¡Todos los derechos para todos los niños y las niñas! La Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño de 1989 es un tratado de derechos humanos que casi todos los países del mundo se han comprometido a defender. Desde su puesta en vigor, millones de niños y niñas han visto como han cambiado sus vidas: han podido acceder a servicios sanitarios, educativos, de protección, de participación ciudadana. Este es el resultado del esfuerzo y dedicación de muchas personas de todo el mundo por hacer un mundo apropiado para la infancia. Un día sin derechos ¿Cómo sería un día sin los derechos de la infancia? Un día sin derechos podría ser así: no desayunarías, no irías a clase, no tendrías cita con el dentista, te pasarías el día en la calle y tus padres no te obligarían a irte a dormir a tu hora. ¿Un día fantástico? Bueno… pero la pregunta tiene trampa: la clave es que los derechos de la infancia no son para una única persona un sólo día, sino para todos los menores de edad, siempre. Así que la situación se parecería más a esta: -Nadie desayunaría (ni comería, ni cenaría). -Nadie iría a clase ni recibiría ningún tipo de educación. -Nadie podría ir al médico, aunque estuviera muy grave. -Nadie tendría un hogar y todos los niños, niñas y adolescentes tendrían que buscarse la vida en la calle. -Los adultos no se preocuparían de lo que es mejor para los niños y adolescentes, ni se esforzarían porque hicieran lo que más les conviene. Tampoco escucharían sus opiniones. Muchos niños, niñas y adolescentes del mundo están esperando a que se cumplan sus derechos. Quizás muchos de ellos están más cerca de lo que te imaginas. ¿Cuáles crees que son los derechos que menos se cumplen a tu alrededor?. (Foto: © UNICEF/NYHQ2008-1308/Asselin) 1· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS www.enredate.org ¿A que esta situación no es tan buena? Además, cuando los derechos no se cumplen, no suele ser sólo durante un día. Los niños y niñas que ven cómo sus derechos se vulneran no tienen la esperanza de pensar que al día siguiente todo será distinto. En demasiados casos, los niños llegan a adultos sin haber disfrutado de sus derechos. A veces, incluso pierden la oportunidad de llegar a la vida adulta, porque las violaciones sistemáticas de derechos como la nutrición, la salud, la educación o la protección hacen más vulnerables a niños y niñas a peligros que pueden costarles la vida. ¿Realmente podrían desaparecer los derechos? En realidad el ejemplo que hemos visto parte de una idea errónea: los derechos de la infancia no pueden “desaparecer”, porque son irrenunciables, son derechos humanos inherentes a la persona con el que nacen todos los niños y que existen hasta la mayoría de edad. Pero las situaciones descritas sí pueden producirse (de hecho se producen todos los días). Que todos los menores de edad tengan derechos no significa que todos sus derechos se respeten y se cumplan: - En todo el mundo millones de niños y niñas ven amenazadas sus vidas por la pobreza, la malnutrición, la falta de agua potable o los abusos. -Demasiados son obligados a trabajar en condiciones peligrosas para su salud y para su desarrollo. -Muchos no tienen acceso a la educación, al juego o al descanso. -Las opiniones de muchos niños y niñas no son tenidas en cuenta y ni siquiera tienen acceso a la información necesaria para formarse un criterio. -Muchos niños y niñas son explotados y carecen de un entorno protector (familia, comunidad o instituciones) que les cuiden y vigilen que no les pase nada malo. … Y demasiadas cosas más. 2· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS Derechos, por principio Los derechos de la infancia se basan en cuatro principios fundamentales: La no discriminación: Todos los niños tienen los mismos derechos. Esto significa: todos los niños y todas las niñas, en todo caso, en todo momento y sin excepciones. No importa su raza, su religión, su procedencia o las ideas de sus padres. El interés superior del niño: Cualquier decisión, ley, o política que pueda afectar a la infancia