Escala de Evaluación de la Responsabilidad Penal

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Escala de Evaluación de la Responsabilidad Penal
Martín y Pardo
UNIVERSIDAD DE ALMERÍA
Departamento de personalidad, evaluación
y tratamiento psicológico
ESCALA DE EVALUACIÓN DE LA
RESPONSABILIDAD PENAL
Francisco M. Martín Murcia
Mª Luisa Pardo González
Programa Doctorado: Psicología Clínica y
de la Salud
Curso: Psicología forense
Profesor: Flor Zaldívar Basurto
Almería, 2004
INTRODUCCIÓN
La evaluación de la responsabilidad penal es uno de los aspectos más
controvertidos del trabajo forense. En síntesis, se trata de valorar –toda vez
probados los hechos- si al sujeto se le puede imputar el delito, es decir, si
contaba con la capacidad de controlar su comportamiento (Fernández,
1994, pp. 115); ser culpable de un delito significa que “el acusado está
implicado en un delito (Actus rea) y que lo cometió con el estado mental
idóneo (Mens rea)” (Psicología jurídica, 1111, pp. 154). Aunque la potestad
de determinar si una persona es responsable de un delito es privativa de los
jueces, habitualmente éstos suelen recabar el testimonio pericial de
expertos para mejor proveer. La imputabilidad puede verse modulada
(eximiente
total
o
atenuante)
por
ciertos
factores
individuales
o
situacionales, como la presencia de enfermedad mental, oligofrenia o el
trastorno mental transitorio.
Estas alteraciones suponen un menoscabo
total o parcial de la capacidad de comprender el acto delictivo y de dirigir
voluntariamente la conducta de acuerdo con dicho conocimiento; según
Pacheco (citado en Fernández, 1994) “para hablar de delito era necesario la
existencia de un agente libre e intencional, de una persona que obrase a
sabiendas de lo que hacía, con intención de hacer lo que hacía, con poder
de no hacer lo que hacía”. En cualquier caso, el juicio de imputabilidad
significa juicio de autoresponsabilidad. Se remite a la Tabla 1, en la que se
describen las teorías generales sobre la imputabilidad, expuestas en Esbec y
Delgado (1994).
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1.
Teorías tradicionales
A) Clásica (Carrara): “la imputabilidad presupone inteligencia y
libertad moral de la persona que actúa”
B) Positivista (Lombroso, Ferri, Garófalo): “la imputabilidad
descansa sobre mera actividad psicofísica del individuo. El
derecho penal no debe diferenciar entre sujetos imputables o
inimputables, sino entre sujetos más o menos peligrosos”
2. Teorías objetivas
A) Imputabilidad como capacidad de acción (Binding, Von Piel,
Gerland): “Esa capacidad de obrar no está presente sólo en el
Derecho penal, sino en otras áreas de lo jurídico”.
B) Imputabilidad como capacidad de deber (Von Ferneck,
Kohlrausch).
C) Imputabilidad como capacidad de delito (Carnelutti, Pannin):
“La capacidad de delinquir es la idoneidad de ser sujeto activo
de delitos. Los inimputables son incapaces de obligaciones
jurídico-penales”.
D) Imputabilidad como capacidad de ser destinatario de la
norma penal (Petrocelli): “La imputabilidad es un estado, un
modo de ser, una condición del sujeto distinta del delito y
preliminar a él, necesaria para que un sujeto pueda ser
destinatario de una norma penal”.
3. Teorías subjetivas
A) Imputabilidad como presupuesto de la culpabilidad (Jiménez
de Asúa, Díaz Palos, Mesa): “Imputabilidad es la capacidad de
conocer y valorar el deber de respetar la norma y determinarse
espontáneamente”.
B) Imputabilidad como elemento de la culpabilidad (Metzger,
Bettio, Maggiore): “El juicio de imputabilidad no retrocede
nunca más allá dela comisión del delito, sino que se refiere
siempre a éste”.
4. Teoría finalista
“Imputabilidad es la capacidad de culpabilidad referida a la
comprensión y determinación de la voluntad. Existe independientemente
de que el sujeto actúe” (Wetzel).
5. Teoría psicosocial
“Imputabilidad es la capacidad de conducirse socialmente, es
decir, observar una conducta que responde a las exigencias de la vida
política común de los hombres” (Von Listz, Fontán).
Tabla 1. Teorías generales sobre la imputabilidad (tomado de Esbec y
Delgado, 1994)
El debate subyace fundamentalmente en dos aspectos: el primero estaría
relacionado con
conceptos como “normalidad”, “libertad de acción”,
“voluntad” y “motivación” –en definitiva, con la comprensión de partida
sobre la naturaleza del ser humano- y el segundo aspecto con la
comprensión de la psicopatología en sí misma y su relectura desde la
jurisprudencia. No es de extrañar que Esbec y Delgado (1994, pp.317)
concluyan que “la imputabilidad constituye la esencia, el problema de
3
mayor significación y alcance tanto para la psicología como para la
psiquiatría forense”. Respecto a la operacionalización de la variable
imputabilidad en nuestro medio jurídico y científico, se dirá que, a pesar de
la obviedad de partida de que la imputabilidad es una variable continua
(Esbec y Delgado, 1994, pp. 339), se ha discretizado para proveer una
medida pragmática en la toma de decisiones jurídicas y periciales, siendo
que se ofrecen tres criterios: imputabilidad plena, disminuida e
inimputabilidad. A pesar de que en nuestro Código Penal no está definida
como tal, se admite que es totalmente imputable todo aquel mayor de
dieciocho años que, ni está enajenado, ni sufre trastorno mental transitorio,
ni como consecuencia de alteraciones precoces de la percepción tenga
gravemente alterada la conciencia de la realidad. A la falta de rigor
nosológico se une la poca concreción de dicha descripción. Para evitar
especulaciones, se sugiere seguir la regla Durham en la que se debe
establecer una relación causal directa entre el trastorno y el delito para la
resolución de inimputabilidad, no siendo suficiente la presencia de un
trastorno. Al parecer, cada vez hay un mayor número de jurisdicciones que
se acomodan al criterio del American Law Institute, según el cual, “una
persona no es imputable si en el momento en que realiza una conducta
como consecuencia de una enfermedad o defecto mental, carece de
capacidad real ya sea para darse cuenta de la ilegalidad de su conducta o
bien adaptar su conducta a las exigencias de la ley”. Este criterio de
inadaptación a la norma, bien por causas médicas, motivacionales o
psicológicas parece el más realista y operativo, a juicio de Esbec y Delgado
(1994, pp.350).
Entre las dificultades que entraña el proceso de evaluación de la
responsabilidad penal –excluyendo las del eterno debate de qué profesional
está mejor dotado para realizarlas-, citaríamos la complejidad –si no
quimera- de realizar diagnósticos a posteriori, las exigencias de análisis en
tiempos insuficientes, la falta de protocolos estandarizados de evaluación
adaptados a nuestro medio social y la falta de indicadores conductuales
válidos para detectar la mentira (López y Zaldívar, 2002). Es precisamente
este aspecto es el que motiva la realización del presente trabajo, en el que
se tratará de diseñar un protocolo para la evaluación de la responsabilidad
penal.
