Jurisdicción: Social Recurso de Suplicación núm. 1503/2005. Ponente: Ilma. Sra. Dª. Petra García Márquez DESPIDO IMPROCEDENTE: trasgresión de la buena fe contractual: formalización en dependencias policiales de denuncia a cliente del hotel que lo había abandonado sin efectuar el abono de la factura. El TSJ desestima el recurso de suplicación interpuesto por la parte demandada contra Sentencia del Juzgado de lo Social núm. 1 de Cuenca, de fecha 13-06-2005, en autos promovidos sobre despido. En Albacete, a nueve de diciembre de dos mil cinco. La Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha, compuesta por los Ilmos. Sres. Magistrados citados al margen, y EN NOMBRE DEL REY ha dictado la siguiente SENTENCIA NÚM. 1655 En el Recurso de Suplicación núm. 1503/05, interpuesto por la representación de la empresa Barambio Hoteles, SA, contra la Sentencia dictada por el Juzgado de lo Social núm. 1 de Cuenca, en autos núm. 250/05, siendo recurrida Dª Antonia, sobre Despido. Ha actuado como Ponente la Ilma. Sra. Dª. Petra García Márquez. ANTECEDENTES DE HECHO PRIMERO Que, por el Juzgado de lo Social núm. 1 de Cuenca, se dictó Sentencia con fecha 13 de junio de 2005, cuya parte dispositiva establece: « FALLO: Estimo la demanda de Dª Antonia contra la empresa Barambio Hoteles, SA, declaro improcedente el despido de la trabajadora y condeno a la demandada a que, en el plazo de los cinco días siguientes al de la notificación de la presente sentencia, opte entre la readmisión del actor o su indemnización en cuantía de 4.078,31 euros, y en todo caso al abono de los salarios de tramitación hasta la notificación de la presente sentencia, que a la fecha de dictarla ascienden a 5.244,33 euros». SEGUNDO Que, en dicha Sentencia, y como Hechos Probados, se establecen los siguientes: «I.-la actora Dª Antonia presta servicios para la demandada Barambio Hoteles, SA desde el 18-8-03, con categoría profesional de directora, percibiendo un salario anual de 21.035 euros. II.-La empresa el 15-3-05 notificó a la trabajadora el despido mediante carta que obra en autos, con efectos desde esa misma fecha. III.-El 30-11-04 la actora formuló una denuncia contra Mercedes, por haber abandonado el Hotel sin abonar la factura correspondiente de 463,90 euros. En dicha denuncia la actora manifestó "que la tal Mercedes era visitada asiduamente por varios hombres. A su vez esta chica visitaba continuamente al morador de la habitación 222, el titular del DNI núm. NUM000, Esteban". IV.-El Sr. Esteban ha enviado una carta por burofax el 4-3-05 al hotel en reclamación de lo que considera intromisión en su vida privada y atentado a su buen nombre, anunciando acciones y reclamando una indemnización de 20.000 euros. V.-Los datos referidos al Sr. Esteban fueron facilitados por la trabajadora a la policía en requerimiento del instructor de la denuncia núm. NUM001, quien solicitó a la actora que llamara al hotel para preguntar datos identificativos de personas que pudieran estar en relación con la denunciada, lo que le fue facilitado así mismo a la actora por personal del hotel (jefe de recepción), a través de esa llamada telefónica efectuada a las 11,30 horas del día 24-11-04, desde al propia Comisaría, prosiguiendo en ese sentido su denuncia interrumpida para ampliarla a través de esos datos, que el instructor consideraba necesarios para la investigación, y según su protocolo de actuaciones. VI.-La policía se puso en contacto con el Sr. Esteban a raíz de esa denuncia para avanzar en la investigación de los hechos, lo que ha desencadenado el "malestar" y reclamación del cliente al hotel. VII.-Se ha celebrado el preceptivo acto de conciliación, que resultó sin avenencia». TERCERO Que, en tiempo y forma, por la parte demandada, se formuló Recurso de Suplicación que fue impugnado de contrario. Elevadas las actuaciones a este Tribunal, se dispuso el pase al Ponente para su examen y resolución. FUNDAMENTOS DE DERECHO PRIMERO Frente a la Sentencia de instancia que acoge la demanda de despido promovida por la actora contra la empresa Barambio Hoteles, SA, para quien venía prestando servicios, con la categoría profesional de directora, declarando la improcedencia de aquel, con las consecuencias legales a ello inherentes; muestra su disconformidad la entidad demandada mediante un solo motivo de recurso, que sustenta en el art. 191.c) de la LPL ( RCL 1995, 1144 y 1563) , encaminado al examen del derecho aplicado, denunciando la infracción del art. 54.2.d) del ET ( RCL 1995, 997) . SEGUNDO Según se deduce de lo actuado, la actora, como directora de la entidad demandada, en fecha 30-11-04, formuló denuncia ante la Comisaría contra Dña. Mercedes, cliente del Hotel, por haber abandonado el mismo sin abonar la factura. Denuncia en la que se hacía constar que dicha cliente era visitada asiduamente por varios hombres, así como que dicha señora visitaba continuamente al ocupante de la habitación 222, identificándolo como D. Esteban; identificación que se llevó a cabo a requerimiento