COMUNIDAD DE MADRID PRUEBA TIPO 2009/2010 AUTOR: Francisco Ríos Pedraza ESTRUCTURA: La prueba consta de dos opciones «A» o «B», cada una de las cuales incluye: a) un texto y b) cuatro cuestiones relacionadas con dicho texto INSTRUCCIONES: El alumno elegirá la opción «A» o la opción «B» y responderá a las cuestiones que aparecen al final de la opción elegida. DURACIÓN: Una hora y media PUNTUACIÓN: Las respuestas a las cuestiones 1ª, 3ª y 4ª podrán obtener una calificación máxima de dos puntos cada una. La contestación a la pregunta 2ª podrá obtener hasta cuatro puntos. Opción A «En fin, dándose cada individuo a todos, cada uno no se da a nadie en particular; y como no hay socio alguno sobre quien no se adquiera el mismo derecho que uno cede, se gana en este cambio el equivalente de todo lo que se pierde, y una fuerza mayor para conservar lo que se tiene. Si quitamos pues del pacto social lo que no es de su esencia, veremos que se reduce a estos términos: Cada uno de nosotros pone en común su persona y todo su poder bajo la suprema dirección de la voluntad general; y cada miembro es considerado como parte indivisible del todo. Este mismo acto de asociación convierte al instante la persona particular de cada contratante en un cuerpo moral y colectivo, compuesto de tantos miembros como voces tiene la asamblea; cuyo cuerpo recibe del mismo acto su unidad, su ser común, su vida y su voluntad ». Jean-Jacques ROUSSEAU, Contrato Social Cuestiones 1. Exponer las ideas y la estructura argumentativa del texto propuesto. 2. Explicar el problema del origen de la sociedad en Rousseau y desarrollar sistemáticamente las principales líneas de su pensamiento. 3. Relacionar el pensamiento de Rousseau con su marco histórico, sociocultural y filosófico. 4. Explicar el tratamiento del problema del origen y fundamento de la sociedad en un autor o corriente filosófica que no pertenezca a la época moderna. Opción B «Cuando los filósofos usan una palabra — «conocimiento«, «ser», «objeto», «yo», «proposición», «nombre»— y tratan de captar la esencia de la cosa, siempre se ha de preguntar: ¿Se usa efectivamente esta palabra de este modo en el lenguaje que tiene su tierra natal?— Nosotros reconducimos las palabras de su empleo metafísico a su empleo cotidiano. […] Si, por ejemplo, alguien dice que la oración «Esto está aquí» (a la vez que apunta a un objeto que hay delante de sí) tiene sentido para él, entonces podría él preguntarse bajo qué especiales circunstancias se emplea efectivamente esta oración. Es en éstas en las que tiene sentido. ¿De dónde saca nuestro examen su importancia puesto que sólo parece destruir todo lo interesante, es decir, todo lo grande e importante? (Todo edificio en cierto modo; dejando sólo pedazos de piedra y escombros). Pero son sólo castillos en el aire los que destruimos y dejamos libre la base del lenguaje sobre la que se asientan. Historia de la Filosofía 1 COMUNIDAD DE MADRID PRUEBA TIPO 2009-2010 Los resultados de la filosofía son el descubrimiento de algún que otro simple sinsentido y de los chichones que el entendimiento se ha hecho al chocar con los límites del lenguaje. Éstos, los chichones, nos hacen reconocer el valor de ese descubrimiento.» Ludwig WITTGENSTEIN, Investigaciones filosóficas Cuestiones 1. Exponer las ideas y la estructura argumentativa del texto propuesto. 2. Explicar el problema del sentido y la utilidad de la filosofía en Wittgenstein y desarrollar sistemáticamente las principales líneas de su pensamiento. 3. Relacionar el pensamiento de Wittgenstein con su marco histórico, sociocultural y filosófico. 4. Explicar el tratamiento del problema del sentido de la filosofía en un autor o corriente filosófica que no pertenezca a la época contemporánea. Historia de la Filosofía 2 COMUNIDAD DE MADRID SOLUCIÓN PRUEBA TIPO 2009-2010 DE LA PRUEBA AUTOR: TIPO Francisco Ríos Pedraza Opción A Ideas y estructura argumentativa del texto. La tesis fundamental del texto está recogida en el párrafo central y viene a decir que por medio del pacto social se crea la sociedad constituida en un todo indivisible cuya capacidad de acción radica en la voluntad general. Relacionadas con esta tesis central se exponen dos ideas, una previa y otra posterior: 쐌 El contrato social propuesto es justo y beneficioso para quienes lo suscriben. 