Guadalajara, Jalisco, 23 veintitrés de mayo del año 2014 dos mil catorce. V I S T O para resolver la segunda apelación del toca 1232/2012 deducido del juicio mercantil ejecutivo 3676/2011 promovido por * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * en contra de * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , tramitado ante el Juzgado Séptimo de lo Mercantil del Primer Partido Judicial de Jalisco, y; RESULTANDO: 1.- Según se desprende de actuaciones, la actora a CUARTA SALA través de sus endosatarios en procuración ejercita acción cambiaria TOCA 1232/2012 directa y demás consecuencias legales; admitida la demanda y D.M. practicadas diligencias de requerimiento, embargo y emplazamiento, ********************* y * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , dieron contestación a los hechos oponiendo excepciones y defensas, declarando precluido el derecho para ello al codemandado * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * ; se abrió el juicio a prueba, en donde se ofertaron y desahogaron medios convictivos conforme a derecho, abierto y transcurrido el período de alegatos se citó a sentencia que se cumplió declarando que la actora probó su acción, mientras que los demandados * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * y * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , no acreditaron la procedencia de sus excepciones y defensas, y la codemandada * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , no compareció a juicio. 2.- Contra esta determinación se alzaron en apelación tanto la actora como demandados * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * y * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , que se admitió en ambos efectos por lo que esta Sala al avocarse al conocimiento de la controversia, confirmó la calificación de grado, tuvo al apelante expresando agravios y citó a sentencia. 2 CONSIDERANDO: 3 resulta competente en los términos del artículo 48 fracción I de la Ley Orgánica del Poder Judicial del Estado para conocer y resolver del presente recurso de apelación. 4 II.- En consideración de que las actuaciones judiciales prueban plenamente, de acuerdo a lo que dispone el numeral l294 del Código de comercio y entre ellas aparecen los puntos de inconformidad que como agravios vierte el recurrente, la Sala da por transcritos literalmente los puntos de queja y se exime para transcribirlos, en el criterio que aplica por extensión y analogía, consultable en la página l450 tomo V, Séptima Epoca l960-l987, bajo el rubro: “CONCEPTOS DE VIOLACION. NO ES OBLIGATORIO TRANSCRIBIRLOS EN LA SENTENCIA.” III.- Los agravios que expresa el Señor Licenciado * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , con el carácter que tiene reconocido en el proceso de origen y en las presentes actuaciones, como Endosatario en Procuración del titular de la legitimación activa la persona jurídica denominada * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , que vincula al recurso de apelación que interpuso en contra de la sentencia que definió la controversia, juicio ejecutivo mercantil que sigue la referida persona moral a través de su Endosatario en Procuración en contra de *********************, ********************* e * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , sentencia que por cierto resultó favorable a los intereses del recurrente. Quienes integramos la Cuarta Sala del Supremo Tribunal de Justicia de Jalisco, a quienes ha correspondido conocer y resolver los medios de impugnación interpuestos en el juicio en comento, una vez que hemos inspeccionado ocularmente el contenido de los autos de origen, documento público de estudio obligado para este Cuerpo Colegiado, que tiene efecto probatorio pleno tal como lo dispone el numeral 1294 de la Ley Mercantil, nos encontramos en posibilidad de anticipar que el agravio expresado por la persona moral demandante, resulta ser infundado e inoperante para modificar en los términos que pretende el fallo combatido, en atención a las consideraciones y fundamentos legales que enseguida habrán de precisarse. Resulta pertinente destacar en lo que al caso interesa que en el actio libelo el ahora quejoso reclamó el pago de intereses moratorios al tipo legal, 5 desde que el deudor incurrió en mora y hasta la liquidación del adeudo, luego, no puede perderse de vista por otra parte que los documentos que fundaron la acción, títulos de crédito denominados pagarés, uno valioso por la cantidad de * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * y el restante por la cantidad de * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , ambos suscritos en esta ciudad capital de Jalisco, el primero el ********************* y el segundo el *********************, ambos del año * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , se destaca que en ambos títulos carecen de fecha de vencimiento, luego, por otro lado, se inconforma el demandante respecto a la sentencia pronunciada por el Juzgador de origen, Juez Séptimo de lo Mercantil respecto a la aplicación indebida de los artículos 362, 1324, 1325, 1327 y 1329 del Código de Comercio, en relación con el 80, 152, 171 y 174 de la Ley de Títulos de Crédito, sustancialmente por la determinación de la Juzgadora de establecer la fecha para la condena al pago de los intereses moratorios reclamados por el apelante, que como se dijo los reclamó a partir de que se constituya en mora el deudor y, en ese contexto, no puede soslayarse que el artículo 80 de la Ley de Títulos de Crédito, cuando trata de los diversos vencimientos que pueden pactarse en una letra de cambio aplicable a los títulos de crédito denominados pagarés de acuerdo con el artículo 174 de la propia