Director del festival GÉRARD CAUSSÉ iglesia de la purísima plaza de san benito patio colegio arzobispo fonseca patio chico iglesia de sta. m. de los caballeros patio de escuelas RO Œ N A S D R G AY S OR E O PLAZA DE SAN BENITO E M A CA LL E L PLAZA DE COL N PLAZA DE ANAYA PATIO CHICO C A L CA LI BR ER OS LL E R PALACIO CONGRESOS PATIO DE ESCUELAS A TO PLAZA MAYOR IGLESIA DE LA PURŒSIMA PATIO ESCUELAS Lorenzo Rodríguez Durántez Director Gerente de la Fundación E V PATIO COLEGIO ARZOBISPO FONSECA LL CA IGLESIA DE STA. MA. DE LOS CABALLEROS E Agradezco a Gérard Caussé, director artístico del Festival y director de la Joven Camerata, y a sus asistentes, Natalia Tchitch y Teimuraz Janikashvili, la inspiración, ilusión y el acierto que han puesto en la organización de Florilegio 2007. ORA CALLE ZAM C T A N I N CAMPO DE SAN FRANCISCO M PA Œ A CALLE CO V E E PLAZA DE LOS BANDOS FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 PLAZA DE LA FUENTE La Joven Camerata, formada principalmente por estudiantes de los conservatorios de música de Castilla y León, se constituye como uno de los ejes del festival. Su participación, junto a maestros de reconocimiento internacional, responde a un objetivo central en los programas de la Fundación que es el de ofrecer oportunidades extraordinarias de formación y de desarrollo personal. Las clases magistrales de violín, viola y violonchelo colaboran a que Florilegio se consolide como un auténtico semillero de jóvenes intérpretes de fama internacional. La cita del viejo maestro salmantino Salinas, “uno llega a hacerse en la vida según la música que acostumbra a oír” daba sentido el año pasado a nuestra invitación al Festival. Ella me da confianza para reiterar mi deseo de que la música que vamos a disfrutar estos días nos haga a todos mejores. IGLESIA DE STA. MA. DE LOS CABALLEROS PATIO COLEGIO ARZOBISPO FONSECA IGLESIA DE LA PURÍSIMA PLAZA SAN BOAL A 02 Continuar el compromiso ha supuesto crecer en el número de conciertos y en el de los grandes solistas que actuarán y también profundizar en el carácter pedagógico del Festival. Los planteamientos formativos, que estuvieron en el origen de la creación de la Joven Camerata de la Fundación Caja Duero, se hacen compatibles y se refuerzan por la calidad artística de las interpretaciones. Al público se le invita a ser cómplice de un diálogo de maestros consagrados y de jóvenes músicos que revela las claves del aprendizaje y de la eterna y fresca reinvención musical. P FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Desde el denominador común de la indiscutible calidad y belleza de las obras seleccionadas, Florilegio 2007 es una convocatoria al disfrute gozoso de la música en las plazas, iglesias y claustros de Salamanca. Los quince conciertos del Festival renuevan nuestro compromiso de ofrecer una programación musical en la temporada de verano, centrada en la música clásica e interpretada por músicos de prestigio internacional. Los espacios urbanos elegidos de gran categoría arquitectónica y artística potencian la calidad musical de los conciertos. PATIO CHICO Localización Conciertos PLAZA DE SAN BENITO Invitación al festival 03 D-17 DE JUNIO 2007 22:00 IGLESIA DE LA PURÍSIMA 1 “Jóvenes Promesas“ M-19 DE JUNIO 2007 22:00 IGLESIA DE LA PURÍSIMA 1 FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 “Compartir...“ 04 X-20 DE JUNIO 2007 22:00 PLAZA DE S. BENITO 2 “Música de Cámara nº 1” J-21 DE JUNIO 2007 22:00 COLEG. ARZOB. FONSECA 3 “Los Clásicos” V-22 DE JUNIO 2007 22:00 PATIO CHICO 4 “Música de Cámara nº 2” - JOHANN NEPOMUK HUMMEL. Concierto para trompeta y orquesta en mi bemol mayor - PABLO DE SARASATE. “Aires Gitanos“ para violín y orquesta de cuerdas, op. 20 - FÉLIX MENDELSSOHN. Concierto para violín y orquesta de cuerdas en re menor - JEAN BATISTE ARBAN. Variaciones sobre “El carnaval de Venecia“ para trompeta y orquesta D-24 DE JUNIO 2007 22:00 - FRANCIS POULENC. Concierto para dos pianos y orquesta en re menor - JOHANN SEBASTIAN BACH. Concierto para dos violines y orquesta en re menor, BWV 1043 - FRANZ KROMMER. Concierto para dos clarinetes y orquesta en mi bemol mayor, op. 35 - ANTONIO VIVALDI. Concierto para dos violonchelos y orquesta en sol menor, RV 531 - FÉLIX MENDELSSOHN. Konzertstück num.1 para dos clarinetes en fa menor. op. 113, Konzertstück nº 2 para dos clarinetes en re menor, op. 114 L-25 DE JUNIO 2007 22:00 - W.A. MOZART. Trío “Kegelstatt“ para piano, viola y clarinete en mi bemol mayor KV 498 - NINO ROTA. Trío para clarinete, violonchelo y piano - FRANCIS POULENC. Sonata para piano y clarinete - MAX BRUCH. Cuatro piezas para viola, piano y clarinete Op. 83 (num. 2,4,5, y 7) COLEG. ARZOB. FONSECA - JOSEPH HAYDN. Concierto para violín y orquesta en do mayor, H VII A. 1 - W.A. MOZART. Sinfonía concertante para vientos y Orquesta en mi bemol mayor, K 297 b - JOHANN SEBASTIAN BACH. Concierto Brandenburgo nº 3 BWV 1048 - FRANZ SCHUBERT. Octeto en fa mayor. D. 803 S-23 DE JUNIO 2007 22:00 - MAYTE MARTÍN, KATIA y MARIELLE LABÈQUE COLEG. ARZOB. FONSECA 3 “El Jardín Mágico” Rafael de León/Mayte Martín: Soneto de amor (arr. J. A. Amargós) José Luís Montón/Mayte Martín: Inténtato otra vez (arr. J. A. Amargós) Mayte Martín: Acaríciame por dentro (arr. J. A. Amargós) Carlos Gardel/Alfredo Pera: Sus ojos se cerraron (arr. J. A. Amargós) F. García Lorca/Mayte Martín: Gacela del amor imprevisto (arr. J. A. Amargós) J. A. Amargós: Variaciones sobre un zorongo Paco de Lucía/J. A. Amargós: Canción de amor (versión para dos pianos) Juan Valderrama/Mayte Martín: Vidalita (arr. Luís Vidal) J. A. Amargós: Capricho por bulerías - CAMILLE SAINT-SAËNS. “Carnaval de los Animales“ D-24 DE JUNIO 2007 12:00 - JOHANN SEBASTIAN BACH. Suite nº 1 en sol mayor, BWV 1007, para viola solo 5 - JOHANN SEBASTIAN BACH. Partita nº 2 en re menor, BWV 527 para violín solo “Los Domingos de Sta. María” - JOHANN SEBASTIAN BACH. Trío-sonata nº 3, BWV 527 para oboe, viola y contrabajo - HEITOR VILLA-LOBOS. Bachianas brasileñas nº 5 para Soprano y Octeto de violonchelos IGLESIA STA. MA. DE LOS CABALLEROS Calendario 2- conciertos COLEG. ARZOB. FONSECA 3 “Resonancias” PATIO DE ESCUELAS 6 “Música de Cámara nº 3” - MAYTE MARTÍN. Cantos para voz y orquesta de cámara - ALEXIS CÁRDENAS CUARTETO. Música Latinoamericana - FRANCIS POULENC. Sexteto para quinteto de vientos y piano - DIMITRI SHOSTAKOVICH. Trío nº 2 en mi menor, op. 67, para piano, violín y violonchelo M-26 DE JUNIO 2007 22:00 - RICHARD STRAUSS. “Las travesuras de Till Eulenspiegel“, op. 28 3 “Concierto Romántico” - MAURICE RAVEL. Concierto en sol, para piano y orquesta - PAUL HINDEMITH. ”Trauermusik” para viola y orquesta de cuerdas - BENJAMIN BRITTEN. Serenada para tenor, trompa y orquesta de cuerdas, op. 31 J-28 DE JUNIO 2007 22:00 - GABRIEL FAURÉ. Barcarolle nº 1 en la menor, op. 26 - Barcarolle nº 6 en mi bemol mayor, op. 70, COLEG. ARZOB. FONSECA 3 “Recital de Piano” Nocturne nº 4 en mi bemol mayor, op. 36, Impromptu nº 2 en fa minor, op. 31 - MAURICE RAVEL. “Pavane pour une Infante défunte” - MODEST MOUSSORGSKY. “Cuadros de una Exposición” V-29 DE JUNIO 2007 22:00 - FÉLIX MENDELSSOHN. Overtura “Sueño de una noche de verano“, op. 21 COLEG. ARZOB. FONSECA 3 “Noches de Verano” - ARNOLD SHÖENBERG. “La noche transfigurada“, op. 4 para sexteto de cuerdas - HÉCTOR BERLIOZ. “Las noches de verano“, op. 7 para mezzosoprano y orquesta S-30 DE JUNIO 2007 22:00 - MAURICE RAVEL. “Introducción y Alegro“ para arpa solo y sexteto en sol mayor PATIO DE ESCUELAS 6 “Música de Cámara nº 4” - W.A. MOZART. Quinteto para trompa y cuerdas en mi bemol mayor. K 407 - JOHANNES BRAHMS. Trio para violín, trompa y piano op. 40 en mi bemol mayor D-1 DE JULIO 2007 12:00 IGLESIA STA. MA. DE LOS CABALLEROS 5 - JOHANN SEBASTIÁN BACH. “Variaciones Goldberg“, BWV 988, para trío de cuerdas (arreglo de Dimitry Sitkovetsky) “Los Domingos de Sta. María” D-1 DE JULIO 2007 22:00 COLEG. ARZOB. FONSECA “La Ronde de Nuit” 3 - LUDWIG VAN BEETHOVEN. Triple Concierto para piano, violín y violonchelo en do mayor, op. 56 - LUDWIG VAN BEETHOVEN. Sinfonía nº 7 en la mayor, op. 92 FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Calendario 1 - conciertos 05 n DOMINGO, 17 DE JUNIO 2007 22:00 o t a s a l p r o g r a m a IGLESIA DE LA PURÍSIMA JOHANN NEPOMUK HUMMEL Johann Nepomuk HUMMEL (1778-1837) Pablo de SARASATE (1844-1908) Felix MENDELSSOHN (1909-1847) Jean-Baptiste ARBAN (1825-1889) Concierto para trompeta y orquesta en mi bemol mayor Concierto para trompeta y orquesta en mi bemol mayor “Aires gitanos” para violín y orquesta de cuerdas, op. 20 Concierto para violín y orquesta de cuerdas en re menor Variaciones sobre “El Carnaval de Venecia” para trompeta y orquesta PABLO DE SARASATE Alumno de Mozart y Salieri y maestro de Czerny, Mendelssohn y Thalberg, Johann Nepomuk Hummel -músico a caballo entre dos siglos, nacido en Pressburg (la actual Bratislava) y fallecido en Weimar- es autor de un inmenso catálogo en el que caben todos los géneros. Pero ser coetáneo de Beethoven y no haber compuesto una sola sinfonía bastó para que su prolífica obra permaneciera sumida en el olvido durante casi dos siglos. Más aún que en sus páginas vocales, el talento de Hummel brilló con especial intensidad en un amplísimo legado de cámara e instrumental que contiene algunas de las más atractivas sonatas para piano compuestas en la Viena de comienzos del XIX. Autor de numerosos conciertos para piano, el nombre de Hummel se asocia hoy, casi en exclusiva, a suConcierto para trompeta en mi bemol mayor, fechado en 1803, estrenado el día de Año Nuevo del año siguiente y escrito especialmente para Anton Weidinger -al que Haydn había dedicado otro concierto en 1796-, trompetista de la corte del príncipe Anton Esterházy donde el compositor sucedió al autor de La creación como maestro de capilla. En la exuberante y luminosa partitura de Hummel, respetuosa con la estructura tripartita consagrada por la tradición, la palpable herencia mozartiana se adereza con aires marciales -especialmente en sus movimientos extremos, Allegro con spiritoy Rondo. Allegro molto, de mayor despliegue virtuosístico- y melodías elegíacas, presentes en elAndante central y anunciadoras del inminente belcanto belliniano. Pamplona y Biarritz enmarcan la trayectoria vital de Pablo Martín Melitón de Sarasate, que fue junto a Joachim e Ysaÿe uno de los más eximios y aplaudidos violinistas de su tiempo. Sarasate estudió en Santiago de Compostela con José Courtié y completó su formación en París con el célebre Delphin Alard. En 1857 obtuvo el Primer Premio de Violín del Conservatorio de París, lo que le permitió emprender dos años después una carrera de concertista que dio a conocer su nombre por toda Europa y América. Su perfecta afinación y firmeza del arco, la sutileza interpretativa y el virtuosismo de su digitación propiciaron que muchos compositores de su tiempo (SaintSaëns, Lalo, Dvorák, Bruch, Wieniawski o Mackenzie) le dedicaran sus obras. Autor de 54 partituras numeradas para violín y piano (u orquesta), Sarasate tradujo en ellas su gusto por las transcripciones y arreglos de temas operísticos (Fantasía sobre “Carmen”), los ritmos populares de raíces españolas (Malagueña y habanera, Romanza andaluza y jota navarra, Playera y zapateado, Capricho vasco) y algunos otros más alejados de nuestras fronteras, como los Aires escoceses, op. 34, la Melodía rumana, op. 47 o los justamente famosos Aires gitanos, op. 20, trepidante amalgama de lirismo, nostalgia y desbordante energía y, sin duda, su mejor y más incombustible partitura entre las de inspiración foránea. El éxito inconmensurable y merecido de esa obra maestra que es el Concierto para violín en mi mayor, op. 64 ha oscurecido sin remedio el espléndido logro -y más si se considera lo temprano de su gestación- de la primera página concertante dedicada al violín por un jovencísimo Mendelssohn. Inspirado sin duda por las obras homónimas de Bach, el músico de Hamburgo escribió a principios de 1822 esta atractiva obra, con destino probablemente como las 12 sinfonías para cuerdas- a las célebres “Sonntagsmusiken” que tenían lugar en la suntuosa residencia familiar de Berlín. El propio compositor o quizá su gran amigo Ferdinand David defendieron la parte solista en su estreno privado. De concepción original pese a su respeto por la tradicional división en tres movimientos, el primero es un Allegro molto cuya energía revela influencias de la música revolucionaria francesa, presente asimismo en los conciertos para violín de Rode y Kreutzer así como en ciertas páginas beethovenianas de años anteriores; la frecuente reaparición del tema inicial refleja aún la impericia constructiva del músico adolescente. De similar extensión, el Andante central participa ya de una atmósfera lírica, íntima y elegíaca que anuncia en germen al gran romántico por venir. Un endiablado Allegro en forma de rondó y a ritmo de gavota concluye esta obra dedicada por Mendelssohn a su amigo y profesor de violín Eduard Rietz. “Aires Gitanos“ para violín y orquesta de cuerdas, op. 20 Descanso FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 FÉLIX MENDELSSOHN 06 Concierto para violín y orquesta de cuerdas en re-menor JEAN BATISTE ARBAN Variaciones sobre “El carnaval de Venecia“ para trompeta y orquesta Solistas: Carla Marrero, violín Rubén Simeo, trompeta Joven Camerata de la Fundación Caja Duero Director: Gérard Caussé Nacido en Lyon y muerto en París, Jean-Baptiste Arban fue sin duda el cornetista más brillante y conocido de su época. Músico en la Marina desde muy joven -integró la tripulación de la goleta “Belle Poule” que, en 1840, recogió en la isla de Santa Elena las cenizas de Napoleón-, Arban ingresó en 1841 en el Conservatorio de París donde estudió trompeta natural con Dauverné. Extraordinario intérprete de corneta, Arban formó parte de numerosas orquestas de salón, llegando a dirigir la de la Ópera de París. Desde 1857 ejerció como profesor de saxhorn (tipo de tuba vertical con válvulas puesta a punto por Adolphe Sax hacia 1845), inaugurando en 1869 una clase de corneta en el Conservatorio de París. Junto a su contribución a la enseñanza y técnica de interpretación y fabricación de la corneta, el prestigio de Arban ha quedado indisolublemente asociado a la publicación en 1864 de un texto fundamental, el “Gran Método completo para corneta de pistones y saxhorn”, aún hoy instrumento de referencia. Autor de fantasías, estudios, dúos y otras piezas de bravura, la obra de éxito más duradero de Arban -junto a la Fantasía brillante- es la titulada Variaciones sobre “El Carnaval de Venecia”, partitura extrovertida, desenfadada y jubilosa que, en apenas ocho minutos, proporciona a su avezado intérprete ocasiones sobradas para demostrar su dominio del instrumento. Los pasajes vertiginosos de notas breves e inacabables sucesiones de picados reclaman del trompetista un virtuosismo sin fisuras. Juan Manuel Viana FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 “JÓVENES PROMESAS” 07 MARTES, 19 DE JUNIO 2007 n 22:00 o t a s a l p r o g r a m a IGLESIA DE LA PURÍSIMA JOHANN SEBASTIÁN BACH Johann Sebastian BACH (1685-1750) Franz KROMMER (1759-1831) Antonio VIVALDI (1678-1741) Felix MENDELSSOHN (1809-1847) Concierto para dos violines y orquesta en re menor, BWV 1043 Concierto para dos violines y orquesta en re menor, BWV 1043 Concierto para dos clarinetes y orquesta num. 1 en mi bemol mayor, op. 35 Concierto para dos violonchelos y orquesta en sol menor, RV 531 FRANZ KROMMER El concerto doppio del período barroco, doble concierto o concierto para dos instrumentos es, desde el punto de vista histórico, tan antiguo como el concierto para solista pero su vigencia fue mucho menor. Aunque apreciado por sus contemporáneos como intérprete virtuoso del órgano y el clave, Bach escribió numerosas obras para instrumentos de cuerda, en especial durante la primera mitad de su carrera. La mayoría de sus composiciones violinísticas -el asombroso ciclo de sonatas y partitas a solo, los conciertos, las sonatas para violín y clave- fueron creadas a lo largo de su fructífera estancia como maestro de capilla del príncipe Leopold de Anhalt-Köthen (1717-1723). Como en los dos conciertos para violín coetáneos, el Concierto para dos violines en re menor se inspira en la familiaridad del músico con el modelo, por entonces muy popular, del concierto instrumental italiano, y en particular con las composiciones de Vivaldi en este género, si bien Bach lo enriquece con una mayor densidad temática, tan presente en las intervenciones solistas -de protagonismo no excesivo, a semejanza del concerto grossocomo en los ritornellos orquestales. Si en los movimientos impares, un enérgico Vivace de gran riqueza contrapuntística y un tenso y contrastado Allegro final, los violines se enfrentan de forma más combativa, en el Largo ma non tanto central -una elaborada y bellísima siciliana- ambos se responden entre sí, entremezclando sus delicadas líneas melódicas en una especie de amoroso dúo operístico. Bohemios y moravos ostentaron a lo largo del siglo XVIII un lugar privilegiado en la vida musical europea. Los Stamic y Richter en Mannheim, la dinastía Benda en Berlín, Myslivecek en Italia, Dusík y Rejcha en París, Vanhal, Vranicky, Kozeluh, Krommer-Kramár, RösslerRosetti y tantos otros compositores alejados de sus fronteras natales practicaron un estilo más o menos “internacional”, con escasas referencias musicales a su tierra de origen. Oriundo de Moravia, Franz Krommer -nombre germanizado de Frantisek Kramár- formó parte de esa pléyade de excelentes músicos checos que prestaron sus servicios en las diversas cortes europeas. Establecido en Viena desde 1795, ciudad donde murió bien entrado el siglo romántico, Krommer edificó su notable prestigio sobre los asentados cimientos de un cuantioso legado de música instrumental. Sinfonías, conciertos y una gran cantidad de composiciones para conjuntos de cámara avalan una trayectoria que alcanzó su cima en el repertorio para instrumentos de viento (cuartetos, sextetos, partitas), terreno en el que Krommer manifestó un talento privilegiado. Publicado en 1803 -el mismo año que vio nacer el Concierto para clarinete, op. 36y de dimensiones más reducidas que su hermano pequeño -el Concierto para dos clarinetes, Op. 91, posterior en doce años-, el Op. 35 manifiesta ciertos ecos mozartianos, sobre todo en el enérgico y chispeante Allegro inicial, su movimiento más desarrollado. El refinamiento melódico del Adagio y el encanto y frescura de inspiración del Rondo final convierten a esta obra en un atractivo eslabón de la literatura concertante para clarinete en la cadena que conduce desde Jan y Karel Stamitz y Mozart hasta Weber y Spohr. El inmenso catálogo concertante vivaldiano encierra, además de 29 conciertos para dos violines, otros 23 conciertos dobles para una pareja de instrumentos solistas (idénticos o distintos), en los que la inagotable experimentación tímbrica del prolífico músico veneciano parece no conocer fronteras. Destacan así, por ejemplo, las inusuales combinaciones formadas por dos flautas traveseras, dos trompetas, dos mandolinas, violín y oboe, violín y órgano, viola d'amore y laúd u oboe y fagot. Vivaldi escribió una única obra para dos violonchelos, el sombrío Concierto en sol menor, RV 531, uno de sus conciertos dobles más tempranos pues parece proceder, por el papel de su autógrafo y una incisividad rítmica que lo relaciona con la serie de L'Estro armonico, op. III, de una fecha en torno hacia 17131717. Dramático y tempestuoso el primer Allegro y vehemente y obstinado el segundo, los dos ofrecen múltiples demostraciones de virtuosismo -notas repetidas, arpegios, rápidas escalasy posibilidades de diálogo entre ambos solistas y en relación con el tutti. En medio, el meditativo Largo central permite que los violonchelos expongan su lírica cantinela con el único y discreto apoyo del bajo continuo, al modo de una sonata en trío. “Konzertstück” num. 1 para dos clarinetes en fa menor, op. 113. “Konzertstück” num. 2 para dos clarinetes en re menor, op. 114 Concierto para dos clarinetes y orquesta num. 1 en mi bemol mayor, op. 35 Descanso FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 ANTONIO VIVALDI 08 Concierto para dos violonchelos y orquesta en sol menor, RV 531 FÉLIX MENDELSSOHN Konzertstück num. 1 para dos clarinetes en fa menor, op. 113 Konzertstück num. 2 para dos clarinetes en re menor, op. 114 Solistas: Michel Portal, clarinete Isaac Rodríguez, clarinete Marius Díaz, violonchelo Jaume Fraga, violonchelo Teimuraz, Janiskashvili, violín Luis Peña, violín Alfonso Sebastián, clavecín Joven Camerata de la Fundación Caja Duero Director: Gérard Caussé Las dos Konzertstücke (Piezas de concierto) para clarinete, corno di bassetto y piano -que aquí escuchamos en su posterior versión orquestada- forman parte de las obras más desconocidas del muy estimable legado de cámara mendelssohniano. Ambas piezas, de reducidas dimensiones -apenas nueve minutos de duración- y distribuidas en tres movimientos, reflejan la admiración del músico hamburgués por su amigo el clarinetista bávaro Heinrich Joseph Baermann (1784-1847). Piezas desenfadadas, incluso un punto humorísticas en sus rápidas secciones extremas, y sin pretensiones, a modo más bien de “potpourris” operísticos, revelan la impecable factura formal, nobleza melódica -presente especialmente en los melancólicos Andantes centrales- y finura tímbrica de su autor. Ambas fueron compuestas en Berlín, entre diciembre de 1832 y enero de 1833, con objeto de ser interpretadas por Baermann y su hijo Karl, que tocaba el corno di bassetto (instrumento favorito de Mozart y, por aquellas fechas, a punto ya de desaparecer). Si el Op. 113 fue titulado por Mendelssohn como “Gran dúo para brioche y tarta de crema”, el último fragmento (Allegro grazioso) del segundo es, en palabras de su autor, “frío porque os vais a Rusia, donde la temperatura también lo es”. Juan Manuel Viana FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 “COMPARTIR...” 