Análisis Jurisprudencial VI Análisis Jurisprudencial ¿La Corte Suprema ha confirmado la viabilidad del precedente Huatuco? Análisis sistemático de la Casación N.° 8152-2014-Cañete Ficha Técnica Autor:Luis Jesús Baldeón Bedón(*) Título: ¿La Corte Suprema ha confirmado la viabilidad del precedente Huatuco? Análisis sistemático de la Casación N.º 8152-2014- Cañete Fuente: Actualidad Empresarial N.º 338 - Primera Quincena de Noviembre 2015 1. Conceptos generales1 Como es de conocimiento público, con fecha 5 de junio del presente año, nuestro Tribunal Constitucional ha expedido –a través del diario oficial El Peruano– la sentencia Exp. N.º 5057-2013-PA/TC23, ya conocida por todos nosotros como el “precedente Huatuco”, mediante el cual los órganos jurisdiccionales ordinarios a nivel nacional ya no podrán ordenar, en los procesos en trámite y en las nuevas causas, la reposición al puesto de trabajo a tiempo indeterminado conforme a las normas del régimen laboral común de la actividad privada (regulado por la Ley de Productividad y Competitividad Laboral-TUO N.º 003-97-TR), en caso se solicite por efecto de una desnaturalización del contrato de trabajo sujeto a modalidad o de un contrato civil, si el demandante no se acredita la existencia de una plaza presupuestada y su obtención –con anterioridad– mediante concurso público de méritos. En efecto, conforme a lo vertido por los medios de comunicación y prensa nacional, todos nosotros hemos tenido conocimiento que, mediante la presente sentencia, la máxima entidad de control concentrado de constitucionalidad nacional se había apartado del criterio mantenido por más de 10 años4, al sos(*) Miembro del Staff de asesores de la revista Actualidad Empresarial. Miembro principal del Grupo de Estudio del Derecho del Trabajo y Seguridad “Luis Aparicio Valdez” de la Facultad de Derecho y Ciencia Política de la misma casa de estudios. 1 Las opiniones vertidas en el presente trabajo son de exclusiva responsabilidad del autor y no compromete la posición adoptada por la revista Actualidad Empresarial. 2 La obligatoriedad de los precedentes vinculantes en materia constitucional se sustenta en el artículo VII del Código Procesal Constitucional vigente, al disponer que las sentencias del Tribunal Constitucional que adquieren la calidad de cosa juzgada constituyen precedente vinculante cuando así lo exprese la sentencia, precisando el extremo de su efecto normativo. 3 El criterio adoptado por el precedente vinculante, y que tienen calidad de observancia obligatoria más importante es el previsto en el Fundamento N.º 18 al disponer que “En los casos que se acredite la desnaturalización del contrato temporal o del contrato civil, no podrá ordenarse la reposición a tiempo indeterminado, toda vez que esta modalidad del Decreto Legislativo N.º 728, en al ámbito de la administración pública, exige la realización de un concurso público de méritos respecto de una plaza presupuestada y vacante de duración indeterminada. Esta regla se limita a los contratos que se realicen en el sector público y no resulta de aplicación en el régimen de contratación del Decreto Legislativo N.º 728 para el sector privado”. 4 A palabras del autor Elmer Arce Ortiz, en un artículo denominado “Una sentencia de otro país: el Precedente Huatuco”, el Tribunal VI-8 Instituto Pacífico tener que la regla general de ordenar la reposición en favor del trabajador en caso de demuestre la existencia de un contrato simulado (locación de servicios / SNP, contrato administrativo de servicios / CAS) o constituido mediante la modalidad de fraude a la ley, había sido modificada por la nueva premisa en la que el Estado ahora ya no podría ser tratado como cualquier empleador, sino que gozaría del privilegio de no reponer a sus trabajadores del régimen laboral privado si la parte afectada no demostraba, en el proceso contencioso administrativo u ordinario laboral5, que su puesto de trabajo había sido obtenido mediante un concurso de méritos (condición indispensable a partir de ahora) y que su plaza se encuentre presupuestada en calidad de permanente, en cuyo caso –si existía el daño denominado cese– solamente procedería el pago de una indemnización por despido (protección resarcitoria), conforme con lo dispuesto en el artículo N.º 38 de la LPCL, que conlleva solamente a una indemnización tarifada. Por ello, ante su promulgación, se alzaron en la doctrina laboralista voces a favor y en contra del precedente vinculante, señalando –desde su perspectiva de análisis– que la presente sentencia realizaba una debida ponderación de principios constitucionales conforme el derecho a la igualdad de acceso a la carrera pública, resaltando su inmediata y obligatoria aplicación por parte de los administradores de justicia por ser una fuente normativa emitida por el TC6; y Constitucional Peruano ha decidido modificar su línea jurisprudencial de más de 10 años al negar la reposición a los trabajadores estatales que cuentan con contratos por tiempo indeterminado y que son despedidos sin causa alguna. Sin embargo, en exactos términos de uno de los magistrados dirimentes de la presente sentencia en un voto singular, me refiero al Dr. Blume Fortini, el citado precedente contraria la línea jurisprudencial que se había desarrollado en forma uniforme desde que inició sus funciones “hace acerca veinte años” en la que elimina el derecho a la reposición o reincorporación de los trabajadores al sector público que ingresaron sin las formalidades del concurso público, sin importar el tiempo durante el cual hayan venido prestando sus servicios para el Estado y la aplicación del Principio de Primacía de la Realidad. (Considerando 3.1). 