boletín ECD Watch Marzo 2006 www.oecdwatch.org Contenido 1 Noticias de OECD watch 1 5 años después 2 Miembros de los Parlamentos holandés, británico y canadiense debaten las Directrices 4 Paper informativo de OECD watch: la transparencia y el principio de confidencialidad 5 Desarrollo reciente de los casos 5 El PNC noruego critica el desempeño en materia de derechos humanos de una empresa operando en Bahía de Guantánamo 5 Anvil Mining y el incidente de Kilwa, República Democrática del Congo 6 Visitas in situ – método de prueba y error 6 Confusión en los casos concernientes al oleoducto BTC 7 Pedidos de clarificación denegados 7 Caso Bayer: el PNC mantiene reuniones separadas 7 La transparencia del PNC en el caso australiano contra GSL 8 Pocos cambios en el caso concernientea la represa hidroeléctrica en Brasil 8 La declaración del PNC belga en el caso del Forrest Group – Bruselas, 20 de noviembre de 2005 9 Estadísticas actuales de los casos 9 Actualización Trimestral de Casos 10 Consultas en la OCDE 10 El Comité de Comercio considera la propuesta del gobierno holandés 0 Orden del día de la inversión internacional 1 13Talleres de OECD watch 13 Desarrollo de capacidades en Ghana 14 Taller sobre la cadena de producción – Berlín, diciembre de 2005 14 Empresas en zonas de conflicto – París, septiembre de 2005 15 Actividades en las Américas 16 Noticias de la OCDE 16 La OCDE nombra un nuevo Secretario General 16 Partidas y arribos 17 Los nuevos miembros de OECD watch 17 Research Group for an Alternative Economic Strategy (GRESEA), Bélgica 17 African Association for the defence of Human Rights (ASADHO/Katanga), República Democrática del Congo 17 Defensa y conservación ecológica de Intag (DECOIN), Ecuador 17 FinnWatch, Finlandia 17 Yokohama Action Research Center (YARC), Japón 17 Forum for Environment and Development (ForUM), Noruega 17 The Social Support Foundation (SSF), Ghana 20 Calendario de eventos Noticias de OECD watch 5 años después La revisión de las Directrices en el año 2000 –que contó con un nivel inaudito de participación de ONGs- despertó gran optimismo en la repleta sede de la OCDE: “Si las Directrices para EMNs logran ganar la confianza de empresas, sindicatos y ONGs, podrían convertirse en una de las iniciativas mundiales más importantes de responsabilidad empresaria global, reforzando instrumentos tales como el Global Compact de la ONU. Como lugar de origen de la mayoría de las multinacionales del mundo, la OCDE puede y debe ganarse tal confianza”1. me titulado Cinco años después, OECD watch notó que, a pesar de la creciente visibilidad de las Directrices, los resultados de la gran mayoría de los casos no fueron alentadores2. El detallado informe enuncia ciertos impactos positivos, aunque las ONGs criticaron tanto la falta de transparencia como la inconsistencia en las interpretaciones y la aplicación de las Directrices por parte de los Puntos Nacionales de Contacto (funcionarios públicos responsables de interpretar las Directrices y de tratar los reclamos presentados en base a ellas, en adelante PNCs). Sin embargo, la experiencia de las ONGs en los últimos cinco años ha apagado el entusiasmo inicial. En su infor- En una ciudad que presenció siglos de barricadas, disturbios y protestas callejeras corrió el rumor de que las ONGs invadirían el sector que aloja a la OCDE, el Arrondissement 16. Desde su espacio de reuniones y en un clima de gestión de crisis, los PNCs luchaban por enviar al mundo un mensaje en respuesta a los reclamos de OECD watch. Lo mejor que pudieron ofrecer fue un débil mensaje tranquilizador en el sentido de que los gobiernos estaban comprometidos con el objetivo de tornar las Directrices en una herramienta aún más útil para promover la responsabilidad social empresaria entre las multinacionales3. OECD watch aboga por que los gobiernos introduzcan medidas más rigurosas para superar las malas prácticas empresarias, particularmente en los países en desarrollo. En su esfera individual, varios PNCs consideran que las Directrices