Legislación, destaca que una letra de cambio girada a uno o varios meces fecha o vista vence el día correspondiente al de su otorgamiento o presentación del mes en que debe efectuarse el pago, pero además lo anterior relacionado con el artículo 79 de la propia Ley de Títulos de Crédito, establece las formas y vencimiento que pueden pactarse en este tipo de títulos, y uno de ellos es precisamente a la vista, lo que implica que carece de fecha de vencimiento y, si bien es cierto que el más alto Tribunal de Justicia de la República ha establecido el término de seis meses a partir de la suscripción del documento para que el deudor puede iniciar el cómputo para la prescripción de la acción ejecutiva, ello es distinto a la fecha establecida para la mora y el reclamo de intereses, pues precisamente la Suprema Corte de Justicia de la Nación cumpliendo el cometido que le corresponde para la interpretación de la Ley cuando existen lagunas o deficiencias en la redacción, ha establecido claramente que tratándose 6 CUARTA SALA TOCA 1232/2012 D.M. de títulos de crédito con vencimiento a la vista, el término para computarse la moral es precisamente el momento en que se requiera al demandado por el pago, y ello en la especie, queda meridianamente claro que aconteció al momento de ser emplazados y requeridos, y del actio libelo no se advierte que la parte actora hubiese requerido de pago a los demandados con anterioridad al requerimiento judicial, luego entonces, con la finalidad de dar certeza a los actos jurisdiccionales, se insiste, la Suprema Corte de Justicia ha emitido diversos criterios en los que directa o indirectamente, es decir, por analogía y por extensión ha tocado el punto relativo a en qué momento debe entenderse que el deudor se constituye en mora cuando no se estableció fecha de vencimiento, y ello es como ha quedado expuesto, es decir, a partir de que es requerido de pago, lo que sucedió en este caso como bien lo determinó el Juzgador a partir del emplazamiento y requerimiento de pago, para ese efecto resulta evidente que es irrelevante que se trate de documentos autónomos, títulos ejecutivos, prueba preconstituida y que de la literalidad de los mismos se cubran los requerimientos que al efecto establece el artículo 170 de la Ley de Títulos y Operaciones de Crédito, para ser considerado como un título ejecutivo, pues el punto a dilucidar y en que consiste la inconformidad es la fecha a partir del cómputo para el pago de intereses moratorios, porque lo anterior a que ya se hizo referencia fue considerado por el Juzgador al atribuirles plena eficacia probatoria por las consideraciones que han que han quedado expuestas a condenar a los demandados al pago del importe de los documentos. Debe insistirse en que precisamente por carecer de fecha de vencimiento y no encontrarse contemplado con claridad en la Ley de Títulos de Crédito a partir de cuando debe computarse la mora, es precisamente por lo que el más alto Tribunal de Justicia de la República ha establecido al respecto criterio como bien lo invocó el Juzgador en el fallo combatido, criterio que es compartido por este Cuerpo Colegiado y, desde luego, apoyado en diversos criterios que como se dijo, ha sustentado la máxima autoridad judicial del País, y que son del tenor siguiente: 7 CUARTA SALA TOCA 1232/2012 D.M. “ACCIÓN CAMBIARIA DIRECTA, PROTESTO INNECESARIO AUN CUANDO SE FUNDE EN PAGARÉS A LA VISTA, DE VENCIMIENTOS SUCESIVOS Y EL TÉRMINO DE TRES AÑOS PARA QUE PRESCRIBA DICHA ACCIÓN EMPIEZA A CORRER UNA VEZ TRANSCURRIDO EL PLAZO DE PAGO QUE ES DE SEIS MESES. Del texto de los artículos 160 y 173 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, se colige que para el ejercicio de la acción cambiaria directa, el tenedor no está obligado a presentar el pagaré a su vencimiento ni a protestarlo por falta de pago, pues para conservar acciones y derechos contra el suscriptor ese protesto es indispensable, sólo cuando se trata de la acción cambiaria en vía de regreso; asimismo, con base en el numeral 165, fracción II, y el 128, ambos preceptos de la ley invocada, los títulos de crédito a la vista, por ser de vencimientos sucesivos, deben ser presentados para su pago dentro de los seis meses que sigan a su fecha, y el término para la prescripción de la acción cambiaria es de tres años, contados a partir de que concluya dicho plazo de seis meses. Por consiguiente, la figura jurídica del protesto, que constituye un presupuesto para la acción cambiaria en vía de regreso, impide que el deudor principal y directo, pueda excepcionarse con la defensa de caducidad, conservando así sus acciones y derechos contra el propio obligado principal y el aval; pero dicho protesto no es necesario para el ejercicio de la acción cambiaria directa, en que los pagarés, por ser de vencimientos sucesivos, son pagaderos a la vista, y por tanto, deben presentarse para su pago dentro de los seis meses del día en que se suscribieron, debido a que a partir de esa fecha nace el derecho del deudor para oponer la prescripción de la acción; en consecuencia, una vez transcurridos los seis meses, vence el plazo de pago y empezará a correr la prescripción”. Novena Época. Registro: * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito Jurisprudencias. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XII, Julio de 2000. Materia(s): Civil. Tesis: I.7o.C. J/8. Página: 597. 