SENTENCIA NÚMERO: Sesenta y cuatro.Marcos Juárez, 12 de Mayo de Dos mil quince.------------------------------------------------Y VISTOS: Estos autos caratulados “CRAVERO, Elsa Elida c/ SUCESORES DE MIGUEL ANGEL MARTINI -Societario Contencioso - Disolución de sociedad de hecho-” (Expte. N° 700106), de los que resulta que: I.- A fs. 02/08 comparece la Sra. Elsa Elida Cravero, L.C. Nº 7.572.367, demandando que, previa declaración de la existencia de la sociedad de hecho que constituyó con el Sr. Miguel Angel Martini, se declare judicialmente la disolución de la misma y se proceda a su liquidación, instaurando la demanda en contra de la Sucesión de Miguel Angel Martini y/o su heredera Alicia Josefa Martini de Pirani.- Refiere que la disolución de la sociedad de hecho denunciada se produjo por fallecimiento de Miguel Angel Martini, acaecido el 3 de diciembre de 2009, debiéndose hacer lugar a la demanda, ordenándose judicialmente la disolución de la sociedad de hecho por la causa indicada y la pertinente publicación que corresponda, y su correspondiente liquidación por el procedimiento de ley, distribuyéndose los bienes y ganancias quedados a la finiquitación de la misma en una proporción del cincuenta por ciento (50 %) para la compareciente en su carácter de socia y el restante 50 % para la sucesora del otro socio, el fallecido Miguel Angel Martini. Subsidiariamente y para el caso de que se pretendiera sentenciar que la sociedad de hecho denunciada no existió, y por ende que tampoco correspondería su liquidación y que por ende no correspondería distribuirse a su favor en la proporción indicada los bienes y ganancias de la misma, demanda que se reconozca judicialmente su participación en condominio con Miguel Angel Martini existencia de un condominio con interposición de personas-, en una proporción de derechos y acciones de propiedad indivisos del cincuenta por ciento (50 %), en cada uno de los bienes inmuebles que, escriturados e inscriptos registralmente a nombre del mismo y por lo tanto y como efecto que se inscriban a nombre de ambos, es decir de la compareciente el 50 % y de la sucesión y/o su heredera el restante 50 %, y/o que se ordene su partición en dichas proporciones. Que en tal reclamo subsidiario, por supuesto que sus aportes para la compra de los bienes no fueron, bajo ningún punto de vista, con animus donandi. Todo con costas.- Relata que en el año 1964, y al mismo tiempo que comenzó a vivir en aparente matrimonio con Miguel Angel Martini, constituyeron con éste una sociedad de hecho. Vivían en el campo del padre de su concubino, y allí sededicaban a la cría de animales para su venta a terceros, entre ellos vacunos y cerdos.Ambos hacían las tareas rurales y de cría de animales personalmente, ya que no tenían empleado, y con el tiempo empezó a trabajar también junto con ellos su hijo nacido de un matrimonio anterior y quien también vivía con ellos -Sr. Roberto Oscar Cantoni, soltero, hoy de 56 años de edad-. Ese trabajo de su hijo se tornó habitual ya desde aproximadamente 1967, y su trabajo era un aporte más que ella hacía a la sociedad de hecho, y al mismo no se le pagaba sueldo sino que sus gastos para vivir eran por ella proporcionados, siendo el mismo soltero. Adita que el objeto de esa sociedad de hecho era, obviamente, la realización de producción especialmente pecuaria, trátese de animales vacunos y cerdos, para que luego de criarlos se procedía a su venta a terceros.La explotación conjunta funcionaba bien, tanto es así que en el año 1970, específicamente el 23 de octubre de 1970, procedieron a comprar, con el producto de la rentabilidad de su explotación agropecuaria y del ahorro que de ella hacían, una porción de campo equivalente a derechos y acciones de propiedad sobre Veintiuna hectáreas novecientos veinticinco metros cuadrados (21,0925 has.), que en la escritura de adquisición se detallan como “derechos y acciones equivalentes a la mitad indivisa que tiene y le corresponden sobre el siguiente inmueble: una fracción de campo formada por la concesión A. del lote noventa y ocho del plano de la Colonia Juárez Celman, pedanía Cruz Alta, departamento Marcos Juárez, provincia de Córdoba, compuesta de una superficie de CUARENTA Y DOS HECTAREAS, UN MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA METROS CUADRADOS; y que linda: al Norte, calle de por medio, con el lote sesenta y tres; al Este, con la concesión letra C. del mismo lote noventa y ocho; al Sud, con la concesión D. del lote noventa y ocho; y al Oeste, calle de por medio, con parte del lote noventa y siete, todos de la expresada Colonia Juárez Celman”. Tal escritura es la Escritura Pública Nº 159, del 23/10/70, labrada por ante el Escribano Jorge Alfonso Passerini, Titular del Registro Notarial Nº 462 de Cruz Alta.Si bien ambos socios teníaninjerencia en la dirección del negocio, por una relación asimétrica desde el punto de vista de la relación afectiva y convivencial- establecida por su concubino con la compareciente, quien si bien era una excelente persona tenía rasgos de entender superior o prevaleciente el sexo masculino respecto del femenino -pauta cultural característica de su generación-, a lo que aducía además que era mejor para el funcionamiento comercial de la explotación, ya sea con casas de comercio y entidades bancarias, agregado a ello que existía una situación y ambiente de total confianza recíproca a mérito de la vida en común y una, si se quiere, dependencia moral de la compareciente hacia su socio por aquel elemento convivencial, el inmueble fue escriturado sólo a nombre del mismo, y también así fue inscripto en el Registro General de Propiedades -se halla inscripta al DOMINIO 22593, FOLIO 34225, TOMO 137, AÑO 1970-. Que siguieron viviendo siempre en el mismo lugar.La explotación agropecuaria funcionaba cada vez mejor, cimentada en el dato económico objetivo que en los primeros años de la década del ´70 se dio una coyuntura internacional favorable para los productos agrarios y pecuarios, de tal modo que es la época que registra mejores precios relativos internacionales de los productos primarios que produce y exporta Argentina, y entre los que se encontraban, obviamente, los que producían. Quiere decir ello que por esos años la explotación que tenían era floreciente y muy rentable; y eran muy ahorrativos y de ritmo de vida muy austero.Así las cosas, y de tal modo, en el año 1973, específicamente el 29 de diciembre de 1973, compraron otra fracción de campo, que se describe como “a) Una fracción de terreno con todo lo edificado, clavado y plantado y demás adherido al suelo, comprendida en el lote sesenta y cuatro de la Colonia Juárez Celman, Pedanía Cruz Alta, Departamento Marcos Juárez, de esta Provincia de Córdoba, la que mide según el plano particular del topógrafo nacional don Conrado L.Vicario agregado a la escritura de su adquisición por el causante, en el costado Sur setecientos setenta y cuatro metros, treinta. centímetros; en el costado Oeste mil seiscientos sesenta y dos metros, sesenta y ocho centímetros; en el lado Este mil trescientos metros cincuenta centímetros; y en el costado Norte, a partir del extremo Nor-Este de dicho lote hacia el Oeste, setecientos setenta y tres metros dos centímetros, continuando luego una poligonal sobre el Río Tercero, cerrando la figura, lo que hace una superficie total de CIEN HECTAREAS, TREINTA AREAS, CUARENTA Y SEIS CENTIAREAS, lindando: Al Norte, en parte con el Río Tercero y en parte, camino de por medio, con el lote cincuenta y siete; al Este, camino de por medio, con el lote sesenta y tres; al Sud, camino de por medio, con el lote noventa y siete; y al Oeste, con mas terreno del lote sesenta y cuatro adjudicado a Evaristo Juan Valvesón (según realidad y plano citado al lado Oeste mide 1.272,68 metros). b) Una fracción de campo con todo lo edificado, clavado, plantado y demás adherido al suelo, ubicado en la concesión C. del lote número cincuenta y siete de la Colonia Juárez Celman, Pedanía Cruz Alta, Departamento Marcos Juárez, de esta Provincia de Córdoba, midiendo según el plano particular del topógrafo nacional don Conrado L. Vicario agregado a la escritura de su adquisición por el causante a que ya se hiciera referencia en el inmueble anterior, en el costado Sur seiscientos veinte y seis metros siete centímetros; en el lado Este ciento veinte y cuatro metros; y al costado Norte y Oeste lo forma una poligonal sobre el Río Tercero, encerrando una superficie de TRES HECTAREAS, SESENTA Y TRES AREAS, SESENTA Y NUEVE CENTIAREAS, lindando: al Norte y Oeste, con el Río Tercero; al Este, calle de por medio, con la concesión d. del lote número cincuenta y ocho; y al Sud, camino de por medio, con parte del lote sesenta y cuatro”. El negocio fue que el padre de su socio Don Gaspar Nazareno Martini compró el 45 % y ellos, es decir la sociedad de hecho entre la compareciente y Miguel Angel Martini, compraron el restante 55 % consistente en derechos y acciones de propiedad sobre 57,20 hectáreas. La operación se llevó a cabo mediante Escritura Pública Nº 99 del 29/12/73, celebrada por ante el Escribano Jorge Alfonso Passerini preindicado. Por iguales circunstancias y comportamientos culturales que lo apuntado anteriormente, el inmueble fue también escriturado sólo a nombre de su socio y concubino Miguel Angel Martini, y también así fue inscripto en el Registro General de Propiedades –se halla inscrita al DOMINIO 13578, FOLIO 19988, TOMO 80, AÑO 1974-.