Célula, Genoma y Organismo 4° Medio Electivo Profesora Bernardita Barraza GUIA DE ESTUDIO: COMUNICACIÓN CELULAR Departamento Ciencias Mecanismos generales de comunicación celular La comunicación celular puede establecerse de distintas formas que incluyen: a) la comunicación paracrina: la señal actúa sobre células vecinas; b) endocrina: la señal viaja por el torrente sanguíneo y alcanza células lejanas; c) autocrina: la señal llega a la misma célula de la cual salió; d) neurotransmisión: la señal es liberada por la célula emisora al espacio sináptico, donde es captada por la célula receptora; e) contactos célula-célula: la señal permanece anclada a la membrana de la célula emisora mientras interactúa con la célula receptora y f) mediante gaps: la señal se difunde desde la célula emisora a la receptora. El reconocimiento de la señal En cada organismo existen distintos tipos de señales químicas que reciben el nombre de ligandos y forman complejos con receptores específicos. Cada tipo celular es sensible a distintas señales y cada interacción ligando-receptor está asociada a una función particular. Cada célula responde a un conjunto de señales. El complejo ligando-receptor transmite el mensaje al interior de la célula e inicia un camino que lleva a la ejecución de una respuesta biológica específica. Por este proceso completo se transduce la señal. Ciertas moléculas pequeñas y/o hidrófobas atraviesan la membrana celular y se unen a receptores internos. Estos complejos suelen unirse al DNA y actuar como factores de transcripción. Los receptores de membrana son variados. Pueden formar parte de canales iónicos, presentar actividad enzimática o estar asociados con enzimas. Existen receptores que activan una proteína adaptadora, la proteína G, que transmite el mensaje al siguiente intermediario. Fig. 1. Ubicación de los receptores Los receptores pueden encontrarse en el interior de la célula o bien anclados en la membrana plasmática. (a) Receptor intracelular; (b) receptor de membrana. Célula, Genoma y Organismo 4° Medio Electivo Profesora Bernardita Barraza Departamento Los receptores intracelulares Ciencias Los glucocorticoides y los mineralocorticoides, las hormonas sexuales y las hormonas tiroideas son ejemplos de ligandos que se unen a receptores intracelulares que actúan como factores de transcripción. Todos los receptores intracelulares tienen una zona de unión al DNA y otra de reconocimiento del ligando. Las proteínas chaperonas mantienen el plegamiento específico de los receptores que se encuentran libres en el citoplasma. Luego de la unión de una hormona al receptor, el complejo se transloca al núcleo, se separa de la chaperona y forma un dímero con otro complejo similar. Estos dímeros interactúan con secuencias específicas del DNA, disparando la transcripción génica. Los receptores de membrana Las hormonas polipeptídicas se unen generalmente a sus receptores específicos en la membrana celular. El receptor reconoce características estructurales de la hormona que generan un alto grado de especificidad y afinidad. La unión de la hormona al receptor puede provocar cambios conformacionales en la molécula de receptor que permiten la asociación con el transductor, en el que pueden tener lugar cambios adicionales para permitir la interacción con una enzima en el lado citoplasmático de la membrana celular. Los cambios conformacionales en la enzima, a su vez, hacen que se active su sitio catalítico. Es más, en algunos casos, el complejo receptor "activado" podría, físicamente, abrir un canal iónico en la membrana o tener otros impactos profundos sobre su estructura. Este proceso se conoce como TRANSDUCCIÓN DE LA SEÑAL y a las moléculas participantes en las interacciones se los llama genéricamente transductores o moléculas transductoras. Muchas de las hormonas que se unen a receptores de membranas transmiten sus señales mediante: 1) aumento del AMPC y la activación de la ruta de la proteína quinasa A 2) el aumento del GMPC y la activación de la ruta de la proteína quinasa G 3) activación de la hidrólisis del fosfatidilinositl 4,5 bifosfato y la estimulación de la ruta de la proteína quinasa C. Los receptores ionotrópicos se encuentran en la membrana celular y permiten el pasaje de iones al interior o exterior de la célula. En general, responden a neurotransmisores y controlan procesos de contracción muscular y transferencia neuronal de información. Existen dos tipos de receptores de membrana asociados con enzimas: los que se activan y funcionan como enzimas y los que activan enzimas del lado interno de la membrana celular. En la gran mayoría de los casos, la actividad enzimática asociada es de proteincinasa. Estos receptores participan en cascadas de señalización, cuyas respuestas biológicas se relacionan con la regulación de la