HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA Capítulo 7 Del Mundial de Indianápolis’87 al de Sevilla’91 Hemos visto en el anterior capítulo como en la primera parte de la década de los ochenta España se consolidaba como una potencia del atletismo continental bajo techo, haciendo que lo de ganar medallas en los Europeos, con excepción del infortunio de Göteborg'84, se convirtiera casi en una rutina. Sin embargo, los retos se seguían sucediendo y en este 1987 en que nos encontramos nacería oficialmente el Campeonato del mundo en pista cubierta, cuya primera edición tendría lugar en la ciudad norteamericana de Indianápolis. Nuestro país también se subiría a ese tren mundialista y acabaría cosechando importantes éxitos, tanto deportivos como organizativos, culminados en la edición que tendría lugar en Sevilla en 1991. Pero comencemos hablando de lo más destacado de este 1987, que comenzó como venía siendo tradicional en los últimos años con la disputa del Gran Premio de la RFEA. Una competición que tendría importantes ausencias, debido a las lesiones y enfermedades de atletas tan significativos como Juan José Prado, Benjamín González, Andrés Vera, José Luis Carreira o Carlos Sala. Sin embargo, en la primera reunión, disputada en Oviedo el 10 de enero, se pudieron ver algunas cosas interesantes como los 47.5 de Ángel Heras en 400 metros, los 7.42 de Lourdes Valdor y Blanca Lacambra en 60 metros o los 2:07.6 de Montse Pujol en 800 metros. No obstante, en ese mismo día la noticia estaba en otra pista, en San Sebastián, durante la disputa del Campeonato de Euskadi, donde la lanzadora de peso Margarita Ramos borraba de las listas una de las plusmarcas más antiguas, los 14,53 metros que la añorada Ana María Molina había establecido en 1971. Ramos realizaba una magnífica serie de 14,19, 14,03, 13,86, 14,26, 14,30 y 14,80, iniciando así un largo dominio en esta especialidad. Una semana más tarde en ese mismo escenario se superaría de nuevo, registrando 14,82 metros. Estrella Roldán Encuentro contra Italia y Bulgaria: En la segunda jornada del Gran Premio, celebrada igualmente en Oviedo el 17 de enero, el hito más destacado fueron los 6,13 metros de Estrella Roldán en longitud, con lo que igualaba la plusmarca nacional de Mercedes Cano. Igualmente, sobresalieron los 7.38 de Blanca Lacambra en los 60 metros y los 2:05.7 de Rosa Colorado en los 800 metros. En hombres lo más destacado estuvo en la velocidad, con victoria de Antonio Sánchez en 200 metros con 21.3 y del italiano Pier Fracesco Pavoni en 60 metros con 6.6. La temporada continuaba su curso el 24 de enero en San Sebastián con la Copa de Clubes, con triunfos de Cajasalamanca en hombres y de Tintoretto entre las mujeres, y sobre todo con el encuentro internacional disputado contra Italia y Bulgaria el 31 de enero en Génova. La selección viajó con muchas ausencias y 120 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA no había demasiado optimismo en el cuadro técnico, en los 1.500 (3:43.35), Javier Moracho en las vallas tanto que el día anterior el propio director técnico (7.82) y Javier García Chico en pértiga (5,20). Durante nacional Carlos Gil consideraba la derrota ante nues- la competición sobresalió la búlgara Stefka tros dos rivales como algo "inevitable" en una entre- Kostadinova, que superaba el récord mundial de salto vista concedida al diario "As". Sin embargo, al final el de altura al elevarse por encima de 2,04 metros. equipo supo pelear y cosechó una buena actuación Las chicas protagonistas del Campeonato de perdiendo con los italianos por sólo siete puntos (68 a 75) y derrotando claramente a los búlgaros por un tan- España: La actuación en Génova había dado moral a los teo de 76 a 63. En mujeres hubo menos suerte pero las nuestras no desentonaron, a pesar de que cayeron nuestros después de un comienzo de temporada que derrotadas contra italianas (51 a 59) y búlgaras (44 a como hemos visto había estado marcado por las lesio64). Precisamente fueron estas últimas las que logra- nes de algunos de nuestros primeros espadas. ron unos registros de mayor calidad, con tres nuevos Afortunadamente de cara a las importantes citas venirécords de España. Blanca Lacambra estuvo de deras nuestros atletas iban a ir recuperando la forma. nuevo inconmensurable, aportando valiosos puntos al Una buena ocasión para demostrarlo fueron los equipo. Fue tercera en 60 metros con 7.46 e idéntica Campeonatos de España absolutos, disputados en posición en los 200 metros con una nueva plusmarca San Sebastián los días 7 y 8 de febrero. En la compede 23.82, trece centésimas menos que lo que lograra tición destacaron las pruebas femeninas, tal y como el año anterior en Madrid. Mientras, la saltadora sevi- señalaba Antxón Blanco en "El País": "la progresión llana María Jesús Fernández llegaba en longitud en del atletismo femenino español se hizo patente en los dos ocasiones hasta 6,16 metros y Mari Cruz Díaz, Campeonatos de España de pista cubierta, disputavigente campeona europea al aire libre, se mostraba a dos este fin de semana en San Sebastián, con la congran nivel en los 3.000 metros marcha, cediendo sólo secución de tres plusmarcas nacionales, a cargo de ante la plusmarquista mundial, la italiana Giuliana Cristina Pérez (200 metros), Estrella Roldán (longitud) Salce, para marcar 13:51.49. Además de los nuevos y Margarita Ramos (peso). En la categoría masculina topes nacionales, destacó el bonito doblete protagoni- hubo demasiadas ausencias (González, Abascal, zado por Rosa Colorado y Montserrat Pujol en los 800 Carreira, Corgos, Oliván y Ruiz) como para que se metros, acreditando ambas la mínima mundialista produjeran hechos destacados. Carlos Azulay y para Indianápolis. Por lo que respecta a la categoría masculina, el gran triunfador español fue sin duda el joven saltador de altura Gustavo Adolfo Bécquer, que realizó un impecable concurso para salvar el listón en 2,26 metros, con lo que añadía dos centímetros al récord anterior de Cabrejas. Fue suya una de las seis victorias conseguidas por el equipo español. Las otras llegaron de manos de Ángel Heras en los 400 metros (46.68), Colomán Trabado José Alonso y Cayetano Cornet libraron uno de los duelos más bellos en los 800 (1:52.16), Andrés Vera del Campeonato. 121 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA Miguel Ángel Prieto destacaron con las plusmarcas en octathlón y cinco kilómetros marcha, respectivamente". Nuestro colega hizo un resumen claro de lo allí ocurrido pero vamos a profundizar un poco más en los logros alcanzados. Por un lado, Cristina Pérez aprovechó la calidad del anillo donostiarra para realizar una magnífica marca en los 200 metros, registrando un nuevo récord nacional en semfinales con 23.62 y 23.77 en la final. Mientras, en longitud se vivió un bonito enfrentamiento entre María Jesús Fernández y Estrella Roldán, resuelto a favor de esta última, que añadía un centímetro al tope nacional al marcharse hasta 6,17 metros, mientras que Fernández, que comenzó con un intento de 6,03, tuvo la mala fortuna de lesionarse en su segundo salto y tener que abandonar la competición. Por último, Margarita Ramos seguía progresando en peso para enviar la bola hasta uno nuevo récord de 15,18 metros. Por lo que respecta a la prueba masculina, superioridad absoluta del malagueño Carlos Azulay en la combinada, en la que registraba 6.232 puntos, plusmarca nacional, a la vez que Miguel Ángel Prieto superaba claramente a sus rivales en los 5.000 metros marcha con 19:50.0. El último récord lo lograba Montserrat Fernández, que marcaba 3.778 puntos en el pentathlon. Se acercaba la primera gran cita internacional del año, los Europeos que debían disputarse en la localidad francesa de Lievin, pero antes en el plano doméstico tenemos que referirnos a una nueva edición del Memorial Cagigal, en la tarde del 12 de febrero en el Palacio de los Deportes de Madrid. Allí el gran triunfador sería sin duda el saltador sueco Patrick Sjoeberg, que después de franquear el listón en 2,37 metros se lanzó a por el récord del mundo de la especialidad. En su segundo intento sobre 2,42 metros, solamente un leve roce con el listón le privó de alcanzar la proeza ante la mirada de 7.000 entusiasmados espectadores. En esta misma prueba destacó la actuación de Arturo Ortiz, que se confirmaba como en gran rival de Bécquer en la disciplina. Mejoró su marca personal con 2,23 metros y luego probó fortuna sin éxito sobre 2,27. Por lo que a los españoles se refiere dos de las grandes estrellas fueron José Luis González y José Manuel Abascal, aunque ambos corrieron pruebas dife- Lacambra, González y Pérez, los medallistas en Lievin. rentes. González dominaba claramente los 3.000 metros en un discreto tiempo de 8:05.53, mientras que José Manuel Abascal se mostraba en plena forma en los 1.500 metros, distancia en la que acreditaba 3:44.14. La velocidad volvió a ser explosiva en el Palacio con el belga Ronald Desruelles y la holandesa Nelly Cooman, dominando los 60 metros en magníficos tiempos de 6.54 y 7.18. Por cierto, que en esta última prueba se mostró en buena forma Blanca Lacambra, que acreditó 7.37. Por último, destacar el gran nivel exhibido por Javier Moracho en los 60 metros vallas, donde con 7.68 consiguió derrotar por una centésima al finlandés Arto Bryggare. Tres medallas en Lievin: Y llegamos así al Campeonato de Europa en pista cubierta, que se disputaría los días 21 y 22 de febrero en el bello estadio de la localidad francesa de Lievin. La coincidencia con el Mundial indoor, sólo dos semanas más tarde en Indianápolis, hizo que algunos atletas se reservaran para esta última cita, como era el caso de Abascal. Hay que decir que hasta 1989 subsistiría esta cohabitación Europeo-Mundial. Luego los 122 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA estamentos internacionales se darían cuenta de que mantener las dos competiciones en el mismo