han sentado la base para que los gobiernos de los países de origen de las EMNs puedan impugnar la presunta mala conducta de éstas en sus operaciones en países en desarrollo. Arguyen que, tratándose de empresas preocupadas por su reputación, el intercambio –aunque confidencial y con frecuencia informal- incrementa la conciencia de los problemas y las trampas ligadas a la globalización. En consecuencia, las actitudes y prácticas empresarias están cambiando. Añaden que entre las ONGs existe una fe equivocada en la efectividad de las regulaciones vinculantes. Sin embargo, los PNCs no toman en consideración los análisis de OECD watch, sino sólo sus conclusiones. ¿Y cuál es la posición de las multinacionales en este debate? En últimos cinco años, los intentos de los principales órganos empresarios del mundo de diseminar las Directrices entre sus miembros han sido notablemente débiles. MEDEF, la asociación empresaria e industrial francesa, constituye una excepción: el Instituto de Empleadores y la Cámara Internacional de Comercio han comenzado a manifestar públicamente su adhesión a las Directrices de la OCDE, aunque menos por convicción que para esquivar las Normas de Derechos Humanos de la ONU para las Empresas. No obstante, varias empresas comienzan a adherir en forma individual a los procedimientos de las Directrices, un tanto desorientadas por la fragmentación y la proliferación de los códigos de conducta y sistemas de certificación: sólo en los EE.UU. existen 12 organismos públicos con más de 50 programas federales dedicados a promocionar la responsabilidad social empresaria. Empresas líderes de la industria extractiva incluso alentarían una mayor claridad por parte de la OCDE respecto de lo que se considera conducta aceptable en zonas de conflicto. Hay signos que indican un compromiso renovado incluso de parte del Comité Consultivo Empresario e Industrial de la OCDE (Business and Industry Advisory – BIAC), que durante años no mostró más que indiferencia. BIAC anunció recientemente una “agenda positiva” en relación a las Directrices, Boletín de OECD Watch aunque sin revelarla aún, y está apoyando el trabajo del Comité de Inversión en materia de zonas de gobernabilidad débil. En un claro mensaje a los gobiernos OECD watch transmitió la frustración de las ONGs por el perceptible debilitamiento de las Directrices y los reiterados intentos de los PNCs de esquivar los procedimientos. Resulta imposible alcanzar una visión compartida de la dimensión ética de los negocios globales a través de un proceso a puertas cerradas en el cual sólo participan empresas y funcionarios públicos. En este sentido, el afirmar que las Directrices son insuficientes no es novedad y es difícilmente controvertible. Sí sería una novedad que los gobiernos adoptaran acciones positivas… Miembros de los Parlamentos holandés, británico y canadiense debaten las Directrices El informe –y la consternación- de OECD watch sobre el mal proceder de los PNCs en numerosos casos han alentado a miembros de los parlamentos holandés, británico y canadiense (MP) a impugnar la actual forma de implementación de las Directrices. En los Países Bajos y el Reino Unido se han iniciado importantes revisiones del actual procedimiento. Países Bajos En otoño último, durante una consulta general sobre la responsabilidad social empresaria (RSE), la miembro del Parlamento holandés Corien Jonker (del partido gobernante Cristiano Democrático, CDA) planteó varias preguntas sobre la actitud del gobierno holandés hacia las Directrices. En respuesta, la Ministro van Gennip (Ministro holandés para el Comercio Exterior) confirmó que estaba al tanto del informe de OECD watch y reconoció que el gobierno es responsable de promover las Directrices. Respecto de la penosa cuestión del alcance de las Directrices, la Ministro hizo referencia al pedido del gobierno holandés al Comité de Comercio de la OCDE para que realizara un estudio sobre la RSE en el comercio y las cadenas de producción de las empresas. La Ministro se manifestó