proliferación, la diferenciación, la producción de la matriz extracelular, la reparación de tejidos y la regulación inmunitaria. Luego de la interacción entre el ligando y el receptor, se produce la formación de varios complejos ligando-receptor en la membrana celular. Los dominios catalíticos permiten la fosforilación recíproca en residuos de tirosina, serina o treonina (según de qué receptor se trate). Esta autofosforilación es seguida por el reclutamiento de moléculas señalizadoras citosólicas, que transmiten el mensaje al interior de la célula. Otros receptores presentan actividad guanilato ciclasa, que cataliza la producción de cGMP a partir de GTP. Célula, Genoma y Organismo 4° Medio Electivo Profesora Bernardita Barraza Departamento Fig. 2. Receptores con actividad de tirosina cinasa Ciencias (a) Antes de que se una la molécula señal, los receptores existen como polipéptidos individuales. La parte intracelular de estos receptores contiene múltiples tirosinas. (b) Cuando se une la molécula señal, por ejemplo un factor de crecimiento, se produce la asociación de dos receptores, formándose un dímero. (c) La dimerización activa la región del receptor con función de enzima, la tirosina cinasa (que no estaba fosforilada y por lo tanto, inactiva). Las tirosinas de la tirosina cinasa adicionan un grupo fosfato que provienen del ATP. (d) Ahora el receptor está activado y puede fosforilar proteínas intracelulares. La fosforilación en tirosina de estas proteínas modifica su conformación. Cuando se trata de enzimas, la fosforilación les cambia la actividad. En el caso de proteínas sin actividad enzimática, la fosforilación les permite la interacción con otras proteínas. Por ambos mecanismos se transduce la señal del ligando al interior celular. Esto activa una serie de vías que conducen a la respuesta celular. Algunos receptores de membrana están acoplados a proteínas G, que intermedian la interacción entre aquellos y otras proteínas de membrana. La cantidad de ligandos que se une a este tipo de receptores es enorme (entre ellos, las hormonas adrenalina, glucagón, adrenocorticotrofina, luteinizante, foliculoestimulante y angiotensina II). Fig. 3. Receptores acoplados a proteínas G (a) Este tipo de receptores consiste en un polipéptido que atraviesa la membrana plasmática siete veces. Este esquema muestra la topología del receptor b2-adrenérgico que se ha estudiado ampliamente. (b) Una señal interactúa con el receptor que se activa y cambia de forma. La proteína G inactiva se une al receptor y se activa. Luego se desplaza hacia otra proteína de membrana que se encuentra en estado inactivo. Cuando la proteína G se une a esta proteína, altera su actividad. Esto conduce a una respuesta. Célula, Genoma y Organismo 4° Medio Electivo Profesora Bernardita Barraza Transducción de la señal: activación de la Departamento adenilciclasa. Ciencias Proteínas G. La hormona se une al receptor en la membrana (Paso 1); esto produce un cambio conformacional en el receptor que deja expuesto un sitio para la fijación de proteína G subunidad (Paso 2); la proteína G puede ser tanto estimuladora, Gs, como inhibidora, Gi, en relación con el efecto final sobre la actividad de la adenilato ciclasa; el receptor interacciona con la subunidad de la proteína G permitiendo que la subunidad intercambie el GDP unido por GTP (Paso 3); la disociación de GDP provoca la separación entre la subunidad y la subuni dad de la proteína G con lo que en la superficie de la subunidad de la proteína G se origina un sitio de unión para la interacción con la adenilato ciclasa (Paso 4); la subunidad se une a la adenilato ciclasa y activa el centro catalítico, de modo que el ATP es convertido en cAMP (Paso 5); el GTP se hidroliza a GDP por la actividad GTPasa de la subunidad original y permitiendo de nuevo su interacción con la subunidad (Paso 6); el GDP se asocia con la subunidad y el sistema retorna al estado no estimulado en espera de otro ciclo de actividad. Es importante destacar las pruebas que sugieren que los complejos pueden desempeñar funciones importantes en la regulación de determinados factores, incluída la adenilato ciclasa.