2 Plano de Feria de Alcalá de Guadaíra 2013 CALLE SEGUIRIYA Nº 1.- LOS FARAONES DEL GUADAÍRA Nº 3.- PARTIDO POPULAR Nº 5.- LA FUENTE DEL PIOJO Nº 7.- LA NUESTRA Nº 11.- FÚTBOL SALA ALCALÁ Nº 13 -15.- CASA EXTREMADURA "ALGUADAÍRA" Nº 17.- LOS ESPUMOSOS Nº 19.- LA CANALLA Nº 21.- EL RINCÓN DE BENAROSA CALLE SOLEÁ Nº 1 - 4.- CLUB DE TENIS OROMANA Nº 2.- A. D. JUANCA Nº 6.- LOS 17 Y UNO MÁS Nº 8.- PON PON PON Nº 10.- TÓ ER MUNDO ES GÜENO Nº 12.- ------Nº 14.- SEMOS LOS QUE ESTAMOS CALLE MALAGUEÑA CALLE ALEGRIA: NIÑOS PERDIDOS POLICÍA NACIONAL POLICÍA LOCAL PROTECCIÓN CIVIL BOMBEROS Nº 1.- LA ALBOREÁ Nº 3.- NO NI NÁ Nº 5.- YA SOMOS BASTANTES Nº 7.- PARTIDO ANDALUCISTA Nº 9.- B.S.N. GIRALT LAPORTA, S.A. Nº 11.- ESTRELLA SAN AGUSTÍN Nº 13 -15.- LO QUE NOS FALTABA Nº 17.- PEÑA CULTURAL BÉTICA "MANUEL ESPINA" CALLE MEDIA GRANAINA Nº 1A.- AMIGOS DE LAS FIESTAS Nº 1B.- AQUÍ NO HAY QUIEN VEVA Nº 2-4.- NOS DA IGUAL Nº 8.- PEÑA CULTURAL FLAMENCA ALCALÁ CALLE BULERIA Nº 1.- LA PRIMERA A LA IZQUIERDA Nº 2.- AMIGOS DEL MOLINETE Nº 3.- CUCHARÁ Y PASO ATRÁS Nº 4.- LOS GITANITOS Nº 5.- EL REALAJE Nº 6.- LOS DEL METRO DE MÁS Nº 7.- HASTA LA CORCHA Nº 8.- AMIGOS DEL DUCAL Nº 2-A.- LOS MAUROS Y SUS AMIGOS Nº 2-B.- CLUB DE LUCHA CRISTÓBAL DE MONROY Nº 4.- PARTIDO COMUNISTA ANDALUZ Nº 6.- AL COMPÁS Nº 8.- FUNDACIÓN DE CARNAVAL Nº 10.- CÍRCULO ALCALÁ Nº 12.- EL CAJUL Nº 14.- AMIGOS DE LA RADIO CALLE PETENERA CALLE FANDANGO Nº 1.- Y TODO VA BIEEEÉN Nº 3.- COTO DE CATA Nº 5.- HDAD. NTRA. SRA. DEL ROCÍO Nº 7.- HARANA Nº 7-A.- LOS DE ANCA DETRÁ Nº 9.- LA CHUMBERA Nº 11.- AL ALBA Nº 1.- ASOCIACIÓN REYES SILOS Nº 3.- EL SUBMARINO AMARILLO Nº 3A.- LOS OCHENTEROS Nº 5.- NTRA. SRA. DE LA LUZ Nº 7.- LOS PUYAS Y ALGUNOS MÁS Nº 9.- DE MOMENTO… NO SABEMOS Nº 11.- LA ÚLTIMA Y NOS VAMOS Nº 13.- EL CÓNCLAVE CALLE TARANTA Nº 1.- P.S.O.E. ALCALÁ DE GRA. Nº 2.- ANDALAUCE Nº 4.- EL ARREBUJO Nº 6.- LA JARANA Nº 8.- LA BUENAS GENTES CALLE MARTINETE Nº 1.- LOS COMPADRES Nº 2.- ARTE Y COMPÁS Nº 3.- HDAD. SAN MATEO EVANGELISTA Nº 4.- LA MITAD MÁS UNO Nº 5.- PÁ NOJOTROS Nº 6 - 8.- AA.VV. LOS PANADEROS Nº 7.- LOS BARRIGONES Nº 9.- LA MÁS GUAY Nº 10.- LA SALEROSA Nº 11.- UN PUÑAO DE GÜENA GENTE Nº 12.- PEÑA C.D. EL CASTILLO Nº 13.- EL REVUELO Nº 14.- EL JARRITO Nº 15.- LOS DEL PASTORCITO Nº 17.- LOS DEL CUCHARÓN Nº 19.- LA ALMAZARA Nº 23.- LOS PIES REONDOS Nº 25.- LOS BUENOS AMIGOS Nº 27.- LA ESQUINA DEL PEREJIL 3 FELIZ FERIA A TODOS A pesar de las difíciles circunstancias económicas y sociales que vivimos, la feria nos llega como una vivencia necesaria. Necesaria porque es también un trabajo para muchas familias, una manera de ganarse la vida que esperan todo el año y que entre todos debemos comprender y apoyar. Pero no sólo por esto, la feria es esencialmente un espacio de encuentro, relación y convivencia entre personas. Y es precisamente en momentos de dificultad, en situaciones desfavorables, cuando mayor bien nos hace el sentir la cercanía y el apoyo de los demás, el estar juntos, compartiendo lo que en ese momento tengamos, y sintiéndonos parte de un colectivo que nos acoge, nos arropa y nos fortalece. S Sánchez Benítez es profesional de la comunicación audiovisual y corporativa. Organizadora de eventos expositivos. Es Licenciada en Bellas Artes, obteniendo entre otras meciones: Premio del «XXV Concurso Nacional de Pintura» de Alcalá de Guadaíra (1996), Primera finalista del «III Premio Nacional de Pintura» de Caja Rural de Sevilla (1996), y Premio «VII Concurso de Proyectos Empresariales» en Alcalá de Guadaíra (2007). Participa en exposiciones de arte como artista en diversas provincias de Sevilla. Este año es la autora del cartel de nuestra Feria de Alcalá de Guadaíra, expresando en la presentacion del mismo: El cartel está inspirado en el de "«Fiestas de Primavera. Semana Santa y Feria» de Sevilla, de José García Ramos (1912). No se trata de un intento de recuperación de ningún tiempo pasado, no es una versión, ni un impulso nostálgico, sino un ejercicio de admiración y homenaje en el que he tratado de sustraer lo «esencial» a mis ojos, esto es; el protagonismo de la mujer y los elementos iconográficos dotados de identidad. Como en el cartel de García Ramos, la mujer está sentada sobre una edificación (quizá sea esta la única semejanza formal con el cartel) pero es una mujer de nuestro siglo. Ella es musa, eje y protagonista, y se erige en el contexto como ILVIA Hagamos todos un esfuerzo por los demás, pero hagámoslo también por ganarle todos unos minutos a la vida… Unos minutos de convivencia, de encuentro y de diversión. Todos lo necesitamos. Feliz feria a todos, Antonio Gutiérrez Limones SILVIA SÁNCHEZ BENÍTEZ: AUTORA un gran monumento. He querido darle ese tratamiento porque es así como veo hoy la feria, con la mujer como heredera de la fiesta, luciendo traje y su nuevo respeto y posición social, de ahí que no se muestre jocosa sino soberana. Los elementos iconográficos también son aquí señas de identidad; el albero de nuestra tierra, el azul de nuestro río y de nuestra bandera, y nuestro castillo. La tipografía que he seleccio- DEL CARTEL DE FERIA nado, con aire modernista, es elegante y delicada. Eliminado cualquier ruido o elemento superfluo, he tratado que la sencillez y la limpieza de la imagen hagan prevalecer las tres cosas importantes que quería decir; feria, mujer, Alcalá de Guadaíra. Con su obra atraerá a los miles de alcalareños al Recinto Ferial de San Juan para el disfrute de la misma. 4 «La Feria es un lugar de convivencia y de tolerancia en la que todo el mundo acude para compartir algo» M ANUEL Casado Trigo es el encar- gado de realizar el anuncio de la Feria de Alcalá de Guadaíra. Lleva el título de pregonero y tiene la alta responsabilidad de realizar la invitación oficial para propios y extraños a adentrarse durante cuatro días en un territorio en el que la alegría es obligada y compartir lo mucho o lo poco, la material y lo espiritual es una forma de vida. Manuel Casado conoce bien el paño sobre el que disertará en el escenario de la Caseta Municipal. Sus credenciales para esta función son inmejorables. Para empezar es de Alcalá, por familia, por vivencias y por devoción. Desde siempre ha estado involucrado en sus fiestas y sus celebraciones. Dispuesto a ayudar a engrandecer todo lo que tenga que ver con su pueblo. Prueba de ello fue su trabajo en la exitosa puesta en marcha del Teatro Auditorio Riberas del Guadaíra, a través de su empresa de gestión cultural Bisemol. Manuel sabe de cante y de pellizcos. Su madre ha hecho de su hogar un lugar en el que la música siempre ha estado presente y se ha vivido como la forma natural de expresarse. Fini Trigo, la niña que quiso ser artista, que vibraba al escuchar a Marisol o a Marifé de Triana, sembró en su hogar una semilla que ha dado fruto en sus hijos. Sus tres varones destacan en la materia. Alfonso es actualmente el director del musical «Los Miserables» que está en escena en Londres. Su hermano Antonio, profesor en el ciclo de sonido del Instituto Tierno Galván, ha pedido una excedencia precisamente para marcharse a Londres con Alfonso e intentar su sueño de vivir de la música. Y Manuel ha paseado por el mundo llevando las sevillanas de su tierra por bandera, con el pasaporte de su grupo Atalaje. Un grupo de flamenco, pero sobre todo de amigos que surgió del Coro de la Hermandad del Rocío y que llegó a grabar varios discos y a actuar en importantes escenarios. Así que de sevillanas, otra pieza fundamental de la Feria, Manuel va más que sobrado. En cuestiones de Feria, podemos decir que tiene una licenciatura y un máster. Acumula vivencias y recuerdos. MANUEL CASADO TRIGO. PREGONERO DE LA FERIA 2013 Entre ellos enmarca de forma especial los momentos de juerga en La Fuente del Piojo, con «Coqui», a la que tanto se echará de menos en la Feria de este año. Porque la Feria de Manuel, es la Feria de día, la que comienza a la hora del almuerzo y se extiende hasta que el cuerpo aguante. Pero sobre todo es un enamorado de la Feria de Alcalá. Una Feria de la que le gusta el marco con el fondo de los pinos de Oromana o su «espíritu abierto, con las casetas dispuestas a acoger a todo el que se acerca». Una fiesta de la que también alaba el buen gusto y el cuidado que se pone en el exorno de las casetas. Una Feria en la que Manuel Casado sitúa el momento perfecto para encontrarse con los amigos y sobre todo con los que están fuera y acuden estos días fieles a la idiosincrasia alcalareña. Una celebración a la que el pregonero define como «lugar de convivencia, de tolerancia y en el que todo el mundo acude para compartir algo, es una fiesta que tiene sus valores propios». Y en la que advierte la fortaleza de una tradición que se impone a las circunstancias puntuales, «vamos adaptándonos como en otras muchas cosas de la vida, no debemos de dejar de ir a la Feria por la situación de crisis, porque hay muchas formas de vivirla», afirma. Aunque a veces la adaptación sea volver a la tradición, redefiniéndola. En este sentido, el pregonero formula una propuesta que no puede ser más alcalareña, «¿por qué no recuperar la celebración en el Águila con la organización de una «velá» alrededor del Santuario en agosto y con los cultos y la procesión a la Patrona, como elemento central?». Con los mimbres que atesora el pregonero, seguro que compondrá una pieza del gusto de la gente de Alcalá. Una obra dividida en once pasajes literarios en los que repasa las cosas que definen a su ciudad con emociones que se transmiten en forma de versos y que iluminarán el espíritu feriante de los asistentes. Por supuesto, no faltará una parte musical y una sorpresa que seguro emocionará a los asistentes. Alberto Mallado Periodista de ABC Director de www.guadairainformacion.com 5 Caseta «El Cónclave» Caseta «Los Faraones del Guadaíra» 6 Caseta «El Revuelo» Caseta «Los del Pastorcito» 7 C el año 1947. La Feria de Alcalá se celebraba en el recinto del castillo, en torno a la Ermita del Águila. Un emplazamiento inmejorable, que pronto se quedaría pequeño. Mirador para todo el paisaje alcalareño. Nuestro cronista, don Fernando de los Rios, ojos azules y voz jupiterina, lo calificó como «Feria en el cielo». La calle del Infierno, ocupaba la explanada baja, con seis o siete atracciones. No podían venir las grandes, ni los circos, porque no cabían por el Arco. Pero resultaba deliciosa, manejable, muy calurosa de día, pero había relente de noche. En Agosto. Un grupo de jóvenes que habíamos puesto en escena la comedia Papeles de Muñoz Seca, con fines benéficos y gran éxito de público, tuvo la peregrina idea de instalar una caseta en la Feria. Entonces, todas eran institucionales: El Ayuntamiento, Educación y Descanso, Nuevo Casino, Peña Sevillista, Peña Bética, y Hermandad de Labradores, así que lo nuestro era inédito. La primera particularidad estaría en el baile, pues siendo todos de Acción Católica, el Cardenal Segura, la declaró incompatible con el baile moderno, «agarrado», no así con el regional o floklórico. Muchos no compartíamos este criterio, pero aceptamos disciplinadamente, mas bien como un reto «¿Habría otra manera de divertirse?». Y la enorme dificultad de que no teníamos dinero: estudiantes, empleados meritorios, aprendices de obreros. Pero había juventud y ganas. El sitio nos lo dió el Ayuntamiento,entre dos grandes casetas. La estructura de hierro, nos la prestaron unos colegas de Mairena; el frente y los toldos, de la Feria de Sevilla, por amistad; el exorno de guirnaldas y flores quedó a cargo de «las niñas» nuestras hermanas, novias y amigas- cuyo papel regaló Enrique Rodríguez, ellas las confeccionaron y nosotros, las colgamos, junto con la instalación eléctrica aportada por Pepe Castro y Joselito Bonilla; el mostrador, los hermanos Troncoso; el albero, un sobrante de la vía pública. Nuestras manos de estudiantes tenían ampollas de clavar la piqueta en el durísimo albero del Águila, para cimentar la caseta, lo que hacía reir a los trabajadores. El tablado para los artistas lo puso el maestro Palacios, que solo pidió una gratificación para sus albañiles. ORRÍA RECUERDOS DE LA FERIA LA CASETA «PAPELES» Caseta de Feria «PAPELES». Año 1947. Contratamos una megafonía en Sevilla, al precio de ochenta pesetas diarias, haciendo un reparto a escote. La animación de la caseta correría a cargo de las niñas, especialmente Regla Cirera, Anita Pinto, Concha y Salud Vega, Lola Romero, nuestras artistas teatrales, que bailaban sevillanas incansablemente, acompañadas por Carlos Núñez Moreno de Guerra, y alguna intervención voluntaria y desinteresada del Platero de Alcalá. Vino un grupo de gitanitos, de no más de diez años, presentado por Juan Barcelona, que interpretaban graciosamente el baile de sus mayores. Caché: la voluntad. Se ganaron la simpatía de todos. Aún conservo la amistad de algunos. Los verdaderos aficionados al cante y al baile, nos consideraban como un oasis, dentro de la monotonía de las demás case- tas, con orquestas y animadores. Para las sevillanas, alquilamos un pianillo en Sevilla, que traje en el tren de los panaderos y se quedó los tres días; tocaba con las manos, con los codos y con la cabeza, siempre protestando por haber tenido que subir la Cuesta tirando del artefacto, aunque le recordábamos que tres de nosotros íbamos detrás empujando. Menos mal que el regreso lo facilitó Alfonso Tobalo, con su camión. Nuestro «barman» fue Antonio Villagrán, un prodigio de optimismo, que vino con dos camareros y confesó haber ganado algo, pero que ni en la guerra había trabajado tanto como en nuestra Caseta. Nadie la sabía mejor que nosotros que éramos porteros, empresarios, palmeros, obreros y clientes, todo al mismo tiempo. Caseta «PAPELES». Antonio, El Platero, y a la guitarra, Carlos Núñez Moreno de Guerra. 8 Primera fila arriba y de izquierda a derecha: Antonio Díaz, Juan Cano, Eduardo Hermosín, Juan Gutiérrez, Rafael La Casa, Manuel del Molino, Eduardo Bulnes, dos camareros, Mateo Hermosín, Manuel del Trigo y Pepe Castaños. Segunda fila: Consuelo La Casa, Elvira Casado, Pedro La Casa, Juan Mª Alvertos, Antonio Vals, Sra. de Figueredo, Marujita Díaz, Vicente Romero, Ángeles Moreno, Enrique Rodríguez, Montoya, Celestino Martín y Rafael Rodríguez. Tercera fila: Conchita Casado, Mª del Carmen Trigo, Concha Bulnes, Lola Ramos, Beatriz Figueredo, Mª de los Santos Alvertos, Carmen Castaños y María de los Santos. Cuarta fila: Lola Trigo, Encarnita, Lola Romero, Concha Trigo, Esperanza Figueredo, Mª del Águila Alvertos y Emilia Granados. Como número fuerte, Ignacio Caballero, seise de la Catedral que me recomendó a una chiquilla del Tardón, Marujita Díaz. La contratamos en setenta y cinco pesetas diarias, una miseria comparada con las mil pesetas diarias que pagaba Educación y Descanso a Antonio Machín y otras mil a la orquesta. Nuestra Marujita vino en el tren, con su madre, como es natural. Se soltó la melena, hasta la cintura, cantó y bailó lo que quiso: bulerías, alegrías, soleares. Nos hizo reir con la dislocación de sus ojos; nos emocionó cantando «Banderita, tu eres roja..». La Feria se despobló a nuestro favor. Exito total. Con el dinero del primer día, se cortó la melena y trajo una permanente abisinia. Le reñimos todos, pero no se alteró: Tres noches de delirio. Su presencia, estimulaba. Entraron recitadores voluntarios, Nicolás Carretero toreaba de salón y ponía banderillas teóricas; un señor desconocido, pidió autorización para darnos una charla sobre los peligros de la bomba atómica. Un tal Curilla, hacía imitaciones. Era en verdad una Caseta diferente, aunque a veces nuestra modesta megafonía, basada en un «picú», era avasallada por la gran potencia de los altavoces de las casetas vecinas. Entonces no se medían los decibelios, pero teníamos que salir a suplicarles que bajaran un poco el volumen. El domingo de Feria no se abría porque estábamos todos en la Procesión de la Virgen del Águila, pero al retorno nos quedábamos hasta el amanecer, ayudando a la familia Chacón a encender el fuego para los calentitos. Alguna madre joven, nos acompañaba muy gustosamente. El invento funcionó. Animación constante, como se esperaba de la edad de los socios, todos jóvenes y de vacaciones. Había otra manera de divertirse. No me quiero acordar de las cuentas. Nuestros ingresos eran 50 socios a 40 pts, y 50 los transeuntes, (un solo día) a 25 pts. Cuando pagamos la electricidad calculada y el alquiler de sillas y veladores, quedó un déficit que pagamos a escote los varones; las niñas, no. Todavía nos quedaba una sorpresa. Acabada la Feria, vino el Sr. Font, representante de la Sociedad de Autores, con una carta del Gobernador Civil, reclamándonos 800 pesetas por la música del pianillo y por las canciones interpretadas por Marujita. Terminamos en el Cuartel de la Guardia Civil. El desmonte de la caseta, fue igualmente rápido y con voluntarios. Pusimos unas cartas de gratitud, pero a los transportistas había que pagarles. Otro escote. Lógicamente, acordamos no ponerla mas. Pero al año siguiente, volvimos a montarla, con el nombre de «RUTAS», y el subtítulo Caseta de la Prensa, porque teníamos un periódico (clandestino, pero periódico) y así repetimos varios años. Cosas de los jóvenes. La Feria en el Cielo y «las niñas» se lo merecían. Sirvan estas líneas de cariñoso recuerdo, para los mencionados, los olvidados y los que están disfrutando de una merecida y real Feria en los cielos. Vicente Romero Muñoz 9 Caseta «El submarino amarillo» Caseta «Los Ochenteros» 10 TESTIMONIOS TRES A DE NUESTRO PASADO HISTÓRICO DOCUMENTOS SOBRE LA ORDEN FRANCISCANA Y SU VINCULACIÓN CON ALCALÁ de abordar el presente documento, objeto de nuestro artículo, recordemos que hace tres años se celebraba el 800 aniversario de la fundación, en 1209, de la Primera Orden de San Francisco de Asís (1182-1226), cuya rama más numerosa fue la de los Franciscanos de la Observancia, «Ordo Fratrum Minorum» (Orden de los Hermanos Menores). Término éste de «Menores» que adoptaron como sinónimo de «humildad». Tomando como base y apoyo nuestros documentos, originales e inéditos, vamos a comentar algunos capítulos de la historia franciscana, para encuadrarla, como debe ser, en su marco temporal, institucional y religioso. Sólo, así, entenderemos todos mejor los entresijos de las tres órdenes religiosas fundadas por el seráfico Francisco. Para ello haremos un breve recorrido por sus «Estatutos», y su continuada renovación a lo largo, y hasta el siglo XVII; hablaremos de la constitución de las dos grandes Familias de la Observancia; estudiaremos el desarrollo de las órdenes franciscanas; y, finalmente, siguiendo nuestras fuentes, comentaremos la vinculación de la Orden con Alcalá, y desglosaremos su contenido y su excelente simbología. Hagamos, pues, un poco de historia. En cuanto a los Estatutos de la Observancia diremos que los más antiguos son los acordados en Narbona, en tiempos de San Buenaventura (1257). Más tarde, aquellos capítulos fueron reducidos a doce, en la Congregación de Perpiñán, en 1331. En España, concretamente, […] en Barcelona, en el año de la Redención de 1451, en el convento de Santa María de Jesús, se juntaron en uno, con la autoridad del papa Gregorio IV, y después, Nicolás V, los Estatutos, tanto NTES Ilustración de San Francisco de Asís, en la portada de los Estatutos de Barcelona. México, por Pedro Ochatre, editor, 1585. Señalaste, Señor a tu siervo Francisco con los signos de nuestra Redención. Apostólicos como los de la Orden, abreviándose en nueve capítulos.1 Ya, hasta 1532, no se volvieron a revisar los Estatutos, pero en 1549 la Congregación de Burgos determinó que los citados Estatutos de la ciudad condal […] se redujesen a un breve compendio, cosa que no se hizo hasta el Capítulo General de Salamanca, en 1553, donde las dos Familias, Cismontana y Ultramontana, acordaron su publicación, previa autorización del papa Julio III (1550-1555). Con todo, en el Capítulo de Valladolid, en 1565, la Familia Cismontana retomó los Estatutos de Barcelona, dejando sin vigor los salmantinos. Andando el tiempo, siendo Ministro General el notable Padre Fray Francisco Gonzaga, se reunió […] en la ciudad imperial de Toledo, en el convento de San Juan de los Reyes, en la fiesta de Pentecostés, en 1583, el Capítulo General, que modificó los Estatutos siguiendo la recomendación del Concilio de Trento.2 En 1606 se celebró, allí mismo, otro Capítulo, pero las decisiones se aplazaron para el de Salamanca, en 1618. Cuando llegó el momento de los acuerdos, las disensiones fueron tantas y tan fuertes que se volvieron a posponer los capítulos. Por fin en 1621, en el convento de San Francisco, de Segovia, se lograron puntualizar las últimas modificaciones. En los Estatutos se incluyeron los decretos pontificios, se sujetaban a la censura de la Iglesia, y, finalmente, […] se exhortaba a todos los religiosos, sin excepción de Familias, a su recibimiento y observancia.3 Como vemos, hasta casi doce modificaciones sufrieron los Estatutos franciscanos, que, como veremos después, no lograron unificar del todo las tendencias religiosas dentro de la Orden. En este sentido, ello dio lugar a la existencia de dos grandes Familias o Vicarías independientes: la Cismontana y la Ultramontana, ya citadas. Con respecto a la primera, se extendía por tres países: España, Francia y Alemania, repartida en 68 vicarías provinciales. Como no es el caso enumerarlas todas, aquí, sólo citaremos su distribución en la Península, que es el siguiente: Castilla, Aragón, Santiago de Compostela, Portugal, la de la Concepción, Andalucía, Burgos, la de los Ángeles, la de la Piedad Descalzos, la de San Gabriel Descalzos, Cartagena, la de los Algarbes (sic), Mallorca, la de San Miguel, Cantabria, Canaria, Cerdeña, Valencia, Cataluña, la de la Rábida Descalzos, la de San José Descalzos, la de San Antonio Descalzos, la de San Juan Bautista Descalzos, Granada y San Pablo Descalzos.4 Asimismo, en las Indias Occidentales figuraban las provincias de Nueva España 1. Estatutos Generales de Barcelona para la Familia Cismontana de la Regular Observancia de N.P. San Francisco. Toledo, 1583, en casa de Pero López de Haro, editor, impresor y librero. 2. Estatutos Generales de Barcelona. En Madrid, Imprenta Real, por Tomás Iunti, impresor del Rey Nuestro Señor. Año 1622. 3. Estatutos Generales de Segovia, ídem, ibídem. 