COMISIÓN DE LEGISLACIÓN Y PUNTOS CONSTITUCIONALES DICTAMEN No. 148 HONORABLE ASAMBLEA: Se recibió en esta Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales, para su estudio, análisis y dictaminación, la INICIATIVA DE REFORMA QUE ADICIONA UN ARTICULO 235 BIS AL CODIGO PENAL PARA EL ESTADO DE BAJA CALIFORNIA, presentada con fecha de 13 de septiembre del año 2005, por el Diputado Ricardo Magaña Mosqueda, integrante del Grupo Parlamentario del Partido Acción Nacional. La Comisión que suscribe, en ejercicio de las facultades que le confieren los artículos 55, 57, 61, 62, 63, 70, 73, 74, 110, 117, 122, 123, 124 y demás relativos de la Ley Orgánica del Poder Legislativo del Estado de Baja California, realiza el presente dictamen con base en los siguientes: A N T E C E D E N T E S: I.- Con fecha de 13 de septiembre del año 2005, el Ciudadano Diputado Ricardo Magaña Mosqueda, presentó ante el Pleno de la Honorable XVIII Legislatura, la iniciativa señalada en el proemio de este escrito. II.- Recibida que fue la iniciativa en comento, el Presidente de la Mesa Directiva, de acuerdo a la facultad conferida por el artículo 50 fracción II inciso f), de la Ley Orgánica del Poder Legislativo del Estado de Baja California, acordó en esa misma fecha, turnar la iniciativa en estudio a la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales. 1 III.- Con fecha 13 de Septiembre del año 2005; la suscrita Comisión, en cumplimiento de lo previsto en el Artículo 62 de la Ley Orgánica anteriormente citada, procedió a la elaboración del presente Dictamen, basándose para ello en el siguiente: ESTUDIO Y ANÁLISIS: I. ASPECTOS GENERALES. a).- DE LA EXPOSICIÓN DE MOTIVOS: El autor de la Iniciativa en estudio argumenta en su exposición de motivos, lo siguiente: “Baja California es un Estado que cuenta con una legislación acorde a los tiempos actuales, por ello, para preservar esta característica los legisladores tenemos la tarea de revisar constantemente el conjunto de leyes que la integran para mantener normas jurídicas que satisfagan las necesidades y demandas de la población. La doctrina reconoce dos aspectos inherentes a toda legislación, el formal y el material; refiriéndonos en esta ocasión al primero relativo a la exigencia de formular clara, inequívoca y exhaustivamente los preceptos contenidos en las leyes. Por ese motivo, me permito exponer un reclamo de la sociedad pero ante todo una necesidad; el tema de los alimentos, comprendiéndose entre estos la comida, el vestido, la habitación y la asistencia en casos de enfermedad; tratándose de menores comprende, además de los gastos necesarios para la educación primaria del alimentista. Y proporcionarle algún, oficio, arte o profesión honestos y adecuados a su sexo y circunstancias personales. En materia de alimentos, el Código Civil establece la obligación de proporcionar alimentos y; el Código Penal para el Estado de Baja California en su artículo 235 consagra el incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar como un delito contra el orden de la familia; imponiendo de seis meses a cuatro años y suspensión o privación de los derechos de familia, en relación con el ofendido, al que no proporcione los recursos indispensables de subsistencia de las personas con las que tenga ese deber legal. 2 Ese delito se sigue por querella del ofendido o de su legítimo representante y, a falta de este, el Ministerio Público procederá de oficio, a reserva que se promueva la designación de un tutor especial. De igual forma señala que no se impondrá pena alguna o se dejara de aplicar la impuesta, cuando el obligado a proporcionar los medios indispensables de subsistencia pague todas las cantidades que hubiera dejado de ministrar por el concepto de alimentos o se someta al régimen de pago que el juez o la autoridad ejecutora en su caso, determinen, garantizando el pago de las cantidades que en el futuro le corresponda satisfacer. De lo anterior se advierte que nuestra legislación vigente contempla los casos de incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar, es decir, el incumplimiento de proporcionar alimentos; sin embargo, no distingue los casos donde se incumple esa obligación por voluntad propia, de aquellos donde se incumple por circunstancias ajenas al deudor alimentista; un ejemplo de lo anterior se presenta en el primero de los casos cuando una persona simplemente se niega a proporcionar los alimentos y el segundo, cuando un deudor alimentista que tiene celebrado un convenio en virtud de un juicio de divorcio o de pensión alimenticia ha dado el debido y exacto cumplimiento a su obligación y que por quedarse sin empleo o por causas de fuerza mayor se ve en la necesidad de fallar oportunamente en ese deber, y que por esa causa se encuadra en el delito previsto en el articulo 235 del Código Penal del Estado de Baja California. Al respecto, la Suprema Corte de Justicia de la Nación emitió una jurisprudencia en la que se considera en forma primordial la manifestación de la voluntad del deudor alimentario de cumplir con la obligación contraída con el acreedor alimentario derivada de la celebración de un convenio de alimentos en el que se haya estipulado el monto de la pensión y el aseguramiento de la misma; toda vez que considera que en estos casos, el atraso del deudor alimentario en el pago de algunas de las pensiones obligadas no significa que por esa razón se tipifique el delito de incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar. Asimismo, deja al acreedor alimentista expedito su derecho para demandar el debido cumplimiento del mismo en la vía civil. Otra razón importante para actualizar nuestra legislación en este tema es que actualmente los alimentos deben asegurarse para la subsistencia de las personas que va a recibirlos; por ese motivo cuando existe un convenio de alimentos ya sea por un juicio de divorcio o de pensión alimenticia, lo más seguro es la ejecución del referido convenio en la vía civil; toda vez que en caso contrario, tramitar un juicio penal para el acreedor alimentista significa iniciar un nuevo procedimiento que comprende desde la presentación de la querella, la integración del acta de averiguación previa, consignar dicha averiguación al juzgado correspondiente con pedimento de orden de aprehensión, resolver si se gira o no la orden de aprehensión y una vez girada hacerla efectiva, una vez realizado lo anterior iniciar el proceso penal hasta concluirlo con sentencia, misma 3 que puede ser recurrida por las partes y, a su vez promover