(figura 7) Un mecanismo similar de activación de proteínas G se propone para la activación de la guanilatociclasa, enzima que cataliza la síntesis de GMPc a partir de GTP. Célula, Genoma y Organismo 4° Medio Electivo Profesora Bernardita Barraza Departamento Transmisión de la señal al interior de la célula Ciencias Cuando un ligando interactúa con su receptor de membrana, la señal es transmitida al interior de la célula. Entonces se dispara una cascada de eventos que incluye la síntesis de segundos mensajeros y la fosforilación de enzimas catalizada por proteincinasas. Fig. 4. Fosforilación en cascada La cascada involucra la fosforilación de enzimas por proteincinasas. Supongamos que la proteincinasa 1 activa fosforila 100 moléculas de proteincinasa 2, activándolas. Cada una de ellas fosforilará otras 100 moléculas de proteincinasa 3, activándolas. Cada una de ellas fosforilará a otras 100 moléculas de proteína blanco inactiva responsable de una respuesta celular. En suma, la activación de una molécula de proteincinasa 1 produce la fosforilación de 100 x 100 x 100 moléculas de proteína blanco inactiva. De esta manera, se amplifica la señal. Célula, Genoma y Organismo 4° Medio Electivo Profesora Bernardita Barraza Departamento Ciencias Los segundos mensajeros son moléculas pequeñas que se generan en gran cantidad y rápidamente en respuesta a la activación de un receptor. Llevan la señal a otras partes de la célula y la amplifican mediante la activación de cinasas y otras enzimas. Los nucleótidos cíclicos, el ion Ca2+ y ciertos lípidos son ejemplos de segundos mensajeros. Fig. 5. Los fosfolípidos segundos mensajeros son La hidrólisis del fosfatidilinositol difosfato libera por un lado el inositol trifosfato (IP3) y por el otro diacilglicerol (DAG). La fosfolipasa C es la enzima que cataliza esta reacción. Esta enzima puede ser activada por proteínas Gq como se muestra en el esquema o mediante la interacción con receptores. El IP3 liberado al citoplasma interactúa con receptores localizados en los depósitos de Ca2+ del retículo endoplasmático y estimula la liberación de este ion al citoplasma. Sobre el margen superior izquierdo del esquema se observa la estructura del fosfatidilinositol difosfato. La fosforilación y desfosforilación de proteínas son parte de la transducción del mensaje. Esto significa que la mayoría de los mensajes que se transmiten al interior de las células producen la activación de cinasas que regulan su función mediante la fosforilación de diversos sustratos. Los caminos de transducción pueden ser lineales, pero también pueden existir puntos potenciales de regulación y de intersección entre distintos caminos. La respuesta celular está conformada por un circuito complejo de activación que involucra más de un camino de señalización. Una molécula señal puede ser reconocida por diferentes receptores asociados a distintos mecanismos de transducción. También puede ocurrir que un mismo receptor active diferentes vías. Célula, Genoma y Organismo 4° Medio Electivo Profesora Bernardita Barraza Departamento El final de la vía: la respuesta biológica Ciencias La transducción de las señales externas produce una respuesta por parte de la célula blanco. Esta respuesta es una alteración como resultado de la activación o inhibición de alguna vía metabólica, y de modificaciones en la forma o el movimiento de las células. El papel de estos procesos en el control de la diferenciación, de la proliferación y del crecimiento celular es esencial para el desarrollo y el funcionamiento normales del organismo. Segundos mensajeros AMP cíclico. La formación de cAMP en la célula normalmente activa la proteína quinasa A, lo que se denomina ruta de la proteína quinasa A. La ruta completa utiliza cuatro moléculas de cAMP en la reacción que forma un complejo entre dos subunidades reguladoras (R), liberándose dos subunidades catalíticas (C) de la proteína quinasa. Las subunidades catalíticas de proteinquinasa A liberadas son capaces de fosforilar proteínas para producir un efecto celular. Por último, puede también activarse una proteína llamada CBP que migrando al núcleo reconocen enhancers ("potenciador") específicos llamados “sitios CREB”, elementos de respuesta a cAMP, con lo que se puede modificar actividades enzimáticas por inducción o represión de genes. Son muchas las hormonas que actúan a través de este mecanismo. IP3, DAG, Calcio-calmodulina El descubrimiento del regulador de la actividad de la fosfodiesterasa dependiente de calcio proporcionó la base para comprender la manera en que el Ca2+ y el AMPc interactúan dentro de la célula. El término con el que se conoce ahora a la proteína reguladora dependiente del calcio es calmodulina, una proteína de 17 KDa homóloga a la proteína muscular troponina C en estructura y función. La calmodulina tiene cuatro sitios para fijación del calcio y la ocupación total de estos sitios conduce a un cambio notable de la conformación, de modo que la mayor parte de la molécula asume una estructura de hélice alfa. Se presume que este cambio de conformación confiere a la calmodulina la propiedad para activa o inactivar enzimas. La interacción de calcio con la calmodulina (con el cambio resultante de actividad de la última) es conceptualmente análoga a la fijación del AMPc a la proteína cinasa y la activación subsiguiente de esta molécula. Con frecuencia, la calmodulina es una de las subunidades reguladoras de proteínas oligómeras, entre ellas