DOCUMENTO ANÁLISIS MECANISMO DE AUTOEVALUACIÓN CONVENCIÓN DE NACIONES UNIDAS CONTRA LA CORRUPCIÓN I. Antecedentes La suscripción de la Convención de Naciones Unidas – CNUCC se dio en el marco de la Conferencia de Alto Nivel para la firma de este instrumento que tuvo lugar del 9 al 11 de diciembre de 2003 en la ciudad de Mérida, México. El Congreso expidió la Ley 970 de 2005 “Por medio de la cual se aprobó la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción, adoptada por la Asamblea General de las Naciones Unidas, en Nueva York, el 31 de octubre de 2003”. Posteriormente la Corte Constitucional declaró su exequibilidad mediante la sentencia C- 172 de 2006 y finalmente el país depositó el instrumento de ratificación el 27 de octubre de 2007. Sobre la importancia de la Convención, el Gobierno colombiano en la exposición de motivos de la Ley aprobatoria del mismo destacó que: “La Convención que se somete en esta ocasión a la consideración del honorable Congreso de la República constituye un valioso instrumento jurídico internacional adoptado por los Estados en el marco de la lucha contra la corrupción. Es, además, el único de su género que tiene un ámbito de aplicación universal”.1 A su vez la Corte Constitucional consideró al estudiar la exequibilidad de la Convención y de su ley aprobatoria que “(…) el contenido del instrumento internacional sujeto a estudio es compatible con la Carta Política y, en buena medida, constituye un desarrollo acertado de distintos principios y valores constitucionales, especialmente el adecuado ejercicio de la función administrativa, la protección del patrimonio del Estado y el fortalecimiento de las instancias democráticas de participación ciudadana”2. II. El Mecanismo de Autoevaluación En el diseño de estrategias para luchar contra la corrupción son diversos los aspectos que deben tenerse en cuenta, entre ellos son de principal importancia la prevención, la penalización de los hechos corruptos, la recuperación de los bienes objeto de estos ilícitos y el desarrollo de mecanismos de cooperación entre los diferentes países. Son estos los ejes principales sobre los cuales se diseñan las convenciones contra la corrupción para enfrentar un fenómeno cada vez más sofisticado y complejo como este. La Convención de Naciones Unidas contra la Corrupción es un instrumento que se caracteriza por incluir un enfoque comprensivo sobre este fenómeno, proveer una combinación de medidas preventivas y punitivas, hacer referencia al sector público, al 1 Exposición de motivos. Proyecto de Ley 235 de 2004 Senado - 237 de 2004 Cámara, por medio de la cual se aprueba la Convención de Naciones Unidas contra la Corrupción y publicado en la Gaceta del Congreso 219 de 2004. 2 Corte Constitucional. Sentencia C - 172 de 2006. sector privado y a la sociedad civil, y enfatizar la importancia de la cooperación legal y la asistencia técnica entre los Estados Parte para la lucha contra este fenómeno.3 La implementación de una convención, sea esta de carácter regional o mundial, siempre es motivo de seguimiento por parte del organismo a instancias de la cual fue adoptada, ello con el fin de lograr su correcta ejecución a nivel local y los mejores resultados en el marco de la lucha internacional para la cual el instrumento fue concebido. La Convención de Naciones Unidas prevé en su artículo 63 que “Se establecerá una Conferencia de los Estados Parte en la Convención a fin de mejorar la capacidad de los Estados Parte y la cooperación entre ellos para alcanzar los objetivos enunciados en la presente Convención y promover y examinar su aplicación.” En este marco, en el año 2011 en la Conferencia de Estados Parte de la Convención de Naciones Unidas contra la Corrupción, se aprobaron los Términos de Referencia del Mecanismo de Evaluación de este Instrumento los cuales establecen un proceso de evaluación entre pares en el que cada Estado es analizado por dos Estados pares, seleccionados a través de un sorteo. El proceso se lleva a cabo a través de varias etapas, en la primera de ellas, el Estado analizado da respuesta al cuestionario establecido en el marco del Grupo de Examen para la aplicación; posteriormente se efectúan, por parte de los estados evaluadores el examen documental de la información remitida. Este examen debe complementarse con cualquier otro medio de diálogo directo, como una visita al país o una reunión conjunta. En la etapa final del proceso de examen los expertos evaluadores, con el apoyo de la Secretaría, prepararán un proyecto de informe sobre el examen del país, el cual es enviado al Estado Parte objeto de examen. El mencionado informe debe contener los éxitos, las buenas prácticas y las dificultades identificadas y también se formularán observaciones para la aplicación de la Convención. Una vez aprobados los términos de referencia del Mecanismo de autoevaluación, se