año era harto complicado dado las "estrecheces" del calendario y los continentales pasarían a disputarse en años pares, manteniéndose los mundiales en los impares. Pero volvamos a Lievin, una cita donde las mujeres españolas iban a superar por primera vez a sus compañeros masculinos, logrando dos de las medallas alcanzadas por el equipo. Ellas brillaron sobre todo en las pruebas de velocidad. En los 200 metros Blanca Lacambra se mostró en una forma excepcional. Ya en semifinales registraba la segunda mejor marca de todas las participantes con un nuevo récord de España de 23.33. En la final la atleta española siguió la estela marcada por la francesa Cazier, a la que cogió la compensación a los 60 metros de carrera para hacerse con una valiosa medalla de plata en un excepcional tiempo de 23.19, de nuevo tope nacional, en una prueba que estuvo dominada por la germana Kirsten Emmelmann con 23.10. Si magnífica fue la actuación de Lacambra en los 200 metros, no menos mala fue la de Cristina Pérez en los 400. La canaria se plantó en la carrera definitiva tras marcar 52.83 en semifinales, que borraban de las listas de plusmarcas los 53.43 anteriores de Blanca. A pesar de lo excepcional del registro, era la peor de las marcas que pasaban a la final por lo que parecía que el acceso al pódium estaba difícil. En la final, la española pasó en la cola del grupo los primeros 200 metros en 25.5, pero en la segunda vuelta realizó una magnífica remontada para superar en la misma línea de meta a la alemana Helga Arendt y hacerse con la medalla de bronce en 52.63. La guinda a la actuación española la puso José Luis González, que de nuevo volvió a dominar a placer el mediofondo europeo, esta vez en la prueba de 3.000 metros. El toledano conseguía su tercer título consecutivo (cuarto en total), ejerciendo una gran superioridad sobre sus rivales. De salida fueron los británicos los que llevaron la iniciativa; luego tomaron el relevo el alemán Baumann y el francés Levan. González progresó a la altura de los 2.000 metros y respondió magníficamente al tirón del danés Guldberg para marcharse en solitario con una fuerza irresistible a falta de 150 metros, haciéndose con la victoria en un tiempo de 7:52.27, con lo que borraba de las listas la vieja plusmarca de Álvarez Salgado (7:52.6), que databa del Europeo de Viena'70. Además de estas medallas, en el plano positivo hay que destacar el quinto puesto de Montse Pujol en 800 metros con un magnífico registro de 2:02.31 y la plusmarca española de 3.000 metros marcha a cargo de Emilia Cano, que le llevaba igualmente a la quinta plaza con 13:23.96. También mejoraba el tope nacional Miguel Ángel Prieto en las series de los 5.000 metros marcha con 19:26.73. Fueron estas las notas positivas de un Europeo que también tuvo desgracias para los nuestros como la lesión de Ángel Heras, la gripe de Carlos Sala, el principio de hepatitis de Yolanda Díaz o la caída en la final de 800 metros de Colomán Trabado, que le hizo perder todas las opcio- LIEVIN'87, EL EUROPEO DE LAS MUJERES ESPAÑOLAS Si Viena'79 había significado la plataforma de despegue para el crecimiento del atletismo español en Europa entre los hombres, Lievin'87 iba a suponer lo mismo para las chicas. Hemos visto a lo largo de nuestra historia como hubo mujeres que se asomaron a los primeros puestos en los continentales bajo techo, empezando por María Coro Fuentes, que fue séptima en Viena'70 en 800 metros y continuando por Rosa Colorado, quinta en 400 metros en San Sebastián'77; Montse Pujol, sexta en 800 metros en Grenoble'81; Gloria Pallé, quinta en Göteborg'84 en 1.500 metros; de nuevo Rosa Colorado, cuarta en Atenas'85 ahora en 800 metros; o Asunción Sinovas, sexta en Madrid'86 en 1.500 metros. Como se ve en los últimos años se había rozado la medalla y esta llegaría en Lievin por partida doble. Por un lado de manos de la vitoriana Blanca Lacambra, que se mostró en una forma sensacional en los 200 metros para colgarse la plata en un tiempo de 23.19. Por el otro, la canaria Cristina Pérez remataría la faena en los 400 metros, luchando hasta el final para hacerse con el bronce en 52.63. Era la primera vez que nuestras atletas sumaban metales en pista cubierta y también la primera que superaban a los hombres en este capítulo en una competición internacional. 123 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA nes de medalla. El balance general fue bueno aunque con matices. Como escribía Joan Carles Armengol en "El Mundo Deportivo": "el balance se hace difícil. El resumen, ciertamente extraño, podría ser aquel de 'ni bien ni mal, sino todo lo contrario'. Como sucediera en los Campeonatos de Europa absolutos en Stuttgart, se esperaba una cosa y resultó otra totalmente distinta, aunque no necesariamente peor". Abascal protagonista en Indianápolis: Sin apenas tiempo para el descanso se comenzó a hablar del Mundial de Indianápolis y uno de los que habían marchado con anticipación para Estados Unidos para ultimar su preparación fue José Manuel Abascal, que el 23 de febrero se imponía en San Diego en una milla con un tiempo de 3:56.1, por delante del norteamericano Scout y del irlandés O'Mara. Sería uno de los principales puntales de un equipo español formado por 15 atletas que, tras un agotador viaje de 21 horas, llegó a la ciudad norteamericana para disputar el I Mundial bajo techo entre los días 6 y 8 de marzo. La cita mundialista fue todo un éxito de participación y de marcas, con un buen número de récords mundiales batidos. Por parte española el gran protagonista, tal y como se esperaba, fue José Manuel Abascal, que llegó a la cita en gran forma tras haber estado preparándose con intensidad durante las dos semanas anteriores. En una final de 1.500 metros que tuvo comienzo lento, aunque luego fue acelerándose progresivamente, el cántabro peleó duramente por la victoria con el irlandés Markus O'Sullivan, aunque al final fue batido por éste por sólo nueve centésimas, logrando la segunda plaza en un tiempo de 3:39.13. Quizás en una carrera más rápida de salida la cosa hubiera cambiado, aunque la plata de Abascal era ya un magnífico premio. Ésta fue la única medalla española en la cita mundialista, aunque hubo algunas otras notas destacadas como el sexto puesto de Javier Moracho en 60 metros vallas con 7.89, la gran actuación de Emilia Cano, que fue quinta en 3.000 Abascal peleando con O’Sullivan en Indianápolis. metros marcha, rebajando el récord nacional hasta 13:02.41, o el undécimo puesto de Javier García Chico en pértiga con 5,40 metros. Era éste el punto culminante de una campaña en sala que iba a tener su colofón el 12 de marzo en el I Gran Premio Ciudad de Valencia, donde la prueba estrella fue la de 3.000 metros en la que se anunciaba un enfrentamiento entre el campeón europeo José Luis González, que no había acudido al Mundial para tomarse unos días de descanso después de su actuación en Lievin, y el marroquí Said Aouita, por aquel entonces gran dominador del mediofondo mundial y que en unos meses iba a convertirse en el primer hombre en romper el muro de los 13 minutos en los 5.000 metros. Fue una prueba llena de emoción en la que González estuvo a punto de dar la gran campanada y batir a su rival. En los últimos metros, cuando parecía que el triunfo no se le escaparía, cometió el error de girar su cabeza a la derecha y Aouita estuvo listo para rebasarle sobre la misma línea de meta, marcando 7:49.73 por 7:49.76 del español, que le quedó como consuelo pulverizar la plusmarca nacional de la distancia, aunque tendría el sabor amargo de haber perdido una magnífica oportunidad de batir al marroquí, algo al alcance de muy pocos por aquellos años. La otra prueba destacada de la velada fue la de 124 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA la milla, donde el irlandés Mark O'Mara (3:57.07) se impondría a José Manuel Abascal (3:57.21). Lo tardío de la fecha de celebración de esta reunión hizo que muchos atletas llegaran pasados de forma y no se produjeran los registros esperados. Sandra Myers, la sensación de la temporada: Y llegamos así a 1988, de nuevo año olímpico, donde todos los esfuerzos de los atletas españoles iban a ir encaminados a lograr su clasificación para los Juegos de Seúl. En pista cubierta era año de Europeo, con una cita que se celebraría en Budapest a principios de marzo. La gran novedad de la temporada sería sin duda la aparición en escena de Sandra Myers, que había obtenido la nacionalidad española en diciembre de 1987. Esta atleta había participado con el equipo norteamericano en la prueba de 400 metros vallas de la Copa del Mundo de 1981 en Roma y posteriormente se había trasladado a vivir a nuestro país, donde se casó con un español, por lo que pudo iniciar los trámites para la nacionalización. Este "regalo americano", como la definió "Atletismo Español" en su revista de marzo, debutó en la primera jornada del Gran Premio RFEA, disputado en Oviedo el 16 de enero, donde se impuso en los 60 metros con 7.39, batiendo claramente a Lourdes Valdor (7.51). En esta reunión sobresalió Maite Zúñiga, que registraba un nuevo récord nacional de 1.500 metros con 4:13.37, mejorando los 4:15.88 de Gloria Pallé. Antes, el 10 de enero, se había montado en el Palacio de los Deportes de Barcelona una competición denominada "Pértiga de Oro". Se instalaron tres saltaderos y en la prueba internacional se imponía el polaco nacionalizado alemán Vladislaw Kozakiewicz con un mejor salto de 5,50 metros, mientras que por parte española el mejor sería Javier García Chico, décimo con cinco metros. Pero Myers seguiría acaparando el protagonismo de las siguientes citas de la temporada; primero en la Copa de clubes, celebrada en San Sebastián el 23 de enero, donde se impuso en los 200 metros con 23.36, y sobre todo en la segunda jornada del Gran Premio, disputada igualmente en Oviedo el 30 de enero, donde pulverizaba la plusmarca nacional de longitud. En