..\ñn XXI REVISTA MEDICA DE COSTA RICA PUBLICAcrON MENSUAL OR(.A:,\'(} DEL COJ.EG.lü Ufo: MEDICOS \' ('IRl:JA!'\OS l' DEI.. CE="l'RO UE ESTUUJOS MEDICOS "l\IORF:NO C-..\lQ.-\S" Secn~t :uiu d,' Redllcd(,n DR. E. GARCIA CARlHLLo Din'ctor nI<.•J().~Qn~ ZE:I.EDO~ CUERPO CONSI:LTIYO: Dr Ur. RonltlGO LoInA COR'I't:S l\tfnlst PJ tilO $alubrlda(] Púhlica JORGE nE !\IEZI¡;RVILLE Prf'~jtlt"lIlt> d.. t Colt'gio de !\1~dicoll ., Cirujanos VIL :\:"\'r0:\"10 PF.~:\ CI-JA\·-ARRIA Ulrt'dor tIc! Hns)Jital "San Juan lIt' Dios" Sumario: 1. Enfermeciark'¡,; oc' GauciH:r :: :"iemann Pick r~'fJr 105 DOf·torJ'!>: .\Ji H,)dríglll'Z .-\('uña. i\1ariu Miran ti;, GutiÍ'rrf'z y HodulJo Ci'sPed~s ~9 t:dulIrdu Pala('iu~ l-"Ian:.ls. Ln Habana (Juba 56 2 Prolf'inas y ..\minmkido~: Su rol nlltritiYo. t('rapt-uUco y furma{,l't1li('o. por el Pruf. Dr. _. 3. , TubE'l"('uJosi:-: COOJO factor responsable dI.' (-{'accione:'> positi\·<.!:, de \Vida! ~' de- \Veil-Fclix. por .-\. Brt'nl~S Jbarra .. . La energia Atómica p!"Ornesa de una \'ida mejor Corte~ia de la Embajada de !(i:-:; Est:ldCl~ Unidos dc ;";or1e América 5 Informaciones MediC'3$ L 61 -., ,- s.-\~ JOSE: COSTA RJC.~ DIRECCJON y AD~nNJSTR!~('JOS: 4.PllCtutlO 9i8 Tf'!éfuno 2920 REVISTA MEDICA DE COSTA RICA Ai'!.o XXI I San Jo~é. C. R. S9 239 Marzo de 19M \Tomo XIII ENFERMEDADES DE GAUCHER y NIEMANN PICK Dot'ton's: Al! Rodriguez A('una. :lIarlo Miranda GuUérrn, Rodolfo Céspedes Fonseca Introdu('clón: Las similaridades clínicas y etiopatogénicas entre las enfermeda_ des de Gaucher y Niemann Pick han hecho que ambas sean estudiadas en conjunto señalando más bién las diferencias que las semejanzas. El €!'tudio de un caso clínico nos ha impulsado a llevar a cabo una revi:.ión general de este problema. ya que estas enfermedades no son ntuy frecuentes pero se prestan para demostrar en forma muy ilustrativa lao; alteraciones histocitológicas que son causa y consecuencia de la enfer· .:"!edad. EnfE"rmf"dad dt> Gaueher: Enfermedad a menudo CamiHar. pero cuya manera de hcredarse permanece incierta. La enfermedad por 10 gzneral aparece en la infan_ da pero también en la juventud y en la edad adulta. No es incompatihle con una larga sobrevida. Morgans (6) menciona un caso en que ~t diagnóstico fué hecho a los 67 años de ed3.d. En la serie mencion!da por \Vintrabe (8) de 71 ca.sos, el diagnóstico se hizo antes del octavo año de edad en el 56% de los casos. Se menciona la mayor frecuellcia ron que aparece la enfermedad entre los judios, sin que sea exclu....ivll de esta raza. ~lntomatoloJ{fa: Los hechos más importantes y frecuentes son la esplen:>megalia, que puede ser notable, hasta producir aumento de volumen del abdo men y sensación de pesantez debido a su considerable tamaño. La he patomegalia seria frecuente y no de mucho menor importancia que la es REVISTA MEDICA. CoSTARRICENSg JJlenomegalia según algunos autores (3) aunque según Wintrobe (8) ps un signo tardío. Hay tendencia a las hemorragias en las encias. En ccrea de un 70o/t: de los casos se observa una pigmentación pardusca de la piel. Puede haber dolores óseos debido a la invasión del esqueleto por las células de Gaucher. La presencia de pingUéculas es especialmen. t~ frecuente en la enfermedad y el estado general está conservado en la mayoria de los casos. Los haJlazgos hematológicos más constantes ~on los siguientes: anemia ligera o de grado mediano, de tipo normo_ crómico y sin evidencias de hemoJisis, leucopenia con Jinfocitosis y trombopenia d~ grado variable. La colesterolemia es normal. Tanto en el bazo como en la médula ósea se pueden observar las células de Gaucher Que se caracterizan por su gran tamaño (30, 50 y aún SO-micrones) por poseer uno o varios pequeños n(¡c1eos por lo ge. neral de posición excéntrica y cuyo citoplasma es abundante y está lleno de pequeñas fibrillas que le dan el aspecto de papel machacado. Entre las fibrillas citoplasmáticas se acumula la kerasifl8. un lipoide d~ estructura eompleja. Enrerm{"dadr~ <Ir Xlrmann PI('k: Es una condición similar a la enfermedad de Gaucher. Sólo se observa en la infancia y tiene mayor tendencia a aparecer entre los juüios que el GauchE'r, hay un predominio en el sexo femenino y los hec~hos más importante son hepatoesplenomegalia. pérdida de peso, tras~ 1ornos digestivos, palidez cérea y detención del desarrollo mental. Los hallazgos hematológicos son similares a los encontrados en la enfermedad de Gaucher ron anemia. leucopenia y trombopenia. El colesterol !-anguineo puede estar aumentado. La enfermedad sigue un curso má~ rápido que la de Gaucher y el compromiso del estado general es la etar. a final casi obligada. En la médula ósea y el bazo se encuentran las células de Nie_ mann Pick, que son grandes, con un diámetro promedio de 40 micrones, con uno o dos núcleos pequeños y con un citoplasma claro, formaeh por múltipies y pequeñas vacuolas cargadas de lipoides. Desde lm.'g, J, el compromiso del organismo por estas células es difuso y a 111 ilutopsia se encuentran en todos los órganos. Los hechos más importantes que diferencian ambas afecciones rnn la casi exclusividad Qn la primera infancia en el Niemann Pick lo mismo que su curso más rápido y ya en el aspecto citológico detallado. el hecho de que el cit~plasma de las céculas de Gaucher es HbriHar. mientras que el dc las células de Niemann Pick está formada por pe.. queñas vacuolas. El diagnóstico preciso de ambas afecciones se realiz::l por medio HE\lSTA MEDICA COSTARRICENSE ,:e la punc;ón esplénica o de la médula ósea. Esta última ha venido practicarsc con más frecuencia últimamente, J.·a que carece de los pe" lIgrcs que tiene la punción ciega del bazo. .1 En el terreno puramente clínico, las afecciones que pueden exi. :-:ir un diagnóstico diferencial serían la leucemia mieloide crónica, Id :t.etaplasia mieloide. la malaria crónica. la esplcnomegalia . ~iop¡itica y ,·casionalmente la enfermedad de Hodgkin. 'J R.\T.\MIEXTO: Es puramente sintomático. La esplcnectomia puede lon resultados transitorios. prncticars~ C.\SO ('I.IXICO: M.E.U.D. de s('xo femenino, raza hlt'nca, de 2 años t'uad. Procedente de San l\figucl de Desamparados. ~. :; n1(.'1;C5 d" La paciente ingresó a la sección de Pediatría del Hospital San Juan de Dios el 26 deo :"Iayo de 1953 COn el diagnóstico provisional de f.:.¡mor dp. Wiims. AntecedentC's mérbidos: Antecedentes familiares: La niña tiene ambos paaI..?s v;vos y 4 her· manos mayores de 7, 10, 11 y doce año:,:: respectivamente. En !lingunu ce estos parientes se hJ encontrado signos o síntomas que sugieri.:n la enfermedad. ¡\XA:\IXF.SIS: Desde hace un af;o los padres de la nll1a han notado que le esta <'Tedendo un tumor en el abdomen, y que aparentern.ente ha comenzado R enf]flquecer y a hir.chársele los pies. EX,\ "EX F1~ICO; Niña en r ~gubr estado nutritivo, que no daba apariencia d<:! ('star gra"cmcnt' enferma, con paHdez discrcta pero franca de piel V mucosas. Pulso 105 por minuto, afebril. Pnlidez franca aunque no int('nHa de conjuntiva ocular. ligero catarro nasal, boca con mucosas pá'idas, cuello sin alteraciones, pulmones sonoros con escasos ronclls di~ ';elninados, cor.