Cómo elegir la valla para mascotas adecuada Cuando llega a la familia un nuevo miembro de cuatro patas, hay dos cosas que son prioritarias. La primera es asegurarse de que el nuevo miembro sea feliz. La segunda, garantizar su seguridad. Ya sea su mascota un perro o un gato, la libertad que vaya a ofrecerle es una decisión importante. Se trata de un asunto fundamental en el que influyen las dos prioridades mencionadas arriba. Tanto los perros como los gatos disfrutan de cierto grado de libertad fuera –sin que su dueño tenga que estar necesariamente presente– y disponer de ella aumentará significativamente su calidad de vida. No obstante, darles total libertad para moverse a su antojo, puede tener consecuencias en la seguridad de los perros y los gatos, especialmente si hay más animales o carreteras transitadas cerca. Los propietarios responsables suelen tomar una decisión a medio camino: darles libertad a sus mascotas dentro del jardín, pero sin que puedan irse más lejos. El único problema de esta solución es el desafío que supone mantener a su mascota dentro del jardín. Incluso aunque su mascota sea obediente y suela quedarse sin problemas en casa, puede haber ocasiones en las que haya fuera distracciones demasiado atractivas. Muchos propietarios instalan vallas altas en sus casas para que sus mascotas no se escapen, pero este método no siempre funciona. Tanto a los gatos como los perros se les puede dar muy bien saltar vallas o escurrirse por debajo de ellas. Para mantener a su mascota dentro de su jardín con una valla convencional, gastará mucho dinero, se quitará gran parte de las vistas y puede que incluso tenga que solicitar algún permiso. Por tanto, la mayoría de las veces, una valla no es la opción más práctica. Aquí es donde los limitadores de zona para mascotas pueden ser la solución. Usan una tecnología para mantener a su amigo peludo dentro del jardín sin necesidad de vallas que afeen su casa. De hecho, es que ni siquiera necesitará tipo alguno de valla si no quiere. En su lugar, el limitador de zona establece una barrera oculta que emplea un sistema con o sin cable combinado con un collar electrónico para su mascota. Cuando su gato o perro se aproxime al límite, el collar le dará un aviso. Dicho aviso puede ser una señal acústica o una vibración. Si su mascota ignora la advertencia y cruza el límite, recibirá una estimulación eléctrica estática del collar. Desagradable, pero segura e inofensiva. La decisión entre un entorno cableado o uno inalámbrico dependerá de cómo sea su jardín. Con los sistemas cableados se crea manualmente un límite mediante un cable especial de antena. Este se coloca bajo tierra, así que el límite será invisible. Los sistemas cableados son muy útiles si su jardín tiene alguna forma especial o si desea bloquear determinadas zonas de este (como estanques o parterres). La otra variante de limitador de zona es la inalámbrica. Este tipo de sistema no requiere ningún trabajo de instalación y es completamente portátil. Solo tiene que colocar la unidad base en su casa y elegir el perímetro para el límite. Este puede ajustarse hasta 32 m de diámetro (en función del sistema elegido) y estará totalmente oculto. Enseñar a su perro a no escaparse con un limitador de zona es muy fácil. Los sistemas se entregan con un completo manual de adiestramiento y un manual de funcionamiento, además de unos banderines que servirán de ayuda visual a su mascota al principio. En la mayoría de los casos, solo se necesitan unas dos semanas para que la mascota se acostumbre al sistema y pueda estar sola con total seguridad fuera en el jardín. ¡Se acabó el escaparse!