ANTECEDENTES Y JUSTIFICACIÓN
El objetivo principal de la evaluación psicológica de la imputabilidad es
reconstruir el estado mental del sujeto antes, durante y después del delito,
así como la relación de dicho estado mental y la conducta delictiva
realizada. Para ello, se precisa establecer el diagnóstico clínico de la
alteración, trastorno o déficit que el acusado presentara en el momento del
delito, así como las conductas y el contexto en el que éstas se emitieron.
También se evaluará la competencia del sujeto para ser juzgado y la
valoración clínica en el momento del juicio, así como determinar la
peligrosidad del acusado. En nuestro medio social no contamos con
protocolos estandarizados ni adaptados, por lo que el modus operandi de
cada perito forense se hará discrecionalmente. Existen dos instrumentos
para la evaluación de la imputabilidad, de origen anglosajón, que son el
Detección y evaluación del Estado Mental en el Momento del Delito, MSE (
Slobogin, Melton y Showalter, 1984) y las Escalas Rogers para la evaluación
de la Responsabilidad Criminal. RCRAS (Rogers, 1984). El MSE es una pauta
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de entrevista diseñada para ayudar a los peritos en la valoración del
funcionamiento psicológico del reo durante la época del delito. Facilita la
detección de los trastornos mentales actuales o pasados y ordena parte de
la información del caso, pero no ayuda a evaluar la imputabilidad, dado que
no realiza análisis de relación entre trastorno y delito. Por otro lado, la
RCRAS nace con la vocación de aportar sistematización y objetividad en el
análisis de los datos, cuantificando una serie de variables psicológicas y
ambientales e incluyendo un árbol decisorio sobre la imputabilidad. Aún
apreciándose sus propiedades psicométricas, no es posible una traducción al
medio español al estar referido a criterios ALI (American Law Institute).
El objetivo del presente trabajo es la propuesta de una Escala para la
Valoración de la Responsabilidad Penal, en forma de protocolo sistematizado
tanto de recogida de datos y evaluación psicológica, en la se diseña un
puntaje indicativo para toma de decisiones. Se ha considerado oportuno
establecer un control sobre la simulación, habida cuenta de que ésta sería
una condición casi inevitable en este tipo de procesos, en los que el acusado
usará con toda probabilidad cualquier estrategia de exención o atenuación
de la pena. La escala está dividida en tres bloques; en el primero se daría
cuenta de los antecedentes jurídicos, psicosociales, psiquiátricos y
culminaría con un diagnóstico presunto tanto en el tiempo del delito como
en la actualidad. Los dictámenes estarían relacionados sin exclusión con la
existencia presunta de causalidad o relación entre el trastorno y la conducta
criminal específica del caso. Este apartado cuenta con una tabla en la que
se incluye el puntaje de fiabilidad de fuentes y si se cuenta con información
suficiente para la elaboración de la historia personal y clínica.
En el segundo bloque se implementaría una entrevista semiestructurada,
con inclusión de ítems de despistaje para evaluar la congruencia en las
verbalizaciones relacionadas con síntomas psiquiátricos. La entrevista es
una guía de ítems, habida cuenta de que no está validada, dejando
obviamente al clínico la posibilidad de ampliar, reducir o incorporar
preguntas pertinentes a la idiosincrasia del caso, aunque se sugiere evaluar
la conducta de seguimiento de instrucciones, con el objeto de analizar si el
sujeto podría seguir con aquiescencia instrucciones de sus posibles delirios
o alucinaciones.
Tras la entrevista, se sugiere la implementación de tests estandarizados en
el caso de sospecha de simulación o dificultad para concluir un diagnóstico.
Se han escogido el MMPI II y el MCMI II tanto por sus propiedades
psicométricas como por la generalización de su uso en ambientes forenses.
Su utilización está a discreción del perito, pero se aconseja en caso de
sospecha de simulación, dado que ambas pruebas ofrecen escalas de
control adecuadas (escalas VRIN, VTRIN, K, L y F del MMPI II y Sinceridad,
deseabilidad y hacerse el enfermo del MCMI II). Este bloque también tendrá
puntuajes
relacionados
con
el
juicio
de
causalidad
entre
síntomas/simulación
y conducta delictiva. El protocolo contiene un
apartado para describir la conducta del sujeto durante la entrevista,
focalizando expresamente la información en el grado de colaboración,
retraimiento/apertura, contacto visual y humor. Este bloque concluye con
tablas de registro de puntajes, tanto de la simulación como del diagnóstico,
incluyendo un apartado de concordancia entre evaluación clínica versus
psicométrica (que recordemos, sería realizada por el segundo investigador).
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Tras la recogida de datos y evaluación, el perito realizará la hipótesis del
caso. Por último, se incluye una tabla de registro ordenado de los aspectos
sustanciales de la pericial, con puntajes que ayuden al forense a establecer
el grado de fiabilidad de la evaluación, la validez del informe y el grado
sugerido de imputabilidad.
INSTRUMENTOS:
FICHA TÉCNICA MMPI II
Nombre original; Minnesota Multiphasic Personality Inventory-2
(Cuestionario Multifásico de Personalidad de Minnesota, MMPI-2)
Autores; S.R. Hathaway y J.C McKinley.
Procedencia; University of Minnesota Minneapolis.
Adaptación española; Alejandro Ávila Espada y Fernando Jiménez
Gómez, Universidad de Salamanca.
Aplicación; individual o colectiva.
Duración; Variable, de 60 a 90 minutos.
Aplicación; solamente adultos (19-65 años). Hay una versión para
adolescentes, (en preparación).
Significación; Evaluación de varios factores o aspectos de la
personalidad a través de tres grupos de escalas; Básicas, de Contenido
y Suplementarias. Contiene también un grupo de escalas referentes a
la validez, y otras adicionales como las subescalas de HarrisLingoes.
Tipificación; tablas de puntuaciones típicas normalizadas en cada una
de las escalas debidamente diferenciadas por sexos.
PROPOSITO DEL MMPI-2
El MMPI, ó Inventario Multifásico de Personalidad de Minnesota ha sido
junto al 16 PF, Rorschach y el TAT, uno de los instrumentos más utilizados,
validados y fiables en la evaluación de la personalidad con objetivos
clínicos.
Diseñado para evaluar un gran número de patrones de personalidad y
trastornos emocionales. Después de 1950, se estableció el formato del
MMPI. Su aceptación creció sin para en Estados Unidos y su uso se extendió
por todo el mundo.
CUALIFICACIONES BÁSICAS DE LOS USUARIOS DEL MMPI-2
Cualquier instrumento psicológico diseñado para evaluar varios atributos de
personalidad en una sola aplicación, requiere el entrenamiento y
cualificación de la persona que lo elige para la valoración individual de
clientes y pacientes. Aunque el MMPI-2 es relativamente fácil y sencillo de
aplicar y corregir, su interpretación requiere un alto nivel de preparación
psicométrica, clínica, personológica y profesional, así como un fuerte
compromiso con los principios éticos del uso de los tests.
Es también esencial estar familiarizado con la estructura, dinámica y
desviación de la personalidad. Con lo cuál implica necesariamente tanto un
conocimiento profundo del Cuestionario, como una comprensión amplia de
las complejidades de la personalidad humana. Es esencial que el usuario del
MMPI-2 controle el rango de su aplicación, las condiciones en las que es
administrado y corregido, así como la confidencialidad de los resultados del
test y los informes finales.