쐌 Al suscribir el contrato social, el individuo se transforma y emerge la voluntad general. La primera idea se recoge en el párrafo inicial, donde se argumenta la justicia del pacto social en la reciprocidad que debe existir entre los contratantes. En el contrato propuesto, cada individuo se entrega al todo social, se somete a su mandato. A cambio recibe el mismo sometimiento por parte de quienes, con él, forman parte de la sociedad. He ahí la reciprocidad en la que se fundamenta la justicia del pacto. El beneficio que obtienen todos es el incremento de la fuerza que se produce por la suma de voluntades y que aumenta las posibilidades de que alcancen sus objetivos legítimos. En el párrafo final se exponen las consecuencias de la firma del pacto tanto para el individuo como para la sociedad. En el individuo se produce una transformación por la que este deja de ser una persona particular para convertirse en ciudadano, es decir, en miembro íntegro de una comunidad social. Para la sociedad supone su creación: emerge una realidad nueva dotada de unidad, vida propia y voluntad específica para perseguir sus propios fines. El problema del origen de la sociedad en Rousseau. El principal interés del pensamiento filosófico de Rousseau es establecer las bases de un progreso social que conduzca a la potenciación de las cualidades positivas que el ser humano posee por naturaleza. Este interés nace de la preocupación por el hecho de que, a su juicio, el desarrollo actual de la sociedad camina en dirección contraria a la que sería deseable. Una vez establecido el enfoque, hay que determinar el plan de trabajo. Rousseau sigue una estrategia que ya habían utilizado otros antes que él, pero a la que da un sello personal y distintivo. Se trata de formular la hipótesis del estado de naturaleza en el que debía haber vivido el ser humano antes de integrarse en el seno de la sociedad. A partir de la comprensión de ese estado natural del ser humano, se tratará de explicar el origen © Oxford University Press España, S. A. de la sociedad y la función que esta ha de cumplir para mejorar las condiciones de vida del ser humano. La hipótesis de Rousseau sobre el estado de naturaleza es contraria a la que habían concebido otros autores antes que él. Para Hobbes, Spinoza o Locke, el ser humano en estado de naturaleza vive una situación de inseguridad que la constitución de la sociedad viene a resolver. Rousseau, en cambio, concibe al ser humano anterior a su vida en sociedad como un «buen salvaje» que vive en armonía con la naturaleza y conforme a los dictados de su razón y sus sentimientos. Este «buen salvaje» es conducido hacia una vida en sociedad que le obliga a apartarse de sus inclinaciones naturales y que le corrompe y le pervierte. Esta es la situación en la que nos encontramos actualmente. Una vez descrito el estado de cosas actual, a Rousseau se le impone la necesidad de proponer la solución al problema planteado. Esta solución no consiste, como cabría pensar en principio, en una vuelta al estado salvaje. En Rousseau no se da un culto a la barbarie; muy al contrario, él es consciente del carácter irreversible de la transformación experimentada por el ser humano al ingresar en la sociedad y de las limitaciones que conlleva inevitablemente el estado de naturaleza. Su propuesta no consiste en mirar para atrás, sino en promover la constitución de una sociedad nueva en la que se potencien las cualidades positivas del ser humano y se den las condiciones para un auténtico progreso de la humanidad. Estos objetivos se lograrán por medio de la suscripción de todos los miembros de la sociedad de un nuevo pacto social. El pacto social que propone Rousseau presenta unas características singulares que permiten por una parte diferenciarlo claramente de otras propuestas precedentes y, por otra, diseñar un tipo de sociedad que camine en la dirección deseada. A diferencia de la sociedad vigente, que obliga al individuo a renunciar a sus sentimientos y vivir únicamente conforme a los dictados de la razón, Rousseau apuesta por la