ha dado inicio a la primera ronda de análisis en la cual son objeto de evaluación los Capítulos III y IV de la Convención sobre Penalización y Aplicación de la Ley y Cooperación Internacional. No obstante la importancia de este Mecanismo de Evaluación debido a la amplitud de los temas abordados por la Convención, prevención, investigación y sanción, así como al número de países signatarios de la misma cada fase de evaluación demanda aproximadamente cuatro (4) años. Por ello Colombia considera necesario implementar un mecanismo que nos permita identificar y priorizar acciones para mejorar la aplicación de este Tratado sin esperar a que a través del mecanismo establecido se lleven a cabo las respectivas rondas de análisis. Es importante señalar que según establecen los términos de referencia del Mecanismo de Examen de la Aplicación de la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción “En www.respondanet.com. Foro Internacional Anti - corrupción “Las Convenciones Anticorrupción: dos perspectivas. En la revista Transparencia y Rendición de cuentas. Agosto de 2006. 3 la fase de examen siguiente, cada Estado parte presentará, en sus respuestas a la lista amplia de verificación para la autoevaluación, información sobre los progresos realizados en relación con las observaciones contenidas en anteriores informes sobre el examen del país. (…)”4 II. Identificación de acciones para mejorar la implementación de la Convención A través de este proceso identificaron las siguientes acciones con el fin de mejor implementación de la Convención de Naciones Unidas contra la Corrupción: Políticas y prácticas de prevención de la corrupción. Artículo 5, párrafo 1 Propuesta: Articulación en escenarios de cooperación El papel de prevención de la corrupción corresponde también a los ciudadanos, quienes tienen el deber de denunciar cuando tienen conocimiento de la comisión de cualquier conducta que deba ser investigada por cualquiera de los órganos de control (Contraloría, Fiscalía y Procuraduría). La expedición de normas claras que faciliten el traslado coordinado y armonizado de la información relevante o de las pruebas recaudadas en el curso de una investigación, sería un punto vital en el fortalecimiento de la lucha contra la corrupción. La norma es genérica en la definición de la cooperación entre entes de control en el marco de sus competencias, es necesaria la implementación de escenarios de cooperación no invasiva de los ámbitos de cada uno de estos entes de control para compartir de manera efectiva información de común interés de cada uno de estos y el traslado de pruebas de un proceso a otro. El establecimiento de nuevos convenios de cooperación interinstitucionales y el fortalecimiento y operativización de los existentes son acciones claves para solucionar el vacío normativo en el tema. Se propone aprovechar el escenario interinstitucional generado para dar seguimiento a los compromisos internacionales, para poder avanzar en estos temas. La Cancillería y la Secretaría de Transparencia podrían liderar este proceso, por supuesto teniendo debidamente en cuenta la independencia y autonomía de los entes de control. La articulación entre instituciones y entes de control requiere de la interrelación del personal a cargo del manejo de la cooperación. Esto con el fin de garantizar la comprensión de los objetivos, procedimientos y competencias de cada una de las entidades. La creación de escenarios tanto puntuales (eventos) como permanentes de socialización y articulación, son una herramienta de armonización de las capacidades de cooperación de cada una de las instituciones involucradas en la lucha contra la corrupción. Este no es problema exclusivo de Colombia y existen buenas prácticas internacionales que podrían ayudar a mejorar este aspecto. La participación de un organismo internacional podría generar un proyecto de cooperación que aborde este problema y proponga soluciones a corto plazo para solucionarlo 4 Mecanismo de Examen de la Aplicación de la Convención de las Naciones Unidas contra la Corrupción. Párrafo 40 En materia de políticas de prevención la Contraloría ha desarrollado una serie de herramientas dentro de su proceso de modernización institucional que está en capacidad de compartir con otros entes homólogos, en la medida de su interés. Políticas y prácticas de prevención de la corrupción. Artículo 5 párrafo 4 Propuesta: Articulación La aplicación de los instrumentos internacionales presenta varias dificultades a nivel operativo y normativo tanto de carácter nacional como internacional. A nivel internacional, el predominio de la cooperación en materia penal redunda en un ambiente extraños para los entes administrativos que no siempre ven reconocido su papel como autoridades centrales de las Convenciones suscritas, dificultando de esta manera la cooperación internacional. A