LA PRÁCTICA DEL CONSEJO PSICOLÓGICO MANUAL DEL CONSEJERO NO-DIRECTIVO En 7 lecciones y 6 apéndices (Según el ““Enfoque Enfoque Centrado en la persona” del “Conseling” de Carl Rogers) FERNANDO JIMÉNEZ HERNÁNDEZ-PINZÓN CÓRDOBA 2003 Título: La práctica del consejo psicológico Autor: © Fernando Jiménez Hernández-Pinzón I.S.B.N.: 84-8454-395-1 Depósito legal: A-XXX-2004 Edita: Editorial Club Universitario Telf.: 96 567 38 45 C/. Cottolengo, 25 - San Vicente (Alicante) www.ecu.fm Printed in Spain Imprime: Imprenta Gamma Telf.: 965 67 19 87 C/. Cottolengo, 25 - San Vicente (Alicante) www.gamma.fm gamma@gamma.fm Reservados todos los derechos. Ni la totalidad ni parte de este libro puede reproducirse o transmitirse por ningún procedimiento electrónico o mecánico, incluyendo fotocopia, grabación magnética o cualquier almacenamiento de información o sistema de reproducción, sin permiso previo y por escrito de los titulares del Copyright “Un día dijo el Maestro: en el país del espíritu no se puede caminar con lámpara ajena. Tu me pides que te preste la mía. Pues bien, yo preferiría enseñarte a que te hagas tu propia lámpara”. A. de Mello ÍNDICE PRESENTACIÓN .........................................................................13 LECCIÓN I Importancia terapéutica y cultural del consejo psicológico (“counseling”) ................................................................................15 1. Dificultades personales y Counseling........................................16 2. Estructura dinámica de la personalidad .....................................17 LECCIÓN II Metodología del Counseling terapéutico.......................................21 1.- Método sintomático-sugestivo..................................................21 El proceso mental de la sugestión..................................................23 Límites del método sintomático-sugestivo del consejo ................24 B. El método del Counseling directivo..........................................25 a) La forma dictatorial ................................................... 25 b) La forma ecléctica ..................................................... 25 Objeciones al Counseling directivo ...............................................26 C. El Counseling no-directivo........................................................27 Postulados fundamentales de la actitud no-directiva y centrada en la persona ..................................................................................28 1. Principio del autoconocimiento:................................ 28 2. Principio de la autodirección: ................................... 28 3. Mecanismo de la dependencia emocional-regresiva: 28 LECCIÓN III Psicoterapia centrada en el cliente .................................................29 9 LECCIÓN IV La actuación psicoterapéutica a través del counseling centrado en la persona ...................................................................................35 Actitudes de base en la relación terapéutica..................................35 A. Congruencia o autenticidad ...................................... 35 Escala para medir la Congruencia o Autenticidad en la relación interpersonal y en Psicoterapia ................................... 36 B. Respeto positivo e incondicional ..................................37 Escala para medir el respeto positivo incondicional en las relaciones humanas y terapéuticas. ........................................... 39 C. Comprension empatica.............................................. 40 Escala para medir la actitud de Comprensión Empática en las relaciones humanas y terapéuticas. ........................................... 41 LECCIÓN V Práctica de la entrevista terapéutica centrada en la persona ..... 43 I. Preparacion................................................................. 43 II. Desarrollo de la entrevista ........................................ 44 III. Cierre de la entrevista .............................................. 49 Pauta breve para la entrevista ................................................... 51 LECCIÓN VI Diagnostico de las actitudes subyacentes a las intervenciones del terapeuta .............................................................................. 55 Caso 1 ............................................................................ 57 Caso 2 ............................................................................ 58 Caso 3 ............................................................................ 59 Caso 4 ............................................................................ 60 Caso 5 ............................................................................ 61 Sobre la técnica de hacer preguntas .......................................... 64 Fases del proceso de la terapia centrada en la persona ............. 