MAPA DE ROMA, 1575, BRAUN AND HOGENBERG,CIVITATES ORBIS TERRARUM The Hebrew University of Jerusalem & The Jewish National & University Library. CAPÍTULO 1. EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE. Universidad de Cádiz. El agua es esencial para el desarrollo de la vida, como lo es el aire y los alimentos, y tiene enorme transcendencia en el desarrollo de las poblaciones humanas. Egipto en la Antigüedad nunca hubiera sido lo que fue sin ese don que es el Nilo, irrigando con sus periódicas inundaciones las tierras adyacentes a sus orillas. Hoy no podríamos hablar de las diversas civilizaciones y culturas que se sucedieron en Mesopotamia si no fuera por los ríos que vascularizan su amplísimo territorio, el Tigris y el Éufrates. Y el mundo griego y Roma fueron lo que fueron, desde una perspectiva histórico-cultural, gracias al aprovechamiento que del agua hicieron. Todas estas civilizaciones desarrollaron sus particulares técnicas para un mejor aprovechamiento del agua que redundó a la larga en su consolidación y crecimiento e hizo de ellas la punta de lanza y motor de las tierras y poblaciones de su entorno inmediato y no tan inmediato. Buena prueba de ello lo tenemos en la civilización romana, en la que nos detendremos, que gracias a la puesta en práctica de la ingeniería hidráulica consiguió crecer y consolidar su posición como potencia hegemónica en Italia (el dominio del agua permitió un desarrollo sostenible de su población), y extender el bienestar y el crecimiento en los territorios que fue conquistando y a medida que consolidaba el control sobre los mismos. De una u otra forma las construcciones hidráulicas romanas están muy unidas al devenir histórico La captación, los usos y la administración del agua en Baetica 13 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE del pueblo romano, por lo que parece oportuno ofrecer el relato de la conquista del agua que Roma consiguió desde que abandonara sus cabañas en el poco saludable Lacio. En el siglo VIII a.C. Roma no pasaba de ser una aldea colgada de las laderas de las colinas en torno al Tíber mientras al Norte se desarrollaba una brillante civilización, la etrusca, y en el Sur comenzaban a desembarcar grupos de emigrantes griegos que crearon un rosario de colonias en sus costas e isla de Sicilia sobre todo. Habrá de transcurrir un lapso temporal grande antes de que Roma emprenda la construcción del primero de sus acueductos. Esto fue en el año 312 a.C. Regiones de Roma. En rojo el crecimiento serviano, en negro el recinto aureliano. Fuente: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Plan_Rome-_Servische_Muur.png#filehistory. Para esos años, finales del siglo IV, Roma había dejado de ser una aldea con sus cabañas alojadas en las laderas de las colinas que asomaban al Tíber, rodeada por brillante civilización que desarrollaban las ciudades etruscas por el Norte y el creciente poderío de las ciudades griegas por el Sur. Durante esos cinco largos siglos los romanos habían drenado el valle fluvial a su paso por Roma, emergió como ciudad, llegó a formar parte de la 14 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. confederación latina, y para el año 338 se hizo con su control, lo que le permitió su disolución para a continuación someter a sus poblaciones e imponer a sus hombres obligaciones y derechos. Diez años después sometió a las ciudades etruscas y a las principales y ricas ciudades de la Campania. Las guerras, los endémicos enfrentamientos con sus vecinos, hicieron de Roma una ciudad con recursos, pero también con necesidades derivadas del aluvión inmigratorio que hubo de soportar como consecuencia de las mejores condiciones de vida que ofrecía la ciudad a los latinos que, en virtud de los derechos de que gozaban en Roma gratuitamente concedidos por los romanos, a ella habían emigrado. Una de estas necesidades era el agua. Ya no bastaban, para el crecimiento demográfico que soportaba, con las cisternas y aljibes para las aguas pluviales y los pozos explotando los acuíferos. Y recursos no le faltaban pues las guerras resultaban económicamente rentables. Aqua Appia. Fuente: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Aqua_appia_planrome.PNG. En el año 312 un principal magistrado de la ciudad, el censor Apio Claudio el Ciego, impulsó y comenzó la primera traída de aguas a la ciudad, conocida como Aqua Appia (el La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 15 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE término usual romano para denominar un acueducto es Aqua, llamada en este caso Appia por el promotor del mismo) 1 . Los manantiales se hallaban en una propiedad de Lúculo (in agro Lucullano) a la vera de la vía Praenestina (Porta Maggiore), entre los miliarios séptimo y octavo. El descubridor fue su colega en la censura Gayo Plautio, y por ello recibió el cognomen de Venox, el cazador, pero no le alcanzó la gloria de que el acueducto llevara su nombre pues abandonó la censura antes de expirar los dieciocho meses del cargo 2 . El trayecto desde la captación de sus aguas subterráneas hasta las puertas de la ciudad en Porta Capena tiene una longitud de 11190 pasos, que equivale a 16561 metros, de los cuales discurren sobre substructiones y arcuationes tan sólo 60 a partir de Porta Capena. Ya en Porta Capena aflora el agua y llega hasta Porta Trigemina. Carecía de piscinas depuradoras 3 , por lo que habría que pensar que a partir de las proximidades de Porta Trigemina, a los pies del Aventino, al pie de la cuesta de Publicio, en el lugar conocido con el nombre de las Salinas, el agua fuese a parar directamente a los veinte depósitos de distribución de los que habla Frontino desde los que llegaría el agua a las regiones II, VIII, XI, XII, XIII y XIV 4 . Se llamaba el lugar Salinae porque era el punto en que desembarcaban en Roma la sal que procedía de Etruria 5 . Una obra hidráulica de envergadura, con un caudal de unos 75537 m3 diarios (1825 quinarios), y además su construcción, subterránea y sobre la superficie, es manifestación de que los romanos contaban con técnicas de ingeniería y personal cualificado, libratores y architecti, adecuados para emprenderla. Las mismas técnicas y el mismo personal cualificado que hicieron posible, ese mismo año, el trazado de la calzada que unía Roma con la Campania, con prolongación a Venusia (año 291), Tarento (año 281) y Bríndisi (año 264); la via Appia, promovida por el mismo magistrado que mandó ejecutar el primero de los acueductos de que se dotó Roma 6 . Liv. IX 29,6; Front., Aquaed. IV-VII, IX, XVIII, XXII, LXV, LXXIX, CXXV; Plin., N.H XXXVI 121. Front., o.c., V, 2-3. 