Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente Sinergia Promoción de la colaboración en materia de tratados ambientales Número 5 junio 2001 La colaboración en cuestiones de interés común Por Robert Hepworth, Director Adjunto, División de Convenios Ambientales del PNUMA Contenido 1 La colaboración en cuestiones de interés común 3 Hacia un marco mundial para el asesoramiento científico 4 Información actual izada sobre los tratados ambientales 5 Calendario de reuniones 6 Mares regionales: El espíritu de Mónaco 7 Convenio de Basilea: la sinergia en la práctica Una vía práctica para alcanzar una sinergia auténtica entre las secretarías de los convenios y otros organismos ambientales es identificar los temas específicos que son de interés para varios de ellos, y en que una cooperación resultaría provechosa para todos. Así pues el objetivo es promover la concentración en un tema, más que la fragmentación, y la orientación, más que la duplicación. La División de Convenios Ambientales del PNUMA demuestra la eficacia de este método, al promover la colaboración en cuatro de estas cuestiones de interés común: 1) La gran crisis de la extinción de los monos. Las cinco especies de monos de África y Asia están amenazadas por la pérdida de su ecosistema y por el comercio de carne de caza y especímenes vivos. Los conflictos civiles y los incendios forestales agravan la presión, en particular sobre los gorilas y los orangutanes. La conservación de los monos es un tema que interesa directamente a numerosos órganos, incluidos las secretarías de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres, la Convención de las Especies Migratorias (varias especies de monos son migratorios), el Convenio sobre la Diversidad Biológica (conservación de los ecosistemas del mono y el uso sostenible de las especies) y la Organización para la Agricultura y la Alimentación (la carne de caza es un elemento sostenible de la producción forestal y de la alimentación humana). Numerosas organizaciones no gubernamentales, incluso órganos coordinadores como Ape Alliance, también trabajan activamente en favor de la conservación de los monos. A principio del año 2001, el PNUMA respondió a la crisis mediante una propuesta de proyecto por un valor de 3 millones de dólares de los EE.UU y basado en tres elementos fundamentales: un embajador de buena voluntad para divulgar la causa de la conservación de los monos, el establecimiento de planes de recuperación del mono en más de 20 Estados del área de distribución, y proyectos específicos sobre conservación y educación en relación con los gorilas, chimpancés y orangutanes en Uganda, Rwanda, la República Democrática de Congo, Camerún, Nigeria, Côte d'Ivoire e Indonesia. El proyecto se ha sometido al estudio de la Fundación ("Turner") de las Naciones Unidas, a quien se pide que financie aproximadamente un 50% de los costes. Los fondos restantes podrían proceder del PNUMA y sus socios en el proyecto, incluidos la Ape Alliance, el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), Fauna and Flora International, y la Orangutan Foundation. Además, antes de presentar el proyecto a la Fundación a principios del año próximo, se recabá apoyo a gobiernos y organizaciones donantes, como la UNESCO. El PNUMA confía en poder anunciar en el verano 2001 quién será el “representante de los monos". 2) La explotación excesiva del esturión para la obtención de caviar. El esturión ha sido explotado durante siglos para obtener su caviar y carne. El mercado internacional de caviar del Mar Caspio representanta probablemente el recurso más valioso del mundo basado en ejemplares de la vida silvestre. Los niveles de captura para las cinco especies de esturión productoras de caviar en el mar Caspio alcanzaron un máximo de unas 30.000 toneladas en el decenio de 1970. Desde Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente entonces, la combinación de la pesca excesiva, la desintegración de la Unión Soviética y un aumento espectacular de la pesca furtiva y el comercio ilícito - a menudo controlado por la delincuencia organizada - ha provocado una reducción acelerada de las poblaciones de esturión. En los últimos años del decenio de 1990, las capturas oficiales se habían reducido a menos de una décima parte de las capturas registradas en las dos décadas anteriores. El valor de la pesca actual se estima en mil millones de dólares de los EE.UU., pero en los hechos la explotación es muy superior, como resultado de las actividades ilícitas. Una vez más, esta cuestión interesa directamente a varios órganos: el Programa sobre Medio Ambiente del Mar Caspio (que congrega al PNUD, el PNUMA, la Unión Europea y el Banco Mundial, en asociación con los cinco Estados del área de distribución - Azerbaiyán, Kazajstán, la República Islámica del Irán, la Federación de Rusia y Turkmenistán); la CITES (el esturión se incluyó en el Apéndice II en 1997); la CMS (el esturión es una especie migratoria); el CBD (uso sostenible de un recurso de valor excepcional); la FAO (gestión y vigilancia de las pesquerías de esturión); el Convenio Ramsar (conservación de los hábitats en los humedales del Mar Caspio), además de Interpol y la Organización Mundial de Aduanas (control de los delitos ambientales y los movimientos de envíos amparados por la CITES). Entre las organizaciones no gubernamentales interesadas figuran el WWF, la UICN y TRAFFIC. En febrero, el PNUMA convocó una reunión de todos los principales organismos internacionales, que seguidamente se pusieron de acuerdo sobre propuestas de medidas. Una delegación interinstitucional examinará estas propuestas con los cinco Estados del área de distribución en junio de 2001. La clave para el éxito de esta iniciativa intersectorial será llegar a un acuerdo sobre un plan obligatorio de pesca y gestión de las pesquerías para los recursos biológicos del mar Caspio, que incluyen al esturión. Si se suscribe el acuerdo, este plan podría atraer financiación externa adicional