DEVOCIONES AL CORAZON DE Quince Minutc!>s EN COMPAÑIA DE JESUS SACRAMENTADO ESTACION AL SANTlSlMO SACRAMENTO CON LAS DEBIDAS LICENCIAS -ECLESIASTICAS- Quince Minutos EN COMPANIA DE Jesús Sacramentado No es preciso, hijo mí.o, saber mucho para agradarme mucho; basta que me ames con fervor. Háblame, pues aquí sencillamente, como hablarías al más íntimo de tus amigos, como hablarías a tu madre, a tu hermano. ¿Necesitas hacerme en favor de alguien una súplica cualquiera? Dime su nombre bien sea el de · tus padres, bien' el de tus hermanos o amigos; dime en seguida qué quisieras que -3- hiciese actualmente por ellos. Pide mucho, mucho; no vaciles en pedir; me gustan los corazones generosos que llegan a olvidarse en cierto modo, de sí mismos, para atender a los necesidades aienas. Háblame, pues con sencillez, con llaneza, de los pobres a quienes quisieras consolar, de los enfermos a quienes ves padecer; de los extraviados que anhelas volver al buen camino; de los amigos ausentes que quisieras ver a tu lado. Dime por todos una palabra siquiera, . pero palabra de amigo; palabra entrañable y fervorosa. Recuérdame que he -4- prometido escuchar toda súplica que salga del corazón; ¿y no ha de salir del corazón el ruego que me diriias por aquellos a quienes tu corazón más especialmente ama? . ¿Y para tí no necesitas alguna gracia? Hazme, si quieres, una como lista de tus necesidades, y ven, léela en mi presencia. Dime francamente que sientes soberbia, amor a la .sensualidad yal regalo que eres tal vez egoístas, inconstante, negligente... ; y pídeme luego que venga en ayuda de los esfuer- -5- zos, pocos o muchos, que haces para librarte de tales miserias. No te averguences, ¡pobre alma! ¡Hay en el cielo tantos iustos, tantos Santos ·d e primer orden, que tuvieron esos mismos defectos! Pero roga ron con humildad, y poco a poco se vieron libres de ellos. Ni menos vaciles en pedirme bienes espi ritua les y corporales: salud, memoria, feliz éxito en tus trabaios, negocios o estudios: todo eso puedo dar, y lo doy, y deseo que me lo ' pidas en cuanto no se oponga, antes bien ayude, a -6- tu sanfificación. Hoy por hoy ¿que necesitas? ¿qué puedo hacer . por tu bien? ¡Si supieras los deseos que tengo de favorecerte! ¿Traes ahora mismo entre manos algún proyecto? Cuéntamelo todo minuciosamente. ¿Qué te preocupa? ¿qué piensas? ¿qué deseas? ¿Qué quieres que haga por tus pad res¡ por tus hermanos, por tus hi¡os, por tus amigos, por tus superiores? ¿qué desearías hacer por ellos? ¿Y por mí? ¿No sientes deseos de mi gloria? ¿No quisieras poder hacer algún bien a -7- tus pr6iimos, a los amigos, a quienes tú amas mucho, y que viven quizás olvidados de mí? Dime qué cosa llama hoy particularmente tu atención, qué anhelas más vivamente, y con qué medios cuentas para conseguirlo. Dime si te sale mal tu empresa, y yo . te diré las causas del mal éxito. ¿No quisieras interesarme algo en tu favor? Hiio mío, soy dueño de los corazones, y suavemente los llevo, sin periuicio de su libertad, a donde me place. ¿Sientes acaso tristeza mal humor? -8- o Cuéntame, cuéntame, alma desconsolada, tus tristezas con todos sus pormenores. ¿Quién te hirió? ¿quién lastimó tu amor propio? ¿quién le ha menospreciado? Acércate a mi Corazón, que tiene bálsamo eficaz para curar todas esas heridas del tuyo. Dame cuenta de todo, y acabarás en breve por decirme que, a semeianza de . mí, todo lo perdonas, todo lo olvidas, y en pago recibirás mi consoladora bendición. ¿Temes por ven tu ro? ¿Sientes en tu alma aquellas vagas melancolías, que no por ser in- -9- iustificadas dejan de ser desgarradoras? Echate en brazos de mi amorosa providencia. Contigo estoy; aquí, a tu lado me tienes, todo lo veo, todo lo oigo, ni un momento te desamparo. ¿Sientes desvío de pa rte de personas que antes te quisieron bien, y ahora olvidadizas, se alejan de tí, sin que les hayas dado el menor motivo? Ruega por ellas, y yo las volveré a tu trato, si no han de ser obstáculo a tu santificación. ¿No tienes tal vez alegría alguna que comunicarme? -10- ¿Por qué no me haces participante de ella a fuer de buen amigo? Cuéntame lo que desde ayer, desde la última visita que me hiciste, ha consolado y alegrado tu corazón. Qu izás . has tenido agradables sorpresas; quizá has visto disipados negros recelos; quizá has recibido faustas noticias, una carta, una muestra de cariño; has vencido alguna dificultad, ·o salido de algún lance apurado. Obra mía es todo eso, y yo te lo he procurado. ¿por qué no haz de manifestarme por ello tu -11- gratitud y decirme sencillamente, como un hiio a su padre: "Gracias, Padre mío, gracias"? El agradecimiento trae consigo nuevos beneficios, porque al bienhechor le gusta verse correspondido . ¿Tampoco tienes promesa alguna que hacerme? leo, ya lo sabes en el fondo de tu corazón. A los hombres se les engaña fácilmente, a Dios no; háblame, pues con toda sinceridad. ¿Tienes firme resolución de no exponerte ya más en aquella ocasión de pecado? ¿de privarte de aquel -12- ob¡eto que te dañó? ¿de no . leer más aquel libro que exaltó tu imaginación? ¿de no tratar más aquella persona que turbó la paz de tu alma? ¿Volverás a ser dulce, amable y condescendiente con aquella otra; a quien por haberte faltado, has mirado hasta hoy como enemiga? Ahora bien, hijo mío, vuelve a tus ocupaciones habituales, a tu taller, a tu familia, a tu estudio; pero no olvides los quince minutos de grata conversación que hemos tenido aquí los dos en la soledad -13- del santuario. Guarda en lo posible, silencio, modestia, recogimiento resignación, caridad con el pr6iimo Ama y honra a mi Madre, que también lo es tuya. Vuelve otra vez mañana con el coraz6n más a moroso, más entregado a mí. En el mío hallarás cada día nuevo amor, nuevos beneficios, nuevos consuelos. Aquí te espero. -14- ESTACION AL SANTISIMO SACRAMENTO 1 Soberano Señor sacramentado. Aquí está un pecador arrepentido. De haber tus mandamientos quebrantado y tus leyes divinas infrigido¡ Aquí me tienes a tus pies postrado. Porque me pesa de que te he ofendido: Pequé, Señor, he caído en tu desgracia. Imploro tu perdón dame tu graCIa. -1'5- Padre nuestro, Ave María y Gloria. Santísimo Sacramento, seas bendito y alabado y eternamente adorado loh soberano portento! 2 De tu misericordia Dios piadoso. Perdón espera mi · alma arrepentida. Pues sé que eres afable y bondadoso. y te gozas en verla convertida; A tí, Dios compasivo y generoso. Te prometo la enmienda de mi vida. y me pesa del tiempo que he pasado. Ofendiéndote, ¡Oh Dios sacramentado! -16- Padre nuestro, Ave María y Gloria. Santísimo Sacramentó" seos'~bendito y' alabadb yéten'ló. mente adorado ¡oh soberano portento! 3 Misericordia, ' ¡oh ,Dios omnipotente! Imploro ,humilde, apiádate de mí. y repito otra vez ingenuamente: Me pesa, oh · Dios de cuanto te ofendí; A tus sagrados . pies sinceramente. Cumplirte ofrezco lo que prometí; Ya vesque está mi corazón contrito: ' -17-, Afírmame en tu amor, Dios infinito. Padre nuestro, Ave María y G1oria. Santísimo Sacramento, seas bendito y alabado y eternamente adorado ¡oh soberano portento! 4 En tí, mi Dios, está mi pensamiento, y absorta contemplándote mi alma; Ilumina, Señor mi entendimien- . to; A mis pasiones dales dulce calma. De ·cuanto te ofendí, ya me arrepiento, y me presento con olivo y palma; -18- Símbolo son de pura fe y concordia; Misericordia, ¡oh Dios!, misericordia. Padre nuestro, Ave María y Gloria. Santísimo Sacramento, seas bendito y alabado y eterna mente adorado ¡oh soberano portento! 5 Siento un iúbilo suave, un gran contento, Postrado ante ese altar, considerando Que estás, Señor, en ese Sacramento, Que es a mi Dios a quien estoy hablando: ¡Qué grande Maiestad! ' ¡qué 9 ra n portento! -19- ¡Oh, qué amable verdad estoy gustando! Sacramento divino yo te adoro; Te venero con fe, tu gracia imploro. . . Padre nuestro, Ave María y Gloria. Santísimo Sacramento, seas bendito y alabado y eternamente a~orado ¡oh soberano portento! 6 No es posible que exista en este suelo Qu ienmerezca cariño puro y fino, Como el que te consagro, oh Dios del cielo: Tú sólderes mi amor, Jesús di- . VinO. -20- Tú eres mi Redentor, tu mi consuelo Todo cuanto en Tí veo , es peregrino; Se enaiena mi alma al contemplarte, y siento gran placer al venerarte Padre nuestro, Ave María y Gloria. Santísimo Sacramento, seas bendito y alabado y eternamente adorado ¡oh soberano portento! 