XXXIX Encuentro de Institutos de Derecho Comercial – Colegios de Abogados de la Provincia de Buenos Aires Comisión 4 : Derecho Concursal Algunas reflexiones sobre los intereses de los créditos laborales en los concursos Autoras : Dras. Fernández Muñoz, Juana Concepción y Landín, Alicia Liliana. ( orden alfabético ) CASM PONENCIA ¿Desde y hasta cuándo corresponde el pago de intereses de los créditos laborales en los concursos ? Planteamos preponderancia de valores y de principios rectores. Desarrollamos y proponemos en especial la aplicabilidad y la concordancia de la pars conditio creditorum y del protectorio laboral.. Actualmente la posición no es pacífica tanto en doctrina como en jurispruden cia.- Los fallos también son contradictorios. La discusión radica en considerar : a) si el crédito laboral sigue.devengando intereses a pesar de la quiebra b) o solamente hasta la presentación en concurso o la declaración de la quiebra c) o si se pagan hasta el efectivo pago Nos pronunciamos por el pago de los intereses de los créditos laborales desde su origen hasta el efectivo pago Sugerimos la modificación del art.19 de la ley 24522 igualando en rango los créditos laborales a los hipotecarios y prendarios. Sostenemos la aplicación del plenario Seidman y Bonder a pesar de haber sido modificada la base normativa “....según Mazza y Lorente.l Consideramos que es posible sostener la aplicación del mencionado plenario Seidman y Bonder en base a la aplicación de los principios del derecho del trabajo, que deben ser observados en el procedimiento concursal., .Lo sustentamos en la naturaleza misma de dichos créditos y lo fundamentamos en el carácter tuitivo del derecho del trabajo por cuanto, surge históricamente como una manera de fortalecer la posición del más débil. No es un capricho del legislador. El crédito laboral no es un crédito más. La naturaleza alimentaria del crédito laboral no puede soslayarse, atento a que de ello depende la subsistencia y la vida de la persona humana. Revisten tales derechos, rango constitucional. Por lo tanto las leyes deben interpretarse en orden a la protección constitucional dispensada a los derechos fundamentales , como lo es el de la VIDA , sin cuya protección , sería impensable el goce de otros derechos DESARROLLO : Los concursos tanto en la legislación argentina, como en la universal, suspenden el curso de los intereses, encontrándose el origen histórico de tal norma en la reforma al Código de Comercio de Francia de 1838, que recogió la doctrina judicial de aquél país, proyectándose desde allí al derecho comparado. (1). En el concurso preventivo tal principio se introdujo en la legislación argentina a partir de la Ley 19551 ( art.20). En la actualidad se encuentra legislado en el primer párrafo del art.19 de la LCQ. – Una norma semejante, se prevé para los casos de quiebra con motivo de su declaración (art.129) LCQ (2). Como lo sostiene Grispo, Jorge (3) “ Desde el momento en que el candidato a concursado presentó su solicitud de concurso preventivo, ante, en el caso de la Cap. Fed., la mesa de entradas de la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Comercial, se produce la suspensión del curso de los intereses, que devengue todo crédito de causa o título anterior a la interposición del pedido de concurso preventivo, en tanto y en cuanto, no se encuentre garantizado con prenda o hipoteca “.Como lo destaca Vítolo, Daniel Roque (4) “ Con la presentación del concurso se produce la cristalización del pasivo, con la suspensión de los intereses, pues si así no fuera, se vulneraría la igualdad de los acreedores. Quintana Ferreyra sostiene que tal momento es el de la apertura. Grispo sostiene que es el de la presentación según el propio texto legal., siguiendo el planteo de Rabiolo : “ Si el concurso preventivo desemboca en la quiebra, proceden los intereses desde el día de la presentación del concurso hasta la fecha de la declaración de la quiebra. - El síndico debe, en tal caso, recalcular el monto de los créditos ( art.202, ley concursal ). De acuerdo a lo dispuesto por el art.129 LCQ., no procede computar intereses con posterioridad a la declaración de quiebra, pues se encuentra prohibido por la ley (6). Siguiendo a Roitman-di Tullio (7) podemos sintetizar los efectos de la aplicación del dispositivo concursal : a) La paralización de los intereses comprende todo tipo de réditos accesorios del capital ( convencionales, legales, compensatorios, moratorios, punitorios, cláusulas penales, recargos por mora ) , a excepción de