SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0502/2015

Anuncio
SENTENCIA CONSTITUCIONAL PLURINACIONAL 0502/2015-S3
Sucre, 12 de mayo de 2015
SALA TERCERA
Magistrada Relatora:
Acción de libertad
Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
Expediente:
Departamento:
09028-2014-19-AL
Tarija
En revisión la Resolución 09/2014 de 23 de octubre, cursante de fs. 53 vta. a 56 vta., pronunciada
dentro la acción de libertad interpuesta por Samuel Grover Mita Quino en representación sin
mandato de “Ruring” River “Covarrubia” García contra Blanca Carolina Chamón Calvimontes y
Ernesto Félix Mur, Vocales de la Sala Penal Segunda del Tribunal Departamental de Justicia de Tarija;
y, Norah Margoth García de Chavarría y Marcelo Prieto Balanza, Jueces del Tribunal Segundo de
Sentencia Penal de Yacuiba del mismo departamento.
I.
ANTECEDENTES CON RELEVANCIA JURÍDICA
I.1. Contenido de la demanda
Por memorial presentado el 30 de mayo de 2014, cursante de fs. 12 a 20 vta., el accionante a través
de su representado, expresó los siguientes fundamentos de hecho y de derecho:
I.1.1. Hechos que motivan la acción
El 25 de septiembre de 2014, se celebró audiencia para considerar la solicitud de cesación a su
detención preventiva al amparo del art. 239 inc. 1) del Código de Procedimiento Penal (CPP),
habiendo presentado nuevos elementos que demostraron que los motivos que fundaron la misma
ya no concurrían, consistentes éstos en el numeral 4 del art. 234 y numeral 2 del art. 235 ambos del
citado cuerpo legal, habiéndose mantenido solamente el peligro de obstaculización previsto en el
mencionado art. 235.2; empero, el Tribunal a quo le negó su petición.
Manifestó que, según las audiencias de 30 de diciembre de 2013 y de 31 de julio de 2014, como
también del Auto de Vista “159/2014”, el argumento para mantener vigente el peligro de
obstaculización fue el desistimiento que se hizo y la posterior interposición de otro memorial que lo
dejo sin efecto, documentación que el Ministerio Público volvió a presentar en la audiencia de
cesación precedentemente señalada.
Indicó que, el Tribunal emitió Auto de apertura de juicio 54/2014 de 22 de septiembre, señalando
audiencia de juicio oral para el 20 de octubre de igual año a horas 9:00, argumento que no fue
puesto en tela de juicio en la audiencia de cesación, además que dicho Auto de apertura no puede
ser obstáculo para una cesación a la detención preventiva.
Refirió que, la decisión de mantener vigente el peligro procesal de obstaculización carecería de
fundamentación, tomando en cuenta que la Jueza no indicó de manera razonada la razón por la que
considera que con medidas sustitutivas el proceso puede seguir desarrollándose, como tampoco
explicó por qué incorporó prueba de oficio e hizo el papel de Fiscal, cuando en el debate nunca se
indicó que se tenga como prueba la acusación y el Auto de apertura del proceso, aspecto que
constituiría en una negación del art. 221 del CPP.
Señaló que, se sostuvo que podía influenciar negativamente en la víctima, quien cuenta con corta
edad y que fue ofrecida como testigo, criterio subjetivo que ya fue rebatido por la defensa, no
pudiéndose valorar nuevamente la prueba que sirvió para negar la cesación, incurriendo
reiteradamente en una carente fundamentación, apartándose de las Sentencias Constitucionales
Plurinacionales 0795/2014 y 0836/2014.
Finalmente sostuvo que, el Tribunal a quo realizó una oficiosa acotación a la negativa de concederle
la cesación, manifestando que se debía dar cumplimiento al art. 60 de la Constitución Política del
Estado (CPE), con ello el Tribunal de instancia sobrepuso el interés superior a sus derechos
constitucionales, entendiéndose que en los casos que tengan que ver con un niño, niña y
adolescente jamás se otorgará la cesación en aras de precautelar el interés superior de los
nombrados en desmedro de los arts. 13 y 23 de la citada Norma Suprema.