- zón de tonos normales. Abdomen francamente globulo~o, depresible ~ indoloro. El higado se palpa a tres traveses de dedo bajo el rebord! costal, de borde cortante y consistencia aumentada. El l'8zo se palpa muy aumentado llegando por abajo casi hfu;:ta la cresta :Jiaca y hacia adentro hacia la línea media, de consistencia aumentada, muy uniform(', superficie lisa y conservada' su forma, aun las escotadu. ras del bord'l interno. No se palparon adenopatias. 52 REVISTA l\lEDICA COSTARRICENSE EsJudJos de laboJ'atorlo: En el examen de heces se encontraron huevos de ascárides y muchas b8ct~rias. El examen de orina rué normal. V. D. R. 1.. Y Khan ne.. gativos. El primer hemograma que se practicó, sin que el diagnósticl') hubiera sido todavía establecido en forma definitiva, di6 el siguiente ""Bullado: Hemoglobina: 10 gros % Eritrocitos 3.320.000 por mm3. Leucocitos 3.600 con la siguiente fórmula: Segmentados 24. linfocitos 74, monocitos 3. El estudio hemato16gico se inició por el interés que !Jresentaba una esplenomegalia de tal grado en una niña de corta edad ·:,?n un estado general más bien conservado. Se practicó primero una punción esplénica con aguja N 20. Los frotis practicados con la escasa ~antidad de material obtenido fueron teñidos con MyGrunwalt Giemsa. El examen de estos frotis puso de manifiesto la existencia de un buen número de células rr.uy grandes (unos 30 micrones) con núcleo pequeño bien teñido, (on citoplasma muy claro, Que al ser observad') con inmersión evirlenció una estructura finamente vacuolar, espumosa. '-Toa vez con la certeza de Que estábamos ante una de las t'enfermeda. des de almacenamiento" como se les ha )Jamado, el estudio del pacien. ¡e se completó con Jos siguientes exámenes: Colesterolemia: 204 rngms% Eritrosedimentac:ón: 45 mm en 1 hora. Corregida: 30 mm en una hora Hematocrito: 33 cc por 100 cc de sangre Tiempo de coagulación: 4 minutos TiemPo de sangrado: 1 minuto Recuento de plaquetas: 48..800 por mm3 Un contdol de hemoglobina, glóbulos rojos y leucocitos dió los siguien~ tes valores respectivamente: 11 gms %, 3.910.000 por mm3, 5240 por mm3 Se practicó un mielograma con el siguiente resultado: Célu!,as nucleadas por mm3: 145.500 Megacariocitos por mm3: 77 por mm 3 Basófilos inmaduros O !3asófilos maduros O Eosinófilos inmaduros 3.6 Eosinófilos maduros 0.4 Mieloblastos 0.8 PromieJocitos neutrófiJos 1.2 Mielocitos neutrófilos 17.6 Metamielocitos neutrófi10s 84 Baciliformes 23.2 Segmentados 6.4 Monocltos 1.2 Linfocitos 8 R.~VISTA MEDICA COSTARRICENSE 63 Plasmocitos O Norrr.cblastos basófilos 20 Ncrml)blastos policromat6filos 7.'2 NormcbJastos (,rtocJoromáticos 0.8 Abl!ndantes Células del estroma. Elementos extraños: Se contaron 600 células gigantes, no megacarioci. tos par mm3. El examen de los ffotiS coloreados mostró gran número de clc_ lT'.ento~ semejantes a los descritos en el bazo, con uno o dos núcleos b:en teñidos con citoplasma abundante finamente vacuolar pero qU.~ tcmaba mal los colorantes. El análisis del mielograma muestra una densidad celular aumentada. abundante megacariocitos. desviación a )a izquierda de la serie granulocitica y predominio de eritroblastos basófjJos. Creimos en la conveniencia de practicar estudios histológicos tan. to de la médula como del bazo en esta paciente. Los autores Weisberger y Durnm (7) han logrado este resultado incJuyendo Jos fragmentos medulares que resultan de la aspiración medular en plasma, el cual ('oaguian después con cloruro de calcio 0.25 M. Como encontrást!mos algunas pequeñas dificultades en seguir este método, ensayamos la gelatina nutritiva Difco (Nutrient GelatinDifco) que tiene la ventaja de licuarse o solidificarse con pequeñas di.. fl?rencias de temperatura. cercanas a 379C. Entonces incluimos los fragmentos de médula que resultaron de la aspiración medular en un~ pequeñ3 cantidad de gelatina. que después fué colocada al refrigerador J>8ra Que solidificara. siendo fijada después con formol al 10%. Un pro. cedímíento similar se siguió Con el material que se extrajo en una nueva punción del bazo. practicada con una aguja calibre 18. El Departamento de Anatomía Patológica informó en la siguiente forma sobre el estudio de los cortes que se obtuvieron con el método .nencionado. OrJgen ce la pieza: ba20, médula ÓSea Reporte: Dos coágulos de gelatina COn tejidos en su espesor. E. Histológic'o: tanto la muestra de médula COJno la de bazo, a más de los elementos propios presentan una cantidad de células grandes d~ núcleo relatívatr.ente pequeño y citoplasma cIaro abundante y de aspecto espumoso como en las descritas en la Enfermedad de Gaucher. Dichos elemtmtos son más abundantes en la muestra de médula. Se practicó el siguiente estudio radiológico: Enema opaco: el enema opaco muestra un cojón de tamaño. forma y situaCión normal. La sombra hepática aparece de tamaño grande, Dr. Morúa. REVISTA MED1CA COSTARRlCENStl Radiografía del tórax (oblicuo y frontal) Campos pulmonares despe~ jadas. Hubo artemás otros exámenes complementarios: Búsqueda de hematozcarios: negativa. Aglutinación para antígeno Eberth O. H. pal'atíficos A y B Proteus OX19 'l nruceUa abortus: negativas. .t:\'oluC'ión y tratumli"nto: El paciente ha sido febril durante toda su hospitalización. Fiehre intermitente que rara vez llega hasta 38, alcanzando por lo general hasta 37.5Q C. Contrajo sarampión mientras estaba hospitalizado. H~ sino tratado con medidas tendientes a mejorar su e:;;tado general. COIUl"otnrto: Aunque desde el ptJnto de vista clínico en este caso es imposible decidir si se trata de una enfermedad de Gaucher o de Niemann Pick. !.1 observación detallada de las células patológicas observadas que preselltan un citoplas:na claro y formado por vacuolas pequeñas y numermas, plantea má~ bien la existencia de una enfermedad de Nicmann Pick. A e3te respecto es importante subrayar que los cortes histolé~ gil'oS no dan un detalle suficiente como para decidir de cual de las dos afecciones se trata puesto que esto depende de la observación dt~ la intima estructura citoplasmática. CrCL'mos de importancia hacer una cIara diferenciación entr(' 13s dos afecciones puesto que el pronóstico es diferente y desde luego, menos favorable en la enfermedad de Niemann Pick. En el. estudLo del caso que hemos analizado, hemos haUado los siguientes hechos: una notable esplenomegalia; ademas en uno de los recuentos de l~ucocitos practicados se encontraron 3.600 glóbulos blan· ron COn 74 r¡; de linfocitos; el recuento de plaquetas dió 48.. 800 por rnm:l ~. ha habido anemia com,tante. de tipo normocrónico, que oscila entr.:!' 3.200.000 y 3.900.000 eritrocitos por mm3. El mielograma PU5() de manifiesto un crecido núm~ro de células extrañas. pero también una den. ;.idad celuJar aUlr.cntada, tomando en cuenta sóJo los elementos precur:-:ores de 135 tres series normales. El análisis de la distribución porcentia! reveló dcsviacién a la izquierda de Ja serie granulocitica y porcen~ Iaje predominante deeritrosblastos basMilos. Toces estos hechos proporcionan fundamento para agregar al (liagnóstico de enfermedad de Niemann Pick. el de hiperesplenism . . . 