Teórico 4 04/09/2015 Dictado por Libertad Borda Matrices culturales, géneros, productos, textos “El momento melodramático del asombro es el momento de evidencia ética y reconocimiento” (Brooks, 1976). “…sufrir a solas es perderse lo mejor del sufrimiento. *…+ El melodrama es un rito familiar y si uno no se sacude en la secuencia postrera, renuncia psicológicamente a la familia, la suya, la del género humano, y la básica, la que puebla las butacas circundantes” (Monsiváis, 2006: 29). [suenan https://www.youtube.com/watch?v=xx-AWMFGAeo suena “Malagueña salerosa”, son huasteco, en Enamorada (Emilio Fernández, 1946) y luego "La media vuelta", ranchera de José Alfredo http://www.youtube.com/watch?v=xKjMGhsK5rA] Jiménez, por Luis Miguel Bueno, hoy sí esperemos que podamos concretar el teórico sobre melodrama que el otro día no pudimos dar por el corte de luz. En la cursada de prácticos van a tener una unidad que es la unidad dos en la que específicamente se va a trabajar la relación entre lo popular y lo masivo, pero como dijimos en la primera clase es el eje prácticamente de toda la materia así que acá también, sobre todo en este caso, en el caso de estos teóricos que vienen ahora y en éste en particular, se van a expandir algunas zonas que están muy sintéticas en la cursada de prácticos, que sobre todo tienen que ver con un aspecto de la teoría de las mediaciones de Jesús Martín-Barbero que es la noción de matrices culturales. Y, en particular, nos vamos a centrar en la que para Martín-Barbero y para muchos otros es la matriz más arraigada en América Latina que es la melodramática, así que podríamos casi ponerle como título “dos siglos de melodrama”, un poco más de dos siglos, así que va a tener sobredosis, prepárense; cantado, actuado, escrito. Probablemente por eso se haya cortado la luz, por la energía melodramática. Justamente, en Jesús Martín-Barbero, en De los medios a las mediaciones, que es donde plantea su teoría, hay algunas zonas que están “sobredefinidas” en el sentido de que están definidas muchas veces, por ejemplo, la noción de mediación, lo que son las mediaciones, tienen un montón de definiciones y a veces eso conspira contra la claridad y otras, como en el caso de matriz, que son importantes casi no están definidas. Vamos a quedarnos con una definición de mediación, no vamos a hacer un rastreo de todas las definiciones. La más sencilla es la que dice que las mediaciones son "ese lugar desde donde es posible comprender la interacción entre el espacio de la producción y de la recepción". Ustedes no van a (re)leer De los medios a las mediaciones, sino un artículo que salió unos años antes, que siempre estamos viendo si lo cambiamos pero la verdad es que es muy sintético, es muy eficaz, entonces lo dejamos. En estos teóricos vamos a hacer un puente con esa propuesta de abordaje de la cultura de masas de Martín-Barbero. Como decía antes, dentro de su teoría la noción de matriz es evidente que es muy importante para él porque figura como título de la segunda parte de De los medios a las mediaciones: "Matrices históricas de la massmediación". Publica un libro un par de años después que se llama Procesos de comunicación y matrices de cultura, pero insisto, sin terminar de definir por completo esta noción, entonces ha habido una serie de intentos de arrimar el bochín por parte de otros autores. Una de las pocas cosas que Martín-Barbero dice respecto de la idea de matriz es que la matriz tiene que ver con la superposición de distintas temporalidades en la cultura, sobre todo en la cultura popular. Y también con las anacronías, con lo cual dice también que esto se relaciona con lo que Raymond Williams llama lo residual; eso supongo que lo habrán visto en alguna comunicación, materia de comunicación, la idea de lo residual en Williams como aquello que se conformó en el pasado, pero que tiene su plena vigencia todavía en el presente. Esta idea de matriz dialogaría con esa idea de lo residual en Williams, 1 pero no , es más amplia. Necesariamente para hablar de matriz tenemos que hablar de tiempos largos, por eso dijimos antes son dos siglos, más de dos siglos en el caso del melodrama, puede haber otras con tiempos más cortos, pero nunca una matriz se conforma en un par de meses. Como les decía es un concepto operativo que más que nada usa Martín Barbero, lo ejemplifica, pero que curiosamente fue apropiado por muchos autores porque evidentemente es productivo como idea. Uno de los autores que trata de explicar este concepto, por lo menos buscar los orígenes, de dónde proviene como metáfora, es un español que se llama Francisco Cruces, que está en la bibliografía. Él señala que probablemente la idea de matriz tiene que ver con el giro que mencionamos en la primera clase, que es lo que algunos llaman “giro a la recepción” que se da aproximadamente en los 80; dice Cruces: "la cultura dejará de ser situada al lado de los datos y las cosas, para ser reubicada decididamente del lado de los sujetos y sus puntos de vista". Se acuerdan que hablamos en la primera clase de que si bien es cierto que esto se produce durante los 80, hubo algunos intereses anticipados en el grupo de Ford, Rivera y Romano diez años antes. Eso es sólo una acotación, no quiere negar la influencia esencial de Martín Barbero, todos los trabajos de recepción en América Latina prácticamente se han apoyado en la teoría de las mediaciones de Barbero. Y por supuesto, obviamente, ni hablar de que también se da el giro a la recepción en el Reino Unido un poco antes, primero apoyado en la idea de decodificación, luego en la idea de consumo, 2 pero bueno, el punto es que es una corriente más amplia, no específicamente latinoamericana. Entonces, Cruces se pregunta de dónde podrá haber venido esta idea, porque es una metáfora la idea de matriz, la palabra matriz tiene un uso metafórico, entonces ese uso metafórico hace que tenga cierta 1 Específicamente afirma “decir matriz no es evocar lo arcaico, sino hacer explícito lo que carga el hoy, lo residual”, Martín-Barbero en De los medios a las mediaciones, México, D.F.: Gustavo Gili, 1987. 2 Este desplazamiento está bien explicado en la introducción de SUNKEL, Guillermo (coord.) El consumo cultural en América Latina. Construcción teórica y líneas de investigación. Bogotá: Convenio Andres Bello. ambigüedad; según cómo pensemos ese origen, que nunca fue explicitado, puede tener asociaciones distintas. Uno de los posibles orígenes, que es el que menos puedo explicar porque no sé nada de matemática, nada nada, es el matemático-informacional: según esta definición una matriz sería algo así como “un algoritmo que puede ordenar series numéricas y generar series nuevas”. Yo tengo que confiar en que eso es así, no tengo idea, pero bueno, parece que eso funciona así según los que saben. Ahora, por otro lado está la asociación más conocida que es la de matriz biológica, la matriz como útero, receptáculo reproductor de un ser que va a ser parecido, no igual; y por último la fabril, o sea, también una matriz se usa en la fábrica, por ejemplo, la matriz de los tornillos. Un molde en el que se funden objetos de metal que han de ser idénticos o que da forma a un material. Tanto sea matemática, biológica, fabril, de lo que se trata cuando hablamos de matriz es de una cosa (que puede ser un molde, un patrón, un útero), que va a dar lugar, de la que va a nacer otra con la que va a tener una relación de similitud o de identidad; en algunos casos, como el caso de los tornillos, son exactamente iguales, pero en otros no. Y esta mezcla de asociaciones es la que para Cruces hace que justamente este concepto sea tan productivo. Dice Cruces que lo que aporta la imagen de matriz a la consideración de la cultura es hacer hincapié en la cuestión de la productividad en la cultura, a diferencia de otras perspectivas que subrayan la reproducción; aquí se está haciendo hincapié en la productividad. También les elegí una cita de Cruces [powerpoint]: "la distribución matricial (como el molde, como el útero) permite replicar hasta el infinito series, formas, seres, que pueden ser idénticos, pero también variantes de una misma estructura" (Cruces, 2008, la negrita es mía). Perdón, alguien me preguntó, yo todas estas citas yo después se las pego en el desgrabado, así que no se preocupen. Me interesa sobre todo esto que plantea Cruces, esto de "permite replicar series, formas, seres"; ¿en qué sentido se puede replicar un ser? No estamos hablando de ciencia ficción, replicantes al estilo Blade Runner, pero sí promover cierto tipo de subjetividades, ciertos gestos, formas de sufrir, en el caso de la matriz melodramática, sobre todo formas de sufrir; cómo tengo que llorar cuando me dejan, cómo tengo que demostrarle mi dolor a alguien o cómo tengo que aceptar una traición o no, o resistir las atracciones, y así podemos poner muchos ejemplos. Y no es que se produzca, como dijimos antes, de idéntica manera en todas las realizaciones. O sea, la matriz melodramática que vamos a ir viendo en estas clases, podría tener variantes infinitas como las que van desde las telenovelas de Televisa a algunas películas de Favio como Nazareno Cruz y el Lobo