Hambre de un Amor Infinito y Sed de Eternidad (II) // Fam d’un Amor Infinit i Sed d’Eternitat (II) El milagro Eucarístico “dels Peixets” (de los Pececitos), de Alboraya y Almácera, Valencia, España. Sábado / Dissabte, 22-8-2015 Memoria de Santa María Reina del Universo Domingo XXI del Tiempo Ordinario, ciclo B Evangelio: Jn 6,60-69 Apuntes para la homilía Seguimos leyendo el Discurso del Pan de Vida, en el Evangelio de Juan. "Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre. Y el pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo.” Disputaban los judíos entre sí: "¿Cómo puede éste darnos a comer su carne?” ... “Mi carne es verdadera comida y mi sangre es verdadera bebida. El que come mi carne y bebe mi sangre habita en mí y yo en él..." Escuchamos, en el Evangelio de este domingo, el final de este discurso del Pan de Vida. Aquí está la clave de comprensión de todo el texto. Hemos visto que muchos dejan de seguir a Jesús por considerar inadmisible este lenguaje. Y Jesús les pregunta a sus doce apóstoles si ellos también quieren dejarlo. San Pedro contesta, en nombre de toda la Iglesia: "Señor, ¿a quién vamos a acudir? Tú tienes palabras de vida eterna." Las palabras enigmáticas de Jesús, sobre “comer su carne” y “beber su sangre”, son “palabras de vida eterna”. No es la carne y la sangre de un cuerpo mortal, sino de un cuerpo glorioso y resucitado, la carne y la sangre que comemos y bebemos en la Eucaristía. De manera que el Pan Glorioso de la Eucaristía no lo comemos nosotros, como hacemos con el pan ordinario, asimilándolo a nuestro organismo. No. ¡El pan de la Eucaristía “se nos come” a nosotros, “a besos”! Es Jesús resucitado que nos asimila a su Inmortalidad Gloriosa. En nuestro cuerpo mortal, que un día morirá, ya entra una semilla de inmortalidad. Pero Dios sabe muy bien que este misterio nos sobrepasa. Por ello, muy puntualmente, Dios permite que el velo de la Eucaristía se retire, en los milagros eucarísticos. Veíamos, el domingo pasado, los milagros eucarísticos de la Santa Duda de Ivorra (en Cataluña, España), Lanciano (en Italia) y el impresionante milagro eucarístico de Tumaco, Colombia, cuando Jesús, realmente presente en la Eucaristía, paró un tremendo tsunami. Hablaremos hoy brevemente de un milagro eucarístico de obligada referencia en el Obispado de Sant Feliu de Llobregat: el milagro eucarístico de Los Pececitos, ocurrido en Alboraya, Valencia. De “obligada” referencia Cortés. Y por ello ahí Obispado de Sant Feliu Encuentro Mundial de las 2006. porque de ahí es nuestro amado nos alojamos un buen grupo de de Llobregat, cuando fuimos a Familias, con el Papa Benedicto Obispo Agustín diocesanos del Valencia en el XVI, en el año Allí, los amables sacerdotes del lugar nos explicaron, con mucho respeto y reverencia, lo que había ocurrido en el año 1348. Cuenta la tradición (en ningún momento nos hablaron de “leyenda”), que el sacerdote de Alboraya fue solicitado en la población vecina de Almácera (perteneciente a su parroquia) para que fuera a administrar el viático a un morisco converso llamado Hassam-Ardá. El sacerdote desgraciadamente cayó al río Carraixet que separa las dos poblaciones, pues era un día de intensa lluvia y bajaba muy crecido. Las tres formas consagradas fueron a parar al río, muy cerca de su desembocadura al mar. El hecho causó consternación en aquellas gentes tan piadosas y amantes de la Eucaristía. Se celebraron misas de reparación y se elevaron fervientes oraciones a Dios para poder remediar aquella gran desgracia que había ocurrido involuntariamente. Al día siguiente unos pescadores en la desembocadura del río dieron la voz de alarma: unos peces llevaban algo blanco en la boca. Resultaron ser las tres formas consagradas. El sacerdote fue corriendo a la orilla del río, con el copón, y los pececitos fueron depositando en él, uno tras otro, las formas consagradas. Desde entonces el milagro eucarístico “dels Peixets” (de los pececitos, en valenciano), se conmemora con una procesión el lunes de Pentecostés, a la ermita erigida en recuerdo de tal suceso. Hermanos y hermanas, quizás a alguien le parezca algo curioso este milagro eucarístico. Pero no es nada improbable que unos seres irracionales, los tres pececitos, reconocieran en aquellas tres formas consagradas a su Creador y Señor, escondido. Y por un instinto sobrenatural se vieran movidos a ayudar a restituir, a Dios sacramentado, al lugar digno que le correspondía: el copón en el