FUERZA Y ARQUITECTURA MUSCULAR EN UN GRUPO DE ESTUDIANTES DE EDUCACIÓN FÍSICA Luis María Alegre Durán (*) David Aznar Chicharro (**) Tomás Delgado Blas (**) Fernando Jiménez Díaz (**) Xavier Aguado Jódar (**) * Universidad de León ** Universidad de Castilla la Mancha 1 FUERZA Y ARQUITECTURA MUSCULAR EN UN GRUPO DE ESTUDIANTES DE EDUCACIÓN FÍSICA La arquitectura muscular modula la fuerza haciendo que se manifieste de forma más o menos eficaz en la vida cotidiana, en los deportes y en diferentes tests. El objetivo del estudio que se presenta en este artículo ha sido, por un lado, comparar las condiciones de fuerza explosiva y arquitectura muscular de la musculatura extensora de las extremidades inferiores de un grupo de 10 estudiantes de educación física con datos descriptivos publicados en la bibliografía y, por otro lado, buscar correlaciones entre las variables de arquitectura muscular y de éstas con las de los tests de salto. 2 1- INTRODUCCIÓN La causa de que un determinado programa de entrenamiento tenga mayor eficacia que otro puede radicar muchas veces en los cambios en la arquitectura muscular que induce. Éstos, que pueden ser estudiados a partir de imágenes de ecografía, condicionarán en gran medida la manifestación de la fuerza muscular. En 2 artículos previos, publicados en RED (Alegre y cols.; 2001 b, 2002 a) se ha expuesto la importancia que juega la arquitectura muscular y se han explicado las diferentes metodologías utilizadas y variables manejadas. Finalmente hemos resumido los principales hallazgos de la bibliografía reciente sobre la arquitectura de distintas poblaciones de sujetos. Los estudios de la arquitectura muscular son relativamente recientes. Hasta el comienzo de los años 80 no aparecen los primeros trabajos, obtenidos de cadáveres. Recientemente y aprovechando las posibilidades de la ecografía y la resonancia magnética han aparecido las primeras investigaciones en músculos humanos realizadas in vivo. Tras la puesta a punto de la metodología y la realización de estudios de reproducibilidad y validez (Alegre y cols.; 2001 a, 2002 b), en este artículo, tras un apartado en el que se mostrarán 2 posibles modelos de adaptación de la arquitectura muscular al entrenamiento, presentamos un estudio descriptivo en un grupo de estudiantes de educación física. En el estudio se tomaron variables de arquitectura muscular en el vasto lateral, gastrocnemio medial y gastrocnemio lateral, variables cineantropométricas y variables de fuerza explosiva en tests de saltos. Finalmente estos resultados se usan para discutir la importancia de la arquitectura muscular en la fuerza explosiva. 3 2- DOS MODELOS DE ARQUITECTURA DIFERENTES COMO RESPUESTA AL ENTRENAMIENTO DE FUERZA La arquitectura muscular varía considerablemente de unas personas a otras debido a diversas causas. Características genéticas, sexo, raza, edad y tipo de entrenamiento han sido mencionadas en la bibliografía. Estas variaciones en sí mismas explicarían gran parte de las diferencias interindividuales en la manifestación de la fuerza. El entrenamiento de fuerza aumenta el tamaño del músculo y provoca cambios en su arquitectura. Estos estudios se han centrado especialmente en los músculos con fibras de dirección oblicua respecto al eje mecánico. Los cambios más habituales van en el sentido de aumentar el grosor muscular, los ángulos de peneación y el área de sección transversal (Kawakami y cols., 1995; Narici, 1999; Blazevich y Giorgi, 2001). Pero también han sido descritos, aunque no estudiados longitudinalmente, cambios en el sentido contrario; es decir la