Asimismo señaló que los Vocales demandados pronunciaron el Auto de Vista 186/2014 de 8 de
octubre, en el que no repararon la falta de fundamentación del fallo pronunciado por los Jueces
codemandados, vulnerando el debido proceso en su elemento fundamentación, por cuanto hasta la
fecha de presentación de esta acción, desconoce el valor otorgado a las certificaciones emitidas por
el Director del Centro de Readaptación “El Palmar” y de la Policía, no encontrando respuesta alguna
a los agravios planteados con relación a la concurrencia del peligro de obstaculización establecido en
el art. 235.2 del CPP, como la referente al mantenimiento de la misma sin valorar la prueba ya
incorporada, tampoco mencionaron cuales serían los actos que su persona haría para influenciar en
la víctima y menos se refirieron a la documentación presentada con su solicitud de cesación, lo que
sería contrario a las Sentencias Constitucionales Plurinacionales 1214/2014 y 0401/2012.
Así también indicó que, el art. 120.I de la CPE, fue vulnerado, por cuanto no existió imparcialidad en
los Vocales demandados quienes asumieron de forma indebida el papel de fiscales persecutores y de
tribunal sentenciador, puesto que se lo tomó como autor olvidándose de la existencia de principio
de inocencia, ya que en el Auto de Vista 186/2014, basan su decisión de mantener su detención
preventiva en la presunción ilegal que sería el autor del hecho.
Refirió que, el Tribunal ad quem empeoró su situación, puesto que no solo agravaron lo referente a
los peligros procesales sino respecto al tipo penal imputado y a la magnitud del delito de violación
agravada.
I.1.2. Derechos y garantías supuestamente vulnerados
La parte accionante consideró lesionados sus derechos a la libertad, al debido proceso, a la defensa,
citando al efecto los arts. 13, 22, 23, 115, 116, 119.II, 120.I y 410.I de la CPE; 7 de la Convención
Americana sobre Derechos Humanos; y, 9 de la Declaración Universal de Derechos Humanos.
I.1.3. Petitorio
Solicitó se le “otorgue” la tutela, dejando sin efecto el Auto 55/2014 de 25 de septiembre y el Auto
de Vista 186/20114, disponiéndose que las autoridades demandadas pronuncien nuevo fallo
realizando una correcta valoración de los elementos probatorios aportados y se efectué una correcta
interpretación del art. 235.2 del CPP.
I.2. Audiencia y Resolución de la Jueza de garantías
Celebrada la audiencia pública el 23 de octubre de 2014, según consta en el acta cursante a fs. 53 y
vta. de obrados, con la presencia del abogado de la parte accionante, ausentes el accionante, las
autoridades demandadas, quienes remitieron sus respectivos informes, y el representante del
Ministerio Público, se produjeron los siguientes actuados:
I.2.1. Ratificación de la acción
La parte accionante ratificó los términos de su memorial de acción de libertad.