09 n MIÉRCOLES, 20 DE JUNIO 2007 22:00 o t a s a l p r o g r a m a PLAZA DE SAN BENITO W.A. MOZART Trío “Kegelstatt” para piano, clarinete y viola en mi bemol mayor, KV 498 NINO ROTA Trío para clarinete, violonchelo y piano Descanso FRANCIS POULENC FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Sonata para clarinete y piano 10 MAX BRUCH Cuatro piezas para clarinete, viola y piano, op. 83 (num. 2, 4, 5 y 7) Solistas: Michel Portal, clarinete Jerome Ducros, piano Barbara Switalska, violonchelo Gérard Caussé, viola Wolfgang Amadeus MOZART (17561791) Trío “Kegelstatt” para piano, clarinete y viola en mi bemol mayor, KV 498 Un nacimiento enigmático, una instrumentación original y una estructura fuera de lo corriente contribuyen a aumentar el atractivo de este excepcional Trío de los bolos, KV 498, una de las más experimentales composiciones camerísticas mozartianas. Fechado en Viena el 5 de agosto de 1786, inscrito en el catálogo temático establecido por el propio músico con la simple mención de “Ein Terzett für Clavier, Clarinett und Viola” y publicado por Artaria dos años más tarde, el Trío “Kegelstatt” fue escrito a los pocos meses del estreno vienés de Las bodas de Fígaro. Quiere la leyenda que la obra viera la luz en el jardín de sus amigos los Jacquin durante una partida de bolos y que fuera ejecutado por vez primera a cargo de Anton Stadler -primer clarinetista de la orquesta de la Corte de Viena, al que Mozart dedicaría más adelante un concierto y un quinteto memorables-, Franziska von Jacquin -hija de los dueños de la casa y alumna de Mozart- al piano y el propio compositor a la viola. Concebido con plena libertad, la obra se inicia, en contra de lo acostumbrado, por medio de un Andante de atmósfera íntima y bucólica que “evoca a la perfección las sombras y la frescura de un cenador, en un jardín vienés un cálido verano” (Halbreich). Un gracioso Menuetto, menos galante de lo habitual, cede el paso a un final de extraña denominación Rondeaux. Allegretto- y encantadora luminosidad. En sus Märchenerzählungen, op. 132, de idéntica plantilla instrumental, Schumann rendirá homenaje en 1853 a esta obra que Paumgartner calificaría como “dulce, cantable, llena de mágicas sonoridades y sonriente melancolía” Nino ROTA (1911-1979) Francis POULENC (1899-1963) Max BRUCH (1838-1920) Trío para clarinete, violonchelo y piano Sonata para clarinete y piano Cuatro piezas para clarinete, viola y piano, op. 83 (num. 2, 4, 5 y 7) Nino Rota es sobradamente conocido por sus numerosos trabajos como compositor cinematográfico. Más de 140 películas llevan su firma en la banda sonora, entre las que cabe destacar logros tan admirables como Guerra y paz, Rocco y sus hermanos, El gatopardo y El padrino aunque fue su trabajo continuado, de 1952 a 1978, al lado del gran Federico Fellini (El jeque blanco, Los inútiles, La Strada, Almas sin conciencia, Las noches de Cabiria, La Dolce Vita, Ocho y medio, Julieta de los espíritus, Satyricon, Los clowns, Roma, Amarcord, Casanova, Ensayo de orquesta) lo que procuraría al músico milanés fama universal. Pero a semejanza de Waxman, Rózsa, Herrmann o, antes que ellos, Korngold, además de esta faceta Rota cultivó con igual intensidad una carrera de músico alejado de las pantallas de cine. Más de un centenar de obras de todo tipo conforman el catálogo “clásico” de este prolífico autor de sinfonías, conciertos, ballets, oratorios, una decena de óperas y numerosas páginas vocales, pianísticas y de cámara. A este último apartado de su producción pertenece el Trío para clarinete, violonchelo y piano fechado en 1973, una época en la que Rota se siente particularmente atraído por los instrumentos de viento como atestiguan las Cinco piezas fáciles para flauta y piano (1972), los Tres dúos para flauta y oboe (1972-73) o la Toccata para fagot y piano (1974). Se trata de una obra dividida en tres movimientos (Allegro moderato, Adagio y Allegrissimo), de corte clasicista como todas las suyas y que refleja fielmente una escritura pulcra y refinada, de gran viveza rítmica y envidiable facilidad melódica. La atracción de Poulenc por los instrumentos de viento atraviesa de principio a fin todo su legado de cámara, desde la juvenil Sonata para dos clarinetes (1918) hasta la postrera Sonata para oboe y piano redactada en 1962, sólo un año antes de su muerte. Como ésta, la Sonata para clarinete y piano fue redactada igualmente en 1962 aunque no sería dada a conocer hasta el año siguiente, muerto ya su autor. Los intérpretes del estreno, celebrado el 10 de abril de 1962 en el Carnegie Hall de Nueva York fueron el clarinetista Benny Goodman -para quien fue escrita- y Leonard Bernstein al piano. Dedicada “a la memoria de Arthur Honegger”, amigo y compañero de Poulenc en el Grupo de Los Seis, la obra se inicia con un Allegro tristamente cuya inusual denominación delata ya su atmósfera agridulce. Una suave melancolía impregna el discurso de la ensoñadora Romanza central, página bellísima y corazón emocional de toda la composición, a la que sigue un breve Allegro con fuoco que permite al piano mostrar parte de sus posibilidades percutivas. Con excepción del primero de sus tres conciertos para violín, justamente célebre, de su también violinística Fantasía escocesa y, en menor medida, de su hermosa suite Kol Nidrei para violonchelo y orquesta, el generoso legado musical del académico Max Bruch ha desertado casi por completo de las salas de conciertos. Volcado hacia la orquesta y el repertorio sinfónico-coral, el músico de Colonia consagró menos energías en el terreno camerístico, acaso porque la comparación con Brahms -su mayor influencia estilística- sólo podía jugar en su contra. Las Ocho piezas para clarinete, violonchelo y piano, op. 83 -de las que escuchamos una selección- constituyen sin duda lo más granado de su producción de cámara. En esta composición tardía, fechada en Berlín en 1910 y que parece provenir estilísticamente de medio siglo antes, Bruch empasta magistralmente los otoñales timbres de viola y clarinete como hará un año después en su Concierto en mi menor, op. 88, otro curioso “pecado de vejez” de este músico mal conocido. Tanto la segunda pieza -un breve Allegro con moto- como la cuarta un Allegro agitato no carente humor- resumen con elocuencia lo mucho y bien que Bruch bebió en las fuentes brahmsianas. La quinta, un nostálgico Andante subtitulado Rumänische Melodie muestra el interés del músico por el folclore mientras que la séptima, marcada Allegro vivace ma non troppo, evidencia un tono ligero y chispeante, de inequívoca ascendencia mendelssohniana. Juan Manuel Viana FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 “MÚSICA DE CÁMARA NUM. 1” 11 JUEVES, 21 DE JUNIO 2007 n 22:00 o t a s a l p r o g r a m a PATIO COLEGIO ARZOBISPO FONSECA “LOS CLÁSICOS” Joseph HAYDN Concierto para violín y orquesta en do mayor, H VII a. 1 (Rohrau, Austria, 1732 - Viena, 1809) Solista: David Grimal Descanso W.A. MOZART FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Sinfonía concertante para vientos y orquesta en mi bemol mayor, K 297 B 12 Solistas: Julia Gallego, flauta J. Manuel González Monteagudo, oboe Guillermo Salcedo, fagot David F. Alonso, trompa Joven Camerata de la Fundación Caja Duero Director: Gérard Caussé El género concierto tiene su origen en el llamado concerto grosso, en el que un grupo de instrumentos de la orquesta se desgaja de ésta para dialogar con ella de forma autónoma. En origen, era una forma de destacar la calidad de una orquesta y el virtuosismo de sus principales componentes. Una forma de lucimiento del dueño de la orquesta, en su momento, normalmente reyes y nobles. Es la época del músico-sirviente, contratado por el señor a cambio de modestos estipendios y sin ninguna consideración social. Hasta tal punto era así, que comían en las cocinas con el resto de la servidumbre. La atención al lucimiento de elementos concretos dotados de un especial virtuosismo hizo nacer el concierto para solista instrumental. Éste está destinado más directamente al lucimiento del solista como virtuoso individual, si bien con el tiempo los valores musicales y expresivos se unen para dar más calidad a un género que podía morir de éxito explotando en la pirotecnia de los virtuosos. Son éstos los que dan desarrollo al género, desde un Paganini, con sus conciertos y otras obras para violín y orquesta a Chopin con los dos suyos para piano. El género concertante es un híbrido entre el concierto para instrumento solista y la sinfonía, y viene a compaginar de algún modo éste con el concerto grosso. Su auge fue entre 1770 y 1830, época de los primeros conciertos públicos y de los primeros virtuosos itinerantes. Los solistas varían mucho en número y tipo de instrumentos. Desde dos de cuerda a los nueve solistas para los que J. C. Bach escribió su Sinfonía concertante en mi bemol mayor T 288/7, para dos violines, dos violas, dos oboes, dos trompas y violonchelo, pasando por curiosidades como la Sinfonía concertante para piano, mandolina, trompeta y contrabajo (1790) de Leopold Kozeluch. Concierto para violín y orquesta en do mayor, H VII a. 1 Comp. Esterháza, ca. Primeros años década 1760 En comparación con la riqueza absoluta de sus sinfonías, los conciertos para instrumento solista de Haydn son poco apreciados por una parte de la crítica y la musicología, que los tiene como los parientes pobres de su catálogo. Él prefirió invertir su tiempo en la composición de sinfonías. Algo normal: era lo que el mercado de mediados de siglo pedía en Viena, al contrario que en Italia. En realidad, Haydn escribió conciertos para algunos miembros de su orquesta en Esterháza, con el claro objetivo de justificar los altísimos sueldos que se pagaban a los solistas que contrató. Mozart escribió los suyos para violín o para piano para su propio lucimiento, especialmente en la época de sus conciertos de suscripción en Viena, o el de sus alumnos de piano. En el campo del teclado, Haydn escribió conciertos para órgano, clavicordio, clavicémbalo, y fortepiano. En las cuerdas, para violín, violonchelo, e incluso para violón o contraviolón, el antecedente más inmediato del contrabajo. También creó conciertos para vientomadera y viento-metal; y así flauta, fagot, trompa -una o dos- y trompeta fueron destinatarios de sus trabajos. El Concierto para violín en Do mayor es el más conocido de los cuatro que escribió, hacia los primeros años de la década de 1760, destinados a Luigi Tomasisni. En ellos, Haydn usa un dispositivo encantador que podemos observar en el Cuarteto op.1 nº 1, enmarcando su movimiento lento con material independiente. En general, sin embargo, estos movimientos lentos, aunque elegantes, son juzgados como algo superficiales y no todos tienen el atractivo melódico irresistible de otros similares del autor. Como otros movimientos lentos en los conciertos de Haydn, es una pieza elegante aunque no tenga el atractivo irresistible de otros similares suyos. Los movimientos finales, nunca marcados más lento que allegro, están escritos en notas breves, en general 2/4 y 3/8, que indican la proximidad del fin de la obra desarrollando un ímpetu entusiasta, muy distinto del carácter más expositivo que suelen tener los movimientos de apertura de estos conciertos. Wolfgang Amadeus MOZART (Salzburgo, 27-I-1756; Viena, D-XII-1791) en Les Concerts Spirituels de Le Gros sin llegar a estrenarse. Mozart habla de ella en su carta de 1 de mayo de 1778: 'Hace cuatro días que la entregué a Le Gros para que la recopiaran, pero siempre la encuentro en el mismo sitio (...) Fui al concierto los días que debía interpretarse. Vinieron a mí Ramm y Punto [dos de los cuatro intérpretes a quienes la destinó], agitadísimos, preguntándome por qué no se ha interpretado (...) Creo que la causa de todo es Cambini, un maestro italiano a quien, sin querer, hice sombra durante nuestro primer concierto en casa de Le Gros'. La obra es brillante y da ocasiones sobradas de lucimiento a los solistas. Por su tímbrica y la tonalidad en la que está escrita, mi bemol mayor, trae a la memoria pasajes de La Flauta Mágica y de alguna de sus composiciones para los rituales de la logia masónica a la que pertenecía. Sinfonía Concertante para Instrumentos de Viento, K 297 B 1 Comp. Mannheim, 1778 De las seis obras de Mozart den este género nos han llegado íntegras tres: el Concertone, el Doble concierto en do mayor para flauta y arpa 297c (¿París?, 1778) y la Sinfonía concertante en mi bemol mayor para violín y viola (Salzburgo, verano de 1779). Además de éstas, se conservan fragmentos de otras dos sinfonías concertantes, el Allegro en re mayor para violín y piano 315f (Mannheim, 1778) y el Allegro en la mayor para violín, viola y violoncelo 320e (¿Salzburgo?, 1779). Las última investigaciones afirman que la popular Sinfonía concertante para oboe, clarinete, fagot y trompa, K 297 fue compuesta probablemente en el s. XIX a partir de fragmentos de la escrita por Mozart en Mannheim a finales de 1777 para su estreno en París. La partitura se extravió en la primavera de 1778 FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 JOSEPH HAYDN 13 NOTA 1. En las últimas revisiones del catálogo de Mozart, se le ha puesto el número de catálogo C Ahn 14.01, ya que se considera como obra espuria de autoría anónima en el s. XIX. © Copyright 2007 by Julián Carrillo Sanz VIERNES, 22 DE JUNIO 2007 n 22:00 o t a s a l p r o g r a m a PATIO CHICO JOHANN SEBASTIAN BACH Dos encargos, dos obras maestras FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Concierto Brandemburgo num. 3 BWV 1048 14 Solistas: Teimuraz Janikashvili, violín Kristof Wisnievsky, violin Jesús Martín López, violín Gérard Caussé, viola Víctor Gil, viola Natasha Tchitch, viola Marius Díaz, violonchelo Cristina Dulanto, violonchelo Héctor Sánchez, violonchelo Alfonso Sebastián, clavecín Descanso FRANZ SCHUBERT Octeto en fa, para cuarteto de cuerdas, contrabajo, clarinete, trompa y fagot, D 803 Solistas: David Grimal, violín Víctor Ambroa, violín Natasha Tchitch, viola Mariuts Díaz, violonchelo Isaac Rodríguez, clarinete Guillermo Salcedo, fagot David F. Alonso, trompa Philippe Noharet, contrabajo Dice Marcel Proust que la obra preexiste al autor y que la labor de éste consiste en descubrirla: 'A veces, aparece con claridad. En otras ocasiones, se debe esperar con paciencia. Las ideas nacen y, en general, 'circulan'. El discurso tiene sus propias leyes y el compositor debe captar, en concentración, por dónde el discurso quiere, desea transcurrir...' Ardua labor, desde luego, para la que -además de la antedicha concentración- hay que tener unas notables aptitudes personales y desarrollarlas por una técnica aprendida con no poco esfuerzo y dedicación. Porque también es cierto que El David o La Piedad llevaban millones de años durmiendo tan ricamente dentro de sus respectivos bloques de mármol sin que nadie los viera, hasta que su 'descubridor', el señor Buonarotti, recibió el encargo de crearlos. Para ello, alguien tuvo que buscar la piedra adecuada con la forma y el tamaño idóneos para que el pintor de la bóveda de la Capilla Sixtina pudiera liberarlas con su arte, eliminando 'todo lo que sobraba'. Como dice Alessandro Baricco: 'el arte siempre ha sido un producto. Miguel Ángel trabajaba porque alguien le pagaba; y le marcaba el dónde, el cuándo y el qué. Mozart componía óperas por dinero, esperando que al público le gustasen. La historia del arte es la de un producto creado por hombres que trabajaban a cambio de unos honorarios, haciendo algo que gustaba a otros.' La leyenda del artista-genio-héroe, tan cara a la sensibilidad de la época romántica, ha hecho mucho daño a una cabal valoración de la vida real de los artistas. Por eso a veces, cuando contemplamos o escuchamos la obra de uno de ellos, olvidamos algo tan obvio como que cada personaje histórico fue en vida una persona. Con sus preocupaciones diarias y sus motivaciones personales de orgullo, novedad, seguridad, ambiciones materiales y espirituales; con sus relaciones sexuales, sus filias y sus fobias. Salud, dinero y amor, como en la vieja canción, guiaron los pasos de todos ellos, como los de cualquier hijo de vecino. El irónico nombre 'arte alimenticio', que a veces se da a la obra realizada de encargo por un artista, no tiene en realidad razón de ser en sí mismo. Es el oficio y la creatividad de cada artista lo que decide la calidad de cada obra, no el fin a que ésta se destine. Las dos obras que hoy escucharemos fueron obras encargadas y pagadas a sus autores; éstos crearon dos obras maestras. J. S. BACH (Baut. Eisenach, 23.03.1685; m. Leipzig, 28.07.1750) Sólo una parte de la obra orquestal de Bach se ha conservado. Aunque a día de hoy las causas de esta pérdida no han sido probadas, la ausencia de sus obras escritas durante su permanencia en Weimar y Köthen, en los que dispuso de orquestas de excelente calidad, puede indicar que esos trabajos quedaran en las bibliotecas sus respectivas cortes. Tampoco cabe descartar que la pérdida sea debida a la dispersión de la obra entre sus numerosos hijos y herederos, a la muerte del maestro. El cambio de los gustos musicales a mediados del s. XVIII tampoco debe de ser ajeno a su pérdida. Concierto Brandemburgo num. 3 BWV 1048 Franz SCHUBERT (Liechtental, Viena: 31.01.1797; Viena: 19.11.1828) A mediados del XIX, S.W. Dehn, conservador de la colección de música de la biblioteca real de Berlín, descubrió “muchas obras muy significativas [de J.S. Bach] que hasta ahora han permanecido desconocidas” (...) “entre otras, 6 concerti grossi dedicados al Margrave Ch.L. von Brandenburg." Por la dedicatoria de Bach, el origen de estos conciertos parece estar en un encargo del Margrave para su orquesta. Con el ciclo de los Conciertos de Brandemburgo, Bach enriqueció el género concerto grosso en muchos aspectos significativos. No es fácil encontrar un ciclo comparable de obras en esa época que logre combinar tan perfectamente la valentía en el experimento con una solidez artística y riqueza musical tan consecuentes con el concepto. Llamados originalmente Concerts avec plusieurs instruments (Conciertos con varios instrumentos) por estar escritos para diferentes y variadas combinaciones de instrumentos solistas, los Brandenburgische son una muestra de la capacidad de orquestación de Bach para lograr, en sólo seis conciertos, una gran variedad de combinaciones de las tres familias orquestales. El Tercer Concierto en sol Mayor, BWV 1048 está escrito para tres grupos, de tres miembros de la familia de las cuerdas cada uno: tres violines, tres violas y tres violonchelos. En él, Bach hace un uso muy ingenioso de las diferentes posibilidades de combinación de estos elementos, creando en alguna de sus secciones una textura musical compartida por los registros altos, medios y bajos, tres tríos de cuerda en otra, o representaciones individuales de cada grupo que adquieren protagonismo como solistas. Una característica de la obra es la ausencia de un movimiento intermedio, siendo la única relación entre los dos movimientos rápidos, de muy diferente carácter y textura, una corta cadenza de transición. En noviembre de 1822, Schubert cayó seriamente enfermo. La enfermedad, sífilis, no ha de extrañarnos cuando recientes biografías suyas1 nos demuestran que vivía su homosexualidad de forma notablemente promiscua. Este diagnóstico y los primeros síntomas del mal le hicieron caer en una fuerte depresión que tuvo entre otras consecuencias el que su Sinfonía nº 7 en si menor, D 759 quedara como Inacabada y la posterior confusión en su numeración, que dio lugar a que se conociera durante años (todavía hoy hay quien la llama así) como Octava Sinfonía. Schubert estaba convencido de que su contagio había coincidido con la redacción de los primeros movimientos de ésta, lo que creó en él una fobia hacia la obra que le hizo abandonar la redacción del resto. Los siguientes años son para él una constante lucha con la enfermedad: ésta desestabilizó muy seriamente la posición social del músico en sus círculos sociales, con el consiguiente deterioro de su salud psíquica y social. Octeto en fa, para cuarteto de cuerdas, contrabajo, clarinete, trompa y fagot, D 803 Comp. Lugar, 1824; estr. Viena: 1824, priv., 1827; 1a ed. 1853, Diabelli & co 2 . El Octeto es un encargo del conde Ferdinand Troger, quien tocaba el clarinete como aficionado. Por su estructura y organización se podría clasificar como un Divertimento, pero su dimensión, elaboración temática, y su plenitud sonora, textural y tímbrica hacen de él una obra concertante para conjunto de cámara digna de figurar entre las más logradas del género. Las introducciones lentas del primero y último movimientos denotan que Schubert tomó como modelo el Septimino, op. 20 de Beethoven. Pero hay algunas diferencias: Schubert expone ya en la introducción del allegro inicial sus temas y ritmos con puntillo. El tema de la introducción en andante del último movimiento se repite en la coda. En el adagio la melodía, típicamente schubertiana, se reparte entre el primer violín y el clarinete. El tercero, vivace, es un scherzo perfectamente ajustado a los usos formales de la época, como también lo es el quinto, minueto. El andante es un conjunto de tema y variaciones: su tema está tomado del dúo Gelagert unter'm hellen Dach, de su 'singspiel'3 Die Freunde von Salamanka (Los Amigos de Salamanca). Comparte con el adagio el clima melódico tan característico de los tiempos lentos de su autor. Las variaciones descomponen el tema o lo acompañan, ligeramente modificado, con rápidas figuras rítmicas. El movimiento final es la máxima exteriorización en esta obra de su lucha con la enfermedad y la variabilidad de sus estados de ánimo, con la atormentada introducción en andante molto y la ligereza y animados diálogos del allegro. La única ejecución producida en vida de Schubert fue su estreno público, que tuvo lugar el 16 de abril de 1827 en el Musikverein de Viena. NOTAS 1. Franz Schubert, A BiographyElizabeth Norman McKay. Clarendon press, Oxford, 1996 2. Publicados sólo los 3 primeros movimientos como obra póstuma (op. Posth. 