VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 1 2 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Memoria de resúmenes presentados 3 4 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 5 El Comité Organizador no se hace responsable por el contenido de ninguno de los resúmenes de las conferencias y ponencias presentadas en esta memoria 6 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 7 Conferencias Invitadas 8 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 9 Sismología histórica, al filo de la geofísica y la historia Aspectos metodológicos para su estudio Giovanni Peraldo Huertas Universidad de Costa Rica, Escuela Centroamericana de Geología gperaldo@geologia.ucr.ac.cr La disciplina de la Sismicidad Histórica, se ha visto como una rama de la Sismología, pues los resultados de su estudio generalmente han sido utilizados para fortalecer o apoyar estudios geofísicos. No obstante, casi nunca, salvo algunos trabajos, la sismicidad histórica no ha sido usada por las personas estudiosas de la historia como una disciplina que arroja luz a los estudios de cotidianidad, por ejemplo, o de estructura socioeconómica de una determinada sociedad en un tiempo definido, que podría coadyuvar eficientemente en estudios históricos sobre riesgo y vulnerabilidad comparada. Entonces, la metodología para estudiar dicha disciplina debe contener, en primer lugar, un análisis histórico preciso que reconstruya el escenario socioeconómico impactado, que sirva para depurar los datos macrosísmicos que sean calculados por medio de relaciones empíricas y así el razonamiento geofísico que ha de hacerse al dato así obtenido pueda ser mejor sustentado y por tanto llegar a conclusiones más firmes sobre el determinado sismo que se estudia. Entonces, el tratamiento histórico depura la información sismológica que debería ser tratada a partir de razonamientos geofísicos. En este sentido, lo primero que se debe hacer una vez obtenida la información desde diferentes fuentes, es el cuestionamiento histórico a los diferentes discursos documentales (sean estos cartas, periódicos, crónicas, pinturas, fotos, entrevistas, entre otros), no es prudente confiar enteramente en el contenido de un manuscrito si este no se compara, hasta donde sea posible, con otros manuscritos que describan el mismo evento. Esta comparación identificará elementos comunes, o bien elementos distorsionados por manipulación conciente o inconciente desde la persona que escribió el documento. 10 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Así se pueden identificar elementos que llegan a inducir errores durante el tratamiento geofísico, tal como: a) cambios o errores de fecha, b) diferentes discursos políticos en torno al evento, c) percepciones que distorsionan las consecuencias del evento, e) información secundaria, de personas que cuentan lo que ocurrió basado en otras fuentes de información, entre otros aspectos. Una vez depurados los datos desde el estudio histórico, estos serán analizados para reconstruir las consecuencias del sismo. Es así que lo más importante es calcular intensidades para las poblaciones que cuentan con información pertinente, para así construir mapas que muestren la distribución de intensidades. Esto nos sugiere fuente sismogeneradora, magnitud, entre otros. Dependiendo de la densidad de información analizada, se deberá cumplir con una norma científica cual es indicar la confiabilidad de la información obtenida, pues se le debe alertar al lector que use los datos, cuanta confiabilidad debe darle a ellos, más si realizará algún análisis con esa información. Esta escala de confiabilidad ya ha sido usada por CERESIS en sus catálogos de sismicidad histórica para América del Sur. Inspirados en ese tratamiento Peraldo y Montero (1999) clasifican la información sismológica histórica de América Central en niveles de confianza. La información así depurada ya estaría lista para ser usada en tratamientos de amenaza sísmica, para planes de ordenamiento territorial. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 11 Valdivia 1960: El gran terremoto Carlos Rojas Hoppe Universidad Austral de Chile, Facultad de Ciencias crojas@uach.cl Al igual que muchas otras ciudades chilenas y latinoamericanas, Valdivia ha sido afectada por varios sismos de diversas magnitudes y diferentes efectos a lo largo de su historia de 460 años. El 22 de mayo de 1960 tuvo lugar en el sur de Chile el sismo de mayor magnitud habido en el planeta en tiempos modernos (Mw 9,5), liberando el 35% de la energía de todos los terremotos del siglo XX. En sentido estricto, se trató de un complejo de procesos naturales encadenados e interrelacionados, incluyendo no sólo diversos sismos, sino también un tsunami, movimientos de remoción en masa, la obturación del desagüe final de un sistema de lagos andinos interconectados y una erupción volcánica en la cordillera de los Andes. Una de las consecuencias geomorfológicas más destacadas del sismo fue una subsidencia del terreno en aproximadamente 1,8 m, en parte debido a compactación de sedimentos arenosos y arcillosos y en parte al movimiento cortical epirogénico. El sismo tuvo especial relevancia por la diversidad de fenómenos acompañantes, la distribución espacial de los efectos y la cuantía de los daños. La zona afectada abarcó una superficie de 150.000 km2, comprendida entre Concepción y el extremo meridional de la isla de Chiloé, generando una intensidad máxima de X en Valdivia y Puerto Montt. El sacudimiento perceptible alcanzó a aproximadamente tres minutos y medio. Considerando los efectos directos del terremoto, del tsunami que lo siguió minutos después y de la inundación extrema causada 2 meses más tarde por la descarga de las aguas represadas en el lago Riñihue, la mayor diversidad y cuantía de los daños se produjo en la ciudad de Valdivia y su entorno. Este complejo evento sísmico es un ícono para la sismología mundial, pero sobre todo constituye un hito en la historia de la ciudad. El número de víctimas fatales para la región afectada se estima en 12 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA aproximadamente 5.700, no reflejando la verdadera catástrofe que se vivió. Los siguientes datos resumen parte de los efectos habidos: daños en la región avaluados en 800 millones de dólares; 450.000 viviendas y otras construcciones dañadas (aproximadamente 10% de ellas sin posibilidad de reparación); 15.000 hectáreas de vegas perdidas por hundimiento del terreno e inundación consecuente en la zona de Valdivia. En la ciudad de Valdivia la destrucción fue estimada en un 80%, con grandes daños en viviendas, edificios, calles e infraestructura urbana (90% de las industrias y 80% de los locales comerciales afectados en mayor o menor grado, 55% de las viviendas averiadas), apreciándose una interesante distribución espacial de los efectos en relación a los suelos de fundación. La mayor destrucción se produjo en la parte occidental de la ciudad, donde abundan las zonas bajas de relleno artificial, y a lo largo de ambas márgenes del río. El fenómeno sísmico se describe y analiza en sus 3 componentes: el terremoto, el tsunami, y la posterior inundación de la ciudad (el “Riñihuazo”). A fin de entender las singulares respuestas de la ciudad al fenómeno sísmico, se describen las características geológico­geomorfológicas de Valdivia, analizando críticamente el uso actual del suelo y la expansión de la ciudad. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 13 Historia comparada de los sismos de Caracas: Dinámica y variabilidad de las intensidades Rogelio Altez Ortega Universidad Central de Venezuela, Escuela de Antropología Facultad de Ciencias Económicas y Sociales ryaltez@yahoo.es El proceso histórico y simbólico que construyó y desplegó las diferentes formas de interpretar y convivir con los terremotos en los contextos americanos, tuvo sus inicios desde comienzos del siglo XVI, cuando los primeros intentos españoles de control y explotación de estos confines ya compartían la escena con los sismos destructores. A partir de allí, ruegos, procesiones, vírgenes, santos y héroes saldrían al paso de la naturaleza para servir de intermediarios entre la dinámica de los fenómenos y la mirada de la cultura. Cuando la expansión ibérica conformó la sociedad colonial del Nuevo Mundo, lo hizo a partir de derroteros concretos que perseguían la búsqueda de metales preciosos, así como la posesión de territorios fértiles para la supervivencia y el alimento de un mercado cerrado que dirigía sus riquezas minerales y agrícolas a favor de la metrópoli española. Todo ello contribuyó a la implantación de poblados, villas y ciudades anclados en (o cercanos a) valles intra o piemontanos, o bien asociados a fuentes fluviales que abastecieran a sus habitantes. Pronto, aquel ensayo de ocupación construyó una larga cadena de poblaciones asentadas en zonas de riesgo geológico, hidrometeorológico y, especialmente en el caso de muchas regiones hoy venezolanas, de amenaza sísmica. Tal ha sido la situación histórica y geofísica de Caracas, ciudad que capitalizó a través del tiempo el desarrollo y expansión territorial de lo que actualmente es Venezuela, ya desde muy temprano en el siglo XVII. La atención a los fenómenos naturales con los que la región ha convivido durante siglos, en consecuencia, ha oscilado entre las decisiones institucionales, la comprensión cultural, la interpretación científica, y la supervivencia a los 14 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA embates eventualmente destructores que el comportamiento regular de la naturaleza ha desplegado sobre estos territorios. Para el caso de los terremotos, la mirada con la cual la sociedad ha enfrentado a los temblores ha recorrido esos mismos derroteros, de la mano de sismos destructores que han ofrecido la oportunidad de manifestarse al respecto. La convivencia con los temblores, algo que ha acompañado a la historia y cotidianidad de estas latitudes y de esta sociedad, exhibió distintas formas de relacionarse con los terremotos, formas que fueron cambiando en tanto se transformaba simbólica y semánticamente la propia sociedad. Una mirada a la historia sísmica de Caracas y a la reevaluación de sus intensidades permitirá comparar a los eventos entre sí y a la respuesta histórica (y con ello heterogénea), de la ciudad en cada caso en particular, así como también servirá de ejemplo metodológico a las investigaciones que desde la sismología histórica asignan valores de intensidades a los eventos analizados. El señalamiento de una necesaria transdisciplinariedad en la mirada sismológica que investiga sobre los terremotos del pasado, encuentra en intentos como estos las aproximaciones características al respecto. Tomando como caso de estudio al casco central de la ciudad de Caracas (la única zona que cuenta con registro urbano desde su fundación a finales del siglo XVI), se realizarán evaluaciones y reevaluaciones de las intensidades de los sismos destructores de su historia, con el objeto de comprender la distribución de esas intensidades, así como las condiciones contextuales que las determinaron. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 15 Terremoto de 1812: Historia de sus interpretaciones sismológicas y análisis de sus efectos macrosísmicos a través de métodos estadísticos. Christl Palme, José Choy, Carlos Guada, Stephanie Klarica Universidad de los Andes, Mérida, Laboratorio de Geofísica palme@ula.ve En los últimos quince años se han dado cambios importantes en las interpretaciones sismológicas de algunos de los grandes terremotos históricos en Venezuela. Es importante revisar las diferentes hipótesis y buscar nuevos aportes documentales, metodológicos y evidencias geomorfológicas para así lograr una visión certera de lo ocurrido desde el punto de vista sismológico. En vista de la conmemoración de los 200 años del terremoto mas destructor que ha ocurrido en Venezuela, es oportuno revisar las diferentes interpretaciones sismológicas que se han dado a este evento. En particular se presentará un análisis publicado recientemente, en el cual se aplican métodos estadísticos para analizar los efectos macrosísmicos del terremoto. Se explicará brevemente el procedimiento utilizado y se presentarán los resulta­ dos. 16 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 17 Ponencias 18 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 19 Los terremotos de 1674 y de 1894 y la amenaza sísmica del Sur del Lago de Maracaibo (The 1674 and 1894 earthquakes and the seismic hazard in the southern area of the Maracaibo Lake) R. Aranguren1, L. Ramírez2, J. Choy1, C. Palme1 y C. Guada1 de Geofísica y 2Grupo de Investigaciones de Historia de las Regiones Americanas. Universidad de los Andes, Mérida reinaj@ula.ve 1Laboratorio Introducción Generalmente, los estudios de riesgo sísmico en el suroeste de Venezuela se concentran en la amenaza a la cual están expuestas las ciudades que se ubican dentro de la cordillera andina. Sin embargo, el estudio de los sismos históricos muestra que en caso de ocurrir un terremoto de gran magnitud en los Andes venezolanos, la subregión sur del lago de Maracaibo, especialmente el piedemonte, puede sufrir daños severos debido a sus particulares condiciones topográficas y geológicas. En este trabajo se presentan algunos aspectos nuevos acerca de los dos terremotos históricos más grandes ocurridos en los Andes venezolanos, los de 1674 y 1894, incluyendo las dramáticas consecuencias para los cultivos en la zona. Esto proporcionará nuevos indicadores para la reevaluación del riesgo símico en el sur del lago. Sismo del 16­01­1674: En el trabajo de Palme et al. (2005) se determinó una magnitud de aproximadamente 7,4 MIw ubicándose el centro de intensidades en la cercanía de 8,95°N y 70,95O°E, en algún lugar entre las ciudades de Trujillo y Mérida, ligeramente al noroeste de la traza de la falla de Boconó. Estos valores son solamente una aproximación cruda porque únicamente se disponen de información sobre unos pocos puntos de intensidad. Además, estudios paleosismológicos mostraron evidencias de este sismo en el páramo de Mucubaji (Audemard et. al. 2008). Desde entonces surgió la interrogante de si se trataba de un sólo sismo o de varios, ya que la referencias mencionan 20 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA temblores desde el principio de diciembre de 1673. Recientemente se ha descubierto información con la cual queda perfectamente claro que el evento principal que destruyó a Trujillo y Mérida fue el que ocurrió el 16 de enero a las tres de la tarde. Los demás temblores que reportan los documentos son precursores o réplicas. Igualmente, se reporta que no hubo personas fallecidas en Mérida, lo que es compatible con la intensidad 8, asignada a la ciudad de Mérida en el trabajo de Palme y Altez (2005), confirmada mediante la relectura de los informes del legajo 202 de la Audiencia de Santo Domingo y de la relación del Procurador de Mérida Gamez y Castillo (Samudio 1985). Igualmente, estos datos permiten tener una visión completa de la situación vivida en la región del sur del lago: terremotos, e inundaciones con barro que cubrieron grandes extensiones de haciendas de cacao. Esto ocurrió en todos las llanuras de los ríos desde El Pocó hasta el Escalante. De acuerdo con los testimonios asentados en el legajo 202 y el documento de Gamez y Castillo, se infiere que los sucesos fueron los siguientes: En la llanura “se arrancaron los árboles de raíz” (licuación del suelo) y en la parte alta se produjeron grandes movimientos de masa que represaron los ríos que luego se abrieron paso arrastrando grandes cantidades de barro hacia las planicies “inundando” las haciendas de cacao. De acuerdo con Ramírez (2011) las riadas ocurrieron semanas después del sismo con la entrada de las lluvias. Sismo 28­04­1894 En este terremoto ocurrió un fenómeno similar al anteriormente mencionado. De acuerdo con Lares (1894) y Febres Cordero (1929) en la depresión de Onia se cayeron los árboles “de cuajo”, a este fenómeno se le han asignado intensidades muy elevadas (hasta 11 MM) y, por consiguiente el epicentro se ha localizado cerca de esta región. Esta valoración es infundada, debido a que se trata de un efecto de sitio, una licuación, la cual puede ocurrir a partir de intensidad 8 o 9 de acuerdo con la escala ESI07. Nuevos cálculos utilizando el método de Bakun y Wentworth han dado como resultado para el centro de intensidades 8,58N 71,54OE (investigación en proceso), ubicado en un lugar cercano a la falla de Boconó. En ese sentido, es preciso expresar que VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 21 los efectos de licuación y de lateral spreading afectaron la región comprendida entre El Vigía y Santa Bárbara del Zulia. En Brun (1894) y la prensa de la fecha se reportan daños ocasionados a la línea del ferrocarril cercana al piedemonte: durmientes separados, rieles doblados y arboles caídos. Otros indicadores de un alto potencial de licuación son los niveles freáticos muy superficiales, los cuales se evidencian en los recientes acuíferos, y la presencia de varios cuerpos de agua tipo ciénaga cartografiados en los mapas antiguos de los años 1898 y 1928. Amenazas sísmicas en la región del Sur de Lago: Los terremotos de magnitud > 7 en la cordillera de los Andes constituyen una amenaza para la región del sur del Lago de Maracaibo por los siguientes fenómenos: ­ Movimientos de masas en las cabeceras de los ríos, que podrían resultar en lagunas de obturación las cuales causarían deslaves e inundaciones ­ El alto potencial de licuación de los suelos del Sur del Lago del Maracaibo, que representa una amenaza para edificios, carreteras, tuberías, puentes etc. Los efectos de licuación ocurren no solamente en la región epicentral sino dependiendo de la magnitud del evento hasta a 150 km desde el epicentro para un evento de magnitud 7 (Rodríguez et al., 2002). Adicionalmente, se debe considerar la presencia de fallamientos inversos a lo largo de todo el piedemonte nor­occidental, cuya actividad sísmica se desconoce. Posiblemente tienen tiempos de recurrencia muy largos, sin embargo, representan una amenaza para los suelos y las construcciones del Sur de Lago de Maracaibo. 