en favor de un mecanismo de “aprendizaje de pares” tendiente a mejorar el desempeño de los PNCs de la UE. Durante una consulta sobre el presupuesto del Ministerio de Economía para 2006, miembros del partido opositor Ecologista de Izquierda (GroenLinks) inquirieron sobre lo que estaba haciendo el gobierno para que las Directrices fueran más vinculantes; la Ministro van Gennip respondió que se oponía a que los instrumentos de RSE fueran de cumplimiento obligatorio. En noviembre de 2005, dos MP holandés, la Sra. Corien Jonker (CDA) y el Sr. Kris Douma (Partido Laborista – PvdA) participaron en un debate público sobre la RSE en la industria del té, organizado por SOMO en Ámsterdam. El Sr. Douma bregó por la extensión del alcance de las Directrices y en favor de su transformación en un instrumento vinculante. En septiembre de 2005, el Ministerio de Economía holandés comenzó a evaluar el trabajo del PNC holandés, revisando la conveniencia de su actual estructura y funciones institucionales. El decreciente interés en las Directrices contribuyó a motivar dicha evaluación: en los últimos 18 meses posteriores a la controvertida decisión del caso Chemie Pharmacie Holland no se presentaron nuevos reclamos ante el PNC holandés. En el contexto de la evaluación se realizaron consultas tanto con representantes de los diversos Ministerios que integran la estructura del PNC como con representantes de empresas, sindicatos y ONGs. Las ONGs expresaron su preocupación por la aplicación del “nexo de inversión” y la incapacidad del PNC (o su falta de disposición) de tratar casos de índole comercial. Plantearon la ausencia de plazos y de transparencia en la resolución de los procedimientos de instancia específica, y cómo ello las llevaba a cuestionar la imparcialidad del PNC. Aunque varios Ministerios integran oficialmente la estructura del PNC, su secretaría es claramente liderada por el de Economía, cuya tarea principal consiste en promover los intereses de las empresas holandesas. Ello ha incrementado la desconfianza en la imparcialidad del PNC. Las ONGs presentaron una serie de propuestas tendientes a restaurar dicha confianza, como el establecimiento de un ombudsman o comisión independiente dotada de poderes investigativos y responsable de resolver los procedimientos de instancia específica. El PNC reformado podría presentar sus recomendaciones al Ministro de Comercio Exterior holandés, quien sería el responsable último del resultado de cada caso. Otras sugerencias incluyeron la transformación del PNC en un órgano cuatripartito, con representantes de empresas, ONGs y sindicatos. Otros Ministerios –como el de Cooperación para el Desarrollo, Asuntos Sociales y Medioambiente- debieran desempeñar un rol mucho más importante en el trabajo del PNC. Por último, diversos Ministerios podrían liderar la resolución de los diferentes casos, en función de las características de cada uno. Las opciones para mejorar el desempeño del PNC seguirán siendo objeto de discusión. Se espera que el Ministro de Comercio Exterior presente los resultados de la evaluación en abril de 2006. Reino Unido En octubre de 2005, el gobierno británico anunció que realizaría una consulta con stakeholders sobre “potenciales mejoras” a la promoción e implementación de las Directrices por parte del PNC del RU. La decisión se fundó en un informe del Grupo Parlamentario Interpartidario sobre la Región de los Grandes Lagos (All Party Parliamentary Group on the Great Lakes’ Region – APPG), de febrero de 2005, relativo al tratamiento, por parte del PNC británico, de los reclamos presentados por la ONG RAID en función de los hallazgos del Panel de Expertos de la ONU sobre la Explotación Ilegal de los Recursos Naturales y Otras Formas de Riqueza de la República Democrática del Congo. RAID y The Corner House, quienes habían planteado la mayoría de los casos, presentaron una respuesta conjunta4. La consulta del gobierno del RU se caracterizó por su alcance notablemente estrecho: sus preguntas se limitaron únicamente