a Douglas Sirk, que es un realizador alemán, pero que trabajó en Hollywood; Pedro Almodóvar; Fernando Gaitán, que es el autor de Yo soy Betty la fea; y así podemos encontrar muchos casos más. Pero no en estos ejemplos que puse, que son todos mediáticos, sino también en los gestos de las personas comunes, yo voy a poner estos ejemplos que también son mediáticos, pero porque son conocidos por todos, pero ustedes pueden bucear en su vida cotidiana y encontrar gestos melodramáticos probablemente en su vida diaria. Hace un par de años, cuando me tocaba dar este teórico justamente se acababa de producir el caso Ángeles Rawson. Yo no sé si lo recuerdan, fueron imágenes fuertes por lo cual probablemente lo recuerden, pero en un primer momento cuando todavía no se sabía quién había sido el asesino, cuando recién aparece el cadáver de ella, recuerdan que sale la madre a hablar y no tiene la actitud melodramática que todos estaban esperando, sino que está como anestesiada, dice incluso “bueno, son cosas que pasan, hay que perdonar…”. Era una reacción que todo el mundo comentó: “pero ¿cómo, qué pasa con esta mujer, cómo no grita, no llora, no se tira al piso, no hace escándalo?” Murió la hija de una manera espantosa y ella no tiene una reacción “normal”. ¿Cuál es la reacción normal? En este caso, la melodramática. Por eso eso, entre otras cosas, inmediatamente surge el rumor de lo raro que había en esa familia; son raros, el padrastro es raro, el hermano, bueno, empezó toda esta idea de lo raro que también tenía cierta relación con la falta de melodramatismo en ese primer momento. Algo de esto también, pero mucho más sutilmente porque era políticamente incorrecto decirlo, pasó cuando fue el encuentro entre Estela Carlotto e Ignacio/Guido; tampoco hubo momento melodramático porque ninguno de los dos tiene un perfil que lleve a esos gestos, pero sí recuerdo perfectamente a Eduardo Feinmann pidiéndolo “bueno, todos estamos esperando ese abrazo”, como diciendo “¿cuándo hay más emoción?, necesitamos esa toma melodramática”, que no fue así porque no era la trayectoria de ninguno de los dos. Pero también fíjense que dio pie a esos comentarios espantosos que uno no debería nunca leer, pero que uno termina masoquistamente leyendo en Infobae o cualquier diario online, comentarios que decían "eso está todo arreglado, es mentira, ya se conocían" o "no, es todo mentira, fíjense que ni se emocionan". Se usa como indicio esta falta de melodramatismo en algunos casos. Es sólo un pequeño desvío para decir que las matrices no sólo se van encarnando luego en textos sino también en estos gestos que se terminan aprendiendo y esperando. Volviendo a Cruces, lo que a él le interesa subrayar es que justamente ésta idea de matriz ayuda a verificar que la cultura no es sólo reproductiva, sino que también es productiva y sobre todo porque si puedo aprender ese gesto melodramático es porque ese melodrama de la cultura de masas hace inteligible mi propia experiencia, es decir, si yo estoy muy mal porque me dejó mi novio, escuchar determinada letra de una canción, o ver una escena de una película a lo mejor me explica mis sentimientos de una manera que no hubiera sido posible sin esa música o sin esa escena. Ese texto (y esa matriz) se toca con mi experiencia. Voy a hacer una crítica respecto de un comentario de Cruces al pasar, sobre todo para que lo tengan en cuenta para el final, cuando redondean todo la materia, piénsenlo desde Grignon y Passeron este comentario que les voy a marcar. Dice: El locus de esa productividad no se halla donde comúnmente se lo ha ido a buscar (en el mundo del trabajo, la conciencia de clase, la confrontación ideológica), sino en esferas marginalmente consideradas: la vida doméstica, el entorno barrial, el relato, el humor, la sociabilidad, la fiesta. La idea apunta a los procesos creativos de constitución del sentido en la vida cotidiana (…) (Cruces, 2008: 177-178. La negrita es mía). Mi crítica respecto de esta idea es que no es que esté mal lo que está diciendo, me parece que sí, que es correcto ir a buscar el sentido en la vida doméstica, el entorno barrial, etc. de hecho lo hacemos con las investigaciones que se han hecho en el marco de esta materia; pero con lo que no estoy de acuerdo es que “no se halla” la productividad en esas otras esferas. Va a haber productividad también allí, de otro tipo. Porque si no no se explicaría lo que estuvimos mencionando la primera clase y ustedes habrán visto en prácticos esta relación entre fiesta y protesta, fiesta y revuelta, si fuera algo tan completamente diferente, que no tiene ningún punto en común. De alguna manera estos comentarios son los que después dan pie a las acusaciones de populismo, porque de esta forma lo que se termina analizando son sólo aquellas situaciones protegidas, como la fiesta, situaciones en las que la dominación se ha puesto “entre paréntesis” porque la autoridad no es evidente en ese lugar, no es flagrante. [agrego esto para que quede más clara la objeción: el sentido se produce también en las otras situaciones, en las que la autoridad, la subordinación, la exclusión se enfrentan, se soportan, se resisten, se justifican, lo que sea, pero no se olvida. El olvido provisorio de la dominación puede ser un mecanismo para producir sentido en determinadas situaciones, justamente como las fiestas. Pero no puede haber olvido en el analista porque ahí es donde se cae en el populismo, no se puede olvidar que se trata también de culturas dominadas. Pero no avanzamos ahora en esto, ténganlo en cuenta a futuro. ] Pero bueno, es solamente un comentario para que lo tengan en cuenta. Como decíamos antes, si bien vamos a hablar de matrices en plural, la matriz que más se va a destacar es la matriz melodramática, que desde que la cultura popular adquiere un estatus académico relativamente legítimo (digo relativamente porque siempre estamos… no en el centro de la legitimidad academica), desde que se convierte en un objeto de estudio académico, el melodrama no podía dejar de entrar en el orden del día porque si hay algo que se puede decir del melodrama es que es obvio, muy visible. Ahora, curiosamente no recibió tanta atención en Argentina como en otros países, como Brasil o México, en el que hay muchos más estudios sobre el melodrama. E incluso en Argentina también parece que algo en nuestra tilinguería hace que esto pase, porque por ejemplo también en la industria sucede eso desde principios del siglo pasado, hay un texto de un colega de semiótica, Gustavo Aprea, que se llama "El melodrama negado", que dice que cuando todas las películas prácticamente tenían un fuerte componente melodramático en Argentina, la crítica nunca resaltaba el buen uso de los recursos melodramáticos, porque el melodrama (como cualquier código) puede tener un buen uso y un uso espantoso. Siempre en las críticas lo que se resaltaba era si esa película se adecuaba o no respecto del realismo, que es otro código. El melodrama no es realista. Puede tener un componente un poco más o menos realista, pero la verdad es que no se propone una presentación realista. Pero siempre se toma el realismo como el único modelo. A pesar de esta relación difícil con el melodrama, hubo intelectuales que siempre tuvieron una relación más cercana con el melodrama como es el caso de Manuel Puig. Ustedes no sé si habrán leído libros de Manuel Puig, los que no leyeron les recomiendo fervientemente que vayan a leer alguno ya: El beso de la mujer araña o Boquitas pintadas, La traición de Rita Hayworth, The Buenos Aires affair. Mi preferido es Cae la noche tropical. Prácticamente no se puede hablar de Manuel Puig sin hablar de la relación con el melodrama y con la cultura de masas en general. Pero en otros casos, esa relación fue mucho más difícil, era una relación negada como dice Aprea, y el que justamente reflexiona sobre esa negación es el propio Jesús MartínBarbero. No sé si lo escucharon alguna vez contar la anécdota, o la leyeron, él la ha contado muchas veces, tanto es así se le ha puesto el rótulo de “el escalofrío epistemológico” porque él cuenta ahí cómo fue su momento de revelación en el que él siente que todo tiene que pasar por el abordaje del melodrama, en América Latina la cosa está ahí. Luego lo van a escuchar en palabras de él, pero antes quiero mostrarles un pedacito de la película que él cuenta que va a ver con unos compañeros. Él es español, pero ya había estado trabajando como 15 años o algo así en Colombia, y entonces está en Cali y se entera de una película que hace muchas semanas que está en cartel, meses creo que era, ahora lo va a decir. Entonces decide ir a veral, pero antes de que él cuente la anécdota, porque aparte en sus palabras es más lindo, les muestro un pedacito de esa película que se llamaba La ley del monte, que es una película mexicana, no colombiana, mexicana, de 1976, y es obviamente muy melodramática, les voy a pasar un pedacito sólo, no se amarguen. Está subtitulado (...). [suena fragmento de La ley del monte (director: Alberto Mariscal) http://www.youtube.com/watch?v=pdNpZ0C_ZJ8], El morocho éste es un cantante muy famoso, después se hizo muy famoso, Vicente Fernández. La