1 PRESENTACION En el quehacer de la Dirección de Identidad Universitaria existe una función esencial que es la comunicación con la comunidad universitaria y la sociedad. Es así que buscando dar cumplimiento a este objetivo la Dirección de Identidad Universitaria difunde a través de diferentes medios las actividades propias y las del Colegio de Cronistas; cuya trascendencia va más allá de los numerosos espacios de nuestra Institución, recibiendo invitaciones de municipios, organismos académicos de nuestra entidad federativa; así como de asociaciones nacionales. Invitaciones nacionales que se han recibido y atendido desde 2005, año en el que los cronistas de la Universidad Autónoma del Estado de México participan por primera vez en este tipo de congresos nacionales organizados por la Asociación Nacional de Cronistas de Ciudades Mexicanas, el cual se llevo acabo del 27 al 30 de julio de 2005, en el Estado de México. El Colegio de Cronistas, desde entonces ha participado año con año de manera exitosa en el Congreso de Cronistas de Ciudades Mexicanas, A.C., en julio de 2010, participará nuevamente en dicho evento, el cual se llevó a cabo en la ciudad de Puebla, Puebla. En el boletín del mes de julio de 2010, la Dirección de Identidad Universitaria da a conocer dos de las ponencias que presentaran los cronistas en dicho Congreso: Isidro Fabela en la Revolución del C.P. Carlos Chimal Cardoso, Cronista del Centro Universitario UAEM Atlacomulco Héroes Anónimos de la Independencia de México de Lic. Jaime Castro Resendìz, Cronista del Plantel “Cuauhtémoc” de la Escuela Preparatoria y Lic. Norma González Paredes, Cronista del Centro Universitario UAEM “Texcoco” 2 ISIDRO FABELA EN LA REVOLUCION C.P. CARLOS CHIMAL CARDOSO CRONISTA DEL CENTRO UNIVERSITARIO UAEM ATLACOMULCO Hijo de familia acomodada, nació en Atlacomulco, Estado de México, el 29 de junio de 1882 y falleció en la Ciudad de Cuernavaca, Morelos el 2 de agosto de 1964, aprende a leer con la Maestra Juana Monroy en la hacienda de “El Salto”, propiedad de sus padres el Ing. Trinidad Fabela y la Señora Guadalupe Alfaro en el año de 1889. Para hablar del Lic. Isidro Fabela Alfaro, es necesario hacer mención de algunos aspectos de su vida, como: Su participación en la gesta revolucionaria, en las actividades como representante de nuestro país en Europa y Sudamérica, así como representante ante la Liga de Naciones, hoy la O.N.U., de sus actividades en el Gobierno del Estado de México y de la creación de una Fundación para donar al pueblo de México la Casa del Risco en la Ciudad de México. En 1890 la familia Fabela abandona Atlacomulco para radicar en la Ciudad de México, iniciando sus estudios en la Escuela de Párvulos anexa a la Normal de Profesores en 1891, donde era Directora su tía Brígida Alfaro, siendo condiscípulo de Antonio Caso y José Clemente Orozco. En 1895 ingresa a la Escuela Nacional Preparatoria en compañía, entre otros de; José Vasconcelos, Antonio Caso, Genaro Fernández Mac-Gregor, Alejandro Quijano, Eduardo Colín, Luis Rivero Borrell, Honorato Bolaños, Santiago Meléndez, Ignacio Bravo Betancurt, Sotero Prieto, Joaquín Gallo, Soledad Récules, José Castillejos, Ríos Venegas, Domingo Díaz y Adolfo de la Huerta, siendo discípulos del maestro Justo Sierra, en la cátedra Historia General y en 1900 ingresa a la Escuela Nacional de Jurisprudencia, donde obtiene el titulo de Abogado. I.- EL IDEAL REVOLUCIONARIO El 18 de julio de 1902, Isidro Fabela participa en la velada fúnebre que organiza la Escuela Nacional de Jurisprudencia a Benito Juárez, donde asiste el Presidente de la Republica, Don Porfirio Díaz. En sus memorias cuenta que en estos años ya existía en el país un incipiente movimiento político que indicaba descontento contra el Gobierno del General Porfirio Díaz, sin embargo sus compañeros en esta escuela eran un grupo de hijos de prominentes Porfiristas, como Secretarios de Estado, Senadores o Magistrados de la Suprema Corte de Justicia, y otro grupo quienes escogieron el liberalismo constitucionalista que se oponían al régimen de Díaz. Con uno de sus profesores de nombre Rodolfo Reyes, que impartía la cátedra de Derecho Constitucional, fue que comprendió la realidad política que reinaba en ese entonces en el país. Con sus condiscípulos pensaban como ayudar para que el dictador dejara el poder y así tener una nación soberana. Esto provoco división entre sus compañeros, ya que unos se declararon antiporfiristas y otros seguían leales al gobernante, aunque diferente forma de pensar, siguieron siendo buenos amigos. Se graduó de abogado en 1908. 3 El 28 de octubre de 1909, se funda el grupo “Ateneo de la juventud”, que destaco en el país durante mucho tiempo, por contar con integrantes talentosos y apegados al estudio, siendo socio fundador, participando en la primera directiva como “Secretario de Actas”. El Lic. Fabela, al igual que muchos consideró la entrevista que concedió el Presidente Díaz al periodista norteamericano James Creelman en 1908, como el preludio de la Revolución Mexicana de 1910, ya que en la misma el presidente reconoció que el pueblo mexicano estaba listo para ejercer una democracia, por lo tanto, debía operarse un cambio radical tanto en el sistema gubernamental, como en los hombres de la Administración Publica y se veía como un triunfo del antirreeleccionismo, que se manifestaba ya abiertamente en el ámbito político nacional. Lo anterior propició que el pueblo se uniera al ideal de Francisco I Madero, quien garantizaba la construcción de una patria mejor, creyendo que la Republica Mexicana se transformaría de la noche a la mañana, sin embargo, al llegar el período de elecciones, el General Díaz no cumplió su promesa, dándose alzamientos revolucionarios en el país que provocaron la renuncia de Porfirio Díaz a la Presidencia de la Republica, el 25 de mayo de 1911, permitiendo que Don Francisco I. Madero fuese Presidente de la Republica, del 6 de noviembre de 1911 al 19 de febrero de 1913. II.- LA REVOLUCION. En 1910 Isidro Fabela, integra un grupo revolucionario llamado “Club Liberal Progresista” adherido al movimiento de Francisco I. Madero y funda el periódico “La Verdad” para sostener la candidatura de Madero, con Juan F, Urquidi, Luis y Leopoldo Zamora Plowes. En el año de 1911, el Presidente Don Francisco I. Madero, nombra a Don Isidro Fabela, Jefe de defensores de oficio en el Distrito Federal, ocupando este cargo poco tiempo, sin embargo, pudo enviar un telegrama al señor Madero, solicitándole una visita a la Cárcel de Belém, para que constatara las condiciones de abandono en que se encontraba, en su respuesta el Presidente le ofreció una visita de inspección, pero los acontecimientos de todos conocidos impidieron se llevara a cabo, después de la Revolución, esta cárcel fue derrumbada y levantada una escuela en ese lugar. En 1912 Fabela, es electo Diputado al Congreso de la Unión por el Distrito de Ixtlahuaca, que comprendía los municipios de Jocotitlán, Atlacomulco, El Oro e Ixtlahuaca, respaldado por gente del Estado de México y del club Liberal Constitucionalista al que pertenecía, ganándoles la contienda a latifundistas ligados al régimen porfirista, siendo apoyado por jóvenes estudiantes de la Escuela de Jurisprudencia de México y de sus dos amigos de fuste como el les llamaba, Don Enrique Peña, y Don Ismael Díaz González. Antes de la apertura del Congreso de la Unión, nuevamente el Presidente de la Republica. Lic. Francisco I. Madero, lo recomendó para que ocupara el cargo de Oficial mayor del Estado de Chihuahua, cuando era Gobernador Don Abraham González. Antes de partir se entrevista con Don Francisco I. Madero en el Castillo de Chapultepec, quien le hace algunas consideraciones sobre la situación general del país, que estimaba buena, considerando a Don Abraham como un gran patriota y un leal correligionario, a quien le tenía estimación y sincero afecto, deseándole además éxito en su nuevo encargo. El 24 de septiembre de 1912, la Cámara de Diputados le concedió licencia para que el Gobierno del Estado de Chihuahua utilizara sus servicios. Sale en tren para el Estado de Chihuahua, pero tuvo que detenerse veinticuatro horas en Torreón por padecer una fiebre intensa y repentina, enfermedad que le salvo la vida, por 4 que el mismo tren en que viajaba fue asaltado mas adelante por las fuerzas de Cheché Campos, corriéndose el rumor en la Ciudad de México que el Lic. Fabela había sido prisionero, sin embargo, al día siguiente al continuar con su viaje, el tren se detuvo mas adelante donde fueron recogidos el garrotero y el pasa-leña del tren del día anterior, quienes habían podido escapar de los asaltantes y entre lo que comentaron era que los maleantes preguntaron por un Diputado que debía ir entre los pasajeros, lo que obligo a Fabela a no identificarse con sus nuevos compañeros de viaje. Al llegar al Estado de Chihuahua se incorporo inmediatamente en su cargo de Oficial Mayor del gobierno de Abraham González, observando que este gobierno no contaba con el apoyo moral ni la simpatía política de la clase conservadora que se integraba de grandes terratenientes y familias privilegiadas, quienes apoyaban a la insurgencia de Pascual Orozco, quien se había separado de Madero y luchaba por su propia revolución, pero por el otro lado se observaba, al proletariado de las extensas tierras ganaderas y agrícolas, de los mineros y quienes trabajaban las artesanías, que sufrían pobreza y resignación aparente. Tuvo trato con el Secretario General de Gobierno, Lic. Aureliano González con quien entablo una estrecha amistad y con los profesores del Instituto Científico y Literario de Chihuahua, donde impartió las cátedras de Literatura e Historia de México. Antes de las fiestas patrias de 1912, una comisión de estudiantes y maestros solicito al Ejecutivo que el orador en la velada solemne en homenaje a los héroes de la Independencia fuese el Sr. Fabela, donde pronunció un ferviente discurso titulado “Por la Libertad”, de la cual extracto lo siguientes: “Mexicanos, ¿que es la libertad? La Libertad es el alma de las democracias, la base de la justicia, la causa primera de toda conquista política y el fundamento mas firme de las nacionalidades…” “…Muy levantado principio debe ser la libertad, cuando por ella el mundo se ha manchado de púrpura de mártires…” “…Necesaria debe ser la libertad cuando los pueblos se atreven a conquistarla por la fuerza de las armas…” “…Sublime es la libertad, señores, cuando hoy hace un siglo y dos años, aquí, en este suelo armado se enalteció con su martirio el azteca Cuauhtémoc, el héroe de los pies carbonizados…” “…Padre Hidalgo: Tú nos diste la libertad, nosotros te damos nuestro amor; la historia su eternidad; la patria el galardón de sus epopeyas; el homenaje soberbio a tu gloria es el himno victorioso y salvaje de su naturaleza, que llorar parece todavía tu ausencia en el correr silencioso de sus linfas y murmura tu nombre en el corazón de sus perpetuos adalides: las montañas…” “…. ¡La libertad no debe estar en los bolsillos, sino en las conciencias! Y en las conciencias, era nula. Por eso, debía surgir la revolución de 1910, y la revolución se gesto para el bien de todo el pueblo, en el cerebro alucinado, el corazón purísimo y el aguerrido pecho de Francisco I. Madero, el libertador de nuestra tercera independencia; hermano, como el porvenir ha de contarlo, de todos los grandes libertadores...” 