3 Front., o.c., XXII 1-3. 4 Front., o.c., LXXIX, 2. 5 Front., o.c., V; Liv., XXV, 47. 6 Liv. IX 29; Strab., V, 3, 9 la califica de una de las más célebres calzadas romanas. 1 2 16 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. En el año 144, y al compás del trazado de un nuevo acueducto, el cónsul Q. Marcio restauró Aqua Appia, dañado como se encontraba y porque particulares hacían uso ilegal y fraudulento de sus aguas 7 . Será objeto de una nueva reconstrucción en el año 33 a.C., por hallarse en estado ruinoso, y su ejecutor fue Agripa 8 . Al cabo de pocos años, entre el 11 y el 4 a.C., se hizo necesaria de nuevo la intervención en él, y en otros acueductos. Augusto había prometido reparar los canales, conducciones y arquerías (riui, specus, fornices) de los acueductos que lo necesitasen, y el senado adoptó una serie de medidas legales para llevar a cabo la promesa imperial 9 . Décadas después de que se construyese Aqua Appia, en el 272, se ejecutó el trazado de un segundo acueducto. El acontecimiento más importante, tras la anexión de las ciudades etruscas y de la feraz Campania con sus ciudades en el 328, fue la conquista de las ciudades griegas, rosario de riqueza en la bota de Italia, tras el desenlace de la guerra mantenida con ellas desde el 282 hasta el 274 y dirigida por el condotiere Pirro rey del Epiro. La riqueza afluye a Roma a chorros, hasta el punto de que el acueducto fue sufragado ex manubiis de Pyrrho captis, esto es, el dinero que se apropian, el producto de la venta de prisioneros de guerra, de la alienación de tierras, etc. 10 , y Roma comienza a convertirse en una potencia comercial; no en vano por esos años se inician las primeras acuñaciones de moneda. El acueducto Anio Vetus -así se llamaba- lo promovió el censor Manlio Curio Dentado 11 , captando sus aguas del río Anión, que nace por encima de Tíbur, a ocho millas de esa ciudad, y tiene una longitud de 43000 pasos, de los que 42779 discurren bajo tierra y 221 sobre substructiones. Recibió el sobrenombre de Vetus cuando se iniciaron las obras de otro nuevo acueducto, el Anio Novus, que tomaba las aguas del mismo río, en los reinados de Calígula y Claudio. Front., o.c., VII, 1. Front., o.c., IX, 9. 9 CIL VI, 1244; Front., o.c., CXXV. 10 Front., o.c., VI, 1. 11 Front., o.c.., IV, 6-7, IX, XIII, XVIII, XXI, LXVI-LXVII, LXXX, XC-XCII, CXXV; Plin., N.H. XXXVI 121. 7 8 La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 17 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE Con su construcción podía satisfacerse la creciente necesidad de agua derivada del crecimiento demográfico de la ciudad (aportaba un caudal diario de 4398 quinarios equivalentes a unos 182033 m3 en el caput aquae, aunque a la ciudad sólo llegaban 1541 quinarios) 12 . Las reformas que efectuó Frontino en la conducción por mandato del emperador hicieron que sus aguas perdieran la salubridad de antaño, por lo que se dedicaban al riego de jardines y servicios urbanos varios. Con esos abastecimientos de agua Roma aguantó más de un siglo, hasta el 144. Anius Vetus. Fuente: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Aqua_aniovetus_planrome.PNG. El castellum aquae se hallaba traspasada Porta Esquilina 13 y a través de 35 castella en el interior de la ciudad abastecía de agua a las regiones I, III, IV, V, VI, VII, VIII, IX, XII y XIV 14 . Fue objeto de reparaciones en el 144 a.C., al igual que también lo fue Aqua Appia y por las mismas razones 15 , y de nuevo en el 33 a.C. y entre el 11 y 4 a.C. 16 Front., o.c., LXVI, 1-2. Front., o.c., XXI, 3. 14 Front., o.c., LXXX, 2. 12 13 18 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. En el año 144 se dotó la ciudad de un tercer acueducto, uno de los más importantes de los que tuvo. Para esos años era una potencia militar y se hallaba implicada en la historia del Mediterráneo. Había guerreado contra los cartagineses y había destrozado la república de Cartago, arrasando la ciudad en el 146. En ese mismo año destruyó Corinto tras vencer a la confederación o liga aquea, y Macedonia había pasado unos años antes a ser provincia romana. En este marco histórico se construyó Aqua Marcia, contando Roma con ingentes recursos económicos generados por sus ahora propiedades en África y en Grecia, y para dar agua a un flujo inmigratorio no sólo ya de latinos, sino también de población procedente de ciudades itálicas 17 . El historiador latino Livio y Plutarco advierten de la escasez de agua que había entonces en Roma. Además, los acueductos Appia y Anio Vetus estaban deteriorados y las tomas fraudulentas de agua por parte de particulares habían disminuido sensiblemente el caudal que había de llegar a la ciudad, como ya hemos dejado dicho. A esta situación respondió el senado ordenando a un principal magistrado, el pretor urbano Quinto Marcio Rex, que procediera a las reparaciones de ambos acueductos y a la represión del fraude del agua. Así lo hizo, pero Roma seguía necesitando de más agua, por lo que se le encargó la construcción de este tercer acueducto, Aqua Marcia. Ciento ochenta millones de sestercios fueron los que destinó el Senado para su ejecución, según decía Fenestella 18 , que posiblemente salieron de los expolios a los que sometió a Cartago y Corinto. Eran tan buenas sus aguas que Plinio decía de ellas que eran un regalo de los dioses para la ciudad, deum munera urbi tributa 19 , mientras Marcial alababa su excelencia: quae tam candida, tam serena lucet ut nullas ibi suspiceris undas 20 , al igual que lo hizo Frontino 21 . Aqua Marcia fue objeto de diversas restauraciones a lo largo de los siglos. Acometió reparaciones Agripa en el 33 a.C. 22 , Augusto en los años 11-4 a.C. 23 , Tito 24 , Trajano, Adriano, Front., o.c., VII, 1-2. Front., o.c., IX, 9. 