Santiago, siete de octubre de dos mil quince. Visto: De conformidad con las reglas del procedimiento de aplicación general, ante el Primer Juzgado de Letras de esta ciudad se sustanció esta causa RIT O5031-2014 caratulada “Bustos con Exportadora y de Gestión Caval Ltda.” sobre “nulidad del despido”, despido injustificado y cobro de prestaciones. Por sentencia de veintitrés de abril del año en curso, el juez del grado rechazó la demanda en todas sus partes, con costas, dejando establecido que ninguno de los elementos que la jurisprudencia judicial y administrativa predican como características de una relación laboral habían sido acreditados en la especie ni tampoco se evidenció indicio alguno de laboralidad en que poder sostener la pretensión del actor. Contra este fallo, recurre de nulidad la parte demandante, invocando al efecto las causales de los artículos 477, segunda parte, y 478 letra b), ambos del Código del Trabajo, las que invoca una en subsidio de la otra, pidiendo la invalidación de la sentencia impugnada y la dictación de una de reemplazo que acoja la demanda en todas sus partes, con costas. Declarado admisible el recurso, se procedió a su vista, oportunidad en la que se escucharon los alegatos que ofrecieron ambas partes. Considerando: Primero: Que la primera causal en la que se apoya el recurso es la infracción de ley a la que se alude en la segunda parte del artículo 477 del Código del Trabajo. Afirma el recurrente que la sentencia se dictó con infracción de ley porque en la asignación de eficacia probatoria a las probanzas producidas en el juicio, el sentenciador no se ajustó a las exigencias que impone el artículo 456 del código laboral; no tomó en cuenta los hechos que el tribunal tuvo por no controvertidos; no se expresan las razones jurídicas y las simplemente lógicas, científicas, técnicas o de experiencia en cuya virtud asignó valor a las pruebas o lo desestimó. Con base en lo anterior, plantea que el análisis probatorio realizado por el a quo atenta contra los principios básicos de la lógica formal pues se limita a reproducir las pruebas rendidas por las partes pero sin abocarse a su examen particular. Sostiene que las probanzas producidas sí evidenciaron la existencia de una relación laboral tal como fue expuesta en su libelo de demanda y, al efecto, relaciona las rendidas por su parte y cómo éstas, a su juicio, demostraron lo anterior. Es por ello que en el fallo, específicamente en los considerandos undécimo a décimo quinto, al declarar la inexistencia de relación laboral, el juez incurrió en un error de raciocinio denominado “argumentación en base a falso antecedente”, ello en relación con lo declarado por los testigos y lo expuesto por el representante legal de la demandada, dichos que a su juicio fueron contradichos con la documental aportada por su parte. Se explaya a continuación el recurrente en explicar cómo su parte habría logrado evidenciar el vínculo de subordinación y dependencia del actor con la demandada y de qué forma las conclusiones del juez del grado atentan contra la lógica así como las normas reguladoras de la prueba consagradas en el Código Civil y en el Código de Procedimiento Civil. Y reitera que éste no expuso las razones que tuvo para desestimar las pruebas rendidas. Más adelante, denuncia la infracción del artículo 1546 del Código Civil pues no se habría considerado por el sentenciador que los contratos deben ejecutarse de buena fe, y también los artículos 455 y 456 del Código del Trabajo pues habiéndose producido prueba bastante para acreditar el vínculo de naturaleza laboral que existió entre las partes, el juez hizo prevalecer su posición jurídica contraviniéndolos, lo que de no haber ocurrido, le habría llevado indefectiblemente a concluir de un modo diverso, acogiendo la demanda. A continuación, analiza cada una de las conclusiones a las que llega el tribunal en relación a los elementos característicos de una relación laboral y cuestiona la eficacia probatoria asignada por el juez a los antecedentes probatorios aportados por las partes, tildando de faltos de toda lógica los razonamientos del a quo y reiterando que éste no se hizo cargo de analizar en “su justo mérito” los medios de prueba aportados lo que deviene en que se haya expuesto un raciocinio insuficiente para develar cuales fueron los motivos concretos que movieron la juzgador a concluir del modo en que lo hizo; Segundo: Que de modo persistente y reiterado se ha hecho notar por este tribunal de nulidad, que la formulación de la causal relativa a la infracción de ley exige atenerse a los hechos determinados en la causa, dado que su finalidad es examinar la aplicación del Derecho pertinente en torno al caso concreto, esto es, de acuerdo a los hechos que se ha tenido por probados, de manera que los mismos no pueden ser contrariados; Tercero: Que, concordante, lo concreto resulta ser que en el motivo undécimo de la sentencia en alzada, el Juez de Grado determina que no existe relación laboral entre los intervinientes del actual proceso. Así, la situación jurídica planteada por el recurrente conlleva un contexto de ingresar a los medios probatorios que permitieron lo conclusivo, situación absolutamente vedada al efecto de la causal. Concordante, es dable argumentar que el artículo 456 del Código Laboral, norma base del actual recurso, precisamente refiere la evaluación de las evidencias del caso los cuales, se insiste, coadyuvaron al sentenciador a declarar la inexistencia de una relación laboral. Cuarto: Que, en este escenario, el Juez explicita las razones jurídicas de lo resolutivo en términos de no haberse acreditado una eventual remuneración ni menos que el actor se haya desempeñado bajo un vínculo de subordinación y dependencia para el demandado. Lo anterior, sin perjuicio de precisar, como se explicita en la sentencia, que constituye un hecho no controvertido por las partes la circunstancia que el actor prestó servicios para la demandada entre el 2 de mayo de 2013 a enero de 2014 para gestionar