canción se las evito. Vamos a sacar la canción porque es too much. Si no, después me odian. Ésta era la película que verán luego que Martín-Barbero llama un “melodramonón” mexicano que había durado tanto tiempo, como seis meses, algo así, en Cali, y entonces cuenta lo que les pasa a y a sus amigos cuando se van a ver la película. [suena Martín-Barbero https://www.youtube.com/watch?v=q2i_LEe5l1U oímos hasta minuto 5 aproximadamente, pero es interesante lo que sigue] Por eso decía que prefería que lo dijera la tonadita mezcla de Castilla y Colombia. Agradezco a Carolina Spataro que me pasó el video, yo lo había leído siempre pero no había visto la anécdota contada por él. No importa si es exactamente así como sucedió, si le fue agregando datos o detalles, de tanto contar la anécdota, pero lo que me interesa es algo que tiene que ver con la cuestión de la autorreflexión, del lugar que ocupa el propio analista respecto del objeto. Ustedes van a tener que trabajar también con un objeto a lo largo de la cursada, se acuerdan que dijimos que tendrían una segunda evaluación, y siempre está bueno como ejercicio aunque después no se integre en el análisis, pero tener claro el punto de partida, ¿qué trae uno respecto de ese objeto también? ¿Qué prejuicios? ¿Qué odios o qué amores? Allí entonces empezó el interés de Martín Barbero por el melodrama, como decíamos, pero el melodrama ya había sido desde hacía varios años objeto de atención académica en Europa y Estados Unidos simultáneamente más o menos sobre todo por estos dos autores que tienen en la pantalla Uno no lo puse [la foto] porque no lo usamos como bibliografía, es Thomas Elsaesser, un alemán, un artículo pequeño pero que tuvo muchísimo eco sobre el cine de Douglas Sirk, el director que mencionaba al principio.3 También si pueden ver alguna película de Douglas Sirk véanlas porque son buenísimas. Es cine de género, es melodrama, pero un melodrama muy muy especial.4 Y este es el texto que ustedes tienen en la bibliografía (voy a seguir el ejemplo de Fabiola que le pone caritas, me gustó, entonces puse, no encontré con biblioteca porque hay pocas fotos de Peter Brooks) de 1976, The Melodramatic Imagination, puse la tapa en inglés porque realmente la traducción que hay es una traducción informal, no se hicieron traducciones oficiales de este texto, lo cual es una pena porque ha tenido muchísimo eco y debería estar traducido oficialmente. Posteriormente este interés va a ser recordado sobre todo por las feministas que se ocupan del cine.5 ¿Por qué les parece que será importante para las feministas el melodrama? [respuestas inaudibles] Por ahí sí, pero sobre todo porque desde la propia industria el cine melodramático del Hollywood clásico estaba en principio destinado específicamente al público femenino o así se decía, con algunos géneros, películas para mujeres (woman’s films), también llamados weepies, o sea, películas para llorar, estaban destinados a un público totalmente femenino aunque después todo el mundo terminaba viendo esas películas. Entonces, Peter Brooks es uno de los autores que informa, que influye sobre Martín-Barbero. Martín-Barbero se va a apoyar para hablar de melodrama sobre dos grandes pilares: uno es Peter Brooks y otro es Monsiváis, por eso incluí a los dos. 3 ELSAESSER, Thomas (1972): “Tales of Sound and Fury. Observations on the Family Melodrama”, Monogram, No. 4. 4 Puede ser Imitation of life, por ejemplo, o Magnificent Obsession, All that Heaven Allows… (esta última está subtitulada en youtube https://www.youtube.com/watch?v=3sPqBZmBy5I) pongo los títulos en inglés para que las encuentren si las buscan, porque las traducciones al español fueron varias. 5 Linda Williams, Laura Mulvey, Christine Gledhill, entre otras. Antes de seguir con Peter Brooks quería hacerles un comentario, porque por ahí les resulta un poco denso, nos vamos a ir a 1800 o antes, así que quería compartir la percepción de un cierto estilo de la época que hemos estado discutiendo con nuestros compañeros que es una dificultad (a veces desinterés, otras simplemente dificultad) que a veces se nota en los trabajos de ustedes, de los alumnos (no sólo de la UBA sino de otras universidades también), de pensar en la dimensión histórica de los objetos que aborda. Con lo cual no estamos queriendo decir que todos deben dedicarse a ser historiadores y a rastrear el pasado en archivos constantemente, pero sí entenderlo como un dato que necesita estar, lo histórico, porque no hay nada completamente nuevo en la cultura. Lo dice Bajtín respecto del lenguaje en el texto "El problema de los géneros discursivos", lo habrán leído en semiótica, "ningún hablante es un Adán". En la cultura también podríamos decir algo parecido, o sea, ningún sujeto cultural es un Adán. Todo lo que aparece en la cultura aparece cargado de sentidos previos, aunque sea para discutirlos, aunque sea para rebatirlos, para continuarlos, para mejorarlos, lo que sea. Lo dice mejor Benjamin (fíjense que estuve en Puán y por eso digo Beniamin y no Benyamin): [Ppt] “sólo a la humanidad redimida le concierne enteramente su pasado…” Walter Benjamin, Tesis sobre el concepto de historia. ¿Qué quiere decir? El texto es sobre el concepto de historia, bueno, solamente podemos liberarnos en la medida en que conozcamos nuestra historia, todo lo que vamos a trabajar es parte de nuestra historia cultural. Entonces, volviendo a Brooks, me interesa por un lado el rastreo que hace del origen europeo del melodrama como un género teatral que luego se va a convertir en matriz, comienza como un género teatral. Y luego qué características van a ir quedando del melodrama que van a pasar a formar parte de esa matriz, aunque él no lo llama matriz, en realidad Brooks lo llama una modalidad melodramática [mode] que se va a extender a otro tipo de textos. Por ejemplo, Steimberg no lo llama ni matriz ni modalidad, lo llama transgénero. Son distintas formas de rotularlo, pero similares en lo que señalan. Lo que suceden con la idea de matriz es que permite dialogar más bien con la recepción, a diferencia de transgénero que me parece más apuntando hacia los textos. En el caso del melodrama teatral europeo, sobre todo Brooks se va a centrar en el francés; hay melodrama también en Inglaterra y otros países, pero el que más influyó fue el francés y tuvo su período de apogeo entre 1800 y 1830. [ppt] Este género teatral tuvo la característica de abrevar en estas dos patas: por un lado las tradiciones populares y por otro lado elementos que provienen claramente de la modernidad. Es decir, las tradiciones populares que vienen de tiempos mucho más largos y, por otro lado, cuestiones que son mucho más nuevas. Dentro de las tradiciones populares, los romances, las baladas, pero sobre todo las actuaciones de feria, a esto le vamos a dar bastante importancia a continuación porque es lo que más va a marcar esa constitución del melodrama como forma teatral: pantomima, equilibrismo, acrobacia, todo lo que pasaba en las ferias primero medievales, luego renacentistas y que habrán visto con Bajtín también. Pero a la vez, el melodrama no podría haber surgido sin la modernidad, porque la modernidad va a aportar la urbanización; o sea, el melodrama es hijo de la ciudad, no surge en el campo; de la profesionalización del espectáculo y de la retirada de diversiones populares a lugares cerrados. Eso también está en el texto de Burke, no sé si lo van a ver en detalle pero está allí. De la plaza pública se va cada vez más empujando a las diversiones populares a lugares cerrados, se profesionalizan, empiezan a aparecer los actores profesionales, y también aparece la influencia de innovaciones tecnológicas que se van a usar fuertemente en el teatro. Todo esto por un lado, y por otro también algo que ya vieron con Fabiola, por ejemplo la cuestión de la homogeneización de la lengua. El melodrama ya no le está hablando al público de la aldea pequeña, de pocos habitantes, en la que sólo ellos van a entender su dialecto y tal vez los de la aldea de al lado no tanto; acá no, se trata del público de París, es un público mucho más amplio, por lo tanto las narraciones, como dice a continuación [ver ppt arriba] ya no van a poder tener referencias locales que no puedan ser entendidas por todos. Esto es lo que hace que algunos hablen del melodrama como narración anacrónica de la modernidad, porque es una narración de la modernidad, pero anacrónica porque trae elementos que son de siglos atrás. Una de las hipótesis que se manejan sobre el melodrama, señala Brooks, es que viene a reemplazar el espacio que deja la religión, con la modernidad se da el famosos “desencantamiento del mundo”, la caída del peso de las interpretaciones religiosas del mundo y entonces el melodrama vendría a cubrir el espacio que deja vacante el púlpito, el sermón del cura, como proveedor de fórmulas morales. El melodrama va a hacer eso, va a proveer fórmulas morales. Luego del desorden de la revolución, porque piensen que el melodrama es de 1800, ya la revolución francesa se produjo, entonces viene a poner las cosas en su lugar. Piensen que habrá sido una conmoción tremenda para esas personas ver cómo