los créditos hipotecarios y prendarios.b) La regla es genérica y abarcativa a toda clase de créditos, siempre que se trate de aquéllos de causa y título anterior a la presentación en concurso o a la declaración de quiebra. c) Los intereses englobados en el capital o pagos anticipadamente , están sujetos a la reducción pertinente, limitándose la procedencia de los mismos a los devengados hasta la fecha de la presentación concursal. d) La suspensión de los intereses no comprende la actualización monetaria. e) Momento de la suspensión es el de la presentación a concurso. En la quiebra opera en forma automática la suspensión a partir de la declaración. f) La suspensión sólo rige frente al concurso y en resguardo de la masa, ya que frente al concursado o fallido , los intereses continúan su curso. g) Los intereses no se suspenden respecto de los fiadores y coobligados solidarios, por lo que pese a la quiebra, siguen devengándose intereses, frente a ellos. h) El período que comprende está supeditado a la suerte del concurso y a lo que en definitiva se convenga sobre los intereses del acuerdo. i) Los fundamentos de la suspensión de intereses radican en el respeto por el trato igualitario a los acreedores. (8). Además la doctrina ha sostenido que: a ) Cuando el deudor se halla en estado de cesación de pagos, su patrimonio deja de producir beneficios y lucros y no puede soportar la carga de los intereses de las deudas que lo gravan. b) Podría beneficiarse a algunos de los acreedores que tuvieran la previsión de estipular intereses sobre otros que no la hayan tenido, o que se beneficien los acreedores que hubiesen pactado tasas diferenciales.c) Es una derivación de la llamada “ insensibilidad del patrimonio del quebrado” imposibilidad de que entren en la quiebra obligaciones futuras o créditos devenidos con posterioridad a su declaración.d) En orden al proceso, lo que adeuda el fallido es lo que adeudaba cuando quebró. e) Tal suspensión intenta evitar sumir al fallido en la imposibilidad de reintegrarse a la corriente económica mercantil. f) Derecho del fallido de liberarse de las obligaciones que lo gravan y sanear su patrimonio. El cobro de intereses por parte del acreedor, puede impedir la rehabilitación del fallido. g) Se intenta encontrar una salida más fácil del deudor a la crisis por la que atraviesa. h) Por efecto de esta regla se consolida el pasivo concursal en el momento de la presentación.SITUACIÓN DE LOS CRÉDITOS LABORALES La doctrina y la jurisprudencia laborales se orientaron en sentido contrario a los comerciales. (8) La posición laboralista siempre que el contrato de trabajo se resolviera por quiebra del empleador, la indemnización del trabajador debía devengar intereses desde que cada suma fue debida hasta su efectivo pago. La posición comercialista exigía la aplicación estricta de los arts.19 y 129 de la LCQ ( es decir, arts.20 y 133 de la ley 19551) que impedía el devengamiento de intereses desde la presentación en concurso preventivo o el decreto de quiebra. Lentamente el criterio comercialista fue cediendo y tratándose de acreedor laboral verificado en un concurso preventivo, la doctrina plenaria de la Capital Federal resolvió que : la suspensión de los intereses impuesta por el art.20 de la ley 19551 ( actualmente art 19 LCQ) no comprendían las acreencias de naturaleza laboral. (9). Con la sanción de la ley 24522 algunos consideraron que continuaba siendo de aplicación la doctrina plenaria citada y otros, que no.Los fallos también son contradictorios, aunque al parecer son mayoría los que dicen que el plenario Seidman y Bonder ya no es aplicable. Esta última es la opinión de Mazza y Lorente (10) al sostener : “ ...La mentada doctrina plenaria no resulta aplicable luego de la reforma concursal de 1995 en mérito a que fue modificada la base normativa sobre la que se dictó, pues el fundamento de dicha doctrina fincaba en lo dispuesto por el art. 11, inc.8 de la ley 19551 ( derogado por la ley 24522), en la inexistencia de un trámite encaminado a que los créditos laborales participaran de la celebración del concordato y en el carácter alimentario del crédito laboral “. “Se juzgó entonces que el incumplimiento del art.11, inc.8, de la ley 19551 no podía mejorar la situación del deudor permitiéndole pagar en moneda desactualizada o sin intereses lo que omitió al tiempo de su presentación en concurso preventivo, por aquello de que nadie debe extraer provecho de su reticencia y menos aún de su dolo. (art.3136, Cód.Civil).” “De este modo consideramos que aplicar el plenario de 1989 importa tanto como transgredir el ordenamiento concursal presente, esto es el art.20 de la ley 19551”. “En cuanto a la posibilidad de participación en la solución concordataria que la ley 19551 negaba al acreedor laboral, la ley 24522 se lo permite. Pueden concurrir a la celebración del acuerdo concursal los acreedores laborales, de manera que no resultan extraños al acuerdo preventivo y pueden participar desde la categoría de quirografarios laborales”. Tal también es la posición de Rivera (11).