Ganadería Patología reproductiva del ganado ovino latxo Los abortos ovinos son de gran importancia en la producción, por su incidencia y las pérdidas económicas que ocasionan. En este artículo se comentan las características más importantes de las principales causas de aborto ovino en la CAPV. Entre las conclusiones se observa la relevancia que está cobrando la infección por el virus Border. Para obtener buenos resultados en la paridera hay que garantizar un buen estado sanitario del rebaño y un buen manejo nutricional TEXTO: J. BARANDIKA, A.L. GARCÍA PÉREZ (DPTO. DE SANIDAD ANIMAL DE NEIKER-DERIO) Los abortos ovinos son de gran importancia en la producción, debido a su elevada 52 sustrai.65 incidencia y a las pérdidas económicas que ocasionan, así como al carácter zoonótico (transmisión al hombre) de algunas de estas infecciones. Su origen es diverso y, además de agentes infecciosos, pueden estar implicadas causas no infecciosas (genéticas, tóxicas, nutricionales, etc.). Respecto a los de tipo infeccioso, existen una serie de abortos con mayor importancia debido a su elevada incidencia, y otros de carácter esporádico. Entre los primeros destacan el aborto enzoótico y paratífico, la brucelosis, la enfermedad de border o la toxoplasmosis. Entre los de carácter esporádico podrían mencionarse los producidos por Anaplasma phagocytophilum (fiebre por garrapatas), Leptospira hardjo, Coxiella burnetii, Campylobacter sp, Yersinia pseudotuberculosis, Listeria monocytogenes y Listeria ivanovii. Las diferencias entre unos y otros pueden obedecer, en parte, a que su diagnóstico puede plantear dificultades, o porque su presencia no se sospecha y por ello no se investiga. En otros casos, el aborto estaría restringido a zonas concretas donde reside el vector, como en el caso de la fiebre por garrapatas. A pesar de todo y teniendo en cuenta todos estos agentes, no siempre es fácil llegar a un diagnóstico. En general, esto se debe a un envío insuficiente o al mal estado de las muestras (autolisis del feto y placenta). La situación ideal para llegar a un diagnóstico preciso, si no hay una sospecha del proceso concreto que requiera confirmación, pasaría por el envío de las siguientes muestras: feto, placenta, sueros maternos pareados, hisopos vaginales, sangre entera e historial completo del caso. La investigación de las causas de abortos debe de involucrar a varias personas, desde el ganadero, que facilite datos sobre hechos y prácticas realizadas antes de producirse los abortos, hasta el veterinario clínico y los técnicos del laboratorio, que conjuntamente deben de decidir qué datos son importantes. ESTUDIO DE LAS CAUSAS DE ABORTO EN LAS EXPLOTACIONES OVINAS LATXAS Desde 1999 hasta 2002 y en colaboración con las asociaciones ganaderas, desarrollamos el proyecto "Estudio de las Causas de Aborto en las Explotaciones Ovinas Latxas", periodo durante el cual se estudiaron muestras procedentes de 86 rebaños con problemas de abortos. Además de realizar una encuesta epidemiológica, se trataba de insistir en la recogida de muestras de abortos una vez comenzado el brote. Durante estos últimos años hemos mejorado y desarrollado nuevas técnicas de estudio que han permitido conocer las causas de aborto en un mayor número de explotaciones. A esta mejora ha contribuido también en gran medida el incremento del número de muestras recogidas por los ganaderos y veterinarios (252 envíos de muestras: 206 fetos y placentas, 460 hisopos vaginales, 1180 sueros y 817 sangres completas con anticoagulante). Como podemos ver en la figura 1, el porcentaje de éxito en el diagnóstico aumenta considerablemente en aquellos rebaños que enviaron muestras para su análisis en más de una ocasión. De los 86 rebaños estudiados en este periodo de tiempo, en 56 (65%) se diagnosticó al menos una causa que pudo ser el origen de los problemas reproductivos, detectándose en conjunto 9 agentes diferentes. Tradicionalmente, las principales enfermedades que producían aborto