el juicio de amparo, lo que representaría para el acreedor alimentario en tiempo de uno a cuatro años a más tiempo, pudiendo en un momento concluir con una sentencia absolutoria, lo cual no ocurre al momento de promoverse la ejecución del convenio en el que una vez realizada la cuantificación de las pensiones atrasadas, de manera inmediata se ordena el requerimiento de pago y embargo de bienes propiedad del deudor. Novena Época Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta Tomo: V, Abril de 1997 Tesis: XXII. J/13 Página: 152 Materia: Penal. IMCUMPLIMIENTO DE LAS OBLIGACIONES DE ASISTENCIA FAMILIAR, CASO EN QUE NO SE TIPIFICA EL DELITO DE. Si el acreedor alimentario, en la vía civil logró mediante convenio celebrado con el deudor alimentista fijar el monto de las pensiones y asegurarlas, o bien que se le garantizara el pago de las mismas, la circunstancia de que el deudor alimentista se haya atrasado en el pago de algunas de las aludidas pensiones a que se obligó, no significa que se tipifique el delito de incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar, puesto que con el convenio de referencia, por un lado se pone de manifiesto la voluntad del citado deudor de cumplir con la obligación contraída y, por otro lado, el acreedor tiene expedito su derecho para demandar su cumplimiento en la vía civil. TRIBUNAL COLEGIADO DEL VIGÉSIMO SEGUNDO CIRCUITO. Amparo directo 324/96. Amadeo Zubieta Méndez. 30 de mayo de 1996. Unanimidad de votos. Ponente: Augusto Benito Hernández Torres. Secretario: Ramiro Rodríguez Pérez. Amparo en revisión 219/96. Gustavo Javier Álvarez Pizarro. 4 de julio de 1996. Unanimidad de votos. Ponente: Hugo Sahuer Hernández. Secretaria: Alma Rosa Díaz Mora. Amparo directo 424/96. José Guadalupe Ramírez Rodríguez. 11 de julio de 1996. Unanimidad de votos. Ponente: Hugo Sahuer Hernández. Secretaria: Alma Rosa Díaz Mora. Amparo en revisión 382/96. Sergio Arturo Cobos Ovando. 17 de octubre de 1996. Unanimidad de votos. Ponente: Hugo Sahuer Hernández. Secretario: Mauricio Torres Martínez. Amparo en revisión 571/96. Manuel Vallejo Soto. 20 de febrero de 1997. Unanimidad de votos. Ponente: Hugo Sahuer Hernández. Secretaria: Alma Rosa Díaz Mora. Por lo antes expuesto, estimo que esta iniciativa redunda en beneficio de la población de Baja California, particularmente de aquellos que en su carácter de deudores alimenticios tienen celebrado un convenio de alimentos ya sea por un juicio de divorcio o de pensión alimenticia, toda vez que de llegar a tener un atraso en el cumplimiento de su obligación no se tipificaría el tipo penal del artículo 235 del Código 4 Penal Sustantivo en el Estado relativo al delito de incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar. Finalmente, considero que con esta propuesta el acreedor alimentista tiene expedito su derecho para demandar el cumplimiento de un convenio en virtud fe un juicio de divorcio o de pensión alimenticia en la vía civil, representando en su beneficio menor tiempo que un proceso penal. Nuestra pretensión legislativa se propone como una adición de un artículo 235 bis del mismo Código, atendiendo las reglas de técnica Legislativa que recomiendan establecer solo una hipótesis normativa por artículo, como lo establece Carlos Sempé Minivielle en su obra “Técnica Legislativa y Desregulación”, señalando al respeto que “Para efecto de claridad y fácil comprensión, es recomendable no poner más de una regla por artículo. Esa fue la norma que se siguió en los Código Civil para el Distrito Federal en materia federal y de comercio a amenos en su versión original, ya que a través de la múltiples reformas que han sufrido, se ha ampli ado el texto de muchos artículos”. b).- DE LA PRETENSIÓN LEGISLATIVA: El autor de la Iniciativa propone crear un artículo 235 Bis en el Código Penal del Estado, para efecto de establecer en nuestra Legislación Vigente, que no procederá la vía penal y por tanto, no se tipifica el delito de incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar, en el simple hecho de atrasarse el deudor alimenticio en el pago de una o varias de las pensiones, cuando exista convenio ya sea por un juicio de divorcio o de pensión alimenticia. c).- DEL MARCO JURÍDICO. La Constitución Política del Estado de Baja California es la norma primaria por cuyo conducto se nutren de validez los actos que realizan los funcionarios y representantes populares de esta Entidad Federativa. En este tenor, el Artículo Décimo Tercero del citado ordenamiento, dispone que el ejercicio del Poder Legislativo se deposita en una asamblea de representantes del pueblo, al cual se denomina Congreso del Estado. 5 Por otra parte, la Constitución General de la República previene la distribución competencial aplicable a que deben ceñirse los distintos órganos de gobierno, y en el caso particular, es el Artículo 124 de la citada Carta Magna donde se establece que las facultades que no están expresamente co ncedidas a la Federación, se encuentran reservadas a los Estados; por lo que toda iniciativa de reforma de Ley debe circunscribirse a las materias propias sobre las cuales goza de competencia la Entidad Federativa. En el caso particular se propone la reforma al Código Penal del Estado de Baja California, por tal motivo, es permisible entrar al estudio de la iniciativa, toda vez que la misma se plantea a un cuerpo normativo emanado de este Poder Soberano y aplicable en el Estado de Baja California. Adicionalmente, se determina que la propuesta, en principio, es formalmente congruente con el régimen de distribución de competencias entre Estados y Federación establecido en la Carta Magna y particularmente con el Artículo 133 que establece el principio de Supremacía Constitucional; por lo tanto no existe obstáculo alguno Constitucional ni jurídico para incursionar al estudio de la iniciativa de mérito. d) RÉGIMEN LEGAL: Para efectos de determinar la viabilidad o inviabilidad de la Iniciativa en cuestión, procederemos a estudiar y analizar los ordenamientos legales aplicables al caso, mismos que se transcriben para su mayor comprensión: CONSTITUCIÓN POLÍTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS: ARTÍCULO 116.- . . . 6 Los Poderes de los Estados se organizarán conforme a la Constitución de cada uno de ellos, con sujeción a las siguientes normas: ... CONSTITUCIÓN POLÍTICA DEL ESTADO LIBRE Y SOBERANO DE BAJA CALIFORNIA: ARTÍCULO 27.- Son facultades del Congreso: I.