- Remarca que tan floreciente era la explotación conjunta, que a fines de los años ´60 e incluso durante toda la década del ´70, su explotación agropecuaria manejaba un stock de cría para posterior venta, en forma permanente, de unos 850 animales entre bovinos, porcinos y caprinos (aproximadamente 150 vacas, 500 cerdos y 200 chivos), a lo que se agregaba, obviamente, tareas de siembra de cultivos, en esos años trigo y maíz (la introducción del cultivo de soja en el país es posterior, al menos en forma generalizada y más allá de algún intento precursor). Que ella permanentemente aportaba su trabajo y el de su hijo a la explotación conjunta que tenían, a lo que debe agregarse que incluso, como ella era única hija, sus padres, que tenían también una porción de campo, habitualmente le regalaban dinero de su explotación, y ella lo volcaba en la sociedad de hecho que relata. Aportes económicos que, sin perjuicio de los habituales y permanentes aportes en trabajo que efectuaba, que se incrementaron luego de la muerte de sus padres, con todo lo que le redituaba la producción del campo de los mismos y que ella recibió íntegramente como única heredera. Ese capital que habían formado en la sociedad de hecho debió ser conservado de las diversas crisis económicas acaecidas en el país desde la década de 1980 en adelante, que les llevó en algunas oportunidades a vivir situaciones de ausencia de rentabilidad de su explotación y también de contraimiento de deudas, y que gracias a los aportes dinerarios que ella hacía pudieron evitar vender partes de los inmuebles rurales que habían comprado pues podían pagar esas deudas con tales aportes (su inmueble propio, heredado de sus padres, consiste en la cantidad de 42 has, y los heredó en 1982 el 50 % y en 1988 el otro 50 %). Es decir, su aporte fue esencialmente de trabajo, pero también de capital para sostener y conservar lo que habían adquirido.Al margen de lo expuesto, si bien nunca se casaron con su socio Miguel Angel Martini, la relación concubinaria que tuvieron siempre fue excelente, siendo un verdadero matrimonio, aunque no se hubiesen casado legalmente.Agrega que no todas las épocas fueron florecientes, sino que hubo algunas, bastante después de la época en que compraron las dos propiedades inmuebles relatadas, que fueron francamente desastrosas desde el punto de vista económico, entre ellas la primera parte de la década del ´80, la época de la hiperinflación de finales de la década de los ´80, la terrible experiencia de la convertibilidad –que hizo que decenas de miles de productores agropecuarios desaparecieran-. En tales circunstancias de verdadero quebranto de la producción que llevaban a cabo, ya que la rentabilidad directamente no existía sino que a veces se trabajaba a pérdida, hubo períodos en que se endeudaron con diversos acreedores, entre ellos con entidades bancarias. De tales circunstancias embarazosas pudieron salir, en primer lugar con mucho sacrificio laborativo de ambos socios, y en segundo lugar abonando, a duras penas y con mucho esfuerzo, las obligaciones que habían contraído. Para abonar dichas deudas, como eran de la sociedad de hecho y por ende correspondía soportarlas por ambos socios, no solamente vendieron los planteles bovinos y porcinos, sino que además, en el caso particular de la compareciente, aportó dinero de la renta del campo que heredó de sus padres. Que no sólo la sociedad de hecho estaba constituida para disfrutar los buenos momentos económicos, sino también, obvia y naturalmente, para soportar conjuntamente las pérdidas y las deudas. Siempre operaron con una affectio societatis indestructible.A posteriori, y ya en el nuevo siglo, siguiendo los pasos de la reconvención general del sector agropecuario, empezaron a destinar el campo al cultivo de soja, si bien aún conservaban algunos animales. Además, a fines del año 2007 decidieron ir a vivir al pueblo, para lo cual compraron una casa, que según título se detalla como “Fracción de terreno que es parte del solar “H” de la Quinta Treinta ubicado en Cruz Alta, pedanía del mismo nombre, departamento Marcos Juárez, provincia de Córdoba que mide: Catorce metros cincuenta centímetros de frente al Sur por Treinta y nueve metros de fondo, encerrando una superficie de QUINIENTO SESENTA Y CINCO METROS CINCUENTA DECÍMETROS CUADRADOS y linda: al Norte con mas terreno del solar H; al Este con terreno de la misma Quinta de Elena Josset de Gorostegui; al Oeste, con solar G y al Sur, con calle Moreno”. Dicha casa fue escriturada e inscripta registralmente a su nombre, si bien fue también comprada con recursos de la sociedad de hecho denunciada. El hecho que fuera puesta sólo a su nombre es porque su concubino y socio había aplacado sus rasgos culturales precitados, y en esas nuevas circunstancias existenciales y culturales entendía razonable que, si total era de la sociedad de hecho, la casa figurara a su nombre, porque él también estaba haciendo figurar a su nombre bienes inmuebles que también eran de la sociedad. Ultimamente compraron una camioneta Dominio ELZ-434 y que fue inscrita únicamente a su nombre, pero que también era de la sociedad de hecho.---------------------------------------Manifiesta que lamentablemente la sociedad de hecho concluyó por el fallecimiento de su socio y concubino Miguel Angel Martini el día 3 de diciembre de 2009. Que los inmuebles quedados son de la sociedad de hecho, y producto del esfuerzo común, el ahorro común y la affectio societatis con que llevaron a cabo esa sociedad.Por ser los bienes inmuebles detallados de la sociedad de hecho, ante la muerte de su socio está detentando la posesión de los mismos, encontrándose los inmuebles rurales actualmente alquilados a terceras personas.Por todo lo expuesto es que viene a reclamar judicialmente que, previa declaración de la existencia de la sociedad de hecho que constituyó con el señor Miguel Angel Martini, se declare judicialmente la disolución de la misma y se proceda a su liquidación; ordenándose las publicaciones que corresponda y su correspondiente liquidación por el procedimiento de ley y con todos sus efectos legales, distribuyéndose los bienes y ganancias quedados a la finiquitación de la misma en una proporción del cincuenta por ciento (50 %) para la compareciente en su carácter de socia y el restante 50 % para la sucesora del otro socio, el fallecido Miguel Angel Martini. Subsidiariamente, y para el caso de que se pretendiera sentenciar que la sociedad de hecho denunciada no existió, y por ende que tampoco correspondería su liquidación y que por ende no correspondería distribuirse a su favor en la proporción indicada los bienes y ganancias de la misma, demanda que se reconozca judicialmente su participación en condominio con Miguel Ángel Martini -existencia de un condominio con interposición de personas-, en una proporción de derechos y acciones de propiedad indivisos del cincuenta por ciento (50 %), en cada uno de los bienes inmuebles que, escriturados e inscriptos registralmente a nombre dela misma y por lo tanto y como efecto que se inscriban a nombre de ambos, es decir de la compareciente el 50 % y de la sucesión y/o su heredera el restante 50 %, y/o que se ordene su partición en dichas proporciones. Hace reserva del Caso Federal, para la eventualidad de que en la litis se configurara una cuestión del rubro, y en mérito de ella debiera recurrir a la vía extraordinaria federal.------------------------------------------------------------------------------A fs. 18/18bis comparece el Dr. Daniel Elvio Lucangeli, apoderado de la accionante, ampliando la demanda y/o a aclarar los términos de la misma, ya que en su redacción se cometió un error involuntario.En efecto, al denunciar los bienes integrantes de la sociedad de hecho denunciada, se consignó como existente en cabeza de la misma una propiedad inmueble que se detalla a fs. 2vta./3 como “una porción de campo equivalente a derechos y acciones de propiedad sobre Veintiuna hectáreas novecientos veinticinco metros cuadrados (21,0925 has.), que en la escritura de adquisición se detallan como “derechos y acciones equivalentes a la mitad indivisa que tiene y le corresponden sobre el siguiente inmueble: una fracción de campo formada por la concesión A. del lote noventa y ocho del plano de la Colonia Juárez Celman, pedanía Cruz Alta, departamento Marcos Juárez, provincia de Córdoba, compuesta de una superficie de CUARENTA Y DOS HECTAREAS, UN MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA METROS CUADRADOS; y que linda: al Norte, calle de por medio, con el lote sesenta y tres; al Este, con la concesión letra C. del mismo lote noventa y ocho; al Sud, con la concesión D. del lote noventa y ocho; y al Oeste, calle de por medio, con parte del lote noventa y siete, todos de la expresada Colonia Juárez Celman”. Tal escritura es la Escritura Pública Nº 159, del 23/10/70, labrada por ante el Escribano Jorge Alfonso Passerini, Titular del Registro Notarial Nº 462 de Cruz Alta que fue inscripto en el Registro General de Propiedades –se halla inscripta al DOMINIO 22593, FOLIO 34225, TOMO 137, AÑO 1970-“; pero por error involuntario en la demanda no se consignó que dicho bien fue luego vendido, aproximadamente entre mediados y finales de la década de los ´70, y por tanto no integra actualmente, ni al momento de la disolución de la sociedad de hecho por causa del fallecimiento de Miguel Angel Martini, ni al momento de radicarse la demanda, los bienes de la misma.En consecuencia deberá ser tenerse por ampliada la demanda y/o aclarados sus términos, y en consecuencia tenidos como bienes inmuebles de la sociedad de hecho de la cual se pide su disolución y liquidación, y se formula la petición subsidiaria, el indicado a fs. 3vta./4 (DOMINIO Nº 13578, FOLIO Nº 19988, TOMO Nº 80, AÑO 1974) y el de fs. 4 vta. (inmueble urbano).-----------------------------------------------------------------------------II.