8N.und:lrio. El. concepto de hip~resplenísmo secundario ha nacido de la oh. servación de Que en toda afección en Que la esplenomegalia es un hecho importante, se produce fre~uentemente leucopenia, y más rara vez ~..nC'mia y trombopenia. Todo C'sto en presencia de una médula Que de. 55 muestra densidad celular normal pero que también puede presentar una detención de- la maduración en una o las tres series, eritrocítica. granulocitica, megacariocítica originadas en la médula. En definitil'a, ("1 diagnóstico correcto de hiperesplenismo sólo se puede establecer post-opcratoritmente, al normalizarse con la esplenectomia las alte· raciones hematológicas periféricas. Nos hemos inclinado más bien hacia un fenómeno de hiperplenis~ mo para explicar las alteraciones hematológicas periféricas, más bien que hacia un mecanismo de mieloptisis. a pesar de estar invadida la médula por elementos extraños, basándonos en una buena densidad dl" elementos propios medulares. Deseamos subrayar la importancia que tiene en el diagnóstico <:orretto de este tipo de afecciones la punción esternal y la punción de bazo. Ya mencionamos la mayor seguridad que ofrece la extracción de médula esternal. COSCLl'SIOSES: 1. Se revisan los aspectos generales de las enfermedades de Gau· cher y de Niemann Pick. 2. Se presenta un caso clinico en C'Je al anáJisis de las caracte· risticas citológicas y clinieas establece el diagnóstico de enfermedari de Niemann Pick. 3. Se comenta )a existencia, además de la enfermedad original. ·ie fenómenos de hiperesplenismo en este caso, basándose en )a esple.. nomegalia los hallazgos en la sangre periférica y en la médula ósea. . 4. Se sut.raya la importancia de la punción del bazo y de )a mé. lula ósea en el diagnóstico de estas afecciones. IlIJlLlOGRAFIA: 1. 2. J. 4. 5. 6. 7. 8 CasUe, W.B. Year Book 01 Medicina. 1951. 340.' Demeshek, W. Estren. S. Hypersplenism. M. CHn. North América 34:1271- 1289, Sept, 1950. Groen, J. Garrer, A. H. Adult Gaucher's di:;ease with special refe· rencc to variations in its clinical course and value of Sternal punc" ture as an aid to its diagnosis. BloO<! 3:1221-1237, 1948. Leitner S. J. Bone ~f3rrow Biopsy. Grune & Stratton. New York, 1949. MoeschHn. La punción del bazo, Ed. Morata, Madrid, 1952. Morgans, M. E. Gaucher's disease without splenontegaly. Lancet 2:576-578, oct. 18. 1947. Weisberger. A. S. Dumm R. M. InvolVement of bone ntarrow Í11 diffuse pulmonary disease. Archives of Internal Medicine 91 :212· 223, 1953. Wintrobe, M. M. CHnical Hematology, Thirc edition Lea & Febige~ Philadelphia, 1951. REVISTA MEDIe... CoSTARRICENSE PROTEINAS y AMINOACIDOS: Su rol nutritivo, terapéutico y farmacéutico Por el Proí. Dr. Eduardo Palacios Planas - La HaOana, Cuba. 1I0L XI;TIIITIVO El capítulo más interesante y sugestivo relativo a la nutrición humana es el que se refiere a las l)roteinas y sus productos finales de degradación o unidades estructurales, los aminoácidos Mientras los demás grupos de substancias que entran en la ali· mentación del hombre, son de naturaleza sencilla ~ de función específica, las proteínas tienen una estructura compleja y una función múltiple en el organismo. los carbohidratos y las grasas tomadas de las fuentes de alimentación naturales van acompañadas de pocas substan~ cias que las impurifican, y si se tornan después de extraídas, generalmente son casi puras. No sucf'de esto can las proteínas, las cuales van s:empre acompañadas de otras substancias alimenticias. La estructu· ra molecular de los glúcidos y líp~dos no está vinculada a otro grupo de substancias, corno ocurre con los prótidos. Este es el carácter nutritivo más importante de las proteinas: servir de vehículo de otros alimentos. fiEica o químicamente. Este CD.~ rácter nega a Ser funcional en lo relativo a los alimentos termógenos, ya que bien es conocido el hecho de transformarse en carbohidrato:; y grasas, cuando las dietas son deficientes en estos alimentos; lo qm' no ocurre con estos últimos, que son incapaces de suplir o convertirs(~ en prcteínas. Las grasas y los carbohidratos no están vinculados a la vida como lo están las proteínas, ya que estas, como "componentes universales de los tejidos" son las que caracterizan la vida. La vida como dijo Max Verwon: "es el modo de ser de :a materia albumin6idea proteica". Este modo de Iiler de la materia proteica depende esencialmente del NITRO GENO, ausente en los lipidos y glúcidos. La vida, en último extremo, es la expresión de la conducta quimica del NITROGENO, con su la· bilidad" cambios de valencias etc., da lugar a las más variadas con~ figuraciones dinámicas en el campo de la química. Si la estructura orgánica viviente es, primordialmente proteica. se infiere que la primera función de las proteínas en la alimentación es la de la rpparaclón, ('rec'imh'nto y rel)roduc('lón. Esta función que pudieramos considerar, desde un punto de vista estático, implica una función dinámica, de importancia extraordinaria como la integración de los mecanismos antigénicos, antitóxicos, antianemicos, oxi-reduc tores, ácidobásico y otros. Si para mantener la vida y la salud normales se necesitan cantidades adecuadas de glúcidos, lipidos, sales minerales, vitaminas yagua, resulta imprescindible la ingestión diaria de una cantidad de protei REVISTA MEDICA CoSTARRICENSE 57 nas para cumplir las funciones que anteriormente señalamos. Sin entrar en discusiones, se ha convenido en que el mínimo proteico higiénico sea de, 1 Gm. por Kg. de peso, cantidad que varía según la edad, el sexo y la función. La normal ingestión de este mínimun ofrece dos cifras normales en la sangre: 7% de protcinJs y 7 mg. % de aminoácidos. Los términos hiper o hiPopl'oteinemins e h'per o hipoaminoacidemia, corresponden a aumentos o disminución de estas cifras. La administración diaria de 1 Gm. por Kg. de proteínas pare:ía sufieente para mantener un balance postivo de Nitrógeno; pero pronto las experiencias de Rose Mendel y Osborne, demostraron la inexactitud de esta apreciación. Muchas proteínas dietarias como la gliacina del trigo y la zeina del mah:, son incapaces de mantener el balance nitrogenado y. por tanto. el crecimiento de los animales ele experimentación. Cuando se ha conocido )a comPosición aminoacid{~­ mica de Jos proteínas este hc':"ho ha tcmido explicación, y han ap:lrecido los conceptos de esenciabiJidad de los ácidos aminados y del ,'alor hloló~i('o de las proteinas. El estudio de los estados de carencia y el empleo de isótopos marcados, han conducido a la división de los aminoácidos en {'st'lIC'ialt's 6 y no esenciales al crecimiento ..... •. . ... Los primeros son capa'_'es. de determinadas p'foporciones, de mantener el crecimiento, y como no pueden ser sintetizados por el organismo. por lo menos. en la cuantia creada por la demanda (para algunos como la arginia), tienen que ser administrados a través de las proteinas exógenas. Las proteínas de alto valor biológico serán aquellas que con· tengan los aminoácidos esenciales. La zeina es una proteina de ba jo valor biológico por faltarle la Jisina y el triptofano, dos aminoacidos e::enciales. Aunque no se han determinado con precisión los requerimientos en cada uno de los aminoácidos esenciales, sin embargo se ha podido saber que, ellos deben estar en la siguiente proporción para mantener el equilibrio nitrogenado: Lisina . Triptofano ...........