CUADERNO DE LA CLINICA DE TRAUMATOLOGIA Y ORTOPEDIA DEL ADULTO A A3 3N N1 1 Triada terrible del codo Revision bibliografica Marzo de 2012 .Introducciòn: La llamada “ triada terrible” de codo, denominada así por Hotchkiss en 1996, es la combinación de la luxación del codo, fractura de coronoides y de cabeza de radio.1 Esta poco común lesión de da en el 10% de todas las fracturas de la cabeza del radio como se muestra en el estudio epidemiológico de Van Riet. 29 Tradicionalmente, el tratamiento de esta lesión se ha asociado con malos resultados en términos de inestabilidad aguda o crónica, rigidez, dolor y artrosis postraumática.2–5 El mejor conocimiento de la anatomía funcional del codo así como sus estabilizadores primarios y secundarios ha contribuido a conocer la fisiopatología de estas lesiones y como enfrentarse a su tratamiento. Actualmente se considera que el tratamiento eficaz de la triada terrible del codo debe ser integral y tener en cuenta todas las estructuras involucradas, tanto capsuloligamentarias como oseas. La realización de un tratamiento sistemático podría mejorar los resultados de esta compleja lesión. 6-9 Recuerdo anatomofuncional El codo es unas de las articulaciones más congruentes del sistema musculoesquelético y por lo tanto es una de las más estables. Esta característica está dada casi por igual por parte de la contención de los tejidos blandos y por las superficies articulares. Los tejidos blandos que actúan como estabilizadores estáticos incluyen los complejos de los ligamentos colaterales y la capsula anterior. El ligamento colateral lateral se origina en el cóndilo humeral y se inserta en el cubito y radio y está conformado por tres haces: 1- Colateral cubital, 2- Colateral radial y 3- Ligamento anular. Dr. Martin Sienra Dr. Flavio Telis clinica.traumatologia@gmail.com De estos se desprende que el mayor componente en la estabilidad en varo y rotatoria es el ligamento colateral cubital que se inserta en el cubito y como tal ayuda a estabilizar lateralmente la articulación cubitohumeral. El ligamento colateral medial consta de tres partes: Los segmentos posterior, anterior y transverso. El anterior es el más diferenciado, mientras que el posterior es un engrosamiento de la capsula posterior. El componente transverso (o ligamento de Cooper) parece contribuir poco o nada a la estabilidad del codo. 18 El mecanismo responsable de esta lesión consiste en diferentes vectores de fuerzas que incluyen caídas con el brazo en semiflexion, supinación del antebrazo y valgo del codo. Lo más común es una caída con el brazo extendido con transferencia axial de la fuerza con el codo en hiperextension, supinación media y una posición de valgo forzado . 11 Las fuerzas que producen la luxación de codo afectan la articulación por injurias estructurales en una secuencia que va de lateral a medial. 13 En la primera fase el complejo ligamentario colateral lateral se ve afectado produciendo una inestabilidad rotacional del codo en varo. En la segunda fase si la fuerza continua la cabeza del radio impacta contra el cóndilo humeral y se fractura. En la tercera fase la inestabilidad rotatoria producida por el complejo lateral permite a la fuerza axial dislocar el codo, por lo general en dirección posterior o posterolateral y se produce conjuntamente con la fractura de la apófisis coronoides. El complejo ligamentario medial también puede verse afectado en la mayoría de los casos pero no es un requisito esencial para conformar la triada. Clasificacion La apófisis coronoides esta frecuentemente involucrada ya que limita el movimiento anteroposterior del cubito sobre el humero y es el sitio de inserción del complejo ligamentario colateral medial.6,12,14. Las fracturas tipo 1 y tipo 2 de la clasificación de Regan y Morrey son las más comunes. Fig. 1 Classification of coronoid fractures based on Fracture size according to Regan and Morrey Type 1, avulsion of the tip of the coronoid process; type 2, a fracture involving less tan 50% of the coronoid process; type 3, a fracture involving more than 50% of the coronoid process. Las tipo 1 generalmente no requieren osteosíntesis y pueden ser tratadas correctamente con medidas ortopédicas. La tipo 2 debe ser tratada por osteosíntesis ya que la mayoría de las veces está afectado más del 50% e la apófisis coronoides dejando como resultado una inestabilidad humerocubital manifiesta.6-15-16-17. Sin embargo la osteosíntesis de las fracturas tipo 2 no es fácil y a menudo requiere la eliminación de los fragmentos. 