7 Para pagarte, Señor mío, en algo, Lo mucho que pecando te he ofendido, Es nada lo que puedo y lo que valgo; -21- Mas te diré que estoy arrepentido. Que ya del mal vivir con brío salgo, Por tu gracia, oh mi Dios, fortalecido, Para ayunar, orar y en penitencia, Prestar siempre a tus leyes obediencia. Podre nuestro, Ave Moría y Glorio. Santísimo Sacramento, seos bendito y alabado y eternamente adorado ¡oh soberano portento! 8 OFRECIMIENTO DE LA ESTACION En memoria, Señor de tu pa., slon, -22- De tu muerte en la cruz, de tu agonía, Porque tanto se aflige el alma mía, Yo te ofrezco, Señor, esta estación. ¡Ojalá que me guíe a salvaciónf Pues todos mis sentidos a porfía, Con respeto, contento y ale, grla, Se enajenan en tu contemplación. De un pecador contrito y humillado, Dígnate recibir aquesta ofrenda·, -23- Concédeme tu grada, Dios amado, y tu misericordia a descienda, Pues te adoro, Señor, con fe sincera, y con fervor mi alma te venera. Viva Jesús Sacramentado. Viva y de todos sea muy amado. mí -24- ACTO DE CONSAGRACION y DESAGRAVIO AL SAGRADO CORAZON DE JESUS ¡Oh Corazón de Jesús! Quiero consagrarme a tí con todo el fervor de mi espíritu. Sobre el ara del altar en que te inmolas por mi amor, deposito todo mi ser: mi cuerpo, que respetaré como templo en que tú habitas; mi . alma, que cultivaré como ¡ardín en que te recreas; mis sentidos, que guardaré como puerta de tentación; mis potencias, que abriré a las inspiraciones de tu gracia; mis pen"samientos; que apartaré de las ilusiones del mundo; mis -25- deseos, que pondré en la felicidad del Paraíso; mis virtudes, que florecerán a la sombra de tu protección; m i s pasiones, que se someterán al freno de tus mandamientos y el dolor de mis pecados, que detestaré mientras haya odios en mi pecho, y que lloraré sin cesar mientras haya lágrimas en mis oios. Mi corazón quiere desde hoy ser para siempre todo tuyo, así como tú, ¡oh Corazón divino!, has querido ser siempre todo mío. Tuyo todo, tuyo siempre. no más cul pos, no más tibieza. Te serviré por los que -26- te ofenden; pensaré en tí por los que .de tí se olvidan; te a m aré por los que te odian; y rogaré, y gemiré, y me sacrificaré por los que blasfeman de Ti sin conocerte. Tú, que penetras los corazones, y sabes la sinceridad de mis deseos, comunícdme aquella gracia que ·· hace al débil omnipotente; dame el triunfo del valor en las batallas de la tierra, y cíñeme el olivo de la paz en las mansiones de la gloria. Amén -27- NOVENA PRIMER DIA Por la señal de la Santa Cruz... Señor mío Jesucristo ... ACTO DE CONTRICION Dulcísimo Jesús mío, Dios y Hombre verdadero, en quien creo y espero y a quien amo más que Q todas las cosas. Por ser vos quien sóis, bondad infinita, pésame, Jesús mío, de haber pecado; no más, pecar. Señor¡ habed piedad y misericordia de mi. -28- ORACION ¡Oh, dulcísimo Jesús mío! Por .fas ardientes llamas que inflama vuestro amabilísimo Corazón, os pido que encendáis en el mío aquel santo y dichoso fuego que vinistéis a encender en la tierra. Dicipad y destruid los afectos que le impiden consagrarse enteramente a Vos. Si hasta aquí os he menospreciado, ya sólo quiero vivir para amaros. Vos sois la hermosura infinita; en Vos están todas las perfecciones¡ sois infinitamente amable. Os amo, Jesús mío, de -29- todo corazón, y sólo a Vos quiero amar. No desechéis mi amor. Haced brillar vuestra gloria manifestando a los Santos y Angeles un corazón, que hasta ahora os había sido ingrato, inflamado ya en vuestro dulcísimo amor en esta vida, y deseoso de amaros, bendeciros y adoraros con vuestra divina Madre en la patria celestial por todos los siglos. Amén. Después de la oración se reza tres veces la siguiente aspiración, y cada vez el Padre nuestro: -30-- v..Divino Corazón de Jesús, sea tal mi feliz suerte. R. Que os ame más y más hasta la muerte Padrenuestro. Aquí pedirá cada uno el favor que desee conseguir en esta novena. PETICION PARA TODOS lOS OlAS Os rogamos, Señor, por el triunfo ' de la Santa Iglesia, por los Prelados de ella, por la exaltación de la fe católica, extirpación de las here¡ías, paz y concor- -31- dia entre los Príncipes crrstianos, conversión de los infieles, hereies y demás pecadores, por las benditas almas del Purgatorio y demás piadosos fines de nuestra Santa Madre Iglesia. V.-Venid. Dios mío, en mi auxilio. R.-Apresuraos, Señor a socorrerme. V.-Glorio al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. R.-Ahora y siempre y como desde el principio y por todos I,os sigros' de los siglos. Amén. Bendito y alabado sea el Sagrado Corazón de Jesús -32- ORACION PARA TODOS LOS OlAS ¡Padre Eterno, Dios Altísimo! Desde vuestro exce,lso trono de maiestad y de misericordia, dignaos echar una tierna mirada a la sacrosa nta vícti ma que os ofrece vuestro Santísimo Hi¡o. Pontífice y Señor nuestro, Jesucristo, por los .pecados de nosotros, sus hermanos a fin de aplacar vuestro iusto enoio, provocar por el exceso de nuestra molida, y de borrar la muchedumbre de nuestras iniquidades. La voz de la sangre de nuestro hermano Jesús, derra- -33- mada por nosotros, clama a Vos desde el santuario de su Corazón, inmolado por nuestro amor. Oid, Señor, s~s clamores, aplacad vuestro iusto enoio, tocad vuestra s~vera iusticia en dulce .y tierna . compasión de nosotros. Ya que invocamos vuestro santo nombre por mediación del Sagrado Corazón de Jesús, .o torgadnos la gracia que os pedimos y derramad sobre nosotros y sobre vuestro pueblo los tesoros de vuest~a infinita misericordia. Amén. ORACION ¡Oh, Jesús, .Señor nuestro! -34- que por un nuevo beneficio de vuestra gracia · os habéis dignado manifestar a vuestra Iglesia las inefables riquezas de vuestro Corazón! Haced que, agradecidos; paguemos a este Sacratísimo Corazón amor por amor, y reparemos con dignos obsequios los ultrajes que recibe de los hom bres ing ratos. Amén. SEGUNDO OlA Dulcísimo (Pág. 29). Jesús mío, etc. ¡Oh, Corazón adorable . de mi Jesús, enamorado de los -35- hombres, · formado expresamente pard amarlos! Perdonadme, Sacratísimo ICorazón, la gravísima ofensa de no haberos amado siempre. Sé que por tan culpable indiferencia merecía el castigo de no poder amaros nunca. Pero, ¡oh, dulce Redentor mío!, dadme cualquier otro castigo antes de negarme la gracia de que os ame enviándome todas las cosas que fueren de vuestro soberano agrado. Y pues no queréis mi perdición, sino que os ame, tampoco quiero sino amores, en justa correspondencia de vuestro i nfi nito cariño. Corazón inflamado de -· 36- Jesús, haced que inflame el mío una centella de vuestro divino fuego. Antes la muerte, Señor, que volver a seros ingrato después que me habéis concendido tantas gracias y favores. Por la sangre que por mi derramásteis, y por la intercesión · de María, Madre del amor, espero que encadenaréis y uniréis mi corazón con el vuestro en este vaUe de lágrImas, de modo que persevere en esta dichosa unión por eternidad de eternidades en la patria celestial. Amén. Lo restante como el primer día (pág. 29). -37- TERCER OlA Dulcísimo Jesús mío etc. (Pág. 29). ORACION Oh, amaotísimo Corazón de mi Jesús! Vos me mandáis que ,. os ame, ,y me amenazals con el Infierno si no os amo. Conozco, amado Salvador mío, que por mis pecados merezco quedar abandonado de vue~ tra divina gracia y condenado a no poder ya amaros. Vos prosegllís en vuestro empeño de que os ame, y me siento vivamente inclinado a corresponder ; 'a vuestra generosidad. -38- Este santo deseo viene de vuestra divina gracia. Vos me lo inspiráis, dadme fuerza para cumplirlo. Vos pedís mi amor, yo deseo el vuestro. Olvidad, Jesús mío, los sinsabores que os he causado. No me dejéis nunca, y no permitáis que yo os . deje. En vuestros méritos pongo toda mi confia nza. Haced que os ame siempre y que os ame dignamente este miserable pecador, que tan indignamente y tan reiteradas veces os ha ofendido. Inmaculada Virgen María, asistidme con vuestro soberano auxilio para que ya en esta vida pueda -39- decirlo de lo íntimo de mi corazón a vuestro Hiio: llAmaos, Señor, más que a todas las cosa Sil, para . repetirlo después en vuestra compañía por eternidad de eternidades. Amén. Lo restante como el primer día. CUARTO OlA Dulcísimo Jesús mío, etc. ORACION Dulcísimo Jesús, crucificado por amor mío: aquí tenéis postrado a vuestras plantas el que tantas veces ha renovado los dolores de vuestro Sacratísimo -40- Corazón. Inflamado el mío, por