reducción de los ángulos de peneación previamente incrementados, que se produciría junto con el alargamiento de los fascículos debido al estímulo de ciertos programas intensivos y de larga duración de entrenamiento de fuerza (Kearns y cols., 2000). Estos dos modelos de desarrollo muscular llevarían asociados efectos diferentes. El primero de los modelos; el de la hipertrofia, o crecimiento a lo ancho permitiría disponer de más sarcómeros (unidades funcionales) en paralelo, con lo que la fuerza aumentaría proporcionalmente. El segundo de los modelos, basado en el alargamiento de las fibras, permitiría tener más sarcómeros en serie, con lo que la variación de longitud al contraerse será mayor y por tanto también la velocidad (Figura 1). -Figura 1- Dos modelos de crecimiento muscular. El modelo de crecimiento en paralelo (A), que permitiría ganar fuerza y el modelo de crecimiento en serie (B) que permitiría ganar velocidad. 4 La hipertrofia aumenta el área de sección transversal anatómica (CSA) y fisiológica (PCSA) del músculo. El efecto del aumento de estas áreas es que ante un mismo preestiramiento el músculo podrá ejercer más fuerza. El crecimiento muscular por alargamiento permitirá en cambio un mayor incremento en la distancia entre las aponeurosis musculares sin que cada sarcómero tenga que estirarse en mayor medida (Figura 2). -Figura 2- El efecto sobre la fuerza del crecimiento por hipertrofia (A) hace que para un mismo estiramiento el músculo pueda ejercer más fuerza (ver 1 y 2). El crecimiento por alargamiento (B) no tiene efectos sobre la máxima fuerza, pero permite un mayor estiramiento absoluto de los fascículos (ver 1 y 2). Así el modelo de crecimiento por hipertrofia desplazará la curva fuerza-velocidad del músculo hacia arriba; es decir el músculo ganará básicamente fuerza. Por otro lado el crecimiento por alargamiento desplazará la curva hacia la derecha, ganando velocidad el músculo (Figura 3). Este segundo modelo permitirá no sólo una mayor variación de la longitud al contraerse, como ya se ha explicado, sino también lo que en la bibliografía se ha descrito como “la posibilidad de que los sarcómeros puedan trabajar en una zona óptima de su curva de fuerza-estiramiento” (Abe y cols., 2001). Si quisiéramos forzar a fascículos no alargados a que mostrasen el mismo acortamiento durante la contracción, deberíamos preestirarlos en exceso (Figura 4), lo que nos situaría en el lado derecho de la curva fuerza-estiramiento, sobrepasando la zona central, en la que se puede lograr la mayor fuerza del componente contráctil muscular (Figura 5). 5 -Figura 3- El efecto sobre la fuerza del crecimiento por hipertrofia (A) hace que la gráfica fuerza-velocidad se separe hacia arriba. En cambio el crecimiento por alargamiento provocaría que la gráfica se separe hacia la derecha (B). -Figura 4- Para conseguir un mismo preestiramiento en un músculo que ha crecido por alargamiento, sus sarcómeros (A) no precisan estirarse tanto como los de un músculo con fascículos más cortos, que se verían forzados a un excesivo preestiramiento (B). 