Cuba Fuente 1: El Son Cubano Las primeras manifestaciones del son cubano surgieron en las montañas de la Sierra Maestra a fines del siglo XIX. En los días cercanos al Grito de Baire en 1895 ya se cantaban y tocaban sones entre las tropas mambisas del Ejército Libertador. Muchos de aquellos sones llamaban al combate por la libertad de Cuba. "Yo memba, yo memba, Yo memba con lo mambises" ¿Por qué tardó tanto el son en llegar a La Habana, y el guaguancó en llegar a Santiago de Cuba? Por la falta de comunicación de aquellos tiempos. En 1909, una de las primeras medidas del gobierno cubano fue la de crear el ejército permanente, estableciéndose de esta manera en el país la práctica de desarraigar al soldado de su medio con la finalidad de evitar conspiraciones y sublevaciones. Este hecho político motivó un interesante intercambio musical entre las provincias cubanas. Muchos músicos de aquella época se enrolaron en el ejército para resolver sus problemas económicos. Los soldados habaneros llevaron el guaguancó a Oriente, y los soldados orientales trajeron el son a La Habana. Dos décadas después, el primitivo son montuno perfeccionado por Miguel Matamoros se imponía universalmente El Trio Matamoros surgió en Santiago de Cuba el 12 de mayo de 1925. Miguel Matamoros fue su director y prolífero compositor de sones y boleros como "El que siembra su maíz", "Olvido" (Aunque tú me has dejado en el abandono……), "Son de la Loma" y otras piezas muy conocidas. Miguel no sólo manejaba las primas de su guitarra con gran destreza sino que luego, mientras cantaba, hacía un "rayado" el cual impartía un gran sabor al trío. Otro integrante era Rafael Cueto, un músico de escuela que conocía armonía. Mientras Miguel "rayaba" él, aparte de marcar los tonos, hacía unos movimientos de bajos insuperables. Siro Rodríguez, el otro miembro del trío, es posiblemente el mejor "segundo" que se haya oído en Cuba. Tenía una voz de barítono muy dulce y cada vez que tenía oportunidad arpegiaba con su voz sobre el acorde con gran maestría. Con el triunfo del son en La Habana, representantes de la compañía disquera norteamericana "Victor" vinieron a Cuba para contratar al trío Matamoros. Ellos tuvieron que viajar a Nueva York para grabar sus primeros discos, ya que en aquel entonces la "Victor" sólo tenía dos estudios de grabación, uno en Nueva York y otro en Buenos Aires, y como es natural los boletos en barco para Buenos Aires resultaban mucho más caros. Estas primeras grabaciones de los Matamoros dieron a conocer el son cubano en el mundo entero. Los años más gloriosos del trío fueron de 1927 a 1928. Sin embargo sus grabaciones se siguieron escuchando en la radio durante muchos años. Recuerdo que estuve presente en sus últimas grabaciones en la CMQ de La Habana allá por el año 1957, cuando cada uno de ellos tenía más de 60 años. Fuente 2: Música Popular Cubana Las raíces de la música cubana tienen su origen en Europa y África. Las dos corrientes más influyentes de la Música Popular Cubana pueden ser clasificadas de manera general en: Son y Danzón. La música AfroCubana más común en Cuba incluye el Yoruba ( la Yoruba) o Santaria, la Abakua y el Palo. El son Cubano: El son Cubano es sin discusión el estilo musical de mayor prestigio que ha salido de Cuba. El son se originó en la región oriental de Cuba y echó las bases para el género internacional llamado Salsa. Es una música que incorpora las influencias española y africana. Ello puede notarse en su instrumentación, esquema rítmico y su forma de convocatoria y empatía. Inicialmente el son era una música vocalizada acompañada por Tres, Guitarra, y Maracas. Luego fue seguido por una instrumentación de sexteto utilizando Tres, Voces, Guitarra, Bajo o Marimbola, Bongó, Maracas, Clave — que le dió el típico latido a esta música sincopada. En la década de los 20 a esta instrumentación se le añadió una trompeta, creando así el estilo estándar del Septeto. Más tarde el Son Montuno incorporó una sección de tres