vuestra infinita misericordia en vuestro santo amor, siente tan vivo pesar de los disgustos que os he causado, que quisiera mori r de dolor. Concédeme la gracia de aborrecer el pecado como Vos le aborrecéis. Inspiradme tal horror a la culpa, que me haga detestar hasta las más ligeras faltas, considerando cuanto desagradan a vuestro Corazón, que, leios de merecer el más mínimo disgusto, se le debe el amor más entrañable. Detesto desde ahora todo lo que pueda disgustarnos. Vos sólo, y lo que Vos -41- amáis, serán en adelante todo el ob¡eto de mi amor. Asistidme, fortaleced me ,otorgadme la gracia de invoca ros siempre, dulcísimo Jesús mío, repitiendo incesantemente: "Dadme vuestro Corazón, dadme vuestro amabilísimo Corazón" y Vos, Madre del Amor, inflamable -en el Corazón de vuestro Hi¡o acá en la tierra, para que pueda adorarle en vuestra compañía por toda la eternidad en la Gloria. Amén. Lo restante como el primer día. -42- QUINTO OlA Dulcísimo Jesús mío, etc. ORACION Compadeceos de mi, piadoso Corazón de Jesús, y olvidad mi ingratitud. Vuestra inagotable piedad me ha iluminado, me ha ofrecido el perdón, me ha hecho detestar mis iniquidades y deseQr vuestro amor. Por esa vuestra tierna piedad confío en que estoy en vuestra divina gracia. Proseguid, Jesús mío dulcísimo, dispensándome vuestra protección. Dadme las luces y auxilios necesarios para 1 -43- no volver a ser ingrato a la tern u ra de vuestro piadoso Corazón. No tend ría derecho a vuestro perdón si de nuevo os volviese las espaldas. Sería temeraria presunción abusar de vuestra misericordia para ofenderos de nuevo, confiado en que volveréis a perdonarme. Qué piedad merecería si, despreciando vuestra amistad, me aleiase de Vos? Os amo y quiero amaros siempre. Esta firme volutad es la misericordia que de Vos espero. Sed mi intercesora. Virgen purísima; no permitáis que me -44- separe de vuestro Hijo acá en la tierra, para que pueda abrazarlo por una ete·r nidad en el cielo. Amén . . SEXTO OlA Dulcísimo Jesús mío, etc. ORACION Amantísimo Jesús mío: Vos no habéis tenido el menor reparo en darme vuestra sangre y vuestra vida, y yo le he tenido en daros mi pobre y mezquino corazón. ¡Oh Redentor mío! Nada puedo por mi mismo, nada tengo que poder da- -45- ros, sino este pobre corazón. Esto os lo doy y os lo consagro, y con él puedo y quiero amaros enseñadme el modo de vivir olvidado de mi :mismo, y de hacer lo que debo para obtener vuestro ¡santo amor, que me hacéis desear por un efecto de vuestra infinita bondad. En vuestras manos está, generosísimo Corazón de Jesus, hacer enteramente · vuestro el mío, hasta ahora tan ingrato, y privado por su culpa de ló dic:ha de amaros con fervor. Inflamadlo con las ,a rdientes llamas del vuestro. Haced que mi voluntad se conforme en un todo con -46- la vuestra, de modo que ésta sea la única regla de todas mis acciones, pensamientos y deseos. Confío, dulce Jesús mío, que no me negaréis la gracia para cumplir este propósito, de conformarme con la más completa abnegación a lo que de mi dispuciéreis. Y Vos Virgen sin mancilla, que no visteis otra voluntad que la de Jesús, hacer que nada desee en este mundo, sino lo que quiera vuestro Hijo, para poder cumplir después con Vos tu voluntad en el cielo por todos los siglos de los siglos. Amén. lo restante como el primer día. -47- SEPTIMO DIA Dulcísimo Jesús mío, etc. (pág. 29) ORACION ¡Oh, Salvador mío. A vuestros pies tenéis un ingrato. No lo he sido pa ra con los hombres, y lo he sido pa ra con Vos, mi Señor y bien hechor. Ninguno de vuestros infinitos beneficios ha bastado pa ra contenerme. Pero me consuela y me da ánimo el saber que trato con un Corazón lleno de bondad y misericordia, que tiene ofrecido olvidarse de las ingratitudes pasadas en el mo- -48- mento en que -e l pecador se a rrepiente de veras. De todas ellas estoy íntimamente- arrepentido, dulcísimo Jesús, mío. Si hasta aquí os he ofendido y despreciado, os amo ya más que a todas ; las cosas y más que a mi mismo. Manifestadme lo que queréis _de mi -que pronto estoy, a emprenderlo, con los auxilios de vuestra gracia. Vos me habéis dejado vuestro propio Cuerpo en el Sacramento del altar. Gracias os doy por tan inmensos beneficios. No permitáis que vuelva a corresponder con - ingratitudes a tanta generosidad. Qui- -49- siera amaros infinitamente, así como ingratamente os he ofendido. Ya que no puedo volver los años perdidos, quiero emplear los que me quedan en amar a vuestro Corazón. Por más que haya tardado tanto en amaros, estoy cierto de la gratitud con que admitiréis mi amor en este mundo, prenda segura del que con vuestra Madre amantísim<:;l deseo consagraros por toda la eternidad en la Gloria. Amén. Lo restante como el primer día (pág. 29). -50-- OCTAVO DIA Dulcísimo Jesús mío, etc, (pág. 29) ORACION ¡Oh Sagrado Corazón de Jesús! ¿Cómo no muero de dolor a vista de vuestra inmensa bondad ultra¡ada? No contento, Salvador, mío, con haberme dado el ser, con haber derramado por mi vuestra Sangre, imaginásteis el modo más ingenioso de sacrificaros diariamente por 'mi en el altar, exponiéndoos a las in¡urias que presentáis y sufrir en la Eucaristía. ¡Y pareceros ingrato sin morir de -51- verguenza! Cese ya mi ingratitud; t~aspasad mi corazón con el dardo de vuestro divino amor. Haced que no sea estéril para mi el fruto de vuestras lágrimas y de vuestra preciosísima Sangre. · Así lo espero, porque si no me abandonásteis cuando no os amaba ni hacía caso de Vos; ¡grande confianza debo tener en Vos ahora que sólo deseo amaros! Haced que desde este insta nte se cu m pla enteramente mi deseo de amaros, o meior diré, vuestro deseo de que os ame, pues Vos sóis quien me lo inspiráis. -52- Virgen Santísima, vuestro piadosÍ'simo Hiio nunca ha desoído vuestras súplicas. Ya que vuestro corazón estuvo siempre inflamado en el amor de Jesús, rogadle por mi y enviadme una centella del amoroso fuego que a rde en Vos, pa ra que, empezando a amar con fervor a vuestro Hijo en la tierra, pueda vivir inflamado en su amor por eternidad de eternidades en el cielo. Amén. lo restante como el primer día: NOVENO DIÁ Dulcísimo Jesús mío. etc. -53- ORACION ¡Oh, Jesús mío! oialá hubiera yo sido fiel para vos, como Vos lo habéis sido para conmigo. Mil veces Redentor mío os he prometido servi ros, y otros tantos os he abandonado, a pesar de la infinita obligación que tengo para con Vos por haberme criado y redimido. Perdonadme, Jesús mío conozco y detesto mis infidel idades. Vos, Bondad infinita, merecéis un amor infinito, especialmente después de haberme amado a pesar de mis reiteradas ofensas. ¡Infeliz de mi si me condenase! -54- Vuestras gracias y las pruebas de vuestro ~special cariño serían el mayor de mis tormentos. No permitáis, Jesús mío, que me pierda, por más que por mis culpas lo ten'g a merecido, a fin de que ni pague con eternas injurias el infinito amor que me habéis tenido. Quitadme la .vida antes que, vuelva a ofenderos. Pidoos esta gracia y la constancia en pedírosla siempre. Sed mi '. intercesora, misericordiosísima Madre de pecadores. Haced que mi corazón sea siempre fiel y constante en el amor de .Jesús en esta vida, -55- para que pueda¡ en uinón con Vos, alabarlo, bendecirlo y glorifica rlo por u na etern idad en la patria celestial amén. Lo restante como el primer día (pág. 29). V.-Jesús, manso y humilde de Corazón. R.-Haced .nuestro corazón semejante al vuestro. FORMULA CONSECRATIONIS Saco C. Jesu a Smo. D. Leone PP. XIII. Composita. Dulcísimo Jesús, -56- Redentor del género humano, míranos humildemente postrados ante tus altares. Tuyos somos, tuyos queremos ser y voluntariamente cada uno de nosotros se ofrece a Ti del modo que pueda estar más firmemente unido contigo. Muchos ¡a más te conocieron y muchos te abandonaron después de haber despreciado tus Mandamientos. Ten misericordia de entrambos, a tu Sagrado Corazón. Reina, pues, Señor no solamente sobre los fie1es que en ninguna ocasión se apartaron de Ti, sino también -57- sobre los hiios pródigos que se abandonaron, y haz que éstos prontamente se acoian a la casa paterna para que no perezcan de hambre y miseria. Reina sobre aquellos a quienes trae engañados el error de sus opiniones o a quienes separó la discordia, y condúcelos al puerto de la verdad y lIámales de nuevo a la unidad de la fé ¡oh benignísimo Jesús!, y atráelos a todos, para que en breve sea uno el redil y uno el Pastor. Reina, finalmente, sobre los que viven en las antiguas supersticiones de la an- -58- tiguedad, y no rehusa llamarlos desde las tinieblas a la luz y Reino de Dios. Concede, Señor, a tu Iglesia segura libertad y firmeza: a todos los pueblos la tranquilidad del orden, y haz que de uno a otro polo de la tierra resuene esta voz unánime: Alabado sea el divino Corazón, por el cual nació nuestra salud, y gloria al mismo y honor por los siglos de los siglos. Amén. Con Licencia Eclesiástica. -59- TRIDUO DEDICADO AL SAGRADO CORAZON DE JESUS Señores Gobernadqres de la Sagrada Mitra.