4. Los franciscanos Descalzos pertenecían a los Hermanos Menores de la Estricta Observancia (O.F.M.D.), y eran conventuales reformados que pro pugnaban el rigor y la austeridad conventual. Su fundación fue en Granada, en 1495, debida a Juan de Guadalupe (Nota del autor). (con 10 sedes), y la del Reino del Perú (con 7 sedes). Por último, en las Indias Orientales existía la de Santo Tomás en su Custodia de la Madre de Dios, en Malaca. Con respecto a la Familia Ultramontana, ésta se extendía por otras tres naciones: Lombardía (con 11 sedes), la del Pequeño Reino (con 9) y la Ultramontana (con 14), repartidas en otras tantas 35 vicarías provinciales. Como decíamos, de la Primera Orden de San Francisco nacieron otras tres, las mismas que profesan la Regla de los citados Frailes Menores, pero cada una con sus constituciones o Estatutos, y su Ministro General. No podía ser de otra manera, a la vista de lo expuesto sobre los Estatutos. Y, sin duda, fue así porque aquella Regla primitiva no escrita, suscitó entre los miembros de la Orden diferentes modos de interpretación, y provocó la pugna entre vivir en la absoluta pobreza, predicación y mendicancia, y la institucionalización en comunidades conventuales. Ello obligó a su fundador a ponerla por escrito, en 1221, y, posteriormente, a ser corregida, supervisada y sancionada por el papa Honorio III (1223) en su bula Solet Annuere («Lo que se suele permitir»). Con ello se solucionaron parte de los conflictos internos de la Orden, pero sólo en parte, como veremos al repasar la evolución de las tres tendencias religiosas franciscanas. En primer lugar, en esta evolución, digamos que los Franciscanos Conventuales son el tronco original de la Orden del que brotaron después diferentes reformas. Ya, en 5 de abril de 1250 el papa Inocencio IV declaró «conventuales» sus iglesias, concediéndoles la misma prerrogativa que a las Colegiatas. Los frailes, sin embargo, no recibieron esta denominación hasta la segunda mitad del siglo XIV, para distinguirlos de los que se retiraban a los eremitorios, -muy pocos, por cierto-, en busca de la mejor «observancia» de la Regla. Los Franciscanos Conventuales vivían en «Comunidad», en los grandes conventos de las ciudades, dedicados a la predicación, la enseñanza y la impartición de los sacramentos. El mantenimiento de estos edificios no permitía la observancia de la pobreza absoluta, pero los Papas, interesados en mantener los beneficios pastorales que aportaban a la Iglesia, ayudaron con privilegios y declaraciones, la observancia de la Regla. A ello se opusieron los «Espirituales» observantes, partidarios de una pobreza más radical, sin intervenciones pontificias. El asunto se fue enconando, hasta que el papa Juan XXII (1317-1318) los condenó, nada menos que por herejes. En esta misma línea, pero con actitudes más conservadoras y ortodoxas, nacieron los Hermanos Menores Observantes o de la Regular Observancia. Dicha Reforma surgió en Italia en 1368, creada por el beato Fray Paoluccio Trinci de Foligno.5 Las reformas observantes se fueron expandiendo rápidamente por Italia, Francia, España y Portugal. Unos cincuenta años más tarde, fueron reconocidas por el Concilio de Constanza en 23 de septiembre de1415, por la Constitución Apostólica «Supplicationibus personarum» («Para las rogativas de las personas»). En 1446, el papa Eugenio IV, por las bulas Vinea Domini («La viña del Señor») y Ut sacra («Para las cosas sagradas»), en 1431 y 1446, respectivamente, separó la Observancia de los Conventuales o Claustrales, y la transformó en una Orden dentro de la Orden. El ascenso imparable de los Observantes, gracias a su buen gobierno y a su ejemplo de vida, consiguió la radical supresión de los Conventuales. Pero también al apoyo de los Reyes Católicos, a principios del siglo XVI y, posteriormente, con Felipe II, en 1568. Tantos favores conllevaron el abandono de los eremitorios y la vuelta a los estudios, fundamentales para su apostolado popular, caritativo, social y misionero. Hasta tal punto fue creciendo su influencia y poder que se apropiaron del sigillum (sello) de la Orden, y de sus conventos. En este caso, porque preferían la ocupación a la edificación de otros nuevos. Todo, desde luego, con tremendos litigios, que hoy, con todo lo que sabemos de la Iglesia, ya no nos sorprenden. Dado este ambiente de discordia, tuvo que intervenir el papa León X, quien por la bula Ite vos («Id vosotros») de 29 de mayo de 1517, terminó de romper la escasa unidad de las dos tendencias. Es el caso de que concedía a los Hermanos Menores de la Regular Observancia (O.F.M., Orden de los Hermanos Menores) la primacía jurídica de la Orden y el título de Hermanos Menores a los Observantes, y a su Ministro General el título de «Minister Generalis Totius Ordinis Minorum» («Ministro General de todos los Hermanos Menores»), como podemos observar en el documento que presentamos. Prerrogativas que antes disfrutaban los franciscanos Conventuales. Desde entonces, la Observancia se dedicó al estudio y la construcción de grandes conventos e iglesias, sin mayores escrúpulos de conciencia. Actitudes muy diferentes a las de sus comienzos en pequeños conventitos y eremitorios. No es de extrañar que, a los pocos años (1532) se segregaran de ellos los Frailes Menores Reformados de la Estricta Observancia, los Recoletos (aunque más de hecho que de derecho) y los Frailes Menores Capuchinos. Esta tercera Familia, nació, lógicamente, del tronco de los Hermanos Menores Observantes, porque era inevitable que alguien, desde dentro, reivindicase el derecho de observar la Regla a la letra, con todo su rigor. La poderosa Familia Observante trató de evitarlo intentando reabsorberlos, pero, al no conseguirlo, los persiguió, durante los primeros años. Gracias a la protección de la sobrina del papa Clemente VII, doña Catalina Cybo, duquesa de Camerino, éste les concedió la bula Religionis celus («El celo de la religión») en 3 de julio de 1528, con lo que oficialmente se fundó la Familia Capuchina. Finalmente, el papa Pablo V, en 1619, les concedió la facultad de disponer de Ministro General propio, con plena autonomía. La Orden mendicante de los Capuchinos ha venido siempre representando la línea más rígida y austera, y, por el modo de trabajar y de vivir, son conocidos como los «frailes del pueblo». Desde entonces, aunque con menor tensión, existieron las disensiones ya referidas, hasta que llegó la reunificación durante el papado de León XIII. En 4 de octubre de 1897, exactamente, con su bula «Felicitate quadam» («Con cierta felicidad»), se puso fin a la división secular de la Familia Observante. No obstante, para hacer frente a los últimos flecos políticos y nacionales de aquel célebre acuerdo, fue precisa la intervención de Pio XII, en 1940. Después de tantos años, el resultado fue que, salvo los Capuchinos, que lograron conquistar y mantener su independencia, las otras Familias franciscanas reformadas siguieron formando parte de la Familia Observante. En este sentido, siguen compartiendo con ella un mismo 5. Los que consolidaron la Reforma fueron: San Bernardino de Siena, San Juan de Capistrano, San Jaime de la Marca y Fray Alberto de Sarteano (Nota de Autor). 12 Ministro General, y las labores de apostolado y misión, sobre todo en ultramar. No discutimos, en fin, que esta desleal competencia histórica entre las distintas tendencias religiosas, que brotaron del primitivo tronco del seráfico San Francisco, tuvieran un mismo y buen fin, pero los medios, en forma de continuados enfrentamientos y litispendencias, no se justifican en modo alguno. Y es que la Iglesia ha olvidado -y olvida, con frecuencia- aquello de dar buen ejemplo. Hasta aquí, una breve, pero necesaria reseña, de las ramas religiosas que surgieron de la primitiva Orden de San Francisco. Llegados a este punto, es el momento de recordar la vinculación histórica de la Orden franciscana con Alcalá. Digamos, pues, que, ya, hacia el último tercio del siglo XV, la presencia de frailes franciscanos se constata en nuestro término. Y no antes.6 El cenobio elegido se edificó a las afueras Documento de donación de un solar a la Orden, de nuestra villa, en el lugar donde por don Luis de Monsalve. APS, 1543. hoy está la «Hacienda de los Ángeles», a 2,5 km de la población. El […] en la collación de Santiago que convento se llamó de «San Francisco», ha por linderos, de una parte, casa solar y por su ubicación, se conocía como «el que solía ser de Diego Santero, e de de los Ángeles Viejos». otra parte e por delante, las calles del En dicho monasterio habitaron, en Rey, e porque el dicho solar cae en el principio, los frailes Claustrales hasta sitio e compás donde se á de pasar el bien entrado el siglo XVI, pero no tuvie- dicho monasterio de los Ángeles, de donde ron Casa dentro de nuestro pueblo, aun- hasta agora está, porque tenga el dicho que pernoctaron muchas veces en casas monasterio aquella largura que se requie«particulares y dignas», cuando sus tareas ra para poder fezer el dicho monasterio, de apostolado o de predicación se alar- es mi voluntad de fazer donación, &,[…].8 gaban.7 Después, a partir de 1537, con la Un segundo intento se dio en 1554. expulsión de los Claustrales, fueron los Se trató de un intercambio del solar citaObservantes los que vivieron en dicho do, […] frontero de la puerta de la igleconvento. sia de ese monasterio, pasado el camiDesde entonces, la primera posibili- no, por otro que el cabildo alcalareño, dad documentada para que la Orden se […] tiene dado sitio para la edificaestableciera en Alcalá, es de 1543. Se ción del convento, y tiene necesidad del trata de una donación de un prócer sevi- solar sobredicho para poder hazer por llano, de la collación de Santa María él el camino y vereda, porque las capiMagdalena, don Luis de Monsalve, que llas que agora se han de edificar estredonaba un solar, chan el dicho camino, &, […]. 9 El trueque lo autorizó el Ministro Provincial de la Provincia de Andalucía, Fray Pedro de Azpeitia, al reverendo Padre Guardián y frailes del convento de Ntra. Sra. de los Ángeles de Alcalá de Guadaíra. En carta firmada y sellada con el sello mayor de su oficio, desde el convento de Santa María de las Veredas, de Utrera, da licencia para que se haga la dicha donación e intercambio, […] porque no estorben la edificación de las dichas capillas, a causa que se le impide el camino, & […].10 ( 3ª) De este documento queremos comentar el sello. Éste se creó en 1499, cuando la Provincia Bética se independizó de la de Castilla, porque anteriormente, desde 1260, con San Buenaventura, la Custodia Hispalense pertenecía al Capítulo General de Narbona. El Ministro General de entonces, Fray Francisco de Gonzaga dejó constancia de su fundación, y añadió el sello mayor, cuya leyenda es: «Sigillum Minister Provinciae Bethici» («Sello del Ministro de la Provincia de la Bética»). Dentro, su iconografía muestra la imagen del Salvador atado a la columna y dos flagelos a sus pies. En la parte superior, el famoso símbolo de la «Tau» (T), y, en el extremo inferior, una granada, porque la Bética pertenecía a Granada, cabecera de la Provincia.11 Tuvieron que pasar once años para que los frailes de los Ángeles se asentaran definitivamente en Alcalá. Fue en 1565. Aquel convento se construyó en un solar cedido por el concejo alcalareño, en la que sería calle de San Francisco, dentro de una bella y frondosa huerta, junto al río, mirando a la ermita de San Roque y San Ginés. Asimismo, el concejo costeó su edificación, convirtiéndose en el principal mecenas y patrono de la Orden12. De todas formas las obras no se acabaron hasta 1587 y 1589, según consta en el Memorial 6. Nos referimos a que no estamos de acuerdo que fuera fundado por Fernando III (1248)«bajo la advocación de los Ángeles», según afirma Ortiz de Zúñiga en sus Anales eclesiásticos y seculares de la ciudad de Sevilla (1246-1671). Imprenta Real, Madrid, 1795, I, 144 (Corregidos e ilustrados por don Antonio de Espinosa y Cárcel); ni que lo hiciese el propio San Francisco, que murió en 1226 (Nota de Autor). 7. APS. Rodrigo de Mairena. Leg. 1534, 5.10.1534, s/f. Francisco Hermoso. Leg. 1541, 10.8.1541, s/f. 8. APS. Perafán de Ribera. Leg. 1543, 3, martes, 7.1543, s/f. La donación la recibió el Padre Fray Juan de la Cruz, solicitador del convento, y en su nombre. Se firmó en la Santa Iglesia Catedral de Sevilla, ante el escribano público García de León. 9. APS. Juan Moreno Delicado. Leg. 1554, 9.10.1554, s/f. 10. APS. Ídem, ibídem. 11. Creo que la sede de la Orden se encuentra en Sevilla, en el convento de San Antonio de Padua, calle de San Vicente, 91. 12. Véase mi artículo: «El monasterio de Ntra. Sra. de los Ángeles». Revista Escaparate. Feria, 1998, 54-55. Coincidimos en esto con el P. Flores, en sus Memorias, y con Pedro León Serrano en su Compendio. 13 de gastos del regidor que supervisó la construcción, don Antonio de Coria.13 ¡Qué diferencia de criterios entre aquellos capitulares y los de nuestro tiempo! Aquéllos edificando; los de nuestro tiempo, destruyendo aquel hermoso monumento de estilo Bajo Renacimiento, para levantar, en 1968, la «excelsa maravilla» de la Torre de pisos de San Francisco (de la que dejaron, al menos, sólo el nombre, para recuerdo de su conciencia). De modo que, durante más de cuatro siglos, los frailes de la Observancia de los Hermanos Menores de San Francisco, desarrollaron en nuestra villa una labor de apostolado social, espiritual y material digna de ser recordada. Así lo hemos podido comprobar en los documentos Licencia del Provincial de la Orden al convento de los Ángeles de Alcalá para hacer la donación del solar. APS, 1554. Vista general del Convento de San Francisco de Alcalá de Guadaíra, derruido en la década de los sesenta del siglo XX. Foto: Enrique Rodríguez Ojeda citados, y en numerosas citas de Protocolos, Actas Capitulares y otros Archivos, cuya relación excede de este artículo. No obstante, hemos seleccionado un tercer documento, que por su peculiaridad y su simbología iconográfica, lo convierte en uno de los más representativos de la vinculación y relación de la Observancia con Alcalá. Como se puede leer se trata de un nombramiento hecho por el Padre Fray Alonso Salizanes, Ministro General de los frailes Menores de toda la Orden de Nuestro Padres Señor San Francisco, al Padre Fray Antonio del Castillo, Predicador Apostólico, a la sazón, Prior del convento de San Francisco, de Alcalá. La carta del Sindicato de Jerusalén va dirigida, como era preceptivo, al Provincial y Juez ejecutor de la Santa Hermandad de nuestra villa, don Francisco Núñez de Prado y Bohórquez, […] persona de los hijosdalgo, quien gozaba de voz y voto, asiento y lugar junto al alcalde en el cabildo, donde podía entrar con espada al cinto y vara alta de justicia.14 Era la Hermandad una especie de policía rural, dada la inseguridad reinante, y, además, un órgano judicial durísimo que actuaba en consonancia con la Santa Cruzada y la Santa Inquisición; las tres «santas» que las malas lenguas de la época (siglo XVII) decían que tenían destruida España.15 En la primera parte del documento se hace mención a que, […] están a cargo de nuestra Santa Religión los sacrosantos lugares de Jerusalén, donde Nuestro Señor Iesucristo, Dios y Hombre verdadero encarnó, nació y vivió, y muriendo en Cruz, obró los misterios de la Redempción (sic) de el género humano, & […].16 (4ª) Después de esta declaración de los principios o dogmas de la Iglesia, señala el texto que dichos Santos Lugares están a su cuidado, […] de más de quatrocientos y sesenta años a esta parte, en medio de la potencia de tantos enemigos: turcos, moros, cismáticos y hebreos…y sin tener bienes en la tierra, pagando excesivos tributos…y hospedando a los peregrinos, que de toda la Cristiandad van a venerarlos, & […].17 13. AHMAG. Ac. Cap. 1.11.1587 y 9.7.1589. 14. APS. Francisco Marín. Leg. 1635-1636. En 2.1.1636, f. 491r-v. ya ocupaba el cargo. 15. Grandeza y miseria de Andalucía. Edición, introducción y notas de Pedro Herrera Puga. Granada, 1981. 16. Archivo Hospital de la Caridad. (AHC). Papeles de la Observancia Franciscana (O.F.M.) del siglo XVI. «Carta del Sindicato de Jerusalén», expedida en el Convento de San Francisco de Madrid, a 20 de diciembre de 1637. Sig. SHC/A-021-48. 17. Ídem, ibídem. 14 La siguiente referencia se centra en Fray Antonio del Castillo, nuestro Prior franciscano alcalareño, sobre el que se dice que su nombramiento se debe porque es […] persona en quien concurren todas las buenas partes de Religión, pruden- cia, fidelidad, exemplo, y doctrina para tan santo ministerio, & […].18 No se piense que estas virtudes se redactaban de oficio en el documento. El proceso de selección era tan estricto como inquisitivo. Además de estas cualidades, eran requisitos previos exclu- Carta de Sindicato de Jerusalén. AHC, 1637. yentes, entre otros, los siguientes: haber nacido de matrimonio legítimo, tener más de 30 años, y tener aprobación de vida y costumbres. Eran inhábiles para el oficio, para el que se nombraba, […] ser descendiente, dentro del cuarto grado, de judíos, moros o de herejes, cuyos huesos o estatuas hubieran sido quemados, conforme a los Estatutos Apostólicos de los papas Paulo IV y Gregorio XIII.19 Toda esta investigación sobre la persona designada, estaba sometida […] a inquisición jurídica de su linaje, dos meses antes de ser nombrado en el Capítulo o Congregación.20 Pero no sólo los religiosos destinados a Tierra Santa, como Fray Antonio, debían llevar una vida con muestras de santidad y virtud, para que allí dieran buen ejemplo de la Fe, sino que, además, […] debían tener la aprobación en letras, y estar experimentados en negocios, para satisfacer a la obligación de su oficio y cargo.21 Al Padre Fray Antonio del Castillo continúa el texto- se le nombraba Comisario, Procurador General y Síndico Apostólico de la Familia Cismontana, en virtud de todo lo dicho, y de los Breves Apostólicos, […] de nuestro santísimo Padre Martino Papa V, de catorce de enero (segundo año de su Pontificado), confirmado por nuestro santísimo Padre Paulo Papa V, de que en esta parte usamos, & […].22 En consecuencia, era éste un cargo de grandísima responsabilidad, para el que nuestro ilustre franciscano recibió plena facultad, para la administración de los Santos Lugares. El nombramiento era para tres años, prorrogable a otro más, pero ya no podía ser elegido hasta pasados dieciséis años (aunque podía ser Vicario o Vicecomisario). Dentro de sus atribuciones, nuestro documento especifica la principal, que era la de nombrar Síndicos Apostólicos, para la recaudación de las limosnas, […] en quien entren las limosnas, mandas de testamentos, situaciones y otras qualesquier, para que las puedan haber, recibir y cobrar en nombre de la Santa Sede Apostólica…para ayuda (de los Santos Lugares) a su conservación y 18. Ídem, ibídem. 19. Estatutos Generales de Barcelona, op. cit.: «De las elecciones e instituciones de los oficios», VII, 61-82. 20. Ídem, ibídem. 21. Ídem, ibídem. 22. AHC. «Papeles…», op. cit., ídem, ibídem. Recordemos lo dicho sobre las dos Familias franciscanas. Martín V (1417-1431) y Paulo V (1605-1621), según el Liber Pontificalis o el Anuario Pontificio. 15 reparos, y sustento de nuestros Religiosos, que los tienen a su cargo.23 Otras funciones que debía cumplir nuestro Comisario General son las siguientes: - enviar las limosnas al Síndico General de la nación (en este caso, que reside en la villa de Madrid). - llevar un libro de registro donde asienten las limosnas que reciba de Tierra Santa, con los gastos de portes y recogida. - remitir las limosnas a Venecia y Mesina, y desde allí, a Jerusalén. - ser avisados del envío de las limosnas, para que se manden juntas. - llevar al Capítulo General los libros de cuentas de las limosnas, en el que los Custodios, contabilizarán la suma de todas las limosnas de su provincia. Por otra parte, el Comisario General tenía facultad de designar un sustituto o Vicecomisario, que realizara sus mismas funciones. También a éste se le obligaba a llevar un registro de las limosnas, especificando cantidades, y si eran espontáneas o perpetuas, anotándose en un libro diferente, en este último caso, seguidas del nombre del donante. Una segunda función del Vicecomisario consistía en tomar la cuenta a los Síndicos cada seis meses, y hacerlo delante del párroco principal de cada parroquia o lugar. En el mismo plazo debía enviar las citadas limosnas al Comisario o Procurador General de la nación, y si había algún impedimento, se entregarían en el convento más cercano.24 Como podemos comprobar todo estaba estrictamente controlado, en cuanto a la percepción de los dineros. Además, se imponían penas de excomunión mayor «latae sententiae ipso facto incurrenda» («sentencia mayor en el acto a los que incurran») a los que de cualquier forma defraudaren, porque las limosnas son […] para la conservación, restauración, socorro de los Santos Lugares, aumento del culto divino, que en ellos se sirve…y también para el sustento y necesidades de los frailes nuestros que allí viven, y de los peregrinos que se hospedan en sus conventos.25 Sin embargo, se consideraba lícito proveer a los Comisarios, Procuradores, Vicecomisarios y compañeros religiosos, de las limosnas recaudadas, para sus necesidades, […] pero con moderación, atendiendo a la pobreza que profesan.26 El cuerpo final del documento hace alusión, precisamente, a que el trabajo y el santo ministerio encomendado a nuestro Comisario franciscano alcalareño no estaba remunerado, […] ya que no podemos gratificar en lo temporal, recibimos a V.M. a nuestra Hermandad, y a toda su familia, a la Ilustración de la Familia Cismontana. Biblioteca Universidad de Granada, 1649. participación en vida y en muerte de todos los bienes espirituales, misas y oficios divinos, meditaciones, confesiones, ayunos, vigilias y penitencias a Dios Nuestro Señor aceptas, que por su misericordia ayuda a hazer a los Religiosos y Religiosas de toda nuestra Sagrada Orden, & […].27 Por último, nos queda por comentar de nuestro artículo la parte más llamativa, representada por toda una completísima iconografía de la Orden Seráfica, simbolizada en cuatro representaciones. Inmaculada: Es conocida la devoción a la Inmaculada Concepción que la Orden Seráfica le profesó, contribuyendo a su arraigo y extensión por todo el mundo. Tanto es, así, que se denominaban «frailes de la Inmaculada». La imagen se presenta sobre la media luna creciente, como señora del Universo, tocada con corona real y, por cimera, las doce simbólicas estrellas. Al pie, el anagrama concepcionista «Ave María». En otra tipografía, que adjuntamos, aparece una Inmaculada semejante, aunque no coronada, presidiendo a la gran Familia Cismontana, con alusión al dogma de la Concepción, «Bajo la católica augustísima protección del rey Felipe IV».28 Precisamente, desde 1644, este rey declaró «fiesta de guardar» el día de la Inmaculada. Anteriormente, el papa Sixto IV, en 1483, había extendido dicha fiesta por todo el Occidente.29 (5ª) Escudo: Dentro del campo, rodeándolo, la cuerda que ceñía el hábito de los frailes. En el cantón superior izquierdo, el emblema común de todos los franciscanos, que comprende: la «Tau», más que cruz, que adoptó San Francisco, como señal de conversión, penitencia y pertenencia a la Iglesia de Cristo; hasta tal punto que firmaba sus cartas con este símbolo.30 23. Ídem, ibídem. 24. Estatutos de los Frailes Recoletos: «Estatutos generales para los Lugares de Tierra Santa», IV, 106-107. 25. Ídem, ibídem. 26. Ídem, ibídem. 27. AHC. «Papeles…», op. cit., ídem, ibídem. Recordemos lo dicho sobre las dos Familias franciscanas. Martín V (1417-1431) y Paulo V (1605-1621), según el Liber Pontificalis o el Anuario Pontificio. 28. Biblioteca de la Universidad de Granada. Sig. BHR/A-016-248. 1649. 29. Ninguna de las quince pinturas de la Inmaculada, repartidas por las iglesias de Sevilla, coinciden con la iconografía de la que presenta nuestro documento (Nota de Autor). 30. La «Tau» es la última letra del alfabeto hebreo y la decimonovena del griego. La Tau la utilizó en el hábito, por primera vez, San Antonio Abad, como distintivo cristiano. (Nota de Autor). 