Diapositiva 1 - Cabildo de Lanzarote.

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5º CONGRESO DE TURISMO UNIVERSIDAD Y EMPRESA
UNIVERSITAT JAUME I . CASTELLÓN
Benicàssim
23-25 Abril 2002
LANZAROTE, LIMITES Y PROCESOS DE UN SISTEMA INSULAR INTEGRADO
PRESENTACIÓN DEL LIFE L+B 2 OBTENIDO PARA LA RESERVA DE BIOSFERA
Aquilino Miguélez López
Observatorio de Lanzarote
Consejo de la Reserva de Biosfera
Nota aclaratoria:
Ponencia elaborada a partir del documento de presentación del proyecto Life de la Unión Europea para el período 2001-2004 referido en
imagen superior, del cual:
Autor: Aquilino Miguélez López
Asesoramiento: Fernando Prats Palazuelo, AUIA; Ana Carrasco Martín, gerencia Consejo de la Reserva de Biosfera.
Equipo Técnico: Los citados y Esteban Armas Matallana, Leolpoldo Díaz Bethencourt, Miguel Ángel Martín Rosa, Mario Alberto Perdomo
Aparicio, Amparo Romero Ortega.
Diseño gráfico, ilustraciones y mapas: Juan Carlos Sastre.
• Una auténtica Reserva de Biosfera (Unesco-MaB)
• Un mosaico natural
• Una cultura insular propia
• La isla tejida por redes humanas
• Perspectivas
• Life Lanzarote en la Biosfera 2
Resumen
Lanzarote intenta desde hace décadas controlar su oferta turística, no sólo para
distinguirse como un destino singularizado, sino para mantener la calidad de vida
que los residentes desean también para sí. Sin embargo, una vez inserta la isla en
el mercado turístico internacional, esta intención enfrenta enormes dificultades
políticas, legales, administrativas, sociales, culturales y ambientales, por lo que
resulta inevitable hablar de crisis en el momento actual, aunque la causa
fundamental sea debida al éxito turístico.
A continuación se ofrece síntesis descriptivas geográficas, sociopolíticas y
culturales que definen los límites y procesos de esta Reserva de Biosfera
empeñada en conseguir un equilibrio entre turismo y desarrollo. Sendas referencias
al significado dado por la Unesco a las Reservas de Biosfera y el reto de Lanzarote
como tal, abren y cierran la presentación.
2
Una auténtica Reserva de Biosfera (Unesco-MaB)
“Las Reservas de Biosfera no deben acabar siendo islas de sensatez en un océano de despropósitos”
(Imagen y frase tomadas del boletín MaB Información, nº 10-11, pág. 4.
Comité Español MaB, julio1995)
Lanzarote representa una Reserva de Biosfera (R.B.) de nueva generación
(Unesco’95), al asumir las contradicciones propias del modelo occidental de
desarrollo e intentar insertarlo dentro del funcionamiento de la biosfera. Por eso no
evita los vertederos o el aeropuerto, sino que ambos pertenecen a la R.B.
Lanzarote, como el planeta entero, marca de manera clara unos límites físicos
a una actividad humana extraordinariamente dinámica. Entenderlo y actuar en
consecuencia supone atravesar una fuerte crisis de adaptación que sólo estamos
iniciando en la isla, pero no hacerlo ahora sólo aumentaría el problema futuro y
socavaría la propia base de la oferta turística actual.
Por eso, en 1997 se impulsó una Estrategia hacia la sostenibilidad insular, con
estructura aproximada de Agenda 21 Local, y hoy exploramos nuevas posibilidades
de actuación con el Life Lanzarote en la Biosfera 2.
