EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL Mikel Haranburu Oiharbide* ; Jesús Guerra Plaza*; Nekane Balluerka Lasa*; Arantxa Gorostiaga Manterola* *Universidad del País Vasco mikel.haranburu@ehu.es Retracción genital, Síndrome de Koro, Trastorno de ansiedad, Ansiedad de castración Genital retraction, Koro Syndrome, Anxiety disorder, Castration anxiety RESUMEN: El síndrome de retracción genital o el síndrome de Koro es un trastorno de la ansiedad relacionado con el miedo a la retracción genital. Es un episodio de intensa ansiedad provocado por la creencia de que el pene se contrae y desaparece en el cuerpo, y que el resultado es la muerte. La mayoría de las personas con el síndrome de Koro son hombres, pero también las mujeres sufren este síndrome: creen que sus genitales externos y pezones serán absorbidos dentro del cuerpo. La creencia de la retracción genital fue mencionada por primera vez en un texto chino del 300 a. C., y hasta 1970 el síndrome de Koro fue considerado como un síndrome ligado a una cultura determinada, a pesar de que estaba relacionado con el temor de "robo genital" que existe en diversas culturas . En la década de 1980 se encontraron algunos casos de este síndrome en diferentes culturas occidentales. Factores precipitantes de los episodios de síndrome de Koro pueden ser la masturbación, los baños de agua fría o el contacto sexual con prostitutas. No es un trastorno físicamente dañino, pero la persona que sufre este trastorno puede lesionarse cuando usa herramientas tales como el sedal de pesca o cordones de zapatos para evitar la retracción del pene. El objetivo de este trabajo será describir este síndrome y responder a las siguientes preguntas: ¿Es la ansiedad de castración un factor etiológico de esta enfermedad? ¿Se trata de un trastorno ligado a la cultura o es un síntoma de la ansiedad? ABSTRACT: The genital retraction syndrome or the Koro syndrome is an anxiety disorder associated with the genital retraction fear. It’s an episode of intense anxiety triggered by the belief that the penis will shrink and disappear into the body, and that dead is the result. The majority of persons with Koro syndrome are men, but women also suffer from this syndrome: they believe that their external genitals and nipples will be sucked into their body. The belief of the genital retraction was first mentioned in a Chinese text dating from 300 B.C., and until 1970 Koro Syndrome was considered as a cultural bound syndrome, although it was related to the fear of “genital theft” in various cultures. In the 1980´s some case of this syndrome were reported in different Western cultures. Precipitating factors for the episodes of Koro syndrome can be masturbation, cold baths or sexual contact with prostitutes. It isn’t a physically harmful disorder, but injuries can occur when the person who suffer from this disorder use tools such as fishing line or shoes strings to prevent the retraction of the penis. The aim of this paper is to describe this syndrome and to answer to the next questions: Is the 1 13º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL castration anxiety an etiological factor of this disorder? Is it a culture bound disorder or is a symptom of anxiety? -213º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL INTRODUCCIÓN El origen de la palabra “Koro” parece derivar de la palabra utilizada en la lengua malaya para denominar la cabeza de tortuga, utilizada a su vez en el argot para denominar el pene. En China se le denomina “shook-yang” o “suoyang” (suo= encogimiento; yang= pene) y está relacionada con la culpabilidad relacionada con el sexo. Otras lenguas de Asia utilizan palabras similares para designar esta alteración. El síndrome de Koro, de miedo a la retracción del pene, es la denominación que se ha utilizado para designar el ataque de pánico en el sudeste de Asia. El Koro, en la medida en que inicialmente su incidencia afectaba únicamente a la población asiática, se ha presentado como un síndrome ligado a la cultura (1). Pero, vista su evolución posterior (los casos que han aparecido en Europa, América y África), se le puede considerar como un síndrome universal relacionado con el pánico a la pérdida de pene que existe en diferentes culturas (2). El síndrome de Koro en algunos casos puede afectar a las personas individualmente; en otros casos puede