tiene que tener en cuenta qué es lo mejor para los niños y niñas. Cuando los adultos tomen decisiones tienen que pensar en cómo pueden afectar a los niños. El derecho a la vida, la supervivencia y el desarrollo: Todos los niños y niñas tienen derecho a vivir, a desarrollarse y a alcanzar su máximo potencial en la vida. Esto incluye tener derecho a cosas como una alimentación y alojamientos adecuados, al agua potable, a la educación, a la atención sanitaria, al juego y el descanso, a actividades culturales y a información sobre sus derechos. La participación: Los menores de edad tienen derecho a ser consultados sobre las situaciones que les afecten y a que sus opiniones sean tomadas en cuenta. Esto no significa que los niños puedan mandar sobre sus padres ni decirles qué tienen que hacer. La participación debe ir aumentando conforme a la edad y es importante para que los niños y jóvenes alcancen la madurez. Foto: © UNICEF/ETHA_2014_00228/Ose www.enredate.org La Convención sobre Derechos del Niño La Convención sobre los Derechos del Niño reconoce que todos los menores de edad deben tener una protección especial y que no pueden ser tratados como adultos. La Convención nació en 1989 para proclamar que todos los niños y niñas tienen unos derechos inalienables, universales e indivisibles y que los gobiernos tienen el deber de aplicar las políticas necesarias para garantizarlos y supervisar que se cumplen. Estos derechos son los Derechos de la Infancia, y aunque ya hemos visto que siempre han existido, esta fue la primera vez en la historia que se reconocieron y el mundo se comprometió en su cumplimiento. La Convención sobre los Derechos del Niño tiene 54 artículos, que describen los derechos de todos los menores de edad y piden a los países que pongan los medios necesarios para que se cumplan. Llegar a esos 54 artículos no fue fácil y muchos expertos de todo el mundo trabajaron durante años para elaborar la Convención. La Convención es el tratado con más apoyo internacional: sólo Estados Unidos, Somalia y Sudán del Sur no son Estados parte de la Convención. La Convención puede ampliarse con documentos adicionales que aumenten la protección de algunos derechos: son los Protocolos Facultativos de la Convención. Actualmente hay tres protocolos que no han sido ratificados aún por todos los Estados Parte de la Convención. Los países que ratifican la Convención están obligados a poner los medios para que los derechos de la infancia se cumplan en su territorio (elaborando leyes, creando instituciones de protección de los menores o promoviendo políticas de infancia, por ejemplo). El Comité para los Derechos del Niño vigila si los países cumplen con sus compromisos y hace recomendaciones para que cambien sus leyes y políticas. Desgraciadamente la existencia de la Convención no es suficiente para garantizar el cumplimiento de los derechos: sin un verdadero compromiso de los gobiernos muchos niños corren el peligro de quedar desprotegidos frente a los abusos, la negligencia o el desinterés de los adultos. Además, todas las personas (adultos y jóvenes) necesitan conocer el alcance real de los derechos de la infancia para poder defenderlos. Por eso, darlos a conocer y difundirlos es tan importante. ¿Se te ocurren formas de hacerlo? Casi todos los países del mundo han ratificado la Convención. Esto significa que se han comprometido a adaptar sus leyes para que defiendan los derechos de la infancia, y a realizar políticas y cambios institucionales para que los derechos se respeten en la práctica. ¿Encuentras en la foto las banderas de los tres únicos países del mundo que no han ratificado la Convención? (Imagen: © UN Photo/Joao Araujo Pinto) 3· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS www.enredate.org El derecho más importante ¿Crees que existen unos derechos más importantes que otros? Esta es una pregunta que los expertos que elaboraron la Convención se preguntaron y que mucha gente que trabaja por los Derechos Humanos sigue debatiendo. ¿Hay derechos “secundarios”? Aunque en algunos