3
DATOS BÁSICOS
2000
Población residente
Turistas
Población total
(habitantes equivalentes)
Visitantes anuales
Capacidad alojativa
Densidad territorial
Espacios naturales protegidos
(P.Nac. Timanfaya + LENAC’94)
Máximo suelo urbanizable
(Plan Insular de Ordenación vigente)
Producción agrícola
106.255
49.005
habitantes
promedio diario de turistas
155.260
habitantes + turistas diarios
1.801.201
58.132
184
turistas / año
plazas turísticas legalizadas
hab.equiv. / km2
41,6
% superf. de Isla + islotes
8,8
% superf. de Isla + islotes
4,6
% superf. insular cultivada
FUENTES: ISTAC / Centro de Datos y Oficina del Plan Insular del Cabildo, 2000
4
Joven a escala planetaria, los más de diez millones de años de esta isla
convierten a Lanzarote, junto a Fuerteventura, en primogénitas del archipiélago
canario. Por ello muestran un relieve aplanado, tras el desgaste causado por la
erosión en un edificio volcánico generado por etapas. Última de las cuales resultó
recubierta un tercio de la isla hace 178 y 272 años de manera muy marcada por las
erupciones de Timanfaya.
Su escasa altura y suave relieve no permiten captar la humedad de los alisios,
por lo que se dificulta enormemente el crecimiento vegetal, de modo que sin
apenas obstáculos topográficos ni cubierta vegetal, la isla resulta trasparente a la
mirada. Por ello reconocemos fácilmente el paisaje real en el desnudo relieve lunar
que simula el ordenador. Por eso resulta tan difícil esconder nuevas edificaciones o
resulta tan palpable la suciedad en el campo.
5
Aunque la isla es hoy un oasis templado y soleado para el turista europeo, el
ambiente insular está caracterizado por una gran aridez a la que contribuyen tanto
la dominancia del sol frente a la lluvia como el fuerte viento que atraviesa la isla de
punta a punta. Esto hace que tanto plantas como animales, y entre éstos los
humanos, hayan buscado refugio y protección.
De modo que, a la latencia que siguen muchas plantas y las cautelas de los
animales, se suma la memoria cultural de los humanos, que hoy ofrecen al turismo
la franja costera más desértica y bonancible, aunque hubo tiempos en que el
horizonte marino era símbolo de aislamiento forzado y origen de peligros. Las
poblaciones se refugiaban en el interior o, incluso, trasladaron su emplazamiento
(Guatiza) para esconder sus luces nocturnas del mar por donde arribaban los
piratas en busca de esclavos.
6
Las erupciones de Timanfaya ofrecieron un nuevo recurso con sus cenizas
volcánicas, puesto que extendidas sobre los campos de cultivo, aislaban las raíces
y la humedad del suelo de los rayos del sol y del viento. De este modo se lograba
retener la escasa e impredecible lluvia y podían producirse mayores cosechas de
una variedad más amplia de cultivos. Pero las técnicas artesanales desarrolladas
son hoy de difícil mecanización.
Además, el desierto cultivado ofrece un ejemplo de cómo la sociedad
lanzaroteña ya logró una vez dilatar los límites impuestos por la naturaleza insular
sin romper su equilibrio, aprovechando las negras cenizas de una catástrofe. Hoy la
actividad turística ha forzado el abandono de una agricultura cuyos paisajes
resultantes ofrece como gran atractivo. Pero estamos lejos de un equilibrio con la
isla y con el planeta.
7
Como cualquier isla sujeta a oscilaciones que un pequeño territorio no puede
amortiguar, la escasez e irregularidad de los recursos en Lanzarote ha empujado a
su población, siempre que ha sido posible, a buscar intercambios con el exterior,
representados en la imagen con las prinicipales puertas de entrada a la isla de
mercancías y pasajeros procedentes de todo el mundo.
Pero ello no siempre ha servido para paliar el infortunio insular. El exterior
también ha potenciado sucesivos auges y declives económicos. Las gráficas
simuladas intentan expresar dichas oscilaciones económicas, causadas por
diferentes razones tecnológicas, económicas o políticas que hicieron decaer fuertes
desarrollos económicos, con graves repercusiones sociales que ahora se quieren
evitar con el turismo.
8
A mediados del siglo XX, la voluntad de abrir la isla al mercado turístico recibe
la generosidad e imaginación de muchos implicados y cuenta con el particular
entendimiento del poder político con los criterios artísticos empleados en las
intervenciones sobre varios rincones singulares de la naturaleza insular. El
presidente del Cabildo, José Ramírez Cerdá, en plena dictadura, emplea dinero
público para estimular un estilo colectivo de Arte-Naturaleza cuyo más destacado
representante e intérprete es César Manrique.