5 “…He dicho.” El Lic. Fabela, conoció en Chihuahua al Gral. Victoriano Huerta, cuando este era responsable de las fuerzas federales, sin embargo, nunca le causo una buena impresión, al igual que al Gobernador Don Abraham González, quienes en muchas ocasiones comentaron lo débil que hacia el ejercito para combatir a las tropas de Pascual Orozco, ya que cuando cometían voladuras de trenes, incendios y asaltos, teniendo la oportunidad de vencerlos, no lo hicieron, dando la impresión de que los federales guardaban resentimiento a la gente del Presidente Madero por la rendición de Ciudad Juárez, sin embargo al Gobernador nunca se le permitió establecer un cuerpo de fuerzas auxiliares que dependieran de el, quien aseguraba acabar en poco tiempo con los inconformes. En los primeros días del mes de febrero de 1913, el Gobernador de Chihuahua le dio una misión confidencial al Lic. Fabela. Que se trasladará a la Ciudad de México, se entrevistara con el Presidente Madero y le insistiera en la necesidad de permitirle organizar el reclutamiento de una fuerza armada dependiente del Estado para combatir a los orozquistas, quienes seguían cometiendo atrocidades y las tropas federales no lograban aniquilarlos, por que no lo querían hacer, según su apreciación, para lo cual estaría dispuesto a pagarles con dinero del estado para que no causara problemas a la federación, recomendándole a su vez también se entrevistara con Don Ernesto Madero, Ministro de Hacienda para que apoyara el proyecto. Al llegar a la ciudad de México solicitó al Presidente una audiencia para enterarlo de la comisión que llevaba, en su mensaje de respuesta el Señor Madero expresó que le sería grato recibirle, lo que nunca ocurrió por sobrevenir a poco la “Decena Trágica” y solo pudo entrevistarse con el Ministro de Hacienda, quien lo recibió muy cortésmente, diciéndole que el nada podía resolver sin la autorización del Primer Magistrado, pero dejó en claro que las finanzas de la federación no permitían el pago de las fuerzas solicitadas. Relata Don Isidro Fabela que el 9 de febrero de 1913, dormía en su apartamento ubicado en las calles de Bucareli en la Ciudad de México, cuando se abre con violencia la puerta de su alcoba, penetrando un nervioso huésped para decirle, Licenciando ¿no sabe lo que pasa?, ¿Qué sucede? pregunto, que se han levantado en armas los felicistas, atacando Palacio Nacional, que no oye la balacera, al poner atención, aunque lejano se escuchaba un tiroteo, ya que Félix Díaz, Manuel Mondragón y Bernardo Reyes, habían desconocido a Madero. Al enterarse de lo que estaba sucediendo, hizo su maleta con lo mas indispensable, salio de prisa y se fue a instalar en forma provisional, con sus tías Brígida y Joaquina Alfaro, en la Colonia San Rafael. Una hora después de abandonar su alojamiento, llegaron al edificio tropas felicistas, siendo saqueadas las habitaciones del edificio y el reloj de la glorieta fue hecho pedazos por las granadas de los combatientes, por lo tanto Fabela volvía a escapar de una muerte segura al salir a tiempo de la “Casa de las Columnas”. El lunes 10, acudió con el Gobernador del Distrito, Federico Gonzáles Garza, a quien vio optimista, pero desconcertado e indeciso, estando con el, lo llamaron por teléfono de la Presidencia, pidiéndole a Fabela que lo acompañara, dirigiéndose ambos caminando hasta Palacio Nacional, el Gobernador de Distrito, subió a ver al Señor Presidente y Fabela se quedo en la Comandancia Militar esperándolo, mientras, estuvo observando a las 6 gentes que transitaban por el recinto histórico, ente los que vio pasar estaba el Gral. Victoriano Huerta, en traje de campaña, con la cabeza gacha, mirando de soslayo a uno y otro lado, como quien va a hurtadillas. Gonzáles Garza salio contrariado por las órdenes recibidas, ya que debía nombrar Inspector General de Policía al Coronel Benjamín Camarena, amigo de Huerta, quién después se supo fue a Chihuahua para asesinar a Don Abraham González, no pudiendo acomodar a su recomendado, el bizarro Gustavo Garmendia, a quien le tenia absoluta confianza. Ante tales acontecimientos y temiendo por su vida, Isidro Fabela se informo de los trenes a Veracruz y marcho lo más pronto que le fue posible con la finalidad de reunirse con sus padres, donde residían por recomendación medica. La estancia con sus padres fue corta ya que al enterarse de la traición huertiana y del crimen al Presidente y Vicepresidente de la Republica, el 14 de febrero de1913, regreso a la Ciudad de México para ocupar su curul en la Cámara de Diputados. Al presentarse como Diputado y rendir protesta de ley no tuvo ningún problema, integrándose al “Bloque Liberal Renovador” al que siempre perteneció, el cual se caracterizo por su elocuencia, su valor civil y su fidelidad a los principios revolucionarios, cuyas acciones habrían de tener importancia ante los encuentros militares que comenzaron para derrocar al usurpador Huerta en todo el país. Así, los diputados renovadores acordaron revelar públicamente su actitud, con la única finalidad de que el país supiera que también la Cámara de Diputados estaba dentro de la revolución, en la siguiente sesión, solicitó la palabra el representante del grupo, Lic. Francisco Escudero, quien en su intervención, gallarda y enérgicamente defendió los ideales de madero, declaró guerra a muerte contra el usurpador y apoyo en su lucha a Don Venustiano Carranza, al final se le felicito, pero esto fue suficiente para que al día siguiente se dictara orden de aprensión en su contra, muchos le aconsejaron que se escondiera o escapara cuando antes, sin hacer caso se fue a su casa, sin embargo al día siguiente disfrazado de obrero abandono la capital del país, marchando para Acapulco, embarcándose a los Estado Unidos y regresar mas tarde para ponerse a las ordenes de Don Venustiano Carranza, quien lo nombro Secretario de Relaciones y Hacienda, en el primer gabinete de la Revolución Constitucionalista. Isidro Fabela, ya como Diputado acompañó a los Diputados Serapio Rendón y Jesús Urueta a la Casa del Obrero Mundial, con el argumento de que las ideas del proletariado se dejaran oír en del Congreso y a su vez los trabajadores apoyaran al grupo renovador, ocasionando que a los tres se les empezara a seguir y espiar por agentes secretos. Días después, cuando fue cerrado el periódico “El Voto” del periodista reconocido Navarro, este se acerco en la Camara de Diputados a Isidro Fabela, solicitándole hablara en la tribuna a su favor, lo que hizo en forma inmediata, haciendo referencia a la libertad de imprenta, sustentado su intervención en el articulo 16 de la Constitución, que menciona el que nadie puede ser molestado en su persona, papales y domicilio. A la mañana siguiente la suerte volvió a favorecer a don Isidro Fabela, ya que al salir de su cátedra de historia de México en el Internado Nacional lo abordo su espía, pidiéndole le permitiera algunas palabras, sintiéndose detenido, se armó de valor y le pidió lo acompañara hasta su departamento y ahí, cuando sentía que le decía “Desé usted Preso”, el espía se identifico como de la Reserva y le comentó que conocía al Ing. 7 Francisco Portillo, muy amigo de la familia de Don Isidro Fabela, que por su recomendación en lugar de ser su espía, actuaría ayudándolo y para no intimidarlo le pedía le informara de sus actividades y los lugares que visitaría, así lo convinieron y de esta forma el agente podía informar ampliamente a sus superiores sin que Don Isidro se sintiera vigilado. El día primero de mayo de 1913 por la mañana se celebro por primera vez un desfile, el cual llego hasta las escalinatas de entrada de la Cámara de Diputados, donde fueron recibidos por un grupo de Diputados ente los que se encontraba Isidro Fabela, donde algunos trabajadores solicitaron su apoyo para lograr el descanso dominical y la jornada de ocho horas de trabajo, peticiones que recogieron con animo los del grupo “Renovador” y les ofrecieron llevarlas ante el Congreso. Por la noche hubo una velada en el Teatro Xicoténcatl, donde previamente en la Casa del Obrero Mundial, se había designado como orador oficial al Diputado Isidro Fabela. En su temerario discurso se refirió a la Libertad, hablo contra Huerta y a favor de la Revolución que encabezaba Carranza, dando confianza a los trabajadores que sus demandas serian escuchadas y transformadas en leyes muy pronto. Al salir del teatro, se acerco a Fabela un hombre de aspecto obrero y le pidió que lo acompañara, diciéndole que lo querían a matar, ofreciéndole esconderlo en su casa, rehuyendo la invitación prefirió encaminarse a su domicilio. El día 2 de mayo, se dictan órdenes de aprensión en contra de Lic. Fabela en la Capital, el Estado de México e Hidalgo, pero el día 3 de mayo al llegar a su domicilio por la noche recibió un recado de la señora Caravantes, indicándole que fuera a verla ya que su vida corría peligro, dirigiéndose a su domicilio inmediatamente. La señora le informo que se había enterado por una amiga esposa de un General Federal que se castigaría severamente a unos diputados, entre los que se encontraban Rendón, Escudero, Fabela y otros mas, pidiéndole saliera de México para salvar su vida. Al día siguiente por la tarde se dirigió a la Cámara, se dejo ver e hizo algunos encargos a su amigo el Diputado Cravioto y salio disimuladamente para ir a su casa por su maleta, indico a los porteros que partía para Pachuca y después de tratar de despistar a sus posibles seguidores llego a la Estación del Ferrocarril en la Villa de Guadalupe y se dirigió hacia Veracruz. Después supo que una hora después de haber salido de su domicilio, llego un grupo de diez gendarmes de la montada para aprenderlo, quienes al enterarse de que no se encontraba, invadieron sus habitaciones, las escudriñaron minuciosamente y se llevaron presos a los porteros por un lapso de cuatro días, sin conocer mas de lo que sabían, después de buscarlo infructuosamente en la Capital del país y en los Estado de México e Hidalgo, se envió otra orden de aprehensión hacía Veracruz. El día 4 de mayo muy temprano llego a Veracruz y se dirigió a la casa de sus padres, quienes lo recibieron muy efusivamente pero alarmados por su presencia, a quienes tubo que informar de lo que estaba viviendo a medias, manifestándoles la intención de dirigirse a Nueva York para trabajar, menciono su padre que en la bahía se encontraba un barco francés que partiría al día siguientes, que iría a ver la posibilidad de que lo aceptaran como pasajero. 