del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (FMAM), y podría sentar una base para la fijación de cupos sostenibles de exportación de caviar en el marco de la CITES. Los organismos manifiestan también interés en ayudar a las autoridades gubernamentales pertinentes a fortalecer las medidas de observancia en la región del Mar Caspio y fuera de ella, incluida la introducción de métodos de identificación con ADN. 3) Observancia de los convenios relacionados con el comercio, a través de las autoridades y los códigos aduaneros. Numerosos acuerdos ambientales contienen 2 disposiciones para controlar y prohibir el comercio de productos que pueden suscitar preocupación desde el punto de vista ambiental. Por ejemplo, la CITES tiene por objetivo la gestión, reducción y eliminación del mercado de las especies amenazadas de flora y fauna silvestres y sus productos derivados y partes. En el marco de la Convención de Rótterdam se aplicarán controles comerciales para reducir los envíos de existencias no deseadas de desechos químicos y peligrosos hacia países que no están en condiciones de asumir su manejo. Desafortunadamente, estas disposiciones sobre el comercio pueden verse socavadas por el comercio ilícito. Las numerosas formas del comercio ilícito, la amplia gama de productos sujetos a los convenios ambientales, y la necesidad de la participación de los funcionarios de aduanas , de organismos de observancia de la ley y de las entidades que se ocupan del medio ambiente añaden un alto grado de complejidad a los esfuerzos en relación con este tema. Una forma de identificar los productos que son objeto de comercio internacional es un sistema internacional de codificación numérica, a saber, el Sistema Armonizado de Designación y Codificación de Mercancías de la Organización Mundial de Aduanas. Los criterios para incluir productos en el llamado Sistema Armonizado eran al principio el volumen y el valor monetario de su comercio, pero esos criterios ahora se han extendido a los productos que pueden ser motivo de preocupación desde el punto de vista social y ambiental. El Sistema Armonizado abarca más de 5.000 grupos de productos y unos 200.000 productos. Un 98% de las mercancías que están en el comercio internacional están clasificadas según este sistema. Las secretarías de la CITES, el Convenio de Basilea, la Convención de Rótterdam, el Protocolo de Cartagena sobre la seguridad de las biotecnologías, la Convención sobre las Armas Químicas, y la Convención sobre la Conservación del Atún del Atlántico ya han empezado a estudiar la utilización de este sistema con la Organización Mundial de Aduanas. Puesto que el comercio ilícito es un tema de interés común para tantos convenios, el PNUMA ofreció promover una labor de colaboración futura con la Organización Mundial de Aduanas. Como primera medida, el PNUMA está organizando un cursillo con los siguientes objetivos: examinar los problemas prácticos en la aplicación de los códigos aduaneros sobre productos como los especímenes incluidos en la CITES, los desechos peligrosos y las substancias nocivas para el ozono; considerar la eficacia de los códigos aduaneros en los envíos en embarcaciones con pabellón de conveniencia; y explorar una futura cooperación entre los acuerdos relacionados con el comercio y entre estos acuerdos y las autoridades aduaneras. 4) La presión sobre los ecosistemas coralinos. La conservación de los corales es uno de los temas ambientales más imperiosos que se plantean a las poblaciones humanas y la fauna y flora silvestres en los mares tropicales. En gran medida, la presión sobre los ecosistemas coralinos y ecosistemas relacionados con ellos, como la zostera y los manglares, es de tipo antropogénico: la pesca es excesiva; se utilizan métodos de pesca perjudiciales económicamente, como la dinamita y las redes que atrapan especies que no se intentaba pescar; se sustituyen los manglares y la zostera - "filtros" naturales para los ecosistemas coralinos - por tierras de cultivo y urbanizaciones; y se liberan gases de efecto invernadero, que elevan el nivel del mar y descoloran los corales. Incumbe a los numerosos acuerdos multilaterales sobre medio ambiente, a los gobiernos y a las organizaciones no gubernamentales poner coto a este daño. El PNUMA ha reunido a la inmensa asociación que incluye a los Programas y Acuerdos sobre Mares Regionales en las cuatro zonas críticas - el Caribe, el África Oriental, el Pacífico Sur y Asia Oriental – con un grupo de organizaciones no gubernamentales interesadas, que aportan a esa asociación un conjunto vital de conocimientos. Además, muchos tratados como el CBD, la CITES y la Convención sobre el Cambio Climático tienen un particular interés en la conservación de los arrecifes de coral, junto con órganos de las Naciones Unidas como el PNUMA, el PNUD y la FAO. Uno de las características clave de la Red Internacional de Acción para los Arrecifes de Coral (ICRAN) será la creación de sistemas de demostración, "centros de excelencia" que se utilizarán para informar y educar a la población sobre las prácticas aconsejables de gestión de los arrecifes. En marzo de 2001, la Fundación anunció una ayuda de más de 10 millones de dólares de los EE.UU. para el proyecto; está ayuda está concebida para producir un efecto multiplicador, que permitan obtener otros recursos públicos, y elevar la cuantía del proyecto a un total estimado en 30 millones de dólares de los EE.UU. Varias grandes fundaciones ya han mostrado interés por participar como socios donantes. La ICRAN está planificando un gran evento en 2001-2002, que sirva a la vez para reunir fondos y para realzar el proyecto. El PNUMA ha establecido una Unidad sobre Arrecifes de Coral en la División de Convenios Ambientales, dirigida por un eminente especialista en ecología marina.