tomar la forma de epidemias de histeria de masa. En su vertiente individual implica una reacción de ansiedad y miedo a la retracción genital mortal y en su vertiente colectiva implica la forma de pánico colectivo. De esta forma, la retracción genital está relacionada tanto con la expresión dramática de la ansiedad aguda y miedo de una inminente muerte como con creencias etno-culturales. El Koro es un episodio de repentina e intensa ansiedad provocado por la creencia de que el pene del varón (o la vulva o los pezones de la mujer) se contraerá y desaparecerá en el cuerpo, y que el resultado será la muerte de la persona. El varón piensa que su pene se va encogiendo y retrayendo, y que acabará ocultándose dentro de su abdomen; en algunos casos también pueden resultar afectados los testículos. El paciente puede tratar de detener la retracción del pene, pidiendo a los miembros de su familia o a sus compañeros que impidan dicha retracción. Pero, en el trastorno de Koro tienen que creer en el trastorno, no sólo el paciente, sino también las personas del entorno, y tienen que tomar parte activa en la manipulación de los genitales de la víctima, para evitar su muerte. Este intento de evitación puede llegar a producir heridas o incluso la muerte (3). Aunque comúnmente se le ha asociado con el trastorno de pánico, la sintomatología del síndrome de Koro está también relacionada con la alucinación hipocondríaca, la psicosis, el miedo a la castración, el trastorno dismórfico corporal, la histeria psíquica, el trastorno obsesivo-compulsivo o la histeria ligada a una cultura. El síndrome de Koro se ha asociado también con creencias de brujería relacionadas a la pérdida del pene por robo genital. Según algunas creencias culturales, fantasmas de la muerte disfrazados y desprovistos de genitales se apoderan de los genitales de las víctimas para volver a la vida. O una mujer con poderes de bruja puede robar el pene de un hombre. En la medida en que es un trastorno ligado a la cultura recibe nombres distintos en las diferentes culturas. Los síndromes ligados a la cultura se han equiparado con las psicosis étnicas, -313º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL con neurosis étnicas, con la psicosis histérica y síndromes exóticos. Se caracterizan porque presentan reacciones específicas que son episódicas y dramáticas y que afectan sólo a personas de ciertas culturas, relativamente desconectadas de la corriente cultural universal. Muestran síntomas y conductas raras, caóticas e impredecibles. Ocurren en unas culturas, y no en otras; tienen nombres locales y son considerados epidemiológicamente diferentes. Los síndromes ligados a la cultura Podrían interpretarse como una especie de reliquia de la perspectiva etnocéntrica e imperialista que ha mantenido la categorización internacional de los síndromes, considerando como ligados a la cultura a ciertos síndromes y como universales a otros. Durante largo tiempo los síndromes ligados a la cultura se han situado en Oriente, pero ahora observamos que también otros síndromes como la bulimia nerviosa o el trastorno de Tipo A podrían considerarse como ligados a la cultura, en este caso a la cultura occidental. En el Koro primario el síntoma principal es el relacionado con el encogimiento del pene. Se han hallado cambios psicofisiológicos en la circunferencia del pene asociadas con el encogimiento imaginado en un caso de Koro. El Koro secundario es comórbido con otros trastornos psiquiátricos como el trastorno de ansiedad, síndrome de abstinencia de drogas, epilepsia, depresión. Algunos autores consideran que el trastorno primario es la ansiedad y el miedo a la retracción genital es secundario. Así, el miedo a la retracción genital sería la expresión de la ansiedad aguda, a la vez que puede estar relacionada con creencias culturales. El síndrome de retracción genital ofrece muchas similitudes con el trastorno de pánico. La preocupación por las sensaciones corporales del trastorno de pánico se interpreta como señal de peligro físico personal. Los pacientes que han sufrido ataques de pánico muestran gran ansiedad ante los cambios corporales. Aunque pueda haber acontecimientos vitales que han desencadenado el ataque de pánico, lo fundamental en el trastorno de pánico es la interpretación distorsionada de los cambios fisiológicos y el conflicto cognitivo que resulta