66 10 LECCIÓN VII Precisiones diferenciales del counseling como psicoterapia .... 69 APENDICE I Actitudes y disposiciones fundamentales del psicoterapeuta, segun los principios axiologicos de Carl Rogers. ..................... 75 APÉNDICE II La formación del psicoterapeuta............................................... 79 APÉNDICE III Definición de psicoterapia......................................................... 85 El diálogo terapéutico .............................................................. 88 Definición analítica-fenomenológica ........................................ 90 Función terapéutica de la palabra ............................................ 91 APÉNDICE IV La psicoterapia como sistema de estímulos ............................. 93 Consideraciones sobre los estímulos psicológicos ................... 94 Las “caricias” psicológicas ....................................................... 96 APÉNDICE V Los Honorarios Profesionales: Su significación psicodinámica ........................................................................... 99 APÉNDICE VI La dinámica motivacional en psicoterapia.............................. 107 BIBLIOGRAFÍA EN ESPAÑOL DEL ENFOQUE CENTRADO EN LA PERSONA ............................................113 11 PRESENTACIÓN Esta obra, pretendidamente práctica y esquematizada, está destinada a aquellos que se encuentran ejerciendo cargos cuya función consiste en acoger, escuchar, orientar y ayudar a la formación de otras personas. También va dirigido a quienes se preparan para una actividad profesional de asesoramiento y de ayuda a los individuos, tanto en sus procesos de desarrollo y maduración, como en el enfrentamiento y resolución de sus conflictos personales. El interés y la aplicabilidad de los principios del Counseling de Carl ROGERS abarca todo el área de las relaciones humanas y, como dice el profesor Curran, “ha afectado recientemente y de modo tan rápido a la sociedad, que se considera como la última palabra en orden a capacitar para su función a educadores (profesores, tutores, orientadores, directivos), jefes de personal, inspectores, empresarios, psicólogos y psicoterapeutas, médicos, entrevistadores, trabajadores sociales, sacerdotes e incluso asesores legales”. La Práctica del Consejo Psicológico, sistematizado en 7 lecciones y 6 apéndices, se propone presentar, de un modo sencillo, claro y didáctico, los principios fundamentales de la psicopedagogía y psicoterapia “centrada en la persona” de Carl ROGERS, para su aprendizaje operativo y su aplicación metodológica. Se completa la obra con una extensísima bibliografía que pone de manifiesto la importancia y aplicabilidad de los principios del Counseling en todas las áreas del saber y del actuar humanos, tanto en los espacios específicos de la psicoterapia y la educación, como en el de las relaciones interpersonales en 13 Fernando Jiménez Hernández-Pinzón la familia, el trabajo, la cultura, la medicina, ampliándose a la sociología, la política, la religión, el derecho, las relaciones sexuales, las relaciones económicas e industriales, las relaciones internacionales, etc. 14 LECCIÓN I IMPORTANCIA TERAPÉUTICA Y CULTURAL DEL CONSEJO PSICOLÓGICO (“COUNSELING”) El consejo psicológico ha llegado a convertirse, sobre todo desde las sistematizaciones de Carl ROGERS, y dentro del marco de desarrollo dinámico de la personalidad, en un verdadero fenómeno cultural, cuya práctica ha determinado en los Estados Unidos, a partir de 1955, la creación de un nuevo título universitario. Este título designa al “consejero psicológico” (Counseling Counseling psychologist psychologist) como la persona capacitada profesionalmente para ejercer las funciones del consejo. “Los psicólogos consejeros trabajan en diversos ambientes y desempeñan gran variedad de funciones. Aunque pueden especializarse en un tipo de consejo (vocacional, educacional, para empleados, de rehabilitación, para ancianos, para matrimonios o de aconsejamiento personal en situaciones de elección, cambio o crisis), los psicólogos consejeros plenamente capacitados reconocen la interrelación de todos los problemas de la adaptación y se centran en el consejo para la persona total”. Hablamos de consejo psicológico, a diferencia del consejo amistoso, moral o espiritual, legal o financiero, en cuanto que lo que pretende es descubrir los factores emocionales en conflicto que condicionan problemas de la personalidad. 