❐ Sinergia Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente Hacia un marco mundial para el asesoramiento científico Por Jan-Stefan Fritz, Asesor, Oficina de Coordinación de Earthwatch (Programa de vigilancia mundial) para el sistema de las Naciones Unidas en su conjunto Durante la pasada década se constituyó un número sin precedentes de grupos científicos con la función de asesorar a los gobiernos sobre diversas cuestiones relacionadas con el medio ambiente y el desarrollo sostenible. Cada año se destinan varios millones de dólares de los EE.UU al funcionamiento de estos grupos. Actualmente se han nombrado más de 3.000 expertos sólo para los procesos consultivos patrocinados por las Naciones Unidas, y otros miles de especialistas aportan sus conocimientos técnicos directamente. Estos procesos de asesoramiento científico forman parte integrante de los órganos rectores que se ocupan de la gestión de los asuntos medioambientales a nivel internacional. Para establecer una idea más precisa del funcionamiento de estos procesos, la Oficina de Coordinación de Earthwatch para el sistema de las Naciones Unidas en su conjunto ha publicado recientemente su segundo nforme relativo a los procesos de asesoramiento científico sobre medio ambiente y el desarrollo sostenible (Report on International Advisory Processes on the Environment and Sustainable Development). El informe hace una sinopsis general de los procesos de asesoramiento actuales y su funcionamiento. A continuación analiza las recientes tendencias en su contribución de conocimientos científicos para la formulación de políticas, y evalúa el desfase entre los procesos de asesoramiento y los de formulación de políticas. En su conclusión presenta varias recomendaciones para mejorar los procesos de recopilación, examen y cicrculación de la información científica y, con el tiempo, reflejarlos en resultados políticos Identificación de las deficiencias El Informe ofrece también una perspectiva sobre qué se entiende en la práctica por expresiones como "information gaps” (insuficiencia de información), "interlinks” (interrelaciones) y "synergies” (sinergias). La importancia de estos conceptos resulta obvia cuando se considera el número completo y la diversidad de los procesos existentes. El Informe Earthwatch identifica más de 50 procesos de asesoramiento científico diferentes, desglosados en tres categorías generales: ciencia para los acuerdos multilaterales sobre medio ambiente (AMUNA); ciencia para las Número 5, junio 2001 deliberaciones intergubernamentales; y ciencia para evaluar el estado de los conocimientos sobre medio ambiente. La primera categoría incluye los órganos subsidiarios de los acuerdos AMUNA. La segunda recoge los órganos creados por gobiernos y organizaciones intergubernamentales, pero que generalmente son independientes (como el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático OMS/PNUMA y el Grupo Mixto de Expertos sobre los Aspectos Científicos de la Protección del Medio Marino). La tercera categoría abarca las evaluaciones, informes sobre el estado del medio ambiente y los sistemas de observación mundiales y otros procesos establecidos por organizaciones intergubernamentales para mejorar la sensibilización pública sobre el estado del medio ambiente en el mundo. Aunque curiosamente hay muy poca competición o superposición entre estos 50 procesos, también el debate general sobre sus funciones y organización es escaso. La mayoría de los debates científicos orientados a la formulación de políticas tiende a colmar lo que el Programa 21 define como la “insuficiencia de datos”, o sea, la disparidad entre los datos de calidad disponibles en todo el mundo, y los que necesitan los responsables de la formulación de políticas. Además de esta insuficiencia de datos, el Informe identifica también varias otras deficiencias como: • deficiencias en materia de nexos, a saber, una desvinculación entre el número creciente de procesos de asesoramiento que se establecen; • deficiencias en materia de acceso público, es decir, un desfase entre la producción y la síntesis de conocimientos, y la utilización de estos conocimientos por un mayor número de lectores; • deficiencias sistemáticas en la organización de la información, que no permiten a los usuarios encontrar fácil y rápidamente temas ambientales diferentes desde diferentes perspectivas; y • deficiencias en el impacto, es decir, una falta de coherencia entre la labor de los procesos de asesoramiento científico y los esfuerzos para apoyar el fomento de capacidades a nivel local y nacional. Estas deficiencias son motivo de preocu- pación, ya que cada uno de los procesos de asesoramiento científico generalmente se establece de forma separada y sin referencia a las experiencias pasadas. Afortunadamente, la diversidad de los procesos existentes puede constituir una ventaja, por cuanto permite aprovechar esta riqueza de experiencias en un proceso recién establecido. Esta es una situación típica en que el PNUMA y el sistema de las Naciones Unidas en su conjunto pueden mejorar sumamente sus servicios aprendiendo de las experiencias de los procesos ya creados. En este sentido, el Informe ofrece recomendaciones que pueden ponerse fácilmente en práctica en la estructura de órganos internacionales existentes de gestión del medio ambiente, al mismo tiempo que se facilita a esta estructura un marco más coherente. Algunas de las recomendaciones son: • que se elaboren métodos normalizados o armonizados para la gestión de datos e información científicos (procedentes, por ejemplo, de los sistemas de observación mundiales y las organizaciones internacionales) que sean útiles para públicos o fines específicos; • que se establezca una Carta de partes interesadas sobre normas mínimas de la información proporcionada por fuentes de las Naciones Unidas sobre medio ambiente y desarrollo sostenible, a fin de mejorar la transparencia de la información comunicada por los organismos de las Naciones Unidas; • que se mejoren las posibilidades de acceso a los múltiples documentos e informes producidos por las Naciones Unidas, mediante el establecimiento de