17 Front., o.c.., IV, VII, IX, XII-XIV, XVIII-XIX, LXVII-LXVIII, LXXII-LXXVI, LXXXI, LXXXVII, LXXXIX, XCIXCIII; Plin., N.H. XXXVI 121, que introduce erróneamente Aqua Tepula, construido en el 127; XXXI 41; Strab., V 3, 13; Vitr., V 3, 1 18 Fr. 10; Front., o.c., VII, 5; Plin., N.H. XXXVI, 121. 19 N.H. XXXI, 41. 20 Mart., Epigr. VI, 42, 19-20. 21 O.c., XCI, 5. 22 C.D. XLIX 42, 2. 23 CIL VI 1249b; Aug., R..G IV, 20. 24 CIL VI, 1246: Rivom aquae Marciae vetustote dilapsum refecit. 15 16 La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 19 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE Septimio Severo y Caracala 25 , entre otros. De todos ellos quien más intervino en el acueducto fue Caracala, quien mandó efectuar algunos nuevos túneles, añadió otro manantial, fons Antoninianus, sin duda en relación con la construcción de un ramal a partir del miliario III de la via Latina a las termas que llevan su nombre. Será la futura Aqua Antoniniana. Aqua Marcia. Fuente: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Aqua_marcia_planrome.PNG. Aqua Marcia capta las aguas principalmente de manantiales aguas arriba del río Anio. Sus aguas se mezclaron con Aqua Tepula y Aqua Iulia, cuando se construyeron esos acueductos, a partir del miliario VII de la via Latina, y juntas llegaban hasta las proximidades de porta Praenestina. De aquí circulaban hasta porta Tiburtina y porta Collina, en cuyo interior se hallaba el castellum aquae, próximo a las futuras termas de Diocleciano, tras un recorrido de 61710 pasos de los que 5427 lo hacían bajo tierra y el resto mediante substructiones (528 pasos) y arquerías (6935 pasos), con un caudal estimado en cabecera de 4690 quinarios diarios equivalentes a unos 194119 m3. 25 CIL VI, 1245: Aquam Marciam variis kasibus impeditam purgato fonte excisis et perforatis montibus restituta forma adquisito etiam fonte novo Antoniniano in sacram urbem suam perducendam curavit. 20 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. Dentro de la ciudad el ramal principal abastecía de agua a las regiones próximas al castellum aquae, recibiendo también sus aguas el Capitolio, el Celio y el Aventino; colinas estas dos últimas que recibirían el agua del Aqua Claudia cuando ésta fuese construída. Poco menos de veinte años después, en el 125, contó Roma con un nuevo acueducto, Aqua Tepula. Para entonces, y como continuación de su implicación en los asuntos griegos, Átalo rey de Pérgamo, a su muerte en el año 133, había dejado en herencia al pueblo romano el reino, para poco más tarde, en el 129, convertirlo Roma en provincia, la provincia de Asia; un mercado de extraordinarios recursos en beneficio del pueblo romano. Aqua Tepula. Fuente: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Aqua_tepula_planrome.PNG. Se inició la construcción del nuevo acueducto bajo el mandato de los censores Gneo Servilio Cepión y Lucio Casio Longino, captando sus aguas de los montes albanos, en la heredad de Lúculo, ex agro Lucullano, próximo al décimo miliario de la via Latina en territorio tusculano 26 . Debido a su templada temperatura se denominó Tepula, y penetraba en Roma, aportando un caudal diario de 445 quinarios equivalentes a unos 18418 m3 –de los cuales 92 26 Front., o.c.., IV, VIII-IX, XVIII, XIX, LXVII-LXIX, LXXXII, CXXV. La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 21 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE quinarios los recibía del Aqua Marcia y 163 los recibiría del Anio Novus cuando éste se construya-, en un specus o canal sobreimpuesto al Aqua Marcia por Porta Praenestina, abasteciendo a las regiones II, III, V, VI, VIII, X y XII por medio de diecisiete castella. Aqua Tepula fue reparada por el Senado y a expensas del emperador Augusto 27 . Agripa, en el año 33 a.C., mezcló sus aguas con las del Aqua Iulia, acueducto que construyó entonces. Hemos de esperar casi un siglo para saber de un quinto acueducto, Aqua Iulia. Roma es la potencia única e indiscutible del Mediterráneo, de los territorios y reinos adyacentes. La política de conquistas, que deviene imperialista desde la primera mitad del siglo I a.C., ha deparado ingentes recursos, como venimos diciendo, ha provocado también un incesante flujo inmigratorio a la ciudad con todas las consecuencias sociales que entraña si no se conduce bien (y no se condujo bien) la nueva situación, ha provocado igualmente el malestar entre los aliados itálicos que activamente participaron en las guerras de conquista pero sin embargo no participaron en la misma medida de los beneficios que reportaron, ha enriquecido a determinadas familias romanas quienes mediante políticas intervencionistas y proteccionistas han arruinado al campesinado, provocando la aparición de proletarios y su masiva inmigración a la ciudad. El resultado fue las luchas facciosas por el control del poder, lideradas por prominentes familias que se valían para sus intereses de las masas desheredadas, el resquebrajamiento de las instituciones romanas, la desaparición de la República como forma de gobierno y el advenimiento de un Nuevo Orden, el Principado, cuyo artífice fue Octavio Augusto. Roma soporta en tan transcendentales años una población ingente a la que hay que alimentar y dar agua, y en el año 33, en plena ruptura del orden constitucional republicano, y cuando Octaviano (todavía no ha tomado el nombre de Octavio Augusto) se apresta a defender sus intereses frente a Marco Antonio, encarga a su hombre de confianza y futuro yerno Marco Agripa la construcción de un nuevo acueducto, Aqua Iulia, así denominado por pertenecer el futuro emperador a la familia Julia 28 . Aqua Iulia toma sus aguas de un conjunto de veneros en el miliario XII de la vía Latina, en el ager Lucullanus, dos millas aguas arriba del nacimiento de Aqua Tepula, en territorio tusculano. En el miliario VII, en la zona denominada