casos existen conflictos de derechos, que pueden hacer dudar sobre qué derecho es más importante en un determinado caso, los derechos de la infancia son indivisibles, interdependientes e interrelacionados. El espíritu de la Convención no es defender situaciones particulares (para eso están las leyes y los abogados), sino promover el respeto de todos los derechos para todos los menores de edad. Aquí es donde se ve más claramente que no es tan fácil decidir qué derecho es más importante. Los derechos no hay que buscarlos, porque forman parte de nosotros. Lo que hay que encontrar es la forma de conseguir que esos derechos se cumplan y sean respetados. Foto: CC By-Nc 2.0 Clover_1 /Flickr Conflicto de derechos en el que hay Un periodista quiere hacer un repor taje sobre un barrio se cometen allí, mucha pobreza, para que la gente sepa las injusticias que pero algunas de las familias no quieren que sus hijos salgan en la tele. Esto sería un conflicto entre el derecho a la libertad de expresión del periodista y el derecho a la imagen de los niños. Resolver este problema es fácil: la Convención dice que se debe respetar siempre el interés superior del niño. Además, el periodista puede buscar otras formas de publicar la noticia sin las imágenes de esos niños. 4· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS www.enredate.org Derechos en la práctica Vamos a verlo más claro. Elige el derecho que creas más importante en cada pareja: 1 2 3 Salud Educación Protección Identidad No-explotación No-discriminación ¿Los has elegido? Veamos unos ejemplos. 1 ¿La salud es más importante que la educación?...…o ¿la educación es más importante que la salud? Historia 1 Historia 2 María, de 20 años nunca pudo ir a la escuela. No aprendió a leer ni a calcular y había muchas cosas que no entendía, como los contratos o las recetas de las medicinas. Cuando cumplió 18 años se casó con Pedro, que tampoco sabía leer ni escribir. Muchas veces no tenían trabajo y cuando trabajaban apenas ganaban para mantener a sus hijos. A veces los engañaban en el mercado o cuando intentaron comprar un burro que les ayudara en el trabajo. Cada vez eran más pobres y sus hijos estaban mal alimentados y enfermaban mucho. Su hija Ana, de 6 meses, murió cuando María y Pedro confundieron sus medicinas porque no entendían el papel que indicaba la dosis. abc Ana perdió su derecho a la salud y la supervivencia, porque sus padres no tuvieron acceso a la educación. 5· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS Mwitwa tiene 6 años, vive en Zambia y está muy contenta porque por fin puede ir al cole. Sus padres han hecho un gran esfuerzo y ha podido matricularse y ya tiene sus libros y su uniforme. Un mes después de empezar el curso empieza a sentirse mal y muy cansada: tiene paludismo, una enfermedad transmitida por un mosquito. Comienza a tener fiebres muy fuertes cada cierto tiempo y cada vez está más débil. No puede ir a la escuela y apenas puede estudiar en casa. En todo el año sólo ha podido ir 20 días al cole. A muchos niños y niñas de su aldea les pasa lo mismo todos los años. Mwitwa está perdiendo su derecho a la educación porque no tiene acceso a los medios para prevenir el paludismo y tratarlo. www.enredate.org 2 ¿La protección es más importante que el derecho a una identidad?...… o ¿la identidad es más importante que el derecho a la protección? Historia 1 Aunque todos la conocen como Lula, en realidad esta niña de 12 años no tiene nombre. Sus padres no la registraron al nacer y para las autoridades del país es como si no existiera: no aparece en los censos ni tiene documentación ni un carnet de identidad. Sus padres siempre la cuidaron y lo hicieron todo por ella, así que no tuvo problemas hasta que ellos murieron. Como no estaba registrada no le concedieron una pensión y algunos familiares malintencionados se aprovecharon de la situación para quedarse con su casa y su herencia. Huyó de ellos porque no la trataban bien y, como no sabía a quién acudir, se unió aun grupo de niños que vivían en la calle. En las calles