varias cinasas y enzimas, participando en el metabolismo de combustibles como en la generación y degradación de nucleótidos cíclicos y el transporte de iones. Además de estos efectos, el complejo calcio/calmodulina regula la actividad de numerosos elementos estructurales en las células.. Los niveles de calcio citosólicos pueden modificarse tanto por ingreso del calcio extracelular como por la liberación desde su principal depósito intracelular: el retículo endoplásmico. La variación de los niveles de calcio puede controlarse directamente por ligado de la hormona al receptor (ej: neurotransmisores) tanto como a través de las modificaciones en los niveles de IP3- DAG por acción de la fosfolipasa C (ej: insulina). Una hormona que opera a través de este sistema se une a un receptor específico de la membrana celular, que interacciona con una proteína G según un mecanismo similar al de la ruta de la proteína quinasa A y transduce la señal, lo que da como resultado la estimulación de Célula, Genoma y Organismo 4° Medio Electivo Profesora Bernardita Barraza fosfolipasa C. Esta enzima cataliza la hidrólisis de fosfatidilinositol 4,5-bifosfato (PIP2) para formar dos segundos mensajeros, diacilglicerol (DAG) e inositol-1,4,5-trisfosfato (IP3). Departamento Ciencias El inositol 1,4,5-trisfosfato difunde hacia el citoplasma y se une a un receptor de IP3 en la membrana de un depósito de calcio, que puede estar separado del retículo endoplasmático, o bien formar parte del mismo. Esta unión da como resultado la liberación de iones calcio, que contribuye a un gran incremento del calcio citoplasmático. Por otro lado, el IP3 se metaboliza por eliminación progresiva de grupos fosfato hasta formar inositol. Este se combina con ácido fosfatídico (PA) para formar fosfatidilinositol (PI) en la membrana celular. Este último es fosforilado doblemente por una quinasa para formar PIP2, que bajo estímulo hormonal ya puede entrar en otra ronda de hidrólisis y formación de segundos mensajeros (DAG e IP3). Si el receptor todavía está ocupado por una hormona, pueden producirse varias rondas del ciclo antes de que se disocie el complejo hormonareceptor. Por último, es importante destacar que no todo el IP3 es desfosforilado durante la estimulación hormonal. Parte del IP3 es fosforilado mediante la IP3 quinasa para dar lugar a inositol 1,3,4,5-tetrafosfato (IP4), que puede mediar en algunas de las respuestas hormonales más lentas o prolongadas -a través de la activación de cascadas de quinasas/fosfatasas -con la modificación final de la expresión genética. El DAG activa la ruta de la proteína quinasa C. Simultáneamente al aumento de Ca2+ citoplasmático inducido por el IP3, el cual procede de la hidrólisis de PIP2, el DAG produce diversos efectos. El DAG activa una importante proteína quinasa de serína/treonína denominada proteína quinasa C por su dependencia de calcio. El aumento inicial del calcio citoplasmático inducido por IP3 parece alterar de algún modo la proteína quinasa C, de modo que ésta es translocada desde el citoplasma hacia la cara citoplasmática de la membrana plasmátíca. Una vez translocada, es activada por una combinación de calcio, DAG y el fosfolípido negativo de la membrana, fosfatidilserina. Tras su activación, la proteína quinasa C fosforila proteínas específicas en el citosol o, en ocasiones, en la membrana plasmática. Estas proteínas fosforiladas llevan a cabo funciones específicas que no pueden realizar en el estado desfosforilado. Por ejem plo, una proteína fosforilada podría migrar hasta el núcleo e incrementar la mitosis y el crecimiento. Además, el sistema IP3-DAG puede modificar la actividad de una familia de enzimas llamadas genéricamente fosfodiesterasas, de las cuales es más abundante la fosfodiesterasa 1 (FD1), cuya activación permite la destrucción de moléculas de cAMP. De este modo hormonas cuyo segundo mensajero es el IP3 pueden reducir los niveles de cAMP en forma indirecta. GMP cíclico. Ruta de la proteína quinasa G. El tercer sistema es el sistema de la proteína quinasa G, que se estimula por el aumento de cGMP citoplasmático. El GMP cíclico es sintetizado por la guanilato ciclasa a partir de GTP. Al igual que la adenilato ciclasa, la guanilato ciclasa está vinculada a una señal biológica específica a través de un receptor de membrana. El dominio extracelular de la guanilato ciclasa puede ejercer la función de receptor hormonal. El cGMP producido activa una proteína quinasa G, que posteriormente fosforila proteínas celulares para que se expresen muchas de las acciones de esta ruta. Es necesario conocer más datos acerca de la proteína quinasa G. Referencias: Curtis et al: Biología (2008), 7ma edición. Editorial Panamericana Célula, Genoma y Organismo 4° Medio Electivo Profesora Bernardita Barraza Departamento Ciencias