6 -Figura 5- En un músculo con fascículos largos los sarcómeros pueden encontrarse en una zona de preestiramiento óptima, mientras que si un músculo con fascículos cortos pretendiese trabajar con ese preestiramiento sobrepasaría su zona en la que podría conseguir la máxima fuerza En corredores de 100 m se han medido longitudes de fascículos superiores a fondistas y a sujetos control (Abe y cols., 2001). También se han encontrado diferencias en las longitudes en corredores de 100 m en función de sus marcas (Kumagai y cols., 2000). Un músculo hipertrofiado ejercerá más fuerza, pero al haber aumentado sus ángulos de peneación, como adaptación funcional para permitir albergar esa mayor cantidad de material contráctil en paralelo disminuirá el ratio de fuerza / PCSA ; denominado en la bibliografía como tensión específica. Esto es debido a que sólo una parte de la fuerza que ejercerán los fascículos revertirá sobre el eje mecánico muscular, como un vagón de tren que fuera empujado en una dirección oblicua a la vía. 7 3- METODOLOGÍA En un grupo de 10 sujetos varones, estudiantes de primer curso de la Facultad de Ciencias del Deporte de Toledo se realizaron mediciones de fuerza explosiva, cineantropometría y arquitectura muscular, con las metodologías y protocolos que a continuación se exponen. A todos los sujetos se les administró también un cuestionario de actividad física con el fin de comprobar que hicieran actividad física, pero no entrenaran un mismo deporte más de 2 días a la semana, con el fin de homogeneizar la muestra. Fuerza explosiva Se evaluó mediante los tests de salto CMJ (salto con contramovimiento) y SJ (salto sin contramovimiento) la fuerza explosiva de las extremidades inferiores. Se usó para ello la plataforma de fuerzas portable Quattro Jump de Kistler con una frecuencia de muestreo de 500 Hz (Figura 6). Se registraron las fuerzas verticales durante la batida y el tiempo de vuelo de los saltos. A partir de estas variables se calcularon: la altura del salto, el pico de máxima fuerza, el impulso de aceleración, el impulso de frenado y el ratio de impulsos. -Figura 6- Posición para la realización de un salto sin contramovimiento sobre la plataforma de fuerzas Quattro Jump. 8 Aunque los sujetos del estudio ya habían realizado tests se salto en otras ocasiones se realizó una sesión de familiarización aprovechando la opción de retroinformación en tiempo real de la plataforma de fuerzas. Esta opción permite mostrar durante el salto, en forma de gráfica proyectada mediante un cañón de vídeo delante del sujeto, las fuerzas que se ejercen o dejan de ejercer contra el suelo. Los tests se hicieron con las manos en la cintura y sin ayuda del tronco en la impulsión. Se dibujó una línea sobre la plataforma en la que se debían alinear las parte anterior de los pies. En el SJ se determinó el ángulo previo de flexión de 90º, medidos mediante escuadra, ajustada a los ejes medios de pierna y muslo, sobre la rodilla. En el SJ una vez adoptada la posición de flexión previa, el investigador contó 4 s indicando el instante del salto. Cineantropometría Todas las medidas laterales se tomaron en el lado derecho del cuerpo, con el sujeto descalzo y con pantalón corto. Se marcaron los puntos anatómicos previamente con lápiz dermográfico. Se usó un tallímetro Seca (con sensibilidad de 1 mm), una báscula de pie SECA (con sensibilidad de 100 g), un antropómetro GPM (con sensibilidad de 1mm), una cinta antropométrica Fat O Meter (con sensibilidad de 1mm), un paquímetro GPM (con sensibilidad de1 mm) y un plicómetro Holtain (con sensibilidad de 0.2 mm). Se talló, pesó y tomaron las longitudes de muslos y piernas a los sujetos. También se calculó la masa libre de grasa (FFM) y se marcaron los lugares anatómicos sobre los que se realizaron las ecografías musculares. Arquitectura muscular Con un ecógrafo Toshiba Just Vision, con cabezal lineal en modo B y a 7,5 Mhz se obtuvieron imágenes a 4 cm de profundidad en cortes oblicuo-sagitales, en la extremidad inferior derecha. Se analizaron el vasto lateral, al 50% de la distancia entre el trocánter mayor del fémur