17 Las fracturas tipo 3 son las más infrecuentes y siempre debería intentarse fijarlas con osteosíntesis para evitar inestabilidad. La clasificación de Regan y Morrey (fig 1) ha sido la más utilizada pero tiene demasiada variabilidad interobservador por lo que algunos autores prefieren utilizar la clasificación de O`Driscoll (fig 2) basada en la morfología según la TAC. Fig. 2 Clasificación de O Driscoll de fracturas de la apófisis coronoides basada en su morfología según la TAC. Dentro de las fracturas de la cabeza de radio las más frecuentes son las de tipo 1 y las de tipo 2 de la clasificación de Mason. Las de tipo 1 hay consenso general en realizar tratamiento ortopédico con férula de yeso y movilización temprana. En las fracturas tipo 2 el tratamiento apropiado es la osteosíntesis. En las fracturas tipo 3 debería tratarse con osteosíntesis de la cabeza del radio o reemplazo de la misma. Es importante mantener el área de contacto radiocapitelar ya sea por osteosíntesis de la cabeza del radio, sustitución de la misma o tratamiento conservador ya que este sitio de contacto es el antagonista principal de la desviación el valgo del codo cuando el complejo ligamentario medial se lesiona. 1,6,11,19. Imagen tomada del JBJS Am 86-2004 Objetivo del trabajo; El objetivo de esta revisión es realizar una puesta al día del tema proporcionando un análisis de lo publicado en los últimos 5 años y así evaluar la tendencia terapéutica del tema propuesto. Material y Método; Se realizo una búsqueda bibliográfica en buscadores electrónicos, donde utilizamos PUBMED y Biblioteca Virtual de Salud (BVS). Utilizamos como palabras clave en idioma ingles; terrible triad elbow, fracture, dislocation, radial head, coronoid. Se incluyeron artículos de los últimos 5 años. Los criterios de exclusión fueron artículos fuera del marco temporal, aquellos que incluían menores de edad, artículos en idiomas que no fueran ingles, español y francés. Artículos que se referían a propósito de casos.De la búsqueda mencionada analizamos 9 articulos. Artículos analizados; 20 - Estudio descriptivo con nivel de evidencia IV donde se investiga el rol de los Componentes más importantes en la estabilidad en varo del codo. Estos componentes son el ligamento colateral lateral, la cabeza del radio y la apófisis coronoides. Se utilizaron 10 extremidades superiores de cadáveres frescos congelados.Las pruebas testean 4 estados principales de los componentes ; LLE intacto, deficiente o reparado, la cabeza del radio resecada o sustituida. Todo se realiza a 2 ángulos de flexión y múltiples niveles de resección de apófisis coronoides. Los valores de restricción de cargas a 1,5 cm de desplazamiento en varo se obtuvieron conuna maquina de ensayos de materiales.Mas allá de una pérdida de 50% de la coronoides, ni la reparación del ligamento lateral externo (LLE) ni la sustitución de la cabeza radial por separado logro un aumento significativo de la estabilidad del codo en varo. Para una pérdida de la apófisis coronoides 2 entre 67-75% la reparación del LLE y el remplazo de la cabeza radial mostro una mayor estabilidad sobre la reparación sola o el reemplazo de la cabeza radial sola. Mas allá del 75% de la perdida de la apófisis coronoides incluso la reparación del LLE y la sustitución de la cabeza radial no ha mejorado la estabilidad en varo del codo. Conclusión: Los resultados del estudio proporcionan una base biomecánica para el tratamiento agresivo de las fracturas de coronoides como componente de la triada terrible 21. Estudio descriptivo con nivel IV de evidencia donde se evalúa las fracturas de coronoides que ocurren en la lesión llamada triada terrible de codo, que por lo general son pequeños fragmentos transversales. Los intentos de clasificar a estos fragmentos de acuerdo a la altura, como los sugeridos por la clasificación de Regan y Morrey