caían símbolos de siglos que nunca pensaron que iban a ser cuestionados, como la monarquía, entonces el melodrama pone de alguna manera la moralidad de nuevo en su lugar; bueno, no todo está tan confuso, hay cosas que son claras, pongamos todo en su lugar otra vez. Y también, según alguna interpretación, tenía la función reaccionaria de hacer que el pueblo olvidara de alguna manera la conciencia de la fuerza que tenía, de las posibilidades que tenía y contenerlo, volverlo al orden. Pero esto es una de las posibles interpretaciones, porque por otro lado, por ejemplo ahora vamos a ver que en el caso de la calle donde se instalaron los teatros melodramáticos, los teatros donde se realizaban actuaciones melodramáticas, que se llamaba Boulevard du Temple, pero la gente le decía Boulevard du Crime, que era boulevard del crimen o del delito, con lo cual no sabemos exactamente si en realidad lo que más quería ir a ver la gente era el mensaje moral o el mal desplegado con esa seducción enorme, pero bueno, simplemente sintetizamos las hipótesis que circulan sobre ese melodrama inicial. Volviendo a lo que les decía antes sobre los elementos populares que toma el melodrama, sobre todo es importante la cuestión de las tradiciones actorales, porque el surgimiento del melodrama está ligado a los avatares de los actores que trabajaban en las ferias que se realizaban en todas las ciudades, pero en el caso de París en las afueras de la ciudad; ustedes saben que las ciudades grandes medievales tenían sus murallas y alrededor de estas murallas se realizaban estas ferias. Tenemos acá un par de grabados, este grabado es de 1670 de la feria de Saint-Germain. Fíjense que ya no hay ese despelote de la plaza pública medieval, está todo bastante ordenado. Acá tenemos un teatro en la feria de Saint Lorraine: En París había tres ferias que duraban como hasta cinco semanas cada una, no al mismo tiempo, entonces era como 3, 4 meses al año que la gente podía ir a las ferias a ver todos estos espectáculos. Uno de los espectáculos que parece más tenía éxito era la acrobacia, entonces ahí ya empieza a darse el seguimiento de alguna figura, de manera muy incipiente, pero de cierta relación del público con lo que luego van a ser estrellas o actores, porque aparecían acróbatas que se destacaban, entonces sabían que estaba en esta feria, después iba a estar en la otra y los iban siguiendo. Algunas ferias eran muy viejas, por ejemplo en el siglo XII, otras eran más nuevas, del siglo XVII. Con los años, estos que se llamaban teatros de ferias en Francia pasan a integrar una clasificación que se da en Francia que son los teatros secundarios por contraposición a los teatros oficiales. Ahora voy a explicar por qué se dio esta clasificación. Y casi todos estos teatros estaban situados en esta calle que yo les decía que se llamaba Boulevard du Temple. ¿Se acuerdan de que Fabiola habló de los boulevares en París y explicó para qué se realizaron? Era para que pudieran las tropas entrar con mucha más tranquilidad a reprimir y todo esto, pero eso fue después. Luego el Boulevard du Temple va a ser demolido, pero en 1838 (fecha del daguerrotipo6 de abajo) todavía existía. 6 Uno de los daguerrotipos más viejos existentes. Se había construído a lo largo de lo que antes era el muro de Carlos V. Cuando se demuele el muro de Carlos V, que es una de las murallas de París, se hace este boulevard donde van a ubicarse todos estos teatros. Esto es sólo un detalle que me parece divertido, que es la primera foto en la que aparece un ser humano. No salían los seres humanos porque eran muy rápidos, al estar en movimiento no salían, pero éste que está lustrándose las botas salió. Sólo por eso se lo puse, es un dato de color. Sobre el Boulevard du Temple, éste es un grabado de 1862, pero fíjense la cantidad de teatros que había uno al lado del otro. Todos estos eran teatros no dedicados a las obras de la alta cultura, sino teatros secundarios. ¿Cuál era la diferencia entonces entre los teatros secundarios y los teatros oficiales? Que los otros, los oficiales, tenían su repertorio autorizado de obras que se parecen más a lo que actualmente podemos pensar como una obra de teatro, una obra con diálogo; en cambio los teatros secundarios tuvieron prohibido durante casi un siglo utilizar diálogo, se les prohibía utilizar diálogo, solamente podían hacer gestos, movimientos, por ejemplo acrobacias, lo mismo que hacían en las ferias podían hacerlo en esos teatros. ¿Pero qué pasaba? Que en realidad, al estar en un lugar confinado, porque fíjense que eran teatros cerrados, acá (figura anterior7) tienen la salida de uno de los teatros, cada vez las obras se habían ido complejizando y se parecían más a las obras del teatro legítimo en términos de incluir un argumento más complicado y diálogos. Entonces se da esta puja entre los defensores de los teatro oficiales, que dicen que esto así no puede seguir porque estas personas, esta gente que monta estos espectáculos, que todavía no era melodrama pero se iban acercando a eso, producen algo en el público que no es conveniente permitir. ¿Qué querían decir? Que enardecían demasiado al público, el público se enardece demasiado, todos las explicaciones que han ido leyendo (supongo que ya han ido leyendo a Burke y los argumentos que ponía sobre las críticas a las prácticas populares, bueno, se repetían más o menos ese tipo de críticas) y entonces esta prohibición del diálogo en los teatros populares tiene que ver con esta corriente de reforma de la cultura popular. Paréntesis: ¿se acuerdan de que Fabiola les marcó esto, ojo, no confundan la reforma religiosa porque eso nos pasa muchas veces en los finales, les pedimos “hablá de la reforma de cultura popular” y hablan de Lutero. Lutero es parte de la reforma (con minúscula), pero no solamente, ¿sí? También los católicos fueron parte de la reforma de la cultura popular. En resumen, todo esto tiene que ver con esa corriente que están viendo en los prácticos de disciplinamiento de las viejas tradiciones populares que ya no son funcionales a la nueva estructura de poder. Y por otro lado el teatro legítimo con estas prohibiciones lograba una distinción mayor, eran los únicos que tenían un repertorio con diálogo y con obras mucho más largas. Los otros les representaban una competencia que pudieron controlar por un tiempo de esa manera, pero ese tiempo fue largo, fue como un siglo más o menos. Estos pequeños teatros que se habían formado con esos actores de feria, o sea, en esos teatros habían confluído esos actores de feria, ahora ya está dentro de la ciudad, ya no están afuera, ya se habían eliminado esas murallas, ya están en la ciudad y tienen que hablarle a ese nuevo público. Es un público nuevo que reúne personas de orígenes diversos y entonces durante mucho tiempo tuvieron que arreglarse para evitar el diálogo y de todas maneras mantener la atención del público. ¿Cómo lo lograban? Con los gestos, con el maquillaje, con el vestuario, con la música, escenografía y todo eso. Como muchas veces pasa, las transgresiones surgen de la prohibición. El hecho de que se le prohibiera el diálogo hizo justamente que se remarcara mucho más, todo el acento era aquello sí podían hacer pero además también buscar maneras de eludir esa prohibición. ¿Cómo la eludían? Porque fíjense que no se les negaba hablar, pero sí el diálogo, era raro eso. Entonces a veces hacían monólogos, monólogos con mudos; eso es muy gracioso, ponían a un personaje mudo o un animal con el cual podían dialogar, o si no pasaban cartelitos con explicaciones de lo que estaban viendo o con versos que todos conocían. Porque acá tenemos que tener claro algo que ustedes me imagino que ya saben o sospechan, que es la profunda implicación del público en estas representaciones teatrales populares. A diferencia de la recepción más distanciada del público más culto, que siempre tiende a aplaudir mucho más controladamente, hasta el día de hoy pasa esto, el público popular se expresaba muy ruidosamente. 7 Es un grabado que representa el Théâtre des Folies-Dramatiques (c. 1835). Lo que me interesa a mí acá es remarcar es el linaje plebeyo del melodrama. El melodrama no se produce por degradación de la tragedia o de géneros cultos, sino por confluencia de todas estas tradiciones populares en intersección con la modernidad. En Francia, la revolución termina por abolir el monopolio de los teatros oficiales y ahí es cuando surge el melodrama, porque ahí sí ya no hay prohibición, el diálogo puede fluir y empieza a surgir el melodrama francés; en Inglaterra es un poco posterior, porque la prohibición como no hay revolución dura más tiempo. Entonces contemos un poquito de qué se trataba esto del melodrama. Lo que tenemos como testimonio de la época son pinturas que reflejan o intentan reflejar ese momento del surgimiento del melodrama, y fíjense que el interés fundamental está en la reacción del público más que lo que pasaba en los escenarios. [ppt: L'entrée du théâtre de l'Ambigu-Comique à une représentation gratis. Louis Léopold BOILLY (1819)] Tenemos esta pintura en que se presenta la entrada de uno de los teatros, con representación gratuita con lo cual el público es un público popular; acá también un día de espectáculo gratuito. [ppt: Une loge, un jour de spectacle gratuit. Louis Leopold Boilly (1830), es decir “Un palco, un día de espectáculo gratuito”+ En este otro, una mujer que se desmaya, se llama "El efecto del melodrama"; obviamente si se desmayaba alguien tenía que ser una mujer. [PPT: Louis Léopold Boilly: “L’effet du mélodrame”, 1830.