8 Mas tarde, en compañía de su padre compró el pasaje y ambos se dirigieron a platicar con el Capitán del Barco, a quien le expusieron la urgencia que tenia para salir del país, quien accedió a que subiera al barco inmediatamente, sin embargo, al siguiente día, antes de partir, fueron sus padres y hermanas a despedirlo, al mismo tiempo llegaron unos agentes de la reservada preguntando por el Diputado Fabela, como es natural, no les dieron información, pero a Fabela lo traiciono el amor familiar y al darse cuenta que sus familiares no lo podían ver a través de la claraboya de su camarote, subió a cubierta para decirles adiós con la mano, situación que aprovecharon los agentes para señalarlo y decirle al Capitán, a esa persona es a quien buscamos, sin embargo el trasatlántico francés “La Navarre” empezó a moverse y los silbatos anunciaron su salida, nuevamente la providencia le había ayudado a escapar de la muerte. Antes de llegar a Nueva York estuvo unos días en la Habana, Cuba, de donde envió una carta a Don Venustiano Carranza mencionándole algunos aspectos de lo qua había pasado hasta esos momentos en apoyo a la revolución, a su vez poniéndose a sus ordenes para la comisión que el determinara. En Nueva York se encontró con el Lic. Federico González Garza y con el Lic. Antonio Villarreal, viajando con este ultimo a Piedras Negras, Coahuila para ponerse a las órdenes del Gral. Pablo González, quien le dio el cargo de Abogado consultor del Cuerpo del Ejército a su cargo y le pidió que esperara un poco para que le proporcionara caballo y arma para entrar a la lucha, donde además conoció al General Jesús Carranza, hermano menor de Don Venustiano. Desde Piedras Negras El Diputado Isidro Fabela lanzo dos iniciativas, una para el Congreso Norteamericano por el embargo de armas hecho a los dos bandos mexicanos en lucha y la otra para los Diputados de la Ciudad de México, para que no dieran con su presencia en la cámara de Diputados apariencia de legalidad al gobierno del tirano Huerta e invitándolos a incorporarse a la revolución con Don Venustiano Carrranza. En el mes de octubre Isidro Fabela, recibe un mensaje de su amigo Juan Sánchez Azcona, Secretario de Gobierno del Estrado de Sonora, que en representación del Gobernador José Maria Maytorena le ofrecía la Oficialía Mayor, la cual acepto y con la venia de Don Jesús Carranza y del Gral. Pablo González partió para ocupar su nueva encomienda, siendo recibido en Hermosillo por su amigo de estudios, Adolfo de la Huerta. El día 28 del mismo mes tomo posesión como Oficial Mayor del Estado de Sonora y de lo primero que se percato es que existían relaciones tirantes entre el Gobernador del Estado y las fuerzas militares comandadas por el Gral. Obregón, situación que tenía molesta a estos últimos por que Don Pepe Maytorena había pedido licencia para separarse del cargo y se fue a Tucson para curarse de un mal del estomago, pero regresó pronto por insistencia de su amigo Venustiano Carranza, sin dar oportunidad de que entrara en funciones al que había designado la Legislatura Estatal de forma provisional. Ya como Oficial Mayor del Estado de Sonora, a Isidro Fabela lo comisiono el Gobernador Maytorena para dar la bienvenida a Don Venustiano Carranza en los campos de Santa Maria, al sur de la capital, en su recorrido que hacia en todo el norte del país, situación que le permitió conocer personalmente al Jefe de los Constitucionalistas. Al trasladarse la comitiva a Hermosillo, Fabela pidió una audiencia al Gral. Carranza, la que le concedió en el tren en que viajaban, limitándose a escucharlo solamente sobre su intención de participar activamente en la revolución y de cómo llego a la Oficialía Mayor del Estado de Sonora, días después Fabela volvió a solicitar otra audiencia a Carranza, 9 concediéndosela en el edificio donde se hospedaba, después de exponer nuevamente sus actividades en la revolución, el Gral. Carranza le dijo que sí requería de sus servicios, pero primero renunciara al puesto de Oficial Mayor, lo que hizo inmediatamente ante el Gobernador, quien la acepto contrariado y con disgusto, entonces, le indicaron se presentara con el Lic. Francisco Escudero, Secretario de Hacienda y Relaciones del primer gabinete de Carranza, quien le informó que estaba comisionado como Jefe del Departamento Diplomático. En veinticuatro horas, el Lic. Escudero salió a cumplir una misión especial hacia Ciudad Juárez y Washington, pero su delicada salud lo detuvo en el camino, propiciando que el Gral. Carranza nombrara al Lic. Fabela, Oficial Mayor de la Secretaria de Relaciones Exteriores. Es importante mencionar que Isidro Fabela, actuó en esa época en asuntos sobresalientes como lo fueron; el Caso Benton, las conferencias del Nìagara, la desocupación de Veracruz que estaba en poder de las tropas norteamericanas y la declaración de neutralidad de México en la Guerra Europea de 1914. Como es sabido el Gral. Ángeles se encontraba en Paris, exiliado voluntariamente desde que se salvo de perder la vida cuando lo apresaron junto con el Presidente Madero y el Vicepresidente Pino Suárez, a quien el Gral. Huerta lo dejo salir del país por la simpatía que le guardaba el ejercito al haber sido Director del Colegio Militar, por lo tanto Don Venustiano Carranza le mando varios recados invitándolo a que se incorporara a la revolución peleando contra Huerta, lo que finalmente sucedió, incorporándolo como Subsecretario de Guerra, encargado del Despacho, causando este nombramiento descontento entre los Generales, como Obregón que le decía a Carranza que no era justo que los mandara un soldado federal de origen porfiriano, sin embargo sus actividades eran solo de tramite, lo que no dejaban satisfecho al general Ángeles. Como el Lic. Fabela llevaba buena amistad con el, le pidió en su nombre suplicara al Gral. Carranza le diera mando de fuerzas, una brigada, un regimiento, lo que considerara mas útil para la causa y no realizar labores burocráticas, lo que cumplió al pie de la letra, pero el Gral. Carranza le informó que lo pensaría y le resolvería mas tarde, sin embargo a varias insistencias se designó al Gral. Angeles para que se uniera a las fuerzas de Francisco Villa cuando se preparo la Guerra de Torreón. Tiempo después Carranza decidió trasladarse a Culiacán., acompañado de su gabinete, realizándose el viaje en tren y a caballo, en este último se trasladó Isidro Fabela en compañía del General Alvarado, en Culiacán le hizo una entrevista al General Manuel M. Dieguez, la cual se llevo a cabo el 14 de febrero de 1914. Este general le señaló que se inició como líder obrero en Cananea, mas tarde fue Alcalde y después soldado con el único fin de defender la ley, los derechos humanos y sociales que se habían quebrantados en la República, además de enarbolar la bandera de “Sufragio Efectivo. No Reelección”, quien le contó entre otras cosas, que su lucha inicio en 1900 como miembro del club Verde, en Hermosillo, Sonora, en 1905 se incorporó al Partido Liberal Mexicano de los Hermanos Flores Magón de San Luis Missouri, posteriormente creo “La Unión Liberal Humanidad” de Culiacán. Le siguió platicando, que en esa época surgió la famosa Huelga de Cananea, que no tuvo nada que ver con cuestiones políticas, ya que se origino por situaciones económicas contra los directores de la empresa, sin embargo los huelguistas lo nombraron uno de sus representantes, por hablar ingles e intervenir en la solución de sus conflictos, sin embargo 10 mas que soluciones, las autoridades federales propiciaron una persecución en su contra, tomándolo preso y sentenciado a 15 años de prisión, los cuales pasó dos en Cananea, uno en Hermosillo y dos en el Castillo de San Juan de Ulua, de donde lo rescato la Revolución de 1910. Al regresar a Cananea en 1912, es electo Presidente Municipal y cuando tuvo conocimiento de la traición de los Generales Huerta, Blanquet y Félix Díaz, se levantó en armas acompañado de su pueblo, siendo nombrado Jefe del Movimiento Revolucionario del Distrito, uniéndose a las fuerzas del Gral. Obregón, pero siguiendo los ideales de Venustiano Carranza. Estando en Culiacán Venustiano Carranza, emitió un decreto en su carácter de Primer Jefe del Ejercito Constitucionalista, donde se declaraba luto nacional el día 22 de febrero de 1914, en memoria del Presidente de la República Francisco I. Madero, como un homenaje al cumplirse un año de su sacrificio. A quien conoció en Culiacán fue a la Coronela Doña Ramona R. Viuda de Flores, a quien llamaban la Güera Carrasco, de quien decía Fabela era de buen ver, alta, rubia, de ojos garzos, cejas oscuras y espesas, boca de labios delgados, con mirada directa y franca, de voz clara y nariz respingada, quien se levantó en armas al conocer el asesinato del Presidente Madero, incorporándose a las fuerzas del General Carrasco. Un día se presento con el Lic. Fabela, para invitarlo a una comida que le ofrecía junto con el General Ángeles, donde estaría presente el General Juan Carrasco, como es de entender previo acuerdo con el General Ángeles, ambos acudieron a la comida, la Güera Carrasco los recibió con todos lo honores, oportunidad que tuvo para tratar a esta mujer con ideales revolucionarios, quien en su charla mencionaba muchos calificativos altisonantes como la tiznada, los ajos, cabrios, y las madres, que además eran muy común entre la tropa, en la comida dio la bienvenida el General Juan Carrasco y la Güera preguntó sobre la situación internacional y las posibilidades de triunfo de la guerra civil, a lo cual le contentaron muy seguros del triunfo de la revolución. A esta mujer, Lic. Fabela solo la volvió a ver en la Secretaría de Relaciones Exteriores en la Ciudad de México quien fue a saludarlo y despedirse, ya que viajaba a los Estados Unidos a visitar a su hija que tenía en un colegio de Nueva York. Tiempo después el General Carranza, dispuso que regresaran a Hermosillo y casi de inmediato ordeno salir para Chihuahua, vía Ciudad