un localizador de los sitios del sistema de las Naciones Unidas en la Web para medio ambiente y Desarrollo sostenible; • que se haga menos hincapié en las soluciones administrativas y, en cambio, se estimule una colaboración sustantiva entre los procesos de asesoramiento científico, que esté impulsada por necesidades, orientada por conclusiones, y fundamentada en el propio interés de todos los participantes; • que, dado el número y la calidad de los órganos científicos internacionales exispagina 8 3 Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente Información actualizada sobre los tratados ambientales Por Michael Williams, Unidad de información para Convenios del PNUMA Acuerdos administrados por el PNUMA Convención de las Especies Migratorias (CEM) – Los delegados de 12 Estados del área de distribución y representantes de varias organizaciones no gubernamentales y agrupaciones de pesca asistieron a la segunda reunión de negociaciones para examinar el proyecto de acuerdo sobre la CEM para la conservación de 21 especies de albatros y siete de petrel. La reunión se celebró en Ciudad del Cabo, Sudáfrica, del 27 de enero al 2 de febrero de 2001. Los delegados se pusieron de acuerdo sobre un texto y lo aprobaron por consenso. Éste podría convertirse en eñ texto definitivo después de una última ronda de consultas internas. El presidente de la reunión declaró que el acuerdo podría abrirse a la firma en junio y entrar en vigor antes de la reunión de la Conferencia de las Partes de la CEM en septiembre de 2002. La reunión de Ciudad del Cabo aprobó también un Plan de Acción para los albatros y petreles. Convenio sobre la Diversidad Biológica (CBD) – Los funcionarios de unos 180 gobiernos miembros del CBD se reunieron en Montreal del 12 al 16 de marzo para participar en la sexta reunión del Órgano Subsidiario de Asesoramiento Científico y Tecnológico (OSACT-6). La reunión examinó cómo mejorar la detección, erradicación y el control de especies exóticas invasoras que cruzan los océanos y otras barreras naturales para colonizar nuevas regiones, donde representan una amenaza para las plantas y los animales autóctonos y su ecosistema. Se analizó un proyecto de 17 principios para guiar la acción contra estas especies. Los principios se refieren al criterio de precaución, el enfoque por ecosistema, los controles fronterizos y las medidas de cuarentena, la introducción intencional y no intencional, así como la erradicación, el control, y la contención de esas especies. La reunión estudió asimismo los informes de los gobiernos que detallan los esfuerzos actuales y describen casos prácticos. El OSACT examinó además otras cuestiones sobre la diversidad biológica, incluidos la diversidad biológica marina y costera, los sistemas de aguas interiores, las evaluaciones científicas, la Iniciativa Global sobre Taxonomía, la diversidad biológica y el cambio climático, y las especies migratorias. Los resultados y las recomendaciones de la reunión se remitirán a la Conferencia de las Partes en su sexta reunión, prevista en abril de 2000 en La Haya. CBD y CEM – Una de las recomendaciones del OSACT-6 es que se transmita a la CdP en el Convenio sobre la diversidad biológica la solicitud procedente de la secretaría de la Convención de las Especies Migratorias de que se la reconozca como socio principal en los temas relacionados con las especies migratorias. La decisión que se propone pediría a las secretarías de los dos tratados que colaboren para desarrollar y ejecutar un programa de trabajo mixto CBD/CEM. Este programa de trabajo apuntaría a ámbitos de interés común, o sea, zonas protegidas, indicadores, evaluación y asesoramiento, uso sostenible, sensibilización y educación del público. También la decisión pediría a las Partes en el CBD que comuniquen a la CdP, en sus informes nacionales, en qué medida se ocupan de las especies migratorias en el plano nacional, e informen acerca de su cooperación con otros Estados del área de distribución. Mares Regionales – El proyecto de Convenio y Plan de Acción para la Protección y Desarrollo Sostenible del Medio Marino y Costero de la Región del Pacífico Nororiental fue el tema de una Segunda Reunión de los Expertos de Alto Nivel designados por sus Gobiernos celebrada en Managua, Nicaragua, del 19 al 23 de marzo. A esta reunión asistieron los representantes de los ocho Estados miembros 4 del nuevo Programa regional del Pacífico Nororiental: Colombia, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua y Panamá. La labor de la reunión se tradujo en cinco resultados principales: 1) De los 28 artículos del Convenio, se aprobaron 25, y tres quedaron pendientes (entre corchetes). 2) Se aprobó por unanimidad el Plan de Acción para la Protección y Desarrollo Sostenible de la Región del Pacífico Nororiental, que servirá de marco para la entrada en vigor del Convenio. 3) Se finalizó la Evaluación de Diagnóstico de las actividades terrestres que afectan el medio marino, costero y de agua dulce de la Región del Pacífico Nororiental, que se publicará en el curso de este año. 4) También se aprobó el Programa de Trabajo 2001-2006 para la ejecución del Programa de Acción Mundial para la Protección del Medio Marino de las Actividades Terrestres (GPA) en la región del Pacífico Nororiental. El Programa de Trabajo ha sido incluido como Anexo I del Plan de Acción para la Protección y el Desarrollo Sostenible del Pacífico Nororiental. 