en nuestros rebaños eran el aborto enzoótico o clamidial, el aborto paratífico (Salmonella sp.) y la brucelosis. Actualmente todas ellas tienen una incidencia menor, especialmente el aborto brucelar que ha desaparecido totalmente. Por el contrario, otros procesos que hasta hace unos pocos años se diagnosticaban en menor medida, bien por no estar presentes en nuestras ovejas o por no ser diagnosticadas con las técnicas laboratoriales disponibles en el momento, han incrementado su prevalencia, como por ejemplo, en el Figura 1: Importancia del número de envío de muestras para la obtención de un diagnóstico. Figura 2: Nº de rebaños en los que se ha diagnosticado la causa de aborto. caso de la Toxoplasmosis y de la Enfermedad de Border (BD), que fueron las causas diagnosticadas con mayor frecuencia, con una incidencia de 21% y 17% respectivamente. Hay que destacar también la presencia de la Fiebre por Garrapatas en el 16% de los rebaños estudiados. Tras estos agentes, se sitúan en orden de importancia el aborto enzoótico (9%) y el paratífico (7%), mientras que el resto aparecieron de forma esporádica. Hay que destacar entre los abortos de tipo esporádico, la presencia de Listeria ivanovii, por su relación con la administración a las ovejas de alimentos en mal estado de conservación o contaminados con tierra o materias fecales, así como un caso de malformaciones congé- nitas en corderos nacidos de un lote de ovejas que habían sido desparasitadas durante las primeras semanas de gestación con un albendazol (figura 2). Brevemente se comentan las características más importantes de las principales causas de aborto de la CAPV. TOXOPLASMOSIS El protozoo Toxoplasma gondii es considerado como una de las causas más importantes de aborto y de mortalidad perinatal en algunas zonas. El ganado ovino es un importante hospedador intermediario en el ciclo de Toxoplasma, infectándose a través de alimentos contaminados por gatos jóvenes que diseminan millones de ooquistes de Toxoplasma con sustrai 53 sus excrementos. El parásito se multiplica en el organismo de animales susceptibles (p.e. ovejas no inmunes) llegando hasta encéfalo, músculos y placenta, etc, donde se multiplica. Si la infección tiene lugar en el primer tercio de gestación son frecuentes las reabsorciones fetales, pero si la infección tiene lugar entre 70 y 120 días pueden nacer corderos débiles o muertos. Es típico observar en un brote de abortos por Toxoplasma la aparición de fetos momificados a la par que nacen corderos aparentemente normales. El estudio histológico de tejidos de fetos y la observación de lesiones compatibles en el encéfalo de fetos abortados confirma el diagnóstico. El control de la infección se basará en reducir el número de gatos jóvenes en la explotación, y en que la reposición entre en contacto con el parásito antes del periodo de cubriciones, es decir que se junte con el resto del rebaño en la cuadra, o en el lugar donde hayan ocurrido los abortos. La vacunación con vacuna viva inactivada parece dar unos resultados satisfactorios. ENFERMEDAD DE BORDER Es una enfermedad producida por un pestivirus estrechamente relacionado con el virus BVD del ganado vacuno, y de la peste porcina clásica. Se caracteriza por el nacimiento de animales con una pelambre anormalmente larga (en razas de lana fina), temblores musculares, deficiente desarrollo corporal y presencia de deformaciones esqueléticas de intensidad variable. Se han descrito varios grupos antigénicos de pestivirus, que predominan en una determinada especie animal (bovino, ovino o porcino), pero que en ocasiones 54 sustrai.65 pueden afectar indistintamente a una u otra especie. De hecho la presencia de ganado vacuno afectado en la propia explotación ovina puede ser la fuente más probable de infección. La presentación de la enfermedad depende principalmente del momento de gestación en que se produce la infección, así puede ir desde un bajo índice de fertilidad en el rebaño con un alto número