de una transgresión moral. Por ejemplo, puede surgir un ataque de pánico como resultado de la ansiedad que produce el cuestionamiento de la identidad sexual propia o el enfado hacia Dios (4). Creencias morales y religiosas rígidas y dogmáticas se han mostrado asociadas con la posibilidad del castigo. El ataque de pánico se acompaña de síntomas fisiológicos que son una reacción autonómica ante la amenaza de una inminente muerte debida a una transgresión moral. ¿Qué es un ataque de pánico? El ataque de pánico es un ataque repentino de ansiedad aguda; se presenta inesperadamente, aparentemente sin causa alguna; es vivido como miedo, va acompañado de una activación del Sistema Nervioso Simpático y causa a menudo incapacidad. Las personas que desarrollan un ataque de pánico tienen una gran sensibilidad hacia las sensaciones corporales. Pueden interpretar las palpitaciones normales como señales de un inminente ataque cardíaco. -413º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL ¿Cuál es la diferencia entre el ataque de pánico y el trastorno de pánico? Se puede considerar que una persona tiene trastorno de pánico si sufre cuatro o más ataques de pánico en un período de cuatro semanas. ¿Cuáles son los criterios para una crisis de angustia o un ataque de pánico? (DSM-IV-TR) (5) La aparición temporal y aislada de miedo o malestar intensos, acompañada de cuatro (o más) de los siguientes síntomas, que se inician bruscamente y alcanzan su máxima expresión en los primeros 10 min: 1. palpitaciones, sacudidas del corazón o elevación de la frecuencia cardíaca 2. sudoración 3. temblores o sacudidas 4. sensación de ahogo o falta de aliento 5. sensación de atragantarse 6. opresión o malestar torácico 7. náuseas o molestias abdominales 8. inestabilidad, mareo o desmayo 9. desrealización (sensación de irrealidad) o despersonalización (estar separado de uno mismo) 10. miedo a perder el control o volverse loco 11. miedo a morir 12. parestesias (sensación de entumecimiento u hormigueo) 13. escalofríos o sofocaciones Se constata que los síntomas de la crisis de angustia son predominantemente somáticos. Estos pacientes se distinguen de los pacientes con otros trastornos de ansiedad en el nivel de vigilancia hacia las sensaciones corporales. Estas crisis aparecen a menudo en situaciones de alta tensión emocional. Los síntomas de miedo a morir y de pérdida de control ocurren a menudo en los ataques y trastornos de pánico. ¿Cuáles son los criterios para el diagnóstico del trastorno de angustia sin agorafobia? A. Se cumplen 1 y 2: 1. crisis de angustia inesperadas recidivantes 2. al menos una de las crisis se ha seguido durante 1 mes (o más) de uno (o más) de los siguientes síntomas: (a) inquietud persistente ante la posibilidad de tener más crisis (b) preocupación por las implicaciones de la crisis o sus consecuencias (por ej., perder el control, sufrir un infarto de miocardio, "volverse loco") (c) cambio significativo del comportamiento relacionado con las crisis -513º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL B. Ausencia de agorafobia. C. Las crisis de angustia no se deben a los efectos fisiológicos directos de una sustancia (p. ej., drogas, fármacos) o una enfermedad médica (p. ej., hipertiroidismo). Aparte de los perjuicios emocionales que pueda acarrear, el Koro no es un trastorno que tenga efectos físicos perjudiciales, puesto que la persona no sufre ninguna retracción física real del pene. Sin embargo, la persona que sufre este trastorno puede lesionarse cuando usa herramientas tales como el sedal de pesca, agujas, garfios o cordones de zapatos para evitar la retracción del pene. Teniendo en cuenta las consideraciones iniciales, el objetivo de este trabajo será describir este síndrome y responder a las siguientes preguntas: ¿Es la ansiedad de castración un factor etiológico de esta enfermedad? ¿Se trata de un trastorno ligado a la cultura o es un síntoma de la ansiedad universal? PREVALENCIA La primera descripción de síntomas similares al Koro aparece en la China de hace unos dos mil años, donde se describe un trastorno similar al trastorno de pánico (6); la creencia de la retracción genital fue mencionada por primera vez en un manuscrito médico chino del 300 a. C: “El clásico de medicina interna del emperador amarillo”. La primera epidemia de Koro que se ha descrito ocurrió en el sur de