su primer ensayo se fue hasta 6,44, progresó hasta 6,52 en el segundo y remató la faena con unos magníficos 6,68 metros en el tercer intento. Superaba así nada menos que en 51 centímetros el anterior récord de Estrella Roldán, un espectacular avance que dejaba situada la plusmarca Crónica de El Periódico de Cataluña SANDRA MYERS HACE AÑICOS EL RÉCORD DE ESPAÑA DE LONGITUD El 30 de enero de 1988 en Oviedo la atleta de origen estadounidense y recién nacionalizada española Sandra Myers batía la plusmarca nacional de longitud por nada menos que 51 centímetros, dando un gran salto de calidad a la prueba. Así lo vio Carlos Martín en "El Periódico de Cataluña": "UNA TEJANA ALARGA EN MEDIO METRO EL RÉCORD ESPAÑOL DE LONGITUD" "Sandra Myers, una tejana de 27 años que tiene los derechos de cualquier otra atleta española después de contraer matrimonio con un culturista español, batió ayer en Oviedo, en el curso de la tercera reunión en pista cubierta de la temporada, un récord fantástico de salto de longitud: 6,68 metros. La saltadora del Tintoretto de Madrid pulverizó la antigua plusmarca de Estrella Roldán (6,17) en más de medio metro… Ex internacional en su país de origen, en el que llegó a poseer el récord de 400 vallas hace cinco años. Sandra estrenará en breve una nueva camiseta nacional. Para el atletismo español se trata de un inesperado y valioso regalo en un año en que se celebra el 70 aniversario de la federación que dirige Juan Manuel de Hoz. La tejana es una atleta polivalente que este invierno ha realizado las mejores marcas españolas de la temporada indoor en 60 y 200 metros. El imperio de Blanca Lacambra se tambalea. Sandra Myers, que dijo que este año saltará 7 metros en pista cubierta y 7,50 al aire libre (récord mundial 7,45), hizo una serie vertiginosa en la que no sólo mejoró tres veces el récord en vigor sino que dejó a mucho distancia la plusmarca al aire libre que posee desde hace años la catalana Olga Dalmau (6,30): 6,44, 6,37, 6,38, 6,52, 6,51 y 6,68. Nadie había saltado tanto y tan bien en España". 125 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA en registros de auténtica talla mundial. Esa misma tarde Margarita Ramos mejoraba por dos veces su récord nacional de peso, primero con 15,55 metros y posteriormente alcanzando diez centímetros más. Fue esa una magnífica reunión en la que también sobresalió Javier Arques, que con una espectacular salida marcaba 6.61 en 60 metros, a una sola centésima de su récord. Mencionar también los 400 metros masculinos, dominados por Ángel Heras en 47.46, o los 800 metros femeninos, donde Maite Zúñiga batía a Montserrat Pujol, corriendo ambas por debajo de 2:03.50. Ese mismo día se disputaban en San Sebastián las "Seis Horas Ciclistas de Euskadi", programándose una prueba de 3.000 metros lisos en los que José Luis González se imponía con un magnífico registro de 7:51.95, por delante de Abel Antón (7:53.12) y del británico Mark Rowland (7:53.36). Otros tres españoles (Anacleto Jiménez, Javier Pascual y Martín Fiz) corrían por debajo de los ocho minutos. La siguiente cita de la temporada sería el Memorial Cagigal, el 2 de febrero en el Palacio de los Deportes de Madrid, donde la gran estrella fue el canadiense Ben Johnson que, meses antes de protagonizar el mayor escándalo de dopaje de la historia del atletismo, marcaba 6.49 en los 60 metros, a sólo dos centésimas del récord mundial de la disciplina. Por parte española volvió a brillar Sandra Myers, que en semifinales batía el récord nacional de 60 metros con 7.24 y que luego en la final registraba una centésima más, clasificándose por detrás de las canadienses Bayley e Issanjenko. En esta prueba también destacaba Yolanda Díaz, que en semifinales corría en 7.33. Histórico triunfo femenino ante Italia: Llegamos así al primer compromiso internacional de la temporada, un encuentro que debía enfrentarnos a las selecciones de la Unión Soviética e Italia el 17 de febrero en el Pabellón Fuente de San Luis de Valencia y allí por primera vez nuestras chicas consiguen un histórico triunfo contra las italianas a las que superan por seis puntos (58 a 52), mientras que caen derrotadas claramente con las soviéticas (44 a 62). Las españolas tuvieron una gran actuación, batiendo dos récords nacionales. Por un Sandra Myers fue la sensación de la temporada. lado Mari Cruz Díaz, que registraba unos sensacionales 12:48.82 en los 3.000 metros marcha, siendo únicamente superada por la soviética Spiridonova. Mientras, Margarita Ramos superó por tres veces su anterior registro para dejar situada la nueva marca en 15,98 metros (en intentos previos había logrado 15,67 y 15,75). Además, Maite Zúñiga lograba una sensacional victoria en 1.500 metros con 4:23.84 y Sandra Myers debutaba con la selección española, si bien unas molestias en su bíceps derecho le impidieron brillar como de ella se esperaba, teniendo que conformarse con saltar 6,24 metros. A pesar de esta importante victoria la alegría era incompleta como escribía Pedro Molero en las páginas de "Marca": "siempre se ha dicho que en el atletismo la felicidad nunca es completa. Una vez más se demostró en el Pabellón Fuente de San Luis de Valencia, denominado localmente como La Fonteta. Y es que ese magnífico triunfo conseguido por la selección femenina quedó empañado, sí así puede calificarse, por la mínima derrota del equipo masculino, que cedió ante Italia por dos pun126 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA tos". Así fue, aunque los nuestros lograban seis triunfos individuales. Anacleto Jiménez realizó una gran carrera en 3.000 metros para hacerse con la victoria, mientras que Ángel Heras y Colomán Trabado se imponían en 400 y 800 metros respectivamente. Los otros triunfos hispanos los pusieron Javier Arques y Carlos Sala en 60 metros lisos y con vallas con buenos registros de 6.70 y 7.66, rematando la faena Antonio Corgos en longitud con 7,77 metros. Era un gran anticipo de una buena edición de los Campeonatos de España en pista cubierta, que comenzaban tres días más tarde en este mismo escenario con un balance de cuatro récords de España batidos y una gran renovación de los atletas que subieron a lo más alto del pódium. En categoría masculina destacó el joven decatleta Antonio Peñalver, que realizó una gran prueba de octathlón para batir la plusmarca de esta prueba con 6.252 puntos, a la vez que Álvaro Burell batía la plusmarca júnior con 6.111. Mientras, Carlos Sala derrotaba a Javier Moracho en las vallas registrando 6.68. En categoría femenina se lograron tres nuevos récords. Margarita Ramos rompía la barrera de los 16 metros en peso para llegar hasta 16,36 metros, mientras que Montserrat Fernández sumaba 3.795 puntos en pentathlón y Begoña Herraez marcaba 9:23.52 en los 3.000 metros en una disputada llegada con Aurora Pérez. Todo estaba preparado para el Europeo de Budapest, pero antes había todavía algunas citas importantes, por ejemplo el Meeting Internacional de Valencia el 23 de febrero, donde lo más destacado fue que Javier Moracho se desquitó de su derrota en el Nacional y batió en esta ocasión a Carlos Sala. Por su parte, tres días más tarde dos plusmarcas españolas caían en la Reunión Internacional de Zaragoza, que no respondió a las expectativas previas, registrándose importantes ausencias de última hora. Allí la júnior Ana Bullón corría los 60 metros vallas en 8.45, dos centésimas menos que el récord que compartían María José Martínez Guerrero y Ana Barrenechea, mientras que Amaya Andrés marcaba en los 1.000 metros 2:52.3. La última competición digna de reseñarse antes de Budapest fue una denominada Copa de la Comunidad Económica Europea, en la localidad francesa de Vittel el 27 de febrero. Allí Antonio Sánchez batía el récord nacional en la inusual prueba de 300 metros con un registro de 34.0, mejorando en dos décimas el tope que Isidoro Hornillos había establecido hacía seis años. Esta competición nacía con vocación de continuidad pero al final se quedaría sólo en un experimento. Quinto entorchado europeo para González: Y por fin llegaba la cita más esperada de la temporada invernal, la XIX edición del Campeonato de Europa, que iba a disputarse en el Palacio de los Deportes de Budapest los días 5 y 6 de marzo y a donde viajaría un equipo español formado por 27 atle- JOSÉ LUIS GONZÁLEZ, TERCER MEJOR HOMBRE EN LA HISTORIA DE LOS EUROPEOS Con su victoria en el Campeonato de Europa de Budapest'88, José Luis González entraba en el selecto club de los hombres que habían conseguido cinco o más títulos en esta competición. Recordamos que el toledano venció en los 1.500 metros de Milán'82, Atenas'85 y Madrid'86 y en los 3.000 metros de Lievin'87 y este último de Budapest, precisamente en las únicas cinco citas en las que había participado. Sin duda todo un pleno. Esta es la relación de atletas con mayor número de títulos hasta ese momento: Títulos 7 6 5 5 4 4 4 Atleta Valery Borzov (URSS) Victor Saneiev (URSS) José Luis González (ESP) Marian Woronin (POL) Henryk Szordykowski (POL) Thomas Wessinghage (RFA) Dietmar Mogenburg (RFA) Prueba 60 metros Triple salto 1.500 y 3.000 metros 60 metros 1.500 metros 1.500 metros Altura 127 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA tas (16 hombres y 11 mujeres), que sabrían mantener el tono de pasadas ediciones logrando cuatro medallas y siete plazas de finalista. En categoría masculina el gran líder del equipo volvía a ser José Luis González, que de nuevo se mostró intratable en Europa en los 3.000 metros, conquistando su quinto título continental bajo techo, algo reservado a muy pocos. De hecho, sólo dos monstruos sagrados del atletismo en el viejo continente como son los soviéticos Valery Borzov y Victor Saneiev le superaban en títulos. González supo maniobrar en la final con la maestría de un superclase. De salida comenzaron marcando el ritmo el checo Kunicky y el irlandés O'Brien, que cubrieron los primeros 