I.2.2. Informe de las autoridades demandadas
Ernesto Félix Mur y Blanca Carolina Chamón Calvimontes, Vocales de la Sala Penal Segunda del
Tribunal Departamental de Justicia de Tarija, por informe escrito presentado el 23 de octubre de
2014, cursante de fs. 30 a 31 vta., manifestaron que: a) El negarle la cesación al ahora accionante no
quiere decir que se vulneraron sus derechos, siendo una facultad de las Salas Penales considerar y
resolver las apelaciones incidentales sobre medidas cautelares, tal como lo establece el art. 51 inc. 1)
con relación al art. 251 ambos del CPP; b) No es evidente que no asumieron el criterio de la SCP
“0836/2014”, ya que señalaron que las pruebas ofrecidas no sustentaban en forma integral la
cesación, haciendo hincapié en el desistimiento presentado y el posterior memorial que negó el
mismo, lo que constituye un manifiesto riesgo de obstaculización que no puede ser desapercibido; c)
En cuanto a la denuncia de imparcialidad se tiene que este es una apreciación a priori y precipitada y
sin ninguna base objetiva, puesto que los jueces no pueden esperar que las partes invoquen las
normas como los arts. 2, 47 y 86.13 de la Ley 348 de 9 de marzo de 2013 -Ley Integral Para
Garantizar a la Mujeres Una Vida Libre de Violencia-, al contrario para fundamentar sus resoluciones
deben respaldarlas sin esperar su solicitud expresa, debiendo guiarse no solo por las normas
jurídicas sino por los principios que apuntalan una correcta aplicación de la justicia, tales como la
eficacia, la eficiencia y la verdad material; d) Consideran un imperativo razonable la aplicación del
art. 348 del CPP, afirmando que no solo puede ser aplicada cuando sea invocada por las partes, sino
cuando así lo consideren los jueces como sustento de sus fallos, más aun tomando en cuenta la
violación agravada del caso de autos; y, e) La jurisdicción constitucional no es la que debe revisar las
medidas de coerción personal, correspondiendo tomar en cuenta el carácter provisional de las
mismas.
Norah Margoth García de Chavarría y Marcelo Prieto Balanza, Jueces Técnicos del Tribunal Segundo
de Sentencia Penal de Yacuiba, mediante el informe escrito de igual fecha, cursante de fs. 51 a 52,
señalaron que: 1) La decisión de mantener la detención preventiva del ahora accionante fue
dispuesta conforme al art. 221 del CPP, concordante con el art. 86.13 de la Ley 348, toda vez que el
acusado es militar y la víctima fue abusada sexualmente, siendo una mujer menor de edad y con
capacidad diferente, estando el riesgo de obstaculización latente; 2) Ese Tribunal emitió Auto de
apertura de juicio y señaló audiencia de juicio oral para el 20 de octubre de 2014, audiencia que no
se pudo instalar por la ausencia del abogado defensor, señalando una nueva para el 23 de igual mes
y año; 3) El art. 60 de la CPE, ordena la prioridad del interés superior de los niños y adolescentes, y
su acceso a la justicia pronta, oportuna y con asistencia; y, 4) Dieron cumplimiento con la SCP
“1481/2014” en cuyo caso idéntico de violación a menor se pidió la cesación en pleno juicio y el
Tribunal negó por que faltaban deponer testigos y el riesgo de obstaculización estaba latente, por lo
que solicitaron se deniegue la tutela.
I.2.3. Resolución
La Jueza Primera de Sentencia Penal del departamento de Tarija, constituida en Jueza de garantías,
por Resolución 09/2014 de 23 de octubre, cursante de fs. 53 vta. a 56 vta., denegó la tutela
impetrada; en base a los siguientes fundamentos: i) Los Jueces codemandados valoraron y
consideraron todos y cada uno de los elementos y fundamentos que fueron expuestos por la
defensa del accionante y también por los de la parte acusadora, por lo que en aplicación del art. 221
del CPP, decidieron mantener la detención preventiva del nombrado con la finalidad de asegurar el
desarrollo del proceso en mérito al peligro de obstaculización señalado en el numeral 2 del art. 235
del citado cuerpo legal, el cual también es considerado como un peligro procesal, por lo que no
emitieron dichas autoridades un criterio subjetivo sino que tomaron en cuenta la condición de la
supuesta víctima como niña y mujer frente a su presunto agresor, debiendo considerarse la SC
“1303/2003” de 8 de septiembre; y, ii) El Auto de Vista 186/2014, no vulneró el derecho al debido
proceso del accionante, ya que los Vocales demandados explicaron de forma precisa los criterios
jurídicos y constitucionales en los que basaron su determinación, situación que no puede ser
considerada como un acto de investigación o que hayan incurrido en la prohibición de reformatio in
peius ya que dicha fundamentación fue realizada en base a los agravios que fueron expuestos por la
defensa del accionante, tomando en cuenta la normativa legal vigente, misma que sirvió para
sustentar sus fallos, por lo que no es necesario que las partes deban invocar las mencionadas
normas legales.