5) La Organización Marítima Internacional (OMI) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) han aceptado apoyar la ejecución del Convenio y sus Planes de Acción en los ámbitos de la preparación e intervención en caso de contaminación marina por barcos, y el tratamiento de las aguas residuales, respectivamente. El Convenio para el Pacífico Nororiental es el primer convenio sobre mares regionales negociado desde la adopción del GPAen 1995, y que ha integrado el GPA en su marco regional. La Oficina de Coordinación del GPA presentará el programa de los mares regionales del Pacífico Nororiental a la Reunión intergubernamental de examen del GPA. La reunión de Managua decidió programar para el 6 a 9 de agosto de 2001 la Tercera Reunión de los Expertos de Alto Nivel designados por sus gobiernos para concluir las negociaciones sobre los tres artículos pendientes del Convenio y debatir sobre sobre la entrada en funcionamiento del Convenio y sus Planes de Acción. La Conferencia de Plenipotenciarios para la firma del Convenio y la adopción del Plan de Acción tendrá lugar el 10 de agosto. Otros acuerdos Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático – Desde la suspensión del sexto periodo de sesiones de la Conferencia de las Partes el 25 de noviembre de 2000, el Presidente Jan Pronk ha entablado consultas oficiosas. Además de numerosas reuniones bilaterales, el Presidente organizó dos debates multilaterales a nivel ministerial, el primero en Nueva York el 21 de abril, y el segundo tendrá lugar, en principio, los dias 27-28 de junio en los Países Bajos. Las consultas se centraron en el anuncio de la nueva administración norteamericana de su oposición al Protocolo de Kyoto, y en un nuevo documento del Presidente, que esboza propuestas para adelantar el proceso. Está previsto que la CdP-6 se reúna entre el 16 y el 27 de julio en Bonn. Durante este período de incertidumbre política, el Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático PNUMA/OMS ha finalizado su Tercer Informe de Evaluación, “Climate Change pagina 8 Sinergia Número 5, junio 2001 5 CDP 6 20-25 de mayo Ginebra, Suiza provisional Reunión conjunta con el Grupo de Trabajo Técnico y el Grupo de Trabajo Legal 1-5 de octubre Ginebra, Suiza Reunión conjunta con el Grupo de Trabajo Técnico y el Grupo de Trabajo Legal, 18-22 de junio Ginebra, Suiza Convención de Basilea RDP y CDP-6 8-26 de abril La Haya, Los Países Bajos SBSTTA –7 12-16 de noviembre Montreal, Canada Comité intergub. para el protocolo de Cartagena (ICCP2) 1-5 de octubre Nairobi, Kenia Reunión abierta de expertos sobre la bioseguridad, 11-13 de julio Havana, Cuba Diversidad Biológica CDP-12 4-15 de noviembre Santiago, Chile CITES Comité sobre Plantas, 3-7 de septiembre, Langkawi, Malasia Comité sobre Animales 30 de julio-3 agosto Hanoi, Vietnam Comité permanente, 19-22 de junio Paris, Francia CITES/ Lusaka CMS CDP-7 AEWA RDP-2, 1-15 de sept., Bonn, Alemania provisional CMS RDP-13 15-19 de octubre Colombo, Sri Lanka 21ª sesión del Grupo de Trabajo Abierto de las Partes, 24-26 de julio, Montreal, Canadá Protocolo de Montreal POPS CIN-8 8-12 de octubre Roma, Italia Rotterdam CDP-5 1-12 de octubre, Ginebra, Suiza UNCCD Sesiones de los Organos Subsidiarios, 3-14 de junio, Bonn, Alemania a confirmar CDP-7 29 de oct-9 de nov, Marrakesh, Marruecos Sesiones de los Organos Subsidiarios 16-27 de julio Continuación de la CDP-6, 18-26 de julio Bonn, Alemania Cambio Climático 4ª reunión sobre los Convenios de los Mares regionales y planes de acción, noviembre,Montreal, Canada a confirmar 3ª Reunión de Expertos Gub. designados del alto nivel 6-9 de agosto, Conferencia de Plenipotenciarios, 10 de Agosto, Lugar a determinar Comité de Vigilancia del Convenio de Cartagena 9-13 Julio San José, Costa Rica Mares Regionales Ramsar CDP-8 18-26 de noviembre, Valencia, España 26º Comité Permanente 3-7 de diciembre, Gland, Suiza 4ª Reunión Europea sobre el Convenio de Ramsar 13-18 de octubre Bled, Slovenia 10ª reunión del Gpo. de Examen Científico y Técnico (GECT) 27-29 de junio, Gland, Suiza Recopilación a cargo de la Oficina de Información sobre las Convenciones del PNUMA(Mayo 2001) Siglas y abreviaturas: Convención de Basilea sobre Control de los Movimientos Transfronterizos de Desechos Peligrosos y su Eliminación Final- Conferencia de las Partes (CDP); Convenio sobre la Diversidad Biológica - Organo Subsidiario de Asesoramiento Científico, Técnico y Tecnológico (SBSTTA) – Comité intergubernamental para el Protocolo de Cartagena (ICCP), Reunión de la Partes al Protocolo de Cartagena (RDP-1);Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas (CITES); El Acuerdo de Lusaka sobre operaciones conjuntas de represión del comercio ilicito de fauna y flora silvestres; Convención sobre las Especies Migratorias (Convención de Bonn) (CMS); Acuerdo sobre la Conservación de las aves acuáticas de África y Eurasia (AEWA); Protocolo de Montreal sobre Sustancias que Agotan la Capa de Ozono; El Convenio de Rotterdam sobre el Procedimiento de Consentimiento Fundamentado Previo para ciertos productos químicos peligrosos objeto de comercio internacional (PIC); COP- Instrumento legalmente vinculante sobre contaminantes orgánicos persistentes- Comité Intergubernamental de Negociaciones (CIN); Comité Provisional de Examen de Productos Químicos (ICRC); Convención de Lucha contra la Desertificación (UNCCD); Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático - Organo Subsidiario de Ejecución (SBI) - Organo Subsidiario de Asesoramiento Científico y Técnico (SBSTA); PNUMA-Planes de acción de los Mares Regionales y Convenios- El Mar Negro, Convención de Cartagena sobre la Protección y Desarrollo del Medio Marino en la Región del Gran Caribe, Los Mares del Asia Oriental, Africa Oriental, Kuweit, Organización Regional para la Protección del Medio Ambiente Marítimo (ROPME), El Mediterráneo –Conferencia Mediterránea sobre el Desarrollo Sostenible (MCSD), Africa Central y Occidental, El Pacífico Noroccidental – Plan de Acción para la Protección, Gestión, y Desarrollo del medio marino y costero del Pacífico Noroccidental (NOWPAP), El Mar Rojo y el Golfo de Aden, Los Mares del Asia Meridional, El Pacífico Sudoriental, El Pacífico Sur, El Programa del Medio Ambiente para la región del Pacífico Sur (SPREP); otros acuerdos de los Mares Regionales, La Convención de Helsinki (HELCOM), La Convención de Oslo y París (OSPAR); Convención sobre los Humedales (Convención de Ramsar), Preparación de un projecto de Acuerdo Marco sobre el Mar Caspio. 