1.000 metros en 2:40.72 con el futuro campeón a cola de grupo. El checo sigue en su empeño y da paso al segundo kilómetro en 5:26.42 con González escalando posiciones y colocándose en clara franquicia de cara el ataque final. Éste se produce en la última vuelta, con un ataque final demoledor que le da la victoria en un tiempo de 7:55.29 por delante del suizo Hacksteiner y del soviético Dasko. El toledano había demostrado de nuevo su calidad y su saber correr en pista cubierta y se hacía con un maravilloso pentacampeonato. Buena actuación igualmente en esta prueba de Anacleto Jiménez, que se clasificaba octavo en un tiempo de 7:59.25. La otra prueba estrella para nuestros intereses sería los 3.000 metros marcha femeninos, donde Reyes Sobrino y Mari Cruz Díaz realizarían una carrera muy inteligente, manteniéndose en puestos secundarios en los primeros compases de la prueba y marchando hacia delante cuando se entraba en la fase decisiva de la misma. La primera se queda en solitario con la checa Vavracova y cuando ésta recibe un aviso a falta de 600 metros decide marcharse por delante con una gran fuerza para hacerse con la victoria en una marca de 12:48.99, a escasas centésimas de la plusmarca de su compañera Mari Cruz, que resiste el ataque de la húngara Ilyes y se hace con el bronce en 12:55.03. El abrazo entre las dos medallistas españolas recuerda a todos los presentes aquel producido dos años antes en Stuttgart, cuando Díaz se proclamaba campeona de Europa de 10 kilómetros al aire José Luis González logró su quinto entorchado europeo en Budapest. libre con sólo 16 años. Si el año anterior en Liévin se había inaugurado el medallero femenino a cubierto, sólo un año más tarde veíamos a la primera española en lo más alto del pódium. La cosecha española en Budapest se completaba con la medalla de bronce de Carlos Sala en 60 metros vallas con un registro de 7.67, con lo que cerraba una magnífica temporada en pista cubierta en la que había sido muy regular. En esta misma prueba Javier Moracho ocupaba la sexta plaza con 7.83. Muy cerca de los metales estuvieron también Antonio Sánchez en 400 metros, donde se clasificaba cuarto en un nuevo récord nacional de 46.49 o Maite Zúñiga, que mejoró por dos veces su plusmarca nacional de 1.500 metros para finalizar quinta con un registro de 4:11.31 (en series había logrado 4:11.92). Se esperaba mucho igualmente de Sandra Myers, si bien esta rindió muy por debajo de lo esperado. Sólo pudo clasificarse en el puesto 12º en el salto de longitud con 6,12 metros; de haber repetido la marca que registró en Oviedo habría estado en el pódium de la prueba. Rápidamente se suscitó un debate en la prensa sobre 128 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA la necesidad de pulir este diamante en bruto. Se decía que debía pasarse definitivamente a la velocidad o bien seguir su preparación con un entrenador especializado en longitud. Afortunadamente la nueva atleta española no tardaría en demostrar internacionalmente su valía y acallar todos estos comentarios. Tras el Europeo de Budapest José Luis González se encargó de poner el colofón a la temporada invernal en la reunión de Oviedo el 12 de marzo, donde realizaba una sensacional prueba de 3.000 metros para mejorar su récord nacional hasta 7:47.58. Lorenzo Hidalgo ejerció como liebre, pasando el primer kilómetro en 2:32.38, mientras que al paso del segundo ya marchaba en cabeza González con 5:09.29 (nuevo tope nacional). A continuación continuó el toledano en solitario para cruzar la línea de meta en ese magnífico registro. Por detrás llegaron Adelino Hidalgo con 7:57.65 y el portugués Mario Silva con 7:58.50. Nos acercamos al final de la década de los ochenta pero antes nos tocaba vivir un año 1989 intenso de competiciones en el que iban a disputarse por última vez en la misma temporada Campeonatos de Europa y del Mundo. El comienzo de la temporada nacional coincidió prácticamente con el relevo en la presidencia de la RFEA, puesto que el 14 de enero José María Odriozola era elegido presidente en las elecciones convocadas al efecto. Sólo cinco días más tarde de producirse este acontecimiento se disputaba el IV Gran Premio Ciudad de Oviedo, donde las principales figuras del atletismo nacional tuvieron su primer contacto con la pista cubierta. Y allí el que arrancó con más fuerza fue Javier García Chico, que dominaba el salto con pértiga con un registro de 5,40 metros, anticipando las grandes marcas que días más tarde conseguiría. Otra nota interesante fue la reaparición de Benjamín González tras un periodo de larga inactividad debido a una lesión. Lograba la segunda plaza en los 800 metros, por detrás de un prometedor Luis Javier González, que tres años más tarde se proclamaría campeón europeo de esta distancia. En categoría femenina lo más destacado fue el triunfo de Ana Barrenechea en 60 metros vallas con 8.61, por delante de María José Mardomingo, que marcaba 8.72. También en Barcelona el Palacio de los Deportes acogía la tercera edición de la "Pértiga de Oro", con presencia estelar de Sergei Bubka, que dominaba la prueba con 5,70 metros, siendo los mejores españoles Alberto Ruiz y Javier García Chico con 5,40 y 5,20 respectivamente. Récords de García Chico y Santiago Moreno: Precisamente García Chico sería el protagonista del primer gran registro de la temporada, al batir en Oviedo el 21 de enero el récord de pértiga con 5,60 metros tras mantener un bonito duelo con su antecesor, Alberto Ruiz, que tuvo que conformarse con volar por encima de 5,50 metros. En esa misma reunión Carlos Sala y Javier Moracho reeditaban de nuevo su rivalidad en las vallas con triunfo del primero, mientras que Sandra Myers volvía a acaparar los titulares en las pruebas femeninas, al imponerse en los 60 metros con un gran registro de 7.32. Por último, la campeona europea en Budapest, Reyes Sobrino, demostraba encontrarse a buen nivel bajando de los 13 minutos en los 3.000 metros marcha. En ese comienzo de año también se producían dos grandes noticias para el atletismo español bajo techo. Por un lado, el Consejo de la IAAF, reunido en Singapur, decidía que Sevilla sería sede del Campeonato del Mundo de 1991, precisamente coincidiendo con la puesta en funcionamiento de la pista del pabellón de Deportes San Pablo, de seis calles y con 200 metros de cuerda, que se estrenó oficialmente el 28 de enero con la Copa de clubes en pista cubierta, donde dominaron Larios en hombres y Kelme en mujeres, destacando individualmente Alberto Ruiz, que probó suerte sin éxito sobre 5,62 metros, que le hubieran devuelto la plusmarca de pértiga. El primer fin de semana de febrero la pista sevillana era escenario del Campeonato de España absoluto y allí se ponía fina a una plusmarca histórica, que llevaba en las tablas nada menos que 21 años. Nos referimos a los 16,47 metros de Luis Felipe Areta en triple salto, que habían sido igualados por Ramón Cid en 1982 y que serían finalmente superados por Santiago Moreno, que en su último intento, sin coger tabla, se fue hasta 16,52 metros, convirtiéndose así en 129 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA el gran protagonista del Campeonato. También en categoría masculina sobresalió Antonio Corgos en longitud, que voló hasta unos magníficos 8,01 metros y las grandes exhibiciones de Cayetano Cornet en los 400 metros (46.57) y de Tomás de Teresa en los 800 metros (1:47.87). En categoría femenina Reyes Sobrino se mostró en gran forma en los 3.000 metros marcha, donde batía la plusmarca nacional con 12:42.29 a la vez que Olga Sánchez también conseguía bajar de los 13 minutos. Por su parte, Maite Zúñiga demostró una gran superioridad en los 800 metros en los que estuvo cerca del tope nacional con 2:02.09 y Blanca Lacambra fue derrotada por Esther Lahoz en los 400 metros. Dos de los grandes ausentes del Campeonato eran José Luis González y José Manuel Abascal, que habían viajado a Nueva York para participar el 3 de febrero en los tradicionales Millrose Games, disputados en el Madison Square Garden. Allí González fue tercero en una carrera de 3.000 metros de magnífico nivel, rebajando en unas centésimas su plusmarca nacional al marcar 7:47.48, clasificándose por detrás del marroquí Said Aouita y del estadounidense Doug Padilla, mientras que Abascal finalizaba quinto en la milla con un discreto registro de 4:07.79. De vuelta a nuestro país la siguiente cita nos llevaría hasta San Sebastián, donde el 10 de febrero se disputaría una reunión internacional de alta calidad por los nombres que tomaron parte en ella, que no por las marcas que acabaron decepcionando. La gran estrella de la reunión era a priori el estadounidense Carl Lewis, que luego defraudaría cayendo claramente derrotado por el cubano Andrés Simón en los 60 metros. Quizás lo más sobresaliente fueron los 22.79 de la jamaicana Marlene Ottey en 200 metros, así como las victorias del estadounidense Steve Lewis, vigente campeón olímpico, en 400 metros y del cubano Javier Sotomayor en altura. Por parte española destacaron los triunfos de José Luis González en 3.000 metros (7:50.33) y de Maite Zúñiga en 1.500 metros (4:15.15). Cornet, campeón de Europa en La Haya: El Europeo de La Haya se acercaba, pero antes de meternos de lleno a comentar lo que allí sucedió Santiago Moreno vamos a mencionar una bonita iniciativa que tiene como protagonistas a las jóvenes promesas del atletismo español, y es que el programa de televisión "Objetivo 92" monta una reunión el 18 de febrero en Sevilla donde se daban a conocer nombres como Fermín Cacho, José Luis Palacios o María José Mardomingo. Precisamente ese mismo día comenzaba en el Houtrust Halle de la ciudad holandesa de La Haya el XX Campeonato de Europa de atletismo en pista cubierta. La proximidad del Mundial de Budapest haría que muchos atletas se reservaran para esta última cita, resintiéndose por tanto el nivel medio del Europeo. Esto ya había