5 De conformidad con lo establecido en el II Acuerdo Plenario en materia laboral realizado por la Sala Constitucional y Social de la Corte Suprema de la República, y publicado en el mes de mayo de 2014, los trabajadores que soliciten actualmente la desnaturalización de su contrato administrativo de servicios lo deberán realizar a través del proceso contencioso administrativo. Pero, si el motivo de invalidez se originó por la temporalidad de la prestación del contrato modal, la vía procesal aplicable será el proceso ordinario laboral. 6 En literales términos del autor Sebastian Soltau Zalasar en la revista jurídica IUS 360, el TC había realizado una adecuada ponderación de los intereses en conflicto, haciendo prevalecer el principio de igualdad de oportunidades en el acceso al empleo público, asimismo el autor Renzo Cavani ha considerado , a través de sus artículos “¿Desacatar al precedente huatuco? ¡De Ninguna Manera!” y “Todavía sobre Huatuco ‘Control de Convencionalidad’ e ‘Independencia Judicial’ como excusas para desacatar un precedente del Tribunal Constitucional Peruano (Parte I)”, revista jurídica IUS 360, que los precedentes, aún si son malos, sí deben ser seguidos, en tanto que son formalmente vinculantes. Asimismo, los autores Jorge Toyama Miyagusuku, a través de un comentario realizado en el diario de circulación Gestión-junio 2015, y Cesar Puntriano Rosas, en una opinión publicada en la sección jurídica de El Peruano, han defendido la validez del presente fallo conforme al Principio de Legalidad y la Meritocracia en la carrera administrativa y -además- proponen que otros que la misma debilitaba el derecho al trabajo a los trabajadores estatales que en esta condición de inferioridad, pues ahora solo podrán demandar su indemnización, al convalidar prácticas estatales, donde la flexibilización y precarización de los contratos terminan siendo resueltos por el lado más débil, mediante la indemnización y la imposibilidad de demandar una reposición7. Pero ante la polémica generada por ciertos juzgados y salas laborales de diferentes distritos judiciales del país que se resistían y resisten a aplicar cabalmente el precedente, sustentando su decisión en la excepción procesal denominada distinguishing8 o apartamiento motivado del precedente, la pregunta que conviene formularse en el presente trabajo es ¿Cuál es la posición que ha asumido la Corte Suprema de la República en el presente caso? ¿Ha respaldado la interpretación obligatoria del precedente vinculante constitucional por ser una fuente normativa de derecho? Es a través de la presente Casación N.º 8152-2014-Cañete, expedida por la Corte Suprema de la República, que la sala ha pronunciado en forma sutil o preparando su momento crucial para continuar con la vinculación interpretativa que emana un precedente vinculante, en cuanto que, el propio colegiado, si bien declaró –discutiblemente– que el precedente Huatuco no era aplicable al presente caso, por acreditar que haya existido una desnaturalización del contrato (a pesar de haber acreditado una actividad de carácter permanente dentro de la relación laboral en el Poder Judicial), uno de sus miembros afirma que –a través de un voto dirimente de la señora juez Rodríguez Chávez– los fallos que se encuentren en calidad de cosa juzgada y sea expedida por el Tribuel mismo criterio jurisprudencial se aplique indiscriminadamente en el régimen laboral de la actividad privada, desconociendo las sentencias que motivaron la reevaluación del rol protector del artículo N.º 27 de nuestra Constitución Política del Estado. 7 En forma certera a nuestro criterio, que la sentencia acotada da la impresión que utiliza como razón objetiva (y no le falta razón) de distinción entre trabajadores estatales y trabajadores de empleadores privados un requisito formal como el concurso público, cuya aplicación puede desenfocar el objetivo del TC y generar casos de mucha injusticia. Como quiera que, los autores Javier Neves Mujica y Cesar Landa Arroyo han referido en diversas conferencias impartidas en universidades y sindicatos que el presente fallo vulnera flagrantemente el artículo N.º 27 de la Constitución Política del Estado, así como la casi anulación del Principio de Primacía de la Realidad en el sector público. 