Tocando el vacío Lugar y fecha de proyección Fecha: martes 11 de noviembre de 2008 Hora: 21 h. Lugar: Aula Magna. Facultad de Ciencias Música de sala “Gumbo Nouveau” (1996) Nicholas Payton (trompeta), Jesse Davis (saxo alto), Tim Warfield (saxo tenor), Anthony Wonsey (piano), Reuben Rogers (bajo), Adonis Rose (batería) Tocando el vacío Título original: Touching the void Año: 2003 País: Gran Bretaña Duración: 102 min. Director y Guión: Kevin McDonald. Argumento: El libro homónimo de Joe Simpson. Fotografía: Mike Eley & Keith Partridge (Video HDTV). Montaje: Justine Wright. Música: Alex Heffres. Productor: John Smithson & Sue Summers. Producción: Film Tour -Pathé. Intérpretes: Joe Simpson, Brendan McKey (Joe Simpson), Simon Yates, Nicholas Aaron (Simon Yates), Richard Hawking, Ollie Ryall ( Richard Hawking). v.o.s.e. En 1985, los escaladores Joe Simpson y Simon Yates emprendieron el ascenso por la cara oeste del Siula Grande, en los Andes peruanos. Consiguieron su objetivo, pero en el descenso, Simpson se rompió una pierna… y Yates lo abandonó a su suerte. Primero fue un libro en el que Joe Simpson explicaba su épico descenso hacia el campamento base de la montaña arrastrándose con una pierna rota, durante cuatro días. Era también un intento de justificar el comportamiento de Simon Yates, quien decidió cortar la cuerda que le ataba a su compañero. 20 años después de tan terrorífica experiencia, Simpson ha vuelto a explicar, ante las cámaras del realizador Kevin McDonald (autor del magnífico y oscarizado documental Un día de Septiembre), toda la historia. Los hechos reales indican que luego de conquistar lo más alto del Siula Grande, con toda la carga emocional que significa un logro como ese, el descenso se complicó más de la cuenta para los dos montañistas, quienes luego de conseguir su objetivo debían retornar en pocos días al campamento, donde los esperaba un tercer profesional, Richard Hawking. Lo acontecido a partir de ese momento significó una odisea que hasta el día de hoy genera debate en el mundo de los profesionales de montaña, y además convierten este documental en una de las mejores cintas de acción y suspense de los últimos tiempos. Algo que ni siquiera se imaginó el más entusiasta seguidor de este tipo de propuestas llevadas al cine. TOCANDO EL VACÍO se alza también como uno de los más auténticos y sinceros tratados sobre la supervivencia en condiciones extremas que jamás se hayan realizado. Un relato emocionante, de proporciones épicas incluso, narrado en paralelo a las entrevistas realizadas a los protagonistas de la expedición años más tarde, por lo que conocemos de primera mano lo sucedido, cosa que nos permite comprender mejor las reacciones y comportamientos de los dos implicados principales en tan accidentada aventura. Lo que para cualquier deportista de este nivel, y en realidad para cualquier ser humano hubiera significado una muerte segura para alguien como Joe Simpson, su impresionante espíritu de lucha y ese deseo irrenunciable por torcer su destino generó uno de los momentos más heroicos dentro del montañismo internacional, sirviendo además como fuente de inspiración para otros deportistas que se han visto enfrentados a rigores como estos en las cumbres. Ese es claramente el mensaje que deja un hecho como este, el no bajar los brazos pese a la evidente adversidad, y la labor de un cineasta sería retratarlo de la manera más real posible, pero siempre teniendo en cuenta que el cine tiene el poder para concentrar las emociones e introducir a los espectadores en los cuerpos de sus protagonistas. La anterior premisa se ve perfectamente cumplida en las manos de McDonald, quien a través de tres actores, Brendan McKey como Joe Simpson, Nicholas Aaron como Simon Yates y Ollie Ryall como Richard Hawking, da vida nuevamente a esta historia repleta de sentimientos encontrados y hechos de extraordinaria significación en medio de una gélida pero hermosa escenografía natural. McDonald consigue recrear esta sorprendente hazaña echando mano a todos los recursos que en el cine permiten atrapar los sentidos, como es un excelente montaje, banda sonora y una fotografía de primer nivel, todo lo anterior presentado a través de un guión que en nada tiene que envidiar a las mejores cintas de suspense. TOCANDO EL VACÍO resulta una experiencia terriblemente absorbente en la que no hacen falta golpes de efecto para sentir en nuestra propia carne el dolor y la desesperación; ofuscarnos o llenarnos de esperanza; luchar para seguir adelante, un paso más, un paso más… Un documento y un documental que no sólo sorprende, sino que además se agradece. Texto: AA.VV., Fotogramas, Agosto 2004. Fuente: http://veu.ugr.es/pages/auladecineycineclub/proyecciones/curso_08_09/noviembre/proyeccion3 Última versión: 2016-11-30 18:18 - 1 dee 1 -