15 Fernando Jiménez Hernández-Pinzón En consecuencia, tiene por fin ayudar a comprender los obstáculos que impiden el desenvolvimiento normal de la personalidad y los medios de superarlos en orden a favorecer el funcionamiento de los procesos psicológicos constructivos. Esto es particularmente urgente en nuestra época en la que, como se nos dice en la obra de Charles Curran, ““La Psicoterapia autagógica”: “Los problemas de nuestra edad giran alrededor de la persona. El torbellino social de nuestro tiempo deja un rastro de vida desorganizadas y dispersas. La inseguridad colectiva en que vivimos bajo amenazas pavorosas a escala sideral, no hace sino agravar la inseguridad de cada cual. Por eso las personas, en su mayor parte, necesitan ser ayudadas, no sólo para orientar a integrar sus ideas, sino para orientar e integrar sus propias vidas. El desorden intelectual y el caos social en que nos debatimos tan peligrosamente van acompañados de confusión y conflicto personal en gran extensión”. 1. Dificultades personales y Counseling En la obra de Curran que acabamos de citar se nos dice que las dificultades personales pueden acabar desencadenando un conflicto emocional por dos motivos: a) o nos falta capacidad cognitiva suficiente para encontrar una solución, b) o nos falta capacidad de decisión para encaminarnos constructivamente hacia las metas fundamentales de la existencia. De aquí se deduce que tenemos necesidad de normas, de principios y de informaciones. Pero esto no es suficiente. Es necesario saber permanecer firmes y progresar a través de todas 16 La práctica del consejo psicológico las vicisitudes de la existencia. Por esto nos referimos a un tipo de consejo que no es puramente racional. No puede detenerse a nivel de la inteligencia. Su función consiste en ayudar a la persona a liberar un mecanismo constructivo que le lleve a - comprender su propia situación interior en toda su complejidad (autocomprensión) - coordinar y dominar sus reacciones instintivas y emocionales (autodominio) - integrarlas positivamente en orden a que colaboren en las resoluciones auténticas y autoconstructivas del individuo, en vez de obstaculizarlas (autointegración). De lo contrario, se dará un conflicto entre las emociones desorganizadas que luchan contra la razón. Es el antagonismo del que habla Freud del Principio de la Realidad frente al Principio del Placer que constituye, en el fondo, la base de todo problema emocional*. 2. Estructura dinámica de la personalidad Para mejor comprender la función psicológica del consejo, nos conviene tener ante los ojos un esquema de la estructura dinámica de la personalidad. Dentro de la concepción de la estratificación de la vida psíquica, se puede afirmar que la persona -que es una unidad psicosomática- se realiza a través de una vida psíquica que emerge, como de una fuente, de los planos más profundos de su ser. Hoffmann, en su teoría de los niveles jerárquicos de la Para una mejor comprensión de los conceptos de Freud recomiendo mi libro Psicoanálisis para educar mejor, publicado por la Ed. Desclée de Brouwer, colección Serendípity. * 17 Fernando Jiménez Hernández-Pinzón personalidad, sitúa: - en el plano más profundo, las pulsiones vitales instintivas que tienden primordialmente al desenvolvimiento de la vida instintiva y de la especie. Sabemos que Freud en su última formulación admite que estas pulsiones, subyacentes a todo desarrollo vital, son el EROS y el TANATOS: el instinto de la Vida y del Amor que la sustenta, y el instinto de la lucha, de acometimiento hasta la Muerte, para la afirmación plena de sí mismo en la existencia. - el segundo plano es el de la afectividad como órgano subjetivo en el que se registran y se expresan los sentimientos y las emociones. - el tercer plano es el del espíritu. En él aparecen la inteligencia y la voluntad, con la función de organizar la acción libre, racional y constructiva de la persona y la posibilidad de la autoexpresión psíquica superior en la experiencia “transpersonal” plenificante. El conjunto dinámico de estos tres planos es lo que constituye la personalidad que, según Pichot, se define como “la integración dinámica de los aspectos cognoscitivos (es decir, intelectuales), conativos (pulsionales) y aafectivos del individuo”. Y Allport: “La organización dinámica en el interior del individuo de aquellos sistemas psicofísicos que determinan su conducta, su pensamiento y su peculiar ajuste al medio”. El primer plano pertenece a la condición animal del ser. El instinto parte de una necesidad, de una estimulación orgánica de carácter carencial que crece hacia el exterior con intensidad progresiva hasta que se satisface. En el caso en que la pulsión queda frustrada, el organismo desencadena un mecanismo automático que tiende a aliviar la tensión interior. Es evidente que la conducta del niño se desenvuelve principalmente sobre este plano. Por eso su actividad primordial significativa se reduce a comer y a llorar. Esta conducta elemental y primitiva se refleja en una zona 18 La práctica del consejo psicológico del cerebro, en la región del paleocortex, que se llama rinencéfalo (etimológicamente destaca su estrecha relación con el olfato, ya que el olfato juega un papel