16 Fue adoptada desde el Concilio mente, de una orden religiosa. de Letrán, presidido por el papa Corresponde al sello del «Ministro Inocencio III, en 1215. El Pontífice, General de toda la Orden de los después de describir la triste situaHermanos Menores», que así reza ción de los Santos Lugares, profasu leyenda. En el interior, (arriba) nados por sarracenos, y los escánel Espíritu Santo inspira y derrama dalos que desacreditaban a la Iglesia, sobre los Apóstoles su sabiduría, en evocó el pasaje de Ezequiel (9, 3-6), forma de lenguas de fuego; en el y dirigiéndose a los presentes, entre centro Jesucristo; en el extremo los que se encontraba San Francisco, inferior, San Francisco. como Ministro General de la Orden, El documento, pues, es una les dijo: espléndida síntesis de la Orden […] habéis de castigar implafranciscana, que nos da todas las cablemente a cuantos no están claves simbólicas de su origen, sus señalados con la Tau propiciatoria, postulados, su evolución y sus actiy se obstinen en deshonrar la vidades conventuales y mendicanCristiandad, &.31 tes. Estos tres escudos en uno, a mi El Papa señaló como portantes me sugieren el misterio de la de la Tau a tres grupos: los que se Trinidad, y el conjunto de la iconoalistaran en las Cruzadas; los que grafía del documento, una síntesis luchasen contra la herejía; y los de los dogmas de la Iglesia. pecadores que quisieran reformar A la vista de los documentos su vida. En cuanto a los «Dos braexpuestos, la Orden de San Francisco zos cruzados con llagas en las paltuvo, por consiguiente, una gran mas», representan a todos los vinculación con nuestro pueblo, Hermanos Menores de la Orden.32 dejando una gran huella entre los En el cantón superior derecho, alcalareños de su tiempo, gracias a «Cinco ramos o racimos» que sigsu labor espiritual y mendicante. nifican las llagas de la crucifixión: Tanto fue así que, incluso, la festi«San Francisco». Dibujo a color. Lápiz sobre papel. las dos de las manos, la del pecho en vidad de Santa María de los Ángeles José Guerra Ventero (+). En su memoria. el centro por la lanzada, y las dos de (celebrada el 2 de agosto) fue el orilos pies. Este mismo escudo aparece en gen de la Feria que ahora disfrutamos, el monasterio de Bidaurreta, de monjas eremitorio fundado en el siglo XVI, celebrándose en su honor a ella hace una Clarisas Franciscanas, en Oñate (Guipúzcoa), dedicado a la devoción de San Roque, extensa referencia nuestro escritor del pero superado por una corona de espinas protector de las epidemias, y a San Siglo de Oro, don Cristóbal de Monroy, (símbolo de la Pasión), y flanqueado a Ginés de la Jara, otro eremita -olvidado en su comedia famosa El encanto por de la tradición alcalareña-, protector de los celos y Fuente de la Judía. después, cada lado por dos ángeles tenantes.33 En punta, o parte inferior central, la vendimia según unos, y de la produc- se llamó de Santa María del Castillo; más escudo de la «Cruz de Jerusalén» (tam- ción y el trabajo, según otros. En primer tarde, Virgen de Agosto; y, finalmente, bién representada en la parte izquierda plano, un monje franciscano, seguramen- Virgen del Águila, que recogió una del retablo de la basílica de Asís). Esta te «San Roque», eremita contemplando bellísima tradición religiosa, insertándocruz es la de los Cruzados y el símbolo un crucifijo, insinuando la relación de la la en la más profunda costumbre religiodel Reino de Jerusalén. Es una cruz Ermita con la Orden Tercera de San sa y festiva del pueblo. griega, rodeada de otras cuatro, iguales Francisco, pues el santo había perteneciPorque, en definitiva, no hay devopero más pequeñas, situadas en cada do a dicha Orden (rama laica que vivió ción sin diversión -y viceversa- en la uno de los cuadrantes (o brazos), que según la espitualidad franciscana). Al vida de los pueblos. Sobre todo en nuesrepresentan a los cuatro evangelistas o, fondo, la Ermita, igual que la vemos tra barroca Andalucía. Esperemos que el según otras teorías, los cuatro puntos hoy, con otro «Penitente recostado» histórico lema de «Paz y Bien» de la cardinales por donde se difundió el men- junto a una ideal representación del Seráfica Orden nos proteja a todos, en saje de Jesucristo. Las cinco cruces, en «Puente». Ermita, San Roque y Puente: estos tiempos tan difíciles, en los que la conjunto, significan las cinco llagas de una trilogía heráldica y religiosa de «hermana» pobreza franciscana es huéssiglos, que ha venido marcando una ped permanente en muchos hogares. la crucifixión. En la parte superior derecha encon- gran parcela de nuestra historia. De ahí, tramos la representación más antigua, y la representación simbólica de Alcalá. José Luis Pérez Moreno Sello: El documento se cierra, al pie, única, de la Ermita del Calvario, de la Doctor en Historia Premio Nacional de Historia e Investigación «Ermita de San Roque y San Ginés», un con un sello ovalado símbolo, general31. Hace referencia a que los israelitas utilizaban este símbolo en los dinteles de sus puertas, durante la Pascua, para librarse del Ángel Exterminador (Nota de Autor). 32. En el retablo de la capilla de la basílica de San Francisco de Asís, parte derecha, está representada la Tau-Cruz (Nota de Autor). 33. Fundado en 1510 por Don Juan López de Lazárraga, tesorero y contador de los Reyes Católicos, y su mujer Doña Juana de Gamboa. (Nota de Autor). 17 Caseta «La Jarana» Caseta «El Jarrito» 18 Caseta «Ducal» Caseta «La Fuente del Piojo» 19 L YA idea no es mía. Además, he tenido que discutir tanto y a veces tan agriamente con su autor, que ganas me han dado de mandarlo todo a paseo. Pero, por fin, una tarde de la primavera, quizás muy similar a aquella en que Merceditas cambió de color, mi amigo Ramón Núñez Vaces lo hizo de parecer. Mi persistente esfuerzo no había sido en vano. De manera que quedé encargado de plasmar por escrito la idea que mi segoviano y terco amigo había tenido. En realidad, de hacer lo que pudiera. Pero he de aclarar algún extremo más. No es que yo no tema al ridículo, pero mi sentido de la amistad, o del compañerismo, me lo hace despreciar en ocasiones. Y ésta es una de ellas: vale que yo lo haga, pero no consentiré, si de mí depende, que mi amigo el segoviano incurra en él. De modo que puede decirse que escribo el presente texto por solidaridad no exenta de sacrificio. Entremos en materia. Ramón quería escribir sobre Antonio Mairena, ahora que en septiembre se cumplirán treinta años de su fallecimiento. ¡En buen lío se iba a meter! ¡Escribir sobre Antonio Mairena! Nada menos. No es que yo pueda hacerlo bien, pero, como ya he dicho, lo que no podía consentir es que alguna o mucha gente se riera de este segoviano metido a exégeta de tan alta figura. Que lo hagan de mí, vale que sea. (Hay que reconocer que lo que escribió sobre Juan Talega no lo hizo mal del todo). Pero, ¿qué decir de Antonio Mairena que no se haya dicho ya y que además no falte a la verdad, esa que casi siempre es relativa? ¿Que ha sido el cantaor más completo y enciclopédico de la historia del cante? ¿Que gracias a su empeño y facultades el gran público -no sé si cabe utilizar esa expresión en el mundo del flamenco- pudo conocer formas cantaoras casi perdidas o limitadas a exiguas minorías? ¿Que su aportación a la creaA zación, la televisión, artificiosidad a tope y tantas cosas que impuso la «revolución» tecnológica) es lo que cambió la realidad de las formas y del fondo del flamenco, lo mismo que de todo lo demás. Es verdad que para mal e irremediablemente, pero... Así que menos mal que por lo menos, en aquel tránsito trágico y definitivo, hubo un Antonio Mairena y algunos y algunas más, últimos representantes de una época que fenecía. Gracias a los prodigios de la técnica podemos gozar de esos prodigios del arte. Hay algo que es necesario destacar: que Antonio Mairena fue el mayor aficionado al cante que se haya conocido. Rectifico: los habrá habido iguales, pero no más. Esta última quizás sea una de sus facultades -yo creo que la más esencial- menos conocidas o valoradas. Porque Antonio Cruz García no se levantaba, sino el último, de una reunión flamenca, ni dejaba de escuchar a alguien, ni concedía importancia al tiempo salvo para emplearlo en el flamenco. Se ha dicho que esa dedicación la ejercía para sacar provecho, para aprehender cada matiz, cada tonalidad y faceta. Pues claro, nada más natural, pero demostración irrefutable de su profunda e inagotable afición. Yo creo que era el capitán Nemo del flamenco, sumergido por siempre en el mar del cante y del baile para cumplir su propósito de que en el mundo terrestre ese Arte tuviese el lugar que merecía. Tarea en la que cualquiera hubiera fracasado, no sólo él. Y me remito a lo del curso de la historia. A mí me parece que hacer elogios es innecesario. Hacerlo de tal o cual cantaor correspondía cuando no existían medios de grabación y era la tradición oral la que ignoraba a unos y hacía inmarcesibles a otros. Por ejemplo, ¡cuántas cosas se han dicho de Frasco el Colorao, de Juaniquí, de Cagancho, de Joaquín la Cherna, de Tomás el Nitri, SON TREINTA AÑOS Antonio Cruz García, «Antonio Mairena». ción y desarrollo de los festivales fue importantísima? ¿Que gracias a él y a otros pocos el cante gitano pasó a ser mejor considerado en la sociedad? Pues sí, todo eso es cierto, e incluso seguramente más cosas que mi incapacidad me impide reflejar. Bueno, y que cantaba mejor que bien. Pero, todo hay que decirlo, ha habido gente que no ha considerado favorablemente esas aportaciones, al menos del todo. Se trata de aficionados que todavía soñaban o sueñan con el cante en las casas de Triana, en las cuevas y en las gañanías, es decir, con la máxima pureza, con lo prístino. Pero el curso de la historia es, para bien y para mal, imparable e irreversible. Y ni el hacer de Antonio Mairena ni el de otros que no eran de su cuerda fue lo que determinó la realidad que acabó imponiéndose a finales de los años sesenta. La mutación en las formas de vida (vivienda, alimentación, oficios, comodidades, el coche en la puerta, la más absoluta comerciali- 20 del Fillo, de la Andonda y más! ¿Y de Joaquín el de la Paula? Ese mismo que, por cierto, sigue sin tener una calle en Alcalá, su pueblo (aunque la tuvo en los años setenta). Sí la tiene, y grande, Antonio Mairena, desde poco después de su partida, en merecida gratitud. Tampoco tiene calle con su nombre Manolito el de María. ¡Increíble pero cierto! Pero, ¿qué más da?, el cante y sus hombres y mujeres no están en azulejos y placas, aunque no es de negar que lo merezcan, sino en el corazón de quienes tienen la facultad -porque es una facultad, muchas veces dolorosa, que no está concedida a cualquiera- de apreciar el arte que de ellos ha brotado. Si los elogios son innecesarios, las comparaciones resultan absurdas. ¿Cómo y a cuento de qué hacerlo entre Antonio Mairena y cualquier otro cantaor que haya logrado celebridad, antes, durante y después de él? ¿Compararemos la aceituna con la pera? ¿El coco con la manzana? ¿El aguacate con la nuez? Claro que no, cada fruto tiene su sabor único, su textura diferenciada. Y cada uno nos aporta una sensación de placer distinta. Pero, claro, hay a quien no le gustan las nueces; a otros, las manzanas; existen los que no resisten ni que les mienten las aceitunas. «Hay gente pa tó», decía Rafael el Gallo (yo apostillaría a mi tocayo y hermano en la alopecia: «menos pa lo que tiene que haber»). Yo me cuento entre los que no les gusta todo (tengo un amigo que dice que a mí no me gusta nada, o casi). Sin embargo, o no obstante, jamás dejo de reconocer que tal o cual cantaor canta o cantaba muy bien, aunque a mí «no me ponga». Hay de todo, sí. Sé de gente que tiene la más completa colección de discos de flamenco: en ella se contienen todos los cantaores de los más variados estilos e idiosincrasias. Los más alejados de unos como estos de los otros. Es gente a la que le gusta eso: todo de todos. Me alegro por ellos, aunque me resulta difícil creerlo. De hecho, hay actualmente algún cantaor-cantante que tiene tantas facultades que es capaz de cantar por, o imitar a, la mayoría de los más conocidos de la historia. Sí, pero como el muchacho transmite menos que un cable de cartón, ¿de qué vale tanto poderío? Joaquín el de la Paula y Manolito el de María, ambos siguen sin tener una calle en Alcalá, en su pueblo. La obra de Antonio Mairena produjo sus epígonos. Unos más afortunados que otros, como es natural. Al lado de excelentes seguidores hubo y hay imitadores que aunque se llevaran cada día de su vida escuchándole no lograrían otra cosa que aburrir y desesperar al oyente (aunque las tragaéras del gran público resultan increíbles). Lo mismo pasa con la pléyade de imitadores de otro celebérrimo cantaor, aunque en este caso no conozco ningún excelente seguidor, y sí muchísimos de los otros, hasta el punto de que cierto día, en un bar que ya no existe, uno que estaba cantando-imitando a ese celebérrimo de cuyo nombre no me acuerdo ahora, hizo que una lagartija cayera al suelo, muerta, y dos o tres grillos salieran de sus escondites, despavoridos. Con todo lo referente a Antonio Cruz García pasa lo que con todo: o se es o no se es, se vale o no se vale. Muchos de ustedes conocerán aquello de Antonio Chacón, cuando alguien le preguntó que por qué siempre se hacía acompañar de cierto individuo que ni hacía palmas, ni decía nunca óle y casi ni hablaba. «Porque sabe escuchar», fue la respuesta del maestro. Lección que deberían aprender muchos, antes que la de escucharse. Pero hay que perder la esperanza en su logro: aquí todo el mundo nace sabiendo. Ya no me quedan más recursos para seguir refiriéndome a Antonio Mairena. No sé si lo que digo a continuación es una procacidad, o un reflejo de cierto orgullo, pero el caso es que un día de verano, estando yo, con mis diecinueve años a cuestas, en un bar que visitaba a diario, llegó Manuel García Fernández, «El Poeta de Alcalá», acompañado o acompañando a Antonio Mairena. Manuel, como yo ya surtía en asuntos del cante, me presentó al astro, o al revés, más bien. La mirada de Antonio, mientras nos dábamos la mano, hizo que me pusiera más encarnado que el tomate más maduro que pueda acabar en un gazpacho. Palabras, palabras. Lo que hay que hacer es escuchar. Para los noveles es difícil en este mundo tan trepidante y a la vez tan estancado. Para los ya experimentados también, porque el bote sifónico en que nos vemos sumidos no nos deja «ni atrás ni alante». Así que, del amplio conjunto de grabaciones (discográficas y no) que hay recogidas en internet, les propongo dos, aunque podrían ser cincuenta. Para los noveles puede que sean reveladoras; para los experimentados, o que crean serlo, dos ocasiones para romperse la camisa (las hayan escuchado ya o no). Una es de Perrate de Utrera en el primer Gazpacho de Morón (Perrate de Utrera & Diego del Gastor - Soleá - 1963). La otra es de Antonio Mairena (Antonio Mairena bulerías - 1963), conseguida en el mismo festival. Para qué hablar más. Se podrían decir muchas más palabras, sesudas frases y elementos definitorios. Lo que tiene que hacer el interesado es escuchar. Que no, pues adiós, muy buenas. Rafael Rodríguez González 21 Caseta «Un puñao de Güena Gente» Caseta «Los del metro de mas» 22 Caseta «Los Gitanitos» Caseta «Los Espumosos» 23 Caseta «La última y nos vamos» Caseta «La mitad más uno» 24 ¿QUÉ PASÓ CON LA TABLA DE SAN BARTOLOMÉ? tía, María del Águila Romero Muñoz, hermana de mi padre, y persona muy conocida en Alcalá como directora de la coral de la Hermandad de Jesús Nazareno. En diversas ocasiones comentaron que una amiga viuda, adinerada y de buena posición, residente en el sevillano barrio del Porvenir, tenía en su casa una tabla antigua, con la pintura de un santo a tamaño natural, en cuyo reverso constaba que pertenecía a la iglesia de Santa María del Águila de Alcalá. Antonia, Manuela y Mª del Águila fallecieron en los años 80, y nunca fue tiempo de comprobar aquel comentario. También interesado por ella, a principios del siglo actual, Antonio García Mora, Profesor de Historia de Enseñanza Secundaria, contactó con el Museo de Bellas Artes de Cádiz, confirmando que la tabla no se encontraba depositada, aunque tampoco recibió información sobre los propietarios. La investigación había quedado en punto muerto. EN EL MUSEO DE CÁDIZ D José Marina Bocanegra, era Secretario del Ayuntamiento de Alcalá de Guadaíra en la década de los cincuenta del pasado siglo. Cada año, disfrutaba de sus vacaciones en Cádiz donde gozaba de buenas amistades, entre ellas, la del director de Museo de Bellas Artes quien en alguna ocasión debió comentarle que entre los fondos del museo, se encontraba una pintura antigua de Alcalá, en concreto, una tabla medieval de San Bartolomé a tamaño natural, con una inscripción en la parte trasera donde podía leerse: «Iglesia de Santa María del Aguila. Alcala de Guadaira». Don José visitó el Museo y contempló la tabla dando cuenta de ello a mi padre que le animó a escribir una reseña. Recabó la información necesaria y redactó un artículo que bajo el título: «San Bartolomé», fue publicado en la Revista de Feria de 1955, acompañado de fotografía en blanco y negro de buena calidad. Escribió que la tabla medía 2´14 metros de alta por 0´56 de ancha y estaba en depósito particular, es decir que no pertenecía a los fondos de públicos del Museo. Afirmaba que perteneció a la iglesia de Santa María del Águila, al primitivo retablo de la Virgen, aunque piensa, que originariamente pudo proceder de la iglesia de San Miguel de Alcalá donde hubo una cofradía en honor del Santo. Luego cita a algunos especialistas afirmando que existen referencias en Post: «Historia de la Pintura Española», en Mayer: «Maestros de la escuela Sevillana»; y del Profesor Angulo Íñiguez, en un artículo publicado en «Archivos Españoles del Arte», quien encuentra analogías entre esta tabla y la pintura de la Natividad, que existía también en el altar de la Virgen, atribuida a Juan Sánchez de Castro. Es posible que esta información la recibiese del propio Museo, aunque era un hombre culto y buen aficionado a la pintura. En marzo de 1957, don José Marina se marchó definitivamente de Alcalá por traslado al Ministerio de la Gobernación en Madrid como Inspector-Asesor de ON NUEVAS PISTAS Tabla medieval de San Bartolomé depositada en el Museo de Bellas Artes de Cádiz. Corporaciones Locales. En la Revista de Feria de aquel año, hay un testimonio gráfico del homenaje de despedida que la corporación municipal le ofreció en el Hotel Oromana por el importante ascenso en su carera profesional. TESTIMONIOS Las hermanas Antonia y Manuela Rebollo Azaín trabajaron entre los años 50 y 70 del pasado siglo en la Tintorería Larios de Sevilla. Solteras, tenían su domicilio en la sevillana plaza de Zurbarán. Mantuvieron una larga amistad con mi Como es sabido, en la cabecera de la nave de la epístola del Santuario, están los restos originales de una interesante pintura mural que representa a San Mateo y Santiago. A efectos de facilitar la interpretación a las personas que la observan, la Hermandad me encargó redactar un texto explicativo, y buscando material para su elaboración, recordé las similitudes que el profesor don Enrique Valdivieso encontraba entre estas y las de San Isidoro del Campo en Sevilla, ahora atribuidas por la profesora Doña Rosario Marchena, al maestro Nicolás Gómez1, ilustrador y reconocido pintor medieval. Presuponiendo la semejanza entre ambas, me puse en contacto con ella para oír su opinión científica. En los primeros cambios de impresiones y tras descartar la autoría del reconocido maestro, la profesora me preguntó si en la iglesia de Santa María del Águila había existido una Hermandad de San Bartolomé, pues en uno de sus últimos trabajos había localizado una referencia al contrato de ejecución de 1. MARCHENA HIDALGO, ROSARIO: Nicolás Gómez. Miniaturista, pintor e ilustrador de libros del siglo XV. Diputación de Sevilla, colección «Arte Hispalense», número 81. Sevilla 2007. 25 unas pinturas para el retablo del Santo. Fue entonces cuando le puse en antecedentes y facilité tanto la foto como el artículo publicado en 1955 por don José Marina. La Profesora Marchena obtuvo del Museo de Bellas Artes de Cádiz información sobre los propietarios. Había sido depositada en 1931 por don Julio Varela Vázquez, y retirada en 1959 por su viuda Doña María del Rosario Purcell Llamas. EL MATRIMONIO VARELA PURCELL En el primer rastreo telemático, pude confirmar que ambos habían fallecido, lo que ya presuponía, pero también constaté que no tenían descendencia, pues no aparecía ningún español con esos apellidos. Los datos localizados sobre ambos cónyuges fueron reveladores pero insuficientes. Don Julio Ángel Varela Vázquez era natural de Cádiz. Fue Almirante de la Armada Española y Ministro interino de la Marina2 en la II República, entre el 27 de enero y el 12 de febrero de 1932. Además del Boletín Oficial del Estado, así consta también en el Diccionario Biográfico de los Ministros Españoles (PB97-1148-C02-01). Su brillante carrera militar desempeñada en el primer tercio del siglo pasado, estuvo premiada por la concesión de importantes reconocimientos oficiales. En 1927, siendo capitán de fragata, mediante despacho de 1 de junio, el Rey Alfonso XIII le otorgó la Cruz de Segunda Clase del Mérito Naval3 con distintivo blanco y pasador con lema «Industria Naval Militar»; y en 1932, el Presidente de la República le concedió en despacho de 22 de marzo, la Gran Cruz del Mérito Naval4. Al mes siguiente pasó a la situación de reserva5 con el empleo de «Contralmirante Honorario», según acuerdo del Consejo de Ministros de fecha 5 de julio. Don José Marina Bocanegra. Finalizada su etapa militar pasó a la vida política ingresando en el Partido Radical Republicano de Lerroux, precisamente durante una de los periodos más convulsos de la historia de España. Aparece en las listas de candidatos en las elecciones municipales de Sanlúcar de Barrameda y Puerto Serrano. El 2 de febrero de 1935 fue nombrado Presidente del Comité Provincial de Cádiz del Partido Esquela Republicano Radical con el refrendo expreso del propio Alejandro Lerroux. La Guerra Civil le debió coger en el desempeño de este cargo. No he localizado información sobre actividades políticas durante la dictadura de Franco, es posible que su talante democrático le hiciese permanecer apartado de la vida pública o bien que fuese expresamente excluido por el Régimen a causa de sus antecedentes políticos. Su esquela mortuoria publicada en ABC de Sevilla6 indica que falleció el 16 de agosto de 1955, cuando mantenía su condición de Contralmirante de la Armada. Estaba residiendo en Sevilla, calle Progreso, número 25, Chalet Ntra. Sra. de Fátima7, y tras el funeral en la parroquia de San Sebastián del barrio del Porvenir, su féretro fue trasladado a Cádiz donde recibió cristiana sepultura. Ruegan una oración su director espiritual, desconsolada esposa, madre política, sobrinos, sobrinos políticos, primos y demás parientes y afectos, pero no aparecen hijos, lo que corrobora que el matrimonio no los tuvo. Tras enviudar, Doña Rosario Purcell mantuvo una posición social distinguida en la sociedad sevillana. Consta que en 1959, retiró del Museo Provincial de Bellas Artes de Cádiz la tabla de San Bartolomé. Debió ser aquella viuda adinerada, a decir de las hermanas Antonia y Manuela Rebollo Azaín, que residía en el barrio del Porvenir, donde ellas habían visto la pintura y leído la inscripción. En ABC, edición de Andalucía, sección «Ecos de Sociedad», localizamos algunas referencias sobre viajes, como su regreso desde Madrid en octubre de 1957 acompañada de Doña Rosario Merry de Rivero-Dávila8; viaje a Roma en junio de 1958 acompaña nuevamente por Doña Rosario Merry, y del General Merry, Conde de Benomar9; o su marcha a La Coruña en octubre del mismo año donde consta como «Maruja Purcell, viuda de Varela»10. 2. Consta el nombramiento y cese en los Boletines Oficiales del Estado de 30 de enero y 23 de febrero de 1932. 3. ABC (Madrid). Jueves 2 de junio de 1927. Página 17. 4. ABC (Madrid). Miércoles 23 de marzo de Edición de la mañana 1932. Página 19. 5. ABC (Madrid). Miércoles 6 de julio de 1932. Edición de la mañana. Página 17. 6. ABC número 16.217 de 16 de agosto de 1955. Edición de Andalucía, página 26. 7. El Inmueble fue vendido y derribado. Su lugar lo ocupa un bloque de pisos. 8. ABC (Edición Andalucía). Jueves 31 de octubre de 1957. 9. ABC (Edición Andalucía). Martes 3 de junio de 1958. 10. ABC (Edición Andalucía). Martes 7 de octubre de 1958. 