•........... Histidina ..•....................• Fenilalanina ...........•......... Lcucina ........•................ Isoleucina ,. Treonina ...............•..•....• IVIetionina .....•..•.............. VaJina ,. ,ArB'inina .. , •.. , .••.... , •.....•.. 5.2% 1. 1 '!o 2.0'!o 4.4% 9.1'!o 3.3% 3.5'!o 3.8% 3.8% 3.5% lIS REVISTA MEDICA CoSTARRICENSB La esenciabilidad de un aminoácido, como el valor biológico de una proteína, puede ser discutido y los crIterios modificados. Así la glicocola no es esencial en el crecimiento, pero es indisPensable en su función desintoxicante. El valor biológico de la caseína es efectivo en el crecimiento en un 18%. Pero baja y se pierde cuando disminuye la proporción. Las proteínas animales son de más alto valor biológico que la~ vegetales. pues estas últimas contienen poca Ilsloa. El valor biológIco aproximado puede determinarse por la fórmula. V. B. - N retenido - - - x 100 N ingerido Desde un punto de vista bromatológico es mejor expresar el valor nutritivo de las proteínas multiplicando el V. B. por su digestibilidad. obteniéndose asi lo que se llama tndh'e nutrith·o. l. N. '""" V. B. x digestibilidad (índice nutritivo>' El valor biológico y, por tanto, el índice nutritivo varia con los métodos de preParacíón de los alimentos, con las mezclas de proteinas o adiciones de aminoácidos. La proteína ideal, de más alto valor bOológico, sería aquella que contuviera los aminoácidos esencialeo; en las proporciones que la demanda fisiológica creara. Como no existe; ha)' que valerse de las mezclas y de las fuentes animales y veg~tales en la proporción de un 50% de cada una. Para resumir esta cuestión, lo hacemos con un nuevo plantea· miento: "el minimo proteico higiénico será aquella cantidad de una mezcla de proteínas animales y vegetales que suministren 56% de aminoácidos esenciales en las proporciones establecidlls": Para complementar el requerimiento proteico es esencial el ca· nacimiento de la composición de aminoAcidas de las proteínas dietarias. ROL TERAPEUTICO Las defiCiencias de proteínas en la alimentación crean Un esta· do de carencia: la hipoproteinemia, cuya expresión externa es el ("dema. La hipoproteinemía, crónica ~. la aguda, encuentran hoy recursos terapeúticos para su resolución. Cuando no sea posible el uso de preparaciones a base de proteínas de alto valor biológíco, se recurre a los hídrolisados de proteinas, bien por via oral, o bien por vía parenteral. Existen fónnulas que permiten calcular la cantidad diaria a administrar para llevar al paciente a un balance de nitrógeno en Wl número limitdao de días. REVISTA MEDle/. CoSTARRICENSE C_ (An-Ar) P. lOO 20 30KI + 59 K2d e- cantidad de proteínas necesitada. concentración de sero-albúmína normal 4.6. Ar "" " real del paciente. p = Peso del paciente en Kg. 20 ~'" factor de conversión del peso en volumen de plasma. K! ".. alternativa de la fracción de nitrógeno ingerido retenido. K2 = necesidad diaria de proteína endógena _ 25. d - número de días. 30 - relación entre la pérdida de proteína del plasma y del tejido. También se crean los estados carenciales de animoácidos. Por ejemplo: An = Ausencia de: Enfermedades: TRIPTOFANO Cataratas, vascularización de la córnea. alopecia, úlcera gástrica, anemia hipo-crómica, defectos de la pigmenta ción de la piel, degeneración testicular, inhibición de la reproducción de la mujer. LlSINA Dolores de cabeza, vértigo. anemia y trastornos del estro y producción de leche. FENILALANINA Detención del desarrollo hormonal. METIONINA ••••••••• •• .•••• Nefritis hemorrágiea•. cirrOsi¡ hepática. caida del ezufre InorgánicG, pérdida del poder desintoxicante. VALINA Trostornos nerviosos, Pérdida del apeo' tito, incapacidad en la coordinación de los movimientos. ARGlNINA Anemias, hlpospermia, testicular. HISTIDINA Anemias, úlcera gastro-duodenal. degeneración LEUCINA ISOLEUCINA Trastornos desintegrantivos. 60 REVISTA MEDIC.A. CosTARRIC'cilSt: La aminoácido-ter::lpia racional es nueVa y arranca del empleo pcr Faots y Tivolle del triptófano y la histid:na en el tratamiento de la anemia perniciosa. Empíricamente ha sido usada a través de las prep.lr.1cicnes de glándulas y órganos por vía oral, pues a los productos de la degradación proteínica ha debido en gran parte, sus virtudes terapeúticas. 1l0L F AIlMACEUTICO Un anchuroso campo a la investigación. a la industria y al co· mercio abre este maravilloso caPítulo de las proteínas, sus hidro lisados y los aminoácidos. A la investigación, porque nuevas fuentes de proteínas del alto valor biológico se pueden obtener, sobre todo cuando estamos frente a un mundo que sufre la gran crisis de la alimentación; y nuevas actividades en el laboratorio clínico se pueden emprender, determinando cifras de proteinas, sus fracciones y aminoácidos en tejidos y liquidas orgánicos, para ofrecer datos para el mejor diagnóstico de mu chas enfermedades. En la lepra hay una hipcrtroteincmia, en la tuberculosis una hipoproteinemia, en la diabetes una caida de azufre inorgánico de glutathión y de aminoácidos azufrados, en el cáncel" una inversión del ácido ~lutRmico y caida del Glutathión para no citar más. A la industria, porque la producción de proteínas a bajo costo, de hidrolisados y ácidos aminados, encuentran mercado halagador para estos recursos dietéticos y terapéuticos. Al comercio, Porque hoy dia can el conocimiento de las virtudes de las preparaciones de proteínas, hidrolisados y aminoácidos, coroo suplementos aUmentarios y como agentes terapeúticos, cubren casi un 257" de las especialidades farmacéuticas si excep~uamos a los antibióticos. Con esta charla, ilustrada por la película, en donde se han tocado débilmente algunos tópicos, y que de ex-profeso hemos dejado otros para establecer la discusión, hemos querido despertar el interés sobre un grupo de substancias que tienen más de un siglo de existencia y que aparecen en la actualidad como novedosos, y que 10 son, ciertamente" en cuanto al aprovechamiento de sus grandes virtudes dietéti· cas y terapeútícas. ~EVISTA MEDICA COSTAkRICENS~ gl TUBERCULOSIS COMO FACTOR RESPONSABLE DE REACCIONES POSITIVAS DE WIDAL y DE WEIL-FELlX A. Rrf'neR Iharrn * En dos trabajos anteriores hicimos come-ntarios acerca de los problemas más frecuentes en nuestro medio en relación con la interpretación de las reacciones de aglutinación de Widal y de Weil.Felix. Hemos hecho hincapié en que dichas reacciones "per se" poseen un valor sumamente limitado en el diagnóstico de infecciones del grupo tifo-paratifico o del tifus exantemático, a menos nne sean correctamente interpretadas. Su valor aumenta cuando se practican exámenes en serie pero aún así no son sino un complemento al diagnóstico elaborado a través de la historia clínica, exploración fisica y observación diaria del