muy importante en la actividad instintivo-tendencial y es donde se moviliza el Principio de Placer en la concepción epistemológica de Sigmund Freud). En esta zona falta la capacidad discriminatoria e inhibitoria propia del neocortex (desde donde se moviliza, en la concepción de Freud, el Principio de la Realidad Realidad), y se limita a asociar ciertas sensaciones y estimulaciones que se expresan a través de una conducta rudimentaria y primitiva. He querido recordar estos conceptos elementales para señalar que si en las primeras etapas de la vida estas estructuras poseen una significación tan predominante, no es extraño que las configuraciones de la conducta propias de esta primera fase continúen ejerciendo una influencia permanente en la vida posterior del individuo y obstaculicen la actividad de los niveles superiores en su triple función de autoconocimiento, autodominio y autointegración. En consecuencia, el funcionamiento ideal de la personalidad no va en el sentido de la satisfacción inmediata de los instintos. Pero tampoco en el sentido de la anulación o la represión brutal de las instancias que proceden de las zonas inferiores, instinto-biológicas del organismo personal. Por el contrario, es necesario saber canalizar y dirigir estas energías vitales hacia los planos superiores cognitivo-mentales de la persona, para convertirlos en actividad autoconstructiva y de superación racional, la única capaz de dar al organismo humano la plenitud y el dinamismo de vivir. El consejo psicológico (“Counseling”) se dirige a este plano del espíritu, para ayudar al sujeto a realizar el mecanismo de integración positiva de su personalidad, en orden a “favorecer su crecimiento psíquico, el propio conocimiento y el razonable dominio emocional de sí mismo, para que sea capaz de resolver 19 Fernando Jiménez Hernández-Pinzón sus problemas y actuar de una manera responsable en la vida”. 20 LECCIÓN II TICO METODOLOGÍA DEL COUNSELING TERAPÉU- A lo largo de la historia de la psicoterapia se han empleado diversas modalidades de intervención psicológica a través del consejo. Voy a intentar sintetizarlas en tres apartados que corresponden, a mi modo de ver, a las tres modalidades típicas de la psicoterapia del consejo y que engloban a todas las demás: 1. El método sintomático-sugestivo 2. El método directivo 3. El método de intervención no directiva, cuya más completa sistematización la constituye la técnica de Carl ROGERS, presentada por él mismo bajo la denominación de ““Psicoterapia centrada en el cliente”. 1.- Método sintomático-sugestivo Como su nombre lo indica claramente, este método se ocupa del síntoma, sin tener en cuenta la base emocional que lo sustenta, e intenta suprimirlo valiéndose de la sugestión por la palabra (lo mismo que en la medicina habitual se intenta suprimir o aliviar los síntomas mediante la administración de fármacos). La función del terapeuta, según el método sintomáticosugestivo, consiste en distraer al paciente del problema que le obsesiona, aconsejándole técnicas, medidas o soluciones referidas a los síntomas, sin preocuparse de que quizás el problema 21 Fernando Jiménez Hernández-Pinzón sintomático sea solamente el aspecto manifiesto de una frustración o conflicto latente, producida por un traumatismo psíquico profundo o por una problemática más radical. La terapia se realiza en tres momentos, cada uno de los cuales comporta ya una intervención psicoterapéutica. a) Tranquilizar Tranquilizar. Es un procedimiento de transición. Su finalidad es la de enfrentar temores no fundamentados, devolver la serenidad al paciente, disminuir su tensión emocional, y en general, facilitar la transición hacia una actitud más serena que le permitirá una visión más objetiva de la realidad. En toda tranquilización sistemática los fenómenos de transferencia y las relaciones emocionales entre consejero y aconsejado son de gran importancia. También supone un estudio de la personalidad del paciente, que puede realizarse mediante tests. b) Animar. Animar Este procedimiento es especialmente indicado para personas de escasa energía vital. Sabemos que Adler lo utilizaba en la fase de reeducación de su Psicoterapia Individual. Consiste, como su nombre lo indica, en animar al paciente de manera que la imagen del miedo o del peligro quede compensada por una imagen de sí mismo en la que se hayan hecho resaltar los elementos positivos de su propio valer personal. c) Persuadir. Esta técnica, en su aplicación a la psicoterapia, ha sido especialmente estudiada por Dubois, psicoterapeuta de Ginebra, a principios de siglo XX. Sin duda, la convicción mental de lo absurdo de sus temores obsesivos, puede contrabalancear, por poner un ejemplo, la ansiedad emocional del enfermo. Esta técnica puede ser eficaz en personas fácilmente influenciables, pitiáticos, y en el