y la meseta tibial (Figura 7) y los gastrocnemios medial y lateral, al 30% de la distancia entre la apófisis estiloides del peroné y el maléolo lateral. Los sujetos se colocaron sobre una camilla en decúbito supino para las mediciones en el vasto lateral y para las de los gastrocnemios en decúbito prono, con la rodilla extendida y el tobillo en posición anatómica. En todas las mediciones el examinador se aseguraba de que la musculatura analizada estaba relajada. Las imágenes fueron directamente grabadas en vídeo y posteriormente digitalizadas para extraer el grosor muscular, el ángulo de peneación y la longitud de las fibras (Alegre y cols., 2002 b). 9 -Figura 7- Obtención de imágenes de ecografía del vasto lateral de cuadriceps. 10 4- RESULTADOS Y DISCUSIÓN En la Tabla 1 se pueden ver las diferentes características de edad y cineantropometría de la población estudiada; en la Tabla 2 se pueden ver los resultados de la medición de la arquitectura muscular en el vasto lateral del cuadriceps, el gastrocnemio medial y el gastrocnemio lateral comparándolos con los de otros estudios recientes publicados en la bibliografía. En la Tabla 3 se pueden ver la estadística despcriptiva de los tests de salto y finalmente en la Tabla 4 se pueden observar las principales correlaciones halladas. -Tabla 1Variable X (± ± SD) Edad (años) Peso (Kg) Estatura (cm) FFM (kg) % grasa Perímetro muslo (cm) Longitud muslo (cm) Perímetro pierna (cm) Longitud pierna (cm) 18.30 (0.48) 70.42 (2.89) 181.02 (4.94) 65.07 (2.73) 7.59 (1.41) 55.44 (2.21) 45.35 (2.12) 37.16 (1.34) 43.21 (1.75) Características de edad y cineantropometría de la población estudiada. -Tabla 2GRUPOS VASTO LATERAL GASTROGNEMIO MEDIAL GASTROGNEMIO LATERAL ESTUDIOS Sujetos Sexo Grosor Ángulo de (n) muscular peneación (cm) (º) Alumnos 1º Curso Ciencias del Deporte Sprinter 100 m lisos T = 10.00-10.90 s 10 H 22 Longitud Fascículos Longitud Grosor Ángulo de Longitud Longitud Grosor Ángulo de Longitud Longitud fascículos / muscular peneación fascículos / muscular peneación fascículos / (cm) (º) Fascículos Longitud Longitud (cm) (º) Fascículos Longitud pierna pierna muslo 2.45 (0.29) 16.4 (3.5) 8.92 (1.52) 0.20 (0.03) 1.77 (0.21) 24.6 (2.0) 4.25 (0.36) 0.10 (0.01) 1.20 (0.18) 13.9 (2.6) 5.04 (0.72) 0.12 (0.02) H 2.75 (0.30) 19.0 (3.2) 8.63 (1.42) 0.22 (0.04) 2.37 (0.37) 21.4 (2.9) 6.62 (1.35) 0.17 (0.03) 1.93 (0.23) 14.0 (1.4) 8.07 (1.49) 0.21 (0.04) 26 M 2.50 (0.37) 17.7 (2.8) 8.40 (1.24) 0.22 (0.03) 2.12 (0.26) 21.1 (2.2) 5.92 (0.77) 0.16 (0.02) 1.69 (0.25) 13.1 (2.2) 7.44 (1.07) 0.20 (0.03) 24 H 2.47 (0.31) 23.7 (2.1) 6.15 (0.61) 0.15 (0.02) 2.10 (0.24) 23.3 (1.8) 5.36 (0.72) 0.13 (0.02) 1.69 (0.21) 16.1 (2.6) 6.23 (1.07) 0.16 (0.03) 15 H 2.67 (0.32) 21.1 (2.1) 7.45 (1.04) 0.19 (0.02) 2.25 (0.19) 23.5 (2.6) 5.70 (0.65) 0.14 (0.02) 1.71 (0.20) 15.2 (2.1) 6.55 (0.68) 0.16 (0.02) 28 H 3.36 (0.46) 19.9 (3.5) 10.01 (1.61) 0.25 (0.04) 2.55 (0.34) 23.6 (2.7) 6.41 (0.84) 0.16 (0.03) 1.97 (0.34) 14.4 (3.1) 7.61 (1.69) 0.19 (0.04) 24 H 2.32 (0.22) 19.5 (3.6) 7.13 (1.18) 0.18 (0.03) 1.97 (0.26) 20.4 (2.5) 5.69 (0.75) 0.14 (0.02) 1.59 (0.19) 13.2 (2.5) 7.16 (1.44) 0.18 (0.04) (Kumagai y cols., 2000) Sprinter 100 m lisos T = 11.04-13.42 s (Abe y cols., 2001) Corredores de fondo 5000 m = 13.5-14.5´ 42.2 km =130 -145´ (Abe y cols., 2000) Sprinter 100 m lisos T = 11.00-11.70 s (Kumagai y cols., 2000) Luchadores de Sumo (Kearns y cols., 2000) Grupo Control (Abe y cols., 2000) Resultados de la arquitectura muscular en el vasto lateral del cuadriceps y los gastrocnemios en la población estudiada, comparándolos con los de otros estudios publicados con diversas poblaciones, que analizan los mismos músculos. 