Texto 4: Decreto de Valencia, Fernando VII. “Dado que la divina Providencia por medio de la renuncia espontánea y solemne de mi augusto padre me puso en el trono de mis mayores [...] y desde aquel fausto día en que entré en la capital, en medio de las sinceras demostraciones de amor y lealtad con que el pueblo de Madrid salió a recibirme, imponiendo esta manifestación de su amor a mi real persona a las huestes francesas [...]; desde aquel día, pues, puse en mi real ánimo para responder a tan leales sentimientos y satisfacer a las grandes obligaciones en que está un Rey con sus pueblos, dedicar todo mi tiempo al desempeño de tan augustas funciones, y a reparar los males a que pudo dar ocasión la perniciosa influencia de un valido durante el reinado anterior. [...] Pero la dura situación de las cosas y la perfidia de Buonaparte, de cuyos crueles efectos quise, pasando por Bayona, preservar a mi pueblo, apenas dieron lugar a más. Reunida allí la real familia, se cometió en toda ella, y señaladamente en mi persona, un atroz atentado [...]; y violado, en lo más alto el sagrado derecho de gentes, fui privado de mi libertad y de hecho del gobierno de mis reinos. [...] Por tanto, habiendo oído lo que ecuánimemente me han informado personas respetables por su celo y conocimientos y lo que acerca de cuanto aquí se contiene se me ha expuesto en representaciones que de varias partes del reino se me han dirigido [...] declaro que mi real ánimo es no solamente no jurar ni acceder a dicha Constitución ni a decreto alguno de las cortes generales y extraordinarias, y de las ordinarias actualmente abiertas [...] sino a declarar aquella constitución y tales decretos nulos y de ningún valor y efecto, ahora ni en tiempo alguno, como si no hubiesen pasado jamás tales actos, y se quitasen de en medio del tiempo, y sin obligación en mis pueblos y súbditos, de cualquiera clase y condición, a cumplirlos ni guardarlos. [...]” (Dado en Valencia, a 4 de mayo de 1814. Yo el Rey) El presente texto es un fragmento del documento conocido como “Decreto de Valencia” de 4 de mayo de 1814. Texto escrito que por su naturaleza es una fuente primaria de contenido jurídico político. Es el decreto por el cual Fernando VII deroga la Constitución de Cádiz de 1812 y restaura el absolutismo monárquico en España tras la invasión napoleónica. El autor del texto es Fernando VII, hijo de Carlos IV, que consiguió llegar al trono tras el motín de Aranjuez. Posteriormente fue convocado junto a su padre en Bayona por Napoleón Bonaparte, donde éste consiguió que renunciaran a la Corona de España en favor de su hermano José Bonaparte. Tuvo lugar entonces la Guerra de Independencia, y la formación de las Juntas y la convocatoria de las Cortes de Cádiz que acaban firmando la Constitución liberal de 1812. Con la firma del Tratado de Valençay (1813), Fernando VII recupera el trono de España. Su reinado durará desde 1814 hasta 1833 y estará marcado por su rechazo al liberalismo. Se dividirá en 3 etapas: Sexenio Absolutista (1814-1820), Trienio Liberal (1820-1823) y Década Ominosa (1823-1833).Al morir le sucedió su hija Isabel II, menor de edad quedando la regencia en manos de su cuarta mujer Mª Cristina de Nápoles, iniciándose una guerra civil entre los partidarios de su hermano Carlos María Isidro de Borbón (carlistas), que no reconocía la legalidad de la sucesión en Isabel, y eran partidarios del absolutismo.El destinatario sería toda la nación española, los súbditos, luego es un texto público. Y no cabe más intencionalidad del autor que la de la justificación de las nuevas medidas y legitimación del poder absolutista, tanto tras la usurpación napoleónica como de las ideas liberales surgidas en España a raiz de la Revolución Francesa. La fecha es 4 de mayo de 1814. El contexto histórico ha sido señalado en el autor. Cabe recordar la situación histórica tras la derrota de Napoleón, La Santa Alianza decide tras varios congresos, en el que destaca el Congreso de Viena, tanto restaurar los monarcas absolutos en los respectivos tronos usurpados, como de la remodelación del mapa de Europa, con sus nuevas fronteras, y el recompensar con territorios y ventajas a los vencedores (Inglaterra, Austria, Prusia y Rusia). Fernando VII regresa al trono después de finalizar la Guerra de la Independencia y con la firma del Tratado de Valençay (1813). en su ausencia la Junta Central había constituido la resistencia política y convocatoria de las Cortes de Cádiz, en ausencia del rey promulgaron la “Pepa” en 1812 de clara ideología liberal (soberanía nacional, monarquía