"Reflexiones Acerca de Texto y Contexto" 7ª Conferencia Sobre Educación del holocausto. Yad Vashem, Jerusalém 13-6-2010 Prof. Yehuda Bauer, Asesor Académico, Yad Vashem Hablaré acerca de lo que yo llamo texto y contexto. Texto. Por texto me refiero al núcleo del Holocausto. ¿Cuál es el núcleo del Holocausto? Es el período comprendido entre 1933 y 1950. 1950, debido a que fue recién entonces en que los sobrevivientes que aún estaban en los Campamentos de Personas Desplazadas del centro de Europa, encontraron por fin sus nuevos hogares, en este país, en occidente o donde sea. Así que el texto es ese lapso de diecisiete años. El núcleo es el antisemitismo nazi, el partido nazi, la persecución de los judíos en Alemania sobre el telón de fondo de las políticas nazis. Es la guerra mundial, los campos, los guetos, los campos de concentración, los campos de exterminio, el ocultamiento, la resistencia, los intentos de rescate, las políticas de las grandes potencias en relación a lo que estaba sucediendo en Europa en ese período, son las relaciones, generalmente, entre judíos y no judíos en la Europa de ese tiempo. El contexto es el período de la inmediata posguerra, de los Campos de Personas Desplazadas, y la dispersión de las personas desplazadas al final, sea donde sea que se hayan ido después. Ese es el núcleo. Ese es el núcleo que incluye el contexto inmediato, por supuesto, porque no se pueden separar estas cosas entre sí, en una especie de compartimentos estancos. Contexto. El contexto, se refiere a lo que sucedió antes y después. En dos abordajes: vertical y horizontal. El corte vertical de la historia trata de los derechos humanos, la historia del pueblo judío, la historia del antisemitismo, la historia de la relación entre judíos y no judíos a lo largo de los últimos cientos de años, es la historia de Europa, la historia de Alemania dentro de Europa, la historia del mundo. El punto de vista horizontal, son las cosas globales, es decir, todo el mundo, porque judíos fueron a Filipinas, a Indonesia, a Shanghai, a India, a Afganistán, África del Norte, África del Sur, África Central, el mundo entero está involucrado en esto. Así que este es el contexto general que incluye a los otros genocidios. El Holocausto, obviamente, fue un genocidio, me refiero a las comparaciones de los efectos de otros genocidios. Hay que ocuparse de los efectos de este genocidio en particular, en la posguerra y hasta hoy, con lo extremo del genocidio, con sus "lecciones" si se quiere pensar así, porque no creo que haya “lecciones” intencionales sino que las "lecciones" se adaptan a partir de lo que se sabe. Derechos humanos y la inacción de las potencias. Así que estos son algunos de los contextos generales, y hay una tendencia, no sólo entre los educadores, sino también en el público en general, los políticos y otros, de mezclar estas cosas, de hablar acerca del más amplio contexto sin conocer el texto. Tratan con los derechos humanos como si esa fuera, esencialmente, la forma en que debe acercarse al Holocausto, pero eso es un error. Efectivamente a los judíos se les negaron los derechos humanos en Alemania y en todas partes, hay una conexión evidente, pero podría no haber sido así. Si, como era perfectamente posible, el Holocausto no hubiera sucedido, no por la hermosa mirada de los ojos de los judíos, sino por el interés de las potencias europeas, que podrían haber detenido a Hitler en su avance en 1936, cuando la Alemania nazi ocupó la Renania, en 1 1938, cuando anexaron Austria, y tras el acuerdo de Munich, cuando se anexaron partes de Checoslovaquia, y luego destruyeron por completo a ese país. En cualquiera de esos momentos podrían haber sido detenidos, no por ninguna consideración humanitaria sino porque era del interés de Gran Bretaña y Francia, en ese momento, detener a Hitler. No lo hicieron. Pagaron muy caro por eso. Lo mismo hicieron los soviéticos. En junio de 1939, se llevaron a cabo negociaciones en Leningrado, hoy San Petersburgo, entre una misión anglo-francesa que trató de ver si podría haber una alianza entre Occidente y los soviéticos, a fin de detener a la Alemania nazi. Podrían haberlo hecho. Negociaron con Voroshilov - no era exactamente un Einstein, pero era un representante de Stalin-, les preguntó a los británicos ¿con qué podían contribuir? El representante británico dijo: ‘dos divisiones’, y más tarde un poco más, es que no tenían nada. El francés dijo: nos mantendremos detrás de la Línea Maginot. Los soviéticos se dieron cuenta de que querían hacer que los nazis atacaran a la Unión Soviética, por lo que dijeron no y, en cambio, hicieron un pacto con Hitler. Podrían haberlo detenido. De haber sido así, ¿qué habríamos dicho hoy? ¿habríamos dicho que hubo negación de los derechos humanos a los judíos en Alemania? Esta negación no condujo a nada más que a la expulsión de los judíos alemanes de Alemania. No hay allí ninguna conexión necesaria con el Holocausto. Pero después de ocuparse del texto también hay que ocuparse de los derechos humanos y se puede decir que en la realidad de los hechos, hablando cronológicamente y en relación al contenido, que la negación de los derechos humanos fue una de las cosas que claramente, condujeron al Holocausto. Pero no tenía por qué ser así. ¿Por qué estalló la guerra? Así que permítanme ocuparme de algo del núcleo, algo del texto. Comenzaré con algo de lo que muy pocas personas se ocupan. ¿Por qué estalló la Segunda Guerra Mundial? Hay cualquier cantidad de libros que se ocupan de Danzig, del corredor, del ataque a Polonia, de las cuestiones diplomáticas, de los preparativos militares, de la situación económica, sabemos todo eso. Eso no es una explicación de por qué estalló la guerra. Alguien quiso que estallara. Y ese alguien, obviamente, fue la Alemania nazi. Ningún otro quería una guerra. ¿Por qué los nazis querían una guerra? Después de todo, Alemania había salido de la crisis económica. Prácticamente ya no había desempleo en Alemania, a los capitalistas alemanes les estaba yendo muy bien, lo que se ve en la documentación de las grandes empresas alemanas de la época. No presionaban al liderazgo político para una guerra, les estaba yendo muy bien sin una guerra. Los militares, en Alemania, estaban preparando un golpe de estado contra Hitler en septiembre de 1938. El líder de dicha asociación conspirativa era nada menos que el jefe de Estado Mayor del ejército alemán, el general Ludwig Beck. No sé si este golpe habría tenido éxito, o si habría sucedido siquiera. No tengo ni idea, porque, por supuesto, Chamberlain y Daladier fueron a Munich y la situación "se resolvió". Pero esto demuestra muy claramente que el ejército alemán, el liderazgo del ejército alemán, no quería una guerra, no porque fueran pacifistas, sino porque temían que la perderían. ¿Quién quería la guerra? Así que los militares no querían una guerra, entonces ¿quién quería una guerra? La respuesta estúpida es: Hitler. La inteligente es: la dirección del partido nazi en Alemania. ¿Por qué? Supuestamente porque querían Lebensraum, espacio vital. ¿Por qué querían espacio vital? Tenían un montón de espacio vital en Alemania. La población de entonces de Alemania era más pequeña que la población 2 alemana en la actualidad y lideraban industrialmente a Europa. Querían controlar Europa, ¿por qué querían controlar Europa? ¿Que hay detrás de todo esto? ¿Hay una pistola humeante en alguna parte? Sí, la hay. Hemos sabido de ella desde los juicios de Nuremberg. Se trata de un memorandum de agosto de 1936. Está en los documentos de los juicios de Nuremberg: Hitler escribió un memorandum muy privado y secreto - el único escrito alguna vez por él mismo, en un horrible alemán, porque el hombre no conocía su propia lengua, dirigido a Hermann Goering, el número dos en la jerarquía, un memo privado que no estaba, evidentemente, destinado a publicación o propaganda. Goering iba a ser designado en octubre de 1936, el zar económico de Alemania. Debía planificar los siguientes años en preparación de una guerra. Se trató de un plan de cuatro años que luego se redujo a tres. Goering tenía que saber lo qué debía hacer, luego el patrón le escribió una carta, un memorandum. Contrariamente a lo que la gente piensa, Hitler conocía bastante bien de macroeconomía, y escribió exactamente lo que Alemania necesitaba para una guerra, cuanto