de reabsorciones fetales, hasta abortos, mortinatos o nacimiento de corderos débiles, con un índice de supervivencia bajo. Si la infección fetal se produce antes del día 60 de gestación puede dar lugar al nacimiento de corderos aparentemente normales pero persistentemente infectados, que no presentan anticuerpos frente al virus y que son la fuente de diseminación del virus en el rebaño. La incidencia es mayor cuando el virus hace su primera aparición en el rebaño. Posteriormente a su introducción en el rebaño, las primíparas son las más sensibles. El control de la enfermedad se basará en la eliminación de los animales persistentemente infectados que puedan estar presentes en la explotación. La detección se hará en base a técnicas de ELISA (antígeno) aplicadas a muestras de sangre entera con anticoagulante. El estudio histológico de tejidos de fetos y la observación de lesiones compatibles en el encéfalo de fetos abortados confirma el diagnóstico. En la actualidad no hay vacunas comerciales para su uso en pequeños rumiantes. FIEBRE POR GARRAPATAS Anaplasma phagocytophilum es una bacteria transmitida por garrapatas que parasita los glóbulos blancos de la sangre produciendo un proceso denominado fiebre por garrapatas, que cursa con una fase de fiebre durante 4-12 días. Los animales gestantes, si no han estado infectados previamente, abortan a los 2-8 días después del comienzo de la fiebre. Los animales han de ser picados por garrapatas (Ixodes ricinus) infectadas desde el primer año de vida, ya que si lo hacen como primíparas gestantes tienen el riesgo de abortar en dicha gestación. Por este motivo la aparición de abortos puede ser en algunos casos consecuencia del manejo del rebaño. Estudios recientes indican que la distribución de este agente en la CAPV Las garrapatas transmiten agentes infecciosos que son causa de aborto en ovejas. es muy amplia, si bien podría sufrir algunas limitaciones ligadas a la presencia de la garrapata vector y al manejo de los rebaños. El diagnóstico se realiza mediante observación microscópica de la bacteria en frotis sanguíneos de ovejas abortadas. El control de la enfermedad pasaría por la inmunización de los animales jóvenes a través del contacto con garrapatas antes de su primera cubrición, evitar el contacto de hembras gestantes, no inmunes, con garrapatas o el tratamiento con antibióticos en las fases de fiebre. ABORTO ENZOÓTICO Este tipo de abortos está producido por la bacteria Chlamydophyla abortus. La infección se asocia generalmente a la entrada de animales nuevos en el rebaño, dando lugar inicialmente a numerosos abortos; posteriormente la tasa de abortos suele ser del 5-10% afectando principalmente a primíparas. La oveja que aborta sólo lo hace una vez, permaneciendo infectada y excretando la bacteria de forma periódica en descargas uterinas y en heces, si bien la importancia epidemiológica de ésto no está claro. En gestaciones gemelares puede ocurrir que sólo se infecte uno de los fetos. El diagnóstico puede sospecharse en un brote inicial por los numerosos abortos en el último tercio de la gestación con fetos, generalmente frescos, y por las lesiones en la placenta (necrosis de cotiledones). Para el diagnóstico laboratorial el estudio de la placenta es imprescindible, así como muestras de suero de ovejas abortadas. El control se realiza mediante vacunación. La vacunación no previene ni elimina la En los periodos de estancia en las sierras puede haber un riesgo alto de transmisión de infecciones entre rebaños infección pero reduce los abortos. El tratamiento con antibióticos a mitad de gestación también reduce la tasa de abortos, sin embargo no parece recomendable su uso de forma rutinaria. ABORTO PARATÍFICO Salmonella abortus ovis es, dentro del grupo de Salmonella sp., la especie relacionada con abortos en ovejas. En la epidemiología de la salmonelosis es importante la presencia en el rebaño de animales portadores que contribuyen a perpetuar la infección. Las ovejas