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La utilidad de la información obtenida mediante el MMPI-2 depende en gran
medida de la capacidad del sujeto para comprender las instrucciones del
test, cumplir con las demandas de la tarea, comprender e interpretar el
contenido de los ítems en relación a sí mismo y registrar estas
autoatribuciones de modo sincero.
Por parte del sujeto que realizará el cuestionario, se requiere un nivel de
comprensión lectora de 2º de ESO más o menos.
INTERPRETACIÓN DEL MMPI-2
La formación de hipótesis interpretativas a partir de los datos reflejados en
el perfil clínico del MMPI-2 depende de tres aspectos interrelacionados de
esas puntuaciones: la aceptabilidad de las puntuaciones del perfil, que está
determinada por los indicadores de validez; la elevación absoluta de las
escalas componentes frente a las normas incorporadas en los varemos de
puntuaciones T; y las configuraciones relativas de estas puntuaciones
dentro del perfil individual.
Para aproximarse paso a paso a la interpretación del perfil básico y de la
información adicional a partir de un sujeto examinado con el MMPI-2, se
requiere:
1-Evaluar el grado en que este conjunto de respuestas es consistente
con otras informaciones sobre esa persona.
2-Examinar las puntuaciones de las escalas clínicas en el perfil
estándar para generar una lista de posibles líneas de interpretación acerca
de la personalidad y el estado emocional actual del sujeto.
3-Consultar diversas guías interpretativas del MMPI.
4-En las escalas elevadas hasta cierto nivel, determinar los
componentes subescalas que está contribuyendo primariamente a esas
elevaciones y anotar el tipo de temas de mayor preocupación para el sujeto.
5- Señalar cualquier ítem crítico significativo que pueda haber sido
contrastado de manera que indique problemas especiales o síntomas o
preocupaciones que no se habían sospechado.
6-Examinar las puntuaciones en la escalas de contenido para elaborar
las hipótesis interpretativas anteriormente generadas y formular un
resumen coherente de la dinámica de la personalidad y el estatus
diagnostico del sujeto.
REPRESENTACIÓN DE UNA PERSONALIDAD IDEALIZADA
Al completar el MMPI-2, algunos individuos no siguen las instrucciones del
test respecto a contestar los ítems según se adecuen a ellos mismos. Por el
contrario, describen sistemáticamente a quien perciben como alguien que
tiene una personalidad perfecta o un ajuste que tiene una personalidad
perfecta o un ajuste ideal. Los registros resultantes proporcionan bases
pobres para hacer inferencias sobre estas personas. Es esencial disponer de
algunos medios detectar este fenómeno y captar sus efectos sobre los
patrones del test. Hathaway y McKinley introdujeron la escala L (Mentira)
para evaluar la probabilidad de que el individuo se hubiese aproximado al
test con esta actitud.
Una puntuación inferior al promedio en la escala l, indica que el sujeto
estuvo completamente libre de a tendencia a colocare a sí mismo en una
posición inusualmente favorable. Por otra parte, puntuaciones muy bajas
eesta escala, pueden acompañarse de puntuaciones en la escala K, lo que
reflejaría un esfuerzo realizado para exagerar problemas emocionales y
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dificultades de ajuste. Puntuaciones moderadamente altas en la escala L
pueden no ser indicativas de una aproximación marcadamente defensiva al
test, aunque pueden reflejar una perspectiva fuertemente moralista o muy
reservada del individuo. Puntuaciones L marcadamente elevadas reflejarían
bastante bien una orientación contaminada del test que afectaría
negativamente al significado de las puntuaciones en las escalas clínicas.
Los individuos que no quieren cooperar con las instrucciones del test
pueden simular responder al MMPI-2, pero contestando los ítemes de forma
azarosa. Otro tipo de individuo, puede estar exagerando deliberadamente
sus trastornos y problemas para asegurar que se les dará una consideración
o atención especial. Algunos de estos acercamientos al test pueden generar
puntuaciones altas en la escala F (Incoherencia).
Algunos sujetos pueden obtener una puntuación algo superior en la escala F
debido a que describen sentimientos o reacciones inusuales en
circunstancias especiales a las que están enfrentándose (problemas
conyugales, problemas en el trabajo..), debido a una patología significativa.
Las puntuaciones en F superiores a T 79 pero inferiores a T 100, pueden
indicar problemas emocionales de un grado significativo. Es importante
intentar identificar la razón de una elevación en la escala F o en Fb, De
hecho, si el sujeto estuvo intentando cooperar con la tarea, pero fue
incapaz de realizarla debido a las limitaciones sensoriales o motoras, es
posible cambiar a una forma alternativa de MMPI-2, para obtener un
registro más válido. El fracaso al intentar obtener un protocolo aceptable
puede ser irremediable cuando el sujeto tiene algún tipo de motivación
especial para fingir un trastorno o para otra distorsión en su registro, pero
la identificación de la razón por la que se fracasa al completar el test puede
resultar de gran utilidad para comprensión del diagnóstico y la evaluación
clínica. Existen formas menos obvias en las que un sujeto puede alterar las
puntuaciones del Cuestionario de personalidad. Los esfuerzos por aumentar
la impresión de salud mental sin intentar crear una imagen totalmente
increíble del propio ajuste, o a la inversa, forzando la impresión de tener
serias dificultades emocionales, pueden alterar los niveles de puntuaciones
y las configuraciones del perfil clínico. La detección de estas actitudes más
sutiles al contestar al test, es más difícil. La puntuación en la escala K
puede ser muy útil en esta dirección.
REPRESENTACIÓN DE UNA PERSONALIDAD IDEALIZADA
Al completar el MMPI-2, algunos individuos no siguen las instrucciones del
test respecto a contestar los ítemes según se adecuen a ellos mismos. Por
el contrario, describen sistemáticamente a quien perciben como alguien que
tiene una personalidad perfecta o un ajuste que tiene una personalidad
perfecta o un ajuste ideal. Los registros resultantes proporcionan bases
pobres para hacer inferencias sobre estas personas. Es esencial disponer de
algunos medios detectar este fenómeno y captar sus efectos sobre los
patrones del test. Hathaway y McKinley introdujeron la escala L (Mentira)
para evaluar la probabilidad de que el individuo se hubiese aproximado al
test con esta actitud.
Una puntuación inferior al promedio en la escala l, indica que el sujeto
estuvo completamente libre dela tendencia a colocare a sí mismo en una
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posición inusualmente favorable. Por otra parte, puntuaciones muy bajasen
esta escala, pueden acompañarse de puntuaciones en la escala K, lo que
reflejaría un esfuerzo realizado para exagerar problemas emocionales y
dificultades de ajuste. Puntuaciones moderadamente altas en la escala L
pueden no ser indicativas de una aproximación marcadamente defensiva al
test, aunque pueden reflejar una perspectiva fuertemente moralista o muy
reservada del individuo. Puntuaciones L marcadamente elevadas reflejarían
bastante bien una orientación contaminada del test que afectaría
negativamente al significado de las puntuaciones en las escalas clínicas. Los
individuos que no quieren cooperar con las instrucciones del test pueden
simular responder al MMPI-2, pero contestando los ítems de forma azarosa.