construcción de una sociedad en la que se respete la integridad humana atendiendo tanto a su lado racional como al emocional. Esta nueva sociedad que surja del pacto social debe, en primer lugar, establecer el bien común como resultado del concierto de los bienes particulares de aquellos que se van a integrar en la sociedad. El establecimiento de este bien común generará el vínculo que mantiene unidos en pos de un objetivo común a todos los miembros de la sociedad. Pero no basta con determinar cuál ha de ser el bien común, Historia de la Filosofía 3 COMUNIDAD DE MADRID PRUEBA TIPO 2009-2010 además es necesario que surja y se mantenga el empeño por alcanzarlo: este es justamente el papel que ha de desempeñar la voluntad general. Rousseau afirma que esta voluntad general emerge como fruto del pacto social propuesto por él. pasado buscando allí el criterio de validez de conocimientos, actitudes y modos de hacer. Con la Ilustración, en cambio, la mirada se orienta hacia el futuro para analizar cualquier propuesta en clave de si contribuye o no al progreso de la humanidad. Al suscribir el pacto, cada individuo se integra plenamente en la sociedad, de tal modo que renuncia por completo a su estado anterior y a las ventajas que pudieran derivarse de él. El pacto social supone una transformación completa del individuo, que pasa de ser una persona particular a un miembro de la sociedad, un ciudadano. Como consecuencia del pacto social, ningún ser humano deberá obedecer a otro ser humano en el seno de la sociedad, sino a las leyes, que son sagradas por ser la expresión de la voluntad general. Rousseau, pese a ser un destacado representante de la Ilustración, se apartó considerablemente del punto de vista mayoritario compartido por sus colegas ilustrados. Rousseau no compartía el ideal de una sociedad ilustrada basada únicamente en el progreso racional. Para él, descuidar la parte emocional del ser humano y volcarse únicamente en su vertiente racional no hace sino agravar los errores cometidos al instituir la vida en sociedad. Relación del pensamiento del autor con su marco histórico, sociocultural y filosófico. A lo largo del siglo XVIII fue creciendo el descontento hacia la organización política basada en el absolutismo y la organización social asociada a esta forma de gobierno, que consagraba la desigualdad entre los miembros de una misma sociedad. Todo ese descontento se articuló en torno a la Ilustración, un movimiento cultural que se extendió por toda Europa y que tiene en Rousseau a uno de sus más destacados representantes. La concentración de poder en torno a la figura del rey y la necesidad que tenía este de contar con el respaldo de la nobleza y el clero condujeron al reforzamiento de una estructura estamental. Por otra parte, el creciente desarrollo económico fruto de la colonización de nuevos territorios, hizo que emergiera con fuerza una burguesía comercial y mercantil. Esta nueva clase social cargaba con el peso económico del Estado y, sin embargo, se veía apartada del ámbito de las decisiones políticas. Este hecho generó descontento y provocó la desestabilización del sistema político y social que condujo a una serie de revoluciones sociales en Inglaterra, América y Francia. En sintonía con este contexto social y político se desarrolla la Ilustración, caracterizada como un movimiento cultural en el que caben destacar las siguientes señas de identidad: 쐌 Confianza en la razón como instrumento revolucionario con el que reflexionar sobre la realidad social y poner en evidencia las injusticias e incongruencias del sistema político y social vigente. 쐌 Afirmación de la tesis según la cual el ser humano posee por naturaleza unos derechos que son iguales para todos y que han de ser respetados por la legislación política de cualquier sociedad que se instituya. 