El resultado es la red de Centros de Arte, Cultura y Turismo del Cabildo,
incluyendo el más importante, la Ruta de los Volcanes, en el único Parque Nacional
creado a inciativa de la población local. La administración insular se convierte en la
principal empresa turística insular, a través de un peculiar proceso económico de
capitalización, logrando una importante fuente de ingresos por visitas que permitirá
generar mucho empleo público. Y, sobre todo, la red enseña una isla tan extraña a
los visitantes que acaba distinguiendo a Lanzarote de otros destinos turísticos, al
tiempo que refuerza la identidad cultural.
9
Pronto surge la sensación de que el éxito se escapa de las manos. Los años ’80
ven sometida la isla a una explosión urbanística que el nuevo poder insular,
democrático, intenta atajar mientras César y el movimiento ecologista siembran una
conciencia social que no ha dejado de crecer y animar posteriores debates. Así, el
Cabildo desarrolla un Plan Insular de Ordenación, tramitado y defendido por varios
partidos políticos, que resulta pionero en el Estado al realizar aportaciones de gran
calado y novedad en 1991:

El Plan adopta una visión integrada y unitaria de la isla
( y condiciona estilos arquitectónicos)

Plantea la capacidad de carga insular como un límite cercano.

Reduce expectativas de construcción, desclasificando más de 250.000
plazas turísticas previstas y limitando la ocupación del litoral a tres zonas
frente a la mitad prevista.
10
En 1997, la Unión Europea aprueba un proyecto para impulsar la Estrategia Lanzarote
en la Biosfera (L+B), hacia la sostenibilidad insular. Con ella se intentaba dar contenido a la
declaración en 1993 de la isla como Reserva e Biosfera por la UNESCO. La década se inició
con una leve crisis turística, pero en 1997 volvía a acelerarse la presión constructora. La
Estrategia L+B venía a preguntar si el futuro previsto para la isla sería mejor que el presente.
Y la opinión general fue que ‘no para la mayoría’, pero que sí generaría deterioros irreversibles
en la Isla.
La opinión pública fue concluyente, como se aprecia en la encuesta, y fijó la postura de
los partidos políticos. La intensa dinámica social surgida elevó la calidad técnica del debate
público, tensó la vida política y trasladó a la calle una discusión sobre la primacía del interés
particular o el general para temas urbanísticos, que tuvo su reflejo en los tribunales, donde
diversos propietarios habían denunciado la limitación a 10.707 nuevas plazas turísticas a diez
años (2010) impuesta por el Cabildo como primera medida para dar ocasión a la población de
repensar el modelo de desarrollo insular. Se necesitaba tiempo y serenidad para ‘articular la
inteligencia colectiva frente a la inteligencia personal’.
11
La dinámica social surgida con la Estrategia L+B impulsa el órgano de
participación de la Reserva de Biosfera (R.B.), de modo que, a la diversidad de
opiniones e inquietudes expresadas espontáneamente a través de un número
creciente de asociaciones y grupos en diversidad de foros, se superpone la
participación social reglada en el Consejo R.B., el cual comienza a tomar inciativas,
emitir comunicados y adoptar decisiones sobre proyectos trascendentales para la
evolución territorial y económica de la isla, de la Reserva de Biosfera, en un
momento en que el debate sobre la contención del crecimiento se extiende hoy al
ámbito canario.
Sin embargo, el fortalecimiento del tejido social no ha evitado una cierta
crispación por los desajustes entre las demandas ciudadanas para poner en
marcha el conjunto de propuestas de la Estrategia L+B, o el simple cumplimiento
de la legalidad en la avalancha de construcciones, y la incapacidad administrativa y
política para impulsar las primeras y resolver lo segundo.
EUFORIA
12
▼
Fase inicial del desarrollo, visitantes e inversores son bienvenidos,
pocos planes y mecanismos de control.
APATÍA
▼
Los visitantes se dan por sentado, los contactos entre residentes y
visitantes toman forma comercial, la planificación está dirigida
fundamentalmente al marketing.