- Legislar sobre todos los ramos que sean de la competencia del Estado y reformar, abrogar y derogar las leyes y decretos que expidieren, así como participar en las reformas a esta Constitución, observando para el caso los requisitos establecidos; II a la XXXV.-... ARTICULO 28.- La iniciativa de las leyes y decretos corresponde: I.- A los diputados; II a la VI... LEY ORGÁNICA DEL PODER LEGISLATIVO DEL ESTADO DE BAJA CALIFORNIA: ARTÍCULO 61.- Las Comisiones de Dictamen Legislativo, serán las siguientes: I.- De Legislación y Puntos Constitucionales. II a la III… ARTÍCULO 63.- Para el cumplimiento de las atribuciones señaladas en el artículo que antecede la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales solicitará a la Dirección de Asuntos Jurídicos Legislativos el estudio y análisis respectivo. 7 ARTÍCULO 116.- Las Iniciativas de Ley o Decreto deberán sujetarse a los trámites siguientes: I.- Dictamen de Comisiones; II.- Discusión; y, III.- Votación. ARTÍCULO 117.- Toda iniciativa deberá presentarse al Presidente del Congreso por escrito y firmada, con su exposición de motivos en la cual exponga su autor o autores las consideraciones jurídicas, políticas, sociales o económicas que justifican, explican, motivan y dan procedencia a la proposición de creación, reforma, derogación o abrogación de una Ley, artículo de la misma o decreto. ... ARTÍCULO 118.- Todas las iniciativas se turnarán por el Presidente del Congreso a las Comisiones de Dictamen Legislativo que corresponda conforme a la presente Ley; una vez estudiadas, analizadas y discutidas formularán el dictamen correspondiente, sujetándolo a votación en los términos del artículo 149 de esta Ley. B).- ASPECTOS PARTICULARES: 1).- ANÁLISIS JURÍDICO COMPARATIVO.LEGISLACIÓN VIGENTE. INICIATIVA DEL DIPUTADO RICARDO MAGAÑA MOSQUEDA Código Penal para el Estado de Baja California. Código Penal para el Estado de Baja California. ARTICULO 235.- Tipo y punibilidad.- Al que no proporcione los recursos indispensables de subsistencia de las personas con las que tenga ese deber legal, se le impondrá prisión de tres meses a cuatro años y suspensión o privación de los derechos de familia, en relación con la víctima o el ofendido. Los concubinos quedan comprendidos en las disposiciones de este párrafo. El delito se perseguirá por querella de la víctima o el ofendido o de su legítimo representante 8 y, a falta de éste, el Ministerio Público procederá de oficio, a reserva de que se promueva la designación de un tutor especial. No se impondrá pena alguna o se dejará de aplicar la impuesta, cuando el obligado a proporcionar los medios indispensables de subsistencia sea la primera vez que incurre en este delito y pague en el momento en que se le requiera todas las cantidades que hubiere dejado de ministrar por el concepto de alimentos o se someta al régimen de pago que el Juez o la autoridad ejecutora en su caso, determinen, garantizando el pago de las cantidades que en el futuro le corresponda satisfacer. ARTICULO 235 Bis.- No procederá la vía penal cuando celebrado un convenio de alimentos entre el acreedor alimentista y el deudor alimentista ya sea por casos de divorcio o por juicio de pensión alimenticia, conste la obligación y aceptación del deudor alimentista para proporcionar los alimentos quedando expedito el derecho al beneficiario de los alimentos para promover ante el juzgado Civil o Familiar la Ejecución del convenio de alimentos celebrado. ARTICULO 236.- Insolvencia dolosa para cumplir las obligaciones alimentarias.- Al que dolosamente se coloque en estado de insolvencia, con el objeto de eludir el cumplimiento de las obligaciones alimentarias que la Ley determina, se le impondrá prisión de seis meses a cuatro años. El juez resolverá sobre la aplicación del producto del trabajo que realice el agente, a la satisfacción de las obligaciones alimentarias de éste. ANÁLISIS PARTICULAR DE LA INICIATIVA a) DELITO DE ABANDONO DE PERSONAS EN EL CÓDIGO PENAL FEDERAL: 9 El delito contemplado en el Código Penal del Estado como “de incumplimiento de obligaciones de asistencia familiar”, en materia federal, se encuentra consagrado en el Título Décimo Noveno “Delitos contra la vida y la Integridad Personal, Capítulo VII, “Del abandono de personas”, en particular en los artículos 336, 336 Bis, 337 y 338. Este delito se encuentra previsto ya que el legislador federal, consideró que la familia constituye en nuestro sistema el núcleo más importante de la sociedad, por lo que debe ser objeto de tutela, cuidado y respeto tanto en su conjunto, como para cada uno de sus integrantes; en forma especial, los hijos menores que son los que, sin duda, por su naturaleza indefensa, requieren mayor protección del Estado y ha contemplado el supuesto de abandono de menores, de hijos y de cónyuge. En el artículo 336, se prevé una pena de 1 mes a 5 años, o de 180 a 360 días de multa, dando una mayor congruencia al sentido de protección, además de la privación de los derechos de familia, en atención a que los abandonados se encuentran sin recursos de subvenir a sus necesidades, estableciendo la reparación de daño, consistiendo esto en el pago de cantidades no suministradas oportunamente. Le confieren un triple carácter para que se sancione corporal, moral y económicamente consolidando aun más el ámbito de protección de la familia. En cuanto al artículo 336 Bis, se encuentra otro comportamiento omisivo, que refiere a las actitudes de dolo específico al colocarse en estado de insolvencia, para eludir obligaciones alimentarias. La pena es de prisión de 6 meses a 3 años, y el Juez debe resolver la aplicación del producto del trabajo que realice el agente a la satisfacción de las obligaciones alimentarias de éste. Por otra parte en cuanto al artículo 337, contiene estas modalidades: a)Establece que el abandono de hijos se perseguirá de oficio, eliminando con ello las limitaciones que la querella necesaria representa. b)Establece que cuando proceda, el Ministerio Público promoverá la designación de un tutor especial que represente al sujeto pasivo del delito ante el juez de la instrucción. 