a “cuestiones sobre las cuales aún no tiene una visión firme”. El documento de la consulta sólo enumera potenciales acciones cuya realización el gobierno ya propone desde un comienzo. Si bien algunas de ellas son bienvenidas, como el involucramiento más formal de otras áreas gubernamentales en el trabajo del PNC, el documento evita cualquier discusión sobre el tema del procedimiento más allá de alguna propuesta de modificación menor. La respuesta de las ONGs señala las cuestiones problemáticas, incluyendo la adopción de decisiones ad hoc, la ausencia de disposiciones en materia de revelación de información y las inconsistencias y la tendenciosidad en la interpretación e implementación de las Directrices. El documento de la consulta también contiene una serie de afirmaciones con las cuales las ONGs están en desacuerdo, como por ejemplo aquélla según la cual PNC del RU se abstendría de tratar un reclamo cuando media un procedimiento judicial paralelo, sea éste penal, civil o administrativo. Las ONGs objetan una regla “sábana” que impida la consideración de los reclamos en razón de la existencia de procedimientos paralelos, aunque reconocen que, tratándose de un procedimiento penal paralelo, el PNC deberá ser advertido de la necesidad de evitar un posible prejuzgamiento. A su vez, recomiendan que el PNC del RU sea el reestructurado y se le confiera el status de ombudsman independiente. En su defecto, proponen como medida transitoria que el Departamento de Comercio e Industria –debidamente entrenado al efecto- continúe desempeñando un rol mediador. En caso de fracasar la mediación, el reclamo irresuelto sería transferido a un panel interministerial presidido por una persona legalmente designada al efecto. Según las ONGs, si el gobierno británico –abandonando su postura original- insistiera en que el PNC del RU no está obligado a declarar las violaciones a las Directrices, poco quedará por ganar del compromiso con este instrumento. El Financial Times cubrió, en enero de 2006, el lanzamiento de un informe de las ONGs Amnesty International Reino Unido, Christian Aid y Friends of the Earth, titulado ¿Insignia o Fracaso? 5 (Flagship or Failure?) y basado en la experiencia de las ONGs británicas en la presentación de reclamos ante el PNC. El informe critica la falta de voluntad política del gobierno para imponer la ejecución obligatoria de las Directrices. El Comité de Desarrollo Internacional del Parlamento británico ha solicitado expresamente una presentación sobre el trabajo del PNC del RU, en vista de la próxima celebración de audiencias sobre el desarrollo del sector privado. Por su parte, el Grupo Parlamentario Interpartidario sobre la Región de los Grandes Lagos ha instituido un grupo de trabajo multi-stakeholder cuya función específica consiste en asistir al gobierno tanto en la evaluación del resultado de la consulta como en el establecimiento de un nuevo procedimiento para tratar los reclamos. Canadá Un grupo de parlamentarios canadienses solicitó al Ministro canadiense de Relaciones Exteriores el establecimiento de medidas jurídicamente vinculantes para gobernar la conducta de las empresas mineras canadienses en todo el mundo, y, puntualmente, la investigación de las actividades de TVI, una empresa minera que actualmente opera en las Filipinas6. El Ministro rechazó el pedido7, arguyendo que Canadá prefiere mantener su adhesión a códigos de carácter voluntario como las Directrices de la OCDE. Sostuvo asimismo que consideraba unificar los principios voluntarios en materia de derechos humanos y de seguridad, declarando que “cuenta con ciertos mecanismos para influenciar a las empresas que, a pesar de tener sus sedes en el exterior y de ser administradas por personas no residentes en Canadá, se hallan incorporadas al país o bien cotizan en la bolsa canadiense”. En el transcurso del año, el gobierno canadiense organizará cinco mesas redondas en distintas partes del país para examinar las cuestiones planteadas en el informe parlamentario. También se