la compra y obtención de un crédito bancario respecto de tres predios ubicados en la comuna de Conchalí. Es decir, se proclama una relación de carácter civil. Necesariamente, debe desestimarse la causal en análisis. Quinto: Que, en subsidio de la anterior, se recurre al motivo de nulidad que contempla el literal b) del artículo 478 del Código del Trabajo, esto es, se aduce que la sentencia se dictó con infracción manifiesta de las normas sobre apreciación de la prueba conforme a las reglas de la sana crítica. Alega el recurrente que el análisis probatorio efectuado por el a quo le ha provocado perjuicio y agravio a su parte. Luego de exponer las características de la valoración de la prueba de acuerdo a la sana crítica, denuncia que no se apreciaron los dichos de los testigos que su parte llevó a estrados “en su justa y total dimensión” ni tampoco la testimonial ni la confesional provocada por su parte respecto del representante legal de la demandada, de cuyo mérito el tribunal podía extraer indicios suficientes acerca de la existencia de la relación laboral y aplicar, al caso concreto, lo dispuesto en el inciso cuarto del artículo 9 del Código del Trabajo. Reclama asimismo que el sentenciador haya asignado a dichas probanzas un efecto probatorio diverso de aquel que logró evidenciarse en el juicio, vulnerando las reglas de la sana crítica al no considerar la multiplicidad, gravedad, precisión, concordancia y conexión con las demás pruebas, que conducían lógicamente a dar por establecida la relación laboral que su parte sostuvo como fundamento de su pretensión. Reclama que, en la apreciación del mérito probatorio de la absolución de posiciones del representante legal de la demandada, no haya hecho el juez aplicación del principio de la buena fe y del “principio de la realidad” pues siendo la confesional la “reina de las pruebas” debió el juzgador tener por probado lo afirmado por el absolvente, lo que además era concordante con el resto de los medios probatorios producidos; así la convicción del tribunal no debió ser otra que la relación laboral fue demostrada en juicio; Sexto: Que, la causal del artículo 478, letra b) del Código del Trabajo tiene como finalidad primordial propiciar un control sobre el juicio de hecho y lo jurídico consecuencial contenido en la sentencia. Sin embargo, no se trata que una simple protesta de las partes legitime el examen de lo actuado en la asignación o negación de eficacia a la prueba rendida. La norma legal que tipifica el motivo de nulidad que se hace valer prescribe que la revisión respectiva sólo puede efectuarse en la medida que exista “una infracción manifiesta de las normas de apreciación de la prueba conforme a las reglas de la sana crítica”. Ahora bien, la parte que pretenda una revisión de ese tipo debe satisfacer el imperativo de demostrar la vulneración de tales reglas. Por lo mismo, resulta indispensable que las identifique o señale; que explique cómo y por qué se habrían vulnerado en el caso; qué hechos específicos estarían comprometidos en esa supuesta vulneración y, en fin, de qué manera podría alterarse la decisión adoptada en la instancia respectiva; Séptimo: Que, más aún, la falta de acreditación del vínculo de naturaleza laboral, se percibe en cuanto no existe una real remuneración o a cuánto asciende, si existiese. Al margen, no existen medios probatorios al efecto de una concreción remunerativa o tendiente a una periodicidad o continuidad en sus pagos o en la permanencia de los servicios prestados. Salvo, respecto de montos que efectivamente ha percibido como secuela de la gestión en la consecución de préstamos bancarios. Concordante, no existen antecedentes a probar una supervigilancia en el desempeño de las funciones que se desempeñan por el actor., precisándose que siempre las actuaciones del actor se dirigen a la gestión de obtener créditos bancarios para un negocio. Así, la base normativa de la causal, artículo 456 del Código del Trabajo, no puede prosperar precisando el carácter de derecho estricto que en el caso de autos conduce a la inexistencia de contrato en los términos del artículo 7 del Código del Trabajo. Más bien, su contenido, conlleva la presencia de otra causal absolutamente ajena a la infracción de ley deducida. Más aún, existe una incompatibilidad con la siguiente causal alegada referida a la letra b) del Código del Trabajo, precisamente pues el deducir la infracción de ley conlleva la aceptación de los hechos establecidos sin que sea posible, posteriormente con la causal anotada, entrar a la cuestionabilidad de los razonamientos que concreta el juez de grado. Por estas razones y de conformidad además con lo establecido en los artículos 477, 478 y 482 del Código del Trabajo, se rechaza, con costas, el recurso de nulidad interpuesto por la parte demandante contra la sentencia de veintitrés de abril de dos mil quince recaída en la causa RIT O-5031-2014 caratulada “Bustos con Exportadora y de Gestión Caval Ltda.” sobre “nulidad del despido”, despido injustificado y cobro de prestaciones dictada por el Primer Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago. Acordada, la decisión de condenar en costas al recurrente, contra el voto del ministro señor Moya Cuadra, quien estuvo por absolverle de dicha carga. Se previene que la ministra señora Ravanales no comparte lo expresado en el párrafo final del motivo séptimo, atendida la forma en que se han hecho valer las causales de nulidad. Redacción del ministro señor Moya Cuadra y de la prevención, su autora. Regístrese y comuníquese. N° 772-2015 Pronunciada por la Décima Sala de esta Iltma. Corte de Apelaciones de Santiago, presidida por el ministro señor Javier Aníbal Moya Cuadra e integrada por la ministro señora Adelita Ravanales Arriagada Carrillo y el abogado señor Óscar Torres Zagal. Autoriza el/la ministro de fe de esta Iltma. Corte de Apelaciones de Santiago. En Santiago, a siete de octubre de dos mil quince, notifiqué en secretaría por el estado diario la resolución precedente.