corre peligro, enferma mucho y alguna gente quiere abusar de ella. Ahora sobrevive con pequeños robos y vendiendo pulseras aunque cree que podría ganar algo más de dinero si se prostituyera. Lula está desprotegida por no haberse cumplido su derecho a una identidad. Historia 2 Ahmed tiene 13 años. Siempre ha sido un niño muy despierto y se le dan muy bien los deportes. Como su escuela está lejos de su casa, a veces le gusta ir corriendo, para entrenar. Un día unos hombres en un coche le preguntaron que si le gustaba correr y si era fuerte y valiente. También le preguntaron si le daban miedo los animales. Dijo que era muy fuerte y que ningún animal le asustaba. Los hombres lo secuestraron y consiguieron saltarse todos los controles policiales y las aduanas, e incluso sobornaron a un policía cuando les pidió los papeles del niño. Para evitar Foto: CC By-Sa 1.0 Niger Malone /Wikimedia Commons a más policías, consiguieron que alguien falsificara sus papeles y le cambiaron el nombre. Consiguieron sacarlo de su Pakistán natal y llevarlo a Arabia Saudí, bajo el nombre de Alí. Ahora es obligado a trabajar allí como jinete en carreras de camellos. Aunque se le da bien, tiene miedo porque cada vez está más cansado y algunos de sus compañeros ya han tenido accidentes y han muerto. La falta de gente que protegiera a Ahmed y evitara que el secuestro tuviera éxito, ha hecho que pierda su identidad y otros derechos. 6· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS www.enredate.org 3 ¿No ser explotado es más importante que no ser discriminado?...… o ¿no ser discriminado es más importante que no ser explotado? Historia 1 Kosika acaba de nacer en un barrio de chabolas de una ciudad de India. Sus padres son dalits (“intocables”) una casta en lo más bajo de la escala social india. Los dalits no pueden relacionarse con personas de otras castas y ni siquiera tocar los mismos objetos que ellos. Los padres de Kosika quieren que su hija estudie y progrese y que sea feliz, pero saben que, por su condición social, siempre será rechazada y maltratada, y sólo conseguirá trabajo en los empleos más duros, peor pagados y menos considerados. La discriminación que sufre Kosika la pone en peligro de ser explotada. Historia 2 Tomás es un niño de 7 años que se levanta muy temprano todos los días para cuidar del rebaño de ovejas de su vecino. No cobra por su trabajo, pero a cambio de trabajar desde las 4 a las 8 de la mañana, puede llevar un poco de leche a su familia. Cuando termina, aunque se da mucha prisa para poder llegar a tiempo, suele llegar tarde al colegio, porque tiene que cargar con un cubo de leche hasta su casa. Sin tiempo de desayunar y lavarse llega a clase, muy cansado y con mucho sueño. Allí, nadie quiere sentarse a su lado, porque dicen que huele a oveja. Tampoco quieren trabajar con él, porque dicen que está siempre medio dormido y que no se entera de nada. La explotación que sufre Tomás hace que sea discriminado en clase. No hay un derecho más importante que otro Lo que une a estos chicos y chicas es que la vulneración de uno de sus derechos ha provocado que pierdan otros. Normalmente las situaciones son tan complejas que es difícil darse cuenta de qué injusticia ha provocado otra. Si te fijas bien en las historias, en las vidas de estos niños hay más derechos que pueden estar siendo pisoteados ¿Cuáles crees que son? Aunque en casos particulares un derecho puede anteponerse a otro, no hay derechos humanos más y menos importantes. Todos están interrelacionados, de modo que si uno no se cumpliese, otros derechos podrían verse afectados. Foto: Cc By 2.0 Mo Bike Fed/Flickr 7· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS www.enredate.org Tipos de derechos ¿Se te ocurren casos en los que estos derechos no se cumplan? La Convención incluye derechos de: Primera generación Derechos civiles Por ejemplo: derecho a la vida, a la igualdad o a la libertad. Derechos políticos Ej.: derecho a expresar una opinión. Derechos legales Ej.: derecho a tener un juicio justo. Segunda generación