Encefalopatía espongiforme bovina

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Encefalopatía espongiforme
b ovina
El siguiente informe, facilitado por el Gabinete de Pren.ra de la E^rabajada Britániia
de Madrid, recoge la situación actual de la EEB en el Reino Unido y una
descripción detallada de la enfermedad, según se contempla en el
Manual OIE (Volumen III, enmienda 1, marzo de 1990).
La Encefalopatía espongiforme bovina (EEB) es una alteración neurológica progresiva y últimamente fatal para el ganado bovino. La enfermedad fue
identificada por primera vez por el Laboratorio Central de Veterinaria del
Reino Unido en noviembre de 1986.
Desde estonces se han registrado alrededor de 13.000 casos de animales enfermos en más de 6.000 explotaciones
del país. En la mayoría de dichas explotaciones, el 63 %> se ha registrado
un solo caso. Otro pequeños focos de
la enfermedad se han detectado en Irlanda del Norte y en la República Irlandesa. La enfermedad ha sido declarada oficialmente en el Reino Unido
desde junio de 1988 y en el norte de
Irlanda desde noviembre del mismo
año.
La enfermedad
La EEB pertenece a un grupo de enfermedades denominado encefalopatías
espongiformes transmisibles que incluye la enfermedad «Scrapie» (del texto
5ó
original) de las ovejas y la «Creutzf^ldt
Jakob» (CJ), una demencia asociada a
trastornos neurológicos que afecta al
hombre.
Su período de incubación es muy largo y puede durar a varios años, sin que
exista ningún test que permita detectar la presencia de la enfermedad sobre el animal vivo.
sos compuestos que contienen material
proteico procedente de ovejas afectadas por «Scrapic». F.n consecucncia, lus
restos procedentes de };anado bovino
enfermo de EEB, pueden haber formado parte de los piensos durante cierto
tiempo.
La actuación conjunta de divcrsos
factores precipitaron la uparición dc la
En el ganado enfermo es posible la
identificació ❑ de la enfermedad sólo a
través de los síntomas clínicos que típicamente se manifiestan como el estado nervioso del animal y su comportamiento incoordinado. La presencia de
la EEB puede determinarse mediante
un examen histopatológico del tejido cerebral tras la muerte del animal.
enfermedad en 1986 posteriormente al
incremento de animales expuestos al
agente causal entre 1981 ó 1982. Entre estos factores cabe destacar el incremento de la cabañx bovinu, un probable aumento en la incidencia de la
enfermedad dcl «Scrapie» en dicho ganado y diversos cambios en los sistemas de renderin};, todu ello en los años
70 y principio de los 80.
La causa
Medidas de actuación
Diversos estudios epidemiológicos
indican que la EEB tiene un común y
extendido origen epidémico, causado
inicialmente, con casi toda probabilidad, por alimentar el ganado con pien-
Tan pronto como se determinú el posible agente causal, se prohibió la alimentación de los animalcs rumiantes
con piensos que contuviesen proteínas
derivadas de otros rumiantes, prohibiMUNI)O 6ANADERO 1990-7
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.
Número mensual y anual de ataques con evidencia clínica
N.° de casos
800
600 ^
ción que se hizo efectiva en julio de
1988. Por lo tanto, la fuente probable
de la EEB ha sido eliminada y la inexistencia de alguna otra vía de contaminación hace prever que esta mcdida permitirá la erradicación de la enfermedad dentro de diez años.