han sido incosistentes y discutibles. El objetivo de este estudio fue cuantificar la altura de la fractura de coronoides en la Triada Terrible de codo. La altura de la apófisis coronoides del cúbito y el fragmento de fractura de coronoides se midieron en las tomografías computarizadas de 13 pacientes que presentaban la tríada terrible del codo. Dos observadores realizaron las mediciones intraobservador e interobservador con excelente fiabiidad.Resultados: La altura total de la coronoides del cúbito tuvo un promedio de 19 mm. El promedio de la altura del fragmento de fractura de la coronoides fue de 7 mm. Esto corresponde a un promedio de 35% de la altura total de la apófisis coronoides. Conclusiones: Las fracturas de la coronoides transversales relacionados con la triada terrible tienen una altura variable que puede no ser fácil de clasificar de acuerdo a la clasificación de Regan y Morrey. Puede ser preferible que la clasificación de las fracturas de coronoides se realicen de acuerdo a la morfología de la fractura y al patrón de lesión. 22. Este es un trabajo de tipo descriptivo, terapéutico con nivel IV de evidencia. El Objetivo del estudio es relacionar los tipos de fractura de coronoides con los patrones específicos de inestabilidad del codo traumático. Esta hipótesis fue probada en una revisión de una larga serie consecutiva de pacientes con fractura de la apófisis coronoides como parte de una luxofractura de codo. Métodos: Solo un cirujano reparo las fracturas de coronoides de 67 pacientes como parte de una luxofractura de codo durante un período de 7 años. Cada fractura de coronoides se trato mediante cirugía. Se analizo por medio de -Chisquare analysis- para evaluar la asociación de la fractura de coronoides con los 4 patrones de luxofractura de codo.Resultados: La fractura de coronoides se asoció con una luxofractura de olecranon en 24 pacientes (anterior 6 pacientes y posterior en 18 pacientes) , una luxación del codo y fractura de la cabeza radial (triada terrible) en 32 pacientes, y una lesión de intestabilidad rotacional en varo posteromedial en 11 pacientes. Entre los 24 pacientes con luxofractura del olécranon 22 tenían grandes fragmentos de coronoides y 2 tenían pequeños fragmentos (menos del 50% de la coronoides) . Todos los 32 pacientes con la lesión de la tríada terrible tenían pequeños fragmentos fracturados de la coronoides (menos del 50%) siendo una de ellas una fractura de la cara anteromedial de la coronoides. Entre los pacientes con de intestabilidad rotacional en varo posteromedial, 9 tenían pequeñas fracturas de la cara anteromedial y 2 tenían grandes fracturas. La asociación del tipo de fractura de coronoides y el patrón de lesión era muy significativa para ambos sistemas de clasificación. Conclusiones: Las siguientes asociaciones se confirmaron en este estudio: grandes fracturas de la coronoides con luxofractura anterior o posterior de olecranon, pequeñafracturas transversales con la triada terrible y fracturas de la faceta anteromedial con la intestabilidad rotacional en varo posteromedial. El conocimiento de estas asociaciones y sus excepciones, puede ayudar a guiar el tratamiento óptimo de estas lesiones. 23. Estudio restrospectivo, comparativo con nivel III de evidencia donde compara los métodos de fijación de la apófisis coronoides en la lesión de la triada terrible de codo. La hipótesis es que la fractura de coronoides tratada con lazo de sutura produce menos complicaciones y mejores resultados en comparación con osteosíntesis con tornillo o con técnicas de anclaje de fijación. Metodos; revisión retrospectiva de historias clínicas realizadas en tres centros de atención terciaria por lesiones de la triada terrible del codo con un seguimiento minimo de diezciocho meses (media 24 meses, rango de 18 a 53 meses) Todos los pacientes fueron tratados con un enfoque estándar que consiste en: (1) osteosíntesis o reemplazo de la cabeza radial, (2) La reparación del ligamento colateral cubital lateral (LCCL) del codo, y (3) la reparación de la fractura de coronoides con una de las dos técnicas: Grupo I (n = 28) consistió en la sutura de la coronoides Grupo II (n = 12) consistió en la reducción