tratamiento de estados hipocondríacos, en los que las depresiones neuróticas están causadas con frecuencia por sentimientos de culpabilidad y por insatisfacción concomitantes a relaciones interpersonales y actividades sexuales 22 La práctica del consejo psicológico insatisfactorias. La aplicación de esta técnica persuasoria tiene especial eficacia en los adolescentes, ya que son más fáciles de persuadir, dado que la estructura de su personalidad es menos sólida. El proceso mental de la sugestión En todo fenómeno sugestivo se opera, más o menos intensamente, el siguiente proceso psíquico: Ideas, sentimientos, representaciones o creencias son transferidas subrepticiamente (por un estrechamiento del campo de consciencia) desde el consejero al paciente, de modo que penetran en la esfera del preconsciente y del inconsciente, y desde allí son sugeridos a la consciencia vivenciándolo el individuo como algo propio. Según McDougall, que llama también a la sugestión imitación y simpatía, ésta se produce por contacto afectivo, gracias a un mecanismo de resonancia afectiva fundada sobre la ascendencia del consejero (imagen arquetípica paterna). Como complemento de los métodos sugestivos, las técnicas de relajación son de gran importancia, a fin de disminuir en el enfermo el nivel de control consciente. También tienen interés las fórmulas autosugestivas practicadas sistemáticamente por Emilio Coué en Francia a principios de siglo, a modo de mantra oriental. “Cada día y en todos los momentos del día, me voy sintiendo mejor, mejor y mejor”. Así era, más o menos, la fórmula que hacía repetir a sus pacientes, durante largos periodos de tiempo y con los ojos cerrados, congregados en una sala del Hospital de la Salpetriêre de París Todas estas técnicas se apoyan sobre la convicción de 23 Fernando Jiménez Hernández-Pinzón que dentro de cada individuo existe un potencial de energía en reserva, una capacidad de resistencia y de defensas psíquicas naturales, vinculado al impulso inmanente de cada persona hacia su propio desenvolvimiento, y que a veces basta con liberarlas y estimularlas para que ellos hagan su propia obra constructiva. Límites del método sintomático-sugestivo del consejo 1. Suponiendo que estas técnicas se ocupan directamente de suprimir los síntomas, sin ofrecer ninguna comprensión de la base emocional que los sustenta, existe el peligro de que la curación se reduzca a un fenómeno transitorio de alivio psíquico, ya que las defensas inconscientes del enfermo se mantienen, con lo que no es posible iniciar una reeducación en orden a que adopte actitudes más responsables y maduras ante sus problemas y dificultades personales. 2. Sabemos también que los síntomas no son más, a veces, que simples elementos de compensación. Es conocida la opinión de Adler sobre los síntomas neuróticos. Según él el neurótico no padece sus enfermedades: las utiliza y se defiende con ellas. De donde, el hecho de suprimir el síntoma sin sustituirlo por otro elemento de equilibrio psíquico más sólido, tiene el peligro de dejar a la persona sin defensas frente a su derrumbamiento interior, sus angustias y sus inseguridades endovivenciales. 3. Los métodos persuasivos que infravalorizan delante del enfermo la importancia de sus síntomas, aunque sea con la intención de aliviarlos, pueden impulsarlo, como reacción, a acentuar los fenómenos neuróticos por su mecanismo elemental de autojustificación. 4. Finalmente, los métodos que no actúan sobre la falta de madurez radical del enfermo, tienen el peligro de crear nuevas 24 La práctica del consejo psicológico actitudes de dependencia con relación al terapeuta, alimentando así su inmadurez psíquica. B. El método del Counseling directivo El consejero directivo se dirige principalmente a la razón del paciente, y se ocupa ante todo de responder al contenido conceptual de las preguntas que se le hacen en relación a los padecimientos del sujeto, o de sus síntomas. Esta modalidad de consejo puede adquirir diversas formas, según la personalidad del consejero y la del paciente. a) La forma dictatorial El consejero acepta al enfermo a condición de que éste se someta a sus directrices. Exige de él, explícita o implícitamente, la obediencia. Al adoptar esta actitud autoritaria se apoya sobre su función profesional, sobre su experiencia y sobre sus conocimientos. La tarea del consejero directivo consiste en - reunir los hechos - interpretarlos desde su punto de vista, y - dar soluciones. b) La forma ecléctica Dentro de esta modalidad de aplicación del consejo directivo, los dos, paciente y terapeuta, adoptan un papel activo en la marcha de la entrevista (discutir, reflexionar juntos, etc.). Pero el consejero se siente autorizado para dirigir, y ejercerá una maniobra sutil y firme a fin de orientar la acción terapéutica hacia las soluciones que el tiene previstas o que él mismo considera las adecuadas. 