166). 3. El 'singspiel' es un género de teatro musical con partes cantadas y habladas, semejante a la opereta o la zarzuela, cuyo más conocido representante esLa Flauta Mágica. © Copyright 2007 by Julián Carrillo Sanz FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 “MÚSICA DE CÁMARA NUM. 2” 15 SÁBADO, 23 DE JUNIO 2007 n 22:00 o t a s a l p r o g r a m a PATIO COLEGIO ARZOBISPO FONSECA MAYTE MARTÍN, KATIA Y MARIELLE LABÈQUE Una noche exótica con paseo por el zoo FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Maurice RAVEL 16 Rafael de León/Mayte Matín: Soneto de amor ( arr. J. A. Amargós ). (1908-1982) José Luís Montón/Mayte Martín: Inténtalo otra vez (arr. J. A. Amargós ). (1962) Mayte Martín: Acaríciame por dentro (arr. J. A. Amargós) Carlos Gardel/ Alfredo Pera: Sus ojos se cerraron ( Arr. J. A. Amargós) F. García Lorca/Mayte Martín: Gacela del amor imprevisto (arr. J. A. Amargós). (1898-1936) J. A. Amargós: Variaciones sobre un zorongo (1950) Paco de Lucía/J. A. Amargós: Canción de amor (versión para dos pianos). (1947) Juan Valderrama/Mayte Martín: Vidalita (arr. Luís Vidal). (1916-2004) J. A. Amargós: Capricho por bulerías Solistas: Katia Labeque, piano Marielle Labeque, piano Mayte Martín, voz Descanso CAMILLE SAINT-SAËNS “ Carnaval de los Animales “ Solistas: Katia Labeque, piano Marielle Labeque, piano David Grimal, violín Jennifer Moreau, violín Gérard Caussé. viola Julia Gallego, flauta María Ángeles Galán, clarinete Justus Grimm, violonchelo Philippe Noharet, contrabajo Juan Antonio Martín López, percusión Narrador: Francisco Alfonso Santiago de Castro (Ciboure, P. Vasco francés, 07.03.1875; París, 28.12.1937) Los padres de Ravel, Pierre Joseph -ingeniero afincado en París- y Marie Delouart se conocieron casualmente en Aranjuez en 1873. Casados en 1874, Maurice nació en 1835, en el País Vasco francés, pero la familia se trasladó en junio de ese mismo año a París, donde pronto comienza sus estudios de piano con Henri Ghys, quien anota en su diario: '31 de mayo de 1882. Empiezo hoy con un pequeño alumno, Maurice Ravel, que me parece inteligente. Decididamente, estoy destinado a los niños ahora'. Posteriormente aprende armonía con Charles René, gran pedagogo que estimulaba a sus alumnos, fuera de los deberes de la asignatura, a componer breves piezas libres de la disciplina de la materia. 1889, año en que comienza sus estudios en el Conservatorio, es también el de la Exposición Universal de París. Las tiendas chinas y el teatro javanés, que le muestran por primera vez los sonidos de una música desconocida, despiertan su imaginación como no puede por menos de ser en un chaval de catorce años. Probablemente, el futuro compositor se cruza allí sin conocerlos con futuros colegas como Debussy, Satie o Chabrier, a quienes también impactaría e influiría la novedad y que tanta influencia habrían de tener en el joven Ravel; el exotismo -concepto que para los franceses de la época incluía lo español- triunfa, con el predominio de una corriente estética orientalista. En las artes plásticas, el “art nouveau” y el “art déco”, además de mucha de la pintura de la época, las figuras criselefantinas y los vidrios artísticos están fuertemente influidos por esta corriente, de la que existe una magnífica colección en el Museo Casa Lis de Salamanca. En música, baste recordar para confirmarlo, que es la época en que Puccini compone Madama Buterfly y, posteriormente, la que habría de ser su obra póstuma e inconclusa, Turandot. Rapsodia Española Comp.; estr. París, 1908; Podríamos definir la Rapsodia Española como un estudio de orquesta por su instrumentación llena al tiempo de color y ligereza, y por la forma en que los timbres se escuchan y responden. En ella, la orquesta suena con nervio y agilidad, con la suavidad seca de una seda salvaje. La inclusión de su Habanera de 1895, más que un recurso, es semejante a una siembra: la de un espíritu que impregna la obra de sabor español, empleando unas fórmulas estereotipadas de lo andaluz que alejan el carácter y la sonoridad de la obra de otras, por su ambigüedad, más habituales en Debussy. Ma Mêre l´Oie Comp. Levallois, 1908; En esta obra, Ravel deja hablar al niño y al poeta que lleva dentro. En sus avances técnicos no pierde la fresca sensibilidad, la libertad imaginativa de los niños. Por eso, porque se siente cómodo en el mundo de Perrault, Ma Mêre l'Oie es una colección de cuentos infantiles narrados en música. En la Pavana de la Bella Durmiente del Bosque inicial nos contará sus ensoñaciones en el timbre más dulce del carrillón, contrastados con la cuerda en pizzicato; nos enteraremos de los temores de Pulgarcito y admiraremos su resolución para afrontarlos; quedaremos sorprendidos por los fastos orientales de aire un tanto marcial al 'ver' el cortejo de Laideronette, emperatriz de las pagodas; se nos irán los pies a ritmo de vals, intentando enterarnos de las Conversaciones de la Bella y la Bestia en su palacio, siendo testigos del fin del encantamiento del príncipe y admirando su gallarda presencia; y reposaremos sintiendo el tacto de terciopelo del aire que se respira En el Jardín de las Hadas. nizado ese mismo año 1852 por la Société Sainte-Cécile de Burdeos. A los dieciséis años (1853), compuso su Primera Sinfonía y la envió como anónimo a la misma sociedad, que la admitó y estrenó el 11 de diciembre de 1853, dirigida por Seeghers, con gran éxito entre críticos y compositores. Fue precisamente en casa de Seeghers -presidente de la Société Sainte-Cécile donde conoció a F. Listz, que había sido maestro de piano de la esposa del director. El Carnaval de los Animales Comp 1886; estr. , París, 1922; ed. 1922 C. SAINT-SAËNS (París, 09.10.1835; Argel, 16.12.1921) Nacido en el Barrio Latino de París y huérfano de padre desde los tres meses, pronto madre e hijo se van a vivir con Charlotte Masson, tía de su madre y dotada de una sólida formación musical. El primer contacto con la música de Camille se produce en casa, en el viejo piano de Mme Masson, quien le da sus primeras clases a partir de los tres años. La precocidad de Saint-Saëns le permitió leer y escribir a los tres años, componer su primera obra a los cuatro y medio (22.03.1839), y su primera canción, Le Soir, a los cinco. En 1848, ingresó en el Conservatorio de París, aprendiendo órgano con F. Benoit composición con J. Halévy. También tomó lecciones de canto y acompañamiento. Fue primer premio de órgano y se presentó al Prix de Rome en 1852 y 1864 sin conseguirlo. La obra presentada en 1852, Ode à Sainte-Cécile, obtuvo el primer premio en el concurso orga- En 1886, Saint-Saëns se halla ocupado en la composición de su ópera Proserpina, el Capricho-Vals para Piano y Orquesta, “Wedding-Cake”, op. 76, y la grandiosa Sinfonía n.º 3 con órgano, op. 78, dedicada a la memoria de F. Liszt. Ese mismo año compuso El Carnaval de los Animales obra a la que subtituló como “grandiosa fantasía zoológica”, pero que siempre consideró como una frivolidad, hasta el punto de no permitir más que la interpretación pública de El cisne en toda su vida. Su estreno se produjo apenas dos meses después de su muerte en Argel. El Carnaval es la obra más popular de Saint-Saëns, en especial la pieza El Cisne, la más conocida de las trece que la componen y uno de los adagios más populares de la historia de la música. Es muy curiosa la inclusión de Pianistas entre los animales: se trata de una auténtica “boutade” (broma) musical para ridiculizar la forma de practicar escalas de algunos pianistas mediocres. © Copyright 2007 by Julián Carrillo Sanz FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 “EL JARDÍN MÁGICO” 17 n DOMINGO, 24 DE JUNIO 2007 12:00 o t a s a l p r o g r a m a IGLESIA DE SANTA MARÍA DE LOS CABALLEROS “LOS DOMINGOS DE SANTA MARÍA” J. S. BACH Suite num. I en sol mayor, BWV 1007, para viola solo Suite num. 1 para violonchelo solo en sol mayor, BWV 1007 Solista: Gérard Caussé, viola Concluidas hacia 1720, las suites para chelo debieron de ser escritas por Bach prácticamente al tiempo que las sonatas y partitas para violín. La evolución lograda por Bach y los resultados obtenidos superan en mucho lo que se venía haciendo en esta materia y género y los intentos en la misma dirección de sus contemporáneos, los que con los cambios de gusto y modas pudo ser la causa del abandono de la misma por la generación siguiente a Bach. Partita num. II en re menor, BWV 527 para violín solo FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Solista: David Grimal, violín 18 Descanso JOHANN SEBASTIAN BACH Trío-sonata num. III, BWV 527 para oboe, viola y contrabajo Solistas: José Manuel González Monteagudo, oboe Natasha Tchitch, viola Philippe Noharet, contrabajo HEITOR VILLA-LOBOS Bachianas brasileñas num. 5 para Soprano y Octeto de violonchelos Solistas: Maria Rodríguez, soprano Violonchelos: Marius Díaz Bárbara Switalska Gregory Lacour aume Fraga Héctor Sánchez Cristina Dulanto Laura Trujillo Las suites para chelo derivan de la suite de danzas de los siglos XVII y XVIII alemanda, courante, sarabanda y gigue-, que Bach amplía con un preludio inicial y el añadido de otra danza -minueto, bourrée o gavotaentre la sarabanda y la giga final. Por su gran variedad, la pieza que más caracteriza a cada suite es el preludio con el que empieza. El de la Suite nº 1 está lleno de energía, igual que la alemanda que lo sigue. La courante tiene un aire muy alegre, la sarabande es profunda y luminosa, los minuetos tienen una serenidad danzante y la giga es como un estallido de luz al final. Por algo el maestro Rostropovich, uno de sus más grandes intérpretes, definió esta suite como la de la 'claridad'. Partita num. 2 para violín solo en re menor, BWV 1004 La primera edición de las Sonatas y Partitas para Violín se hizo en 1802 por Simrok, de Bonn. Más tarde, Schumann las editó con acompañamiento de piano. No se conoce el orden en que las escribió Bach, pero cuando se toca el conjunto se suelen alternar sonatas y partitas en el orden del manuscrito. Todo lo dicho y escrito sobre significados del orden por tonalidades, números o siglas es sólo especulación. Las partitas son suites de danzas de estructura más variada que la habitual. La segunda se inicia por el violín con una honda alemanda, la courante tiene un ritmo punteado, la sarabande es breve y emotiva y la giga desarrolla su bravura a partir de un motivo muy calmado. La obra culmina con la célebre Chacona en re. En ésta, a partir de una sencilla frase de cuatro compases se desarrolla un gran conjunto de 64 variaciones, dividido en tres secciones en los modos menor y mayor, que despliega todos los recursos de Bach para el violín. Culmina con la re-exposición del tema principal en una armonía distinta. Trío-Sonata num. 3 para oboe, viola y contrabajo, BWV 527 Los Tríos-Sonata, BWV 525 a 530 son conocidos como música de órgano. Sin embargo, de los dieciocho movimientos que los componen, menos de la mitad fueron escritos originariamente para ese instrumento. El adagio del tercero, BWV 527 que se escuchará en el concierto de hoy, proviene del movimiento lento del Concierto en la menor para flauta violín y clavicémbalo, cuyos movimientos extremos fueron antes un preludio y fuga para órgano. El primer tiempo del cuarto se encuentra ya instrumentado como triosatz (pieza para trío) para oboe d'amore, viola da gamba y continuo, en funciones de sinfonia (obertura) de la segunda parte de la gran Cantata nº 76. En cuanto a las fases de composición del conjunto, no es segura la opinión de Forkel cuando dice que Bach compuso el conjunto para su primer hijo, Wilhelm Friedemann. En cualquier caso, éste se llevó esta música junto a otras cuando viajó a Dresde en 1773 para hacerse cargo de un puesto en la Iglesia de Santa Sofía. Heitor VILLA-LOBOS Bachianas Brasileiras num. 5 para soprano y 8 violonchelos Comp. 1938 (Aria) y 1945-6 (Dança). Es la más famosa del ciclo de nueve. Su primera parte Aria (Cantilena) está compuesta en 1938, con letra de Ruth Valadares Corrêa, quien la cantó en su estreno público. La letra de la segunda parte, Dança (Martelo), es de Manuel Bandeira, quien la escribió en 1945. En el estreno pudo oírse en la voz de Hilda Ohlin en París, el 29 de octubre de 1947. Una nueva letra para el aria fue escrita por David Nasser y grabada por la cantante Elizabeth Cardoso en 1979. Los productores de Madalena, un encargo suyo a Villa-Lobos, tenían el empeño de que se usara la Bachianas nº 5 como obertura de esta opereta, por lo grande que era su popularidad en 1947. Esto enfadó al autor, que amenazó con volverse al Brasil y suspender la representación. A la vista de esto, los empresarios dieron marcha atrás y la obra se estrenó por fin en 1948. FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 JOHANN SEBASTIAN BACH 19 n DOMINGO, 24 DE JUNIO 2007 22:00 o t a s a l p r o g r a m a PATIO COLEGIO ARZOBISPO FONSECA “RESONANCIAS” Francis POULENC Concierto para dos pianos y orquesta en re menor (París, 07.01.1899; 30.01.1963) Solistas: Katia y Marielle Labeque, piano Descanso FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 MAYTE MARTÍN Cantos para voz y Orquesta de Cámara “ Balada de amor sin nombre “ “ Si te he visto no me acuerdo” “ La mujer del pirata” “No me maltrates la vida “ Letra. Mayte Martín. arrg. J. A. Amargós. Descanso ALEXIS CÁRDENAS CUARTETO Música Latinoamericana Orquesta del Festival 20 Director: Gérard Caussé El padre de Poulenc, Émile, era un hombre de provincias, ferviente católico y admirador de la música de Beethoven y César Franck. Fue uno de los fundadores de Poulenc Frêres, que habría de llegar a convertirse en una de las mayores industrias químicofarmacéuticas mundiales, la compañía RhônePoulenc. De su padre, Francis heredó tanto la inclinación a asistir frecuentemente a la iglesia, como el aspecto tosco de un 'paysan' (campesino, en francés). De Jenny, su madre, un inapreciable regalo: su amor por la música. Francis Jean Marcel Poulenc, vivió desde muy niño una vida realmente cómoda en la residencia familiar cercana al Palacio del Elíseo, donde a los cinco años recibió sus primeras lecciones formales de piano de la mano de su madre, Jenny, pianista aficionada. A los dos, ya había recibido un piano blanco de juguete en el que fingía 'leer a primera vista'. Así pues, la música, como para tantos músicos y compositores, fue para él una experiencia familiar desde la infancia, obteniendo eso que los expertos en neuro-fisiología describen como una correcta formación precoz de las redes de neurotransmisores cerebrales. En 1914, asiste a un concierto en el Casino de París, donde Pierre Monteux dirige La Consagración de la Primavera de Igor Stravinsky, del que Poulenc se convierte de por vida en un admirador incondicional. Este entusiasmo provoca que su tradicionalista padre le espete: 'Pobre chico; tienes un gusto musical bien raro'. Pero Francis guarda fervorosamente sus partituras de Petrushka y La Consagración, del Allegro Bárbaro de Bartók o de las Seis Pequeñas Piezas de Schonberg en versión para piano. Y conoce y aprecia las obras de Ravel y Débussy; sus gustos artísticos son de una sofisticación rara en un quinceañero. En 1915 conoce al pianista español Ricardo Viñes, que se erige en su mentor, introduciéndolo en los círculos de la alta sociedad parisina. A los veinte años, había decidido ser músico, pero su vida emocional distaba de estar bien asentada. En 1930, Poulenc decide dedicar su vida 'al vino, los chicos y la canción' pero no necesariamente en ese orden. Es la época de su asistencia al salón de la residencia de MarieLaure de Noailles, en la que compuso la música del ballet Aubade, que el autor subtituló como 'concierto coreográfico para piano y dieciocho instrumentos', y donde toca sus nuevas obras en presencia de G. Auric, J. Février, P. Picasso o P. Elouard. Ésta es para Poulenc 'la casa de la música', igual que la de Marie-Blanche de Polignac es´la de la pintura', por el profundo conocimiento de esta arte por parte de su anfitriona, según cuenta en el Journal des Melodies. Dos mujeres que llegan a sentir el arte hasta el punto de considerar Noailles a Antonello da Messina (Messina, Italia, 14301479) como un viejo amigo y Polignac a Monteverdi (Baut. Cremona, 15.05.1567; Venecia, 29.11. 1643) como un músico vivo. Por aquellos días, Wanda Landowska le encarga su Concierto Campestre para Clave y le anima en su relación homosexual con el pintor Richard Sanlaire. Concierto para dos pianos y orquesta, en re menor Comp. 1932; estr. Venecia, 05.09.1932. El Concierto para dos Pianos, FP 61, tiene una estructura algo engañosa. Dividido en tres movimientos: Allegro ma non troppo, Larghetto y un Allegro Molto final, tiene la apariencia formal de de una sonata, pero la esencia de la obra es más la de una 'fantasía'. Está escrito bajo la influencia de los dos conciertos de Ravel, especialmente la del Concierto en sol, estrenado en la sala Pleyel en enero de 1932, lo que le sirve para tomarse toda clase de libertades formales. Su norma, por encima del encorsetamiento o la libertad que a unos u otros da la forma, es la sonrisa, el placer, y su apetito por hacer de la música una experiencia sensual. El primer movimiento, pese a su división formal en introducción, desarrollo y coda, atrapa al oyente en una especie de aventura como de película muda, en la que los pianistas siguen tocando valientemente en un contexto de sorpresas y disgresiones surgidas desde la aparente seriedad de su estructura. Al principio, hay un intercambio entre los dos solistas de cuatro notas percutidas a semejanza del final del Cuarto Concierto para Piano de Beethoven. También se refleja en este allegro ma non troppo algo del breve flirteo con la música de tambores africanos que supuso su Rapsodia Negra. El final del movimiento supone la inmersión en un mundo exótico inspirado por la música balinesa de 'gamelang' que pudo oír en la Exposición Colonial del Palacio de Chaillot en 1931. Su segundo movimiento comienza por una réplica íntima de un Andante mozartiano, como una bagatela escrita de forma incluso algo más preciosista que la del propio salzburgués. El tercero resulta un curioso contraste con este larghetto por la influencia de la música de G. Gerswing. © Copyright 2007 by Julián Carrillo Sanz FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 FRANCIS POULENC 21 LUNES, 25 DE JUNIO 2007 n 22:00 o t a s a l p r o g r a m a PATIO DE ESCUELAS 22 FRANCIS POULENC Francis POULENC Sexteto para quinteto de vientos y piano (París, 07.01.1899; 30.01.1963) “ Miro Ensemble “: Julia Gallego, flauta J. Manuel González Monteagudo, oboe Isaac Rodríguez, clarinete Guillermo Salcedo, fagot David F. Alonso, trompa Claudio Martínez-Mehner, piano A lo largo de su vida, Poulenc buscaría consejeros que sostuvieran y desafiaran su propio ego, así como amigos de su misma edad para cubrir la figura de padres hipercríticos, que parecía necesitar tener junto a sí. Es el que desempeñó Georges Auric, considerado como un prodigio musical y literario: Francis le solicitaba su consejo, tomando siempre muy en serio su opinión. Siendo un músico con gran sentido de la medida en su arte, Poulenc cometía excesos que le hacían caer en la escasez; no por sus necesidades, sino por sus lujos. Le gustaba comer, beber y vestir bien. Amaba viajar hospedándose en hoteles de lujo, para bajar a sus salones y mezclarse con lo que hoy ¿o fue ayer? llamaríamos la 'jet-society'; ver y ser visto. O jugar con ellos al 'bridge'-juego en el que tenía como compañero a Serguéi Prokofiev, quien en una pesada ironía a la rusa declaraba que Poulenc pensaría apuntarse a un concurso de bridge patrocinado por un semanario neoyorquino, seguramente porque el premio de 25.000 dólares era más rentable que el pago por sus composiciones de encargo. Descanso DIMITRI SHOSTAKOVICH Trío num. 2 en mi menor, op. 67, para piano, violín y violonchelo Solistas: Teimuraz Janikashvili, violín Justus Grimm, violonchelo Claudio Martínez-Mehner, piano Sexteto para piano, flauta, oboe, clarinete, fagot y trompa Comp.1932; Rev. 1939-40; estr. rev. 1940 La primera versión (incompleta) de esta obra aprovecha su experiencia con el Trío para oboe, fagot y piano, de 1926. La Segunda Guerra Mundial crea en Poulenc una gran aprensión hacia el hecho de escribir nueva música, abandonando en buena medida