22 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Comentarios acerca del terremoto de La Grita 03­02­1610, estado de las investigaciones (Commentaries about the La Grita earthquake 03­02­1610, state of research) C. Palme1 palme@ula.ve, R. Aranguren1 reinaj@ula.ve, A. Leal2 aleal@funvisis.gob.ve, J. Choy1 choy@ula.ve, C. Guada1 carlosg@ula.ve 1Laboratorio de Geofísica, Universidad de los Andes Mérida, 2Funvisis, Caracas Introducción El terremoto de La Grita del 3 de febrero de 1610 es uno de los grandes terremotos en el occidente de Venezuela para el cual todavía existen incertidumbres y diferencias de opiniones en lo que se refiere a sus características sismológicas. En el presente trabajo se trata de resumir el estado de conocimiento y se agregarán algunos elementos nuevos que pueden ayudar a definir algo mejor las coordenadas del centro de intensidades y la magnitud. Se dan por conocidos los detalles de los hechos relatados por el Fray Pedro Simón acerca del terremoto, un excelente resumen de estos y de las interpretaciones que se han dado, se encuentra en el notisismo de Laffaille (2011) que fue publicado el 25 de octubre. Otro documento publicado sobre el sismo, pero no tan difundido, es la carta de Don Joan de Aguilar (1611, puede ser consultado en el Sistema de Teleinformación de Sismología Histórica de Venezuela STSHV) en la cual habla de la destrucción de La Grita y que en el ¨mismo temblor¨ se había producido un ¨bolcan¨ muy grande que ¨abrió unas sierras¨ y que descubrió una mina de cobre muy gruesa e importante. El documento no especifica el sitio del ¨bolcan¨ Otros documentos conocidos son aquellos que mencionan un temblor y daños en San Cristóbal en un año no definido después de 1597. (STSHV) VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 23 Interpretaciones Interpretaciones de estas descripciones se encuentran publicadas por los siguientes autores: Fiedler (1961 y 1972), Cluff y Hansen (1969), Lugo (1995), Ferrer y Laffaille (1998), Singer (1998) y Palme et al. (2005). Estos trabajos fueron completados por los estudios de una trinchera cerca de La Grita por Audemard (1998). Nuevas fuentes históricas encontradas Un monje de la orden de Santo Domingo, fray Joseph Martines de Solis, declaró el 13 de marzo de 1610 en Altamira de Cáceres de Barinas haber visto grandes movimientos de masa en los términos de La Grita, Mérida y San Cristóbal que habían ocurrido quince días antes de haber pasado por la región proviniendo de Santa Fe de Bogotá, además informa que con los temblores se habían asolados la ciudad de La Grita y la villa de San Cristóbal con un número de muertos en La Grita y sus alrededores de mas que 80. Por otra parte se halló en la colección de Los Andes varios documentos con fechas de 1610 o 1611 que hablan de las minas de cobre descubiertas por un “volcán” grande que se produjo por los temblores en el valle de San Bartolomé en un sitio llamado Lomas de los Vientos. El sitio “Lomas del Viento” se consiguió muy cerca del páramo del Zumbador entre La Grita y San Cristóbal. Reinterpretación de las intensidades. La Grita: dado el grado de destrucción de las casas en La Grita descrito por Fray Pedro Simón se puede afirmar que muchas o incluso la mayoría sufrieren daños de grado 5, suponiendo una vulnerabilidad alta de clase A (mayor vulnerabilidad) esto correspondería, de acuerdo a la escala EMS98. a una intensidad entre 9 y 10. Esto explica también el gran número de muertos (60­80). San Cristóbal: es seguro que en San Cristóbal hubo destrucción, pero es difícil saber el grado por la confusión con el sismo ocurrido anteriormente, sin embargo el sacerdote Joseph Martines menciona como poblaciones destruidas 24 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA explícitamente San Cristóbal y La Grita no menciona por ejemplo Mérida a pesar de haber tenido que pasar por ella en su viaje, tampoco se mencionan muertos en San Cristóbal. Por estos motivos planteamos que la intensidad en San Cristóbal ha sido mínimo 7 pero podría haber llegado muy bien hasta a 8. Bailadores: La escala ESI07 dice en relation a la intensidad 8 ¨small to moderate landslides are widespread in prone areas, ...where equilibrim is unstable their size is sometimes large (105­106 m3). Landslides can occasionally dam narrow valleys causing temporary or even permanent lakes¨.Quiere decir a partir de intensidad 8 se podría haber producido un fenómeno como el de Bailadores y el reducido número de muertos en Bailadores surgiere una intensidad menor a la de La Grita por esta razón proponemos una intensidad mínima 8 y máxima 9... Una argumentación parecida se puede aplicar a la situación en la Loma del Viento. La zona de los grandes movimientos de masa se extendió por lo mínimo desde el paramo del Zumbador hasta Bailadores, una distancia de aproximadamente 45 km. Aplicando el método de Bakun y Wentworth (Choy et al. 2009) a estas intensidades se obtuvo un centro de intensidades de 8,15˚N y 71,95˚O y una magnitud de 7 MIw. Conclusiones: Año del evento, 1610: no hay duda sobre el año del evento mayor, hay tres fuentes que coinciden con este año. Fecha y hora del evento: 3 de febrero a las 3 de la tarde. El único autor que relata este dato es el fray Pedro Simón, no hay motivo de desconfiar de la información. Localización del centro de intensidades y de la isosista 8: el centro de intensidades se ubicó muy cerca de La Grita, de acuerdo con el cuadro de daños y efectos cosismicos descritos arriba. La isosista de intensidad 8 podría haberse extendido desde el noreste de Bailadores hasta cerca de San Cristóbal, una distancia del orden de 70 km. No tenemos ninguna información acerca de daños en sitios fuera de los valles centrales de los Andes. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 25 Magnitud: una magnitud alrededor de 7 parece razonable para explicar todos los fenómenos observados Los análisis de este trabajo sugieren que el terremoto de 1894 no fue una repetición del de 1610, las áreas afectadas por este último se encuentran totalmente al suroeste de aquellas que fueron afectados por el sismo de 1894. 26 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Lo que el sismo se llevó y en papeles nos dejó. Contribución documental al estudio del terremoto de Lobatera del 26 de febrero de 1849 (What the earthquake took away and on papers left behind. Documentary contribution to the study of Lobatera earthquake of February, 26, 1849) Alejandra Leal Guzmán1 aleal@funvisis.gob.ve; Carlos Escalona Villalonga2 syahoram@gmail.com, Sor Martínez Silva3 sormartinez@gmail.com. 1Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas 2Escuela de Historia­UCV 3Escuela de Antropología­UCV Al igual que la cultura, el suelo donde ésta se desarrolla es dinámico y en constante movimiento. Los sismos, no sólo implican un movimiento tectónico, sino que a su vez, afectan los pilares de la sociedad, sacudiendo desde lo material hasta lo más profundo del pensamiento. Se trata pues de eventos que modifican tanto lo material como lo simbólico y que dejan huellas proporcionales a su fuerza intrínseca. Para el caso de los terremotos históricos, la documentación que da cuenta de su ocurrencia es parte significativa de esa huella sísmica, además de constituir la materia prima de la sismología histórica. No obstante, la recopilación y análisis de estos registros ­a veces escasos y/o herméticos­ suele ser una tarea tan ardua que son muchos los terremotos históricos venezolanos que permanecen indocumentados, solapados o escasamente estudiados. El sismo que sacudió Lobatera, la mañana del 26 de febrero de 1849, no escapa a lo anterior. Este importante evento se encuentra reseñado, pero sin suficiente respaldo de fuentes primarias, en los catálogos sísmicos más representativos (Centeno Graü, 1949­1969; Grases et al., 1999). Recientemente, la investigación histórica adelantada por los autores en el Archivo General de la Nación y la Biblioteca Nacional, ha permitido recopilar diversos registros inéditos, relativos al sismo de Lobatera de 1849; siendo el propósito de este artículo presentar dichos aportes documentales, acompañados de un breve análisis y de los comentarios pertinentes. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 27 Historia de la instrumentación sísmica en Venezuela y la evolución del catálogo sísmico (Seismic instrumentation history in Venezuela and the evolution of seismic catalog) Gloria Romero1 gromero@funvisis.gob.ve, Raquel Vásquez1 rvasquez@funvisis.gob.ve, Miguel Palma1 mpalma@funvisis.gob.ve, Leonardo Alvarado1 lalvarado@funvisis.gob.ve, Herbert Rendón1 hrendon@funvisis.gob.ve, Carolina Granado1 cgranado@funvisis.gob.ve, Alejandra Leal Guzmán2 aleal@funvisis.gob.ve, José A Rodríguez2 jrodriguez@funvisis.gob.ve 1Funvisis, Departamento de Sismología 2Funvisis, Departamento de Ciencias de la Tierra Algunos investigadores hacen una reflexión sobre el estudio histórico de los terremotos en Venezuela y refieren que estos se tornaron disciplina a partir del siglo XIX. Sin embargo, documentos de la época de la colonia (Archivo de Indias) detallaron los principales eventos que afectaron regiones americanas y de allí parte la historia del Catálogo Sismológico Venezolano con el sismo del 1 de septiembre de 1530. En Venezuela los investigadores de la historia asumieron con responsabilidad la compilación de documentos donde se anota la observación y el de las destrucciones causadas por los terremotos e iniciaron la compilación de catálogos de terremotos, apareciendo el término “Seismología” el cual significa ciencia de la agitación o ciencia de los terremotos, siendo utilizado formalmente el termino Sismología hacia mediados del siglo XIX. En este trabajo se presenta un recuento histórico sobre la instrumentación sísmica en Venezuela y la elaboración y evolución del catálogo histórico – instrumental, tomando en cuenta que desde 1940 hasta nuestros días, la sismología ha experimentado un rápido desarrollo que se puede dividir en dos grandes apartados, el primero estudia los mecanismos de la generación de los terremotos y el segundo la naturaleza de la propagación de las ondas sísmicas en la tierra. En ambos casos, el desarrollo comprende los aspectos teóricos y de observación. 28 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Con este trabajo se pretende mostrar en retrospectiva realizada por algunos autores estudiosos de la historia sismológica, donde se cita muy especialmente, al profesor Henry Salas, quien relata sobre los primeros equipos de medición sísmica en Venezuela y los primeros registros de sismogramas, lo cual nos permite conocer los pasos de la evolución de la sismografía y el estado actual del proyecto Red Sismológica Nacional. También se resalta en este trabajo, el valioso aporte realizado por los primeros especialistas que abordaron el tema sismológico, donde se destaca Melchor Centeno Grau (1867­1949) quien elaboró el primer catálogo de terremotos en Venezuela y Gunther Fiedler, investigador, quien asume la responsabilidad desde 1950 para conducir las riendas del primer Instituto sismológico venezolano ubicado en el Observatorio Cagigal e insistió en la necesidad de reevaluar los terremotos del pasado, instrumentados sismológicamente para hacer estudios y abrir paso a la sismología experimental en Venezuela, legado que lleva consigo a la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológica Funvisis. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 29 Efectos de sitio recientes e históricos en la zona del Terremoto de Maule, sur de Chile, 2010 (Recent and historic site effects in the region of the maule, southern Chile, 2010 earthquake) Schmitz, Michael1 mschmitz@funvisis.gob.ve, Leyton , Felipe2 fleyton@utalca.cl, Soto, Víctor2, Ramírez, Paola3 pramirez@sernageomin.cl, Campos, Jaime4 jaime@dgf.uchile.cl, Miller, Matt5, Tassara, Andrés5 andres­ tassara@udec.cl 1Funvisis, Caracas, Venezuela 2Universidad de Talca, Talca, Chile 3Sernageomin, Concepción, Chile 4Universidad de Chile, Santiago de Chile 5Universidad de Concepción, Concepción, Chile Después del terremoto de magnitud 8,8 Mw en la costa de Maule, sur de Chile, el 27 de febrero de 2010, el Centro Regional de Sismología de América del Sur (CERESIS), con fondos de la UNESCO, envió una comisión de reconocimiento a la zona afectada. Parte de las evaluaciones efectuadas a 10 días de haber ocurrido el evento se enfocaron en la evaluación de los efectos de sitio, ya que las ciudades más afectadas se ubican en cuencas sedimentarias, propensas al desarrollo de amplificaciones generadas por la presencia de los sedimentos. En este trabajo se presentan las características principales del subsuelo en las tres ciudades Concepción, Talca y Santiago con un resumen de las observaciones realizadas en campo respecto a las condiciones del subsuelo y su posible relación con los daños causados por el terremoto. En la ciudad de Concepción, Simón Rodríguez ha planteado por primera vez en Sudamérica una relación entre las condiciones del suelo y la ocurrencia de daños generados por el terremoto de 1835. Rodríguez realizó una evaluación post­terremoto, en la cual analiza el comportamiento de los materiales de construcción utilizados, así como las condiciones del suelo local con el fin de indicar recomendaciones para la remoción de los escombros y la reconstrucción 30 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA de la ciudad. Estudios geotécnicos realizados en 1965 revelan la predominancia de depósitos de arenas y limos provenientes de los ríos Bío Bío y Andalién, intercalados con arcillas en los suelos de Concepción. Los daños generados en Concepción por el terremoto de Valdivia de 1960, permitieron determinar intensidades VII a VIII, junto con el mapeo de la variación dela calidad del suelo superficial base para la definición de microzonas para la ciudad de Concepción. El análisis de los daños sufridos por el terremoto de 2010, reveló que aproximadamente 80% de los edificios con daños severos se ubican en la zona correspondiente a depósitos fluviales del río Bio­Bío, con espesores de sedimentos entre 50 y 130 m y períodos predominantes entre 1 y 1,4 s. Estos daños se pueden explicar por un fenómeno de amplificación o resonancia, causado por la coincidencia del periodo predominante del suelo con el propio de las estructuras fundadas en ellos. La ciudad de Talca de más de 200.000 habitantes está ubicada en el límite oeste del Valle Longitudinal, que tiene un espesor de los sedimentos cuaternarios de 350 m debajo de la ciudad y un máximo de aproximadamente 500 m, sobre una planicie cuaternaria, compuesta principalmente por gravas de variable consolidación en la parte occidental, separada del resto del valle de un alto del basamento. Un recorrido rápido por la ciudad arrojó una gran cantidad de daños en edificaciones de mampostería no reforzada y adobe. Las estructuras más recientes tuvieron en general un buen comportamiento. Por el momento no se puede establecer una correlación entre la distribución de los daños y las condiciones del subsuelo. Para ello se recomienda el análisis de las mediciones de ruido ambiental realizadas, así como una recopilación de las perforaciones geotécnicas disponibles en Talca, para poder elaborar un modelo detallado del subsuelo que pudiera relacionarse con el levantamiento de los daños. La cuenca de Santiago está ubicada en la Depresión Central y tiene una extensión de aproximadamente 2.000 km2, rellena con depósitos cuaternarios provenientes de abanicos aluvionales, depósitos fluviales, depósitos de cenizas ignimbríticas pumicíticas, depósitos coluviales y conos de deyección, depósitos lacustres y depósitos de flujos de fluvio­torrenciales. La topografía de la cuenca es relativamente plana con pendientes muy suaves con VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 31 elevaciones entre 450 y 750 m. La información sobre el espesor de los sedimentos (entre 35 y 500 m, con una base muy irregular y con afloramientos rocosos de cerros) proviene principalmente de perforaciones de pozos de agua y estudios gravimétricos. Un primer modelo de microzonificación sísmica en el año 1972 propone una zonificación en tres clases basada en las intensidades de los terremotos de 1965 y 1971: gravas con intensidad 7, suelos eólicos y lacustres con intensidad 7­8, al igual que los suelos finos cementados por cenizas volcánicas. Basado en las intensidades del terremoto de 1985 se identifican zonas con intensidades 8 para los suelos finos del Noroeste, así como en los sectores sobre depósitos de Pumicita (Maipú) y depósitos del río Maipo (Puente Alto), intensidad 7 para el Oeste de Santiago sobre depósitos de gravas de los ríos Maipo y Mapocho, en los conos de deyección, disminuyendo a 6,5 sobre las gravas del río Maipo en las comunas de Las Condes y Vitacura. Las frecuencias fundamentales del suelo para Santiago se pueden asociar con los espesores de sedimentos, y todas las zonas con espesores de sedimentos mayores a 400 m corresponden a frecuencias menores a 1 Hz. Entre los edificios dañados y visitados por la misión CERESIS/UNESCO se encuentran dos edificios altos (aprox. 20 pisos) ubicados en la comuna Nuñoa en una zona con frecuencias naturales del suelo menores a 1 Hz, lo que corresponde aproximadamente a la frecuencia fundamental de los edificios. En Maipú se observaron daños en algunas edificaciones y un número considerable de muros perimetrales, concentradas en un área de aproximadamente 1 km2, caracterizada por frecuencias fundamentales menores a 0,5 Hz, y el la presencia de depósitos de pumicita. Un factor que puede haber incidido en la ocurrencia de daños pueden ser lagunas existentes en la zona antes de la construcción de las viviendas. Las evaluaciones de las condiciones de sitio demuestran que existe una base de datos muy diferente en los sitios estudiados. Se recomienda una recopilación de toda la información existente en las ciudades afectadas, con el fin de identificar las necesidades de levantamiento de datos de campo (geológicos, geofísicos y geotécnicos). En Santiago existe una gran cantidad de información respecto a la conformación del subsuelo. Sin embargo, esta 32 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA información está muy dispersa y debe unirse en un solo Sistema de Información Geográfico. La información histórica de sismos previos es una fuente importante de información que debe integrarse en la evaluación de los efectos se sitio del reciente sismo. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 33 Sinopsis del terremoto de Cúa del 12 de abril de 1878 (Synopsis of the Cúa earthquake of April 12, 1878) Miguel Ángel Morales Collazos Prevención de Protección Civil Miranda driesgopcmiranda@gmail.com Los Valles del Tuy se ubican dentro de una región sísmicamente activa controlada estructuralmente por un Sistema de Fallas conformado por la Falla de Tácata y la Falla de La Victoria, siendo la Falla activa precursora por referencia de los movimientos telúricos en esta área la Falla de Tácata (estructura geológica que presenta un plano oblícuo). Mayormente los suelos de esta región son limosos y arcillosos, lo cual aun día demanda la construcción de viviendas especiales. Dentro del registro histórico de eventos sísmicos relevantes en los Valles del Tuy es el sismo más antiguo del que se tiene información el del 11 de junio de 1641, reseñándose otros eventos similares en los años 1766 y 1812. Cúa, La capital del municipio Urdaneta, como ciudad tiene la particularidad de haber sido reubicada debido a la ocurrencia de movimientos sísmicos que afectaron sus previas locaciones (La primera capital denominada Santa Rosa de Marín fue devastada por el sismo de 1641). El 12 de abril de 1878 aproximadamente a las 8:45 pm se generó un fuerte movimiento sísmico con una intensidad aproximada de 6.3° en la escala de Ritcher y una intensidad equivalente de 8° en la escala de Mercalli. El epicentro de este terremoto pudo ubicarse entre las poblaciones de Cúa y Ocumare del Tuy, siendo destruida en ese evento la villa de Cúa y afectadas las poblaciones de Charallave, Ocumare del Tuy, Santa Teresa del Tuy, San Francisco, Tácata y San Casimiro. El registro total de afectaciones y pérdidas por este evento difiere según varias fuentes de información, siendo para esa época reseñado entre 400 a 2000 muertes (el censo del comerciante local Andrés de La Morena indica sin embargo una cifra no superior a los 70 fallecidos), el colapso total del templo (solo sobrevivió una columna y su capitel), centenares de viviendas colapsadas, y la devastación de las Haciendas: La Consolación, El Palmar, San Rafael, El Conde, Souza, Tovar, 34 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Mendoza, Calabozo, Piñate, Santa Bárbara y Oviedo y daños menores en las poblaciones aledañas previamente citadas. Reseñas sobre testimonios de los pobladores refieren la ocurrencia de hundimientos del terreno y el haber oído crujidos fuertes. El hecho de que este evento ocurriese pocos días antes de la semana santa y sucesos relacionados a un párroco local (José María Céspedes) le confirieron elementos sobrenaturales dentro de los pobladores. Luego de la devastación la población de Cúa recibió la visita del Presidente de la República Francisco Linares Alcántara quien recorrió las áreas afectadas, dándole a este evento una connotación nacional. Otro elemento de interés se presenta como un efecto co­ sísmico a la ocurrencia de este fenómeno, ya que como iniciativa para la asistencia de las personas afectadas el “Colegio Smith” conformó una Junta Benéfica de carácter voluntario que entre sus objetivos se planteó la construcción de un orfanato que diera hogar temporal a los niños huérfanos a causa del terremoto; dicha institución logró brindar asistencia no solo a los niños de la región ya que también recibía infantes de la ciudad capital. Un hecho poco conocido es que fue en ese orfanato donde se dio la primera consulta médica exclusivamente pediátrica en el país. De esa prospera ciudad cuyo desarrollo violentamente fue interrumpido luego del terremoto de 1878 sobreviven pocos vestigios heredados en la memoria de algunos pobladores. Los Valles del Tuy siguen siendo considerados una zona sísmicamente activa, sus suelos han seguido constituyéndose por sedimentos transportados por el río Tuy y sus afluentes (limos y arcillas), y su población ha olvidado en gran parte ese dinámico pasado sísmico que en más de una oportunidad afectó a las florecientes villas del Tuy y del cual el Terremoto del 14 de abril de 1878 es uno de lo eventos sísmicos más contundentes generados en el Estado Miranda. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 35 El sismo fronterizo de Cúcuta, del 18 de mayo de 1875 ¿accidente tectónico responsable?, indicios geológicos del posible accidente­fuente (The border earthquake of Cúcuta, 18 may 1875 ¿responsible tectonic accident?, geological evidence of possible accident­ source) Rodríguez, L. M1 lrodriguez@funvisis.gob.ve, Singer A1 y 2 singer.andre1@gmail.com, Rodríguez, J. A1 jrodriguez@funvisis.gob.ve, Audemard, F1 faudemard@funvisis.gob.ve y Leal, A1 aleal@funvisis.gob.ve 1Funvisis, Departamento de Ciencias de la Tierra 2Universidad Central de Venezuela, Escuela de Geología, Minas y Geofísica El 18 de mayo de 1875 ocurrió el terremoto de Cúcuta (Colombia), cuyo epónimo corresponde a la población donde hubo mayor registro de muertos y daños; sin embargo, este evento sísmico, por su impacto destructor, constituye un evento de dimención transfronteriza, cuya ubicación epicentral aún se mantiene en discusión. A más de un siglo de su ocurrencia, este terremoto sigue representando para la historia sísmica de la frontera colombo­venezolana un evento con mucho por discernir y analizar. Para algunos investigadores, el accidente tectónico­fuente responsable del mismo es la falla de Boconó, mientras que para otros podría ser el sistema de fallas de Aguas Calientes. Poblaciones fronterizas en ambos países fueron fuertemente afectadas. Pero la interrupción de las vías de comunicación y del servicio telegráfico del lado colombiano por los numerosos deslizamientos y derrumbes cosísmicos, dio origen a un movimiento de ayuda y solidaridad importante desde Venezuela hacia Cúcuta, al quedarse aislada esta ciudad de Bogotá de manera prolongada. Del lado venezolano, las descripciones históricas refieren a daños en las poblaciones de San Cristóbal, San Antonio, Ureña, Rubio, Capacho, La Mulata, San Pedro del Río y San Juan de Colón, mientras que del lado colombiano, se tiene además de San José de Cúcuta, al sector conocido como San Luis, San Cayetano, Villa del Rosario, Pamplona, Arboledas, Mundo Nuevo, Planadas (actualmente Concordia), Santiago y San Faustino. 36 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Previamente al evento principal, se estima que, entre el 16 y 17 de mayo ocurrieron tres ó cuatro sismos premonitores que afectaron a la población de Cúcuta. Otro dato importante a resaltar es que quizás este sismo no corresponde a un solo evento; en efecto, las crónicas señalan tres temblores seguidos, siendo el último él de mayor fuerza, y que la gente tuvo tiempo de devolverse a las casas y rescatar víctimas. Otros aspectos importantes de analizar en este evento, concierne a los efectos geológicos cosísmicos reportados en las crónicas de la época. Entre los más significativos esta la evidencia de reflujos momentáneos de los ríos Táchira y Pamplonita: En el río Pamplonita esta anomalía de drenaje cosísmica ocurre en el sector de Los Moros a la altura del puente San Rafael. El análisis de estos efectos cosísmicos y la integración de los mismos con datos paleosísmicos obtenidos del lado colombiano, permitirán una mejor comprensión sobre el accidente tectónico responsable de este evento tan importante para Venezuela y Colombia. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 37 Actuación de los multiplicadores del Aula Sísmica “Madeleilis Guzmán” en el municipio Carirubana, edo. Falcón (Periodo 2010­2011) Aisha E. Infante Departamento de Prevención de Incendios, Cuerpo de Bomberos Punto Fijo aishaelena@hotmail.com Actividades como la realizada en el año 2010, en la que nuestro municipio fue seleccionado para la ejecución del plan piloto de prevención sísmica y que fue implementado en dos escuelas modelo, sirvieron de pilar para que las autoridades educativas y personal del Cuerpo de Bomberos tomaran conciencia de los riesgos que representa un evento de ésta naturaleza y la afectación causante, identificando cierto desconocimiento en la comunidad en general acerca de qué hacer o a quien acudir en caso de sismos así como la vulnerabilidad presente en éstas zonas. Con el propósito de fomentar y mantener la conciencia ante la prevención sísmica en todos los niveles de la población y en especial la comunidad estudiantil, el Instituto Autónomo Cuerpo de Bomberos del Municipio Carirubana y el Instituto Universitario de Tecnología Bomberil, Núcleo Falcón, de la mano con Funvisis, llevan a cabo acciones como el Programa de Charlas en Materia de Prevención Sísmica a recintos hospitalarios, instituciones educativas, comercio en general y a la comunidad organizada, de igual forma los efectivos bomberiles que egresan de esta casa de estudios, tienen la opción en la prestación del servicio comunitario de desarrollar la información del aula sísmica “Madeleilis Guzman” mediante más horas de intercambio con los estudiantes permitiendo diversas actividades en la que el proceso de enseñanza aprendizaje resulta más favorable. Igualmente los inspectores adscritos al Departamento de Prevención de Incendios del Cuerpo de Bomberos de Punto Fijo, realizan las evaluaciones de riesgos a las estructuras físicas de las instituciones educativas para emitir los lineamientos de seguridad pertinentes pues un gran número de ellas tienen una data de construcción de más de 30 años y que se evidencia que no fueron tomados ningunos criterios de 38 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA sismorresistencia. El trabajo continua, la meta es llegar a toda la comunidad e incorporarlos a actividades donde todos los organismos de seguridad e instituciones sean participes, de cambiar el paradigma de que nuestro municipio es inmune a estos eventos. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 39 Experiencias comunitarias en prevención ante el riesgo sísmico en los municipios San Felipe e Independencia, estado Yaracuy (Community experience to the seismic risk prevention in the municipalities of San Felipe and Independencia, state Yaracuy) Erika Solano Dirección de Protección Civil y Administración de Desastres del estado Yaracuy solanoerik@hotmail.com La elevada vulnerabilidad de nuestro estado Yaracuy ha sido puesta de manifiesto durante los últimos eventos sísmicos que se han manifestado en nuestro país. Esto nos lleva a unir esfuerzo de instituciones educativas, consejos comunales, instituciones públicas y privadas y gobierno regional, a fin de crear conciencia en toda la población de lo que significa el riesgo sísmico y lo que debemos hacer ante los eventos de gran magnitud. Esta formación va desde talleres educativos sobre Prevención sísmica, autoprotección ciudadana, técnicas de evacuación hasta visitas guiadas a instituciones como la Fundación venezolana de investigaciones sismológicas Funvisis. Dos razones para preparar a la población yaracuyana: 1.­ Sistema de fallas geológicas que atraviesa nuestro Estado Yaracuy 2.­ Vulnerabilidad de sistema educativo, en virtud de que el 80% de la instituciones fueron construidas durante los años 1970 ­1980, según normas COVENIN construidas con las normas de 1.939, 1.947, 1.955 y 1.967, a saber, poca rigidez y resistencia a carga lateral, poca capacidad de disipación de energía y la presencia de columnas cortas que precipitan modos de falla frágil. experiencia como multiplicador de prevención sísmica: instituciones educativas de educación inicial básica y superior en los municipios San Felipe y Cocorote recibieron el taller de Prevención Ante el Riesgo Sísmico, lo que llevo a desarrollar dentro de las instituciones la iniciativa de realizar planes escolares de emergencias y el interés en culminar con simulacros de 40 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA evacuación. La población que recibió el taller fueron: Consejo Comunales 92 personas, Centros de Educación Inicial 200 niños, Instituciones Públicas del Estado como el Sistema de Emergencias 171 y Tránsito Terrestre e INCES 286 personas, los albergues ubicados en los municipios Nirgua, Bolivar, Manuel Monge y Veroes 145 personas, Instituciones de Educación I y II etapa 400 personas e instituciones de educación superior 313 personas. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 41 La autoprotección y la seguridad escolar como un valor en el curriculo de la escuela DR. Alberto J. Fernández (The self protection and school safety as a value in the curriculum at school Dr. Alberto J. Fernández) Rita Reyna EBNB Dr. Alberto J. Fernández Sociedad Ecológica Conservacionista Aragua (S.E.C.A) ritareynagutierrez@gmail.com En una sociedad dinámica, movida por los cambios tecnológicos, científicos y culturales ante la revolución de la política, economía, educación, la crisis de valores, la inseguridad social; es necesario unir esfuerzos para aprender y desaprender, para construir y derribar, es necesario que los cambios se asuman desde las escuelas. así pues el esfuerzo que aquí se presenta se enmarca dentro de las iniciativas que desde diversas instancias se realizan para apreciar la eficacia, la eficiencia y efectividad de la educación integral en las escuelas bolivarianas insertadas en el Programa Gestión de Riesgo y Desarrollo Sustentable patrocinado por la Sociedad Ecológica Conservacionista Aragua S.E.C.A. , quienes desde su fundación en 1972. Han tenido su gran meta ambientalista, ecologista y preventiva, además han dedicado muchos años a la formación de la comunidad y ahora a la educación en autoprotección dentro de las escuelas del municipio M.B.I. esta tarea abordada a partir de dos elementos : las características de los procesos de generación del conocimiento y de las peculiaridades del marco institucional en donde se desenvuelven, es decir cada escuela avanza según su nivel de compromiso según sus posibilidades y propios intereses. Estos elementos forman parte de la línea de innovación educativa, qué solo es posible a través de un conjunto de actores e interacciones condicionados tanto por las características del proceso de innovación mismo como por la estructura institucional que marca pautas y regula conductas. En concordancia con ello hablar de autoprotección como un valor en el currículo de la escuela bolivariana Dr. Alberto J Fernández, es reconocer esfuerzos, sistematización, 42 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA ensayo y errores, dedicación organización, preparación para modificar la propia estructuración, sus modos de hacer y de interactuar internamente; la autoprotección y seguridad escolar es un aprendizaje para la vida, es paulatino, tiene su propio ritmo, genera emociones propias es salud preventiva. La actividad de autoprotección y seguridad escolar como aprendizaje de equipo es evaluado desde diferentes esferas que pueden contrastar los resultados, la autoevaluación ,los expertos externos, y la evaluación de los usuarios y los observadores externos que acompañan todas las fases de la autoprotección y seguridad escolar permiten valorar, corregir y redimensionar el proceso. Por otra parte es imprescindible la incorporación del personal directivo al proceso de autoprotección y seguridad escolar para dirigir, organizar, planificar, comandar y guiar las operaciones de emergencia escolar. Así como verificar los elementos claves del proceso del ambiente y la estructura para hacer su mapa de riesgo y recursos. La incorporación del personal docente , para que extiendan la dinámica de autoprotección a sus estudiantes día a día, así como la enseñanza de la autoprotección y seguridad escolar desde el currículo básico a todas las áreas del conocimiento. Participación del personal obrero, administrativo y COMAPROA: esto permiten identificar, valorar, crear, organizar actividades con respeto, dinamismo y desde otra perspectiva sin excluir, cabe destacar que esta participación debe ser voluntaria, sus aportes son muy valiosos. Reunirse con frecuencia para escuchar y ser escuchados, intercambiar ideas, evaluar, reorganizar y empezar de nuevo. Planificar la estrategia de respuesta en caso de desastre, terremoto, incendio o tiroteo. Escribir los detalles, establecer responsables y encargados de cada actividad. Comunicar, informar, difundir, promocionar el evento (charla, taller, reunión o ensayo de simulacro). Formar brigadas de autoprotección y seguridad escolar (B.A.S.E) con estudiantes, docentes, obreros, administrativos, comaproa,( cooperativa de madres procesadoras). Para formar equipos proactivos con alto desempeño en las brigadas de, primeros auxilios, evacuación, vigilancia, prevención de incendios, apoyo, salud, patrulleros. Es importante capacitar las brigadas haciendo redes socio comunitarias con los VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 43 expertos: Bomberos, Dipren, policía comunal, Edupol, Protección civil Aragua, Corpo salud, Funvisis, Prevención del delito, 171 emergencias, s.e.c.a. a quienes le expresamos nuestro más sincero agradecimiento. Ustedes se preguntaran como insertar la autoprotección y la seguridad escolar con el curriculum de la escuela bolivariana pues simplemente lo integramos a todas las áreas es una acción permanente teórica práctica que forma hábitos disciplina y desarrolla habilidades y destrezas y permite tomar conciencia del espacio del momento y de sí mismo por ejemplo en el área de lengua investigamos , redactamos comunicaciones se usa un vocabulario técnico ,se usa el diccionario , se construyen poesías y cuentos , en matemática ubicamos fechas, leemos cifras , elaboramos planos , estadísticas, gráficos, y problemas de operaciones básicas, ciencia y salud, prevención primeros auxilios, mezclas, seguir instrucciones, se desarrollan los temas del agua, fuego, arena, entre otros.., historia, eventos anteriores, se indaga el contexto histórico comunitario, geografía, las fallas geológicas, los sismos, terremotos, ubicación en el mapa de Venezuela y mapamundi, en educación familiar y ciudadana : los valores socialistas, la autoprotección en el hogar, la escuela y la comunidad, educación para el trabajo: preparación de los incendios , manejo de los extintores , técnicas naturales contra incendio, pintar las flechas de evacuación, preparación de la mezcla para el incendio , diseño de insignias , elaboración de chalecos para las brigadas, educación física: las técnicas de evacuación y autoprotección ( posición fetal, filas , columnas) Es decir para la escuela Dr. Alberto J Fernández la autoprotección es un valor humanista es un verdadero eje transversal , es educación para la vida, es tomar conciencia ,es un servicio comunitario , es salud integral, es planificación y evaluación , es enseñanza y aprendizaje, es gestión ecológica, es educación integral, es enamorarse de la vida es motivación al logro, es acción preventiva , es pensamiento sistémico, es amar tu escuela , es sentir pasión por la educación integral, es compromiso social es de todos y para todos. 