8 “ACCIÓN CAMBIARIA DIRECTA. NO OPERA SU CADUCIDAD POR LA FALTA DE PRESENTACIÓN PARA SU PAGO DE UN PAGARÉ CON VENCIMIENTOS SUCESIVOS, DENTRO DE LOS SEIS MESES SIGUIENTES A LA VISTA. Cuando un pagaré se suscribe a día fijo pero en él se establecen vencimientos sucesivos y se incumple con el pago de cualquiera de los abonos, se entenderá siempre pagadero a la vista, en términos del artículo 79 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito. Ahora bien, conforme al artículo 128 de dicha ley, el tenedor del documento deberá presentarlo para su cobro dentro de los seis meses que sigan a su fecha; sin embargo, la omisión de cumplir con esa obligación no trae como consecuencia la caducidad de la acción cambiaria directa, en virtud de que el artículo 172 de la legislación aludida señala que la presentación para el cobro del documento únicamente tiene el objeto de fijar la fecha del vencimiento, para efectos del cómputo de la prescripción de la acción cambiaria a que se refiere el artículo 165 del citado ordenamiento, pero no para computar el término de su caducidad; máxime que los referidos artículos no disponen tal consecuencia”. Novena Época. Registro: * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * Instancia: Primera Sala. Jurisprudencias. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XXIII, Febrero de 2006. Materia(s): Civil. Tesis: 1a./J. 194/2005. Página: 63. “PAGARÉS EXPEDIDOS EN SERIE CON VENCIMIENTOS SUCESIVOS. PARA QUE OPERE EL VENCIMIENTO ANTICIPADO DE LOS RESTANTES POR FALTA DE PAGO DE UNO O MÁS DE ELLOS, SE REQUIERE QUE CONTENGAN LA CLÁUSULA QUE ASÍ LO ESTABLEZCA. De conformidad con el principio de literalidad que rige la eficacia de los títulos de crédito, contenido en los artículos 5o. y 17 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, el derecho de crédito está incorporado al documento, de tal forma que lo escrito en su texto es lo que constituye el derecho del acreedor, mientras que el suscriptor se compromete en los términos redactados como única medida y alcance de su obligación; por tal motivo, si el compromiso del suscriptor de una serie de pagarés con vencimientos sucesivos, es que ante la falta de 9 pago de uno o más de ellos, opere el vencimiento anticipado de los restantes y, en consecuencia, que sean exigibles a la vista, es necesario que tal circunstancia conste en el texto de todos y cada uno de dichos títulos valor, esto es, que se inserte una cláusula en la que se establezca que el pagaré forma parte de una serie de determinado número de documentos, y que la falta de pago de uno o más de ellos dará lugar al vencimiento anticipado de los que le sigan, haciéndose pagaderos a la vista. Ello es así, porque de no estar inserta dicha cláusula, el vencimiento de cada pagaré se dará conforme a la fecha de vencimiento que contenga, atento el referido principio de literalidad, sin que sea óbice a esto último lo dispuesto por el artículo 79 de la mencionada ley, en cuanto señala que "Las letras de cambio ... con vencimientos sucesivos, se entenderán siempre pagaderas a la vista por la totalidad de la suma que expresen.", pues tal disposición no resulta aplicable a los pagarés emitidos en serie, sino sólo respecto de aquellas letras de cambio o pagarés, en los cuales en un solo documento se establece un beneficiario y una suma determinada de dinero a pagar, pero se pactan diversas fechas para efectuar varios pagos parciales o amortizaciones por la cantidad total que representa, en cuyo caso se entiende que no son aplicables las fechas convenidas para efectuar los pagos parciales, sino que se trata de un documento pagadero a la vista”. Novena Época. Registro: * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * Instancia: Primera Sala. Jurisprudencias. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XIV, Septiembre de 2001. Materia(s): Civil. Tesis: 1a./J. 64/2001. Página: 295. “INTERESES MORATORIOS. TRATÁNDOSE DE PAGARÉS CON VENCIMIENTOS SUCESIVOS PAGADEROS A LA VISTA, AQUÉLLOS EMPIEZAN A GENERARSE A PARTIR DEL EMPLAZAMIENTO AL JUICIO EJECUTIVO MERCANTIL, PUES SU PRESENTACIÓN AL DEMANDADO EN ESTA DILIGENCIA, SURTE EFECTOS DE INTERPELACIÓN JUDICIAL (APLICACIÓN SUPLETORIA DEL CÓDIGO DE PROCEDIMIENTOS CIVILES PARA EL ESTADO DE VERACRUZ). De conformidad con el artículo 79, 10 CUARTA SALA TOCA 1232/2012 D.M. último párrafo, de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito (aplicable a los pagarés por disposición del artículo 174 de la referida ley), estos títulos de crédito con vencimientos sucesivos, se entenderán siempre pagaderos a la vista por la totalidad de la suma que expresen; y, tomando en consideración esa circunstancia -que deben ser pagaderos a la vista-, para hacer incurrir en mora al deudor de un título de esa naturaleza, es menester que se le presente el documento y se le requiera de su pago, a efecto de que en el supuesto de que no pague su importe, entonces sí, a partir de ese momento puede estimarse que ha incurrido en mora. En consecuencia, es a partir de este momento cuando pueden generarse los intereses moratorios correspondientes, no antes, pues si no se había presentado el documento para su cobro, no podía existir legalmente la mora por falta de pago. Lo anterior, considerando que, atento al artículo 212, fracción IV, del Código de Procedimientos Civiles para el Estado de Veracruz, aplicable supletoriamente a la materia, en términos del artículo 1063 del Código de Comercio, uno de los efectos del emplazamiento es producir todas las consecuencias de la interpelación judicial, si por otros medios no se hubiere ya constituido en mora el obligado”. Décima Época. Registro: * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Tesis Aislada. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Libro XVI, Enero de 2013, Tomo 3. Materia(s): Civil. Tesis: VII.1o.C.5 C (10a.). Página: 2082. “TÍTULOS DE CRÉDITO CON VENCIMIENTOS SUCESIVOS. ES LEGAL EL RECLAMO DE LOS INTERESES MORATORIOS PACTADOS EN ELLOS, GENERADOS ANTES DE LA INTERPELACIÓN JUDICIAL, SI AQUÉLLOS NO HAN CIRCULADO. La Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, al establecer en su artículo 79, aplicable por disposición del ordinal 174 de la misma ley a los pagarés, los modos en que la letra de cambio debe ser girada, que pueden ser a la vista, a cierto tiempo vista, a cierto tiempo fecha y a día fijo, realmente no permite la suscripción de títulos de crédito con vencimientos sucesivos, razón por la que 11 en el párrafo quinto del aludido artículo 79, se establece que las letras de cambio con otra clase de vencimiento, o con vencimientos sucesivos, se entenderán siempre pagaderas a la vista por la totalidad de la suma que expresen, determinación legal que tiene como propósito evitar que con la convención de vencimientos sucesivos sea entorpecida la circulación de los títulos de crédito, dotados de especial aptitud para pasar de un patrimonio a otro, libre, y sin las dilaciones que lleva consigo la transmisión de los créditos comunes, sobre esta base, si el acreedor y el suscriptor del pagaré con vencimientos sucesivos han convenido, que ante la falta de pago oportuno del monto total o de las parcialidades en que éste se divide, los intereses moratorios se generarán mensualmente y por todo el tiempo que el adeudo esté insoluto, lo correcto es que se atienda a dicha convención por el órgano jurisdiccional cuando se reclama el pago total del importe del título de crédito, que se encuentra vencido y que no ha circulado, sin que considere que la mora se genera una vez que el deudor es requerido judicialmente del pago y no lo realiza, pues aunado a que al atenderse a la convención entre el acreedor y el deudor no se afecta a un tercero adquirente del mismo, y por tanto aquél puede oponer las excepciones personales que estime convenientes en contra del acreedor primario; al tenerse en cuenta el modo en que se pactó que los intereses moratorios se generarían, se atiende a la literalidad del título de crédito, que es la medida del contenido y extensión de éste, y que es válida en términos del artículo 78 del Código de Comercio”. Novena Época. Registro: * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Tesis Aislada. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XXXI, Marzo de 2010. Materia(s): Civil. Tesis: I.8o.C.294 C. Página: 3084. “PAGARÉ CON VENCIMIENTOS SUCESIVOS. LOS INTERESES MORATORIOS SE GENERAN CUANDO ES PRESENTADO PARA SU COBRO Y NO SE LIQUIDA ÉSTE. El artículo 174 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito establece que son aplicables al pagaré, en lo conducente, entre otros, el artículo 79 del mismo ordenamiento legal, el cual dispone que la letra de 12 cambio puede ser girada a la vista, a cierto tiempo vista, a cierto tiempo fecha y a día fijo, pero además cuando contiene otras clases de vencimiento o con vencimientos sucesivos, se entenderá siempre pagadera a la vista por la totalidad de la suma que exprese. Por lo tanto, el documento que tenga esta forma de vencimiento, es exigible precisamente cuando se ponga a la vista del obligado para pagarse, es decir, cuando se da la condición a que está sujeta esta clase de vencimiento, y cuando no se cumple con dicho requisito, la obligación de pago contenida en el título de crédito no puede reputarse como vencida y, por ende, como exigible, lo cual indica que la mora se genera desde que el documento se ponga a la vista del obligado, y éste no realiza el pago; así, es evidente que el cálculo de los intereses moratorios debe efectuarse a partir de que el documento se presentó para su cobro”. CUARTA SALA TOCA 1232/2012 D.M. Novena Época. Registro: * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Tesis Aislada. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo X, Agosto de 1999. Materia(s): Civil. Tesis: II.2o.C.181 C. Página: 777. “TÍTULOS DE CRÉDITO CON VENCIMIENTOS SUCESIVOS, SE ENTIENDEN PAGADEROS A LA VISTA, Y SU PRESENTACIÓN AL DEMANDADO EN LA DILIGENCIA DE EMPLAZAMIENTO A JUICIO EJECUTIVO MERCANTIL, SURTE EFECTOS DE INTERPELACIÓN JUDICIAL, CONSTITUYÉNDOLO EN MORA A PARTIR DE LA FECHA DE LA PRÁCTICA DE TAL DILIGENCIA. De conformidad con el artículo 79, último párrafo de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, los títulos de crédito con vencimientos sucesivos, se entenderán pagaderos a la vista por la totalidad de la suma que expresen; tomando en consideración esa circunstancia, se estima que para hacer incurrir en mora al deudor de un título pagadero a la vista, es menester presentarle el documento y requerirlo de su pago, para que en el supuesto de que dicho deudor no pague su importe a partir de ese momento se estime que ha incurrido en mora, sin embargo, no es necesario que previamente al ejercicio de la acción cambiaria directa en el juicio ejecutivo mercantil, se 13 realice tal acto de interpelación, pues de conformidad con el artículo 1392 del Código de Comercio, la orden de exequendo dictada en un juicio de esa naturaleza tiene como primera finalidad requerir de pago al deudor del título; y conforme al artículo 259, fracción IV, del Código de Procedimientos Civiles para el Distrito Federal, aplicable supletoriamente a la materia, uno de los efectos del emplazamiento como medio de interpelación judicial, es constituir en mora al deudor requerido de pago; por consiguiente, basta que haya sido éste requerido de pago al diligenciarse el auto de exequendo y emplazársele al juicio natural para que a partir de ese momento, por virtud de la falta de pago del adeudo se constituya en mora”. Novena Época. Registro: * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Tesis Aislada. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo X, Julio de 1999. Materia(s): Civil. Tesis: I.8o.C.204 C. Página: 915. “PAGARÉS CON VENCIMIENTOS SUCESIVOS, PRESTACIÓN DE. PARA SU COBRO (6 MESES) Y OPORTUNIDAD PARA INCOAR PROCESO JUDICIAL (3 AÑOS). De acuerdo con la tesis publicada en la página mil novecientos ochenta y cinco, Segunda Parte, del Apéndice al Semanario Judicial de la Federación 1917-1988, de rubro: "PAGARÉS. SON A LA VISTA CUANDO SE PACTAN VENCIMIENTOS SUCESIVOS.", los pagarés con vencimientos sucesivos deben estimarse pagaderos a la vista (y no de fecha cierta, que es la diversa hipótesis); luego, un documento "a la vista" necesita de un momento, época o fecha, en que pueda encontrarse su tenedor en aptitud de exigir su pago y, además, para que los plazos y consecuencias legales inherentes den inicio, incluyendo el de la prescripción para intentar acción cambiaria, de lo que los artículos 79, en relación con el 128 y 172 de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, se ocupan al señalar el término de seis meses contados a partir de la fecha de su expedición, a fin de que el documento se presente para su cobro, regulando, en sí, a los documentos pagaderos a la vista que, por lo mismo, no poseen fecha cierta de vencimiento, para que una vez presentados al cobro dentro del citado plazo de 14 haberse elaborado, quede definida su fecha de vencimiento, a partir de la cual será dable efectuar los cómputos respectivos y procedentes. En otras palabras, aquella exigencia (la presentación) no es más que para definir desde cuándo debe considerarse cobrable o vencido un documento pagadero a la vista, como ocurre con los pagarés que consignan vencimientos sucesivos, así como cuándo comienza a operar, además, la prescripción de la acción cambiaria; pues no debe perderse de vista que una cosa es la exigencia de la ley relativa a la "presentación de los documentos", "para su cobro" y otra, muy distinta, la oportunidad para incoar proceso judicial, acorde con las reglas contenidas en el Código de Comercio, para obtener ese cobro, que prescribe en el lapso de tres años, según lo previene el artículo 165 de la invocada ley”. Novena Época. Registro: * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Tesis Aislada. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo VII, Marzo de 1998. Materia(s): Civil. Tesis: VII.2o.C.41 C. Página: 807. “INTERESES MORATORIOS. TRATÁNDOSE DE TÍTULO DE CRÉDITO SIN FECHA DE VENCIMIENTO ENDOSADO EN PROPIEDAD AL AVAL, SE GENERAN A PARTIR DE QUE SE PUSO A LA VISTA DEL DEUDOR PRINCIPAL Y ÉSTE NO CUMPLIÓ CON SU OBLIGACIÓN DE PAGO. Sólo el titular del pagaré puede exigir el cumplimiento de la obligación relativa, en tanto que el deudor se libera pagando a quien aparezca como tal. El obligado no puede saber si el documento se encuentra circulando, ni quién sea su acreedor, sino hasta el momento en que éste se presente a cobrarle legitimándose activamente con la posesión del documento; por tanto, cuando un título de crédito sin fecha de vencimiento aparece endosado en propiedad en favor del aval de la obligación, esto no constituye un indicio que implique que se hubiera puesto a la vista del deudor principal y, por ende, a partir de entonces se hubiera vencido, en virtud de que tal modo de proceder dejaría a este último en total estado de indefensión, ya que esa transmisión implica que el documento entró en circulación; en consecuencia, es hasta que el aval, 15 como nuevo beneficiario del documento, lo presenta al avalado y deudor principal para su cobro, cuando se hace exigible la obligación y ante su falta de pago, se incurre en mora, siendo a partir de entonces cuando lógicamente se generan los intereses moratorios”. Novena Época. Registro: * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Tesis Aislada. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo XXIX, Junio de 2009. Materia(s): Civil. Tesis: III.5o.C.150 C. Página: 1063. CUARTA SALA TOCA 1232/2012 D.M. Indudablemente que este Tribunal tiene obligación de atender los criterios aludidos, precisamente porque proporcionan los elementos de que adolece la Ley de Títulos de Crédito para determinar con certeza la condena de los intereses moratorios, indudablemente que el propio quejoso reconoce que se trata de títulos de crédito pagaderos a la vista, y desde luego que en la especie, no se trata de la falta de presentación para determinar la condena como establece en la jurisprudencia que invoca en primer término, puesto que ésta se refiere a títulos de crédito con vencimiento establecido y, desde luego, que la Sala comparte la opinión del recurrente que el pago de los intereses debe efectuarse a partir de su vencimiento que como se dijo ha considerado la Suprema Corte que éste ocurrió a partir de que es presentado para su pago, y que precisamente el emplazamiento con el requerimiento de pago implica precisamente el requerimiento para la constitución en mora, indudablemente debe insistirse que los fundatorios carecen de fecha de vencimiento por lo que el quejoso carece de sustento jurídico para pretender establecerlo en fecha distinta a la del requerimiento como estableció el Juzgador, además de que es omiso al establecer a partir de qué fecha pretende que se tenga como fecha de vencimiento de los pagarés, por lo que, en consecuencia, en base a lo que ha quedado expuesto debe concluirse que los agravios resultan infundados e inoperantes para modificar el fallo combatido en el sentido abordado por el recurrente, es decir, la fecha a partir de la cual se computó la condena al pago de intereses moratorios. 