del instructor de la denuncia, que lo consideraba necesario para la investigación, el cual solicitó de la accionante que llamara al hotel para preguntar por los datos de las personas que pudieran estar relacionadas con la denunciada, siendo el jefe de recepción el que, a través de dicha llamada telefónica, facilitó los datos de aquel. La policía, a raíz de la denuncia, y a fin de avanzar en la investigación, se puso en contacto con el Sr. Esteban, lo que desencadeno el «malestar» de este y la subsiguiente reclamación al hotel. Por último, en fecha 15-03-05, la demandada comunica a la actora el despido, con efectos de esa misma fecha, basándolo en la comisión de una falta de abuso de confianza y quiebra de la lealtad debida a su empleadora. Visto lo que antecede, y por lo que se refiere a la normativa legal de aplicación, la posibilidad de rescindir unilateralmente el contrato de trabajo, le viene conferida al empleador por el art. 54 del ET ( RCL 1995, 997) , para aquellos supuestos en los que el trabajador incurra en un incumplimiento contractual, necesariamente calificado como grave y culpable. Precepto en el que, sin ánimo exhaustivo, se especifican una serie de conductas catalogadas como justificativas de la adopción de tal medida, contemplándose en el apartado 2º.d), la transgresión de la buena fe contractual y el abuso de confianza en el desempeño del trabajo. Atendiendo, así mismo, a la doctrina jurisprudencial, esta viene manteniendo reiteradamente [ SSTS De 9-4-1986 ( RJ 1986, 1903) , 5-7-1988 ( RJ 1988, 5763) , 4-31991 ( RJ 1991, 1822) , 10-11-1998 ( RJ 1998, 9550) y 13-11-2000 ( RJ 2000, 9688) ], que las diversas infracciones que contempla el art. 54 del ET, no presuponen en si mismas y de forma directa o automática, la sanción de despido, sino que es preciso la valoración de cada conducta de forma particularizada, teniendo en cuenta la concurrencia de los distintos elementos, tanto subjetivos, como objetivos que en ellas inciden, así como los antecedentes y las situaciones coetáneas que acaecen, a fin de determinar la concreta y especifica gravedad y culpabilidad verdaderamente existente, puesto que el despido se configura como la sanción de máxima gravedad en el ámbito laboral, imponiéndose pues la adecuada ponderación entre todas aquellas circunstancias a fin de graduar proporcionalmente la infracción producida y la sanción a imponer a la misma. Igualmente, la Jurisprudencia viene manteniendo [ SSTS 18-12-1984 ( RJ 1984, 6408) , 27-02-1987 ( RJ 1987, 1134) , 31-10-1988 ( RJ 1988, 8190) , 4-03-1991, 2-04-1992 ( RJ 1992, 2590) ] que dado el carácter sinalogmático del contrato de trabajo, este impone a las partes el mutuo deber de acomodar su comportamiento a las exigencias derivadas del principio de la buena fe, configurado como un elemento normativo y conformador del contenido obligacional derivado del contrato de trabajo y que impone una conducta acomodada a pautas de comportamiento presididas por la lealtad, honradez, probidad y respeto a la confianza que legítimamente una de las partes del contrato deposita en la otra, tal y como se infiere de los arts. 5.a) y 20.2 del ET. Es por ello, que la transgresión de la buena fe se define como una actuación contraria a los especiales deberes de conducta que deben presidir el contrato, contemplándose su quiebra, en el art. 54.2.d) del ET, como justificativa del despido, así como el abuso de confianza, conducta esta que se configura como una modalidad cualificada de aquella, traducida en un uso desviado de las facultades conferidas y cuya comisión supone una lesión o riesgo para los intereses de la empresa [ STS de 26-02-1991 ( RJ 1991, 875) ], aún cuando la conducta no sea dolosa, al contemplar el art. 54.2.d), las acciones culposas, siempre y cuando esta sea grave e inexcusable [ STS 4-02-1991 ( RJ 1991, 794) y 25-09-1986 ( RJ 1986, 5168) ]. TERCERO Visto lo que antecede y trasladándonos al caso que no ocupa se impone la desestimación del recurso y la confirmación de la sentencia impugnada, en tanto que de la descripción de la conducta imputada a la actora y de las circunstancias que individualizan la misma, no es posible concluir en el sentido de que tal actuación suponga un abuso de confianza en el desempeño el trabajo, ni tampoco una transgresión de la buena fe contractual, en tanto que la actora, al denunciar a una cliente del hotel que había abandonado el mismo sin efectuar el abono de la correspondiente factura, no hizo más que cumplir con los deberes que le imponía su cargo de directora de dicha entidad, y ello con la finalidad última de salvaguardar los intereses de la empleadora, junto con la cumplimentación de un deber ciudadano relativo a poner en conocimiento de los órganos policiales la comisión de un delito. Conclusión que no puede quedar desvirtuada por el hecho de que al formalizar dicha denuncia, en las dependencias policiales, y a instancia del instructor, previa consulta telefónica con el Jefe de recepción del Hotel, pusiese de manifiesto datos