10 c) En el supuesto de abandono de hijos se declarará extinguida la acción penal, previa garantía de audiencia cuando el procesado cubra los alimentos vencidos y otorgue la garantía suficiente que el Juez estime para el sostenimiento, y por otra parte, mantiene la querella para la persecución del delito cuando la parte agraviada sea la cónyuge. Por lo que en dichas reformas independientemente de agravar la pena, tienden a la reparación económica del daño causado y garantizan la sucesiva manutención. En consecuencia, al agravar la sanción, previene la realización de delito. En cuanto al artículo 338, establece que para que el perdón concedido por el cónyuge ofendido pueda producir la libertad del acusado, este deberá pagar todas las cantidades que hubiera dejado de ministrar por concepto de alimentos y dar fianza a otra caución que en lo sucesivo pagará todas las cantidades que corresponda. De esta forma, la ratio de este tipo penal descansa precisamente en la existencia de conductas cuya realización presupone un peligro abstracto para la vida o la integridad de algunas personas, debido bien a las circunstancias fisiológicas o condiciones patológicas en que se hallan, bien al lugar que ocupen en la esfera familiar, por lo que el abandono debe interpretarse en la omisión de cuidado que coloca al sujeto pasivo en una situación de desamparo material que implique la privación, aunque sea momentánea de los cuidados que le sean debidos, con riesgo para su integridad personal. b) EN EL CÓDIGO PENAL DEL ESTADO DE BAJA CALIFORNIA: Nuestro Código Penal Local, localiza a este delito en el Titulo Primero, Delitos Contra el orden de la familia, Capítulo I, Incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar, la pretensión se consagra en dos artículos y consiste en sancionar la inactividad adoptada por quien 11 debe actuar, ante situaciones o circunstancias bajo las cuales otro ser humano se encuentra o ha sido colocado; misma que lo tiene sometido a una posición de peligro con factibilidad de afectación a su integridad física. El auténtico fin establecido en la hipótesis a estudio, denota para el pasivo, una situación de desamparo material, que implica la privación, aunque sea momentánea de los cuidados que le sean debidos, con riesgo para su integridad personal. La mayoría de los doctrinarios sostiene que este delito no admite tentativa o frustración, la sola conducta omisa lo integra. Primordialmente bajo este comportamiento omisivo, se encuentran las siguientes hipótesis: a) Al que no proporcione los recursos indispensables de subsistencia de las personas con las que tenga ese deber legal. b) Al que dolosamente se coloque en estado de insolvencia, con el objeto de eludir el cumplimiento de las obligaciones alimentarias que la Ley determina. El Código Penal para el Estado, previene una eximente de responsabilidad, que puede operar en dos supuestos: a)Cuando el obligado por incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar paga todas las cantidades que hubiere dejado de ministrar por concepto de alimentos; y b) Cuando el infractor se someta al régimen de pago que el órgano jurisdiccional determine y además garantice la amortización de las cantidades que en el futuro le corresponda satisfacer. 12 Estos casos de excepción, derivan en ambas hipótesis en el hecho de que al quedar cubiertos los elementos a que se refiere cualquiera de ellas, el artículo en comento dispone la no aplicación de sanción alguna lo que se traduce en una excusa absolutoria. Tesis que es consagrada incluso por la Suprema Corte de Justicia de la Nación. En este marco jurídico, el Legislador pretende contemplar un artículo 235 Bis en el Código Penal del Estado. Lo anterior, debido a que advierte que en nuestra Ley Sustantiva Penal vigente, si bien, se contemplan los casos de incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar, esto es, el incumplimiento de proporcionar alimentos; no se distinguen los casos donde se incumple esa obligación por voluntad propia, de aquellos donde se incumple por circunstancias ajenas al deudor alimentista. Por lo que señala que un ejemplo de lo anterior, se presenta en el primero de los casos cuando una persona simplemente se niega a proporcionar los alimentos y el segundo, cuando un deudor alimentista que tiene celebrado un convenio en virtud de un juicio de divorcio o de pensión alimenticia ha dado el debido y exacto cumplimiento a su obligación y que por quedarse sin empleo o por causas de fuerza mayor se ve en la necesidad de fallar oportunamente en ese deber, y que por esa causa se encuadra en el delito previsto en el artículo 235 del Código Penal del Estado de Baja California. c)LEGISLACIÓN VIGENTE EN MATERIA DE OBLIGACIONES ALIMENTARIAS EN EL MARCO DE LA FAMILIA PARA EL CASO DE MENORES. En el tema de alimentos, primero debemos recordar que existe disposición constitucional, es el caso del artículo 4o. de la Constitución, que señala el deber del Estado para proteger a la familia a través de la ley: "...Ésta protegerá la organización y desarrollo de la familia...".De igual modo, el mismo artículo establece obligaciones que son derechos respecto de los hijos, para los padres o quienes ejerzan la patria potestad o tutela sobre menores al señalar que : "Es deber de los padres preservar el derecho de los menores a la satisfacción de sus necesidades y a 13 la salud física y mental. La ley determinará los apoyos a la protección de los menores, a cargo de las instituciones públicas". En los artículos 925 y 926 del Código de Procedimientos Civiles del Estado, nos dicen que todas las controversias del orden familiar se consideran de orden público y que el juez de lo familiar podrá intervenir de oficio en ellos, especialmente tratándose de aquellos en que se vean afectados los intereses, la situación de los menores o los alimentos. La doctrina ha definido a los alimentos como el derecho que, en este caso concreto, tiene el menor para obtener de sus ascendientes u otros parientes obligados, conforme a la ley, aquello que es indispensable no sólo para sobrevivir sino para desarrollarse y vivir con dignidad y calidad de vida. Puede definirse el derecho de alimentos como aquel que tiene todo individuo para obtener todo aquello que le es necesario para vivir... plenamente. Así, pues, no es el derecho alimentario la posibilidad que tiene una persona para percibir alimentos propiamente dichos, significa mucho más; incluye lo necesario para estar bien nutrido, vestirse, tener un techo, recibir educación y asistencia médica. El artículo 305 del Código Civil señala limitativamente aquellas prestaciones que constituyen los alimentos en materia familiar de la siguiente forma: "Los alimentos comprenden la comida, el vestido, la habitación y la asistencia en caso de enfermedad. Respecto de los menores, los alimentos comprenden además, los gastos necesarios para la educación primaria del alimentista, y para proporcionarle algún oficio, arte o profesión honestos y adecuados a su sexo y circunstancias personales". Los artículos 298 al 320 del Código Civil regulan el derecho y la obligación alimentaria, de tal modo que se establecen las reglas para la obtención y reclamo de la obligación alimentaria. 