Juárez, donde la lista que acompañaban al primer Jefe estaba compuesta solo de militares, según información del Capitán Breceda, obligando al Lic. Fabela a preguntar directamente a Carranza si el podía acompañarlo, a lo que contesto que el si estaba contemplado en su comitiva, trasladándose en tren y a caballo en un viaje que duro veintitrés días. Al llegar a Chihuahua Carranza y su comitiva, se suscitó un episodio que pudo costarle la vida tanto al General Manuel Chao, Gobernador de Chihuahua como al General Francisco Villa, Comandante de la División del Norte, que pudo ser librada gracias a la oportuna intervención del Gral. Carranza, ya que días antes se había cometido el asesinato del ingles William Benton, en manos del Capitán Fierro, por haber tenido la osadía de reclamarle a Villa el haberlo despojado de algunos bienes, sin embargo el Gobierno Británico había reconocido el gobierno de Huerta, por tal motivo solicitó al Gobierno de los Estados Unidos su intervención para aclarar el caso, enviando el Cónsul Carothers un enérgico mensaje a Carranza donde se pedía el castigo de los delincuentes, Carranza pidió a Fabela enterarse del asunto con Villa para contestar, lo hizo por 11 telegrama, contestando que le había faltado al respeto injuriándolo y queriéndolo matar, sometiéndolo a un consejo de guerra, quien lo sentencio a muerte. Pero la prensa de los Estado Unidos y de Inglaterra, agrandaron el asunto, alegando que eso era mentira, colocando todo contra el Primer Jefe, en forma injusta y belicosa. Entonces Carranza le contestó a la Secretaria de Estado, que no siendo un ciudadano norteamericano sino ingles, le tocaba al gobierno de su Majestad Británica dirigirse a el como encargado del Poder Ejecutivo de la Revolución, garantizando de esta manera la Soberanía Nacional ya que no éramos una republica sometida a la Casa Blanca, obligando de esta manera al cónsul de la Gran Bretaña a dirigirse a Fabela para la solución de este asunto. Este hecho y otros malentendidos que se fueron sumando, fueron los que distanciaron al Gral. Carranza con el General Villa, encargándose de acrecentar la gente de influencia de Villa, hasta llegar al rompimiento final y volverse enemigo del Jefe de la Revolución. Estando Carranza en Chihuahua, se llevo a cabo la Toma de Torreón y al salir victorioso Villa, se dirigió con sus generales a Chihuahua para presentar sus respetos al Jefe de la Revolución. Sabedor Carranza de las rencillas que traían Villa y el Gobernador de Chihuahua, con amenazas de muerte, los reunió en la Casa Gameros, donde se hospedaba, para que se reconciliaran, lográndolo de tal modo que después, Chao le fue fiel a Villa, hasta que lo mandó fusilar el Gral. Álvaro Obregón. Una vez subsanados los problemas en Chihuahua, el Gral. Carranza dispuso el traslado de su gabinete a Torreón, donde los principales Jefes de la División del Norte ofrecieron un banquete al Jefe de la Revolución, notándose la ausencia de Villa en este acontecimiento, lo que les hizo suponer que ya estaba preparando lo que había de ser la segunda guerra civil en el país, al final del banquete se dieron los discursos y Carranza pidió a Fabela diese el agradecimiento, quien en su discurso, mencionó las acciones victoriosas del General Villa, con quien se garantizaba el triunfo de la revolución, recalcando que el Jefe del Poder Ejecutivo llevaba una labor cotidiana e incansable en todo el país, suscitándose un malentendido al final, cuando un comensal borracho interrumpió el discurso, propiciando que se retira la comitiva y ordenando Carranza que partirían al día siguiente para Saltillo. Lo que no supo en ese momento Fabela, fue que el interlocutor era un General de la División del Norte, quien solicitó inmediatamente un consejo de guerra contra Fabela para que se le fusilara, acción que no paso a mayores por la oportuna intervención del Gral. Carranza. Ante el distanciamiento entre el Jefe de la Revolución y el Gral. Villa, este desobedece ordenes y se encamina con todo su ejercito hacia Zacatecas, para la toma de dicha ciudad, que es reconocida como una de las grandes batallas y logros de la revolución mexicana, con este triunfo, Villa regresa a Torreón donde establece su cuartel general. Es entonces cuando ordenó Carranza, al Gral. Obregón, al Gral. Pablo González y al Gral. Cándido Aguilar que se preparasen para seguir adelante hasta llegar triunfantes a la ciudad de México, venciendo primero a Victoriano Huerta y después enfrentándose al Gral. Villa, así, el General Obregón no tubo dificultades para llegar triunfante a la Ciudad 12 de México, recibiendo ordenes de Carranza para firmar los tratados de Teoloyucan, que permitió a Carranza su entrada a la Ciudad de México el 20 de agosto de 1914. Estando Carranza en Teoloyucan llego el Ministro de Brasil quien además llevaba la representación de Washington para plantearle, que según las conferencias del Niágara se debería permitir a las fuerzas federales seguir perteneciendo al ejercito constitucionalista, dando garantías a jefes, oficiales y tropa, a lo cual Carranza contrariado, le manifestó que la rendición seria incondicional de los soldados federales y la entrega total de la Ciudad de México, saliendo el Ministro de Brasil enojado y amenazando que no seria reconocido su gobierno por estas naciones. Es importante mencionar un episodio ocurrido en la revolución y que es conocido por mucha gente, la ocupación norteamericana en Veracruz, que se presentó estando Don Venustiano Carranza en Chihuahua acompañado de su comitiva, protestando por este hecho de manera enérgica con una nota dirigida al encargado del Poder Ejecutivo, señor Woodrow Wilson, tan enérgica que Estado Unidos la considero un ultimátum e inmediatamente el señor Wilson respondió con una nota de disculpa, diciendo que la ocupación en Veracruz era un castigo contra Victoriano Huerta. Sin embargo, Carranza no acepto la disculpa, pidiendo al Presidente de Estados Unidos la inmediata desocupación del puerto, siguiendo los comunicados el Lic. Fabela, en su carácter de Encargado de la Secretaria de Relaciones sin éxito, así, una vez que Huerta salio del país Fabela insistió por la desocupación de las tropas norteamericanas, contestando la chancillería de Washington que esta seria desocupada en fecha próxima. Después de seguir con las protestas, felizmente la Agencia Confidencial de Washington le envió un mensaje a Fabela indicándole que el Presidente Wilson había determinado que en noviembre las fuerzas norteamericanas desocuparían el puerto de Veracruz, informe que inmediatamente envió al Presidente Carranza a Palacio Nacional y este lo pudo trasmitir a la nación en su mensaje del tradicional Grito de Independencia desde Palacio Nacional, felizmente el 14 de noviembre de 1914 es desocupado al puerto por las fuerzas invasoras. De este delicado asunto Fabela consideró, que la tardanza en la desocupación del puerto de Veracruz por las fuerzas norteamericanas se debió a que Washington no estaba seguro de que Don Venustiano Carranza triunfara en la guerra civil, sino según sus fuentes de observación decían que Villa era quien ganaría la lucha, sin embargo, al cerciorarse del triunfo de los constitucionalistas, reconocieron a Carranza como Presidente de México. Isidro Fabela en sus memorias narra un hecho importante sucedido durante la revolución, el haber sido el primer país del mundo que utilizo el avión bombardeando al enemigo, describiendo los siguientes hechos: En 1913 el Gobierno del Estado de Sonora que apoyaba a la revolución, compró un avión Curtís, manejado por un piloto francés de nombre Dossier Masón, el cual efectúo vuelos de exploración y arrojó varias granadas, siendo los bombarderos el Mayor Juan Merigo y el Capitán Joaquín Bauche Alcalde, sin embargo duro poco tiempo el gusto, ya que se accidento en Cruz de Piedra, provocando que todo el tiempo que estuvo el Sr. Carranza en Sonora, no fuese posible que volara, por ser su reparación muy complicada. En junio de 1914, Gustavo Salinas, efectuó algunos vuelos bombardeando Topolobampo y Mazatlán a las tropas huertistas, después estuvo comisionado en Ciudad Juárez bajo las órdenes del Gral. Villa, para organizar la primera Flotilla Aérea Constitucionalista, con 13 aviones comprados en Nueva York a la casa Moisant, donde Alberto había efectuado estudios de piloto aviador en 1912, pero después de la insubordinación de Villa, la flotilla que había sido destinada a la División del Norte, paso a depender directamente del Estado Mayor del Primer Jefe Constitucionalista. En 1915, la flotilla participó activamente en la campaña que se realizó en Yucatán en los combates de Halachó, Blanca Flory Kalkini, siendo sus misiones muy efectivas de bombardeo, después pasó a Tampico, prestando valiosos servicios durante la defensa de la región petrolera de Ébano y cuando la Ciudad de México fue ocupada por la División del Centro al mando del Gral. Pablo González, la flotilla paso a la capital y se instalo en San Lázaro, donde quedo organizado el Departamento de Aviación y puestos en marcha los Talleres Nacionales de Construcciones Aeronáuticas y la Escuela Militar de Aviación. En 1960 Fabela, fue testigo en Francia del homenaje al General de Brigada Alberto Salinas Carranza, como miembro de los Vieilles Tigres, sociedad al que solo pertenecían pilotos titulados antes de 1920. III.- ACTIVIDADES REPRESENTANDO A MEXICO El 24 de diciembre de 1915, Isidro Fabela hace su primer viaje a Europa con el carácter de Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario de México, con amplias facultades, teniendo la misión de reorganizar los consulados en Inglaterra, Francis, Italia y España. El 7 de enero de 1915 llega a Londres, durante la primera guerra mundial, como Agente Confidencial del Gobierno Constitucionalista, visitando Inglaterra y Francia para reanudar las relaciones diplomáticas interrumpidas con motivo de los sucesos revolucionarios, sumando también a Italia, posteriormente recorre España, Roma, Génova, Milán, Nápoles y Venecia, donde deja encargados en sustitución de los representantes porfiristas o huertistas que se encontraban en estos lugares. En 1916, regresa a Paris recibiendo el nombramiento de Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciarios de México ante los gobiernos de Argentina, Brasil, Chile y Uruguay, también con el propósito de reanudar las relaciones diplomáticas. En 1917 es designado Embajador Especial en la Republica Argentina, estableciendo su residencia en Buenos Aires, recorriendo Chile, Brasil y Uruguay para cumplir con su cometido y una vez cumplida su misión, regresa a Europa. En 1918 en Barcelona, presenta un documento sobre la conducta política internacional asumida por la casa blanca de los Estado Unidos en Cuba, Filipinas, Panamá, Nicaragua y Santo Domingo, combatiendo valientemente la actitud que impuso el imperialismo norteamericano, sobre intereses políticos, militares y económicos. Participo en el caso “Columbus”, población americana que atacó Villa como represalia por el reconocimiento oficial del Primer Jefe, así como en la invasión al territorio mexicano por la Expedición Punitiva, con lo que se inició uno de los más graves conflictos internacionales entre nuestro país y la Unión Americana. Firmo y envió en representación del primer Jefe del Ejercito Constitucionalista, la declaratoria de que México observaría estricta neutralidad en el conflicto armado entre Alemania, Austria-Hungría, Bélgica, Francia, Gran Bretaña, Japón, Rusia y Servia que culmino con la primera guerra mundial, en su carácter de Encargado del Despacho de la Secretaria de Relaciones Exteriores. 