actualmente Capannelle, sus aguas se 27 28 Front., o.c., CXXV. Front., o.c., IV, IX, XVIII, XIX, LXVIII-LXIX, LXXVI, LXXXIII, CXXV. 22 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. unen a las del Tepula con las que comparte la piscina limaria y, una vez depuradas, desde allí discurren juntas hasta las proximidades de Roma sobre las arcuationes de Aqua Marcia. Aqua Iulia. Fuente: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Aqua_iulia_planrome.PNG. Su longitud es de 15426 pasos, discurriendo en superficie desde la piscina limaria en el miliario VII por espacio de 7000 pasos de los que 528 son por substructiones y 6472 mediante arcuationes. Aportaba un caudal de 1206 quinarios, equivalentes a unos 49916 m3 diarios, a los que hay que añadir los que recibirá, próximo a la ciudad y pasados los jardines de Palas 29 , del Aqua Claudia cuando se construya este nuevo acueducto, 162 quinarios, lo que hace un total de 1368 quinarios de los que aportará 993 a Aqua Tepula 30 . En las proximidades de porta Praenestina se depuran sus aguas en una piscina limaria para salir por canales distintos y sobre las mismas arcuationes para su distribución en Roma. Las 29 30 Se hallaban entre la via Collatina y la via Prenestina. Front., o.c., LXIX. La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 23 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE aguas de Iulia por el canal superior, por el inferior las del Marcia y entre ambos discurren en otro canal las del Tepula. Desde porta Praenestina llega a porta Tiburtina, y de aquí a porta Viminalis en cuyas proximidades de halla el castellum aquae que a través de 17 castella distribuye el agua por las regiones II, III, V, VI, VIII, X y XII: el Celio, Esquilino, Viminal, Quirinal, los Foros, Capitolio, Palatino y parte del Aventino. Otro ramal terminaba cerca de porta Collina, mientras que un tercero lo hacia al SE del Viminal. Porta Tiburtina. G. Piranesi, Antichita Romanae, 1748, vol. 1, fig. I (tav. XI). Frontino tiene constancia de que hubo tomas fraudulentas de agua en la vecindad del Celio y del Aventino, y ya Celio Rufo 31 , en una contio de aquis recriminaba los vitia de que eran objeto las canalizaciones de agua que, de modo fraudulento, irrigaban campos, se utilizaban en tabernae y en las casas vecinales, cenacula. El Aqua Iulia hubo de ser reparada 20 o 30 años más tarde por Octavio Augusto, mientras Agripa hubo de reparar, como ya hemos dicho, los acueductos Apia, Anión y Marcia. 31 Amigo de Cicerón, y de quien hablan Suetonio (de claris rhetoribus) y Quintiliano (I.O. LIV, 2, 1), fue cuestor, tribuno de la plebe, edil curul y pretor, y en función de sus cargos hubo de encontrarse en la necesidad de pronunciar ese discurso sobre las aguas y los acueductos. 24 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. Aqua Virgo. Fuente: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Aqua_virgo_planrome.PNG. Trece años después de haber ejecutado la conducción de Aqua Iulia, construyó un nuevo acueducto, Aqua Virgo (año 19) 32 . Cuenta Frontino que una doncella –de ahí el nombre de virgo dado al acueducto según él- mostró a unos soldados que andaban buscando agua unos veneros, y en recuerdo de ese momento se erigió una aedicula y una pintura en el lugar 33 . Pero acaso el nombre le viniera porque fue inaugurada el 9 de Junio, en que se celebraba los Vestalia, día feriado de culto a la diosa Vesta, o como dice Casiodoro debido a que eran unas aguas muy puras 34 . Toma sus aguas en una zona pantanosa en las proximidades del miliario VIII de la vía Collatina, in agro Lucullano, y aumenta el volumen acuoso con otros manantiales que encontraba a su paso. Su longitud era de 14105 pasos de los que 450 eran sobre substructiones y 700 sobre arquerías, el resto bajo la superficie, y tenia un caudal estimado en 2504 quinarios equivalentes a unos 103640 m3 diarios. Seguía la vía Collatina para girar en un momento dado 32 Front. o.c., IV, X, XVIII, XXII, LXX, LXXXIV; Plin., N.H. XXXI 42, XXXVI 42 en donde atribuye erróneamente su construcción al 33 a.C. y su asociación con el riuus Herculaneus. 33 O.c., X. 34 Casiod., Variae VI, 3: currit aqua Virgo sub delectatione purissima, quae ideo sic appellata creditur. La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 25 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE bruscamente hacia el Norte y tras describir un gran arco atraviesa las vías Nomentana y Salaria para alcanzar los jardines de Lúculo en el Pincio, donde comienzan las arcuationes. Atraviesa la vía Lata (El Corso) y de aquí llega hasta los Saepta, ya en el campo de Marte. Satisfacía sobre todo las necesidades de agua del Campo de Marte y de las termas que el mismo Agripa mandó construir, y de las que el Panteón era el vestíbulo de entrada, por medio de 18 castella a partir del castellum aquae situado a occidente de los Saepta. Piscina limaria de Aqua Virgo. R. Fabretti, De Aquis et Aquaeductibus veteris Romae Dissertationes tres, Romae 1680, Diss. II, pag. 125. Carecía de piscina limaria, pero en tiempos de Hadriano se construyo una de considerables dimensiones bajo el Pincio, en las proximidades de Piazza di Spagna. Es una construcción con cuatro cámaras abovedadas dispuestas en dos pisos y conectadas mediante aberturas verticales y horizontales. Aqua Virgo fue restaurada por Constantino 35 , y Procopio cuenta que en el 537 los godos intentaron penetrar en la ciudad utilizando el tramo subterráneo en el Pincio una vez que desviaron sus aguas a otros acueductos 36 . 35 CIL VI 31564. 26 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. Además de estos acueductos, Agripa reconstruyó Aqua Appia, Anio Vetus y Marcia, 37 casi en ruinas ya, además de embellecer la ciudad con importantes obras hidráulicas, incluidos los baños por él construidos y ya mencionados 38 . Aqua Alsietina. Fuente: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Aqua_alsietina_planrome.PNG. Reinando el emperador Octavio Augusto, mandó éste construir un nuevo acueducto, Aqua Alsietina, también denominada Augusta -como el primero de los acueductos que tuvo la ciudad de Córdoba: Aqua Augusta-. 