enfermo. U, 2) En el presente trabajo nos referimos a la tuberculosis como factor responsable de reacciones de aglutinación de Widal y de WeilFelix positivas en ausencia de tifoidea, fiebres paratificas, vacunación TAB o tifus exantemático. Utilizamos material clínico estudiado en el Hospital San Juan de Dios y en el Hospital del Seguro Socldl, ambos en San José. Costa Rica. ~rATERTAL CLINJ('O 335 <'nfermos ingresaron al Servicio de Enfermedades Infecto Contagiosas del Hospital San Juan de Dios en el p~ríodo comprendido entre Septiembre de 1946 y Junio de 1949 con diagnóstico de fiebre tifcidea, fiebre paratifica o tifus exanternático. El estudio de los pa~ cientes permitió confirmar el diagnóstico en 307 casos: 253 de fiebre tifoidea, 1 de fiebre parat!fica B y 53 de tifus exantemático. Los restantes 2R casos representan un 8 % del grupo de 335 enfermos en los que no se encontró evidencia de tifoidea, paratifica o tifus exantemático a Pesar de los resultados positivos a titulos más o menos altos de las reacciones de Widal y de Weil~Felix. Más adelante nos referiremas con más detalle a estos :;::8 pacienets, 18 de los cuales presentaban tuberculosis pulmonar activa. En todos estos enfermos del Hospital San Juan d\' Dios se em· pleó cerno antigeno vara la reacción de Weil un cultivo de bacilos tit;cos de 24 horas suspendidos en solución salina normal (cePas de Cos la Rica~. Aproximadamente 900 reacciones de aglutinación se llevaron a cabo en estos 335 pacientes empleando antígenos para el esludio de infecciones del grupo tifo-paratitico. Además. en forma siste· mática se llevó a cabo simultáneamente en todos los enfermos la jn~ • servido de Enff'rrnt"(ladps Infp(,to Contaclmms San Jllan de Hios, San José, Costa Idea, C. A. d~1 lIospltal 62 REVISTA MEDICA CoSTARRICENSE vestigación de las aglutininas correspondientes al proteus OX 19 brucella 8'/;0.-1:U5. y En el Hospital del Seguro Social estudiamos un gruPo de 47 ca. sos de tuberculosis pulmonar activa desde el punto de viflota de la relación entre esta enfermedad y las reacciones de aglutinación de Widal y de Weíl-FeJix. La investigación en este gruPo de 47 enfermos se llevó a cabo con Antigenos Febriles' Lederle para el ensayo rápido macrcspóp¡co de aglutinación segun el método de Welch y Stuart, utilizando los siguientes antígenos: Tincos O y H, paratíficos A y B, OX 19 y brucella abortus. Así pues. el tot31 de enfermos estudiados en ambos hospitales; rué de 382. El total de reacciones de aglutinación practic~.18S fue de unas 950 aproximadamente. k("a("C'hmps de oglutinaC'lón dp \\'ida) y dt> ""f'II-Fl"lIx l)o!iiith·a~ df'hido a la tllbf'r('uIO!ils pulmonar Es un hecho ya conocido que el suero sanguineo de los tuberculosos es capaz de aglutinar ciertas bacterias cuya infección no se ha presentado en dichos enfermos. Ya en 1932 Madgwick y Partner demostraron que el 34.2 ('le de un grupo de 73 tuberculosos presentaban sueros sanguineos que aglutinaban el baci!o de Eberth a titulas elevados en el curso de lOS tres meses que duraron las investigaciones. Dichos enfennos 110 habían sido nunca vacunados ni habían sido infecta· dos por el ba~i1o tífico. Aglutinaciones negativas o positivas pero a titulas bajos Se constataron en 100 enfermos mentales estudiados romo. testigos. Nosotros hemos tenido la oportunidad de constatar este fenómeno en nuestro medio. Hemos encontrado, además, Que el suero de los tuberculosO! en ocasiones es capaz de aglutinar el proteus OX 19 induciendo a errores de diagnóstico con el tifus exantemático. Como regla general los enfermos que se envían al Servicio de Enfermedades Infecto Contagiosas del Hospital San Juan de Días con diagnóstico de iiebre tifoidea, fiebre paratífica o tifus exantemático hao sido observados por un lapso muy corto, sea en el propio domicilio del padente o bien en el Servicio de Medicina General del mismo hospital. Durante dicho corto periodo de Observación se llevan a cabo unos pocos exámenes de laboratorío. Jos cuales permiten alcanzar un diagnóstico correcto en la inmensa mayoría de los caSos. En esa forma el enfermo es trasladado al servicio especializado en donde se le aísla y Si! procede a confirmar el diagnóstico. Es lógico que ante un enfermo febril Que se ha observado durante unos pocos dias únicamente y en cual se ha constatado una reacción de aglutinación de Widal o de Weil-Felix positiva. la primera impresión del médico es la de que el sujeto sufre tifoidea, paralifica o tifus exantemático. Ya mencionamos anteriormente que de 335 enfermos que ingresaron al Servicio de Enfermedades Infecto Contagiosas del Hospital REVISTA MEDt("~'l CoSTARRICENSE 63 San Juan de Dios Con diagnóstico de tifoidea, paratifka o tifus exan. temático, dicho diagnóStico fue confirmado en 307 casos (92 %). Los ¡'estantes 28 casos representan un 8 % de errores diagnósticos, porcentaje relativamente pequeño si se toma en cuenta que el diagnóstico de cUéilquiera de estas enfermedades resulta bastante dificil durante la primera semana. Dichos 28 pacientes se clasifican como sigue: 4 enfermos ingresaron con diagnóstico de tifoidea. El diagnóstico final fue hemorragia meningea post antiguo traumatismo craneo~ encefálico, leucemia mieloide o linfoide aguda, gripe y salpingitis agu~ da respectivamente. 6 pacientes fueron admitidos con diagn6st~co de tifus exantemático. El diagnóstico final fué endocarditis crónica, pielitis, absceso del pscas, carcinoma del páncreas, neumonía !obar y paludismo respecti· vamente. Los restantes 18 enfermos de este grupo de 28 son los més interesantes ya que fueron los que llamaron nuestra atención al pr:lblema de la tuberculosis como factor responsable de reacciones de Wi· dala de Weil·Felix positivas. En eSOs 18 pacientes se había diagnosticado tifoidea en 13 casos. paratífica A en 1 caso y tifus exantemático en ca~os. En todos ellos se encontró tuberculcsis pulmonar activa. En ninguno de ellOs fue posible encontrar antecedentes de tifoidea, para· tifica, vacunación TAB o tifus exantemático que pudiesen explicar la reacción positiva de 'Vidal o de Weil-Felix. Con el objeto oe determinar la real incidencia de reacciones de Widal o de \Veil-FeJix positivas debido a la tuberculosis pulmonar de~ cidimos estudiar un grupo de sujetos afectm. de di~ha enfermedad desde este punto de vista. Dicho estudio se llevó a caco en el Hospital del Seguro Social en donde se seleccionaron 47 enfermos con tuberculo· sis pulmonar activa en los que no existían antecedentes de tifoidea, paratitica, ,'acunación TAB ('1 tifus exantemático. los resultados fueron los siguientes: En 9 enfermos (19 ~(-) no se presentó aglutinación con ninguno d~ los antigenos empIcados. En 38 padentes (81 t;'c ) las aglutinaciones fueron positivas a los siguientes titulas: Al 1 x 20 en 13 casos. Al 1 x 40 en 15 pacientes. Al 1 x 80 en 8 enfermos. En los restantes 2 enfermos se encontró un título fe 1 x 6e 40 (con el proteus OX 19). Así pues, el titulo de aglutinación fue muy baje. en 36 de estos 38 casos. Aisladamente o integrando una gran variedad de combinaciones se encontraron las siguientes aglutinaciones en orden de frecuencia: Tifico O ....................