14 El 30 de enero de 1920, fue designado Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario en Alemania y en el mes de mayo, después de la muerte de Venustiano Carranza, Fabela renuncia por cable a su cargo diplomático, por no querer colaborar con quienes habían traicionado y derrocado al Gobierno Constitucionalista del Presidente Carranza. IV.- EL INTERNACIONALISTA En 1927 regresa a Paris como particular, dedicado a escribir para diversos periódicos como “El Diario de Yucatán”, “El Mundo de Tampico, “Excelsior de México y algunos diarios de Centro y Sud América. En el mes de julio asiste como representante de Excelsior al Congreso de la Prensa Latina, celebrada en Madrid. En 1928 se publica en la revista “Ariel” de Honduras, una carta que envía Fabela al General Augusto Cesar Sandino, donde defiende la libertad de América. En 1932 se le designa Comisionado Mexicano en funciones de Juez, en la Comisión de Reclamaciones México-Italia, cargo que desempeña hasta 1933. En 1937 El Presidente Cárdenas lo nombra Representante de México ante la Liga de las Naciones, como “Enviado Extraordinario y Ministro Plenipotenciario”, con pleno poder en nombre y representación de los Estado Unidos Mexicanos y como Primer Delegado de los mismos. Tomó parte en las deliberaciones de la Asamblea General de la Sociedad de Naciones, hoy, Organización de las Naciones Unidas (ONU). En septiembre del mismo año, en Ginebra, pronuncia un discurso sobre la España Republicana, en contra de los ejércitos invasores de Hitler y Mussolini, en dicha asamblea el Delegado Polaco trata de que se expulse de la Liga a Abisinia (Etiopia), defendiendo su derecho a permanecer de parte de Fabela, logrando que continuara. Encontrándose en Viena, recibe un mensaje de la Secretaria de Relaciones Exteriores comunicándole que habiendo sido nombrado delegado a la Conferencia de Brúcelas por el Presidente de la República, se traslade a Bélgica para cumplir su comisión, sin dejar su representación en la Sociedad de las Naciones. El 7 de julio de 1937, en Brúcelas defiende a China por la agresión recibida del ejercito Japonés sin declaración de guerra. En 1938 regresa a México y el Presidente Cárdenas deja al Lic. Fabela en condiciones de elegir entre la cartera de Asistencia Pública o seguir en Ginebra, decidiendo seguir al Frente de la Delegación de México ante la Sociedad de las Naciones, donde protesta ante el Secretario General de la Liga y ante el mundo por la ocupación de Austria. En 1939 se le confiere pleno poder para que en nombre y representación de nuestro país, efectué en la Secretaria General de la Sociedad de las Naciones el deposito del instrumento de ratificación del Proyecto de Convenio para limitar horas de trabajo en las minas de carbón y participa en las deliberaciones de la XX sesión ordinaria de la Asamblea. En 1940, asiste a la Habana, Cuba como representante del Consejo de la Oficina Internacional del Trabajo a la Conferencia del Trabajo. 15 El Presidente Manuel Ávila Camacho, lo designa Presidente de la Delegación Mexicana ante la Tercera Conferencia del Caribe, a celebrarse en Haití, donde la Secretaria de Relaciones de Cuba y la de Haití, pidieron al Lic. Fabela elaborara el Reglamento de las Conferencias del Caribe. En noviembre de 1941, el Comité Ejecutivo de la Internacional Free World Associación, de Nueva York, le ofrece a Fabela la presidencia de la rama mexicana ante dicha asociación, de la cual forman parte los mas ilustres intelectuales y políticos del mundo, entre los que se contaban a Albert Einstein, Hugo Moore, Thomas Mann, El Vizconde Cecil, Lázaro Cárdenas, El Conde Sforza, el ex ministro francés Pierre Coty, Sir Norman Angell, Carlo A Pratto, Fernández Artucero, entre otros, cuyos fines era cooperar a la defensa de la democracia, la libertad, la seguridad colectiva y la justicia social en el mundo. En 1943 la Agrupación “España con Honra” publica en la Ciudad de México un discurso de Fabela sobre el Presidente Manuel Azaña y la Política de México hacia la Republica Española. En 1946 Isidro Fabela, es candidato de México a la Corte Internacional de Justicia, siendo electo Juez del Tribunal de la Corte Internacional de Justicia de la O.N.U., junto con 14 mas. V.- GOBERNADOR DEL ESTADO DE MEXICO El 16 de marzo de 1942 es designado Gobernador del Estado de México, rindiendo protesta en La Ciudad de Toluca en el recinto del Poder Legislativo del Estado, acudiendo en representación del Presidente de la República, el Lic. Fernando Casas Alemán, Subsecretario de Gobernación. En el Estado de México, Fabela inicia una nueva política que sienta las bases para el engrandecimiento futuro de la entidad, ya que su gobierno se caracterizo por una ética estricta, aplicada al manejo del erario en general a todos sus actos de gobierno, iniciándose la industrialización del Estado, la ceración del Banco Industrial del Estado de México, dando un gran impulso a la educación, mejorando al magisterio, tanto en sus emolumentos como en su preparación, se inicio la construcción de importantes carreteras, hospitales, obras de agua potable, incrementándose notablemente el presupuesto y se imprime una dinámica gubernamental que pronto se traduciría en obras, se pacifica al Estado, creando una unidad política en torno a los nuevos sistemas, entre lo que destaca la Abolición de Cacicazgos y del Pistolerismo, Extinción de la Violencia y Moralización General de la Administración Pública. Durante su gobierno, cobró gran impulso la Campaña de Alfabetización y a iniciativa del Lic. Adolfo López Mateos, se efectuó una sesión del Ayuntamiento de Toluca para que este le otorgara un subsidio mensual al Instituto Científico y Literario del Estado de México, presentando posteriormente ante el Congreso Local, la iniciativa de ley que le da su autonomía, (hoy Universidad Autónoma del Estado de México). El día 15 de septiembre de 1945, hizo entrega del Poder Ejecutivo del Estado de México al Señor Don Alfredo del Mazo. En 1951 la Universidad Nacional Autónoma de México le confiere el titulo de Doctor Honoris Causa. 16 En 1959 es electo Presidente de la Sociedad Mexicana de Geografía y Estadística para el ejercicio social 1959-1961. En 1960 el Senado de la Republica le otorga la Medalla “Belisario Domínguez”. Fue fundador de algunos órganos periodísticos como la Verdad, el Pueblo y Mundo Libre. Siendo coordinador de la Comisión de Investigaciones Históricas de la Revolución Mexicana, se encargó de la edición de la Historia Diplomática de la Revolución Mexicana, así como de la serie Documentos Históricos de la Revolución Mexicana. En el campo del Derecho Internacional se inclinó por la neutralidad, el derecho de no intervención, y la elaboración de un concepto moderno de la agresión imperialista. VI.- LA CASA DEL RISCO. En 1933 Isidro Fabela compra la Casa del Risco, ubicada en San Ángel, Distrito Federal, donde vive por 30 años en compañía de su esposa Josefina Eiseman y sus dos hijos adoptivos, llevándose mas de cinco años en su restauración, donde coloco la colección de arte y antigüedades que fue coleccionando tanto en México como en el extranjero, llegando a reunir mas de 800 piezas que se pueden apreciar ahora en el Museo del Risco del Centro Cultural “Isidro Fabela”. Esta casa es famosa por su fuente ubicada en el patio interior, levantada como un altar y tapizada con platos, platones, tazas, tibores, riscos (pedacearía de porcelana y cerámica), concha nácar y pequeños espejos, única en su genero. Isidro Fabela, desde un inicio tubo la idea de donar esta casa, pero es el 5 de octubre de 1958 cuando se constituye un fideicomiso con Banamex y la participación del Gobierno del Estado de México, para su cuidado y administración, siendo el 30 de septiembre de 1963, cuando entrega la casa al Pueblo Mexicano con la presencia del Lic. Adolfo López Mateos, Presidente de los Estado Unidos Mexicanos. Cabe mencionar que la entrada a este Museo esa completamente gratuita, siendo el único de su género que se conoce en la Ciudad de México y puede ser comparado con los que existen en la Ciudad de Washington. Por ultimo menciono que se han levantado monumentos en su honor, escuelas llevan su nombre, así como poblados y centros culturales, además de que su nombre esta escrito en letras de oro en la Cámara de Diputados de la Ciudad de México. 