- Ignacio Gonzalo de Arriaza, autor del ad¡unto Triduo dedicado al Sagrado Corazón de Jesús, suplica respetuosamente a S. S. que, previo examen y aprobación del referido Triduo, se le permita mande imprimirlo para su circulación entre los fieles, con lo que recibirá gracia.- Puebla de los Angeles, ¡unio 14 de 1831.- Ignacio Gonzalo de Arriaza.Señores Gobernadores de la Sagrada Mitra.-Presentes. -60- Puebla, 15 de ¡unio de 1881. "":"'Pase al Curó Rector ·de la . Parroquia . de San Marcos de esta ciudad, para su revfsión y censura como teólogo consultor.- Los señores Gobernadores de la Sagrada Mitra así lo decretaron y firmaron.- M. Castillo . Zamacona.- Ante mí, · Dr. Miguel Mariano Luque, Secretario. Señores Gobernadores de la Sagrada Mitra.- En cumplimiento del superior decreto que antecede, procedí a la lectura y revisión del manuscrito intitulado: "Triduo dedicado al -61- ll Sagrado Corazón de Jesús • Nada encuentro que se oponga a la enseñanza dogmática de la Santa Iglesia; en las citas y algunas alusiones que en dicho manuscrito se hacen a varios pasaies de la Escritura Sagrada, hay oportunidad, y los conceptos místicos que forman la parte expositiva de las preces y oraciones, son afectuosos y sencillos: condición indispensable para que esta clase de . devociones se reciten con agrado y provecho ' espiritual por las personas piadosas. Este es mi parecer, que en todo suieto al muy respetable e ilustrado -62- de VV. SS. a quienes con este motivo, reitero las consideraciones de mi sincero respeto y afecto. Curato de San Marcos, ¡unio 18 de 1881.- Rafael Fernández de lora. Para alcanzar la gracia que se pide, procú rese hacer este Triduo, comulgando los tres días o al menos el último. Puesto de rodillas delante de la Sagrada Imagen del 50grado Corazón de Jesús, y después de persignarse, se dirá la siguiente. -63- ORACION PREPARATORIA Para los tres días. Alma mía, suave aliento de la Omnipotencia, a quien adornan las riquezas de la memoria, la grandesa del entendimiento y la hermosura de la voluntad, despierta y oye el eco dulcísimo del ¡v erdadero amor que interrumpe tu pesado sueño Alma mía, ¿estás triste? ¿tienes pesadumbres? ¿sientes dolores? Levanta los ojos y mira a la misma alegría de los ángeles que llama a tu puerta para consolarte: que te busca para darte contentos y viene cuando -64- estás más sola y sumergida en la afl icción. Yo soy el Corazón de Jesús ; te dice, soy la misma bondad, la sabiduría, la gracia, la riqueza la salud, cuanto tú deseas; ámame, y sin que me pidas te daré cuanto quieras; ámame, y te daré una porción del reino que poseo. ¿Permanecerás como las peñas, sin movimiento, sin voluntad después de oír tan doloroso convite? ¿Te resistirás al llamamiento de un buen Padre? ¿Tienes verguenza? Deséchala y corre a sus brazos ¿Estás -65- cargado de pecados? Llégate a sus pies, arróiate a ellos? pídele perdón y te dará gracia; en la mesa de los ángeles, te nutrirá con los · manjares de fortaleza. Sí, alma mía, Jesús ansía por ti; Jesús te ama; Jesús te busca; quéjate y serás rica, p;de y recibirás. ORACION A LA SMA. VIRGEN Para los tres días Madre amorosísima del Sagrado Corazón de Jesús: Yo soy indigno de levantar la voz para hacer una petición a tan alta Majestad, y sin embargo, -66- tengo necesidad y nad~e me la puede socorrer más que Aquél que nadó de tus purísimas -entrañas. ¡Ay, dulce consuelo mío! Tengo el corazón marchito por las pesadumbres, y mi frente se indina al peso del dolor. Busco de Jesús los favores, pero soy pecador y no puedo usa r de la franqueza de los bienaventurados; pero tú, que eres refugio de pecadores, oye mis plegarias y haz que se · acerquen al Sagrado Corazón de Jesús, para que, movido de compasión, perdone mis faltas y oiga que le pido por su amarga soledad, que remedie las -67- congoias que en este Tríduo le expond re, en memoria de las tres horas que m u rio · en la Cruz. Oyeme, Señora, y pide por quien, lleno de confianza te dice: Ave María. Se reza una Ave María y Gloria y en seguida el ACTO DE CONTRICION Para los tres días Corazón adorable de Jesús: el último de vuestros hijos y el primero de los pecadores se encuentra delante de Vos, con grande necesidad y temeroso de pedir el remedio de ella. Mu- -68- cho tiempo he sufrido mis marti rios, y en silencio he pasado las horas .bebiendo por ellos el llanto sin atreverme a pedir consuelo; pero ya estoy cansado, ya no puedo resistir más lo amargo de mi dolor; y aunque veo la iusticia con que padezco, al fin estoy de rodillas diciéndoos como el Profeta: Dela nte de ti he. pecado y todo lo malo que he hecho delante de ti. Atended, Dios mío, que entre gemidos se escapa de mi alma la voz del arrepentimiento, y iuzgadme .según es vues- -69- tra infinita misericordia. Es verdad, Señor, que más de una vez he quebrantado mis propósitos; que entregado a los desvaríos y excesos del mundo, me encerré en un círculo de vicios, siendo tipo de orgullo, foco de vanidad, modelo de perversión; es cierto que olvidé tus · preceptos y, menospreciando a la virtud, desoí los repetidos gritos de mi conciencia; es la verdad, Dios mío, que provoqué vuestros enojos, y que entre mis maldades, pude haber rodado alguna vez a los infiernos; y ¡VOS, oh pacientísimo Jesús, diciéndome a -70- cada paso y donde quiera: Aprended de mí que soy manso y humilde de corazón! Todo es cierto¡ Señor¡ pero también es verdad que sois grande, generoso, y compasivo. hechos que acreditan mi existencia a pesar de mi maldad; porque ¿qué os obliga a guardar una miserable vida? ¿qué os detiene para no pulverizar una porción de tierra? ¿qué esperáis de la misma nada; o de una criatura que produjo el pecado? ¡Dios mío! yo veo que me amáis y que por toda recompensa, con mis acciones os he dicho como luzbel: 11¿Quién como yo?" -71- ¡Infeliz de mí! Hormiga despreciable, vil y asqueroso gusano, ¿qué pretendí? ¡Ah, Señor, castigad, herid, quemad y cortad. destruidme y aniquilad a quien tanto os ha ofendido, aunque yo quisiera la vida para publicar vuestros prodigios, y hacerme esclavo de gratitud. Por eso estoy aquí como el ciego de Jericó, diciéndoos como él: Jesús, h iio de David, tened compasión de mí. Yo soy Longinos, el mismo que os hirió; pero ya tengo luz en mis oios y he visto que pequé como la Magdalena, Jesús mío, y heme aquí regando mi llanto, deshacién- -72- dome en suspiros... Acordáos que sois la resurrección y la vida, y resucitadme como a lázaro¡ perdonadme como a la muier adúltera¡ virtud en mi corazón como vivísteis en el corazón de Santa Gertrudis¡ pu rificad me pa ra vivi r con Vos y por Vos. y si este ruego soy indigno de alcanzar, desde ahora me humillo, alabando vuestra santísima voluntad, e inclino la cabeza suplicándoos al menos aceptéis que desde hoy lleve el honroso título de indigno esclavo del Corazón de Jesús, tomándoos por modelo, entrégándome todo a mi dulce -73- dueño, de quien espero el remedio de tantas necesidades que me afligen, o siquiera una muerte feliz y dichosa, para alabaros eternamente en el cielo. Amén. A continuación se reza lo si,guiente: PRIMER DIA Vuelto a tus pies, ¡ohSagrado Corazón de Jesús! vengo a mostrarte el mío seco y marchito por la amarga pena; ¡quiero quejarme, ¡Jesús mío! y pedirte el remedio en mi aflicción como que eres mi amo- -74- roso Padre, mi refugio, mi consuelo y mi esperanza. Mi tribulación es justa, y no conforme a lo que merezco por mis pecados. pero ya no puedo resistir, aunque mi espíritu está conforme con tu santísima voluntad. Templa, Señor, tus enojos, y mira que en medio de mi pequeñez reconozco tu grandeza; mira, centro de bondad que te pido con fe y que puedes darme el consuelo que te pido: ¿;Me oyes, Jesús mío? ¿Me levantaré sin tus favores.? No, no, mi Padre, socorre mi necesidad por aquellas que experimentó la Santísima