acero, hierro, tanto esto, tanto de esto otro, cómo conseguirlo, dónde conseguirlo, etcétera. El miedo al bolcheviquismo. Pero la primera página explica por qué. Permítanme citar sólo una frase en el lenguaje de Hitler que traduje literalmente para mostrar la forma de pensar de Hitler y también el modo peculiar en que utilizaba el lenguaje. "Desde el comienzo de la revolución francesa el mundo ha ido a la deriva, con velocidad creciente, hacia un nuevo conflicto, cuya solución más extrema se denomina Bolcheviquismo, pero cuyo contenido y objetivo es la eliminación de aquellos estratos de la sociedad que le dieron el liderazgo a la humanidad hasta el presente, y su sustitución por el judaísmo internacional... Una victoria del bolcheviquismo sobre Alemania no conducirá al Tratado de Versalles sino a la destrucción final, incluso al exterminio del pueblo alemán". ¿Por qué queremos una guerra? Porque debemos derrotar al bolcheviquismo, porque el bolcheviquismo es judío, y el bolcheviquismo quiere reemplazar a todos los dirigentes de la humanidad por judíos. Esa es la razón para la guerra. Y luego, el 30 de enero de 1939, en su famoso discurso ante el Reichstag, que se puede ver filmado, añadió, y cito: "Si los financistas judíos internacionales, dentro y fuera de Europa, tuvieran éxito en hundir a las naciones, una vez más, en una guerra mundial, entonces el resultado no será la bolcheviquización de la tierra, y esa es la victoria de los judíos, sino la aniquilación de la raza judía en Europa". [En la visión de Hitler] bolcheviquismo y financistas judíos internacionales son una sola cosa. Y cada judío representa a todos ellos y, por lo tanto, la aniquilación de la raza judía es esencial. Ese es el propósito de la guerra. Ese es el núcleo del Holocausto. Las víctimas. Encararé ahora otro elemento del núcleo, esta vez las víctimas. Lo que es esencial en este caso no es sólo un registro del asesinato. Todos sabemos eso. Lo que necesitamos es darnos cuenta cuáles fueron las reacciones de las víctimas. Las reacciones antes de que supieran lo que iba a suceder, después de que supieron lo que iba a suceder, y cómo reaccionaron mientras estaba sucediendo y luego, en el período inmediatamente posterior. Las décadas después de eso, pertenecen al contexto general, pero el núcleo es lo que los judíos hicieron. La percepción sigue siendo, dentro de una gran parte de la comunidad internacional, que los judíos fueron objeto de un asesinato. Es parcialmente cierto, y parcialmente falso, porque los judíos no sólo eran objetos, eran, primero y principal, sujetos. Es por eso que se convirtieron en objetos, porque 3 desarrollan un cierto tipo de cultura, de civilización, que fue atacada por algo que llamamos muy inexactamente antisemitismo, -que no tenemos tiempo de profundizar ahora- que se convirtió en una herramienta política central, tanto en Europa como en muchos otros lugares. La reacción judía. La reacción de los judíos fue variada. En Alemania por ejemplo, durante la década de 1930, hubo un formidable esfuerzo por parte del declinante número de la comunidad judía en Alemania, para recuperar su propia cultura dentro de Alemania. Hubo un florecimiento de la cultura judía en un contexto exclusivo para Judíos porque no se les permitía tener ningún contacto real con sus vecinos no judíos. Produjeron literatura, teatro, música, historia, historia, de la acostumbrada manera judía, con contradicciones y oposiciones, con un tremendo florecimiento. Entonces encontramos que dentro del mismo Holocausto, dentro del mismo asesinato, tuvo lugar un florecimiento y también una reacción. No había armas, no había posibilidad de resistencia armada, pero había posibilidad de reacciones sin armas o resistencia sin armas. Sabemos todo esto, pero hay que enfatizarlo, porque es crucial para la comprensión, no sólo de la reacción judía sino de la capacidad de reacción humana. Aquí es donde se combinan la especificidad de la experiencia judía y la experiencia universal. ¿Cómo reaccionan las personas cuando se enfrentan a una situación de genocidio, de asesinato en masa? La reacción judía fue única y aquí utilizo el término único y no lo uso en otro sitio. El