39 Procedían sus aguas del lago Alsietino (Lago di Martignano, al NNO de Roma) con aportaciones del lago Sabatino (Lago di Bracciano) cerca de Careiae, a seis millas del miliario XIV de la via Claudia, y tras un trayecto de 22172 pasos, de los que sólo 358 eran sobre arquerías, y un aporte de agua de 392 quinarios equivalentes a unos 16224 m3 diarios, iba a parar a un castellum para desde él satisfacer las necesidades de agua de la naumaquia que ese mismo emperador hizo construir en el Trastévere con motivo BG II, 8, 1-11. Front., o.c., IX. 38 Plin., N.H. XXXVI, 121; C.D. XLIX, 42-43. 39 Front., o.c., IV, XI, XVIII, XXII, LXXI, LXXXV. 36 37 La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 27 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE de la dedicación del templo a Marte Vengador en el año 2 a.C. 40 Era un agua no apta para el consumo humano, por eso su destino para la naumaquia, y el agua sobrante se dedicaba para la irrigación de los jardines adyacentes y para uso de los particulares como agua de riego. Sólo cuando por reparaciones en la red de distribución de agua faltaba ésta en la zona transtiberina, se desviaba para surtir las fuentes públicas. Durante el reinado del emperador Calígula (37-41) se comenzó la construcción de dos nuevos acueductos. Roma había crecido, los establecimientos balnearios -importación helenística debida a Agripa- tanto públicos como privados comenzaban a levantarse y proliferar en la ciudad, las personas de sustancia no se privaban de los nuevos refinamientos puestos en solfa cuando no criticados por Horacio y Séneca- 41 e instalaban en sus domus estancias balnearias. A todo ello hay que añadir nuevos y grandiosos espacios públicos templos, teatros, ninfeos, jardines. Inmediata consecuencia de tan esplendoroso desarrollo urbano fue la necesidad de más agua. Será el emperador Claudio quien finalice ambos proyectos en el año 52 42 . Uno de estos acueductos recibió el nombre de Aqua Claudia 43 . Procedían sus aguas de los manantiales Cerulo y Curcio, junto al miliario XXXVIII de la vía Sublacensis en el valle del Anión, a tan sólo 100 pasos aguas arriba del nacimiento del Aqua Marcia, cerca de Agosta, y recibía también las aguas del manantial Albudino; aguas muy saludables y comparables a las del Aqua Marcia. Al Aqua Claudia fueron a parar también las aguas de la fons Augusta -una derivación de agua al Aqua Marcia para complementar su caudal, obra de Octavio Augusto- 44 cuando el Aqua Marcia no podía absorber sus aguas. Tras un recorrido de 46406 pasos, de los que 36230 lo hace bajo la superficie, y 10176 en superficie, de los cuales 3076 en arcuationes próximas a la piscina limaria de cabecera, 609 son sobre substructiones y 6491 sobre arcuationes próximo ya a la ciudad, penetra en la ciudad, aportando un caudal diario de 4607 quinarios equivalentes a unos 193033 m3, por Porta Maggiore (porta Praenestina). Las tres inscripciones sobre los arcos 45 indican que (I) el emperador Calígula mandó construir Aqua Claudia desde su nacimiento en los manantiales R.G. 23; Suet., Aug. 43; Vell. II 100; C.D. LV 10, 7: Naumaquia; R.G. 21: Marte Vengador. Hor., Sat. 1, 2, 26-27; Sen., Ep. 108, 16. 42 Suetonio dice que Calígula sólo comenzó el primero de los acueductos, aqua Claudia, mientras que la autoría del segundo es Claudio (Vida de los Doce Césares, Cal., 21; Claud., 20). 43 Front., o.c., 4, 13-15, 18-20, 69, 72, 76, 86, 89, 91, 104-105; Suet., Cal., 21; Claud. 20; Tac., Ann. XI 13; Plin., N.H. XXXVI 122. 44 R.G. 20; Front., o.c., 12. 45 CIL VI, 1256-1258. 40 41 28 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. Caeruleus y Curtius y Anio Novus -año 52-, que (II) el emperador Vespasiano mandó reparar Aqua Claudia -año 71- y que (III) el emperador Tito mandó volver a repararla -año 80. Tras diez años en uso, Aqua Claudia quedó fuera de servicio durante nueve, hasta que Vespasiano la reparó en el 71, necesitando de nuevas reparaciones durante el reinado de Tito, diez años más tarde; sin contar las reparaciones de que fue objeto en los siglos II y III. Porta Maggiore. R. Fabretti, De Aquis et Aquaeductibus veteris Romae Dissertationes tres, Romae 1680, Diss. I, pag. 20. Discurre en paralelo al río Anio hasta Tíbur desde donde describe un gran arco hacia el Sur, pasando a occidente de Labicum y al Norte de Túsculo; el mismo recorrido que describen las aguas de Marcia (Iulia) y Tepula, antes de penetrar en Roma, estando el castellum aquae, que recibía también las aguas del Anión Nuevo, pasados los jardines de Palas. De aquí las aguas de ambos acueductos se distribuían en Roma por medio de 92 pequeños reservorios o castella a las 14 regiones de la ciudad. La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 29 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE Aqua Claudia y Aqua Neroniani. Fuente: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Arcus_neroniani_planrome.PNG. Abastecía de agua sobre todo al Celio, Palatino, Aventino y el Trastévere, aportándola también a porta Capena el ramal que se dirigía a la región transtiberina 46 . La excepcional altura de su specus le permitía abastecer también al Quirinal, Viminal y Esquilino. El agua emerge sobre arcuationes a partir de la piscina limaria de la cabecera, en las proximidades del miliario VII de la vía Latina; las mismas que llevarán también las aguas del Anio Novus que se construirá e inaugurará por las mismas fechas, y ambos canales discurren sobre el monumental arco de Porta Maggiore desde 13 kilómetros antes. Las arquerías del Aqua Claudia son las más vistosas de todas las construcciones hidráulicas de Roma. De Aqua Claudia salía un ramal, los arcus Neroniani, desde Spes Vetus, templo en el Esquilino 47 y próximo a porta Praenestina, al templo de Claudio en el Celio, mandado 46 CIL VI, 31963. 