•. 18 casos Paratítico A 18 Paratitico B ................• 15 OX 19 10 Tifico H ....................• 5 Brucella A\>ortu$ .•.....•.•..• 2 " 6i REVISTA MEDlCA CoSTARRICENSE Aglutininas O Y H se encontraron en 23 enfermos a los siguien.. tes títulos: Tífico O Tífico H lx80 7 casos ., 1 x 40 ..•..•.. 8 lx20 3 lx40 ......•. 3 lx20 2 .. Si tomamos en cuenta que los sueros normales pueden aglutinar el antígeno H a la dilución de 1 x 20 y el antie:eno O al 1 x 100. he· mos de reconocer que los resultados de las reacciones d(' aglutinación con estos antigencos en este grupo de tuberculosos se encuentran den· tro de limites. normales Este estudio no se considera completo ya que no se llevaron a cabo exámenes periódicos de las reacciones con el objeto de determinar si los títulos se mantenían constantes o presentaban variaciones durante el curso de la enfermedad. Por otra parte se debería haber estudiado simultáneamente un grupo de individuos sa- nos co~ control. Así pues, la única anormalidad encontrada en estos 41 tuberculosos desde el punto de vista de las reacciones de Widal y de 'VeilFelix se refiere a los 2 casos de aglutinación del proteus OX 19 t\ titulas de 1 X 160. Como antes dijimos, 4 de Jos 18 casos de tuberculosis pulmonar enviados al Hospital San Juan de Dios con dbgnó,t;c) de tifus exantcmático presentaban la reacción de WeiJ·Fclix F.:Isitiva (a títulos que variaban entre 1 x 120 y 1 x 240). Ello hace un talta) de G casos de reacción de Weil-Felix positiva debido a ia tuberculosis puJm::n:lr. Aun cuando los resultados de este estudio cn Jos tubC'rculc s-:-;-¡ dl'J Hospital del Seguro Socíal fueron normaJcs desde el panto de \·h~ ta de la reacción de 'Vidal. fue precisamente esta reacción h que.' CCII más frecuencia se encontró positiva debido a la tuberculosis en 103 enfermos estudiados en el Hospital San Juan de Dios. Como ya diji~ mos, 14 tuberculosos ingresaron al Servicio de Enfermedades Infecto Contagiosas de este hospital con diagnóstico de tifoidea en 13 casos y de paratítica A en 1 caso. No contamos con observaciones de reacciones de Widal o de \VciJ-Fclix positivas debido a tuberculosis extra pulmonar . Creemos factible que la presencia de focos activos de tuberculosis fuera del aparato respiratorio dé también Jugar a rencciones de Widal o de \Veil-Fclix positivas a titulos suficientemente altos como para inducir a errores diagnósticos como sucede en casos de localización pulmonar. COME:-ITARlO En trabajos pntcriores hemos hechos alguna!! consideraciones REVISTA MEDICA CoS'l'ARRlCENSE 65 en relación con la interpretación de las reacciones de aglutinación de Widal y de Weil~Felix. Hemos señalado que la reacción de Widal puede encontrarse positiva en ausencia de tifoidea o fiebres paratifica'i, no solamente como resultado de reacciones anamnésicas o vacunació.\ TAB sino también debido a la presencia de tuberculosis pulmonar activa o de tifus exantemático. Al igual que la reacción de Weil-Felix puede aparecer positiva debido a tifoidea o a tuberculosis pulmonal' activa en ausencia de tifus exantemático. Por otra Parte pueden encontrarse casos de tifoidea, paratiticas o tifus exantemático en lo.; que las reacciones de Widal o de Weil·Felix se mantienen negativas durante el curso de la enfermedad. En el presente trabajo nos hemos limitado a presentar ejemplos de reacciones de Widal o de Weil-Felix positivas debido a tuberculosis pulmonar activa, Creemos que este fenómeno tiene importancia en un medio en que tanto la tuberculosis como las infecciones del grupo tifo-paratítico y el tifus exantemático se presentan COIl frecuencia. Nuestro propósito al escribir estos articulos ha sido el de hacer hincapié en el indiscutible valor del diagnóstico clínico en el estudio de estas enfermedades pero sin pretender m('nospreciar la ayuda del laboratorio, sin el cual no estaríamos en condiciones de establecer :.m diagnóstico de certeza. A pesar de sus limitaciones, estas reacciones de aglutinación deben siempre llevarse II cabo en todo caso en que se SOsPeche la ex¡s~ tencia de tifoidea, paratificas o tifus exantemático, ya que son relativamente simples de practicar y pueden ofrecer información muy útil, Pt>ro sus resultados no deben ser considerados como definitivos. A otrcs exámenes de laboratorio debe recurrirse si deseamos encontrar evidencia de la infección. Así por ejemplo, si se trata de probar el diagnóstico de cualquiera de las infecciones tifo-paratificas contamos (:on la posibilidad de obtener cultivos de la sangre, heées u orina. Pero en el ca."o del tifus exantemático se pueden presentar grandes dificultades para verificar el diagnóstico ya que exámenes tales como inoculnc:ón al cobayo, prueba de fijación del complemento, prueba de protecc:ón o neutralización con suero de convaleciente, prueba de aglu tinación con susPensiones de rickeltsias, etc., sólo se llevan a cab3 C'n laboratorios especialmente dedicados a esta clase de estudios. Así pues, lt'jos de recomendar que se renuncie a practicar reaecienes de aglutinación de Widal y de Weil·Felix debido a que existen factores que afectan su especialidad. aconsejamos, por el contrario, el familiarizarse con ellas en tal forma que se pueda obtener el máximo beneficio de su interpretación. Constituyen un valioso comple· mento del diagnóstico clínico cuando se analizan con amplitud de cri· terio pero pueden conducir a errares diagnósticos si sus resultados, po!>;tivos o negativos, son aceptados como prueba definitiva de la !lre. 66 REVISTA. MEDIe!. COSTARRICENSE sencía o ausencia de la infección, A y B o tifus exantemático. )'8 se trate de tifoidea, salmonelosis 8e analizan loa re8u.ltadolt de unlls 95(1 reacciones de oglutinaCidt4 de Widal 11 de WeU ..Feli.-r llel'tlda8 ti robo ..it1lllltdtlromettte ~ "8f Aft37'TYlDS des. de el pUNte de viR/a de 8'U relacióft ro" lu fuberculosis pulmOMT actit'a. 8e har.e t'er (Jlle las rea('CiOPleR de Widal U de Wej¡'Peliz pueden opa. TE-Ct!r 1JQBitít"tlR en t:/I:l"MlOR co" tube.curolli. pulmonar activa en aURf'Nr;d de lie/1rea tifoj(IN' t) ptJruH/iroB. tifus exa"temdtico o reaccione. altatnnér-:iNIR. SUMARY 950 Wlda1 aHd Weil~Fe1i:r agl1ltinatiOlf, tests 84in .782 palientl' are atItJ11lzed (Toril th.e viewpoiJd 01 ~hPiT relatj()N lo active pulmonar., tuberculo.nl. 11 il pointetl out thal Widal 1I11d Weil·ft'elir tl'lItll nlay aplJear pasitit'fl '. patieftta ,,cith a.-:ive prllmOtlary tuberculOllis i" the afHtHtCe 01 tNPhoid or .lUrntIlP1¡oia lev'3rs, :,¡lJ;UlIl lever or a,wmnestic 1'eactioJls. The re8~~t~ l)t CQr"',;~ 1 nl1dtmSeo1t8lu (J) BRRNES ¡,,/eclo .t.Y1r.iOtteR Lbout O"t I!7A!~NA. roltt1"i'.JIl:J. p'!r,~(,nJ'es. Algunos allpectoa de nuelltra patolonlo boMJdas en el estudio de 6(}{) obsttr"Jtet.'isla aUdica de Costa Rica", VIII: 2& (febreTO) ABELARno: Cmutideroci{))It~;s .19,.1'. ti} BRENES llJARRA. AHELARDf), .,' •• , •• '., •••• ' ...• , •• lletJIourama. hemocultivo 11 TMOCidtt de fll11llthmr.ión ole W;,lal en .,,. llTUPO de f5.' 