+ Y éste es el único en el que sí aparecen representados los actores y el escenario. Así, sin saber nada de la obra, ¿qué se supone que puede haber pasado? En ese momento, ¿qué habrá pasado? [Honoré Daumier: “Mélodrame”, circa 1860.] Alumnos: Hay un muerto. Un muerto, ¿y además? Fíjense cómo está la mujer y cómo está el otro hombre. Alumnos: Un engaño… Puede ser, pero pareciera que la está acusando, yo por lo menos lo interpreto como que él la acusa, parece como que la señala; porque si hay algo que caracteriza a los melodramas es que los virtuosos, ¿cómo sabemos que son virtuosos? Ella es buena, ¿por qué? Alumnos: el vestido es blanco… Exactamente. Ella tiene un vestido blanco, tiene que ser buena. Eso era así, imposible que fuera de otra manera, la vestimenta y los gestos estaban fuertemente codificados, ya lo estamos viendo acá. Pero sobre todo al pintor le interesa el público. Fíjense que en el primer plano, aunque en penumbras, está el público. Éste es un pintor conocido, Honoré Daumier, es un grabado; están todos muy metidos en lo que está pasando, así como se veía en los otros anteriores. Vamos a hablar de características del melodrama según Brooks: el aspecto narrativo que caracteriza al melodrama, que es lo que va a retomar después Barbero, es que la moral logra exponerse, no quedan cabos sueltos, la moral se impone, los buenos triunfan. El triunfo de la virtud es la clave. La recompensa de esa virtud puede estar o no, la víctima puede casarse con el noble, o puede recibir una herencia, este giro puede estar o no estar; lo más importante es que sea reconocida esa virtud y esa verdad, esa verdad que puede llamarse identidad real, en el sentido de que la cambiaron al nacimiento por otro bebé pero también que no la cambiaron, pero la acusaron (como decíamos a cuento de la pintura) injustamente de algún delito, entonces su identidad de honesta ha sido des-conocida. Cuando Barbero después va a hablar del “drama del reconocimiento” lo está tomando de Brooks. Brooks es el que plantea esta idea del drama de reconocimiento, pero lo que quiere decir con esto del “drama” es la “escenificación” de un proceso de reconocimiento de un personaje virtuoso que pasa de ser des-conocido al momento de re-conocérsele esa virtud y esa identidad. En principio, ¿por qué cae en desgracia la virtud, o los virtuosos? Por acción de los villanos, por lo que suelen caer en lugares espantosos como cárceles, hospicios, mazmorras… La mazmorra era un escenario habitual en el melodrama. Entonces, por un lado, está el villano que actúa, pero también, en gran medida, muchas de las cosas que le van a pasar son por obra de la casualidad. Vieron cuando a veces se dice sobre una telenovela “pero todo eso que pasa es por casualidad”. Bueno, al fin y al cabo, son las reglas del melodrama, el melodrama es casualidad, no tiene que tener toda una explicación psicológica: el malo es así porque le pasó esto de chiquito. No, es malo porque sí. O pasó que encontraron por casualidad la medallita que acredita que es hijo del Conde y no es hijo de la mucama, pura casualidad. Otra de las cosas que son importantes narrativamente, y también para Barbero, es que durante gran parte de la obra teatral el personaje virtuoso injustamente acusado o desconocido no puede decir la verdad, no puede hablar, no puede defenderse porque ha hecho una promesa, sobre todo un voto familiar de silencio. Por ejemplo, el padre, le hizo prometer en su lecho de muerte que nunca va a decir “x cosa”, no sé qué. Toda la obra, casi todo el tiempo no puede defenderse porque esos votos hechos bajo lazos de sangre son inviolables, son sagrados. Por eso dice Brooks que más que luchar, la víctima (que casi todas las veces eran mujeres, pero puede no ser una mujer, puede ser un hombre) la víctima más que luchar resiste. Esto después, en melodramas posteriores va a cambiar, ustedes me pueden decir “no, pero en la telenovela tal no es así”, luego van a cambiar estas cosas, no es que va a quedar todo fijo, van a quedar algunos rastros, pero otras cosas van a cambiar, por ejemplo los personajes femeninos se van a volver mucho más fuertes y ya sí van a luchar, no solamente resistir. Los cuatro pilares del melodrama, luego vamos a ver que se retoman en el cine mudo, son, en términos de personajes, la víctima, el villano, el héroe o justiciero y el bobo. Esto no quiere decir que fueran cuatro, sino que eran como cuatro categorías o actantes en las que claramente se insertaban los personajes. Desde el punto de vista de la interpretación actoral, se caracterizó, eso sí lo relatan los testigos de la época, por una actuación emocional no naturalista; fíjense, los gestos mismos del cuadro (“Mélodrame” arriba) dan cuenta de esto. No es natural, no son gestos que uno haría cotidianamente. El melodrama no es cotidiano en ese sentido, no muestra reflejar ninguna cotidianeidad, todo lo contrario. Todo tiene que ser muy evidente, piensen que estamos en un teatro sin micrófonos, se tenía que escuchar, había que gritar, había que moverse por todo el escenario y todo tenía que quedar muy claro para todos, incluso desde el vestuario; como decíamos antes, sabemos que la víctima está vestida de blanco, por lo tanto tiene que ser buena y así era en todos los casos; el villano estaba vestido de negro, tenía un sombrero que le cubría los ojos, y un bigote que hacía que fuera difícil leer sus intenciones. Todo tenía que ser muy claro y muy codificado. Ponerse la mano en la frente como hace acá o tirarse los cabellos es señal de desesperación, dar saltitos es gesto de alegría y así en otros casos. Brooks va a hablar de que el melodrama implica una retórica hiperbólica y simple que trabaja con la pureza y el extremo, la polarización, o el maniqueísmo. Luego veremos que este maniqueísmo después se va a actualizar de diferentes maneras. Se puede actualizar como extremos de emoción, de alegría y de tristeza, de alegría y de dolor, pero también en términos de clase (esto lo vamos a ver la clase que viene), los ricos y los pobres u otras posibilidades. O por ejemplo los habitantes del campo y los de la ciudad. Toda esta estética está al servicio de producir asombro en el público. Por eso se llama el capítulo que les puse de Brooks "La estética del asombro", porque se representa esta idea de que la verdad te deja apabullado, completamente obnubilado. Otra cosa que no mencionamos es que la puesta en escena era fundamental, es uno de los primeros géneros teatrales en los que se le presta tanta importancia a la puesta en escena. Estamos hablando de unas puestas en escena bastante sofisticadas, en las que les llevaba a lo mejor 3 ó 4 meses montar un espectáculo porque necesitaban muchos efectos, efectos que podían implicar una inundación, una erupción de un volcán, una mazmorra que se levantara. Ustedes van a decir ¿en esa época hacían eso? Y sí, se las arreglaban. No era realista, digamos, no es que aparecían llamas verdaderas, pero tenían que lograr ese efecto en el público, un efecto de auténtico terror o auténtica emoción, lo que fuera que quisieran provocar... puentes levadizos, todo lo que necesitaran las obras, que eran bastante complicadas en su trama. Y para esto también era importante la iluminación. Es decir que todo esto tiene relación con lo que dijimos antes, con esa vieja prohibición del diálogo. Fíjense que se ponía mucha más importancia en los movimientos, en los gestos, el maquillaje, el vestuario, la escenografía que en la palabra misma. Y una de las cosas que no mencionamos todavía y que es crucial para el melodrama es la cuestión de la música. ¿Por qué digo que no podemos olvidar...? MELOdrama. Por el origen etimológico, ya la palabra melo, música en griego, indica que la música tuvo que tener una importancia fundamental. Es el primer momento en el que se constituye la idea de música incidental. Esto no existía como idea antes, y de lo que se trata es de remarcar cómo se debe reaccionar, entonces poner una música fuerte en el momento culminante como para llamar la atención del público: “Uy, va a pasar algo, va a haber una revelación”. O estamos en una fiesta y se escucha música alegre y de repente música de suspenso; bueno, “todo se va a pudrir”, ya sabemos que debemos prepararnos por la música. Esto que hoy en día ya lo tenemos un poco naturalizado, en algunos casos cuando vemos una película ya casi no lo escuchamos, y saben que ha sido criticado por algunas corrientes cinematográficas como el Dogma8 esta idea de la música incidental. Bueno, nace ahí, nace con el melodrama. Por ahí les parece absurdo entrar en tanto detalle sobre ese melodrama original, bueno, les pido que tengan paciencia porque apunta a esta idea de buscar luego qué fue 8 El Dogma o Dogma 95 fue un movimiento fílmico propuesto por Lars von Trier y Thomas Vinterberg. Pueden encontrar una síntesis de su manifiesto aquí: http://extracine.com/2007/09/1995-manifiestodogma. quedando de todo esto. Les propongo que hablemos de una de las últimas cuestiones de este melodrama original que es un mecanismo que usaban, no les puedo mostrar imágenes de esto, porque justamente en una imagen fija no se apreciaría el efecto. Porque lo que pasaba era que en un momento de la actuación podía suceder que al terminar una escena, cuando querían remarcar el efecto, sobre todo de asombro ante una situación, se quedaban todos como inmóviles en lo que se llamaban cuadros, tableau, o tableau vivant, cuadros vivos, era como un cuadro, una fotografía pero con los actores en escena. La función que tenía este tableau era justamente didáctica, indicar al público cuál debía ser su reacción. Les puse aquí el nombre de este autor DALLEMBACH, Lucien (1991): El relato especular, Madrid: Editorial Visor, . 