abierta y fijación interna (RAFI) con tornillos o anclajes de sutura. Resultados: En la población estudiada, el arco medio postoperatorio de movilidad del codo fue de 115 grados (Rango, 75 A 140), se utilizo el score de la discapacidad media del brazo, hombro y mano (DASH) siendo su la puntuación de 16 3 (rango, 0 a 43), y el promedio de la puntuación de Broberg-Morrey (Tabla III) fue de 90 (rango, 64 a 100). Para la reparación de la fractura de coronoides, la técnica de sutura de lazo era más estable que las otras técnicas durante la cirugía, tanto antes (p <0,05) como después (p <0,05) de la reparación del LCCL , y al final del seguimiento (p<0,05). RAFI se asoció con una mayor prevalencia de fracaso del implante (p<0,05), y los anclajes de sutura fueron asociados con una mayor prevalencia de consolidación viciosa y no consolidación (p <0,05). Conclusiones: En caso de lesiones de la tríada terrible, una mayor estabilidad con menor número de complicaciones se logró con el uso de la técnica de sutura de Lazo en la fijación de la fractura coronoides. 24. Estudio restrospectivo, descriptivo con nivel IV de evidencia.El objetivo del trabajo es informar sobre los resultados funcionales a largo plazo luego de la reparación de las lesiones producidas en la triada terrible de codo tratadas con un protocolo quirúrgico paso a paso.Métodos; 44 pacientes fueron diagnosticados desde el año 1995 al 2007 que presentaban una luxofractura de codo. De estos, 37 presentaban la triada terrible. Fueron contactados para una evaluación funcional del codo y realizar Rx. 8 pacientes no accedieron a la evaluación y fueron excluidos. El tratamiento quirúrgico de los pacientes fue basado en un algoritmo de trabajo. A todos los pacientes se le realizo un abordaje lateral tipo Kocher para acceder a la articulación de codo. En dos pacientes con fractura de la cabeza de radio sin desplazamiento se realizo el mismo abordaje para visualizar la coronoides o ayudar a colocar un fijador externo. Las fracturas conminutas de cabeza de radio si no estaban desplazadas no se fijaron, si estaban desplazadas se les realizo osteosíntesis o fueron reemplazadas a discreción del cirujano.El ligamento colateral lateral fue reparado con anclas. La apófisis coronoides se fijo con osteosíntesis solo en los tipos II y III de la clasificación de Morrey. Se testeaba estabilidad luego de la cirugía. Si la estabilidad era adecuada a 30 grados se dejaba una férula de yeso. Si la inestabilidad persistía mas allá de los 30 grados se dejaba un fijador externo articulado y se revaloraba estabilidad.Al ligamento colateral medial no se le realizo reparación.Todos los pacientes recibieron una única dosis de 700cg de radiación para prevenir la osificación heterotopica. El resultado funcional fue evaluado por Mayo elbow performance score (Tabla 1), BrobergMorrey score (Tabla III), DASH (discapacidad media del brazo, hombro y mano) y SF-36v2 escalas funcionales. Resultados Los resultadosincluyen que la medida de flexion – extensión del arco de movilidad del codo fue de 109mas menos 27 grados y el promedio de pronación supinación fue de 128 mas menos 44 grados. <la fuerza de agarre fue en promedio el 72% de la extremidad contralateral. La puntuación de Mayo fue de una media de 81 grados <<<8rango entre 45 a 100 grados) , la media Broberg-Morrey fue de 77 (rango de 33 a 100) El DASH promedio fue de 28 (rango de 0 a 72<<9. <cuando se compara con los valores noemales según la edad, la puntuación de la media de los pacientes de DASH fue de 1,4 SD peor que una persona promedio de la misma edad. <ninguna de las caacteristicas de esta lesión, datos demográficos del paciente o modalidades de tratamiento se asoció significativamente con un mal resultado en el intervalo de confianza del 95% Conclusiones : Los reultados en los pacientes con lesión de la riada terrible del codo generalmente son insatisfactorios, pero el manejo quirúrgico agresivo con el uso de un protocolo sistematico puede ser beneficioso. En este trabajo también con cluyen que con el protocolo implementado lograron la restauración de la estabilidad de la articulación del codo en todos los pacientes. 