30 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. construir por Nerón, de ahí el nombre, desde donde sus aguas se distribuían por medio de castella para las necesidades de los habitantes de la colina y de las regiones vecinas. Quizá fuese Domiciano quien lo mandase ampliar hasta el Palatino, comunicando así ambas colinas 48 . Anio Novus. Fuente: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Aqua_anionovus_planrome.PNG. El otro acueducto, Anio Novus, fue mandado construir por Calígula, aunque Suetonio dice, como acabo de señalar, que lo comenzó Claudio, inaugurándolo, junto con Aqua Claudia, faustuosamente en el año 52 49 . Captaba sus aguas en el miliario XLII de la vía Sublacensis, aguas arriba del nacimiento de Aqua Claudia, en tierras de cultivo, por lo que discurrían turbias y con fango a pesar de la piscina limaria que se construyó entre la captación de aguas y el inicio del acueducto. A cuatro millas aumentaba su caudal con el canal de Hércules, rivus Herculaneus. Su longitud era de 58700 pasos, de los que 49300 lo era en galería y 9400 en superficie, de los cuales 2300 sobre substructiones y arcuationes antes de llegar a las proximidades de Roma y 7100 cerca ya de Roma. Discurre, como Aqua Marcia-Julia, Tepula y Claudia, bordeando el río Anio o Aniene, y tras trazar un gran arco hacia el Sur, como los anteriores, penetra en la ciudad por la Liv., II, 51, 2; Dionys., IX, 24. Front., o.c., XX, LXXVI, LXXXVII. 49 Front., o.c., XXI, LXVIII, LXXIII, XC, XCIII, además de las citas de la nota 41. 47 48 La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 31 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE porta Praenestina, estando el castellum aquae tras pasar los jardines de Palas. Trece km. antes de entrar en Roma comparte las arcuationes con Aqua Claudia, en canales superpuestos, el Anio Novus sobre Aqua Claudia, y distribuyendo el agua a la ciudad a través de 92 reservorios o castella. El Anión Nuevo aportaba a la ciudad un caudal de 4738 quinarios equivalentes a unos 196105 m3 diarios. Abastecía de agua a las partes más altas de la ciudad, al igual que Aqua Claudia; no en vano era, junto con esa, el acueducto más alto que entraba en la ciudad en los días de Frontino. Sus aguas estaban destinadas fundamentalmente para suplir las deficiencias de agua motivadas por las tomas fraudulentas de otros acueductos. Dada la turbidez de sus aguas el emperador Trajano decidió tomar el agua aguas arribas de su nacimiento, apropiándose de las aguas de la antaño villa campestre de Nerón en Subiaco 50 . Estos son los acueductos que surtían de agua a Roma en tiempos de Frontino, de quien fundamentalmente hemos extraído todos estos datos, y si sumamos el caudal diario estimado de cada uno de ellos arroja la cifra de 1.029.025 m3 diarios de agua para una población que puede estimarse en un millón de habitantes (esa es la cifra que se baraja para el reinado de Octavio Augusto), lo que equivale a un consumo diario por persona de nada menos que poco más de mil litros. Hay que tener en cuenta, no obstante, que parte del agua no llegaba a Roma sino que abastecía a villae y otros servicios a lo largo del recorrido de los diversos acueductos, que un porcentaje de agua no cuantificable iba a parar a los edificios y servicios públicos ya en Roma, y que, finalmente, estamos ofreciendo cifras teóricas sobre el caudal de agua que por segundo puede aportar una fistula quinaria, cuando el diámetro de éstas no siempre era el mismo al ser manual la operación de cierre de la lámina de plomo -casi siempre en forma de gota o piriforme- y no ser tampoco el mismo el grosor de la lámina. Sólo podríamos garantizar las medidas de las planchas de plomo. Vitruvio decía que estas planchas habrían de tener como mínimo 10 pies y pesar 120 libras, lo que equivale a unos 2'93 m de longitud, un peso de algo menos de 300 gramos y un espesor variable, entre 5 y 15 mm. De todos estos acueductos, el que fue objeto de más reparaciones fue Aqua Marcia que, según documentación epigráfica, conoció los cuidados de Agripa, Octavio Augusto, Tito, 50 Front. o.c., XCIII. 32 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. de Hadriano, de Septimio Severo, de Caracala, de Diocleciano y de Honorio, en ocasiones ampliándolo para satisfacer demandas públicas como las termas de Caracala y las de Diocleciano 51 . Aqua Traina. Fuente: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Aqua_traiana_planrome.PNG. Tras la gestión de las aguas de Roma por Frontino, que nos ha dejado su recuerdo en la obra Los acueductos de Roma, la ciudad conoció al menos dos acueductos más, Aqua Traiana y Aqua Alexandrina, además del Aqua Antoniniana ya mencionada. En el año 109 mandó construir Trajano una conducción de aguas, aqua Traiana, captadas en manantiales al Norte del Lago di Bracciano (lacus Sabatinus) 52 . Salvo la mencionada inscripción, un cipo, ningún autor la nombra y no consta en la obra acabada de citar de Frontino pues su construcción es posterior a ella. Entraba el acueducto en la ciudad por el Gianicolo y estaban destinadas sus aguas al abastecimiento de la región XIV, la transtiberina, que en épocas críticas sólo contaba con el agua Alsietina, de muy poca calidad. 51 52 C.D. XLIX 42, 2; R.G. 20; Front., o.c., CXXV; CIL VI 1244-1249. CIL VI, 1260. La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 33 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE Aqua Alexandrina. Fuente: http://commons.wikimedia.org/wiki/File:Aqua_alexandrina_planrome.PNG. No hubo necesidad, al parecer, de más agua en Roma en el tiempo que media entre el 109, fecha de construcción del acueducto recién mencionado, y el 226. En el 226 Severo Alejandro mandó construir una nueva conducción de aguas, Aqua Alexandrina, captadas a orillas del Pantano Borghese, al Sur de la vía Praenestina, en tierras tusculanas, a 14 millas de Roma, donde entraba por la porta Praenestina para dar servicio a las remodeladas termas neronianas del Campo de Marte que llevaron su nombre, thermae Alexandrinae 53 . A lo largo de los siglos, gracias a ingentes recursos económicos, a una tecnología hidráulica y a especialistas que supieron utilizarla, Roma se dotó, como hemos visto, de agua para satisfacer las necesidades de consumo de la población, las necesidades de agua de los edificios públicos: templos, teatros, anfiteatros -a veces convertidos en naumaquias-, jardines, ninfeos, circo, termas y naumaquia, las necesidades de agua, finalmente, de los mercados e industrias artesanales, sobre todo los batanes. 