- A fs. 19 el Tribunal imprime a la presente causa el trámite de ley. A fs. 22 comparece la Sra. Alicia Josefa Martini, sucesora del Sr. Miguel Ángel Martini, y a fs. 74/84 contesta la demanda entablada en su contra solicitando su rechazo con costas.Afirma ab initio la inexistencia de sociedad de hecho entre su hermano Miguel Ángel MARTINI y la actora Elsa Elida CRAVERO, al igual que afirma la inexistencia de un condominio entre la actora y Miguel Ángel Martini; la inexistencia de participación alguna por interposición de persona en ninguna proporción de derechos y acciones de propiedad indivisos. Niega categóricamente todos y cada uno de los hechos invocados por la accionante en su artificiosa y mendaz demanda, debiendo en consecuencia tenerse por ciertos tan solo aquellos que fueren motivo de expreso reconocimiento de su parte y por negados todos los demás.La simple lectura del líbelo de la actora permite inferir que acciona con evidente malicia, de modo ilegítimo e ilícito, con conocimiento pleno de su carencia de derecho alguno en su contra o sobre los bienes de su extinto hermano, invocando un vínculo societario de hecho que jamás existió. Es evidente también que la actora trata de valerse del estado de indefensión de Miguel Ángel Martini, habiendo esperado que ocurriese su fallecimiento para tratar de obtener alguna parte de su acervo hereditario, porque de hallarse en vida su hermano habría repelido personal y enérgicamente tal ilícito accionar de su concubina.El permanente y fluido trato familiar que siempre mantuvo con su hermano Miguel Ángel y mientras vivió mantuvieron entre ambos con supadre Gaspar Nazareno Martini, le autorizan afirmar y reiterar que nunca existió sociedad de hecho alguna entre Elsa Elida CRAVERO y Miguel Ángel Martini, ni tampoco existieron bienes de ninguna naturaleza en condominio entre ellos.- Afirma que la señora Elsa Elida nunca realizó aportes patrimoniales a la actividad agropecuaria y patrimonial que realizaba en vida su extinto hermano Miguel Angel MARTINI, quién actuó siempre en forma personal, individual y sin ninguna clase de sociedad con la actora, siendo esta la única realidad. La evolución patrimonial de su hermano se produce en el marco de la estrecha relación familiar mantenida con su padre y con ella, en la que ninguna participación le cupo a la su concubina, hoy demandante de su sucesión. De aquella relación paterno filial con Gaspar Nazareno MARTINI surgió la adquisición de las fracciones de campo existentes en el acervo hereditario de su hermano Miguel Ángel MARTINI. La manera en que cronológicamente se sucedieron los acontecimientos familiares y patrimoniales en su familia ha de echar por tierra las mendaces expresiones de la demandante, quien pretende engañar mediante relatos falsos y tergiversación de hechos y acontecimientos.En efecto, legítimamente le pertenece la totalidad del acervo hereditario de su extinto hermano, en razón de ser su única y universal heredera, declarada tal tras un debido proceso legal mediante Auto Nº 247 de fecha veintiocho de junio de dos mil diez, que obra a fs. 33 a 34 de los caratulados: “MARTINI, Miguel Angel - Declaratoria de Herederos” (Expte.: Letra "M" - Nº 10 Año 2010), tramitados por ante este mismo Tribunal. Que existe evidente mala fe en la actora al peticionar que se declare judicialmente la existencia de una sociedad de hecho con el señor Miguel Angel Martini, sabiendo perfectamente que jamás existió tal sociedad y que ella no efectuó ningún aporte personal ni material para ello y que tampoco corresponde una declaración judicial de disolución de aquello que nunca se constituyó.- Señala que miente la actora al expresar que por el fallecimiento de Miguel Angel Martini acaecido el 3 de diciembre de 2009 se produjo la disolución de la sociedad de hecho que falsamente denuncia. No existe sociedad de hecho y no corresponde liquidación alguna, ni distribución de ninguna naturaleza ni proporción. No existe en la actora el carácter de socia del fallecido Miguel Angel Martini. Nunca existió participación alguna en condominio de la actora con Miguel Ángel Martini de ninguna naturaleza ni proporción; por lo que ningún reconocimiento en tal sentido puede válidamente pretender la demandante.Todos los bienes inmuebles que conforman el acervo hereditario de su hermano Miguel Angel Martini, de quien fue declarada judicialmente única y universal heredera, se hallan escriturados e inscriptos registralmente a nombre del mismo porque así corresponder a la realidad histórica de su adquisición, en la que ninguna participación le cupo a la actora.Por ello ningún derecho le asiste a la actora sobre las fracciones inmuebles rurales, al igual que tampoco le asiste derecho alguno sobre los bienes muebles, frutos y productos quedados al fallecer su querido hermano.- Reitera y afirma una vez más, que ningún aporte para la compra de bienes efectuadas en vida por Miguel Angel MARTINI realizó su concubina Elsa Elida CRAVERO.La inexistencia de sociedad alguna con la actora también se desprende de la posición tributaria e impositiva que revistió siempre su extinto hermano Miguel Angel, desde su inscripción ante la AFIP y D.G.I. hasta en día de su muerte. Niega que en el año 1964 al mismo tiempo que la actora comenzó a vivir en aparente matrimonio con Miguel Angel Martini haya constituido con el mismo una sociedad de hecho. Lo único cierto es que la actora y Miguel Angel Martini vivieron en concubinato en el campo de su padre don Gaspar Nazareno MARTINI, pero no es cierto que allí la actora se dedicara a la cría de animales para su venta a terceros, entre ellos vacunos y cerdos. No es cierto y niega que ambos hacían las tareas rurales y de cría de animales personalmente. Afirma que la concubina de su hermano nunca realizó las tareas rurales a diario lo hacía su hermano Miguel Angel. No es cierto y niega que con el tiempo empezara a trabajar un hijo nacido de un matrimonio anterior de la actora. Es cierto que Roberto Oscar CANTONI, soltero, hoy de 56 años de edad- vivió con su madre en el mismo lugar en que aquella convivió con su concubino Miguel Angel MARTINI, pero solo eso es verdad. No es cierto y niegaque el hijo de la actora haya sido un trabajador habitual desde aproximadamente 1967.Roberto Oscar CANTONI nunca tuvo apego por el trabajo en ninguna de sus formas. No es cierto y niega que el trabajo del hijo de la actora, si alguna vez existió, haya sido un aporte a una sociedad de hecho. No es cierto y niega que al mismo no se le pagara sueldo y que sus gastos para vivir fueran proporcionados por la actora. No es cierto y niega la existencia de una sociedad de hecho entre la actora y su hermano con objeto de realización de producción especialmente pecuaria, de animales vacunos y cerdos, para su venta a terceros. No es cierto y niega la existencia de una explotación conjunta. No es cierto y niega que en el año 1970, específicamente el 23 de octubre de 1970, la actora haya tenido algo que ver con la compra de una fracción de campo equivalente a derechos y acciones sobre veintiuna hectáreas novecientos veinticinco metros cuadrados (21,0925 has.), que en la escritura de adquisición se detallan como “derechos y acciones equivalentes a la mitad indivisa que tiene y le corresponden sobre el siguiente inmueble: una fracción de campo formada por la concesión A. del lote noventa y ocho del plano de la Colonia Juárez Celman, pedanía Cruz Alta, departamento Marcos Juárez, provincia de Córdoba, compuesta de una superficie de CUARENTA Y DOS HECTÁREAS, UN MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA METROS CUADRADOS; y que linda: al Norte, calle de por medio, con el lote sesenta y tres: al Este, con la concesión letra C. del mismo lote noventa y ocho; al Sud, con la concesión D. del lote noventa y ocho; y al Oeste, calle de por medio, con parte del lote noventa y siete, todos de la expresada Colonia Juárez Celman”.- Afirma que las fracciones de campo adquiridas y también las vendidas por su hermano lo fueron siempre con la intervención de su padre don Gaspar Nazareno Martini, en el marco de la una estrecha y estricta relación familiar, iniciada con la explotación agropecuaria conjunta de la Familia Martini a través de su padre. Explotación que efectuó su padre con su hermano Miguel Angel y la colaboración de la suscripta; negocios en los cuales nunca intervinieron ni participaron la concubina de su hermano Elsa Elida Cravero, ni personal ni materialmente. No es cierto y niega que Miguel Angel Martini y la actora hayan sido socios. La actora nunca tuvo injerencia en los negocios de su hermano Miguel Angel ni en su dirección.- Insiste que no es cierto y niega que entre Miguel Angel Martini y la actora haya existido una relación asimétrica desde el punto de vista de la relación afectiva y convivencial establecida por el concubino con la actora. No es cierto y niega que Miguel Angel Martini tuviera rasgos de entender superior o prevaleciente el sexo masculino respecto del femenino, que fuera -pauta cultural características de su explotación-, ni que adujese nada de lo mendazmente expresado por la actora. No es cierto y niega que existiera una situación y ambiente de total confianza recíproca a mérito de la vida en común. No es cierto y niega que existiera dependencia moral de la actora. Miguel Angel Martini nunca fue su socio. No es cierto y niega que por un elemento convivencial el inmueble fue escriturado sólo a nombre del mismo. Las fracciones de campo correspondientes a Miguel Ángel Martini fueron escrituradas siempre respetando la realidad de los hechos y circunstancias de cada momento histórico, en los que ninguna participación le cupo a la actora. No es cierto y niega que la actora haya producido o tenido alguna explotación con Miguel Angel MARTINI en la década del ´70, como tampoco la tuvo antes ni después. No es cierto y niega que en el año 1973, específicamente el 29 de diciembre de 1973, la actora haya comprado algo junto a Miguel Angel MARTINI. Afirma que la actora nada tuvo que ver y ninguna participación de ninguna naturaleza le cupo en la compra de las fracciones de campo que se describen como “a) Una fracción de terreno con todo lo edificado, clavado y plantado y además adherido al suelo, comprendida en el lote sesenta y cuatro de la Colonia Juárez Celman, Pedanía Cruz Alta, Departamento Marcos Juárez, de esta Provincia de Córdoba, la que mide según el plano particular del topógrafo nacional don Conrado L. Vicario agregado a la escritura de su adquisición por el causante, en el costado Sur setecientos setenta y cuatro metros, treinta