8 Tal como ha afirmado Edwin Figueroa Gutarra, en su trabajo “Precedentes Vinculantes: ¿Consolidación normativa o restricciones a las facultades interpretativa de los Jueces?”-Pensamientos de Derecho Constitucional, la doctrina constitucional, a través del distinguishing, o mecanismo de diferenciación, permite que el juez advierta que el caso en examen puesto en su conocimiento, es distinto al caso que perfila el precedente vinculante y, por lo tanto, evade la aplicación del precedente. El argumento es puntual, no resulta viable la aplicación del precedente por cuanto las condiciones fácticas del caso presentado difieren de los supuestos de hecho determinados en el precedente. N.° 338 Primera Quincena - Noviembre 2015 Área Laboral nal Constitucional, obliga a los jueces de todas las instancias a respetar y a aplicar la interpretación efectuada por la misma, más aún a las que se les ha reconocido la calidad de precedente vinculante. 2. Posición del demandante Tal es el caso, que doña Gladys Venturo Sánchez, en su calidad de extrabajadora, interpone una demanda de reposición por desnaturalización del contrato de trabajo sujeto a modalidad de servicio específico en contra de su exempleadora, ante el Poder Judicial del Perú, sosteniendo que, a pesar de haber firmado un contrato temporal, su labor era de carácter permanente al realizar labores en su condición de asistente judicial en el Juzgado Mixto Transitorio de Chilca y en el Juzgado de Paz Letrado de la Corte Superior de Justicia de Cañete, al no poder corroborar la correlación de la causa objetiva con la modalidad del contrato, aduciendo –asimismo– una simulación relativa y fraude a la ley. dentro del fallo los servicios brindados en el Juzgado de Paz Letrado de la Corte Superior de Justicia de Cañete, conforme a una valoración conjunta de todos los medios probatorios así como el análisis de toda la relación laboral. Para ello, el colegiado supremo sustentó su fallo en los siguientes criterios: Tercero. Respecto a la estructura fáctica consistente en la existencia de la prestación de servicios de doña Gladys Venturo Sánchez, se concluye que la causa objetiva […] se encuentra suficientemente justificada, concluyendo […] que no se observa la infracción normativa del inciso d) del artículo 77 del Decreto Supremo N.º 728, ya que la sentencia de vista sustentó la decisión de transitoriedad y temporalidad del servicio prestado, determinándose la inexistencia de un supuesto de desnaturalización. Cuarto. En relación a la precitada regla jurisprudencial […] considerando que en el caso concreto no se ha establecido la existencia de una desnaturalización del contrato modal ni la vulneración de los derechos de la demandante, no resultaría coherente la emisión de un pronunciamiento anulatorio de todos los actuados para que la demandante varíe sus pretensión al otorgamiento de una indemnización por despido arbitrario. Séptimo (Voto Singular). En este contexto, considero que me encuentro en la obligación de aplicar las reglas del precedente vinculante, según la cual, de verificarse que la parte quien alega el derecho a la reposición, efectivamente,[…] no implicaría automáticamente amparar la pretensión de reposición en el empleo, pues, tratándose el empleador de una entidad pública, resulta necesario que el trabajador haya ingresado por concurso público de méritos, que la plaza esté presupuestada y que se trate de una vacante indeterminada, siendo que, de no cumplirse los presupuestos, el trabajador solo podrá optar por la indemnización. 3. Posición del demandando La demandada contesta la demanda, argumentando que la plaza que ocupaba la demandante no era de carácter permanente, sino de carácter transitoria (temporal) a afectos de la descarga procesal. Adicionalmente sustenta que la plaza no se encuentra presupuestada con carácter permanente, por tener este órgano jurisdiccional el carácter de transitorio descarga procesal, evidenciándose la imposibilidad de desnaturalización del contrato. Además, el hecho que la trabajadora haya desempañado labores en una plaza distinta a la contratada, no implica que le corresponda la permanencia en dicha plaza, ya que ello se originó por las necesidades del servicio y no se sustrae la causa objetiva. 4. Materia controvertida En tal sentido, la controversia radica en que si es procedente la reposición al puesto de trabajo por la desnaturalización de un contrato sujeto a modalidad de servicio específico, al sustentarse que las actividades de la actora eran de carácter permanente mediante la certificación de servicios en el Juzgado Mixto Transitorio de Chilca y en el Juzgado de Paz Letrado de la Corte Superior de Justicia de Cañete, a pesar de contar con una plaza presupuestada en forma temporal y realizar actividades de descarga procesal en forma transitoria. 5. Posición de la Corte Suprema La Corte Suprema declara INFUNDADA el recurso de casación interpuesto por la parte demandante, concluyendo que el contrato de trabajo por obra o servicio específico no se encontraba desnaturalizado, al acreditarse la temporalidad del servicio prestado dentro del Juzgado Mixto Transitorio de Chilca, sin considerar N.