2002 Deciembre Noviembre Octubre Septiembre Agosto Julio Junio 2001 Calendario de reuniones en materia de Tratados de Medio Ambiente C a l e n d a r i o Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente Mares regionales: El espíritu de Mónaco Por Ellik Adler, Jefe del Programa sobre Mares Regionales, División de Convenios Ambientales del PNUMA Mi primer verdadero encuentro con el Programa sobre Mares Regionales, después de aceptar mi nuevo puesto en el PNUMA, fue en Mónaco, durante la celebración de la Tercera Reunión Mundial de los Convenios y Planes de Acción sobre Mares Regionales. Muy pronto hice un agradable descubrimiento: no había podido sumarme a los Mares Regionales en un mejor momento. Entusiasmo, compromiso, voluntad de pasar de la palabra a la acción práctica, todas cualidades que no siempre caracterizan a estas reuniones oficiales. Pero durante los siguientes cinco días en Mónaco (6-11 de noviembre de 2000 tuve pruebas de que el espíritu de los Mares Regionales está más presente que nunca. El nivel de participación fue la primera clave para el éxito de la reunión: asistían los representantes de trece programas activos sobre mares regionales, tres programas asociados, y un posible nuevo programa, junto con los representantes de ocho convenios mundiales y acuerdos conexos, cuatro organismos de las Naciones Unidas además del PNUMA, y dos organizaciones no gubernamentales. El ministro Bernard Fautrier representaba al gobierno de Mónaco, y la reunión se celebró en el Laboratorio del Medio Ambiente Marino del Organismo Internacional de Energía Atómica. El PNUMA envió un equipo numeroso y entusiasta. Resultados clave La reunión de Mónaco tuvo un programa cargado, compuesto de 10 temas principales, además de sesiones adicionales sobre los mamíferos marinos y los arrecifes de coral. Sus recomendaciones estuvieron principalmente orientadas a fomentar vínculos y sinergia entre los planes de acción y los convenios regionales, y entre los Programas sobre Mares Regionales y sus socios externos como los convenios mundiales y otras organizaciones del sistema de las Naciones Unidas y que no pertenecen al sistema de las Naciones Unidas. Algunas de las decisiones clave plantearon los siguientes temas: El derecho del mar. En 1999, las Naciones Unidas emprendieron un Proceso Consultivo Oficioso sobre Océanos y Derecho del Mar. Durante el pasado mes de octubre, tras examinarse los primeros 6 resultados del proceso, la Asamblea General de las Naciones Unidas hizo un llamamiento a favor de un mayor fortalecimiento de la cooperación regional en ámbitos como la pesca, la gestión integrada y el desarrollo sostenible de las zonas marinas y costeras, y el fomento de capacidades. Como contribución al proceso, el PNUMA y la FAO prepararon un documento conjunto sobre la gestión de las pesquerías basada en el ecosistema para presentarlo en Mónaco. Este importante documento, que expone líneas generales para fomentar la cooperación con los organismos regionales de pesca para el uso sostenible de los recurso piscícola, en constante disminución, fue totalmente aprobado por los participantes y pronto se publicará en un Informe Técnico sobre los Mares Regionales. El Mandato de Yakarta. El Convenio sobre la Diversidad Biológica (CBD) trata de la diversidad biológica marina y costera en el marco del Mandato de Yakarta adoptado en 1995, y se estima que el Programa sobre Mares Regionales puede prestar una importante contribución para su aplicación a nivel regional. La reunión de Mónaco instó a establecer vínculos más estrechos con el Mandato de Yakarta del CBD, ya que el Convenio sobre la Diversidad Biológica constituye un importante foro para encarar los temas del mar y la costa, y el Programa sobre los Mares Regionales puede a su vez ayudar en la labor del programa del Convenio sobre la gestión costera. En la reunión de Mónaco se reseñaron varias medidas concretas para promover estos vínculos, con especial referencia a la cooperación con la Red Internacional de Acción para los Arrecifes de Coral (ICRAN). Los hábitats costeros y marinos. Uno de los asociados mundiales clave para el Programa sobre los Mares Regionales es el Programa de Acción Mundial para la Protección del Medio Marino de las Actividades Terrestres (GPA), establecido por los gobiernos en 1995. Entre las nueve áreas del GPA de especial interés, compartidas con el CBDMandato de Yakarta y los Mares Regionales, figura la “alteración física y la destrucción de los hábitats”. Se dedicó media jornada de la reunión de Mónaco para debatir la relación entre las tres organizaciones, con especial referencia a la preparación de un plan de acción estratégico que trata de la destrucción de los hábitats. Los productos químicos peligrosos. Existen varios convenios relativos a los esfuerzos regionales para tratar de la contaminación costera por productos químicos – desde las fugas de las existencias de plaguicidas obsoletos hasta las descargas de desechos industriales saturados de contaminantes orgánicos persistentes (COP). Se destacan el Convenio de Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y su eliminación, y la Convención de Rotterdam sobre el procedimiento de consentimiento fundamentado previo (CFP) respecto de determinados productos químicos y plaguicidas peligrosos que son objeto de comercio internacional. El propio Programa sobre Productos Químicos del PNUMA participa en las negociaciones de un nuevo convenio sobre los COP. La reunión de Mónaco hizo un llamamiento en favor de una colaboración más estrecha entre estos organismos, en particular en el fomento de capacidades para la gestión de productos químicos peligrosos, el intercambio de información y la armonización de códigos aduaneros. Se pidió al PNUMA que reuniera información para una base de datos sobre la labor en materia de productos químicos en el marco del Programa sobre Mares Regionales. La intervención en casos de emergencia. Diez de los once convenios