trompetas, un piano y una conga, o tumbadora , como se le llama en Cuba. Orígenes del Danzón: La Orquesta La Moderna Tradición se especializa en el Danzón y sus derivaciones, cuya historia es por demás muy interesante: A finales de 1700, después de la sangrienta revolución Haitiana, muchos haitianos y colonos franceses huyeron a Cuba y con ellos llegó la Contradanza, su música bailable popular de origen europeo. En el transcurso de muchas cálidas noches cubanas, la Contradanza se convirtió en Danza, a partir de la cual se originó el Danzón. Desde finales del siglo diecinueve el Danzón ha evolucionado y cambiado en muchos aspectos; sin embargo gran parte de la estructura original permanece, siendo esta continuidad lo que hace que el danzón siga siendo definido como una forma artística vital realmente excepcional. Danzón FUENTE 1 En las dos primeras décadas del siglo XX, el danzón es proclamado Baile Nacional de Cuba, y durante casi cuarenta años, no hubo acontecimiento social o político, que no fuera tema de un danzón, como el advenimiento de la República en 1902; la celebración de elecciones o la primera guerra mundial, como en los danzones La toma de Varsovia y Aliados y alemanes. Por otra parte, los compositores de danzones utilizaron temas de óperas, zarzuelas, cuplés españoles, boleros de moda, rag-time; es decir, que al danzón pasaba todo elemento musical aprovechable; incluso melodías chinas, como la que utiliza José Urfé en El bombín de Barreto; y este mismo compositor emplea una escala pentatónica en El dios chino; también Raimundo Valenzuela, en Los chinos y Eliseo Grenet, en Espabílate. En cuanto a su formato instrumental, la contradanza, la danza y el danzón, son la base sobre la cual surge el primer prototipo de agrupación instrumental popular: la orquesta típica o de viento, la cual en los inicios del siglo XIX estaba integrada por un cornetín en la, un trombón de pistones o cilindro en do, un figle en do, un bombardino en do, dos clarinetes en do, dos o más violines, un contrabajo, un par de timbales o pailas criollas y un güiro o calabazo. Los compositores más destacados para este tipo de formato fueron: Miguel Faílde, Rafael Landa, Raimundo Valenzuela, Enrique Peña, Jorge Anckermann y José Urfé. A la orquesta típica o de viento la sustituyó otra, llamada charanga, integrada por clarinete o flauta de madera de cinco llaves, violín, contrabajo, timbal y güiro; endicho período este tipo de orquesta no utilizaba el piano (en este caso se decía que tocaba "al pelo" (sin piano), y en algunas de ellas se incluía el arpa cubana (de origen peruano o mexicano). Fue José Doroteo Arango y Padrón (Pachencho), quien mantuvo hasta el final de su vida la última charanga con arpa que se escuchó en La Habana. En el siglo XX surgió el otro prototipo de formato instrumental del danzón: la charanga francesa (su antecedente fue la Unión Armónica, de Matanzas, que en 1890 tocó en la Glorieta Saratoga, con los instrumentos siguientes: piano, flauta, violín y contrabajo) integrada por flauta de madera de cinco llaves, piano, violín, contrabajo, timbal criollo y güiro o calabazo; posteriormente se agregó un segundo violín, y cuando las circunstancias lo permitían, incluían un cello y una viola. En el caso de la orquesta de Antonio María Romeu, en ocasiones adicionaba clarinete, trombón, trompeta (uno de sus trompetistas fue Mario Bauzá) y un cantante. Hubo orquestas, como la del Ateneo, que utilizó seis violines, dos flautas, cello, contrabajo, piano, timbal, güiro y un cornetín con sordina. El danzón fue introducido en La Habana por Miguel Faílde, Antonio Torroella (Papaíto) y Raimundo Valenzuela. Los nombres de Torroella, Leopoldo Cervantes y Antonio María Romeu, se confunden en la capital con el origen de la charanga con piano . Los compositores más destacados para este formato fueron: Antonio María Romeu, Octavio Alfonso (Tata), Ricardo Reverón, Armando Valdés Torres, Jacobo Rubalcaba, Eliseo Grenet, Abelardito