centímetros; en el costado Oeste mil seiscientos sesenta y dos metros, sesenta y ocho centímetros; en el lado Este mil trescientos metros cincuenta centímetros; y en el costado Norte, a partir del extremo Nor-Este de dicho lote hacia el Oeste, setecientos setenta y tres metros dos centímetros, continuando luego una poligonal sobre el Río Tercero, cerrando la figura, lo que hace una superficie total de CIEN HECTÁREAS, TREINTA AÉREAS, CINCUENTA Y SEIS CENTIAREAS, lindando: Al Norte, en parte con el Río Tercero y en parte, camino de por medio, con el lote cincuenta y siete; al Este, camino de por medio, con el lote sesenta y tres; al Sud, camino de por medio, con el lote noventa y siete; y al Oeste, con mas terreno del lote sesenta y cuatro adjudicado a Evaristo Juan Valvesón (según realidad y plano citado el lado Oeste mide 1.272,68 metros). b) Una fracción de campo con todo lo edificado, clavado, plantado y demás adherido al suelo, ubicado en la concesión C. del lote número cincuenta y siete de la Colonia Juárez Celman, Pedanía Cruz Alta. Departamento Marcos Juárez, de esta Provincia de Córdoba, midiendo según el plano particular del topógrafo nacional don Conrado L. Victorio agregado a la escritura de su adquisición por el causante a que ya se hiciera referencia en el inmueble anterior, en el costado Sur seiscientos veinte y seis metros siete centímetros; en el lado Este ciento veinte y cuatro metros; y al costado Norte y Oeste lo forma una poligonal sobre el Río Tercero, encerrando una superficie de TRES HECTÁREAS, SESENTA Y TRES ÁREAS, SESENTA Y NUEVE CENTIÁREAS, lindando: al Norte y Oeste, con el Río Tercero; al Este, calle de por medio, con la concesión d. del lote número cincuenta y ocho; y al Sud, camino de por medio, con parte del lote sesenta y cuatro”. Operación que en efecto se llevó a cabo mediante Escritura Pública Nº 99 del 29/12/1973, celebrada por ante el Escribano Jorge Alfonso Passerini y que se halla inscrita en el Registro General de Propiedades al DOMINIO N° 13578, FOLIO 19988, TOMO 80, AÑO 1974. No es cierto y niega que el negocio haya sido realizado como maliciosa y mendazmente lo describe la actora.En forma reiterativa la actora inventa y tergiversa hechos y circunstancias, con absoluta mala fe, intentando con ello hacer parecer que algo tuvo que ver con los negocios de su hermano Miguel Angel. No es cierto y niega que una sociedad de hecho entre la actora y Miguel Angel Martini comprara el 55 % consistente en derechos y acciones de propiedad sobre 57,20 hectáreas. Lo cierto es que las dos fracciones, una de CIEN HECTÁREAS, TREINTA AÉREAS, CINCUENTA Y SEIS CENTIÁREAS y otra de TRES HECTÁREAS, SESENTA Y TRES ÁREAS, SESENTA Y NUEVE CENTIÁREAS de superficie descriptas por la actora en su demanda, fueron compradas por su padre Gaspar Nazareno MARTINI y su hermano Miguel Angel MARTINI en condominio, con el producto la venta de las CUARENTA Y DOS HECTÁREAS, UN MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA METROS CUADRADOS que poseían ambos, también en condominio, y que en el mismo momento efectuaron mediante Escritura Pública Nº 100 del 29/12/73 labrada por el Escribano Jorge Alfonso Passerini e inscrita en el Registro General de Propiedades al DOMINIO N° 5016, FOLIO 7636, TOMO 31, AÑO 1974. Aplicaron también para tal operación el resultante de la venta de los frutos y productos agropecuarios obtenidos de las explotaciones en conjunto por su padre y su hermano de ese mismo campo de 104 has. y fracción, de las 42 Has. y de mayor cantidad de tierra que arrendaban a la familia VALVESON. Y que ninguna injerencia ni participación tuvo en estos negocios la concubina de su hermano Miguel Angel MARTINI, quien nunca aportó dinero, ni bienes ni trabajo personal. No es cierto y niega que la actora haya tenido alguna explotación agropecuaria conjunta con Miguel Angel Martini que a fines de los años ’60 e incluso durante toda la década del ´70 manejara un stock de cría para posterior venta, en forma permanente, de unos 850 animales entre bovinos, porcinos y caprinos (aproximadamente 150 vacas, 500 cerdos y 200 chivos) y que se agregaran tareas de siembra de cultivos de trigo y maíz. Lo expresado por ella además de falso es malicioso. No es cierto que la actora haya aportado permanentemente su trabajo y el de su hijo a la explotación de Miguel Angel Martini. No es cierto y niega que a la actora sus padres habitualmente le regalaban dinero de su explotación. No es cierto y niega que la actora colocara dinero en la explotación agropecuaria de Miguel Angel Martini. No es cierto y niega una vez más que la actora haya efectuado aportes económicos o de trabajo a la explotación agropecuaria de Miguel Angel Martini. No es cierto y niega que luego de la muerte de los padres de la actora, aquella haya efectuado algún aporte de todo lo que le redituaba la producción del campo de los mismos No es cierto y niega que la actora haya formado un capital de explotación con Miguel Angel Martini que llevara en algunas oportunidades a vivir situaciones de ausencia de rentabilidad y también de contraimiento de deudas. Las deudas contraídas por su hermano fueron siempre personales e individuales y nunca participó de ellas la actora. No es cierto y niega que la actora haya efectuado aportes dinerarios para pagar deudas contraídas por Miguel Angel Martini en las diversas crisis económicas acaecidas en el país desde la década de 1980 en adelante. No es cierto y niega que la actora haya efectuado aportes de trabajo y también de capital (inmueble propio, heredado de sus padres) para sostener y conservar algo del patrimonio personal de Miguel Angel Martini. Todo lo contrario,lo describe, fue la suscripta quien siempre ayudó y apoyó económicamente a Miguel Angel Martini en las épocas en que contrajo deudas, garantizando realmente con su propio patrimonio y con el campo que poseían en condominio un crédito con garantía hipotecaria (Cédulas Hipotecarias) otorgado a su hermano por el Banco de la Nación Argentina, para superar su abultado endeudamiento. Afirma que Elsa Elida Cravero nunca efectuó aportes patrimoniales a la explotación agropecuaria de su hermano Miguel Ángel, y que lo único que compartió con el fue su compañía de concubina, y nunca prestó su garantía personal ni real en las épocas en que la explotación de su hermano lo necesitó para afrontar el pago de deudas contraídas. No es cierto y niega que la relación concubinaria que tuvo la actora con Miguel Angel Martini, siempre fue excelente. No es cierto y niega que fuera un verdadero matrimonio, aunque no se hubiesen casado legalmente. No es cierto y niega una vez que una sociedad de hecho entre la actora y Miguel Angel Martini comprara las dos propiedades inmuebles relatadas por la actora. No es cierto y niega que haya habido períodos desastrosos desde el punto de vista económico para la actora. No es cierto y niegaque la actora haya llevado a cabo con Miguel Angel Martini producción alguna. No es cierto y niegaque en algún momento la actora se haya endeudado con diversos acreedores de Miguel Angel Martini y con entidades bancarias. No es cierto y niega que la actora haya realizado mucho sacrificio laborativo. Afirma que nunca fue socia de Miguel Angel Martini ni contrajo obligaciones, ni deudas relacionadas con la explotación agropecuaria de su hermano; ningún quebranto llevó a cabo la misma; ni trabajó a pérdida. No es cierto y niega que existieran deudas de una sociedad de hecho entre la actora y su hermano, porque nunca existió tal sociedad, que inventó la actora, tampoco existieron socios. No es cierto y niega que existiesen planteles bovinos y porcinos en que la actora tuviese alguna participación. No es cierto y niega que la actora haya aportado dinero de la renta de un campo que heredó de sus padres. No es cierto y niegaque la actora y su hermano hayan constituido una sociedad para disfrutar de los buenos momentos económicos y para soportar conjuntamente las pérdidas y las deudas. No es cierto y niega que entre la actora y Miguel Angel Martini operara una affectio societatis indestructible. Afirma que jamás existió entre los concubinos ni el más mínimo atisbo de affectio societatis. No es cierto y niegaparticipación alguna de la actora en la reconvención general del sector agropecuario. No es cierto y niega que la actora haya tenido algo que ver con el destino del cultivo de soja dado por su hermano Miguel Angel al campo, o que pertenecieran a la actora algunos de sus animales. Es cierto que a fines del año 2007 su hermano decidió ir a vivir al pueblo, pero solo hasta allí verdad. Desconoce por no constarle, que una casa, que según título se detalla como “Fracción de terreno que es parte del solar “H” de la Quinta Treinta ubicado en Cruz Alta, pedanía del mismo nombre, departamento Marcos Juárez, provincia de Córdoba que mide: Catorce metros cincuenta centímetros de frente al Sur por Treinta y nueve metros de fondo, encerrando una superficie de QUINIENTOS SESENTA Y CINCO METROS CINCUENTA DECÍMETROS CUADRADOS y linda: al Norte con mas terreno del solar H; al Este con terreno de la misma Quinta de Elena Josset de Gorostegui; al Oeste, con solar G y al Sur, con calle Moreno” y está escriturada e inscripta registralmente a nombre de la actora, haya sido comprada con recursos de una sociedad de hecho que la misma denuncia en su artificiosa demanda. Desconoce por no constarle, que el inmueble de mención haya sido puesto sólo a nombre de la actora por alguna razón. No es cierto y niega que su concubino aplacara rasgos culturales que maliciosamente y de mala fe le atribuye la actora, a sabiendas que su buen y querido hermano no podrá defenderse ni replicarle. No es cierto y niega nuevas circunstancias existenciales y culturales que alega la actora.