1ra. edición en francés, 1977. porque de alguna manera, antes se leía, no sé si ahora lo dan en semiótica, Dallembach propone un concepto que es el de puesta en abismo y dice que hay relatos que ponen en abismo su propio relato, por ejemplo se acuerdan en Hamlet que hay un momento en el que se representa una obra de teatro que tiene el mismo argumento de Hamlet y así otros casos, por ejemplo, el cuadro de Las meninas (de Velázquez) muestra el proceso de pintura de Las meninas. Bueno, a ese tipo de cosas él las llama puesta en abismo, pero también hay otras puesta en abismo según él del público (o del lector, según el caso), que pretenden ser didáctica. Es decir, si yo muestro a un público integrado a lo que estamos mostrando, de alguna manera pretendemos una identificación, que puede darse o no, puede fracasar, pero la intención está. Volviendo al melodrama, ese tableau en el que todos quedan “guau, era la hija de Fulanito que creíamos muerta”, remarca lo que pretendían que fuera el efecto en el público, que a todos les quedara muy claro que eso era lo importante del momento. Esa reacción que les enseña, o se intenta enseñar al público, es una reacción moral, es decir, que la verdad los tiene que dejar “culo pa’ arriba”. La verdad golpea, quedaron todos así mudos, quietos, ustedes, público, también tienen que quedar igual. Esta función didáctica del melodrama, que después va a retomar sobretodo Monsiváis, también la reconocían los mismos contemporáneos. Por ejemplo, Guilbert de Pixérécourt, que era uno de los autores más famosos, más exitosos de melodrama, fíjense que él también lo admite: "el melodrama es un medio de instrucción para el pueblo porque este género por lo menos está a su alcance" (Reflections sur le mélodrame, 1823). Es un poco condescendiente, pero bueno, era obvio que fuera así en esa época. Como dijimos entonces el melodrama tiene una fidelidad extrema a esos orígenes de pantomima, de los teatros de feria, por eso van a encontrar que están llenos de mudos, muchísimos mudos, mutilados también. Luego va a haber otras discapacidades exhibidas; en el caso del radioteatro va a estar lleno de ciegos. Pero de todas maneras siempre va a ser mucho más importante el cuerpo, la escenografía y la música que la palabra. Y otra cosa que plantea Brooks es que el género tenía como un costado democrático en el sentido de que el villano siempre era el poderoso; porque de hecho, la verdad que un villano sin poder no es villano. Usa el poder para joderle la vida a las víctimas, que por otro lado pertenecen a un universo más democrático en el sentido de que no creen en el mérito del origen sino en el mérito moral. Él llama a esto la fraternidad de los buenos, los buenos tienen que juntarse más allá de si son pobres o ricos. Por eso es que después Barbero va a decir que hay un mecanismo de negación de los conflictos en la cultura de masas que se ve claramente en el caso del melodrama, pero no son de cualquier conflicto, en los conflictos de clase, porque, fíjense, ¿en qué sentido está negado? Porque si bien está presente esta oposición, pobres y ricos, muchas veces la víctima es pobre y el villano es rico, el conflicto no está planteado en términos de clase, sino de moral: el problema es que ella es buena y él es malo, no que ella es pobre y él rico.9 A mediados del siglo XIX empieza la decadencia del melodrama como género teatral y justamente es cuando empieza a manifestarse como matriz, porque la decadencia del melodrama teatral se solapa con el surgimiento del folletín. Ustedes tal vez lo habrán visto en historia de los medios supongo, saben que se trata de esta publicación por entregas de una ficción que era melodramática. Solamente quiero mencionar qué quedó en ese folletín del viejo melodrama. O sea, hay cosas que desaparecen por imperativo del lenguaje; obviamente no hay gestos porque el folletín es escrito, no hay música porque es escrito. Pero sí quedan las tramas, ahora mucho más intricadas porque a lo mejor un folletín está publicándose durante un año y medio. Lo que tienen de diferente, la novedad fundamental es la serialidad. Hay un autor que trabaja esta idea de serialidad, que es Roger Hagedorn: [ppt] HAGEDORN, Roger (1995): “Doubtless to be continued. A brief history of serial narrative”. En Allen, Robert (ed) To Be Continued. Soap Operas Around The World, Routledge, London. Hagdorn dice que ésta es la primera vez que un relato se convierte en mercancía porque se empieza a incluir el folletín en los periódicos para lograr vender más ejemplares. Pero si bien es cierto que se hace para eso, también tiene un efecto de implicación mucho más fuerte con el público, porque si yo todavía el relato siento que no está terminado, como lector pienso que puedo incidir en el rumbo de ese relato, y ahí empiezan las cartas de lectores y los pedidos para dar más importancia a unos u otros personajes o cosas así. Aquí ya claramente estamos en el reino de lo masivo, de manera mucho más clara. El melodrama teatral es el momento mismo de su surgimiento, según lo marca el propio MartínBarbero, que dice acá vemos un ejemplo de cómo nace la cultura de masas, pero con el folletín ya está constituída y en marcha, se está hablando a grandes masas de lectores, que de todas maneras realizaron una apropiación que no siempre estaba prevista. Acá tienen uno de los más exitosos que fue Los misterios de París, de Eugéne Sue. 9 En cambio, Matthew Karush (vean teórico 5 y 6) insistirá en que la oposición pobres y ricos, a pesar de que se presenta como una oposición moral, no deja de ser un planteo de clase en el cine argentino del 20, 30 y 40. Esta es la publicación del folletín ya terminado y completo, pero acá en esta otra imagen tienen, no se ve muy bien, pero el folletín salía en la parte de abajo, en el pie del diario (Journal des débats, 18/6/1842):10 Duró como un año y medio, algo así, y este es un caso interesante, lo menciono solamente porque se es un ejemplo bastante trabajado. El autor, Eugéne Sue, parece que heredó muchísima plata a los 26 años y se la patinó, en 7 años se quedó sin guita, y si antes escribía por placer tuvo que pasar a hacerlo para vivir. Entonces alguien le aconseja que en un folletín incluya personajes de los barrios pobres de París y él, como no conocía esos barrios va a ver esos lugares que le resultan exóticos y los integra en el relato con un éxito tremendo, al punto de que la gente se implica tanto con esos personajes que le piden que aparezcan muchas más veces,11 le mandan plata para que ayude a la familia, entran en el juego. Es un caso interesante, ¿se acuerdan cuando hablábamos de Gramsci en la primera clase y el origen de los cantos populares? El origen en este caso es la cultura de masas, pero ese relato entra en ese mundo popular de una manera muy fuerte. Esto es lo que plantea Umberto Eco, en El lector modelo, habla justamente de Los misterios de París y dice 10 Es demasiado pequeña la imagen pero se advierte una línea en el tercio inferior que separa el texto del folletín del resto. 