sido percibido por las autoridades competentes, que habían decidido que no volvieran a coincidir las dos citas en el mismo año. Por parte española el gran héroe de la competición fue sin duda Cayetano Cornet, que desde la primera ronda se mostró como el más fuerte en los 400 metros. Ya en la final partió muy rápido, pasando en cabeza los primeros 200 metros, en unos explosivos 21.43 y, a pesar de que se agarrotó algo en los últimos metros, consiguió mantener su ventaja para imponerse en un nuevo récord nacional de 46.21 por delante del británico Whittle y del alemán Just, mientras que Antonio 130 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA Sánchez se clasificaba quinto con 47.45. Otra de las pruebas donde habíamos depositado nuestras esperanzas era la de 3.000 metros, con la participación de tres españoles en la final. El mejor de todos ellos fue Abel Antón, que demostró su capacidad competitiva para hacerse con la plata en 7:51.88 en una carrera dominada por el que tres años más tarde se proclamaría campeón olímpico de 5.000 metros en Barcelona, el germano Dieter Baumann. Los otros españoles, Adelino Hidalgo y Anacleto Jiménez, quedaron lejos del pódium, ocupando respectivamente las plazas séptima y novena. El balance de medallas lo completarían Antonio Corgos en longitud, prueba en la que hizo un magnífico concurso para hacerse con la plata, igualando por dos veces su plusmarca con 8,12 metros en el segundo y cuarto intentos, y Reyes Sobrino, que defendió brillantemente su título en 3.000 metros marcha, sacando la medalla de bronce con un nuevo récord nacional de 12:39.50, mientras que Olga Sánchez se clasificaba quinta con 12:43.40. En definitiva un balance de cuatro medallas y diez finalistas, que pudo ser incluso mejor ya que por ejemplo Manuel Pancorbo se quedaba a una sola centésima del bronce en los 1.500 metros o Carlos Sala tropezaba con la quinta valla en la final de 60 metros vallas, lo que le hacía perder unos metros decisivos, quedando relegado a la quinta plaza final. Igualmente Alfredo Lahuerta caía aparatosamente en la final de 800 metros cuando luchaba por meterse en el pódium. Y es que ya se sabe que las desgracias nunca vienen solas, impidiendo que nuestro país superara su techo en continentales en pista cubierta. España, centro de interés mundial bajo techo: Esta temporada nuestro país iba a convertirse en un importante referente del circuito de reuniones internacionales. Los organizadores echaron la casa por la ventana y contrataron a algunas de las grandes estrellas del momento. Una de estas reuniones fue el II Memorial José Luis González, celebrado el 26 de febrero en Oviedo, donde la gran figura fue precisamente el propio González que realizó una impresio- Pódium de los 3.000 metros en La Haya. En primer término Abel Antón, medalla de plata. nante cabalgada solitaria en los 3.000 metros para imponerse en un gran registro de 7:48.51, a poco más de un segundo de su récord de España. En el plano internacional las grandes figuras de la reunión a priori eran Carl Lewis y Said Aouita. El primero de ellos cosechaba una nueva derrota a manos del cubano Ricardo Chacón en los 60 metros, mientras que Aouita no perdonaba, dominando con claridad los 1.500 metros por delante de un Fermín Cacho que ya comenzaba a dar que hablar. Las pruebas femeninas tuvieron algo menos de interés. Si acaso el triunfo de la cubana Liliana Allen en 60 metros con 7.30 por delante de Sandra Myers (7.39) o la victoria de la también caribeña Aliuska López en los 60 metros vallas. El circuito de reuniones continuaba dos días más tarde en Sevilla con el Memorial Plácido Fernández Viagas, que resultó la mejor de la temporada por la calidad de sus marcas. En el tartán sevillano Carl Lewis por fin pudo desquitarse y lograr su primera victoria en su gira española, al imponerse en los 60 metros, eso sí con un discreto registro para él de 6.64, superando a los que habían sido sus verdugos en las citas anteriores. Siguiendo con la categoría masculina el brasileño 131 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA José Luis Barbosa lideraba una espectacular prueba de 800 metros con un tiempo de 1:45.73, por aquel entonces mejor marca mundial del año, arrastrando a Tomás de Teresa a un magnífico registro de 1:46.97, a sólo seis centésimas de la plusmarca de Trabado. Igualmente resultó interesante la prueba de 1.500 metros, donde Manuel Pancorbo era segundo con 3:38.78 en una carrera dominada por Said Aouita en un magnífico crono de 3:37.33. En las pruebas femeninas sobresalió la de 800 metros con victoria de la rumana Doina Melinte en 2:00.38 y donde Maite Zúñiga recortaba cuatro centésimas al récord nacional al marcar 2:01.83. González y Cornet brillaron en Budapest: El Palacio de los Deportes de Budapest estaba ya preparado para recibir a los mejores atletas del mundo desde el día 3 al 5 de marzo. Entre ellos se encontraban 14 españoles (11 hombres y 3 mujeres). El Campeonato fue de gran calidad con momentos memorables como los récords del mundo del keniano Paul Ereng en los 800 metros o del cubano Javier Sotomayor en altura. Por parte española se mejoró algo con respecto a la actuación en Indianápolis, con un balance final de dos medallas, si bien el número de finalistas quedó reducido a ese mismo dígito. Se esperaba mucho de José Luis González, que no había acudido a La Haya para reservarse para esta cita, y el toledano no defraudó, conquistando la medalla de plata en los 3.000 metros en un tiempo de 7:48.66, sólo superado por un magistral Aouita, que marcó 7:47.94. En esta prueba fue séptimo José Luis Carreira, que había sufrido un accidente de tráfico con anterioridad al Mundial que le obligaba a llevar un collarín puesto. El otro gran protagonista español en la ciudad del Danubio era un Cayetano Cornet en gran forma y muy motivado tras su victoria en el Europeo. El atleta de Reus supo coger la calle libre en cabeza en un tiempo de 21.76 y en la vuelta definitiva sólo era superado por el norteamericano McKoy y el trinitense Morris, aguantando la medalla de bronce con un tiempo de 46.40. Sin duda era la culminación de una gran temporada para el atleta de Reus. Del resto del equipo español poco más que reseñar, si acaso la sép- tima y octava plazas de nuestros pertiguistas Alberto Ruiz y Javier García Chico o la descalificación de Reyes Sobrino en marcha cuando iba en quinta posición camino de un nuevo récord de España. Por lo menos le quedaría el consuelo de haber mejorado el tope nacional en series con 12:27.82. La temporada tocaba a su fin pero antes el epílogo lo puso el Memorial Cagigal el 10 de marzo en el Palacio de los Deportes, donde se dieron cita un gran elenco de estrellas internacionales y que por parte española tuvo como principales actores a Javier García Chico, que mejoraba la plusmarca nacional de pértiga al elevarse por encima de 5,62 metros, y a Sandra Myers, que igualaba su récord de 60 metros con 7.24. También mejoraban los topes nacionales Ana Barrenechea en 60 metros vallas con 8.40, Estrella Roldán en triple (12,90) y Maite Zúñiga en los 1.000 metros (2:44.87). Llegamos así a los noventa, una década en la que nuestro país se iba a consolidar como potencia atlética internacional en pista cubierta antes de dar otro salto cualitativo importante ya en el siglo XXI. Nos encontramos en 1990, un año que comenzó con la disputa del V Gran Premio Ciudad de Oviedo el día 20 Budapest fue el escenario del Campeonato del Mundo de 1989. 132 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA de enero, una reunión que tuvo un tono general discreto, salvándose si acaso Ángel Heras, que regresaba tras casi un año en el dique seco debido a una lesión y se imponía en los 200 metros con 21.75 o los 6,24 metros de Gregoria Miranda en longitud. Una semana más tarde se disputa en San Sebastián la Copa de clubes en pista cubierta, con victorias de Larios en categoría masculina y Kelme en la femenina y donde Ana Isabel Alonso rebaja el récord de España de los 3.000 metros hasta 9:21.59. En esta misma categoría femenina destaca la victoria de María José Mardomingo en los 60 metros vallas con 8.42 y sorprende la derrota de Sandra Myers en 60 metros a manos de Cristina Castro, que marca unos buenos 7.40. Por cierto que en esta misma prueba en categoría masculina Javier Arques se muestra intratable registrando 6.69, mientras que en los 800 metros Luis Javier González domina por debajo de 1:50, iniciando una magnífica temporada en la que iba a convertirse en uno de los principales protagonistas españoles. Llegamos así al mes de febrero donde el primer hito importante sería el III Gran Premio F.M.D. de pista cubierta, disputado en Oviedo en la tarde del 4 de febrero, donde los atletas españoles fueron afinando su estado de forma de cara al Campeonato de España y al Europeo de Glasgow. En el tartán ovetense destacaron por encima de todos dos nombres, de nuevo Luis Javier González, que vencía en los 800 metros con un magnífico registro de 1:47.54 y el saltador abulense Ángel Hernández, que ingresaba en el selecto club de los atletas que habían sobrepasado los ocho metros en nuestro país al registrar justo esa medida. En esta prueba dominaba el cubano Jaime Jefferson con un salto de 8,18 metros. Mientras, en categoría femenina destacaron las marcas de Sandra Myers en 60 metros (7.38) y de Gregoria Miranda en longitud (6,38). Cornet y Luis Javier González, los mejores en el Hexagonal de París: Llega así la primera gran cita internacional del año para la selección española, un Hexagonal que debía enfrentarnos a las selecciones de Francia, Italia, las dos Alemanias y la Unión Soviética, el 10 de febrero en París, donde Luis Javier González España obtiene una buena cuarta plaza en hombres y la quinta en mujeres. Individualmente los nuestros obtuvieron dos victorias, por un lado Cayetano Cornet, que de nuevo supo coger la calle libre