25. Estudio prospectivo con nivel IV de eviencia científica. El objetivo del presente estudio fue evaluar la etiología de la inestabilidad, tanto óseas como ligamentarias, y los resultados de la estabilización con una combinación de fijación interna, reparación ligamentaria, ORIF o artroplastia de la cabeza del radio y, cuando era necesario, la implementación de un fijador externo.Se realizo mediante un protocolo formulado y un algoritmo de tratamiento para la luxofractura de codo en una serie de treinta y dos pacientes. Métodos; 32 pacientes con la triada terrible de codo fueron referidos a tres centros de referencia terciarios donde ingresaron al presente estudio prospectivo entre el año 2001 y 2005. Todos fueron evaluados mediante TAC con reconstrucción.A todos los pacientes se les realizo un abordaje posterior. El nervio cubital se diseco rutinariamente. Los complejos ligamentarios medial y lateral fueron inspeccionados y reparados por sutura o por anclas. ORIF de la cabeza del radio fue realizada cuando era posible sino, se realizaba artoplastia. El complejo coronoides braquial fue reparado con el uso de tracción a través de puntos de sutura. Se testeaba estabilidad y se utilizaba fijadores externos cuando estaba indicado. Fue administrada indometacina profiláctica para prevenir osificación heterotopica.Todos los pacientes fueron examinados clínica, radiológicamente y con el 4 autocuestionario (DASH). El rango de movimiento, congruencia articular, la estabilidad del codo, y las tratamiento en el algoritmo.Todos los pacientes que participaron de este estudio prospectivo fueron manejados por un solo cirujano utilizando el algoritmo propuesto .Resultados; A los 32 pacientes se les reparo el complejo braquial coronoides. La cabeza de radio estaba intacta en seis codos. Fue reconstruida en siete pacientes y reemplazada en diecinueve. El LCL fue reparado en 18 pacientes, el LCM se reparo en 2 pacientes, y combinados el LCL y LCM en 12 casos. En 21 pacientes se le aplico una fijación complementaria con fijador externo. Despues de un periodo medio de seguimiento de tres años (rango, uno a cinco años) los treinta y dos codos tenían un arco funcional de movimiento de 30 a 130 grados. La pérdida de extensión media de 12 grados (rango de 0 a 20 grados), la pérdida de flexión media fue de 14 grados (rango entre 0 a 20 grados), y un rango completo de movimiento se exibio en tres pacientes. La puntuación DASH promedio fue de 23 grados (rango entre 19 a 28 grados) A pesar de haber recibido la profilaxis con indometacina, tres pacientes desarrollaron una osificación heterotópica menos, que no afectó el serultado final. A los pacientes que se les realizó artroplastia de la cabeza radial no mostraron a mediano plazo problemas tales como la perdida o el desgaste capitelar. Discusión: TAC con reconstrucción tridimensional son muy útiles para la planificación quirúrgica y para el tratamiento. El algoritmodesarrollado representa un enfoque sistematico para lograr los objetivos de restablecer la estabilidad y el movimiento funcional. La estabilización quirúrgica se realizó una vez que la inflamación había disminuido. Los pacientes a los qu se les coloco un fijados externo articulado tuvieron un rápido retorno a la movilidad 26. Estudio retrospectivo tipo revisión bibliográfica con nivel IV de evidencia científica. El objetivo de esta revisión fue evaluar los patrones de lesión, los tratamientos aplicados y los resultados obtenidos en pacientes con la tríada terrible de codo tratados con los protocolos quirúrgicos actuales y definir los aspectos clave en el manejo de estas lesiones complejas.Esta revisión analizo 137 pacientes con la triada terrible de codo de cinco estudios en donde se utilizaron protocolos quirúrgicos actuales. Estos protocolos incluían fijación de al apófisis coronoides, reparación o reemplazo de la cabeza radial y reparación del complejo ligamentario lateral, reservando la reparación del ligamento colateral medial y la colocación de fijadores externos para los pacientes con inestabilidad residual. La mayoría de los casos reportados en los estudios revisados fueron tratados durante la primera semana después de la lesión.El tratamiento de