- Insiste que no es cierto y niega que Miguel Angel Martini entendiese razonable que, si total era de la sociedad de hecho, la casa figurara a nombre de la actora. No es cierto y niega que Miguel Angel Martini estuviera haciendo figurar a su nombre bienes inmuebles que eran de una sociedad. No es cierto y niega que la actora haya tenido alguna participación o aporte en la compra de la camioneta Dominio ELZ-434. No es cierto y niega que la camioneta Dominio ELZ-434 fuera de una sociedad de hecho. Afirma que la camioneta de mención, marca Chevrolet, modelo 321 – S10 2.8 DLX T.I. (CABINA DOBLE) año 2004, pertenecía al momento de su muerte a su hermano Miguel Angel Martini, por compra que el mismo realizó en vida, en su condición de soltero, el 14/07/209, siendo el 100% de su exclusiva titularidad; al igual que afirma que para adquirir esta última dispuso la venta otra pick-up marca Chevrolet, que tenía hasta ese momento, modelo 44 – CONQUEST TURBO PLUS/1996, Dominio AYQ947, que fue vendida a la señora Clelia Ramona BENITEZ. No es cierto y niega que por el fallecimiento de Miguel Angel Martini, el día 3 de diciembre de 2009, haya concluido alguna sociedad de hecho.- Señala que es lamentable que la actora, valiéndose de la muerte de su hermano, ofenda su memoria con peyorativas descripciones sobre su personalidad y conducta, y pretenda ir más allá de la relación concubinaria que mantenían, aprovechándose del estado de indefensión que la desaparición física de una persona trae aparejada, mintiendo alevosamente y tratando de engañar a sobre una inexistente sociedad de hecho. Afirma que los inmuebles rurales quedados al fallecimiento de su hermano Miguel Angel Martini nunca pertenecieron a ninguna sociedad. Afirma una vez más la inexistencia de esfuerzo en común, ahorro en común y affectio societatis entre la actora y su extinto y querido hermano Miguel Angel Martini. No es cierto y niega que la actora esté detentando la posesión de los inmuebles rurales descriptos supra. Los hechos inventados por la actora y las innumerables falsedades en su relato hacen que se hallen ante un fraude procesal en grado de tentativa, ya que se pretende atribuir a una persona fallecida actos y hechos inexistentes y falsos para obtener de ello un beneficio patrimonial indebido. Los hechos y circunstancias verdaderos sobre la evolución patrimonial de su hermano Miguel Angel MARTINI, cuya historia se halla estrechamente ligada a la suscripta y a su “Familia”, es la siguiente: en el año 1938 (17/09/1938) se casan sus padres Gaspar Nazareno MARTINI y María Luisa SCARPETTA.En el año 1940 su padre y su hermano llamado José Enrique Martini comienzan a trabajar en sociedad, haciéndolo ambos en el campo durante diez años.En el año 1948 su padre Gaspar Nazareno Martini y su hermano José Enrique Martini compran en condominio de iguales partes a los señores Luis FORAY y otros, mediante escritura N° 112 de fecha 20/09/1948 labrada por el escribano Gustavo H. Martínez Recabarren, una fracción de 42 HAS. 1.850 MTS.2, que se describen como “Una fracción de campo con todo lo edificado, clavado y plantado, formada por la concesión A. del lote noventa y ocho del plano de la Colonia Juárez Celman, pedanía Cruz Alta, departamento Marcos Juárez, provincia de Córdoba, compuesta de una superficie de CUARENTA Y DOS HECTAREAS, MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA METROS CUADRADOS; y que linda: Al Norte, calle de por medio, con el lote sesenta y tres; al Este, con la concesión letra C. del mismo lote noventa y ocho; al Sud, con la concesión D. del lote noventa y ocho; y al Oeste, calle de por medio, con parte del lote noventa y siete, todos de la expresada Colonia Juárez Celman.” Que en ese mismo año alquilan a Guillermo VALVESON una fracción de campo cercana a la adquirida y allí fuimos a vivir todos, en esa propiedad rural, ella tenía solo 5 años y su hermano Miguel Angel 9 años de edad. En el año 1950, tras el fracaso de las cosechas, su tío José Enrique Martini se retira del campo para radicarse en el pueblo de Cruz Alta y se reparten con su padre Gaspar Nazareno Martini en mitades el capital de explotación, es decir los bienes muebles y animales que poseían en sociedad, entregándole su padre el cincuenta por ciento a su hermano y quedándose en el campo en pésima situación económica, sin dinero para pagar empleados; que comenzaron con su hermano a colaborar con su padre en las tareas del campo, yendo al colegio medio día y el otro medio día boyereando los cerdos y vacunos.En el año 1954, lograron comprar un tractor, porque la situación económica había mejorado en esos 4 años; ella con 11 años trabajaba en el campo con caballos y con el tractor, habiendo aprendido junto a su padre y a su hermano Miguel Angel casi todas las tareas del campo.En el año 1956 su padre Gaspar Nazareno Martini compra al señor Pedro PIZZOLATO una fracción de campo de CUATRO HECTÁREAS, TRES AREAS Y TREINTA Y OCHO CENTIAREAS, mediante escritura N° 31 de fecha 15/06/1956, labrada por el escribano Jorge Alfonso Passerini; inscribiéndose el Dominio al N° 15.738, FOLIO 18.703, TOMO 75 del Año 1956,fracción que al fallecer su hermano heredamos en condominio de iguales partes con su hermano.En el año 1959 con sus padres emparvaban pasto y sacaban bolsas de maíz en espiga que luego se colocaban en trojas; en ese tiempo tenía 15 años y esas tareas las realizaba porque su hermano estaba afectado al servicio militar obligatorio, y ella debía continuar colaborando con sus padres, siempre en absoluta armonía con su familia y con el solo afán de su bienestar. En el año 1961 contrajo matrimonio con Nazareno PIRANI, el 14 de Enero de ese año, teniendo ella 17 años.En el año 1970 con la ayuda de su padre y la anuencia como hermana ya que su hermano no contaba con recursos propios suficientes, Miguel Angel Martini compra a su tío José Enrique Martini la mitad indivisa de la facción de CUARENTA Y DOS HECTÁREAS, UN MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA METROS CUADRADOS que poseía aquel en condominio con su padre; haciéndolo a través de escritura N° 149 de fecha 23/10/1970, labrada por el escribano Jorge Alfonso Passerini. En el año 1973 su padre Gaspar Nazareno Martini y su hermano Miguel Angel venden a Ernesto Alejandro Zaniolo y Orlando Nazareno Zaniolo la facción de CUARENTA Y DOS HECTÁREAS, UN MIL OCHOCIENTOS CINCUENTA METROS CUADRADOS que poseía en condominio; haciéndolo a través de escritura N° 100 de fecha 29/12/1973, labrada por el escribano Jorge Alfonso Passerini. Concomitantemente en esa misma fecha (29/12/1973) su padre y su hermano Miguel Angel compran a doña Lidia Iris VALVESON de FISSER y a doña Cleria Josefa VALVESON de FRANCHINI en la proporción del 45% y 55% indiviso respectivamente, dos fracciones de campo que anteriormente arrendaban sobre el lote N° 64 de la Colonia Juárez Celman, pedanía Cruz Alta, departamento Marcos Juárez, con una superficie de 100 Has. 30 As. 46 Cas. la primera y la otra fracción ubicada en la concesión c. del lote N° 57 de la misma Colonia, que encierra una superficie de 3 Has. 63 As. 69 Cas., aplicando para dicha compra lo obtenido por la venta de las 42 Has. y fracción y dinero aportado por sus padres Gaspar Nazareno MARTINI y su madre María Luisa SCARPETA producto de la explotación agropecuaria que en forma familiar venían realizando. Acota que la actora Elsa Elida CRAVERO comenzó a cohabitar con su hermano Miguel Angel en el año 1964, pero jamás realizó trabajos de campo ni efectuó ningún aporte material ni de ninguna otra naturaleza o especie para el negocio y explotación de su hermano Miguel Angel. Su hermano Miguel Angel realizó siempre la actividad agropecuaria a nivel familiar junto con su padre Gaspar Nazareno Martini, y tras su fallecimiento lo continuó haciendo en forma individual y personal hasta su muerte, contando siempre con su ayuda y colaboración económica. En el año 1979 fallece su padre e iniciaron su sucesión; a su madre se le adjudica el usufructo vitalicio sobre dos inmuebles urbanos; correspondiéndole a su hermano Miguel Angel Martini el 50% indiviso sobre los inmuebles rurales que en la proporción del 45% indiviso le correspondía a su padre por la compra efectuada a doña Lidia Iris VALVESON de FISSER y a doña Cleria Josefa VALVESON de FRANCHINI de las dos fracciones de campo identificadas como lote N° 64 de la Colonia Juárez Celman, pedanía Cruz Alta, departamento Marcos Juárez, con una superficie de 100 Has. 30 As. 46 Cas. la primera y la otra fracción ubicada en la concesión c. del lote N° 57 de la misma Colonia, que encierra una superficie de 3 Has. 63 As. 69 Cas., y el 50% indiviso sobre la fracción de campo de CUATRO HECTÁREAS, TRES AREAS Y TREINTA Y OCHO CENTIÁREAS, anteriormente citadas. En cuanto a su parte le correspondió también el 50% indiviso sobre los mismos inmuebles rurales descriptos supra. Que continuó siempre colaborando económicamente con su hermano Miguel Angel tanto con los honorarios de la sucesión como con los gastos que demandó la construcción de la nueva casa, galpones, silos y todo lo clavado y plantado en el predio de 104 Has. y facción. También le cedió íntegramente para que pudiera evolucionar lo producido por las hectáreas de campo que le correspondieron por herencia, y que continuó trabajándolas y usufructuándolas su hermano; también le cedió la totalidad de los animales vacunos y porcinos existente al momento del fallecimiento de su padre. En el año 1995, tendiente a superar el endeudamiento de su hermano con la Cooperativa Agrícola Ganadera Cruz Alta Limitada, se gestiona un crédito en el Banco de la Nación Argentina, sucursal Los Surgentes, obteniendo Miguel Angel un préstamo de cédulas hipotecarias rúales serie 3 para lo cual y como garantía real y su propia garantía. De modo tal que fueron hipotecadas las tres fracciones que en condominio poseían con su hermano, poniendo en riesgo lo que le correspondía, pero haciéndolo con gusto por tratarse de su querido hermano y para que no tuviese que vender parte de su capital y pudiera saldar la deuda. Ninguna participación tuvo en todo aquello la concubina de su hermano. De lo precedentemente expuesto da cuenta la Escritura N° 163 