II.
CONCLUSIONES
De la atenta revisión y compulsa de los antecedentes que cursan en obrados, se establece lo
siguiente:
II.1.
Por Auto 55/2014 de 25 de septiembre, dictado por Norah Margoth García de Chavarría y
Marcelo Prieto Balanza, Jueces del Tribunal Segundo de Sentencia Penal de Yacuiba del
departamento de Tarija -ahora codemandados-, dentro del proceso penal seguido por el Ministerio
Público contra “Ruring” River “Covarrubia” García, hoy accionante, por la presunta comisión del
delito de violación agravada, se denegó la cesación a la detención preventiva solicitada por el
nombrado (fs. 5 a 6 vta.).
II.2.
Mediante Auto de Vista 186/2014 de 8 de octubre, pronunciado por Blanca Carolina
Chamón Calvimontes y Ernesto Félix Mur, Vocales de la Sala Penal Segunda del Tribunal
Departamental de Justicia de Tarija -hoy demandados-, dentro del caso precedentemente señalado,
se declaró sin lugar el recurso de apelación incidental interpuesto por el ahora accionante,
confirmándose la Resolución impugnada, manteniéndose en consecuencia su detención preventiva
(fs. 7 a 9 vta.).
III.
FUNDAMENTOS JURÍDICOS DEL FALLO
El accionante alega como lesionados sus derechos a la libertad, al debido proceso y a la defensa,
puesto que las autoridades a su turno resolvieron denegarle su solicitud de cesación a la detención
preventiva a través de fallos carentes de fundamentación y valoración probatoria. Además los
Vocales demandados no se pronunciaron sobre los agravios denunciados en el recurso de apelación
incidental.
En consecuencia, corresponde determinar en revisión, si los hechos demandados son evidentes, a fin
de conceder o denegar la tutela impetrada.
III.1. Jurisprudencia reiterada sobre la obligación de fundamentación de las resoluciones sobre
medidas cautelares por el Juez cautelar y el Tribunal de apelación
Al respecto la SCP 2267/2013 de 16 de diciembre, dejó establecido que: “El Tribunal
Constitucional, en su uniforme jurisprudencia, ha señalado que las resoluciones sobre medidas
cautelares deben estar debidamente fundamentadas, conforme lo exigen los arts. 236.3 y 124 del
CPP, última norma que determina que las sentencias y autos interlocutorios deben expresar los
motivos de hecho y de derecho en que basan sus decisiones, y el valor otorgado a los medios de
prueba, no pudiendo ser reemplazada la fundamentación por la simple relación de los documentos o
la mención de los requerimientos de las partes.
En ese sentido, la SC 0012/2006-R de 4 de enero, ha señalado: 'La motivación de los fallos judiciales
está vinculada al derecho al debido proceso y a la tutela jurisdiccional eficaz, consagrados en el art.
16.IV Constitucional, y se manifiesta como el derecho que tienen las partes de conocer las razones
en que se funda la decisión del órgano jurisdiccional, de tal manera que sea posible a través de su
análisis, constatar si la misma está fundada en derecho o por el contrario es fruto de una decisión
arbitraria; sin embargo, ello no supone que las decisiones jurisdiccionales tengan que ser
exhaustivas y ampulosas o regidas por una particular estructura; pues se tendrá por satisfecho este
requisito aun cuando de manera breve, pero concisa y razonable, permita conocer de forma
indubitable las razones que llevaron al Juez a tomar la decisión; de tal modo que las partes sepan las
razones en que se fundamentó la resolución; y así, dada esa comprensión, puedan también ser
revisados esos fundamentos a través de los medios impugnativos establecidos en el ordenamiento;
resulta claro que la fundamentación es exigible tanto para la imposición de la detención preventiva
como para rechazarla, modificarla, sustituirla o revocarla'.