Holocausto no fue único, pero aquí utilizo el término único, porque no hay otro ejemplo en la historia de una tal reacción desarmada cultural, educativa, civilizatoria, a una situación de asesinato en masa, genocida, por parte de civiles afectados por esa situación. Se encuentra esta reacción en Varsovia, en Lodz, en Vilna/Vilnius, en muchos otros lugares, no sólo en Polonia. Sucede en Terezin, en la actual República Checa y en otros lugares, se produce una reacción al momento, a la más mínima oportunidad. También hubo una reacción opuesta, un colapso total de la cohesión social. Hubo lugares donde no hubo educación, ni vida religiosa, ni vida cultural, ni bienestar social, ni ayuda mutua. Podría dar ejemplos, pero no es posible porque no tengo el tiempo para ello. Así que ¿por qué ocurrió en algunos lugares y no en otros? Mi respuesta es muy clara. No sé. Mi conjetura es que hay un elemento de carácter personal, de oportunidad y suerte, y sé que mis colegas historiadores se encogen cuando utilizo esos términos, puesto que no es una explicación histórica. Pero es porque estamos tratando con seres humanos, con gente, no con objetos flotantes en el aire. Los seres humanos tienen carácter y pueden tener suerte y oportunidad y a veces las podrían aprovechar y otras no. La reacción de los judíos es un núcleo del Holocausto. Especificidad del Holocausto. Totalidad. Otro elemento central es la especificidad del Holocausto, en comparación con otros eventos del mismo tipo. Porque es sólo en el Holocausto que se tienen elementos tales como totalidad, por ejemplo. Fue desarrollado un plan que decía que cada persona con tres o cuatro abuelos judíos debía ser muerta (en Alemania, no todos aquellos con dos abuelos judíos, porque no estaban muy seguros de cómo manejarse con los así llamados mestizos - todos los que tenían tres o cuatro abuelos judíos.) La gente estaba condenada a muerte por el crimen de haber nacido. Y no hay ningún 4 precedente de eso en la historia humana. Y esto iba a ocurrir en todas partes del mundo. No había estado planeado así antes. El Holocausto no fue planeado previamente. Hasta 1941, no existía ningún plan para asesinar a todos los judíos. Puedo decirlo con absoluta certeza. El plan se fue desarrollando junto con el asesinato en masa a mediados de 1941 y en el otoño – septiembre, octubre- fue tomando forma. En el invierno de 1941 –diciembre, enero- ya estaba allí. El 28 de noviembre de 1941, Hitler se reunió en Berlin con el Mufti de Jerusalem, Haj Amin al-Huseini, colaborador nazi. Debido a que el Sr. Al-Husseini no sabía nada de alemán y el Sr. Hitler no conocía nada de árabe, había un traductor que tomó notas, así podemos saber exactamente lo que se dijo. Al-Husseini expresó su preocupación de cómo tratar al pueblo judío fuera de Europa. Y Hitler dijo: Cuando ganemos la guerra en todos los países del mundo se tratará a los Judíos de la misma forma en que los estamos tratando aquí". Universalidad. Cuando se habla de genocidio, se habla acerca de intención. Aquí tienen un documento que muestra, muy claramente, cual era la intención. No es el único, hay varios más por el estilo. Esta internacionalización no tiene precedentes en la historia de la humanidad, un genocidio globalizado. No fue así en Rwanda, que se limitó a la superficie del país; ni con los armenios en la Turquía otomana, que se limitaba a las zonas étnicas turcas; Los armenios en Jerusalén no fueron tocados, porque ésta no era una zona étnica turca. No es así en Darfur que, fuera de Darfur, no hay genocidio de Darfur. Pero había judíos en otros países fuera de Europa y ese genocidio iba a ocurrir en todas partes del mundo. Ideología. También tenemos la ideología, una ideología totalmente no pragmática. Los judíos no tenían ningún territorio, ningún ejército, ninguna institución que los centralizara. La primera vez que hubo un liderazgo de los judíos alemanes fue ocho meses después de que Hitler llegara al poder. Nunca había habido una comunidad judeo-alemana, había judíos de Alemania, pero no una comunidad judeo-alemana. En Polonia tampoco. Desde el siglo 18 no había habido ningún tipo de asociación de los judíos de Polonia que