00808 de fi#!hre ti/oid&J. "'R. "¡8rt, Mellirtl de CORta 8ioo/' VII: (;1 (Nooil!"mbrej 195'. Gl RE:VISTA MEDICA CoSTARRICENsE LA ENERGIA ATOMICA PROMESA DE UNA VIDA MEJOR * Se Considera generalmente como comienzo de la Era Atómica al dia en Que cayó la bomba atómica en Hiroshima: 6 de agosto de 1945. Desde entonces ,el hombre afronta una vida bajo la espada de D;!mocles de la autodestruccién -la destrucción por los mismos áto· mos Que aprendió a dirigir. Pero la revelación del secreto fiel átomo ha colocado ante el hombre de hoy posibilidades no soñadas Para mejorar su vida, la de sus hijos, y la ete Jos hijos de sus hijos. El hombre deberá decidir cuáJ de estos caminos ha de tomar. Se debatía entre esas alternativas cuando, el 8 de diciembre tIC' 1953, se iluminó el camino hacia su propio bien. Ese fué el día en Que el Presidente Eisenhower propuso a In Asamblea General de las Naciones Unidas un plan para la cooperación internacional en el uso pacifico de la energía atómica. El Plan Eisenhower expuso una alternativa al suicidio potencial del homare. El Presidente Eisenhower esbozó cómo podia el ñtomo s~l'vir a la Humanidad en lugar de destruirla. Dijo que los Estados Uní· dos estarían mAs que dispuestos -se sentirian orgullosos- de tloa· bajar con otras' nacionse por el desarrolJo de planes a través de los cuales se apre!:iurasc el uso pacifico de la energía atómica a beneficio de la Humanidad. El Presidente Eisenhower Propuso que se crease una agencia internacional a la que podrían contribuir materiales fisionables las n~(iones mi('mbro~ "hasta el límite que aconsejase la prudencia normal. " Desde fines de la Segunda Guerra Mundial Jos Estados Uni. dos han instado pl'rsistentemente a un acuerdo internacional qu(' controlase el poder destructor de la energía atómica. Durante ese mismo periodo la Unión Soviética se ha negado una y otra vez a accp· tal' o acordar planes tendientes_ al contl'Ol internacionnl de Ja energia atómica, bajo las Naciones Unidas. El empleo de la energia atómica con propósitos pacíficos ha sido el ilerrotero de la política de los Estados Unidos desde Que se rE'. vejó el secretó del Momo. De acuerdo con esta política, miUares de científicos e ingenieros nortemericanos han estado trabajando para ct"sarrolJar usos pacificas di'" la energia atómica Que serán de incalcula· bies beneficios para toila la Humindad. • ('ortl'sía di' ha EmbnJada de lo~ Estados (roldos dt" X. A. 68 REVIS'l'A MEDICA COST AaRlCENSE uno de los campos pacificos mAs imPortantes en cuyo desarro· Uo se Jabora. actualmente es el de la producción de energia eléctrica atómica. Científicos e ingenieros en los Estados Unidos, y también en la Gran Bretaña, han demostrado ya que el atomo promete oonvertirse en una de las principales fuentes de energía del mundo. Es· t~ es de especial importancia en vista del hecho de que hay mucha$t áreas del mundo que todavia no cuentan con .recursos adecuados de enerJtia de indale convencional. En el camPo de la medicina, los hombres de ciencia dIcen que el uso cada vez mayor de radioisotopos para seguir el CUi.':':' de los medicamentos y de las enfermedades a través del organismo del h01t'I. brc y de los anim!lJes, pudieron llegar a constituir la llave maestra Que abriria el camino a la solución de la mayoría de los problemas más desconcertantes que afronta la medicina. En muchos campos de la agricultura, los radiois6topos estAr. desempeñando un papel cada vez más imPortante. Ya han ayudado a Jos científicos a determinar las mejores formas de utiUzar ferU· Uzantes comerciales. cómo actúan los herbicidas, la forma según la cual se extienden algunas enfermedades que atacan a las p!8nt8~, y la mejor epoca para cortar la caña de azúcar. En la ind~Tria aumenta continuamente el uso de los radiois6t~.. ~ pos. Al igual que los rayos X los isótopos pueden emplearse en 13 iJ'¡,-pecci6J: de los interiores de piezas de metal fundido a fin de de.,,rubrír desperfectos. Más de 200 fundiciones emplean ya los radioisó.. topos para este fin. LA ENERGIA ATOMICA APLICADA AL PROGRESO DE LA MEDICINA Hny un gran interés por el uso de la radiación atómica en el estudio y el tratamiento del cáncer. Ya se están empleando rutinaria mEnte productos de las piJas atómicas para sus dignósticos y trata~ mientos mMicos. ~:stos unaterl..'lles ~Hamados radiOlsótopos- han revolucionado la investigación médica. Los médicos dicen que al mejerar la ,",'Omprensión de las funciones del organismo humano, los ra.. dioisótopos han ht'cho más por la medicina, que cualquiera otra cosa dE'sdt' la invendón del microscopio. Un radioisótopo es, simplemente, una fracción de cualquier ma.. t~r:al que se ha vuelto radioactiva por su exposición a la radiación P.:l una i'ila atómica o en un acelerador de partic.ulas, o puede ser el residuo del mismo proceso de fisión. La radioactividad en el matc~ Tial es inestable y tiende a dispersarse. bberando en ese proceso una o mas de tres clases de radiación. REVISTA MEDIC,\ CoSTARRICENSe 69 En algunas aplicaciones, se utiliza la radiación en sí. Por ejcm~ pIo. hay algunos tipos de radiación que matan células animales y ve· Ketales, y Por consiguiente pueden emplearse varios radioisótopos para destruir algunas formas del cáncer. En el tratamiento del cáncer y otras enfermedades, los radio· isótopos se utilizan más ampliamente como sustitutos del radium. El valor de los isótopos para esta finalidad -se debe a su mayor disponihilidad y a su COS\O relativamente bajo. Además son más fádIes de ma nejar. ApQrte de b,; cirugía, la radiación ha probado ser la cura eficaz del cáncer. Anteriormente se usaban el radium y los rayos X. Ahora. los radioisótopos están sustituyendo rápidamente a esas técnicas más antiguas. Pese a )0 importante que son ya los actuales usos terapéuticos de los radioisótopos, no cabe duda de que se descubrirán formas tú· davia mejores del tratamíento del cáncer y otras enfermedades, a través de la investigación básica en la que se adelanta actualmente. Esta jnvesti~ación se neva a cabo, no sólo en los Estados Unl· dos, sino también en muchos otros paises del ,Mundo Libre. A partir del 1946. la Comisión de Energía Atómica de los Estados Unidos ha remitido más de 42.000 embarques de radioisótopos. q' fueron entregados a más de 300 laboratorios en los Estados Unidos y a más de 150 laboratorios en los otros 39 paises del Mundo Libre, incluyendo a Cuba. Los incontables investi~adores atomistas del mundo libre, consideran cada embarque como un arma potencial y altamente eficaz en la lucha del hombre contra las enfermedades. MAS ENERGIA El poder Pacífico de la energía atómica no es uJ:I sueño futurísta. La Comisión de Energía Atómica de los Estados Unidos lleva algún tiempo generando electricidad experimentalmente, empleando e tal fin el calor de los reactores atómicos para producir vapor, y utilizando después ese vapor para operar turbinas. La turbina genera energia eléctrica. Esa energía se ha utilizado ya experímentalmente en la ílu. minación de edificios, el funcionamiento de equipo de laboratorio; y también para operar un sistema de aire acondicionado. La primera demostración sobre el desarrollo de energía nuclear (':!!ra usos pacificos tuvo lugar en una estación de prueba de la Comi· sión de EneTJ~:ia Atómica de los Estados Unidos, situada en el estado occidental de Idaho. En diciembre de 1951, un gruPo de hombres de ciencia se reuma en una J".t'equeña casa de piedra alrededor de un objeto común un bombillo eléctrico apagado. Uno de aquellos hombres giró lentament~ una válvl,lla. Los demás mantenían sus ojos fijos en el bombillo. 