400
200 ^
AMJJASONDJFMAMJJASONDJFMAMJJASONDJFMAMJJASONDJF
88
^
89
^
87
•
^
85
86
Ataques con evidencia clínica (mes/año)
Distribución del número de casos sospechosos y confirmados
por explotación en abril de 1990
Porcentaje
^o
sa
50
40
30
20
10
0
1
2
3
4
5
6
7
8
9
10 11 12 13 14 15 > 15
N.° de casos por explotación
Incidencia específica sobre la edad de las explotaciones con al menos
un caso confirmado de BSC
La carne y estructura dsea de los rumiantes puede ser utilizada en la alimentación de otras especies no rumianres, tales como cerdos y aves puesto no
creemos (según cita el informe OIE)
que representen algún riesgo para estas especies. Realmente, en ninguna
parte del mundo se ha detecrado la aparición natural de esta cnfermedad en
las especies citadas, lo que hace improbable que sean susceptibles a la infección. Prueba de ello es yue restos de
carne y huesos procedentes de rumiantes hayan sido causa ampliamcnte y durante muchos años en la alimentación
de cerdos (en una proporción doble a
la utilizada en la dieta de los rumiantes y administrándose durante todo el
cebo) sin que haya aparecido ningún
caso de animal enfermo. Para más dutos, diversos experimentos realizados en
EE.UU., fracasaron e ❑ su intento de
probar la posible transmisión a los cerd05.
U ❑ informe pericial independicnre
del Partido Laboralista, realizado por
el profesor Sir Richard Southwood de
la Universidad de Oxford concluye que
es muy improbable que la «EEB tenga
alguna implicación para la salud huma-
,o „
na». La Scrapie, una de las enfermedades perteneciente al grupo de encefa-
J^. --
lopatías transmisibles, se ha manifestado como enfermedad endémica en la
cabaña nacional durante 250 años, sin
que haya habido ninguna evidencia de
que haya transmitido, o pueda hacerlo, a los humanos. Aún así, se recomendó aplicar diversas medidas de precaución con respecto a la EEB en el país.
Tipos de ganado vacuno infectado por EEB
Entre ellas, y desde el 8 de agosto de
1988, la de sacrificar obligatoriamen-
Aptitud
cárnica
Aptitud
lechera
Número de cabezas enfermas y
posiblemente afectadas
4980
550
N.° total de cabezas del censo de Ingláterras,
Escocia y Gales
40,858
(12,18%)
54,334
(1,01 %)
MUNDO GA111ADER0 1990-7
te todo el ganado susceptible de padecer la EEB, y la destrucción, mediante
incineración o entierro, de sus cadáveres, para impedir su introducción en
la cadena de alimentación. La medida
incluía una compensación económica
para los ganaderos que tuvieran que sacrificar animales. Por otra parte, desde diciembre de 1988 se impuso la pru57
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hibición de utilizar la leche procedente de animales posiblemente infectados,
a pesar de que nunca se haya demostrado que la leche transmita alguna encefalopatía espongiforme.
Igualmente el Gobierno ha prohibido para el consumo humano el uso del
cerebro, espina dorsal, bazo, timo,
amígdalas e intestinos de animales mayores de seis meses sacrificados en el
Reino Unido. Esta es una medida de
máxima precaución para la protección
de la salud pública que impide la incorporación de despojos susceptibles de
estar infectados por el agentede la EEB
a la dieta humana. Esta medida es aplicable, salvo en el caso de terneros menores de seis meses de edad; en este caso, los terneros no han sido alimentados con las proteínas animales causantes de la enfermedad; incluso si se
hubiera demostrado la transmisión vía
materna, el agente infeccioso (de forma similar que en la enfermedad «Scrapie») no podría detectarse en ningún
tejido de un animal de dicha edad.
Las medidas tomadas con respecto
a los despojos tienen el objetivo de evi-
tar cualquier mínimo riesgo para la salud pública, aunque basándonos en
nuestro conocimiento de la enfermedad
Scrapie, es altamente improbable que tal
riesgo se pueda presentar. En consecuencia, la carne procedente de animales sanos es perfectamente sana y no
presenta riesgos para la salud pública,
afirmación confirmada por el Comité
Científico Veterinario de la Comunidad
Europea.
Programas de investigación
Tan pronto como la EEB fue identificada como una nueva enfermedad, se
inició un programa de investigación,
dotado con más de 2 millones de libras
esterlinas, para estudiar varios aspectos de la enfermedad, incluyendo su
epidemiología, patología y posibles vías
de transmisión. También fue establecido un comité consultivo, bajo la supervisión del Dr. David Tyrrel, del
Consejo Médico de Investigación, para establecer las líneas prioritarias del
programa. EI informe del Comité se hizo público en enero de 1990, y tras conocerlo, el Gobierno aceptó las conclu-
siones del Dr. Tyrrcll aumentando el
presupuesto del prugrama cn 12 millo❑ es de libras a dedicar durante los tres
primeros años del mismo al estudio de
la EEB y enfermedades similares en
otras especies. Inevitablemente, scrán
necesarios varios años para conocer los
resultados de tales trabajos.