limitada y hereditaria, división de poderes, derechos fundamentales de los ciudadanos, sufragio universal masculino e indirecto) y otros decretos y leyes que eliminarían el Antiguo Régimen (supresión de señoríos jurisdiccionales, Inquisición, gremios; señoríos territoriales pasan a manos privadas…) Estamos pues en 1814 Fernando VII regresa de Francia, donde había permanecido cautivo durante la Guerra de la Independencia, y se dirige a Valencia. Tras la una primera aceptación de la Constitución de Cádiz, reniega de ella y del liberalismo, y tras el Manifiesto de los Persas, donde las corrientes absolutistas le piden volver al absolutismo y el apoyo del ejército, y el entusiasmo popular con que es acogido (el pueblo le llamaba "El Deseado"), publica el Decreto del 4 de Mayo anulando la obra de las Cortes de Cádiz. El consejo de Regencia había mandado a un diputado a Valencia para que el Rey firmase la Constitución, y se había proclamado que hasta que el rey no la firmase no debía ser reconocido como tal, pero el rey declara nula la Constitución y comienza el sexenio absolutista, cuyas medidas son: restablecimiento del régimen señorial, de las instituciones antiguas, de la Inquisición, supresión de la prensa libre, etc y una cruenta represión hacia los líderes liberales (detenidos, asesinados o el exilio). Vamos a analizar las principales ideas. La primera idea es la de la reivindicación de su legitimidad como rey (hereditario y por derecho divino) en le línea uno y dos del primer párrafo “Dado que la divina Providencia por medio de la renuncia espontánea y solemne de mi augusto padre me puso en el trono de mis mayores ...” .En esta declaración hace referencia a la abdicación de Carlos IV en su hijo, Fernando VII, tras el Motín de Aranjuez (19 de marzo de 1808) que asimismo justificar primero en el amor que le profesa el pueblo “.... demostraciones de amor y lealtad con que el pueblo de Madrid ...” como a referencia a la política llevada a cabo por Manuel Godoy, valido de Carlos IV durante la última etapa de su reinado”... reparar los males a que pudo dar ocasión la perniciosa influencia de un valido durante el reinado anterior. Más abajo, en el último párrafo también la idea paternalista característica del despotismo ilustrado “mis pueblos y mis súbditos”. Pero la idea principal es que tras la Restauración, Fernando VII expone claramente su postura absolutista y su intención política de restaurar el Antiguo Régimen, anulando y dejando sin efecto toda la labor política de las Cortes de Cádiz y de la Constitución de 1812. “....no jurar ni acceder a dicha Constitución ni a decreto alguno de las cortes generales y extraordinarias, y de las ordinarias actualmente abiertas [...] sino a declarar aquella constitución y tales decretos nulos y de ningún valor y efecto...” El rey no reconoce a las Cortes extraordinarias, en tanto fueron convocadas e iniciaron su labor fuera de la tradición de las Cortes españolas, por lo que las considera una usurpación del poder, que solo le correspondía al Rey. Por eso declara nula toda la labor legislativa restaurando las instituciones del Antiguo Régimen como la Inquisición, la Mesta, el régimen señorial. La tercera idea sería la explicación histórica de su ausencia, ya que habla de su prisión y la de toda la familia real en Bayona durante toda la Guerra de la Independencia (1808-1814).Y la justificación de las abdicaciones de Bayona (6 de mayo de 1808) por las que Napoleón se hace con el trono español cediéndolo posteriormente a su hermano José Bonaparte (José I)”....a perfidia de Buonaparte,.....quise, pasando por Bayona, preservar a mi pueblo......Reunida allí la real familia, se cometió en toda ella, y señaladamente en mi persona, un atentado [...fui privado de mi libertad y de hecho del gobierno de mis reinos. [...] “ Por último en la frase “me han informado personas respetables ….” se refiere al “Manifiesto de los Persas” documento que le presentaron un numeroso grupo de diputados absolutistas publicado el 12 de abril de 1814, pidiéndole la vuelta al Antigu Régimen. Así en Valencia el general Elio invita al monarca a recobrar sus derechos, poniendo sus tropas a disposición de Fernando VII. Como conclusión podemos afirmar que este documento muestra la pugna ideológica que tiene lugar en España y Europa en el siglo XIX entre el absolutismo y el liberalismo . En el reinado de su hija Isabel II continuó el conflicto, en el contexto sucesorio de las guerras carlistas, pero que no era más que una lucha entre absolutismo (carlistas)y liberales (isabelinos).