53 S.H.A., Alex. Sev. 25 34 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. Entre los instrumentos de medición para llevar a buen puerto obras de tal envergadura como son los acueductos, con sus tramos subterráneos, sifones invertidos, túneles, o las obras en superficie -substructiones y arcuationes-, contó la sociedad romana con instrumentos de medición de los que quiero destacar dos de ellos, la dioptra y el chorobates (vale también cuanto decimos para la construcción de calzadas). Invención al parecer de Herón de Alejandría, la dioptra era un instrumento que mediante la triangulación del terreno permitía determinar la dirección de vías, túneles y otras estructuras. Era superior, por más preciso, a la groma, y fue el precursor del teodolito, de invención británica en el siglo XVI. Pero a diferencia del teodolito (y por eso es superior el teodolito) carecía de compás y de lentes. Tratábase de un instrumento suficientemente preciso para la construcción de túneles trabajando simultáneamente desde las dos bocas, y siempre se empleó para el trazado de los acueductos. Chorobates. http://haegar.fh-swf.de/boehme/ringvorlesung/node7.html El chorobates era una regla con una longitud aproximada de 20 pies (cerca de 6 m) que en sus extremos tenía unos brazos transversales que se correspondían con exactitud, poseían la misma medida y estaban fijados en los extremos de la regla, formando un ángulo recto; La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 35 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE entre la regla y estos brazos iban unos travesaños sujetos por medio de espigas, que tenían unas líneas trazadas en perpendicular a la regla, con toda exactitud; además, llevaba unas plomadas suspendidas en cada uno de los extremos de la regla. Cuando la regla estaba en su correcta posición, si las plomadas rozaban de manera idéntica a las líneas trazadas, era señal de que el chorobates estaba perfectamente nivelado. Tal es la descripción que del chorobates ofrece Vitruvio. Era un instrumento grande, incómodo para trasladar de un sitio a otro, pero sin embargo proporcionaba una información precisa sobre la declinación del terreno. El librator se situaba en uno de los extremos menores del chorobates una vez instalado en el terreno. Miraba por la mirilla y el canal central que tenía la regla, y en un punto distante de él en la trayectoria del acueducto (o de la calzada en su caso) estaba situado un hombre con un jalón, que a las indicaciones del topógrafo lo subía o bajaba, lo movía a la derecha o a la izquierda hasta quedar enrasado con el canal por donde miraba el librator. El desnivel era la lectura del jalón menos la altura del chorobates. Ahora bien, estos instrumentos de medición requerían de especialistas que supieran manejarlos para poder realizar el ulterior proyecto de obra, y entre ellos, el principal era el librator, por lo general un miembro del ejército. Los libratores eran los que tenían los conocimientos técnicos necesarios para emprender tamañas empresas y quienes entendían y utilizaban los aparatos de medición, tan necesarios para calcular desniveles y trazar trayectos. Eran nuestros modernos topógrafos y medían el desnivel de los terrenos para calcular la pendiente adecuada (libramentum) y así poder diseñar por dónde habría de discurrir la canalización de las aguas. Se valían para ello principalmente de los dos instrumentos citados, la dioptra y el chorobates. Otro actor indispensable era el architectus, especie de ingeniero, en este caso hidráulico, que, a la vista de los resultados y de los estudios realizados para un determinado recorrido por el librator, diseñaba para su ejecución las técnicas constructivas más adecuadas para cada tramo del trayecto. Finalmente estaban los redemptores, contratistas de las obras que se atenían a los planos que les entregaban los ingenieros y topógrafos. Contaban para la realización de la obra con mano de obra por lo general esclava y para los cometidos más duros, como la tunelación, trabajo en las canteras para la obtención de la piedra o la excavación de las galerías subterráneas, aunque no se descartaba la mano de obra de los hombres libres de las poblaciones o aldeas próximas al trazado del trayecto. 36 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. La implantación de estas maravillosas obras de la ingeniería hidráulica en provincias, y en concreto en la provincia Bética, no son en ningún caso anteriores al cambio de era, según el estado actual de nuestros conocimientos. En un primer momento las ciudades se abastecían del agua pluvial que recogían en aljibes y cisternas, y del agua de los ríos próximos a ellas. Sólo más tarde se produjo la canalización de las aguas captadas desde largas o medias distancias hasta las ciudades. Fue éste un fenómeno relativamente tardío y tuvo mucho que ver con la mejora en sus estatutos políticos, unas finanzas adecuadas, propias o ajenas a la ciudad pero al servicio de la ciudadanía, y un crecimiento demográfico y económico. Debido a las fuertes inversiones requeridas para la construcción de acueductos, cuando las ciudades romanas contaron con estas magníficas obras hidráulicas fue porque contaron con recursos propios (las menos de las veces), o los proporcionaban benefactores municipales (que siempre los hubo a lo largo de la vida de las ciudades), o allí estaba la evergesía del emperador, principal y primer benefactor de la sociedad romana que siempre esperaba de él remediase las necesidades urbanas. Además de unas finanzas adecuadas para la conducción de agua a las ciudades, se requería que hubiese necesidad de ella y que el aporte de las aguas pluviales y de los pozos, en consecuencia, no fuese suficiente para el incremento poblacional. Tal crecimiento demográfico no se dio antes de la colonización itálica de nuestras