Derechos económicos Ej.: derecho a un nivel de vida adecuado. Derechos sociales Ej.: derecho a la educación o a la salud. Derechos culturales Ej.: derecho a la propia lengua. Tercera generación Derechos colectivos Ej.: derecho a la paz, al desarrollo o a un medio ambiente adecuado Entre los derechos, hay derechos positivos, que se refieren a cosas que tenemos que tener o que nos tienen que pasar (tener derecho a tener un hogar o a tener un nombre y una nacionalidad) y derechos negativos, que se refieren a cosas que no tenemos que tener y que no deberían pasarnos (tener derecho a no sufrir discriminación, a no combatir en un grupo armado o a no sufrir violencia o malos tratos). Foto: Cc By-Nc-Sa 2.0 eric pas d’accent/Flickr 8· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS www.enredate.org Tenemos la Convención… ¿Está todo hecho? La Convención sobre los Derechos del Niño proclama los derechos de todos los niños, niñas y adolescentes del mundo e involucra a los gobiernos en la aplicación de las políticas necesarias para garantizarlos. Pero la Convención no es mágica: su simple existencia no hace que todos los niños se libren de abusos e injusticias. Es necesario que todos nos comprometamos para hacer que los derechos de la infancia se respeten. Aquí tienes algunos ejemplos de casos de derechos que se incumplían hace siglos y, aunque cada vez menos, también ahora. - ¿Crees que hay diferencias entre las causas en la antigüedad y las actuales? - ¿Crees que hay diferencias en el modo de ver estas injusticias antes y ahora? Salud Si los derechos se “quedan en los libros” y no hacemos esfuerzos por llevarlos a la práctica, no se estará cumpliendo la Convención y el mundo faltará a la promesa que le hizo a la infancia. Foto: Cc By-Nc-Nd demandaj/Flickr ANTES: Hasta finales del siglo XIX, cuando se descubrieron las vacunas y comenzaron las campañas de vacunación masiva en Europa, muchos niños y niñas enfermaban y morían antes de llegar a los diez años. Incluso durante gran parte del siglo XX la mortalidad infantil por enfermedades como el sarampión o la tuberculosis no era rara en los países industrializados. Otro momento peligroso para los niños era el nacimiento: se calcula que uno de cada seis bebés moría en Europa antes de cumplir su primer mes. AHORA: En la actualidad, cada día pierden la vida en el mundo 18.000 niños menores de cinco años. La mayoría mueren por enfermedades que se pueden evitar, como la diarrea o el sarampión, pero la pobreza les impide acceder a los servicios médicos que podrían evitar su muerte. En los países en desarrollo la salud es un derecho aún lejano para millones de niños y niñas: la falta de agua potable y saneamiento, las enfermedades infecciosas, el paludismo y la desnutrición son las principales causas. 9· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS Garantizar el derecho a la salud requiere reforzar los sistemas de salud públicos, de forma que todos los niños y niñas tengan acceso a atención médica de calidad. UNICEF y otras organizaciones trabajan en colaboración con los gobiernos para generar políticas que fortalezcan la sanidad y las infraestructuras que favorecen un entorno saludable. Foto: © UNICEF/NYHQ2009-0460/Gangale www.enredate.org Educación ANTES: El primer edificio escolar que se conoce existió hace más de 4.000 años en una ciudad de Mesopotamia llamada Mari. Mesopotamia ocupaba gran parte de las tierras que hoy pertenecen a Iraq y Siria, en Oriente Medio. Sin embargo, durante gran parte de la historia de la humanidad, ir a clase era un privilegio reservado a las clases altas y la nobleza. Hasta el siglo XVII no se fundó la primera escuela gratuita en Europa. AHORA: En la actualidad, millones de niños y niñas en conflictos armados como el de Iraq ven en peligro su derecho a la educación. La guerra, que empezó en 2003, ha acabado con sus escuelas, sus familias y sus medios de vida. Muchas familias se han visto obligadas a huir del país y vivir como refugiadas. En los campamentos de refugiados, UNICEF y otras organizaciones