nivel interno aún falta regular actividades que facilitarían el lavado de activos mediante ciertos tipos societarios que garantizan el anonimato para los inversionistas, abriendo de esta manera la puerta para la intrusión de capitales de origen ilícito. Políticas y prácticas de prevención de la corrupción. Artículo 5 párrafo 1 Propuesta: Mejora de la capacitación Las entidades no incluyen dentro de sus Planes Institucionales de Capacitación los programas de Inducción y de Reinducción y los componentes que obligatoriamente deben encontrarse en ellos como la normativa y la detección de decisiones tendientes a la prevención de corrupción al interior de las entidades como inhabilidades e incompatibilidades. Las entidades que cumplen con la obligación de realizar inducciones a sus nuevos funcionarios no estructuran de manera adecuada el cumplimiento de los objetivos que están plasmados en la Ley y en sus correspondientes decretos reglamentarios a través de los programas de Inducción y de Reinducción. Reforzar en el despliegue territorial y la importancia de cumplir los requisitos de desempeño correcto, honorable y debido de las funciones propias de los servidores públicos para que se proporcione capacitación especializada y apropiada en la concientización de los riesgos de corrupción inherentes al desempeño de función pública. También es importante fortalecer el coaching organizacional, mediante la formación de tutores que impulsen los procesos de aprendizaje en cuanto a inhabilidades e incompatibilidades y prevención de la corrupción. Buenas prácticas de capacitación especializada en riesgos de corrupción inherentes al desempeño de las funciones de los servidores público. Compartir instrumentos técnicos y normativos desarrollados, para orientar la formulación de los Planes Institucionales de Capacitación y el régimen de inhabilidades e incompatibilidades. Sector Público. Artículo 7 párrafo 1 Propuesta: Códigos de ética, planes institucionales de capacitación Las normas vigentes y las medidas aplicables que dan cumplimiento al artículo 7, numeral 1, literal D, de la Convención, abarcan un gran espectro de temas. Desde lo establecido en el Estatuto Anticorrupción, el Código Único Disciplinario. Prohibiciones de tipo penal, normas de contratación pública, instrumentos en Rendición de Cuentas, hasta todo lo relativo a la carrera administrativa y el empleo público como la formación y capacitación de los servidores públicos. El catálogo de normas e instrumentos es acertado y completo e incluye los temas pertinentes, a pesar que el tema de inhabilidades e incompatibilidades tiene una gran dispersión normativa. Varios de los temas además, cuentan con cartillas y guías metodológicas que ayudan al entendimiento del tema. Las entidades no incluyen dentro de sus Planes Institucionales de Capacitación los programas de Inducción y de Reinducción y los componentes que obligatoriamente deben encontrarse en ellos como la normativa y la detección de decisiones tendientes a la prevención de corrupción al interior de las entidades como inhabilidades e incompatibilidades. Las entidades que cumplen con la obligación de realizar inducciones a sus nuevos funcionarios no estructuran de manera adecuada el cumplimiento de los objetivos que están plasmados en la Ley y en sus correspondientes decretos reglamentarios a través de los programas de Inducción y de Reinduccion. Reforzar en el despliegue territorial y la importancia de cumplir los requisitos de desempeño correcto, honorable y debido de las funciones propias de los servidores públicos para que se proporcione capacitación especializada y apropiada en la concientización de los riesgos de corrupción inherentes al desempeño de función pública. También es importante fortalecer el coaching organizacional, mediante la formación de tutores que impulsen los procesos de aprendizaje en cuanto a inhabilidades e incompatibilidades y prevención de la corrupción. Sector Público. Artículo 8 párrafos 1 y 2 Propuesta: Códigos de ética, planes institucionales de capacitación El catálogo de normas e instrumentos es acertado y completo e incluye los temas pertinentes, a pesar que el tema de inhabilidades e incompatibilidades tiene una gran dispersión normativa. Varios de los temas además, cuentan con cartillas y guías metodológicas que ayudan su entendimiento. Teniendo en cuenta que no existe un código de ética común para todos los servidores públicos, sino que por el contrario, cada entidad tiene la responsabilidad de establecerlo, es importante consolidar una línea que contenga los conceptos que deben inculcarse a los funcionarios, con el objetivo fundamental de combatir la corrupción. Es importante articular lo consagrado en el Código Único Disciplinario con lo señalado en las directrices establecidas en el Plan Nacional de Formación y Capacitación, los Códigos de