NOVENA A SAN ANTONIO Parroquia de San Antonio de la Florida Compuesta por Luis Palacios Mackliff Son muchos los devotos de San Antonio que acuden diariamente a venerar al Santo en nuestra parroquia de San Antonio de la Florida. Todos sienten que sus oraciones son escuchadas y reciben incontables gracias y bendiciones. Es habitual ver personas solitarias, familias o grupos de amigos arrodillados ante la imagen del Santo implorando de él la salud, trabajo, la paz familiar, el bienestar del ser querido, encontrar algún objeto valioso que se ha perdido y muchas otras gracias que se antojan imposibles pero que en absoluto lo son para este santo que tanto cuida de sus devotos. Así como muchas personas relatan con alegría los beneficios recibidos por intercesión de San Antonio en lo material también constatamos la actuación benéfica del paduano doctor evangélico en lo espiritual: conversiones, arrepentimientos, reconciliaciones, corazones pacificados, encuentros con el Señor… todo ello permanece en lo secreto de la intimidad y la confidencia, pero es real. Numerosas personas al acercarse a nuestra Ermita-Parroquia piden “una Novena de San Antonio” y siempre acabamos recurriendo a los distintos devocionarios escritos o digitales que existen. Por eso hemos querido ofrecer a la piedad de nuestros amigos y visitantes (“físicos y virtuales”), esta novena que ha de servir para encauzar durante los nueve días preceptuados por la tradición, la admiración con que se medita la vida del Santo, el fervor con que se imita su ardiente amor a Jesucristo y su vida virtuosa y la devoción con que se pide su intercesión. Recomendamos a todos que se ejerciten durante esos nueve días en la oración ante el Santísimo Sacramento, con la oraciones vocales propuestas, la meditación del Santo Evangelio, la adoración, alabanza y acción de gracias, la impetración y la intercesión. Bueno será comenzar la Novena con una confesión sacramental y tratar de acudir a la Santa Misa con frecuencia mientras se realiza este santo ejercicio y después de forma habitual. De esta manera nuestra devoción a San Antonio nos llevará a una más plena comunión eclesial. Ójala que como fruto de la Novena cada una y cada uno de nosotros avancemos en nuestra vida cristiana y crezcamos en la fe, esperanza, caridad, pureza, humildad, pobreza, obediencia, celo apostólico y piedad mariana, las virtudes que el Santo vivió de forma admirablemente heroica y que se van desgranando cada día del santo ejercicio de la Novena. No hemos de olvidar que aunque nos sintamos muy lejos de brillar con la santidad de San Antonio compartimos con él una cosa: el Bautismo, el sacramento que nos injerta en Cristo, nos hace miembros de la Iglesia, nos regala la Salvación e incoa en nosotros la vida santa de los hijos de Dios. Que nadie deje de orar intensamente, cada vez que realice esta Novena, por las intenciones de la Parroquia y especialmente por sus sacerdotes. Responsorio de San Antonio Si buscas milagros, mira muerte y error desterrados, miseria y demonios huidos, leprosos y enfermos sanos. El mar sosiega su ira, redímense encarcelados; miembros y bienes perdidos recobran mozos y ancianos. El peligro se retira, los pobres van remediados; cuéntenlo los socorridos, díganlo los paduanos. El mar sosiega su ira, redímense encarcelados; miembros y bienes perdidos recobran mozos y ancianos. Gloria al Padre, Gloria al Hijo, Gloria al Espíritu Santo, Ruega a Cristo por nosotros, Antonio benigno y santo, para que dignos así de sus promesas seamos. Amén DÍA PRIMERO. ORACIÓN INICIAL PARA TODOS LOS DÍAS. ¡Oh admirable y esclarecido protector mío, San Antonio de Padua! Siempre he tenido grandísima confianza en que me habéis de ayudar en todas mis necesidades, rogando por mí al Señor a quien servisteis, a la Virgen Santísima a quien amasteis y al divino Niño Jesús que tantos favores os hizo. Rogadles