China y data de 1865 (3). Desde la segunda guerra mundial han ocurrido varias epidemias de Koro en China, Singapur, Tailandia o India. En la epidemia de Singapur de 1967 resultaron afectadas miles de personas, los hospitales se vieron inundados por gente preocupada de que sus penes se estaban encogiendo; muchos recurrieron a pinzas o abrazaderas para impedir que sus penes se desvanecieran completamente y las autoridades tuvieron que realizar una campaña para tranquilizar a los hombres de que es imposible la retracción anatómica del pene; el pánico surgió del rumor de que los puercos envenenados por inoculación de la fiebre porcina eran los causantes del encogimiento genital. Epidemia de pánico en Sudán En septiembre del año 2003 una epidemia de pánico se extendió por Jartum (Sudán). Era una epidemia de histeria colectiva relacionada con la disolución del pene. Los afectados por la epidemia temían que se derritieran sus penes después de que se pusieran en contacto con africanos occidentales, después de que recibieran una maldición verbal, se diesen la mano o compartieran un peine electrónico. Por ejemplo, consideraban que el peine en cuestión (“Penis-melting Zionist cyborg comb”) era una -613º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL especie de robot controlado por laser, que al introducirse en el cráneo descendía a la parte baja del cuerpo para castrarle y privarle de su poder reproductor. El fenómeno fue atribuido a los sionistas que intentaban aniquilar a la población sudanesa, convirtiendo a sus hombres en incapaces de procrear. Se extendió por la ciudad el rumor de que gente extranjera que circulaba por las calles hacía desaparecer los penes de las personas cuyas manos estrechaban. Hubo incluso personas que utilizaron manos protésicas para estrechar la mano de otras personas, con la excusa de que “era mejor prevenir que curar”. Se propagaron diversos rumores sobre la procedencia de esta gente. Lo cierto es que la policía recibió numerosas quejas de ciudadanos extranjeros que anulaban la virilidad de los hombres al estrechar su mano o al peinarse con el peine que éstos les había proporcionado. Todas las personas que se quejaban de encogimiento de pene fueron enviadas a hospitales y los informes médicos dictaminaron que sus penes eran normales. Muchos de los que habían interpuesto denuncias, las retiraron declarando que se habían recuperado. El ministro de sanidad dijo que no había base científica alguna, que era cuestión de brujería, magia o problema emocional. En un comienzo el trastorno parecía limitarse a la población asiática, por lo que se decía que el Koro era un trastorno ligado a una etnia o cultura. Hasta la década de 1970 los casos de Koro se limitaban a la población de varones de Asia. A partir de 1980 empezaron a aparecer casos esporádicos de síndrome de Koro en países occidentales, africanos y de Oriente Medio, terminando así con la idea de que el Koro es un trastorno ligado a una cultura determinada (7) (8). Se han encontrado casos de Koro en Israel, Grecia, Inglaterra, Francia, Estados Unidos y África. Se han observado también recientes epidemias de Koro en el Congo (Kinshasa), Ghana, Benin y Nigeria, con acusaciones de robo de pene, después de un inesperado contacto con un extranjero. Los casos de Koro que se han observado en Europa, América y Oriente Medio se diferencian de los casos de Asia y África en que la retracción del pene no acarrea la muerte y de que va asociada a una enfermedad mental, más que a epidemias sociales. Aunque la gran mayoría de las personas que sufre el síndrome de Koro son varones, existen también mujeres que padecen este síndrome (el 3%) y a quienes les absorbe una intensa ansiedad y temor de que sus genitales externos y pezones serán absorbidos dentro del cuerpo. Sin embargo, salvo alguna excepción, no hay casos de síndrome individual de Koro en mujeres; los casos disponibles de Koro en mujeres son casos epidémicos (9). En la mayoría de los casos se han diagnosticado trastornos mentales juntamente con el Koro secundario, pero también se han descrito algunos casos de Koro sin otro trastorno mental. -713º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL ETIOLOGÍA Las causas más comunes a las que se ha atribuido el Koro son las siguientes: - Muchos estudiosos del tema piensan que las causas del Koro son similares a las que