Ética de las entidades y las disposiciones legales estipuladas en materia de capacitación, Inducción, Reinducción y entrenamiento en el puesto de trabajo. Buenas prácticas de capacitación especializada en riesgos de corrupción inherentes al desempeño de las funciones de los servidores público. Compartir instrumentos técnicos y normativos desarrollados, para orientar la formulación de los Planes Institucionales de Capacitación y el régimen de inhabilidades e incompatibilidades. Medidas para prevenir el blanqueo de dinero: Artículo 14, párrafo 4 Según la autoevaluación en el cumplimiento de las 40 recomendaciones, esta se encuentra avanzada siendo pocos los puntos que presentan avances escasos o no satisfactorios. Al respecto de estos últimos se adelantan esfuerzos por parte de distintas entidades para el total cumplimiento de las mismas. Se debería hacer un esfuerzo adicional para que la UIAF incorpore las nuevas tipologías de la corrupción como delito fuente de lavado de activos. Existen ligeras disparidades conceptuales entre el contenido de las 40 recomendaciones y la normatividad aplicable en el país, los cuales más que generar desarticulación entre las disposiciones simplemente general dudas respecto a su alcance, especialmente a nivel internacional. Más allá de las conclusiones determinadas en los procesos de autoevaluación en la implementación de las 40 recomendaciones, deberá tenerse en cuenta las disparidades normativas especialmente en el nivel internacional, con el fin de armonizar el tratamiento de cada caso en consenso con las autoridades internacionales. Capítulo III – Tipificación de delitos de corrupción En relación con las exigencias previstas en la Convención sobre la tipificación de delitos de corrupción se identificaron los siguientes temas: Respecto al artículo 16 de la Convención sobre soborno de funcionarios públicos extranjeros y funcionarios de organizaciones internacionales públicas, Colombia incorporó a través del Estatuto Anticorrupción el delito de soborno transnacional (art. 16, párr. 1, de la Convención), sin embargo el país no ha implementado aún el artículo 16, párrafo 2 que establece que “Cada Estado Parte considerará la posibilidad de adoptar las medidas legislativas y de otra índole que sean necesarias para tipificar como delito, cuando se cometan intencionalmente, la solicitud o aceptación por un funcionario público extranjero o un funcionario de una organización internacional pública, en forma directa o indirecta, de un beneficio indebido que redunde en su propio provecho o en el de otra persona o entidad, con el fin de que dicho funcionario actúe o se abstenga de actuar en el ejercicio de sus funciones oficiales.” Respecto al tráfico de influencias Colombia ha incorporado modificaciones a su legislación en cuanto a la conducta descrita en el artículo 18 de la Convención en su artículo 411 del Código Penal, relativo al tráfico de influencias de servidores públicos, y el 411-A, relativo al tráfico de influencias de particulares. Sin embargo es necesario analizar la necesidad de complementar en su totalidad los requisitos del artículo 18 de la Convención que en su actual redacción no incluyen las conductas de promesa, ofrecimiento o concesión de un beneficio a una persona para que esta abuse de su influencia real o supuesta en el Estado, o la solicitud o aceptación con el mismo fin. Colombia ha realizado avances para incorporar en su legislación el delito de soborno en el sector privado (artículo 21 de la Convención) con el nuevo artículo 250 A del Código Penal, relativo a la corrupción privada, sin embargo esta norma no prevé esta conducta con respecto a todos los empleados de una entidad privada, y sin requisito de perjuicio a la sociedad. En relación con el artículo 23 de la Convención, el artículo 323 del Código Penal, en su inciso 1), penaliza el lavado de activos e incluye como delito fuente, entre otros, el enriquecimiento ilícito y los delitos contra la administración pública. Asimismo los artículos 446 y 447 del Código Penal, respectivamente, sobre favorecimiento y receptación, complementan los requisitos del apartado a), párrafo 1, del artículo 23 de la Convención. El apartado b) se encuentra incorporado por el artículo 447 y las disposiciones de la Parte General del Código Penal, con excepción del concepto de la “utilización” de bienes (artículo 23, párrafo 1 b) i)). El artículo 25 de la Convención requiere que “Cada Estado Parte adoptará las medidas legislativas y de otra índole que sean necesarias para tipificar como delito, cuando se cometan intencionalmente: a) El uso de fuerza física, amenazas o intimidación, o la promesa, el ofrecimiento o la concesión de un beneficio indebido para inducir a una persona a prestar falso testimonio o a obstaculizar la prestación de testimonio o la aportación de pruebas en procesos en relación