Vir- -75- gen al pie de la Cruz, por su dulcísimo Nombre, por ti mismo,' y finalmente por caridad. Amén. Se hace la petición, en seguida se reza lo siguiente: PARA lOS TRES OlAS Jesús mío: muévaos a compasión mi dolorida queja. Padre nuestro y Gloria Esperanza y refugio mío: oíd mis lamentos y dadme lo que os pido. Padre nuestro y Gloria. -76- Señor: vuestro siervo llora y esta a vuestros pies. Padre nuestro y Gloria. Unico amparo a quien me acoio, cerréis las puertas de vuestro Corazón en los momentos que llama un pecador. Padre nuestro y Gloria. Socorro, Señor, pide un infeliz, no se lo neguéis Padre nuestro y Gloria. Se concluye el día con las siguientes: -77- SUPLICAS AL SAGRADO CORAZON DE JESUS V. Oh Corazón Sagrado Manantial de protección . .R. En ti, Señor, he confiado, No desprecies mi oración. V. Remedia, Dueño adorado, Mi amarga tribulación. R. En ti, Señor; etc. V. Mírame, Señor, postrado En amarga tribulación. R. En ti, Señor, etc. V. Estoy de penas cercado, -78- Tengo duelo y confusión. R. En ti, Señor, etc. V. Mi espíritu aprisionado Ya se extingue de aflicción, R. En ti, Señor, etc. V. A ti, Jesús, he buscado Como paz del corazón, R. En ti, Señor, etc. V. Tus manos me han prodigado Tesoros de salvaCión. R. En ti, Señor, etc. . V. Muchas veces te he llorado Por menos tribulación. R. En ti, Señor, etc. V. A tus oíes arrodillado, Espero hallar compasión, I -79- R. En ti, Señor, etc. No me desprecies, Señor, Por tu nombre o por piedad, Atiéndeme por favor y mira que un pecador Te pide esta caridad. OlA SEGUNDO ¡Oh Corazón Sagrado de mi buen ' Jesús! ¡Con cuánta conHa nza vengo a vuestros pies, y con qué entusiasmo os grito: ¡Señor! ¡Señor! Llamo a vuestras puertas como el infeliz peregrino. Soy oveia de vuestro rebaño. Señor, Señor: ¡oídme por piedad! Abridme vues- -so- tro Corazón que traigo lo insignia de lo Cruz, y el sello de vuestro sa~gre. Señor, Señor, soy el hambriento que os pide el pon del consuelo y una gota de agua del piélago' de vuestras misericordias: ¿me oís? Llamo uno vez y otra más, y ¿no abrís aquel raudal de tesoros poro tomar la porción que tomara una hormiga, un gusanillo o el más diminuto reptil? ¡No! no me dejéis perecer en mi necesidad, que en humilde recompensa le daré... ¿Qué os doré si nodo tengo? ¿Qué queréis que os dé el que viene a pediros? Nado -81- tengo, nada soy, nada valgo, pero si encontráis en nií alguna cosa que os agrade, tomadla, yo os la ofrezco, así como esta miserable vida que respiro y los mayores sufrimientos, penas, congoias, contentos y martirios que me tengáis preparados en este valle de lágrimas. Sí, Dios mío, a Vos pertenezco, y a Vos toca prodigar el. consuelo que os pido. Quitadme este dolor que amarga mi existencia, destruid con sólo vuestra voluntad esta pena que me aflige y dadme la tranquilidad que busco. Si mi petición; ¡amor mío! no es conforme con vues,tro altos desig- -82- njos, haced de mí lo ,que os plazca; atormentadme más y más hasta extinguir mis culpas y merecer el contento de haberme purificado en esta vida para mereceros en la otra. Amén. Se hace la petición. En seguida se rezan los Padre nuestros, conel uyendo con las súplicas al Sagrado Corazón de Jesús. DIA TERCERO iAmorosísimo Corazón de Jesús! Aquí estoy de nuevo con mis quejas y lamentos~ para -83- instaros otra vez, Señor, y pediros socorro en mi necesidad. Yo bien sé que más os ag radan las súplicas del pecador, que las más ricas ofrendas; yo sé que quedáis más complacido con los suspi ros de la ora·· ción, que con los cantos de las aves, los preludios de la orquesta, los olores de la flor; yo por fin, comprendo la compasión a que os mueve el alma más afligida y la criatura agonizante en la aflicción; por eso vengo, ¡oh Corazón de Jesús~ a derramar mi llanto a vuestros pies y a pediros a gritos el dulce consuelo que busco. ¡Cora- -84- zón de Jesús! oídme por aqvelIa amargura que experimentásteis en el Huerto de Getsemaní, por las ~ngustias que os afligieron tanto en la noche de la última Cena; por aquel trance fatal que se verificó en la calle de la Amargura, encontrando a vuestra Santísima Madre. Basta de aflicción, Dios mío, bastGJ de duelo, y tened misericordia de esta humilde criatura, por vuestro dulce corazón, por el ,corazón de las , . vlrgenes que viven consagradas a Vos, por el corazón de los niños que se mueren en la gracia; por el virgen cora- -85- zón de Santa Gertrudis que tanto ' amásteis; y finalmente, por el dulcísimo corazón de María Santísima. Sí, ¡Padre amorosísimo! tened compasión de mis pobres ruegos; moveos al oír mis súplicas; ved mis llantos de dolor; haced que mi voz ya no sea de desconsuelo ni de quebranto, sino que continuameni'e se deshaga mi lengua en fervorosas exclamaciones de gratitud, y que viva siempre amándoos y reconociéndoos y suspi rondo por la fel iz morada del Corazón de Jesús. Amén. -86- La petición y después los cinco Padre nuestros, conclu.yendo como el primer día. ORACION A la' Santísima Virgen para finalizar el · Triduo o Que bueno será se rece los tres días. ¡Amorosísima y tierna Madre mía, en quien he puesto mi confianza! Yo no sé con que voces pedirte me alcances del Sag rado 'Corazón de Jesús las gracias que solicito. Apuro mi mente, y en ella no encuentro frases que interpreten mi dolor. -87- He llorado, Señora, . pero mis lágrimas carecen de elocuencia: he suspirado mucho, · mucho; pero mi aliento, corrompido con la maldad, tal vez no llega a tus pies. María, ¡mi dulce mad re! Tú que conoces el lenguaje de tus hiios, traduce el mío balbuciente y torpe, y aclara mi humilde petición, sé mi intérprete para con Jesús, dile que no sé hablar, que mi lengua de mortal sólo vierte frases en el idioma de los hombres. Haz; Señora, que fije sus divinos ojos en esta alma pobre, que se inspire en el dolor; ruégale, pídele que corone mis -88- deseos, que favorezca mi petición y que acepte este Tríduo en memoria de sus agonías, aunque nada me conceda. ¿Me desampararás, M a d r e mía? ¿quedarán sin ser escuchadas las súplicas que te hago? En fin, Señora, si encuentro remedió en mis congojas, pediste , y me convino; y SI no, sera para mejor y que se haga la santísima voluntad del Sagrado Corazón de Jesús. pero que siquiera me dé paciencia para sufrir por su amor las amarguras que por mis culpas merezco Amén. . . -89- ORACION AL SAGRADO CORAZON DE JESUS ¡Corazón de m i Jesús! donde residen la calma y el reposo; Corazón dulcísimo, donde todo es mansedumbre y bondad; puerto seguro ,d el triste náufrago, asilo seguro donde se encuentra verdadera paz, jardín delicioso de delicado aroma, fuente pura y cristalina de la gracia, horno amoroso de encendidas llamas; aquí está esta pobre ove¡illa, esta miserable pecadora que no tiene otro a quien acudir sino a Ti" -90- aquí la tienes · postrada a tus divinas plantas, llamando a la puerta de tu Corazón para que le abras y derrames sobre su cabeza esos raudales de gracia y de amor. Abre, Señor, ese Sagrario santo, porque la vida sin Ti no es vida. ¡Oh vida de la vida mía! ábrelo, Señor, y que al cerrar la puerta quede yo allí en las moradas interiores, a gozar de las delicias celestiales de tu amor, donde todo es consuelo y alegría, donde residen el amor y la ternura. Allí en la soledad de tu Santuario sagrado podré decirte a so'as~ ¡yo te amo! -91- JACULATORIA ¡Dios mío! uno mi voluntad a la tuya y quiere vivir y morir unida a Ti. Consagración al Sgdo. Corazón de Jesús Aquí, estoy, Señor, dispuesta a recibir todo, absolutamente todo cuanto quieras enviarme; yo nada valgo; no obstante eso, quiero ofrecerme como víctima por tu amor. ¡Ojalá que con mis sufrimientos pudiera reparar las injurias que recibes diariamente en el Santísimo Sacramento del -92- altar y aliviar la llaga de tu adorable Corazón! Soy tuya, porque Tú eres mi Creador y mi Padre, y porque a Ti me he consagrado. Haz/pues, de m í lo que meior te plazca, que todo recibiré gustosa, viniendo de tu santa mano. Pater, Ave y Gloria Ochenta días de indulgencias. Se suplica una oración por el autor. -93- DESPEDIDA DEL SAGRADO CORAZON DE JESUS AL SALI R DE SU IGLESIA Salve, Corazón abierto, Santa y dulce habitación. Adiós, Jesús de mi vida, Dadme vuestra bendición. Salve, Corazón cargado Con la Cruz de tu pasión. Adiós, Jesús de mi vida, Dadme vuestra bendición. Salve, Corazón punzado Con nuestro olvido y traición Adiós, Jesús de mi vida, Dadme vuestra bendición, -94- Adiós, amante querido, Dueño de mi coraz6n: Adi6s, Jesús d~ mi vida, Dadme vuestra bendici6n. PROMESAS Hechas por nuestro Señor Jesucristo a la Beata Margarita María Alacoque, religiosa de la visitaci6n, en beneficio de Jos personas devotas del divi no coraz6n. 1. les daré todas las gracias necesa rias pa ra su estado en esta vida. 2. Estableceré la paz en sus familias -95- 3. Les consola ré en todas sus pena Iidades. 