Título: ¿Por qué la resistencia a la insulina puede ser una causa natural de la disfunción tiroidea? Autora del Artículo: Gabriela Brenta Resumen realizado por: Karen Chen El hígado y la glándula tiroides son dos órganos estrechamente relacionados entre sí. Las hormonas tiroideas están involucradas en la regulación del metabolismo de todas las células, es decir, la cantidad de energía requerida para el desarrollo del trabajo celular, y a su vez el hígado es el encargado de la metabolización de las hormonas tiroideas, triyodotironina (T3) y tiroxina (T4). Y se han observado la coexistencia de alteraciones de la función tiroidea (hipo e hipertiroidismo) con procesos hepáticos. La existencia de una variación en la producción de hormonas tiroideas en el hígado y sus tejidos periféricos, disfunción tiroidea, genera una alteración en el metabolismo de la glucosa, un descontrol e intolerancia que causa un cambio en la sensibilidad y resistencia de la insulina. Efectos y alteraciones de la disfunción tiroidea en el metabolismo: o Efectos de las hormonas tiroideas sobre el TEJIDO HEPÁTICO Estudios realizados sobre el hígado de ratones demuestran que los efectos directos de las hormonas tiroideas en el hígado desempeñan un papel importante, ya que pueden producir efectos antagónicos de la insulina en el hígado. La HT promueve un aumento de la glicólisis hepática, disminuyen el contenido de glucógeno hepático y aumentan la neoglucogénesis (por aumento de la expresión de la glucosa 6 fosfatasa) y la glucogenolisis, lo que determina AUMENTO EN LA PRODUCCIÓN DE GLUCOSA a nivel hepático, lo que genera una mayor cantidad de glucosa para le economía. Además dichas hormonas estimulan la síntesis de AG por el hígado (mediante la inducción T3 a través de la activación transcripcional de la enzima málica) y la movilización de ácidos grasos y glicerol del adiposo favoreciendo la presencia de AG para su metabolización. Hay aumento de la síntesis hepática de TAG y colesterol libre, pero al mismo tiempo existe un aumento proporcional de su metabolización debido al incremento de la LPL, causado por el aumento de los receptores de las lipoproteínas) VLDL y LDL y una excreción por vía biliar incrementada, por lo que causa un descenso en las concentraciones de colesterol sérico. Un punto importante que hay que mencionar es que la nutrición es un factor importante que se debe tomar en cuenta ya que puede variar considerablemente los efectos de las hormonas tiroideas sobre la sensibilidad de la insulina. Fuente: http://www.hindawi.com/journals/jtr/2011/152850/ Fig1. Efectos de las hormonas tiroideas sobre el metabolismo de la glucosa en eutiroideo (líneas continuas), hipertiroidismo (líneas discontinuas), y las condiciones hipotiroideos (líneas finas discontinuas). o Efectos de las hormonas tiroideas sobre los TEJIDOS PERIFÉRICOS A diferencia de lo que ocurre en el tejido hepático, en los tejidos periféricos las hormonas tiroideas trabajan de manera sinérgica con la insulina, como por ejemplo en la acción de incrementar la expresión de GLUT 4, y fosfoglicerato quinasa. En el musculo esquelético GLUT 4 es inducido por T3, razón por la cual aumenta el transporte de insulina basal y estimula la glucosa en este tejido, además T3 también regula la UCP3, dicha asociación es importante ya que reducción progresiva de los niveles UCP3 resulta en resistencia a la insulina acompañada con la disminución de la oxidación de ácidos grasos y una menor intensidad de Akt/PKB y resistencia acompañado por la oxidación de ácidos grasos. A partir de observaciones realizadas a ratas se encontraron nuevos hallazgos que apuntan a UCP como un posible factor determinante molecular de la acción de T3 en el metabolismo energético. Los efectos indirectos de las hormonas tiroideas en los tejidos periféricos demuestran que el hipotálamo puede modular la producción endógena de glucosa. La resistencia de la insulina como consecuencia del hipertiroidismo. La resistencia a la insulina ocurre cuando las células se vuelven literalmente resistentes al efecto de la insulina en ellas. Esa insulina “no funciona bien” (la insulina no es metabolizada), por lo tanto las células necesitan cada vez más insulina para permitir que la glucosa entre a ellas causando que el azúcar en la sangre en la sangre aumente y la energía de las células baje. Unas de las consecuencias del hipertiroidismo es el incremento de la producción endógena de glucosa en el hígado y la disminución de la sensibilidad hepática de la insulina en los humanos. Los distintos mecanismos que explican este fenómeno incluye el aumento en la velocidad de los procesos de glucogénesis y glicogénesis, incremento de la acción simpática mediada por el hipotálamo y el aumento de la concentración del transportador de glucosa en el hígado, conjunto al aumento de la concentración de ácidos graos en el plasma. El efecto del hipertiroidismo en las células periféricas produce un aumento considerable de la velocidad de consumo de glucosa debido al aumento de la oxidación de la glucosa. Por otra parte, el hipotiroidismo también conlleva a la resistencia de la insulina, alterando el metabolismo del organismo. A veces, pacientes con hipotiroidismo sufren de una reducción de de la glucogénesis causando una disminución de la producción de glucosa en el hígado lo que conlleva a la disminución de la sensibilidad de la insulina debido a la desregularización de la acción de la leptina en el hipotálamo. Muchos fueron los experimentos realizados en animales para la comprobar la resistencia de la insulina en hipotiroidismo .Entre ellos se llevo a cabo un experimento en el tejido adiposo y muscular de ratas, en los que se demostró la resistencia de la insulina en hipotiroidismo, en dichos estudios se observó que la vía de la síntesis de glucógeno a partir de glucosa se encontraba inhibida, mientras que la estimulación del flujo glucolítico por parte de la insulina se frustró por completo. Otros autores aportaron que los efectos del hipotiroidismo en el músculo no fueron mediados a través de una interferencia de la insulina unidos a su receptor. Fue postulado que más bien se produce a través de un mecanismo postreceptor que podría incluir una fosfororilación anormal de insulina. En conclusión se puede decir que: Las HT ejercen un papel fundamental en el metabolismo de la glucosa. Se ha descrito una regulación directa de los genes responsables de la tiroides en el órgano especifico, más recientemente, un efecto indirecto que involucra diferentes vías hipotalámicas que regulan el metabolismo de la glucosa a través del control del sistema nervio simpático. Además, los efectos de la hormona tiroidea pueden ser insulina agonística, tal como se demuestra en músculo o antagonista tal como se observa en el hígado. En hipertiroidismo, la desregulación de este equilibrio puede terminar en la intolerancia a la glucosa principalmente debido a la resistencia hepática. En el hipotiroidismo los resultados son menos evidentes. Sin embargo, los datos disponibles sugieren que la resistencia a la insulina está presente principalmente en los tejidos periféricos. Las explicaciones posibles para explicar este fenómeno va desde el período de la desregulación del metabolismo oxidativo mitocondrial a la reducción del flujo sanguíneo en el músculo y tejido adiposo en condiciones de hipotiroidismo.