Del mismo modo, la SC 1141/2003 de 12 de agosto, citada a su vez por la SC 0089/2010-R de 4 de
mayo, ha sostenido que: '...la aplicación de una medida cautelar de carácter personal en el ámbito
procesal penal debe cumplir con las condiciones de validez legal, lo que significa que, la autoridad
judicial competente, para adoptar la decisión de aplicar la detención preventiva, de una parte, está
obligado a verificar y determinar la concurrencia de los requisitos previstos por el art. 233 CPP, para
lo que deberá contrastar la solicitud fundamentada del Ministerio Público con los elementos de
prueba presentados sobre la concurrencia de los requisitos, en el marco de las normas previstas por
los arts. 234 y 235 CPP; de otra parte, deberá fundamentar en derecho la decisión de aplicar la
medida cautelar de carácter personal, pues tomando en cuenta que uno de los principios
fundamentales inherentes al Estado Democrático de Derecho es la motivación de las decisiones de
las autoridades públicas, el juez está obligado a expresar los motivos de hecho y de derecho en que
se basa su convicción determinativa de la concurrencia de los requisitos, así como el valor otorgado
a los medios de prueba, esa fundamentación no puede ser reemplazada por la simple relación de los
documentos o la mención de los requerimientos de las partes; de modo que está obligado a
expresar los presupuestos jurídicos que motivan la medida, con cita de las normas legales aplicables
y la descripción clara y objetiva de los elementos de convicción concurrentes'.
En cuanto al Tribunal de apelación, la citada SC 0089/2010-R, señaló: '…está obligado igualmente a
dictar una resolución debidamente fundamentada sobre la necesidad de aplicar dicha medida
cautelar de carácter personal, explicando la concurrencia de los dos requisitos determinados en el
art. 233 del CPP. En ese sentido, se ha establecido que el Tribunal de apelación, está obligado a
motivar y fundamentar su Resolución, precisando los elementos de convicción que le permiten
concluir en la necesidad de revocar las medidas sustitutivas y aplicar la detención preventiva; a cuyo
efecto, debe también justificar la concurrencia de los presupuestos jurídicos exigidos por el art. 233
del CPP y una o varias de las circunstancias señaladas por los arts. 234 y 235 del CPP, mediante una
resolución debidamente fundamentada, conforme exige el art. 236 del CPP, puesto que sólo cuando
se han fundamentado debidamente estas dos situaciones, se puede disponer la detención
preventiva'.
Así también, la SC 0782/2005-R de 13 de julio, determinó que: 'Ahora bien, la exigencia de
pronunciar una resolución motivada en la que se establezca la concurrencia de los requisitos de
validez para determinar la detención preventiva, entendiendo por motivo fundado a aquél conjunto
articulado de hechos que permiten inferir de manera objetiva que la persona imputada es
probablemente autora de una infracción o partícipe de la misma y que existe riesgo de fuga y/u
obstaculización de la averiguación de la verdad no sólo alcanza al juez cautelar, sino también al
tribunal que conozca en apelación la resolución que disponga, modifique o rechace las medidas
cautelares, toda vez que si bien de conformidad con el art. 251 del CPP, las medidas cautelares
dispuestas por el juez cautelar, pueden ser apeladas y, por lo mismo, modificadas, ello no significa
que el tribunal de apelación cuando determine disponer la detención preventiva, esté exento de
pronunciar una resolución lo suficientemente motivada, en la que se exprese la concurrencia de los
dos requisitos que la ley impone para la procedencia de esa medida cautelar'.
Consecuentemente, la fundamentación de las resoluciones judiciales no sólo es exigible al momento
de disponer la detención preventiva, sino también cuando se rechaza la solicitud de cesación de la
detención preventiva, se determina la sustitución o modificación de esa medida o, finalmente,
cuando se la revoca; aclarándose que la fundamentación se exige tanto en las resoluciones
pronunciadas en primera instancia, como aquellas emitidas en apelación y en toda decisión judicial
conforme establece el art. 124 del CPP”.