están en la base del ataque de pánico: la ansiedad o el estrés emocional, así como la exposición al frío, producen un encogimiento genital. En gran parte de los casos descritos en la literatura, las personas que han desarrollado el síndrome de Koro han vivido en condiciones de estrés y ansiedad en el período que ha precedido al desarrollo del síndrome (10). En culturas en las que existe una alta ansiedad sexual, relacionada con historias de muerte por retracción genital, es normal que haya casos de pánico cuando ven el encogimiento del pene ante el frío o la ansiedad. Puede darse una retracción parcial del pene por enfermedad, ahogamiento u obesidad. Los casos de Koro que aparecen en revistas de urología responden en general a anormalidades anatómicas. - En el pasado había más tendencia a atribuir el síndrome a la influencia de espíritus malignos, a los hechizos o a la brujería. El Koro se ha relacionado con creencias de posesiones por espíritus malignos, con el equilibrio entre el Ying y el Yang, con el cuento de la zorra que absorbe la energía de víctimas varones, con la psicosis. En África las víctimas de Koro han acusado a menudo a sus vecinos de su patología, pero cuando les ha analizado el médico, no ha encontrado nada anormal en ellos, aparte del problema psicológico. - Recientes episodios de Koro se han atribuido a agentes más objetivos, como puede ser la contaminación con productos químicos del suministro de agua de una población (caso de del norte de Tailandia), la contaminación de la carne de cerdo consumida (Singapur). Cuando se le explica a la gente que los síntomas nada tienen que ver con los productos alimenticios, la mayoría de las personas se recupera. - A menudo se le ha echado la culpa del Koro al hecho de haber mantenido relaciones sexuales con prostitutas. En China a menudo los hombres creen que su equilibrio sexual se rompe cuando se mantienen extramatrimoniales. Como factores precipitantes de Koro se han aducido también la masturbación, los baños fríos o la exposición a vientos helados los excesos sexuales. - La explicación psicodinámica enfatiza la pérdida simbólica de potencia y poder, el miedo a la castración y el rol de la ansiedad de castración como factor etiológico del miedo a la retracción genital (11). Entre los factores predisponentes estarían los sentimientos de culpabilidad sexual, los conflictos sexuales y la culpabilidad acerca de temas sexuales. La satisfacción por tener un cuerpo bien formado y la preocupación por una malformación o un defecto corporal son normales. Las personas que tienen un trastorno dismórfico piensan que determinada parte de su cuerpo está deformada, es fea o indeseable. La exhibición fálica se ha asociado con la dominancia. En los siglos quince y dieciséis eran normal que los hombres de estatus elevado llevaran taparrabos acolchados o bolsas rellenas en el exterior de sus -813º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL calzones. Estas bolsas estaban decoradas y su tamaño dependía del nivel jerárquico del varón. También en Nueva Guinea los hombres llevan unas cubiertas decorativas para sus penes y el tamaño de los mismos depende de su posición social. Esta exhibición del tamaño del pene es una práctica bastante generalizada a lo largo de la historia y en distintas culturas. Los hombres tratan de persuadir a los otros hombres de que son dominantes porque están bien dotados. En este sentido, el síndrome de retracción genital sería una especie de prolongación del síndrome de la castración. En la teoría psicodinámica la angustia de castración es un componente importante de un estadio del desarrollo de la personalidad. El síndrome de la retracción genital conectaría con la ansiedad por la pérdida del miembro masculino. La preocupación por el tamaño del pene ha sido una preocupación constante entre los varones. Unas dos terceras partes de los hombres consideran que su pene es demasiado pequeño. De ahí que en diferentes culturas se hayan desarrollado métodos tradicionales para el alargamiento del miembro viril como el método de estiramiento polinesio del pene o la bomba de vacío, métodos más modernos de estiramiento como los quirúrgicos, o métodos quirúrgicos para extraer los penes ocultos de forma congénita o encogidos iatrogénicamente después de la circuncisión. - En los casos de Koro referidos a casos no asiáticos, algunos