Portugal El territorio de Portugal se divide en tres regiones biogeográficas: mediterránea, atlántica y los archipiélagos de las Azores y Madeira, incluidos en Macaronesia. Destaca la Laurisilva de Madeira, declarada Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1999. Portugal cuenta con cinco reservas de la biosfera: Paúl do Boquilobo (1981), isla de Corvo (2007), isla Graciosa (2007), isla de Flores (2009) y Geres-Xures, territorio transfronterizo con España. Hasta un total de 86.581 hectáreas del país están protegidas como humedales de importancia internacional al amparo del Convenio de Ramsar, es decir, un total de 28 sitios Ramsar. Por último, tiene un parque nacional, el de PenedaGerês. Clima Orografía El clima portugués se clasifica como Atlántico-Mediterráneo. Es un clima marítimo, influenciado por el Océano Atlántico, siendo frío y lluvioso en el norte, y caluroso y seco en el sur (precipitaciones anuales: Faro524 mm; Lisboa- 750 mm; Coímbra- 1.000 mm; Oporto1200 mm; Viana do Castelo1.400 mm). En el Portugal continental, las temperaturas medias son de 13 °C en el norte y 18 °C en el sur. Madeira y Azores, debido a su localización en el Atlántico, son lluviosas y húmedas, y tienen una amplitud térmica menor. Portugal es uno de los países europeos más cálidos. La primavera y el verano son soleados y las temperaturas más altas durante julio y agosto oscilan entre los 28 °C y los 35 °C, llegando en ocasiones a los 40 °C en el interior de la zona sur. El otoño e invierno son típicamente lluviosos y ventosos, aunque hay días soleados. No son habituales las temperaturas inferiores a los 2 °C en la zona costera, estando por lo habitual en un promedio de 8 a 11 °C. Portugal continental está atravesado por el Tajo, que lo divide en dos áreas principales. El Portugal Septentrional tiene un paisaje montañoso. Las áreas interiores son mesetas, y están divididas en cuatro sub-regiones que permiten el desarrollo de áreas agrícolas fértiles. Entre el Miño y el Duero se puede encontrar, de oeste a este, el Parque Nacional da Peneda-Gerês, en la frontera con el Cabeza de la Meda (Cabeza da Meda, 1.316 m), así como la fronteriza Sierra de Xurés / Serra de Gêres, más al sur. En la misma zona, por encima del Duero, se encuentra la Serra da Cabreira; al sur de Bragança, se sitúa la Serra de Nogueira; y un poco más al sureste, en dirección a la frontera española, la Serra de Mogadouro. Al sur del Tajo, hasta el Algarve, el paisaje es de relieve suave. Las escasas montañas son de poca altitud, siendo la máxima altura en el Algarve, el monte Foia (902 m). Hay incluso zonas pantanosas como los valles bajos del Tajo y del Sado. En las alturas del Trás-os-Montes existen gatos salvajes Bosque mediterráneo de alcornocales Portugal Flora Fauna La flora del Portugal continental es la característica del clima mediterráneo, que predomina en la mayor parte de la Península Ibérica, si bien existen diferencias entre el norte y el sur como consecuencia de la diferencia de pluviosidad. En los dos archipiélagos la flora, como ocurre en todas las islas, es abundante en endemismos. Las principales formaciones vegetales varían entre bosques mixtos de xerófilas (brezales) y planifolias (castaños, madroños, etc) en el noroeste, y bosques mediterráneos típicos (encinares y alcornocales) en el centro y en el sur. Precisamente, estos bosques de encinares y alcornocales son los que sustentan los sectores fundamentales de la economía portuguesa, como la industria del corcho y las dehesas ganaderas. A medida que se avanza hacia el sur y baja la altitud, las especies dominantes cambian y aparecen el roble melojo (Quercus pyrenaica) y el quejigo (Quercus faginea) de hoja marcescente, la encina carrasca (Quercus rotundifolia), alcornoques (Quercus suber) e incluso coscojas (Quercus coccifera) en las zonas más templadas. El norte de Portugal es el hábitat de muchas especies animales. En la frontera española, pueden encontrarse ciervos, caballos salvajes, jabalíes y águilas reales, que comparten el parque nacional de Penada-Gerês. En las alturas del Trás-os-Montes, existen lobos, linces, gatos salvajes y zorros. Hay un total de ocho reservas o parques naturales. La reserva de Ria Formosa es un lugar privilegiado para observar a los pájaros migratorios y en ella se hallan multitud de peces, moluscos y crustáceos. El Cabo San Vicente es una parada para estos pájaros en sus migraciones hacia África o Europa. En la frontera española pueden encontrarse jabalíes y águilas reales Coordina: Europe Direct Comunidad de Madrid Elaboran: Enlaces de interés: Ministerio de Ambiente y Ordenamiento del Territorio. http://www.maotdr.gov.pt Instituto de Conservación de la Naturaleza y la Biodiversidad. http://www.icn.pt Instituto Geográfico Portugués. http://www.igeo.pt Bosque de roble melojo