11 -Tabla 3Variables Unidades Altura SJ m Altura CMJ m Altura SJ / Altura CMJ -Tiempo fase concéntrica batida CMJ s Potencia máxima SJ / Masa W/kg Potencia máxima en CMJ / Masa W/kg Impulso de aceleración SJ (N.s) Impulso de aceleración CMJ (N.s) Impulso frenado / Impulso aceleración CMJ -- X (± ± SD) 0.301 (0.035) 0.352 (0.045) 0.859 (0.080) 0.276 (0.040) 50.75 (5.34) 51.31 (5.30) 186.64 (8.51) 199.73 (12.03) 0.47 (0.09) Resultados de los tests de salto sin contramovimiento (SJ) y con contramovimiento (CMJ) sobre plataforma de fuerzas portable “Quattro Jump de Kistler” en la población estudiada. -Tabla 4Variable 1 Variable 2 r P 0.51 ns 0.68 < 0.05 0.71 < 0.05 Altura salto en CMJ Ángulo de peneación vasto lateral 0.52 ns Impulso de frenado en CMJ Ángulo de peneación gastrocnemio lateral 0.67 < 0.05 Resultados de algunas correlaciones entre variables de arquitectura muscular y de los tests de salto en la población estudiada. Grosor muscular vasto lateral Grosor muscular gastrocnemio medial Grosor muscular gastrocnemio lateral Ángulo de peneación vasto lateral Ángulo de peneación gastrocnemio medial Ángulo de peneación gastrocnemio lateral En la Tabla 2 destacan las longitudes de los fascículos del vasto lateral en los sujetos estudiados que son relativamente grandes (8.92 ±1.52 cm) en comparación con los otros estudios que se muestran, pero al normalizarlas con la longitud del muslo el valor ya no sobresale respecto a los otros trabajos. Los valores de arquitectura muscular son frecuentemente normalizados con las dimensiones antropométricas de los segmentos corporales a los que pertenecen ya que su influencia será relativa a éstos. Así una vez normalizados con la longitud del muslo se obtiene un ratio de 0.20; por debajo de los 0.22 encontrados en los estudios de Kumagai y cols. (2000) y Abe y cols. (2000) en velocistas de 100 m hombres y mujeres respectivamente. Esto es debido a que estos velocistas estudiados, que aunque no viene descrito en dicho artículo, probablemente eran japoneses, tenían menores estaturas y longitudes de muslo que nuestros sujetos. Por otro lado si cogemos estudios en los que participan sujetos de similar estatura a los nuestros, como por ejemplo los de Brechue y Abe (2002) con “powerlifters”, presentan longitudes medias de 11.28 cm, pero con mayores ángulos de peneación ( 22.1 frente a 16.4 en nuestro estudio) y mayores grosores musculares (3.00 frente a 2.45 cm en nuestro estudio) debido a las características de hipertrofia muscular que presentaban los “powerlifters”. En el estudio de Brechue y Abe los sujetos de la categoría de peso superior (por encima de 110 kg) presentaban de media grosores musculares de 3.69 cm en el vasto lateral del cuadriceps, superando con mucho todos los valores comparativos mostrados en la Tabla 2. 12 Las modificaciones que la hipertrofia habitualmente provoca en la arquitectura muscular aumentando el ángulo de peneación y el grosor son explicadas a veces a partir de las correlaciones encontradas entre estas dos variables de la arquitectura muscular. En algunos estudios hechos con muchos sujetos las correlaciones son buenas, como en el trabajo de Kawakami y cols. (2000) hecho con 637 sujetos en el tríceps braquial (r= 0.81). Abe y cols. (1998) en un trabajo hecho con 51 hombres y mujeres, con el objetivo de mostrar diferencias entre sexos, obtienen buenas correlaciones en algunos músculos, como la cabeza larga del tríceps (r= 0.83) pero despreciables correlaciones, que sin embargo sí