R e v i s t a , I5Bs«?leI®|sé6liem. l i FABRICMÍON DE SOIBREROS DE PAJA Er Los tan renorabrados sombreros de paja de Itàlia se fabrican en diversas cornarcas de aquel liermoso país; però mas particularmenle en el Valle del Arno en Toscana. Confecciónanse con paja de trigo los comunes, y con la de centeno, que es algo mas fina però mucho mas quebradiza, cualidad que dificulta las manipulaciunes, sombreros que valen de 1,000 à 3,000 francos. La variedad de trigo llamado de ïoscana, cuya paja sirve para esta fabricacion, es muy precoz y temé los úUiffios frios del invierno, por lo que se sienibra à úUimos de Febrero, à razon de 10 hectólitros por hectàrea. La sienibra espesa, del. trigo y centeno, tiene por objeto oblener tallos bajos, muy íinos y cuasi ahilados, cuyo sistema siguen tambien con el mismo fin los Flamencos para cosechar sus belles y finos linos. Mantiénense las plantüS durante su vejetacion tan limpias como es posible de raalas yerbas. A fin de Mayo ó à principios de Junio arràncanse los tallos , que à pesar de haber llegado ya à su completo desarrollo y madurez, terminan en una espiga en miniatura y alcanzan à penas 2 centínieiros de altura. Una hectàrea de este cultivo ocasiona un gasto de 1,000 à 1,200 fraccos y produce de 7 à 8,000 kilógramos de paja que valen de 1,600 à 1,800 francos, quedando para el cultivador un beneficio de 500 à 600 francos. Despues de haber atado estos pequeíios talles en raanojos se les pooe à secar, y se procede à su hlanqueo que se obtiene estendiéndolos sobre un prado recienteraente segado, ó sobre los cantes rodados del àlveo de un torrente ó rivera. Esta operacion que pide cuidados minuciosos por la necesidad de preservar las pajas de las Uuvias y de los huracanes tan frecuentes en el valle del Arno, dura de 6 à 7 dias vendiéndose despues el centenar de manojos à 5 ó 6 francos; sin embargo, este precio faria muchas veces segun el color de la paja, pudiéadose venderla perfectamenlc blanca à 20 francos el kilógrarao. Despues del blanqueo viene el corte de las espigas, que tiene ademàs por objeto separar de la base del tallo toda la parte lisa, es decir, aquella paríe superior que no tiene nudos. Se disponen los tallos de este modo preparades, en paquetes de 100 graraos, con los que se forman haces de 6 à 7 kilógramos que se reraojan con agua limpia y se extienden de nue- Diputació de Girona — Servei de Biblioteques vo al sol, para someíerlos luego à la accion del àcido sulfuroso en cajas cerradas herméticanienle, cuyo fondo agujeread.* dà paso al àcido sulluroso proveniente de un Èiormlio colocado dcbajo de la caja, en el que 5e querna flor de azufre. Esta fumigacion se repite ires ó euatro veces basta que la paga haya adquir:do un hermoso color blanco-amarillo. Reúnense entonces en manojos, que con la ayuda de un cuchillo muy fino se cortan en pedazos de 10 à 12 centimetros. Sepàranse enseguida los tallos segun sus diàmetres y se clasifican por números desde el 30 basta el 135 que forma el límite superior de finura en la paja de trigo, Uegando en la de centeno al número 180. Escojidas y clasificadas las pajas, las atan en paquetes de 100 gramos y las entregan à las muchachas labradoras que construyen con ellas trenzas de 11 à 13 pajas segun su finura. Para la confeccion de una trenza larga de, 55 metros, se gastan 1 kilógramo 500 gramos de paja del número 30 ó 500 gramos de! número 100. Concluidas las trenzas las lavan con agua de ja bon para quitarles la grasa que haya podido acumularse en su superficie y las secan al sol. Jí-tas trenzas pasan à manos de otras obreras que las cosen y forman sombreros. Para coser un. sombrero de mediana finura necesitan al menos un mes. Se conslruye un sombrero en punta número 105, con 125 ó 130 metros de trenzas y UH sombrero redondo del mismo número con 165 metros; unes y otros se venden de 150 4 200 francos. Cuando està concluido el sombrero lo lavan con leiia de potasa, luego con agua clara y io secan al sol; soraetiéndolo luego durante 3 dias à la accion del azufre en vapor. Despues de este ultimo blanqueo, una obrera repasa las faltas de las trenzas. encargàndose otra de la última operacion que consiste en encolarlo, aplanchai'lo y cortar las pajas salientes, Segun Mr. Heuze la fabricacion de sombreros de paja principio à tener importància en Itaiia durante el primer Imperio. En 1812 bízose la primera exportacion para Inglaterra y Amèrica y en el dia esta fabricacion ocupa en To-cana 100,000 obreros de ambos sexos y da lugar à una exportacion anual de 20 millones üe sombreros de varias clases. En algunas cornarcas de Francia se fabrican tambien sombreros oc paja, aucqne mucho menes finos que los ilalianos, dependiendo la finura de estos <ir la cual·iiad de la paja. debida sin duda, à las propiedades del suelo en que creció, y piobablemente al calor y à la luz de aquel hermoso clima. El trigo y el centeno sem brados en Francia con el mayor esmero, y siguiendo exactamente las Ipràcticas de aquel pais,