esta lesión demandante parece ser efectiva en la mayoría de los casos. Con un promedio de 31 meses de seguimiento, se logro un arco de flexión global fue 111.4 °, un promedio de flexión de 132.5 ° con la rotación del antebrazo de 135,5 °, Mayo elbow performance score fue de 85,6 puntos, y Broberg Morrey-score fue de 85 puntos. Sin embargo, el paciente debe se informados sobre la incidencia de complicaciones, como rigidez, alteraciones en el nervio cubital o artritis posttraumaticaRecomendaciones: las limitaciones de este estudio incluyen el nivel de evidencia III y IV de los trabajos revisados. Las investigaciones futuras parece aconsejable, especialmente para refinar las indicaciones específicas para la fijación de la fractura de coronoides tipo I, la fijación o la sustitución de la cabeza del radio en fracturas parciales, la reconstrucción del ligamento lateral interno y los beneficios y las indicaciones de la fijación externa.La mayoría de los casos que abarcan este estudio fueron tratados dentro de la primer semana de ocurrida la lesión De acuerdo con la literatura reciente sobre el manejo de la tríada de codo y losresultados reportados en este estudio, se realizaron las siguientes recomendaciones para el tratamiento de la tríada de codo: 1. La tomografía computarizada con reconstrucción tridimensional puede ser útil en la obtención de una adecuada diagnóstico del tipo de lesión. 2. Todos los materiales que puedan ser necesarios para la reconstrucción deben estar preparados (tornillos, anclajes de sutura, placas, prótesis, fijadores externos, etc) antes de la cirugía. 3. El abordaje posterior es el más utilizado que permite el acceso tanto a medial como a lateral del codo. 4. La transposición anterior del nervio cubital puede prevenir en el postoperatorio los síntomas de disfunción del nervio cubital. 5. Reparación de las estructuras desde lo más profundo hacia lo más superficial;apófisis coronoides, cabeza del radio, ligamento lateral, utilizando los diferentesmétodos disponibles en función del tipo de lesión. 6. Tratar de mantener la cabeza del radio, si no es posible, se debería realizar la artroplastia de la cabeza del radio de metal. 7. Evaluar la estabilidad después de la reconstrucción. Si el codo se luxa a 30-45 °grados de extensión, reparar el ligamento colateral medial. 5 Si persiste, colocar un fijador externo para mantener la estabilidad. 8. Evaluar la congruencia articular. Si la unión no es congruentes, repetir los pasos desde el numeral 5. 27. Estudio restrospectivo con nivel IV de evidencia científica. El propósito de este estudio fue informar de los resultados tanto de la clínica como radiográficos y la estrategia quirúrgica en la triada terrible de codo.La hipótesis fue que los resultados en este tipo de lesión serian satisfactorios si el LCM fuera restaurado sistemáticamente al mismo tiempo que la estructura lateral. Métodos. Se revisaron retrospectivamente los resultados de este tratamiento realizado en 13 codos con la tríada terrible. El protocolo quirúrgico incluye fijación o la sustitución de la cabeza del radio y la reparación del LCCL (ligamento colateral cubital lateral) a través de la ventana lateral. En todos los casos, la fijación simultánea de la coronoides y la reparación del musculo flexor común se realizaron a través de la ventana medial. En ocho pacientescon lesión del LCM siempre se reparo. A todos los pacientes se le realizo un abordaje posterior. Los 13 pacientes fueron tratados a una media de 6,3 días (rango 1 a 13 días) luego de la lesión. El periodo de seguimiento osciló entre 18 a 41 meses (media 25 meses). Resultados. El arco de flexion-extensión del codo tuvo un promedio de 128 °y la rotación del antebrazo un promedio de 134.6 °. The Mayo elbow performance score (tabla I) fue de 95 puntos (rango, 85 a 100), que correspondía a diez excelentes resultados, ytres buenos resultados.La estabilidad concéntrica fue restaurada en todos los casos. Las complicaciones postoperatorias fueron en un paciente tenía una neuropatía del nervio cubital. Conclusiones: los actuales procedimientos operativos restauran todos las estructuras dañadas laterales y mediales a través de una ventana medial y lateral obteniendo buenos resultados tanto clínica como radiológicamente y se recomiendan para pacientes portadores de la triada terrible28.