Valdés, Antonio Sánchez Reyes (Musiquita), Silvio Contreras, Orestes López, Israel López (Cachao), Enrique Jorrín y Félix Reina. Fueron José Urfé y Raimundo Valenzuela quienes completaron la estructura ulterior del danzón, al introducir, en el último trío, un nuevo elemento rítmico: el son. En este período el son venía imponiéndose y, en cierta medida, fue desplazando al danzón que a su vez daba paso a un nuevo género, si bien de corta vida, importante: el danzonete, del matancero Aniceto Díaz, quien estrenó en Matanzas, en 1929, la primera obra de este género: Rompiendo la rutina. La primera parte tenía los mismos elementos constitutivos del danzón; la segunda se cantaba y era en un tempo más movido (son). El danzón también fue llevado al plano de la música sinfónica, y Darius Milhaud utiliza en la "Obertura" de su Saudades do Brazil, el danzón Triunfadores, de Antonio María Romeu; Aaron Copland incluyó en su Salón México una parte titulada "Danzón", y Leonard Bernstein, en su ballet Fancy Free, incluye una parte del danzón Almendra, de Abelardito Valdés. Compositores y pianistas como Chucho Valdés, Emiliano Salvador, y Gonzalito Rubalcaba, han creado y recreado el danzón con una armonía y sonoridad contemporáneas, no sólo en obras para piano, sino también para orquesta y otros formatos instrumentales. FUENTE 2 Origen, influencias y lugar geográfico: El danzón originó en Cuba, y es la fusión de música y bailes europeos, africanos y cubanos. El danzón tiene una historia, o árbol genealógico, muy larga que empieza en Inglaterra con la danza del campo. En el siglo XVII pasó a Francia donde la danza y el nombre cambiaron a la contradanza. La contradanza francesa y el minué llegaron en Haití con los colonizadores franceses. Durante la batalla por independencia de Haití, muchos habitantes huyeron a Cuba. En Cuba, la contradanza pronto se convirtió primero en la danza y, posteriormente, en el danzón. El danzón tiene usa fecha de nacimiento oficial: el primero de enero de 1879 cuando Miguel Faílde presentó en la ciudad de Matanzas en Cuba su primer danzón titulado "Las alturas de Simpson". Probablemente el lugar más importante para la sobrevivencia del danzón es México, donde el baile llegó con la inmigración de cubanos que salieron de su país por los problemas políticos resultantes de su reciente independencia de España. El danzón viajó de la península de Yucatán a Veracruz y, finalmente, a la Ciudad de México. En la Ciudad de México y en el estado de Veracruz el danzón es un elemento vigente de su música popular. Elementos rítmicos y musicales: El danzón se bailaba en parejas, hasta veinte parejas en un salón. Estas personas llevaban flores y arcos bordados en la ropa. Bailaban en piezas de cuadro o trazaban con sus pasos figuras como círculos y flores simples, siempre ajustándose al compás de la Habanera, en compás 2/4. Hoy en día, el movimiento debe ser muy sutil y sin un gran desplazamiento en la pista. Cuando la orquesta hace una pausa en la música, se le aplaude mientras las mujeres se echan aire con el abanico y los hombres se acomodan su ropa. Instrumentos musicales: El ritmo sonoro se basa en la utilización del piano. Un ejemplo de una orquesta de danzón típica incluye también el contrabajo de tres cuerdas, flauta antigua de cinco llaves, violines primero y segundo, dos timbales, güiro, trombón, claves, con el clarinete o flauta como instrumento relevante. En México los saxofones altos, tenores, barítonos y, ocasionalmente, el saxofón soprano, son empleados y pueden ser aumentados con trompetas y trombones. Algunos de los danzones más conocidos: "Acapulco" por Gus Moreno "Acayucan" por Marcario Luna "Blanca Estela" por Emilio B. Rosado "La Negra" por Gonzalo N. Bravo "Mocambo" por Emilio Renté "Nereidas" por Amador Pérez Torres "Paludismo agudo" por Esteban Alfonzo "Playa Suave" por Ernesto Domínguez "Pulque para 2" por Gus Moreno "Salón México" por Tomás Ponce Reyes "Teléfono a larga distancia" por Aniceto Díaz