16 Por lo que atañe a los agravios que expresa * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , Licenciado en Derecho, autorizado en los amplios términos de lo que dispone el artículo 1069 del Código de Comercio, de la demandada la persona jurídica denominada * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , que vincula al recurso de apelación que interpuso en contra de la sentencia que definió la litis y a que ya se hizo alusión en el proemio, en concepto de quienes integramos la Cuarta Sala, y una vez que hemos inspeccionado ocularmente el contenido de las actuaciones de origen y las pruebas rendidas por ambas partes, actuaciones que tienen eficacia probatoria plena tal como lo contempla el numeral 1294 del Código de Comercio, nos encontramos en posibilidad de anticipar que los agravios resultan ser infundados e inoperantes para modificar el sentido del fallo combatido, en atención a las consideraciones y fundamentos legales que enseguida habrán de precisarse. Resulta indudable que en todo procedimiento jurisdiccional los Tribunales deben garantizar el respeto irrestricto a las garantías de legalidad y seguridad jurídica que surgen del artículo 14 del Código Político de Querétaro, toda vez que la Ley Procesal Mercantil es considerada como de orden público en virtud a tales garantías, por lo que en consecuencia, su cumplimiento no puede quedar al arbitrio de las partes y menos aún del Órgano Jurisdiccional, quien por el contrario como en la especie acontece debe erigirse en su garante. Ahora bien, en ese orden de ideas, debe decirse que carece de sustento jurídico el recurrente cuando se duele de la condena que le impuso el Juzgador de origen al pago de lo reclamado, aludiendo incorrecta valoración de las pruebas en relación a la excepción de improcedencia de la vía que opuso y que esta Sala en diversa resolución de fecha * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , le admitió, sin embargo, contrario a lo que sostiene, debe decirse que la procedencia de la vía ejecutiva mercantil elegida por la parte actora, deviene del imperio de la Ley y para ello basta consultar el contenido del artículo 1392 del Código de Comercio, para advertir que el procedimiento ejecutivo tiene lugar cuando la demanda se funda en documento que traiga 17 aparejada ejecución, traen aparejada ejecución, en lo que al caso interesa la fracción IV, los títulos de crédito, luego, el artículo 5° de la Ley de Títulos de Crédito, establece que son títulos de crédito los documentos necesarios para ejercitar el derecho literal que en ello se consigna, en relación al punto el diverso numeral 170 establece que el pagaré debe contener la mención de ser pagaré inserta en el texto del documento, la promesa incondicional de pagar una suma determinada de dinero, el nombre de la persona a quien ha de hacerse el pago, la época y el lugar del pago, lo que como ya se dijo es considerada la vista al carecer de época de pago, la fecha y lugar en que se suscribe el documento, y la firma del suscriptor o de la persona que firme a su ruego o en su nombre, en la especie, basta la inspección ocular que en estos momentos los integrantes de la Sala realizamos de los documentos fundatorios de la acción, para advertir que los fundatorios satisfacen los requerimientos a que ya se ha hecho alusión para ser considerados títulos de crédito, para ejercitar el derecho literal que en ellos se consigna, documentos que además han sido considerados por la Suprema Corte de Justicia de la Nación, con la característica de ser autónoma, es decir, que a partir de la suscripción se desvinculan del acto jurídico que les da origen, que tal autonomía no la pierden aunque hubiesen sido firmados en garantía, lo que en la especie no acontece, pues basta la inspección de éstos documentos para arribar a la conclusión aludida, lo que conlleva que resulta irrelevante que el quejoso afirme haber establecido en su defensa y ahora a través de los agravios, que firmó cinco contratos de prenda con la demandante, y que los documentos se otorgaron en garantía, se insiste, sin que se hubiese aportado prueba que vinculara a ambos documentos, pero con independencia de ello como se dijo, los títulos de crédito adquieren autonomía una vez satisfechos los elementos de existencia y validez que contiene el referido numeral 170 de la Ley de Títulos de Crédito, de igual forma resulta carente de sustento jurídico su pretensión de que tales argumentos y prueba ofertadas, es decir, los contratos a que hace referencia sean suficientes para atraer como consecuencia la improcedencia de la vía y de la acción intentada, luego entonces, lo estipulado en los contratos que alude el recurrente no pueden afectar el CUARTA SALA TOCA 1232/2012 D.M. 18 contenido de los títulos de crédito ni limitar el ejercicio de la acción cambiaria que se ventiló en el proceso de origen. En lo que concierne el agravio derivado de lo que califica como indebida la resolución de sus excepciones sin haber realizado correcto análisis de las pruebas, carece de razón, puesto que basta inspeccionar el fallo combatido para advertir que analizó las pruebas ofertadas por el recurrente para justificar las excepciones tanto de improcedencia de la vía, de la acción y de carencia de autonomía de los fundatorios, a las cuales les atribuyó el Juzgador pleno valor en cuanto a su contenido pero carentes de vinculación con los documentos fundatorios, lo que se constata en este acto al tener a la vista tales documentos, pues evidentemente se trata de contratos de crédito que celebran tanto la parte actora como la demandada con garantía prendaria pero que carecen de vinculación con los documentos fundatorios de la acción que como ya se dijo, con independencia de ello, no le restan para el ejercicio del derecho literal que en ello se contiene, lo mismo acontece respecto de las copias certificadas de los cheques que exhibe en vía de prueba la recurrente a favor de la