° 338 6. Análisis crítico De lo que hemos podido describir en la parte introductoria sobre los vaivenes, problemas teóricos y procesales que está conllevando la aplicación del precedente Huatuco en materia constitucional y procesal, a pesar que la Corte Suprema haya desestimado su aplicabilidad en el supuesto hecho (que no compartimos evidentemente) al no acreditarse la desnaturalización de la prestación de servicios sujeta a modalidad, hay algo evidente que nos invita a la ironía: ¿Por qué, si era tan evidente que tales contratos no se encontraban desnaturalizados, uno de los magistrados tuvo que sustentar su voto singular en la improcedencia de la reposición al puesto de trabajo en base a lo dispuesto en el referido precedente? ¿Acaso de los medios probatorios actuados no se determinaba una prestación de naturaleza permanente al existir labores adicionales que no se sustentaban a una supuesta prestación transitoria del servicio judicial? Por ello, a nuestro criterio, consideramos que la referida Corte Suprema, en vez de optar por afrontar la posibilidad de Primera Quincena - Noviembre 2015 VI aplicar o no el precedente Huatuco, en forma clara y expresa (considerando objetivamente que el supuesto de hecho encaja perfectamente con el supuesto que originó al precedente y que impide al juzgador apartarse de su decisión), se ha valido de un criterio cuestionable de validez del contrato temporal para informar a los ciudadanos en forma indirecta –en criterios finos: sutil– que también asumirá la posición (no ahora, sino más adelante, o mejor dicho en el momento preciso para no generar nuevas críticas a los ya realizados al TC) de denegar la reposición cuando no cumplan con los requisitos extremadamente formales que ha determinado el colegiado constitucional, con la finalidad de prevalecer la supuesta eficiencia y los méritos en la carrera administrativa, avalando la responsabilidad del Estado en la forma de contratación realizada por varios años (en la que el propio TC atribuía tal responsabilidad y carga económica al propio Estado empleador), en perjuicio de una de las partes9 y desconociendo así el Principio de Progresividad y No Regresividad del artículo N.º 26 de la Convención Americana sobre Derechos Humanos. Solo es cuestión de tiempo para que nuestra Corte Suprema asuma plenamente una aplicación, casi religiosa, del citado precedente sin ninguna distinción de exclusión (¿aplicarán el distinguishing?, no me considero optimista) por desnaturalización como el que hace ahora referencia (hasta tengo la certeza de que será en un caso similar al comentado en nuestra edición), ya que existen claras evidencias –a través del voto singular– en la que el colegiado se encuentra “comunicando o anticipando progresivamente” que en sus futuros fallos, cuando trate de calificar reposición o desnaturalización de contratos laborales o civiles –en forma conjunta o individual en la demanda–, no van a dejar de obligarse a aplicar las reglas del precedente vinculante, si se verifica que la parte quien alega el derecho a la reposición no ha cumplido con acceder a un puesto por concurso público y sujeta a una plaza de carácter indeterminado. ¡Las reglas ya están dadas! 9. En el mismo sentido, los autores Cesar Landa Arroyo y Javier Mujica Petit, en una entrevista brindada a la asociación Enfoque Derecho de la PUCP, así como en una opinión vertida en la revista jurídica IUS 360 – “¿Se debe desacatar el Precedente Huatuco?”, han afirmado que la sentencia parte de una concepción bastante legalista, al imponer una condición discriminatoria a sus pares del sector privado, y pareciera valorar en sobremanera que el ingreso al sector público debe realizarse única y exclusivamente en la forma prevista por la ley, lo cual es deseable; pero el manejo de austeridad pública ha llevado a que dentro de las instituciones estatales existan disposiciones normativas y presupuestarias, como la prohibición de nombramiento, que la propia autoridad estatal intenta evadir a través de fórmulas que no vayan en contra de leyes restrictivas en materia de nombramiento, logrando así un evidente debilitamiento del derecho del trabajo, porque los trabajadores estatales que al momento en que sean separados, no tendrán derecho a la reposición, protegida válidamente en el Protocolo de San Salvador, el cual el Perú está obligado a respetar. Omar Toledo Toribio, al considerar que el precedente Huátuco implica la inobservancia de los principios del derecho del trabajo y la afectación de los derechos de los trabajadores originando la captura o subsunción de la subjetividad laboral. Opinión recogida en la revista La Ley N.º 15, Lima, setiembre 2015; asimismo, en la Sentencia del 17-07-15, Cuarta Sala Laboral Permanente de Lima, Tribunal Unipersonal, vocal ponente Omar Toledo Toribio, EXP. N.º 27013-2013-0-1801-JR-LA-03. Actualidad Empresarial VI-9