labrada en fecha 15 de diciembre de 1995 por el escribano público Carlos Italo RIVA en la localidad de Monte Buey, que en fotocopia se acompaña. La señora CRAVERO mantuvo una relación concubinaria de muchos años con Miguel Ángel MARTINI, que comenzó aproximadamente a los dos años de ocurrido el fallecimiento de su cónyuge CANTONI, con quien tuvo dos hijos, pero nunca formó con su hermano una sociedad. Es que de por sí la relación de concubinato no hace surgir una sociedad de hecho, ni la presunción de que exista, siendo preciso que se hayan producido real y efectivamente aportes patrimoniales, jamás realizados por la actora. En el ámbito de las relaciones extrapatrimoniales o concubinarias no resultan de aplicación los fundamentos de orden público que sustentan el régimen de bienes del matrimonio, como la comunidad de ganancias. Afirma que tras ser declarada única y universal heredera de su hermano y conferírsele judicialmente la posesión de la herencia tiene el derecho de detentar la misma.Asimismo, respecto de la porción correspondiente a su hermano sobre los inmuebles rurales descriptos supra, con su anuencia, conformidad y consentimiento fueron arrendados en vida por Miguel Angel a los señores Jorge Carlos BIZET, Federico GINEVRÓ y Rodolfo Oscar ZANIOLO, en fecha 24 de mayo del año 2007, por el plazo de cinco años, excluidas sus 25 HAS.; haciéndolo mediante CONTRATO DE ARRENDAMIENTO AGRÍCOLA QUE EN COPIA adjunto con el presente.Que en el contrato de arrendamiento de mención se excluyeron también expresamente de la totalidad de las mejoras consistentes en una casa-habitación, galpones, silos, molinos, aguadas, corrales, pista de engorde, instalación de electrificación rural, etc., todo lo cual ocupa una superficie aproximada de Tres hectáreas, cincuenta áreas (3,50 Has.), incluido el camino interno de acceso al camino público rural, quedando las mismas reservadas para el uso excesivo y excluyente del arrendador durante toda la vigencia del contrato. Que con respecto a ese predio y mejoras descriptas supra que perteneciera a su hermano en condominio con la suscripta, el día 10 de febrero de 2010 celebró un contrato de comodato con el señor Victoriano ROJAS y la señora Ernestina CONTRERA; instrumento que también acompaña.Trascurrido el plazo establecido en el contrato de comodato, sus comodatarios le restituyeron el inmueble desocupado, juntamente con las llaves de la vivienda, hallándose actualmente todo aquello ocupado por su hijo Daniel Lucio PIRANI, sobrino de su hermano Miguel Angel. Que no le caben dudas que los hechos falsamente relatados en la demanda por la actora nunca ocurrieron y que el reclamo judicial de declaración de existencia de una sociedad de hecho entre la actora y su hermano Miguel Angel Martini, la disolución y liquidación merecen un enérgico y total rechazo con expresa imposición.Idéntica suerte deberá correr el planteo subsidiario de la actora de que se reconozca judicialmente la existencia de un condominio con interposición de persona y una participación en condominio con Miguel Angel Martini en una proporción de derechos y acciones sobre cada uno de los bienes inmuebles escriturados e inscriptos registralmente a nombre del mismo.----------III.-Diligenciada la prueba ofrecida y firme el decreto de autos dictado a fs. 399 queda la presente causa en estado de ser resuelta.----------------------------------------------Y CONSIDERANDO: I.- LaLitis.- La Sra. Elsa Elida Cravero impetra demanda en contra de la sucesión del Sr. Miguel Ángel Martini y/o su heredera Alicia Josefa Martini de Pirani para que previa declaración de la existencia de la sociedad de hecho que constituyó con el Sr. Miguel Angel Martini, se declare judicialmente la disolución de la misma y se proceda a su liquidación. Por otro costado, al comparecer la demandada, Sra. Alicia Josefa Martini, contradice enfáticamente la acción entablada en su contra solicitando su rechazo.-----------------------------------------------------------------------------------------------Queda de este modo planteada la cuestión a resolver.--------------------------------II.- La sociedad cuya liquidación se pretende en autos, debe ser previamente considerada en su existencia, puesto que no se puede pensar la disolución si primeramente no se dilucida su génesis. El ente ideal que se trata, se encuadra en el art. 21 de la L.S. (es una sociedad de hecho), quedando comprendida en consecuencia, para su tratamiento, en la sección IV del título Primero de la Ley Societaria. En primer lugar se evidencia la inexistencia de un contrato social constitutivo, por lo que en definitiva habrá de estarse a las constancias probatorias, las que podrán ser suficientemente convictivas en tanto los elementos aportados traduzcan en la realidad la presencia de hechos concretos y certeros sobre la existencia efectiva del ente ideal.---------------------Sabido es que las sociedades de hecho, son aquellas que no tienen instrumentado su contrato constitutivo, pero cumplen con una actividad mercantil, que se traduce en la formación del capital con el aporte de cada uno de los integrantes, y la participación en los beneficios y las pérdidas (Conf. NISSEN, Ricardo Augusto, “Sociedades irregulares y de hecho”, Ed. Hammurabi, Bs.As., 2ª. Reimpresión, pág. 24.). Así se ha resuelto que “La prueba de la sociedad de hecho, si bien se halla regida por un criterio de amplitud respecto de los medios de acreditación, encuentra limitación en lo que atañe al rigor en la valoración de los hechos y circunstancias probatorias. Por ello, la prueba del contrato debe ser no sólo convincente e idónea, sino inequívoca y concluyente y, en caso de ser negada la sociedad, la carga probatoria de su existencia recae incuestionablemente en el actor” (C.Nac.Com. Sala C, 1/12/92, JA 1996-III).------------- Autorizada doctrina societaria y concordante jurisprudencia sostiene que la acreditación de la personalidad precaria de una sociedad de hecho, constituye una circunstancia que puede analizarse desde cualquier medio de prueba -en lo que implica una amplitud de criterio en el ofrecimiento- pero su apreciación debe ser rigurosa, meritándose si de su conjunto surge un serio poder de convicción que autorice a admitir la existencia de la misma, por las gravosas consecuencias que puedan derivar de su reconocimiento. (Conf. Ricardo A. Nissen, Ley de Sociedades Comerciales, Tomo I, pág. 141, Ed. Abaco).-------------------------------------------------------------------------------No se puede sustentar válidamente que el cumplimiento o incumplimiento de una obligación determinada o indeterminada en su nomenjuris devenga en una sociedad de hecho, ello por cuanto el medio societario comercial no puede fijarse en las reglas comunes a los contratos de cambio donde existen prestaciones reciprocas entre las partes, puesto que en los contratos de organización plurilateral, las obligaciones de los socios están dirigidas al ente común distinto de todos ellos. De esta inteligencia surge que la existencia de la sociedad entre la Sra. Elsa Nélida Cravero y el Sr. Miguel Ángel Martini, negada por la sucesora de éste último -Sra. Alicia Josefa Martini- puede ser probada por cualquier medio de prueba (art. 25 Código de Comercio), con sujeción a las normas del derecho común conforme su “exposición de motivos”, de las que “...debe tratarse de una prueba convincente e idónea, imponiéndose analizar las probanzas aportadas a fin de apreciar si de su conjunto surge un serio poder de convicción que autorice a admitir la existencia de una sociedad de hecho” (Conf. NISSEN, “Sociedades irregulares...”,pág. 133).-----------------------------------------------------------III.- Corresponde en efecto, analizar el material probatorio acompañado en autos. En primer lugar la accionante ha ofrecido numerosos testigos de los que destaco los siguientes conceptos: a) el Sr. Orlando Nazareno Zaniolo, quien tenía amistad con ambas partes, indica que desde que se juntaron (“sesenta y pico”)la Sra. Cravero le ayudaba a su marido a realizar las tareas relacionadas con el campo, atender los animales, específicamente cerdos, chivos, corderos, con las vacas a veces también cuanto tenía trabajos que se hacen, por ejemplo separación de animales, atención de terneritos, los cerdos, chivos, cuando los mataba, ella le ayudaba. El testigo refiere que le supo comprar. “Desde el momento que se juntaron fue así, antes la mujer de campo se sabe como era, significa que le ayudaba al marido a realizar todas las tareas relacionadas con las tareas del campo.” Siempre la veía trabajando. De la personalidad de Elsa Cravero señala que era una persona normal, muy abocada a su familia, estuvo siempre junto con Miguel, piensa que lo debió haber atendido muy bien; que cuando Miguel salía a trabajar ella estaba ahí, siempre en el campo, atendiendo las cosas de la chacra. Que tenían aproximadamente 100 chivos, 200 o 300 chanchos y 100 vacas, también corderos y pollos (200 aves) y cuando el Sr. Martini efectuaba trabajo para terceros la Sra. Cravero con su hijo quedaban a cargo de la atención a los animales. Que Elsa Cravero tiene campo de herencia de su padre, desde la década del 80 lo trabajaba Martini hasta el 2007 (fs.137/138); b) el Sr. Rodolfo Oscar Zaniolo, preguntado con quien arreglaron el arrendamiento del campo que la Sra. Cravero tendría a su nombre, ello a partir de 2007, señala que se arregló con el Sr. Martini el valor del arrendamiento y condiciones contractuales pero que el contrato se firmó con Elsa Cravero, que el Sr. Martini le daba los insumos y el valor de los trabajos; que el Sr. Martini se dedicaba a la agricultura, tenia cerdos y chivos en el campo donde vivía con Elsa Cravero; que Elsa Cravero participaba en esas actividades, sabe que renegaba mucho con las heladas cuando se levantaban temprano, con el tema de los chanchos con los calores; que el Sr. Martini le ofreció al testigo el alquiler de todo el campo que estaba trabajado él y el de Elsa