esta actividad, con la ansiedad confesada de que lo único que le dolía dejar era su piano. Invadido su pensamiento por el temor a desaparecer, se obsesiona por ser un gran compositor, preocupándose muy seriamente por la forma. Re-orquesta la partitura de su ballet Les Biches, que había escrito en 1923 para los Ballets Rusos de Diaguilev, 'por si llega lo peor'. Es el momento en que revisa y completa la partitura de su Sexteto para piano y quinteto de vientos, de 1932. El Sexteto tiene una clara influencia de la música de jazz, aunque no por el tipo de sonido, sino por la necesidad de libertad e individualismo: algo que Francis añora durante esos años, cuando en su correspondencia confiesa: 'No me gusta esta época en la que uno raramente se siente libre. Pero quiero a alguna gente en este mundo... Si al menos tuviera una fe, incluso una negativa, tendría algo. Pero no tengo ninguna en absoluto. Por supuesto estamos en una época en la que el buen humor apenas basta para arreglar algo.' La nueva versión del sexteto es un proyecto atractivamente cálido y cordial. El primer movimiento es una especie de tocata, con un clasicismo muy al modo de Stravinski, como el segundo, andantino, con una clásica estructura lento, rápido, lento. El final, prestissimo, es una variante de rondó. Pero lo más interesante de este sexteto no es su estructura, apenas variada de la más clásica obra en tres movimientos, sino el ambiente creado por las melodías que el autor enmarca en ella. Dimitri SHOSTAKOVICH (San Petersburgo, 25.09.1906; Leningrado 1, 09.08.1975) Hace unos años, a la salida de un concierto, un buen amigo, profesor en la orquesta que acababa de tocar una de las sinfonías de Shostakovich me comentaba completamente abatido por el esfuerzo y la tensión del tarbajo que acababa de realizar: 'No entiendo cómo este hombre ha podido escribir quince sinfonías, quince cuartetos y tantas obras más, creando una música tan terrible, tan desoladora como ésta no se suicidó'. La respuesta que le di, seguramente, estaba implícita en la pregunta: 'Precisamente por la liberación que le suponía escribirla'. Y es que el poder terapéutico de la música va más allá de su mera audición. Además de ser el oficio con el que se gana la vida, el arte permite al creador expresar sus sensaciones vivencias y sentimientos mediante un medio no hablado, que la palabra se queda muy, muy corta cuando las emociones son profundas; como lo son el amor, la alegría; como lo son, y más, la tristeza, la melancolía, el desamor. Trío num. 2 en mi menor, op. 67, para violín, violonchelo y piano Comp. Ivanovo, 1944; estr. 15.11.1944, Leningrado En 1927, a los 21 años, Shostakovich conoce a Iván I. Sollertinski, musicólogo y científico, de 25. Ambos amigos pasaron, evacuados junto a sus familias en Kuibisev, gran parte de la Segunda Guerra Mundial. A últimos de 1943, Dimitri es hospitalizado en Arkangelskoe con unas fiebres tifoideas, viviendo en Ivanovo, cerca de Moscú, al salir del hospital. El director del Conservatorio de Moscú, Visharion Shebalin, ofrece por mediación de Shostakovich un puesto en el Conservatorio a Sollertinski que éste acepta, con la idea de empezar las clases a mediados de febrero de 1944. En plenos preparativos para su traslado, Sollertinski muere de un fallo cardiaco el 11 de febrero. Su muerte afecta seriamente a Shostakovich, quien escribe a su viuda: 'Querida Olga: no puedo expresar con palabras el dolor que he sentido al recibir la noticia de la muerte de Iván Ivanovich. Iván I. era mi amigo más querido (...) Siempre tuve el convencimiento de que Iván I., con su mente privilegiada, su claridad de ideas y su inagotable energía estaba muy cerca de mí. Su ausencia es un golpe muy amargo. Iván I. y yo hemos hablado muchísimo y casi de todo. Hablábamos también (...) acerca de la muerte. Los dos la temíamos y a los dos nos aterraba. Amábamos la vida, pero sabíamos que antes o después tendríamos que dejarla' El 15 de febrero Shostakovich empieza a escribir el Trío en mi menor, con la dedicatoria 'A la memoria de Iván Ivanovich Sollertinsky'. Necesitaba hacerlo; el dolor se lo exigía. No es de extrañar que la introducción marcada como andante, del movimiento inicial sea un lamento tan lacerante para quien lo escucha con un mínimo de sensibilidad. Apenas susurrado, el canto del violonchelo, en unos armónicos artificiales tocados con sordina, lleva muy adentro del oyente una fuerte y rara emoción. De ésas que se hacen piedra en el pecho y lija en la garganta. De ésas que sólo permiten respirar bien hondo cuando se hacen manantial en los ojos. Tras esta preparación de los ánimos, el movimiento continúa -moderato con motocon una fuga de fúnebre solemnidad que expone el primer tema de un magnífico primer tiempo de sonata. El segundo movimiento es un scherzo señalado como marcatissimo, pesante en el que se pone de manifiesto toda la dura ironía característica de la música de Shostakóvich. El tercero, largo, passaaglia, reproduce el clima inicial del trío, pero con un aire más sereno y resignado: el hondo dolor del moderato ha sido pasado por el filtro del scherzo y la respuesta es más resignada, más calma. La referencia a un tema de la Novena Sinfonía de Mahler es otro homenaje a Sollertinski a través de su compositor favorito, que él había descubierto para Shostakovich. El allegretto final es un rondó nacido una sugerencia de música judía, tantas veces sutilmente aludida por Shostakovich en épocas de genocidio de tal etnia. En la coda final, Shostakovich crea de esos ambientes apenas audibles que tan magistralmente sabe utilizar el autor, como una invitación a un homenaje al amigo muerto con esa parte tan esencial de la música, el silencio. NOTA 1. Son los nombres oficiales de la misma ciudad en distintos momentos. © Copyright 2007 by Julián Carrillo Sanz FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 “MÚSICA DE CÁMARA NUM. 3” 23 MARTES, 26 DE JUNIO 2007 n 22:00 o t a s a l p r o g r a m a PATIO COLEGIO ARZOBISPO FONSECA “CONCIERTO ROMÁNTICO” Richard STRAUSS (1864-1949) “Las travesuras de Till Eulenspiegel“, Op. 28 “Las travesuras de Till Eulenspiegel”, op. 28 Solistas: Teimuraz Janikashvili, violín Isaac Rodríguez, clarinete Guillermo Salcedo, fagot David F. Alonso, trompa Philippe Noharet, contrabajo En 1895 el aún joven músico bávaro, que ya había estrenado De Italia, Don Juan y Muerte y transfiguración, concluye la composición de Till Eulenspiegels lustige Streiche, donde desarrolla un lenguaje que -a semejanza de Mahler- alía comicidad, ironía y truculencia. La habilidad constructiva straussiana elabora en esta ocasión un trepidante poema sinfónico que, respetando la rígida estructura de rondó, constituye un ejemplo consumado de música programática. El argumento de este Till “Espejo de lechuza” procede de un viejo relato original de Flandes y el norte de Alemania que describe las aventuras de un irreverente bufón que vivió en la primera mitad del siglo XIV y murió hacia 1350 en Molln (donde está su presunta tumba), cerca de Lübeck, víctima de la peste. Aunque a raíz de su estreno Strauss rechazó redactar un programa aclaratorio, una publicación posterior suministró la información precisa para seguir las extravagantes peripecias de su protagonista. Tras el “érase una vez” a cargo de los violines, Till aparece personificado por un tema en la trompa que, más tarde, pasa al clarinete constituyendo el estribillo del rondó. A partir de entonces, el retrato sonoro de sus hazañas cobra vida en una orquesta de deslumbrante plasticidad: Till irrumpe a caballo en un mercado destrozando todo a su paso; con hábito de clérigo arenga a la multitud; como empedernecido seductor corteja a las jóvenes… y así sucesivamente hasta que su comportamiento provoca una venganza colectiva. Es detenido, juzgado, condenado a muerte y colgado mientras un último trino de las flautas representa su postrero suspiro. “Aunque el humor es inmortal”, parece decir la breve coda FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 MAURICE RAVEL 24 Concierto en Sol, para piano y orquesta Solista: Jean-Phillippe Collard, piano Descanso PAUL HINDEMITH ”Trauermusik” Para viola y orquesta de cuerdas Solista: Gérard Caussé, viola BENJAMÍN BRITTEN Serenada para tenor, trompa y orquesta de cuerdas, Op. 31 Solistas: Agustín Prunnell Freind, tenor Herve Joulain, trompa Orquesta del Festival Director: Gérard Caussé que, cerrando el círculo, retoma con dulzura el tema del inicio antes de explotar la última risotada orquestal. El conocido arreglo para violín, clarinete, trompa, fagot y contrabajo que hoy escuchamos -publicado con el título de Till Eulenspiegel einmal anders! y estrenado en 1954- es obra del compositor y musicólogo vienés Franz Hasenöhrl (1885-1970). Maurice RAVEL (1875-1937) Concierto para piano y orquesta en sol mayor El refinadísimo catálogo orquestal raveliano concluye con sus dos conciertos pianísticos, tan hermosos ambos como disímiles en el fondo y en la forma, concebidos simultáneamente entre finales de 1929 y 1931. Si en el Concierto para la mano izquierda dominan las sonoridades abruptas, los tonos oscuros y unos acusados efectos jazzísticos, el Concierto para piano en sol mayor es, como apuntaba Roland-Manuel en su temprana biografía del músico de Ciboure, “una diversión de virtuoso, brillante, clara y ligera, de relieves agudos”. Ravel, que había tenido intención de titularla en un principio Divertimento, concibió la obra al más puro estilo clásico de Mozart y Saint-Saëns pues pensaba que “la música de un concierto puede ser alegre y brillante y no es necesario que pretenda ser profunda o busque efectos dramáticos”. El vehemente impulso rítmico de los movimientos extremos -Allegramente y Presto, con predominio de los instrumentos de viento- contrasta con la serenidad contemplativa del memorable Adagio assai central, página exquisita modelada -como confesó su autor a Marguerite Long, dedicataria de la partitura y su primera intérprete- “de a dos en dos compases, con ayuda del quinteto con clarinete de Mozart”. Paul HINDEMITH (1895-1963) “Trauermusik” para viola y orquesta de cuerdas La condición de gran intérprete de viola -fue fundador y miembro del Cuarteto Amar- influyó de forma notable en la confección del imponente catálogo de Paul Hindemith. Cuatro sonatas para viola sola, tres sonatas para viola y piano y tres partituras con orquesta y viola solista -la Kammermusik nº 5, la Konzertmusik y el concierto inspirado en antiguas canciones alemanas Der Schwanendrehercorroboran esa querencia. A este legado debe añadirse la más breve de las piezas concertantes compuestas por el músico de Hanau para su instrumento, la “Trauermusik” para viola y cuerdas. El 19 de enero de 1936 Hindemith -alejado de su Alemania natal ante la desconfianza que su pasado radicalismo estético suscitaba entre la jerarquía nazi- se encontraba en Londres para presenciar el estreno de su reciente concierto para viola. Cuando al día siguiente murió el rey Jorge V, el músico, presionado por la BBC y con el tiempo limitado a seis horas, hubo de componer algo que pudiera reemplazar al alegre Schwanendreher previsto. El resultado fue esta Trauermusik (Música de duelo o Música fúnebre), obra austera y resignada que desarrolla su concentrado discurso de apenas nueve minutos en cuatro secciones encadenadas (Langsam-Ruhig bewegt-Lebhaft-Sehr langsam) y concluye con el coral “Vor deinen Thron tret'ich hiermit”. Benjamin BRITTEN (1913-1976) Serenata para tenor, trompa y orquesta de cuerdas, op. 31 Dentro de la valiosa serie de ciclos de canciones para voz y orquesta compuestos por Britten entre 1928 (Cuatro canciones francesas) y 1958 (Nocturno), la Serenata para tenor, trompa y cuerdas ocupa un lugar sobresaliente tras Las iluminaciones de 1939, sobre textos de Rimbaud. De regreso a Inglaterra tras la estancia estadounidense que lo alejó de su tierra natal entre 1939 y 1942, Britten emprendió la tarea de traducir musicalmente -a la espera de recibir un libreto adecuado para su ópera Peter Grimes- un conjunto de seis poemas de autores ingleses de los siglos XV a XIX. Pastoral, Nocturno, Elegía, Treno, Himno y Soneto son los títulos de las secciones vocales -enmarcadas por un Prólogo y un Epílogo a cargo de la trompa- que tienen como eje temático común la celebración del crepúsculo, la llegada de la noche, del sueño y de la muerte. Charles Cotton, Alfred Tennyson, William Blake, un anónimo del siglo XV, Ben Jonson y John Keats son los autores respectivos de los textos elegidos por Britten, destinados a ser cantados por el tenor Peter Pears, su fiel compañero durante décadas. La obra fue también escrita para otro intérprete británico excepcional, el malogrado trompista Dennis Brain. Ambos la estrenaron, bajo la batuta de Walter Goehr, el 15 de octubre de 1943 en el Wigmore Hall londinense. Juan Manuel Viana FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 RICHARD STRAUSS 25 JUEVES, 28 DE JUNIO 2007 n 22:00 o t a s a l p r o g r a m a PATIO COLEGIO ARZOBISPO FONSECA “RECITAL DE PIANO” Gabriel FAURÉ (1845-1924) GABRIEL FAURÉ Barcarolle num. 1 en la menor, op. 26 Barcarolle num. 6 en mi bemol mayor, op. 70 Nocturne num. 4 en mi bemol mayor, op. 36 Impromptu num. 2 en fa menor, op. 31 MAURICE RAVEL FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Pavane pour une Infante défunte Miroirs Oiseaux tristes Alborada del Gracioso 26 Descanso MODEST MOUSSORGSKY “ Cuadros de una Exposición” Promenade Gnomus Promenade Le vieux Château Les Tuileries Bydlo Promenade Ballet des poussins dans leurs coques Samuel Goldenberg et Schmuyle Promenade Le marché de Limoges Catacombes Cum mortuis in lingua mortua La Cabane sur des pattes de poule La Grande porte de Kiev Barcarola num. 1 en la menor, op. 26. Barcarola num. 6 en mi bemol mayor, op. 70. Nocturno num. 4 en mi bemol mayor, op. 36. Impromptu num. 2 en fa menor, op. 31 Mixtura irrepetible de emoción, lirismo, encanto y ligereza, el universo sonoro de Fauré está íntimamente ligado al piano. Tan desbordante de belleza como sutilmente innovadora, la música pianística del músico de Pamiers ocupa un lugar estético único e inimitable, a modo de puente entre Schumann y Debussy, entre el arte de su admirado Chopin y el de Ravel, uno de sus más distinguidos alumnos. Los ciclos de barcarolas y nocturnos, coincidentes en la cronología y en el número de piezas que los integran, recorren de principio a fin toda la vida creadora del músico francés. Las barcarolas constituyen, en palabras de Halbreich, “una especie de contrapunto más animado y más ligero a los nocturnos”. Como éstos, son trece y fueron compuestas entre 1882 y 1920. Algo más breves y de construcción menos elaborada que los nocturnos, presentan sin embargo su misma fluidez y sensualidad, su mismo refinamiento en la escritura y capacidad para el claroscuro. Fauré amaba los espacios acuosos, en especial contemplar los juegos de luz y sombras sobre la superficie de un lago. Venecia, Lugano y, en sus años finales, la preciosa villa de Annecy fueron algunos de sus lugares predilectos. Con su repetitivo balanceo, la Barcarola nº 1 -marcada Allegro moderato- parece evocar esas tornasoladas ondulaciones acuáticas. Fechada en 1896, la Barcarola nº 6 -Allegretto vivo- anuncia ya, pese a su rico cromatismo, la sobriedad del estilo de madurez de su autor. La composición de los trece nocturnos se desarrolla entre 1875 y 1921. La poesía del atardecer, el silencio y la soledad asoman entre las notas de estas páginas admirables en las que la capacidad de Fauré para la introspección alcanza sus más altas cimas. El Nocturno nº 4, de 1884, es un Andante molto moderato que expresa según Halbreich “la dicha del amor compartido”. Un sonido de campanas lejanas, en su sección central, subraya la belleza de sus transparentes melodías. La serie de impromptus está constituida por sólo cinco piezas, fechadas entre 1881 y 1909. Marcado Allegro, el Segundo de la colección es una página juvenil de 1883; cascada de notas definida por Jankelevitch como “pieza de virtuosismo, de movimiento vivo y aspecto brillante, ocasionalmente oscurecida por una poesía nocturna que se esconde bajo las apariencias de la improvisación”. Maurice RAVEL (1875-1937) Pavane pour une Infante défunte Miroirs Oiseaux tristes Alborada del Gracioso Como en el caso de su maestro Fauré, el teclado constituye un capítulo trascendental en el escueto catálogo de Ravel. La nostálgica Pavana para una infanta difunta, obra temprana (1899) y aún relativamente impersonal, sería más tarde juzgada por su autor con excesiva severidad: “Percibo bien sus defectos: la influencia de Chabrier, demasiado flagrante y la forma harto pobre”. Aunque la herencia de Fauré autor en 1887 de otra encantadora Pavana no menos célebre- también resulta palpable, la delicada página raveliana ha gozado siempre de los favores del público, sobre todo en su versión para orquesta efectuada por el compo- sitor en 1910. Dedicada a la princesa Edmond de Polignac, la obra fue estrenada por Ricardo Viñes el 5 de abril de 1902 en la parisina sala Pleyel. Junto al posterior Gaspard de la nuit, fechado en 1908, Miroirs (Espejos) supone la cumbre absoluta del pianismo raveliano. Integrado por cinco piezas, el ciclo fue compuesto en París entre 1904 y finales de 1905. La primera página, cronológicamente, es la estática Oiseaux tristes -segunda en el orden definitivo de la colección y dedicada asimismo a Viñes- en la que Ravel evoca “a pájaros perdidos en el torpor de un bosque muy umbroso durante las horas más cálidas del estío”. La pirotécnica Alborada del gracioso (su título original en español) está dedicada a Calvocoressi, otro de los íntimos amigos en el círculo de los Apaches. Roland-Manuel recuerda su “virtuosismo cortante y seco” en contraste con “los arrebatos extáticos de la melopea amorosa, que interrumpe los bordoneos furiosos de las guitarras”. La resplandeciente orquestación de 1918 subraya la irresistible atracción de Ravel por los ritmos frenéticos y los colores sensuales de la música española. Modest MUSSORGSKY (1839-1881) “Cuadros de una exposición” En 1873, Victor Hartmann, pintor, arquitecto y gran amigo de Mussorgsky, fallece a los 39 años. Un año más tarde se organiza una exposición en San Petersburgo para honrar su memoria que muestra algunas de sus acuarelas, dibujos, bocetos y proyectos. Como recuerdo al artista desaparecido, el autor de Boris Godunov compone en apenas tres semanas, entre junio y julio de 1874, los Cuadros de una exposición, ciclo que evoca sus impresiones personales ante diez de las obras de Hartmann. En lugar de describir musicalmente los cuadros originales, Mussorgsky prefiere imaginar sus propios escenarios. Los títulos originales, cuidadosamente elegidos por el músico, recurren a seis idiomas: ruso, francés, italiano, polaco, latín y alemán. La obra se articula como una suite compuesta por diez secciones en las que un interludio de ritmo irregular -ese “Paseo” inicial que reaparece, intercalado esporádicamente hasta en cinco ocasiones, siempre con diferentes indicaciones de tempo- representa el desplazamiento del corpulento compositor ante las obras expuestas en la galería. Todos los temas predilectos de su autor encuentran feliz acomodo en estos pentagramas magistrales: las escenas rurales y campesinas (Bydlo, Samuel Goldenberg y Schmuyle, El mercado de Limoges), lo fantástico (Gnomus, La cabaña sobre patas de gallina), la infancia (Tullerías, Ballet de los polluelos en su cascarón), la muerte (Catacombae: Sepulcrum romanum, Cum mortuis in lingua mortua) o la tradición ortodoxa de la vieja Rusia, acompañada de sonidos de campanas (La Gran Puerta de Kiev). Jamás interpretados en público en vida de Mussorgsky, los Cuadros de una exposición -obra grandiosa de ejecución extremadamente compleja y exigente- cobraron nueva vida gracias a la portentosa orquestación realizada por Ravel en 1922. Juan Manuel Viana FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 solista: Jean-Philippe Collard 27 VIERNES, 29 DE JUNIO 2007 n 22:00 o t a s a l p r o g r a m a PATIO COLEGIO ARZOBISPO FONSECA “NOCHES DE VERANO” Obertura - Sueño de una noche de verano, op. 21 ARNOLD SHÖNBERG FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 “La noche transfigurada“ op. 4 para sexteto de cuerdas 28 Solistas: David Grimal, violín Patricio Gutiérrez, violín Gérard Caussé, viola Natasha Tchitch, viola Justus Grimm, violonchelo Marius Díaz, violonchelo Descanso HÉCTOR BERLIOZ “ Las noches de verano “ ” op. 7 para mezzosoprano y orquesta” Solista: Nora Gubish Orquesta del Festival Director: Gérard Caussé Felix MENDELSSOHN BARTHOLDI (Hamburgo, 03.02.1809; Leipzig, 04.11.1847) Un breve recorrido por los primeros años de a vida de Jacob Ludwig Felix Mendelssohn nos da una idea de lo que fue ésta, junto con una notable sensación de vértigo, por la rapidez con que se suceden en ella los acontecimientos. Felix nace en Hamburgo, en la familia judía de un banquero, Abraham, que se traslada a Berlín cuando Felix tiene dos años; a los seis, da sus primeros pasos en el piano, guiado por su madre; a los siete es bautizado, viaja a París y empieza a estudiar con Marie Bigot; a los nueve, debuta en un concierto de música de cámara; a los diez, entra en el Coro de la Academia de Canto, y empieza a estudiar composición con Zelter; a los once y doce años, sus composiciones son realmente abundantes; a los trece, visita Suiza, conoce a Weber y a Benedict, y Zelter lo lleva a Weimar para que