Ciudadana: Dra. LILIAM NÚÑEZ ARISTIMUÑO. Directora de Recursos Humanos de la Gobernación del Estado Zulia. Su despacho. Honorable Directora. Luego de saludarle, la presente tiene por objeto dar respuesta a comunicación No. 0-1449, fechada 12 de agosto de 2002, recibida el día 1408-2002, donde solicita opinión jurídica con relación al disfrute de vacaciones y el pago del bono vacacional, cuando el trabajador o funcionario en el transcurso del año de servicio ha presentado suspensiones médicas, indicando ese despacho la oportunidad del disfrute, así como el pago del bono vacacional cuando son disfrutada en forma colectiva, lo hago en los términos siguientes: FUNDAMENTO DE DERECHO LOS ARTICULO 219 Y 232 DE LA LEY ORGANICA DEL TRABAJO, establecen: ARTICULO 219: “Cuando el trabajador cumpla un (1) año de trabajo ininterrumpido para un patrono, disfrutará de un período de vacaciones remuneradas de quince (15) días hábiles. Los años sucesivos tendrá derecho además a un (1) día adicional remunerado por cada año de servicio, hasta un máximo de quince (15) días hábiles. (Omissis). ARTICULO 232: “No se considerará como interrupción de la continuidad del servicio del trabajador para el goce del derecho a las vacaciones legales remuneradas, su inasistencia al trabajo por causa justificada; pero la concesión de la vacación anual podrá ser pospuesta por un periodo equivalente a la suma de los días que no hubiere concurrido justificadamente a sus labores. Se considerará como causa justificada de inasistencia al trabajo, para los efectos de este artículo, la ausencia autorizada por el patrono, la ausencia debida a enfermedad o accidente o a otras causas debidamente comprobadas. FUNDAMENTO DOCRINARIO El autor patrio, Dr. Rafael Alfonzo Guzmán, en su obra “Nueva Didáctica del Derecho del Trabajo”, página 263, dice: “Los periodos de inasistencia al trabajo sin causa justificada, en cuanto totalice siete o más días al año, pueden imputarse al período de vacación anual a que tiene derecho el trabajador, siempre que el patrono hubiere pagado el salario durante la inasistencia del empleador u obrero (Art. 233). Los días de inasistencia justificada pueden causar la posposición del goce del derecho por un periodo equivalente a la suma de los días de dicha inasistencia (Art. 232 L.O.T). OPINIÓN DEL CONSULTOR El artículo 219 de la Ley Orgánica del Trabajo, establece como condición para el nacimiento del derecho a la vacación, el transcurso de un (1) año ininterrumpido de labores, es necesario entonces que el trabajador durante ese tiempo, haya estado efectivamente al servicio del patrono. El periodo anual, por otra parte, comienza a transcurrir desde el inicio de la relación de trabajo, produciéndose cada año aniversario el derecho al disfrute de las vacaciones, siempre que no haya habido interrupción en la labor. Una interpretación estricta de la norma llevaría a la consideración de que cualquier motivo que haya impedido la prestación de los servicios provocará una interrupción de la antigüedad requerida, posponiéndose el derecho a este descanso. No parece esta, sin embargo, la interpretación que hace el mismo legislador de la noción de trabajo ininterrumpido; en efecto, el artículo 232, arriba citado, expresamente señala que las causas justificadas de inasistencia al trabajo no se considera interrupción de la continuidad del servicio, pudiéndose sin embargo, posponer el disfrute de la vacación por igual número de días a aquellos en que el trabajador faltó justificadamente al trabajo. Enuncia la disposición algunas causas justificadas a los efectos que ella consagra; así, la ausencia autorizada por el patrono, la ausencia debida a enfermedad o accidente o a accidentes o a otras causas debidamente comprobadas. Como se observa, la interpretación de la continuidad de los servicios es bastante liberal, sobretodo en la última parte cuando señala <<cualquier causa debidamente comprobada>>. Como vemos, el artículo 232 de la Ley Orgánica del Trabajo, enuncia las inasistencias del trabajador que no producen interrupción en la continuidad del servicio, a los efectos del otorgamiento de las vacaciones anuales. Nuestra legislación laboral, en vez de requerir un determinado número de días de trabajo efectivo durante el año autoriza al empleador, para posponer las vacaciones por un tiempo equivalente a la suma de los días de ausencia o de suspensión justificada del trabajo; es decir; que si el trabajador o empleado interrumpe sus labores por causas ajenas a su voluntad, como lo sería el padecimiento de una enfermedad, el inicio de sus vacaciones queda diferido por un periodo igual al de la suspensión del trabajo. Por los fundamentos de hechos y de derecho, arriba explanados, este despacho recomienda en el caso de los trabajadores que disfrutan de vacaciones colectivas, y que hayan presentado suspensiones médicas que justifican sus inasistencias al lugar de trabajo, en el transcurso del año anterior, al nacimiento del derecho de la vacación, que los mismos – trabajadores- podrán disfrutar (a voluntad del patrono) con el resto del personal que labora en el organismo, cancelándoles íntegramente el bono vacacional. De ser contaría la decisión, el patrono puede ordenar el diferimiento del goce de las vacaciones del trabajador, por un tiempo igual a la suma de los días en no concurrió justificadamente a sus labores, de conformidad a lo establecido en el Artículo 232 de la Ley Orgánica del Trabajo. Sin otro particular a que hacer referencia, se suscribe de usted. Atentamente, Abog. RAUL SOTO Director de Asuntos laborales