26 Desconozco la fecha exacta del fallecimiento de Doña Mª del Rosario Purcell. La única esquela mortuoria que he localizado aparece el del lunes 8 de febrero de 1988 en ABC de Sevilla por encargo de la Hermandad de los Javieres11, constando como hermana y Camarista de la Virgen. La esquela convoca a una Misa al día siguiente, en la parroquia de Ómnium Sanctorum, ante los devotos titulares. He consultado recientemente a la Hermandad, en concreto a Maruja Vilches, hermana mayor, quien me informó que además fue nombrada «Camarera de Honor». Hablé también con su cónyuge José Márquez, pero tampoco me aportó datos significativos. La pista del matrimonio Varela Purcell llegó a vía muerta cuando nos fue imposible localizar a sus familiares y comprobar que el chalet Nuestra Señora de Fátima había sido derribado y sustituido por un moderno edificio de pisos. ESTUDIO DE LA MARCHENA PROFESORA Bajo el título de: «Las Pinturas de Santa María del Águila de Alcalá de Guadaíra», la profesora Doña Rosario Marchena Hidalgo, titular de Historia del Arte de la Facultad de Geografía e Historia, Universidad de Sevilla, publicó en 2011 un artículo donde además del análisis estilístico aportó dos noticias de sumo interés; de un lado, el contrato de ejecución, y de otro, el estudio del reconocido profesor Angulo12 que en 1943 examinó la tabla cuando estaba depositada en el Museo de Cádiz. Describe la profesora Marchena que San Bartolomé «de cuerpo entero, está representado de tres cuartos, con dos cuchillos en su mano izquierda, símbolo de su martirio, mientras que con la derecha sujeta un libro que representa la epístola que se le atribuye y una anilla de la que cuelga la cadena que mantiene el diablo a sus pies, según la iconografía tradicional. El fondo de la tabla lo ocupa una cuadrícula en la que se alojan flores de cuatro pétalos y el pavimento es ajedrezado en blanco, negro y rojizo. Sobre la túnica oscura con cenefa en cuello y puños, un manto blanco de brocado bordeado también por grecas… …El nimbo de oro dice… BARTHOLOMEAEUS APOSTOLUS ORA PRO (NOBIS)"13. Leemos en el mismo trabajo que el contrato de ejecución había sido localizado por don José Gestoso y Pérez14 en el antiguo Archivo de Protocolos Notariales15. Mediante carta de pago con fecha 7 de marzo de 1508, los pintores Gonzalo Díaz y Nicolás Calvo, vecinos de la parroquia del Salvador de Sevilla, reconocen haber recibido 8.000 maravedíes de Francisco Sánchez, prioste de la cofradía de San Bartolomé de Alcalá de Guadaíra como parte del pago del retablo que estaban realizando para la referida Hermandad, cuyo contrato de ejecución había sido firmado ante la escribanía alcalareña de Pedro del Castillo. LA COFRADÍA DE SAN BARTOLOMÉ EN LA IGLESIA DE SAN MIGUEL En el siglo XVI, había en Alcalá dos Hermandades de San Bartolomé, una más antigua y de mayor riqueza con sede en la parroquia de San Miguel, y otra en Santiago. El padre Flores16 testimonia que en la cabecera de la nave colateral de la epístola de la iglesia de San Miguel, se encuentra la capilla de San Bartolomé con rótulo donde consta fundada en 1429 por Alonso Sánchez Oreja e Isabel González, y afirma que la cofradía era tan antigua, o aún más que la capilla. En San Miguel había cuatro altares documentados: El mayor, dedicado al santo arcángel titular, el del Santo Cristo crucificado, San Bartolomé y Santa Ana. Los informes de los visitadores refieren que los altares eran de buenas pinturas17; por contra, en la iglesia de Santiago el altar de San Bartolomé se limitaba a una hornacina muy pobre en la pared con la iconografía del Santo. La iglesia de San Miguel quedó arruinada en la primera mitad del siglo XIX. Ocupada por las tropas francesas en 1808, el edificio resultó muy dañado18, y aunque fue reabierta al culto algunos años después, en 1842 quedó definitivamente cerrada por desplome de la nave central19. Es muy posible que a consecuencia de todo ello la tabla de Restos ruinosos de la capilla de San Bartolomé en la San Bartolomé fuera trasladada a la iglesia de San Miguel. Fue fundada en 1429 por Alonso iglesia de Santa María del Águila, y Sánchez Oreja e Isabel González. Al fondo se observa el arco que acogía el retablo. allí permaneció cerca de 100 años 11. Cofradía de Nazarenos del Santísimo Cristo de las Almas, María Santísima de Gracia y Amparo, y San Francisco Javier. Iglesia del Ómnium Sanctórum. Sevilla. 12. ANGULO ÍÑIGUEZ, DIEGO: «San Bartolomé de escuela sevillana de fines del siglo XV, expuesto temporalmente en el museo de Cádiz". Archivo Español de Arte, Madrid: Instituto Diego Velázquez, 1946. 19(75), pgn 243. 13. MARCHENA HIDALGO, ROSARIO: "Las Pinturas de Santa María del Águila de Alcalá de Guadaíra". Archivo Hispalense. Número 285-287. Diputación de Sevilla 2011. 14. GESTOSO Y PÉREZ, JOSÉ: Ensayo de un diccionario de los artífices que florecieron en Sevilla desde el siglo XIII al XVIII inclusive. Sevilla: Andalucía 1889-1908. T.III, p.100. 15. Hoy Archivo Histórico Provincial de Sevilla. Libro II de Francisco Segura. Signatura 2.179. 16. DE FLORES LEANDRO JOSÉ: Memorias Históricas de la Villa de Alcalá de Guadaira. Sevilla 1833/34. 17. ROMERO GUTIÉRREZ, VICENTE: «La iglesia de San Miguel». Escaparate. Feria 2001. 18. Catálogo Histórico Artístico de Sevilla y su Provincial. Hernández Díaz, Sancho Corbacho y Collantes de Terán. Año 1941. 19. Diccionario Geográfico Histórico y Estadístico de España y sus posesiones de Ultramar. Pascual Madoz. Año 1846. 27 hasta que fue vendida a comienzos del siglo XX. Esta información la aporta el propio profesor Angulo20 que dice haberla recibido directamente de personas vinculadas al Santuario. Quizás esta venta pudiera estar relacionada con las importantes obras que la Hermandad de la Virgen del Águila hubo de realizar entre 1910 y 1911, como medio de financiarlas, sin embargo no hay referencias en el amplio y bien documentado archivo de la Hermandad. Fuera como fuese, la tabla fue vendida y adquirida por un tercero, posiblemente el contraalmirante don Julio Ángel Varela Vázquez quien la depositó en 1931 en el Museo de Bellas Artes de Cádiz. Paradójicamente este expolio salvó a la tabla de la irremisible destrucción de 1936, pues de haber permanecido en el Santuario hubiese quedado reducida a cenizas. fue adquirida el pasado año en una colección particular de Córdoba». LOCALIZACIÓN Teníamos perdidas gran parte de las ilusiones porque el intenso rastreo a la familia Varela Purcell resultaba infructuoso. Habían transcurrido 25 años desde el fallecimiento de Doña Rosario y del matrimonio no quedaban herederos directos. Para colmo, habían vencido unos depósitos en el banco a plazo fijo y los fondos fueron a parar al tesoro público, ya que ningún heredero los reclamó. La única esperanza era que las fotos publicadas por la profesora Marchena en su artículo de Archivo Hispalense, con amplia repercusión en los medios especializados, diese sus frutos. El pasado 17 de abril, el correo electrónico de la profesora Marchena registraba una entrada sorprendente. Lo remitía la firma «Z. Sierra-Antigüedades y Decoración» con domicilio en Madrid, calle Lagasca 36, local 1. Informaba que la tabla de San Bartolomé se encontraba expuesta para la venta en su local comercial, informando: «La pieza se encuentra en perfectas condiciones, fue recientemente restaurada para reparar algunas perdidas y consolidar policromía. Conservamos informe de la restauración. La obra 20. ANGULO ÍÑIGUEZ, DIEGO. Obra citada Visionadas las fotos, la profesora Doña Rosario Marchena constató que se trataba de la tabla original y no de una falsificación. Advertía, al ver el reverso de la pintura, que se había intentado borrar la inscripción dando además una capa de aparejo -estopa y yeso- sobre toda la superficie algo inusual y extraño. También advirtió que se había eliminado la inscripción de la aureola, posiblemente para dificultar su identificación, lo que había perjudicado el fondo de la pintura. Posiblemente la Sra. Purcell tuvo necesidad de venderla y el comprador intervino la trasera borrando la inscripción por razones obvias. Según ello, desde la salida de Alcalá, la tabla sufrió al menos dos intervenciones. Una de Manuel Lucena, «Restaurador de Cuadros antiguos de la Catedral de Sevilla», según consta en el dorso, que pudo ser casi a la misma vez de su compraventa, y otra reciente de la firma: «I & R», cuyo escueto informe de restauración firmado el pasado 13 de enero por Rafael Romero Asenjo indica que «Estructuralmente la obra se ha mantenido intacta desde su ejecución, mantiene por el reverso sus travesaños originales y el recubrimiento de estopa y yeso. No muestra signos de ataque biológico ni de alteraciones por antiguas restauraciones… …no presenta barridos ni alteraciones de antiguas limpiezas», lo que en algunas partes de la pintura resulta contradictorio. Este capítulo se cierra con los 38.000 €. que el anticuario desea percibir por la venta de esta tabla. Queda en manos de las instituciones andaluzas y alcalareñas decidir si se inician las gestiones para que esta antigua y significativa obra del patrimonio artístico alcalareño, regrese a donde nunca debió haber salido, ahora que se cumplen 505 años desde que en 1508 fuese pintada por los maestros Gonzalo Díaz y Nicolás Calvo. Vicente Romero Gutiçerrez Estado actual de la tabla según se encuentra a la venta en un anticuario de Madrid. Académico Correspondiente de la Real Academia Sevillana de las Buenas Letras 28 29 LA LECCIÓN DEL DR. ORDÓÑEZ S primo Pepe y su hermana Pilar me lanzan el guante con cariño, y yo lo veo en el suelo, de reojo, con pesadumbre, con la misma que constato una vez más que llegamos tarde al abrazo con demasiada frecuencia, convertimos en infinitos los kilómetros y recordamos a las personas pero no sus números de teléfono porque vamos siempre deprisa al mismo sitio de siempre. Entre el honor y el desconcierto, acepto el reto de escribir en pasado de la mejor voz de informativos que ha dado la radio sevillana. Debido a una enfermedad repentina, el pasado mes de abril nos dijo adiós el periodista alcalareño Antonio Ordóñez, amigo y compañero en Radio Guadaíra, aquella que fue radio con Isa Mateo, Jorge Pinto, Juan Jiménez, Antonio Sánchez, Juan Fuentes, Cordero o Florencio Ordóñez, entre otros muchos y buenos que llegaron para aprender y se fueron para seguir aprendiendo. Antonio fue un maestro coetáneo en quien me fijé porque donde yo ponía empeño él derrochaba talento. Cualquiera que fuese el género o la temática, noticia, reportaje, deportes... desplegaba una redacción ágil y certera, rematada por una locución impropia de su juventud, acento andaluz culto, pausada y perfecta modulación, de modo que salida de su boca la actualidad local parecía de agenda nacional. Comenzó su andadura en Radio Sevilla junto al Maestro Araujo, primero en la redacción de deportes y luego destacado en informativos de la Cadena Ser, en Sevilla y Huelva. Posteriormente trabajó en la oficina del Portavoz del Gobierno de la Junta de Andalucía con U escaparate@movistar.es Antonio Ordóñez Martínez el ex consejero Gaspar Zarrías y más tarde cambió de rumbo profesional para volver a la radio, a su medio, en este caso a Canal Sur como presentador y productor de programas. Semanas antes de su marcha mi amiga y periodista Mercedes Vega me cuenta que se lo encontró en los estudios de Canal Sur y que le preguntó por mi, que si seguía informando de temas alcalareños podría contar que había terminado y defendido con éxito su tesis doctoral El derecho de la protección de datos personales y los medios de comunicación, conducida desde el departamento de Periodismo II de la Facultad de Comunicación de la Universidad de Sevilla. Por ello, el periodista y abogado ha sido distin- guido por el consejo consultivo de la Agencia Española de Protección de Datos con el premio de investigación en la modalidad de trabajos originales e inéditos, y cuyo acto de entrega tuvo lugar el pasado 26 de abril en Madrid ya sin Antonio entre nosotros. Era tenaz, brillante y con un admirable afán de superación. Todos estos años de comunicación institucional y periodismo radiofónico los había simultaneado con la carrera de Derecho, de la que se licenció en 1997, y el trabajo de investigación sobre un tema novedoso y oportuno como el de la protección de datos y el tan anhelado derecho al olvido en la red. Esa es la raza de los pioneros, de quienes son capaces de llegar hasta donde antes nadie ni quiso ni pudo. Porque a Antonio lo fácil le aburría y se trazaba desafíos que ya tenía construidos en su mente. Me gusta pensar que no se fue definitivamente, que se ha marchado por un tiempo como esos miles de jóvenes talentosos que hacen las maletas para encontrar fuera lo que aquí se les niega, el justo reconocimiento a duros años de preparación profesional. El Dr. Ordóñez nos deja un gran legado. De un lado la tesis doctoral que habrá de convertirse en manual de trabajo académico para las generaciones venideras tanto de periodistas como de letrados, empeño en el que nos afanaremos familiares y amigos. También, nos impartió esa lección magistral con la que indica el camino del esfuerzo como el más directo al premio del conocimiento y de aspirar a ser mejores personas. Fco. Javier Maestre Caballero 609 344 567 30 Caseta «El Realaje» Caseta «El Rincón de Benarosa» 31 ALCALÁ E gran pintor Emilio Sánchez Perrier nació el 15 de octubre de 1855 en la ciudad de la Giralda, Sevilla. De muy joven ingresó en la Escuela de Bellas Artes de su ciudad, teniendo como maestros a Joaquín Domínguez Bécquer, Manuel Barrón y Carrillo, Manuel Wssel de Guimbarda y Eduardo Cano de la Peña. También comparte su tiempo ayudando al padre en la relojería de la calle Sierpes, aunque esta tarea no era de su agrado. Entre otras recibió las siguientes condecoraciones y distinciones: - Medalla de Oro de la Exposición de Cádiz, 1879. - Mención Honorífica en el Salón de París, 1886. - Segunda Medalla en la Exposición Universal de París, 1889. - Medalla de segunda clase en Madrid, con la obra titulada «Febrero», hoy, en el Museo de Arte Moderno de Cataluña con el nº 2278, donde existe otro paisaje de L EN BUENOS AIRES (III) Alcalá de Guadaíra, con el nº 2279, que fue adquirido en la Exposición de Bellas Artes de Barcelona de 1891. - Comendador de la Orden de Isabel la Católica. - Académico Honorario de la Academia de Bellas Artes de Santa Isabel de Hungría de Sevilla. - Miembro de la Sociedad Nacional de Bellas Artes de Francia. Tras pasar una temporada en Alcalá, toda su producción se la llevaba a París, donde con los trabajos de allí realizados, eran vendidos a su marchante George A. Lucas. Así actuaba todos los años. Sus bellísimas obras eran muy solicitadas, tanto en Francia como en Inglaterra y Estados Unidos, obteniendo unos beneficios económicos muy considerables. La última obra que sabemos que realizó fue la titulada «Triana» en 1907, y que formó parte del álbum entregado en 1908 a la Reina Victoria Eugenia por la Real Maestranza de Caballería de Sevilla. Este álbum contiene, además, obras de Villegas, Luis Jiménez Aranda, Alpériz, Virgilio Mattoni, Conde de Aguiar, Sánchez Perrier, José García Ramos, López Cabrera, García y Rodríguez y Gonzalo Bilbao (orden dentro del álbum). Toda su vida fue un verdadero éxito. Dice José Cascales, en su libro Las Bellas Artes de Sevilla, Toledo, 1929: …que reproduce la naturaleza sobre el lienzo, con tal exactitud, que los arroyos de sus paisajes tienen la transparencia y el verdadero movimiento de las aguas, y hasta parece que se oye el murmullo que producen al serpentear entre las flores silvestres que adornan las orillas; los árboles figuran mecerse a impulso del viento que pone en revolución las hojas de sus ramas; las yerbas del prado no pueden ser más verdaderas, y el cielo que pinta en un hermoso día de sol, es tan diáfano y azul como el de la patria que lo vió nacer. Emilio Sánchez Perrier es, para terminar, uno de los paisajistas Río Guadaíra con San Roque al fondo. Sánchez Perrier. Óleo sobre lienzo. 48 x 65 cm. 32 contemporáneos más distinguidos y una gloria de España. Eugenio Sedano, en su obra Estudio de Estudios, escribe sobre nuestro pintor: Honra de la moderna escuela pictórica, Sánchez Perrier es artista de cuerpo entero, merecedor de los elogios que la crítica sabe tributarle y digno de la admiración de los aficionados. Ante los paisajes de este maestro, el ánimo se extasía pensando en los misteriosos encantos de la campiña, enervase el sistema nervioso como si, en efecto, los ojos se recrearan en la corriente del arroyuelo, que juguetón serpentea; la cabeza siente suaves desvanecimientos porque el horizonte la lleva tras sus líneas lejanas. Arboleda. Sánchez Perrier. Grisalla sobre papel. 44 x 27 cm. Portada del Catálogo Estudio de árbol. Sánchez Perrier. Dibujo sobre papel. 24 x 33 cm. No opinaba igual Bernardino de Pantorba, que en su obra El Paisaje y los paisajistas españoles, relata: Pocos paisajistas de categoría ha dado la región andaluza, ninguno sobresaliente. El más notable (ya que no el más conocido lo fue García y Rodríguez) parécenos Emilio Sánchez Perrier. Tristemente, el día 13 de septiembre de 1907 fallecía en los Baños Viejos de Alhama de Granada como consecuencia de la tuberculosis, a la edad de 52 años; tardando varios días en poder realizarse su enterramiento, por no localizar a sus familiares, puesto que sus padres habían fallecidos y su estado civil era soltero. Visitado el Cementerio Municipal de dicha localidad, y dado la falta de familiares, su tumba ha desaparecido. Como este resumen se titula «Alcalá en Buenos Aires», es digno mencionar que hasta su fallecimiento y a pesar de su triunfo en Europa y Estados Unidos, en Buenos Aires por mediación del marchante ARTAL, sólo había presentado una obra en el año 1905. En junio de 1907, y a través del Sr. Artal, en su Exposición nº XVIII presentó tres óleos denominados: «Molino de San Juan», «Paisaje de Alcalá» y «Alrededores de Sevilla». No logró vender ninguno de ellos, volviendo al Catálogo de la Exposición XIX celebrada en abril de 1908. El cuadro «Molino de San Juan» (46 x 27 cm.) en una subasta celebrada en Nueva York, el día 30 de octubre de Portada del Catálogo 33 Molino del Algarrobo. Sánchez Perrier. Óleo sobre tabla. 21 x 32 cm. 1985, fue adjudicado en la cantidad de 25.000 dólares. En la misma casa, celebrada el 17 de octubre de 1991 se adjudicó la obra «Curso del río de Alcalá» (36 x 55 cm.) en 29.700 dólares. El propio Sr. Artal disfrutaba en su domicilio de un paisaje de Sánchez Terrier. Aún, a pesar de la crisis actual, en el mes de enero de 2013, en la sala de subastas Ansorena de Madrid, se ha adjudicado una obra llamada «Ribera de Guillena» (19 x 35 cm.) por la cntidad de 26.000 €, más gastos. Más importante fue la intervención del pintor y marchante José Pinelo en Buenos Aires; en el Catálogo de la VII Exposición de Pintura Española, celebrada en el salón de C/. Florida 112 el año 1908, presentó 41 obras, de las que al menos nueve de ellas quedan perfectamente identificadas de Alcalá. En la VIII Exposición en 1909, organizada por el Sr. Pinelo y celebrada en el salón Costa en C/. Florida 163, también en Buenos Aires, vuelve a presentar 37 obras de Sánchez Perrier, de las que ocho corresponden a Alcalá. Merece citar la IX Exposición de 1910 en el salón L´Aiglon en C/. Florida 654, presentando 16 obras, ninguna de ellas de Alcalá. Hemos podido comprobar que fueron 111 obras de Emilio Sánchez Perrier, las que se presentaron en Buenos Aires. Aquellas que no se vendieron, Pinelo las expuso en Río de Janeiro, Uruguay, Cuba, etc. Después de lo narrado, comprobamos la gran dispersión de la obra de nuestro pintor. Como en anteriores ediciones de la publicación Escaparate, volvemos a dar la bienvenida a esta obras que suponemos han llegado desde tan lejos para poderlas disfrutar en su tierra. Continuara… Mª Carmen Pareja 34 LUTO EN EL MUNDO DEL FÚTBOL. SE FUE E N la madrugada del pasado 2 de abril nos dijo adiós Mariano Pulido Solís, ex futbolista del Sevilla y entrenador que fuera de, entre otros equipos, nuestro Club Deportivo Alcalá, al que ascendió a tercera y donde dejó a todos los que tuvimos la suerte de trabajar con él la huella indeleble de su profesionalidad y calidad humana. Nacido en Marchena el 22 de agosto de 1956, a Pulido se le había diagnosticado una enfermedad degenerativa contra la que parecía luchar con la misma entereza y dignidad que siempre demostró en los terrenos de juego. La noticia de su fallecimiento sorprendió a todos cuantos conocían su situación ya que, a pesar de la enfermedad, su estado no hacía presagiar tan fatal desenlace. Así nos lo confirmó recientemente un ex jugador cuya relación de amistad trascendió lo puramente deportivo y de quien nos consta ha sentido muy profundamente su muerte, Juan Antonio Girón, uno de los últimos grandes goleadores que ha dado nuestro balompié y protagonista en el ascenso a tercera del Alcalá de Pulido: «No lo esperaba. Le vi sólo cinco días antes en su casa porque tengo amistad con Loli y toda la familia, y le encontré muy bien. Como persona era una maravilla. Con un trato correcto siempre, como entrenador ha sido el mejor que he tenido junto a Pintinho. Fue quien más confianza me dio y con quien he jugado más. Coincidí con él aquí y en el Marchena y aprendí mucho. Su apuesta por el fútbol bonito era algo que le distinguía. ¿Una anécdota? Recuerdo que Carlitos, ex jugador del Sevilla y del Mallorca le regaló unas botas y le dije que si ascendíamos a tercera me las tenía que regalar. Logrado el ascenso se vino hacía mí y me dijo: "Toma las botas, te las ha merecido"». De similar opinión es el capitán que estuvo a sus órdenes en esa histórica temporada 2000-2001, Agustín Castellano, «Rarra», miembro de una estirpe de futbolistas que han defendido la elástica alcalareña durante muchas temporadas: «Como persona, no hace falta añadir nada más ya que lo dice todo el mundo. Una persona estupenda. Y como entrenador lo que más llamaba la atención era que nos inculcaba la idea de jugar al fútbol, de tratar bien el balón. Algo inusual cuando estas jugando en categoría regional y en campos de albero. Pero no renunciaba a ese objetivo. Era, además, muy trabajador, con una gran capacidad. No me extraña los títulos que alcanzó en las categorías inferiores del Sevilla de donde tantos y buenos jugadores ha sacado.» UN ALCALAREÑO MÁS Aunque no renunció nunca a sus raíces, Pulido se sentía plenamente identificado con Alcalá y siempre hizo gala de ese sentimiento. Con una alcalareña se casó, alcalareños son sus hijos, Sara y Jorge, y como tal más se manifestaba incluso cuando algún periodista le preguntaba acerca de sus orígenes marcheneros: «Nací allí, pero me he criado en Alcalá y soy de aquí. Me resulta raro que te refieras a mí como el míster marchenero», le espetó un día a Oscar Murillo, periodista de Estadio Deportivo. Por cierto, que su hijo Jorge siguió sus pasos y juega actualmente en el Fuenlabrada madrileño aunque hace unas temporadas defendió los colores del Alcalá en Segunda B dejando igualmente en nuestra afición un grato recuerdo. Su matrimonio con nuestra paisana Loli Barneto emparentó a Pulido con Rivas, al estar casado éste con su cuñada, otro nombre mítico para la afición nervionense y que MARIANO PULIDO también defendiera los colores de nuestro primer club antes de triunfar en el Sánchez Pizjuán. La profesión de entrenador de fútbol no siempre es bien entendida. Ocurre, como pasa en otras actividades, que el paso del tiempo pone cada cosa en su sitio y hace ver las cosas de otra manera. A veces los futbolistas llegan a tener una visión distinta de sus técnicos cuando han alcanzado cierta madurez o dejan de estar en activo. Y sobre todo, cuando pasan a convertirse en entrenadores transcurridos unos años. Es el caso de Agustín Núñez, «Agustín», lateral en el conjunto campeón que Pulido llevó a categoría nacional y sobrino de otro veterano de los banquillos, su tío José Luis, ya retirado: «Ahora que también me dedico a entrenar, entiendo mejor a Mariano. No es fácil entrenar y dirigir a un grupo de personas, cada una con su carácter. Mariano tenía un carácter fuerte y yo, a pesar de mi juventud, también. A veces chocamos, pero siempre con admiración y respeto. Era una relación muy especial. Era un amante del buen fútbol que disfrutaba en cada momento y nos hacía disfrutar a los demás. Ha sido, sin duda, con el entrenador que más me he divertido en un campo de fútbol». Compañeros de Girón, Rarra y Agustín fueron en esa temporada histórica los porteros Fernando y Belmonte, José Luis, Victor Sánchez, Núñez, Coronilla, Rocha, Miguel Ruiz (a quien Pulido se trajo del Sevilla), Coroba, Andrés, Paquito, Lozano -que luego le sustituiría en la dirección técnica en una controvertida decisión de la directiva presidida por Javier Olivero que muchos no entendimos-, Selu, Álvarez... Todos ellos supieron del carisma de un técnico que fue un señor dentro y fuera del terreno de juego. Para el actual presidente del Alcalá, Lisardo López, Mariano Pulido era «un profesional muy bueno. Le gustaba el juego pausado, de toque, y le recuerdo como una persona muy pacífica. Muy respetuoso con todos. Incluso cuando era amonestado por el árbitro, lo hacía para buscar una reacción en la grada. Para motivar a la gente. Aceptó su salida del club sin rencor y de hecho ayudó para que su hijo jugase aquí, tal como sucedió.» 