Otro tipo de individuo, puede estar exagerando deliberadamente sus
trastornos y problemas para asegurar que se les dará una consideración o
atención especial. Algunos de estos acercamientos al test pueden generar
puntuaciones altas en la escala F (Incoherencia). Algunos sujetos pueden
obtener una puntuación algo superior en la escala F debido a que describen
sentimientos o reacciones inusuales en circunstancias especiales a las que
están enfrentándose (problemas conyugales, problemas en el trabajo..) o
debido a una patología significativa. Las puntuaciones en F superiores a T
79 pero inferiores a T 100, pueden indicar problemas emocionales de un
grado significativo. Es importante intentar identificar la razón de una
elevación en la escala F o en Fb, de hecho, si el sujeto estuvo intentando
cooperar con la tarea, pero fue incapaz de realizarla debido a las
limitaciones sensoriales o motoras, es posible cambiar a una forma
alternativa de MMPI-2, para obtener un registro más válido. El fracaso al
intentar obtener un protocolo aceptable puede ser irremediable cuando el
sujeto tiene algún tipo de motivación especial para fingir un trastorno o
para otra distorsión en su registro, pero la identificación de la razón por la
que se fracasa al completar el test puede resultar de gran utilidad para
comprensión del diagnóstico y la evaluación clínica. Existen formas menos
obvias en las que un sujeto puede alterar las puntuaciones del Cuestionario
de personalidad. Los esfuerzos por aumentar la impresión de salud mental
sin intentar crear una imagen totalmente increíble del propio ajuste, o a la
inversa, forzando la impresión de tener serias dificultades emocionales,
pueden alterar los niveles de puntuaciones y las configuraciones del perfil
clínico. La detección de estas actitudes más sutiles al contestar al test, es
más difícil. La puntuación en la escala K puede ser muy útil en esta
dirección.
DETERMINACIÓN DE LA VALIDEZ DEL PROTOCOLO
Para evaluar si una determinada aplicación del MMPI-2 es aceptable, los
indicadores tradicionales de validez se usan por separado o en combinación.
Además, han sido desarrolladas algunas pruebas suplementarias de validez.
Antes de hacer inferencias personológicas o generar hipótesis diagnosticas,
cada protocolo del test debe examinarse para determinar su aceptabilidad.
Sólo si se asume que el individuo cumplimenta el test marcando los ítemes
consistentemente de forma que seguramente refleja sus auto-percepciones,
puede el clínico continuar con el proceso interpretativo. Un sujeto puede
responder de diversos modos que invalidan un registro: puede dejar sin
responder numerosos ítemes, o interpretar diversos roles que distorsionan
el patrón real de auto-descripciones, o no respetar las instrucciones del
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test, o ser incapaz de leer y comprender el significado de los ítemes y,
consecuentemente , responder virtualmente al azar. Los indicadores de
validez construidos en el MMPI-2 se diseñaron para ayudar a detectar tales
fuentes de invalidez del protocolo y proporcionar una base para evaluar el
impacto de tales distorsiones en el registro del test. Cada sujeto debe
responder Verdadero o Falso a la mayor cantidad de ítems del MMPI-2 que
le sea posible. La puntuación ? (Interrogante); no es una escala en el
sentido usual de la palabra, es un simple recuento de los ítemes que se
dejaron sin contestar o que fueron respondidos por el sujeto como
Verdaderos y Falso a la vez. Cuanta más alta sea la puntuación ? más débil
será la capacidad de discriminación de las escalas del test. Si el número de
ítemes dejados sin contestar excede de 30, el registro del test debe ser
considerado como altamente sospechoso, si no complementario invalidado.
PUNTUACIÓN INTERROGANTE ?
Implicaciones de las puntuaciones
Punt. directa
PD>o = 30
Utilidad del
perfil
Probablemente
inválido
PD 11-29
Validez
cuestionable
PD 2-10
Probablemente
válido
Valido
PD 0-1
Origen de la
evaluación
Serios problemas
de lectura o
dislexia
Retardo
psicomotor
Confusión
Desafío
Indecisión
Problemas leves
de lectura
Ausencia de
experiencia
Supercauteloso o
legalista
Interpretación
idiosincrática
Hipótesis
interpretativas
Depresión grave
Estado obsesivo
Falta de
familiaridad con
el idioma ideación
paranoide
-Escala L (Mentira);
Se redactaron algunos ítems que proporcionaban al sujeto la oportunidad de
rechazar varias faltas menores y defectos de carácter que la mayoría de los
individuos confesaban voluntariamente que eran verdad en ellos mismos.
Aunque la escala L puede reflejar engaño en la situación del test, no puede
ser considerada como una medida de alguna tendencia general a mentir,
inventar o engañar a otros en las actividades diarias. Por otra parte,
puntuaciones muy bajas en esta escala, pueden acompañarse de
puntuaciones muy bajas en la escala K, lo que reflejaría un esfuerzo
realizado para exagerar problemas emocionales y dificultades de ajuste.
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ESCALA L (MENTIRA)
Implicaciones de las puntuaciones:
Puntuaciones T
T > ó = 80
T 70-79
T 60-69
T 50-59
T < 50
Utilidad del
perfil
Probablemente
inválido
Origen de la
Elevación
Fingir un buen
ajuste
Hipótesis
interpretivas
Prueba de
resistencia o
ingenuidad
Validez
Respuestas al
Estado de
incuestionable
azar
confusión
Rechazo de faltas Estilo represivo
Falta de
comprensión
Probablemente
Cuadro defensivo Superconvencional
válido
y conformista
Moralista
Rigidamente
virtuoso
Válido
Típica
Conforme con su
aproximación a
propia imagen
los tests
Puntuaciones
dentro de la
media
Posible actitud de Cuadro de
Auto-confiado e
“mala imagen”
“buscar conseguir independiente
algo más”
Crítico, sarcástico
Todas las
respuestas son
“verdadero”
-Escala F (Incoherencia);
Los individuos que no quieren cooperar con las instrucciones del test
pueden simular responder al MMPI-2, contestando los ítems de forma
azarosa. Incluso puede que lo que desee el sujeto sea exagerar
deliberadamente su trastorno y problemas para asegurar que se les dará
una atención o consideración especiales, estaríamos ante puntuaciones
altas en F, puntuaciones que describen a un individuo con sentimientos o
reacciones inusuales en circunstancias especiales a las que están
enfrentándose, o debido a una patología significativa.
ESCALA F (INCOHERENCIA)
Implicaciones de las puntuaciones
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Puntuaciones T Utilidad del
Perfil
T > 100
Perfil invalidado
Origen de la
elevación
Respuestas al
azar
Errores de
corrección
Grave dislexia
Contestar todo
como verdadero
T 80-100
Perfil invalidado
Si valido,
considerar serios
problemas
psicopatológicos
T 65-79
Probablemente
válido
Fingir
enfermedad
Procesos
psicóticos
Responder
“Falso a todas
las respuestas”
Exageración de
problemas
Fingir
enfermedad
Procesos
psicóticos
T 60-64
Probablemente
válido
T 50-59
Registro
aceptable
T < 50
Registro
aceptable
Puntuaciones
dentro de la
media
Conformidad
Posible falsa
imagen
Hipótesis
interpretativas
Actitud no
cooperativa
Fingir mala imagen
de sí mismo
Paciente
psiquiátrico que
puede estar
desorientado
claramente psicótico
Reafirmación
Deseabilidad social
Estado confusional
Psicótico
Neurótico severo
Problemas de
sociabilidad
Propenso a cambios
de humor,
desasogado,
inquieto,insatisfecho
Cambiante,
impredecible
Problemas en un
área particular
(trabajo, sexo,
salud...)