III.2.
Análisis del caso concreto
A través de la presente acción tutelar el accionante denuncia que las autoridades
demandadas a tiempo de resolver su solicitud de cesación de la detención preventiva mediante el
Auto 55/2014, y el Auto de Vista 186/2014, vulneraron sus derechos a la libertad, a la defensa y al
debido proceso, por cuanto dichos fallos fueron dictados sin la debida fundamentación y valoración
de la prueba, denunciando además que los Vocales demandados no dieron respuesta sobre los
agravios denunciados en su recurso de apelación.
Antes de ingresar al fondo de la problemática, cabe establecer que el análisis se limitará al examen
de la Resolución de alzada, ello debido a que son los Vocales los llamados a revisar de acuerdo a los
principios de pertinencia y congruencia las resoluciones emitidas por los jueces en primera instancia,
marco dentro del cual corresponde pronunciarse directamente sobre la Resolución de segunda
instancia pues es a través de ésta que se deben analizar los supuestos de vulneración de derechos
fundamentales en que pudieran haber incurrido los jueces cuya resolución se conoce en apelación.
Ahora bien, en efecto cursa en obrados el Auto de Vista 186/2014, pronunciado por los
Vocales demandados ante el recurso de apelación presentado por la parte accionante impugnando
el Auto 55/2014, en el que las autoridades demandadas identificaron los siguientes agravios
manifestados por el accionante:
a)
La Resolución del Tribunal a quo no se encuentra conforme al ordenamiento adjetivo penal,
además que ese Tribunal hizo una incorrecta interpretación de la ley, sin aplicar la SCP
“08316/2014”, ni señalar el motivo por el cual no lo hizo, careciendo de la debida fundamentación y
motivación imponiendo un criterio subjetivo, vulnerándose así los principios de presunción de
inocencia y seguridad jurídica.
b)
Que el Tribunal a quo habría señalado que existiría influencia obstaculizadora al haber
presentado un desistimiento y luego un memorial negando esa situación, aspectos que habrían sido
objeto de valoración. Tampoco valoraron adecuadamente la prueba presentada, como la referida a
la certificación policial en la que se indicó que no existe denuncia alguna de actividad
obstaculizadora, amenaza a la víctima o a familiares. Además que de manera oficiosa incorporó el
hecho de que se presentó acusación formal, vulnerando el principio de imparcialidad, indicando
también que tenía señalada una audiencia para el juicio oral, siendo que ninguna de las partes
mencionó dicho extremo.
Al respecto y resolviendo la alzada, los Vocales demandados señalaron lo siguiente:
La SCP “0836/2014” hace referencia a la exigencia de la fundamentación de resoluciones y
señala que es factible la revisión de la cesación a la detención preventiva cuando se cumple la
previsión del art. 239 inc. 1) del CPP, debiéndose tomar en cuenta además que dicho fallo deviene
de hechos de corrupción, aspecto muy diferente al de autos, puesto que conforme al art. 15.II de la
CPE, se visibiliza a la mujer como sujeto de tutela especial para no ser considerada como un objeto
sexual y de manera particular a la niña, niño y adolescente, conforme el art. 60 de la Norma
Suprema.
Se insiste en haberse valorado el desistimiento presentado por parte de la víctima y un
posterior memorial que manifiesta que ese desistimiento no sería idóneo, en razón de que al no
saber firmar la nombrada fue prácticamente obligada a rubricar el mismo, aspecto que le resta la
eficacia jurídica y en ese sentido lejos de favorecer al imputado confirmaría el riesgo de
obstaculización.
De acuerdo a lo establecido en los arts. 2 y 47 de la Ley 348, no se encuentra violación
alguna de los derechos del imputado.