parte actora, porque en los mismos términos no tiene vinculación con los fundatorios ni tampoco se aportó prueba diversa para establecerla, en similares condiciones se encuentran los estados de cuenta exhibidos por el quejoso en vía de prueba para justificar la excepción de pago, pues carecen de igual forma de vinculación con los documentos fundatorios, por lo que acertadamente el Juzgador consideró inepta la prueba para justificar excepción de pago opuesta por el quejoso, además de que se matiza la importancia de los documentos aludidos al referirse a fechas distintas a las de expedición de los documentos fundatorios de la acción al referirse a diversos actos contractuales entre las partes y, como se dijo, de fechas distintas a las contenidas en los fundatorios, por lo que evidentemente al carecer de vinculación no puede efectuar la eficacia y literalidad de los títulos de crédito, de igual forma los cheques no se refieren a pagos efectuados en relación con los fundatorios, y que además de ello como se destaca en el fallo combatido los demandados reconocieron la existencia del adeudo reclamado y la ejecutividad de 19 los documentos fundatorios de la acción, de la impertinencia aludida se encuentran también afectados los informes rendidos por las instituciones de crédito denominadas * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * y * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , con los anexos exhibidos por carecer de igual forma relación con el adeudo reclamado a través de los documentos fundatorios. Resulta carente de sustento jurídico la argumentación del quejoso en el sentido de que demuestra la excepción de falsedad ideológica porque independientemente de no haber rendido las pruebas pertinentes, por el contrario aduce en su defensa y en vía de excepción que efectuó pagos a los documentos fundatorios de la acción, lo que implica un reconocimiento a la existencia del acto jurídico que dio origen a la suscripción de los documentos y, por ende, no basta que aduzca la inexistencia de acto jurídico y falta de recepción del importe de los documentos para que la excepción quede justificada, pues como lo dispone el artículo 1194 de la Ley Mercantil, el actor está obligado a probar sus excepciones, desde luego que deviene de su particular óptica la afirmación de que los pagos efectuados sí se relacionan con los documentos fundatorios de la acción, pues resulta evidente que no aportó las pruebas pertinentes para establecer en su caso la vinculación que pretende, es cierto como se anticipó, que los contratos de prenda tienen pleno valor en cuanto a su contenido como el Juzgador lo estableció en la sentencia, sin embargo también estableció que carecen de vinculación con los documentos fundatorios, con independencia de que dada la característica de autonomía aunque hubiesen tenido relación quedan desvinculados del acto jurídico que les da origen, y no impiden el ejercicio literal que en ello se consigna, consecuentemente su pretensión de que el Juez debió declarar fundadas sus excepciones y absolverlo de lo reclamado, deviene de su particular óptica, pues evidentemente que no cumplió con la obligación de probar sus excepciones, y como consecuencia la condena surge precisamente de la exhibición de títulos de crédito que son prueba preconstituida del derecho literal que en ellos se consigna y, como se dijo, el demandado no aportó las pruebas suficientes para justificar sus excepciones en los términos que han quedado expuestos. Debe quedar constancia de que si bien es cierto, el CUARTA SALA TOCA 1232/2012 D.M. 20 demandado opuso por un lado la excepción de falsedad ideológica, lo que implica la inexistencia del acto jurídico que hubiese dado origen a la suscripción de los documentos fundatorios, por el otro, contradictoriamente opuso como excepción la de pago de los propios títulos de crédito en comento, y además reconoció haber firmado, pero debe también destacarse que tal excepción no quedó probada, es decir, la excepción de pago, y de su propia conducta contraviene la excepción primeramente mencionada, además como corolario de lo anterior y como consta de la propia sentencia que se analiza, no justificó la excepción de pago, por lo que no le restó eficacia a los títulos de crédito que fundaron la acción por lo que evidentemente conservan su característica de ejecutividad y ser prueba preconstituida del derecho con motivo de ello ejercitado. Lo que trajo como consecuencia evidentemente la condena al pago de lo reclamado y las costas del juicio, sin que dada la naturaleza del juicio incida la temeridad o la mala fe que argumenta, pues tal como lo establece la fracción III del artículo 1084 de la Ley Mercantil, el que fuese condenado en juicio ejecutivo será condenado al pago de las costas por imperio de la Ley, luego entonces, como se anticipó, al resultar infundados e inoperantes los agravios expresados por el quejoso, se impone confirmar el fallo combatido y condenarlo al pago de las costas de esta instancia que deberán regularse en ejecución de sentencia y a través del incidente respectivo, no así por lo que respecta al medio de impugnación interpuesto por la parte actora al no actualizarse ninguna de las hipótesis que prevé el citado precepto. Cobran aplicación al respecto, las siguientes jurisprudencias y tesis: “TÍTULOS DE CRÉDITO. NO PIERDEN SU NATURALEZA CUANDO SE DAN EN GARANTÍA. Los títulos de crédito que contienen los requisitos que establece la ley para su suscripción, adquieren por ese solo hecho autonomía respecto del negocio que les dio origen, de modo que si además de tales requisitos se asienta en los documentos, que éstos se dan en garantía, tal circunstancia no los priva 21 de la