Buen
funcionamiento
Típicas respuestas
Convencionalidad
Sinceridad
Conformidad social
-Escala K (Corrección);
Es el más complejo de los indicadores de validez. El contenido de los ítems
cubre un rango de características que muchos individuos prefieren negar
acerca de sí mismo y de sus familias. En la escala K, las puntuaciones
superiores a la media pueden reflejar la tendencia al sesgo, de forma sutil,
de las propias respuestas en una dirección que minimiza las implicaciones
de un pobre control emocional e ineficacia personal. Los datos de la historia
del individuo
y las circunstancias concurrentes son necesarios para
distinguir entre un sujete con buen comportamiento, psicológicamente
12
sano, y un individuo que asume una actitud excesivamente defensiva y
evitativa al contestar el Cuestionario.
ESCALA K (CORRECCIÓN)
Implicaciones de las puntuaciones
Puntuaciones T
Utilidad del
perfíl
Perfil invalidado
Origen de la
elevación
Fingir buena
imagen
Marcada
defensividad
Contestar a todo
como “falso”
T 60-70
Validez
cuestionada
Defensividad
moderada
Negación del
problema
T 50-59
Perfil válido
Autoevaluación
equilibrada
T < 50
Perfil invalidado
Fingir “hacerse el
enfermo”
Exageración de
sus propios
desajustes
Contestar a todo
como “falso”
T > 70
Hipótesis
interpretativas
Implicación
emocional
acusada
Inhibición,
timidez
Desconfianza
Ausencia de
comprensión
Clínicamente
defensivo. Todo
lo niega
Intolerante
Sin capacidad
para la intuición
Muy ajustado.
Independiente
Inteligente
Entusiasta.
Interés amplios
Confuso
Autocrítico
Conformista
Introvertido
Cínico, suspicaz
-Indicadores adiccionales de Validez;
-La escala Fb (F posterior);
Esta escala contiene 40 itemes y trata de identificar un registro en el
que el sujeto ha dejado de prestar atención a los ítemes del test y ha
cambiado hacia un patrón de respuesta esencialmente azaroso.
ESCALA Fb (F POSTERIOR)
Implicaciones de las puntuaciones
13
Puntuaciones T
T > 100
Utilidad del
perfil
Perfil invalidado
T 80-100
Perfil invalidado
Si es válido,
considerar serios
problemas
psicopatológicos
T 65-79
Validez
cuestionable
T 50-64
Puntuaciones
dentro de la
media
Validez
cuestionable
T < 50
Origen de la
elevación
Responder al azar
Responder a todo
como “falso”
Ofrecer una mala
imagen de sí
mismo
Hipótesis
interpretativas
Paciente
psiquiátrico que
puede estar
desorientado,
confuso o que
puede mostrar
claramente su
conducta
psicótica
Responder a todo Posibles
como “falso”
problemas
Hacerse el
psicopatológicos
enfermo
Confuso
Exagerar sus
Fatiga, cansancio
desajustes
Responder a todo Considerar serios
como “falso”
problemas
Hacerse el
psicopatológicos
enfermo
Fatiga, cansancio
Exagerar sus
desajustes
Puntuaciones
aceptables
Considerar que
ha podido
expresar una
“buena imagen”
de sí mismo
-La escala TRIN (Inconsistencia de las respuestas verdadero) y la escala
VRIN (Inconsistencia de respuestas variables) son nuevas escalas de
validez (Tellegen, 1982, 1988) diseñadas para completar los indicadores de
validez tradicionales. Las puntuaciones TRIN y VRIN proporcionan un índice
de la tendencia del sujeto a responder a los ítemes de forma inconsistente o
contradictoria. Así, TRIN y VRIN se parecen a la escala de Descuido
(Greene, 1978) que también fue desarrollada para identificar este tipo de
inconsistencia en las respuestas al MMPI. Tanto TRIN como VRIN consisten
en pares de ítemes de VRIN tiene contenido similar u opuesto; cada par se
puntúa ante la presencia de una inconsistencia en las respuestas a los
ítemes. La puntuación en la escala VRIN es el numero total de pares de
ítemes a los que se responde inconsistentemente. Puntuaciones altas en
VRIN advierten que el sujeto puede haber contestado los ítemes del
Cuestionario de forma indiscriminada, e indica la posibilidad de que el
protocolo pueda ser invalidado y de que el perfil no sea esencialmente
interpretable. La escala TRIN, diferente a VRIN, se compone exclusivamente
de pares de ítemes cuyo contenido es opuesto. Una puntuación TRIN muy
alta indica una tendencia itemes (aquiescencia), y una puntuación muy baja
en TRIN indica una tendencia a contestar Falso indiscriminadamente (no
aquiescencia). Se espera que TRIN y VRIN complemente a L, F y K de
14
manera útil. Las puntuaciones TRIN y VRIN que representan calores
extremos en las muestras normativas, deben usarse como simples guías
para identificar perfiles caracterizados por una significativa inconsistencia:
puntuaciones directas VRIN de 14 ó más, y puntuaciones directas TRIN de 9
ó menos, o de 14 ó más. Puntuaciones TRIN muy altas o muy bajas son una
advertencia de que el sujeto puede haber respondido al Cuestionario
indiscriminadamente, de modo que el perfil será invalidado e
ininterpretable. Una puntuación F combinada con una alta puntuación VRIN
indica, con mayor probabilidad, que el perfil no es interpretable debido a
descuido, confusión, etc, más que si VRIN no es elevada. Por otra parte, en
el caso de F elevada y VRIN baja, el descuido, la confusión, etc., pueden
descartarse, y la puntuación F elevada puede descartarse, y la puntuación
F elevada puede interpretarse en términos de su contenido real, el cuál
reflejaría tanto una autentica psicopatología como un esfuerzo deliberado
para fingir disfunción. Una alta puntuación en K combinada con una
puntuación TRIN muy baja, refleja con mayor probabilidad respuestas Falso
indiscriminadamente, que si TRIN fuese menos que el promedio.
ESCALA TRIN (INCONSISTENCIA DE LAS RESPUESTAS VERDADERO)
Implicaciones de las puntuaciones
Puntuación directa
PD > 14
Utilidad del perfil
Perfil invalidado
PD 9 -13
PD < 9
Perfil Válido
Perfil Válido
Hipótesis interpretativas
Tendencia a la
aquiescencia de
respuestas
Tendencia a la noaquiescencia de las
respuestas (no sabe no
contesta
ESCALA VRIN (INCONSISTENCIA DE RESPUESTAS VARIABLES)
Implicaciones de las puntuaciones
Puntuación directa
PD > 14
PD < ó = 14
Utilidad del perfíl
Perfil invalidado
Perfil valido
Hipótesis interpretativas
Responder al azar
LAS ESCALAS CLINICAS
Escala 1 (Hs: Hipocondría): Muestra preocupación excesiva por la salud,
atención auto-centrada en las vidas de esos individuos.
15
Escala 2 (D: Depresión): Los ítems de esta escala reflejan sentimientos de
desanimo, pesimismo, desesperación, hiperresponsabilidad, valores
personales rígidos y auto-castigo.