Transmisicín entre animalcs
Hasta el momento no existc la evidencia de yue la EEB pueda contagiarse
entre animales en condiciones naturales, tanto enrre madre y tcrnero, como
entre animales no emparentados.
Las investigaciones en marcha, darán una respuesta definitiva a cstas
cuestiones, pero los resultados no podrán saberse hasta pasadus unos años,
debido al largo período de incubación
de la enfermedad. Incluso aunyue estos
contagios se produzcan, no hay riesgo
para la salud humana dadas las medidas de precauciún que se han comadu.
Semen y embriones
Tampoco existe evidencia de trans-
Resumen de las conclusiones del Consejo
de Ministros de Agricultura de la CEE
EI pasado 6 y 7 de junio el Consejo de Agricultura de la CEE
aprobó las conclusiones del informe elaborado por el Comité
Cientíhco de Veterinarios, obtenido a principios de año, por
el que se declara que la carne de vaca procedente del Reino
Unido no entraña riesgo para la salud pública. A continuación se resumen estas conclusiones:
y tejidos linfáticos durante la preparacieín de la carne de bovino para consumo en fresco.
Las partidas de carne yue requieran scr exportadas con hueso, deberán presentar al inspector veterinario oficial del matadero una declaración que confirme la ausencia de la EEB en
la granja de procedencia, al menos desde hace dos años. De
Los cupos abiertos de carne de bovino procedentes de los acuerdo con tal declaración, el inspector podrá certificar la carne
países donde se ha declarado la EEB, no se consideran peli- pata su comercio en la CEE.
grosos para la salud pública. Sin embargo, como medida de
La certificación deberá contener el certificacio EC 60 csprecaución deben eliminarse, durante el proceso de preparatandar enmendado como sigue:
ción de la carne, todos los nervios y tejidos linfáticos de los
Cuotas abiertas para la carne fresca de bovino procedenproductos con destino al consumo humano. Estos tejidos se destruirán y tampoco entrarán a formar parte de alimentos desti- tes de ganado de explotaciones en las yue no ha sido contirmada la EEB desde dos años antes de las últimas cuoras.
nados al consumo humano en los cupos cerrados.
Los ministros de Agricultura de la CEE concluyen que la carne
Las restricciones temporales impuestas por Francia, Alemabritánica puede ser exportada a otros países miembros de la nia e Italia, han sido levantadas y el comercio está reestableciCEE, exportación sujeta a ciertos cambios en los certificados do en todos los países miembros de la CEE, en base a la nueva
necesarios y que son los siguientes:
certificación.
La carne de vaca procedente de animales de cualquier propiedad puede comercializarse en la CEE en ausencia de huesos. El Certificado Europeo de Salud (EC 60), firmado por un
inspector veterinario oficial contiene una declaración oficial
relativa a los cupos abiertos sobre la eliminación de nervios
5ó
La OIE ( Organización Internacional de Epizootias) informú
sobre la EEB el pasado diciembre de 1)89 concluyendo que
con las medidas de precaución establecidas, la carnc y leche
del ganado procedente de los países donde existe la EEB, no
tienen peligro para la salud humana.
MUNDO 6ANADERO 1990-7
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misión de la EEB por vía del semen o
de los embriones. Diversos estudios sobre la enfermedad «Scrapie» de las ovejas demuestra que el agente causal está ausente en ellos. Las investigaciones
en curso pretenden demostrar que ocurre lo mismo en el caso de la EEB y el
ganado vacuno.
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Futuro de la enfermedad
Predecir el futuro curso de la EEB
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HAUP,
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transmisión vía materna podría retrasarse el proceso pero no sería posible
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