쐌 Cambio de actitud en relación con la temporalidad de los asuntos humanos. Hasta ahora se miraba hacia el © Oxford University Press España, S. A. El problema del origen y fundamento de la sociedad en Platón. Platón, en su diálogo titulado la República, se ocupa extensamente de describir cómo habría de ser una sociedad para que en ella no se puedan cometer injusticias como la de condenar a muerte al hombre más justo de entre sus miembros (en referencia clara a la condena a muerte de Sócrates por parte de los atenienses). La solución platónica apunta hacia la institucionalización de la desigualdad basada en las capacidades de cada uno de los miembros de la sociedad. Platón lamenta que en la asamblea democrática vale tanto la opinión del experto como la del ignorante, y eso es injusto. Lo justo y lo adecuado es que gobiernen aquellos que poseen el conocimiento necesario para gobernar. Para lograr este objetivo Platón diseña una estructura del Estado basada en tres clases sociales: gobernantes, guardianes y productores. Cada clase social atenderá a una de las tres necesidades presentes en toda sociedad humana: gobierno, seguridad y riqueza económica. Una vez establecida la estructura de la sociedad, la dificultad consiste en determinar qué individuos deben desempeñar cada una de las tres funciones y así integrarse en cada una de las tres clases sociales. Para ello, Platón elabora un complejo sistema educativo que forma a los miembros de la sociedad y los selecciona en función de sus capacidades naturales para acceder al tipo de educación que necesitará en el desempeño de las tareas que le serán encomendadas. Así, todos accederán a una formación básica hasta los veinte años. A partir de ahí se hará la selección distinguiendo entre los que deben instruirse en un oficio, los que deben adiestrarse en el manejo de las armas y los que necesitan aprender el arte de gobernar con justicia. La propuesta platónica es muy distinta de la de Rousseau, pero ambos coinciden en aspirar a construir una sociedad más justa basándose en las capacidades naturales de los miembros de la sociedad. Historia de la Filosofía 4 COMUNIDAD DE MADRID PRUEBA TIPO 2009-2010 Opción B Ideas y estructura argumentativa del texto. Este texto de Wittgenstein tiene una estructura expositiva y en ella se encadenan cinco ideas fundamentales: 쐌 A veces la filosofía parece tener un contenido propio cuando trata de emplear ciertas palabras con un significado diferente al que tienen en su uso cotidiano. 쐌 El significado de las palabras es únicamente el que poseen en su uso cotidiano. 쐌 Al negar la existencia de un significado propiamente filosófico de ciertas palabras parece que la filosofía perdiese su importancia. 쐌 La tarea de la filosofía consiste en sacar a la luz los errores que cometemos cuando rebasamos los límites del lenguaje. 쐌 Cuando se presta atención a las consecuencias que algunos de esos errores han tenido, se comprende la verdadera importancia de la filosofía. El problema del sentido y la utilidad de la filosofía en Wittgenstein. Desde los orígenes de la filosofía moderna hasta nuestros días, los filósofos han estado preocupados por el hecho de que determinadas partes del saber avanzan a paso seguro, mientras que la filosofía parece estar atascada y debatiendo siempre los mismos problemas a los que no consigue dar una solución definitiva. La corriente neopositivista a la que pertenece Wittgenstein hizo de este problema su principal preocupación. La conclusión a la que llegó el neopositivismo en su análisis del problema del estancamiento de la filosofía es que no existen problemas específicamente filosóficos. La tarea de la filosofía, según estos filósofos, no debe consistir en resolver problemas filosóficos sino, precisamente, en lo contrario, en contribuir de manera muy especial a la clarificación del lenguaje de modo que los supuestos problemas filosóficos se diluyan. Con cierta frecuencia aparecen pseudo-problemas filosóficos fruto de un uso erróneo del lenguaje. La filosofía ha de poner de manifiesto el carácter puramente aparente de estos problemas, evitando así que nos extraviemos y perdamos tiempo y energías en problemas que en realidad no lo son. En su análisis del lenguaje, los neopositivistas siguieron dos estrategias diferentes que se sucedieron una a la otra, y Wittgenstein fue una figura destacada del neopositivismo en ambos casos. 쐌 La primera de esas estrategias consistió en el intento de elaborar un lenguaje lógicamente perfecto en el que no tuviesen cabida los sinsentidos que han dado lugar a los falsos problemas filosóficos. 