característica citada, es decir, de tener independencia de la operación de la que han derivado, sino que únicamente se dará lugar, en el caso de que no hayan circulado, a que el obligado pueda oponer la excepción personal correspondiente, para lo cual debe demostrar con precisión la obligación garantizada con el título y que ésta ya quedó cumplida previamente o que se resolvió por cualquiera de los medios legales, pero en modo alguno priva al tenedor de los títulos de la acción ejecutiva”. Novena Época. Registro: * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Jurisprudencias. Fuente: Semanario Judicial de la Federación y su Gaceta. Tomo IX, Enero de 1999. Materia(s): Civil. Tesis: VI.2o. J/160 . Página: 810. “TÍTULOS DE CRÉDITO. AUTONOMÍA DE LOS MISMOS. Los documentos mercantiles otorgados en relación, con cualquier contrato, adquieren, como títulos de crédito, una existencia autónoma, independiente por completo de la operación de que se han derivado” Séptima Época. Registro: * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * Instancia: Tercera Sala. Jurisprudencias. Fuente: Semanario Judicial de la Federación. Volumen 217-228, Cuarta Parte. Materia(s): Civil. Página: 391. Genealogía: Informe 1987, Segunda Parte, Tercera Sala, tesis 435, página 310. Apéndice 1917-1988, Tercera Sala, jurisprudencia 1957, página 3154. “PAGARÉ. PARA SU COBRO EN LA VÍA JUDICIAL NO ES NECESARIO QUE SE EXHIBA EL CONTRATO DEL CUAL SURGIÓ. Los títulos de crédito, entre los que se encuentra el pagaré, tienen como una de sus características la autonomía, esto es, que son independientes de la causa que les dio origen y para su cobro judicial en la vía ejecutiva mercantil no es necesario que se exhiba el contrato del cual surgieron, sino que dicha vía es procedente con sólo exhibir el pagaré de que se trate, como se advierte de lo dispuesto por el artículo 1391, fracción IV, del Código de Comercio”. Novena Época. Registro: * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * Instancia: Tribunales Colegiados de Circuito. Jurisprudencias. Fuente: 22 Apéndice 1917-Septiembre 2011. Tomo V. Civil Tercera Parte - Históricas Primera Sección - SCJN Subsección 1 Sustantivo Materia(s): Civil. Tesis: 1350. Página: 1525. CUARTA SALA TOCA 1232/2012 D.M. “TÍTULOS DE CRÉDITO, NO DESNATURALIZA SU CARÁCTER DE, LA EXCEPCIÓN PERSONAL RELATIVA A QUE FUE SUSCRITO EL DOCUMENTO EN GARANTÍA DE UN ADEUDO, SI EL DEUDOR NO PROBÓ QUE CUMPLIÓ CON SU OBLIGACIÓN.- Si se demandó en la vía ejecutiva mercantil el pago de cierta cantidad, fundando tal pretensión en un pagaré, y el demandado opuso como excepción que la actora recibió ese documento en garantía del adeudo que representaba su crédito sujeto a aclaración; como el documento no circuló, la excepción opuesta tiene el carácter de personal, y la circunstancia de que el obligado haya acreditado que lo suscribió en garantía de su adeudo, conforme al artículo 5° de la Ley General de Títulos y Operaciones de Crédito, que prescribe que son títulos de crédito los documentos necesarios para ejercitar el derecho literal que en ellos se consigna, no tiene el alcance de desvirtuar la naturaleza del documento base de la acción, sino en su caso, para que fuera procedente su excepción, debió probar que no debía la cantidad que se le reclamó, o bien que lo que se le demandó no representaba el adeudo que tenía con la actora, por la liquidación efectuada”. Tesis visible en la Jurisprudencia Civil Mexicana, 1988-1995, Octava Época, Tomo V, de Ángel Editor. Por lo anteriormente expuesto y con fundamento además en lo que previenen los diversos numerales 1322, 1324, 1336, 1339 y 1342 del Código de Comercio, se resuelve ésta con las siguientes: PROPOSICIONES: PRIMERA.- Los agravios esgrimidos por la parte actora, persona jurídica denominada * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , resultaron infundados e inoperantes para modificar el fallo combatido, por lo que se CONFIRMA en sus términos; sin que proceda determinar condena en costas de segundo grado, por lo que respecta a este apelante, al no actualizarse 23 ninguna de las hipótesis que prevé el numeral 1084 del Código de Comercio. SEGUNDA.- Los agravios expresados por la parte demandada persona jurídica denominada * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , resultaron infundados e inoperantes, por lo que se impone CONFIRMAR el fallo combatido, y condenarlo al pago de las costas de esta instancia que deberán regularse en ejecución de sentencia y a través del incidente respectivo. TERCERA.- Con testimonio de la presente resolución, remítanse al Juez de origen autos y documentos, y en su oportunidad archívese el toca como asunto concluido. CUARTA.- La resolución pronunciada se clasifica como sentencia definitiva y se ha pronunciado dentro del término legal, por consecuencia, no se trata de compromiso arbitral ni existe convenio por el que las partes hubieren fijado procedimiento especial, y no es menester notificar personalmente a los interesados en base a lo que previenen en lo conducente los numerales 1054, 1068,1069 y demás relativos del Código de Comercio, en relación a los numerales 109 fracción VI, 419 y 439 del Código de Procedimientos Civiles de aplicación supletoria. NOTIFÍQUESE. Así lo resolvió la Cuarta Sala del Supremo Tribunal de Justicia en el Estado integrada por los CC. Magistrados Licenciados * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , en substitución del Magistrado * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , por acuerdo plenario del diecisiete de abril del año en curso, actúa en la Secretaría la Licenciada * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * , quien autoriza y da fe. *********************