4. Seré su salvaguardia durante la vida y especialmente en la hora de la muerte 5. Derramaré abundantes bendiciones sobre todas sus empresas. 6. Los pecadores encontrarán en mi Corazón un insondable mar de misericordia. 7. Las almas tibias se harán fervorosas. 8. Las almas fervorosas pronto adquirirán grande perfec., clon. -96- 9. Yo mismo bendeciré la casa en que la imagen de mi Sag rado Corazón sea expuesta . y venerada. 10. Daré a los Sacerdotes el talento para ablandar los más empedernidos corazones. 11. las personas que den publicidad a esta devoción tendrán sus nombres inscritos en mi Corazón, y ¡amás serán borrados de El. Te prometo en el exceso de misericordia de mi Corazón, que mi amor todopoderoso concederá a todos aquellos que comulguen nueve primeros vier- -97- nes de mes, sin interrupción, la gracia de la penitencia final; que no morirán en mi desgracia, ni sin redbir los Sacramentos, siéndoles m i Corazón seguro asilo en aquella hora postrera. Corazón agonizante de Jesús, ten misericordia de los moribundos. Sagrado · Corazón de Jesús, que llegue tu ReirÍo. (300 días de indulgencia. Pío X, 29 ¡unio de 1906). -98- CORONA DE LA MISERICORDIA (Para rezarla particularmente en su Rosario) Un Padrenuestro, Avemaría y Credo. En las cuentas grandes: "Padre Eterno. Yo te ofrezco, el Cuerpo, la Sangre, el Alma y la Divinidad de Tu Amadísimo Hiio y Señor Nuestro Jesucristo en expiación por nuestros pecados y los pecados del mundo entero". En las cuentas pequeñas: "Por la Pasión Dolorosa de -99- Jesús, 'ten Misericordia de nosotros y del mundo entero" (Esto se repite diez veces en cada decena del Rosario, meditando en los diferentes Misterios). Para concluir se reza tres veces: "Santo Dios, Santo Fuerte, Santo Inmortal ten Misericordia de nosotros, y del mundo entero". Rece la siguiente iaculatoria con frecuencia: "Oh Sangre y Agua que brotasteis del Sagrado Corazón -100- de Jesús como una Fuente de Misericordia para nosotros, yo confío en Vos". Invocaciones y Promesas Jesús conoce las necesidades y tribulaciones de cada alma. El sufre si no puede derramar los torrentes de Su Misericordia en las almas. Sufre el Señor si las almas no se acercan a El y no quieren recibir los torrentes de Su Misericordia. Esa pena del Sagrado Corazón se manifiesta en las palabras siguientes que le di¡o a Sor María Faustina¡ "¡Hiia mía!/', las llamas de Mi Misericordia me con- -101- sumen ... Yo quiero derramarlas en las almas Ah, qué pena me dan, si no quieren aceptarlas ... Hiia mía, diles que Yo solo soy el Amor y la Misericordia ... Haz todo lo que está en tu poder para propagar la veneración a Mi Misericordia ... Habla al mundo de mi. Misericordia para que toda la humanidad sepa que es infinita ... Esta es mi amonestación para los últimos días, luego vendrá el día de la Justicia. Mientras haya tiempo, tengan su refugio en la Fuente de Mi Misericordia, y ningún pecador tenga miedo de acercarse a Mi! El Señor ordena: -102- "Yo deseo que los Sacerdotes prediqu~n Mi Gran Misericordia a los pecadores". "Yo prometo al alma que venerare esta Imagen de la Misericordia que no perecerá. Yo le prometo ya aquí en la tierra la victoria sobre sus enemigos' especialmente en la hora de la muerte. Yo, el Señor, la protegeré . COM¡O Mi propia Gloria". Estos rayos de Mi Corazón, que significan Sangre y Agua, protegenalas almas de la Ira de Mi Padre ... Feliz el que viva baio su sombra, pues la mano de la iusticia de Dios no le -103- a-I canzará. A las almas que propaguen Mi Misericordia yo las protegeré por toda su vida como una Madre a su niño, y en la hora de la muerte, para ellos no seré ¡uez, sino Redentor. En esa última hora el alma no tiene otra protección que Mi Misericordia. Feliz aquella alma, que durante su vida estuvo hundida en Mi Misericordia, pues la iusticia no la alcanzará. la humanidad no encontrará Paz hasta que venga con confianza a Mi Misericordia. Dí a la humanidad sufriente, que venga a Mi Misericordioso Corazón y les daré la Paz". -104- IMPRIMATUR Mons. Francisco Orozco lomelín Vicario Gral. del Arzobispo de México 5 de Agosto de 1982 -105- NOVENA DE CONFIANZA Al SAGRADO CORAZON DE JESUS Haz prometido, Jesús mío, dueño de mi alma, de que tu corazón Divino será un océano de Misericordia para los necesitados que confían en Tí. yo creo firmemente que Tú puedes concederme lo que te pida, aunque para hacerlo fuera necesario un milagro ... ¿A dónde llamaré, sino a las puertas de tu Corazón?.. Dichosos todos los que en El confían": ¡Oh Jesús!, a tu corazón con- -106- fío (tal alma, tal pena, tal negocio). Míralo y después haz lo que tu Corazón te diga. Deja obrar a tu Corazón. O~ ¡Jesús!, ya cuento conti- go, yo me fío de Tí, yo me entrego y consagro a Tí, yo estoy seguro de Tí. 300 días de indu1gencias cada día de ta novena; plenaria al fin para todos los que confesados y comulgados visiten una iglesia y rueguen por las intenciones del Pontífice. s. (Sgda. Penitencia, mayo de 1923) -107- Padre nuestro, Ave María y Gloria, y después con todo fervor, repítase 9 veces¡ "Sagrado Corazón de Jesús en vos confío". ORACION AL CORAZON EUCARISTICO DE J ESUS SACRAMENTADO Te ofrezco todas ni is acciones, alegrías y sufrimientos de este día y te suplico repares y consumas con el ardiente amor de tu corazón eucarístico, todas las faltas, infinidades y miserias que hay en mi pobre corazón. Sé para mí ¡oh Jesús Eucarístico! Mi Dios, due- -108- ño, mi guía, mi fortaleza, mi consuelo, mi único amor, y mi todo, concédeme a cualquier hora del día o de la noche, sea cual fuere el deber que me ocupe, encuentre mi corazón escondido en el tabernáculo, hasta que se consuma unido a tí en el amor y celo de la mayor gloria de Dios. Amén. ORACION AL SAGRADO CORAZON DE JESUS Postrado a vuestros pies humildemente vengo a pediros, dulce Jesús , miO, -109- poderos repetir constantemente: Sagrado Corazón en Vos confío. Si la confianza es prueba de ternura esta prueba de a mor da ros , anslo; aún cuando esté sumida en amargura Corazón de Jesús, en Vos confío. En las horas ~ más tristes de mi vida cuando todos me deien, ¡Oh Dios Mío! y el alma esté por penas combatida, Corazón de Jesús en Vos confío. -110- Aunque sienta venir la desconfianza y que Vos miráreis con desvío, no se confunda mi esperanza; Corazón de Jesús en Vos confío. Si contraie con Vos divina alianza Os di todo mi amor y albedrío, ¿Cómo ha de ser frustrada mi esperanza? Corazón de Jesús en Vos confío. y siento una confianza de tal suerte que sin temor, a nada Jesús Mío espero repetir hasta la muerte: Corazón de Jesús en Vos confío. ¡Oh dulce Jesús! que habéis dicho -111- si quieres agradarme confía en mí; si quieres agradarme más, confía más; si quieres agradarme inmensamente, confía inmensamente; las almas confiadas son las robadoras de mi gracia. Ayudad mi confianza, yo confío en Vos. Vos Señor, espero no sea yo confundida eternamente. Amén. ORACION A JESUCRISTO REY UNIVERSAL ¡Oh Cristo Jesús!, yo os reconozco como Rey universal, todo cua nto existe ha sido creado por Vos. Ejerced en mi todos vuestros derechos. -112- Renuevo mis promesas del bautismo: renuncio a Satanás, a sus pompas y a sus obras, y prometo . vivi r como buen cristiano; sobre todo, me comprometo · hacer triunfar, según m is fuerzas, los derechos de Dios yde vuestra Iglesia. Divino Corazón de Jesús, os ofrezco ~is pobres acciones para obtener que todos los corazones reconozcan vuestra realeza Sagrada a fin de que el Reino de vuestra Paz se restablezca en el universo entero. Así sea. -113- VEN SEI\IOR.