17 HÉROES ANÓNIMOS DE LA INDEPENDENCIA DE MÉXICO LIC. JAIME CASTRO RESENDIZ Cronista del Plantel “Cuauhtémoc” de la Escuela Preparatoria LIC. NORMA GONZÁLEZ PAREDES Cronista del Centro Universitario UAEM “Texcoco” "El pueblo no es libre; porque la libertad debe estar instituida en las raíces culturales de los pueblos forjadores de igualdad, reconocer y valorar a nuestros grupos culturales es reforzar nuestra identidad ." Norma González Paredes INTRODUCCIÓN En el momento de la decisión sobre el tema para participar en este Congreso, optamos por realizar una crónica sobre los héroes anónimos que participaron como carne de cañón en la Guerra de Independencia y que injustamente no fueron favorecidos con el triunfo de las armas insurgentes; debido a que el sector rural históricamente ha constituido una parte importante y amplia de la población nacional y que agrupa en su seno a indígenas y campesinos, Los primeros quedan definidos como aquel grupo que desciende de la población originalmente americana y autóctona, y que históricamente ha sufrido todo un proceso de conquista y que ha quedado marginado a pesar de haber sido utilizado en los movimientos sociales aún hasta en nuestros días, pese a los esfuerzos gubernamentales por apoyarlos con una educación bilingüe y preservar sus lenguas, dialectos y costumbres a veces tribales; sigue siendo un grupo social que ha quedado marginado -y porque no decirlo- a veces discriminado racialmente y ha permanecido casi indemne o poco fusionado. Los segundos, campesinos, forman parte de ese grupo de individuos que se dedica básicamente a la agricultura y todas sus acciones económicas giran en torno a esta actividad. Esta crónica está diseñada fundamentalmente con información obtenida de fuentes de primera mano, es decir consultando documentos manuscritos en la primera mitad del siglo XIX que forman parte del acervo del Archivo General del Estado de México, apoyados también en fuentes bibliográficas para darle fundamento teórico, porque consideramos que es una etapa histórica en donde el país y el Estado de México, vivieron situaciones inestables y difíciles, tales como la recién concluida Guerra de Independencia, así como el ensayo de formas de gobierno como la Monarquía de Agustín de Iturbide y las Repúblicas Federalista y Centralista; y el correspondiente desequilibrio económico, político social, consecuencia de la problemática presentada, que repercutirían directamente en el campo mexicano. En el que menciona López Cámara (1999) “En México la influencia del pasado indígena, frecuentemente se enlaza con el presente; hace acto de presencia por doquier; en su historia se localizan no pocas páginas brillantes de la lucha por la libertad. 18 Por eso en la etapa final el movimiento de independencia como en la primera del México Independiente vienen a ser el punto de partida para hablar de los campesinos e indígenas como héroes anónimos de la Guerra de Independencia. 19 HÉROES ANÓNIMOS DE LA INDEPENDENCIA DE MÉXICO A pesar de la Independencia, la propiedad del suelo mexicano conservaba aún las mismas características que predominaron durante el largo periodo colonial; desde luego el sistema de las haciendas, apenas había sido alterado, sus pocas modificaciones eran de tal naturaleza que tendían más bien a acentuar su extensión, y en algunos casos sólo cambió la nacionalidad de los dueños; el sistema no sólo había logrado subsistir sino, lo que resultaba aún más grave, tendía a acentuarse. Así pues, al iniciarse la vida independiente, en nuestro país se tuvo que enfrentar a una serie de situaciones económico-sociales que legaron las instituciones coloniales, por lo que en la inmensa mayoría del territorio nacional se presentaron una gran cantidad de problemas que se reflejaron en sus habitantes, principalmente indígenas y campesinos. Por ello es que la independencia política de la Nueva España teóricamente produjo la igualdad jurídica de todos los ciudadanos con la Constitución de 1824. Sin embargo como era de esperarse la teoría dista mucho de la práctica, ya que no se mostraron indicios de una igualdad y en la actualidad se percibe ese distanciamiento entre indios, mestizos y criollos. De repente desaparecieron todos los obstáculos legales que se oponían a la integración de los indígenas a la vida nacional, teóricamente. Pero esto no ocurrió así, su efectiva inferioridad económica y social los colocó en situación desventajosa y la esperada igualdad jurídica nunca llegó y tuvo como consecuencia el agravamiento de su situación. De tal forma que los efectos inmediatos del supuesto igualitarismo fueron dos y que en la realidad sólo quedaron en “letra muerta”: primero, el indio podía disfrutar libremente de sí mismo en el mercado de trabajo y segundo, la tierra que ocupaba podía pasar a ser propiedad privada. Para el correspondiente efecto Rivera Herrejón (2007) indica que en el año de 1821 en lo que corresponde al Estado de México se tenía una defectuosa distribución de tierras y de habitantes, se apreciaba una propiedad indígena individual y comunal casi desaparecida y una propiedad siempre creciente en manos del clero, de militares, de los españoles y sus descendientes aún radicados en México. Esta desigualdad en la distribución de tierras generó que los pueblos indígenas quedaran a veces comprendidos dentro de los grandes latifundios particulares a los que Stavenhaguen (1998) afirma que en el siglo XIX a pesar de darse inicio el liberalismo económico; se pensó hacer un bien a la población agrícola mexicana; pero no fue así ya que de hecho fue durante este siglo en el que se constituyeron los inmensos latifundios y los títulos de propiedad de los indígenas pasaron a manos de los latifundistas y aún sin cambios legales las tierras comunales de los indígenas les fue despojada progresivamente. Gonzalbo y otros (2004) opinan que al otro día de lograda la independencia surgieron algunas dificultades, por un lado la inexperiencia de los criollos en la administración pública; la inclinación de los caudillos menores a convertirse en reyezuelos de las zonas donde habían luchado; los deseos de los caudillos mayores a convertirse en presidentes del nuevo país, el desinterés político de la gran mayoría de la población y la vehemencia política de la minoría y en especial de la clase media; fueron dificultades que desde el punto de vista económico se agudizaban porque la mayoría de grandes y medianos comerciantes propietarios de un gran capital, al ser hispana, iniciaron su éxodo desde principios de la Guerra de Independencia que culminaría con su expulsión en 1827. 20 El movimiento de independencia efectuado por criollos, permitió que éstos se constituyeran en el nuevo grupo en el poder, y aunque este insistiera, los campesinos y los indígenas jamás los aceptaron ni los vieron como mexicanos porque en ningún momento los favorecieron ya que se aprovecharon de la ignorancia, la miseria y la desigualdad en que vivían los grupos rurales, contribuyendo con ello en esta agrupación despojada en todos sentidos: una mentalidad de odio y desconfianza a todo lo que se identificaba como persona o elemento que lo explotara, llevándose esto al extremo de manifestarse en actitudes de antagonismo racial y de odio representado en algunos casos por cabecillas populares y como ejemplos señalamos los siguientes casos: En 1820 en los Estados de México y Puebla se suscitó un connato de revolución que tenía como plan el privilegio exclusivo de la confiscación de las propiedades de los españoles. Nos referimos al movimiento que se inició en Chaucingo, lidereado según declaración de los participantes, por individuos que tienen injerencia con la comunidad eclesiástica de Puebla, mientras que en el Estado de México se hicieron todas las invitaciones al sector campesino para secundar el movimiento (Archivo General Del Estado de México: 1820. Vol. 2. 5 ff. frente y vuelta. –a partir de aquí se emplearán las siglas AGEM para identificar a esta institución). El Gobierno del Estado de México, aún no enterado del todo de la realidad de esta conflagración debido a que sus funcionarios locales le informan con ambigüedades que esta revolución tiene también como objetivo la consolidación de la verdadera independencia, donde realmente el pueblo mexicano; entiéndase que está integrado por indígenas, mestizos criollos y como la denomino José Vasconcelos la raza de bronce participen de libertad no solo a nivel nacional sino a nivel del continente americano. Parece entonces que la rebelión de Chaucingo no es más que un reflejo de la Doctrina Monroe, que intentó solidarizar a América en beneficio de los intereses norteamericanos. Podrá comprenderse esto en el párrafo documental firmado por José Cristóbal Jiménez de Mejía y extraído del AGEM. (1820) Vol. 3. 7 ff. frente y vuelta …Hablad españoles injustos… ¿porqué no queréis que gocemos lo que Dios ha concedido a todos los hombres? … ¿No sois Vosotros los que hacéis alarde de haber derramado sangre? … Quitaos la máscara y confesad que nos habéis robado lo más estimable y lo más precioso que puede tener el hombre, que es su libertad … A las armas AMERICANOS ya no es tiempo de deliberar … a las armas MEXICANOS… animaos del fuego en que arden vuestros compatriotas… El gobierno del Estado de México a inicios de 1821 al enterarse de que la rebelión que iniciaba en Chaucingo, tenía en sus filas grandes grupos de indígenas y campesinos, hizo alarde de poder de persuasión, desplegando propaganda en la que invitaba a la tranquilidad y a la calma y desafortunadamente este movimiento no prosperó ya que poco a poco fue desapareciendo por no haber cobrado real fuerza. Otro caso importante -entre miles de los que hay en los documentos del AGEM- en los que nuestros héroes anónimos, los indígenas y campesinos se vieron involucrados fue la política hacia los pueblos y comunidades rurales que el naciente Estado de México y su gobierno en 1821 ejerció hacia esos sectores rurales, y como ejemplo el caso en el que la 21 Hacienda de Atenco generó un fuerte conflicto agrario que inició en 1821 y que duró hasta 1828. Como era de esperarse con los sectores indígenas y campesinos con los que se vieron frustrados sus intentos de mejorar sus condiciones de vida; ya que otros grupos: los terratenientes, el clero y los militares, al terminar la independencia de México se constituyeron en la clase dirigente, avalada por las acciones gubernamentales que tendieron a favorecerlos y consolidarlos en perjuicio de esos habitantes rurales. Esto se manifestó en diferentes maneras: repartiendo y dotando terrenos, permitiendo despojos, haciendo prohibiciones innecesarias o recargando de contribuciones a los pueblos. La irregularidad política palpada en el Estado de México en el primer año de nación independiente, la distribución desorganizada de la tierra, y los vestigios estructurales heredados de la colonia. Procuraron un conflicto que estuvo a punto de convertirse en una verdadera guerra civil sangrienta y radical, por posición de terrenos entre la extensa Hacienda ganadera de Atenco contra los pueblos de Capulhuac, Calimaya, Santa Cruz Atizapan, Texcaliacac, La Asunción, San Antonio la Isla, Xalatlaco, Techuchulco y Almoloya del Rio; pertenecientes al entonces Partido de Tenango del Valle. El asunto tuvo antecedentes coloniales, porque algunas extensiones territoriales pertenecieron desde el punto legal al Ex Conde de Calimaya, desde el inicio del conflicto intervino el departamento de justicia para hacer frente a la mentalidad indígena al considerar la tierra como un medio de subsistencia indispensable, ya que nación en el campo, por lo que al privársele de las tierras era destinarlos al sufrimiento (AGEM. 1821. VOL. 6. 