en cabeza para aguantar la ventaja y dominar los 400 metros en un buen crono de 46.41; por el otro, Luis Javier González, que corrió con maestría en los 800 metros para vencer por delante de algunos de los mejores mediofondistas europeos. No consiguieron la victoria, aunque también brillaban con fuerza en la "Ciudad de la luz" Maite Zúñiga y Montse Pujol, segundas en 800 y 1.500 metros con marcas respectivas de 2:02.92 y 4:14.59 y los cuartetos de relevos 4x200 metros, que batían la plusmarca nacional en esta inusual prueba con registros respectivos de 1:25.56 (hombres) y 1:35.50 (mujeres). Ese mismo día en San Sebastián, dentro de las 6 Horas ciclistas de Euskadi, se programa una prueba de 5.000 metros, donde José Luis González realizaba una magnífica cabalgada solitaria para vencer en una nueva plusmarca nacional de 13:39.45, siendo secundado por el británico Billy Dee (13:47.67) y por Abel Antón (13:57.62). También nuevo récord, en este caso en 60 metros vallas, hubo en el Campeonato de España promesa, el 11 de febrero en Valencia, donde María José Mardomingo registraba 8.39, aunque la alegría le duraría dos días puesto que Barrenechea recuperaría el primado 133 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA en Madrid con 8.37. Por último, el día 10 de febrero, también en Madrid, Miguel Ángel Prieto había marcado un nuevo tope en 5.000 metros marcha con 19:25.81. San Sebastián sería el escenario de los XXVI Campeonatos de España absolutos en pista cubierta los días 17 y 18 de febrero, donde el saltador de altura Arturo Ortiz iba a erigirse en gran protagonista. El atleta de Arganda cerró de forma brillante la competición, convirtiéndose en el primer español que superaba la barrera de los 2,30 metros en esta prueba. Ortiz realizó un concurso impecable, igualando la plusmarca con 2,26 (misma altura que saltaba Gustavo Adolfo Bécker), superándola posteriormente con 2,28 y luego probando fortuna con 2,31, altura que volvía a franquear en su segundo intento para hacer historia en el tartán de Anoeta. Otro atleta que subió también muy alto fue Javier García Chico en salto con pértiga, franqueando 5,65 metros en su tercer intento y añadiendo tres centímetros a su plusmarca. Del resto de pruebas masculinas habría que destacar la imponente victoria de Fermín Cacho en los 1.500 metros en 3:44.06, tras realizar unos últimos 500 metros en 1:08 o la victoria de Cayetano Cornet en los 200 metros con 20.91, tras haber marcado 20.89 en semifinales, a sólo dos centésimas del récord de Antonio Sánchez. En la categoría femenina había una importante novedad como era la inclusión por primera vez de la prueba de triple salto, que estuvo dominada por Mari Carmen Murga con un registro de 12,83 metros, mientras que en los 60 metros vallas Ana Barrenechea batía el récord de España con una marca de 8.27, marcando tres centésimas más en la final y batiendo a María José Mardomingo, que registraba 8.33. La otra plusmarca en categoría femenina la lograba María Díez en la prueba de pentathlón, donde sumaba 3.810 puntos. Antes de marchar para el Europeo nuestros atletas tenían una nueva oportunidad de lograr buenos registros en dos reuniones destacadas: primero en la Reunión Internacional de San Sebastián el 20 de febrero, con un tiple récord de España. Cayetano Cornet corría los 400 metros en 46.06, mientras que Sandra Myers realizaba 23.08 en 200 metros y Montserrat Pujol 4:09.48 en 1.500 metros; luego el II Memorial Plácido Fernández Viagas, disputado el 27 de febrero en Sevilla, que se destacó como el mejor meeting de la temporada, creando unas magníficas expectativas de cara al Mundial que debía disputarse al año siguiente. Lo más sobresaliente de la reunión estuvo en los 1.500 metros masculinos, donde el británico Peter Elliot realizaba una espectacular carrera para batir la plusmarca mundial de la distancia con 3:34.21 y arrastrar al resto de atletas a la consecución de grandes registros, entre los que cabe destacar los de los españoles Lorenzo Hidalgo con 3:37.72, en aquel entonces segunda mejor marca nacional de todos los tiempos, Ángel Fariña (3:38.02) y Adelino Hidalgo (3:39.95). Gran carrera se pudo vivir igualmente en los 800 metros, donde el estadounidense Johny Gray se imponía con 1:45.64 y el asturiano José Arconada marcaba unos sensacionales 1:47.17. También hubo protagonismo de Javier García Chico, que en pértiga se elevaba por encima de 5,67 metros, nuevo récord nacional. En categoría femenina la gran estrella fue la jamaicana Merlene Ottey, que se impuso en 60 metros (7.15) y en 200 metros (22.77), estando secundada en esta prueba por Sandra Myers, que ARTURO ORTIZ FRANQUEA LA BARRERA DE LOS 2,30 METROS Sin ninguna duda Arturo Ortiz fue el gran protagonista del Campeonato de España de 1990, disputado en el Palacio de los Deportes de San Sebastián. El saltador de Arganda elevó nada menos que en cinco centímetros el récord nacional de salto de altura y franqueó por primera vez la mítica barrera de los 2,30 metros en una inolvidable tarde, que fue narrada de esta manera en las páginas del diario "Marca": "Finalizaron los campeonatos de España absolutos con la prueba de salto de altura, donde Gustavo Adolfo Bécker y Arturo Ortiz confirmaron que son los mejores saltadores del país. El madrileño superó los 2,22 a la primera, haciendo lo propio el catalán con 2,24. Luego, en 2,26 metros necesitaron dos intentos, igualando la plusmarca que poseía el del Kelme. El listón se situó en 2,28, que el de Arganda saltó a la segunda, logrando de tan excelente forma el título, saltando después, también a la segunda, los 2,31 y poniendo un bonito colofón a un torneo que en líneas generales registró un excelente nivel". 134 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA señalaba 23.16, mientras que Ana Barrenechea en 60 metros vallas batía el récord nacional con 8.24. En definitiva, una gran reunión que demostraba que la ciudad hispalense podría ser un magnífico marco del Campeonato del Mundo en pista cubierta. Cuatro medallas en Glasgow: La ciudad británica de Glasgow esperaba a los mejores atletas del viejo continente para disputar la XXI edición del Campeonato de Europa en pista cubierta los días 3 y 4 de marzo, una competición por cierto que se destacó por su caos organizativo, que acaparó casi más titulares que los éxitos de nuestros atletas. España acudía con una amplia selección a la ciudad escocesa, reflejo sin duda de la excelente temporada bajo techo que estábamos viviendo, obteniendo un buen balance de cuatro medallas y nueve finalistas. Sólo nos faltó la guinda del oro para que la actuación hubiera sido completa. El principal potencial del equipo español estuvo una vez más en el mediofondo. En los 800 metros Tomás de Teresa realizaba una gran carrera para hacerse con la plata en 1:47.22, mientras que José Arconada peleaba duramente por el bronce, teniendo que conformarse al final con la siempre ingrata cuarta plaza, a sólo tres centésimas de subir al pódium. La carrera fue claramente dominada por el local Tom McKean que, espoleado por correr en su ciudad natal, vencía con unos magníficos 1:46.22, mejor marca mundial del año. Mientras, en los 1.500 metros el soriano Fermín Cacho iniciaba lo que sería una década triunfal para él colgándose la medalla de plata, tras dura pugna con el germano-oriental Jens Peter Herold, que finalmente sería el ganador de la prueba, mientras que Teófilo Benito ocupaba la quinta plaza. También plata obtuvo Arturo Ortiz en altura, ratificando la buena impresión que había causado en el Campeonato de España. El saltador español realizó un impecable concurso, franqueando a la primera el listón en 2,30 metros, lo que le llevó a la segunda plaza, sólo superado por el polaco Arthur Partyka, que voló por encima de 2,33 metros. La cosecha hispana la cerraría Cayetano Cornet con su medalla de bronce en los 400 metros, un metal que tuvo un cierto sabor agridulce puesto que el atleta español partía como claro Fermín Cacho fue uno de los medallistas españoles en Glasgow. favorito para la victoria tras su exhibición en semifinales, donde batía el récord de España con 46.00; sin embargo, una salida excesivamente rápida con un paso temerario por los 200 metros en 21.21 (con el que hubiera sido bronce en esta prueba) le hizo pagar en la segunda mitad de carrera donde fue superado por dos atletas germanos, el federal Dobeleit y el oriental Carlowitz. Las cuatro medallas conseguidas en Glasgow pudieron incluso incrementarse puesto que Sandra Myers a punto estuvo de subir al pódium en los 200 metros, donde fue cuarta con 23.08, récord nacional igualado, a sólo tres centésimas del bronce. Siguiendo con la categoría femenina hay que destacar el quinto puesto de Carmen Murga en triple salto con 12,57 metros o el récord de España de Begoña Herraez en los 3.000 metros, donde marcó 9:20.69 que le llevaron a la décima plaza final. Igualmente, en el plano emotivo hay que reseñar la despedida de Javier Moracho de los Europeos en pista cubierta, tras 14 ediciones en la cita continental, todo un récord en la historia de la competición. Esta retirada de las pistas del atleta oscense se iba 135 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA a materializar el 13 de marzo en el Memorial Cagigal de Madrid donde iba a estar acompañado por algunos de los mejores especialistas mundiales, en una carrera dominada por el estadounidense Reinaldo Nehemiah en 7.54, con Carlos Sala cuarto en 7.67 y Moracho quinto en 7.84. Lo más destacado de la reunión estuvo en la velocidad; en los 60 metros femeninos la jamaicana Marlene Ottey se imponía con unos espectaculares 7.08, mientras que Sandra Myers dejaba el récord de España de la distancia en 7.23. Las otras plusmarcas de la tarde fueron para Montse Pujol, que corría los 1.000 metros en 2:44.61 y para Antonio Corgos, que protagonizó un magnífico concurso de longitud para igualar una vez más