14 Este Código de Procedimientos Civiles del Estado , regula dentro de las controversias del orden familiar las relativas a la obtención de los alimentos en los artículos 925 a 942, en el que fija las reglas de, entre otros, los casos de demanda de alimentos. d) CARACTERÍSTICAS GENERALES DE LA FIGURA DE LOS ALIMENTOS. El Código Civil reconoce y regula tanto el derecho como la obligación que tienen los miembros de la familia de proporcionarse alimentos, con base en principios tales como los de proteger a la institución de la familia y los valores sobre los cuales descansa como son la unidad, la solidaridad y la asistencia, que nacen, en este caso, de la filiación y del parentesco. De conformidad con el artículo 925 Código de Procedimientos Civiles los asuntos relativos a alimentos, por ser inherentes a la familia, son de orden público y el juez podrá intervenir en ellos de oficio. La obligación es recíproca para cualquiera de los sujetos contemplados en la norma para este caso concreto, como lo señala el artículo 301 del Código Civil del Estado. Existe la posibilidad de garantizar el aseguramiento de los alimentos, que se encuentra regulado por los artículos 312 a 320 del Código Civil del Estado, éste se podrá solicitar una vez interpuesta la demanda de alimentos. Los alimentos deben ser proporcionales a las posibilidades del que debe darlos y a las necesidades del que debe recibirlos. En el Distrito Federal, la cuantía de éstos será determinada por convenio o por sentencia y deberán tener un incremento automático mínimo equivalente al aumento porcentual del salario mínimo diario vigente en el Distrito Federal, salvo que quien debe dar los alimentos demuestre que sus ingresos no aumentaron en igual proporción, caso en el cual el aumento en la cuantía de los alimentos se hará conforme al aumento real comprobado que hubiera habido en los ingresos del deudor alimentario. Si fueran varios los que deben pagar los alimentos, el juez determinará la proporción que corresponde aportar a cada uno tomando como base el haber o posibilidades de cada uno de los deudores alimentarios. En caso de que sólo uno 15 de los deudores tuviera posibilidades de pagar los alimentos, sobre éste recaerá toda la obligación, asimismo si sólo algunos pudieran cubrir la deuda alimentaria, el juez podrá repartir el importe de los mismos entre ellos. Por lo que hace a la proporcionalidad de los alimentos, existe jurisprudencia que señala: Los Convenios y las sentencias relacionados con la ministración de alimentos no tienen validez invariable en el ámbito temporal, toda vez que por naturaleza de los alimentos deben ajustarse a las diversas circunstancias que se vayan presentando, entre ellas los cambios que sufra la posibilidad del que debe de darlos y la necesidad del que debe recibirlos, a fin de acatar lo dispuesto por el artículo 323 del Código Civil para el Estado de Tamaulipas, pudiendo así presentarse situaciones en que nazca o cese la obligación de dar alimentos, o bien debe aumentarse o disminuirse el monto de lo mismo. Se considera la posibilidad de la divisibilidad de la deuda alimentaria entre todos aquellos que resultaren obligados para cada caso concreto conforme con la norma, siempre que estén en posibilidad económica de asumir la deuda y de acuerdo, por supuesto, con sus posibilidades, de lo que deberá comprobar el juez de lo familiar, en caso de que se optara por esta opción. El derecho y la obligación de recibir y dar los alimentos se da entre sujetos perfectamente determinados por la ley, los cuales para ejercitar el reclamo de este derecho o el cumplimiento de la obligación deben tener las características de acreedor o deudor alimentario establecidas por la legislación civil; por lo tanto, los alimentos son personalísimos. La obligación alimentaria no es negociable en lo s términos del artículo 318 de este ordenamiento, es decir que no puede ser materia de transacción. Como se desprende de los artículos 300, 301 y 302 del Código Civil del Estado, los padres están obligados con los hijos, y a falta o imposibilidad de éstos tienen la obligación los demás ascendientes más próximos en grado (como por ejemplo los abuelos o los bisabuelos) tanto por la línea paterna como por la materna. Cuando los ascendientes no estuvieran en 16 posibilidad de proporcionar alimentos, entonces la obligación recaerá sobre los hermanos de padre y madre y a falta de alguno de éstos, en los que fueren de madre o en los que fueren de padre en el caso concreto. Por último, a falta de todos éstos, la obligación recae sobre los parientes colaterales hasta el cuarto grado (hermanos, primos, tíos) cuando se trate de menores de edad hasta que cumplan la mayoría de edad. En el caso de la adopción simple, el adoptante tiene obligación de proporcionar los alimentos de igual forma que la ley lo establece para padres e hijos, y en el caso de la adopción plena, tanto el adoptante como sus parientes tiene obligación de dar alimentos al menor adoptado. Cuando el que proporciona los alimentos no se encontrare presente para pagarlos o encontrándose se negara a proporcionarlos a los miembros de su familia, cuando así correspondiera con arreglo a la ley, se hará responsable de las deudas que éstos contraigan para cubrir sus necesidades, pero sólo en la cuantía estrictamente necesaria para ese objeto y siempre que no se trate de gastos de lujo. La deuda alimentaria será exigible a partir del momento en que nace la obligación por las razones ya expuestas o cuando surge el estado de necesidad; el importe de los alimentos debiera ser proporcionado por el simple acuerdo entre las partes; sin embargo, en muchas ocasiones para que el deudor alimentario los reciba se hace necesario requerirlos por la vía judicial, es decir, mediante una determinación del juez de lo familiar e incluso mediante la retención del importe de los alimentos hecha directamente de la nómina o sueldo del deudor alimentario por órdenes del mismo juez. El derecho a recibir alimentos no es renunciable ni puede ser objeto de transacción alguna. El deber de proporcionar alimentos termina cuando el que tiene la obligación no tiene medios para cubrir el importe de los mismos, cuando quien debe recibir los alimentos deja de necesitarlos, cuando quien debe recibir los alimentos cometa actos de injuria, faltas o