44 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Prevención sísmica en el estado Lara, Venezuela (Seismic prevention in Lara state, Venezuela) Lermit Figueira Universidad de Yacambú, estado Lara riesgossismos@hotmail.com Conocí el proyecto Taller de Aula Sísmica "Madeleilis Guzmán" un diciembre de 1999, y me cautivó. Comencé a dictarlo en enero de 2000 y lo he continuado haciendo hasta el presente. Desde el año 2002, en el marco del aniversario del terremoto del 26 de marzo de 1812, efectuamos las Jornadas de Prevención Sísmica en la Universidad Yacambú. Para las Jornadas del 2010 y 2011 (IX y X) tuvimos una asistencia de 730 y 820 personas, respectivamente. En mayo de 2011, con el apoyo de Funvisis y Protección Civil ­ Lara nos propusimos llevar el Taller de Prevención Sísmica a todos los institutos educacionales del estado Lara. Para ello hemos capacitado, hasta el 12 de octubre de 2011, a 191 bomberos, brigadistas y docentes como multiplicadores en Prevención Sísmica. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 45 Gestión Integral de Riesgo en espacios educativos, municipio Guanta Carmen Virginia Carrera Calzadilla carmenvcc@hotmail.com, Juana Amatima juanaguanta5@yahoo.es CMEB­Guanta Preparar a las comunidades escolares para la reducción de riesgo en caso de ocurrir evento adverso, es el Objetivo General que tiene la puesta en marcha de La Gestión Integral del Riesgo y el Sistema de Alerta Temprana en las Instituciones Educativas del Municipio Guanta, Estado Anzoátegui, la cual llegó para formar a ciudadanas y ciudadanos en prevención ante riesgos y/o eventos adversos naturales y antrópicos terrestres, acuáticos (fluvial­marítimo) y aéreos que puedan ocurrir en la familia, escuela y comunidad. En el Municipio Guanta es de vital importancia estar preparados y alertas en lo que a inundaciones se refiere, debido a la existencia de la “Quebrada la Culebra” y también por estar dentro de la Falla Geológica de Paria. En cuanto a la preparación que se ha estado recibiendo en las Instituciones Educativas, se describirá todo el proceso por el cual hemos logrado formar a la Comunidad Escolar en general, es decir, Personal Directivo, Docente, Administrativo, Obreros, Niños, Niñas, Padres, Representantes o Responsables, en Multiamenazas, autoprotección, eventos adversos y Primeros Auxilios, como una forma de contribuir para que todos estemos listos a la hora de suceder un Evento Adverso. 46 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Primer Encuentro de Experiencias Significativas de Misión Ciencia I (First Meeting of significant experiences Mission Science I) Irma González Unidad Educativa Estadal Rural “Volcadero”, Guanta – estado Anzoátegui. rosarito064@hotmail.com La Unidad Educativa Estadal Rural “Volcadero” se avoca a la prevención de riesgos y desastres naturales, entre las cuales mencionaremos: Inundaciones, Tsunamis, Terremotos, entre otros. Para llevar a cabo la prevención, los y las docentes implementaron: Talleres, Charlas, Simulacros y Proyectos de Aulas correctamente, orientándolos en cuanto a las medidas a tomar en caso de un evento socio natural. En la realización de estas actividades se evidenció que el espacio entre las filas de pupitres en los salones es muy angosto y que los alumnos colocaban sus morrales al lado del pupitre, representando esto una debilidad al momento de realizar desalojos. A raíz de estas observaciones, se establecieron las siguientes normas, en los salones de clases, sobre la ubicación de los morrales y su utilización durante la jornada escolar: 1) Solo mantener los útiles indispensables para realizar el trabajo asignado en el momento, 2) Mantener el morral abierto para guardar los útiles en caso de un desalojo, 3) Mantener el morral ubicado en la parte posterior del pupitre, 4) Colocarse el morral antes de comenzar el desalojo. De la misma manera la Unidad Educativa Estadal Rural “Volcadero” ha integrado tanto en su P.E.I.C. como en sus Proyectos de Aula, actividades para lograr el aprendizaje significativo de los alumnos y alumnas, materia de prevención de riesgos y autoprotección. Proyecto Educativo Integral Comunitario: La comprensión lectora como estrategia para lograr un aprendizaje significativo basado en valores y la preservación del medio ambiente. Proyectos de Aula: 1) Cuidemos nuestro amiente para mejorar el planeta, 2) Preservemos nuestro ambiente para mejorar nuestra calidad de vida, 3) VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 47 Vivamos en un mundo limpio y feliz., 4) Salvemos nuestro planeta, que en nuestras manos esta el futuro de la tierra. De igual manera es de hacer notar que de acuerdo a las experiencias de cada docente en su aula de clase, nace por parte de la Lic. Irma González, la iniciativa de una Canción Inédita llamada: LOS EVENTOS SOCIO NATURALES, donde se plasman los conocimientos obtenidos durante la jornada, como una estrategia significativa para los niños y niñas de nuestro plantel educativo. 48 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA La transferencia de conocimientos a instituciones y comunidades, una forma de apropiación social del conocimiento en el marco del Proyecto De Investigación Aplicada a la Gestión Integral del Riesgo en Espacios Urbanos (Knowledge transfer to institutions and communities, a form of social appropriation of knowledge in the frame of the Applied Research Project on Integrated Risk Management in Urban Areas) A. Aguilar, J. L. Guzman, W. Marin, A. Betancourt, B. Quintero Centro de Documentación e Información­Funvisis prevencion@funvisis.gob.ve Actualmente, el Gobierno de la República Bolivariana de Venezuela a través del Ministerio del Poder Popular para Ciencia y Tecnología, está ejecutando un proyecto definido en el marco de la Misión Ciencia I “Riesgos Naturales y Tecnológicos”. En el mismo, se presentan los aspectos que tienen que ver con la formulación de un mega­proyecto de investigación en red denominado “PROYECTO DE INVESTIGACIÓN APLICADA A LA GESTIÓN INTEGRAL DEL RIESGO EN ESPACIOS URBANOS” desarrollado simultáneamente en las ciudades de Barcelona, Puerto La Cruz; Mérida; Valencia, Maracay; y Valle de la Pascua, en el periodo 2007­2012. Dicho proyecto incluye cuatro componentes a saber: Investigación y desarrollo, formación del talento humano, transferencia de tecnologías a las instituciones y comunidades, fortalecimientos de redes de alertas ante desastres. Asimismo, algunos de estos componentes se subdividen en diferentes sub­proyectos, que se plantean como fin la “Necesidad de mejorar o reactivar la infraestructura y las capacidades humanas en el seguimiento de las variables sismológicas, hidrometeorológicas, geotécnicas/geomorfológicas y tecnológicas, en el territorio nacional para fines estadísticos, toma de decisiones, manejo de recursos asociados y prevención de riesgos de desastres”. La incorporación del fortalecimiento de las capacidades VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 49 institucionales y comunitarias para la Gestión Local de Riesgo, obedece a la necesidad de promover la transferencia de capacidades y tecnologías en Gestión de Riesgo urbanos a las instituciones locales y a las comunidades como un modelo alternativo para enfrentar integralmente la problemática creciente de los desastres. Para asumir este gran reto, se ha subdividido el componente de transferencia en 2 áreas temáticas de intervención: 1) La transferencia de los conocimientos y tecnologías necesarias para el manejo de los aspectos de prevención y mitigación de riesgos urbanos, con un enfoque de transversalidad; y 2) Transferencia de los conocimientos y tecnologías necesarias para el manejo de los aspectos de preparación y respuesta local ante potenciales desastres, desde una perspectiva constructivista, abierta a la participación. Todas estas actividades de transferencia tienen como fin el transferir los productos preliminares o concluidos generados por el componente de investigación y desarrollo. Para lograrlo, se describen en el presente trabajo los aspectos de planificación, logísticos y de negociación, que hicieron posible generar experiencias de apropiación social del conocimiento de la información generada por el presente proyecto de investigación, en distintos niveles, y su utilización para llevar a cabo medidas y acciones para prever, mitigar, reducir y enfrentar los efectos de posibles eventos generadores de desastres, generando un impacto significativo en el aumento de la resiliencia de instituciones y comunidades organizadas. 50 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Experiencia comunitario­educativa del primer simulacro de tsunami en la República Bolivariana de Venezuela (Educational experience frst community­tsunami simulation in theBolivarian Republic of Venezuela) Juan Luis Guzmán1 jguzman@funvisis.gob.ve y Gloria Romero2 gromero@funvisis.gob.ve 1Funvisis, Departamento de Documentación e Información 2Funvisis, Departamento de Sismología Se presentan las fases de concepción, ejecución y resultados de la experiencia comunitario­educativa del primer simulacro de tsunami en la República Bolivariana de Venezuela, Caribe Wave 2011, efectuado el 23 de marzo de 2011 en cuatro municipios costeros del estado Anzoátegui, el cual presenta antecedentes de afectación por un evento sísmico histórico generador de tsunami ocurrido en la región del Caribe, específicamente en las Islas Vírgenes en 1867. Esta actividad, justificada por la frecuencia de eventos sísmicos y tsunamis de recurrente ocurrencia global y regional así como los impactos devastadores de los tsunamis de Haití y Chile, estuvo enmarcada dentro del Proyecto Tsunami con la participación, a nivel del caribe y regiones adyacentes, de la República Bolivariana de Venezuela de la Comisión y Subcomisión Oceanográfica Intergubernamental de la UNESCO, conformada a raíz de los acontecimientos de diciembre de 2004 en Indonesia. La fase de concepción de esta experiencia educativa, dentro del acuerdo de la 5a reunión del Grupo Intergubernamental de Coordinación del Sistema de Alerta contra los Tsunamis y otras Amenazas Costeras en el Caribe y Regiones Adyacentes (ICG­CARIBE­EWS­V), consistió en la elaboración de un cronograma de trabajo intenso en la región comprendido entre octubre 2010 y marzo 2011 de acuerdo a las líneas de tiempos establecidas por la UNESCO Para la fase de ejecución se efectuaron inicialmente tres visitas de conocimiento, integración y formación sobre el tema tanto para los VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 51 organismos y actores locales de la región como para el sector educativo. Para éste último en lo concerniente a la selección de los planteles y comunidades organizadas aledañas en cada uno de los cuatro municipios participantes en el simulacro. En cuanto a los resultados, se estima que unas tres mil (3.000) personas fueron movilizadas en el desarrollo de este simulacro, entre los que se cuenta la participación de mil doscientos (1.200) niños y niñas pertenecientes a 4 instituciones educativas de la zona norte del estado Anzoátegui. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 52 Experiencias comunitarias, desde la prevención sísmica hacia la gestión integral del riesgo en el Municipio Guanta sector “Valle Seco” durante el primer ejercicio de Simulacro de Tsunami “Caribe Wave 2011” (Community experiences, from prevention seismic towards integrated risk management in the Municipality Guanta "Valle Seco" during the First Caribbean Tsunami Warning Exercise "Caribbean Wave 2011") Ben Quintero1 bquintero@funvisis.gob.ve, Juan Guzmán1 jguzman@funvisis.gob.ve, Antonio Aguilar1 aguilar@funvisis.gob.ve, Mónica Paolini2 mpaolini@funvisis.gob.ve, Gloria Romero3 gromero@funvisis.gob.ve 1Funvisis, Departamento de Documentación e Información Departamento de Geofísica Aplicada 3Funvisis, Departamento de Sismología 2Funvisis, El presente trabajo describe las actividades y experiencias en materia de formación comunitaria desde la prevención sísmica hacia la gestión integral de riesgo en el primer ejercicio de simulacro de tsunami denominado “Caribe Wave 2011”, elaboradas en la localidad de la comunidad Valle Seco, ubicada en el estado Anzoátegui, Municipio Guanta, Venezuela. Desde el punto de vista educativo, los instructores e instructora de Funvisis apoyados por diversas personalidades e instituciones le dieron vida al ejercicio de Simulacro conjuntamente con todos los países del Caribe. Dicha actividad fue elaborada con énfasis hacia la formación preparación y prevención ante eventos adversos, específicamente ante sismos y un posible tsunami. El escenario simulado fue un sismo histórico con epicentro en Islas Vírgenes ocurrido en 1867 de magnitud 7.5. La metodología enmarcado en la investigación, acción y participación, dando como prioridad los aportes y las observaciones propuestas por las instituciones participantes como la Unidad Educativa “Valle Seco”, Protección Civil Estadal y Municipal y la Comunidad de Valle Seco entre otras. Para el logro del objetivo planteado en esta investigación se VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 53 planificaron diferentes actividades de formación, en educación ante eventos sísmicos y tsunamis, con el propósito de generar un conocimiento en las personas y permitir que las comunidades educativas, sociales y las instituciones de respuesta inmediata adquirieran herramientas necesarias para enfrentar situaciones que represente calamidad e incertidumbre en un determinado lugar y que perdure a través de la historia. 54 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Propuesta de simulacro de evacuación ante movimientos sísmicos “Una estrategia para reducir la vulnerabilidad social en la escuela” (Proposed evacuation drill before earthquakes "A strategy to reduce social vulnerability at school") Wilmer Marin wmarin@funvisis.gob.ve Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas La vulnerabilidad social en la escuela se refiere a la falta de organización para responder adecuadamente a una emergencia generada por un evento sísmico. La Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas a través del programa divulgativo Aula Sísmica “Madeleilis Guzmán”, tiene entre sus objetivos contribuir con la preparación de la comunidad educativa ante la ocurrencia de terremotos. Reducir el riesgo desde la perspectiva social en instituciones educativas ha sido un eje de acción que Funvisis viene desarrollando por más de diez años, además, constituye una respuesta concreta a las diferentes declaraciones que la ONU y otras instancias internacionales, han recomendado aplicar en el sector educativo en materia de gestión de riesgo. La propuesta del simulacro de evacuación como estrategia para reducir la vulnerabilidad social en la escuela, forma parte del esfuerzo colectivo que realiza el Aula Sísmica para mejorar la capacidad de respuesta de la comunidad educativa ante movimientos sísmicos . La propuesta incluye los siguiente pasos: diagnóstico de la susceptibilidad escolar frente a la amenaza sísmica, curso de prevención ante el riesgo sísmico dirigido a todo personal de la institución, inducción dirigida estudiantes en autoprotección, elaboración del croquis de rutas de evacuación, realización y evaluación del simulacro y redacción del plan. En este trabajo se presentan los resultados de dos experiencias piloto realizadas en la Escuela Bolivariana “Ezequiel Zamora” ubicada en Cúa, Estado Miranda y en el Colegio “San José de Palo Verde” ubicado en la VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 55 Parroquia Petare de la misma entidad. Todo el proceso que condujo a la reducción de la vulnerabilidad social en ambas instituciones educativas se realizó en el marco del programa de pasantias que ofrece el Aula Sísmica de Funvisis a estudiantes universitarios. En este caso el buen desempeño de un grupo de estudiantes de la UNEFA perteneciente a la carrera de Administración de Desastres, permitió alcanzar los objetivos planteados. 