35 CORAZÓN BLANCO De su etapa como jugador profesional cabe recordar que debutó en el primer equipo sevillista con 17 años de la mano de Santos Bedoya, con el equipo todavía en segunda división. Roque Olsen le haría debutar seguidamente en primera. Su estancia en el Sevilla -5 temporadas- no se alargó más debido a la enorme competencia del plantel, ya que era la época de Baby Acosta, Espárrago, Biri-Biri, Rivas, Gallego, San José, Blanco..., es decir, un equipazo. Y también -por qué no decirlo-, por la falta de apoyo de Carriega y Muñoz, a pesar de ser internacional en todos los escalafones inferiores y de participar en las Olimpiadas de Montreal en 1976. Para José Antonio Sánchez Araújo, maestro de periodistas, Pulido era «un jugador de una técnica extraordinaria. Un libre que destacaba por su salida de balón, enemigo del patadón, y sólo la enorme competencia le privó de estar más años en Nervión. Pero hay que destacar, Juan, una cosa en Pulido, y es que, a su categoría como jugador hay que añadir su enorme categoría humana». Tras jugar cedido en el Elche y regresar a Nervión, fue fichado por el Castellón donde jugó dos temporadas, comenzando en segunda división, donde logró ascender, y jugando al año siguiente de nuevo en primera. Era la temporada 81-82. A continuación pasó al Linares, en aquélla época en segunda, y allí estuvo cinco temporadas. Puso fin a su trayectoria como futbolista en Ceuta y Écija. Impartió su magisterio como técnico en conjuntos como Los Palacios, Pilas y Marchena, además del nuestro al que llegó de la mano de Joaquín Espina, relevando a Paco Paradela tras un motín del vestuario. Después de conseguir la gesta de devolver a nuestro equipo a categoría nacional, en 1998 volvió al Sevilla para dirigir los escalafones inferiores. De su alta apuesta por el fútbol de toque, de sus muchas cualidades como entrenador y forjador de valores, pueden dar fe pupilos que han alcanzado altas cotas. Nombres como los de Lauren, Velasco, Campano, Antoñito, José Mari, Corona y más recientes como Luis Alberto actualmente triunfando en el segundo equipo del Barcelona-, Luna, Cala, José Carlos y muchos más. Para ellos, el técnico alcalareño resultó fundamental en Mariano Pulido, jugador del Sevilla, entre San José y Paco Gallego. Mariano Pulido, en el centro de pie, entrenador del C.D. Alcalá. sus trayectorias, como para él lo fueron Pepe Alfaro, quien le hiciera debutar en el infantil con 12 años en el año 1968, o el propio Santos Bedoya. En la última etapa, y debido ya a sus limitaciones físicas, formó parte de la secretaría técnica del club blanco donde realizaba informes de los rivales del primer equipo. Su compromiso con el club de sus amores fue absoluto y siempre hizo gala de un sevillismo incondicional. De lo mucho que era apreciado en el mundo del fútbol y en su vida cotidiana fue fiel reflejo la masiva asistencia al tanatorio alcalareño, donde se congregaron representantes de los diversos estamentos deportivos regionales, del fútbol sevillano y local. Directivos, compañeros, así como muchos jugadores a los que tuvo a sus órdenes acompañaron a familiares y amigos en la hora del adiós. Y en todos con quienes pude hablar, una opinión generalizada: la de su capacidad de trabajo, su entrega total en la labor encomendada que supo impregnar siempre de honestidad, su saber estar en los momentos difíciles y su carácter sencillo, su humildad, valores a los que no renunció nunca ni aun estando entre la élite del fútbol. Mariano Pulido fue siempre el mismo con todos y en todas partes. No tenía dobleces. Yendo siempre de frente, diciendo lo que pensaba aunque ello no gustase a su interlocutor pero siempre con respeto, con la misma elegancia que sacaba balones comprometidos desde su área sin recurrir al patadón fácil, como bien afirma el «Maestro Araújo». Así es como le recuerdo, pese a que coincidimos poco tiempo en el club del entonces vetusto -y hasta añorado- Francisco Bono. Tiempo suficiente, sin embargo, para ratificar las impresiones aquí recogidas de manera sucinta, unirme al pesar por su temprana y lamentable pérdida, y poder decir que fue todo un honor colaborar -desde el área de comunicación- con un profesional de su categoría. Descanse en paz. Juan Fuente 36 María José Borge Montero Mª Carmen Rodríguez Hornillo PSOE PP Tiempo para disfrutar y agradecer D 30 de Mayo al 2 de Junio, se abren las puertas de nuestra Feria, una feria de todos, una feria que destaca, por la alegría de nuestra gente, el recibimiento a los que vienen de fuera, el reencuentro con nuestros familiares y amigos, las ganas de pasarlo bien y de compartir un trozo de nuestras vidas, que de uno u otro modo, grabará en la memoria esa anécdota, esa sonrisa, ese baile, esa «copita» en la caseta y ese hablar de lo que llevamos pasado este año. Quién no recuerda, cuando iba con sus padres de niño o con su familia, la primera vez que fuiste ya en pandilla, las risas de las ocurrencias de tus amigos, limpiar los zapatos llenos de nuestro albero, la foto en el caballo de cartón, con el sombrero o la flor, o la primera vez que llevaste a tus hijos. Al fin y al cabo, la vida no se mide, ni por minutos ni por las veces que respiras, sino por tus sensaciones, los sentimientos y las veces que se te corta la respiración, este es mi mensaEL je, estamos en una época muy dura, con una crisis económica muy importante, pero lo que ésta situación, no nos va a recortar nunca, es la forma especial de ser de los alcalareños y alcalareñas, en su forma de ver la vida, de disfrutarla, de pelearla, en las ganas de vivir y superarse, en nuestra forma de querer y de ser «buenas gentes». Y para que todo esto, sea posible, hay muchos de nuestros paisanos implicados, los caseteros, los restauradores, los caballistas, los servicios públicos, los cuerpos de seguridad, cruz roja, protección civil... sería una lista muy larga de personas a las cuales quiero expresar mi agradecimiento y admiración por su trabajo, muchas veces altruista, porque sin ellos, no sería posible, el poder disfrutar año trás año de nuestra feria. ¡Feliz reencuentro! ¡Felices vivencias! ¡Felices recuerdos! ¡Felices emociones! ¡FELIZ FERIA 2013!. Bienvenida la Feria de Alcalá 2013 U gran bienvenida a nuestra feria un año más. Quizás este año con un poco más de alegría si cabe, porque supone un paréntesis frente al pesimismo y negativismo que inundan nuestras vidas cotidianas últimamente. No será la feria evidentemente una solución a los problemas de muchos, pero si nos los hace olvidar durante unos días, junto a nuestra familia, junto a nuestros amigos, pasándolo bien que falta nos hace. Los alcalareños un año más, nos encontraremos en el recinto ferial y compartiremos los mejores días de nuestra ciudad. Además, la Feria supone un estímulo fundamental para nuestra economía y un refuerzo a nuestro atractivo turístico que debemos potenciar cada vez más. Nuestra Feria debe de tener, año tras año, las puertas cada vez más abiertas a toda el área metropolitana, como una de las principales ciudades de la provincia de Sevilla, la Feria de Alcalá de Guadaíra tiene que ser un referente entre todas. Pero lo que no debemos de perder de vista, es que la celebración de este tipo de eventos representan un gasto municipal que, obligatoriamente deben de estar calculados de forma que queden cubiertos. Para el Partido Popular de Alcalá de Guadaíra, fuegos artificiales sí, gran Portada de feria sí, servicios de prevención apropiados por supuesto,… etc, todos los recursos económicos invertidos en la feria para una gran celebración bueno son, eso si, siempre y cuando haya una planificación rigurosa en la que se tengan previstos y calculados los costes y NA los ingresos a percibir por las arcas municipales. En eso consiste una buena gestión municipal, dar a los ciudadanos grandes eventos y celebraciones pero con la habilidad e inteligencia de que éstos, no supongan un coste añadido a las ya arruinadas arcas públicas del Ayuntamiento. Una gestión responsable no puede basar su éxito en gastar y gastar, así, hasta un niño pequeño lo sabría hacer. Es importante para nosotros, tener presente a aquellas familias que desgraciadamente no se pueden permitir gastar los pocos recursos que tienen en diversión y entretenimiento, y a ellos, especialmente, queremos decirles que estamos trabajando y esforzándonos al máximo, para que estos momentos que atraviesan de difícil situación económica, queden tan sólo en un mal recuerdo y que sea algo que quede atrás, muy atrás. Estamos convencidos de haber iniciado un cambio en nuestra ciudad. A raíz de la propuesta del Partido Popular, todos los grupos políticos del Ayuntamiento nos hemos unido para combatir juntos el desempleo. Los populares estamos dispuestos a trabajar codo con codo con el gobierno de la ciudad, si éste se toma enserio el Pacto por el Empleo y sobre todo, si de una vez por todas, actúa con transparencia y lealtad. El Partido Popular de Alcalá de Guadaíra, como todos los año, tendrá su caseta en la calle Seguiriya nº 3. Gracias a la colaboración de nuestros afiliados, amigos y simpatizantes, las puertas están abiertas para todo el mundo. Os esperamos. 37 Mª Dolores Aquino Trigo Alberto Jesús Miranda Oliva PA-EP-AND IULV-CA No nos queda más remedio que levantarnos y luchar por lo que es nuestro Feria y empleo en Alcalá S acerca la fiesta laica más importante en Alcalá de Guadaíra: La Feria. Días de preparativos, montajes, comidas o convivencias la anteceden. Es entonces cuando introducimos nuestros planes ante estas fiestas. Pero sin duda esta feria será una edición en la que muchos sentimos todavía más, si cabe, las dificultades y problemas que padecemos los 14.000 alcalareños que estamos en paro en nuestra ciudad. Y ello condiciona sin duda nuestra fiesta, que será en lo importante menos lucida: cuando nuestros vecinos no puedan llenar las calles del Real disfrutando de estos días porque no se lo pueden permitir. Los Andalucistas no entendemos, ni compartimos, que en este escenario se decida contratar más de millón y medio de euros en iluminación para festejos, o incluso se aumente el presupuesto destinado a la Feria. Y no lo entendemos, porque mientras, muchas familias de nuestra ciudad carecen por competo de ingresos. Con este panorama es un despilfarro gastar más en adornos y hemos pedido coherencia con los tiempos que corren, pues son gastos suntuosos que se pueden reducir, priorizando los gastos sociales, más necesarios y urgentes. Nuestra apuesta sigue siendo el mantenimiento de nuestras fiestas como seña de identidad de la ciudad, pero con los auténticos dramas personales que a diario pasan por el Ayuntamiento, pensamos que hay que apretarse más el cinturón en lo prescindible, para poder mantener la calidad en los servicios públicos imprescindibles, que son los E más relevantes en estos tiempos. Y mientras escribo estas líneas, añado que los Andalucistas también estamos trabajando con responsabilidad, compromiso y seriedad en el Plan de Empleo Local, para poner en marcha medidas que creen herramientas adecuadas para atraer inversión a Alcalá, generando empleo. Las propuestas del PA se articulan en tres ejes: La puesta en valor del potencial turístico de la ciudad; la culminación de infraestructuras necesarias y el apoyo institucional hacia los trabajadores y empresarios. Estas medidas, responden a las singularidades de nuestra ciudad, analizando nuestro déficit y planteando líneas que refuercen nuestras fortalezas. Nuestro esfuerzo mira hacia esa dirección, y trabajo cada día para que toda la Corporación y principalmente el gobierno de nuestra ciudad, estén en esa misma tarea, porque de lo contrario, Alcalá perderá su rumbo. Y volviendo a nuestra Feria, estos días de fiesta son para compartir y disfrutar con familiares, amigos y vecinos de otras localidades que nos visitan y es sin duda también oportunidad de trabajo y negocio para otros. Por ello te deseo una feliz Feria. Suerte a los que encuentren en ella la oportunidad de unos días de trabajo, y gracias un año más a Escaparate, por brindarnos esta oportunidad de poder dirigirme a mis vecinos, e invitarles a compartir momentos de feria en nuestra caseta de la calle Alegría, frente a la portada. Allí estaremos los Andalucistas para escucharte y compartir estos días contigo. Te espero. Q UERIDO trabajador, querida trabajadora: Desde Izquierda Unida queremos volver a utilizar, como cada año, las líneas que nos brinda la revista Escaparate para desearte unas feliz feria de Alcalá de Guadaíra, y como ya es costumbre, hemos optado por saltarnos el protocolo habitual de usar esta columna solamente para eso, creo necesario utilizar cada milímetro de espacio público que se nos brinda, para lanzar un mensaje mucho más importante. Estamos en un momento histórico para el país entero, sufrimos una de las peores crisis de los últimos siglos, una crisis que nosotros no hemos creado si no que ha sido fruto de la avaricia de los hombres que nos gobiernan, banqueros, grandes empresarios y políticos al servicio de los mismos. Vivimos en un sistema político que privatiza la educación y la sanidad y mantiene a miles de familia sin techa, un sistema que condena a millones de personas al desempleo mientras gasta ingentes cantidades de dinero en salvar a los bancos sin hacerlos públicos, un sistema corrupto que cada 4 años cambia de cara poniendo a un monigote del PSOE o a otro del PP que aplican exactamente la misma política económica, porque ambos partidos están al servicio del capital financiero internacional. Nosotros no te vamos a decir que somos los mejores y estamos en posesión de toda la verdad como hacen a diario PP o PSOE, no te vamos a decir eso porque no es cierto, nosotros sólo somos trabajadores y trabajadoras organizados contra el sistema capitalista que queremos construir un mundo mejor, más justo e igualitario que ponga a las personas por encima del dinero y no al revés. Pero como nosotros hay muchas organizaciones que hacen un gran trabajo a diario como el caso del movimiento 15M, Andaluces de Alcalá o los sindicatos CCOO o SAT de Alcalá de Guadaíra entre otros muchos, y todos juntos seremos capaces de acabar con este sistema nauseabundo encabezado por esos dos grandes partidos que serán recordados en la historia como los baluartes y principales defensores del único modelo político que es capaz de matar a la mitad de la población del mundo de hambre para que la otra mitad muera de colesterol. No te voy a pedir que te unas a Izquierda Unida, pero sí te voy a pedir encarecidamente que te unas a la lucha contra el capitalismo, donde quieras, a cualquiera de las organizaciones que nos partimos la cara a diario, pero ayúdanos a derribar el peor de los sistemas políticos que ha conocido la humanidad, para que el día de mañana no tengas que mirar atrás lamentándote cuando ya sea tarde y nos hayan arrebatado todo lo que nuestros abuelos consiguieron entregando en muchos casos sus propias vidas. 38 Caseta «Cuchará y paso atrás» Caseta «El Arrebujo» 39 Caseta «Amigos del Molinete» Caseta «La Canalla» 40 Caseta «Lo que nos faltaba» Caseta «El Bolillón» 41 J Maldonado marchó al Reino de Granada con toda su familia y además, con el encargo de Fiscal de la Audiencia de dicho Reino. El Nuevo Reino de Granada comprendía los actuales Estados de Colombia, Panamá, Venezuela y Ecuador. En su origen fue un vicerreinato del Imperio español de América. En ese inmenso territorio, Juan Maldonado, tenía que juzgar las acciones de los demás; su misión principal consistía en iniciar la acción de la justicia en defensa de la legalidad de los derechos, tanto de los españoles, como de los indios; él, tenía la misión sagrada de tutelar por Ley de oficio o a petición de cualquiera de las dos comunidades; además, tenía que velar por la independencia de los distintos órganos de la judicatura y lo más importante, tenía que dar respuesta y satisfacer al interés social de ambas comunidades. UAN UN PERSONAJE SINGULAR: JUAN MALDONADO EL DOCTOR JUAN MALDONADO, vecino de Alcalá de Guadaira, hijo de Diego de Coria y de doña Leonor Maldonado; Antonio Maldonado, su hermano, y doña Marina, su mujer con cinco hijos; y los criados, Gines Sánchez, vecino de Moratalla, hijo de Alonso y de Beatriz García; Francisco de Medina, vecino de Sevilla, hijo del Licenciado Diego de Medina y de doña Teresa Vázquez; Alonso Galeas, vecino de la villa de Ribera, hijo de Rodrigo Salguero y de doña Galeas, Francisco de Aguilar, vecino de la villa de Ribera, hijo de Francisco de Aguilar y de Catalina Sánchez de Colmenares, vecino de Aguilar de Campos, hijo de Martín Sánchez y de María Álvarez, al Nuevo Reino de Granada, por haber sido nombrado el Doctor Juan Maldonado, fiscal de dicha audiencia Signatura. Contratación, 5537, libro, nº 1, folio nº 10v-27v-30-33V. Signatura. Pasajero, libro, nº 3E, 1960. Fecha de embarque: durante el año 1554. ¡Menudo papel!... La Audiencia a la que fue destinado, era muy importante, tanto, que entendía en todos los pleitos de aquel gran territorio. El Nuevo Reino de Granada, tiene ya, cuando llegar Juan Maldonado (1554), seminario (1592) y además, la Real y Pontífica Universidad de Santo Tomás, que no llegó a existir de forma definitiva hasta 1629, después de un largo pleito, ganado por los Dominicos contra los Jesuitas. A pesar de no haber imprenta, hubo en Nueva Granada algunos escritores, teólogos, juristas, arbitristas, como Luis Brochero, auto- res de crónicas, como Rodríguez Fresle y el agustino Fray Andrés de San Nicolas, y aún historiadores como el obispo Piedrahita (1688) y gramáticos de las lenguas indígenas, como el dominico fray Bernardo de Lugo y los jesuitas José Dadey y Francisco Varaix. Los fiscales eran los encargados de juzgar de manera severa las acciones de los demás, teniendo por visión, promover la acción de la justicia en defensa de la legalidad, de los derechos de los ciudadanos y del interés público tutelado por la ley, de oficio o a petición de los interesados, así que como de velar por la independencia de los órganos jurisdiccionales y de promover ante estos la satisfacción de interés social. En último lugar tenemos las Audiencias que no eran otra cosa que los tribunales que entendían en los pleitos de un territorio. Estaban facultados para dar fé pública, asesorar legalmente, controlar y fiscalizar la gestión económica, financiera, presupuestaria y contable, y así mismo podrían llevar la tesorería y la recaudación. Con estos antecedentes marchó lleno de ilusión nuestro paisano Juan Maldonado. Juan Manuel Benítez Díaz 42 Y vio Dios ser buena la luz, y la separó de las tinieblas; y a la luz llamó día, y a las tinieblas noche, y hubo tarde y mañana, día primero. MANUEL FERNÁNDEZ GARCÍA (SEMBLANZA DE UN PINTOR) (Gén. 1, 4-5) A ti, temblor y halo del paisaje, recortadora del perfil y ciega para el pincel abierto que disgrega la mancha de la mar y del celaje. Rafael Alberti T ANTA historia en tus calizas entrañas, hojaldrada Carmona. Viejo recinto recio contenido por tu devenida templanza dentro de la majestad de tu cerca, que amuralla el tiempo acumulado, todo el tiempo de los milenios que ya no provocan el vértigo de su inexorable transcurso, porque el miedo se lo tragó el olvido, y tú ya eres el ámbito de la luz. Carmona, eres Roma en el alcor. Una Roma de foro, de voces antiguas como la tierra o la piedra cuyos ecos aún resuenan en cualquiera de tus rincones, y todavía pueden verse los resplandores que asombraron a ignotas miradas. Carmona, donde los veneros acostumbran a florecer en los fontanales de los escarpes, o en el corazón de las plazuelas. Aguas diáfanas para saciar un afán de luz de un hijo tuyo, Manuel Fernández García. Hijo de tu tiempo, de tu historia plena y de un cielo filtrado por las copas de unos pinos. Árcade en Carmona, Arcadia del pintor, donde anudado a la fluencia densa de lo mítico en su ciudad y protegido por el abrazo de las edades, lleva desenvolviendo un arte que sólo se hace evidente en los lugares eternos, entre otros merecidos herederos de tan opulenta memoria. Y vienen siendo para todos nosotros una suerte su retina y su mano derecha; su dibujo; sus pinceles y su paleta, con los que ha fecundado lienzos, tablas o papeles; y suerte para Carmona, donde acrisolado se vierte y vive, entrañado en la caliza, consistiendo ya en una capa de colorida pintura, una capa más en el hojaldre milenario del sereno fulgor de un lucero, cuna y morada del artista. Manuel Fernández García nace en la calle Bogas del barrio de San Felipe, el 29 de diciembre de 1927. En sus prime- Manuel Fernández, en su estudio en Carmona. Foto: Olga Duarte. ros recuerdos se ve con su única hermana, Dolores, y sus padres. En 1922 el padre había abierto una tienda de tejidos en un inmueble adosado a la Puerta de Sevilla. Él se crió en la tienda, aunque de los vecinos de San Felipe se acuerda con cariño, como si fueran parte de su familia. Recuerda también la feria con su padre, y haciendo la primera comunión. Del barrio de San Felipe era también Miliki, Emilio Alberto Aragón Bermúdez (Carmona 1929-Madrid 2012), que había nacido en la casa de enfrente, aunque apenas lo recuerda porque al quedar huérfano de padre, su tío, que era payaso lo acogió y se lo llevó con su circo. Su bisabuelo paterno fue un pintor decimonónico de temas religiosos, aunque se le conoce un paisaje de desierto en un cuadro sobre Los Reyes Magos. Firmaba sus obras con el apellido Pérez. Es el autor del cuadro de la virgen de Gracia que cuelga de una de las paredes de su casa, que fue un regalo para la hija, abuela de Manuel, cuando se casó. Tuvo un hijo que también fue pintor y firmaba Pérez Hurtado. Hay un debate en la familia sobre los cuadros que han heredado, algunos creen que eran del bisabuelo y otros del tío abuelo. En la casa familiar una puerta tenía pintada una cesta con unas flores y sus tías lo mismo le decían que la había pintado el bisabuelo, que el hermano de la abuela, tío Antonio. Todo viene porque muchas veces no ponían las fechas y otras ni siquiera firmaban los cuadros. Entre estos ascendientes artistas hay otro pintor en la familia, llamado Juan de la Cruz, que murió en el manicomio de Sevilla, donde al parecer había cuadros de él. Su abuelo materno se apellidaba Canelo, y aunque actualmente se ha perdido como apellido en Carmona, en el siglo XVI los Canelo tenían derecho a «bastón de mando». Fue un gran herrero en cuyo taller se forjaron herrajes de gran valor artístico. En el colegio del convento de las dominicas de Madre de Dios dibujaba. Sus compañeros de párvulos le servían de modelos. Dibujaba a los niños cuando los castigaban a estar de rodillas o contra la pared. Es el recuerdo más remoto del artista con la pintura. Sor 43 Patrocinio, que era la maestra de los niños en el parvulario, le tenía mucho cariño porque era menudo y bueno. Fue ella quien lo llamó por primera vez Manolín, que es el nombre por el que todo el mundo conoce al pintor en Carmona. Aún conserva una estampa dedicada por la monja donde ésta dejó escrito: «A mi querido y monísimo Manolín de su tía Sor Patrocinio.» Como compañeros de pupitre tuvo a Manuel Losada Villasante (1929), que andando el tiempo llega a ser discípulo de Severo Ochoa y premio Príncipe de Asturias de Investigación Científica y Técnica; y a José María Requena (19251998) el escritor, poeta y periodista, premio Eugenio Nadal en 1971 por su primera novela, titulada El cuajaron, cuya portada, precisamente, dibujó Manuel que también colaboró con el escritor en otras ediciones de libros suyos. Requena, cuando eran jóvenes, exhortaba al pintor para que se fuera con él a Bilbao, le decía que allí estaba su porvenir, pero a éste nunca se le hubiera pasado por la cabeza marcharse de Carmona. Empezó el bachillerato como alumno interno en el colegio de San Hermenegildo de Dos Hermanas, que regían los terciarios capuchinos. El colegio había sido correccional antes de la guerra: todavía conservaba las puertas con las postiguillos por donde les metían los platos de la comida a los niños recluidos, estaba rodeado de unas tapias altas para que, entonces, no se escapara nadie. Pero cuando él estuvo en San Hermenegildo, aunque había disciplina, sabía, por algunos de sus amigos, que el colegio de San Hermenegildo era una gloria comparado con los salesianos de Alcalá o de Utrera, donde eran mucho más duros que allí. Los frailes, por ejemplo, los llevaban a dar buenos paseos al Tomillar e, incluso, a Alcalá; a los que estaban en quinto y sexto, con permiso de sus padres, les dejaban fumar, aunque los curas no fumasen. Después estuvo, también interno, en los Escolapios de Sevilla, donde los curas fumaban y a ellos no los dejaban fumar. En los Escolapios había demasiada disciplina. No llegó a terminar el bachillerato porque le hizo falta a su padre en la tienda. En San Hermenegildo, entre las asignaturas que se impartían estaban el dibujo artístico y el dibujo técnico. El Puerta de Sevilla. Carmona. Acuarela. Manuel Fernández. Colección particular. Grazalema. Cádiz. Óleo sobre lienzo. Manuel Fernández. Colección particular. 