Las certificaciones emitidas por la Policía presentadas para acreditar que no existiría
obstaculización, no alcanzan para desvirtuar dicho peligro procesal, porque en los hechos de
agresión sexual que implica violación a la niña, niño o adolescente, como en el caso de autos, tanto
por la doctrina como por la ley se establece que el agresor tiene relación de poder sobre la víctima
de sometimiento de ésta a los designios de aquel, lo que implica que dada la edad, la contextura
física y la madurez psicológica del nombrado frente a la fragilidad de la presunta víctima, por lo que
el art. 47 de la Ley 348, pone en relieve esa circunstancia desigual para equipararle en el principio de
igualdad, tomando en cuenta que la víctima es una niña y que además es de capacidades diferentes.
Respecto a que el Tribunal a quo oficiosamente hubiese señalado la existencia de la
acusación y el señalamiento de audiencia de juicio, el Tribunal ad quem consideró que ello no era
evidente, puesto que lo único que hizo el a quo fue ubicar el momento procesal en el que se
encontraba el imputado, en ese sentido al mencionar la existencia de la acusación solo confirmó su
competencia ya que la acusación fue presentada en esa instancia, aspecto que no afectó su
imparcialidad o que se hubiesen incorporado hechos nuevos.
Sobre la vinculatoriedad de la SC “0301/2011” y la SCP “0836/2014”, señalaron que si bien la
jurisprudencia establecida en la primera Sentencia citada refiere que los peligros procesales
concretamente el de obstaculización puede persistir inclusive hasta la ejecutoria de la sentencia, y el
último fallo que determinó que los elementos que sirvieron para establecer la detención preventiva
no pueden permanecer indefinidamente en el tiempo; conforme se hizo mención, el criterio de
interpretación a emplearse debe partir desde la misma Constitución Política del Estado, inclinándose
la protección a lo dispuesto por ésta.
Finalmente, las autoridades demandadas consideraron que los nuevos elementos
presentados por la defensa no reunieron la exigencia establecida en el art. 239 inc. 1) del CPP, para
desvirtuar el riesgo de obstaculización en un delito de violación agravada de una niña con
capacidades diferentes.
En ese marco, en base a lo precedentemente manifestado por las autoridades demandadas,
se declaró sin lugar la apelación interpuesta y se dispuso mantener la detención preventiva del
accionante.
Ahora bien, conforme a la jurisprudencia constitucional referida en el Fundamento Jurídico
anterior, es una obligación de las autoridades judiciales a tiempo de emitir sus resoluciones la
exigencia de fundamentación de las mismas, y por consiguiente deben señalar los motivos de hecho
y derecho que sirvieron de base para la toma de sus decisiones, y claro está el valor otorgado a los
medios de prueba; por lo que tal como se tiene evidenciado de autos, y la relación efectuada en
forma precedente, los Vocales demandados a tiempo de pronunciar el Auto de Vista 186/2014 de 8
de octubre, justificaron razonablemente la decisión asumida, tomando en cuenta la prueba
presentada por el accionante y la normativa legal aplicable al caso concreto, aspecto que hace
conducente se deniegue la tutela impetrada.
Por lo precedentemente señalado, la Jueza de garantías al denegar la tutela, efectuó una correcta
compulsa de los antecedentes procesales, así como los alcances de esta acción tutelar.
POR TANTO
El Tribunal Constitucional Plurinacional, en su Sala Tercera; en virtud de la autoridad que le confiere
la Constitución Política del Estado y el art. 12.7 de la Ley del Tribunal Constitucional Plurinacional; en
revisión, resuelve: CONFIRMAR la Resolución 09/2014 de 23 de octubre, cursante de fs. 53 vta. a 56
vta., pronunciada por la Jueza Primera de Sentencia Penal del departamento de Tarija; y en
consecuencia, DENEGAR la tutela solicitada.
Regístrese, notifíquese y publíquese en la Gaceta Constitucional Plurinacional.
Fdo. Dr. Ruddy José Flores Monterrey
MAGISTRADO
Fdo. Dra. Neldy Virginia Andrade Martínez
MAGISTRADA
Descargar