conozca a Goethe; a los catorce tiene su propia orquesta privada y continúa componiendo en notable cantidad música de gran calidad. Pocos compositores en la historia de la música han tenido una vida tan aparentemente fácil y lujosa como él y pocas músicas han sido víctimas como la suya de esa fama de compositor digamos 'señorito'. Tras la muerte de Beethoven (26.03.1827), se creó el concepto 'La Gran Música Alemana' por unos cuantos personajes de la vida cultural vienesa, como Hegel y el crítico Hanslick, con la inestimable colaboración de Clara Schumann, personaje mitómano e intolerante donde los haya. Partiendo de la elevación de Beethoven a los altares del mito, como punto de partida de la figura del artista-héroe -que él mismo contribuyó a crear- 1, defendieron a capa y espada la conveniencia del uso de la crítica como su mejor instrumento de propagación y afirmación de sus ideas. Sin embargo, pocos compositores han sido capaces de desarrollar una labor creativa y musicológica como la suya 2. Obertura de Sueño de una Noche de Verano, op. 21 Comp.1826; estr.; ed., Una multitud de temas, un gran número de ideas distintas están entretejidas como un todo. Obra de tránsito a la madurez de un compositor trabajando en lo más alto de su inspiración. Entretejidas. Tras los acordes de apertura, tenemos el tema feérico en mi menor, seguido por otro de carácter mucho más ceremonioso en mi mayor que nos sugiere de forma casi visual la corte de Teseo. Luego llega el tema sentimental de los amantes, el vivo retrato del cortejo de los campesinos. Toda esa variedad de materiales en una equilibrada forma de primer tiempo de sonata. Con un largo e imaginativo desarrollo y una coda de gran belleza en la que las hadas tienen la última palabra y la extensión de su hechizo hasta el palacio de Teseo. La orquestación está llena de maravillosos momentos particularmente la escritura del viento-madera en el desarrollo y el tranquilo timbal en la nota de la dominante del acorde final. Diecisiete años más tarde, cuando Felix escribió el resto de la música incidental para El Sueño de una Noche de verano, quedó demostrada la adecuación de la obertura y hasta podríamos pensar que nunca hubo una mayor sintonía entre música y drama. Arnold SCHÖNBERG (Viena, 13.09.1874; 13.07.1951) Nacer en una familia judía y además modesta, marcaría la vida de Arnold Schoenberg1. Comenzó a componer música a los ocho años, de forma autodidacta, al tiempo que empezaba a estudiar violín. Luego dominó viola y chelo, tocando su propia música en grupos de cámara. Oskar Adler, su asiduo compañero en aquellos conciertos, le enseñó los principios de la armonía. Al morir su padre comenzó a trabajar en un pequeño banco, abandonando la escuela. Por aquellos años empezó a tocar en una orquesta de aficionados dirigida por Alexander von Zemlinski, su único maestro reconocido y su cuñado tras casarse con Mathilde, de la que tuvo dos hijos. De 1901 a 1903, en Berlín trabaja como orquestador de operetas y director de una orquesta de cabaret, volviendo a Viena en 1903. Si bien se ha considerado a Schonberg un revolucionario, en realidad su trabajo se basa en la tradición musical, que siempre incluyó la evolución. Tras su paso por el cromatismo wagneriano, fue haciendo progresivamente complicada su armonía -su Tratado de armonía es de 1911-, lo que le llevó a la atonalidad y posteriormente al dodecafonismo, cuyas leyes terminó en 1923, año de la muerte de Mathilde. Su segundo matrimonio en 1924 y la oferta de un puesto como profesor de composición en la Academia de Artes de Berlín lo llevan a la capital alemana, volviendo a Viena en 1915, de donde se exilia a París a la llegada del régimen nazi en 1933 y posteriormente, en 1934, a EE.UU. En 1941 se nacionalizó estadounidense, retirándose por enfermedad en 1946 y muriendo en 1951. Verklärte Nacht (Noche transfigurada) op. 4 Comp. Viena, 1899 (sexteto de cuerda; estr. Viena, 1902); 1919 (versión orquestal, estr. 1919) y 1943 (íd. revisada) Si las primeras obras del catálogo de Schonberg son fruto de su pasión por la poesía -sus op. 1, 2 y 3 son tres conjuntos de canciones, no lo es menos Noche Transfigurada, primera obra no vocal de Schonberg, basada en el poema homónimo de Richard Dehmel2, pese a ser una de las 22 obras sin texto de su catálogo de 50. La primera redacción de la Noche Transfigurada recoge por su formación de sexteto la tradición de la música de cámara de Brahms, integrándola en las nuevas corrientes programáticas de los poemas sinfónicos de R. Strauss y la sensualidad desbordante del Tristán wagneriano. La obra conserva la estructura en cinco estrofas del poema de Dehmel, tocándose sin solución de continuidad. Las secciones impares: preludio, Interludio (pesante, grave) y postludio (adagio) sugieren la marcha de la pareja de amantes en la noche, en una sucesión de temas sugerentes de gran sensualidad. Esta profunda correlación con el texto se escucha también en la segunda sección, molto rallentando, que expresa la agitación de la mujer al confesar su estado y la respuesta comprensiva del hombre expresada por el canto sereno de los violonchelos 3. La Noche Transfigurada es sin duda la primera obra maestra del músico que, sin haber asistido nunca a un conservatorio, más habría de influir en la música del s. XX. H. BERLIOZ (La Côte-Saint-André, Francia, 11.12.1803; París, 08.03.1869) La familia Berlioz es conocida desde el s. XVII en la región entre Grenoble y Lyon, en el departamenteo de Isère. De origen menestral -sus más remotos ascendientes eran curtidores- los ascendientes más directos de Berlioz por línea paterna ejercieron la abogacía, como su abuelo; o la medicina, como su padre, tambien llamado Louis-Joseph, un probo ciudadano que ejerció la alcaldía de La Côte-SaintAndré en 1817. Louis-Héctor Berlioz fue el primogénito de seis hermanos y su padre se encargó directamente de su educación. Hombre de vasta cultura y grandeza de miras intelectual, inició la formación musical de Héctor y su gusto por la lectura: los paisajes imaginados habrían de ser un motor de su creatividad en su vida. A los doce años comenzó a estudiar flauta con el Método de Devienne, tocando los conciertos para flauta de Drouet; también llegó a cantar leyendo la partitura. En esos días, los Berlioz se unieron a otras familias de la localidad para contratar a un profesor de música, Imbert, que dotó de cierta metodología a estos estudios. Desde el principio de sus estudios musicales mostró una clara tendencia a la composición y aplicando lo aprendido en los tratados de armonía de Catel y Rameau. Pronto escribió un sexteto para cuerdas, flauta y corno, para un cuarteto local al que se agregaron el propio Berlioz como flautista y el hijo de Imbert, que acabó suicidándose; esto hizo que sus siguientes composiciones, hoy desaparecidas, fueran dos quintetos con flauta. La llegada de Dorant, un nuevo profesor en sustitución de Imbert, amplió sus conocimientos, aprendiendo a tocar la guitarra y FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 FÉLIX MENDELSSOHN 29 30 componiendo acompañamientos para romances de varios autores como Boildieu y otros, o componiendo canciones sobre poesías bucólicas y sentimentales. Su precoz amor no correspondido desde los doce años por Estelle Duboeuf, una vecina seis años mayor que él a la que llamaba 'Stella Montis' -La Côte-St-André esta a los pies de los Alpes y eso llenaba de sentimientos al joven Hector-, infundió en él una vena sentimental y apasionada desde la adolescencia. O sea, lo que le pasa a cualquier chaval de esa edad, pero multiplicado por sus tendencias artísticas, que empezaron a disgustar al Dr. Berlioz previendo la falta de vocación científica de su hijo. En marzo de 1821 se diplomó como bachiller en Grenoble, trasladándose a París en octubre para su ingreso en la Facultad de Medicina. Su firme decisión de seguir los pasos de su padre como médico se disolvió como un azucarillo tras su primera experiencia en la sala de disección, que narra muy gráficamente en sus Memorias: “Al ver esa terrible carnicería [cuya descripción por el pobre novato en la materia ahorro a Vdes sustituyéndola con esta más breve disgresión], se adueñó de mí tal sensación de repugnancia que salté por la ventana de la sala de disección y huí a mi casa, como si la Muerte y todo su séquito estuvieran pisándome los talones” esos años estudia composición con el viejo Lesueur y vende sus primeras obras. También obtiene su primer fracaso, al suspenderse la ejecución de su Misa, prevista para el 28 de diciembre de 1824 en la Iglesia de St Roch, que le valdría una gran reprimenda y la supresión de su asignación por parte de su padre. El éxito de su estreno el 10 de junio de 1825 y la publicación de comentarios positivos en siete diarios no impidieron el repudio de su familia. De 1827 al 29, compone la Sinfonía Fantástica, tres cantatas -La Mort d'Orphée, Herminie, y Cléopâtre- optando sin éxito con ellas al Premio de Roma, que obtiene en 1830 con Sardanapale. Reside en Roma en 1830-31, regresando a Francia en 1832. En años sucesivos,se suceden hitos importantes en su vida y obra: se casa con Harriet Smithson (1833); compone Harold en Italia, para viola y orquesta, por encargo de Paganini y escribe crítica musical para el Journal des Débats (1834); asume la dirección de sus propios conciertos; compone la Grande Messe des Morts (1837); Benvenuto Cellini (1837; representada sin éxito en 1838); compone Romeo y Julieta y conoce a Wagner (1839). Les Nuits d´Eté op. 7 Comp. 1840-41/1856 estr. ; ed. 1841/1856 4 En dos años llegó a obtener su 'Baccalauréat en Sciences Physiques', pero sus aspiraciones científicas no tenían un horizonte más lejano. París sedujo al joven Berlioz; la ópera lo fascinó, especialmente las de Gluck. La obra de Beethoven casi llegó a desplazarla en sus preferencias; detestó la ópera italiana, con especial aversión a la de Rossini y descubrió que la Biblioteca del Conservatorio estaba abierta al público, estudiando y copiando partituras de su amado Gluck y otros autores. En En 1840, Berlioz compone su descomunal Grande Symphonye Funèbre et Triomphale para banda de 200 instrumentos, en conmemoración del décimo aniversario de la Revolución de 1830. Situada bien lejos de las estrategias sinfónicas de Berlioz, esta obra de encargo responde a la tradición del ceremonial público instaurada en Francia desde la Revolución. De algún modo, parece que 'empachó' a Berlioz, devolviéndole al cultivo de las formas más reducidas. En mayo compone la música para canto y piano sobre el poema amoroso Villanelle, de la colección de poemas de Théophile Gautier La Comédie de la Mort, la más hermosa canción compuesta por Hector hasta el momento. Tres estrofas de delicada variación, con el piano tocando ocho ligeros acordes por compás, repetidos al estilo del segundo movimiento de la Octava de Beethoven mientras la izquierda dibuja una alegre melodía. Villanelle tiró en la mente de Berlioz del resto de los poemas hasta completar la serie para canto y piano, que sería orquestada en 1856. La versión orquestal de Le Spectre de la Rose comienza con una introducción de gran porte escrita en ocho compases. Su música se desarrolla de forma continua, sin repetición del tema inicial, reflejando de forma dramática el ambiente misterioso del poema de Gautier hasta la conmovedora sencillez del recitativo final. La parte de la orquesta difiere más de la original para piano en Sur les Lagunes (Lamentation). Dos notas enmarcan con un ritmo obsesivo el dolor de la letra Ma belle amie est morte... como en un doblar de campanas. Estas notas van siempre a un acorde en modo menor preñado de tristeza. El final de cada estrofa, Ah!, sans amour s'en aller sur mer... es como una recaída en el dolor del amor perdido y, al final de la canción, el duro reconocimiento de la soledad. No menos melancólica es Absence. La estrofa prolongada durante quince compases es una forma de enunciado completo de ese sentimiento que perfora más allá de la nostalgia; los otro dos fragmentos que aparecen -el segundo de ellos una variante del primero- tienen un aire más entre queja y lamento. La desesperación del poeta aumenta, si cabe, en Au Cimetière: Clair de Lune. Los acordes simples como losas; el cantante à un quart de voix evoca el pasado y la música se anima en el recuerdo hasta que se muestra una aparición en forma de texturas de la cuerda en armónicos, y el choque de unas disonancias que se mantienen hasta el fin de la pieza. Pero la vida sigue y el poeta recupera la luz en L'Ile Inconue: una luminosa barcarola sobre la que Berlioz proyecta su espíritu viajero y sus deseos juveniles de conocer lugares exóticos, mundos lejanos y océanos de islas desconocidas y playas desiertas. o t a 2. Felix fue el redescubridor y divulgador de la Pasión Según San Mateo de Bach (bajo su dirección se ejecutó por primera vez desde la muerte de éste, el 11 de marzo de 1829) y de gran parte de su obra. 3. Aunque su apellido era en origen Schönberg, respetamos aquí el cambio de ortografía, realizado por el propio Schoenberg al huir de los nazis como muestra de su rechazo por lo alemán. 4. Texto del poema de Dehmel: Dos personas caminan por la pelada, fría arboleda; la Luna los acompaña, ellos la contemplan. La Luna viaja sobre los altos robles; ni una nube oscurece la luz del cielo, hacia la que suben las negras copas de los árboles. Una voz de mujer dice: Llevo en mi seno un niño y no es tuyo; en pecado camino junto a ti. Profundamente he delinquido contra mí. a l p r o g r a m a Ya no creía en la felicidad y tenía un gran anhelo por una vida fructífera, por la felicidad y la responsabilidad de ser madre; así que me atreví y, trémula, dejé que un extraño abrazase mi cuerpo y quedé encinta de él. Ahora la vida se ha vengado, ahora que te he encontrado. Ella avanza con torpe paso. Mira hacia arriba: la Luna los acompaña. Su oscura mirada se inunda de luz. Una voz de hombre dice: NOTAS 1. En 1802, la sordera de B. se agrava y el alcoholismo le lleva a crisis depresivas: se oscurece el horizonte de su gran ambición: que la Historia le reserve un lugar preeminente como artista-héroe. El 6 de octubre escribe el llamado “Testamento de Heiligenstad”: una carta dirigida a sus hermanos en la que se queja amargamente de que la sordera le impide desarrollar su vida social como quisiera. Redactada para ser leída después de su muerte -de ahí su nombre-, cita expresamente varias veces sus ideas suicidas. s Que la criatura que has concebido no sea una carga para tu alma. ¡Oh, mira, con qué fulgor brilla el universo! En todo hay un resplandor; estás conmigo a la deriva en un frío océano, mas una especial tibieza flamea de ti hacia mí, de mí hacia ti. Esto transfigurará al hijo del otro; por mi lo llevarás, desde mí; me has traído el fulgor; de mí mismo has hecho un niño. Él abraza las robustas caderas de ella. Sus hálitos se unen en la brisa. Dos personas caminan por la elevada, clara noche. 5. Sin embargo, el propio Schoenberg decía de ella que 'no ilustra ni la acción ni el drama, sino que se ciñe a la pintura y descripción de los sentimientos humanos. Yo creo que, debido a esto, puede ser apreciada como música pura”. 6. En 1840-41, Berlioz escribe la primera versión de las canciones, para mezzo soprano o tenor y piano. En 1856, la versión orquestal. © Copyright 2007 by Julián Carrillo Sanz FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 n 31 SÁBADO, 30 DE JUNIO 2007 n 22:00 o t a s a l p r o g r a m a PATIO DE ESCUELAS MAURICE RAVEL FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 “ Introducción y Alegro “ para arpa solo y septeto en sol mayor Solistas: Laura Vidouta, arpa Svetlin Russev, violín Jennifer Moreau, vioín David Quiggle, viola Marius Díaz, violonchelo Julia gallego, flauta Isaac Rodríguez, clarinete W. A. MOZART Quinteto para trompa y cuerdas en mi bemol mayor. K 407 Solistas: Herve Joulain, trompa Svetlin Russev, violín David Quiggle, viola Aroa Sorín, viola Henri Demarquette, violonchelo 32 Descanso JOHANNES BRAHM Trio para violín, trompa y piano op. 40 en mi bemol mayor Solistas: Svetlin Russev, violín Herve Joulain, trompa Claudio Martínez Mehner, piano LOS APACHES, UN QUINTETO PARA UN BURRO Y EL BARBAS PASEANTE DEL BOSQUE Maurice RAVEL (Cibourne, P. Vasco francés, 07.03.1875; París, 28.12.1937) Admirábamos a Ravel1 en dos de sus obras orquestales, en pleno auge del exotismo imperante en el arte de la Belle Époque instalado en París, tras sus estudios en el Conservatorio. Fueron los años de gloria de 'Los Apaches' un grupo de artistas que se reunía en casa de Paul Sordes, pintor y gran melómano, y de su hermano Charles. Entro otros, el poeta Tristan Klingsor, los pintores Edouard Benedictus, Séguy, Charles Guerin, Chanvin; el musicólogo M.D. Calvocoressi; fueron llegando posteriormente Maurice Delage, D.E. Inghelbrecht, Lucien Garban, el pianista español Ricardo Viñes, el decorador Georges Mouveau y el gran dibujante Pivet. Ravel fue presentado al grupo por Leon-Paul Fargue en 1902. El nombre parece que se lo puso Viñes cuando al cruzarse con un vendedor de periódicos, éste gritó al verlos ¡Cuidado, apaches! Respetuosos con los demás -Fargue cortaba la música a la una de la madrugada para no molestar a los vecinos-, el grupo estaba abierto a toda novedad, pero cerrado a cal y canto a falsos estetas y doctrinarios. En 1904, las reuniones se trasladan a la nueva casa de M. Delage, en las afueras y sin vecinos, para poder tocar el piano toda la noche. Allí se incorporan al grupo nuevos miembros, incluido un jovencísimo músico español de apenas 18 años, Manuel de Falla. Una de las actividades preferidas del grupo era la asistencia a conciertos y representaciones de ópera en los que manifestaban su agrado o repulsa de forma ruidosa o extremadamente galante, según los casos, pero siempre vehemente. El grupo se disolvió en 1909, poco después de la llegada al mismo de otro joven genio de la música, Igor Stravinski. Introducción y Allegro para arpa, con acompañamiento de cuarteto de cuerdas, flauta y clarinete en sol mayor Comp. 1906 Sólo dos años antes de la Rapsodia Española y Ma mêre l'Oie, escribe una obra para un conjunto nada frecuente en la música de cámara, como es un arpa solista, cuarteto de cuerdas de formación tradicional -dos violines, viola y violonchelo-, flauta y clarinete. Lo inusual de su formación hace de esta obra una rareza en las programaciones, lo que aumenta su valor testimonial en este festival. En ella explora Ravel unas texturas y colores del conjunto que sólo un maestro de la sutileza como él podía llevar a buen puerto. La obra es fruto de uno de los encargos de Erard, el conocido fabricante de pianos, para la promoción de su nuevo modelo de arpa con todos los adelantos mecánicos; pero también de la costumbre de Ravel de no internarse de lleno en ninguna forma musical, causa de que escribiera un solo cuarteto para cuerdas; una sonata para violín y piano; otra para violín y violonchelo; un trío con piano; una ópera cómica, L'Herure Espagnole; una ópera fantástica, L'Enfant et les Sortilèges; y un ballet, Dafnis y Cloe, ya que los otros dos, Ma Mêre l'Oie, Le Langage des Fleurs y Adelaïde son adaptaciones de obras para piano. La siguiente obra para teatro sería un drama lírico, Jeanne d'Arc. Wolfgang Amadeus MOZART (Salzburgo, 27-I-1756; Viena, D-XII-1791) Hacia 1782, Mozart tiene una serie de animados encuentros y veladas musicales en casa del barón Van Switen, cuya amistad le facilita el acceso a la colección de obras de J.S. Bach y G.F. Haendel de la biblioteca del barón. Mozart dedica una buena parte de su tiempo al estudio de estos fondos, profundizando en el estudio de las fugas del que son frutos los Seis Preludios y Fugas para cuerda, K 404a y las Cinco Fugas para Cuerda K 405, amén de transcripciones para cuerda de una parte de la obra para teclado de Bach. La obra que esta noche podremos escuchar es bien diferente en su estrategia compositiva Quinteto para Trompa y Cuerdas en mi bemol mayor, K 407 Comp. Viena, 1782; estr. 1891; ed. Schmidt & Rau, Leipzig, 1796 El Quinteto para Trompa fue dedicado por Mozart -como toda su obra para ese instrumento, incluidos los conciertos para trompa y orquesta-, al trompista J. I. Leutgeb, vecino de Viena desde 1777, a quien Wolfgang llamaba en las cartas a su padre 'ese burro de Leutgeb'; eran amigos desde Salzburgo, donde ambos habían estado al servicio del príncipe-arzobispo. Este quinteto tiene un aire más de concierto para instrumento acompañado que de quinteto; no en vano, su composición es perfectamente coetánea a la del Concierto nº 1 para Trompa, K 412. La cuerda, salvo en algunos pasajes, se limita a acompañar al solista y poco más. Por otra parte, Mozart escribió para éste algunos pasajes casi como cadenzas. Su aire general es bienhumorado, casi como de broma musical, pero en el segundo movimiento, andante, se desarrolla un diálogo de un bello lirismo entre la trompa y el primer violín. Johannes BRAHMS (Hamburgo, 07.05.1833; Viena, 03.04.1897) Trío para Violín, Trompa de caza y Piano en mi bemol mayor, op. 40 Comp. Lichtental, 1864/; estr. Privado, Zurich, 28.11.1865; público, Karlsruhe, 0.15.1865; ed. Simrock, Bonn , 1866 Aunque escribió poca música de cámara para instrumentos de viento, ésta es de máxima calidad; baste recordar su Trío para clarinete, chelo y piano o su Quinteto con clarinete, que el pasado Florilegio 2006 tuvimos ocasión de escuchar en una versión de referencia