Altoaragoneses del Año, porque nos gusta aplaudir y disfrutar

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12 ESPECIAL 30 AÑOS
Diario del AltoAragón - Miércoles, 28 de septiembre de 2016
Altoaragoneses del
Año, porque nos gusta
aplaudir y disfrutar
Guiñote, porque nos gusta
jugar y nos van la emoción
y las raíces altoaragonesas
El Campeonato Provincial fue la primera gran
promoción del nuevo diario en el año 1985
0 Campeonato de Guiñote, en su última edición.
0 b Vocal con Paloma Lago en la última Gala de los Altoaragoneses del Año. PABLO SEGURA
El concurso llega a
la edición 32 tras
haber entregado más
de 1.200 premios
L
OS ALTOARAGONESES del Año se estrenaron en el otoño
de 1985 y la primera
Gala de las Pajaritas,
como se le denomina desde los
orígenes, tuvo lugar en enero
de 1986 en La Venta del Sotón,
que durante más de veinte
años albergó este acontecimiento en el que los oscenses
aprecian la oportunidad que
se les brinda de aplaudir a sus
conciudadanos, los de aquí y
los que fuera de nuestro territorio llevan la bandera aragonesa y promocionan nuestra
comunidad.
Los Altoaragoneses del
Año, a punto de abrir su edición número 32, cumplen
con su objetivo de reconocer
los méritos de cuarenta personas o colectivos anualmente por sus éxitos durante el
ejercicio, por su trayectoria,
por su desempeño profesional o por su entrega generosa
vocacional. Unos galardones
distribuidos por los lectores
a través de decenas de miles
de boletines de votación.
Las distinciones más importantes tienen la carga icónica de materializarse con
las Pajaritas de Ramón Acín,
el artista que para los oscen-
ses simboliza libertad, paz y
alegría.
Arrancó en 1985 este referente de la vida social, cuando los lectores designaron
como pajaritas de oro a Santiago Marraco (Política), Caja
Rural Provincial (Empresa),
Amigos de Serrablo (Cultura) y Gemma Usieto (Deportes). Se erigieron, así, en los
primeros de los 124 acreedores del máximo galardón, de
entre los más de 1.200 personajes reconocidos con pajaritas o diplomas.
Esta invitación a la participación de los lectores ha
mantenido su espíritu y su
voluntad, pero ha cambiado
desde aquella primera cita en
La Venta del Sotón. Actualmente, las categorías son las
de Cultura, Sociedad, Empresa y Deporte, y la necesidad
de mayor espacio ha conducido a su celebración en el
céntrico y espléndido Hotel
Abba Huesca, tercer escenario ya que un año el afable
anfitrión fue el Hotel Pedro
I de Aragón. Durante el concurso, se celebran semanalmente sorteos culminados
en la Gran Gala con rifas y la
estelar del Coche de los Altoaragoneses, que ha variado
de marcas aunque desde hace un buen puñado de años
es Pirenauto, el concesionario de Opel en Huesca, el que
ha firmado tan emocionante
momento.
La de los Altoaragoneses
del Año ha sido una bonita
historia que ha incorporado
algunos galardones especiales. En el 25 aniversario, la
Asociación Down Huesca recibió la Pajarita de Oro Especial al ser la candidatura con
mayor número de votos en la
historia.
Desde los Altoaragoneses
delAño2010,poriniciativadel
Consejo de Administración
de DIARIO DEL ALTOARAGÓN, se ha instituido la figura del Altoaragonés de
Honor, ajeno a las votaciones
y que el propio consejo designa de entre personalidades
y figuras entrañables. El primero fue Antonio Angulo en
las puertas de su jubilación
como director. Después de él,
los científicos Carlos López
Otín y Elías Campo, el atleta
Eliseo Martín, la ONCE en su
75 Aniversario, Atades Huesca al cumplir media centuria
y Manuel Campo Vidal.