daños graves contra el que debe proporcionarlos, cuando la necesidad de los alimentos provenga de las conductas viciosas o de la falta de aplicación al trabajo de quien deba recibirlos, pudiéndolo hacer; 17 en éstos dos últimos casos, la causal termina cuando tales conductas desaparezcan, y finalmente cuando quien debe recibir los alimentos abandone la casa de la persona que se los provee sin consentimiento y por causa injustificable. e)MEDIOS PARA SOLICITAR EL CUMPLIMIENTO DE LA OBLIGACIÓN ALIMENTARIA 1. Los convenios de acuerdo con el Código Civil del Estado. Cuando se trata de casos de divorcio no contencioso, existe la obligación de presentar junto con la demanda de divorcio un convenio en el que se estipulen las condiciones en que se ejercerán los derechos y se cumplirán las obligaciones relativos a los hijos. En el convenio se acordará voluntariamente por las partes, en este caso los ascendientes, sobre el cumplimiento de la obligación alimentaria y la forma en que se cubrirá y garantizará la misma, como se desprende del contenido del artículo 270 del Código Civil del Estado. Artículo 270. - Los cónyuges que se encuentren en el caso del último párrafo del artículo anterior, están obligados a presentar al juzgado un convenio en que se fijen los siguientes puntos: I. ... II. El modo de subvenir a las necesidades de los hijos, tanto durante el procedimiento como después de ejecutoriado el divorcio. III. ... IV. ... V. ... 18 De cualquier forma, mientras se declara el divorcio, el juez decretará las medidas que juzgue necesarias para garantizar la subsistencia de los menores hijos, con respecto de los cuales existe la obligación de dar alimentos. La jurisprudencia en materia de convenios relativos a alimentos señala que en caso de que exista un conflicto respecto de la cantidad pactada por alimentos, su actualización deberá estarse al siguiente criterio: Si existe un Convenio para proporcionar alimentos, a él debe estarse, y si se considera que la cantidad pactada no basta para cubrir los alimentos de los menores, debe solicitarse un aumento acreditando previamente la insuficiencia de la cantidad estipulada, y, naturalmente, probando también que el demandado tiene posibilidades económicas; pero si se sostiene que el demandado no proporciona alimentos y este demuestra lo contrario y acepta seguir pagando la cantidad pactada, la autoridad responsable actúa correctamente al conformar la sentencia de primera instancia que condenó al demandado únicamente a pagar la cantidad pactada. 2. Procedimiento contencioso El procedimiento establecido por la legislación se encuentra contenido en el Título Decimosexto, del Código de Procedimientos Civiles para el Estado denominado De las controversias del orden familiar, y de conformidad con el artículo 925 del mismo código la autoridad competente para conocer de estos casos es el juez de lo familiar. Las disposiciones del título que tratamos nos muestran una serie de reglas conforme a las cuales habrá de llevarse a cabo el procedimiento de alimentos. El artículo 929 señala que no se requiere de formalidad alguna para la tramitación de la demanda de alimentos ante el juez de lo familiar. El artículo 930 establece que la parte interesada podrá acudir al juez por escrito o en forma personal. El mismo artículo señala para el caso específico de los alimentos que: "Tratándose de alimentos, ya sean provisionales o los que se deban por... disposición de la ley, el 19 juez fijará a petición del acreedor, sin audiencia del deudor, y mediante información que estime necesaria, una pensión alimenticia provisional, mientras se resuelve el juicio en definitiva. En todos y cada uno de estos casos la autoridad encargada de conocer es la judicial, esto es, concretamente el juez de lo familiar, a quien tocará resolver de acuerdo con el derecho y en el mejor interés de la familia, como institución, y de los integrantes de la misma en lo individual, ya que se considera que todos los problemas que se refieran a la familia, incluyendo los relativos a los alimentos, son de orden público. En el mismo sentido se le otorgan facultades al juez, sobre todo cuando se trate de menores, para intervenir de oficio en los casos relativos a los alimentos, pero siempre con la obligación de determinar las medidas precautorias que aseguren y preserven, en este caso, los derechos de los menores. La conciliación es un elemento importante de la intervención del juez en este tipo de conflictos; en caso de que las partes llegaran a un acuerdo sobre los alimentos, éste deberá quedar establecido mediante un convenio, como ya hemos visto en el presente trabajo. Ahora bien, si no se llegó a un arreglo mediante la conciliación, una vez que ha sido presentada la demanda, el juez procederá a notificar a la contraparte, la que podrá contestar lo que a su derecho convenga, para ello contará con un término de nueve días a partir de haber recibido la notificación de la demanda. En el caso de los alimentos, el juez podrá a petición del acreedor alimentario, y tomando en consideración la información que éste le presente, fijar los alimentos provisionalmente mientras se resuelve el juicio. En la audiencia que resuelva la controversia sobre los alimentos, las partes deberán aportar todas las pruebas que procedan. Dicha audiencia podrá llevarse a cabo con o sin la presencia de las partes y deberá tener verificativo dentro de los quince días siguientes al auto que ordene el traslado. El Código de Procedimientos Civiles del Estado, establece los 20 medios de prueba que se pueden hacer valer en este tipo de juicios, que serán todos aquellos que establece el propio Código, excepto aquellos que sean contrarios a la ley, las que deberán ser ofrecidas y desahogadas en una audiencia establecida para tales fines. El Código de Procedimientos Civiles para el Estado, nos señalan que para que el juez pueda resolver en justicia sobre la demanda de alimentos, deberá comprobar que los hechos presentados y argumentados son ciertos; para ello deberá evaluarlos personalmente y con el auxilio de los especialistas y/o instituciones especializadas que considere pertinentes o que establezca la ley. La valoración de los hechos, las pruebas y los informes tendrá que hacerse en su conjunto atendiendo a las reglas de la lógica y de la experiencia, señalando en la sentencia los fundamentos de la valoración jurídica que llevaron a esa resolución. De esta forma, podemos señalar que la intención del legislador de que no proceda la vía penal, cuando celebrado