afectantes a dicha cliente, tales como que la misma visitaba asiduamente al cliente de la habitación 222, indicando los datos identificativos de este, ya que dicha actuación se incardinaba en la necesaria colaboración para el esclarecimiento de un hecho delictivo, sin que la iniciativa en tal sentido surgiese de la propia trabajadora, sino en respuesta a la solicitud del profesional encargado de investigar el delito. Situación ante a cual no es posible hacer valer la existencia de derecho alguno de reserva por parte de la accionante, en orden a mantener en secreto los datos de tal cliente, en tanto que en todo establecimiento hotelero se solicita la identificación, mediante el oportuno documento de identidad, a los clientes del mismo, con objeto de facilitarlo a las autoridades policiales, de lo que se infiere que estos hubiesen podido hacerse de los mismos en el caso que nos ocupa, aún sin la colaboración de la directora. Por otra parte, también es preciso destacar que la identificación del cliente visitado por la persona denunciada, se hizo de forma reservada, sin la mas mínima publicidad, en el ámbito de una investigación policial, e incardinado en unas diligencias penales, no pudiendo perjudicar a la hoy accionante, la forma, modo o manera en la que los responsables de tal investigación hiciesen uso de los datos suministrados a su instancia, o de la reacción del propio cliente. Visto lo que antecede, no pudiendo colegir que la conducta imputada a la actora implique transgresión de la buena fe contractual o abuso de confianza en el desempeño del trabajo, ni actuación alguna que, de forma grave y culpable suponga un incumplimiento de los deberes que conformaban su vinculación laboral, se está en el caso de desestimar el recurso planteado, confirmando la Sentencia impugnada. FALLAMOS Que desestimando el Recurso de Suplicación interpuesto por la representación de la empresa Barambio Hoteles, SA, contra la Sentencia dictada por el Juzgado de lo Social núm. 1 de Cuenca, de fecha 13 de junio de 2005, en autos núm. 250/2005, siendo recurrida Dª Antonia, sobre despido, debemos confirmar la indicada resolución. Imponiendo las costas de esta alzada, por ser preceptivas, a la parte recurrente, incluidos los honorarios del Letrado de la parte impugnante, que se cuantifican en 250 euros. Notifíquese la presente resolución a las partes y a la Fiscalía del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha (Albacete), haciéndoles saber que contra la misma únicamente cabe RECURSO DE CASACIÓN PARA LA UNIFICACIÓN DE DOCTRINA, que se preparará por escrito ante esta Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla La Mancha (Albacete), dentro de los DIEZ DÍAS siguientes a la notificación de la Sentencia, de acuerdo con lo dispuesto en los artículos 219 y 228 de la Ley de Procedimiento Laboral ( RCL 1995, 1144 y 1563) . La consignación del importe de la condena deberá acreditarse, cuando proceda, por la parte recurrente que no goce del beneficio de justicia gratuita ante esta Sala al tiempo de preparar el Recurso presentando resguardo acreditativo de haberla efectuado en la Cuenta Corriente núm. 0044 0000 66 1503 05, que esta Sala de lo Social del Tribunal Superior de Justicia de Castilla-La Mancha (Albacete) tiene abierta en el Banco Español de Crédito, Oficina número 3001, sita en la calle Marqués de Molins, número 13, de Albacete, pudiéndose sustituir dicha consignación en metálico por el aseguramiento mediante aval bancario en el que se hará constar la responsabilidad solidaria del avalista, debiendo igualmente la parte recurrente, que no ostente la condición de trabajador o causahabiente suyo, o beneficiario del régimen público de la Seguridad Social, o se trate del Ministerio Fiscal, Estado, las Comunidades Autónomas, las Entidades Locales, los Organismos dependientes de todas ellas y quienes tuvieren reconocido el beneficio de justicia gratuita, consignar como depósito la cantidad de TRESCIENTOS EUROS (300 EUROS), que deberá ingresar en la Cuenta número 2410 del Banco Español de Crédito, Sucursal de la calle Barquillo, núm. 49 (clave oficina 1006) de Madrid, que tiene abierta la Sala IV de lo Social del Tribunal Supremo, debiendo hacer entrega del resguardo acreditativo en la Secretaría de dicha Sala IV del Tribunal Supremo al tiempo de personarse en ella. Expídanse las Certificaciones oportunas para su unión a los autos y al rollo de su razón, incorporándose el original al correspondiente Libro de Sentencias. Así por esta nuestra sentencia, lo pronunciamos, mandamos y firmamos. PUBLICACIÓN.- Leída y publicada fue la anterior Sentencia en el día de su fecha, por el Ilmo. Sr. Magistrado-Ponente que la suscribe, en la Sala de Audiencias de este Tribunal. Doy fe. PUBLICACIÓN.- En la misma fecha fue leída y publicada la anterior resolución por el Ilmo. Sr./a. Magistrado que la dictó, celebrando Audiencia Pública. Doy fe. DILIGENCIA: Seguidamente se procede a cumplimentar la notificación de la anterior resolución. Doy fe.