- En idéntica postura se colocan Roitman y Di Tulio (12).Esta posición no es pacífica en doctrina y en jurisprudencia, habiéndose interpretado en sentido contrario y con apoyo en el fallo plenario dictado en vigencia de la ley 19551, que la presentación a concurso no suspende el cómputo de los intereses en los créditos laborales, atento a que el art.19 de la ley 24522 contiene la misma disposición que el art.20 de la ley 19551, por lo que permanece vigente la interpretación establecida en el plenario SEIDMAN Y BONDER. Asimismo se entiende que la propia ley 24522 ha reconocido la naturaleza alimentaria del crédito laboral, disponiendo su satisfacción prioritaria con el resultado de la explotación, por lo tanto debe interpretarse que el carácter alimentario de tales créditos justifica un tratamiento diferente. En esta postura se encuentran Fassi-Gebhart (12), Dasso (13), Grispo (149 y Ciminelli (15).Nos inclinamos por la postura minoritaria. Consideramos que el plenario Seidman y Bonder debe continuar aplicándose, pues la ley 24522 ha querido proteger el crédito laboral, acordándole prioridad de pago dada su naturaleza alimentaria ( art.16) La excepción a la regla general fue una creación de la jurisprudencia ya que tanto la ley 19551 como la ley 24522 contienen idéntico principio general para todos los créditos exceptuando los hipotecarios y los prendarios. La naturaleza alimentaria del crédito laboral reviste rango constitucional. Responde al resguardo del valor VIDA y sabemos que sin alimento no hay vida sino muerte y desnutrición.El principio rector de la pars conditio creditorum y el protectorio laboral deben integrarse impulsando el resguardo y respeto de los derechos más elementales. El crédito laboral no es un crédito más, porque compromete la subsistencia del que trabaja. Si no se satisfacen dichos créditos en forma prioritaria como lo manda la ley, deberán soportar los intereses. No se estaría violando el principio de igualdad porque no puede existir igualdad entre los desiguales. Quien tiene un crédito alimentario lo necesita para comer, no otorgárselo en tiempo oportuno, atenta contra su derecho a la vida e integridad física y moral. Un crédito alimentario no se encuentra en un pie de igualdad con uno no alimentario. Por lo tanto su protección implica extremar los mecanismos para su satisfacción prioritaria. Si se trata con la suspensión de intereses, entre otras cosas, de facilitarle la reinserción al fallido, si no le facilitamos por todos los medios la obtención del cobro de su crédito en forma prioritaria, el trabajador no podrá reinsertarse a la vida , pues o morirá o su salud se verá considerablemente dañada. Sabemos que la institución del “ pronto pago” es insuficiente para hacer efectivos los derechos alimentarios, por lo tanto debe sostenerse la doctrina del plenario de SEIDMAN Y BONDER. Para liberarse de los intereses se deben satisfacer íntegramente los créditos laborales. Evidentemente como el juez del concurso debe armonizar todos los intereses en pugna, lo debe hacer, respetando los principios de cada disciplina. El derecho del trabajo ha tenido siempre un carácter tuitivo, se ha basado en el principio protectorio que no abandonará en el futuro. Como dice Vázquez Vialard, su fundamento es la protección de la parte más débil de la relación . Equilibra a los desiguales. El derecho del trabajo surge históricamente como una manera de fortalecer la posición del más débil. El derecho del trabajo es el resultado de un fenómeno histórico : La circunstancia de que fuerzas económicas poderosas avanzaban creando injusticias sociales, horadando la condición humana de los más humildes. El derecho del trabajo no es un capricho del legislador, sino que fue, la reacción del hombre ante una injusticia. No vamos a pretender reinventar todo el derecho con una norma de derecho concursal. Si éste tiene por objeto la empresa en crisis y bueno, deberá compatibilizar los derechos que se aplican a los distintos componentes de esa