•. SALMO a la Sagrada EUCARISTIA VEN, Señor mío, y Dios mío, yo · te alabo, te bendigo, te adoro, te doy gracias y te pido por tu santísimo cuerpo, sangre, alma, divinidad y humildad sacratísimas, realmente presentes en el Augusto Sacramento del Altar, que esta palabra de invitación hacia Tí, esté frecuentemente en m is la bios y siem pre en m i corazón. VEN a mí por medio de tus visitas de misericordia y -114- aún de iusticia. Tú eres el mismo en ambas; las apariencias te ocultarán, sí; pero la fe está siempre pronta para mover mi corazón y hacer que exclame: ¡Es el Señor! VEN en los secretos m isteriosos de tu gracia eficaz, con tus amonestaciones, cariñosas reprensiones, con tus recom pensas, con tus rega los; también con tus cruces ... y con todas las mil formas de tu amor de que Tú acostumbras usár. VEN a mí en las difíciles lecciones de desprendimiento y abnegación, que . tarde , o tem- -115- prono el corazón tiene que aprender... en mis humillaciones, en las desilusiones de todo lo de la vida, en la soledad y desamparo que los años traen consigo. Toma po ro Tí el sitio vacante que otros dejen, hasta que al fin Tú solo seas el dueño de las potencias de mi alma, de los sentidos de mi cuerpo, de mi imaginación, de mis empresas y trabaios y de todas mis aspiraciones. VEN en las tem poradas de obscuridad y de desgracia, cuando m·i espíritu abatido por sus penas, turbado y como -116- aturdido en medio de las tempestades de la vida, parece como que camina solo y sin apeyo ... y como empuiado con terrible ímpetu por mil ráfagas de un infortunio horrendo! VEN a mí para levantarme en mis caídas, para darme contricción de mis pecados, para que yo repare el mal que he hecho, con una vida eiemplar y para que aprenda · a tratar con dulcísima misericordia a mis hermanos los pecadores que, como yo, quieren llorar sus culpas. VEN, pacientísimo Jesús, y -117- tanto como has esperado y esperas tanto como has sufrido y sufres ... ¡sírvate tan sólo para que todo ese . torrente de paciencia se convierta en un mar sin fondo y sin orillas de amor, tuyo en mi torozón, que apague para siempre y exti nga en él todo lo que no sea por Tí, para Tí y contigo. VEN, cuando mi alma te desee con ansia en sus desconsuelos y te quiera encontrar como un niño pequeñito anhela por el regazo de su dulce madre; enséñame entonces la caridad con el prójimo -118- y ejercitar obras de misericordia. VEN a mí ahora, a lo menos espiritualmente con tu sacramental presencia para reclamar tus derechos, para que te conozcan más, para contestar a mis súplicas, para calmar mis temores, para purificarme y atraerme hacia TL.! VEN, sí Pan vivo bajado del cielo. El Pan nuestro de cada día, a sostenerme en mi jornada, como el maná fortaleció a los que atravesaron el desierto, endulzando la monotonía de su marcha diaria. -119- VEN sobre todo, a asistí rme en mi última lucha en el combate decisivo · con la muerte. cuando todas las cosas se aparten de 'mí. Tú quédate conmigo: cuando ninguno me pueda ayudar, abrácenme tus brazos con abrazo , eterno; escóndeme ,en tu Corazón dulcísimo! Ven, ¡OH SEt'lOR JESUS!, Y tu respuesta sea: HE AQUI QUE VENGO PRONTO. Mi primera visita en la eternidad, sea la realización de las palabras con que la S a n t a Iglesia me despedirá de la tierra: Mitis at que .festivus -120- Christi Jesu tibi aspectus appa, reat". Aparezca ante tí el suave y festivo rostro de Cristo Jesús", y concédeme que yo te vea y oiga de tus divinos labios, el eco de mis plegarias VEN delante del Sagrario. ¡VEN!... BENDITO DE MI PADRE ¡VEN! Asi sea. -121- PLEGARIA AL SANTISIMO SACRAMENTO Tabernáculo augusto, excelso trono. Que . sostiene al Todopoderoso En ese sol luciente y misterioso Que adoro con ferviente ado., raclon. Maniar del alma, prenda inestimable. Del indecible amor de un Dios, tan bueno; Pan consagrado, que de gozo, lleno. , Recibe agradecido el corazon., -122- Hostia pura, que allá en la última cena. En expiación perpetua te ofreciste, Delicioso Maná, que descendiste Del Cielo para el hombre alimentar. Arca preciosa que cerrada guardas. El tesoro más rico y más preciado Como es Jesús, Jesús Sacramentado, A quien rendido adoro en el altar. Sí, mi Dios, mi Señor, mi único dueño. -123- En pos yo vengo de tu amor prolijo, Deja que llegue a tu presencia tu hijo; No lo deseches, oye su oración, Indigno soy, es cierto, de acercarme Ante tu trono, porque te he ofendido. Pero vengo contrito, arrepentido. A implorar de mis culpas el perdón. Son horrendos y muchos mis delitos -124- Por los cuales me hiciera tu . enemigo, y por eso al venir traigo conmigo De la Virgen la Santa protección. De esa Señora¡ tan amante y tierna, Tengo mercedes y licencia tengo Para verte, Señor, por eso vengo A ofrecerte mi pobre corazón. ¿Te negarás¡ Señor, a recibirme Cuando traigo a María por mi abogada, Cuando sé que la estimas, que es tu Amada Porque es la fuente del divino amor? -125- Yo no creo que me arroies de tu lado Siendo como es, tan grande tu clemencia, Al contrario, Señor, tengo la creencia, De aplacar con mi llanto tu rigor Espero con ruegos mis lágrimas y Mitigar tus eno¡os. Padre mío; y lo espero yo así, porque confío En tu palabra que ¡arnés faltó. Tú diiiste, al ba¡ar, del alto cielo -126- Que venías a buscar con tus amores No a los i ustos, y sí a los pecadores Misera bies y pobres como yo. Tu sangre derrama en el calvario Fuá en abundancia por tu amor vertida; Mas yo comprendo que sería invertida Para lograr mi eterna ;salvación. "Venid a mí, diiiste bondadoso, "los que sufrís trabaios y aflic· . clones -127- "Conmigo no tendréis tribulaclones; . "Y a todos os daré mi corazón. " ¿Y habrá quien sufra como yo he sufrido Las consecuencias del fatal pecado? ¿Quién en el mundo más necesitado? ¿Quién más infame como yo, Señor? Por eso vengo a confesarte ahora Mis incontables faltas y malicia; '-128- No me iuzgues cual iuez recto en iusticia, Sino cual padre dame tu perdón. Perdón, Señor, perdón, yo te lo pido Por tantos como · han sido mis errores, Perdón, Señor, y vuelve tus favores Al que llora contrito su maldad. No me alzaré de aquí si tú, mi padre, No me concedes lo que anhelo tanto; -129- Ten compasiÓn de mí, m'ira mi llanto, Vuelve tu rostro, ten de mí piedad. Siquiera porque nunca te he negado, Olvida mis pecados, mis delritos, oye, Señor, · de un pecador los gritos, la voz de un dolorido corazón. Confieso que he faltado a tus preceptos, Que pequé contra ti, mi dueño amado, -130- Por eso lloro ante tu altar postra. do, y he de llorar hasta alcanzar perdón, Soy cristiano y anhelo qve me salves. y que la honra adquirida .en el Bautismo No se pierda en el anch9 y hondo abismo En donde esconde tantas la impiedad. Soy pecador y mucho te he ofendido, Puedo decir que soy un delincuente, -131- Pero tu sangre que cayó en mi frente Es superior a toda mi maldad. Ultimamente cuando allá en la cumbre De Gólgota tremendo agon izabas, Con palabras de amor me encomendabas De tu Madre a la santa protección. Tus moribundos labios pronunciaron la palabra: hiio 11 Mujer he ahí a tu -132- Pues héme aquí que en tus encargos fijo Con ella vengo a darte el corazón, Ya vez, Señor, que no he ven;i do solo, Viene conmigo la que tú amas tanto. Por sus dolores y su amargo llanto Tenme, piedad: perdóname, Senor. Piedad, piedad; misericordia pido -133- Con lágrimas que corren de mis . °IOS Piedad, mi Dios, y acaben tus enolos . Con el perdón de un pecador. pobre Se ruega por amor de Dios Nuestro Señor, la reimpresión y reparto de estos versos. i CORAZON SANTO! Pueblo Corazón Santo, Tú reinarás; Tú nuestro en canto siempre serás. Estrofa Jesús del alma, Dueño amoroso, Padre Padre piadoso, Dios de Bondad: Vengo tus plantas, si Tú me dejas, humildes quejas a presentar humildes quejas a presentar. -134- ESTROFAS 2.-JesÚs amable, Jesús piadoso, Dueño amoroso, Dios de bondad; yo herí pecho Con mi pecado, lloro humillado tanta maldad . 3.-¡Venid, Cristianos! Acá en' el suelo; como en el cielo se ve adorar· ta~bién nosotros adoraremos ' y ensalzaremos al Dios de paz. 4.-JesÚs del alma, Dueño amoroso, Padre piadoso, Dios de bondad; Vengo a tus plantas, s¡ Tú me dejas, humildes quejas a presentar. 5.-Divino pecho donde se inflama . la dulce llama de caridad, tu sangre pura borre del mío, perveso y frío tanta maldad. 6.-En él arroja divino fuego, y todo luego se inflamará; que si lo abrasa tu amor ardiente, eternamente tuyo será. 7.-Corazón dulce, manso y clemente, divina fuente de santidad; Tú eres la prenda de mi victoria, Tú eres mi gloria, mi eterna paz. S.-Tú solo pvedes, Omnipotente, mi sed ardiente refrigerar. Aquí, Bien mío, aquí el postrero suspiro quiero por Ti exhalar. Con Licencia Eclesiástica INDICE Pág. Quince Minutos en Compañía de Jesús 3 Sacramentado . . .. . ......... . .. " . . . Estación al Santísimo Sacramento (1) • • • 15 Acto de Consagración y Desagravio al Sagrado Corazón Jesús .............. 