su récord con 8,12 metros. La temporada se cerraría con la reunión de pértiga de Grenoble (10 de marzo) donde Javier García Chico volvía a elevar su plusmarca hasta 5,70 metros. Margarita Ramos comienza fuerte la temporada: Cerramos ya este capítulo con la crónica de lo acontecido en 1991, año en el que todas las miradas apuntaban al Mundial en pista cubierta que debía disputarse en el Pabellón San Pablo de Sevilla a principios de marzo. La primera fecha importante del año fue el 19 de enero, con varios escenarios repartiéndose el protagonismo. En las instalaciones del Consejo Superior de Deportes de Madrid Margarita Ramos fue la gran estrella de una reunión de lanzamiento de peso, batiendo el récord nacional por partida doble. En el primer intento se iba hasta 16,95 metros y en el quinto rompía una nueva barrera, la de los 17 metros, lanzando 17,17; sin duda un nuevo hito en la historia de esta prueba. Algo parecido lograría Conchi Paredes ese mismo día en Oviedo con motivo de la I Reunión Nacional de pista cubierta, superando por dos veces la plusmarca de triple con dos saltos de 12,97 y 13,06 metros. En esa misma competición otros puntos destacados fueron el duelo entre los locales José Arconada y Miguel Cuesta en 400 metros, resuelto a favor del primero en 48.45, mientras que en categoría femenina sobresalía Amaia Andrés en 800 metros (2:07.97) e Isabel López en longitud (6,29). El tercero de los escenarios de la jornada habría que situarlo en el Centro de Alto Rendimiento de Sant Cugat; y es que por aquellas fechas se ponían de moda los módulos cubiertos, muy funcionales, donde se podían disputar pruebas de velocidad, saltos y lanzamientos. Allí, en una reunión de pértiga regresaba a la competición tras un largo paréntesis debido a las lesiones Alberto Ruiz, que dominaba la prueba con 5,33 metros. La temporada bajo techo continuó el 26 de enero en San Sebastián con la Copa de Clubes, con victorias del Fútbol Club Barcelona en hombres y del Kelme en mujeres. Mientras esto ocurría en nuestro país, José Luis González viajaba hasta Estados Unidos para participar en una nueva gira americana. El 1 de febrero corría en los "Millrose Games" de Nueva York, donde se clasificaba segundo en los 3.000 metros con un buen crono de 7:49.96 por detrás del estadounidense Rubén Reina (7:48.80). Nuestros principales actores comenzaban a entrar en forma y esto pudo comprobarse en el IV Gran Premio de atletismo F.M.D., celebrado también en Oviedo el 2 de febrero, donde se lograron dos récords de España júnior y otro en categoría promesa. En el primer apartado Daniel Martí superaba el listón en pértiga en 5,20 metros, en una prueba dominada por García Chico en 5,40, mientras que el mallorquín Mateo Cañellas corría los 3.000 metros en un registro de 8:09.95, también plusmarca de la categoría. Por su parte, Julia Merino ponía el récord promesa al liderar los 400 metros en unos magníficos 53.41. Otros hechos reseñables de la tarde fueron la victoria de Gustavo Adolfo Bécquer en altura con 2,28 metros, estando a punto de superar incluso los 2,31 o las grandes carreras de 800 y 1.500 metros con Luis Javier González y Fermín Cacho como protagonistas. Cuatro días más tarde en Madrid Mari Mar Martínez batía el récord de España de altura con 1,88 metros, tras haberlo igualado previamente con 1,86. Leroy Burrell, récord del mundo en Madrid: Uno de los grandes acontecimientos previos al Mundial tenemos que situarlo en la pista del Palacio de los Deportes de Madrid, donde en la tarde del 13 136 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA LEROY BURRELL, RÉCORD DEL MUNDO DE 60 METROS EN MADRID El norteamericano Leroy Burrell se convertía en gran protagonista del Memorial Cagigal al batir el récord del mundo de 60 metros, en una carrera que no estuvo exenta de cierta polémica. Vamos a reproducir aquí un extracto de la crónica que Ignacio Romo escribía en "El Independiente": "Los atletas se situaron en los tacos y llegó el disparo de salida. En el Palacio de Deportes todo el mundo lo vio claro. Se había escapado. El velocista estadounidense había reaccionado con anterioridad al disparo y se había puesto en acción por delante de sus rivales. Burrell voló y detuvo el crono en unos espectaculares -pero ilegales- 6.40. Diez centésimas por debajo del récord del mundo. Durante algunos instantes la confusión reinó en el Palacio de Deportes. El público silbaba ininterrumpidamente… Las imágenes de televisión aclararon el asunto. Burrell se había anticipado al disparo. Aunque el juez de salida tardó en rectificar su decisión, al final el jurado de carrera decidió anular la carrera por salida ilegal de Burrell. La decisión era justa y fue aplaudida por el público. Sólo cuatro de los seis finalistas quisieron volver a correr. También estaba Leroy Burrell, que aceptó con una exquisita elegancia la decisión de los jueces. Los velocistas volvieron a situarse, una vez más, en la línea de salida. Esta vez la salida de Burrell fue correcta. Voló por la pista y detuvo el crono en 6.48. Esta vez había batido de verdad el récord del mundo de los 60 metros". de febrero y en el marco del Memorial Gagigal el estadounidense Leroy Burrell se convertía en el nuevo rey de la velocidad mundial; además en una prueba con cierta polémica. El hecho fue que en la final de 60 metros Burrell hizo unos movimientos previos a la salida, que el juez en primera instancia no apreció como irregulares; el estadounidense partió como un rayo y marcó unos espectaculares 6.40, pulverizando el récord del mundo por nada menos que diez centésimas. Estaba bastante claro que la marca se había conseguido con una salida nula y posteriormente el jurado de apelación decidió invalidar la carrera. Se tomó la decisión de repetir la prueba media hora más tarde. A pesar de este contratiempo, el norteamericano, que estaba en un gran estado de forma, decidió salir de nuevo a por el récord y realizó otra magnífica carrera, realizando 6.48, plusmarca mundial por dos centésimas. Su compatriota Mark Whiterspoon (6.59), el nigeriano Chidi Imoh (6.68) y Florencio Gascón (6.70) fueron testigos de excepción de esta magnífica gesta. Los 6.50 del también norteamericano Lee McRae habían pasado a la historia y comenzaba a fraguarse la leyenda de la recta central madrileña como escenario talismán para la consecución de récords del mundo de velocidad. Fue este el momento estelar de una tarde que deparó mucho y bueno; por ejemplo una interesante carrera de 1.000 metros donde Fermín Cacho batía el récord de España con 2:21.33, superando los 2:21.99 que Antonio Paez había establecido en 1982, o un concurso de longitud donde Ángel Hernández se mostraba en gran forma volando hasta 8,03 metros y donde Jesús Oliván resurgía tras atravesar varios problemas físicos para saltar 7,91 metros. En categoría femenina sobresalieron igual- 137 Fermín Cacho venciendo en los 1.000m del Cagigal. HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA mente las pruebas de velocidad, con la jamaicana Marlene Ottey venciendo en los 60 metros con un gran registro de 7.12 por delante de la cubana Lilliana Allen (7.19) o con Sandra Myers imponiéndose en los 400 metros en 52.95. También buena fue la prueba de 60 metros vallas, donde la soviética Lyudmila Narozhilenko marcaba unos magníficos 7.86, mientras que María José Mardomingo señalaba 8.34. 7,10 en longitud, 16,24 en peso, 1,96 en altura, 8.44 en 60 metros vallas, 4,60 en pértiga y 2:51.21 en 1.000 metros. Además, en el anillo sevillano pudieron vivirse espectaculares carreras como la de 400 metros, donde Cayetano Cornet vencía con unos magníficos 46.10, a sólo diez centésimas de su récord nacional, y era secundado por Antonio Sánchez, que marcaba 46.50; la vibrante recta final protagonizada por Luis Javier González y Tomás de Teresa en los 800 metros, con triunfo final para el primero; o la accidentada final de 1.500 metros, con una caída que afectó nada menos que a seis atletas y donde Fermín Cacho supo maniobrar con maestría para hacerse con el triunfo. La cita del Nacional resultó decisiva para confeccionar el equipo que debía viajar a París para tomar parte en el Seis Naciones el día 23 de febrero. Allí nuestros atletas fueron quintos tanto en hombres como en mujeres, superando en la primera de las categorías a Gran Bretaña y en la segunda a Italia. En la capital francesa se lograron tres victorias individuales. Por un lado, Fermín Cacho en los 1.500 metros donde mostró su autoridad en una carrera muy táctica para dominar en 3:48.43, mientras que Sandra Myers realizaba una gran prueba de 400 metros, imponiéndose con claridad en 51.82, con lo que le pegaba un recorte de siete centésimas al récord que ella misma Sandra Myers, la gran estrella en el Nacional: La cita mundialista estaba cada vez más cerca y la pista sevillana del Pabellón San Pablo necesitaba rodarse con importantes competiciones como el Campeonato de España absoluto, celebrado los días 16 y 17 de febrero. Allí Sandra Myers volvió a demostrar su adaptación progresiva a los 400 metros, marcando 54.24 en series, 53.73 en semifinales y unos espectaculares 51.89 en la final, por supuesto nueva plusmarca nacional, apuntando sus posibilidades en esta prueba de cara al Mundial. Siguiendo con las pruebas femeninas, destacaba la victoria de Cristina Castro en 60 metros con 7.46, la de Maite Montaña en 3.000 metros con 9:21.75, o la plusmarca española de Susana Cruz en pentathlón con 3.940 puntos. En las pruebas masculinas se mejoraron dos récords de España; por un lado, el marchador Miguel Ángel Prieto, que realizó una impresionante prueba de 5.000 metros marcha, tomando la cabeza desde los primeros metros e imponiendo un fuerte ritmo que no pudo ser seguido por sus perseguidores. Ya al paso de los 3.000 metros marcaba 11:23.15, por debajo de su plusmarca en esta distancia y completaba la prueba en un nuevo primado nacional de 18:56.41, mejorando en casi medio minuto su registro anterior. Buena carrera igualmente de Valentín Massana, que con 19:20.75 superaba el récord de la categoría promesa. Por otro lado, Antonio Peñalver marcaba 5.690 puntos en el heptathlón con Barrenechea y Mardomingo mantuvieron un bonito duelo en el unos parciales de 7.23 en 60 metros, Campeonato de España. 