ENOJO
▼
El punto de saturación está próximo. Los residentes recelan de la
industria turística, la administración trata de solucionarlo creando
infraestructura más que limitando el crecimiento.
ANTAGONISMO
▼
La irritación es abiertamente expresada, los visitantes son vistos
como la causa de todos los problemas, la planificación trata de
remediarlo, pero la promoción decrece y se deteriora la reputación
del destino.
Índice de irritación de Doxey (Murphy, 1984:124)
(Tomado de A.Santana (1997) Ed. Ariel. Col. Antropología y turismo)
Por ello, podemos decir que el éxito turístico y la alta conciencia social ha llevado a
la sociedad insular a un interesante conflicto de intereses, contradicciones y deficiencias
propias, más evidentes y mejor comprendidas que antes, acompañadas con reacciones
más o menos afortunadas para evitar un nuevo colapso económico. La duda es si
estamos a tiempo para evitar que la sociedad insular caiga del estadío 3 (ENOJO) al 4
(ANTAGONISMO) con respecto al turismo. El último dato de la encuesta Ecocanarias
distingue a Lanzarote del resto de Canarias como más templado en su valoración sobre
la relación entre el turismo y el medio ambiente. Lanzarote parece decir ‘Turismo sí, pero
bajo control’.
¿COMO CREE QUE INCIDE LA ACTIVIDAD TURISTICA EN
EL MEDIO AMBIENTE?
50
45
GRA N CA NA R.
40
TENERIFE
35
LA NZA ROTE
30
25
FUERTEVENT.
20
EL HIERRO
15
LA P A LM A
10
LA GOM ERA
5
0
M UY
F A V O R A B LE
F A V OR A B LE
N O T IEN E
N A D A QU E
V ER
D E F OR M A
N EGA T IV A
M UY
N EG A T I V A
D EPEN D E D EL
T U R ISM O
N S/ N C
Ecocanarias 2001, Gobierno de Canarias / Servicios Integrales Comunitarios S.L.
13
(En creación de patrimonio turístico –1997-2001-, estimación de N.Láiz, 2002, comunic. oral)
14
Lo cierto es que la Isla soporta una presión humana creciente cuando el grado de
humanización ya es patente en todos los órdenes, espacios y épocas del año. El
desierto se ha poblado de humanos y su cohorte de artefactos y técnicas merced a un
trasiego ingente de energía fósil, mercancías y personas que entran y salen de la isla.
Con su contraparte de residuos líquidos, sólidos y gaseosos vertidos al ambiente
insular o planetario a causa de estilos de vida irresponsables y tecnologías obsoletas.
El sistema insular actual equivale a Un bello portaaviones de lujo escorado por su
carga contaminante (A.del Val. 2000. Lanzarote, el papel de la crisis. Fundación César
Manrique). El 99% de la agua consumida procede de desalación de agua marina. La
energía eólica representa el 3 % del consumo total de energía, o el 17 % del consumo
por desalación .
De otro modo, la economía insular depende del turismo en más de ¾ partes, pero
no ha servido para potenciar la agricultura, sino un intercambio desigual, no sólo de
mercancías elaboradas por deshechos y residuos, sino de capitales, donde la sociedad
insular transfiere propiedades a cambio de salarios.
15
Agua, energía, residuos y transporte eran los cuatro sectores ambientales clave
de la Estrategia L+B y resultan definitorios del modelo occidental de vida. La isla
tiene que enfrentarlos para aplicar la mejor tecnología disponible y lograr el mínimo
impacto ambiental, si bien ello supondrá más que inversiones cuantiosas como ya
se realizan en la isla, con anterioridad a otras islas canarias.
Gestionar esas necesidades básicas de manera más eficiente y responsable
exige cuestionar hábitos administrativos y empresariales, conductas personales y
valores sociales. Lanzarote ya cuenta con una alta sensibilidad estética (paisaje) y
debe ampliar su coherencia ambiental al resto de los sectores. Este era el reto
lanzado por la Estrategia L+B en 1998. ¿Y hoy?