el convenio de alimentos entre acreedor y deudor alimentista, conste la obligación y aceptación de este último para proporcionarlos, se considera procedente toda vez que del análisis realizado no se encontró aspecto técnico en contrario que impide dicha propuesta, sobre todo si se pretende dejar el expedito el derecho al beneficiario de los alimentos el promover ante el Juzgador la ejecución del convenio. Por otra parte, es necesario señalar que este Criterio se encuentra robustecido con Tesis de la Suprema Corte de Justicia, que establece que cuando el deudor alimentista deja de suministrar el porcentaje que se le fijo por concepto de pensión alimenticia definitiva no puede originar que legalmente se tipifique el delito de incumplimiento de las obligaciones familiares, pues si se promovió juicio especial de alimentos para obtener el pago de los mismos y existe sentencia sobre el particular, tiene expedita la vía civil para reclamar el cumplimiento de dicha resolución que decreto el pago de la pensión, por lo que si no ha agotado dichos medios, la vía penal es improcedente. Tesis que a continuación nos permitimos transcribir: Novena Época Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta Tomo: VII, Mayo de 1998 Tesis: XXI.1o.45 P Página: 1024 Materia: Penal 21 INCUMPLIMIENTO DE LAS OBLIGACIONES FAMILIARES, DELITO DE. NO SE CONFIGURA SI EXISTE RESOLUCIÓN CONDENATORIA EN LA VÍA CIVIL SOBRE LAS. La circunstancia de que el deudor alimentista deje de suministrar el porcentaje que se le fijó por concepto de pensión alimenticia definitiva no puede originar que legalmente se tipifique el delito de incumplimiento de las obligaciones familiares, pues si la querellante promovió juicio especial de alimentos para obtener el pago de los mismos y existe sentencia sobre el particular, tiene expedita la vía civil para reclamar el cumplimiento de dicha resolución que decretó el pago de la pensión en cuestión y, por ende, si no ha agotado esos medios, la vía penal es improcedente. PRIMER TRIBUNAL COLEGIADO DEL VIGÉSIMO PRIMER CIRCUITO. Amparo en revisión 196/97. Francisco Antonio Gómez Ortiz. 28 de mayo de 1997. Unanimidad de votos. Ponente: José Sánchez Moyaho. Secretaria: Casimira de la Cruz Juárez. Por otra parte, se justifica la reforma ya que las razones que dan origen a los diversos proyectos de reformas nacen en virtud de la ineficacia o insuficiencia jurídica de una regulación deben adaptarse a la evolución y cambios que experimentan las ideas políticas directrices y a las variaciones continuadas del ambiente social. Por ende, las normas y las fórmulas jurídicas tienen que ser dinámicas y hallarse en reelaboración permanente, porque la sociedad y sus concepciones políticas tienen movilidad. Por lo que se considera pertinente la reforma en análisis más aun como lo considera el inicialista en su exposición de motivos, esta propuesta redundaría en beneficio de aquel sector de la sociedad que en su carácter de deudores alimenticios tiene celebrado un convenio de alimentos ya sea por juicio de divorcio o de pensión de alimentos y que se atrasen en el cumplimiento de dicha obligación no se tipifique el delito previsto por el artículo 235 del Código Penal del Estado, sin emb argo para hacer una reforma integral a dicho numeral, se considera necesario adecuar la redacción del precepto en cita, a efecto de incluir, la circunstancia de que el deudor alimentista se hay retrasado en el pago de algunas de las 22 pensiones a que se obligo tal y como se contempla en la tesis Jurisprudencial motivo de nuestro estudio. Por tal motivo, del análisis general y de los razonamientos señalados con antelación se considera procedente la iniciativa de adición antes descrita. CONSID ERANDOS PRIMERO.- Que de conformidad con la fracción I de los artículos 27 y 28 de la Constitución Política Local, es facultad del Congreso del Estado, legislar sobre todos los ramos de la administración que sean de la competencia del Estado; asimismo es facultad de los Diputados el presentar iniciativas en bien de los habitantes del Estado. SEGUNDO.- Dentro de las atribuciones de la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales, se encuentran las referentes al conocimiento, estudio y dictamen de las modificaciones, reformas, adiciones, derogaciones o abrogaciones de las Leyes Ordinarias del Estado, acorde a lo previsto por la fracción III del artículo 62 de la Ley Orgánica del Poder Legislativo del Estado. TERCERO.- En tal virtud, las facultades que no estén expresamente otorgadas por nuestra Carta Magna a los funcionarios federales, se entienden reservadas a los Estados, conforme a lo establecido por el artículo 124 del ordenamiento citado. Por lo cual, se entiende que los Estados conserva todo el poder no delegado al gobierno federal por la Constitución, por lo que la Legislatura del Estado de Baja California esta facultada para expedir leyes sobre materia penal en el ámbito de su competencia. 23 CUARTO.- Que con fecha de 13 de septiembre del año 2005, el Ciudadano Diputado Ricardo Magaña Mosqueda, presentó ante el Pleno de la Honorable XVIII Legislatura, Iniciativa de Reforma que adiciona un artículo 235 Bis al Código Penal para el Estado de Baja California. QUINTO.- Que la iniciativa de reforma presentada ante esta Honorable Legislatura reúne todos y cada uno de los requisitos de fondo y forma que previene el artículo 116 y 117 de la Ley Orgánica del Poder Legislativo, razón por la cual se tomaron en consideración las argumentaciones jurídicas, políticas y sociales que justifican la reforma que se expone ante el Pleno de esta Soberanía. SEXTO.- Que el artículo 235 del Código Penal del Estado, consagra el incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar como un delito contra el orden de la familia; imponiendo de seis meses a cuatro años y suspensión o privación de los derechos de familia, en relación con el ofendido, al que no proporcione los recursos indispensables de subsistencia de las personas con las que tenga ese deber legal. Por lo que el autor de la Iniciativa propone crear un artículo 235 Bis en este ordenamiento, para efecto de establecer en nuestra Legislación Vigente, una excluyente en aquellos casos en los que los deudores alimenticios tengan celebrado un convenio de alimentos ya sea por un juicio de divorcio o de pensión alimenticia; y cuando estos tengan un atraso en el cumplimiento de su obligación no se tipifique el tipo penal del artículo 235 del Código Penal Sustantivo en el Estado. SÉPTIMO.