pacientes muestran trastornos psiquiátricos como la esquizofrenia, la depresión o el trastorno de pánico; otros pacientes de Koro muestran distintas disfunciones cerebrales debidas a enfermedades del cerebro como tumores, epilepsia o ataques. Los ataque de pánico parecen responder a disfunciones de los lóbulos frontal y temporal; sin embargo, los trastornos de la imagen corporal parecen responder a lesiones de los lóbulos parietales. CASO DE KORO POR ATAQUE Paciente de 41 años admitido al hospital por un episodio de amaurosis fugax en su ojo izquierdo (12), por pérdida de sensibilidad en la parte izquierda de su cara y por debilidad en su pierna y brazo izquierdos y por hipertonía idiopática. A los pocos meses tuvo síntomas recurrentes de ansiedad acompañados de sensaciones somáticas (intenso miedo a morir, palpitaciones, sudoración, dolor en el pecho…). Posteriormente apareció el sentimiento de que su pene iba a contraerse y desaparecer en su cuerpo. Sus ataques de pánico tenían una frecuencia de una a tres veces por semana y fueron seguidas por disfunción eréctil. La Imagen de Resonancia Magnética reveló lesiones corticales y subcorticales en ambos lóbulos temporales y en los polos frontales. Combinaba los síntomas de Koro con los del ataque de pánico. - El conocimiento previo del Koro hace que las personas tengan expectativas sobre estos síntomas y que estén más predispuestas a relatarlos. Muchas de las personas que han -9- 13º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL desarrollado Koro han tenido noticias de este trastorno antes de sufrirlo ellos mismos. - Una personalidad inmadura con poca confianza en su virilidad o en su capacidad sexual, sugestionable, con una historia de enfermedades venéreas, con pobre imagen corporal, condición de emigrante, que vive aislada en un ambiente de determinadas creencias culturales y de un nivel reducido de escolaridad. - Han aparecido varios casos de Koro relacionados con el consumo de drogas: Existen casos de encogimiento de pene como consecuencia del consumo de marihuana (13), abstinencia de heroína o consumo de anfetamina. • Casos de Koro que desarrollaron creencias de retracción del pene después de fumar cannabis: se han referido en la India casos de retracción del pene relacionados con el consumo de marihuana (13). También en EEUU se han referido casos de Koro relacionados con el consumo de esta sustancia (14). Los casos detectados en EEUU habían oído hablar de la relación entre el Koro y el consumo de marihuana, y experimentaron la retracción del pene después de consumir marihuana de forma atípica. Tal vez el conocimiento previo de casos de relación entre el Koro y la retracción genital creó expectativas en estos casos, lo que facilitaría la detección, la identificación y el relato de los síntomas que sufrían. Tal vez las expectativas sobre la presencia del síndrome de Koro inducido por la marihuana contribuyeron a la aparición de ataque de pánico. CASO REFERIDO POR EARLEYWINE (14): EJEMPLO DE JORO RELACIONADO CON EL CONSUMO DE MARIHUANA Se trata de un joven caucásico que había estado consumiendo cannabis durante cuatro años y había oído hablar de Koro inducido por cannabis en la clase. Había consumido cigarrillos, cafeína, alcohol, cocaína y alucinógenos. Mostraba una insatisfacción recurrente porque su pene estaba deformado. Consumió cannabis de alta potencia en pipa de metal. Después de quince minutos se sintió temeroso y desorientado y tosía de tal forma que con cada tos se retraía su pene. Después de algún tiempo tosiendo, comprobó que su pene se había reducido. Llenó la bañera y estuvo bañándose durante 40 minutos, porque recordó que la suspensión en el agua curaba los casos de los que había oído hablar. Se redujo su ansiedad sobre el miedo a la desaparición del pene. • También se ha encontrado casos de síndrome similar al Koro relacionados con el consumo de -10- 13º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL anfetaminas. Tienen la percepción de que su pene se ha encogido y va a ser aspirado por su cuerpo. El síndrome denominado Whizz-Dick es una condición de encogimiento temporal del pene relacionado al consumo de anfetaminas. De hecho, se han referido muchos problemas sexuales relacionados con el consumo de anfetaminas: episodios de transexualidad, transvestismo, encogimiento progresivo del pene. CASO DE