por mí, para que por vuestra poderosa intercesión me concedan lo que pido. Admirable fe de San Antonio. La vida del santo es un continuo pregón de la fe cristiana. Por ella, muy joven, ansía derramar su sangre a imitación de los mártires franciscanos de Marruecos. Por lo que se entrega completamente a Dios en vida santa y perfectísima de evangelización que fue pasmo del mundo, rica en portentos y maravillas De la vida de San Antonio. El 16 de enero de 1220 fueron martirizados en Marrakech los franciscanos que habían pasado por Coímbra. Tras esto Antonio marchó a Marruecos con un compañero, encendido en deseos de martirio. Pero, cuando veía ya cercano el cumplimiento de sus anhelos, una grave enfermedad lo tuvo postrado todo el invierno, y lo obligó a regresar a su patria tan pronto como el tiempo y la navegación lo permitieran. De los sermones de San Antonio. “En cada martirio no solo contemplamos la realización suprema de la fe de cada uno de los testigos de Cristo; también se muestra en toda su maldad la actitud de aquellos que los llevan a la muerte porque no quieren oír lo que no les agrada. Los matan primero en su interior porque les anuncian un juicio en que sus iniquidades serán castigadas”. Pídase la gracia que se desea obtener…. RESPONSORIO DE SAN ANTONIO, PADRE NUESTRO, AVE MARÍA Y GLORIA. ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS. Señor Dios de poder y misericordia, te pedimos que nos envíes tu Espíritu Santo, para que, haciendo morada en nosotros, como la hizo en tu siervo Antonio, nos convierta por su intercesión en templos de tu gloria y nos guíe por los caminos que tú, Padre de bondad, quieres para nosotros. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén DÍA SEGUNDO. ORACIÓN INICIAL PARA TODOS LOS DÍAS. ¡Oh admirable y esclarecido protector mío, San Antonio de Padua! Siempre he tenido grandísima confianza en que me habéis de ayudar en todas mis necesidades, rogando por mí al Señor a quien servisteis, a la Virgen Santísima a quien amasteis y al divino Niño Jesús que tantos favores os hizo. Rogadles por mí, para que por vuestra poderosa intercesión me concedan lo que pido. Vida de esperanza de San Antonio. Amó vivamente el Santo esta virtud. Una vida de sacrificio, en lucha constante contra el infierno, el mundo y las pasiones, sería imposible sin una gran esperanza, hija de una gran confianza en la bondad divina, en la paternal Providencia de Dios y en la ayuda constante de su gracia... Por eso Antonio jamás desmayó en su vida de incesante y penoso esfuerzo. ¡Contaba con Dios! De la vida de San Antonio. San Antonio a poco de hacerse franciscano se traslada a Italia. Aquí se encuentra solo y desamparado en un lugar extraño donde ignora todo: lengua, costumbres, etc. Pero con una gran esperanza se pone en las manos de Dios, quien marcará con Su mano un camino nuevo e insospechado para el santo. De los sermones de San Antonio. “La esperanza es la aceptación de los bienes futuros. Y Jesús es un nombre dulce que alimenta esta esperanza; nombre que es júbilo para el corazón, melodía para el oído y miel para la boca”. Pídase la gracia que se desea obtener…. RESPONSORIO DE SAN ANTONIO, PADRE NUESTRO, AVE MARÍA Y GLORIA. ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS. Señor Dios de poder y misericordia, te pedimos que nos envíes tu Espíritu Santo, para que, haciendo morada en nosotros, como la hizo en tu siervo Antonio, nos convierta por su intercesión en templos de tu gloria y nos guíe por los caminos que tú, Padre de bondad, quieres para nosotros. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén DÍA TERCERO. ORACIÓN INICIAL PARA TODOS LOS DÍAS. ¡Oh admirable y esclarecido protector mío, San Antonio de Padua! Siempre he tenido grandísima confianza en que me habéis de ayudar en todas mis necesidades, rogando por mí al Señor a quien servisteis, a la Virgen Santísima a quien amasteis y al divino Niño Jesús que tantos favores os hizo. Rogadles por mí, para que por vuestra poderosa intercesión me concedan lo que pido. Caridad de San Antonio. He aquí un Santo cuya vida fue un holocausto de entrañable amor a los hombres. Puede decirse que toda ella no fue sino una caricia a los pobres pecadores, a los tristes enfermos, a los atormentados por las negruras de la miseria. Caridad que no se ha detenido con su muerte, hoy sigue concediendo grandes favores a todos aquellos que se acercan a él con problemas y angustias. De la vida de San Antonio. Vemos en este santo un gran amor a los hombres. Aquellos que sufren a causa de las enfermedades, incomprensiones y también de los que son esclavos del pecado; consciente que Dios no le niega su amor a nadie. Cuando Antonio residía en Tolouse, vivía en aquella ciudad un notario de vida escandalosa, al que el santo saludaba todos los días con gran deferencia. Es un hecho que no solo admiraba a los demás fieles sino también al mismo notario. Un día ya sorprendido por tanta y reiterada cortesía se acercó a preguntarle el porqué. Antonio sin inmutarse le respondió que lo hacía porque a él Dios también le tenía preparada una gran misión. De hecho este notario terminó convirtiéndose y recibiendo el martirio. De los sermones de San Antonio. “Tan pobre como es la mesa que carece de pan, así la vida más ejemplar resulta vacía si le falta amor”. Pídase la gracia que se desea obtener…. RESPONSORIO DE SAN ANTONIO, PADRE NUESTRO, AVE MARÍA Y GLORIA. ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS. Señor Dios de poder y misericordia, te pedimos que nos envíes tu Espíritu Santo, para que, haciendo morada en nosotros, como la hizo en tu siervo Antonio, nos convierta por su intercesión en templos de tu gloria y nos guíe por los caminos que tú, Padre de bondad, quieres para nosotros. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén DÍA CUARTO. ORACIÓN INCIAL PARA TODOS LOS DÍAS. ¡Oh admirable y esclarecido protector mío, San Antonio de Padua! Siempre he tenido grandísima confianza en que me habéis de ayudar en todas mis necesidades, rogando por mí al Señor a quien servisteis, a la Virgen Santísima a quien amasteis y al divino Niño Jesús que tantos favores os hizo. Rogadles por mí, para que por vuestra poderosa intercesión me concedan lo que pido. Pureza de San Antonio. La gran pureza de San Antonio es lo que hace que se lo represente con un lirio en la mano. Fue un ejemplo de castidad. El demonio quiso mediante muchos medios tratar de hacerlo caer en este punto, pero el Santo la guardó como un tesoro; la defendió con una gran austeridad marcada por cilicios, vigilias, disciplinas, ayunos, oraciones, trabajos. De la vida de San Antonio. Dicen sus biógrafos que el Santo fue acometido en su juventud por la violencia de las pasiones; pero añaden que el «casto joven nunca, ni por un instante, se rindió a las exigencias de la pubertad y del placer». Estas crisis pasionales que asaltan a la juventud, y que para muchos jóvenes son el principio de una vida de pecado, fueron para el Santo la piedra de toque que le movió a encauzar su vida por otras sendas que estuvieran al abrigo del demonio de la impureza. Luchó intensamente contra la sensualidad agarrado de la mano de la Virgen a la que siempre encomendaba su pureza. Lucha que dio resultado, en sus últimos años ya ni en sueños podía ser víctima de la sensualidad. Cuando el demonio quería atacarlo en este tema, Antonio rápidamente se levantaba y poniendo su confianza en la Virgen María con una pequeña oración seguía durmiendo tranquilamente. De los sermones de San Antonio. “El lobo devora con gusto a su presa; así el demonio busca, sobre todo, manchar la pureza.” “El varón justo debe aniquilar toda clase de lujuria ¡Ay cuantas personas han sido devoradas por la sensualidad! Por esto todos debemos destruir toda circunstancia de impureza para que nuestro corazón sea hermoso como el marfil y el Espíritu Santo pueda habitar en nosotros” Pídase la gracia que se desea obtener…. RESPONSORIO DE SAN ANTONIO, PADRE NUESTRO, AVE MARÍA Y GLORIA. ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS. Señor Dios de poder y misericordia, te pedimos que nos envíes tu Espíritu Santo, para que, haciendo morada en nosotros, como la hizo en tu siervo Antonio, nos convierta por su intercesión en templos de tu gloria y nos guíe por los caminos que tú, Padre de bondad, quieres para nosotros. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén DÍA QUINTO. ORACIÓN INICIAL PARA TODOS LOS DÍAS. ¡Oh admirable y esclarecido protector mío, San Antonio de Padua! Siempre he tenido grandísima confianza en que me habéis de ayudar en todas mis necesidades, rogando por mí al Señor a quien servisteis, a la Virgen Santísima a quien amasteis y al divino Niño Jesús que tantos favores os hizo. Rogadles por mí, para que por vuestra poderosa intercesión me concedan lo que pido. Humildad de San Antonio. También en este Santo, y por manera singular y maravillosa, se cumplió el dicho de Jesucristo: "El que se humille será ensalzado". Se ocultó intensamente; buscó el retiro, el silencio y, dotado de altísima sabiduría, la tuvo oculta y sólo la obediencia pudo abrir con su llave de oro aquellos raudales portentosos que hicieron a San Antonio predicador insigne. De la vida de San Antonio. Antonio era un hombre de una inteligencia admirable. Con un gran conocimiento bíblico y teológico. Pero por su humildad lo tenía muy oculto, no quería figurar ni ser reconocido. Su vida humilde lo empujaba a apartarse de las felicitaciones de los demás y amar la vida de soledad y servicio. Pero no lo pudo esconder por mucho tiempo. En 1221 por motivo de una ordenación sacerdotal, el superior de Antonio le pide dar unas pequeñas palabras, a lo que el santo accede por obediencia. Bastaron pocos minutos para descubrir el potencial que había tenido oculto debido a su humildad. Esto hizo que su superior lo enviara a Francia para predicar contra los herejes, ganando muchas almas para Dios. De los sermones de San Antonio. “Cristo quiso ser llamado «niño» por muchas razones; pero, por amor a la brevedad, voy a exponer una sola. Por el valor que le da a la humildad. Si haces una injuria a un niño, si lo provocas con un insulto, si lo golpeas; pero si después le muestras una flor o una rosa o algo semejante, y mientras se la muestras se la entregas, ya no se acuerda de la injuria sufrida, se le pasa la ira y corre a tu encuentro para abrazarte”. Pídase la gracia que se desea obtener…. RESPONSORIO DE SAN ANTONIO, PADRE NUESTRO, AVE MARÍA Y GLORIA. ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS. Señor Dios de poder y misericordia, te pedimos que nos envíes tu Espíritu Santo, para que, haciendo morada en nosotros, como la hizo en tu siervo Antonio, nos convierta por su intercesión en templos de tu gloria y nos guíe por los caminos que tú, Padre de bondad, quieres para nosotros. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén DÍA SEXTO. ORACIÓN INICIAL PARA TODOS LOS DÍAS. ¡Oh admirable y esclarecido protector mío, San Antonio de Padua! Siempre he tenido grandísima confianza en que me habéis de ayudar en todas mis necesidades, rogando por mí al Señor a quien servisteis, a la Virgen Santísima a quien amasteis y al divino Niño Jesús que tantos favores os hizo. Rogadles por mí, para que por vuestra poderosa intercesión me concedan lo que pido. Pobreza de San Antonio. Nace en una familia aristocrática y conocida de Lisboa. Pero ante las sonrisas y halagos del mundo, San Antonio abraza la pobreza de la Orden Franciscana... Se hace hijo de San Francisco y como él marcha por el camino de las privaciones y sufrimientos. Su despego del mundo, le hizo rico en