una vez que padecen el aborto adquiere inmunidad y en posteriores casos sólo abortarán los animales de reposición. Aparte de abortos, nacimiento de mortinatos o de animales débiles, los animales pueden desarrollar también metritis, diarreas o septicemias. El diagnóstico se realiza fácilmente mediante aislamiento microbiológico a partir de órganos fetales o placenta. El control se realiza mediante vacunación. El tratamiento con antibióticos durante un brote puede contribuir a reducir el número de abortos. FIEBRE Q Producida por la riquetsia Coxiella burnetii, la Fiebre Q da lugar a, en general, abortos esporádicos, aunque en ocasiones se han descrito formas endémicas o brotes explosivos. A pesar de todo, la infección parece estar bastante extendida. Las ovejas infectadas son precisamente las que eliminan una gran cantidad de riquetsias durante la gestación las cuales sirven de fuente contagio y pueden ser vehiculadas por el viento y propagar la infección a lugares distantes. El contagio es principalmente por vía aerógena, aunque también puede transmitirse por garrapatas (picaduras, contacto con sus heces). El aborto se produce al final de la gestación, pudiendo nacer también animales débiles o normales. Los fetos aparecen normalmente frescos y sin lesiones. Para el diagnóstico laboratorial el estudio de la placenta es imprescindible, así como muestras de suero de ovejas abortadas. La fiebre Q es una zoonosis transmisible al hombre que se transmite básicamente por inhalación, y en menor grado, por ingestión de leche. El tratamiento con antibióticos durante un brote contribuye a reducir los abortos. OTRAS CAUSAS DE ABORTOS En 30 de los 86 rebaños estudiados no se pudo detectar la presencia de ningún agente sustrai 55 infeccioso con capacidad abortiva, por lo que consideramos que otras causas de origen no infeccioso podrían estar implicadas. Por ello, planteamos un estudio en colaboración con las asociaciones ganaderas, en rebaños con problemas de abortos y sin un diagnóstico establecido. Se seleccionaron 5 rebaños que frecuentaban zonas de sierra durante la cubrición y/o la gestación. En estas áreas, los rebaños ovinos suelen entrar en contacto con otras especies, domésticas (vacuno y equino principalmente) y animales silvestres (jabalí, corzo, ciervo, etc.) y dependiendo de la carga ganadera y de las condiciones climatológicas, pueden darse situaciones de aporte insuficiente de alimento y/o de agua, que afecta a la capacidad reproductiva de las ovejas. Además el pastoreo conjunto de especies domésticas y silvestres puede favorecer el contagio de agentes patógenos entre diferentes especies animales. El objetivo fue analizar los resultados reproductivos de cada rebaño al finalizar la paridera, una vez realizado el análisis laboratorial de los abortos, la evaluación de las posibles deficiencias nutricionales durante la gestación (a través del estado de carnes y de la determinación de los niveles de algunos minerales en sangre) y la valoración de la adecuación del número de machos utilizados en monta natural. En primer lugar hay que resaltar que, tras el análisis de los datos reproductivos, se observó que la fertilidad fue óptima en los cinco rebaños, con cifras entre 0.92 y 0.99. Además, el porcentaje de abortos fue bajo, con únicamente 1.9-3.6% de abortos. Tras el análisis de estos datos, podemos decir que durante la 56 sustrai.65 paridera 2001-02 los índices reproductivos fueron mejores que los de campañas anteriores, y que no se produjo un fallo reproductivo destacable. Sin embargo, hay algunas observaciones de interés. En cuanto a la duración de la paridera, ésta se prolongó hasta finales de mayo e incluso hasta mediados de junio, y tuvo una duración normal (88-89 días) en 2 rebaños, y prolongada en el resto (115-155 días). Cuando se analizaron las características de los animales que tuvieron partos tardíos (2,5 meses después de comenzar la paridera), se observó que el número de ovejas adultas con partos