56 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Implementación de un Sistema de Alerta Temprana contra Tsunami en la Republica Bolivariana de Venezuela. Interacción institucional y desafíos planteados para el último eslabón de la cadena. (Implementation of a Tsunami Early Warning Sistem in the Bolivarian Republic of Venezuela. Institutional interaction and challenges for the last link in the chain) A. Aguilar1 aaguilar@funvisis.gob.ve, G. Romero2 gromero@funvisis.gob.ve, J. Fra3 j_frar@hotmail.com 1Centro de Documentación e Información, Funvisis 2Departamento de Sismología, Funvisis 3Proyecto SINAPRED. Dirección Nacional de Protección Civil y Administración de Desastres La República Bolivariana de Venezuela, conciente de sus amenazas costeras, participa desde el 2005 en el Grupo de Coordinación Intergubernamental para la Creación del SISTEMA DE ALERTA ANTE TSUNAMIS Y OTRAS AMENAZAS COSTERAS PARA EL CARIBE Y REGIONES ADYACENTE (ICG/CARIBE/EWS–V), integrado por todos los países que conforman la cuenca del Mar Caribe. En la V Reunión del Grupo, realizada en Nicaragua en marzo 2010, se acordó la participación de los Estados Miembros en un ejercicio de Simulacro, basados en el escenario del terremoto y tsunami del 18 de noviembre de 1867, donde se estimó una altura de ola superior a 10 metros para el este del Caribe. Este ejercicio propuso generar una “alerta de tsunami observado” (o “tsunami watch”) emitido por el Pacific Tsunami Warning Center PTWC, con un terremoto hipotético de magnitud 7.3 en Islas Vírgenes. Desde Venezuela se escogió como escenario las costas del Edo. Anzoátegui, también en el marco del ”Proyecto de Investigación Aplicada a la Gestión Integral del Riesgo en Espacios Urbanos”. El objetivo de este ejercicio CARIBE WAVE 2011 fue: 1) Asegurar la transmisión de comunicación entre el PTWC con los Puntos Focales de los países miembros 2) Probar los planes de respuesta de las VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 57 Oficinas de Manejo de Emergencia que hayan desarrollado planes, y promover a la creación de ellos en caso de no tenerlos 3) Revisar los EMOs costeros (Oficinas de Manejo de Emergencias), discutir y evaluar varias alternativas de comunicaciones para recibir y diseminar varios mensajes de alerta de tsunami. El problema científico y tecnológico de la detección temprana, análisis y procesamiento de la información puede ser visto como una cadena de acciones las cuales facilitan la transmisión de las alertas a los puntos focales en los diferentes países caribeños. Al respecto, existen criterios científicos, tecnología desplegada y data analizable, lo que evidencia cierta claridad en la generación de las alertas. Pero ante una posible aviso de tsunami para las costas venezolanas ¿cómo procesará la información el último eslabón de esta cadena?, integrado por las instituciones encargadas de generar respuesta frente a emergencias y desastres; y por supuesto y no menos importante, las comunidades vulnerables en la costas. Para el escenario Caribe Wave 2011 seleccionado en Venezuela, fueron preparadas para el desalojo las poblaciones de “Caicara”, Municipio Bolívar; “Santa Rosa”, Municipio Licenciado Urbaneja; “Playa Redonda”, Municipio Sotillo; y “Valle Seco”, Municipio Guanta. El presente trabajo recoge la experiencia de las organizaciones municipales, regionales, nacionales, ONGs y sociedad civil frente a una amenaza común: un Tsunami de considerable altura impactando las costas del Edo. Anzoátegui. Para lograr la articulación se generaron negociaciones complejas, el enfrentamiento de problemas operativos multidimensionales, el establecimiento de inexistentes canales de comunicación, en un gran esfuerzo por intentar dejar de lado las diferencias institucionales, políticas y filosóficas, arraigadas en dichas instituciones; para promover la sinergia necesaria entre todos los actores involucrados, con el fin de ofrecer a las comunidades vulnerables la respuesta más eficiente posible. 58 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA La conformación de una mesa técnica de riesgo sísmico: un ejemplo de participación comunitaria (Development of technical committees for seismic risk: a case of community involvement) Ángel Betancourt1 abetancourt@funvisis.gob.ve, Joaana Salazar2 njoaanna@gmail.com, Keila Lira3 iliekag@gmail.com 1Funvisis 2Instituto Universitario de Tecnología de la Región Capital; 3Fundación del Niño Simón; Dentro de la organización de los consejos comunales en Venezuela, su organización y estructura interna, plantea la necesidad de involucrar mesas técnicas en diversos temas para solventar las principales necesidades de la comunidad. Dentro de este caso en particular se pretende formar a una comunidad de la populosa parroquia del 23 de Enero en Caracas, para que aprendan a reconocer el riesgo sísmico real al que están expuestos, ya que identificar las amenazas es una de las principales formas de proteger a la comunidad y a la propiedad social de los efectos destructores de los sismos. Se considera que la enseñanza en materia de riesgo sísmico puede tener lugar a través de la educación formal hacia la comunidad por mediación de las organizaciones y redes sociales representadas por el Consejo Comunal “Felicia Gómez”, comunidad piloto seleccionada para la ejecución de actividades diagnósticas y formativas. Este trabajo es de suma importancia para la comunidad, ya que contará con una serie de didácticas educativas, operativas y técnicas que permitirán en forma mancomunada actuar en caso de una situación de riesgo sísmico, además, le permitirá a otros investigadores una base como antecedente para la realización de otros trabajos. Adicionalmente entre los objetivos iniciales, se ha fijado la necesidad de formar a la comunidad como base para la conformación de una mesa técnica de riesgo sísmico y la aplicación de planes de emergencia y acción contra estos eventos, esto conlleva a establecer objetivos específicos que puedan VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 59 servir de guía, ente ellos se encuentran el diagnóstico, planificación, desarrollo y evaluación de la comunidad en torno a estas acciones. De igual forma para poder desarrollar el trabajo es necesario establecer el contexto de actuación ya que las personas de la comunidad expresan que a través de la historia sísmica de Venezuela, principalmente aquellos que han afectado a la localidad de Caracas, los edificios 9 y 10, conocidos como bloques, han tenido daños en su infraestructura. Cabe destacar que en la comunidad existen comercios como bodegas, tapicería, licorería, peluquería y kioscos, adicionalmente una institución escolar que también pudiera verse afectada ante la ocurrencia de un sismo. Asimismo, existe un estacionamiento el cual se encuentra en un evidente deterioro, el mismo es usado por los habitantes como centro de disfrute de las personas que hacen vida en la comunidad, igualmente existen otros riesgos como las escaleras, las cuales están cediendo ya que son talud de tierra, la gran cantidad de tendidos eléctricos y tomas de corrientes improvisadas, así como postes y cajas de alto voltaje sin empotramiento. Por consiguiente, los avances que se han obtenido hasta los momentos en materia de resultados se han realizado a través de entrevistas estructuradas, encuestas y cuestionarios, parte de estas actividades se realizaron a los 28 miembros activos del Consejo Comunal, evidenciando un 78% de interés en el tema y la preocupación existente, incluyendo, además, la posibilidad de crear una organización y/o mesa técnica de riesgo dentro del consejo comunal para atacar estas problemáticas. 60 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA El conflicto entre datos históricos y registros documentales en el caso del sismo de 1736. Consideraciones metodológicas para su estudio. (The conflict between historical data and documentary records in the case of the earthquake of 1736. Methodological considerations for study) Sor Martínez Silva1 sormartinez@gmail.com, Franck A. Audemard. M.2 faudemard@funvisis.gob.ve, Alejandra Leal Guzmán1 aleal@funvisis.gob.ve 1Universidad Central de Venezuela, Escuela de Antropología­UCV 2Funvisis, Departamento de Ciencias de la Tierra El evento sísmico ocurrido en el centro occidente venezolano en el año 1736, es un sismo poco estudiado y sobre el cual existe escasa documentación conocida, a pesar de su importancia para evaluar amenaza sísmica actual en el centro­occidente de Venezuela. El estudio de este sismo sirve como referencia metodológica para el estudio de otros terremotos históricos, donde el problema va desde verificar su ocurrencia misma, la manera en que fue abordado en su momento histórico y posteriormente cuando entra solo como reseña de la historia fabulada del territorio que hoy conocemos como el estado Lara. Considerando entonces que la investigación está basada en registros históricos, la búsqueda de datos secundarios como catálogos sísmicos y crónicas, en primer lugar que sirven de referencia para la ubicación del contexto; sin embargo, en muchos de los casos se hace mención a los sismos de manera referencial más que de hacer una descripción del mismo o aportar datos que sirvan para una investigación más completa. También se hace uso de las fuentes documentales de primera mano, por ejemplo, cartas, comunicados oficiales (eclesiásticos y gubernamentales), crónicas, etc.; así como de las diversas fuentes que se disponen actualmente, electrónicas. Otros materiales a analizar se encuentran en los repositorios de los archivos que haremos mención más adelante y se encuentran en papel, lo que se hizo necesario el uso del formato digital (fotografías de los documentos) para su posterior análisis. El sismo de 1736, presenta un verdadero reto a investigar ya que a VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 61 pesar de todas las fuentes consultadas, no contamos aún con suficiente información que nos permita estimar a los parámetros básicos que requieren este tipo de estudios. Sin embargo, se ha logrado reunir datos de suma importancia sobre las ciudades afectadas, con lo cual se pueden efectuar inferencias sobre el tramo de la falla activado en ocasión de este evento sísmico. 62 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA El sismo de Caracas del 29 de julio de 1967: comentarios técnicos y anecdóticos (The Caracas earthquake of July 29, 1967: technical and anecdotal comments) Cristóbal Grimán Funvisis­ Museo Sismológico de Caracas cgriman@funvisis.gob.ve El 29 de julio de 2012 se cumplen cuarenta y cinco años del sismo que sacudió a Caracas durante su cuatricentenario. Y aunque aún su recuerdo permanece en la memoria colectiva, este evento sísmico todavía tiene aspectos poco divulgados. La hora de origen de este movimiento, publicada en el boletín sísmico del Instituto Sismológico del Observatorio Cagigal, indica que ocurrió a las 23 horas, 59 minutos, 58,7 segundos, esos 1,3 segundos que faltaban para las ocho de la noche fueron determinantes para que en Venezuela se captara este sismo el día 29 de julio, mientras que el resto de las estaciones, que formaban la red sismológica a nivel mundial, lo captó y registró el día 30 de julio, pues justamente a las ocho de la noche, cambiaba el patrón mundial de tiempo. En ese momento Venezuela tenía cuatro horas de diferencia con respecto al meridiano cero, es decir, nuestra hora legal se calculaba restándole cuatro horas a la hora G.M.T. (Greenwich Meridian Time). Para el día de la ocurrencia de este sismo, el Dr. Günther Fiedler, jefe del Instituto Sismológico del Observatorio Cagigal, se encontraba en Japón, donde realizaba un curso de especialización en sismología. Los equipos sismológicos pertenecientes al proyecto VELA comenzaron a fallar días antes del terremoto. El reloj de cuarzo, cerebro de los citados instrumentos, presentó desperfectos. En ese momento, solo se disponía de una estación sismológica en todo el territorio nacional y era la instalada en el Observatorio Cagigal. De esto se desprende que hubo confusión para conocer el epicentro y las demás características del sismo, seguramente recurrieron a informaciones del extranjero, ya que incluso el sismógrafo Wiechert, de 20 toneladas, instalado en los sótanos de Cagigal, se averió por el fuerte movimiento. Hubo registros VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 63 en sismoscopios instalados en zócalos, a nivel del suelo, en el área donde se encontraban dispuestos los sismómetros de largo período VELA y que fueron utilizados a su regreso a Venezuela, por el Dr. Fiedler para calcular la dirección y otros parámetros del evento. Cabe destacar que en esa época tampoco se contaba con personal de guardia, para la asistencia del público, de la prensa y que pudiera abocarse a la supervisión de los instrumentos durante las veinticuatro horas del día. Este terremoto fue incluso anunciado por una vidente italiana, Marina Marotti y hubo gente que aseguró que el sismo cesó cuando la cruz que se desprendió de lo alto de la catedral metropolitana tocó el suelo caraqueño. El sismo de Caracas del 29 de julio de 1967 ha sido y sigue siendo investigado, ya que sin duda hay todavía mucha información que transmitir. 64 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA A prueba de temblores. Reflexiones sobre construcción y sismorresistencia en la Venezuela de 1900. Caso del sismo de San Narciso. (Quake­proof: Some ideas about constructions and seismic resistance at the time of the San Narciso 1900 earthquake, Venezuela) Alejandra Leal Guzmán aleal@funvisis.gob.ve, José Antonio Rodríguez jrodriguez@funvisis.gob.ve y Franck A. Audemard faudemard@funvisis.gob.ve Funvisis, Departamento de Ciencias de la Tierra El 29 de octubre de 1900, día de San Narciso, a las 4:42 a.m., un poderoso terremoto sacude el norte costero de Venezuela, afectando sensiblemente a las poblaciones ubicadas en la región que actualmente corresponde al área metropolitana de Caracas, en la costa de Barlovento y en los estados Vargas, Aragua y Anzoátegui; llegando incluso a ocasionar daños materiales de menor significación en poblados llaneros. Este evento, conocido como el sismo de San Narciso, ha sido uno de los eventos sísmicos más importantes que han ocurrido en las adyacencias del área metropolitana de Caracas y también uno de los más destructores que ha padecido la ciudad capital. El terremoto de 1900 fue ampliamente reseñado en la prensa nacional, constituyéndose así un extenso y muy variado corpus documental que había permanecido oculto en los archivos venezolanos, y en consecuencia, era prácticamente desconocido para la sismología venezolana. A poco más de un siglo de distancia, el esfuerzo de investigadores provenientes de diversas disciplinas ha permitido recopilar y sistematizar esta copiosa y variada documentación, cuya evaluación preliminar reveló la existencia de un importante número de artículos científicos e informes técnicos abocados a describir los daños producidos por el terremoto, examinar los efectos del sismo en relación con las características constructivas de las poblaciones afectadas y proponer soluciones constructivas apropiadas a la naturaleza sísmica de Venezuela. El hilo discursivo que –casi inesperadamente­ enlaza a VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 65 estos meticulosos escritos resulta ser la idea de sismorresistencia. Sin bien la noción de sismorresistencia es de muy reciente incorporación a la terminología científica, la idea en sí misma, es muy antigua: la preocupación por la solidez y la resistencia de edificios y ciudades ante el embate de los terremotos, ha existido largamente en la mentalidad de todas las sociedades enfrentadas directamente a la inquietante naturaleza plutónica del planeta. Naturalmente el término ha evolucionado. En 1900 se hablaba de las casas anti­temblores o contra temblores, mientras que en 1950 –en la coyuntura del terremoto de El Tocuyo­ se utilizaba el término antisísmico, que significa "antiterremoto" y por lo tanto expresa un sentido técnico muy diverso al que está contenido en el término sismorresistente. Semánticamente, antisísmico significa que los terremotos no producen daño alguno en las construcciones o que estas pueden resistir ilimitadamente los efectos de un sismo lo cual resulta, a todas luces, incorrecto. El sismo de San Narciso no constituye la primera ocasión en que la idea de sismorresistencia surge en la mentalidad venezolana. La preocupación por diseñar e implementar tipologías constructivas que resistan los temblores, así como también la conciencia de la relación entre daños macrosísmicos y la calidad y adecuación de las construcciones se puede encontrar en documentos venezolanos referidos a los sismos de 1812, 1875 y 1894, por ejemplo. Sin embargo, no deja de sorprender la calidad de los escritos sobre construcciones y sismorresistencia inspirados por el terremoto de 1900. El presente artículo pretende dar a conocer estos significativos documentos enfatizando las lecciones que de ellos se desprenden, las cuales representan un valioso aporte para el estudio de la ingeniería sísmica en Venezuela. 66 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Terremoto del 21 de octubre de 1766 y sismo del 20 de septiembre de 1968: implicaciones para Guayana. (October 21, 1766 earthquake and September 20, 1968 seism: implications to Guayana). Noel Mariño Pardo Consultor independiente nmarinop@gmail.com El objetivo del presente trabajo es describir y documentar los daños que sufrieron los pueblos de Santo Tomé de Guayana, cuando ésta se encontraba ubicada a orillas del río Usupamo, donde hoy se encuentran los Castillos de Guayana y Angostura, actual Ciudad Bolívar, en ocasión del terremoto del 21 de Octubre de 1766, el evento más extensamente sentido en la historia sísmica de Venezuela y sus posibles implicaciones para las actuales poblaciones de Ciudad Guayana, sede de las empresas básicas y del parque de empresas de servicio asociadas, de gran importancia para la economía del país, así como de Ciudad Bolívar, la capital política del estado. Sobre la base de la investigación bibliográfica llevada a cabo, toda la zona noreste del continente suramericano fue la que recibió la onda y la zona más afectada fue el Oriental del país, donde la ciudad de Cumaná fue el centro urbano con mayores daños materiales y bajas humanas. Las zonas afectadas incluyen las ciudades de Maracaibo, Cayena, las islas Guadalupe y Martinica. Muchos poblados de lo que actualmente son los Estados Sucre, Monagas, Nueva Esparta, Anzoátegui, Miranda y Bolívar sufrieron los estragos del terremoto. De acuerdo a las observaciones manifestadas por los diversos autores consultados y muy bien documentadas, se presume que “este evento tuvo una magnitud muy grande, y dos imprecisos epicentros: uno en el área de Cumaná, Margarita y Trinidad, y otro en la zona del bajo Orinoco. Así mismo, indican que ese sismo no debe ser asociado a ninguna ruptura de la falla de El Pila”. Otros autores describen los daños reportados en su momento y la extensión de los mismos en las antiguas poblaciones de la Provincia de Guayana. E resumen, se presume que el sismo de 1766, fue un evento de profundidad media, de VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 67 aproximadamente 120 km, con una magnitud de 7,6 a 7,8 producido por una gran ruptura de la zona de la actual subducción del Caribe debajo del continente sudamericano. Así mismo, se refiere lo indicado por investigadores sobre el sismo del 20 de Septiembre de 1968, cuando a las 02:01 am, la península de Paria fue afectada por un temblor de magnitud 6,0 que causó daños en Macuro, Guiria e Irapa, donde se registraron 2 fallecidos, así como varios heridos. Se describen los reportes de daños menores en Tucupita y Puerto Ordaz, así como sus implicaciones en la población. Se discuten dos (2) posibles causas para que el norte del Escudo de Guayana sea propenso a que “algunos sismos de foco intermedio, con epicentro en los alrededores de la península de Paria, sean sentidos fuertemente en Ciudad Guayana, aunque no así en Maturín ni en Cumaná y acaso débilmente en Guiria”, a saber: 1) La existencia de una discontinuidad en el subsuelo, producto de la zona de subducción entre la Placa del Caribe y la Placa de América del Sur, que hacen que las ondas de los sismos se propaguen con facilidad, 2) El afloramiento de la Formación Mesa, con espesores no mayores de 20 m y sedimentos no consolidados del Cuaternario, sobre rocas de la Provincia Geológica de Imataca, en el perímetro urbano de Ciudad Guayana, que inducen al riesgo geológico de las cárcavas, así como posibles comportamientos análogos a los depocentros descritos para la ciudad de Caracas. Por lo anteriormente expuesto, se pretende que el presente trabajo sirva para alertar y consensuar a los organismos de atención primaria en casos de emergencia, así como Protección Civil y Administración de Desastres en sus tres niveles (municipal, estatal y nacional), para que se entienda que el norte del Escudo de Guayana si es potencialmente vulnerable a ser afectado por un evento sísmico de gran magnitud, por lo cual, es necesario reforzar conductas de prevención entre la ciudadanía, que incluya alumnos de las diferentes etapas de educación, así como a los trabajadores de la empresas bá­ sicas. 