empresa en crisis. No puede arrasar con los principios de todas las ramas del derecho. Por eso sí que es trascendente el pensamiento de Provinciali: “ apperto a causa dellastessa un procedimento concorsale questo asume a asorbe anche, ogni tutela particolare.” O sea, que el juez concursal al asumir la tutela de todos los intereses del concurso, deberá hacerlo teniendo en cuenta las características de cada interés particular, no pudiendo soslayar ni el carácter alimentario del credito laboral, ni el carácter protectorio del derecho del trabajo. El juez del concurso no tiene el problema de armonizar el derecho concursal con el derecho del trabajo, el juez del concurso debe respetar que quien reclama un crédito alimentario, lo necesita para comer y que la situación de insolvencia, lo coloca en una situación más frágil aún que la que tenía cuando la empresa funcionaba bien. ANÁLISIS DE LA JURISPRUDENCIA POSTERIOR A LA LEY 24522.Las salas A y C de la Cámara Nacional en lo Comercial de la Capital Federal, se han expedido a favor de la aplicación del plenario SEIDMAN Y BONDER. Así, la sala B ha dicho: ...”Atento que el art.19 de la ley 24522 contiene la misma disposición que el art. 20 de la ley 19551, permanece vigente la interpretación establecida en el fallo plenario “SEIDMAN Y BONDER S.C.A. s/ concurso preventivo. Incidente de verificación por Piserchia, Raúl “ del 2/11/1989, en cuanto estableció que la suspensión de los intereses impuesta por el art. 20 de la ley 19551 , no comprende las acreencias de naturaleza laboral y no libera al deudor del pago del interés devengado en período posterior a la presentación en concurso preventivo.CNCom. Sala B 14 – 7 – 2000” ; “ATC S.A. s/concurso preventivo. Incidente de pronto pago por Ferraroti, Alberto Luis”.La sala C ha dicho “ Resulta improcedente la suspensión de los intereses posteriores a la apertura del concurso preventivo respecto de reclamos de acreencias laborales, en virtud de la doctrina del plenario “SEIDMAN Y BONDER SCA ...”( DJ 1190 – 1 – 903) que es aplicable a pesar de la reforma de la ley concursal, dada la naturaleza alimentaria del crédito vinculado a la subsistencia del trabajo “ CNCom. Sala C, 2002/09/17 – “ PINEIRO, Carlo R s/ coc. Prev. S/ inc. de rev. en Sobremesa S.A.) En el segundo de los fallos mencionados, la decisión se basa en la naturaleza alimentaria del crédito laboral. Sin embargo, tal no parece ser la orientación predominante en la jurisprudencia. Así, la Cámara de Apelaciones de San Martín, Sala II dispuso: “El carácter alimentario del crédito laboral no permite por sí solo sortear el valladar del art.19 de la ley concursal y evitar la cristalización de los intereses, a la fecha de corte allí prevista, atento que el artículo citado no admite interpretaciones extensivas que no surjan de su propia letra o, en todo caso, de la incompatibilidad de esta preceptiva con otras disposiciones del ordenamiento concursal, tal como ocurría con el antiguo régimen, en virtud del derogado art.11, inc.8 de la ley 19551. La aplicación del dispositivo de cristalización del pasivo, no importa negar la naturaleza alimentaria del crédito, la cual se ve contemplada en la ley concursal en aspectos de mayor trascendencia, tales como : a) la institución del “pronto pago” (art.16, 2do y ter. Párrafo, ley 24522), b) el régimen de privilegios ( especial y general ) y c) la exclusión del verificatorio previsto por el art´.32 de la ley citada.” cc0002 sm 43026, 5-3-1998” Núñez de Buenanueva,Olga y otros c/REAL S.R.L.s/ incidente de verificación de crédito”.Tal ha sido también el criterio de la CNCom. Sala A en los autos “ Empresa de Transportes Pedro de Mendoza SISA s/ conc.prev.s/ inc. de verif. por Varela, Carlos A.” del 2001/03/07 También se ha aplicado el plenario SEIDMAN Y BONDER cuando el crédito laboral fue devengado bajo la ley 19551 ( ver Civ y Co.Rosario SF) Sala 1º integrada 27-10-97.QUÉ SUCEDE CON LOS INTERESES Y LA DECLARACIÓN DE QUIEBRA .Según Grispo ( ) un fallo echa luz definitiva sobre esta cuestión. “En materia de intereses de créditos laborales, es conveniente distinguir dos cuestiones netamente diferenciales: a) El curso de los mismos. b) El privilegio con el cual deberán ser pagados. Los intereses por un crédito laboral corren desde la mora hasta la fecha declarativa de la quiebra, donde por aplicación del art.133 (ahora art. 129) de la ley de concursos, quedan suspendidos a fin de igualar a todos los acreedores y mantener la pars conditio creditorum: Los intereses así devengados , se pagarán