Escala 3 (Hy: Histeria de conversión): Esta escala reflejan quejas físicas
específicas, trastornos molestos, negación de problemas en la propia vida o
ausencia de ansiedad social.
Escala 4 (Pd: Desviación psicopática): Es una escala centrada en la ausencia
de consideración acerca de la mayoría de las normas sociales y morales de
conducta; discordia familiar, problemas con la autoridad, frialdad social,
alineación social y autoalineación.
Escala 5 (Masculinidad-Feminidad): Los ítems de esta escala cubren un
rango de reacciones emocionales, intereses, actitudes y sentimientos sobre
el trabajo, interrelaciones sociales y aficiones en los que, en general,
varones y mujeres difieren.
Escala 6 (Pa: Paranoia): El contenido de los ítems de la escala 6 refleja
tanto una marcada sensibilidad interpersonal como una tendencia a
malinterpretar los motivos o intenciones de otros. También se incluyen en
algunos de estos ítems egocentrismo e inseguridad.
Escala 7 (Pt: Psicastenia): Muestra preocupaciones obsesivas, rituales
compulsivos o miedos exagerados. La escala completa refleja ansiedad y
estrés más generalizados (o emocionalmente negativos), así como la
declaración de estrictas normas de moral auto-culpa por las cosas que mal
y rígidos esfuerzos por controlar los impulsos.
Escala 8 (Sc: Esquizofrenia): El contenido de los ítems de esta escala cubre
un amplio rango de pensamientos extraños, experiencias inusuales y
características sensibles especiales de estos individuos. Alineación social,
alineación emocional y tres medidas de ausencia de autocontrol (cognitivo,
conativo e inhibición defectuosa) y experiencias sensoriales extrañas.
Escala 9 (Ma: Hipomanía): Esta escala trata de cubrir algunas de las
características conductuales de esta condición y rasgos asociados (ambición
desmedida, extraversión y altas aspiraciones).
Escala 0 (Si: introversión Social): Muestra la tendencia a la introversión o
extraversión del sujeto, tales como Timidez/Auto-conocimiento (Si1),
Evitación Social (Si2) y Alineación respecto a sí mismo y a otros (Si3).
16
ESCALAS SUPLEMENTARIAS
Escalas Tradicionales:
-La escala A (Ansiedad).
-La escala R (Represión).
-La escala Es (Fuerza del yo).
-MAC-R (Escala revisada de Alcoholismo, de MacAndrew).
Escalas Adicionales:
-O-H (Hostilidad excesivamente controlada).
-Do (Dominancia).
-Re (Responsabilidad Social).
-Mt (Inadaptación universitaria).
-GM y GF (Escalas de Rol sobre Género).
-MDS (Malestar matrimonial).
-APS (Potencial de adicción).
-AAS (Reconocimiento de Adicción).
ESCALAS DE CONTENIDO
-ANX (Ansiedad).
-FRS (Miedos).
-OBS (Obsesividad).
-DEP (Depresión).
-HEA (Preocupaciones por la salud).
-BIZ (Pensamiento extravagante).
-ANG (Hostilidad).
-CYN (Cinismo).
-ASP (Conductas antisociales).
-TPA (Comportamiento tipo A).
-LSE (Baja Autoestima).
-SOD (Malestar social).
-FAM (Problemas familiares).
-WRK (Interferencia Laboral).
-TRT (Indicadores negativos de tratamiento).
17
SUBESCALAS
-D1: Depresión subjetiva.
-D2: Retardo psicomotor.
-D3: Disfunción física.
-D4: Enlentecimiento mental.
-D5: Rumiación.
-Hy1: Negación de ansiedad social.
-Hy2: Necesidad de afecto.
-Hy3: Lasitud-malestar.
-Hy4: Quejas Somáticas.
-Hy5: Inhibición de la agresión.
-Pd1: Discordia familiar.
-Pd2: Problemas con la autoridad.
-Pd3: Frialdad social.
-Pd4: Alineación Social.
-Pd5: Autoalineación.
-Pa1: Ideas persecutorias.
-Pa2: Hipersensibilidad.
-Pa3: Ingenuidad.
-Sc1: Alineación social.
-Sc2: Alineación emocional.
-Sc3: Ausencia de control yo, cognitivo.
-Sc4: Ausencia de control yo, conativo.
-Sc5: Ausencia de control del yo, inhibición defectuosa.
-Sc6: Experiencias sensoriales extrañas.
-Ma1: Amoralidad.
-Ma2: Aceleración psicomotriz.
-Ma3: Imperturbabilidad.
-Ma4: Auto-envanecimiento.
-Si1: Timidez / Auto-cohibición.
-Si2: Evitación social.
-Si3: Alineación respecto a sí mismo y a otros.
MCMI-II: El MCMI II es un cuestionario que consta de 175 ítems de
respuesta verdadero-falso, que informa sobre 8 patrones clínicos de
personalidad, 3 formas graves de patología de personalidad, 6 síndromes
clínicos de intensidad moderada y 3 síndromes clínicos graves. Las
puntuaciones se convierten en tasas base, cuyo punto de corte se sitúa en
el valor 75, siendo los valores superiores sugestivos de algún problema
clínico y por encima de 84 discriminaría trastornos del Eje I y II. Cuenta con
escalas de control como medidas de validez, sinceridad, deseabilidad y
exageración deliberada de la sintomatología. Es un intrumento basado en la
teoría biosocial de Millon, de naturaleza politética no factorial; desde su
modelo teórico ningún tipo de personalidad o estado psicopatológico
18
consiste en propiedades enteramente psicológicas, homogéneas y discretas.
La fiabilidad del cuestionario, realizada a través del índice de Cronbach en la
población española es de 0.71, suficientemente válida para la
administración en ámbitos judiciales. Se trata de uno de los mejores
instrumentos de evaluación de la personalidad empleados en la actualidad
para valoraciones forenses (Jiménez, 2003). Con puntuaciones bajas en las
escalas X (sinceridad) e Y (deseabilidad) y elevadas en (alteración, hacerse
el enfermo), puede concluirse una moderada exageración de los problemas
psicológicos.
Con puntuaciones bajas en X y Z y altas para escala Y, puede concluirse
que el sujeto enfatiza en una auto-presentación demasiado saludable y
ajustada.
Baja puntuación en la escala Y y altas en X y Z sugiere auto-presentación
negativa y mal ajuste.
Cuando la escala Z>85 TB e Y<40 TB, se pueden presumir síntomas de
exageración de psicopatología.
PROCEDIMIENTO DE EVALUACIÓN
El equipo investigador deberá contar al menos con dos miembros, con el
objeto de que el perito principal esté en condición ciega respecto a los
resultados psicométricos. La ordenación por bloques seguirá un criterio
cronológico, además de metodológico. Durante la recogida de datos del
primer bloque, que realizará el primer perito, se extremarán las medidas
para recabar toda la información posible, incluyendo entrevistas al contexto
social pasado y actual del sujeto. Tras la revisión de los datos, se procederá
a registro de puntajes en base a los diagnósticos presuntos. Se reconoce la
pertinencia de un peritaje inmediato al delito, para evitar preparación
(López y Zaldívar, 2002).