44 Molino de Alcalá de Guadaíra. Óleo sobre lienzo. Manuel Fernández. Colección particular. tiralíneas no le gustaba; dibujar tuercas, tornillos o pernos, no era lo suyo Orondo, barbudo y grande, el padre Jaime era el profesor de dibujo artístico. Como la clase de dibujo estaba en la planta alta del edificio, para subir y bajar las escaleras el padre Jaime se apoyaba en su bastón con una mano y con la otra en el hombro de Manuel, aunque no tanto para ayudarse -la cor- pulencia de Manolín era la antípoda de la del fraile- como porque tenía predilección por el bachiller, apreciaba mucho sus dibujos y no había exposición escolar a la que no mandara sus trabajos. En una carpeta conservó Manuel todas las láminas con los dibujos de piezas de escayola (bustos, hojarasca, capiteles...) que hizo mientras fue alumno del Padre Jaime. Plaza de Abastos de Carmona en el s.XIX. Óleo sobre lienzo. Cuadro cedido por el autor, Manuel Fernández, al Ayuntamiento de Carmona en el transcurso del acto de «Hijo Predilecto de Carmona». Esos dibujos, precisamente, son los que pudo mostrar a José Arpa (Carmona 1858-Sevilla 1952) cuando lo conoció con catorce años. Después de pasar una gran parte de su vida en Roma, Méjico o San Antonio de Tejas, don José había regresado a España con setenta años, a Sevilla, donde tenía su casa en la calle Jáuregui y su estudio en la calle Feria, pero pasaba los veranos en Carmona. Venía con un sobrino que le acompañaba y se hospedaban en una fresca habitación del Hotel Comercio. Uno de esos veranos Arpa pretendía pintar la calle y la torre de San Pedro desde la Puerta de Sevilla, que era paso obligado para ir al mercado de toda la gente del Arrabal, cuando todavía todo el tránsito de personas y vehículos se hacía a través del arco romano, lo que supuso que fuera grande la dificultad que tenía el pintor para tal empeño -le pusieron hasta un guardia municipal-.Un día su padre le ofreció el balcón del piso superior de la tienda. Desde allí José Arpa pintó muchas veces la calle y la torre de San Pedro. Manuel ya se había incorporado al negocio familiar y no perdía ocasión de estar junto al maestro cuando éste trabajaba en el almacén de la tienda, muy atento a lo que hacía y en silencio los dos. Manuel se sentaba en una silla mientras don José trabajaba, sin molestar. Arpa se extrañaba de que el muchacho estuviera allí viéndolo pintar y sin levantarse durante tantas horas. Y hablaron: -¿A ti te gusta la pintura? -Sí a mí me gusta mucho. -¿Tú has hecho algo? -Yo tengo del colegio de los hermanos de San Hermenegildo, algunas láminas de las que hacía. -Tráelas, tráelas... -Ah!, tú dibujas muy bien, ¿por qué no pruebas?- dijo el maestro cuando vio su carpeta de dibujos. El almacén de la tienda, situado en la parte superior, se convirtió en el lugar donde Arpa guardaba sus caballetes, lienzos, óleos, pinceles y otros enseres. Allí trabajaba todos los días menos los domingos. Uno de éstos, Manuel, sin licencia de aquél, cogió algunos tubos de óleo y una tablita que había quedado preparada y sobre ella pintó un cuadrito 45 desde su azotea de la Torre de San Felipe, ese domingo. Así realizó su primera pintura al óleo. Ya no era un dibujo. Y a Arpa le gustó, y no tuvo que reprocharle nada por su atrevimiento, sino todo lo contrario. Manuel salió una infinidad de veces con Arpa a pintar, porque entonces se pintaba todo del natural, unas veces buscando vistas de la vega o desde ésta de los escarpes del alcor, y otras buscando patios o plazuelas. Arpa le pedía permiso a su padre para aquellas excursiones que éste educadamente otorgaba, aunque a don Fernando le hacía muy poca gracia, pues no le veía mucho futuro a la pintura como trabajo o profesión de su hijo, a quien prefería preocupándose más de la tienda como porvenir; aunque ya la suerte estaba echada y el futuro sólo podría ser visto desde pinceles y perspectivas. Poco tiempo después no tuvo inconveniente el padre de Manuel para que el almacén, que estaba vacío de géneros en aquellos años cuarenta de escasez y posguerra, sirviera como primer estudio del hijo, durante muchas temporadas compartido con Arpa. Como don José y Manuel pasaban mucho tiempo juntos, Rafael, el farmacéutico, les decía: «ya vienen el maestro y el discípulo» y Arpa, que tenía 90 años, contestaba: «No, no; somos amigos». Con esa edad tenía una salud envidiable. Era capaz de ir desde la fonda hasta el Alcázar, donde está hoy el parador, andando con su bastón y llevándolos con la lengua fuera al sobrino, que portaba el maletín y el caballete, y a él, mientras les decía: «La mano derecha que vaya libre; la caja de pintura y el caballete en la izquierda». Porque había que cuidar el pulso de la mano derecha. El discípulo recuerda que el maestro le daba muchos consejos. Cuando ponía a su vista algún trabajo él nunca decía «Esto no es así», sino «Yo lo hubiera interpretado de esta forma». Lo evoca como un ser estupendo, generoso y muy ameno que le obligaba, le corregía sin dejar de ser grato lo que provocaba en Manuel que creciera su entusiasmo por la percepción pictórica de la realidad de José Arpa, por esa concreta mirada del mundo: una tradición plástica a la que Manuel Fernández García se anudó de Manuel Fernández García y su hijo Mariano Ferández Goncer. manera sencillamente natural y que ha continuado con una obra que en calidad y cantidad le acredita como legatario cimero y leal, y como representante indiscutible, del paisajismo andaluz desde el último tercio del siglo XIX. En su recuerdo están también los escultores Francisco Buiza Fernández (Carmona 1922-Sevilla 1983) y Antonio Eslava Rubio (Carmona 1909-1983). Frecuentaba sus talleres en la calle Feria y en la Plaza de Mengíbar, respectivamente. La forma de hacer, de trabajar de estos escultores le influyeron en su forma de hacer y trabajar con la pintura. A lo largo de toda su larga vida no ha tenido necesidad de salir mucho de Carmona, y aunque en el estudio de su centenaria casa haya sido donde ha aplicado su colorido y ejecutado sus cuadros sobre su ciudad y sobre cualquier otro paisaje, donde también ha dado vida a los pueblos blancos de la sierra gaditana, a Cádiz, a Jerez de la Frontera, a Sanlúcar de Barrameda... Y hasta ha pintado a los indios del Orinoco o los morros de San Juan para coleccionistas de Venezuela. Su obra está repartida por toda España y por otros países como Alemania, Méjico, Estados Unidos o Japón. Nunca ha conducido un coche, nunca tuvo que sacarse el carné. Antonio Franco, un marchante de Jerez de la Frontera que le vendía muchos cuadros, cuando quería cuadros de Grazalema, donde tenía una casa, lo recogía de Carmona en su vehículo y se lo llevaba por la sierra de Cádiz para que pudiera tomar apuntes o hacer fotos de Benaocaz, Ubrique o Villaluenga del Rosario. El pintor guarda una intensa memoria de su relación pictórica con Grazalema, representada en multitud de sus obras. También los rincones de los paisajes rondeños o los pueblecitos de la Alpujarra han sido llevados a su lienzos, tablas o papeles, al óleo o a la acuarela. Nunca ha viajado al extranjero por razón de la pintura, aunque en los viajes que ha hecho dedicara gran parte del tiempo a visitar museos. En Venecia quedó cautivado por la belleza de la ciudad y hechizado por los palacios y los canales, por San Marcos y por La Academia. A su regreso empezó a pintar cuadros sobre la Serenísima para una exposición que nunca pudo inaugurarse porque los visitantes del taller que iban descubriéndolos los adquirían. Quedaron algunos que sacó del gabinete y los conserva en su colección particular. Nunca se ha quejado de su suerte. Lo ha vendido todo porque ha tenido muchos clientes. Jamás ha organizado una exposición y siempre los galeristas que han expuesto obra suya, previamente le han comprado las pinturas. Ha vivido de la pintura desde fines de los sesenta. Con su siempre recordada y amada Antonia Goncer ha criado y educado a siete hijos. Si tuviera que repetir lo ya vivido desearía dedicarse a la misma tradición pictórica a la que se ha consagrado y en la que sustenta una vida gozosa y creativa. ...Y todo en ti, Carmona, por ti, poso hojaldrado del tiempo y Arcadia del pintor. Donde la mano, la retina, la paleta, el lienzo, la línea, la perspectiva, la composición, el pincel y el color se aúnan para darte existencia otra vez más allá de ti misma. Olga Duarte Piña Lauro Gandul Verdún 46 PUBLICADO EN BOGOTÁ EL LIBRO DE VIAJES DE D E manera casual, a través de «You Tube», hemos tenido la feliz noticia que el pasado 8 de noviembre de 2012 tuvo lugar en Bogotá el acto de presentación del libro de viajes de José María Gutiérrez de Alba (1822-1897) que contó con la presencia e intervención del presidente de la República de Colombia, Juan Manuel Santos. La obra ha sido publicada por la editorial Villegas bajo el título de Diario ilustrado de viajes por Colombia 18711873, gracias al patrocinio de la empresa colombiana Ospina & Cía que cumplía el pasado año el 80º aniversario de su fundación. Por fin, después de más de 140 años esperando ver la luz, aparece la única obra importante del escritor alcalareño que no había sido nunca publicada. Un ejemplar de la misma se encuentra ya a disposición de todos los interesados en la Biblioteca Pública Municipal «Editor José Manuel Lara», gracias a la donación de la editorial Villegas. El proyecto de esta publicación surgió años previos a la celebración en 1997 del centenario de la muerte de José María Gutiérrez de Alba, cuando nos visitó en Alcalá de Guadaíra Benjamín Villegas, presidente de la editorial de igual nombre, dedicada especialmente a la publicación de libros relacionados con el valor patrimonial e histórico de Colombia. Su objetivo era conocer de primera mano a los responsables de la preparación de dicho evento y contactar con Pedro Gutiérrez Gómez, sobrino bisnieto de Gutiérrez de Alba, para llegar a un acuerdo con él para la compra de los manuscritos del libro de viajes, ya que tenía la intención de publicarlos. El título original de la obra manuscrita es Impresiones de un viaje a América. Se trataba de un libro de viajes en trece tomos, donde a modo de diario ofrece el autor alcalareño un testimonio de primer orden de la Colombia de la década de los setenta del siglo XIX siguiendo el estilo de los viajeros románticos. Aparte de los interesantes y numerosos datos que contiene el extenso relato, destacan especialmente las casi trescientas ilustraciones en color, la mayoría de ellas realizadas por el propio Gutiérrez de Alba, que son un valioso tesoro gráfico de la Colombia de esa época. El resto de las ilustraciones son cuadros costumbris- Portada de Diario ilustrado de viajes por Colombia 1871-1873. tas de Torres Méndez o de la Comisión Corográfica. Los tomos manuscritos, de los que desgraciadamente se encuentran perdidos los tomos II, III y IV, los había conservado hasta entonces en su casa de Madrid Pedro Gutiérrez Gómez, el cual se los había comprado anteriormente al hijo de José María Gutiérrez Ballesteros (1893-1990), conde de Colombí y sobrino nieto de Gutiérrez de Alba. De dichos manuscritos solo se habían publicado hasta la fecha algunos fragmentos sueltos, pues su edición completa siempre había encontrado el obstáculo del alto coste que suponía. El magnífico libro publicado por Villegas Editores consta solo de 440 páginas, pues se centra fundamentalmente en la reproducción de todas las ilustraciones a color, que es lo que presenta el mayor interés histórico para los colombianos ante la escasez de fotos de la GUTIÉRREZ DE ALBA época de las imágenes llevadas al papel por Gutiérrez de Alba. Asimismo se intercalan extractos consecutivos del diario, en especial aquellos que se refieren a los temas de las ilustraciones, pues la publicación íntegra de los textos supondría un mínimo de dos o tres volúmenes más como el que ha salido a la luz. La edición se completa con una introducción de Malcolm Deas, historiador de la Universidad de Oxford, además de estudios temáticos de Gloria Inés Ospina, historiadora colombiana de la Universidad Complutense de Madrid, el historiador colombiano Efraín Sánchez y el propio que suscribe las presentes líneas. En el caso concreto de mi estudio, su contenido trata de una aproximación a la vida, la época y la obra de José María Gutiérrez de Alba. Para comprender la génesis de esta obra hemos de saber que, desde los primeros años de su juventud, en que la lectura de varias obras relativas al descubrimiento y conquista de América le ilustraron suficientemente, José María Gutiérrez de Alba tuvo la aspiración constante de que España hiciera los mayores esfuerzos por recuperar allí su influencia perdida después del proceso de independencia de las antiguas colonias. Terminada la revolución de 1868 «La Gloriosa» y constituido el Gobierno de Prim, emanado de la Constitución de 1869, se le encomendó una misión confidencial en Colombia bajo la apariencia y el oficio de vendedor de libros. Para iniciar el proyecto presentó una memoria al ministro de Estado, Manuel Silvela, y, desde el principio, manifestaron un gran interés por la realización del mismo Cristino Martos, Segismundo Moret y Eduardo Gasset, diputados demócratas; además de Víctor Balaguer y otros amigos suyos de la fracción más avanzada de los progresistas. Todos ellos estaban resueltos a hacer ver a Silvela la gran importancia que tenía para el Gobierno de la Revolución tomar la iniciativa en el asunto. Como señala la historiadora colombiana Gloria Inés Ospina1, solo pasaron tres meses para, mediante Real Orden, nombrarle Agente Confidencial en Nueva Granada (topónimo entonces de Colombia) y Enviado del Gobierno español al resto de las repúblicas hispanoamericanas. En 1. España y Colombia en el siglo XIX. Los orígenes de las relaciones, Madrid, Cultura Hispánica (ICI), 1998, pp. 181-192. 47 la Real Orden se indicaba hacer hincapié sobre tres aspectos importantes, de los que el Ministerio de Estado quería tener información: uno era de carácter político, otro de carácter social y el tercero económico. En primer lugar, debía averiguar por qué «la Nueva Granada no había hecho ningún género de gestiones para ser reconocida por el Gobierno español». En segundo lugar, debía «consagrar muy especial atención a indagar el estado de los inmigrados españoles que existan en la Nueva Granada, su número y condición, las provincias de la Península cuyos habitantes contribuyen con mayor contingente y departamentos de la República en que con preferencia fijan su residencia». Por último, se le encargaba «estudiar el comercio indirecto y de tránsito que se hace entre Nueva Granada y la Península y muy especialmente con las islas de Cuba y Puerto Rico». Ello estaría seguramente relacionado con el desasosiego generado en la metrópoli por los incipientes movimientos independentistas de estas dos islas. José María Gutiérrez de Alba se embarcó el 15 de enero de 1870 en Cádiz, en el vapor «Canarias», y llegó al puerto colombiano de Santa Marta el 22 de abril, para proseguir luego hacia Bogotá, a donde llegó el 16 de mayo. Desde los meses inmediatos a su llegada, y tal vez con el propósito de remitir impresiones de primera mano, como nos señala la historiadora Aída Martínez José María Gutiérrez de Alba Carreño2, el agente confidencial inició una serie de viajes por distintas regiones del país, desde los parajes inmediatos a la capital, hasta sitios distantes, como los Llanos, el Tolima, Boyacá, e inclusive el Caquetá. Entre viaje y viaje y uno u otro informe, además de ocuparse de las posibilidades comerciales del libro español, colaboraba con artículos literarios, narraciones y poesías en los periódicos bogotanos. Sus relaciones con los escritores del momento hicieron posible su pertenencia a la Academia Colombiana recién creada. En la correspondencia que mantiene Gutiérrez de Alba con el Gobierno español ya informaba que había emprendido una obra titulada Impresiones de un viaje a América. La Restauración borbónica en España a finales de 1874, cuando llevaba Gutiérrez de Alba casi cinco años en Colombia, le hizo decidirse por alargar su estancia en el país hispanoamericano. Desde entonces se consagraría sin descanso a los estudios de agronomía y a la creación literaria, dejando de lado la tarea fundamental para la que llegó allí. Esta decisión la reflejará claramente en el tomo X de sus Impresiones de un viaje a América, ya que interrumpirá aquí su narración con fecha 4 de junio de 1874, y no la reanudará hasta 1883, que decide regresar a España, y cuyas observaciones del viaje de vuelta llenarán todo el tomo XI. Los tomos XII y XIII de este libro de viajes forman un pequeño diccionario de términos autóctonos. De todas sus iniciativas, las que implicaron un mayor compromiso personal fueron los institutos para la enseñanza de la agronomía en Boyacá y Santander. Convencido de la vocación agrícola del suelo colombiano, tesis que planteaba frecuentemente en sus escritos y conferencias, y basado en la observación personal de las variadas condiciones de suelos y de climas del territorio nacional, se comprometió en 1875 con la creación de una sociedad anónima que fuera origen de un instituto agrícola en Villa de Leiva. Obtuvo autorización gubernamental para utilizar el viejo convento de San Francisco, Interiores de los manuscritos de Impresiones de un viaje a América. 2. «Personajes curiosos del siglo XIX. José María Gutiérrez de Alba, de agente secreto de España a librero y agrónomo en Colombia», en Credencial Historia (Bogotá), núm. 17, mayo de 1991, pp. 4-7. 48 abandonado a raíz de la expropiación de bienes de las comunidades religiosas. Dedicó gran empeño a su ampliación y restauración, enseñando a los artesanos y ocupándose personalmente del jardín y la huerta. Según su afirmación, invirtió doce mil pesos en la plantación de olivos, mejoras de edificios, talleres de carpintería y herrería, herramientas y aparatos agrícolas. El aporte del gobierno fue únicamente de tres mil pesos. Estudió con ahínco lo relativo a la agricultura. Careciendo de la formación para ejercer la docencia en ramas tan especializadas, su proyecto incluía el desplazamiento de profesores europeos. Mientras se cumplían los trámites, se propuso fortalecer el cultivo del olivo, ya iniciado en Sáchica, y plantar la vid. Uno de sus objetivos manifiestos era el de erradicar, mediante el consumo del vino, la perniciosa presencia de la chicha. Quedaron como resultado más de cinco mil olivos nuevos y mil matas de parra, pero el instituto agrícola, para el cual preparó un cuidadoso programa y publicó el libro Cartilla agraria o Tratado elemental de agricultura y ganadería, dedicado a la juventud de Colombia (Bogotá, 1878), que fue difundida por las escuelas. Sin embargo, el proyecto quedó truncado por desacuerdo surgido con José Eusebio Otálora, presidente del Estado, alrededor de la posesión y manejo del convento franciscano que le serviría de sede. A raíz de ese fracaso, y para defenderse, Gutiérrez de Alba regresa a la labor periodística con la fundación de El Cachaco, el 1 de abril de 1879. El subtítulo de esta publicación refleja claramente el espíritu inequívoco del escritor alcalareño: «Periódico agridulce y jocoserio, conservador, radical e independiente, consagrado a decir la verdad en chanza a todos los partidos, a todos los hombres y de todas las cosas». Redactor único del mismo, reflejaba en sus pági- nas la frustración y resentimiento, pese al estilo burlón y ligero. Como casi todas sus iniciativas, el periódico sólo duró unos meses, hasta diciembre de ese mismo año, cuando llevaba 37 números publicados. La lógica venganza por sus críticas periodísticas, en una agitada etapa de revueltas y golpes de estado que afligió a la República de Colombia, le suscitó furiosas persecuciones, según cuenta Mario Méndez Bejarano3. Para sustraerse a ellas abandonó algún tiempo el país y visitó algunos estados de la confederación norteamericana, aunque no prolongó mucho su estancia. El gran respaldo a José María Gutiérrez de Alba se produjo por parte del presidente del Estado soberano de Santander, el poderoso general Solón Wilches, quien en carta de 19 de octubre de 1879 le ofrecía todas las facilidades requeridas para fundar en la provincia de García Rovira el instituto agrícola que había proyectado para Boyacá. Para suerte suya, no hubo de presenciar el languidecimiento de este instituto establecido en 1880 y trasladado a Málaga en 1884. Allí, poco tiempo después y sin muchos dolientes, como iniciativa de un gobierno ya depuesto, cerró sus puertas. Con la esperanza de lograr alguna vez un gran acierto, Gutiérrez de Alba animó proyectos y generó numerosas iniciativas culturales y educativas en Colombia. Con ninguna de ellas logró triunfar. Sin embargo, fueron tan bien concebidas, que posteriormente llegaron a realizarse. Los estudios agronómicos, el gran mercado del libro español y la creación del Teatro Nacional serán realidad años más tarde. Resignado a la nueva etapa monárquica española, el 1 de diciembre de 1883 inicia el viaje de regreso a España, ante las múltiples dolencias que le dejó un accidente sufrido durante un paseo a caballo. José María Gutiérrez de Alba llegó al puerto de Cádiz, a bordo del vapor «Coruña», el martes 26 de febrero de 1884. Después de casi catorce años de permanencia en tierras americanas, se estableció definitivamente en su pueblo natal, donde moriría el 27 de enero de 1897, en el número 2 de la calle Bailén, hoy Alcalá y Ortí. José Manuel Campos Díaz Dibujos reaizados por Gutiérrez de Alba. 3. Poetas españoles que vivieron en América, Madrid, Renacimiento, 1929, pp. 173-174. Profesor de enseñanza secundaria 49 LA ALCALÁ INSURRECTA DEL DOCTOR VALLINA NUEVAS APORTACIONES SOBRE LA II REPÚBLICA EN «-¿Es que los demás países que están más civilizados que el nuestro hay ese sindicalismo o comunismo libertario?