쐌 La segunda estrategia se centró en el análisis del lenguaje cotidiano y en las acciones que realizamos por medio de él. © Oxford University Press España, S. A. El intento de construir un lenguaje perfecto se justifica por la necesidad de evitar la polisemia presente en los lenguajes naturales, que es la causa de las confusiones y los errores que hay que evitar. El lenguaje formal que trataron de construir primero Russell y posteriormente Wittgenstein debía cumplir tres requisitos fundamentales: 쐌 Respetar el principio de isomorfismo entre lenguaje y realidad. Esto significa que la estructura del lenguaje que se construya ha de ser idéntica a la estructura de la realidad. 쐌 Sostener una concepción referencialista del significado. Esto quiere decir que el significado de cada término de una oración es aquello a lo que refiere, ya sea un objeto, una propiedad de un objeto o una relación entre objetos. Del mismo modo, el significado de una oración es su verdad o falsedad. Decir de una oración que es verdadera significa afirmar que existe en la realidad un estado de cosas que se corresponden fielmente con lo expresado en la oración. 쐌 Ser un lenguaje extensional, es decir, las oraciones complejas son el resultado de combinar oraciones simples y el valor de verdad de las oraciones complejas está en función del respectivo valor de verdad de las oraciones simples que las integran. Pronto se descubrió que las dificultades que entrañaba un proyecto como el de construir un lenguaje lógicamente perfecto eran de tal calibre que hacían inviable el proyecto. Por este motivo, Wittgenstein abandonó la idea, aunque no así la tesis más general según la cual los supuestos problemas filosóficos no eran más que errores fruto de un mal uso del lenguaje. La solución, por tanto, estaba en el camino ya iniciado de clarificación del lenguaje, aunque había que introducir cambios en la estrategia. El error había consistido en reducir las múltiples funciones del lenguaje a una sola: la función de representar la realidad. Esta es una función muy importante, pero no la única. Existe una enorme variedad de funciones que puede desempeñar el lenguaje y para una mejor comprensión de ellas debemos prestar atención a su uso, más que al significado de las oraciones que empleamos. La estrategia correcta consiste en dirigir la atención al lenguaje cotidiano y estudiar el uso que hacemos del lenguaje en ese contexto. De este modo descubriremos, entre otras cosas, que los pseudo-problemas filosóficos resultan de seleccionar cierto tipo de conceptos y trabajar con ellos al margen del contexto en el que se usan de manera cotidiana. Puesto que el significado de los conceptos nace de su uso y guarda una estrecha relación con él, si los descontextualizamos pierden su significado original y provocan los errores que ha cometido históricamente la filosofía. Historia de la Filosofía 5 COMUNIDAD DE MADRID Si la filosofía quiere curarse de los males que le han aquejado durante siglos, debe limitarse a describir los distintos usos lingüísticos. De este modo podrá contribuir al progreso del conocimiento deshaciendo las confusiones y los equívocos que se producen a causa de las analogías que existen entre expresiones pertenecientes a distintos usos lingüísticos. Relación del pensamiento del autor con su marco histórico, sociocultural y filosófico. A Wittgenstein le tocó vivir en primera persona las dos grandes guerras del siglo XX, llegando a participar activamente en la primera de ellas. Su origen era austríaco; sin embargo, con veintitrés años se trasladó a Cambridge para estudiar con Bertrand Russell. Este es el motivo por lo que se le incluye dentro de la línea anglosajona de pensamiento y se le considera un representante destacado de la escuela filosófica de Oxford-Cambridge. Esta escuela filosófica participó del llamado giro lingüístico que experimentó la filosofía en la primera mitad del siglo XX y que fue llevado a cabo, además de por el neopositivismo anglosajón, por el estructuralismo y por la filosofía hermenéutica. El giro lingüístico significó un nuevo enfoque para la filosofía, que centró el interés en el estudio del lenguaje