a Pascal Moraguès y el cuarteto de cuerda formado por Janikashvili, Moreau, Caussé y Demarquette. Brahms había sido en su juventud intérprete aficionado de trompa de caza, instrumento que adoraba y que tiene un timbre muy característico. La idea de componer el Trío para Piano, Violín y Trompa de caza le vino a Brahms durante su estancia en la Selva Negra en el verano de 1864, según cuenta a su amigo Dietrich, “mientras daba un paseo matutino por el bosque, empezó a salir el Sol. Fue entonces cuando se me ocurrió la idea de un trío para trompa de caza y, como por milagro, me vino el primer tema a la cabeza”. El Trío para Violín, Trompa de caza y Piano tuvo una acogida bastante negativa por la crítica del momento por causas que curiosamente hace suyas una parte de la actual, siendo la principal el uso de la trompa de caza o waldhorn en vez de la ya entonces habitual trompa de pistones. Pero lo cierto es que la waldhorn empasta de forma muy cálida en el conjunto y su color es el más adecuado para los efectos que Brahms pretendía en esta obra, fundamentalmente subjetivos por más que el estímulo inicial para la composición fuese el paisaje antes aludido. La obra tiene unas características muy propias del Brahms 'heterodoxo de la forma' y se inicia con un Andante dividido en cinco secciones, cuya alternancia recuerda más un rondó que un primer tiempo de sonata o un andante convencional. El tema principal, dulce y expresivo, es su centro melódico. El segundo movimiento, se sale por estructura y desarrollo de lo que su convencional enunciado -scherzo, trio, scherzo- aparenta. Su primera sección es una sonata bitemática bien desarrollada, seguida por un trío y una recapitulación sobredimensionada para los usos del momento. El adagio consta de cuatro secciones, con dos temas expuestos en las dos primeras, repetido el primero en la tercera y ambos en la cuarta; casi unas variaciones, forma tan querida a Brahms. Este movimiento sí parece haber sido influido por los sentimientos surgidos por la muerte de su madre, pues estaba inacabado cuando ocurrió ésta. El allegro con brio final con cuatro temas de fanfarria de caza, abierto y brillante, es con el que Brahms otorga al instrumento que lo inspiró un mayor protagonismo. NOTA 1. Ver introducción biográfica Ravel en notas al concierto del día 23.06.2007 Copyright © 2007 by Julián Carrillo Sanz FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 “MÚSICA DE CÁMARA NUM. 4” 33 n DOMINGO, 1 DE JULIO 2007 12:00 o t a s a l p r o g r a m a IGLESIA DE SANTA MARÍA DE LOS CABALLEROS JOHANN SEBASTIAN BACH “ Variaciones Goldberg “, BWV 988. Para trío de cuerdas ( arreglo de Dimitry Sitkovetsky) FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Solistas: Tatiana Samouil, violín Gérard Caussé, viola Henri Demarquette, violonchelo 34 EL MÚSICO PERDIDO Y HALLADO EN LA HISTORIA J. S. BACH (Baut. Eisenach, 23.03.1685; m. Leipzig, 28.07.1750) La historia del olvido y la recuperación de Bach y su música se ajusta perfectamente al mito, tan propio del Romanticismo, del artista olvidado tras su muerte cuya genialidad es rescatada por alguien de forma casual o milagrosa mucho tiempo después. Todos conocemos la historia de la recuperación de La pasión según San Mateo -que en realidad es más obra de Fanny Mendelssohn que de su hermano Félix- en Berlín, en el año 1829. Pero en el caso de la música para teclado de Bach la historia no se cumple. Muchas de estas obras suyas nunca dejaron de tocarse y el coleccionismo de sus manuscritos por todo Occidente, no sólo en Europa, se inició muy poco después de su muerte. Mozart conoció su música de la mano de Johann Christian, hijo de Johann Sebastian, y cuando la estudió a fondo a partir de 1782-3, en la Biblioteca de Van Swieten, hizo bastantes arreglos de algunas fugas de Bach para tríos y cuartetos de cuerda, probablemente influido por su esposa, Konstanze, iniciando una tradición que habría de continuar hasta nuestros días, a mayor gloria de Bach y desesperación de dogmáticos del historicismo. Beethoven, que admiraba y tocaba frecuentemente la música de Bach, usó en sus últimas composiciones algunos de sus procedimientos compositivos. Carl Czerny, alumno de Beethoven entre 1800 y 1803, publicó en 1837 una edición del Clave bien temperado, “recogiendo el modo como Beethoven tocaba a Bach”. Liszt, en su época más brillante como virtuoso, incluía en sus recitales la Fantasía cromática y fuga, las Variaciones Goldberg y fugas de El clave bien temperado. R. Schumann recibió de Mendelssohn su conocimiento de Bach y fue -junto con Moscheles- uno de los 24 miembros fundadores de la Bach Gesellschaft de Leipzig, que publicó a partir de 1850 la primera edición de la obra completa de Bach. ¿Transcrittore, tradditore? Johannes Brahms, quien ya en su primer recital a los 15 años incluyó una fuga de Bach , durante toda su vida tocó regularmente en sus conciertos públicos la Fantasía cromática y fuga y sus propias transcripciones de las obras de Bach para órgano. Incondicional sostén de la Bach Gesellschaft como Schumann, con él se inicia la gran tradición de los transcriptores o, mejor, arreglistas de Bach. Porque, como dice H. Parry, co-fundador del Royal College of Music de Londres en 1883: “La finalidad de los arreglos es hacer que aquellas obras musicales escritas en un determinado lenguaje musical, sean inteligibles en otro”, [mientras que las transcripciones son] “una adaptación más íntimamente apropiada a la naturaleza del nuevo medio, tomándose grandes libertades respecto al original”. La interpretación de Bach al piano se suele juzgar dentro del contexto historicista de interpretación de la música renacentista y barroca. En realidad, existen múltiples y muy variadas tradiciones interpretativas de la música para teclado de Bach, muchas de ellas 'históricamente informadas', y sería una lástima que se perdieran por un excesivo purismo. Sin ir 'más cerca' (hay que tener en cuenta que San Petersburgo no dista de Viena más que Salamanca, pongamos por caso), en Rusia existe una gran tradición pianística bachiana, habitualmente atribuida a Antón Rubinstein (1829-1894) pero que ya es más que bicentenaria. Varios alumnos de Bach eran rusos o se establecieron en Rusia (entre otros y en relación con el programa de este concierto, el embajador H. C. von Keyserlingk, [1696-1764], supuesto destinatario de las Variaciones Goldberg). En 1794 la prensa moscovita anunció la venta de una copia manuscrita de su Clave bien temperado. Por último, John Field (1782-1837) se establece en Rusia, tocando Bach en público muchas veces y llegando incluso a tocar con tres de sus alumnos en San Petersburgo, en 1815, el Concierto para cuatro pianos y orquesta. Aria mit verschiedenen Veränderungen BWV 988 Leipzig, ca. 1741; ed. Nuremberg, ca. 174142; Viena, 1802 Arr. trío, Dimitri Sitkovetski Ed. por Doblinger (Viena, Munich, s/fecha, ca.1985) La historiografía musical, siempre tan aguafiestas, hace tiempo que dejó atrás leyendas e interpretaciones de ficción, como la bonita novela The Little Chronicle of Anna Magdalena Bach (Esther Meynell, 1925) o la primera y no menos imaginativa monografía sobre Bach (1802), de Johann Nikolaus Forkel (1749-1818), que nos cuenta una historia -que no la historiaque siempre se cita, en torno al supuesto insomnio del Conde Kayserling, antiguo embajador de Rusia en la corte del elector de Sajonia y su presunta petición a Bach de que escribiera algunas piezas de carácter tranquilo, más bien alegres, a fin de que pudieran recrear sus noches en vela. Lo que hoy se sabe es que el Aria con distintas variaciones fue compuesta con destino a la imprenta, como cuarta entrega de sus Clavier-Übung (Ejercicios para teclado) y que, como anteriores entregas, contenía cánones, fugas, estudios, piezas de carácter, danzas y canciones populares. Lo original es que el objetivo didáctico parte de un solo tema: el Aria que abre y cierra la obra, estructurada según un riguroso plan formal de 30 variaciones en dos bloques cuya frontera es la espléndida 'Obertura a la francesa' (Variación 16). Además, cada tres variaciones forman un grupo individualizado que termina siempre en un canon. De esta monumental obra se puede decir que es el modelo de la práctica totalidad de variaciones para piano compuestas en los últimos dos siglos largos. El arreglo para trío de cuerdas que hoy podremos escuchar se debe a la pluma de D imitri Sitkovetski. Está dedicado, “in memoriam”, a Glenn Gould -tal vez el más celebrado intérprete al piano de las Variacionesy escrito respetando fielmente el original bachiano. Como en éste, es impresionante la claridad de líneas de su contrapunto y la belleza sobrecogedora de sus climas sonoros. La primera grabación de la versión fue realizada por el propio Sitkovetski al violín, con Gérard Caussé como violista y Misha Maisky en la parte del violonchelo. Fue editada por el sello Orpheo (138 851) en 1985, con ocasión del tercer centenario del nacimiento de Bach. © Copyright 2007 by Julián Carrillo Sanz FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 “LOS DOMINGOS DE SANTA MARÍA” 35 n DOMINGO, 1 DE JULIO 2007 22:00 o t a s a l p r o g r a m a PATIO COLEGIO ARZOBISPO FONSECA LUDWIG VAN BEETHOVEN Triple Concierto para piano, violín y violonchelo en do mayor, op. 56 Solistas: Tatiana Samouil, violín Justus Grimm, violonchelo Claudio Martínez Mehner, piano LUDWIG VAN BEETHOVEN FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Sinfonía num. 7 en la mayor, op. 92 36 Orquesta del Festival Director: Gérard Caussé EL GENIO SUBVENCIONADO Ludwig van Beethoven (Bonn, 16.12 .1770; Viena, 26.03.1827) Triple Concierto , para Violín, Violonchelo y Piano en do mayor, op. 56 Comp. Viena, 1803-1804; estr. 1804; edit. Bureau des Arts et d’Industrie, Viena, 1807 El que hoy conocemos como Triple Concierto fue bautizado en su primera edición como: Gran Concierto Concertante para Pianoforte, Violín y Violonchelo, con acompañamiento de dos violines, viola, flauta, dos oboes, dos clarinetes, dos trompas, dos fagotes, trompetas, timbales y bajo. Compuesto y dedicado a Su Alteza Serenísima el Príncipe de Lobkovitz por Ludwig van Beethoven, Op. 56. Nada menos. Este título tan 'sencillito' es como un vuelo de reconocimiento sobre la situación socio-económica de Beethoven en Viena. Tras la condición de sirvientes más o menos distinguidos de compositores como Bach o Mozart en su época de Salzburgo, algunos, como el propio Mozart o Haydn, asumieron el riesgo de convertirse en profesionales liberales, o incluso -en el caso de Mozarten empresarios productores de sus propios conciertos y óperas. Frente a estos caminos y sus correspondientes riesgos, Beethoven prefirió seguir el suyo a la búsqueda del mecenazgo, inaugurando de alguna manera el bonito oficio de artista subvencionado. En tan atractiva dedicación tiene todavía hoy una legión de sucesores, que lo siguen con la fruición propia de quienes esperan serlo también en su supuesta condición de genio de la composición incomprendido por sus contemporáneos. El dedicatario, príncipe Lobkovitz, fue el principal mecenas de Beethoven junto al archiduque Rudolph y a Kinski, y fue en su palacio donde se pudo escuchar el Triple por primera vez. Los primeros esbozos de la obra datan de 1800. El concierto fue interpretado por Anton Kraft, un virtuoso del chelo; August Seifler, un buen violinista profesional; y el propio archiduque Rudolph, alumno de piano de Beethoven y un aceptable intérprete aficionado. La dificultad de cada parte está adaptada a su correspondiente intérprete, lo que desde su estreno causó las correspondientes críticas negativas por el desequilibrio de las partes solistas. El concierto, resueltamente sinfónico, sigue la huella de la sinfonía concertante en el intento de compaginar el concierto para instrumento solista, que en este caso debería ser el trío -tan en alza, como todos los conjuntos de cámara, en la Viena de la época que en eso, como en los sombreros, seguía la moda parisina-, con el Concerto grosso, en el que un grupo de solistas dialoga de forma autónoma con la orquesta. El primer movimiento es un allegro de aire heroico (el Triple es estrictamente coetáneo de la Tercera Sinfonía), introducido por chelos y contrabajos solos en su registro grave. El tema es tomado por el chelo y contestado inmediatamente por el violín. El piano, aun con partes de algún lucimiento y diálogos con sus compañeros, es tratado de forma algo subordinada. El segundo movimiento es un breve largo con una duración de apenas cinco minutos, dotado de un carácter hondamente lírico y de una serenísima belleza. También en este movimiento tiene el mayor protagonismo el chelo, con bellísimas respuestas del violín sobre fondos arpegiados del piano. El movimiento desemboca sin solución de continuidad -sólo unas notas repetidas del chelo lo anuncian- en el Rondó alla polacca final, una brillante polonesa con un aire más elegante que heroico. Es la parte más lograda de la obra y, aunque el chelo sigue siendo 'el jefe', también es el movimiento más equilibrado, lo que se une a su atractivo ritmo para que haya sido considerado siempre el más atractivo del concierto. Sinfonía num. 7 en la mayor, op. 92 Comp. Viena, 1811-12; estr. 08.12.1813; 1 edic., Steiner, Viena, 1816 Desde el de su Primera Sinfonía en do mayor, op. 21, los estrenos de Beethoven en este género se habían producido con una cierta regularidad cada dos o tres años de media, llegando a estrenar tres en apenas un año (Cuarta en noviembre de 1807 y Quinta y Sexta en diciembre de 1808). Habían de pasar otros cinco años hasta el de la Séptima en la mayor y Octava en fa mayor, ocurrido el 8 de diciembre de 1813. Hay que tener en cuenta que la guerra contra Napoleón causó una crisis económica en la Viena de la época la inflación superó el 1000 % y las subvenciones asignadas a Beethoven no se incrementaron: los protectores de Beethoven no estaban para fiestas. Éste tuvo, sin embargo, una fase de bastante actividad: entre 1810 y 1811 hizo trabajos de encargo (cuando la necesidad aprieta, ni la gloria del genio se respeta) para varios teatros, entre los que se cuentan la música incidental para Egmont, El Rey Esteban y Las Ruinas de Atenas que le sirvieron como experimentos para la Séptima Sinfonía. La Séptima, calificada por su autor como 'mi mejor sinfonía', fue estrenada en un concierto celebrado en la Universidad de Viena en favor de los soldados austriacos y bávaros heridos en la batalla de Hanau. Este concierto fue el típico acto patriótico de una nación en guerra, en el momento de la victoria. En el concierto, que dirigió el propio Beethoven, se tocó sólo música suya: entre otras obras, la versión orquestal -la original estaba escrita para Panharmónicon, un curioso instrumento inventado por el 'Mecánico Imperial', J.N. Mälzel, creador del metrónomo que lleva su nombrede Wellingtons Sieg, oder die Schalacht bei Vittoria (La Victoria de Wellington o la Batalla de Vitoria), op. 91. La esencia de esta sinfonía está en su carácter rítmico, que tanta tinta hizo correr con la obsesión de buscar un significado a cada composición de su sordo autor. Descripción de bodas campesinas (Schumann) incluida orgía final (Lenz); historias de reinos antiguos y moros españoles u otra raza sureña de guerreros (A.B. Marx), o la de un músico gallego que vio en el tercer movimiento, vivace, una muiñeira, hacen bueno el conocidísimo comentario de Wagner diciendo que “la séptima sinfonía es la apoteosis de la danza, es la danza misma en su aspecto más sublime, como si fuese la acción excelsa del movimiento corporal integrado en un molde de tonalidad ideal.” La introducción se caracteriza por su gran extensión y la inédita repetición -al menos sesenta y una veces- en su melodía de la nota mi por maderas y violines. El tema inicial es expuesto por oboe y clarinete y más tarde por trompa y flauta. Es como una serena reflexión antes de la acción de la avalancha de ritmos que se avecina. El vivace tiene una gran variedad temática y polifónica en un ritmo ternario lleno de energía desarrollado con las oleadas de fuerza características en Beethoven. El Allegretto sustituye al tiempo lento habitual de las sinfonías en una solución de coherencia con la nervatura rítmica de la obra. Desde el estreno fue el más popular y reconocido de la obra, y encanta al oyente con su construcción, su flexibilidad rítmica, y su juego armónico y polifónico. Rápidamente aparecieron transcripciones, arreglos para vientos, grupos de cámara de distinta composición con o sin piano, para uno o dos pianos, piano a cuatro manos, etc. También se publicó en partes orquestales y en partitura dedicada a uno de los más devotos protectores de Beethoven, el banquero conde Moritz Fries, quien de acuerdo con Karl Holz pagó a Beethoven un subsidio regular (genio y figura...) durante varios años, hasta que quebró en 1825. Las funciones del scherzo con el que Beethoven sustituyó el minueto tradicional de anteriores autores sinfónicos está tomadas en la Séptima por un presto, lleno de una energía elevada a lo aéreo por su gracia y ligereza. La repetición alternada de presto -tres veces- y trío -dos- le dan un aspecto estructural de rondó. El trío central, indicado como meno presto es de una sencillez ejemplar en su primera sección, que repite el tutti con aire un tanto marcial. La breve coda es una alusión en menor del trío antes de los cinco resueltos acordes finales. El allegro con brio final se inicia, continúa y concluye con toda la fuerza, vitalidad y alegría que el Beethoven de los mejores momentos vitales era capaz de poner en una partitura. Sus secciones se suceden con un ritmo tan vertiginoso como el que contienen sus notas. No es pues de extrañar que su instrumentación por bloques, un tanto rompedora, la abstracción de su estructura y su polifonía, así como sus modulaciones armónicas, dieran lugar a ríos de tinta intentando explicar una música que, incluso más que otras, es mejor gozar; como espero hayamos hecho, de éste y anteriores conciertos, cuantos hemos asistido al Florilegio Musical Salmantino 2007. © Copyright 2007 by Julián Carrillo Sanz FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 “LA RONDE DE NUIT” 37 Gérard Caussé, viola y director Katia y Marielle Labèque, piano Violista de gran reconocimiento internacional, Gerard Caussé es ampliamente aclamado por pertenecer al grupo de los pocos talentos internacionales en viola de nuestro tiempo y uno de los que desde Primrose ha hecho de la viola, una vez más, instrumento solista en todo su derecho. Estas dos pianistas sorprenden, con un repertorio desde lo ecléctico a lo inesperado. Tienen una carrera impresionante en todas las partes del mundo y han sido invitadas por las más prestigiosas orquestas, incluyendo la Filarmónica de Berlín, la Boston Symphony, Chicago Symphony, Cleveland Orchestra, etc... junto a directores como Semyon Bychkov, Sir John Eliot Gardiner, Zubin Mehta, Seiji Ozawa, Sir Simon Rattle, Esa Pekka Salonen, etc... FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Altamente respetado por sus colegas, Caussé interpreta y graba con regularidad con nombres tan familiares como Emmanuel Krivine, Charles Dutoit, Kent Nagano, Gidon Kremer, Maria João Pires, Augustin Dumay, François-René Duchable, Paul Meyer, Renaud y Gautier Capucón y Michel Portal. 