intentan que los niños recuperen su derecho a la educación. Aunque no hay un único modelo de escuela que valga para todas las situaciones, todos los niños y niñas del mundo deben tener acceso a la educación. Cada vez más gente es consciente de la importancia de la educación, incluso en países donde tradicionalmente las niñas eran apartadas de las escuelas. Foto: © UNICEF/ UKLA2012-00993/Schermb Discriminación ANTES: “Siempre hay que criar a un hijo varón, aun cuando sea uno pobre; una hija puede ser expuesta, aun cuando sea uno rico”, así describía Posidepo, un escritor de la Grecia antigua la costumbre de algunas familias de exponer (abandonar) a las niñas recién nacidas. Entonces, en Grecia los hombres tenían más consideración social y se creía que eran más útiles para la familia. En Roma y en otras civilizaciones de antigüedad también era frecuente que se abandonaran los bebés que tenían alguna discapacidad, e incluso se llegaba a obligar a las familias a desprenderse de ellos. AHORA: Hoy en día, muchas niñas son abandonadas al nacer en países de Asia, por ser consideradas una carga para la familia, normalmente por la exigencia de pagar una dote cuando se casan. En muchos lugares del mundo, la discriminación de la mujer en la sociedad hace que las familias den ciertos privilegios a los chicos frente a las chicas. También hay muchos niños y niñas entre nosotros que ven limitadas sus posibilidades de integración y desarrollo porque su entorno no está preparado para afrontar sus discapacidades. 10· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS la La discriminación es un obstáculo en el camino de muchos niños, niñas y adolescentes. La falta de igualdad les obliga a hacer más esfuerzo para conseguir lo mismo que otros y les impide desarrollar todas sus capacidades. Afortunadamente, cada vez hay más políticas para acabar con la discriminación y más gente es consciente de los obstáculos invisibles que muchas personas afrontan cada día. Foto: © UNICEF/SRLA2011-0516/Asselin www.enredate.org Niños soldado ANTES: Hace 2.500 años, en Esparta (en el sur de la actual Grecia), los niños eran separados de sus familias a los 7 años para seguir una formación militar. Allí no aprendían las cosas que se suelen aprender en una escuela, sino que eran instruidos para obedecer, para soportar la fatiga y el dolor y para vencer en la lucha. Vivían en condiciones antihigiénicas para endurecerse, comían poco, iban descalzos, no llevaban ropa de abrigo y dormían en el suelo. Además se fomentaba la rivalidad entre niños de diferentes edades, para que fueran crueles entre sí y se hicieran más feroces en la lucha. AHORA: En muchos países aún se recluta a muchos niños y niñas para que sirvan como soldados en grupos armados. Sirven a los ejércitos como combatientes, porteadores, cocineros, sirvientes o esclavos sexuales. Los adultos les dan drogas y los torturan para que sean capaces de luchar sin pensar. La situación de las niñas es incluso más dura. Estos chicos y chicas tienen muchos problemas para volver a sus hogares porque su entorno los rechaza y, en ocasiones, sus conocidos reclaman venganza por lo que hicieron cuando eran niños soldado. Para demasiados menores de edad las armas no son un juego, sino que forman parte de su vida. La Convención enfatiza que los niños y niñas deben estar protegidos de cualquier tipo de violencia. Uno de los protocolos facultativos de la Convención está orientado a proteger a los niños, niñas y adolescentes víctimas de conflictos armados. Foto: © UNICEF/ NYHQ2009-0191/Kavanagh Aunque el sufrimiento de estos niños y niñas era el mismo y las consecuencias de estas injusticias sobre ellos quizás sean muy parecidas hace siglos y ahora, hay una diferencia fundamental. Antes, el incumplimiento de los derechos de los niños era visto como algo “normal”, porque nadie se había parado a pensar que los niños tuvieran derechos. Los niños y niñas eran considerados sólo como “adultos a medio hacer”, una especie de proyecto de persona y no como seres humanos con toda su