68 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Misión patrimonio histórico sismológico: una contribución para los estudios de la amenaza sísmica en Venezuela (Historical seismological heritage mission: a contribution for the studies of the seismic hazard in Venezuela) Gloria Romero1 gromero@funvisis.gob.ve, Miguel Palma1 mpalma@funvisis.gob.ve, Raquel Vásquez1 rvasquez@funvisis.gob.ve, Leonardo Alvarado1 lalvarado@funvisis.gob.ve, Carolina Granado1 cgranado@funvisis.gob.ve, Herbert Rendón1 hrendon@funvisis.gob.ve, José A Rodríguez2 jrodriguez@funvisis.gob.ve, Alejandra Leal Guzmán2 aleal@funvisis.gob.ve 1Funvisis, Departamento de Sismología 2Funvisis, Departamento de Ciencias de la Tierra El paso de la sismología histórica en Venezuela indudablemente se concentra en la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas (Funvisis) quien tiene la responsabilidad de preservar su patrimonio y generar un archivo que guarde la huella de su recorrido. Se propone en este trabajo realizar una Misión didáctica y científica sin precedentes que facilitará un avance en la optimización del Catálogo Sismológico Nacional de Venezuela. La tarea inicia con la caracterización del material documental existente en Funvisis (Sismográmas de papel), en segundo lugar una propuesta­consulta para la recuperación y preservación de este documental histórico invaluable y finalmente la metodología y avance en el análisis con fines de completitud de catálogo utilizando las mejores técnicas de procesamiento (desde el análisis de sismogramas rutinarios hasta una imagen digitalizada y procesada con tecnologías informáticas). El resultado final de esta Misión será la completitud del catálogo sismológico histórico­instrumental de Venezuela cuya prioridad es la mejor estimación de magnitud y localización epicentral. Esta Misión se inspira en el sufrimiento de la humanidad a causa del los terremotos desde el comienzo de la civilización y en los millones de personas fallecidas en el mundo en las últimas 3 décadas. Aprender de los eventos pasados se hace fundamental para hacer planes sobre la mitigación del peligro sísmico, debido VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 69 a que los sismogramas componen una base de datos de registro observacional de los terremotos, fundamental para los estudios de la amenaza sísmica y para conocer cada vez más los movimientos de placas y del interior de la Tierra y en particular, Venezuela. En todos los observatorios del mundo existen estos registros y son almacenados localmente, debido al tamaño del papel y buena reproducción. En el caso venezolano, ellos han permanecido en el tiempo, pero su metodología de archivo y procesamiento no ha sido fácil, en consecuencia los sismólogos invierten mucho tiempo y esfuerzo para la recuperación significativa de los sismogramas e interpretación de estos por lo lento de los procesos, mientras que la sismología instrumental nacional lleva aproximadamente 112 años con mayor avance a partir de 1980. 70 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Erdbeben in Caracas. El terremoto de 1900 en las notas de Hermann Ahrensburg (Erdbeben in Caracas. The earthquake of 1900 in the writings of Hermann Ahrensburg) Christl Palme1 palme@ula.ve y Alejandra Leal Guzmán2 aleal@funvisis.gob.ve 1Laboratorio de Geofísica de la Universidad de Los Andes 2Funvisis, Departamento de Ciencias de la Tierra El terremoto que sacudió la costa centro­norte de Venezuela el día 29 de octubre de 1900, evento conocido como el sismo de San Narciso, constituye el último gran terremoto que ha afectado las adyacencias del área metropolitana de Caracas. Además de remecer el suelo, los edificios y las conciencias, y de aterrorizar a las gentes; el sismo de San Narciso también inspiró a científicos y escritores, a reflexionar diversamente sobre sus posibles causas y sus consecuencias. En este sentido, son bien conocidos, por ejemplo, los escritos de Melchor Centeno Graü (1900), Jesús Muñoz Tébar (1900) y Wilhelm Sievers (1905). Sin embargo, no ocurre así con el conciso informe titulado Erdbeben in Caracas (1901), firmado por Hermann Ahrensburg, jefe del Gran Ferrocarril de Venezuela y testigo presencial del sismo de San Narciso. Este interesante documento ­exhumado recientemente por las autoras en la sede principal de la Biblioteca Nacional de Venezuela (Caracas)­, se encuentra referido, pero no citado expresamente en bibliografía existente sobre eventos sísmicos en Venezuela. Pese a la brevedad de su informe, dirigido a la Sociedad de Geógrafos de Turingia, Ahrensburg logra ofrecer noticias muy precisas de las características del sismo, así como de sus efectos y consecuencias en la ciudad de Caracas. Este artículo presenta la primera traducción al castellano, conocida hasta el momento, del informe de Ahrensburg, comentada, y enriquecida con notas históricas; poniéndolo así, a disposición de los investigadores interesados en el estudio de la sismicidad venezolana. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 71 Testimonios históricos de terremotos locales tsunamigénicos en el oriente venezolano (Historical records of local tsunamigenic earthquakes in eastern Venezuela) Franck A. Audemard M.1 faudemard@funvisis.gob.ve, Alejandra Leal Guzmán1 aleal@funvisis.gob.ve y Christl Palme2 palme@ula.ve 1Funvisis, Departamento de Ciencias de la Tierra 2Laboratorio de Geofísica, Universidad de Los Andes, Mérida El Inventario Nacional de Riesgos Geológicos del año 1983, así como al Catálogo de Sismos Sentidos o Destructores de Venezuela 1530­1998 del año 1999, reportan de manera confiable la ocurrencia de olas tsunamis que afectaron las costas nororientales venezolanas, o fenómenos que se pueden interpretar como modificaciones sustanciales del nivel del mar en esa región, en asociación a sólo cinco sismos locales. Tales eventos tsunamigénicos ocurrieron el 1­IX­1530, 15­VII­1853, 29­X­1900, 17­I­1929 y el 9­VII­1997. Todos, a excepción del sismo de 1900, afectaron a la ciudad de Cumaná, estando siempre el sismo generador asociado a la falla transcurrente dextral de El Pilar. En el caso del sismo de 1900, se reporta de manera fehaciente olas tsunamis sólo en la costa de Barlovento, particularmente en la población de Puerto Tuy (ubicada en la desembocadura del río Guapo). Aunque se desconoce a ciencia cierta la fuente de este tsunami, el sismo de 1900 parece atribuible a la falla de San Sebastián, en un segmento en proximidad a Cabo Codera, ubicado al norte de la población reportada como afectada. De los 4 eventos que afectaron Cumaná, es hoy sabido que los eventos de 1530 y 1853, con reporte de olas más altas, deben haber ocurrido en la fosa de Cariaco, cuenca en tracción producida por el relevo transtensivo entre las fallas de San Sebastián y El Pilar. Por su parte, los sismos “tsunamigénicos” del siglo XX (1929 y 1997) ocurrieron en el golfo de Cariaco, al este de la ciudad de Cumaná. El autor fue recolector de primera mano de las impresiones y observaciones de los pobladores durante el sismo de 1997. Tanto en la costa sur del golfo de Cariaco, como en la costa oeste de Cumaná, los habitantes 72 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA claramente precisaron que durante este sismo, el mar se retiró, exponiendo el fondo marino, para luego volver a su nivel original de forma muy tranquila. En tal ocasión, las modificaciones del nivel del mar en el Oeste de Cumaná podrían imputarse a un deslizamiento submarino disparado por el sismo, arrastrando hacia el cañón submarino del río Manzanares parte de la costa, en la desembocadura del río Manzanares; mientras que los movimientos percibidos dentro del golfo de Cariaco después del sismo deben relacionarse a la cinemática de la traza submarina de la falla de El Pilar dentro del cuerpo de agua confinado del golfo de Cariaco. En 1929, se reporta la presencia de olas anómalas en proximidad a y en la desembocadura del río Manzanares (de hasta 6 m), así como en su curso intra­urbano. Dado que este sismo ocurre sobre un segmento de la falla de El Pilar ubicado en el golfo de Cariaco, donde no se reporta oleaje anómalo alguno, parece acertado pensar que las anomalías observadas en el río Manzanares y su desembocadura sean debidas a otro deslizamiento dentro del cañon submarino del Manzanares, muy similar a lo observado luego del evento de 1997. En definitiva, los 2 sismos mayores de la falla de El Pilar ocurridos en el siglo XX habrían tenido asociados olas tsunamis a consecuencia de la remobilización sísmica de masas deslizadas submarinas de dimensiones considerables. Algunos autores, por extensión y asociación con los fenómenos observados durante los sismos contemporáneos (1929 y 1997), postulan que los maremotos de 1530 y 1853 hayan sido igualmente producidos por deslizamientos submarinos, y que las olas tsunamis sean de hecho “river bores”, producto del encuentro de una subida considerable del nivel del mar (unos pocos metros; –2­3 m­) opuesta al flujo natural del río Manzanares, así magnificando el alto de la ola tsunami y desbordando el río y su llanura en su curso más inferior. El presente autor, por el contrario, propuso que las olas tsunamis de los sismos de 1530 y 1853 eran tsunamis tectónicos productos de la combinación de la cinemática transcurrente de la falla de El Pilar y una batimetría muy accidentada; particularmente para el tsunami de 1530 por las dimensiones de la zona inundada en Cumaná (de al menos media legua). Es significativo resaltar que estos 5 eventos tsunamigénicos locales VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 73 afectaron la costa venezolana en al menos una localidad de la costa venezolana en la ensenada de Barcelona, que se extiende entre cabo Codera (estado Miranda) al oeste y la población de Araya al este (extremidad más occidental de la península de Araya, estado Sucre). De los sismos cuyos “run­ups” (o alturas de olas) están reportados en el Catálogo antes indicado, en al menos 3 de ellos (1530, 1900 y 1929), los observadores de la época (las fuentes primigenias) describen olas de entre 6 a 10 m de alto. Como previamente postulado, el fenómeno de alzamiento de la columna de agua de mar, como consecuencia del mar encrespado por olas tsunamis de poca alzada (inducida por deslizamiento submarino, por ejemplo) contra el flujo natural del río, puede muy bien explicar la altura de ola del sismo de 1929 en Cumaná, justificando su poca extensión lateral y la concentración de sus efectos a lo largo y en proximidad del tramo más inferior del río Manzanares. En el caso particular del tsunami de 1900, un reporte de olas de hasta 10 m en Puerto Tuy es poco verosimil. Por una parte, el sismo ocurre en Barlovento previo al alba, próximo a las 5 de la mañana; es decir, aún a oscuras. En descargo de los habitantes de la región, cuya labor principal es la pesca, es imaginable que gran parte de la población asentada sobre esa costa a esas horas de la madrugada estuviesen en su faena habitual (siempre y cuando la luna no les fuese desfavorable). En tal caso, se habrían recibido numerosos testimonios de ola(s) tsunami(s) de parte de los pescadores que hubiesen estado pescando. Por el contrario, los reportes de esa costa, en las poblaciones de Paparo, Puerto Tuy y San José de Río Chico, están siempre asociadas principalmente a señalar que el nivel de los ríos se elevó y éstos se desbordaron. Se observa para este sismo el mismo fenómeno que caracterizó al tsunami de 1929: la formación de “river bore”. No obstante, a diferencia de lo acontecido en 1929, estas olas tsunamis no son de afectación local, porque este fenómeno se reporta en diversos ríos, en localidades tan distantes como, por una parte, San José de Río Chico (en las márgenes del río San José), Paparo (desembocadura del río Tuy) y Puerto Tuy (desembocadura del río Guapo), todas ubicadas en la costa de Barlovento (extremo oeste de la 74 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA ensenada de Barcelona); y por otra, en Barcelona (a orillas del mar y en caños previamente secos del río Neverí), población ubicada diametralmente opuesta en la costa de la misma ensenada homónima. En referencia al tsunami de 1530 y sus características, es sumamente ardua cualquier tarea de evaluación o calibración de este maremoto, dado que Venezuela era entonces apenas una colonia incipiente, con todas las implicaciones para los estudios de sismología histórica que ello conlleva. No obstante, si podemos plantear que pareciera justificado indicar que la investigación o búsqueda sistemática de paleotsunamis en el registro geológico de las zonas costeras aledañas de la ensenada de Barcelona que se pretenda realizar, no puede reposar ciegamente sobre testimonios históricos de olas con alturas generalizadas de 6 m o más, y que gran parte de dicha alzada puede atribuirse a efectos de “river bore”, por lo que se deberá entonces realizar investigaciones paleosísmicas (o paleotsunámicas) sistemáticas partiendo de la premisa que las olas tsunamis producidas durante esos eventos históricos podrían haber sido de altura más modesta, de sólo 2 a 3 m de alto. Ello no es una limitante excluyente, porque luego de reconocimiento de campo preliminar realizado a tal fin, se apreció que los cordones litorales de dicha ensenada generalmente son de altura promedio entre 1,2 y 1,5 m. En consecuencia, y considerando que hay testimonios históricos de modificaciones del nivel del mar durante sismos locales venezolanos, ocurridos sobre fallas transcurrentes mayores próximas (El Pilar y San Sebastián, a menos de un centenar de kilómetros de distancia), y que están dadas las condiciones fisiográficas (costas bajas, con variación intermareal de sólo unos 30 cm, y extensas plataformas continentales llanas contiguas costa afuera), como las geológicas (extensos y numerosos ambientes lagunares de aguas tranquilas, tras cordones litorales de menos de 1,5 m de alto, que pudiesen funcionar como excelentes registradores de paleotsunamis) a lo largo de la costa de la ensenada de Barcelona, entre Cabo Codera y Araya, se ha iniciado el estudio sistemático de las lagunas costeras entre ambas localidades, desde comienzos del año 2009. Dado que Cumaná reporta históricamente ser la ciudad más afectada por olas tsunamis de manera reiterada, se inició este VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 75 programa exploratorio con la toma de núcleos en la laguna de Los Patos, ubicada al sureste de la playa de San Luis y al suroeste del casco urbano. Posteriormente, se prosiguió en 2011 con la revisión sistemática de las lagunas costeras, de oeste a este, de: Tacarigua, Unare, Píritu, Chacopata y El Juncal; la primera en el estado Miranda y las restantes ubicadas en el estado Anzoátegui. En estas lagunas, la exploración residió en el enfoque combinado de excavación de calicatas y extracción de núcleos cortos imperturbados. 