16
En todo caso, la implantación de la moratoria insular ha coincidido con
fuertes movimientos de capitales financieros, especialmente relacionados con la
Reserva de Inversiones de Canarias (R.I.C.) y con la entrada del Euro. Por ello, el
grueso de las plazas turísticas que se podían construir desde 1998 a 2010,
entrarán en oferta este año 2002.
En consecuencia, la presión humana ha crecido bruscamente, con la llegada
de población atraída por la fuerte actividad económica. Y, en paralelo, han crecido
los problemas sociales, laborales y ambientales. La moratoria insular turística se ve
ahora apoyada por iniciativas similares del Gobierno de Canarias, pero
enfrentamos tres niveles de incertidumbre:

Garantía de cumplimiento de la legalidad urbanística y turística.

Intervenir decididamente en el resto de programas de la Estrategia L+B.

Evitar nuevos desbordamientos de la capacidad de carga insular a partir de 2010.
17
Sugerencia del Cabildo Insular de Lanzarote al trámite de información pública del Avance de las Directrices de Ordenación General y del Turismo en
Canarias, 3726 Anuncio del 8 de octubre de 2001. BOC 2001 / 136, miércoles 17 de octubre de 2001.
Con posterioridad a 2010, la normativa urbanística insular permite la
construcción de varias decenas de miles de camas turísticas y varias decenas de
miles más de carácter residencial en zonas turísticas. Lanzarote necesita nuevas
herramientas para frenar esas presiones sobre un sistema insular ineficiente. La
meta es no construir ni una plaza turística más.
Por eso el nuevo Life se orienta a la superación de los obstáculos encontrados
en diversos ámbitos, como la falta de información insular, especialmente en
economía; en las carencias de los procedimientos administrativos regionales,
especialmente urbanísticos; en el marco legal y financiero canario con el que puede
maniobrar la isla para, incluso, rescatar derechos edificatorios en suelo urbanizable
consolidado. O las posibilidades de aplicar fiscalidad ambiental insular para inducir
cambios en las estrategias empresariales y en los estilos de vida de residentes.
18
Para acometer esta exploración de nuevas líneas de actuación, financiación
y fiscalidad para la Reserva de Biosfera, se están realizando diversos estudios que
amplíen el conocimiento sobre los márgenes de maniobra y mejoren las
herramientas del Cabildo para intervenir en el ordenamiento territorial y urbanístico.
Dentro de ello, los análisis permitirán extraer conclusiones para abordar la
posibilidad de plantear medidas fiscales con las que implicar al turismo actual en la
preservación de la isla tal y como la conocemos, evitando las nuevas
construcciones; y medidas para orientar el consumo racional de recursos naturales
y generación de residuos. Estas posiblidades requieren acuerdos con el Gobierno
de Canarias, que posee la capacidad legislativa necesaria.
19
Así pues, esta Reserva de Biosfera, a principios del siglo XXI, intenta cambiar la
mentalidad y legislación desarrollista, para lo que necesita implicar a varios niveles
administrativos
del
Estado
de
las
Autonomías.
Además
pretende
cambiar
el
comportamiento de las personas, no sólo en relación con el despilfarro de agua, energía,
etc, sino intentado superar una cultura individualista y consumista que no conduce siquiera
a la satisfacción1 de quienes disponen de medios para vivirla en plenitud.
Como Reserva de Biosfera, Lanzarote acierta al extender la conciencia de los
límites y unidad del sistema insular, y lo hace también al impulsar líneas de ordenación
territorial, participación social, transición cultural, conservación y desarrollo, turismo
sostenible... pero al hacerlo se convierte, como buen representante de un planeta en crisis,
en una isla conflictiva que ha iniciado lentos procesos de transformación, de los que tanto
aciertos como fracasos serán de utilidad para la Red Mundial de Reservas de Biosfera
como laboratorio de la humanidad.
1
Durning, A.T., ¿Cuánto es bastante?, La sociedad de consumo y el futuro de la Tierra. Ed. Apóstrofe, Barcelona, 1994.
Cembranos, F. Bienestar, ecología y participación social, Intervención Psicosocial n. 5, Madrid 1993 (consultable en:
http://habitat.aq.upm.es/boletin/n3/afcem.html)
20
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