- Estudio retrospectivo con nivel IV de evidencia cientfica. La hipótesis del presente estudio era que la intervencioçon temprana, la fijación y la reparación estable proporcionarían estabilidad suficiente para permitir movimiento en siete a diez días luego de la cirugía y asi mejorar los resultados funcionales. Métodos: Se revisaron retrospectivamente los resultados del tratamiento implementado en dos hospitales de enseñanza universitaria con 36 pacientes con luxación de coso con fractura de cabeza de radio y de coronoides (triada terrible). El protocolo quirúrgico incluia la fijación o sustitución de la cabeza del radio y fijación de la coronoides si era posible, reparación de la capsula y del ligamento lateral y en casos seleccionados la reparación del ligamento colateral medial y/o la colocación de un fijador externo en pacientes que presentaban inestabilidad rsidual Lospacientes fueron evaluados tanto clínica como radiológicamente. En cuanto a la técnica quirúrgica se les realizó reparación de lacápsula anterior con sutura con hilo reabsorbible a las fracturas de coronoides tipo I de la clasificación de m<orrey y fijación con osteosíntesis con uno o dos tornillos desde la superficie posterior del cubito en las tipo II y III. Tambien utiliza tornillos canulados ya que la guía del torinillo puede ser perfectamente colocado en el fragmento de la coronoidesA la cabeza del radio se le realizo OS cuando era ñposible, si tenían uno o dos fragmentos los autores preferían fijarlos con tornillos de Herbert, si el fragmento era menos al 25% de la cabeza se realizó excision del mismo o se le reemplazo por una protesis de metal cuando no era posible la OS. El ligamento colateral lateral se reparó, siendo una avulsión del LCL en el humero lo más común. Aproximadamente el 60% de los pacientes tienen una disrupción de una o de todo el origen del extensor común. Se reparó elligamento colateral medial en los apcientes con inestbilidad posterior residual y se coloco fijadoes externos sia pesar de la reparación ligamentaria continuaba inestable. Todo se realizó desde lo profundo a lo superficial (deep to superficial), rimero la coronoides,capsula anterior, cabeza del radio, complejo ligamentario lateral al origen del extensor comúnEn cuanto al abordaje los autores prefieren uno lateral porque sostienen que pueden controlar todas las estructuras involucradas pero manifiestan que por un abordaje posterior también se puede tener un buen acceso a lateral y a medial Resultados: Con un seguimiento de una media de 34 meses luego del tratamiento quirúrgico el arco de flexoextension fue de 112 ° ± 11 ° y la pronosupinación tuvo un promedio de 136 ° ± 16 °.El score Mayo Elbow Performance tuvo una puntuación de 88 puntos (rango de 45 a 100 puntos) correspondiendo a 15 excelentes resultados, 13 buenos resultados, 7 resultados regulares y un mal resultado. La estabilidad concéntrica fue restaurada en 34 pacientes. 8 pacientes presentaron complicaciones que requirieron reintervencion. 2 tuvieron una sinostosis. 1 una estabilidad recurrente. 1 tuvo infección de la herida. Conclusiones: En este estudio los autores concluyen que el uso del protocolo quirúrgico propuesto para la luxación de codo con fractura de cabeza del radio y coronoides logran una 6 estabilidad suficiente como para permitir la movilidad postoperatoria precoz y así lograr una mejora en el resultado funcional. Recomiendan una reparación quirúrgica temprana con el uso de un protocolo para este tipo de de lesiones. Discusión La llamada Triada Terrible de codo es una lesión grave que involucra una articulación y provoca una gran inestabilidad que para restaurarla es necesario un tratamiento integral de todas las estructuras involucradas. La primera gran conclusión que se desprende de esta revisión es que no existe evidencia científica confiable que abale ningún tratamiento ni protocolo especifico para la resolución de este tipo de lesión. De los estudios que se evaluaron solo uno de ellos tiene un nivel III de evidencia científica que