Cravero (fs. 142/143); c) el Sr. Miguel Ángel Carrascal, amigo desde pequeños de la actora y el Sr. Martini, quien refiere que las tareas que efectuaba la Sra. Cravero eran las de ama de casa nomás, ya que nunca a vio hacer otras; que los animales que tenía Martini eran para la venta a terceros; agrega que la accionante tiene campo propio herencia de su padre el que era trabajado por Martini pero cuando lo dejó de laborear se lo alquiló a Zaniolo (fs. 178/179); d) el Sr. Eduardo José Santiago Vecchi, amigo íntimo de las partes, testifica que cuando Martini y Cravero se juntaron se fue a vivir con ellos el hijo de ésta última; que Martini cosechaba en campo propio y cree que lo hacía también en el campo de su suegro, es decir al padre de Elsa Cravero; que Roberto Oscar Cantoni, hijo de Elsa, trabajaba con Martini como cualquier empleado rural; agrega que Elsa realizaba tareas en el campo en los momentos en que Martini no estaba, es decir cuando salía a enfardar, sembrar o cosechar; daba agua o comida a los animales, “…hacía las tareas de la casa y también barrer el patio, atender las gallinas, como toda mujer de campo.”, que Martini a partir de 1970 decidió criar cerdos “porque era rentable, una chacra chica había que hacerla media mixta, es decir tener cereal, cerdos, ovejas, vacas…” (fs. 180/181); e) la Sra. Fabiana Dolores Fiorelli, de profesión asesora impositiva, depone señalando que la Sra. Elsa Cravero tenía registración y movimiento impositivo desde el año 2007 o 2008, momento en el que hizo contrato de alquiler de un campo de su propiedad con el Sr. Zaniolo para lo cual tuvo que inscribirse; adita que cree que la actora tiene cuenta en la Coop. Agrícola Ganadera de Cruz Alta desde que se inscribió impositivamente, pero que ella no operaba con ningún banco ya que carece de documentación que avale dicho manejo (fs. 195/196); f) el Sr. Ricardo Pedro Stremiz testimonia que la Sra. Cravero atendía los animales (comida, bebida y veía si había alguno enfermo) cuando el Sr. Martini salía por ejemplo con la enfardadora y que dichas tareas también las realizaba el nieto de Cravero, es decir, cuando estaban los hombres las labores las realizaban ellos; refiere que nunca la vio sola trabajando; que la veía a la Sra. Cravero haciendo los trabajos con los animales junto con el nieto y con el Sr. Martini, que hace más de cuarenta años que vió esto. (fs. 203/204); g) la Sra. Susana Celina Voirrer indica que la Sra. Cravero colaboraba con las tareas del campo haciendo cosas lógicas de una casa de familia, también colaboraba con la vacunación de los animales; que tenían muchos animales y vendían; que la veía en el corral cuando había animales chiquitos darles la mamadera, darle agua a los cerdos y cuando una cordera o una chiva abandonaba a sus crías, Elsa Cravero los alimentaba para darle vida y salvarlos, sabe que también ordeñaba vacas. (fs. 206/208); similar apreciación en relación al trabajo conjunto de Cravero y Martini, con los animales formulan los testigos José Eduardo Juan (fs. 210/211) y Hugo Eduardo Juan (fs. 213/214); h) el Sr. Horacio Adolfo Vidoret, vecino de las partes, señala que en el campo vivían ahí “el Loli y la Mirta que eran los hijos de Elsa”; que Elsa hacía los trabajos de la casa y que los animales que criaba algunos los comían y el resto se vendía; que Cravero sabía atender a las chanchas cuando estaban pariendo (fs. 215/216); i) Jorge Antonio Martiñena la vio a Elsa Cravero en el corral apartar animales de un corral a otro para venderlos, castrarlos o vacunarlos, que ayudaba como lo hacen las mujeres de campo (fs. 208/209); j) la Sra. Rosa Gómez Viuda de Frutero, amiga de ambas partes, indica que el Sr. Martini y la Sra. Cravero trabajaban conjuntamente, el primero en el campo y la segunda en tareas de cuidado de la casa y algunas como ordeñar vacas; que tenía vacas y cerdos, siendo algunas vacas de propiedad del padre de Elsa, pero los cerdos en su mayoría eran de Miguel, mientras que los chivos los iban comprando juntos, teniendo conocimiento de ello la testigo en virtud de los propios comentarios del Sr. Martini; agrega que “en una oportunidad trajo una libreta o cuaderno con una anotación de los animales del padre de Elsa y los animales de él… eso fue ni bien faltó el papá de Elsa Cravero” (fs. 217/219).-----------------------------------------------------------------------------Por otro costado la heredera demandada ofreció sus testigos de los que se puede detallar lo siguiente: a) la Sra. Ernestina Contreras y el Sr. Victoriano Gustavo Rojas reconocen la firma y fecha del contrato de comodato obrante a fs. 70/71, donde el Sr. Martini cedió en comodato un inmueble de aproximadamente 3 hectáreas situado en la zona rural de Cruz Alta (fs. 305 y 341); b) el Sr. Jorge Alberto González refiere que la Sra. Cravero trabajaba como ama de casa y que el “Loli” (hijo de otro matrimonio de la Sra. Cravero) sembraba soja alrededor del campo y un pedazo del vecino porque Miguel le prestaba las herramientas y le daba la semilla y los líquidos, que eso era para el Loli (fs. 314/315) yc) el Sr. Guillermo Garuba de profesión martillero y corredor inmobiliario por su parte señala que conoce al Sr. Martini por una venta de un terreno que estaba a nombre de Alicia Martini por el año 2006, operatoria en la que la Sra. Cravero no tuvo intervención alguna (fs. 322).-------------------------------------------------IV.- Ahora bien, no cabe duda alguna de la existencia de concubinato entre la Sra. Cravero y el Sr. Martini, ello no ha sido controvertido y ha quedado suficientemente acreditado con la prueba testimonial referida y especialmente con la declaración jurada de fs. 108, de fecha 19 de setiembre de 2000, en la cual el Sr. Miguel Angel Martini manifiesta encontrarse unido en concubinato con la Sra. Elsa Elida Cravero, desde hace cuarenta y dos años. Se reafirma ello con la declaración efectuada en similar sentido por la actora a fs. 161, dando cuenta del concubinato desde el año 1964 hasta el día 03 de diciembre de 2009, fecha de fallecimiento del Sr. Martini. Sabido es que no por probarse la existencia de concubinato puede presumirse también entre sus miembros la conformación de una sociedad de hecho. Esta “debe ser demostrada mediante la prueba de aportes y de la participación en las utilidades y pérdidas. Dice Graciela Medina que “la sociedad de hecho es un contrato por el cual dos o más personas acuerdan poner en común alguna cosa con el objeto de repartirse el beneficio que pueda obtenerse y deben existir tres elementos para que se considere evidenciada, ellos son: 1) la existencia de aportes; 2) la participación en los beneficios o en las pérdidas y 3) la intención de celebrar un contrato de sociedad” (http://www.gracielamedina.com/proceso-de-las-uniones-de-hecho-y-concubinato/).Adelanta el suscripto la evidente existencia de estos elementos en la relación convivencial de la Sra. Cravero y el Sr. Martini. En relación a los aportes comunes (de trabajo o capital) todos los testigos son contestes en sus declaraciones sobre la labor mutua y cooperativa desarrollada por la pareja. La crianza y cuidado de los animales era realizada en forma común, por supuesto descontando que las tareas más rudimentarias o pesadas quedaban a cargo del Sr. Martini. Aparte de ello realizaba también la actora las tareas de la casa, y si bien señala Medina (artículo citado) que las tareas domésticas no guardan relación de causalidad con la comunidad de trabajo originada por la sociedad de hecho, no se puede compartir tal afirmación cuando de lo que se trata es de un hogar rural, y más en el contexto cultural, histórico y geográfico en el cual se desarrolló la unión convivencial, donde si bien las labores de la casa eran a cargo de la mujer, no acababa su tarea en ello, sino que también realizaba trabajos en el mismo ámbito -la casa y la chacra estaban en un mismo lugar- por fuera de lo que realiza cualquier ama de casa de zona urbana. Señalan los testigos que el producido de los animales era destinado a la venta, y evidentemente quien se encargaba del aspecto dinerario era el Sr. Martini. La economía y finanza corría por cuenta del Sr. Martini, la pericia contable da cuenta de ello (fs. 236/250), a él se le pagaba por los arrendamientos, era quien ponía las condiciones de su campo y el de su conviviente y era él quien vendía los animales y tenía registración y asistencia contable, como también movimiento bancario -fs. 173- y cooperativo -fs. 189-, la Sra. Cravero recién registra movimiento en cooperativa a partir del año 2000 -fs. 232- y si bien parte de los beneficios se destinaba a la subsistencia de los convivientes, cabe entender que el excedente era reinvertido en bienes que no ingresaban al patrimonio de la Sra. Cravero, (véase escrituras de fs. 92/94 vta. de 1970 y 98/101 de 1973) quien veía así afectada su economía, producto de una raigambre cultural patriarcal, me permito concluir, evidenciando ésta una discriminación cruzada de género, por ser mujer, ama de casa, conviviente, y trabajadora en el ámbito rural, en décadas en que la perspectiva de género no se vislumbraba en nuestro país. Tal discriminación no puede dejar de destacarse para entender si se quiere el porqué de la inscripción registral de todos los bienes de importancia económica a nombre del integrante masculino de la sociedad. En un contexto de igualdad de género no resulta permisible tal proceder y el sentenciante como operador jurídico tiene el deber de reparar tales conductas, bajo riesgo de inobservar los numerosos tratados internacionales que propenden a una sociedad más justa e igualitaria. En su preámbulo la Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer, reconoce explícitamente que "las mujeres siguen siendo objeto de importantes discriminaciones" y subraya que "esa discriminación viola los principios de la igualdad de derechos y del respeto de la dignidad humana". Según el artículo 1, por discriminación se entiende "toda distinción, exclusión o restricción basada en el sexo [...] en las esferas política, económica, social, cultural y civil o en cualquier otra esfera". La Convención afirma positivamente el principio de igualdad al pedir a los Estados Partes que tomen "todas las medidas apropiadas, incluso de carácter legislativo, para asegurar el pleno desarrollo y adelanto de la mujer, con el objeto de garantizarle el ejercicio y el goce de los derechos humanos y las libertades fundamentales en igualdad de condiciones con el hombre" (artículo 3). Por el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, en su artículo 3, Los Estados Partes se comprometen a asegurar a los hombres y a las mujeres igual título a gozar de todos los derechos económicos, sociales y culturales. La Ley 26.485, de protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales, tiene por objeto entre otros “a) La eliminación de la discriminación entre mujeres y varones en todos los órdenes de la vida; […] e) La remoción de patrones socioculturales que promueven y sostienen la desigualdad de género y las relaciones de poder sobre las mujeres”; esta ley garantiza todos los derechos reconocidos por la Convención para la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer, la Convención Interamericana para Prevenir, Sancionar y Erradicar la Violencia contra la Mujer y en especial, los referidos a: La integridad física, psicológica, sexual, económica o patrimonial.