sobre Mares Regionales han incluido protocolos conexos sobre la contaminación por hidrocarburos y otras sustancias nocivas, y muchos han detallado planes regionales de intervención de emergencia en caso de vertidos y accidentes en que haya hidrocarburos y productos químicos peligrosos. Está claro que una mayor cooperación en esta materia ha de redundar en un gran beneficio para todas las regiones. La reunión de Mónaco formuló su petición de que se constituya un foro de cooperación entre los Mares Regionales del PNUMA y la Organización Marítima Internacional (OMI) para una abordar una respuesta de emergencia conjunta en los casos los derrames de hidrocarburos y los accidentes con productos químicos, especialmente centrada en el fomento de capacidades, acuerdos de hermanamiento pagina 8 Sinergia Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente Convenio de Basilea: la sinergia en la práctica Por Sachiko Kuwabara-Yamamoto, Secretario Ejecutivo, Convenio de Basilea sobre el control de los movimientos transfronterizos de los desechos peligrosos y su eliminación. El problema de los desechos peligrosos plantea un enorme reto. Por esta razón, estamos cada vez más convencidos de que la colaboración es la mejor vía para aplicar nuestro programa de trabajo y cumplir nuestro mandato con un mínimo de recursos. Cuatro ejemplos recientes de la labor de la secretaría del Convenio de Basilea ilustran las ventajas que resultan para los convenios ambientales de una colaboración activa para promover la sinergia: 1) La intensificación de los controles aduaneros. Los funcionarios aduaneros deben abordar el comercio de un gran volumen y variedad de productos. El aspecto del comercio relacionado con el medio ambiente, por sí solo, ya plantea cuestiones como el envío lícito e ilícito de miles de especies de plantas y animales silvestres, de CFC y de otras substancias nocivas para el ozono, productos químicos tóxicos y desechos peligrosos. Para asegurar una formación coordinada y eficaz, en términos de costo y tiempo, de los funcionarios encargados de la observancia en los puertos, en diciembre de 2000 la secretaría del Convenio de Basilea y sus socios organizaron un seminario de formación conjunto en Hong Kong. Entre estos socios figuraban la secretaría de la Convención Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES), la secretaría del Protocolo de Montreal sobre las substancias que agotan la capa de ozono, la Organización para la Prohibición de las Armas Químicas, Interpol, la Organización Mundial de Aduanas, la Organización Marítima Internacional, la Unidad de Coordinación Regional del PNUMA para el Asia y el Pacífico, y el Centro Regional del Convenio de Basilea en Beijing. Las próximas etapas deberían incluir el fortalecimiento de la cooperación en materia de recopilación de información confidencial entre instituciones internacionales. Para que las actividades de Número 5, junio 2001 observancia sean eficaces será necesario, además, una mejor cooperación y establecimiento de redes a nivel nacional entre las autoridades encargadas de la observancia en los temas ambientales, las autoridades portuarias, la policía, el ministerio público y el poder judicial. Los convenios ambientales pueden, a través de un mayor fomento de las capacidades, contribuir a ayudar a los gobiernos en la formulación de un enfoque nacional exhaustivo que permita evaluar y combatir el comercio ilícito que afecta al medio ambiente. 2) La eliminación de las existencias de desechos peligrosos. En el pasado mes de enero, la secretaría del Convenio de Basilea y el Reino de Marruecos celebraron la primera conferencia continental para África sobre el manejo ecológicamente racional de las existencias de desechos peligrosos indeseables y su prevención. En esta reunión, las Partes en el Convenio de Basilea, junto con los representantes de las Naciones Unidas, otras organizaciones intergubernamentales, la industria, y las organizaciones no gubernamentales relacionadas con el medio ambiente y el desarrollo, acordaron elaborar un programa de acción. En la reunión se estableció un mecanismo de seguimiento para desarrollar y aplicar este programa. 3) La protección de los derechos humanos. En abril, la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas aprobó una resolución por la que se renovaba el mandato a fin de investigar los efectos negativos de los vertidos de residuos tóxicos. En esa resolución se ponía de relieve la vinculación entre los derechos humanos y el medio ambiente, en particular la cuestión de los desechos peligrosos. La Comisión instó a los gobiernos a que tomen medidas legislativas y de otro tipo para prevenir el tráfico ilícito de substancias peligrosas y disuadir del traslado de industrias contaminantes y la transferencia de tecnologías desde los países desarrollados a los países en desarrollo. La Comisión alentó, por otro lado, a la secretaría del Convenio de Basilea, al Departamento de los Productos Químicos del PNUMA, la FAO, la Organización Internacional del Trabajo, la OMS, Interpol y la OMA a colaborar en el manejo ecológicamente racional de los desechos peligrosos y los productos químicos, y a promover la asistencia técnica. 4) El desmantelamiento de buques. Normalmente, al final de su vida útil, los buques se venden para el desguace, con frecuencia a instalaciones situadas en la India, Pakistán, China y Bangladesh. Sin embargo, muchas veces las operaciones de desmantelamiento no se hacen según las normas ambientales, de salud y de seguridad. La secretaría del Convenio de Basilea, la OMI, la OIT, la Cámara Naviera Internacional y una serie de organizaciones no gubernamentales relacionadas con el medio ambiente cooperan activamente en la redacción de directrices técnicas sobre la gestión ecológicamente racional de las operaciones para el desmantelamiento total o parcial de buques. Este tema se seguirá debatiendo en la reunión de este mes del Grupo de Trabajo Técnico del Convenio de Basilea.