76 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Memoria urbana y geología de amenazas naturales en la ciudad de Caracas (Urban memory and natural hazards geology in Caracas city) Javier Oropeza1 joropeza@funvisis.gob.ve y André Singer1 y 2 singer.andre1@gmail.com 1Funvisis, Departamento de Ciencias de la Tierra 2Univeridad Central de Venezuela, Escuela de Geología, Minas y Geofísica A diferencia de la geología de campo convencional, tradicionalmente concentrada en “el monte”, la geología urbana dispone de una capa geológica de excepcional importancia documental, la “capa de cultura”, inscrita en el Antropoceno s.l., cuyos cimientos alcanzan los tiempos prehispánicos. Esta capa geológica de cultura proporciona una fuente de información del mayor interés para la evaluación geocientífica en profundidad de las amenazas naturales tanto en la ciudad como en su periferia. Los estudios de geología urbana acometidos recientemente en Caracas para fines de microzonificación sísmica, ofrecen una excelente ilustración del acervo documental potencial contenido en la capa geológica de cultura urbana, y de su valorización por medio de la investigación diacrónica de las amenazas naturales. Al respecto, se presentan 4 casos representativos de lo señalado. El primer caso se refiere a la puesta en evidencia de una alteración llamativa sufrida por la dinámica fluvial y el trazado del río Guaire en ocasión de una gran difluencia ocurrida en este drenaje en el margen norte de su trazado conocido, entre Quinta Crespo y la Esq. Las Piedras, asi como de divagaciones menores en ambas extremidades del trazado anómalo señalado entre San Juan y El Paraíso, y a la altura de las Flores de San Agustín. Este brazo norte del río Guaire figura aparentemente por primera vez en el Mapa de Depons de 1801 y parece corresponder a la reutilización por una crecida anterior a este documento de una madre vieja del río Guaire ocasionada en un pasado no documentado, por el impacto lateral de aportes torrenciales de la Qda. Caroata en el drenaje principal. Este brazo poco conocido del río Guaire, esclarece la función de la Cuadra Bolívar como desembarcadero fluvial en VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 77 época colonial, asi como el ancho retiro no urbanizado, que permaneció al sur del casco de la ciudad hasta mediados del siglo 20 y que era ocupado por las vegas inundables del río Guaire. El segundo caso concierne a la evaluación de la cota topográfica susceptible de ser alcanzada por la máxima inundación posible en las partes más bajas del Valle de Caracas. Al respecto, la cartografía del Cuaternario en esta depresión ofrece información de interés, suministrada por la extensión lateral máxima de los depósitos aluviales de origen lacustre originados por el represamiento, en el Pleistoceno superior, del río Guaire y de su afluente el río Valle, y de la conversión de las áreas de influencia de este sistema de drenaje en un espejo de agua continuo que alcanza la cota 890 metros, por lo menos entre El Paraíso y la confluencia de éstos dos ríos. En el espacio señalado, los depósitos lacustres subsisten bajo la forma de terrazas de descarga muy entalladas, cuyo tope domina claramente las vegas inundables más recientes, de edad holocena, del río Guaire en El Paraíso y en Los Caobos, y en Valle Abajo, en dirección a La Bandera en el río Valle. El remanente más extenso y muy bien conservado de esta antigua planicie de represamiento lacustre ocupa la depresión topográficamente confinada de El Rincón del Valle entre El Cementerio y la UCV. En toda la extensión señalada, el tope de los depósitos lacustres alcanza la cota de 890 metros, es decir, un nivel ubicado a unos 10 metros por encima de la cota alcanzada por la máxima inundación documentada del río Guaire, previamente a su embaulamiento, y correspondiente a la gran crecida de 1892, cuando las aguas desbordadas de río llegaron a las Esq. Pelaez y Palmita. El tercer caso se refiere a la puesta en evidencia, por medio del acervo documental de la nomenclatura geotoponímica caraqueña, de la existencia de una prolongación del estribo rocoso de la colina de El Calvario en dirección al casco de la ciudad por medio de una loma rocosa explotada por canteras y erradicada en la Colonia para fines de urbanismo, y cuya memoria geológica perdura todavía en la llamada Esq. de La Pedrera. La presencia del referido saliente rocoso en el subsuelo de la ciudad, complica el contorno y la geometría tridimensional del borde de cuenca definido por el contacto del 78 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA macizo rocoso con los depósitos aluviales cuaternarios, y es susceptible de introducir anomalías locales en la respuesta sísmica de los terrenos de interés para fines de microzonificación sísmica. El último caso concierne a la evaluación de la amenaza de aludes torrenciales con base a la utilización de las fuentes de información arqueogeológica prehispánicas contenidas en el subsuelo aluvial del Valle de Caracas como potenciales marcadores cronoestratigráficos. De esta manera, se ha logrado aprovechar 5 sitios de interés constituidos por yacimientos arqueológicos ubicados “in situ” y en estratigrafía, escalonados cronológicamente desde el probable Periodo I Meso­Indio hasta el Periodo IV Neo­Indio (1150­1500 DC) y sepultados por lo menos bajo 3 generaciones de depósitos aluviales de origen convulsivo, originados por aludes torrenciales provenientes del macizo El Ávila (yacimiento de Boleita Norte) o por fenómenos secundarios de descarga ocurridos a lo largo de la vega aluvial del río Guaire como consecuencia de represamientos recurrentes del mismo por los referidos movimientos de masa (yacimientos de La Vega, El Pinar (El Paraíso), El Conde y de Las Mercedes). VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 79 El flujo de tierra del Cerro Mulato, Chabasquén, Edo. Portuguesa, fenómeno geodinámico crónico del piso climático subtropical de la cordillera andina. (Flow of land in Cerro Mulato, Chabasquén, Portuguesa state. Chronical geodynamic phenomena of the subtropical climatic floor of the Andes.) Walter Reátegui1, Jovanny Herrera2 y André Singer1 1Funvisis, Departamento de Ciencias de la Tierra 2UNELLEZ – Guanare wreategui@funvisis.gob.ve El 26 de junio de 2011, después de intensas precipitaciones en el sector Cerro Mulato, de Chabasquén, un deslizamiento de tierra de tipo rotacional activó un flujo de lodo de 2,5 km de longitud y unos 250 m de ancho aproximadamente. Dicho flujo devastó progresivamente un área de 54 ha, entre los cuales 40 ha de cultivos de café, y causó la interrupción de la carretera Troncal 7 entre los estados Portuguesa y Lara en dos sitios cercanos distintos, producto de la división del flujo en dos ramales. El empuje permanente de tierras sobre la calzada de la vía esta obligando al despeje continuo de la vía con maquinarias hasta la actualidad. La morfología original de la vertiente y la cubierta vegetal desaparecieron totalmente, dejando el suelo desnudo. Una fuerte erosión se ejerce actualmente al área devastada por el flujo de tierra. La litología local corresponde a areniscas consolidadas, alternadas con capas de lutitas negras de la Formación Volcancito la cual se caracteriza por la existencia de binomios de “capas – esponja” y de “capas – sello”, y la acumulación de aguas de infiltración al contacto de las mismas, lo cual conduce a una saturación permanente de los terrenos y a la activación recurrente de este movimiento de masa, investigaciones históricas indican una antigua reactivación de ese mismo flujo de tierra en el Cerro Mulato en 1851 y en 1950. Para 1851 el antiguo pueblo de Chabasquén se encontraba ubicado en el sitio conocido como Pueblo Viejo y resultó destruido por un flujo de tierra lo cual motivó su mudanza al sitio del actual Chabasquén. En agosto de1950 80 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA ocurre otro flujo de tierra en el mismo lugar del Cerro Mulato. En cada uno de estos eventos, periodos de fuertes lluvias parecen ser el detonador principal de estos fenómenos gravitacionales, sin descartar la posibilidad de una influencia de la actividad sísmica asociada a la cercana falla activa de Boconó, como parece haber ocurrido en 1950. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 81 Terremotos y pensadores en Venezuela durante el Siglo XIX (Earthquakes and thinkers in Venezuela during the nineteenth Century) Andrea Noria Universidad Central de Venezuela, Escuela de Antropología Facultad de Ciencias Económicas y Sociales andrean.noriap@gmail.com En el siglo XIX, las regiones correspondientes a la nación hoy venezolana se vieron envueltas en conflictos y diferencias en torno a la comprensión del mundo que les rodeaba. Dentro de este cúmulo de razonamientos, el entendimiento sobre los terremotos estuvo marcado por pensamientos y funcionalidades propios de la época, del contexto y de las condiciones locales. La irrupción de fenómenos naturales potencialmente destructores, entonces, se fue resemantizando de acuerdo a estas condiciones contextuales que, a través de la práctica social de determinados actores, permitieron que se hiciesen evidentes las distintas formas de producción y reproducción del pensamiento sobre la naturaleza en general y sobre los terremotos en particular. En esta investigación fue posible advertir tres momentos discursivos y contextuales que condujeron a observar las transformaciones que en la cultura occidental en general habían comenzado a ocupar nuevos espacios materiales y simbólicos. Plumas y distintas voces se alzaron para disponer y liderar estos cambios. Las mismas condujeron, paulatinamente, a la consolidación de un pensamiento científico en el ámbito sismológico. Un primer momento se halla determinado por condiciones contradictorias, donde nuevas eficacias, funcionalidades y disfuncionalidades configuraron un contexto sumamente convulso. Estas condiciones llevaban impresas el sello de los conflictos políticos e ideológicos (eventualmente armados, como en el caso de la guerra de independencia), lo cual implicó la inserción de nuevos valores en la sociedad venezolana de entonces. Una mirada en transición se alzaba en medio de esta violencia material; y la presencia de fenómenos naturales potencialmente destructores, como lo fueron 82 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA los terremotos del 26 de marzo de 1812, garantizó que las voces entre ruinas y escombros que se escucharon se encontrasen deambulando entre los fundamentos del orden colonial y los discursos incipientes del modelo republicano. Alejandro de Humboldt, Manuel Palacio Fajardo, Louis Delpeche, Juan Germán Roscio y Narciso Coll y Prat, por ejemplo, fueron claros indicadores de este proceso. Los razonamientos al respecto, se llevaron a cabo al ritmo de las campanas de las iglesias, de las procesiones, de los arbitrios de la silla episcopal y de una fe inquebrantable. Confrontaciones atravesadas por una unidad confesional sujeta al orden religioso, enemigos de la modernidad entrante, simpatizantes del orden eclesiástico y arrepentidos pecadores, se vincularían en los movimientos telúricos con una mirada transicional sobre la naturaleza. En conjunto con ellos, los ilustrados, herederos del discurso enciclopedista del siglo XVIII, pensando en la gobernabilidad de la razón y en la exclusión de la superstición y la religión, abogarían por el liderazgo de la medición, sistematización y minuciosidad de la observación en la comprensión del mundo natural. Posteriormente, ya para una segunda etapa, este modelo de entendimiento que se encontraba en un estado incipiente y que asomaba los rastros de un orden republicano, se desplegó en articulación con el discurso institucional sobre la naturaleza y la búsqueda de espacios más académicos y científicos para las discusiones sobre los terremotos en particular. La sed de conocimiento prevalecía en la creciente necesidad de explicaciones racionales. En este sentido, mucho tendrían que decir, por ejemplo, pensadores como Simón Rodríguez, Agustín Codazzi, Luis Daniel Beauperthuy, Alejandro Ibarra, Lino J. Revenga y Valentín Machado. Las consideraciones sobre los terremotos pasarían de estar ocultas tras los avatares de la gesta emancipadora, a la militancia de un discurso institucional que se hizo evidente, por ejemplo, con la irrupción del terremoto del 15 de julio de 1853 en Cumaná, para adentrase en discusiones con espacios propios, con intencionalidad racional y científica, y de la mano de eventos destructores que, con su presencia insoslayable, señalaban la necesidad de respuestas sistemáticas y ahora oficiales. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 83 Un último momento en torno al pensamiento sismológico, y a las interpretaciones sobre los terremotos de entonces, se asume a través de la transición de esta mirada institucional hacia una mirada más formal y académica, cuyo ámbito práctico se pone en evidencia por medio de la aplicabilidad de estos conocimientos sobre el medio ambiente, en perspectiva con una mirada más técnica (o tecnológica), guiada por científicos y académicos. Este escenario también iría de la mano, a su vez, de la proliferación y asimilación de estas palabras y pensamientos más formales dentro del entendimiento de la sociedad y de la capacidad de respuesta del Estado ante la presencia de este fenómeno natural, conducidas a partir del papel bisagra de los intelectuales de la época. Los terremotos del 12 de abril de 1878 en la localidad de Cúa; el conocido Gran Terremoto de Los Andes, el 28 de abril de 1894; y el terremoto del 29 de octubre de 1900 en Caracas y el litoral central, serían los escenarios determinantes y oportunos de la puesta en práctica y la legitimación de estas formas de entender la realidad natural. Arístides Rojas, Adolfo Ernst, José María Martel, Wilhelm Sievers, Jesús Muñoz Tébar y Melchor Centeno Graü, por ejemplo, son algunos de los actores sociales que participaron y encabezaron este proceso. Este trabajo persigue interpretar el proceso de consolidación del pensamiento científico venezolano, a través del acendramiento conducido por el discurso que surgía de las escenas características a la vuelta de la destrucción causada por los temblores, el cual recorrería un camino decimonónico pautado por un inicio sólidamente colonial, y un cierre en plena construcción de la unidad nacional y la institucionalidad del Estado. Este mismo proceso es coincidente con la secularización característica de la cultura occidental, y por consiguiente le conforma y aporta decididamente, toda vez que da cuenta de su eficacia en la sociedad venezolana. Los terremotos, de una u otra manera, ilustran y acompañan esta historia. 84 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Ruina de Gibraltar y desaparición de San Pedro: coyunturas desastrosas en la Laguna de Maracaibo. (Gibraltar ruin and disappearance of San Pedro: joints disastrous in Maracaibo Lake) Ileana Parra Grazzina1 ileana_grazzina@yahoo.es, Rogelio Altez2 ryaltez@yahoo.es y Arlene Urdaneta1 arlenequrdaneta@gmail.com 1Universidad del Zulia 2Universidad Central de Venezuela San Antonio de Gibraltar y San Pedro datan del siglo XVI y constituyeron los más antiguos puertos y poblados negros criollos de la costa sur de la Laguna de Maracaibo. Las coyunturas desastrosas allí ocurridas representan claros ejemplos en la comprensión de los desastres como resultado de procesos históricos y sociales, y no de la dinámica particular de la naturaleza. Complejas y específicas combinaciones de variables naturales y antrópicas condicionaron, en ambos casos, la cristalización de un proceso material y subjetivo, a la vez, de vulnerabilidad social en la región gibraltareña, entendida como tal, la vertiente andino­lacustre que abarca la red hidrográfica del Pocó­Torondoy y los valles de los ríos Pino­Capaz­Frío. En Gibraltar fueron las arremetidas periódicas de piratas durante cuatro décadas (entre 1643 y 1678); la serie de terremotos destructores de la región (entre 1673 y 1674) que desencadenaron movimientos de masa e inundaciones, así como las consecuentes pérdidas de cacaotales y cañaverales; la gran pérdida de mano de obra esclava a causa de las pestes, hambre o deserción; y la prolongada y sostenida resistencia indígena. Estas variables, sumadas a la desatención institucional oportuna, propiciaron el ocaso de Gibraltar, “ciudad opulenta en vecindario y caudales”, y del protagonismo histórico como puerto de Mérida y escenario de ferias comerciales. Por otro lado, en San Pedro, dinámico puerto y pueblo cacaotero, originario asimismo del siglo XVI y ubicado en el valle de “San Pedro y Santa María”, cercano al río Tucaní, una serie combinada de variables adversas a lo VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 85 largo de tres siglos gestaron un proceso de decadencia y ruina hacia finales del siglo XIX, que se materializó en su desaparición definitiva. En este caso predominaron las recurrentes lluvias, los efectos prolongados de inundaciones, y las consecuentes tierras anegadizas junto a fiebres endémicas. En el marco de los Estudios Históricos y Sociales de los Desastres, y bajo la premisa de que la construcción de la vulnerabilidad es una constante que no desaparece (por el contrario, se redimensiona y adquiere nuevos matices en diferentes tiempos históricos), este trabajo se plantea analizar y contextualizar la producción, reproducción y transformación de riesgos desde dos ventanas de observación que conviven geográficamente y dan cuenta de una misma región: Gibraltar y San Pedro. Ambas localidades son observadas como la expresión histórica y material de contextos vulnerables incapaces de resignificarse o reconstituirse exitosamente ante las amenazas y los riesgos desplegados en su proceso de existencia. Las coyunturas desastrosas padecidas en uno y otro caso dan cuenta, igualmente, de la región gibraltareña como marco geoambiental ampliamente vulnerable, esto es: un contexto vulnerable multidimensional históricamente producido y recurrentemente padecido por las comunidades que allí han residido, llegando a expresar momentos paroxísticos de alta complejidad e, incluso, alcanzando la desaparición de una de esas localidades. Tras este objetivo, resultó ardua la investigación documental y bibliográfica. De gran aporte resultaron los documentos localizados en el Archivo General de Indias, Archivo Histórico del Estado Zulia, y Archivo Arquidiocesano de Mérida, puesto que la fuente primaria arrojó pesquisas de primera mano, elaboradas por quienes vivieron los momentos críticos de las mencionadas coyunturas desastrosas. En el mismo orden, contribuyó la versión testimonial del obispo Mariano Martí tomada de sus Documentos relativos a su visita pastoral de la Diócesis de Caracas 1771­178, recopilación sin la cual no se hubiese podido reconstruir el siglo XVIII en el caso de San Pedro. Asimismo, fuentes orales, recopiladas durante la actividad de campo llevada a cabo en los pueblos de Santa María, San Antonio y San José (años 2004­2006), permitieron evaluar las apreciaciones de los lugareños acerca del caso de San Pedro y su decadencia. 86 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Dada la necesidad y utilidad del conocimiento histórico y social de los desastres ocurridos en épocas remotas, cuyo objeto conduce a la elaboración y despliegue de medidas de adaptación y reducción de riesgos ambientales locales y regionales, esta ponencia responde a la línea estratégica de ambiente inserta en las Necesidades de Investigación 2011 sistematizadas para la propuesta FONACIT 2011. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 87 El Ávila rugía como un león: El episodio telúrico en El hombre de hierro de Rufino Blanco Fombona (The Avila roared like a lion: The telluric episode in El hombre de hierro by Rufino Blanco Fombona) Krislia I. Grimán M. Universidad Católica Andrés Bello, Escuela de Letras krisliag@gmail.com Esta ponencia abordará el episodio telúrico en El hombre de hierro, de Rufino Blanco Fombona, con el fin de mostrar los siguientes aspectos: 1. El sismo a manera de anécdota: Blanco Fombona nos narra algo que él mismo experimentó. 2. La novela como reflejo de la mentalidad venezolana. 3. El sismo como prueba moral de Crispín Luz. 4. Implicaciones religiosas y simbólicas del sismo. El 29 de octubre de 1900 ocurrió un terremoto en Caracas, Venezuela. 