70 REV1STA MI.;v¡CA COSTARRICENSE De repente. rompieron exclamacíones de asornllro. El bombillo historia. se había utilizado el átomo como fuente de enCl'lia controlada. Aquel bombillo eléctrico encendido señaló la aurora de una nueva cra. como ocurrió sin duda Con la primera aplicación práctica de la electricidad. o la invención del motor accionado a vapor. Una vez que los hombres de ciencia hayan logrado reducir el costo de )a enet1o?;ía nuclear .10s problemas que afrontan Jas naciones que sólo disponen de un abasto Jimitado de combustible. o de agua, se aminorarán considerablemente. Además, las bendiciones que represen· tan la electricidad estarán al alcance de regiones de la tierra que se haUan muy apartadas de las fuentes de carbón. petróleo o energía hidroeléctrica. La energía Potencial para uso pacjfico que puedt" obtenerse del atomo supera a lo imaginable. Con sólo una libra de material fisionable. f1Uede obtenerse tanta energía como con 2.600.000 libras de caro bón de piedra o alrededor de 300.000 galones de gasolina. "Creemos Que nos encontramos ya en umbral del uso práctico de la energía del átomo para proveer al mundo de una nueva fuente de energía", dice Lewis L. Strauss, Presidente de la Comisión de Ener gia Atómica de Jos Estados Unidos. "Nuestras investigaciones seña· lan que la energía potencial del material fisionabJe a la vista es por 10 menos 23 veces mayor que la que pudh~ramos esperar de las reservas existentes de fuentes convencionales de energía". Todavia quedan por resolver muchcs problemas antes que la producida partíendo del átomo, para su empleo en propósitos Pacífieos. pueda competir económicamente con otras fuentes de ener~ gía. El problema principal es el costo de construcción. ener~ia Uno de los adelantos más importantes que han podido lograrse hacia la producción económica y práctica de electricidad atómica es el desarrollo del llamado reactor múltiple. Este reactor podria produ. cir energla para propósitos pacificoS' y crear al mismo tiempo el material fisionable que consume. Aunque se halla todavía en sus etapas iniciales. se trata, desde Juego de un adelanto sorprendente. Es como si una persona que habitase en un País frío err.pezase el invierno con 5 toneladas de carbón y cinco de piedra en el sótano de su casa, y luego de utilizar el carbón para calentar su casa durante todo eJ invierno, descubriese que si bien se habia consumido el carbón las piedras se hablan habían convertido. a su vez. en otras cinco toneladas de carbón. REVISTA MEDlt1. CoSTARR1CENSE 71 APUCACIONES DE LA ENERGIA ATOMICA EN LA AGRICULTURA Los hombres de ciencia predicen que la aplicación de la energla atómica y los subproductos de \a fisión atómica significaran a su tlem po mejores alimentos para la Humanidad y aumentarán las cosechas de los cultivos actuales. La aplicación más eficaz de la energ;a atómica en la agricultura ha sino el uso de trazadores radioactivos en los ferti1izantes. Los primeros esfuerzos en este campo revelaron que la irradiación de los fertilizantes no aumentaba su valor en cuanto a suministrar elementos nutritivos a las plantas. Pero al utlizar radioisótopos para seguir el movimiento de Jos elementos nutritivos de los fertilizantes comer_ ciales, la cienda obtuvo una valiosa información. Con anterioridad al empleo de los isótopos, los efectos de los fertilizantes sólo [AJdrian determinarse por las tablas comParativas del desarroUo de las plantas y el rendimiento de las cosechas. En cambio, con el uso de los isótopos ha sido posible descubrir, por ejemplo. si el contenido en fósforo de las plantas ya crecidas procede del fertilizante o fué extraído de los fosfatos naturales del sue~ lo. Los hombres de ciencia pueden seguir los elementos nutritivos en su movimiento a través del terreno, hacia las raíces y por ellas a las plantas, midiendo tanto la rapidez como la extensión de ese movimiento. Pueden determinar, qué etapa de su ciclo de creCimiento es cuando más necesita In planta del fertilizante. Pueden averiguar dónde y cómo debe suministrarse el fertiJizante para que produzca el 'beneficio máximo. Pueden descubrir qué clases de fertilizantes obran mejor en los diversos tipos de suelos. Asi, puede verse fácilmente que se está controlando al átomo para Que sirva al hombre en vez de destruirle. Los Pueblos del mundo tienen ante si la poderosa visión de un modo práctico de empezar a forjar la espada atómica. convirtiéndola en un aracio para la paz. Tienen ante si )a más formidable promesa de salud y bienestar. El Presidente Eisenhower hizo surgir )a más brillante esperanza de paz que ha visto el mundo en los ocho largos años de la Era Atómica. Fup. una llamada a la acción, una clara invitación a la Hu~ manidad para que se una en la gigantesca labor de salvarse de la destrucción atómica ): decida en caminar~e hacia una nueva vid, de es~ plcndoroso bienestar. I~FORYlA{:IO¡o.;ES MEDICAS- Interesantes párrafos de la XXI Reunión del Comite Ejecutivo de la Organización Sanitaria Panamericana (1954) El Dr. Fred L. Soper, Director de la Oficina Sanitaria Panameri· c"'!na. al exponer la situación de los problemas de salud pública en lao; J\méricas. se refiri{ a la constante amenaza de la fiebre amariU!t en el Ueml-~ferio. constiuyendo lIna señal de peligro el continuo movimiento ri~ infección en los animales de las zonas selváticas durante los pasados cinco años y medio. Manifestó Que durante dicho periodo, la infección Je habia extt:naido desde la región oriental de Panamá, a través del Ca· nal hasta el resto del país, avanzando por Costa Rica y Nicaragu=\ hasta H'lnduras, y amenaza Begar a Guatemala y posiblemente a El Salvador. Existe la posJbilidad de Que se produzcan epidemias urbanas en los paises situados al norte. debido a la presencia en ellos del Aedes at'gypti. rr.osquito vector de la fiebre amarilla urbana. La rnayoria de los países dl?"l Hemisferio participan en una continental, patrocinada por la Oficina, 1~a la erradicación de este vector. El Comité recomendó que el superávit en efectivo. $ 144.099. del presupuesto de 1953. se utílice en la intensificación de la campaña con· tera la viruela en las Amérícas. ¡'teniendo en cuenta el hecho de Que .3 erradicación d~ esta enfermedad constituye un problema sanitario ~e importancia mundial". En re!.a.cién a la propuesta presentada p~r el Gobierno de El Salva· relativa a )a organización de un Instituto Centroamericano de Productos Biológicos. el Comité recomendó al Director que estudie la'i ventajas y la necesidad de crear el mencionado Instituto. que seria ~o:;tablecido por las seis RepúbUcas de Centroamérica. con la asistenei-) de la Oficina. -iJf