tierras, pero sobre todo se dio tras la plena integración de las ciudades en el sistema jurídico romano por medio de los estatutos municipales y coloniales que permitieron a los indígenas, ahora con derechos aunque no fuesen en su plenitud, contraer negocios de distinta naturaleza con los romanos. De modo que crecimiento demográfico y cambio en el estatuto jurídico de las ciudades fueron a la par; y uno y otro los principales promotores y generadores de riqueza que dio paso a la existencia visible de élites urbanas ricas, de sustancia, controladoras de la vida política y económica de las ciudades. Algunas de estas ciudades que contaron con acueductos ejemplificarán cuanto acabamos de decir. Nos limitaremos a Gades y Corduba. La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 37 FRANCISCO JAVIER LOMAS SALMONTE Gades contó con acueducto no antes de que obtuviese el estatuto de municipio. En su obtención tuvo mucho que ver el posicionamiento de sus habitantes -sobre todo de la oligarquía mercantil de la ciudad- del lado de la causa cesariana en la contienda de Julio César con los hijos de Pompeyo que se saldó, además de con la muerte de uno de ellos y la derrota del otro, con el dominio y control de toda Hispania. A raíz de la victoria, otorgó Julio César a las ciudades que se habían puesto de su parte con hombres y recursos, mejoras jurídicas; Gades entre ellas, puesto que posiblemente consiguiera para sus habitantes el estatuto de ciudadanos romanos en fecha tan temprana como el 49 a.C. 54 . A partir de este momento las instituciones púnicas gaditanas quizá fueran transformándose y adaptándose a las de las ciudades romanas, ya que Gades contó con un colegio de cuatórviros -nominalmente una institución genuinamente municipal pero que acaso encubriera a los dos sufetes púnicos, el tesorero del Erario y el censor; institución constatada en ciudades púnicas como Cartago. Octavio Augusto, en reconocimiento de los méritos contraídos por la ciudad en favor de Julio César, y teniendo en cuenta la ciudadanía romana que sus habitantes poseyeran, refundaría la ciudad. Plinio la menciona como Urbs Iulia Gaditana, conociendo a sus habitantes como Augustani 55 . Además, Gades contaba con sólidos recursos económicos como se infiere, de un lado, por la nómina de quinientos individuos que tenían el rango ecuestre 56 , y de otro, por el plan urbanístico promovido y financiado por uno de los oligarcas gaditanos, Balbo el Menor 57 ; ello sin contar con la documentación arqueológica que muestra fehacientemente una intensa actividad artesanal y comercial centrada en pesquerías y conserverías derivadas del tratamiento del pescado. Por si no bastaran estos datos, contó la ciudad con el patrocinio de Marco Agripa –el constructor de Aqua Iulia y Aqua Virgo-, testimoniado por acuñaciones locales, y por el del rey Juba II, duóviro que fue de la ciudad 58 . Así pues, Gades cumplía con creces los requisitos para mejorar también el abastecimiento de agua a la ciudad que hasta esos momentos se abastecía de las aguas pluviales recogidas en cisternas y aljibes, y de algunos pozos con agua salobre, como recuerda Estrabón en su descripción de las islas gaditanas 59 . Otro ejemplo lo tenemos en la ciudad de Córdoba. Contó la ciudad no con uno, sino al menos con tres acueductos, el primero de los cuales es de época de Octavio Augusto -Aqua Augusta se denominaba- y hay que ponerlo en relación con la refundación de la colonia. En el C.D. XLI 24; Caes., B.C. II, 18, 20, 23. N.H. IV 119. 56 Strab. III 5, 3. 57 Su condición de hombre rico en Cic. Ad fam. X 32. 58 Avieno, O.M. 280 que hay que poner en relación con CIL II 3417. 59 Strab. III 5, 7. 54 55 38 Estudios sobre el abastecimiento hídrico en comunidades cívicas del conventus Gaditanus EL ABASTECIMIENTO URBANO DEL AGUA EN LA ANTIGÜEDAD ROMANA. UNA INTRODUCCIÓN. siglo I a.C. asistimos a la fundación de la colonia, de derecho romano, por obra y gracia de Julio César y como consecuencia de la desafección de los cordobeses a la causa cesariana 60 . Dictó una ley mediante la que impuso el estatuto colonial; un nuevo estatuto colonial del que se beneficiaron los partidarios de César y los grandes perdedores fueron los que habían defendido la causa pompeyana, que perdieron sus bienes y haciendas en beneficio de los nuevos colonos; sin duda soldados veteranos y licenciados de las legiones que habían combatido al lado de Julio César, así como sus partidarios civiles de la ciudad y de su entorno. Con Octavio Augusto, el primer emperador, asistimos a la refundación de la colonia, con el asentamiento y entrega de tierras a veteranos y licenciados de las guerras cántabras, presumiblemente. De todos modos, parece que fueron veteranos los que se beneficiaron a juzgar por monedas romanas de la ceca cordobesa que en su reverso tienen representadas estandartes legionarios. En el anverso, la cabeza de Augusto y la leyenda PERMISSV CAES AVGVSTI. Es entonces cuando la ciudad recibe la epíclesis de Patricia, cuando es capital de la provincia y sede de uno de sus conventos jurídicos 61 . 60 Sin perjuicio de que Córdoba conociese ya para entonces la urbanización, y de que para mediados del siglo II a.C. hubiese en ella una especie de praesidium dado el hostigamiento de población lusitana en el entorno y la riqueza de Sierra Morena que los romanos habían de custodiar para su beneficio. 61 La esencial historiografía reciente sobre la colonia se halla en A.M. Canto, “Algo más sobre Marcelo, Corduba y las Colonias Romanas del año 45 a.C.”, Gerion 15, 1997, 253-281; J.F. Rodríguez Neila, “Corduba”, DHA, terza serie, 1-2, 1992, 177-194; J.F. Murillo, J.L. Jiménez, “Nuevas evidencias sobre la fundación de Corduba y su primera imagen urbana” en J.L. Jiménez y A. Ribera, (coords.): Valencia y las primeras ciudades romanas de Hispania (Grandes Temas Arqueológicos 3), Valencia, 2002, 183-193, donde ni alude a la historiografía reciente (salvo el trabajo de J.F. Rodríguez Neila), ni tiene en cuenta la documentación literaria. La captación, los usos y la administración del agua en Baetica. 39