con la comisión de los delitos tipificados con arreglo a la presente Convención; b) El uso de fuerza física, amenazas o intimidación para obstaculizar el cumplimiento de las funciones oficiales de un funcionario de la justicia o de los servicios encargados de hacer cumplir la ley en relación con la comisión de los delitos tipificados con arreglo a la presente Convención. Nada de lo previsto en el presente artículo menoscabará el derecho de los Estados Parte a disponer de legislación que proteja a otras categorías de funcionarios públicos.” Sobre el particular el Código Penal establece entre los delitos contra la eficaz y recta impartición de justicia el soborno (artículo 444), el soborno en la actuación penal (art. 444A) y las amenazas a testigo (art. 454 A). No queda regulado el uso de la fuerza física contra un testigo, ni específicamente la obstrucción de justicia en asuntos relacionados con la aportación de pruebas. El artículo 33 de la Convención establece que “Cada Estado Parte considerará la posibilidad de incorporar en su ordenamiento jurídico interno medidas apropiadas para proporcionar protección contra todo trato injustificado a las personas que denuncien ante las autoridades competentes, de buena fe y con motivos razonables, cualesquiera hechos relacionados con delitos tipificados con arreglo a la presente Convención.” Sobre el particular Colombia requiere fortalecer la efectividad de la protección de denunciantes en el derecho penal, administrativo y laboral. Embargo preventivo, incautación y decomiso: Artículo 31 párrafos 6 y 7 Propuesta: Competencia de la Contraloría en asistencia judicial recíproca La persecución de los bienes de los presuntos responsables fiscales y los responsabilizados por esta causa, no hace distinción en razón a la procedencia de los bienes de estos sujetos. Se debe buscar una mejor coordinación entre las autoridades centrales y nominar a un punto de contacto para que lidere en el país lo relacionado con la aplicación del Capítulo V de la Convención de Naciones Unidas contra la Corrupción. La norma está diseñada para un entorno jurisdiccional penal, por lo cual las actuaciones administrativas deben adecuarse a lo contemplado en las mismas a pesar de tener ámbitos de aplicación dispares. La claridad en el papel de las autoridades administrativas dentro de la asistencia jurídica reciproca es clave para el buen tramite de las mismas, adecuando sus competencias a las de las autoridades extranjeras, de conformidad con los diversos ordenamientos normativos Indemnización por daños y perjuicios: Artículo 35 Propuesta: recuperación de bienes La normatividad en materia de responsabilidad fiscal es adecuada para la protección del patrimonio público, sin embargo podrían generarse mejores herramientas para la recuperación de recursos públicos desviados por eventos de corrupción. El reconocimiento de la Contraloría General de la Republica como legitimada para iniciarla acción de repetición se configuraría como una acción valiosa para la protección del patrimonio público. Podría iniciarse una iniciativa legislativa en tal sentido. Coordinación entre organismos nacionales: Artículo 38 Propuesta: Coordinación - Convenio Se hace necesaria la generación de escenarios de consenso entre los entes de control, con el fin de articular acciones Para ello la Fiscalía General de la Nación, la Contraloría General de la República y la Procuraduría General de la Nación trabajan con miras a definir los términos de un convenio tripartita cuya finalidad es aunar esfuerzos para que en el ámbito de sus competencias, se adelanten acciones conjuntas de investigación que redunden en el cumplimiento de las funciones constitucionales y legales de cada una de las partes. Asistencia Judicial recíproca: Artículo 46 Sobre el particular se requiere que el país asegure que las competencias y responsabilidades de las cuatro autoridades centrales de asistencia judicial recíproca estén bien definidas y explicadas en el directorio de autoridades centrales de la UNODC. También se alienta a Colombia a crear un mecanismo que asegure el rápido intercambio de información entre las cuatro autoridades centrales y a sensibilizar a todos los actores del sistema institucional de su existencia (art. 46, párr. 13); Así mismo es necesario considerar la posibilidad de aplicar directamente la Convención por encima de otros instrumentos en caso de que estos contengan motivos de negación más amplios (art. 46, párr. 21); Cooperación en materia de cumplimiento de la ley: Artículo 48 El literal e) busca que los Estados colaboren estrechamente con miras a aumentar la eficacia de las medidas de cumplimiento de la ley orientadas a combatir los delitos de la Convención, para ello Colombia debe considerar la posibilidad de promover el intercambio de personal y otros expertos (art. 48, párr.1 e de la Convención).