- preguntó un viejo socialista a Fermín. - No; el sindicalismo y el comunismo libertario es, por ahora, la fórmula revolucionaria española. El anarquismo en España es la mística de la revolución. En su aspecto crítico tiene indudablemente valor; ahora, en su aspecto constructivo, a mí me parece una utopía más.» Pío Baroja Los visionarios, 1932, cap.VII. LA LLEGADA DE LA II REPÚBLICA EN ALCALÁ Y LAS «EXTRAÑAS AMISTADES» DE VALLINA (ABRIL DE 1931). UN HOMBRE DE IDEAS (Y DE ACCIÓN) L A llamada «Semana Sangrienta» de Sevilla, que transcurrió entre el 18 y el 25 de julio de 1931, fue una de las primeras grandes crisis a las que tuvo que enfrentarse el recién nacido régimen republicano del 14 de abril. En dicha crisis jugaría un papel importante nuestra localidad y un personaje que apenas ha sido tratado en la historiografía local: el doctor y líder anarquista Pedro Vallina. El análisis de fuentes hasta ahora poco conocidas como son las Memorias de Vallina (Mis memorias, Ed. Córdoba, 2000) junto a la prensa de la época nos ofrecen unos hechos que explican los primeros y difíciles meses de la andadura republicana. Pedro Vallina (1879-1970) era natural del municipio sevillano de Guadalcanal y procedía de una familia pequeño-burguesa que regentaba una confitería y unas hazas de tierra. Tras estudiar Medicina pasó a ejercerla en el sevillano Hospital de las Cinco Llagas (hoy sede del Parlamento andaluz). Allí conoció de primera mano los estragos que produjo la epidemia de gripe de 1918 y la tuberculosis en los estratos más desfavorecidos de la sociedad. En el trato con los más humildes seguramente desarrollaría su ideología anarquista comenzando a ser un activo militante de la CNT (Confederación Nacional del Trabajo). Hombre «de ideas» (como se decía en aquella época,) pero también hombre de acción, ya que según algunas fuentes participó en un atentado frustrado contra Alfonso XIII en una visita a Paría el 1 de junio de 1905 (ABC, 25/7/1931). Ya residiendo en Alcalá, tomó parte muy activa en los movimientos insurreccionales del final de la monarquía y de comienzos de la II República. Detenido ALCALÁ (JULIO, 1931) DE GUADAÍRA. Doctor Vallina. El Sol 9 de Junio de 1931. Hemeroteca Digital BNE. por los hechos de la «Semana Sangrienta» en Alcalá, pasaría a ser encarcelado en el Castillo de Santa Catalina de Cádiz. A partir de ese momento poco conocemos de su trayectoria política. Participó en la Guerra Civil en el cuerpo médico republicano y al acabar la contienda pasó al exilio en Méjico, donde acabaría sus días siendo reconocido por su labor en pos de la erradicación del paludismo. El doctor Vallina era considerado como una especie de apóstol ácrata y en palabras del ministro Miguel Maura «gozaba de gran popularidad entre los campesinos de la región» (Así cayó Alfonso XIII, Barcelona, 1966, pág. 283). También era calificado, tanto por socialistas como por conservadores, como un fanático o incluso «santón» que tenía ensoñaciones apocalípticas. En sus Memorias, Vallina se refiere al concepto que tenía del anarquismo: «los anarquistas valemos mucho, como hombres de acción que somos, y hasta se nos reverencia; pero si el movimiento triunfa, se nos persigue como a los peores enemigos» (Mis Memorias, pág, 228). Las primeras noticias que tenemos de su relación con Alcalá se refieren a un acto clandestino celebrado en una venta de la localidad a finales de la monarquía (entre finales de 1930 y principios de 1931). En dicho acto se refirió a que «si no podíamos instaurar el comunismo libertario, destruir por lo menos hasta los cimientos el militarismo, el clericalismo y al feudalismo, para que la segunda República se levantara sobre sus ruinas tan rápidamente como la primera» (Mis Memorias, pág. 230). Según Vallina, este acto fue el primero de un supuesto «núcleo conspirativo» dependiente del Comité Revolucionario que se creó a raíz del Pacto de San Sebastián en agosto de 1930, y que estaba conformado por todos los partidos republicanos y el PSOE. Aunque el sindicato anarquista CNT no participaba orgánicamente en dicho pacto, en el otoño de 1930 se creó un Comité de Acción Revolucionaria que colaboraría con la insurrección republicana. En dicho Comité destacaba, junto a otros militares filoanarquistas, el comandante de aviación Ramón Franco con el que Vallina más adelante tendría una relación más estrecha. En este contexto Vallina era el responsable en Alcalá de activar la que sería fracasa insurrección republicano-socialista. El líder anarquista residía en aquellos momentos en un hotelito que tenía arrendado su hijo y un compañero, ambos estudiantes en Sevilla, y fue allí donde sería por primera vez arrestado por la Guardia Civil tras fracasar la intentona revolucionaria republicana en Jaca en diciembre de 1930. El advenimiento de la II República tras las elecciones municipales del 12 de abril de 1931, parece que le sorprendió arrestado ya que, según él mismo, fue puesto en libertad por la intercesión de las nuevas autoridades militares afectas a la República, en concreto por el nuevo Capitán General de la II Región Militar, el general Cabanellas (luego primer líder militar del bando nacional en la Guerra Civil). Tras ello el jefe de la Guardia Civil de Alcalá «me esperaba en la puerta del cuartel… me saludó militarmente y se puso a sus órdenes. Mandé los guardias que se encerrasen en el cuartel y monté en auto que llevaba el oficial. A solas con él, me entregó la pistola que me 50 había quitado y me dio toda clases de excusas» (Mis Memorias, pág. 249). Resultaba sorprendente que la Guardia Civil comenzara el nuevo régimen republicano en Alcalá bajo las órdenes de un anarquista. Este hecho fue continuamente recordado por sus enemigos tanto en la derecha como en la izquierda. De tal manera el periodista de ABC M. Sánchez del Arco reproducía unas supuestas palabras de Vallina cuando recordaba el momento en que el Teniente de la Guardia Civil Franco «llorando me lo ha tenido que devolver [el revólver] si no el mando de algunas autoridades peligraba» («Frutos de una periodo de lenidad», ABC 25/7/1931); por otro lado, el diputado del PSOE por Sevilla en las primeras Cortes republicanas, Eladio Egoechea, dijo que el propio Vallina «despidió con un abrazo en el muelle de San Telmo» a Cabanellas cuando este fue nombrado jefe del Ejército de Marruecos el 3 de junio de 1931. Además el diputado socialista recogía también que Vallina portaba pistola «merced a un permiso especial del gobernador» (ABC, 21/8/1932). El Gobernador referido era Antonio Montaner Castaño del PRR (Partido Republicano Radical) al que el ministro de la Gobernación Maura acusaba de favorecer a la CNT Sevilla en perjuicio de la UGT-PSOE y así evitar problemas con los anarquistas «que eran los únicos elementos que podían alterarle [el orden público]» (Así cayó Alfonso XIII, pág. 284). Estas «extrañas» amistades de Vallina le costarían, una vez que cayó en desgracia tras el fracaso de la insurrección de julio de 1931, el desprecio de la CNT sevillana que en palabras de su secretario local Carlos Zimmmermann le «agradecía» «su servicio al capitalismo y a las autoridades» (ABC 25/5/1931). LA POLÉMICA ENTREVISTA DE EL SOL Y TABLADA (JUNIO 1931) EL COMPLOT DE Instalado en «Villa Salvoechea», una casita de una planta en la calle Barrio Obrero, Vallina instaló su consulta donde asistía a una clientela de origen humilde que lo veneraba como un «Bautista ácrata», en palabras de Francisco Lucientes, el periodista del periódico madrileño El Sol que lo visitó (9 de junio de 1931). Esta entrevista se insertaba dentro de una serie dedicada por este periódico progresista al problema del campo andaluz y que tuvo un gran impacto mediático en toda España, convirtiendo a Vallina en la «bestia negra» de socialistas y conservadores. Al llegar a Alcalá el periodista madrileño y preguntar por él, un paisano le dice «en su consurta resibe a toos encuantito reúne las siete peseta pa la plana, ya too gratis». En el Círculo de Labradores el periodista madri- leño recogió otra opinión bien distinta: «el doctor Vallina es un tigre que anda suelto». El retrato de Vallina que ofrece Lucientes es el siguiente: «vestido con su bata de clínica y confortador, Vallina atiende a los grupos de enfermos [donde] asoman los signos de la tragedia andaluza: hambre». Comenzada la entrevista, en sus palabras asoma lo que unos historiadores han llamado «alzamiento como chantaje», es decir se le lanzaba al Gobierno Provisional la posibilidad de organizar una revuelta exitosa o que sería muy costosa o arriesgada de suprimir (E. Ucelay y S. Tavera, «Una revolución dentro de otra: la lógica insurreccional en la política española, 1924-1934», Ayer, nº 13, 1994, pág. 129.) De tal forma Vallina decía que si las futuras Cortes Constituyentes no solucionan el problema de la tierra en octubre «a una orden nuestra arderán [Andalucía y Extremadura] de punta a punta... [el campesinado] hoy confía aún en la República, y por eso se ha contenido la revolución. ¿Mañana? La República dirá». La propuesta de Vallina, y por tanto de la CNT andaluza, era a corto plazo la expropiación (con o sin indemnización) de los latifundios que pasarían a ser administrados por «el Sindicato» (anarquista) al cual debían sindicarse de forma obligatoria todos los campesinos. La tierra no será parcelada y repartida, ya que «el obrero andaluz es antipolítico y revolucionario», siendo trabajada de forma colectiva, en consonancia con el objetivo final de todo cenetista: el comunismo libertario. Pero mientras llegara esa situación, Vallina propugnaba que fuera el Estado a través del Banco de España y del Banco Hipotecario, quien financiara la construcción de escuelas y de granjas experimentales en localidades de entre 15 y 20 mil habitantes. Es decir, que de alguna manera el Estado, al que consideraban el enemigo a batir, financiara la revolución libertaria. Vallina no hacía otra cosa que poner de manifiesto la lógica de los «juegos dobles» que marcarían la historia política de la II República donde al margen de la acción parlamentaria el recurso a la insurrección fue moneda de uso común por todas las formaciones políticas. Así las cosas, esta idea rompe con la idea del «apoliticismo» de los anarquistas, muy al contrario, estaban muy al día de la política «burguesa» y jugaban a presionar y a dirigir la acción del gobierno o del parlamento. Mientras Vallina propugnaba una política de apaciguamiento muy en la línea «sindicalista» de la dirección barcelonesa de la CNT liderada por Pestaña y Peiró, a la vez jugaba la carta insurreccional de los grupos de acción dominados por los «aguiluchos» de la FAI. Ambas corrientes no diferían en los objetivos, ni era una más radical que otra, sino que diferían en los plazos para llegar al común fin: instaurar el comunismo libertario. Vallina se presenta a él mismo más como un apaciguador pero los hechos demuestran también lo contrario. Es así que en la campaña para la elección de las primeras Cortes Constituyentes de la II República (celebradas el 28 de junio de 1931) integró una estrambótica candidatura «Republicano, Revolucionaria, Federalista y Andaluza» liderada por Ramón Franco (Director General de la Aeronáutica), el reformista agrónomo Pascual Carrión, el republicano de izquierdas José Antonio Balbotín y el andalucista Blas Infante, que fue el encargado de redactar su programa electoral. Un programa radical y con profundas incoherencias, que llegaba a pedir el protectorado andaluz de Marruecos (J.M. Macarro, Sevilla la roja, Sevilla, 1989, pág. 43.) Es interesante remarcar que esta candidatura fue la más votada en Alcalá de Guadaíra con 1.251 votos frente a la candidatura republicano-socialista que obtuvo la mitad (648 votos). Lo cual nos da la medida de la importancia de la militancia de extrema izquierda republicana y anarquista (la CNT contaba con 4822 afiliados) en nuestra localidad, y por tanto de la influencia que llegaría a tener Pedro Vallina (L. Álvarez Rey, «La crisis del siglo XX», en AAVV, Permanencias y cambios en la Baja Andalucía. Alcalá de Guadaíra en los siglos XIX y XX, 1995, pág,242). Gracias a ello Ramón Franco consiguió su acta como diputado, aunque luego renunció para aceptar la conseguida por Barcelona, esta vez por la candidatura de ERC. Pero a la vez que Vallina y los suyos jugaban a la «política», también llevaron a cabo para el día previo a las elecciones una insurrección que se conoce como el «complot» de Tablada. Un hecho que si no fuera por los trágicos momentos en que vivía España más parecía una ópera bufa. La idea al parecer partió del futuro candidato Franco, de Blas Infante y del propio Vallina, y no era otra que bombardear Sevilla en las vísperas de las elecciones, a la vez que se producía una insurrección anarquista que tomara el poder. Se pretendía utilizar aviones militares del aeródromo de Tablada, pintados con el lema «Andalucía Libre», siendo cargados con bombas que el capitán Rexach obtuvo de la Maestranza de Artillería. Conocido el complot por el ministro de Gobernación, Maura, envió de inmediato al Director General de la Guardia Civil, el general Sanjurjo (que un año después lideraría un intento de golpe de Estado contra la República en Sevilla) que en cuestión de horas desarticuló la bufonada. No se pudo detener a Franco ya que estaba con la pierna fracturada al caerse del escenario en un mitín celebrado en Lora del Río. Un detalle que remataba el despropósito de Tablada. 51 LA SEMANA TRAGICA Y EL COMITÉ REVOLUCIONARIO DE ALCALÁ (JULIO DE 1931). En el mes de junio de 1931 las palabras de Vallina se unieron a un clima enrarecido de conflicto social en Sevilla que la CNT capitalizó con una huelga de albañiles y que en Alcalá se extendió a los repartidores de pan. El peligro de desbordamiento hizo que la dirección de CNT enviara a Ángel Pestaña a calmar a sus compañeros (aunque los medios conservadores como ABC dijeron lo contrario) e incluso a que su órgano oficial «Solidaridad Obrera» llamara, en su edición del 16 de junio, a evitar aventuras revolucionarias (J. Maurice, El anarquismo andaluz, Barcelona, 1990, pág. 190). Sin embargo los anarquistas sevillanos, en competencia con los comunistas, se lanzaron a una huelga general que acabó en insurrección el 18 de julio y que llevó a una escala de violencia que se cobró decenas de muertos y a más de 60 detenidos (entre ellos Vallina). La contención que preconizaba Vallina se había evaporado; el centro y las barriadas sevillanas se convirtieron en un campo de batalla entre la Guardia Civil y los anarquistas que provocó que el recién nombrado Gobernador Civil, José Bastos Ansart, hombre de confianza del Miguel Maura y cercano a su partido DLR (Derecha Liberal Republicana) se aplicara con «mano dura». La situación llegó a tal extremo de gravedad que el 22 de julio, el Gobierno ordenara la intervención el ejército al mando del general de la División de Andalucía Ruiz Trillo que proclamó el «estado de guerra». Producto de ello fue la muerte de 4 detenidos por las fuerzas del orden y «cívicos» (paramilitares de derechas) en la Plaza de España al aplicar la tristemente famosa «ley de fugas». Un trágico prólogo de lo que ocurriría en otro julio, el de 1936. El epílogo de esos días de violencia fue el cañoneo (tras su desalojo, incluido los dos gatos que allí moraban) por parte del ejército del que se consideraba «cuartel general de los insurrectos»: el conocido bar de la Macarena «Casa Cornelio» (hecho totalmente falso ya que era lugar de reunión de comunistas y no de anarquistas). En palabras de Maura «la casa destripada y en escombros quedó meses y meses expuesta al pueblo, como muestra de la ejemplariedad de la justicia militar, simbólica, pero inexorable» (Así cayó…, pág. 287). En esos mismos días la prensa publicaba dos hechos legislativos fundamentales: la presentación el día 22 de julio del proyecto de Reforma Agraria por la Comisión Técnica encargada al efecto por el ministro de Justicia socialista Francisco Giner de los Ríos y la propuesta de Maura de una ley en Defensa de la República que sería finalmente aprobada el 20 de octubre. El Gobierno focalizó en Vallina al principal instigador de la revuelta y le acusó de organizar una columna de campesinos anarquistas provenientes de Alcalá que se dirigían a Sevilla a extender la revolución. El periódico madrileño La Voz publicó el 21 de julio que 8 o 10 camiones cargados de anarquistas alcalareños fueron detenidos en la Cruz del Campo por la Guardia Civil. El ABC del día siguiente reproducía unas palabras del Gobernador Bastos que afirmaba que los anarquista tenían la consigna de «pasar a cuchillo» a las fuerzas del orden. El ministro de la Gobernación envió esa noche a la Guardia Civil a Alcalá con el objeto de practicar «el desarme del pueblo de Alcalá de Guadaíra» y detener a Vallina y a los suyos (La Voz 21/7/1931). En sus Memorias Vallina desmentía este hecho y acusaba al ministro y al gobernador civil de inventar tal excusa para desarticular la CNT local. Así lo explicaba con sus propias palabras: «Me entrevisté con los militantes obreros de aquel pueblo, gente seria y de toda confianza, y les comuniqué mis temores, así como lo que sabía de los propósitos de Maura… Después de escucharme con la mayor atención, me dijeron que ellos estaban preocupados también por una cosa muy rara que ocurría, y era que habían hablado con el patrono Pedro Gutiérrez, con quien estaban en negociaciones para solucionar una huelga declarada en su industria; y a éste se le había dicho el gobernador Bastos que tenía un interés particular en que siguiera la huelga. Pedro Gutiérrez estaba muy indignado porque la continuación del conflicto, como deseaba el gobernador, le costaba mucho dinero. Entonces los allí reunidos acordaron convocar a una reunión a los representantes obreros de la región, a fin de que no tomasen parte en un movimiento de huelga general revolucionaria sin conocimiento de causa. En el momento se redactaron las convocatorias, en mi domicilio, de carácter urgente» (pág. 252). Es interesante observar como Vallina intenta demostrar su intención conciliadora y utilizando lo dicho por el patrono aceitunero (y exalcalde de la Dictadura de Primo de Rivera) Gutiérrez Calderón, acusar a las autoridades de ser las culpables del clima de tensión. Siguiendo con su relato, Vallina afirma que a espaldas suyas, en su propio domicilio de Alcalá, se preparó la huelga revolucionaria en Sevilla, destacando un tal «Calderón», obrero de la carpintería en Sevilla. Más tarde, su domicilio fue asaltado por la noche por la guardia civil, siendo detenido junto a un grupo de obreros de Alcalá, acusados de formar su «estado mayor». Vallina, junto al sindicalista comunista sevillano Adame y tres sindicalistas más fueron encarcelados en el Castillo de Santa Catalina de Cádiz (ABC 23/7/1931). Días más tarde se publicaban los 6 nombres del «Comité Revolucionario» de Alcalá: Francisco Martín Delgado, José Sánchez Ojeda, Santiago Pozas López, Manuel Cariño González, Antonio Posadas Pérez y Francisco Falcón Durán (ABC 25/7/1931). Una vez detenido dicho «Comité», Alcalá entró en un estado de «excitación» (La Voz, 21/7/1931) que provocaría el día 23 de julio la muerte de una persona y 3 heridos, al disparar miembros de la Guardia Civil a caballo a un grupo que los apedreaban en la calle La Mina a la altura del mercado de abastos (actual Plaza del Cabildo) (ABC 24/7/1931). A principios de agosto aún se observaban las consecuencias en Alcalá de los luctuosos acontecimientos al ser detenidos el chófer de Vallina, el anarquista José Cerquera Rodríguez, «Cerquerita» y dos miembros de la dirección local de la CNT: Manuel Mejías Moreno, «El Roque» y Manuel Mejías Palacios (ABC 5 y 11/8/1931). Los acontecimientos de la «Semana Sangrienta» en Alcalá y en Sevilla siguieron siendo actualidad ya que el propio Vallina envió a través de la prensa dos comunicados dirigidos a sus compañeros donde denunciaba «por mi honor y mi conciencia yo os juro que vuestra causa ha sido traicionada en Sevilla» y que la traición procedía de «falsos compañeros al servicio de personas interesadas en hacernos fracasar». Y anunciaba «muy en breve conoceréis el nombre de los traidores» (ABC 25-26/5/1932). De esto último no tenemos constancia que se produjera. Por último, casi un año más tarde los hechos seguían candentes incluso en las Cortes, cuando el diputado radicalsocialista Eduardo Ortega y Gasset (hermano mayor del filósofo) denunciaba la brutalidad de la represión gubernamental y reprobaba que se detuviera a Vallina «hombre de ideas, incapaz de comprometer a los obreros en movimientos estériles» (ABC 23/6/1931). Vallina, abandonado por sus compañeros cenetistas, sería al final defendido por la izquierda republicana, la misma con la que empezó su aventura insurreccional a principios de 1931. Vallina acabó preso del «doble juego» al que antes aludíamos entre la apelación a la «gimnasia revolucionaria» del anarquismo más radical, la colaboración con la extrema izquierda republicana y la defensa del sindicalismo apolítico. Vallina ejemplificó la tendencia al fatalismo y a la idea de martirio que durante la II República manifestó la CNT, que se planteaba como un «mundo paralelo» al mundo burgués, y que la arrastraría a la vorágine del 36. Pablo Romero Gabella Profesor IES Vía Verde (Puerto Serrano, Cádiz) 52 Caseta «Aquí no hay quién veva» Caseta «Kiosko La Plazuela» 53 ALCALÁ DE GUADAÍRA EN MI RECUERDO. UN LIBRO Y DOS PROPUESTAS E los últimos quince años Francisco García Rivero ha conseguido publicar tres voluminosos y valiosos libros, que suman bastante más de mil páginas, dedicados íntegramente a Alcalá de Guadaíra. En efecto, esta auténtica trilogía se inició en 1997 con Orígenes e Historias de Alcalá de Guadaíra, continuó con las Crónicas y Memorias de Alcalá de Guadaíra de 2006 y se cierra -por ahoracon Alcalá de Guadaíra en mi recuerdo, presentado el 4 de abril en el salón de actos de la Casa de la Cultura. En realidad, se trata de un único proyecto, una única obra meditada y reelaborada continuamente a lo largo de toda una vida con la única finalidad de conservar y transmitir la memoria, los recuerdos, no sólo del propio autor sino también y sobre todo de conservar y transmitir la memoria colectiva, la memoria social, tanto la reciente, la de las últimas generaciones, como la del pasado histórico, que no por antiguo es menos trascendente. Estos tres libros son una auténtica llamada de atención, un recordatorio permanente y consciente de lo que se suele conocer como «señas de identidad», dirigido a todos los que han nacido, vivido o se sienten vinculados a este pueblo nuestro de Alcalá. Porque estos libros y los muchos artículos que ha publicado y publica el autor tienen siempre la N escaparate@movistar.es Portada del libro realizada por Elvira Martos García familiaridad y la cercanía de un pueblo, del pueblo de Alcalá que vivió y conoció personalmente. Los libros de Curro -o quizá los libros en general- son auténticas batallas contra el olvido, contra la desmemoria, contra la ignorancia. Pretenden parar el tiempo para contarlo y para saborearlo. El mejor elogio de la palabra, el más elemental, quizá sea su valor como fijación permanente de los pensamientos y de las actividades del hombre (o mejor de las actividades humanas, como dicen ahora los manuales del lenguaje supuestamente correcto). Pero estas palabras un tanto solemnes son perfectamente válidas también para todas y cada una de las historias, crónicas, anécdotas, vivencias y recuerdos que va desgranando García Rivero en sus libros y en sus muchos artículos publicados en La Voz de Alcalá. Este último libro no es solo un libro de erudición local. Tampoco es solo un trabajo de descripción costumbrista o antropológica. Alcalá de Guadaíra en mi recuerdo es un relato vivo, libre, escrito siempre en primera persona, sin pretensiones académicas, fresco y sentimental; es un todo continuo dividido en artículos breves, que parecen pensados más para ser oídos que para ser leídos. Y nada de esto es fácil; muy al contrario. En estas páginas, en esta crónica sentimental de Alcalá, oímos hablar de algunos sucesos notables de nuestra historia, tanto de la más remota como de la más reciente, con episodios que van desde la Prehistoria, la Edad Media o la Guerra de la Independencia, hasta la Guerra Civil y la represión franquista); 609 344 567 54 y también tienen una presencia muy notable los más conocidos monumentos de Alcalá: el castillo omnipresente, origen del pueblo, los molinos del río, las enigmáticas galerías subterráneas, las calles y edificios singulares. Pero junto a la Naturaleza, la Historia, la Arqueología o el Patrimonio Monumental, nuestro autor nos va