Curso: HISTORIA Y REALIDAD PERUANA Profesor: Martín Luis Zelaya Arteaga Grado: 5º de Secundaria Bimestre: 3 Colegio de La Inmaculada Jesuitas – Lima Área de Ciencias Sociales 2014 narquía para dummies Parece que está de moda entre la juventud más hiperactiva de Latinoamérica el llamarse anarquista, el famoso “contra-todo”, “sin leyes”, “sin estado”, “sin autoridad”, dos kilos de marihuana en mano, una bomba molotov y hartas cantidades de vinagre para contrarestar los gases lacrimógenos. ¿Destrucción? Claro que sí, pues son “anarquistas” ¿no? ¿Qué hacemos con microbusero? un tombo? Lo Lo destruimos, molemos, a un ¿A un malvado imperialista tacho de basura… lo aniquilamos… Es que “somos anarquistas”. Más allá de lo gracioso del asunto, y aclarando que como nacional revolucionario que soy, tengo absolutas e irreconciliables diferencias ideológicas con el planteamiento anarquista REAL, es bueno siempre enseñar, incluso a estos desadaptados muchachos, qué es la anarquía en realidad. Para eso analizaremos al hombre que desarrollo está cosmovisión, su nombre fue Mijaíl Bakunin. Mijaíl Bakunin fue un filósofo ruso que nació en Priamujino en 1814. El contexto en el que se desarrolló fue el del agitado siglo XIX. Es importante destacar que vivir durante este siglo pudo haber influenciado mucho a su pensamiento y critica, por la serie de innovaciones sociales, culturales y políticas que se daban durante este periodo en todo el mundo y en especial en Europa. 1 Lo primero que hay que mencionar es que Bakunin no veía el anarquismo como caos y desorden. Esta afirmación es importante de destacar y aclarar puesto que para nuestro vocabulario actual, un “anarquista” es parte de un grupúsculo de “indignados” muchachos con capuchas echando fuego a un paradero de transporte público del centro de Lima, por ejemplo y eso difiere mucho de lo que Bakunin quiere precisamente presentar. Al hablar de libertad podemos subrayar el hecho de que para Bakunin la libertad del hombre está al respetar las leyes naturales, mas no en respetar las leyes jurídicas, políticas que se han impuesto por el Estado. En ese sentido podríamos encontrar esta especie de síntesis: Las leyes reales: que son las leyes naturales, sociales y económicas, y que son leyes necesarias, intrínsecas al hombre. Las leyes falsas: que son políticas y jurídicas, y que son leyes arbitrarias que buscan promover la dominación de uno sobre otro. A continuación, me parece pertinente agregar una cita del texto “El sistema del anarquismo”: “Debemos distinguir bien entre las leyes naturales y las leyes autoritarias, arbitrarias, políticas, religiosas, criminales y civiles que las clases privilegiadas han establecido siempre en el curso de la historia para la explotación del trabajo de las masas trabajadoras – leyes que, bajo la pretensión de una moralidad ficticia, fueron siempre fuente de la más profunda inmoralidad”. Como nos hemos podido dar cuenta el principal tema para Bakunin es la libertad humana. Para él, la libertad se conseguirá solo por medios libres por lo que el Estado y el orden no apoyarían en nada, sino más bien serían un instrumento de limitaciones y coerción. En ese sentido, un Estado por más popular que sea siempre será un instrumento de dominación y explotación. De ese modo, a lo que 2 se tendría que llegar es a la abolición del Estado y todo lo relacionado a la política. Por otro lado, encontramos a la libertad vista desde el lado de las leyes naturales. Y es que son las leyes naturales, según Bakunin, las únicas que podrán proveer al hombre de libertad. El hombre las reconoce como tales, naturales, que vienen de él mismo y no son impuestas por ningún otro elemento impositivo. Bakunin destaca la idea de seguir las leyes naturales propias del hombre porque son las que bastan para poder mantenerse en libertad viviendo en sociedad. Este filósofo está relacionado con la corriente del positivismo debido al énfasis que hace en la idea de que muchas respuestas serán encontradas en la física y que, además, es la ciencia la que respalda a las leyes reales o también llamadas naturales. Así, Bakunin dice que el hombre solo debería estar en contra de las leyes arbitrarias pero no contra las leyes naturales, económicas, sociales. Son solo las revoluciones sociales las que pueden liberar al hombre del dominio de otro ser humano. Para eso la ciencia y el trabajo son los únicos elementos que bastan y dejan fuera de cualquier participación a la política y religión. Si seguimos hablando de libertad, podríamos encontrar que Bakunin señala que “se hizo a los hombre iguales en el cielo pero en la tierra, no”. Por eso hay que pensar siempre en que mientras más libre son los demás, más libre es uno puesto que algo fundamental para la libertad, según Bakunin, es el reconocimiento. La libertad supone que el otro te reconozca como libre y esta relación supone que ambos sean libres. Una cita de Bakunin demuestra mejor esta idea “Yo mismo sólo soy un ser humano y libre en cuanto reconozca la libertad y la humanidad de todas las personas