11 Los folletines tenían tantos personajes que los escritores los dosificaban, dejaban a algunos durante días o incluso semanas, y el público podía impacientarse. “Señalado por Marx y Engels como modelo de perorata reformista, el libro realiza un misterioso viaje en el ánimo de unos lectores que volveremos a encontrar en las barricadas de 1848, empeñados en hacer la revolución porque, entre otras cosas, habían leído Los misterios de Paris. ¿Acaso el libro contenía también esta actualización posible? ¿Acaso también dibujaba en filigrana a ese Lector Modelo? Seguramente; siempre y cuando se le leyera saltándose las partes moralizantes o no queriéndolas entender” (Eco en El lector modelo) En todo momento nos encontramos esta diferencia, esta asimetría, entre producción y recepción. Es decir, hay una bajada de línea que proviene del viejo melodrama que ahora ya está en el folletín también; el melodrama tiene un mensaje moral muy claro y en el folletín también. Pero sin embargo parece que no habían entendido tanto los de la comuna de París porque leyeron Los misterios de París e igual hicieron las barricadas. El propio Gramsci también se queja del caso italiano, en el texto Literatura y vida nacional, se lamenta de que justamente los escritores italianos no tenían esa llegada con los públicos populares que sí tenían los franceses, entonces se preguntaba por qué los italianos no aprendían a escribir folletín como los escritores franceses. Y dice algo que muestra que la tenía muy clara Gramsci con respecto a la herencia popular del folletín, dice [ppt] “El carácter retórico de géneros populares como el melodrama, está relacionado con el hecho de que el gusto popular no se formó con la lectura ni con la meditación íntima de la poesía y el arte, sino con las manifestaciones colectivas, oratorias y teatrales” (Gramsci, Literatura y vida nacional) Está haciendo referencia a tiempos largos, el gusto popular se viene formando en esa decantación y superposición lenta que mencionábamos al principio de tradiciones que no son ni individuales ni pasan por la escritura ni tampoco por el texto escrito, el libro como lo concebimos nosotros, sino más bien por la performance, por el teatro, por la oratoria y por la lectura colectiva, no individual. Dejamos aquí el folletín porque no me voy a detener más en esto. El melodrama ya en tanto matriz va a volver a actualizarse en el cine mudo, era obviamente muy esperable que fuera así, era natural, dada se deuda con la pantomima. Vamos a ver unos ejemplos muy pequeños de cine mudo. Saben que la música se tocaba en vivo en el momento en el cine mudo, un pianito, una orquesta, según la importancia que tuviera la película o el cine, pero en las películas mudas que se conservan algunas están sin sonido, y la verdad es que hoy nos resultan insoportables, entonces siempre pongo como ejemplo una escena de ésta que se llama Huérfanas de la tempestad [Orphans of the Storm]que en realidad está basada en un melodrama teatral, Este es el afiche de la película, que es de 1921 de David Griffith y ésta es la obra de teatro original que fue súper exitosa y que tuvo un montón de realizaciones cinematográficas, sólo voy a mostrar un fotograma para que vieran, lo que me interesaba es que vieran la gestualidad; la protagonista es Lilian Gish, que es una de las primeras estrellas del cine mudo. Me interesa que vean que así como probablemente fuera la gestualidad del melodrama teatral era la gestualidad del cine mudo. En este caso, la historia es transcurre durante la Revolución Francesa, en los días que anteceden, llegan dos hermanas a París, una de ellas está ciega y la otra la acompaña para que se opere, que la vea un médico, y ya tenemos el elemento melodramático de la fidelidad a los lazos familiares: ella le prometió a la hermana que no se va a casar hasta que ella no vea, por muy enamorada que esté no se puede casar porque le prometió a la hermana ciega. Esa fidelidad primordial de la que habla Martín-Barbero está también en el cine mudo. Entonces, llegan a París, se encuentran con un villano que la secuestra a una de ellas y ella se encuentra acá rodeada de villanos muy malos como verán en esta cara, son muy malos Fíjense cómo las sombras que marcan la maldad, se la están a punto de violar en una orgías espantosa y ahí es donde ella pide ayuda. Acá ven que está tratando de zafar y llega el defensor que yo si lo veo en realidad pienso que es el villano, está pintado, los ojos, parece un mapache. Pero de todas maneras él es el bueno, porque antes de esto, ustedes no lo vieron, pero él estuvo repartiendo pan a los pobres, es bueno; es el Chevallier Du Vaudrey. En este caso van a encontrar los mismos actantes del melodrama original teatral en el cine mudo. En este caso, en esta película, creo que no había ningún caso de bobo, pero sí en esta otra, Way Down East, que me volví loca rastréandola porque Monsiváis hacía una referencia a esta película pero sin poner el nombre y yo decía ¿a qué película está haciendo referencia? Hasta que deduciendo entendí que era Way down East, nuevamente de Griffith, que se tradujo como "Las dos tormentas". Les paso un pedacito porque es tremendamente larga la escena y medio intolerable.. [fragmento del final de Way Down East, Griffith, 1920): https://www.youtube.com/watch?v=MgD4_GEvl2s ] La película trata de una mujer que es engañada, por supuesto una mujer buena, virtuosa, que es engañada por un rico que finge casarse con ella, pero es un casamiento falso y ella queda embarazada, tiene un hijo, el hijo encima se muere, es trágica, terrible. Anna, la protagonista, tiene entonces la desgracia de haber tenido un hijo fuera del matrimonio, es madre soltera (aunque el hijo haya muerto) y es la peor cosa que le puede pasar a una mujer, entonces se tiene que ir de la casa, se va a un lugar donde no la conoce nadie, pero aparece alguien del pasado que la delata “esta mujer tuvo un hijo soltera, está manchada, blablabla” entonces ella desesperada se lanza a la tormenta de nieve que está desatándose. Disculpen por la imagne, pero está toda la película en un estado genial (para una de esa época), justo ese final no se ve bien. Pero bueno, les quiero mostrar solamente porque Monsiváis va a ejemplificar con esta escena la diferencia entre cine latinoamericano y cine de Hollywood. No solamente que está en una tormenta de nieve, sino que se desmaya y se rompe el témpano donde ella flotaba y el témpano flota hacia una catarata!! o sea, ella se va a morir inexorablemente; de algún modo se está insinuando que ella quiere morirse, en realidad está medio desmayada, no sabemos bien. Pero aparece el defensor, que es un chico que estaba enamorado de ella y trata de alcanzarla, no se ve un pomo. Yo digo que parece la ranita del videojuego que va saltando de témpano en témpano. Es una escena que dura como 5 ó 6 minutos, es larguísima. Ahí la salva. Era obvio que era una muñeca por lo liviana [risas]. Pobrecita, che, la actriz se habrá congelado filmando esto. Y también quería mostrarles el final bastante extraño en el que hay un casamiento múltiple, todas las parejas que aparecieron en la película se casan al final y ahí sí claramente aparece el bobo, fíjense la pareja ésta que aparece acá son los bobos de turno. [sigue película] Me interesaba que vieran al menos esta parte [los dos hombres se besan por error]. Es bastante raro para la época. Y acá, esto es más raro todavía, fíjense, ¿qué pasó ahí? [se besan en la boca la suegra y la novia, dos veces] ¿Qué pasó? Parece que no la entendí, Griffith por favor vení y explicame. Nada, era un detalle divertido. El beso final fue mortal. El beso final no es con el novio, es con la suegra! es rarísimo. Ésta es de un año antes, es de 1920. Como les decía antes, por un lado en el cine de Hollywood estaban las películas claramente melodramáticas que estaban destinadas a las mujeres, y que se llamaban weepies, pero por otro lado esta idea de matriz se va a verificar en que cualquier película de Hollywood de ese período tiene un componente melodramático; es decir, un western, el western más duro de esa época, del 20, 30, va a tener algún momento melodramático. John Wayne puede ser durísimo, pero va a haber un niño o una mujer que lo conmueva y va a haber momento fuertemente melodramático. Pero no vamos a detenernos en Hollywood porque nos interesa más América Latina, solamente quería marcar que el melodrama no es una prerrogativa latinoamericana, no es que nos apropiamos solamente nosotros del melodrama, también está imbricado firmemente en el cine más influyente del mundo. Piensen que es el cine que influye más en todo el mundo el de Hollywood y el que puede exportar sus fórmulas que no son sólo narrativas, sino también de comercialización. Por un lado está el sistema de estudios, el sistema de estrellas; todo esto tiene que ver con formas de comercialización. En el caso de América Latina, el contexto sociopolítico va a ser diferente y esto es lo que va a dar un costado distinto al melodrama latinoamericano, y luego vamos a ver que pasa en el caso argentino. La matriz se va sesgando según elementos del contexto. Me interesó incluír el texto de Carlos Monsiváis para hablar de América Latina porque entiendo que no se ha leído mucho en la carrera a Monsiváis y es un autor que ha influído muchísimo en muchos otros. Hay una compañera de la cátedra que se llama María Terán, a lo mejor algunos de ustedes la tienen como docente, que está escribiendo su tesis de doctorado sobre las crónicas de Monsiváis. Monsiváis es un autor que escribió mucho en periodismo y también como académico. Esto permite que yo pueda poner estas dos imágenes, porque por un lado está la clásica, la que está a la izquierda, como las que señalaba Fabiola con los libros, con el agregado de la computadora, el dato más moderno, pero por otro lado está esta otra imagen que ¿pescaron de dónde vienen? ¿Lo llegaron a ver? Al principio de la clase, cuando a lo mejor todos no habían llegado, pasamos el videoclip de "La media vuelta", yo se los puse en Facebook el miércoles. El videoclip de "La media vuelta" de Luis Miguel, algunos dicen como que fue un momento re importante para la historia cultural de México porque se movió media humanidad (mexicana) atrás de su filmación, todos los relacionados con la industria del melodrama participan en ese video (todos no, pero bueno, muchos) incluso Monsiváis. Éste es el minuto 2.53 en el que está él en esa especie de salón, el video está ambientado en una hacienda que también fue escenario de muchas telenovelas y mezcla la ficción y realidad o pasado y presente en esa escena, en la que se buscó de alguna manera reeditar el viejo cine mexicano. Al principio vimos, y también se los puse en Facebook, no sé cuántos lo vieron, una escenita12 de una película que es Enamorada, de Emilio Fernández, lo puse para que vieran cómo se intentó imitar ese viejo cine de la época de oro del cine mexicano que era a blanco y negro, pero tenía una fotografía hermosa, de Gabriel Figueroa que era uno de los más conocidos directores de fotografía de la época. Y ahi se pretende, en ese videoclip, imitar la estética del cine de oro mexicano, la actriz pretenden que se parezca a María Félix (la actriz de Enamorada, y de muchas otras) está maquillada y peinada para que se parezca un poco más. ¿Por qué está Monsiváis en este video? Porque él escribió muchísimo sobre melodrama, es un autor que se maneja con mucha soltura en el mundo de lo popular o más bien está a horcajadas entre el mundo culto y el mundo de lo popular. Hace poco María Terán recordaba una anécdota que me parece divertida la anécdota porque los muestra a los dos de cuerpo entero, a él y a Sarlo. Parece que cuando grabó el video (1994), en algún momento habla por teléfono con Beatriz Sarlo, eso lo cuenta Beatriz Sarlo en un artículo, y cuando él le contó que había participado en el video de Luis Miguel, dice Sarlo “a mí la situación me daba vahídos”, pero Monsiváis se lo contó muerto de risa, se había recontra divertido haciéndolo, tenía una actitud muy desprejuiciada para con el melodrama. Van a encontrar muchos conocidos en ese video; no sé si son conocidos para ustedes, salvo que haya alguna delirante que mire El canal de las estrellas... siempre encuentro a alguien que mira El canal de las estrellas, aunque no lo crean hay estudiantes de comunicación argentinos que miran El canal de las estrellas. 12 Una investigadora sobre el tema del melodrama, Silvia Oroz, dice que esa es una de las escenas mejor filmadas del cine mexicano. Insisto en recalcar que en Martín-Barbero influye Brooks, pero también Monsiváis, y él lo dice, dice que muchas de las cosas que él va a sostener en De los medios a las mediaciones sobre el cine mexicano como un cine que tuvo mucha importancia sobre la identidad nacional en México, las toma de Monsiváis, las aprendió de él o las advirtió gracias a Monsiváis. Lo que más va a reforzar Monsiváis y que tal vez, a pesar de esta admisión de Barbero me parece que está mucho más fuerte en Monsiváis que en Martín-Barbero es la cuestión de la dimensión didáctica del melodrama. Para Monsiváis el pueblo latinoamericano deriva su educación sentimental del melodrama. Creo que justamente, porque él se ocupa más del cine y de otras manifestaciones, es que no se ocupa tanto del drama de reconocimiento, porque el drama de reconocimiento es retomado mucho más fuertemente con la televisión, con la telenovela, no tanto por el cine. El texto que ustedes tienen para leer de Monsiváis se llama "Se sufre porque se aprende". En otro momento, en otro texto anterior, escribió algo parecido, con algunos fragmentos iguales pero no todos, donde había dicho “Se sufre PERO se aprende”. Tiene un matiz distinto. Va a hacer un recorrido en ese texto por distintas zonas donde se manifiesta esa matriz melodramática (aunque él no lo va a llamar matriz, lo va a llamar LO melodramático), que viene desde muy lejos, del siglo XIX y antes, en América Latina dice ya en el teatro, en la poesía, encontramos este desborde emocional de sentimientos antes de en los medios de masas propiamente. Y luego sí va a hablar del cine, de la música popular, y les puse algunos géneros musicales; nosotros no vamos a poder seguir todo el recorrido porque vamos a tener que hablar de otras cosas, más de Argentina, pero les hice un pequeño resumen de algunos géneros melodramáticos que él va a trabajar: la ranchera, el tango y el bolero; el bolero lo puse entre corchetes porque lo menciona en otros textos, pero también tiene un componente melodramático fuerte. Luego la telenovela, el talk show y la crónica roja o crónica periodística sensacionalista, que son todas zonas que son bastante esperadas; a ver, uno normalmente piensa el melodrama en relación con estas manifestaciones, pero en cambio éstas últimas tres que puse en un costado me parece porque son menos mencionadas normalmente: por un lado el discurso religioso, ya no tanto en la imaginería (porque hay otros autores, por ejemplo Guillermo Sunkel,13 que habla de la imaginería de las iglesias latinoamericanas, en algunos 13 Sunkel, Guillermo (1985): Razón y passion en la prensa popular. Un estudio sobre la cultura popular, cultura de masas y cultura política. Santiago de Chile: ILET. casos como muy melodramáticas en el sentido de representar vívidamente la sangre, las e corona de espinas, los ornamentos dorados, mucho desborde allí), pero Monsiváis hace más hincapié en la cuestión de los terribles castigos que aparecían en los sermones que se pronunciaban en el púlpito y que eran realmente algo que después se va a retomar, esto del castigo, en el cine latinoamericano y sobre todo en el mexicano. Él va a hablar después de narrativas admonitorias. En el cine mexicano está muy fuerte esta idea del castigo para el pecado, sobre todo para el pecado en las mujeres, las pecadoras siempre son mujeres; los hombres pecadores pueden salvarse, las mujeres jamás. Y por otro lado también el discurso político. En otros años este teórico viene a continuación del teórico que da Pablo sobre peronismo, entonces ya ustedes tienen escuchado el discurso de Evita, pero a lo mejor lo han escuchado; hay varios discursos de Evita que son profundamente melodramáticos, pero sobre todo el del día de renunciamiento, lo cual tiene que ver también con el hecho de que ella era una actriz, sin decir esto peyorativamente, yo soy peronista, pero es innegable la impronta melodramática en su enunciación. No solamente en el gesto, en la entonación, sino en algunas metáforas que usa, como por ejemplo, “las guaridas asquerosas” de los oligarcas, “restañar las heridas”; es un lenguaje marcado por el melodrama.14 Bueno, me estoy quedando sin voz, creo que ya podemos ir dejando. El recorrido de Monsiváis no es estrictamente cronológico, les digo para cuando lo lean, esperemos para la próxima clase puedan tener leído a Monsiváis y también Karush, es un poco largo, Monsiváis va a alternar Argentina, México, algo de Brasil, pero más que nada habla del público brasileño; porque el cine brasileño también fue melodramático, pero acá no llegaba, no se veía, así que no nos interesa tanto. Pero digo, más allá de que hay saltos cronológicos y geográficos, lo que me interesa es ver que él está hablando de cómo funciona esta matriz, aunque insisto, no mencione la palabra matriz. Antes les ponía más ejemplos mexicanos y siempre había alguien que me preguntaba por qué tanto México y probablemente a ustedes les puede llamar la atención por qué poner ejemplos de México, pero no les hubiera llamado la atención a sus abuelos porque las personas que iban al cine durante la década del 30, 40 y 50 veían películas mexicanas con cierta regularidad; el cine mexicano se exportó al resto de América Latina, todavía hoy siguen exportando telenovelas, pero en su momento era el cine y yo por ejemplo que nací en el 60, hagan la cuenta, ya cuando iba al cine cuando era chica todavía daban las películas en continuado que no sé si todavía en algún lugar del país se siguen dando. En mi infancia se daban tres películas y uno podía llegar a cualquier hora y ver las tres, todo el día pasarse adentro del cine (claro que casi nadie soportaba eso), pero por ahí había alguna película que una llegaba a la mitad. Entonces después faltaba ver la primera mitad y la madre de una decía “dale, vamos que se hace tarde”; “no, ¡quiero ver la primera mitad!”; “Pero ¿ésta, la mexicana?, dejate de joder”. Siempre como que la mexicana ya en ese momento era la menos importante, era como que ya no tenía importancia. Pero llegué a ver todavía películas mexicanas y en décadas anteriores, las principales figuras, Jorge Negrete, María Félix, vinieron a Argentina, pasaban por Radio El Mundo, que era el living de Susana de la época y todos los conocían, eran estrellas conocidas. En cambio ya La ley del monte (ver antes) probablemente no la hayan dado; es casi seguro que no la llegaron a dar. Además, México tuvo la 14 Pueden escucharlo en https://www.youtube.com/watch?v=HF_RI0xK0xU. particularidad, eso lo vamos a mencionar la clase que viene, que fue el lugar en el que terminaban recalando aquellos que o no tenían suerte en Argentina o eran prohibidos por alguna razón, como Niní Marshall, Tita Merello, Libertad Lamarque. Ahora los dejo y la clase que viene retomamos, traten de leer. Gracias. ¿Queda alguna pregunta? [suena “Se dice de mí” por Tita Merello: https://www.youtube.com/watch?v=mfBW66KSSVQ] Desgrabación: Agustín Alabarces Revisión: Libertad Borda