38 Gérard Caussé fue reconocido a mediados de los '70 como miembro fundador y viola solista de la Ensemble Intercomtemporain de Pierre Boulez. Desde principios de los años 80 fue nombrado profesor de viola en el Conservatorio Superior de París. Gérard Caussé ha aparecido como solista con las más prestigiosas orquestas, interpretando repertorio que abarca del barroco a contemporáneo . En su repertorio cuenta con más de diez conciertos dedicados a su nombre por los compositores mas destacados de nuestra época . Su discografía está compuesta por más de 35 grabaciones con amplio repertorio solístico y de música de cámara al lado de los intérpretes y directores más excelentes de panorama musical. De 2002 a 2004, Gérard Caussé fue director artístico de la Orquesta de Cámara Nacional de Toulouse con quien apareció como director. Desde el 2004 es el Director artístico de la Joven Camerata de la Fundación Caja Duero y del Festival Florilegio en Salamanca . Gerard Caussé toca una viola de Gaspar da Salo (1560). Katia y Marielle han actuado junto a grupos barrocos como The English Baroque Soloists, Il Giardino Armonico, Musica Antiqua Köln y Venice Baroque, entre otros. El concierto que dieron en el Musikverein de Viena junto al Giardino Armonico con motivo del centenario de Bach fue televisado en todo el mundo por ORF y grabado en DVD. En 2005 Katia y Marielle Labèque lanzan la Fundación KML dirigida a promover la investigación sobre el repertorio de los dúos pianísticos a través de encuentros con artistas de todos los campos. Uno de sus proyectos consiste en un programa para niños bajo el auspicio del programa Zunkunft@Bphil, de la Fundación de la Filarmónica de Berlín, que fue creado por Sir Simon Rattle. Se destaca la audiencia récord de 33.000 espectadores que el dúo alcanzó con su interpretación durante el concierto de clausura en la Waldbühne junto a la Filarmónica de Berlín que fue televisado a nivel mundial. Michael Portal, clarinete i o g r a f í a s FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 b 39 Michael Portal, es un músico polifacético, un clarinetista clásico que obtuvo los primeros premios de clarinete del Conservatorio Nacional Superior de Música de París en 1959, del Concurso Internacional de Génova y del Jubileo de Suiza en 1963, así como el Gran Premio Nacional de Música de Francia en 1983. Toca habitualmente con Georges Pludermacher, Christian Ivaldi, Maria Joao Pirès, Bruno Canino, Michel Dalberto, Marie-Josèphe Jude, Laurent Korcia, Paul Meyer, Youri Bashmet, Gérard Caussé, Tabea Zimmermann, Les Quatuors Sine Nomine, Ysaÿe... Ha trabajado con Kagel, Stockhausen, Berio, Boulez y Globokar, así como ha colaborado con el conjunto “Musique Vivante” de Diego Masson. Colabora regularmente con la bailarina americana Carolyn Carlson. En 1995, Radio France le dedicó un “Retrato”. Apasionado del jazz, se rodea de los mejores músicos europeos: Texier, Humair, Solal, Jenny-Clark..., y crea el Portal Unit. Entre sus compañeros americanos cabe mencionar a Jack Dejohnette, Mino Cinelu, Charlie Haden… Michael Portal ha conseguido tres premios César. En 1990 y 1995, recibe un Sept d'Or por la mejor banda sonora televisada. En noviembre de 2005, recibe el Premio de Honor de la Academia Charles Cros y, en febrero de 2006, una Victoria de Honor en las Victorias de la Música Clásica de Estrasburgo. Para coronar la temporada 2005-2006, el Sindicato Profesional de la Crítica de Teatro, Música y Danza le concedió el Gran Premio de la Crítica. Maite Martín, voz Tatiana Samouil, violín Nace en Barcelona, en 1965. En 1986 comienza su proyección internacional al ser elegida por Peter Gabriel para actuar en diversos festivales de músicas del mundo. Tatiana Samouil nación en San Petersburgo. A la edad de 6 años comenzó a tocar el violín. Tres años más tarde, Tatiana dio su primer recital y comenzó como solista con la Orquesta Nacional Moldova. Tatiana ha sido alumna de Maja Glezarova en el Conservatorio Tschaikovsky de Moscú. Después ingresó como alumna de Igor Oistrakh en el Real Conservatorio de Bruselas, en donde obtuvo su Master y también el Premio Especial Maurice Lefranc. Finalmente perfeccionó su arte con el profesor Jose Luis García en Madrid. Es escogida por Miguel Bosé para cantar en la Expo de Sevilla. En 1993 conoce al pianista Tete Montoliu y éste le propone trabajar juntos. En 1994 presenta su primer compacto flamenco “Muy Frágil”. Graba junto con Tete Montoliu su segundo disco, “Free Boleros”. Para su actuación en el Festival Grec, escoge como artista invitada a la bailaora Belén Maya para una colaboración puntual que, más tarde, se convierte en una compañía estable. En 2000 sale al mercado su tercer disco, “Querencia”. Es requerida por el maestro Rafael Frühbeck de Burgos para interpretar en Alemania El Amor Brujo de Falla, con la Orquesta Sinfónica de Berlín. En febrero de 2003 sale al mercado “Tiempo de Amar”, su cuarto disco y el segundo con repertorio latino. En éste mismo año crea y produce “Flamenco de Cámara”, su segundo espectáculo con Belén Maya. En el 2004 colabora con la cantante de fado Dulce Pontes. En el 2005 produce su espectáculo “Mis treinta años de amor al arte”, que estrena en el Palau de la Música de Barcelona. Participa en una gira homenaje a Leonard Cohen versionando uno de sus temas. La señorita Samouil ha interpretado como solista en muchas ocasiones junto a importantes orquestas y directores. Es ganadora del Primer Premio del Concurso “Prix Henry Vieuxtemps” en Verviers y Concurso de la Radio-Televisión Belga “Tenuto” así como laureada de grandes concursos internacionales. Como premio especial del Concurso Internacional Jean Sibelius, ha grabado recientemente su primer CD en la Academia musical de Villecroze, Francia. Durante la temporada pasada, Tatiana tocó junto a la Orquesta Sinfónica de La Monnaie, Orquesta de Cámara Nacional de Toulouse, Orquesta Sinfónica del Teatro Colón en Buenos Aires, Klassische Philarmonie de Bonn y fue solista en gira con la Brandenburgisches Staatsorchester de Frankfurt. Tatiana utiliza un Guarnerius del Ges de 1741 (ex-Vieuxtemps) perteneciente a la Maggini Foundation (Suiza). Henri Demarquette, violonchelo Justus Grimm, violonchelo 40 i o g r a f í a s FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 b 41 Henri Demarquette nació en 1970 y a los 13 años ingresó en el Conservatorio Nacional Superior de Música de París. También trabaja con Pierre Fournier y Paul Tortelier y después con Janos Starker en Bloomington, Estados Unidos. Es descubierto por Sir Yehudi Menuhin quien le invita a tocar bajo su dirección el Concierto de Dvorak en Praga y en París. Desde entonces, toca en numerosas capitales con los más famosos directores de orquestas y en compañía de músicos de cámara privilegiados. Henri Demarquette aborda regularmente la música contemporánea, trabajando en estrecha colaboración con grandes compositores actuales, especialmente Olivier Greif, quien le dedica su concierto “Durch Adams Fall”. Pascal Zavaro también le dedica su concierto. Grabó la integral de las sonatas de Beethoven en DVD (Armide), la integral de la obra de Chopin (Intrada), las ''suites'' para violonchelo solo de Bach (colección Etoiles du Festival d'Auvers sur Oise), los dos tríos de Beethoven para clarinete, violonchelo y piano (Zig-Zag Territoires), los dos conciertos de Haydn (Verany), una grabación dedicada a la música de cámara de Eric Tanguy (Transart Live), la Rapsodia para violoncelo y orquesta de G. Ropartz (Timpani), La Leyenda de Jean Cras (Timpani), el Violonchelo Romántico (Verany) y un disco dedicado a Jean Françaix. Henri Demarquette toca un violonchelo del lutier italiano Goffredo Cappa de 1697 y un arco de Persois de 1820. Nacido en 1970 en Hamburgo, Grimm tenía 5 años cuando recibió de su padre su primera clase de violonchelo. Más tarde, estudió en Saarbrücken con Ulrich Voss y en Colonia con Klaus Kanngiesser y Frans Helmerson. También ha participado en clases magistrales con Heinrich Schiff, William Pleeth, Boris Pergamenschikov y Steven Isserlis. Justus Grimm fue laureado del Concurso Jugend Musiziert. En 1994, ganó el Primer Premio de violonchelo del Conservatorio Superior de Colonia y es laureado del Concurso Internacional de Conservatorios Superiores de Alemania. En t1999 obtuvo junto al pianista Florian Wiek, el Primer Premio del Concurso Nacional Deutscher Musikrat, así como el Primer Premio, con medalla de oro, del Concurso Internacional Maria Canals en Barcelona. Desde entonces, el dúo toca regularmente en festivales de música a través toda Europa. Desde 1993, Justus toca como solista junto a grandes orquestas europeas, en salas tales como el Berliner Konzerthaus, el Musikhalle de Hamburgo, el Palacio de Bellas Artes de Bruselas, el Beethovenhalle de Bonn o el Kölner Philarmonie. Justus enseña desde este año a la Capilla Musical de la Reina Elisabeth. Aparte de numerosas producciones radiofónicas y televisivas (WDR, SWR, NDR, RTBF, DLF, etc…), ha realizado recientemente un CD con obras de Beethoven, Brahms y Shostakovitch con Ars Musici de la serie Primavera. David Grimal, violín Jean-Philippe Collard, piano A pesar de haber empezado a tocar el violín a los cinco años de edad, David Grimal dedicó mucho tiempo a cuestionarse su necesidad interior como músico. Después del Conservatorio Nacional Superior de París, donde trabaja con Régis Pasquier y aprovecha los consejos de artistas prestigiosos como Schlomo Mintz o Isaac Stern, pasa un año en la escuela de Ciencias Políticas, para después conocer a Philippe Hirshborn. Desde entonces, la interpretación musical como metáfora de sus preguntas espirituales se convierte en su evidencia, su naturaleza. Suele tocar como invitado en las orquestas más prestigiosas. Asimismo, también suele tocar bajo la batuta de directores como Emmanuel Krivine, Mathias Bamert, Hubert Soudan, Stanislas Skrowaczewski, Lawrence Foster, Jap van Sweden, Yan Pascal Tortelier, James Judd, Michael Schonwandt, Frübeck de Burgos, Heinrich Schiff, Christoph Eschenbach… Jean-Philippe Collard fue admitido en el Conservatorio Nacional Superior de Música de París a una edad temprana. A los dieciséis, le galardonaron de forma unánime con el Primer Premio del Conservatorio de París y, posteriormente, obtuvo muchos otros premios incluidos el Premio del Concurso Internacional Marguerite Long-Jacques Thibaud y el Gran Premio del Concurso Internacional Cziffra. En enero de 2003 al Sr. Collard se le premió con un Chevalier de la Legión d'Honneur. David Grimal tiene el privilegio de contar con grandes intérpretes entre sus compañeros; deben mencionarse Boris Berezovsky, James Galway, Valery Afanassiev, Truls Mork, Xavier Phillips Georges Pludermacher, Yuri Bashmet, Jian Wang, Gérard Caussé, Michel Beroff, François René Duchable, Marc Coppey, Alain Planès, Nicholas Angelich, Anne Gastinel, Paul Lewis… Además de sus recitales por todo el mundo, Collard también apareció como solista con las orquestas más importantes del mundo. Ha colaborado con directores tan conocidos como Bychkov, Janowski, Ozawa, Previn, Rattle, Krivine y Dutoit. Ha actuado en los conciertos del London Proms y en los festivales de Edimburgo, Alderburgh, Bad Kissingen, Salzburgo, Bath, Caramoor, Newport y Saratoga. En su discografía se encuentran el integral de sonatas y partitas de Bach (Transart Live), la sonatas de César Franck y Richard Strauss (Harmonia Mundi), las tres sonatinas de Schubert (Aeon), un disco Dohnanyi entre otros. Con más de 50 títulos a su nombre para EMI, la discografía de Collard incluye el Ravel Concertos con Lorin Maazel y la Orquesta Nacional de Francia (Premio Gramophone), los cinco Conciertos de Piano Saint-Saëns con André Previn y la Royal Philarmonic Orchestra y el Concerto Op 21 de Chausson con Augustin Dumay y el Muir String Quartet (Gran Premio del Disco). Más recientemente, EMI ha lanzado un disco del Concierto Nº 1 de Tchaikovsky junto con el Concierto para piano compuesto por su antiguo profesor del Conservatorio de París, Pierre Sancan. Svetlin Roussev, violín Nora Gubisch, Mezzosoprano 42 i o g r a f í a s FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 b 43 Svetlin Roussev nació en Roussé, Bulgaria, en 1976. A los cinco años empezó a tocar el violín en la escuela de música de su pueblo natal, hasta que en 1991 ingresó en el Conservatorio Nacional Superior de París, en las clases de Gérard Poulet, Dévy Erlih y Jean-Jacques Kantorow. En 1994 se le otorga por unanimidad el primer premio de violín. Svetlin Roussev fue premiado en un gran número de concursos internacionales. Invitado como solista en diferentes orquestas de los Estados Unidos, América Latina, Asia y Europa, ha tocado bajo la dirección de importantes directores. Svetlin Roussev ha ofrecido conciertos por todo el mundo. Se le invita regularmente a diversos festivales. Al mismo tiempo, colabora en la organización del Festival Les Classiques de Val d'Isère. Por otro lado, también actúa en el repertorio de tango con el grupo Tanguisimo y en música de cámara con el Rachmaninov-Piano-Trio (Elena Rozanova, piano y François Salque, violonchelo). Tras dedicar un disco a Pantcho Vladiguerov con la pianista Elena Rozanova, el cual ha recibido muy buenas críticas, acaba de publicarse la grabación del Concierto Fúnebre de Karl Amadeus Hartmann con la Orquesta de Auvergne bajo la dirección de Arie Van Beek. Considerado uno de los mejores artistas de su generación, a Svetlin Roussev se le acaba de nombrar músico del año 2006 en Bulgaria. Nora Gubisch empezó su carrera musical en la Maîtrise de Radio France, y después en el Conservatorio de Saint-Maur. Empezó cantando con Jacqueline Gironde y continuó sus estudios con Christiane Eda-Pierre en el Conservatorio de París, donde obtuvo un primer premio a los 24 años de edad. Actualmente trabaja con Vera Rozsa. Canta bajo la dirección del Sr. C Davis, G. Prête, L. Maazel, N. Harnoncourt, A. Jordan, J, Conlon, J. Lopez-Cobos, G. Bertini, Jean-Claude Malgoire, Michel Plasson, Christoph Eschenbach y actúa con la Orquesta Filarmónica de Nueva York, la Filarmónica Wiener, la Staatskapelle Dresde, la Bayerisches Rundfunk, la Orquesta Sinfónica de Berlín, la Orquesta Filarmónica de Radio de Holanda, la Orquesta Sinfónica de Londres, la Orquesta de París y la Orquesta Filarmónica de Radio France, además de cantar en los más prestigiosos teatros de ópera del mundo, interpretando los pricipales papeles de numerosas óperas. También dedica una gran parte de su tiempo al oratorio, la música de cámara y los recitales. Entre sus grabaciones, debe citarse la Malquise de Bellonda en Perela de Dusapin, Hedwige en Die Rheinnixen de Offencach, Die Hexe en Königskinder de Humperdinck bajo la dirección de Armin Jordan y Ilka en Hary Janos de Kodaly con Gérard Depardieu para el disco Accor Universal. Herve Joulain, cornetista Claudio Martínez Mehner, piano Herve Joulain, cornetista francés, nació en 1966 en Saint-Romans-lès-Melle (Dex-Sèvres). Desde los 20 años, Hervé Joulain, ha sido el primer cuerno solista de la Orquesta Filarmónica de Radio France del director Marek Janowski, así como desde muy pronto tocó bajo la dirección de Leonard Bernstein, Zubin Mehta, Daniel Barenboïm, Pierre Boulez, Lorin Maazel, Armin Jordan, Seiji Ozawa, Ricardo Muti y Carlo María Giulini. Diez años después, ocupó al mismo puesto en la Orquesta Nacional de Francia de Charles Dutoit. En la actualidad, se ha vuelto a unir a Lorin Maazel como primer cuerno de la Filarmónica Toscanini de Parma. Su carrera como camerista también le ha llevado a actuar por todo el mundo con Paul Tortelier, Yuri Bashmet, Pierre Amoyal, Vadim Repin, Michel Dalberto, Boris Berezovzky, Boris Belkin, Pinchas Zukerman, Natalia Gutman y Gidon Kremer. Nacido en Alemania en 1970, comienza su educación musical en el Real Conservatorio de Música de Madrid, con los profesores Amparo Fuster, Pedro Lerma y Joaquín Soriano, finalizando con el Título de Profesor Superior de Piano y Premio de Honor Fin de Carrera en 1989. Completa sus estudios posteriormente en el Conservatorio Tchaikovsky de Moscú, la Escuela Superior de Música Reina Sofía de Madrid, la "Hochschule für Musik Freiburg" (Alemania), la "Fondazione per il Pianoforte" en Como (Italia) y el "Peabody Conservatory" en Baltimore (E.E.U.U.), estudiando principalmente con Dmitri Bashkirov, Vitalij Margulis y Leon Fleisher. Asiste activamente a clases magistrales impartidas por Murray Perahia, Alexis Weissenberg, Karl-Ulrich Schnabel, Fou Ts'ong, Dietrich Fischer-Dieskau y Mstislav Rostropovich, entre otros. Ha sido finalista en el concurso internacional "Paloma O'Shea" de Santander y ha ganado primeros premios en los concursos Internacionales "Fundación Chimay" (Chimay, Bélgica), "Pilar Bayona" (Zaragoza) y "Dino Ciani" (Milán). Su actividad como solista le lleva a actuar en toda Europa, E.E.U.U., Rusia, Centroamérica, Korea y Japón con orquestas como la Filarmónica de Munich, la Filarmónica de Moscú, Filarmónica del Teatro Alla Scala, Scottish Chamber Orchestra, Filarmónica de Praga, Radio Svizzera Italiana, Norddeutsche Rundfunk, Filarmonia Hungarica y numerosas orquestas españolas. En la actualidad, y tras haber sido profesor en el CNSM de París, Hervé Joulain se dedica a impartir cursos por Francia, así como en Brasil, la República Checa, Canadá y Finlandia. En la actualidad es profesor asistente de piano en la Escuela Superior de Música Reina Sofía y profesor en el Conservatorio Superior de Salamanca. Agustin Prunell-Friend, tenor Alexis Cárdenas Cuarteto FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Hervé Joulain también es miembro del Octeto de Vientos de Paris Bastille, con el que suele viajar regularmente al extranjero, así como ya ha grabado una veintena de discos. 44 i o g r a f í a s FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 b 45 Agustín Prunell-Friend es uno de los más destacados tenores españoles en repertorio barrococlásico y de lied. Ha actuado en festivales y salas de concierto del máximo prestígio, junto a orquestas como la Rundfunkorchester Berlin, la Orquesta Filarmónica de Bergen, la Dresden Philharmonie, la Orchestra Nazionale della RAI, Orchestre de Chambre de Toulouse y Los Angeles Philharmonic Orchestra, trabajando con directores como Sir Neville Marriner, Rafael Frühbeck de Burgos, Esa Pekka-Salonen, Gunter Herbig, A. Zedda e Ilan Volkov. Ha también cultivado con asiduidad el lied y el género canción en general, abarcando desde los laudistas ingleses isabelinos hasta figuras del siglo XX; también es miembro del Songmakers' Almanac dirigido por Graham Johnson, con quien se presenta habitualmente en recital. Es un gran especialista en el repertorio Barroco y Clásico. Se ha presentado junto a agrupaciones como la Orquesta Barroca de Venecia y A. Marcon, la Akademie für Alte Musik Berlin y Collegium Vocale Gent, La Grand Écurie et la Chambre du Roy y Jean-Claude Malgoire, Orquesta del English Bach Festival y Al Ayre Español y Eduardo López Banzo. En su discografía figura Il turco in Italia de Rossini (Kicco Classic 1999), Ode to St. Cecilia de Handel (RTVE Música), Orione de Cavalli (Mondo Musica) y Gli Amori di Apollo e di Daphne. Comienza sus estudios con José Luis Balda. En 1984 entra en el Conservatorio de Maracaibo. En 1990 interviene como solista junto a la Orquesta de Jóvenes Solistas y la Orquesta Sinfónica de la ciudad. En 1991 es solista de la Orquesta Simón Bolivar y de la Orquesta Sinfónica Jóvenes de Barquisimeto. Participa como solista en distintos conciertos junto a los más prestigiosos conjuntos de Venezuela antes de cruzar las fronteras hacia Francia. Obtiene el primer premio del Conservatorio Nacional Superior de París junto a Olivier Charlier y Jean Jacques Kantorow. En 2000 sigue el ciclo como solista con Roland Daugareil en el Conservatorio Nacional de la Región de París. Alexis ha sido galardonado con varios premios de concursos internacionales. Alexis Cárdenas tiene una carrera brillante como solista y actúa regularmente en las mejores salas de conciertos, festivales de Francia y del mundo entero. b Carla Marrero, violín Màrius Díaz i Lleal Philippe Noharet i o g r a f í a s Jennifer Moreau Carla Marrero ha trabajado con importantes directores y orquestas en Europa y EEUU y ha participado en varios proyectos solidarios. Recientemente ha debutado con gran éxito en el Conservatorio Tchaikovsky de Moscú y en la Filarmonía de Ekaterimburgo (Rusia). Entre sus maestros tiene especial importancia Sergei Fatkulin, con quien Carla comenzó a la edad de cinco años. Continúa su educación musical en la Musikhochshule de Colonia (Alemania) con la profesora Ariadne Daskalakis. Ha hecho grabaciones para AXN y RTVE en España, Univision en EEUU, Venevisión y TNP en Latinoamérica y para la WDR alemana en Colonia. Acaba de ser nombrada Embajadora de Buena Voluntad por la Fundación “Tierra de Hombres”, institución esta con la que colabora en la difusión y concienciación de sus diferentes planes solidarios de actuación en general y sobre el proyecto “Viaje hacia la Vida” en particular Carla toca un valioso instrumento Hyeronimus Amati, Cremona 1703, perteneciente a la Casa Beares (Londres) cedido generosamente por Charles Beares. Rubén Simeo, trompeta 46 Nace en Vigo, en 1992, comienza sus estudios musicales en el conservatorio de esa ciudad con su padre José Vicente Simeó Máñez. A los 10 años, logra el Segundo Premio en el "Concurso Internacional Yamaha ", obteniendo él Primer Premio al año siguiente, ambos celebrados en Madrid. Desde los 8 años actúa como solista con varios agrupamentos musicales. Asiste a cursos de perfeccionamiento con Maurice Andre, P. Dutot, G. Touvron, M. Sommerhalder, Enrique Rioja, J. Ortí, L. Vidal, Spanish Brass, L. González, entre otros... El 25 de diciembre de 2004, actúa como solista con la Orquesta Sinfónica de la RTVE en el auditorio nacional de Madrid, televisado para todo el mundo por Televisión Española Internacional. Actúa con distintas orquestas sinfónicas, realizando giras por toda Europa. En Julio de 2005, con 13 años, actúa, invitado por Maurice Andre, en la Semana Internacional de la Trompeta, celebrada en Burdeos (Francia), con gran éxito de crítica y público. Ha obtenido grandes premios de renombre internacional como el Concurso “Philip Jones” celebrado en Guebwiller (Francia), Concurso “Selmer” celebrado en París, Yamaha (Madrid), Ciudad de Vigo (Pontevedra)... Recientemente, acaba de conseguir el 2º Premio en el prestigioso concurso internacional “Maurice Andre”, celebrado en París, siendo con 14 años inédito en la historia del concurso, recibiendo grandes elogios de Maurice Andre. violonchelo contrabajo violín Nacido en Barcelona en 1964, estudió con Francesc Solà, Radu Aldulescu y Lluís Claret. En Londres estudia con William Pleeth, David Stange y Nicholas Roth, licenciándose por el Trinity College. En 1988 llega a Boston y estudia con Bernard Greenhouse en el New England Conservatory, donde obtiene los Masters y Graduate Diplomas. Entre 1986 y 1989 fué miembro de la Orquesta de jóvenes de la Unión Europea, actuando con prestigiosos directores. Desde 1991 es Solista de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León. Ha sido profesor en los cursos de verano de Lucena y es catedrático de violoncello del Conservatorio Superior de Música de Salamanca. Colabora con músicos como Phillipe Entremont y Dimitry Sitkovetsky. Ha grabado el Triple Concierto de Beethoven junto a Jennifer Moreau, Judith Gordon y la Orquesta Sinfónica de Castilla y León. Comenzó sus estudios a la edad de 5 años en la clase de André Marillier y entra a la edad de 13 años en el Conservatorio Superior de Música de Lyón. Desde 1981 toca en varias orquestas francesas y desde 1991 es miembro de la Opera de París y de la Orquesta Mundial Para la Paz. Participa en conjuntos como “ Les Virtuoses de France”, “Forum”, “TM+”, “Carpe Diem”, “Calliope”, “Colors of Invention”. Ha sido invitado en la mayor parte de los grandes festivales de Música de Cámara dentro y fuera de Europa (Montreal, Tokio, Australia, de California a Alaska). Su pasión por el jazz y música tradicional le llevo a acompañar a artistas tales como Ute Lemper, Michel Legrand, Gilles Apap, Richard Galliano. Últimamente ha grabado un cuarteto de Jazz con LSO (London Symphony Orchestra). Jennifer Moreau creció en Nueva Zelanda y volvió a los Estados Unidos con 17 años para estudiar en el New Engand Conservatory, en Boston, con Dorothy Delay y Masuko Ushioda. Es primer violín del cuarteto de cuerda “Ocean Drive” y ha colaborado con músicos como Bernhard Greenhouse, Walter Trampler, Gérard Caussé, David Quiggle, Henri Demarquette, T. Janikashvili, D. Sitkovetsky, Joan Enric Lluna y P. Moragues entre otros. Ha colaborado con orquestas cómo la Handel Haydn Society de Boston, The New Zealand Chamber Orchestra, The Mahler Chamber Orchestra, New European Strings, BandArt y es miembro de la Orquestra de Cadaqués. Jennifer ha sido catedrática de música de cámara del Conservatorio Superior de Música de Salamanca y actualmente es solista de segundos violines en la Orquesta de Castilla y León. FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Nacida en Junio de 1995 en Madrid, Carla Marrero esta considerada un valor emergente dentro del panorama musical internacional. Con tan solo diez años fue ganadora del Primer Premio, premio especial del Ministerio de Cultura a la Dotes Artísticas y premio especial a la Participante más Joven en el prestigioso concurso internacional Demidov International Young Violin Competition. 