LICEO MIXTO LA MILAGROSA ORIENTACION ESPIRITUAL EL SEXO NOMBRE: Ángela María Viafara Echeverry GRADO: Undécimo (11º) 1. Sociedad Impuesto como un principio fundamental de los seres vivos para reproducirse esta el sexo, es el tan simple hecho de la unión de dos cuerpos entre un hombre y una mujer aunque con tanta diversidad de interpretaciones esta también la unión de un hombre con otro hombre o la unión de una mujer con otra mujer estas dos ultimas concepciones es llamada en un termino general homosexualismo que es rechazado por muchas personas a nivel mundial. Este acto tiene diversos valores dependiendo su carácter religioso, económico, político entre otros. En la antigüedad el sexo era más conservado que en la actualidad. Estamos tan enseñados a este acto que ya nos los venden en todas partes, como símbolo de las propagandas para vender cualquier producto ya perdió su sentido y se transformo en un termino común e impuro por que se acto a mas representaciones perversas y pecaminosas. 2. Principios bíblicos de las relaciones sexuales. No es la voluntad de Dios que llevemos la dimensión sexual a la extinción de nuestra personalidad. Así como los demás apetitos, necesitamos asumir responsabilidad espiritual por medio del control. Control, no extinción es la lógica de Dios. (Prov 5: 1-23, 23:1-3; Cantares 2:7, 3:5, 8:4-10). No es el negarnos a casarnos, no proclamar un celibato, no es aniquilar nuestra personalidad como lo hacía el anciano del cual hablé al principio, el principio divino se enfoca en el dominio propio Control es un elemento que es fruto del Espíritu Santo y es un Componente del trabajo de la Gracia Divina en la vida de los hijos De Dios. (Gálatas 5:22-26; Rom 8:8-14.). Cuando la Biblia habla de dominio propio está enfocado a tres cosas, la manera de hablar, el sexo y la comida. Dominio Propio y el rehusar aplicarlo en nosotros mismos y en nuestras relaciones nos introduce a asuntos teológicos como: Pecado, Arrepentimiento, Confesión, Perdón y Restauración. (1 Juan 1:9; 2 Corintios 6,7; Gálatas 5:1). Lo único que es legítimo en cuanto a satisfacción del apetito sexual está enmarcado dentro de un compromiso de pacto; el sello de un compromiso de pacto se encuentra en el matrimonio y esto pertenece a la lógica de Dios. (Gen 2:18-25; Prov. 5:1-23; Cantares 3:12, 8:6; Mat. 19:3-11). El principio divino demuestra que Dios creó el sexo para el matrimonio, no fuera del matrimonio. Nunca una pareja fiel va a tener problemas de enfermedad venéreas por tener mucho sexo entre ellos. Pero, si uno de los dos sale del pacto y tiene sexo fuera del matrimonio, correrá el riesgo de enfermedades. Sexo bajo el sello del pacto no es solo bueno, si no además es puro, honorable y santo. Hebreos 13:4). Son muchos los que creen que el sexo en el matrimonio es aburrido, que el sexo más atractivo, desbordante, explosivo y ardiente está en las aventuras y fuera del matrimonio. Pero este principio divino dice todo lo contrario .El sexo dentro de la norma matrimonial no solo es bueno, sino puro, honorable, santo explosivo, creativo. El Apetito sexual no solo ha sido colocado en los humanos para asegurar la procreación. Era la intención de Dios que nuestra sexualidad sea una fuente de intenso placer para nosotros. (Prov. 5:18,19; Eclesiastés 9:7-10, Cantares 4:1-15). Los primeros padres de la Iglesia creían que el sexo era solo para procrear hijo. Placer sexual no es malo cuando está dentro del marco matrimonial. Acto Sexual es más que un acto físico. Envuelve dos personas en muy especial clase de conocimiento que implica profunda conexión, comunión, compartir y un total darse el uno al otro. (Gen 2:18-25, Cantares 8:1-14, Efesios 5:25-33). Para nuestra sociedad, sexo es solo un placer físico o la unión de dos cuerpos, pero en realidad el principio de Dios es que sexo es más allá de una unión física. Esto implica una conexión, una comunión, un abrirse al otro un compartir de sentimientos y profundidades una entrega genuina y real. Muchas parejas de matrimonios aún cristianos solo practican sexo como lo hacen los no creyentes, nunca hablan de sexualidad, no tienen intimidad como pareja más allá de la sexualidad y mucho ni siquiera se conocen. Sexo es un derecho reciproco basado en la realidad de que nuestro cuerpo pertenece a nuestro cónyuge. La enseñanza Escritural no intenta dar licencia para abusar del cónyuge, sino al contrario enfatizar las responsabilidades que acompañan el compromiso matrimonial. Esposos y Esposas son responsables ante Dios para servir el uno al otro satisfaciéndose sexualmente de una manera sana. En este sentido, sexo es una reunión compleja a nivel personal y santo, donde se intercambian sentimientos, pensamientos y sensaciones. (1 Corintios 7:1-5).