que me rodean. Y sólo cuando respeto su carácter humano, respeto mi propia humanidad… solo soy libre 3 cuando todos los seres humanos que me rodean, hombres y mujeres son igualmente libres”. La libertad y la igualdad también están íntimamente ligadas para Bakunin. La libertad supone cierto grado de igualdad social y económica de todas maneras puesto. Esta igualdad no está referida en términos de igualitarismo o que todos deben tener lo mismo sino en función de que debe existir una mínima distribución de manera justa. En términos generales la libertad para Bakunin no se consigue solo por quererla sino porque uno es reconocido por el otro como libre, porque uno tiene cierto grado de igualdad social y económica y por la ciencia. Otro elemento fundamental para este filósofo es la educación. Él le otorga un peso importante a esta área porque ubica a la instrucción común del ser humano en la ciencia. Además, es el conocimiento el que termina transformando el sentido común por lo que la educación termina siendo un pilar fundamental para el ser humano y su relación con la ciencia. Eso finalmente quiere decir que la libertad va aumentando cuando la ciencia aumenta. Para ilustrar de una mejor manera la relación educación-libertad-ciencia comparto una cita del texto “El sistema del anarquismo”: “una amplia difusión del conocimiento llevará a la plena libertad… a saber, que la mayor parte de las leyes naturales inmanentes al desarrollo de la sociedad humana – tan necesarias, invariables e inevitable como las leyes que gobiernan el mundo físico – no han sido debidamente reconocidas y establecidas por la propia ciencia… Cuando hayan sido reconocidas – primero por la ciencia, y luego por un amplio sistema de educación e instrucción popular – e integradas orgánicamente en la conciencia general, la cuestión de la libertad estará completamente resuelta”. 4 Bakunin propone también una organización de comunidades tipo federal que no tenga Estado-Nación para que de ese modo se vaya abandonando la nacionalidad y se de un modo más comunitario y sin jerarquías. Esto debe darse a nivel mundial. Este filósofo no cree en Dios, ni en el libre albedrío por lo que supone que el reto de la libertad en el desarrollo humano debe ser una meta dentro del proceso histórico. Ahora entramos a algo muy importante, Bakunin fue un gran crítico de Marx, y eso hay que resaltarlo, ya que hoy por hoy, muchos “anarquistas” locales son “marxistas” o bueno, dicen serlo. Como sabemos Marx propone la dictadura del proletariado como una salida a la desigualdad e injusticia. Sin embargo, Bakunin señala que en la práctica esta propuesta marxista la da el poder a una sola élite y juega el mismo papel de las leyes arbitrarias que tanto critica. En ese sentido la dominación seguiría estando en un grupo privilegiado, cerrado, pero que tiene un dominio de abajo hacia arriba. Hasta aquí hemos visto muy brevemente lo planteado por Bakunin, su doctrina es utópica, materialista y romántica; por tal motivo, analizando sus preceptos filosóficos, yo me atrevo a afirmar que, al menos en el Perú, NO EXISTEN anarquistas. Podemos hablar de “punks” con ganas de destruir mobiliario estatal y que luego se toman una imperialista cerveza cristal en la esquina de Quilca, drogadictos con peinados estrambóticos o poseros con una bandera negra y una “A” roja en el medio; pero ninguno debate y desarrolla el anarquismo o, menos aún, lo estudia. Aquellas épocas del debate político de las ideas y contraposiciones han quedado atrás. ¿Anarquistas? Los de antaño claro, a los que aunque sea se les podía decir lo equivocados que estaban y te podían rebatir argumentos, ¿los chiquillos de hoy? Esos solo son rebeldes sin causa clara. Concluyendo, si bien según Bakunin, es la ciencia y la naturaleza intrínseca a nosotros lo que determinaría nuestro desarrollo y libertad; son los sentimientos y la naturaleza apasionada del hombre la que sin límites, es decir, sin la existencia 5 de un Estado que ponga el orden y el bien común sobre el propio, podrían descarriar el camino de solidaridad y equilibrio que cada comunidad necesita en la actualidad para vivir y convertirla en el caos absoluto. No me pienso poner muy Hobbesiano, pero la historia nos comprueba que, sin Estado (Ya sea sin la existencia de éste propiamente dicho, o con un Estado débil o títere) la sociedad entra en un caos generalizado e inseguridad, eso está demostrado y hoy lo experimentamos en carne propia, ¿o es que acaso usted no ha pensado en comprar un arma de fuego de gran calibre para defenderse de la inseguridad ciudadana ante la falta de acción del Estado? El anarquismo está bonito como ciencia ficción, pero más allá de debates de cafetín, no pasa. Es como cuando te pones a hablar de cómo sería el Perú en el año 3000, ¿qué utilidad tiene en una realidad como la de hoy? Ninguna… Fuente: Corneliu (2014) Anarquía para dummies. Blog El Blog del Disidente, enero 13, 2014. Consultado el 10 de mayo del 2014 de http://elblogdeldisidente.wordpress.com/category/filosofia-y-espiritualidad/. 6