❐ 7 Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente pagina 6 entre convenios, y apoyo mutuo en ámbitos de interés común como los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo (EIPD). Las evaluaciones ambientales. El seguimiento y la evaluación científica del medio marino respaldan los Programas sobre Mares Regionales desde el principio, y la Comisión Oceanográfica Intergubernamental (COI) de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO) ha sido uno de los principales organismos asociados en esta labor. Una actividad clave, el Sistema Mundial de Observación de los Océanos (SMOO) de la COI-PNUMA, recopila datos útiles sobre los océanos, si bien hasta ahora su aplicación a los ecosistemas costeros ha sido limitada. A fin de ayudar a los programas regionales a comprender mejor los procesos costeros y prever al mismo tiempo la toma de decipagina 2 tentes, se creen nuevos procesos de asesoramiento sólo cuando no existan otros órganos apropiados; y • que se ayude a los órganos científicos subsidiarios de los acuerdos multilaterales sobre medio ambiente, pidiendo a las organizaciones internacionales que inviertan en un apoyo efectivo a los centros de coordinación nacionales, y habilitando a los órganos nacionales responsables para que puedan cumplir su obligación de presentar informes. Se presenta en detalle la lista completa de siones fundamentadas sobre gestión, la reunión de Mónaco ha pedido a la COI y los Mares Regionales que trabajen juntos para determinar los elementos costeros susceptibles de incluirse en el SMOO. De la palabra a la acción Esos son los planes y las recomendaciones; ahora viene la parte difícil. No obstante, soy optimista; la reunión de Mónaco me convenció de que el impulso está creciendo en los Mares Regionales, y de que cada uno de los que asistieron sabe cuán rápida y fácilmente se puede aumentar nuestra productividad si trabajamos juntos y aprovechamos mutuamente nuestros logros. Quedó claro que el Programa sobre Mares Regionales puede y debe utilizarse como la mejor plataforma para la ejecución a nivel regional de los convenios mundiales y las estrategias globales. Ya se han iniciado las reuniones de las recomendaciones en el Informe, que puede telecargarse en www.unep.ch/earthw/sciadv2.htm. Los que deseen recibir ejemplares impresaos pueden dirigirse a UNEP/DEWA, PO Box 30552, Gigiri, Nairobi, Kenya. Jan-Stefan Fritz es actualmente Oficial Científico en la Oficina Internacional del Ministerio Federal de Educación e Investigación de Alemania. Para contactarlo, diríjase por correo electrónico a la dirección: jan-stefan.fritz@dlr.de. Las opiniones expresadas supra son personales del autor.❐ pagina 4 2001" (Cambio Climático 2001). El Volumen I, “The Scientific Basis” (Las Bases Científicas), fue terminado en enero. Confirma la existencia de pruebas nuevas y más concluyentes que atribuyen en su gran parte el calentamiento de la Tierra observado durante los últimos 50 años a las actividades humanas. Se hacen proyecciones sobre efectos devastadores del proceso de calentamiento general, de 1,4-5,8ºC durante el próximo siglo, y se indica que es muy probable que el decenio de 1990 haya sido el más cálido y que, según las observaciones llevadas a cabo desde 1861, el año 1998 haya sido el más caluroso. El volumen II, “Impacs, Adaptation and Vulnerability” (Impacto, adaptación y vulnerabilidad), se completó en febrero. Describe con un grado de detalle sin precedentes los efectos que puede tener el calentamiento sobre el entorno natural y civilizado. Analiza de qué manera el fenómeno, descrito en el 8 volumen I, afectará a África, Asia, Europa y otras regiones específicas en las futuras décadas. Al mismo tiempo que pone de relieve las incertidumbres subsistentes, detalla los cambios esperados en las pautas meteorológicas, los recursos hídricos, el ciclo de las estaciones, los ecosistemas, los fenómenos climáticos extremos, y muchos otros temas. El tercer volumen " Mitigation” (Mitigación) fue acabado en marzo. Se evalúan políticas y tecnologías eficaces para tratar de abordar las emisiones de gases de efecto invernadero y la amenaza del cambio climático producido por el hombre. Confirma que hoy en día se dispone de numerosas soluciones económicas contra el aumento de las emisiones. En muchos casos, sin embargo, para que estas soluciones puedan surtir efecto, los gobiernos necesitarán superar varios obstáculos institucionales, de comportamiento y de otro tipo que se oponen al cam- seguimiento a la de Mónaco y otras actividades. La próxima reunión de todos los programas sobre mares regionales está programada para finales de noviembre de 2001 en Montreal (Canadá), y sospecho que todos nos llevaremos una agradable sorpresa al ver todo lo que habremos logrado para entonces. Para un informe completo de la Reunión de Mónaco, véase http://www1.unep.org/monaco/. Para más información sobre este artículo, véase: “Un renacimiento de los mares regionales” por Jorge Illueca in Sinergia nº1, noviembre de 1999 (disponible en la página web del PNUMA: www.unep.ch/conventions/synergies). No se olviden visitar la página web de los Mares Regionales en www.unep.ch/seas❐ SINERGIA Número 5 junio 2001 Este boletín sólo proporciona información general y no representa las opiniones oficiales de las Naciones Unidas ni de ninguno de sus organismos especializados. Los lectores pueden reproducir los artículos, mencionando la fuente. Publicado por la División de Convenios Ambientales del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente. Los interesados en recibir una suscripción gratuita, impresa o por correo electrónico, o los que deseen alguna información editorial, pueden dirigirse a Oficina de Informacíon sobre las Convenciones del PNUMA International Environment House 11-13 chemin des Anémones CH-1219 Châtelaine Suiza iuc@unep.ch Este boletín se publica en inglés, francés y español, y se presenta en la página web del PNUMA: www.unep.ch/conventions/ Sinergia