economía doméstica Lavadora: uso eficiente, ahorro seguro El gasto en electricidad de este gran electrodoméstico se puede rebajar si se aprende a lavar la ropa de forma más eficiente E l Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) calcula que nueve de cada diez hogares cuentan con una lavadora que simplifica la existencia de la familia y alivia el trabajo de limpiar la ropa. Sin embargo, también es la responsable del 11,8% del consumo de energía doméstico. Cada familia desembolsa al año 990 euros en electricidad y más de la mitad de ese consumo, es decir, 546 euros al año, corresponde al uso de electrodomésticos como la lavadora. De ahí que cualquier forma de ahorro sea siempre bienvenida. Menos electricidad Poner una lavadora supone un consumo de entre 60 y 90 litros de agua. Según un estudio realizado por el departamento de Medio Ambiente de Barcelona, cada familia repite este gesto entre 5 y 10 veces por semana. El primer truco para reducir la factura de la electricidad consiste en usar agua fría o a baja temperatura. Para los expertos, alrededor del 90% de la energía consumida en la lavadora se gasta en calentar el agua. Si se ajusta la temperatura de caliente a tibia, el ahorro de energía será notable, ya que el lavado a 90 oC consume casi el doble de energía que a 60 oC y cuatro veces más que a 40 oC. Asimismo, un programa corto gasta menos que uno largo. Cuestión de peso ¿Cuánta ropa se debe introducir en la lavadora para ahorrar? No debe estar vacía ni tampoco a rebosar. La clave para ahorrar es la moderación. Los expertos recuerdan que no se debe poner la lavadora con dos o tres 34 prendas, pero que tampoco conviene llenarla en exceso. La referencia para gastar menos es dejar un palmo vacío en la parte superior, ya que el agua debe poder correr sin esfuerzo. Además, conviene consultar el manual de instrucciones para saber el peso máximo en cada lavado. Tipo de lavadora Para ahorrar energía, también se debe consultar la etiqueta energética del aparato, puesto que informa de su eficiencia. Esa eficiencia está identificada por un código de colores y de letras: desde el color verde y la letra A (los equipos más eficientes) hasta el color rojo y la letra G (los menos eficientes). Las lavadoras etiquetadas como clase A, A+, A++ o A+++ son, por tanto, las que permiten ahorrar más energía y dinero a largo plazo. Además, para gastar aún menos, los especialistas recomiendan escoger una lavadora de carga frontal. Aunque estos electrodomésticos tienen menor capacidad que los de puerta en la parte superior, también consumen menos agua y energía. No obstante, el mercado se moderniza y ya existen lavadoras de carga superior de bajo consumo. El horario La nueva factura de la luz por horas obliga al consumidor a estar atento al reloj. Desde el pasado julio (aunque las compañías se han reservado un plazo de adaptación hasta el 1 de octubre), poner la lavadora cuesta más o menos en función de la hora del día. Por eso, se deben aprovechar los momentos en que el kilovatio-hora (kWh) es más barato. Así, como regla general, el kilovatiohora es más económico por la noche y más caro por el día. Como recomendación, la Asociación de Consumidores de la Energía aconseja también evitar poner la lavadora entre las 20.00 horas y las 23.00 horas. Cantidad de detergente Según los expertos, los consumidores echan más detergente del necesario en la lavadora. La causas de este derroche de jabón incluyen la dificultad para determinar la dosis de jabón correcta (vienen en el envase), la inercia de llenar hasta arriba el tapón-dosificador o la idea falsa de que cuanto más detergente utilicemos, más limpia saldrá la ropa. Además, se ha de elegir un detergente de calidad, ya que suelen cundir más. Y mejor aún si es líquido: hará trabajar menos a la lavadora. En buen estado Mantener en buen estado el electrodoméstico también ayuda a ahorrar dinero durante los lavados. Unos filtros sucios con cal pueden aumentar el consumo de energía hasta 20% durante el lavado. Aun así, no basta con mantener los filtros limpios; los expertos también aconsejan retirar los botones sueltos, así como revisar bien los bolsillos para evitar que se cuele alguna moneda. Estos sencillos gestos evitarán más de una avería en la lavadora, que habría que reparar. ¿Cómo secar las prendas para ahorrar? Una vez limpias, también es posible ahorrar dinero en el secado de las prendas. • Secar la ropa al aire. La forma más barata (y sencilla) de secar la ropa sin gastar es utilizar el clásico tendedero al aire libre. En invierno, o en regiones de lluvia frecuente, un tendedero plegable protegido dentro de casa también puede funcionar. Lo mejor es colocarlo cerca de una ventana o de una corriente de aire. No se recomienda colocar las prendas húmedas sobre los radiadores, esto incrementará el consumo eléctrico. • Secadora. Uno de cada cuatro hogares españoles tiene secadora, según el IDAE. Se trata de un electrodoméstico pensado para eliminar la humedad de las prendas después de lavarlas. El inconveniente está en que la secadora implica también un consumo de energía: suponen una subida del 3,3% de la factura de la luz. • Otras opciones. El tendedero eléctrico es una alternativa intermedia. Lo importante es elegir uno de bajo consumo para no aumentar el gasto de energía en casa. www.consumer.es 35