45 segundos fueron suficientemente devastadores. Casas caídas y deterioradas. Muertos y heridos pulverizados en cifras. Un terremoto destruye y reduce. La tierra nos recuerda cuán vulnerable somos. El miedo invoca nuestra presencia. Caminamos hacia la noche bajo una temporalidad que nos parece infinita con la misión de burlar la naturaleza. O todo, o nada. En 1907, uno de nuestros literatos más importantes y prolíficos, Rufino Blanco Fombona, publica una novela titulada El hombre de hierro, que narra la historia de Crispín Luz, personaje vilipendiado hasta por su propia familia, presentado más como un hombre de arena que como un hombre de hierro. Pero a pesar de los atropellos de los personajes que lo circundan, Crispín nos sorprenderá por su excesiva bondad, por su abnegación al trabajo, y por su amor ingenuo hacia la amada. El ente de papel que construye Blanco Fombona no compagina con la sociedad que le tocó vivir. Ésta, es, entonces, una novela de contrastes, de juegos de luz y de sombra, de terremotos, que también ocurren en el alma del personaje principal. 88 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA El episodio telúrico funciona como una vértebra de la novela, la cual narra retrospectivamente la vida de Crispín. No obstante, es necesario aclarar que, a nuestro modo de ver, la incorporación del sismo dentro de la ficción no es un asunto fortuito, sino premeditado. Y responde a varios elementos: el primero de ellos, nos muestra una recreación que el autor realiza de un incidente que él mismo presenció: el terremoto de 1900 (al cual nos referíamos al iniciar esta ponencia). Tal asunto nos indica que estamos ante la presencia de una relación entre literatura y vida. El segundo, está relacionado con la intención de enaltecer al personaje principal frente a los otros. Y tercero, pero no menos importante, el terremoto se puede rastrear de una manera simbólica, como el punto en donde los acontecimientos toman su curso más dramático. A partir de allí, la tragedia será inminente. La relación entre literatura y vida, se hace evidente si la estudiamos bajo la óptica de la escritura íntima del diario. En Viéndome vivir (1998), texto inédito publicado por esta misma universidad, podemos corroborar que Blanco Fombona habla del terremoto, justo un año después. El 29 de octubre de 1901, desde Ámsterdam, Holanda el escritor nos confiesa que el terremoto se le quedó plasmado en la mente. A partir de entonces, hasta el ruido de una puerta cerrándose lo atormentará. La incorporación de este episodio en El hombre de hierro le sirve al autor para ambientar su novela, para ubicarla en un espacio geográfico (Venezuela) y en un tiempo (principios del siglo XX). Así es como la relación entre literatura y verdad puede consumarse. Pero más allá de eso, la narración del sismo le permite a Blanco Fombona exorcizar sus demonios a través de la pluma. La escritura se vuelve purificación. Al salir esos monstruos, saldrán también los miedos. El siguiente dato biográfico, perteneciente a la publicación antes nombrada, nos permite certificar que el autor se encontraba en Venezuela y que, en efecto, vivió y sufrió el terremoto. Más aún, Fombona nos ofrece un testimonio de la tragedia. El dolor se convierte en discurso. El hombre de hierro se convierte en una novela que refleja la mentalidad venezolana de la época, cargada de supersticiones, de humor y de ingenuidad. Los venezolanos de principios de siglo, al igual que los de 1812, sentían que VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 89 un terremoto era un castigo de Dios, por lo que su imagen divina era la de un inquisidor que no sólo no perdonaba los pecados; sino que los castigaba en la misma tierra. Pero si en 1812 se pensó que el terremoto era una sanción por habernos separado de la república española; entonces, ¿qué tenía que castigar Dios en 1900? Quizás más que una condena, el terremoto sirvió para afianzar la creencia popular que vaticinaba el fin del mundo. Apenas se acabara un siglo y empezara el otro, se escucharían las trompetas del Apocalipsis. Aunque en la novela de Blanco Fombona no se hable de muertos, se revelará, a través de las invocaciones a Dios, que el susto de cada uno de los personajes se escribe con mayúscula. De hecho, el terremoto, desde el punto de vista religioso, podría funcionar en la novela como una forma de aviso, de amenaza. Los personajes dependen de algo ajeno a ellos y ese algo podría castigarlos en cualquier momento por el mal que han hecho. De todos, los más asustados parecen ser los miembros de la familia Luz. Ellos sabían cómo habían obrado y temían que su castigo viniera en este mundo, no en el otro. Pero más contundente que todo lo anterior resulta la recreación que nos hace Blanco Fombona, que sin dudas, tiene tanto de verdad como de imaginación, pues el autor no narra el terremoto de 1900 para describirnos solamente lo ocurrido, ni nos cuenta el episodio con un lenguaje técnico o científico. La anécdota se reelabora bajo el seno de lo literario. 90 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA Narrativas, mitos e imaginarios en torno a los eventos naturales en poblaciones de la cuenca del Lago de Maracaibo. (Narratives, myths and imagery around natural events in populations of Maracaibo Lake) Carlos Adán Valbuena Universidad del Zulia, Facultad de Humanidades y Educación, Departamento de Sociología y Antropología cvalbuena@luz.edu.ve Desde el chubasco de Santa Rosa hasta el mito de Ojesma, las narrativas construidas por las diversas comunidades que habitan hoy en día la cuenca del lago de Maracaibo recogen saberes que no necesariamente obstruyen las prácticas que podrían considerarse deseables frente a los efectos nocivos que eventos naturales o socioambientales e incluso antrópicos pudieran ocasionar en comunidades determinadas. De alguna manera es posible recoger referencias a instancias a través de las cuales las sociedades han logrado representaciones y prácticas de sentido frente a los eventos naturales pues mas allá de las conocidas escenas bíblicas en las cuales pueblos arrasados y sociedades devastadas evidencian el escarmiento ocasionado por la desobediencia a las deidades y en consecuencia se convierten en víctimas del castigo divino, narrativas presentes en el contexto contemporáneo de la mencionada cuenca, se configuran como elementos de calidad casi anticipatoria; de proposición de haceres y decires suficientemente contundentes como para despertar una reflexión con respecto a esos elementos culturalmente construidos como mecanismos de vigilancia y observación de los cambios contextuales frente a la aparición de indicios que delaten amenazas de carácter geológico, hidrometeorológico, antrópico o socionatural que coloquen en situación de riesgo a las comunidades concernidas. Para el desarrollo del presente trabajo se ha privilegiado la perspectiva antropológica atendiendo a que esta, aparte de centrarse en la descripción de los eventos y procesos sociales, implica también una relación directa entre los sujetos VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 91 investigadores e investigados quienes emprenden un intercambio dialógico de información al compartir la vida de las comunidades e intercambiar con los protagonistas de las prácticas, apreciaciones y criterios para lograr interpretaciones pertinentes, así como comparaciones y convalidaciones ajustadas a los hechos investigados se acudirá al registro y recopilación de los relatos orales de algunos miembros de la comunidad como fuente de información, procurando apreciar la “textura real de la vida social…” (Bertaux, 1993: 150)Se busca una lectura de las relaciones sociales a partir de las prácticas, pero también de las relaciones simbólicas, focalizando aquellos aspectos que hayan modelado la transmisión de los saberes en las comunidades. 92 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 93 Los resúmenes que se presentan a continuación están fuera de programación, pero el Comité Organizador ha decidido incluirlos dada la enorme vigencia y pertinencia que actualmente poseen 94 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 95 Contribución de los eventos del pasado al “retorno de experiencia” y a la gestión preventiva del conocimiento sobre magnas amenazas naturales creíbles de aludes torrenciales. Análisis de casos venezolanos (Contribution of past events to the return on experience process and for the preventive knowledge management concerning major credible debris flows hazard. An analysis of Venezuelan case studies) André Singer Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas, Funvisis Universidad Central de Venezuela, Escuela de Geología, Minas y Geofísica singer.andre1@gmail.com Los protocolos de retorno de experiencia basados en la formalización científica del principio empírico de los ensayos y errores constituyen hoy en día herramientas esenciales de las jóvenes ciencias del peligro (o cindínicas) para la gestión preventiva de situaciones críticas planteadas tanto por fallas tecnológicas como por errores humanos en materia de seguridad, en particular en el mundo industrial y en los sistemas modernos de transporte masivos. Asimismo, este principio adquiere una particular importancia en los aspectos concernientes al proceso individual de aprendizaje y de asimilación intelectual abordados por las ciencias de la educación a la luz de las concepciones piagetanas del desarrollo de la inteligencia. De la misma manera, la aplicación de este principio experimental al campo de la geociencias del peligro (o geocindínicas), conduce a la extracción fuera de los arcanos del pasado histórico y geológico, de las huellas ocultas de los excesos e iras de la naturaleza, que la gente incrédula mantiene relegados en aquellos territorios apartados de la dimensión desconocida, al romperse el delgado hilo del tiempo consciente y tornarse borrosa la memoria colectiva transgeneracional de sus efectos catastróficos. Sin embargo, los conocimientos explícitos obtenidos mediante una paciente reconstrucción documental de las condiciones y mecanismos de ocurrencia de aquellos eventos geodinámicos extremos, asi 96 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA como de la magnitud de sus efectos traumáticos tanto para la misma naturaleza como para las colectividades, son susceptibles de ofrecer orientaciones a futuro, que presentan analogías con la dinámica de los protocolos de “retorno de experiencia” y del proceso de aprendizaje. Esta “experiencia” resulta útil para el diseño de escenarios y simulaciones prospectivas de riesgo, en aquellos sitios cuya vulnerabilidad esta señalada por la naturaleza y atestiguada por la historia, y que se encuentran expuestos a la acción de fenómenos de alto impacto devastador como los aludes torrenciales, al permitir la anticipación y prevención de sus efectos destructores en las poblaciones instaladas o proyectadas en las zonas­fuente, trayectorias y sectores de expansión de los mismos. VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 97 Over 4 decades of paleoseismic studies in Venezuela. How far we have gone and how much still to be done! Franck A. Audemard M. faudemard@funvisis.gob.ve / franck.audemard@ing.ucv.ve Some 53 trenches for paleoseismic studies have been excavated and studied in Venezuela since a pioneering 2­trench study carried out by the American company Woodward­Clyde & Associates, as early as 1968, at the request of a former foreign oil company, for the seismic hazard assessment (SHA) of a protective earth embankment system, which was constructed along the eastern shore of lake Maracaibo to avoid inundation of increasing subsiding areas due to oil extraction. That was the only evaluation not performed by la Fundación Venezolana de Investigaciones Sismológicas –Funvisis­ (Venezuelan Foundation for Seismological Research). Results from all these studies have been progressively incorporated in specific SHA for essential infrastructure, and simultaneously in the national seismic building codes. More recently, they have become a foundation input for the microzoning studies of several major cities, which were essentially started from 2005. It is worth mentioning that most of the Venezuelan large cities sit on sedimentary basins of significant fill thickness. The above­mentioned paleoseismic studies were performed across Quaternary or active faults. Success of trenching across faults in Venezuela deeply relied on a thorough and detailed mapping of fault­related landforms. Not until very recently, Venezuela did not count with the help provided by indirect geophysical methods, such as GPR or electrical resistivity tomography. Experience developed in the Pacific US on tectonic geomorphology of strike­slip faults was transferred and applied to our major right­lateral strike­slip faults, such as Boconó, el Pilar and Oca­Ancón faults, since the late 70’s. However, Venezuela lies on a complex transpressional (compressive­transcurrent) plate boundary zone. This fact led us to develop the geomorphic evaluation of thrust faults in house since the early 90’s, and more particularly on active blind thrusting located along the edges of uplifting 98 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA orogens such as the Mérida Andes. Onshore, the future of paleoseismology in Venezuela as a discipline heads to multiplying the number of trenches, either on partly­evaluated faults or on previously non­studied faults, and very particularly on very slow faults, in order to establish from direct seismic deformations: (1) seismogenic potential of each fault or fault segment (repeat time of maximum likely earthquakes); (2) seismogenic fault segmentation; (3) fault interaction due to stress changes after an earthquake; (4) time­space distribution of major earthquakes along a given fault or fault segment; (5) seismotectonic association of historical earthquakes; (6) occurrence of last event on a fault; and (7) likelihood of occurrence of the forthcoming event on a given fault. Moreover, it can also bring additional light on: average slip rate of active faults, seismic slip per event, vertical and horizontal components of slip on a fault relying on actual striation observed on fault plane. This is of vital importance in the estimation of permanent deformations of the building environment of any type or any relevance, at the crossing with active faults. Not only the evaluation of on­fault deformation may be assessed through trenching, seismically induced effects can also be investigated with the same techniques. However, genetic relationships (cause­effect relations) derived from the second set of features are more time and effort consuming. As to this, the Earth Sciences Department of Funvisis since late 2000, in collaboration with the Laboratoire of Géodynamique des Chaînes Alpines –LGCA­ of the University of Chambery (current ISTerre) –Bourget du Lac, Savoie, France­ have targeted peri­glacial lakes and paleo­lakes of the Santo Domingo­ Apartaderos region, in the central Venezuelan Andes, recovering long cores and determining a combined seismic history for the Boconó fault by correlating and integrating on­fault and off­fault earthquake chronologies. In recent years, we have been using a sort of advertising slogan that reflects a major tendency of where we are now looking at. I quote: “I have turned my back to onshore Venezuela and stare now at offshore Venezuela and Caribbean coastal areas”. Since 2006, we have launched and carried out an aggressive program of single­channel high­resolution shallow seismic VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA 99 reflection acquisition, a more modest campaign of core recovery offshore so far and a growing interest on paleo­ and historical tsunami recognition along our exposed low­lying inhabited seashores. The cataloguing of tsunami prone areas was started with an investigation of historical first­hand accounts and testimonies that guided the geologic exploration (by coring and trenching) of a set of coastal lagoon in eastern Venezuela. This has been luckily boosted by the interest of UNESCO of implementing an Early Tsunami Warning System for the Caribbean and adjacent regions –Caribbean ETWS­, which is a benevolent consequence of the disastrous Sumatra 2004 tsunami. We still have to elucidate whether these local tsunamis are triggered by earthquake­induced submarine sliding or sea bottom deformation produced by right­lateral strike­ slip faulting; being this author inclined for the second cause, at least during some of the major offshore events (e.g., San Narciso 1900 event). We have definitely not abandoned onshore exploration!! In parallel, we have been trenching very slow faults (e.g. El Ávila fault), cataloguing prone areas to liquefaction nationwide, determining liquefaction potential and mass wasting susceptibility of certain regions (particularly for city microzoning projects), establishing the time­space distribution of major –both historical and prehistorical­ earthquakes at regional scale, mapping spatial distribution of liquefaction features during certain modern large earthquakes. Some of these products have led to building a magnitude­to­feature size relationship from either a national or international catalogue of earthquakes triggering liquefaction. These served as input for the development of the INQUA Environmental Seismic Intensity Scale as to 2007. In the same way, to refine geologically/geomorphologically derived fault slip rates, from the beginning of this XXI century, local benchmark networks have been installed and measured with GPS in eastern (since 2003) and western (since 2011) Venezuela. This is also being improved by the current installation of cGPS stations, with a multi­parameter goal (tectonic slip, tsunami detection and weather watching and forecasting). Other features, such as seismically induced deep­seated landslides, have been targeted since late year 2000. During the reconnaissance of potential GPS sites, very large mass movements of the type 100 VI JORNADAS VENEZOLANAS DE SISMOLOGÍA HISTÓRICA of Deep­Seated Gravitational Slope Deformations –DSGSD­ have been identified and mapped, bringing new insights on the current evolution of high relief areas of the Mérida Andes.1 1 BELQUA­2012 Annual Scientific Workshop, March 01; The Royal Academies of Belgium for Science and Arts, Brusells, Belgium