WHIZZ-DICK, SÍNDROME SIMILAR AL KORO, REFERIDO POR BLOOR (15) Un joven de 17 años acude al urólogo como consecuencia de sensaciones desagradables en su ingle y con la sensación de que su pene va a ser absorbido en su abdomen. Derivado a la clínica psicosexual, se constata que ha consumido anfetaminas y cannabis durante dos años. Derivado a la unidad de tratamiento de drogas, se comprueba que ha consumido anfetaminas desde los 13 años. La aparición de los síntomas fue repentina, y dejó de consumir anfetaminas desde el episodio. Describió el fenómeno del encogimiento del pene como Whizz-Dick y refirió que los consumidores de anfetaminas en general son conocedores de este fenómeno. DIAGNÓSTICO Síntomas característicos: - Dificultades de relajación y sueño. - Paciente desconcertado, inquieto, vigilando continuamente su zona genital. - Ansiedad generalizada, depresión y pánico. - Petición ansiosa de que detengan el encogimiento de su pene. - Tirar de su pene para impedir que sea aspirado por su abdomen. - Sentimientos de culpabilidad por haber mantenido relaciones con profesionales del sexo. - Ausencia de síntomas físicos. - Miedo a la muerte. Aunque se ha relacionado el Koro con el Trastorno Dismórfico Corporal, el Koro se diferencia de él por su breve duración, por rasgos asociados diferentes (ansiedad aguda y miedo a la muerte), por su respuesta positiva a explicaciones racionales y por su carácter epidémico ocasional. -1113º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL Trastorno dismórfico corporal (Dismorfofobia) Criterio A: preocupación por algún defecto imaginado del aspecto físico. El defecto es imaginario o, si existe, la preocupación del individuo es excesiva. Criterio B: la preocupación provoca malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o de otras áreas importantes de la actividad del individuo. Criterio C: la preocupación no se explica mejor por la presencia de otro trastorno mental (p. ej., insatisfacción con el tamaño y la silueta corporales en la anorexia nerviosa). El trastorno de pánico y el Koro comparten varios rasgos sintomáticos como la activación autonómica o el miedo a la muerte. En este sentido, el Koro puede ser considerado un trastorno de pánico, pero también un trastorno psicótico, una forma de histeria o un trastorno obsesivo. DISCUSIÓN Algunos piensan que la consideración del síndrome de Koro como un trastorno ligado a la cultura puede impedir un tratamiento científico sin estigmatizaciones (16). Otros consideran que el Koro es más un trastorno relacionado con la cultura que ligado a ella (17): existe en ciertas áreas de China, pero no en otras; asimismo existe en países exteriores a China. Por otra parte, considerar el síndrome de Koro como un síndrome específico ligado a la cultura no parece que mejora el manejo de esta patología por los servicios sanitarios. Habría que modular el concepto de síndrome ligado a la cultura, porque todos los patrones psiquiátricos están en cierta medida ligados a la cultura (18). Cuando tratamos de consensuar y redactar manuales que recojan síndromes universales, habría que realizar un tratamiento cuidadoso de los síndromes “ligados a la cultura”, porque podrían ser el reflejo de una perspectiva etnocéntrica. El mantenimiento de síndromes “ligados a la cultura” podría obligarnos a revisar las etiquetas de otras patologías, que estando consideradas actualmente como universales, habría que clasificarlas entre las ligadas a la cultura. Es el caso del concepto de depresión occidental que podría ser considerado un trastorno ligado a la cultura (19). La pérdida del sentido de valía personal que es un criterio nuclear de la depresión en Occidente puede ser el reflejo de la aceptación de la insignificancia propia y de la reconciliación con el orden de la existencia que debe practicar un buen budista en Oriente. Los episodios de encogimiento del pene son producto del funcionamiento psicológico normal y manifestaciones de un proceso universal, más que síntomas de un síndrome ligado a la cultura. La especificidad física del pene debe borrarse para que florezca la abstracción del falo ideal. En la leyenda egipcia del gobernante Osiris su esposa Isis no pudo recomponer el cuerpo desmembrado del gobernante, ya que pudo recolocar todas las partes del cuerpo excepto el pene. Isis tuvo que -1213º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL reconstruir una réplica. De este modo se demuestra que la construcción del falo ideal se asienta sobre la desaparición del pene físico. El síndrome de Koro sería una especie de metáfora de la desaparición del pene físico. Tal como dice Lacan (20), «En la doctrina freudiana, el falo no es una fantasía, si por fantasía hay que entender un efecto imaginario. Tampoco es ya como tal un objeto (parcial, interno, bueno, malo, etc.), en cuanto este término tiende a apreciar en una relación la realidad de la que se trata. Menos aún es el órgano, pene o clítoris, que simboliza. Pues el falo es un significante, un significante cuya función en la economía intrasubjetiva del análisis levanta quizás el velo que mantenía en los misterios. Pues es el significante destinado a designar en su conjunto los efectos de significado, en tanto que el significante los condiciona por su presencia de significante.» El falo significa en la medida en que no es el pene y el pene es la parte del cuerpo que no debe ser; de ahí que la capacidad de simbolización del falo depende del pene. La universalización del falo descansa sobre la desaparición del pene. Rechazando el pene físico, el falo puede llegar a ser un significante trascendental. La función del pene es ocultarse bajo el velo fálico. Por medio del síndrome del Koro se oculta el pene bajo el velo del trastorno y se consigue que el falo mantenga su primacía. El Koro puede venir relacionado a mitos culturales procedentes del Asia Sud-Oriental en forma de epidemias con síntomas de retracción genital, ansiedad aguda y miedo a la muerte. Puede venir también relacionado con mitos de África Occidental en forma de epidemias de robo de pene por brujería, magia o gente envidiosa. O el síndrome similar al Koro puede aparecer en el mundo occidental, asociado a otros trastornos físicos o mentales (alucinación hipocondríaca, imagen corporal alterada…). En cualquier caso, está respondiendo a una inquietud universal de ansiedad por miedo a la pérdida de pene, la ansiedad que surge del miedo a la castración, castración que tiene que darse para que se implante el orden simbólico. El pene debe desaparecer para que florezca el falo. En la mayoría de los casos de Koro los pacientes han pasado por experiencias de estrés y ansiedad antes de desarrollar el síndrome (10). Actualmente existe un acuerdo generalizado que considera que este trastorno es similar al ataque de pánico (16). Más que un síndrome ligado a la cultura es un trastorno universal de ansiedad con miedo a la retracción genital (21), que puede adoptar formas distintas en diferentes culturas. En el debate sobre las enfermedades ligadas a la cultura (el síndrome de Koro o el síndrome de Amok) se plantea el problema de si son trastornos determinados culturalmente o variantes de formas universales de patologías como la ansiedad o la depresión. Habría que huir de las posturas relativistas que defienden que estas categorías de trastornos mentales están ligadas y se limitan a un determinado contexto cultural; habría que evitar la postura que niega la especificidad de las culturas en la génesis y estructuración de las patologías psíquicas; habría que fomentar la postura de que las patologías psíquicas toman a menudo formas culturales específicas, a pesar de que su existencia es universal. Estas enfermedades psíquicas no están “ligadas” a la cultura, están relacionadas con la cultura, y hay que entenderlas en su contexto. -1313º Congreso Virtual de Psiquiatria.com. Interpsiquis 2012 www.interpsiquis.com - Febrero 2012 Psiquiatria.com EL SÍNDROME DE RETRACCIÓN GENITAL BIBLIOGRAFÍA (1) Cheng S-T. A critical review of Chinese koro: Culture, Medicine and Psychiatry 1996; 20(1): 67-82. (2) Adeniran RA, Jones JR. Koro: Culture-bound disorder or universal symptom? Br J Psychiatry 1994;164:559-561 (3) Mo GM, Heise T. Die Koroepidemie in Südchina. En: Hoffmann K, Machleidt W, editores. Psychiatrie im Kulturvergleich. Berlin: VWB; 1997. p. 105-111 (4) Trenholm P, Trent J, Compton W. Negative religious conflict as a predictor of panic disorder. Journal of Clinical Psychology 1998; 54: 59-65. (5) American Psychiatric Association. DSM-IV-TR. Manual de diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales. Texto Revisado. Barcelona: Masson; 2002. (6) Ng BY, Kua EH. 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