bienes celestiales... Trocó el oro de la tierra por el oro inestimable del amor divino. De la vida de San Antonio. El amor de Antonio por la pobreza era muy claro. Cuenta uno de sus biógrafos que en cierta ocasión al ver la habitación que le había preparado un hermano le dijo: “Esta celda está muy bonita, pero si de verdad quieres que pase aquí unos días te pediré que la revistas por dentro y por fuera con piedras y de ramas de árboles”. Todos los que lo conocían eran conscientes que cuanto más pobre y humildes eran las celdas de sus hermanos, con tanto más agrado las miraba y se hospedaba en ellas. De los sermones de San Antonio. “Sabed hermanos que la pobreza es el camino especial de salvación, ya que fomenta la humildad y es raíz de perfección… esta virtud es el tesoro escondido del campo evangélico. El que quiera llegar a la cumbre de esta virtud debe renunciar no sólo a la prudencia del mundo, sino a la pericia de la letras; de tal forma que pueda entregarse desnudo en los brazos del crucificado”. Pídase la gracia que se desea obtener…. RESPONSORIO DE SAN ANTONIO, PADRE NUESTRO, AVE MARÍA Y GLORIA. ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS. Señor Dios de poder y misericordia, te pedimos que nos envíes tu Espíritu Santo, para que, haciendo morada en nosotros, como la hizo en tu siervo Antonio, nos convierta por su intercesión en templos de tu gloria y nos guíe por los caminos que tú, Padre de bondad, quieres para nosotros. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén DÍA SÉPTIMO. ORACIÓN INICIAL PARA TODOS LOS DÍAS. ¡Oh admirable y esclarecido protector mío, San Antonio de Padua! Siempre he tenido grandísima confianza en que me habéis de ayudar en todas mis necesidades, rogando por mí al Señor a quien servisteis, a la Virgen Santísima a quien amasteis y al divino Niño Jesús que tantos favores os hizo. Rogadles por mí, para que por vuestra poderosa intercesión me concedan lo que pido. Obediencia de San Antonio. La obediencia es la muerte de la propia voluntad, y cuando el hombre mata a ésta, ha matado a su mayor enemigo. La voluntad divina, manifestada por los legítimos Superiores, obra entonces maravillas en las almas. San Antonio fue obediente al máximo. De la vida de San Antonio. Tal como suele ocurrir en la vida de muchos santos, la planificación que ellos tenían no coincidía con los planes de Dios. Antonio se veía predicando a los mahometanos y llevándolos a la conversión. Pero cae enfermo, al recuperarse sus superiores deciden que regrese a Europa y que dentro de unos años lo volverían a llamar a Marruecos. Antonio lo acepta obedientemente. Pero debido a una gran tormenta no llega a Portugal, sino a Italia. Ahí lo destinan a una pequeña ermita. Antonio vuelve aceptar obedientemente un nuevo cambio de planes. Sin saber que sería en Italia donde alcanzaría la cumbre de la santidad. De los sermones de San Antonio. “Debemos a menudo meditar la Pasión del Señor. De ello debemos servirnos como de un sudario, para secar el sudor de nuestras fatigas y la sangre de nuestros sufrimientos. En toda prueba debemos recordar los ejemplos de obediencia extrema que nos dio Jesús”. Pídase la gracia que se desea obtener…. RESPONSORIO DE SAN ANTONIO, PADRE NUESTRO, AVE MARÍA Y GLORIA. ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS. Señor Dios de poder y misericordia, te pedimos que nos envíes tu Espíritu Santo, para que, haciendo morada en nosotros, como la hizo en tu siervo Antonio, nos convierta por su intercesión en templos de tu gloria y nos guíe por los caminos que tú, Padre de bondad, quieres para nosotros. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén DÍA OCTAVO. ORACIÓN INICIAL PARA TODOS LOS DÍAS. ¡Oh admirable y esclarecido protector mío, San Antonio de Padua! Siempre he tenido grandísima confianza en que me habéis de ayudar en todas mis necesidades, rogando por mí al Señor a quien servisteis, a la Virgen Santísima a quien amasteis y al divino Niño Jesús que tantos favores os hizo. Rogadles por mí, para que por vuestra poderosa intercesión me concedan lo que pido. Celo apostólico de San Antonio. Vemos en Antonio una labor incansable de predicación para llevar a la conversión a los paganos. Desde Marruecos hasta Padua lo vemos anunciando el Evangelio de Jesucristo. Estaba convencido que debía proclamar la salvación de los hombres sin importar que esto le conllevara muchas enfermedades y sufrimientos. De la vida de San Antonio. Cuando Antonio se encontraba en Rímini que era el centro de los herejes cátaros sucedió que un día ninguna persona fue a la parroquia, ya que habían sido amenazados por los herejes. Esto no desanimó al santo, quien se dirigió a orillas del Adriático y ahí se puso a realizar su sermón con todo el entusiasmo que lo hubiera hecho como si estuviera en la parroquia. De repente los peces comenzaron a asomar sus cabezas y a quedarse estáticos frente al santo (como si lo estuvieran escuchando). Al terminar su sermón el auditorio estaba repleto. Ni la más grande contrariedad pudo evitar que Antonio predique el Evangelio. De los sermones de San Antonio. “El nombre de Jesús es superior a todo nombre, porque delante de él se dobla toda rodilla. Si lo predicas, ablanda las voluntades más obstinadas. Si lo invocas, dulcifica las más ásperas tentaciones. Si piensas en él, se te ilumina la inteligencia. Si lo lees, te alimenta el corazón.” Pídase la gracia que se desea obtener…. RESPONSORIO DE SAN ANTONIO, PADRE NUESTRO, AVE MARÍA Y GLORIA. ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS. Señor Dios de poder y misericordia, te pedimos que nos envíes tu Espíritu Santo, para que, haciendo morada en nosotros, como la hizo en tu siervo Antonio, nos convierta por su intercesión en templos de tu gloria y nos guíe por los caminos que tú, Padre de bondad, quieres para nosotros. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén DÍA NOVENO. ORACIÓN INICIAL PARA TODOS LOS DÍAS. ¡Oh admirable y esclarecido protector mío, San Antonio de Padua! Siempre he tenido grandísima confianza en que me habéis de ayudar en todas mis necesidades, rogando por mí al Señor a quien servisteis, a la Virgen Santísima a quien amasteis y al divino Niño Jesús que tantos favores os hizo. Rogadles por mí, para que por vuestra poderosa intercesión me concedan lo que pido. Piedad mariana de San Antonio. Si algo es constante en la vida de todo santo es el profundo amor a la Virgen María. San Antonio no es la excepción, durante su vida la trató como una verdadera Madre y encomendaba en sus manos todas sus luchas y esperanzas. De la vida de San Antonio. A los siete años de edad era estudiante del colegio episcopal de Lisboa, que estaba junto a la Catedral de la ciudad. Por entonces, nos dice la tradición, hace voto de virginidad por amor a su madrecita (mamashina, en portugués) la Virgen María. De los sermones de San Antonio. “María es como el arco-iris, señal de reconciliación entre Dios y los hombres. Es como un capullo de rosa que abre sus pétalos en pleno invierno; como un lirio que crece junto a la corriente de las aguas; como un incienso que esparce suaves aromas. Ella es un cáliz de oro cubierto de piedras preciosas, un olivo que jamás pierde su follaje, un ciprés que se eleva sobre todos los árboles del bosque.” Pídase la gracia que se desea obtener…. RESPONSORIO DE SAN ANTONIO, PADRE NUESTRO, AVE MARÍA Y GLORIA. ORACIÓN FINAL PARA TODOS LOS DÍAS. Señor Dios de poder y misericordia, te pedimos que nos envíes tu Espíritu Santo, para que, haciendo morada en nosotros, como la hizo en tu siervo Antonio, nos convierta por su intercesión en templos de tu gloria y nos guíe por los caminos que tú, Padre de bondad, quieres para nosotros. Te lo pedimos por Jesucristo, nuestro Señor. Amén