a) En forma privilegiada , los corridos desde la mora en el pago del crédito y hasta dos años b) Los que excedieran ese tiempo hasta el auto de quiebra, son quirografarios. Obviamente, si el plazo que va desde la mora hasta el auto de quiebra, es menor a dos años, serán totalmente privilegiados ( CNCiv.y Com. Laboral y de Minería Santa Rosa, noviembre 20-980, Paulucci, Orlando O. Rep.La LeyXLI, J-Z, sum 183). De todos modos los interese por deudas laborales no se pierden, sino que se suspenden a raiz de la declaración de quiebra. Si existe remanente, deberán pagarse los intereses suspendidos. El criterio sustentado por Grispo es el de la Corte de la Provincia de Buenos Aires, que en virtud del art 129 de la LCQ, reconoce la procedencia de intereses de créditos de naturaleza laboral hasta la fecha del auto declarativo de quiebra. Opera el privilegio para su cobro, sólo sobre aquellos intereses que corrieron durante dos años después de la mora y siempre con la fecha de quiebra como límite.(SC JVA 5-3-2003,” Banco de Chivilcoy SA s/ QUIEBRA”). En los autos” La Razón SA s/QUIEBRA s/Inc.de verif. por González Caro R. de la CNCom. Sala B, diciembre 30-994 ( ) el Dr. Butti, ha planteado una disidencia : sostuvo que la suspensión establecida por la ley de concursos no puede ser extendida a los créditos que exceden al privilegio especial y general, cuando el lapso de dos años , vence posteriormente a la declaración de quiebra, pues ello implicaría limitar el privilegio establecido por la ley. Tal postura respondería, según Grispo, a la especialidad de los créditos laborales, citando a Rivera en cuanto dice .” Mientras el derecho concursal se sustenta entre dos pilares que sirven para edificarlo: a) En el principio de la igualdad de los acreedores “ pars conditio creditorum” b) En el derecho laboral, que constituye un sistema inspirado en la protección singularizada de los créditos que se originan en el trabajo, reivindicando para ello el carácter alimentario de tales acreencias” No obstante Grispo se pronuncia en contra de la opinión de Butti, distinguiendo entre privilegio especial de los créditos laborales y la suspensión del curso de los intereses Quintana Ferreira, Tuillón y Fassi Gebhardt ( ) sostienen que la disposición de la ley concursal de suspender los intereses tiene como fundamento la necesidad de dejar definitivamente cristalizado el pasivo, manteniéndolo sin modificar, a partir de la fecha de la sentencia declarativa de la quiebra y para preservar la igualdad. CONCLUSIÓN : Proponemos igualar en rango los créditos laborales con los hipotecarios y prendarios, para lo cual sugerimos la modificación del artículo 19 de la ley 24522, el cual quedaría redactado de la siguiente forma: “ La presentación del concurso produce la suspensión de los intereses que devengue todo crédito se causa o título anterior a ella, salvo a) los créditos de origen laboral, por su naturaleza alimentaria y b) los que no estén garantizados con prenda o hipoteca................” Igual criterio se mantendría para la quiebra. BIBLIOGRAFÍA Citas : (1) Conf.Bonelli, Gustavo.Del fallemento;Casa edit. Dottos Francesco; Vallardi-milano p.532. Citado por Roitman Horacio y Di Tullio,José A. “Los intereses en los concursos” Rubinzal Culzoni (2) Conf.Roitman-Di Tulio, obra citada. (3) Grispo, Jorge Daniel “”Tratamiento legal de los intereses en materia Concursal”LL 1997-A pág.896 (4) Citado por Grispo, en el art.cit. en la nota ant.-Vítolo,Daniel Roque (5) Fassi Gebhardt “Concursos y Quiebras “ Edit.Astrea 1996. (6) Ver Roitman-Di Tulio obra citada. (7) Obra cit. Páginas221 a 225 (8) Comentarios de la ley de Concursos y Quiebras N`24522.Edit Edit. Ad Hoc 1996 Obras: Roitman,Horacio y Di Tullio José A. “Los intereses en los concursos” Ed.Rubinzal-Culzoni. Grispo, Jorge Daniel “Tratamiento legal de los intereses en materia concursal” LL 1997-A págs. 897 a 902 Mazza, Alberto José, Lorente Javier Armando “Créditos laborales en los concursos” Astrea , BsAs 2000 Grispo, Jorge Daniel “Suspensión del curso de los intereses (una valiosa disidencia) LL 1995-E págs. 68 a 79 Ciminelli, Juan Carlos “Efectos de concurso preventivo” Ed. Ad Hoc Buenos Aires, 2001. Jurisprudencia CNCom Sala E 1990-02-14 CNCom en pleno 1989-02-11 “SEIDMAN Y BONDER, sociedad en comandita por acciones s/ conc. Prev. Inc. de verif. cred. por Diserchia Raúl LL 1991 pág. 8 a 9. CNCom.,sala B diciembre 30-994 “La Razón S.A. S/quiebra s/.inc.verif. por González Caro R.,LL1995-E,PAGS. 68 A 71, con comentarios de Jorge Daniel Grispo