Han mostrado en nuestras
galas sus buenos oficios Silvia Jato, María Teresa Campos, Mabel Lozano, Emma
Ozores, Nieves Herrero, María José Suárez, Eva Isanta,
Belinda Washington Yvonne Reyes, Cristina Higueras,
Elena Sánchez, María Escario, Mónica Pont, Alejandra
Grepi, María José Suárez, Elsa Anka, Patricia Betancort,
Mariló Montero, Teresa Viejo, Vanessa Romero, Inma del
Moral, Patricia Conde, Paloma Lago,… l d.a.
Seguramente porque DIARIO
DEL ALTOARAGÓN emergió
de las raíces de nuestra tierra,
el guiñote se convirtió en la primera gran promoción iniciada
por el periódico gestionado por
la nueva sociedad, cuando todavía amanecía diariamente la cabecera de Nueva España.
Tiene por supuesto un ingrediente fundamentalmente
lúdico, pero a la par representa un homenaje y un tributo a
nuestros ancestros a través del
reconocimiento de una de las
grandes señas de identidad, a la
par que uno de los motivos para congregarnos y disfrutar de
un momento apasionante. En
torno a una mesa, sobre el tapete y con los naipes, se confirma
el carácter hospitalario y amistoso de los altoaragoneses, que
aprovechan para aguzar el ingenio, ejercitarse en el cálculo,
aplicarse a la psicología propia
y la inversa, galardonar la habilidad y, finalmente, despedirse
con un “hasta la próxima partida” con un apretón de manos
que es un contrato de valor extraordinario.
El campeonato de guiñote madrugó en su primera edición al
celebrarse en primavera, cuando los oscenses se vieron sorprendidos por la audaz apuesta
de “Nueva España. El Periódico
de Huesca”, con el nuevo equipo
contratado por la sociedad que
adquirió la empresa.
Fiel al espíritu territorial que
alumbraría con la nueva cabecera, tuvo igualmente la virtud
de congregar simultáneamente en las diez comarcas altoaragonesas a centenares y
centenares de practicantes de
este juego. Para la historia quedan los nombres de la pareja
inaugural del cuadro de honor:
Carlos Laiglesia y José María
Zamora, en el mes de mayo,
fueron los más admirados, los
campeones del Guiñote en la
provincia de Huesca.
La trayectoria de este acontecimiento, patrocinado por
Bantierra (anteriormente Caja Rural y Multicaja fueron sus
denominaciones) y que dispone
de la generosa colaboración de
Joyería Riva (actualmente Riva
Trofeos), ha sido extraordinaria y ha permitido comprobar
que la deportividad y el buen carácter de los altoaragoneses les
lleva hasta los mejores logros.
Entre los grandes acontecimientos, las 2.700 personas que
se sentaron simultáneamente
en la primera jornada del campeonato a finales de los 90, que
constituye un récord Guinness.
Por otro lado, DIARIO DEL
ALTOARAGÓN y Bantierra
fueron promotores de los tres
Campeonatos Interprovinciales de Guiñote que se disputaron coorganizados con diarios
provinciales y cajas rurales de
Castellón y de Soria. Los oscenses fueron los ganadores en la
primera edición celebrada en
Peñíscola (Castellón), mientras
las dos siguientes tuvieron lugar en las bellas localidades de
Benasque y Vinuesa (Soria).
El afán divulgativo se plasmó
en la publicación de un libro sobre las reglas del guiñote escrito
por Fernando Alvira, colaborador entonces tanto de la entidad
financiera como de DIARIO
DEL ALTOARAGÓN, y también
con motivo de las bodas de plata, cuando hubo una excelente
exposición sobre la historia de
los naipes y una conferencia,
todo ello en el salón de actos de
Bantierra.
Al elenco, se incorporan desde hace años mujeres que se
han proclamado campeonas,
y de hecho cada vez se aprecia
una mayor paridad en las rondas finales del Campeonato de
Guiñote. l d.a.
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