----------------------La clara afectación de la economía de la Sra. Cravero, que permaneciera oculta durante la vida en común, en la cual se le asignara una función estereotipada, subordinada a una relación de poder de género, aflora incuestionable a la muerte del conviviente, por la disolución y liquidación de esa sociedad constituida bajo la protección del amor familiar. Las conductas de las partes, el trabajo o esfuerzo conjunto y en miras de un objetivo, crianza de animales para su venta y demás tareas agrícolas con fines de lucro, reflejan sin dudarlo la affectio societatis existente entre las partes. Tenemos en consecuencia probados los aportes, la participación en los beneficios (y pérdidas) y la affectio societatis, con los cuales resulta que la pareja de convivientes constituían además de una verdadera familia, una sociedad de hecho, sobreviniendo a partir de la muerte de uno de los integrantes la necesaria partición de los bienes que la componen.--------------------------------------------------------------------------------------------La conclusión arribada debe asentarse especialmente dentro de una perspectiva de género (como forma de ver, conocer y aprehender la realidad) y a la luz de uno de los más nobles principios del derecho como es la equidad. En este iter conceptual no cabe dudas que a la accionante le asiste una verdadera “compensación económica”, entendida ésta como una obligación surgida en la existencia de una sociedad de hecho a la par de un concubinato debidamente consolidado, acarreada por la disolución del mismo -en el caso bajo análisis por el fallecimiento de uno de los integrantes- cuya forma de determinación yace en el desequilibrio ostensible existente durante la relación, pero debe ser repartido en forma equitativa por ser ambos en partes iguales socios de hecho. Los parámetros en que fundo la decisión y que se corroboran con la prueba incorporada pueden resumirse de la siguiente manera: a) que se ha probado a más del concubinato la sociedad de hecho constituida por los integrantes de aquel y b) que con motivo de la ruptura de la relación concubinaria ha aflorado un desequilibrio manifiesto de la situación por la que atravesaba la actora, por cuanto, apoyados en la confianza propia del concubinato, la adquisición de bienes inmuebles durante dicho estado ha sido realizada a título personal por el Sr. Martini cuando surge claro que éstas pertenecían a la sociedad de hecho existente.--------------------------------------------------------------------Insisto, no se puede soslayar la verdadera solidaridad familiar sumada ello a una verdadera “affectio societatis” que atravesó por muchos años el concubinato bajo estudio, no pudiendo convertirse éste en un enriquecimiento para uno a costa del otro. Es notable la constante dedicación de la Sra. Cravero para el sostenimiento de la empresa familiar gestada, que redituaron en la faz laborativa del Sr. Martini, quien gracias a ello, podía continuar con el desarrollo de sus actividades mercantiles y el consecuente engrandecimiento de su patrimonio.----------------------------------------------V.- Como corolario, la correspondiente disolución de la sociedad de hecho debe prosperar, debiendo adjudicar en partes iguales los bienes ingresados al patrimonio de las partes durante la vigencia del concubinato y sociedad de hecho, lo que refleja una justa compensación valorada a la luz de la conducta habida por los cónyuges a través de casi una vida juntos (nótese que convivieron desde que ambos eran adolescentes), embarcados en un proyecto de esfuerzo compartido y solidaridad familiar y cuya inobservancia constituiría una falta de equidad manifiesta respecto de los aportes producidos por cada conviviente.-----------------------------------------------------------------En similar sentido se expide la Excma. Cámara Civil, Comercial, de Trabajo y Familia de la Sede, en autos “BAS, Santa Magdalena c/ SUCESIÓN DE JOSÉ ROQUE GONZALEZ Y OTROS – Liquidación de Sociedad de Hecho – Apelación (Expte. N° 727747), por Sentencia N° 8, de fecha 09 de abril de 2015, considerando en atención “al progreso contemporáneo de ambos socios conviviendo en aparente matrimonio, producto del aporte en dinero y de trabajo de ambos […] por sobre la simple colaboración de ambos para subvertir las necesidades comunes de la convivencia, conclusión sostenida desde la sana crítica, en función de la prueba analizada aplicando la normativa del art. 1.190 C.C. finiquitando por este camino que la sociedad de hecho está probada, resultando ante el fallecimiento de González, conducente su liquidación.”.----------------------------------------------------------------------------------------- Disuelta entonces la sociedad corresponde ordenar su liquidación. El proceso desintegrador de la liquidación de la sociedad, es una etapa de carácter obligatorio previsto prioritariamente en beneficio de terceros. “La liquidación es el procedimiento establecido por la ley mediante el cual el liquidador realiza los bienes que componen el activo de la sociedad para pagar las deudas sociales, los gastos y honorarios de liquidación, y en caso de remanente, distribuir el mismo entre los socios. Este procedimiento es obligatorio e inderogable...” ( Código de Comercio - Comentado y Anotado - Rouillón, Adolfo A. N.. Tomo III -pag. 245 - La Ley, Año 2006). La disolución no importa por sí la extinción de la sociedad, sino tan solo el pase a la fase liquidativa con sus correspondientes etapas, las que no pueden ser obviadas, cualquiera sea el patrimonio existente en la sociedad.--------------Atento el tipo de sociedad de que se trata en autos, deberá designarse liquidador por las partes dentro de los treinta días de la firmeza de la presente resolución. En defecto de acuerdo, vencido dicho plazo, deberá designarse audiencia al efecto. El liquidador que se designe deberá actuar de conformidad a lo previsto por los arts. 101, siguientes y concordantes de la Ley de Sociedades Nº 19.550.-----------------------------------------------VI.- Costas y Honorarios.- Las costas se imponen por su orden, atento que la divergencia jurisprudencial en la materia pudo generar en las partes el convencimiento de razones favorables para litigar (art. 130 “in fine” del CPCC) y los honorarios de los letrados intervinientes se difieren para cuando exista base económica en autos para ello y los mismos lo soliciten (art. 26 Ley 9459).----------------------------------------------------Los honorarios de la perito contadora oficial Laura Serra se justiprecian en la suma de quince (18) Jus y los del perito contador de control Sebastián Alberto Latanzi en la suma de nueve (09) Jus, siendo éstos últimos a cargo de su proponente (art. 49 inc. 2° Ley 9459).----------------------------------------------------------------------------------------- Dichos honorarios generarán desde la fecha de la presente regulación y hasta la de su efectivo pago, un interés (art. 35 Ley 9459) igual al que resulta de adicionar la tasa pasiva que publica el BCRA con más el 2 % nominal mensual.------------------------Por todo lo expuesto, normas citadas y haciendo presente que el resto de las pruebas rendidas, debidamente valoradas, en nada modifican las conclusiones a las que se arriba.----------------------------------------------------------------------------------------------RESUELVO: I.- Hacer lugar a la demanda de declaración de disolución de sociedad de hecho y respectiva liquidación entablada a fs. 02/06 por la Sra. Elsa Elida Cravero en contra de la sucesión de Miguel Ángel Martini, todo en la forma expuesta en el considerando pertinente.--------------------------------------------------------------------------------------------II.- Imponer las costas por su orden.----------------------------------------------------III.- Diferir la regulación de honorarios de los letrados intervinientes para cuando exista base económica en autos para ello.----------------------------------------------IV.- Regular en forma definitiva (art. 28 Ley 9459) los honorarios profesionales de la perito contadora oficial Laura Serra en la suma de Pesos Seis mil seiscientos sesenta y nueve con 90/100 ($ 6.669,90).--------------------------------------------------------V.- Regular en forma definitiva (art. 28 Ley 9459) los honorarios profesionales del perito contador de control Sebastián Alberto Latanzi en la suma de Pesos Tres mil trescientos treinta y cuatro con 95/100 ($ 3.334,95) los que son a cargo de su proponente (art. 49 inc. 2° Ley 9459). Protocolícese y hágase saber.-