- Que el Legislador pretende la reforma porque advierte que nuestra legislación vigente contempla los casos de incumplimiento de las obligaciones de asistencia familiar, es decir, el incumplimiento de proporcionar alimentos; sin embargo, no distingue los casos donde se incumple esa obligación por voluntad propia, de aquellos donde se incumple por circunstancias ajenas al deudor alimentista; un ejemplo de lo anterior se presenta en el primero de los casos cuando una persona simplemente se niega a proporcionar los alimentos y el segundo, cuando un deudor alimentista que tiene celebrado un convenio en virtud de un juicio de divorcio o de pensión 24 alimenticia ha dado el debido y exacto cumplimiento a su obligación y que por quedarse sin empleo o por causas de fuerza mayor se ve en la necesidad de fallar oportunamente en ese deber, y que por esa causa se encuadra en el delito previsto en el artículo 235 del Código Penal del Estado de Baja California. OCTAVO.- Que la razón de ser de este tipo penal descansa precisamente en la existencia de conductas cuya realización presupone un peligro abstracto para la vida o la integridad de algunas personas, debido bien a las circunstancias fisiológicas o condiciones patológicas en que se hallan, bien al lugar que ocupan en la esfera familiar, por ol que debe interpretarse en la omisión de cuidado en que coloca al sujeto pasivo en unas situación de desamparo material que implique la privación, aunque sea momentánea de los cuidados que le sean debidos, con riesgo para su integridad personal. NOVENO.- Que primordialmente bajo este comportamiento omisivo se encuentra dos hipótesis normativas, el que no proporcione los recursos indispensables de subsistencia de las personas con las que este tenga deber legal y aquel que dolosamente se coloque en estado de insolvencia con el objeto de eludir el cumplimiento de las obligaciones alimentarias que la Ley determina. DECIMO.- Que de conformidad con el artículo 4 de nuestra Carta Magna, es deber de los padres preservar el derecho de los menores a la satisfacción de sus necesidades y a la salud física y mental. La ley determinará los apoyos a la protección de los menores, a cargo de las instituciones públicas", de igual forma, el artículo 7 de nuestro Código Político local, establece que “Los menores de edad tienen derecho a vivir y crecer en forma saludable y normal en un nivel de vida adecuado para su desarrollo físico, mental afectivo, moral y social, en el seno de la familia.. DECIMO PRIMERO.- El Código Civil del Estado reconoce y regula el derecho co mo la obligación de proporcionar alimentos, con base en principios y valores como son la unidad, la 25 solidaridad y la asistencia y protección de la institución de la familia de conformidad con el artículo 925 del Código de Procedimientos Civiles del Estado, los asuntos relativos a alimentos, por ser inherentes a la familia son de orden público y el Juez podrá intervenir de oficio. DECIMO SEGUNDO.- Que los alimentos deben ser proporcionales del que deba darlos y a las que necesidades del que debe recibirlos, la deuda alimentaria será exigible a partir del momento en que nace la obligación o cuando surge el estado de necesidad; el importe de los alimentos debiera ser proporcionado por el simple acuerdo entre las partes; sin embargo, en muchas ocasiones para que el deudor alimentario los reciba se hace necesario requerirlos por la vía judicial, es decir, mediante una determinación del juez de lo familiar e incluso mediante la retención del importe de los alimentos hecha directamente de la nómina o sueldo del deudor alimentario por órdenes del mismo juez. DECIMO TERCERO.- Que dentro de las disposiciones normativas contenidas en el Código Civil y de Procedimientos Civiles del Estado se establecen claramente las reglas conforme a las cuales habrá de llevarse al cabo el procedimiento de alimentos, en todos estos caso la autoridad judicial es el Juez de lo familiar, a quien le tocara resolver de acuerdo con el derecho y el mejor interés de la familia, como institución, pudiendo intervenir de oficio tratándose de menores, pero siempre con la obligación de determinar las medidas precautorias que aseguren y preserven estos derechos. DECIMO CUARTO.- Que del estudio y análisis que se realizó a la iniciativa que nos ocupa, se estima que si bien es procedente la intención de legislador, también lo es que a consecuencia de la reciente reforma que impacto diversos ordenamientos jurídicos, entre ellos el Código Punitivo local, en el artículo 235, que establece “ No se impondrá pena alguna o se dejará de aplicar la impuesta, cuando el obligado a proporcionar los medios indispensables de subsistencia sea la primera vez que incurre en este delito y pague en el momento en que se 26 le requiera todas las cantidades que hubiere dejado de ministrar por el concepto de alimentos o se someta al régimen de pago que el Juez o la autoridad ejecutora en su caso, determinen, garantizando el pago de las cantidades que en el futuro le corresponda satisfacer”. En consecuencia de que se ha legislado al respecto, a criterio de esta Comisión, no se considera viable la reforma. DECIMO QUINTO.- Que una vez debidamente estudiada y analizada la iniciativa que hoy se dictamina; la Comisión de Legislación y Puntos Constitucionales determinó su improcedencia, mediante votación unánime de los Diputados presentes, siendo los C.C. René Adrián Mendívil Acosta, Jaime Xicoténcatl Palafox Granados, José Francisco Blake Mora, Gilberto Daniel González Solís, Carlos Enrique Jiménez Ruíz, y Elvira Luna Pineda. Por lo anteriormente expuesto, la Comisión que suscribe somete a la consideración de esta Honorable Asamblea de la XVIII Legislatura del Estado Libre y Soberano de Baja California, el siguiente Punto: RESOLUTIVO UNICO: No se aprueba la adición del artículo 235 Bis al Código Penal del Estado de Baja California. DADO en la Sala de Comisiones del Órgano Superior de Fiscalización”, en la Ciudad de Tijuana Baja California a los veinticuatro días del mes de Enero del año dos mil seis. 27 COMISIÓN DE LEGISLACIÓN Y PUNTOS CONSTITUCIONALES DICTAMEN No. 148 DIP. RENÉ ADRIÁN MENDÍVIL ACOSTA PRESIDENTE DIP. JAIME XICOTENCÁTL PALAFOX GRANADOS SECRETARIO. DIP. CARLOS ENRIQUE JIMÉNEZ RUÍZ VOCAL. DIP. ELVIRA LUNA PINEDA VOCAL. DIP. GILBERTO DANIEL GONZÁLEZ SOLÍS VOCAL. DIP. JOSÉ FRANCISCO BLAKE MORA VOCAL. DIP. SILVANO ABARCA MACKLIS VOCAL. DICTAMEN NUMERO 148. - RELATIVO A LA INICIATIVA DE REFORMAS AL ARTÍCULO 235 DEL CÓDIGO PENAL PARA EL ESTADO DE BAJA CALIFORNIA. 28