47 b 48 Jérôme Ducros Bárbara Switalska Julia Gallego J. Manuel González o g r a f í a s Guillermo Salcedo clarinete piano violonchelo flauta oboe fagot Nacida en Museros, Valencia. Realiza sus estudios en el Conservatorio Superior de música de Valencia, obteniendo Matrícula de Honor en el último curso. Después de realizar diversos cursos con el clarinetista Joan Enric LLuna, se traslada al Real Conservatorio de La Haya (Holanda), donde estudia con el profesor D. Sjef Dowes. En 1992 entra a formar parte de la Joven Orquesta Nacional de España, donde recibe clases de grandes profesores como Wolfgang Meyer, Anthony Pay, Michelle Zukovsky, Joan E. LLuna, J.L. Estellés, Kate Hill y Jaime Martín, entre otros. En 1994 es ganadora del 1º Premio en II Concurso Nacional de Música de Cámara “Monserrat Alavedra” de Tarrasa (Barcelona), junto al quinteto de viento “Haizea”. Ha trabajado con diversas orquestas como O. Sinfonica de Galicia, O. Pablo Sarasate de Pamplona, O. Filarmónica de Israel. Nacido en 1974, Jérôme Ducros estudia piano con Françoise Thinat en el Conservatorio de Orleáns y posteriormente con Gérard Fermi y Cyril Huvé en el CNSM de París. Continúa sus estudios de tercer ciclo junto a Gérard Fermi. En 1994 consigue el Segundo Premio del Primer Concurso Internacional de Piano Umberto Micheli, así como el Premio Especial por la mejor interpretación de la pieza obligatoria. Ha participado como solista en importantes orquestas y toca junto a grandes músicos en diversas formaciones de música de cámara. La adaptación a dos manos de la Fantasía para piano a cuatro manos de Schubert se incluye en un disco dedicado a las Fantasías de Schubert (Ligia Digital), premiado con el Diapasón de Oro del Año 2001. En 2005, la grabación de los Trios de Beethoven con Héau y Demarquette obtuvo “Choc” del Monde de la Musique. Nacida en Polonia estudia violonchelo con Stanislaw Malek y Feliks Tatarczyk y Stanislaw Firlej en su pais natal y con Ivan Monighetti, en la Escuela Superior de Música Reina Sofía de Madrid y en la Academia de Música de Basilea. Ganadora del Concurso Nacional de Polonia, ha sido galardonada con diversos premios a lo largo de su trayectoria musical. Ha actuado como solista en diversos países. Como intérprete de música de cámara, desenvuelve una intensa actividad y ha colaborado, entre otros, con músicos como Árnulf von Arnim, León Spierer e Ivan Monighetti. En 2003, interpretó junto a la Real Filharmonía de Galicia y bajo la dirección del Maestro A. Ros Marbá, las Variaciones sobre un tema Rococó de Tchaikovski. En 2006, en compañía de la RFG tocó el Concierto de R.Schumann. Es violonchelista coprincipal de la Real Filharmonía de Galicia. Nacida en Altea en 1973, realiza sus estudios en el Conservatorio Superior de Paris, y ha obtenido numerosos premios. Flauta solista de la Orquesta Sinfónica de Tenerife (19971999) y de la Orquesta Sinfónica de Galicia (2001-2002), cabe destacar sus colaboraciones con diversas orquestas europeas que le han permitido trabajar con directores como Abbado, Harding, Boulez, Jansons, Brüggen, Ozawa. En música de cámara, ha colaborado con músicos como G. Nikolic, R. Capuçon, F.Braley, R. Vlatkovic, D. Poppen, D. Quilggle, entre otros. Como solista, ha actuado con las Orquestas de Tenerife, Ciudad de Granada, la de Galicia y de les Arts. Actualmente es miembro de la Mahler Chamber Orchestra, de Lucerne Festival Orchestra, de la Orquestra de Cadaqués y de la Orquesta BandArt. Destacar su gran actividad camerística con el Miró Ensemble . Nació en Valencia. Sus profesores fueron D. Fermín Clemente y D. Francisco Salanova. Continuó estudios en la Royal Academy of Music de Londres y en la Musikhochschule de Stuttgart. Fue miembro de varias orquestas de jóvenes y ha recibido variados prémios internacionales. En el curso 1995/96 fue profesor del Conservatorio Profesional de Cáceres y actualmente imparte cursos de perfeccionamiento y como profesor invitado en la Joven Orquesta Nacional de España, Joven Orquesta de Cataluña y Fundación Presjovem. Desde 2001 es Oboe Solista de la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla. Como solista ha aparecido con la Real Orquesta Sinfónica de Sevilla, Orquesta de RTVE, Barcelona Sinfonieta, Kammerorchester Arcata Stuttgart y Brodsky Quartet. En música de cámara realiza giras por todo el mundo con el Miró Ensemble. Este fagotista compagina su labor docente en el Conservatorio Superior de Salamanca y en el Conservatorio Superior del Liceo con múltiples actuaciones como solista y en colaboración con el quinteto Miró Ensemble. Formado principalmente en Alemania, junto al Prof. Klaus Thunemann, pasa sus dos últimos años de estudio en las filas de la Orquesta Filarmónica de Berlín, como academista. Desde los 16 años participa en la Joven Orquesta de la Comunidad Europea (EUYO) y en la Joven Orquesta Gustav Mahler y, posteriormente, trabaja con otras formaciones bastante reconocidas, junto a importantes directores. Ha recibido varios premios, como el Primer Premio del 59º Concurso Permanente de Juventudes Musicales de España 2003 o el Primer Premio del Internationaler Musikwettbewerb de la ARD de Múnich (2001), con Miró Ensemble. FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Ma Ángeles Galán i 49 b 50 trompa David Alonso nació en Vigo en 1978. Comienza sus estudios de trompa con el profesor Óscar Davila. Ha tocado en varias jóvenes orquestas, en las cuales actuó como primer trompa. Ha recibido clases de Will Sanders, Eric Terwilliger, Timothy Brown y James Ross entre otros. Ha tocado en la Orquesta Sinfónica de Galicia y la Orquesta Sinfónica de la Radio de Baviera. En estas orquestas ha sido dirigido por importantes directores. Además, colabora con varias orquestas alemanas. Actualmente tiene un contrato con la Orquesta de la Radio de Stuttgart (SWR). También ha tocado vários conciertos como solista. Es miembro de varios grupos de música de cámara, como el Miró Ensemble, con el que ha obtenido el Primer Premio y Premio del Público en el Concurso Internacional de ARD de Munich, con el que ha actuado en diversos festivales. Patricio Gutiérrez violín Nacido en Sta. Cruz de Tenerife, Patricio Gutiérrez obtiene los Diplomas Superiores de Violín y Música de Cámara en el Conservatorio Superior de Sta. Cruz de Tenerife y simultáneamente en el Conservatorio Royal de Bruselas. Ganador de los concursos nacionales más importantes, se ha prodigado igualmente como solista con distintas orquestas y directores. Recientemente ha sido invitado para dirigir y tocar como solista con la O. Nacional de Nicaragua. En la música de cámara, es de destacar el Cuarteto Casals de quien fue miembro fundador, y el dúo formado con el pianista Gustavo Díaz. Ha impartido cursos en el III Festival de Música de del Adriático; Conservatoire Royal de Bruselas; Centro de Música de Nicaragua; Conservatorio Superior de Sevilla, Universidad de Santa Bárbara. Actualmente es Catedrático de Violín del Conservatorio Superior de Salamanca. Laure Vidouta David Bryson Quiggle Víctor Ambroa o g r a f í a s Juan Antonio m. lópez arpa viola violín percusión Nacida en 1973, Laure Vidouta comienza sus estudios de arpa con Françoise Chomarat. Posteriormente, se perfecciona con Gérard Devos en el Conservatorio Nacional Superior de Música de París. En septiembre de 1993, obtiene por oposición la plaza de solista de arpa de la Orquesta Filarmónica de Málaga. En Francia, ha colaborado con las orquestas “Pasdeloup”, de Auvergne y de los Pays de la Loire; en España, con todas las orquestas de Andalucía y también con las de Badajoz, a Coruña, de la Comunidad de Madrid, de Palma de Mallorca, de Santiago de Compostela y de Valladolid; en Alemania, con varias orquestas de Munich, Nürnberg, Augsburg y Passau. Ha tabajado con directores como Rafael Frühbeck de Burgos, Aldo Ceccato, Jesús Lopéz Cobos, Lorin Maazel o Rostropovich. David Quiggle se graduó con honores en el Conservatorio de Música Nueva Inglaterra (Boston) en 1992. Ha sido viola principal de la Orquesta Sinfónica de Galicia y viola solista y director instrumental del Talles Instrumental del Centro Gallego de Arte Contemporáneo, en Santiago de Compostela. Interpretó y estrenó un gran número de obras inéditas y recientes de los compositores contemporáneos. En 1999, David Quiggle se unió al Cuarteto Casals con el Concurso de Londres y el Concurso de Hamburgo. Ha realizado extensas giras por Europa y América. Como solista, David Quiggle ha colaborado con directores como P.A. Valade, G. Shuller, D. Boyd, C. Eberle, B. Sargent, J.R. Encinar y E. Colomer. Ha ofrecido recitales en el Guggenheim de Nueva York. Actualmente, es profesor de viola del Conservatorio de San Sebastián - Musikene. Inició sus estudios de música con Victoriano Martín y los continuó en el Real Conservatorio Superior de Música de Madrid. Residió en Londres durante dos años para perfeccionar sus estudios con José Luis García Asensio. Ha ganado varios prémios en concursos nacionales. Ha sido miembro de la Joven Orquesta de la Comunidad Económica Europea. Fue director titular de la Joven Orquesta Sinfónica patrocinada por la Fundación Coca-Cola España. Desde 1993 hasta 1999 fue profesor asistente en la Escuela Superior de Música “Reina Sofía”, en Madrid. Fue miembro del Grupo “Manon”. En la actualidad es concertinodirector de la Orquesta de Cámara Andrés Segovia, miembro permanente de la Orquesta de Cadaqués, profesor de violín en el Conservatorio Profesional de Música de Majadahonda y miembro del grupo “Sartory Cámara”. Juan Antonio Martin López comienza sus estudios con D. Jorge Moreno Algárate, finalizándolos en el Conservatorio Superior de Madrid con Enrique Llopis, Eduardo Arroyo, Javier Benet y José Luis Alcain. Amplía estudios en el Sweelinck Conservatorium de Ámsterdam y en Weikersheim (Alemania) y Bydgoszcz (Polonia). Ha participado con varias orquestas de estudiantes y colaborado con la Sinfónica de Málaga, Granada y RTVE Forma parte de Cámara Latina, Tabir Percusión Ensemble, Cyclus, grupo de percusión de la JONDE y grupo de pianos y percusión de Castilla y León. Como solista, cabe destacar los conciertos con la Orquesta de Estudiantes de León y la Orquesta Sinfónica de Castilla y león. Actualmente es profesor invitado de la Universidad de Valladolid y Solista de timbales de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León. FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 David F. Alonso i 51 b María Rodríguez Isaac Rodríguez Aroa Sorín i o g r a f í a s Natasha Tchitch, viola Nacida en el 1975 Natalia Tchitch ha realizado 15 años de sus estudios de violin y viola en Moscú. Desde 1998 se traslada a España. En el año 2001 continua su formación en la Escuela Superior de Música Reina Sofía, en la cátedra de viola de Gerard Caussé. Ha sido invitada a actuar en diversos festivales internacionales colaborando con músicos como Alain Meunier, Luciano Berio, Maria-João Pires, Gerard Caussé, Silvia Marcovici, Katia y Marielle Labeque, R. Vlatcovich y J.García Asensio entre otros. 52 En 2005 comienza su labor como asistente de Gerard Causse en la Fundacion Caja Duero, con el proyecto de la Joven Camerata . soprano clarinete viola Nacida en Valladolid, es Licenciada en Arte Dramático por la RESAD de Madrid. Realiza sus estudios musicales y de canto con la soprano Ángeles Chamorro, siendo su repertorista Celsa Tamayo.Tras ganar el concurso del Teatro Sperimentale di Spoleto (Italia), es becada para realizar estudios superiores con los maestros Renato Brusson, Robert Kettelson, Giovanna Canetti (profesora de la Scala) y Enza Ferrari. Recibe clases magistrales, impartidas por los directores René Jacobs, Alan Curtis y Alberto Zedda -entre otros-, en el Teatro de la Zarzuela de Madrid, y es requerida por este último para participar como alumna activa en la Academia Rossiniana de Pesaro. En 1997, gana el Concurso de Canto de Irún y al año siguiente, el de Spoleto (Italia). En 1999 resulta finalista en Operalia, en San Juan de Puerto Rico. En la actualidad perfecciona su repertorio y técnica vocal con la soprano Virginia Zeani, en USA. Nacido en Barcelona en el año 1978, estudió en el Conservatorio de Badalona y, posteriormente, en el Conservatorio Nacional de Región de Niza con Michel Lethiec, completando su formación con Charles Meidich, Hans Deinzer, Yves Didier, entre otros. Ha obtenido numerosos premios como el Primer Premio “Concurso permanente de Juventudes Musicales de España”, Primer Premio “Concurso de Música de Cámara Ciudad de Lucena”, Segundo Premio “ Concuerdo Ciudad Manresa”, Primer Premio concurso “Paper de Música de Capellades”, Tercer Premio “ Jugend Musiziert (Weimar)”, Segundo Premio “Sitges”, Primer Premio y Premio Especial del público en el concurso “ARD de Munich”. En la actualidad, es profesor de clarinete y música de cámara en el Conservatorio Superior de Música del Liceo de Barcelona y miembro activo del Miró Esemble. Comenzó los estudios como violinista en Bucarest “Liceo de Música G. Enescu”, y los contínuo en el “Conservatorio C. Porumbescu”. En 1995 recibió una beca de estudios en Suiza, en Gstaad, “Internacional Menuhin Music Academy”, donde tuvo como maestros el violinista Alberto Lysy y también el violista Johannes Eskase. Tres años después recibió otra beca, esta vez en España, en la Escuela Superior de Música teniendo como maestro a Caussé. Alcanza la madurez profesional en el Conservatoire Nacional Superieur de Musique de Paris y Hochschule fur Musik und Theater-Hamburg, donde obtuvo su último diploma. Ha sido ganadora en el 2000 del Primer Premio del Concurso Internacional di Viola Maurice Vieux (París-Francia). En 2005 ha sido Viola Solo del emsemble “i Palpiti” (Los Angeles) y en el año 2006 fue también la Viola Solo en la Orchestra Nacional de Bélgica. Teimuraz Janikashvili, violín FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Desde el año 2003 vive en Paris donde es el miembro de la orquesta de la Opera y profesora -asistente del Conservatorio Superior de París. 53 Nace en Tbilisi, Georgia. A la edad de 8 años, ofrece su primer concierto con la Orquesta Nacional de Georgia y a partir de este momento actúa como solista con la Orquesta Sinfónica en varios conciertos y grabaciones. En 1988 se traslada a Moscú para continuar sus estudios en el Colegio Tchaikovsky y continua sus estudios en el Conservatorio Tchaikovsky con los profesores I.Bochkova y M. Glizarova. Ha sido miembro de la Orquesta de RTV de Rusia , violín solista de la Orquesta de Cámara Kremlin, concertino invitado de la Orquesta de Cámara de Tbilisi y la Orquesta de Cámara “Solistas de Moscú”, con cuyo director, Yuri Bashmet, ofrece conciertos y festivales por todo el mundo colaborando con solistas como M. Rostropovich, V. Tretiakov, M. Portal, G. Kremer, M. Vengerov, entre otros. Desde 1999 se traslada a España y forma parte de la Orquesta Sinfónica de Galicia. Es miembro del Ensemble Shostakovich, con el cual, consigue críticas entusiastas de su participacion en el Festival Crec de Barcelona, así como en otros conciertos y festivales en los que siguen participando en España. Actualmente Teimuraz Janikashvili es Profesor Asistente de Gerard Caussé en la Joven Camerata de la Fundación Caja Duero; solista colaborador en la Orquesta de Cámara Spaniard, Orquesta de Cadaqués, profesor de la Orquesta Presjovem “Ciudad De Lucena”, Orquesta de Cámara de la Orquesta Sinfónica de Galicia, Orquesta Pablo Sarasate y solista de la de Orquesta Castilla y León. c FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Continuamos con el impulso del Florilegio 2006 y nuestro navío musical levanta el ancla en esta 2007, abriéndose a sus nuevas perspectivas. Lo creado el año pasado se refuerza con esa “alternativa” que recibe el joven músico, otorgada por un profesiona. Este intercambio es el credo fundador del Festival. Los Jóvenes músicos estarán integrados en el corazón de los conciertos. 54 Nuestras propuestas se abren y van ampliándose a nuestra trama pedagógica. Para las Clases Magistrales queremos dar la bienvenida al talento de los cuatro solistas invitados. Los Jóvenes músicos serán solistas, inaugurado el primer concierto del Festival. Estamos ante un espejo donde se mirarán el maestro y el alumno, interpretando juntos, uno al lado del otro, una misma obra para dos instrumentos solistas. El Festival con su ritmo, sus impulsos, sus respiraciones y apoyándose en la llegada de grandes solistas que van a tejer la trama y la historia de este segundo Festival. Estamos contentos de ampliar nuestro velamen recibiendo a grandes voces que nos deleitarán con Mozart, Berilos, Villa Lobos y Britten. Gérard Caussé Director de la Joven Camerata Fundación Caja Duero m p o n e n t e s Orquesta del festival Violines I Luis Peña Gonzalez Óscar Rodríguez Rodríguez Cristina Sánchez Blanco María Ruano Caño Blanca Prieto Acera Laura Campillo Lopez Violines II Víctor Barrasa Muro Pilar De Sena Tomás Jesús Martín López Raquel López Casillas Eduardo De la Fuente Guillén Sara Patricia Medina López Viola Víctor Gil Gazapo Isabel Martín García Cristina Del Arco Jiménez Manuel Alejandro Santos Lorente Violonchelo Jaume Fraga Llavería Héctor Santos Conde Laura Trujillo Sanz Cristina Dulanto Viejo Contrabajo Paula Livianos González Violines i Violines ii Teimuraz Janikashvili Krzysztof Wisniewski Âne Matxain Víctor Ambroa Mallet Lucie Alberto Menchen Cuenca Óscar Rodríguez Rodríguez Cristina Sánchez Blanco María Ruano Cano Luís Peña Jennifer Alicia Moreau Patricio Gutiérrez Laura Salcedo Rubio Alfredo García VÍctor Barrasa Muro Pilar De Sena Tomás Jesús Martín López Eduardo De la Fuente Guillén Sara Patricia Medina López Raquel lópez casillas Pauline Dangleterre Violas David Quiggle Natasha Tchitch Flore -Anne Brousseau Aroa Sorin Isabel Martín Alejandro Santos Lovente Víctor Gil Gazapo Cristina Del Arco Jiménez Contrabajos Violonchelos Justus Grimm Marius Díaz Gregory Lacour Bárbara Switalska Pavel Gomziakov Héctor Santos Conde Laura Sanz Trujillo Jaume Fraga Cristina Dulanto Philippe Noharet José Miguel Such López Paola Livianos González Benoit Levesque Tuba Flautas Trompas Julia Gallego Maria José Ortuño Ester Caballero David F. Alonso José Manuel González Diego Santiago Pla Clarinetes Fagotes Isaac Rodríguez Maria Ángeles Galán Guillermo Salcedo Higinio Arrue Álvaro Prieto Mario Galán Oboes Alfonso Alberto Viñas Ramos J. Manuel González Monteagudo Álvaro Vega Cubillo Tamas Balla Chembalo Percusión Trombones Juan Antonio Martín López Philippe Stefani Samuel Rodríguez Martín Alfonso Sebastián Alegre FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Joven Camerata de la Fundación Caja Duero o 55 FLORILEGIO MUSICAL SALMANTINO/07 Clases Magistrales Clases Magistrales* Fecha y hora Profesor invitado Violín De 16:00 h. a 19:00 h. 18 de Junio 07 David Grimal Contrabajo De 16:00 h. a 19:00 h. 21 de Junio 07 Philippe Noharet Viola De 16:00 h. a 19:00 h. 23 de Junio 07 David Quiggle 28 de Junio 07 Henri Demarquette 56 Violonchelo De 16:00 h. a 19:00 h. *La participación de las clases magistrales está reservada a los miembros de la Joven Camerata de la Fundación Caja Duero. El acceso como oyente a las clases magistrales es público y libre hasta completar el aforo de 50 personas. Lugar de realización de las clases magistrales: Fundación Caja Duero, plaza San Boal, s/n, 2ª Planta. 37002 Salamanca. Organiza: Fundación Caja Duero ENTRADAS POR INVITACIÓN, A RETIRAR: - en taquilla, C/ Rúa Mayor, 35, a partir del 11 de junio 2007 - en el recinto del concierto, media hora antes de su comienzo