por considerar que las condiciones a priori del conocimiento humano están dadas en nuestro lenguaje. Dicho de otro modo, los protagonistas de este giro lingüístico sostienen que no se trata de que hablemos porque somos capaces de pensar, sino más bien que pensamos porque tenemos un lenguaje. Como no podía ser de otro modo, la guerra influyó notablemente en la vida y en la obra de Wittgenstein. Dos años después de su llegada a Cambridge estalló el conflicto bélico y Wittgenstein decidió alistarse como voluntario en el ejército austriaco, en el bando enemigo del ejército británico, por lo que perdió todo contacto con sus colegas filósofos. Durante la guerra escribió su famosa obra Tractatus logico-philosophicus en clara sintonía con las tesis defendidas por su maestro Bertrand Russell. Una vez finalizada la guerra, recuperó el contacto con Russell, pero al poco tiempo, en 1920, decidió abandonar su carrera profesional de dedicación a la filosofía, probablemente convencido de que sus tesis sobre la construcción de un lenguaje perfecto le llevaban a un callejón sin salida. Años más tarde retomó sus investigaciones de filosofía y reformuló su posición para emprender un nuevo camino dentro del análisis filosófico. En esta ocasión centró su atención en el uso cotidiano del lenguaje y en las funciones que este desempeña cuando es usado por los hablantes de una lengua. Esta nueva línea de investigación sirvió de inspiración para un buen número de jóvenes filósofos de la época, entre los que se cuentan J. L. Austin y G. Ryle, entre otros. © Oxford University Press España, S. A. PRUEBA TIPO 2009-2010 Dentro de la misma corriente neopositivista en la que incluimos a Wittgenstein hubo otro grupo de pensadores especialmente interesados en establecer un criterio de demarcación que permitiera diferenciar los enunciados científicos (enunciados que producen auténtico conocimiento) de aquellos que no lo son. Este criterio de demarcación adoptó la forma de una teoría sobre el significado de las oraciones científicas. El sentido de la filosofía en Kant. Para Kant, la tarea propia de la filosofía consiste en realizar una crítica de los distintos usos de la razón. Es innegable la importancia de esta facultad humana en la construcción de nuestro conocimiento de la realidad tanto natural como social. Sin embargo, Kant considera que nunca nos hemos preguntado de modo adecuado cómo debemos usar nuestra razón para que produzca conocimiento verdadero. Tampoco hemos llevado a cabo un análisis en profundidad de las posibilidades reales y los límites de nuestra razón. El trabajo de la filosofía consiste, por tanto, en establecer el modo en que debemos usar nuestra razón y los límites de su capacidad de conocimiento, si los tuviera. Esta es una tarea sumamente compleja, puesto que la razón alcanza muy distintos ámbitos y habrá que especificar para cada uno de ellos el uso adecuado que podemos hacer de ella y sus límites de actuación apropiada. Así, Kant subdivide esta crítica de la razón fijando tres grandes objetivos: 쐌 Establecer las posibilidades reales de conocimiento científico de la realidad, así como sus límites, si los hubiera. Este objetivo puede expresarse de una manera sencilla diciendo que consiste en dar respuesta a la pregunta ¿qué puedo conocer? 쐌 Fijar los principios generales que han de regir la conducta moral y determinar en qué medida la razón humana puede y debe intervenir en este proceso. Igualmente podemos formular este objetivo con la pregunta ¿qué debo hacer? 쐌 Señalar los fines que debe perseguir el ser humano por ser acordes con su condición racional. Así resolveremos el interrogante sobre ¿qué me cabe esperar? Según Kant, cuando hayamos dado respuesta a las tres grandes preguntas en las que se expresan los objetivos de la filosofía, habremos respondido también a una cuarta pregunta que las engloba: ¿qué es el hombre? Por tanto, podemos decir que, en última instancia, el sentido y la utilidad de la filosofía para Kant consisten en que el ser humano se aclare consigo mismo, llegando a conocer el funcionamiento y las posibilidades reales de aquello que le hace específicamente humano: su razón. Historia de la Filosofía 6