representara a todos los judíos de Polonia. Los judíos estaban divididos, una parte de ellos eran socialistas que se oponían al sionismo y a la religión. Una parte de ellos eran sionistas que peleaban entre sí y una parte de ellos eran ortodoxos, que se peleaban con todos los demás. La primera vez que hubo una organización unida polaco-judía, fue cuando un industrial judío de Lodz envió un telegrama, un cable, a París al Joint Distribution Committee, para decir "Hemos logrado crear un comité que representa a todos los judíos de Polonia con el objeto de ocuparnos de la asistencia social en Polonia". La fecha de dicho cable fue el 3 de septiembre de 1939. No había representación política judía constituida, vino mucho después. Y así vemos que el colectivo judío que estaban atacando no existía. Fue una ideología ilusoria, una ideología delirante. Pensaban que los judíos controlaban al mundo, bolcheviques y capitalistas. Es el resultado de determinados desarrollos ideológicos que llamamos antisemitismo nazi. Es totalmente no pragmático. Destruyeron el gueto de Lodz en la primavera de 1944, a pesar de que los nazis locales, por sus propias razones, querían que el gueto continuara existiendo, y el ejército alemán, la Wehrmacht, quería que continuara existiendo, porque estaban obteniendo algunas 5 cosas de allí, que eran muy seguras, porque los bombarderos aliados nunca atacaron Lodz. Pero en la primavera de 1944, hubo una directa intervención de Himmler ordenando que no debía haber ninguna consideración económica, de cualquier valor, y que los judíos debían desaparecer. (Sollen verschwinden)... Y parte de ellos fueron deportados a Chelmno, de donde no quedaron sobrevivientes, y más tarde, el resto fue deportado a Auschwitz. ¿Es eso pragmático? ¿Ese costo es eficaz? ¿Eso está dentro del interés alemán, económico, militar, o lo que sea? No. Es el único genocidio en la historia que se basó, absolutamente, en principios no pragmáticos, incluso antipragmáticos. Ese es el núcleo del Holocausto. ¿Por qué no salvaron a los judíos de Europa? ¿Por qué no bombardearon Auschwitz? Abordaré un tercer aspecto central: los neutrales y los aliados y su relación con lo que estaba sucediendo. Un gran número de mis colegas, especialmente en Estados Unidos, acusó a la administración Roosevelt de no haber hecho nada para rescatar a los judíos europeos. ¿Cuándo, exactamente, los estadounidenses deberían haber hecho esto? ¿Antes de la guerra? Pero nadie sabía que habría un Holocausto. Ellos podrían haber aceptado a más refugiados procedentes de Alemania. ¿De verdad creen que Estados Unidos tenía una obligación de rescatar a gente sufriendo algún tipo de desastre en cualquier parte del mundo? ¿Es eso realista? Y cuando estalló la guerra, Estados Unidos se encontraba fuera de la guerra. Se unió a la guerra, por así decirlo, después del ataque japonés a Pearl Harbor. Si los japoneses no hubieran atacado, los estadounidenses se habrían mantenido neutrales. No fue Estados Unidos quien declaró la guerra a Alemania. Si Alemania no declaraba la guerra a Estados Unidos, los estadounidenses se habrían mantenido neutrales. Y una vez que se vieron forzados a la guerra, a finales de 1941, ¿cómo podrían haber rescatado a los judíos europeos? No había un solo soldado, estadounidense o británico, en el continente europeo. Estaba ocurriendo en Europa Oriental, y los soviéticos estaban huyendo, huían porque estaban completamente derrotados al comienzo de la invasión alemana. Estaban luchando por sus vidas y no les preocupaban los judíos de todos modos. Entonces, ¿cómo, exactamente, piensan ustedes que la coalición anglo-estadounidense podría haber rescatado a los judíos de Europa durante el Holocausto? Podrían haber hecho más, seguro. Podrían haber rescatado a miles, quizá decenas de miles. Los británicos cerraron Palestina. Los británicos negaron la entrada de refugiados judíos desde la península Ibérica a Gran Bretaña durante la guerra. Los estadounidenses tenían sus cuotas, muy, muy limitadas, pocos cientos por aquí, pocos cientos por allá, durante la guerra. Podrían haber hecho más. De hecho decidieron no hacer más. Pero ¿rescatar a los judíos de Europa?: no podrían haberlo hecho. ¿Podrían haber bombardeado Auschwitz? ¿Podrían haber bombardeado Treblinka, Chelmno, Sobibor, Belzec? ¿Podrían haber hecho eso? La respuesta es no. No podían, no hasta la primavera de 1944. ... Los bombarderos anglo-estadounidense Lancaster podrían haber alcanzado Polonia una sola vez. Podrían haber alcanzado Polonia oriental y regresar a Inglaterra, pero no podían hacerlo sin una escolta de cazas. No había cazas, aviones o cazas que pudieran acompañar a los bombarderos hasta tan lejos. Así que habrían estado completamente solos. Habrían sido derribados como patos volando. No había manera de que la fuerza aérea anglo estadounidense pudiera haber alcanzado a Polonia antes de la primavera de 1944. ¿Por qué podían alcanzarla entonces? Porque los aliados ocuparon los aeródromos de Foggio, en Italia central, en Noviembre de 1943. Les tomó unos tres meses reconstruirlo porque, por supuesto, los alemanes lo destruyeron completamente, y recién entonces podrían haber bombardeado Polonia. 6 Pero a comienzos de 1944, Treblinka ya no estaba en funcionamiento, Sobibor ya no estaba en funcionamiento, Belzec ya no estaba en funcionamiento y Chelmno estuvo en funcionamiento durante un corto período de tiempo para destruir a los judíos de Lodz, en junio de 1944. Sólo estaba Auschwitz-Birkenau. Obtuvieron información sobre Auschwitz-Birkenau, información detallada, en junio de 1944, cuando los informes de cuatro judíos, evadidos juntos de Auschwitz, llegaron a occidente. También hubo informes de la resistencia polaca, de la Delegatura de Polonia. Un libro que se publicó en Oswiecim, en el museo de Auschwitz-Birkenau, en 1968 bajo los comunistas, transcribió el informe exacto que fue enviado a Londres desde Polonia y que incluía la destrucción de los judíos en Auschwitz. Y el gobierno polaco en el exilio lo informó a Occidente. Así que en la primavera de 1944 podrían haber bombardeado Auschwitz-Birkenau. ¿Por qué no lo bombardearon? Porque, en enero de 1944, hubo una decisión del Estado Mayor Conjunto en Washington de no usar medios militares para propósitos civiles. Auschwitz era un campo civil, no tenía importancia militar. Monowitz, Auschwitz III, sí la tenía, así que fue parcialmente bombardeado. Y, por error, unas cuantas bombas cayeron en Birkenau. Pero había una decisión, que nada tenía que ver con los judíos, no se trataba de antisemitismo sino el resultado de un fallido ataque de los aliados en Francia para liberar a los combatientes resistentes franceses en Dieppe. Debido a ese fracaso, decidieron no volver a recurrir a medios militares para propósitos civiles. Y cuando llegó la solicitud de bombardear Auschwitz, dijeron: ‘Pero tomamos una decisión, no podemos hacerlo’. Hubo, de hecho, un Mariscal del Aire estadounidense, Spaatz, que el 2 de agosto de 1944, les dijo a sus superiores en Washington: ‘Si me dan el permiso, bombardearé Birkenau’. Nunca lo obtuvo. Así que existió una posibilidad en los últimos momentos, pero ¿eso podría haber salvado a millones de judíos? No. ¿Podría haber salvado a los judíos en el campo de Auschwitz? No, pero tal vez habría enviado un mensaje que decía: nos importa. Se trata de una cuestión moral, no una pragmática. Y los aliados no fracasaron debido a lo pragmático. No habrían salvado judíos de esa manera. Aunque los crematorios hubieran sido destruidos, lo cual es muy poco probable, los alemanes habrían continuado asesinando judíos. Lo hicieron en la marchas de la muerte, inmediatamente después de eso. No, el bombardeo a Auschwtiz no habría cambiado nada, pero habrían enviado un mensaje moral: nos importa la vida humana, nos preocupamos por millones de personas que sabemos que están siendo asesinadas porque son judías. No lo hicieron. El fracaso de esta proposición moral sigue siendo señalada. Lo que quiero enfatizar es que sin el núcleo, sin el texto, no se puede abordar el contexto. Pero, sí, hay que abordar el contexto después de abordar el texto. Se debe hacer. La gente dice que el Holocausto es incomparable, es único. No lo es. Si fuera único, si hubiera sido único, significaría que ocurrió sólo una vez en la historia, y entonces podríamos olvidarnos de