67 ff. Frente y vuelta.) Es así como en sus primeras exposiciones los indígenas de los lugares citados se expresan y continúan diciendo: El Síndico del Ilustre (sic) Ayuntamiento de Calimaya, a nombre del mismo Ayuntamiento y de todos los pueblos comprometidos en la municipalidad, ante V.E. con el debido respeto hace presente: que agraviados aquellos pueblos … muchos años á (sic) por la usurpación y tiranía de todo enero (Sic) que ejercieron sobre los dueños de la Hacienda de Atenco, aumentando estos males desde que los bienes…estuvieron a cargo del español D. Martín Angel Michaus… corrieron presurosos a V.E., cuando tuvimos la fortuna de que visitara el Valle de Toluca, considerando que solo de su Superioridad podían esperar el remedio de sus males… le manifestaron cuanto padecían, V.E. vió por sus mismos ojos hasta donde llegaba el atrevimiento (sic) de los de Atenco… V.E. vio que esta Hacienda hera (sic) como el centro de un gran feudo en medio del hermoso Valle de Toluca… y que cuando en toda América se disfrutaba una completa libertad, solo aquí abrumaba la opresión a los infelices pueblos que circundaban aquella finca de la Hacienda de Atenco, de cuyos sudores se mantenían los opulentos dueños de ella… El corazón ciempre (sic) generoso de V.E. no pudo menos que conmoverse a la vista… de nuestras aflixiones (sic) y nos prometió que aría (Sic) terminar pronto nuestros males. (AGEM. 1821. Vol. 6. 67 ff. Frente y vuelta) Es notorio la restricción, que sobre el concepto de libertad manejaban los habitantes de estos pueblos; considerando que sólo ellos estaban sujetos a un problema de posesión territorial, sin imaginarse que todo este conflicto es una manifestación, no sólo en el Estado de México, sino en el país entero. 22 Sin embargo, no solamente existía una queja por parte de los indígenas y de los campesinos, sino que también las autoridades locales contribuyeron a favor de los indígenas como fue el caso del Juez de Tenango, que en agosto de 1821 había mandado realizar una repartición de tierras a favor de los pueblos; cosa que molestó al dueño de la Hacienda de Atenco, Miguel Angel Michaus, quien asumió actitudes, como todo aquel individuo que pertenece al grupo económicamente fuerte; y que como se cita en el documento referenciado, se le acusaba de que: ... quizo (sic) sorprender a aquel Juez con enredos y cavilaciones, intentó comprarlo con el oro y amedrentarlo con indecentes amenasas (sic) nada consiguió… y apeló entonces a la Audiencia, este Trivunal (sic) baliéndose (sic) sin duda de los mismos recursos, logró que sin citar ni hoyr (sic) a los pueblos para nada se rebocaran (sic) las determinaciones del Juez de Letras de Tenango…(AGEM. 1821. Vol. 6. 67 ff. frente y vuelta) La Audiencia que de hecho era un órgano judicial, sin realizar diligencia alguna, emitió su fallo a favor del citado Michaus y solicitó inmediatamente se mandara ejecutar la sentencia, señalando argumentos por la parte que ha favorecido; y continúa señalando el mismo documento …llevar adelante lo resuelto…en todas sus partes…declarando no haber lugar a la revocación asentada, a cuyo efecto se dirige a V.E. el presente, para que se sirva ordenar al Prefecto de Toluca y al Sub prefecto de Tenango, que de ninguna suerte impidan las resoluciones de este fallo, y antes bien afronten y soliciten al Juez de Letras, nombrado ejecutor de la providencia, todos los aucsilios (sic) que pudiere con su debido (sic) cumplimiento con arreglo a las leyes. (AGEM. 1821. Vol. 6. 67 ff. frente y vuelta La misma Audiencia y el Gobernador del Estado de México en una carta al Prefecto de Toluca, mantuvieron su posición unilateral de justicia; pero lo cierto es que a través de esa carta enfáticamente manifestaron su condición de grupo dominante ya que tenían entre sus colaboradores individuos que servían a sus intereses. Respecto a sus tierras de dominio, el español Ángel Michaus se negaba a manifestar los documentos que legalizaban su propiedad, y al respecto los indígenas y los campesinos de los pueblos en disputa manifestaron: “Los trámites nunca serán favorables al que no sea acaudalado y están por lo mismo desididos (sic) a dejar de existir primero, que dejar de ser dueños de lo que les dio la naturalesa (sic) para su subsistencia…” (AGEM. 1821. VOL. 6: 67 ff. frente y vuelta) Realmente los ánimos de los indígenas se exaltaron aún más por la parcialidad de los Tribunales de Justicia y por lo engorroso que resultaron los trámites burocráticos para el reconocimiento de lo que consideraban su propiedad pese a que poseían sus respectivos títulos que los acreditaban como propietarios, por lo que las autoridades locales de Capulhuac, Calimaya y Tenango informaron al gobierno del Estado que preveían ya un enfrentamiento y que no se responsabilizaban de los resultados. Por tal motivo el 20 de febrero de 1822 en la Subprefectura de Tenango se reunieron más de tres mil indígenas, quienes solicitaban que se revocara el fallo de la Audiencia e insistían que se confrontaran los títulos de propiedad de Ángel Michaus con los de los pueblos, pero se esbozó para los campesinos una sutil negativa, intentando así maniatar y 23 alinear a los gobiernos locales señalándoles que era su deber considerar que la petición de los indígenas y campesinos era un acto de insubordinación y que su deber era mantener el orden y la tranquilidad de los pueblos, y como consecuencia el Subprefecto de Tenango y las autoridades del pueblo de Capulhuac, prefirieron renunciar, antes de asumir una actitud servil a los intereses del hacendado de Atenco. Egoístamente el gobierno estatal sin escuchar los argumentos expuestos por los campesinos e indígenas, intentó continuar la ejecución del fallo emitido por la Audiencia y manipulaba todos los conductos habidos y por haber para que en un momento ya cercano se restituyeran las tierras a la hacienda de Atenco y consideraba que era momento de emplear algunos métodos represivos, ante la negativa radical principalmente de los campesinos de no aceptar el fallo de la Audiencia a favor de Michaus, por lo que las autoridades del Estado consideraron que las milicias podían ya actuar. (AGEM. 1822. Vol. 1. 7 ff. frente y vuelta) En respuesta a esta situación nuevamente los campesinos se dirigieron al gobernador del Estado manifestándole: Consideramos injusto el sentimiento de parcialidad a las partes que favorecieron a la Hacienda de Atenco y al español Michaus en contraposición de los pueblos arbitrariamente desposeídos por parte del Ejecutivo Estatal y de la Audiencia, ya que demandaron se llevara a efecto el fallo sin hacer averiguaciones fundadas y rechazando todos los inconvenientes que habían formulado los Ayuntamientos de Tenango, Capulhuac y Calimaya (AGEM. 1822. Vol. 1. 7 ff. frente y vuelta) La Prefectura de Toluca, después de haber llevado a cabo la restitución a la Hacienda de Atenco, dio recomendaciones a los Alcaldes respectivos para que controlaran a su gente y pretendiendo realizar las festividades patronales al mismo tiempo y tomó entonces el camino de la represión argumentando absurdamente que la concurrencia de los habitantes de los pueblos afectados era ilegal; por lo que se establecieron en los alrededores de Tenango del Valle una estricta y estrecha vigilancia con la presencia del Regimiento de los Dragones de la reina, Infantería, Caballería, Milicia Local y Granaderos de Toluca. Durante los seis años subsecuentes, el litigio continuó y el fallo siempre estuvo a favor del dueño de la Hacienda de Atenco, prueba de ello es un documento fechado el 9 de abril de 1828 en el que en forma definitiva la sentencia favorecía a la Hacienda, quedando establecidas dos situaciones: primero la posición estratégica de los grupos militares en los distintos caminos que conducen a Tenango y segundo la ubicación inmóvil de un numeroso grupo de indígenas , que hasta el último momento esperaban que se revocara o que no se llevara a cabo la sentencia. El Subprefecto de Tenango en una carta al Prefecto de Toluca informaba: …Pese a nuestras exhortaciones la Compañía de Ynfanteria (sic) hizo a dos disparos a los que la multitud de indígenas respondieron arrojando cuanto encontraban a la mano…y los Ynfantes (sic) se echaron armados hasta los frenos de los caballos. Mientras que los Dragones de la Reyna sin mandato de su jefe, resistieron sable en mano ante los sublevados…y esta defensa repentina no pudo menos que producir un notable desorden. A esta razón los Ynfantes (sic)de Toluca que estaban al frente de la mohonera…cargaban con furor sobre los indios ya 24 desordenados…presentaban una funesta escena…y nosotros pensábamos en evitar el derramamiento de sangre de aquellos desdichados…nuestras diligencias nos colocaron entre las partes contendientes, cerca de un cuarto de hora…hasta que se logró una relativa calma, hasta entonces se retiraron algunos indios que permanecían en la mohonera, y reconocido el terreno desocupado, resultó haber quedado en él varios muertos y algunos heridos de los indios, inmediatamente se dio orden de proporcionar aucsilios (sic) espírituales…Yo y ninguno de nosotros presentes secundamos la medida…le informamos a V.E. que aproximadamente furor tres mil indios los que se amotinaron… (AGEM. 1828. Vol. 6. 55 ff. frente y vuelta). Por su parte otros funcionarios del Ayuntamiento de Tenango le expusieron al Gobernador del Estado un informe en el que favorecían a los indígenas y campesinos al determinar que los soldados han causado la muerte, el estrago y la herida en los pacíficos habitantes de esta municipalidad y causa espanto el referir como se atropelló con la espada y la bala a una multitud de indígenas miserables, tímidas mujeres y tiernecitos niños quienes sin ninguna defensa auxilio y protección, ya que los indígenas no tenían ninguna arma para su defensa, contentándose sólo a tirar a las tropas terronazos por no encontrar en aquel sitio piedras ni palo alguno, en su informe también incluían que en esta acción de maltrato a los indios se distinguió al Padre Fray Francisco Cruz, religioso Agustino. Como se ha podido observar que pese a las pruebas presentadas por los indígenas, y haber concluido al acto posesorio, preocupados por algo que les correspondía, eran considerados como revoltosos; y ante una desigualdad de fuerzas, fueron rápidamente reprimidos y aplacados justificando su actitud el Gobierno considerando a los indios como culpables. Fue así como el Gobernador D. Lorenzo de Zavala dio una orden al juez de Letras de Tenancingo de realizar una investigación para aclarar el estado de cosas, que se buscara a los cabecillas y que se evitara más derramamiento de sangre. Mientras se realizaban las investigaciones, entre los indígenas se siguió desarrollando una actitud de desconfianza y odio hacia las autoridades; por eso no es extraño que llegaran a considerarlos como enemigas que agudizaban su estado de miseria y escuchar exclamaciones como “Tu nos has vendido y los Alcaldes están comprados…Alcahuetes…maten al Juez Comisionado, nosotros respondemos, pues ya está comprado…mátenlo” (AGEM. 1828. Vol. 6. 