En el segundo bloque, la entrevista clínica será implementada por el
investigador principal, cuyas consignas deben ceñirse a las sugeridas en
cada prueba, registrando los ítems relacioneados con la conducta del sujeto.
Si se estima necesario, la administración de tests psicométricos, serán
implementados por el segundo investigador, que registrará cualquier
contingencia durante las pasaciones y mantendrá un comportamiento
distante con el sujeto. En el caso de que sea necesaria la administración del
MMPI II y/o MCMI II (aunque recordamos el principio de la menor
intrusividad), se realizarían en días alternos, para procurar blanqueo. Los
resultados deberán indicar puntuaciones compatibles o no con diagnóstico
clínico de EJE I y II, presencia o no de trastornos de personalidad (con
codificación DSM IV-TR y CIE 10), valoración de la simulación según escalas
de control del MMPI II y MCM II, concluyendo la relación entre trastorno y
conducta delictiva.
La tabla final de registro contará con los puntajes para la toma de
decisiones acerca de la validez del informe y del grado sugerido de
imputabilidad acorde con el marco jurídico español. Dichos puntajes tienen
carácter subjetivo y simplemente reflejan la valoración del forense sobre
los aspectos sustanciales de la evaluación. En el anexo se ofrece el
protocolo de evaluación.
19
PROTOCOLO DE
PASACIÓN
E.R.P
ESCALA DE EVALUACIÓN DE LA
RESPONSABILIDAD PENAL
Copyright Martín Murcia 2004
Universidad de Almería
20
BLOQUE I
1. VACIADO DE AUTOS
Descripción pormenorizada del delito
Baremo
Fiabilidad
0 SI
de fuentes
1 NO
Puntuación
Información 0 SI
suficiente
1 NO
21
2. ANTECEDENTES PSICOLÓGICOS:
• Estabilidad, integración y adaptación
• Relaciones familiares
• Relaciones sociales
• Relaciones pareja
• Historia académica
• Historia laboral
• Historia de actividades lúdicas
• Conducta adictiva
3. ANTECEDENTES PSIQUIÁTRICOS
* Dx……………………………………………………………
Fecha:………………………..
Facultativo: ………………………………………………...
Centro clínico: ……………………………………………..
Evolución clínica: ………………………………………….
* Dx……………………………………………………………
Fecha:………………………..
Facultativo: ………………………………………………...
Centro clínico: ……………………………………………..
Evolución clínica: …………………………………….........
* Dx……………………………………………………………
Fecha:………………………..
Facultativo: ………………………………………………...
Centro clínico: ……………………………………………..
22
4. DIAGNOSTICO PRESUNTO tempus delicti:
………………………………………………………………….
Código DSM IV-TR/CIE 10:…………………………………
(Según informes previos)
Baremo
Organicidad*:
Puntuación
0 NO
6 SI
Diagnóstico*:
0 Ausente
1 Presente
5. DIAGNOSTICO PRESUNTO actual:
..........................................................................................................
Código DSM IV-TR/CIE 10:…………………………………
(Según informes previos)
Baremo
Organicidad*:
Puntuación
0 NO
6 SI
Diagnóstico*:
0 Ausente
1 Presente
* Relacionado/a con la naturaleza del delito
23
BLOQUE II
1. ENTREVISTA DE DESPISTAJE (*)
* Se trata de una guía para el clínico, quedando abierta a focalizar en ítems de interés
diagnóstico. Debe utilizarse soporte de audiovisual para registrar la entrevista. Si el sujeto
presenta enlentecimiento psicomotor, descarrilamiento o tangencialidad, solicitar dibujo libre y
dirigido, observando la congruencia en la ejecución.
Consigna: A continuación le formularé una serie de preguntas sobre algunos aspectos
de su vida, así como acerca de su forma de pensar y sentir ante algunas situaciones.
Conteste teniendo en cuenta que ninguna respuesta es correcta o incorrecta. Le ruego
que no dedique demasiado tiempo a razonar sobre la pregunta, aunque puede
extenderse cuanto quiera en su respuesta.
1. ¿Ha evitado trabajos o tareas que implicaban tener que tratar con la gente?
2. ¿Permanece generalmente callado cuando conoce a gente nueva?
3. ¿Le preocupa con frecuencia ser criticado o rechazado en situaciones sociales?
4. ¿Tiene usted unos valores estrictos sobre lo que está bien o mal?
5. ¿Suele estar a menudo seguro de tener razón?
6. ¿Siente con frecuencia que los demás no le comprenden?
7. ¿Suele estar de mal humor y discutir con la gente?
8. ¿Cree que su estado psicológico es bueno?
9. ¿Se ha sentido a lo largo de su vida habitualmente infeliz?
10. ¿Cree usted que la mayoría de las personas no son buenas?
11. ¿Tiene últimamente sentimientos de culpa?
12. ¿Ha padecido algún trastorno mental a lo largo de su vida?
13. ¿Considera que en el momento de los hechos usted padecía algún trastorno
mental?
14. ¿Cree que tuvo alguna experiencia extraña en el momento de los hechos?
15. (Si refiere síntomas positivos) ¿Qué te decían las voces?
16. (Si refiere síntomas positivos) ¿A que edad empezaste a oirlas?
17. (Si refiere síntomas positivos) ¿En que oido solías escucharlas?
18. (Si refiere síntomas positivos) ¿Las visiones que tenías eran en color?
19. ¿Tiene usted buena memoria? ¿La tenía antes de los hechos?
20. ¿Qué opina de lo sucedido, lo considera un delito?
21. ¿Existen personas cercanas en su familia que padezcan alguna enfermedad
mental?
22. ¿Se identifica usted con ese familiar supuestamente “trastornado”?
23. ¿Hubo algún momento anterior al delito donde usted ha sentido las mismas
sensaciones que en el momento del incidente? ¿Cómo reaccionó?
24. ¿Ha solicitado ayuda alguna vez en su vida por sentirse mal?
25. ¿Cuándo empieza a sentirte mal, a tener pensamientos negativos, a notar
incomodidad... que solía hacer en su vida antes de los hechos?
26. (Si refiere síntomas positivos) ¿Qué hacía cuando tenía esas visiones?
27. (Si refiere síntomas positivos) ¿A quien le comentó que oía voces?
28. (Si refiere síntomas positivos y no lo comentó) ¿Porqué no se lo comentó a
nadie?
29. (Si refiere síntomas positivos) ¿Las visiones que tenía siempre eran las mismas?
24
30. ¿Por qué cree que las voces querían que cometiera el delito?
31. ¿Cómo definiría su estado psicológico segundos antes de los hechos?
32. ¿Ha tenido problemas anteriormente con la justicia? ¿Cómo se resolvieron?
33. ¿Cree que se le ha acusado injustamente?
34. ¿Recuerda que ropa llevaba puesta el día de los hechos?
35. ¿Podría decir de que color era la vestimenta del la victima?
36. ¿Quién fue la última persona a la que vió antes del incidente? ¿Recuerda si habló
con ella, o si tenía algún rasgo, vestimenta, peinado que le llamara la atención?
37. ¿Recuerda cuál fue la última comida o bebida que ingirió el día de autos?
38. ¿Podría decir el sexo de la victima y si recuerda alguno de los detalles de su
vestimenta?
39. ¿En algún momento anterior al incidente, había pensado que usted sería capaz de
actuar así en un momento dado?
