La Idea de Patrimonio Ambiental Por: Lic. Marcela Tenorio Colaboradora Jurídica de la Unidad de Medio Ambiente Desde fines del siglo pasado, a medida que los seres humanos comienzan a tomar conciencia de la situación del medio ambiente, el derecho ambiental empieza a configurarse como materia relevante, sobre todo a nivel internacional, alcanzando incluso, el derecho a un medio ambiente sano, la categoría de derecho humano. “El derecho a un medio ambiente sano es, sin duda, un derecho humano fundamental, y presupuesto del disfrute y ejercicio de los demás derechos, por la íntima vinculación del ambiente con el nivel de vida en general,” según establecen López Alfonsín y Tambussi, (s/f). Así, este derecho se ha incluido en las constituciones de los Estados, buscando un equilibrio con los derechos individuales. En este contexto, se puede relacionar estrechamente la idea de patrimonio ambiental, que pese a estar muy vigente en los estudios sobre la materia, aún presenta dificultades de comprensión. De acuerdo a lo establecido por Brañes (2001) en el Informe sobre el desarrollo del derecho ambiental latinoamericano, en estos casos, el uso del concepto “patrimonio” se separa del sentido que le da el derecho civil, asumiendo un significado específico que le otorga el derecho ambiental, y que en algún sentido se relaciona con su origen. Lo anterior, pues “patrimonio” viene de la voz latina patrimonium y ésta de patrem monet, que en el derecho romano designaba los bienes del padre, consecuentemente evocando la idea del conjunto de bienes que se transmiten de generación en generación y que para poder ser transmitidos deben conservarse. No se precisa el momento en que la expresión “patrimonio” comenzó a utilizarse en el derecho ambiental, pero uso generalizado se da a partir de 1972 en la Convención sobre el Patrimonio Mundial, Cultural y Natural, mismo año en el que se celebra la Conferencia de Estocolmo sobre Medio Ambiente Humano, gran hito en la materia. el punto es que el giro que asumido dicha expresión en el derecho ambiental lo ha transformado implicando la idea de que el medio ambiente (y no simplemente los ecosistemas) es un bien jurídico compuesto por una universalidad de cosas y, en consecuencia, es susceptible de pertenencia y protección jurídica. Asimismo, constituye un bien colectivo o res communes omnium, independientemente de la propiedad singular que pueda existir sobre alguna de las cosas que lo componen y de ahí deriva el derecho de todas las personas a gozar de un medio sano o adecuado y el reconocimiento del derecho de cualquiera a reclamar su tutela judicial como miembro de la colectividad. Finalmente, se trata de un bien que se encuentra fuera del comercio y debe conservarse, teniendo el cuenta el enfoque intergeneracional (Brañes, 2001). En El Salvador, se avanza hacia una mayor protección judicial y administrativa del patrimonio ambiental. La Constitución de la República no establece expresamente el derecho a gozar de un medio ambiente sano, sin embargo, la Sala de lo Constitucional ha expresado, en Sentencia de 2­VII­98, Inc. 5­93, lo siguiente: “…si bien nuestra Constitución no enuncia expresamente dentro del catálogo de derechos fundamentales el derecho a un medio ambiente sano, es imprescindible reconocer que las obligaciones prescritas en el art. 117 y otras disposiciones de la Ley Suprema no importan un contenido prestacional en favor de los recursos naturales ­lo cual es jurídicamente imposible­, sino de las personas que conforman la colectividad, es decir, de quienes satisfacen sus necesidades materiales mediante el aprovechamiento de tales recursos. En consecuencia, la regulación de las obligaciones del Estado en relación con la política ambiental, y los límites prescritos a esa actividad, son establecidos en favor de la persona humana, lo que conlleva ineludiblemente al reconocimiento de que tal derecho a gozar de un medio ambiente sano tiene rango constitucional…” En cuanto a la protección administrativa del patrimonio ambiental, se encuentran diversas direcciones y gerencias dentro del Ministerio de Agricultura y Ganadería y del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, que basándose en la legislación ambiental nacional e internacional, se encargan de estudiar y proteger los elementos que conforman este patrimonio vital para la continuidad de los seres humanos en la Tierra. Brañes, R. Informe sobre el desarrollo del derecho ambiental latinoamericano. PNUMA, Mexico D.F. disponible en www.rolac.unep.mx , consultado el 04/11/2010. López Alfonsín, M. y Tambussi C., El medio ambiente como derecho humano, disponible en http://www.gordillo.com/pdf/dh­­ 5/capitulo_xiii.pdf, consultado el 04/11/2010. Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, Sentencia de 2­vii­98, inc. 5­93, disponible en www.jurisprudencia.gob.sv.