25 Fernando Jiménez Hernández-Pinzón El método directivo se llama también método diagnósticoprescriptivo. Objeciones al Counseling directivo 1. Esta modalidad de consejo puede crear, en efecto, una mayor inteligencia del problema y de sus posibles soluciones. Pero no una vivencia personal que aporte un convencimiento al enfermo. Lo cual puede desencadenar en él un mecanismo normal de resistencia frente a lo que no está sentido por sí mismo. Además hay que saber que la voluntad no funciona bajo el impulso de un conocimiento puramente especulativo, sino vivencial y sentido. También es posible, por otra parte, que el paciente ya tuviera el conocimiento intelectual de su problema y que el hecho de buscar un consejo no sea por interés de recibir una información, sino por necesidad de ayuda o de desahogo o de compartir y escapar de la soledad. 2. La interpretación fría y objetiva del terapeuta puede tener el peligro de crear en el paciente el sentimiento de una nueva responsabilidad perturbadora, con la tensión emocional consecuente al hecho de no sentirse capaz de afrontarla. 3. Existe también la posibilidad de que estas actitudes autoritarias creen en el consejero un sentimiento contratransferencial de autosatisfacción, por sentirse fuerte e importante y como compensación de sus propios problemas. Esto provocaría sin duda una reacción defensiva de parte del paciente. 4. Estos consejos racionales son frecuentemente inútiles en ciertas personas que los buscan con el secreto deseo, no de tener que enfrentar sus problemas, sino de encontrar personas que los acepten como dignos de compasión. 26 La práctica del consejo psicológico 5. Someterse a aceptar las directrices de otro favorece con frecuencia el mantenimiento de actitudes de inmadurez en personas irresponsables que prefieren ser guiadas antes de comprometerse a sí mismas. Son personalidades eternamente dependientes, como niños, incapaces de realizar ninguna actividad creadora y responsable que les justifique como seres humanos adultos. Sin embargo, hay casos y momentos, dentro de la psicoterapia y de toda relación interindividual de ayuda a otras personas, en los cuales puede considerarse indicada la aplicación del consejo directivo. Por ejemplo, cuando se trata de entrevistas de tipo informativo en las cuales el consultante ignora la respuesta; o cuando es urgente la solución objetiva del problema, sobre todo si no existe al mismo tiempo una gran tensión emocional de parte del paciente. C. El Counseling no-directivo Este tipo de intervención sistemática supone una actitud básica, caracterizada por el hecho de centrarse sobre la persona del paciente, y no sobre sus síntomas, ni incluso sobre sus problemas. El consejero adopta una actitud de respeto positivo incondicional hacia la persona del paciente, con la convicción de que en él existen todos los recursos necesarios para su propia reconstrucción y orientación. Por lo tanto el consejero no introduce nuevas ideas, dejando en manos del paciente la responsabilidad de toda iniciativa en la conducción de la entrevista. 27 Fernando Jiménez Hernández-Pinzón Postulados fundamentales de la actitud no-directiva y centrada en la persona 1. Principio del autoconocimiento: Nadie es capaz de conocer a otro individuo mejor que cada uno puede llegar a conocerse a sí mismo. Es decir, que la complejidad de un problema con sus aspectos manifiestos y latentes puede solamente llegar a ser auténticamente comprendido por el mismo sujeto que lo padece. 2. Principio de la autodirección: En el fondo de cada individuo existe en reserva un potencial de energía psíquica que le impulsa en la línea del propio crecimiento hacia la madurez. En consecuencia, no hay nadie más capaz que el individuo mismo para dirigir sus propias fuerzas constructivas hacia la solución de sus problemas. 3. Mecanismo de la dependencia emocional-regresiva: Toda persona que se encuentra afectada por un conflicto psíquico tiende, por un mecanismo regresivo de dependencia fijado en la infancia, a descargar sobre otro su propia responsabilidad. Como consecuencia práctica deducida de los principios anteriores, el consejero debe saber que el hecho de aceptar la dirección de otra persona, la hace irresponsable e impide su proceso hacia la madurez. Por esta razón debe actuar con el convencimiento de que cada persona es responsable de su propia conducta y que posee por sí misma la fuerza dinámica, el impulso y los recursos creadores constructivos y necesarios para llegar a ser psicológicamente madura y para saberse autodirigir. En la práctica, el consejero no debe hacer nada que indique aprobación o reprobación, o que impida al sujeto obtener por sí mismo la comprensión de sus propios sentimientos, y del carácter, causa y solución de sus problemas. 28