138 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA había establecido días antes en el Campeonato de España y establecía una mejor marca mundial provisional de la temporada. En esta misma prueba en categoría masculina Cayetano Cornet se anotaba otra importante victoria en un tiempo de 46.48, por delante del alemán Lieder y del italiano Nuti. Dejando a un lado estos triunfos, una prueba que se destacó por sus grandes registros fue la de 5.000 metros marcha, dominada por el soviético Mikhail Schennikov en 18:46.01 y donde Valentín Massana ocupaba la cuarta plaza en 18:59.60, acercándose a la marca que había fijado Miguel Ángel Prieto en Sevilla. Por último, podemos citar que en las pruebas de relevos 4x400 metros se establecían nuevos récords de España con tiempos de 3:10.69 en la carrera masculina y 3:37.74 en la femenina. Espectacular prueba de 1.500 metros en Sevilla: A la vuelta de París todavía quedaba una oportunidad más para los atletas que querían conseguir la mínima para participar en el Mundial ya que el 28 de febrero se disputaba en la pista sevillana el Memorial Plácido Fernández Viagas, que de nuevo resultó la mejor reunión de la temporada por la calidad de los registros allí conseguidos. Si el año anterior el británico Peter Elliot se había convertido en gran protagonista del meeting, en esta ocasión sería otro mediofondista, el argelino Nourredine Morcelli el que acapararía todas las miradas en los 1.500 metros, con el permiso de nuestro Fermín Cacho. La carrera se montó con la idea de volver a batir la plusmarca mundial y para ello contó con una liebre de excepción, el norteamericano Washington, que cubrió los 400 metros en 55.93 y los 800 en 1:53.55, más rápido que los pasos del británico el año anterior. Morcelli siguió marcando un ritmo frenético, con Cacho que no le perdía la zaga en ningún momento para pasar por los 1.200 metros en 2:53.04 y cubrir los últimos 300 metros en 41.12 para registrar un espectacular récord del mundo de 3:34.16, mientras que el español finalizaba en unos magníficos 3:35.29, con lo que ponía fin al reinado de González en la distancia. Buen crono igualmente de Víctor Rojas (3:39.24) en una carrera que será difícil de olvidar por su intensidad. Fue el momento cumbre de la Morceli batiendo el récord del mundo en Sevilla. tarde pero no el único porque por ejemplo en los 400 metros pudimos ver a un gran Michael Johnson dominando en 45.46 por delante de su compatriota Danny Harris (46.68) y el alemán Thomas Schoenlebe (46.77), mientras que en los 60 metros el británico Linford Christie se imponía en una apretada llegada al nigeriano Chidi Imoh, acreditando ambos 6.57. En las pruebas femeninas la gran protagonista fue una vez más la jamaicana Merlene Ottey, que registraba un sensacional doblete en 60 y 200 metros con muy buenos cronos de 7.08 y 22.37, mientras que por parte española sobresalía la vallisoletana Julia Merino, que se impuso en los 400 metros con 52.39, ganándose su billete para el Mundial, así como Emilia Cano, segunda en 3.000 metros marcha con 12:56.17 por detrás de la australiana Kerry Saxby (12:51.75). También podemos citar a María José Mardomingo que en 60 metros vallas igualaba el récord nacional con 8.24. Antes de llegar al Mundial merece la pena mencionarse igualmente el Encuentro de combinadas entre España, Francia, Holanda y Suiza en Zaragoza los días 2 y 3 de marzo donde nuestros hombres y mujeres completos brillaron a gran nivel. Por un lado, Antonio 139 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA Peñalver era segundo en el heptathlon con un nuevo récord de España de 5.952 puntos, mientras que Susana Cruz ocupaba la cuarta plaza en pentathlon con 4.008 puntos, igualmente primado nacional. Sevilla vivió un gran Mundial: La cita mundialista estaba a punto de empezar y el tartán sevillano había mostrado de sobra su calidad por lo que las expectativas previas eran altas. Así, por la capital hispalense desfilaron algunos de los mejores atletas mundiales entre los días 8 y 9 de marzo para disputar la tercera edición de esta competición. La expedición española estaba formada por 37 atletas, como es lógico la más numerosa en la historia de la competición, y el resultado final fue plenamente satisfactorio con un balance de cuatro medallas y nueve finalistas, dando un importante salto de calidad en relación a lo conseguido en Indianápolis'87 y Budapest'89. El Mundial supuso un gran éxito a todos los niveles, no sólo el deportivo sino también el organizativo y participativo, con un público entusiasta y entregado que llenó la instalación los dos días de competición y no dejó de animar no sólo a los atletas españoles sino a todos los participantes. Pero vayamos ya con la crónica deportiva de lo allí acontecido. Los cuatro metales conseguidos por nuestros atletas llegaron todos en las pruebas en el anillo. En los 1.500 metros Fermín Cacho ponía un magnífico colofón a su gran temporada y lograba una valiosa medalla de plata en un tiempo de 3:42.78 por detrás del por aquel entonces imbatible Morcelli, que se mostró muy superior en todo momento. Mientras, en los 800 metros se produjo una curiosa circunstancia puesto que la victoria en primera instancia fue para el keniano William Tanui por delante del plusmarquista mundial, su compatriota, Paul Ereng; sin embargo, sería posteriormente descalificado por pisar la línea interior de su calle en la salida. Por detrás de estos dos superclases realizaba una magnífica carrera el cántabro Tomás de Teresa, que en la recta final se lanzó a por el bronce, cosa que consiguió en un registro 1:47.82 tras mantener una dura pugna con el canadiense Hoogewerf y el norteamericano Redwine. Al final y con la descalificación de Tanui el español cambiaría el bronce por la plata. Mismo metal obtendría Sandra Myers en las dos vueltas a la pista, en una prueba rapidísima lanzada por Diane Dixon con un paso de 23.93 por los 200 metros. La norteamericana no abandonaría el liderazgo hasta el final, registrando 50.64 pero Myers estuvo colosal, descendiendo de los 51 segundos (50.99), con lo que se colgaba la medalla de plata además de batir una vez más el récord de España de la distancia. La última de las preseas llegaría en esta misma prueba en su versión masculina y correría a cargo de Cayetano Cornet, que de nuevo demostraba su capacidad competitiva y volvía a subirse a un pódium en una de las grandes citas bajo techo, logrando el bronce en un tiempo de 46.52, por detrás del jamaicano Morris y el keniano Kitur. Mención especial merecen también los atletas que se quedaron a las puertas de subir al pódium. Por ejemplo, Miguel Ángel Prieto, que rindió a un magnífico nivel en los 5.000 metros marcha para finalizar cuarto en una nueva plusmarca nacional de 18:53.83, justo Tomás de Teresa camino de la plata. 140 HISTORIA DEL ATLETISMO ESPAÑOL EN PISTA CUBIERTA por delante de Valentín Massana, en una prueba en la que el soviético Schchennikov batía la plusmarca mundial en 18:23.55 tras una dura pugna con el italiano De Benedictis (18:23.60). No menos malo fue la actuación del local Miguel Ángel Gómez en los 200 metros, que encandiló al público logrando incrustarse en la final, tras vencer en una de las semifinales con 21.09 y ocupando la quinta plaza en un tiempo de 21.29 en la ronda definitiva. El capítulo de finalistas lo completaron el cuarteto femenino de 4x400 metros, formado por Sandra Myers, Julia Merino, Gregoria Ferrer y Esther Lahoz, que finalizaba cuarto en 3:31.86, marca que sigue siendo el vigente récord español y Emilia Cano, sexta clasificada en los 3.000 metros marcha con 12:40.87. Por el Campeonato desfilaron grandes estrellas como Sergei Bubka, Mike Conley o la soviética Inessa Kravets, que batió la plusmarca mundial de triple con 14,44 metros. En definitiva, una cita que fue valorada muy positivamente por los medios de comunicación y los estamentos oficiales. La temporada tocaba a su fin, pero antes, el 15 de marzo en la III Reunión Internacional Ciudad de San Sebastián nuestro país iba a ser de nuevo escenario de la consecución de un récord del mundo... y en este caso espectacular. El por aquel entonces todavía soviético Sergei Bubka voló a los cielos de "la Bella Easo" y sobrepasó en su segundo intento el listón en 6,10 metros en salto con pértiga, logrando una plusmarca de las de altura, nunca mejor dicho. Otros tres atletas más superaron el listón en 5,81 metros en una prueba de altísima calidad. La verdad es que la reunión donostiarra resultó excelente con marcas como los 7.42 de Greg Foster en 60 metros vallas o los 6.53 de Chidi Imoh en 60 metros. Por parte española Sandra Myers rebajaba la plusmarca española de 200 metros hasta 22.81, clasificándose por detrás de la soviética Sergeyeva, que marcaba 22.45, mientras que Carlos Sala igualaba su marca personal en los 60 metros vallas con 7.66. Solamente dos apuntes más de esta temporada que estamos despidiendo como es la puesta en escena de una nueva competición para los júniors, la Copa de Clubes Júnior, que recibió el sobrenombre de "Trofeo Antonio Ferrer" como homenaje al que fue su gran promotor, cuya primera edición se disputó en el Pabellón Fuente de San Luis de Valencia el 16 de marzo con victorias de Larios en hombres y Valencia C.F. en mujeres. Por último, Javier García Chico volvía a brillar en la reunión de Grenoble el 23 de marzo, al elevarse por encima de 5,72 metros en pértiga, estableciendo el último récord de España de la temporada. Sandra Myers fue una de las medallistas españolas en el Mundial de Sevilla. 141