son destacadas en el trabajo, en otros músculos, como el gastrocnemio medial (r= 0.41). En nuestro trabajo (Tabla 4) hemos encontrado correlaciones de r= 0.51 (no significativa) en el vasto lateral, r= 0.68 (p<0.05) en el gastrocnemio medial y r= 0.71 (p<0.05) en el gastrocnemio lateral. Creemos que estas relaciones entre el grosor muscular y el ángulo de peneación se pueden ver reforzadas en trabajos hechos con muchos sujetos y que presenten variados grados de entrenamiento. Aun así para poder afirmar, como lo hacen algunos trabajos, que con el entrenamiento de hipertrofia el grosor muscular aumenta a medida que lo hace el ángulo de peneación debería hacerse en base a trabajos longitudinales hechos con los mismos sujetos, que son entrenados y desentrenados. Los estudios de Abe y cols. (2000) y Kumagai y cols. (2000) con corredores de velocidad muestran correlaciones bajas, pero significativas entre la longitud de fascículos del vasto lateral y el tiempo en los 100 m (r= -0.51 y p<0.001 en el estudio de Abe). También se han publicado correlaciones, aun de menor consistencia, entre longitud de fibras en el gastrocnemio lateral y el tiempo en los 100 m (r= -0.44 y p<0.05 en el trabajo de Abe). En nuestro estudio no hemos encontrado correlaciones de las longitudes de los fascículos con la capacidad de salto. Un salto, estudiado de forma aislada, es también un movimiento explosivo, no obstante no tiene nada que ver con la rapidez de las contracciones musculares durante la carrera de velocidad ya lanzada. Así por ejemplo, la duración de un apoyo durante la carrera de velocidad puede ser incluso menor a una décima de segundo, mientras que la batida de un salto puede superar las 3 décimas de segundo (0.276 ± 0.04 s en la fase ascendente del CMJ en este estudio). Siguiendo este razonamiento hemos encontrado una leve tendencia de correlación de la capacidad de salto justamente con una variable que se asocia a fuerza máxima, como el ángulo de peneación. Así hemos encontrado correlaciones de la altura del salto en el CMJ con el ángulo de peneación del vasto lateral (r= 0.52; no significativa) y entre el impulso de frenado del CMJ y el ángulo de peneación del gastrocnemio lateral (r= 0.67; p<0.05). No obstante las correlaciones encontradas en este trabajo, al igual que las mostradas en la bibliografía deben ser entendidas con ciertos matices y más teniendo en cuenta que muchas veces en la literatura internacional han sido consideradas correlaciones con valores de r menores a 0.5 y valores de p menores a 0.05. Según nuestro punto de vista la arquitectura muscular no sería más que uno de los factores responsables de las variaciones en la manifestación de la fuerza. Otros factores deberán tenerse también en cuenta si se quiere saber el peso relativo de unos y otros en una determinada población sometida a estudio. Entre los otros factores tendrían una especial relevancia el tipo histológico de fibras y la activación neuromuscular, pero también deberían considerarse factores de tipo mecánico, como la forma muscular o el momento sobre la articulación (Aguado, 2000). La arquitectura muscular al igual que el 13 resto de factores podría variar el grado de influencia en la manifestación de la fuerza según las características de los sujetos estudiados. Hay que considerar como una limitación de este trabajo que la arquitectura ha sido tomada en situación de relajación muscular. Para acabar de comprender la importancia de la arquitectura en la fuerza algunos trabajos recientes han empezado a evaluar los cambios durante contracciones musculares isométricas