Sagrario. El tsunami retrocedió ante el Santísimo, en Tumaco, Colombia. En Alboraya, Valencia, España, pasó algo más sencillo, no tan portentoso, pero que también nos habla de la Presencia Real, aunque misteriosa, de Dios mismo, en la Eucaristía. «¿Quién negará de este pan el Misterio, cuando un mudo pez nos predica la fe?» (Cf. http://www.catequesisenfamilia.org/postcomunion/narraciones/2128historias-de-la-eucaristia-el-milagro-de-los-peces.html ) Ya lo dijimos el domingo pasado: Realmente nos ayudan los milagros eucarísticos a creer que es verdad que hay Algo Más que pan y vino en la Eucaristía. Es Dios mismo que se hace alimento de Vida Eterna. Porque Sólo Dios, infinito y Eterno, puede saciar el hambre de Amor Infinito y la Sed de Eternidad que hay en el corazón del hombre. La Eucaristía es el más esponsal de todos los sacramentos: aquí celebramos una Alianza Nueva y Eterna, sellada con una sangre derramada en una Cruz. De esta Por eso mujer y refiero unión esponsal nos ha hablado San Pablo en la Segunda lectura:”... abandonará el hombre a su padre y a su madre, y se unirá a su serán los dos una sola carne. Es éste un gran misterio: y yo lo a Cristo y a la Iglesia” (Efesios 5,21-32). Cuando Santa Teresa de Ávila, ya en su madurez, llega a la Unión Esponsal con su Dios, en la Séptima Morada del Castillo Interior, que es el alma, tiene una visión impresionante, precisamente en el contexto de una Eucaristía (“estando comulgando”). El Señor, esposo de su alma, le regala un clavo de la Cruz Redentora (Cf. Cuentas de Conciencia, n. 25). El mensaje es claro: cuando, perseverando en la oración fervorosa, sin desfallecer en las noches oscuras y sin desanimarse ante tantas dificultades que pueden presentarse en el camino de la fe, se llega a la intimidad con Dios, entonces Dios nos hace partícipes de aquello que Él más quiere: LA SALVACIÓN DEL MUNDO. El clavo puede ser aquella enfermedad, aquellas dificultades en la vida personal, matrimonial, comunitaria, esas largas y dolorosas noches oscuras del alma, etc... Sin olvidar que también puede ser “el clavo” el sufrimiento íntimo provocado por el pecado que tanto nos acecha y tanto nos humilla: Dios no desprecia un corazón contrito y humillado (cf. Sl 50). La Reina del Cielo bajará muchas veces del Cielo a la Tierra, para pedir oraciones y sacrificios por los “pobres pecadores” (Fátima), para que no vayan a parar a un lugar de tormentos sin fin, sino que se conviertan y vayan al cielo. Y nos dirá lo que les dijo a los pastorcillos de Fátima: “(Que no os asuste sufrir, pues) LA GRACIA DE DIOS SERÁ VUESTRA FORTALEZA”. Y la Gracia de Dios es el AMOR DE DIOS DERRAMADO EN NUESTROS CORAZONES, CON EL DON DEL ESPÍRITU SANTO. Que María Santísima, Reina y Señora de Cielo y Tierra, todos los santos y santas de Dios y todos los ángeles del Cielo nos ayuden a ser unos excelentes alumnos en la Escuela del Amor Redentor, que es la Eucaristía. Y así, llenos a rebosar de Dios, lleguemos al cielo, pero no solitos, sino cada uno de nosotros con un millón de amigos y de amigas. Que así sea. Que així sigui. Mn. Joan Manuel Serra i Oller (jserrao@bisbatsantfeliu.cat) www.bisbatsantfeliu.cat / www.mossenjoan.com Ver esta y otras homilías mías en: www.mossenjoan.com/index_JMSO.html www.evangelizaciondigital.org www.movimientosacerdotalmariano.es www.camino-neocatecumenal.org 500 años del nacimiento de Santa Teresa de Ávila: www.mistica.es / www.carmelcat.cat www.stj500.es / www.stj500.cat Más sobre los milagros eucarísticos: http://www.catequesisenfamilia.org/postcomunion/narraciones/2128historias-de-la-eucaristia-el-milagro-de-los-peces.html «¿Quién negará de este pan el Misterio, cuando un mudo pez nos predica la fe?» https://es.wikipedia.org/wiki/Milagro_de_los_peces http://webcatolicodejavier.org/mAlboraya.html http://www.santdubte.com/ca_index.htm http://webcatolicodejavier.org/meucaristicos.html http://www.corazones.org/sacramentos/eucaristia/milagros_eucaristicos.ht m http://adoracionperpetua.info/bibliotecaf.php?li_1=x&li_2=x&li_3=current &li_4=x&li_5=x&li_6=x&li_7=x&li_8=x http://www.therealpresence.org/eucharst/mir/a3.html Una Gran Señal Apareció en el Cielo. Kiko Argüello, en Fátima: http://gloria.tv/media/APtw1JCXz8L (Versió catalana en preparació. S’escriu primer en castellà perquè la majoria dels destinataris, al Continent Digital, son de llengua castellana). Nota: si no quieres recibir más emails de este cura tan pesado, sólo responde “baja” y disculpa.