él, porque si algo ocurrió sólo una vez, no tiene significado para nosotros. Pero puede repetirse, no exactamente, las cosas nunca se repiten exactamente, pero sí de un modo general. Así que no es único, no tiene precedentes, lo que significa que el Holocausto fue un precedente, y los sigue habiendo, de maneras diferentes, no de la misma manera, siguen habiéndolos. Y es por eso que están ustedes aquí. Porque es muy, muy específicamente judío. No pueden hacer frente al contexto sin tratar con el texto judío. Deben saber algo acerca de los judíos. Si abordan el genocidio de Ruanda, deben saber algo acerca de los hutus y 7 los tutsis. Si están en Camboya tienen que saber la diferencia entre el Khmer y el Cham. Y si se trata de los indios americanos, tienen que saber la diferencia entre los Lakota y los Pawnees. No se puede prescindir de ello. Así que hay que saber algo acerca de los judíos. Eso es muy, muy específico. Y todo genocidio es específico para las personas que lo sufren. Y el hecho de que sea específico significa que es universal, porque todo genocidio es así. Allí tienen la dialéctica del asunto. Así que no tiene precedentes pero es un precedente, y hay que enseñarlo en sus dos aspectos, la especificidad y la universalidad, son dos caras de una misma moneda. Conclusiones. ¿Cuáles son mis conclusiones? Bueno, yo soy muy escéptico acerca de las conclusiones generales, ya saben, son el inicio de algún estudio más. Pero creo que las conclusiones de lo que acabo de decir son, en primer lugar, la comprensión de que la Segunda Guerra Mundial fue llevada acabo por la Alemania nazi, principalmente por razones ideológicas, y el Holocausto es el producto de razones ideológicas, no pragmáticas. Y todo encaja de un modo horrible. El Holocausto, que es motivado ideológicamente, encajó en la II Guerra Mundial, que fue motivada ideológicamente, no como la Primera Guerra Mundial, que fue motivada por razones económicas, políticas y otras razones pragmáticas. En segundo lugar, y eso está incluido en el primero, el antisemitismo fue una motivación básica lo que tiene profundas raíces históricas. El resultado de la Segunda Guerra Mundial fue el asesinato, la muerte, de treinta y cinco millones de personas sólo en Europa, sin Asia. Treinta y cinco millones, cerca de seis millones de los cuales eran judíos, veintinueve millones de los cuales eran no judíos. Los veintinueve millones de no judíos murieron a causa del antisemitismo. En tercer lugar, existen paralelismos y también muy considerables diferencias, en relación con las más extremas formas de genocidio. No por el número de víctimas, que fue igualado por otros, no debido al porcentaje de las víctimas del conjunto de la comunidad víctima, que también es igualada por otros, no por el sufrimiento de las víctimas, que siempre es el mismo en todas partes. No hay diferencia entre judíos, tutsis, rusos, alemanes, y cualquiera que sea, sino por las razones que he mencionado la totalidad, la universalidad, la ideología y algunos otros puntos que no tuve tiempo para abordar. No se puede evitar hacer una comparación entre la Alemania nazi y el imperio soviético. Pero esa comparación muestra no sólo los paralelos, sino las principales diferencias entre esos dos regímenes totalitarios. Los soviéticos no fueron responsables de la Segunda Guerra Mundial. Era una dictadura brutal, un régimen horrible, pero no fue responsable de un genocidio en masa. Fue responsable de algunas cosas genocidas, claro. Nunca planearon un genocidio importante per se. Fue suficientemente horrible como fue y fue aliado de la Alemania nazi por un tiempo, lo que permitió a los alemanes hacer lo que hicieron, pero eso no fue culpa de los soviéticos. Fue culpa de las tres grandes potencias, que se podrían haber unido para detener a la Alemania nazi y no lo hicieron. Una igualación simplista entre el nazismo y el estalinismo es equivocada. Una prueba de ello es el Holocausto. 8 Y, finalmente, si se quiere enseñar el Holocausto, hay que empezar desde el núcleo, desde el texto, antes de poder abordar al contexto. Pero hay que hacer ambas cosas. Gracias. Traducido para Generaciones de la Shoá por José Blumenfeld 9