y dinámicas, incluso durante saltos (Kurokawa y cols., 2001) viendo cómo las fibras musculares modifican sus dimensiones y se reorientan en el espacio. Finalmente decir que los resultados de los tests de salto (Tabla 3) no son diferentes a los de otros estudios realizados también con plataforma de fuerzas en alumnos de la Facultad de Toledo en el último año, aunque sí son significativativamente diferentes respecto a estudios anteriores, realizados en 1997, con estudiantes también de Educación Física de León, en los que destacan las alturas, que eran superiores (CMJ: 41.6 ±5.1 cm y SJ: 34.2 ± 5.3 cm) (López y cols, 2001; Aguado,1999). 14 5- CONCLUSIONES 1- La metodología de evaluación de la arquitectura muscular mediante imágenes de ecografía es relativamente asequible en cuanto al aparataje necesario, pero muy compleja por los estrictos y laboriosos protocolos que hay que aplicar para obtener reproducibilidad y validez buenas. Una vez puesta a punto la metodología, en el presente artículo se presentan datos descriptivos incluyendo correlaciones simples en el estudio de la arquitectura muscular y características del salto en un grupo de estudiantes de educación física comparando los resultados con los de otros estudios. 2- La arquitectura muscular es simplemente uno de los factores que pueden explicar el resultado en las manifestaciones de la fuerza que vayamos a medir. 3- Diferentes factores involucrados en la producción de la fuerza, y entre ellos la arquitectura muscular puede variar el peso que tengan en la manifestación de la fuerza en función de las características de la población que se estudie. 4- La mejor evaluación de la fuerza explosiva será mediante instrumentos que midan directamente la fuerza y que no interpreten a partir de medidas simples, como el tiempo de vuelo de un salto, diferentes variables relacionadas con la fuerza, como la potencia mecánica. 5- Los sujetos estudiados no difieren en las características de arquitectura muscular respecto a poblaciones similares, cuyos datos se encuentran publicados en la bibliografía, más si se normalizan las medidas de arquitectura respecto de las dimensiones antropométricas. 6- Se han encontrado correlaciones entre grosor muscular y ángulo de peneación, que creemos que incrementarían su consistencia en poblaciones más heterogéneas y numerosas. 7- Han sido encontradas algunas correlaciones de variables de arquitectura, muscular habitualmente relacionadas con la fuerza máxima, con la capacidad de salto. Sin embargo no han sido encontradas correlaciones entre capacidad de salto y longitud de fascículos en el vasto lateral ni en los gastrocnemios. 8- Sería interesante reproducir este estudio con sujetos de diferentes características de edad, grado de entrenamiento y sexo. 15 BIBLIOGRAFÍA 1. Abe T., Brechue W.F., Fujita S. y Brown J.B. (1998): Gender differences in FFM accumulation and architectural characteristics of muscle. Medicine and Science in Sports and Exercise, 30 (7): 1066-1070. 2. Abe T., Kumagai K. y Brechue W.F. (2000): Fascicle length of leg muscles is greater in sprinters than distance runners. Medicine and Science in Sports and Exercise, Junio:32(6):1125-9. 3. Abe T., Fukashiro S., Harada Y. y Kawamoto K. (2001): Relationship between sprint performance and muscle fascicle length in female sprinters. Journal of Physiologycal Anthropology and Applied Human Science 20(2):1417. 4. Aguado, X. 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Agradecimientos: se agradece la colaboración de SonoSite Ibérica, sin quienes no hubiéramos podido realizar este estudio. 17