compara técnicas de fijación de la apófisis coronoides concluyendo que el uso de suturas produce menos complicaciones que tornillos o anclajes. Los demás estudios son todos con un nivel de evidencia científica IV. De todas formas ningún autor duda en realizar como primera cosa tratamiento quirúrgico y no se plantea el ortopédico. Más allá de lo comentado parece necesaria la reparación del ligamento colateral lateral, la osteosíntesis o artroplastia de la cabeza del radio y la reparación de la fractura de la coronoides. El cuanto al abordaje la mayoría realiza posterior que da un excelente acceso tanto a las estructuras mediales como a las laterales. Otros autores prefieren lateral ya que sostienen tener un mejor acceso a la apófisis coronoides. La función estabilizadora de la cabeza del radio está bien documentada así que ningún autor plantea la resección sino que se repara cuando es posible, sino se realiza sustitución protésica. Uno de los aspectos importantes en esta lesión parece ser la postura frente a la apófisis coronoides, ya que es un importante estabilizador del codo tanto antero-posterior como en varo. La mayoría de los autores realizan la reparación de la apófisis coronoides por más que sea pequeño el fragmento, ya que la sola reparación de la capsula anterior parece aumentar la estabilidad. En función del tamaño del fragmento se puede optar por distintos tipos de osteosíntesis según la preferencia del cirujano; Suturas, anclas, tornillos transoseos. El ligamento colateral medial generalmente no se repara. Parece ser que solo en los casos en que el codo continúa inestable a pesar de realizar lo antes expuesto se puede plantear su reparación.Si la inestabilidad persiste a pesar de realizado todo lo expuesto algunos plantean la colocación de un fijador externo. También hay consenso en realizar el tratamiento quirúrgico antes de los 10 días de producida la lesión. En cuanto a la rehabilitación postoperatoria la mayoría de los autores inmovilizan la articulación del codo por 7 a 10 dias con una férula de yeso posterior para luego comenzar con movimientos pasivos de flexoextension y pronosupinación. ///////////////////////////////////////////////////////////////////////////// 7 movimientos pasivos de flexoextension y pronosupinación. Tabla I: Mayo Elbow Performance Score Variable Dolor (max 45 ptos.) Rango de movilidad (max 20 ptos.) Estabilidad (max 10 ptos.) Funcion (max 25.ptos) Definición Ninguno Leve Moderado Severo Mayor a 100 grados Entre 50 y 100 Menor a 50 Estable Moderadamente inestable Muy inestable Puede peinarse Puede comer por si solo Puede higienizarse Puede vestirse Puede calzarse Puntos 45 30 15 0 20 15 5 10 5 0 5 5 5 5 5 Resultado: >90 excelente; 75-89 bueno; 60-74 regular; <60 malo Tabla II Treatment algorithm proposed for the achievement of anatomic fixation and mechanical stability in patients with complex fracture-dislocations of the elbow . EUA = examination under anesthesia, MUCL = medial ulnar collateral ligament, LUCL = lateral ulnar collateral ligament, P/L = posterolateral stability, and ORIF = open reduction and internal fixation. 8 Tabla III : Broberg y Morrey. Puntuación funcional de las fracturas de la cabeza del radial Movimiento Grado de flexión (0,2 arco) Grado de pronación (0,1 arco) Grado de supinación (0,1 arco) Max 27 Max 6 Max 7 Fuerza Normal 20 Pérdida leve (apreciada pero sin limitación, 80% al del lado opuesto) 13 pérdida moderada (limita alguna actividad, 50% al del lado opuesto) 5 La pérdida severa (limita tareas cotidianas, perjudicial) 0 Normal 5 Pérdida ligera (percibida por el paciente, sin limitación) 4 Pérdida moderada (limita alguna actividad) 2 La pérdida severa (limita tareas cotidianas) 0 Sin dolor 35 Leve (con la actividad, no requiere medicamento) 28 Moderado (con o después de la actividad) 15 Grave (en reposo, medicación constante, incapacitante) 0 Estabilidad Dolor Resultados 95-100 Exelente 80-94 Bueno 60-79 Regular 0-59 Pobre Bibliografia 1.Hotchkiss RN.Fractures and dislocations of the elbow. En: Rockwood CA, Green DP ,Bucholz RW, Heckman JD, editores. Rockwood and Green’s fractures inadults,4 thed. 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