contando, nos va enseñando ese otro patrimonio -el inmaterial, el más humano, el más socialque tanto valor tiene para las señas de identidad de un grupo humano: las costumbres, las fiestas civiles y religiosas, los ruidos cotidianos, los oficios y los objetos antiguos, las denominaciones populares, el humor, las anécdotas, los personajes célebres, las curiosidades, los acontecimientos singulares. Creo que esta auténtica «labor social», esa arqueología de lo cotidiano que practica Curro es el mayor valor de su obra. Él quiere ser el testigo, el periodista, el escribano fiel de lo que observa y analiza para transmitirlo a los demás, para que no caiga en el olvido. Sus armas principales son una memoria magnífica, una curiosidad inagotable, una buena capacidad de análisis y un deseo permanente de compartir no sólo sus conocimientos y sus vivencias sino también sus pensamientos, sus proyectos y sus ideas. Otros de sus recursos, y de gran importancia, son sus buenas intenciones, la bondad de sus sentimientos, así como su defensa a ultranza de la amistad en lo personal y del civismo en lo Francisco García Rivero. Autor del libro. colectivo. En definitiva, un hombre comprometido, «positivo», que es un adjetivo que utiliza muy frecuentemente para referirse a muchos de sus amigos y conocidos, pero positivo en muchos y variados aspectos que giran en torno a Alcalá, al pueblo físico y humano, al pueblo histórico y al pueblo del presente y del futuro. Como es fácil de entender, estos fuertes amores por Alcalá sirven al autor para agudizar el recuerdo, para pensar en proyectos y propuestas dirigidas a solucionar problemas de muy diverso tipo, para el elogio y la satisfacción ante situaciones bien resueltas… y también, en algunos casos, para la indignación, si bien la indignación que puede aparecer en los escritos de Curro siempre es silenciosa, educada y constructiva. En el fondo, no deja de ser un joven «indignado y ecologista», altruista y desde luego muy positivo. Finalmente quiero dedicar las últimas de estas palabras a proponer al Alcalde y a la Corporación Municipal de Alcalá de Guadaíra que reconozcan, con la rotulación de sendas calles, los indudables méritos cívicos de dos personas que han dedicado muchos esfuerzos a este pueblo durante muchas décadas, de forma altruista, sobre todo a través de sus escritos y de sus libros. Creo que tanto Francisco García Rivero como Vicente Romero Muñoz -abogado, profesor universitario y académico- merecen con creces ese reconocimiento y lo merecen en el momento actual, mientras siguen plenamente activos y trabajando para Alcalá. Espero que el Alcalde, que asistió a la presentación y les dedicó elogiosas palabras, acoja y favorezca esta iniciativa, que a buen seguro contará con el apoyo de muchos alcalareños. Pienso que los reconocimientos de nuestras instituciones deben llevarse a cabo mientras los protagonistas están entre nosotros, como un homenaje real de los ciudadanos, como ya se hiciera acertadamente con el cardenal Amigo Vallejo y con el periodista Sánchez Araujo. Marcos Fernández Gómez 55 Caseta «La Alboreá» Caseta «La Primera a la izquierda» 56 Caseta «La más guay» Caseta «De momento no sabemos» 57 DAVID PÉREZ-CABALLERO, «UNA CIENTÍFICO ALCALAREÑO EN NUEVA YORK NUEVA GENERACIÓN DE ANTICUERPOS MEJORARÁ LA VIDA A MILLONES DE PERSONAS CON PATOLOGÍAS INFECCIOSAS» Tras su exitoso trabajo sobre el virus del SIDA, desarrolla en un laboratorio norteamericano avanzados fármacos para combatir enfermedades D ocho años, ha sido científico del Centro de Investigación del SIDA Aaron Diamond de la Universidad Rockefeller de Nueva York. Su trabajo sobre el mecanismo de acción de una proteína que bloquea la infección del VIH se ha publicado en la más importante revista científica del mundo. Hoy en día es investigador principal de enfermedades infecciosas para Regeneron Pharmaceuticals en EE.UU. Advierte que recortar en investigación y educación condenará a España a ser «un país de servicios, y no un país innovador». David Pérez-Caballero (40 años, Alcalá de Guadaíra, Sevilla) vino el pasado fin de año para ver a sus padres y hermanos: Paco, ejecutivo destinado en China, y Susana, profesora afincada en Alemania. De su apretada agenda de compromisos y visitas sacó tiempo para esta entrevista. La residencia alcalareña del científico está en un barrio de trabajadores situado junto a la A-92 y frente a una fábrica de colchones que ya hace unos meses se fue a Portugal dejando decenas de parados, y a escasos kilómetros de otra de sanitarios para el baño que también ha anunciado que se va. Él se fue hace mucho. Primero a la Universidad Autónoma de Madrid en 1996 para doctorarse cum laude en biología molecular en el Centro de Investigaciones Biológicas del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y de ahí a EE.UU, donde en la actualidad es un referente en su campo con trabajos y conferencias en las más prestigiosas revistas científicas y universidades de Norteamérica. A 6.000 kilómetros de su laboratorio neoyorkino se siente relajado y con sólo dos días de sol del sur ya ha cogido moreno en la piel. Protege sus ojos azules con unas modernas gafas, viste cómodo, calza deportivas y regala una amplia sonrisa desde su metro ochenta de altura para corresponder a esa afectividad que, dice, sólo los españoles sabemos dedicar al prójimo. En Harlem no hay pan de Alcalá, ni los inglés las 24 horas del día. Quién se lo iba a decir cuando estudio francés en secundaria y sobrevivió, no sin apuros, a las entrevistas que mantuvo con los cazadores de talentos de las universidades que se lo disputaban, Columbia y Rockefeller. URANTE David Pérez-Caballero posa junto al recinto fortificado de Alcalá de Guadaíra, ciudad en la que residió y creció junto a su familia hasta el comienzo de su tesis doctoral. dulces de la confitería La Centenaria. Tras café y mollete con tomate y aceite de oliva -también escaso en la gran manzana- se somete expectante al cuestionario. Gasta un acento andaluz correcto en el que intercala por instantes alguna vocal que le lleva a la palabra que busca, pues viene de pensar y hablar en Pregunta- ¿Qué le llevó a estudiar biología molecular? Respuesta- Siempre quise ser profesor de ciencias naturales. Me gustaban mucho los animales y quería saber cómo funcionaban por dentro. De pequeño era hiperactivo, revoltoso y desmontaba muñecas y relojes para construir coches. Ya en el instituto cuando aprobé COU, motivado por una profesora, empecé a estudiar Matemáticas. Mi idea era cambiarme a Biología, me quedé sin plaza y entré en Químicas al siguiente curso. Por fin accedí a la carrera que quería convalidando algunas materias y haciendo primero y segundo en el mismo año. Y no es que fuera de notas espectaculares, notable de media. Pasó que me fui enganchando conforme avanzaba la carrera y en optativas me atrapó la biología molecular. Alcalá, Sevilla, Madrid, Nueva York. Hoy el talento se marcha de España por necesidad, ¿también fue su caso? No me fui por necesidad. Me fui porque me apetecía a nivel personal y porque una buena carrera científica se completa con un doctorado y postdoctorado en otro país. La ciencia funciona en inglés. Al principio pensé ir a Australia, pero quedaba muy lejos; luego Gran Bretaña, pero seguía siendo Europa y probé en Nueva York. Mandé dos emails con mi trabajo y después de una conversación telefónica me invitaron a una entrevista personal. Viaje y estancia pagados y dos ofertas sobre la mesa de las universidades de Columbia y Rockefeller. Esta última fue más concreta y a la larga más exigente, y me alegro elegirles entonces, porque su laboratorio me sirvió para expandirme y publicar mucho. 58 Vd. Trabaja ahora para Regeneron Pharmaceuticals, cuyo lema es «hacer la vida mejor, luchando sin descanso para desarrollar nuevos medicamentos para los pacientes» ¿Lo están consiguiendo? Creo que si. Mi empresa tiene ahora en el mercado tres medicamentos. El más importante es uno que se inyecta en el ojo para tratar la degeneración macular (el centro de la retina) sobre todo en gente mayor. En personas de avanzada edad se puede producir un crecimiento de los vasos sanguíneos o microcapilares de la retina, dañándola y provocando la pérdida de visión en el centro del ojo. El medicamento detiene el crecimiento de esos vasos sanguíneos que intentan crecer por debajo de la retina. Regeneron tiene en desarrollo muchos más fármacos y trabaja en múltiples campos como el oftalmológico, inmunología, oncología, infecciosas y tratamiento del dolor, entre otros. Es una compañía relativamente pequeña, de unos 1.800 empleados, y que cuenta con el apoyo de un gigante como Sanofi Aventis, un laboratorio francés que financia varias líneas de investigación en las que estamos inmersos. ¿Cuál es su rutina laboral? Me desplazo a diario desde casa a Terrytown, que está a 30 millas (unos 40 km) en transporte público o con un compañero del laboratorio. Empiezo a las 8:15 y acabo a las 17:00 h, y en función de la tarea trabajo en casa leyendo artículos, documentos, presentaciones o diseñando experimentos. Por lo general, paso más tiempo en la oficina, y voy al laboratorio para supervisar. Allí tengo dos técnicos a mi cargo que tienen bastante libertad de acción. Diseño experimentos y dejo que se organicen, no estoy permanentemente encima como un jefe pesado. Eso sí, de forma periódica me siento con ellas y discuto sobre los avances en curso. También despachamos por email. Soy investigador principal en el departamento de enfermedades infecciosas y por encima de mí está mi jefa directora senior del grupo, quien depende del vicepresidente de investigaciones de Regeneron en Nueva York. ¿Se le plantean muchas dificultades para el logro de sus objetivos? Al principio del año me siento con mi jefa y le planteo los distintos objetivos para el ejercicio, así como el por- centaje de tiempo para cumplirlos. Discutimos si son adecuados y cerramos el proyecto anual, pero en general yo soy el que decide. En dos años y medio sí me he topado con la dificultad de no poder trabajar con virus peligrosos, porque precisamos de un laboratorio más seguro cuya construcción se está retrasando. Los mayores obstáculos son logísticos. También en una farmacéutica, cada vez que necesitas material proveniente de una institución académica el proceso se complica mucho por los requisitos legales. Exigen un acuerdo legal y económico y son los abogados los que lidian con estos contratos. Entre instituciones académicas sí hay una colaboración más fluida, pero entre la empresa y las universidades las colaboraciones a veces se hacen más complicadas por cuestiones puramente legales. ¿Un científico de su reputación gana lo que debe? Yo me considero bien pagado. Podría ganar más, pero no me quejo. He dado un salto cualitativo y cuantitativo. Antes estaba en una universidad, y éstas pagan poco. Fíjate que un día hablé con el doorman (portero) del edificio donde vivía y supe que ganaba bastante más que yo. En todo el mundo el científico está muy mal pagado, tienes que llegar a un nivel muy superior para alcanzar grandes sueldos. En los laboratorios el sueldo depende de dónde trabajes. Mi empresa es joven y hasta que no ha empezado a ganar dinero no ha empezado a premiar a su personal. He entrado a formar parte de un proyecto nuevo en el que me siento a gusto. El contraste entre Ilustración correspondiente al trabajo del científico sobre la proteína Tetherin que impedía escapar al VIH de la célula. Regeneron y una institución académica no es tan grande porque aquí, lejos de ser un mero eslabón de la cadena, participo en todo el proceso. Soy más padre de los proyectos, empezando desde cero. Con todo, deberías saber que si en España está mal visto preguntar a alguien cuánto gana, en EE.UU es tabú. Sus éxitos en la Rockefeller University con las proteínas bloqueadoras del VIH ¿habrían sido posibles en España? En España no hay mucha investigación molecular con el VIH, sí clínica. Pero sí, aquí los podría haber alcanzado. En este país hay muy buenos investigadores, pese a los medios limitados con los que cuentan. Fuera, los científicos españoles están muy bien considerados por su gran formación. Dicen que somos trabajadores, gente inteligente e innovadores. Al menos en el campo científico, el sistema educativo español a nivel de formación universitaria y tesis doctoral es muy bueno. Yo hice Biología en Sevilla, en una universidad pública, y el nivel era potente, con grupos buenísimos. Luego, en el Centro de Investigaciones Biológicas mi jefe era un tipo muy inteligente que ejercía una gran presión. En cuanto al SIDA, su tratamiento experimentó un punto de inflexión con el cóctel antiretroviral, un conjunto de medicamentos que mantienen al virus para que no se duplique, reduciéndose la cantidad de virus en sangre. El virus sigue ahí, y si dejas de administrar el cóctel se reactiva. Yo trabajé en la relación entre el VIH y el humano. Cuando un virus ataca al organismo, éste se defiende y el virus evoluciona para derribar esa defensa. Trabajé con dos proteínas humanas, TRIM5alfa y Tetherin, que forman parte de la defensa del organismo contra infecciones virales. TRIM5alfa básicamente impide que el virus empiece el proceso de duplicación, mientras que Tetherin bloquea la salida del virus de la célula cerrándole la puerta con una especie de correa con la que las partículas virales no pueden desprenderse de la membrana plasmática y así infectar a otras células. Desafortunadamente, el virus ha desarrollado mecanismos para combatir estos dos frentes de defensa del organismo, por lo tanto la idea es comprender esta interrelación para poder diseñar nuevos fármacos que ayuden al sistema inmune a ganar la batalla. 59 «En este país hay muy buenos investigadores, pese a los medios limitados con los que cuentan. Los científicos españoles son reconocidos fuera por su capacidad de trabajo e innovación» Ahora está desarrollando anticuerlloso de lo que hago. Estoy feliz con lo pos monoclonales humanos para traque he hecho hasta ahora y no necesito tar distintas infecciones víricas, y hasta ser famoso. Para mí el anonimato es funahí podemos leer. Dígame al menos damental. Además, el mundo científico para cuándo y para cuántas personas. no es tan amplio como algunos piensan. Los fármacos actualmente en desarroPese a las políticas de confidencialidad llo en mi laboratorio afectan a millones y la lógica cautela, todo se sabe porque de personas. No puedo especificar más la información, que otorga poder, acaba por problemas de confidencialidad pero circulando ¿Mi sueño? Que la investigasí te puedo contar que estos anticuerpos ción en la que trabajo salga adelante, permitirán tratar distintas infecciones vaya al mercado y beneficie a los pacienvíricas, y estamos desarrollando estos tes. Ahora estamos en una fase crucial fármacos gracias a ratones transgénicos de ensayos clínicos para que una nueva producidos en Regeneron. La empresa generación de anticuerpos mejore la calibusca un beneficio económico y nosotros, dad de vida de muchas personas con patolos científicos, además de ganarnos la logías infecciosas. vida tenemos la esperanza de repercutir ¿Cómo ve el futuro de la investigaen la calidad de vida de los pacientes. ción relativa a la lucha contra el cánMe he llevado ocho años ejerciendo una cer? investigación básica que no generaba No soy experto en cáncer, pero sí te un beneficio a corto plazo, aunque sí una puedo decir que en este terreno la mediacumulación de conocimiento necesaria cina ha sufrido un cambio radical. Ahora para innovar a largo plazo. Ahora, lo creo que mis trabajos sean de la origi- hay fórmulas específicas y más exactas, que producimos sí está más próximo al nalidad y el impacto en el conocimiento con tratamientos a la carta que mejoran paciente, es más práctico e inmediato, que se requiere para eso. No necesito este los resultados. Se ha evolucionado muchíporque con las lógicas limitaciones tipo de reconocimiento para estar orgu- simo gracias a marcadores genéticos, sabemos que nuestro esfuerfármacos con menos efectos zo tendrá un impacto directo secundarios y una radioteraJamón, aceite de oliva y la revisión por pares en la vida de la gente. pia más localizada que antes. David sabe que las cosas bueA mucha gente le cuesta Se están produciendo avances nas son el premio a la tenacidad y entender que la tecnología impensables hasta hace muy el esfuerzo. Siempre se lo inculcaen sistemas de comunicación, poco con un mayor índice de ron sus padres y así se lo dice la por ejemplo, vaya muy por supervivencia entre los pacienpropia experiencia. Menciona con regusto el artículo que firmó a delante de la investigación tes. Aunque yo sólo me dedifinales de 2009 en la revista Cell, médica. co a enfermedades infecciola más prestigiosa del mundo sobre No es exactamente así. sas, mi empresa tiene en la las ciencias de la vida y biología Comprender los procesos biooncología una de sus líneas molecular que publica mediante la lógicos requiere más tiempo prioritarias para el desarrorevisión por pares (peer review en que los tecnológicos. En reallo de proyectos. inglés). También denominado arbitraje o revisión comunitaria, es un lidad los avances en tecnoloHecho y contestado el método usado para validar trabagía tienen un mercado a corto cuestionario, David disfruta jos escritos y solicitudes de finanplazo con un brutal retorno de una cervecita con añoraciación con el fin de evaluar su calidad, originalidad, factibilide la inversión. Las investidos altramuces en el velador dad y rigor científico antes de su publicación, a cargo de varios gaciones médicas no tienen soleado de un bar de Alcalá. científicos de rango semejante o superior al del autor. «Resulta un efecto tan sincrónico porJusto al lado, decenas de percasi tan difícil -asegura- como disfrutar de nuestro jamón ibérico en EE.UU. Con el aceite de oliva es más fácil, aunque allí es que requieren procesos más sonas entran y salen de una muy caro y el que compro o me traigo de España lo administro pausados, y entonces las admifarmacia, totalmente ajenas en pequeñas dosis, como si de un codiciado elixir se tratase». nistraciones cortan las vías de de tener al alcance de sus Además de Cell, ha firmado artículos y ensayos en sciencedifinanciación sin dar oportumanos a un antiguo convecirect.com, Journal of Virology, PNAS (Academia Nacional de nidad a esas consecuencias no convertido en uno de los Ciencias de EE.UU), la revista PLoS Pathogens y en The prácticas. científicos silenciosos del American Journal Humans Genetics, entre otras. Advierte que en su carrera nadie le hizo regalos y ha encontrado su sitio con En parte ha seguido la mundo. Alguien que encoesfuerzo, capacidad de adaptación y mucho sentido práctico. senda de D. Severo, ¿cuál mienda su tiempo y su talen«Salir de tu tierra no es fácil, supone desmontar tu vida en un es su sueño en el campo de to a mejorar nuestra salud y lugar y montarla en otro, con distinto clima, idioma y cultura. El la investigación médica? esperanza de vida. primer año hice la maleta cuatro veces, ahora llevo 10 en EE.UU No, para nada. Lo que y estoy a gusto. Podría volver, pero la oferta tendría que ser muy Francisco Javier yo he hecho lo hace mucha buena». Maestre Caballero gente. Nobel no porque no 60 P ARECE que fue ayer y ya han pasado más de veinte años. Corrían los primeros días de enero del año 1993 cuando un grupo de jóvenes alcalareños se embarcaban en la difícil aventura de caminar en solitario por el apasionante mundo de la música. Aunque en sus orígenes bebieron del Coro del Rocío, eran años de cambio. Años en los que el «formato de grupo» tipo «Siempre Así» se imponía como un soplo de aire fresco en el panorama musical andaluz y, coherentes con sus inquietudes de buscar nuevos sonidos y ampliar horizontes musicales y artísticos, diez amigos se unieron con el reto de formar algo nuevo y distinto. Por ello, si alguna palabra define el comienzo de Atalaje fue la ILUSIÓN. Ilusión que, alimentada con duro trabajo, pronto comenzaría a dar sus frutos. Aún recuerdo cuando ese primer año nos contrataron como grupo fijo en la caseta de la Cadena Cope, en la Feria de Sevilla. Todos trabajábamos o estudiábamos, y, sin embargo, no sé cómo lo hacíamos, pero cumplíamos religiosamente con nuestro compromiso del pase de medio día y el pase de por la noche en la caseta. Anécdotas hubo miles, como poder llegar casi a las puertas de la Feria en mi Renault 5, pudiendo aparcar hasta encima de la acera en República Argentina -algo impensable hoy día- o cantar con las abuelas del Betis, y conocer a todos los grandes artistas y personalidades que pasaban por allí. No lo haríamos muy mal porque, al año siguiente, volvieron a contratarnos. Esa ilusión hizo que todos nuestros esfuerzos se centraran en producirnos nuestro primer disco: De colores (1994). Con su lanzamiento, Atalaje comienza a ser un grupo conocido en el mundo de las sevillanas; a sonar en emisoras nacionales, como Cadena Dial, Radio Olé, etcétera; a recorrer con nuestra música toda Andalucía, y conseguir actuar en el extranjero. Dos puntos geográficos serán un referente en la historia del grupo: Miami y Marruecos. Feria de Sevilla en Miami, ¡toda una experiencia. ¿Os imagináis lo que supuso representar a España en una Feria de Sevilla montada en Key Biscayne, donde los jinetes eran una fusión entre cowboys y flamencos de Jerez? El son cubano se confundía con el compás de ATALAJE, VEINTE AÑOS JUNTOS Primera foto del grupo Atalaje en 1993 realizada en el Cortijo Olivera. De izquierda a derecha: Vicente Fernández, Antonio Alcoba, Carlos Rodríguez, Maribel Benítez, Conchi Vargas, Sara Núñez, Macarena Benítez, Jesús Gormaz, José Alberto Iglesias y Manuel Casado. nuestras sevillanas y hasta la mismísima Celia Cruz se arrancaba con nuestros cantes. Inolvidable fue también la noche con Julio Iglesias Jr. y Gloria Estefan, aunque será fundamentalmente el cariño del pueblo cubano y su gran acogida el motivo que nos hiciera regresar a Miami durante cuatro años consecutivos (19941997). Marruecos fue otra historia. De las fiestas que vivimos en el Reino de los sentidos destacaría la experiencia que supuso cantar La Tarara con la Orquesta Andalusí de Tánger, hacer bailar a la famosa chica Bond, Grace Jones y hasta la felicitación del mismísimo príncipe, hijo de Hassan II, tras una boda que cantamos en Casablanca. Tras Marruecos vendría Portugal y toda la geografía andaluza, hasta que en el año 1995, a raíz de la grabación de nuestro segundo disco Canalla (1995), aparece Pascual González. La experiencia con el Cantor de Híspalis fue imborrable. Todo un lujo colaborar en sus discos, programas de televisión, participar en la gira Yo vengo de Andalucía y, aparte de componernos y producirnos nuestro tercer disco Alegría (1996), lo realmente importante fue contar con su cariño y apoyo incondicional. Como apoyo el que recibimos también de Fran Sonido (hijo), produciendo nuestro cuarto disco A conciencia (1998) o de la firma «Pasarela» con el lanzamiento de Eurovisión por rumbas (1999). También imposible olvidarnos de Antonio Algarrada (cuando lo conocimos era técnico de sonido en los estudios Alta Frecuencia), quien nos contagió la ilusión de recrear Una noche en el camino y montones de producciones más. El grupo se consolidó, creció, y así podría continuar hasta escribir un libro, porque sería imposible encerrar en unas líneas las vivencias, actuaciones, viajes y experiencias a lo largo de estos últimos veinte años. Pero, tras hacer balance, la mayor satisfacción que me queda es lo que con mis humildes palabras reflejo en un fragmento del Pregón: Hoy quisiera cantarte, Atalaje de mi alma, sentir de nuevo tu llama que perdure por los tiempos, que veinte años no es nada, y aunque quede en el recuerdo que hubo un grupo en Alcalá que brilló por su alegría, su arte y saber estar el tesoro que me llevo es cariño sin igual de este Atalaje sembrao con amigos de verdad. Manuel Casado Trigo Pregonero de la Feria 2013 de Alcalá de Gra.