25 Fórmula de Consagración .. . .. . . . . .. . 56 Triduo dedicado al Sagrado Corazón de Jesús ...... . ... .. ....... . ...... . . 60 Oración Preparatoria .. .. .. . .... . . ... 64 Súplicas al Sagrado Corazón de Jesús . " 78 Oración al Sagrado Corazón de Jesús . . . 90 Despedida del Sagrado Corazón de Jesús al salir de la Iglesia ....... ... .. .. .. 94 Corona de la Misericordia .. .. ... ... . 99 Novena de Confianza al Sgdo. Corazón de Jesús . . . . ... . . . . . . ... . .. .. . ... 106 VEN SE~OR .. . SALMO a la sagrada EUCARISTlA .. .. ... . 114 Plegaria al Santísimo Sacramento . .. ... .. . . Corazón Santo ... .. . . .. . ... . ... . . . . . . . . Méx ico, D. F. Enero de 1951 -136- 122 134 LETANIA Y ROSARIO AL SGDO. CORAZON DE JESUS LET ANIA DEL SAGRADO CORAZON Señor, tened piedad de nosotros. JESUCRISTO, TENED PIEDAD DE NOSOTROS. Señor" tened piedad de nosotros. Jesucristo Oidnos. JESUCRISTO, ESCUCHANOS. Dios Padre Celestial, TENED PIEDAD DE NOSOTROS. Dios Hijo, Redentor del mundo, TENED PIEDAD DE NOSOTROS. Dios Espíritu Santo, (tened piedad de nosotros). Santísima Trinidad, que sois un solo Dios. Corazón de Jesús, Hijo del Padre Eterno. Corazón de Jesús formado por el Espíritu Santo en las entrañas de la Virgen María. Corazón de Jesús, unido substancialmente al Verbo de Dios. Corazón de Jesús, de Majestad infinita. Corazón de Jesús, santuario de la divinidad, TENED PIEDAD DE NOSOTROS. Corazón de Jesús, tabernáculo del Altísimo. Corazón de Jesús, Casa de Dios Y puerta del cielo. -137- Corazón de Jesús, hoguera encendida de caridad. Corazón de Jesús, receptáculo de justicia y amor. Corazón de Jesús, lleno de amor y de bondad. Corazón de Jesús, abismo de todas las virtudes. Cerazón de Jesús, dignísimo de toda alabanza. Corazón de Jesús, Rey y centro de todos los corazones, (tened piedad de nosotros). Corazón de Jesús, en quien residen todos los tesoros de la sabiduría y de la ciencia, (tened piedad de nosotros). Corazón de Jesús, en quien habita toda la plenitud de la divinidad. Corazón de Jesús, objeto de las complacencias del Padre. Corazón de Jesús, de cuya abundancia todos hemos recibido. Corazón de Jesús, deseado de los collados eter~ nos, (tened piedad de nosotros). Corazón de Jesús, paciente y misericordiosísimo, (tened piedad de nosotros). Corazón de Jesús, rico para todos los que os invocan. Corazón de Jesús, fuente de vida y santidad. Corazón de Jesús, propiación por nuestros pecados. Corazón de Jesús, saturado de oprobios. -138- Corazón de Jesús, rasgado de dolor por nuestras culpas. Corazón de Jesús, hecho obediente hasta la muerte, (tened piedad de nosotros). Corazón de Jesús, traspasado por la lanza, (tened piedad de nosotros). Corazón de Jesús, fuente de todo consuelo. Corazón de Jesús" vida y resurrección nuestra. Corazón de Jesús, nuestra paz y nuestra reconciliación. Corazón de Jesús, víctima de los pecados. Corazón de Jesús, salud de los que en vos esperan. Corazón de Jesús, esperanza de los que en Vos mueren, (tened piedad de nosotros). Corazón de Jesús, delicia de todos los Santos, (tened piedad de nosotros). Cordero de Dios, que quitas los pecados del mundo, (Perdonad nos, Señor). Cordero de Dios, que quitáis los pecados del mundo. (Atendednos, Señor). Cordero de Dios, que quitáis los pecados del mundo, (Tened piedad de nosotros). Cordero de Dios, que quitáis los pecados del mundo, (Tened piedad de nosotros). Jesucristo, oídnos. Jesucristo, escuchadnos. -139- Jesús, dulce y humilde de corazón. Haced nuestro corazón semejante al nuestro. ORACION Omnipotente y eterno Dios, mirad el corazón de vuestro amabilísimo Hijo: ved las satisfacciones que hoyos ofrece por los pecadores: escuchad las alabanzas que os tributa en nombre de ellos y, aplacado por El, conceded el perdón a los que lo imploran de vuestra clemencia. Por el mismo Jesucristo vuestro Hijo, que con Vos vive y reina, en unidad del Espíritu Santo, por los siglos de los siglos. Amén. Con licencia Eclesiástica. ROSARIO DEL SAGRADO CORAZON DE JESUS Se compone de cinco decenas en honor de las cinco llagas de Nuestro Señor. MANERA DE REZARLO En lugar de acto de contrición se rezará la siguiente oración de San Ignacio: Almo de Cristo! sontifícome, -140- Cuerpo de Cristo! sálvame, Coraz6n de Cristo! vivifícame, Sangre de Cristo! embriágame, Agua del costado de Cristo! lóvame. Pasi6n de Cristo! conf6rtame. Oh mi buen Jesús! 6yeme. Dentro de tus llagas, esc6ndeme, No permitas me separe de ti. A la hora de mi muerte llámame. y mándame venir a ti, Para que con tus Angeles y Santos, te alabe eterna· mente. 300 días de Indulgencias. En lugar de Padre Nuestro: Jesús dulce y himilde de Coraz6n, Haced el mío semejante al vuestro. 300 días de Indulgencias. En lugar de Ave Marra se dirá diez veces: Dulce Coraz6n de Jesús, Sed Vos mi amor. 300 días de Indulgencias. Al fin de cada decena se dirá. Dulce Corazón de María, Sed Vos la salvaci6n mla. 300 días de Indulgencias. Al concluir la quinta decena se dirá lo siguiente: Corazón Sagrado de Jesús, Tened piedad de nosotros. 100 días de Indulgencias. -141- Corazón Inmaculado de María, Rogad por nosotros. 100 días de Indulgencias. Este Rosario es un verdadero teso ro de indulgencias, p~rque las oraciones de que se compone han sido tan enriquecidas, que en tres minutos que dura, se ganan las indulgencias. Traducido del que se publicó en francés con aprobación del Sr. Obispo de Montreal. Corazón de Jesús, Misericordia! -?O días de Indulgencia. Corazón agonizante, tened piedad de los moribundos! 300 días de Indulgencias. VISITA A JESUS SACRAMENTADO De nuevo aquí me tienes ¡Jesús mío! confuso y humillado ante tu altar, sin saber qué decirte ni qué hablarte, ansioso solamente de llorar. Vengo del mundo, vengo del combate can~ sado de sufrir y de luchar, traigo el alma car~ gada de tristezás y hambriento el corazón de soledad. De esa soledad, dulce, divina, que alegra tu presencia celestial, donde el alma tan sólo con mirarte, te dice cuanto te quiere sin hablar. - 142- Mis miserias, ¡Señorl, aquí me traen: ¡ay, mírame con ojos de piedadl Soy el mismo de siempre. ¡Dueño mío! un abismo infinito de maldad. Un triste pecador, siempre caído que llora, desolado su orfandad y gime bajo el peso de sus culpas y ansía por recobrar su ,libertad. SPy una alma sedienta de ventura, un corazón que muere por amar, y abrasarse en la flama inextinguible. Concédeme, Señor, que a Ti me acerque del fuego de tu eterna caridad, permite que tus pies llegue a besar, déjame que los riegue con mi llanto y sacie en ellos mi ardoroso afán. ¡Oh, qué bien se está aquí, mi dueño amado! ante las gradas de tu santo altar bebiendo de la fuente de aguas vivas que brotan de tu pecho sin cesar. ¡Quién pudiera vivir eternamente en aquella divina soledad, gozando de tu amor y tu hermosura, en un éxtasis dulcísimo de paz! Puede imprimirse - Secretaría del Arzobispado de México 24 de Octubre de 1933, El Excmo. y Revmo. Sr. Arzobispo Pedro Benavides, Secretario. -143- VISITA NOCTURNA Quédate con nosotros, Señor, esta noche. Qué·· date para adorar, alabar y dar gracias por nosotros, mientras que dormimos, para hacer que baje del cielo tu miSlericordia sobre el mundo; para socorrer desde los Tabernáculos de la tierra. a las almas, que padecen len el purgatorio, su prolongada noche de sufrimientos y penas. Quédate con nosotros Señor, para apartar lo justa ira de Dios de nuestras populosas ciudades, cuyas densísimas nubes de vicios y crímen!Els. clama venganza al cielo. Quédate con nosotros Señor, para guardar a· los inocentes, para sostener a los tentados para· levantar a los caídos: para subyugar el poder del demonio, para impedir !El1 pecado. Quédate con nosotros Señor, para confortar a los que sufren, paro. bendecir a los que yacen len, el lecho del dolor, para dar contrición a los que mueren, para recibir a las miles de almas que se presentarán a Ti para ser juzgadas. ¡Oh Buen Pastor!, quédate con tus ovejas, defiéndelas de los peligros que las rodean y amenazan; pero sobre todo, quédate con los quesufr.en y con los agonizantes. Danos una noche tranquila y un fin perfecto;· se nuestro Misericordioso Padre hasta lo último. para que sin temor podamos aparecer delante· de Tí, como nuestro Juez. Quédate, Señor, en el corazón de todos los. aquí presentes. Así sea. -144-