dignidad. Ahora, sabemos que vulnerar los derechos de los niños es una injusticia y que no está bien. Además disponemos de los medios legales para impedirlo y podemos actuar para que los niños y niñas que están desprotegidos puedan disfrutar de sus derechos. ¿Se te ocurre cómo? 11· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS www.enredate.org 10 mitos sobre los derechos de la infancia 1 Los derechos son “un rollo político” Mucha gente piensa que los derechos son algo que tiene que ver con la política y las leyes y que preocuparse por ellos es poco práctico. A veces, cuando podemos disfrutar de nuestros derechos no nos damos cuenta de que nuestro día a día es posible porque se respetan nuestros derechos: tenemos un nombre, una familia, estudiamos, obtenemos ayudas y becas cuando no tenemos recursos, podemos ir al médico y no somos esclavos de nadie. Todas estas cosas las damos por supuestas, sin darnos cuenta de que son el reflejo de nuestros derechos. Los debates sobre derechos no deberían ser una cosa que preocupara sólo a jueces y políticos. Todos podemos reflexionar sobre el impacto que tienen los incumplimientos de derechos sobre las vidas de niños, niñas y adolescentes. Foto: Cc By 2.0 Pantulis/Flickr Demasiadas veces se asocia todo lo infantil y juvenil como “chiquilladas” y se le da menos valor que a las “cosas de adultos”. Esto no suele ser cierto, pero en el caso de los derechos de la infancia es completamente falso. Los derechos de los niños no son algo secundario, ni complementario ni prescindible. Son derechos humanos. 3 Si ya existen derechos humanos, “no hacen falta” los derechos de la infancia Los derechos de los menores son “menores” 2 Aunque los derechos de los niños y niñas son derechos humanos, no pueden intercambiarse. La Convención de los Derechos del Niño aporta una protección especial a los niños, porque hay derechos de los adultos que no pueden aplicarse a la infancia y viceversa. Por ejemplo, la Declaración de Derechos Humanos reconoce el derecho de “casarse y formar una familia”, mientras que los niños y niñas no tienen derecho a casarse y tener hijos, sino todo lo contrario: para ellos ser obligados a casarse y a tener hijos es una vulneración de sus derechos. Hay otros ejemplos similares, como el derecho al voto o la posibilidad de trabajar en un ejército. Otra razón importante por la que los niños, niñas y adolescentes tienen derechos especiales es que son personas dependientes de otras y van adquiriendo independencia a medida que crecen. 12· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS www.enredate.org 4 Si existen leyes que protegen a los niños y niñas y ya hay policías y jueces, la Convención “es innecesaria” Muchas leyes de protección a la infancia existen precisamente porque los países que ratifican la Convención se comprometen a incluirlas en su legislación y a poner los medios necesarios para que se cumplan. Además, el Comité de los Derechos del Niño existe para vigilar que los países que han suscrito la Convención, la cumplan. Ningún niño tiene que esforzarse por conseguir sus derechos: los derechos humanos se tienen, se cumplan o no. Es algo que nadie te puede quitar y que forma parte de tu condición de ser humano. Todos los niños y niñas nacen con derechos y no tienen que conseguirlos, ni “ganárselos”. Si no se cumplen o sufren injusticias pueden reclamarlos o buscar el apoyo de otras personas que los exijan en su nombre. Cuando vemos que una persona sufre injusticias, es nuestro deber reclamar el cumplimiento de sus derechos. 