tardíos era elevado, y pudo ser resultado de reabsorciones fetales o de abortos no observados por el pastor al principio de la época de cubriciones. Otro de los aspectos interesantes es la relación entre el "número de ovejas por macho presente", excesivamente alta en 3 de los 5 rebaños. Un número insuficiente de carneros puede dar lugar a una prolongación excesiva de la paridera, ya que los carneros tienen que cubrir a un número elevado de ovejas, y además, este problema es mayor en zonas de sierra donde los carneros tienen que moverse por grandes extensiones de terreno. En lo que respecta a la estimación de la condición corporal, 4 de los cinco rebaños presentaron valores adecuados a lo largo de la gestación, mientras que el quinto presentó un estado deficiente que no alcanzó la puntuación de 2,5 (valor mínimo deseable) en ningún momento. El estado corporal (EC) en el que llegan las ovejas a la monta y la mejora del mismo en el momento de la cubrición, incre- menta la fertilidad y prolificidad de los rebaños. Por lo tanto la alimentación que reciban y el estado de las reservas corporales que presenten en esta época, condicionarán en gran medida los resultados reproductivos que obtengamos. Por ejemplo, la prolificidad (nº de corderos nacidos/oveja parida) está relacionada estrechamente con la alimentación y el EC que presentan los animales en el momento de la cubrición. Así, la baja condición corporal que mostró uno de los rebaños antes de la cubrición pudo ser la causa de los valores más bajos de prolificidad respecto al resto de rebaños. En el estudio de minerales, si bien se observó un descenso progresivo generalizado de los valores a lo largo de la gestación, en ningún momento hubo estados carenciales. Por lo tanto no podemos decir que existieran deficiencias minerales que pudieran afectar a los resultados reproductivos de estos rebaños. No obstante, dado que puede haber diferencias entre zonas y manejo de los rebaños, es un aspecto que debe tenerse en cuenta en caso de que los rendimientos reproductivos no sean los esperados. En el estudio laboratorial de los abortos, se obtuvieron también resultados de interés. El virus Border se identificó en 3 rebaños, a partir de la observación de lesiones en los fetos o por la presencia de anticuerpos (seroconversión) en ovejas abortadas. Por lo tanto se planteó estudiar en los 5 rebaños la evolución de la tasa de anticuerpos frente al virus a lo largo de la gestación, para comprobar si existía un aumento de la seropositividad que sugiriera un contacto reciente con el vírus. Dos rebaños presentaron una baja seropositividad a lo largo de todo el periodo, mientras que en los 3 restantes, o bien se observó una alta seropositividad frente al virus, o bien una seroconversión manifiesta a lo largo del periodo en la sierra. Estos resultados sugieren que el virus Border pudo ser la causa de aborto y de las reabsorciones fetales, con el consiguiente retraso de las parideras de estos rebaños. CONCLUSIONES. De los resultados de estos estudios se desprenden varias conclusiones: • Hay que tener una visión global del problema de los abortos ovinos, teniendo que en cuenta que además de causas de tipo infeccioso, existen otras relacionadas con la alimentación y el manejo del rebaño que pueden estar ocasionando problemas reproductivos. • Además de hacer análisis laboratoriales para descartar el origen infeccioso del aborto, también hay que hacer un exhaustivo estudio del manejo del rebaño. • Por otro lado en los últimos estudios realizados se ha puesto de manifiesto la relevancia que está cobrando la infección por el virus Border en el ganado ovino, que se encuentra entre las principales causas de aborto de nuestra comunidad. Por lo tanto, es necesario promover programas de control para este tipo de infecciones (virus Border y BVD) tan extendidas en el ganado ovino y bovino que frecuenta zonas de sierra. Agradecimientos: A las asociaciones de Ganado Ovino Latxo de los 3 Territorios.