40. ¿Considera usted que puede haber justificación alguna para haber realizado un
hecho así?
41. ¿Le sorprendió su actuación en el incidente?
42. Sitúese minutos antes del hecho, ¿Qué se le pasó por la cabeza? ¿Cómo se
sentía?
43. ¿Recuerda si hubo alguna señal, alguna palabra, algo... que le empujara a
comportarse como lo hizo?
44. (Si refiere síntomas positivos) ¿Qué te decían exactamente las voces en ese
momento?
45. (Si refiere síntomas positivos) ¿Desde cuando las oía?
46. (Si refiere síntomas positivos) ¿En que oido las oyó con mayor intensidad?
47. (Si refiere síntomas positivos) ¿Las visiones que tuvo en ese momento eran en
blanco y negro, en sepia o en color?
48. ¿Nos podría describir a la victima en el momento del delito, que decía, que hizo
cuando estaba cerca de usted?
49. ¿Hubo algún detalle durante el incidente que llamara especialmente su interés?
50. ¿Le insultó la victima?
51. ¿Y usted, que le dijo exactamente?
52. ¿Cree que pudo verle alguien en el momento del incidente?
53. Durante algún instante se le pasó por la cabeza dejar de hacer lo que estaba
haciendo?
54. ¿Pensó en el dolor que estaba experimentando la victima en algún momento?
55. (Si es afirmativa) ¿Por qué no paró?.
56. ¿Me podría decir más o menos la hora aproximada del delito?
57. ¿Por qué elegió a esa victima?
58. ¿Cree que la victima tuvo su merecido, que en cierto modo, tu conducta fue
provocada por esa persona? ¿Si no le hubiera provocado “según usted” hubiera
actuado así?
59. ¿Recuerda en que pensabas cuando estabas cometiendo el delito?
60. ¿Recuerda que sentía en ese preciso momento?
61. ¿Consideró en esos momentos, los riesgos que estaba corriendo y las
repercusiones que le podría acarrear?
62. ¿Eras usted quien actuaba o cree que pudiste ser inducido por otra persona y no
eras consciente de lo que estabas haciendo?
63. ¿Recuerda el sexo de la victima?
64. ¿Habló algo la victima durante el delito, se dirigió a usted en algún momento?
65. ¿Qué le dijo la victima justo cuando usted la estaba atacando?
25
66. ¿Nos podría indicar algún detalle de la vestimenta de la víctima?
67. ¿De qué color era la piel de la victima? ¿Y su pelo?
68. Hubo alguna expresión, palabras, comportamiento de la victima durante el
incidente que llamara su atención.
69. Descríbame los detalles generales del lugar donde se produjeron los hechos.
70. Podría indicar algún detalle específico del lugar del delito.
71. ¿Había alguien más en el momento del delito, o se encontraba usted solo con la
victima?
72. ¿Cabe la posibilidad de que hubiera algún testigo en el lugar?
73. (Si refiere síntomas positivos) ¿Quiénes eran los que veías en ese lugar?
74. (Si refiere síntomas positivos) ¿Esas visiones eran en blanco y negro?
75. (Si refiere síntomas positivos) ¿Quiénes crees que eran esas personas que veías?
76. ¿Recuerda cuál fue la primera persona que vio usted tras los hechos?
77. ¿Se ha arrepentido en algún momento de lo que hizo? ¿Cuándo?
78. ¿Qué cree que fue lo que le motivó a cometer el hecho?
79. ¿Nos podría decir cuanto tiempo más o menos duró la emisión del incidente?
80. ¿Nos podría apuntar alguna de las palabras que dijo u oyó por parte de la victima
en el incidente?
81. ¿Recuerda si la victima habló o le dijo algo?
82. ¿Con quien fue la primera persona con la que usted conversó después del delito,
le comentó algo sobre lo ocurrido?
83. ¿Recuerda el momento de la detección tuya por parte de la policía, había alguna
mujer policía o todos eran hombres? ¿Qué palabras te dijeron? ¿Ofreciste
resistencia?
84. ¿Cómo define actualmente su estado mental?
85. ¿Cómo definiría su estado mental en el momento del incidente?
86. ¿Si usted hubiera estado en su” pleno juicio”, hubiera actuado de igual manera?
¿Qué hubiera hecho?
87. ¿Hubiera actuado así con cualquier persona, o solo con la victima en cuestión?
88. ¿Volvería a cometer el mismo delito con otra persona similar a la victima?
89. ¿Crees que si hubieras sabido las consecuencias que conllevaba el delito, cárcel,
juicio, multa ..., lo hubieras cometido de igual manera?
90. ¿Qué piensas de las personas mentalmente trastornadas? ¿Crees que son capaces
de cometer un delito como este?
91. ¿Se puede estar perfectamente bien de la cabeza y hacer un delito así?
92. ¿Qué opinas ahora de la victima?
93. ¿Consideras que la víctima debe de tener ahora una recompensa justa, por el
daño sufrido?
94. ¿Cuál crees que debería de ser esa recompensa y quien crees que debería de
recompensarla?
95. ¿Cuál fue el primer pensamiento que se te pasó por la cabeza segundos después
del hecho?
96. ¿Hay algún detalle que se te ha podido pasar por alto y que consideres que es
importante aportar?
97. ¿Considera usted que tiene buena memoria en este momento?
98. ¿Aprueba usted lo ocurrido o lo considera un delito?
26
2. TEST MMPI II (*)(**)
• VRIN:
• VTRIN:
• K, L
3. TEST MCMI II (*)(**)
• DESEABILIDAD:
• ALTERACIÓN:
• VALIDEZ:
* Realizar si existe dificultad para establecer diagnóstico clínico o sospecha de simulación
** Realizarla tras período de blanqueo (mínimo 48 horas)
4. CONDUCTA DURANTE LA ENTREVISTA:
- Grado de colaboración:
- Retraimiento/Apertura:
- Contacto visual:
- Humor (tipo, congruencia, sintonía):
27
5. VALORACIÓN DE SIMULACIÓN:
Baremo
Simulación
Puntuación
1 Ausente
0 Presente
Fiabilidad
0 Fiable
diagnóstica
1 No fiable
6. DIAGNÓSTICO CONTRASTE:
Baremo
Puntuación
Diagnóstico (*) 0 Ausente
1 Presente
Kappa:
0 Concordancia
1 Discordancia
7. HIPÓTESIS DEL CASO:
28
8. VALORACIÓN IMPUTABILIDAD:
BAREMO
Puntuación
Fiabilidad
Alta
2
de fuentes
Moderada
1
Baja
0
Suficiente
2
Insuficiente
1
Deficiente
0
Nivel de Información disponible
Grado
de
fiabilidad
evaluación
VALIDEZ DEL INFORME
de
la Alta
2
Moderada
1
Baja
0
0 No evaluable
0
1-2 Validez baja
1-2
3-4 Validez moderada
3-4
5-6 Validez alta
5-6
IMPUTABILIDAD
No evaluable
(Si validez >3)
0 Imputable
0
3-4 Semiimputable
3-4
5-6 No imputable
5-6
Fecha de inicio de evaluación: ………../………./……….
Fecha de conclusión de evaluación: ………../………./……….
29
BIBLIOGRAFÍA:
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DSM IV-TR (2002): Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales, texto
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