6 Los derechos “hay que conseguirlos” 5 Los incumplimientos de derechos son “algo lejano” “Eso no me puede pasar a mí”, es a veces nuestra reacción cuando nos enteramos de las injusticias que se cometen con otras personas. Asumimos que las violaciones graves de derechos sólo ocurren en países muy pobres y nos dejamos llevar por prejuicios del tipo “eso es porque no tienen cultura”, “son unos fundamentalistas” o “sus gobiernos son corruptos”. Quizás si miráramos con un poco de atención a nuestro alrededor nos daríamos cuenta de que lo que provoca algunas de las injusticias más graves son actitudes y situaciones que también existen a nuestro alrededor. Muchos niños, niñas y adolescentes no pueden reclamar sus derechos porque ni siquiera los conocen. El derecho a la información es uno de los derechos recogidos en la Convención. La información y el conocimiento pueden abrirnos el paso al cumplimiento de otros derechos. Foto: © UNICEF/MENA04618/ Pirozzi 7 Preocuparse por los derechos es “cosa de mayores” En todo el mundo hay chicos y chicas que colaboran activamente para conseguir que los derechos de otros sean respetados. Participan en asociaciones, grupos de ayuda y en actividades de apoyo a chicos y chicas como ellos. Además, su trabajo es muy importante, porque para los chicos y chicas que sufren injusticias muchas veces es más fácil confiar en alguien como ellos que en un adulto. 13· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS www.enredate.org Que los niños y niñas tengan derechos no significa que no tengan obligaciones y responsabilidades. De hecho, estamos obligados a respetar los derechos de los demás, sean niños o no. Por ejemplo, reírse de alguien que tiene una discapacidad atenta contra su derecho a no ser discriminado y a no recibir malos tratos; difundir rumores sobre alguien vulnera su derecho a la imagen y acusar y castigar a alguien de algo que no ha hecho va contra su derecho a ser tratado con justicia. 9 Los derechos de los niños significan que “puedo hacer lo que quiera” Los derechos de los niños “sólo tienen que cumplirlos los adultos” 8 La Convención sobre los Derechos del Niño es una cosa seria: significa un reconocimiento del deber de proteger a los menores de edad de injusticias graves que pueden limitar sus posibilidades de desarrollo y que pueden causarles problemas y sufrimiento. Esto no significa que los menores, sólo por el hecho de serlo, tengan derecho a todo. Por ejemplo el derecho al juego no implica tener derecho a “que me regalen los juguetes que pido”, el derecho a la alimentación no significa poder “elegir que todos los días quiero comer patatas” ni el derecho a la libertad de opinión es que “mis padres me dejen estar en la calle hasta la hora que yo quiera”. Reclamar el cumplimiento de nuestros derechos no significa que tengamos derecho a reclamar cualquier cosa. Tenemos el deber de respetar los derechos de los demás. Foto: Cc By-Nd 2.0 sizumaru/Flickr 10 Yo no puedo hacer nada por los derechos de la infancia ¡Claro que puedes hacer mucho por tus derechos y por los de otros chicos y chicas! Lo primero que todos podemos hacer por nuestros derechos es conocerlos. Luego podemos reflexionar sobre situaciones de nuestro entorno en la que estos derechos no se cumplen o están en peligro. También puedes informarte sobre los cauces disponibles para defender estos derechos: qué leyes protegen a la infancia, qué asociaciones y organizaciones trabajan para defender los derechos de la infancia y qué iniciativas de defensa de los derechos permiten que los niños y los jóvenes se unan a ellos. También puedes iniciar junto a tus amigos y familiares tu propia campaña de defensa de derechos. ¿Se te ocurre algún derecho por el que puedas empezar? 14· TODOS LOS DERECHOS PARA TODOS LOS NIÑOS Y LAS NIÑAS Chicos y chicas se manifiestan en el Sudán del Sur por el respeto de sus derechos. Reclaman el final de los abusos sexuales que afectan a muchas niñas y mujeres de la región. Foto: © UNICEF/NYHQ2007-0884/Cranston www.enredate.org En 2014 se celebra el 25 aniversario de la Convención sobre los Derechos del Niño SÍGUENOS EN LA RED facebook.com/enredate.org twitter.com/unicef_EDU UNICEF - Comité Español, 2014 Edición Amaya López de Turiso Ilustraciones Pupi Herrera Enrédate es el programa educativo de UNICEF - Comité Español. Los contenidos de este documento son publicados bajo licencia Creative Commons y pueden ser copiados y reproducidos con fines educativos siempre citando las fuentes y con excepción de aquellos recursos sometidos a sus propios derechos de uso.