55 ff. frente y vuelta). Como resultado de este litigio se sostuvo que los Ayuntamientos de Capulhuac, Calimaya y Tenango contra la Hacienda de Atenco el dar por concluido el caso con el cese y nulificación del fallo que favorecía a la Hacienda y que había tenido como un hecho de escándalo el tumulto y represión de indígenas en Tenango; además se quedaba incierto el asunto y se manifestó que las medidas del Estado ante muchos de los problemas agrarios como éste, fueron calmantes más no remedios efectivos. Para concluir esta crónica en la que como héroes anónimos que derramaron su sangre en el campo de batalla durante la Guerra de Independencia y no disfrutar de los beneficios de la victoria, los indígenas y campesinos dieron cuenta de otro hecho en el que por propia mano pretendieron hacerse justicia en 1824 en los momentos de efervescencia política entre los republicanos exacerbados en su entusiasmo por dar una Constitución a nuestro país; con un INTENTO DE REBELIÓN PARA CORONAR A UN INDÍGENA COMO REY. 25 En 1824 un grupo aproximado de 800 indígenas se reunieron en el Sur del Estado de México entre los Partidos de Temascaltepec, Sultepec y Zacualpan, en las poblaciones de Tlatlaya, Santa Ana, Teloloapan, Tlachapa y Alahuistlán; quienes de esa manera manifestaron su odios a los europeos y a los propios criollos mexicanos, debido a su paupérrima condición económica y social en que quedaron después de terminada la Guerra de Independencia; ante esto trataron de buscar soluciones por medio de un levantamiento con tintes políticos En marzo de 1824 el Subprefecto de Zacualpan informaba a la Prefectura de Taxco que una gavilla de indígenas había aparecido, diciendo que: …Al montar a caballo allá por San Miguel un compañero mío avistó frente a Santa Ana a un numeroso grupo de hombres bien armados, y sin saber de qué parte son andaban preguntando por los Alcaldes de los lugares, esto se lo comunico para que V.E. participe al gobierno y coloquen centinelas en las entradas de los pueblos. (AGEM. 1824. vol. 5. 17 ff. frente y vuelta) A su vez el Prefecto de Taxco informaba al Gobierno Estatal que el cura encargado de la doctrina en el pueblo de Alahuistlán Don Mariano Antonio Jiménez también vio al grupo de hombres armados y mal vestidos, todos con gorros negros solicitando conocer a los Alcaldes de aquellos lugares. Por lo que el Prefecto de Toluca, dio órdenes al Subprefecto de Zacualpan para que se investigara el origen de aquellos individuos y que salvaguardaran la tranquilidad pública de su partido y restablecer la confianza perdida entre los indios y los campesinos de aquellos lugares. Se preveía que aquella acción de indígenas podría ser un levantamiento, y por la forma enigmática en que apareció, cobró gran difusión, entre los pueblos y el asunto nuevamente llegó hasta el mismo gobierno del Estado de México, quien inmediatamente realizó una gran movilización de correspondencia para que estuvieran enterados los gobiernos locales de esa región y trataran de asegurar la tranquilidad de sus demarcaciones, indicándoles que podían solicitar ayuda militar al gobierno federal a través de la Secretaría de Guerra y Marina, la que en un lapso de dos meses movilizó a las milicias. Por su parte la Gubernatura Estatal intentaba conseguir mayor cantidad de datos para conocer más de cerca el objetivo de aquella gavilla, pero sería hasta el mes de mayo de 1824 cuando la misma Prefectura de Taxco, informaba que aquel movimiento armado de indígenas que se habían levantado en las inmediaciones del pueblo de Santa Ana ya se había establecido en el cerro del Tequesquite y San Vicente en la Municipalidad de Tlachapa y que militaban bajo “…el plan de quitar del reyno (sic) a los europeos y gobierno a los criollos, coronando a un indígena como rey” (AGEM. 1824. vol. 5. 17 ff. frente y vuelta) por lo que el mismo Prefecto de Taxco manifestaba la necesidad de situar un destacamento militar en las inmediaciones de los Partidos de Zacualpan, Sultepec y Temascaltepec. Llegó a ser tanto el escándalo producto de ese levantamiento que en casi todo el Estado de México, incluyendo los Partidos de Toluca, Acapulco, Taxco y Cuernavaca activaron a todos los grupos militares que estuvieron a su alcance, con la aprobación y apoyo directo de la Secretaría de Guerra y Marina y del Presidente de la República Don Guadalupe Victoria, para perseguir a aquellos hombres armados y hacer prisioneros a sus cabecillas; sin embargo como sucede en todo movimiento popular los dirigentes desaparecen y no tan fácilmente se les descubre. 26 Por ello es que cuando la expectación había crecido enormemente en el Estado, los Comandantes militares de Cuernavaca y Taxco informaron al Gobernador Zavala que la gavilla había desaparecido y para comprobar tal afirmación presentaron testigos de que habían visto que los integrantes de aquel movimiento se encaminaron rumbo a la población de Huetamo en el Estado de Michoacán. Ciertamente que para asegurar que no se presentaran nuevos brotes rebeldes en la región, se tomaron medidas de seguridad militar y así el asunto concluyó con una aceptación de conformidad, respecto a la disolución pacífica del movimiento y los gobiernos locales aseguraron que la Rebelión que pretendía coronar a un indígena como rey había abortado, por la gran cantidad de milicias ubicadas estratégicamente en casi todo el extenso territorio del Estado de México; y aún reafirmaron esa tranquilidad obligada con la sola presencia de la fuerza bélica tan grande en comparación con la débil y pequeña fuerza de los rebeldes indígenas sureños, pero se trató de no dejar raíces a un probable conflicto que políticamente los intranquilizara. CONCLUSIONES Haber llegado a la culminación de un proceso de investigación sólo de tres casos en los que la retrospectiva histórica muestra a los héroes anónimos de la Guerra de Independencia; Indígenas y campesinos que pretendieron hacer con su manifestación el reclamo de los derechos que les correspondían, pues ellos fueron quienes participaron activamente en el conflicto militar derramando su sangre en el campo de batalla y con su colaboración se logro la libertad de nuestro país; su participación genera el compromiso de seguir investigando sobre incontables y grandes problemas que en el ámbito rural existen y que documentos originales, del Archivo General del Estado de México, están esperando a ser consultados para poner de manifiesto a la luz de la micro historia los hechos inéditos que deben enriquecer la prospectiva de nuestra patria. Pese a que los criollos al integrar los partidos políticos republicanos federalistas y centralistas y como nuevo grupo en el poder políticamente, se preocuparon por darle al país una Constitución (la de 1824), legalizaron la existencia de la propiedad privada: Bajo estas condiciones jurídicas, se realizaron explotaciones hacia los sectores indígenas y campesinos; quienes se vieron perjudicados al ir desapareciendo la propiedad comunal; y aún más, con la aparición y reafirmación de la propiedad de terratenientes de las haciendas, los indígenas y campesinos se vieron despojados de sus propiedades o lo que fue peor algunas comunidades indígenas quedaron comprendidas dentro de esas grandes propiedades. Ante la gran desigualdad socioeconómica en el campo mexicano durante la Guerra de Independencia y después de ella, se presentaron por parte de los campesinos e indígenas manifestaciones de inconformidad ante despojos, invasiones, robos, luchas, motines y levantamientos, a las cuales el gobierno, sobre todo el estatal, trató únicamente de evitarlos; sin acabar o reducir siquiera esa desigualdad, se nota que realizó ciertas reformas solamente para apaciguar a la gente. Desde el momento en que nuestro país se constituyó en una nación libre e independiente, se reflejaron algunos cambios con respecto a la época colonial sobre todo en la posesión de la tierra y en la relación terrateniente con el campesino quien ya no era una especie de siervo, sino ahora como un trabajador libre para contratarse; estos dos cambios marcaron momentos de transición, cambios que se iban consolidando a pesar de la 27 reacción de las antiguas estructuras coloniales, que se expresaba en levantamientos reforzados por los campesinos e indígenas que no tuvieron con el triunfo de la Guerra de Independencia el privilegio de quedar registrados en la historia patria. Las malas condiciones socioeconómicas de los campesinos y de los indígenas contrastaron exageradamente con la riqueza de los terratenientes. Los indígenas y campesinos sumidos en la ignorancia, creencias religiosas e incapaz de comprender su situación dentro del marco histórico de finales de la Guerra de Independencia y principios del periodo del México Independiente, no podía más que manifestarse o sublevarse por motivos de hambre en forma local y aislada. Y que todo esto constituiría los antecedentes primero para el periodo de la reforma y posteriormente incrementarse los problemas agrarios durante el porfiriato y para sentar las bases de lo que sería en 1910 la Revolución Mexicana. Resulta pues satisfactorio presentar sólo estos tres casos que son de utilidad para reflexionar sobre los acontecimientos inéditos, sin embargo no se han agotado aun, ya que existe un gran acervo documental por consultar, creemos que esta crónica no ha sido agotada y que requiere nuevas revisiones documentales, por lo que continuaremos con la investigación porque estos congresos nos dan la oportunidad como cronistas universitarios aportar investigaciones de corte histórico. 28 FUENTES DOCUMENTALES Archivo General del Estado de México. (1820). Volúmenes 2,3. Toluca, México. Archivo General del Estado de México (1821). VOL. 6. Toluca, México. Archivo General del Estado de México 1822. Vol. 1. Toluca, México. Archivo General del Estado de México 1824. vol. 5. Toluca, México. Archivo General del Estado de México 1828. Vol. 6. Toluca, México. BIBLIOGRAFÍA Gonzalbo y otros. (2004). Nueva Historia Mínima de México. México. Colegio de México. López Cámara, Francisco. (1999). La estructura económica y social de México. México. Siglo XXI. Rivera Herrejón, Gladys. (2007). El desarrollo agrícola en el Estado de México.G Stavenhaguen, Rodolfo. (1998). Las Clases sociales en las sociedades agrarias. México. Siglo XXI. 29