comprometió a brindar apoyo financiero y político al trabajo del Representante Especial de la Secretaría General de la ONU en lo referente a derechos humanos y empresas transnacionales y otras empresas comerciales. Paper informativo de OECD watch: la transparencia y el principio de confidencialidad 8 Desde el primer reclamo presentado por una ONG, en 2001, la cuestión de la confidencialidad y la transparencia en el procedimiento de instancia específica ha sido una de las cuestiones centrales en los debates sobre cómo promover la efectiva implementación de las Directrices para Empresas Multinacionales. Refiriéndose a él como el “principio de confidencialidad” de las Directrices, la Guía Procedimental instruye a las partes en un reclamo a omitir revelar la información Boletín de OECD Watch conocida y la documentación recibida luego de haber sido el caso aceptado por el PNC, salvo que las partes acuerden que la información puede ser hecha pública. En lo que también cabría denominar el “principio de transparencia”, la Guía Procedimental dispone a su vez que los PNCs debieran hacer públicos los resultados de los reclamos, “a menos que el mantenimiento en secreto de dicha información redunde en el máximo interés de la aplicación eficaz de las Directrices”. En la práctica, no obstante, es frecuente que los PNCs den mayor énfasis al mantenimiento de la confidencialidad en todos los aspectos del procedimiento de instancia específica, sacrificando así la transparencia hacia los reclamantes. Ejemplo de ello es el hecho de que pocos PNCs emiten una declaración al concluir un caso. Por otro lado, hay signos preocupantes que sugieren que el Comité de Inversión se propone extender el alcance del principio de confidencialidad, mientras que, paralelamente, casi nada demuestra que los PNCs se estén esforzando por una mayor transparencia en el manejo de los reclamos. Un nuevo paper de OECD watch explica el principio de confidencialidad de las Directrices, incluyendo en qué consiste, cuándo es aplicable y cuándo una interpretación del principio no es consistente con la Guía Procedimental de las Directrices. También explica las obligaciones del PNC en materia de transparencia, describiendo cómo la ausencia de procedimientos administrativos para la consideración de instancias específicas (incluyendo la información sobre los resultados de los casos) continúa siendo el principal obstáculo al logro de la equivalencia funcional. El paper también examina los principales debates en materia de confidencialidad y transparencia en el procedimiento de instancia específica, concluyendo con una serie de recomendaciones para aumentar la transparencia. Desarrollo reciente de los casos El PNC noruego critica el desempeño en materia de derechos humanos de una empresa operando en Bahía de Guantánamo El 29 de noviembre de 2005, el Punto Nacional de Contacto noruego emitió su declaración final en el caso sobre las actividades de Aker Kværner en la Bahía de Guantánamo, Cuba. El reclamo había sido presentado cinco meses antes por ForUM (Forum for Environment and Development), red noruega de más de 50 organizaciones voluntarias dedicadas al medioambiente y el desarrollo. Aker Kværner ASA opera en la Bahía de Guantánamo desde 1991, trabajando para el Departamento de Defensa de los EE.UU. a través de su subsidiaria Kværner Process Services Inc. (KPSI) cuya propiedad ostenta en un 100%. En 2001, la empresa fue contratada para la construcción y el mantenimiento de instalaciones para la detención de combatientes, muchos de los cuales habían sido capturados durante la guerra en Afganistán. Varias organizaciones internacionales –incluyendo el Comité Internacional de la Cruz Roja, Human Rights Watch y Amnistía Internacional- declararon que las condiciones de detención en las instalaciones de la Bahía de Guantánamo son violatorias de las normas fundamentales de derechos humanos. En su reclamo, ForUM alegó que Aker Kværner, a través de su subsidiaria KPSI, había violado el Capítulo 2, párrafo 2 de las Directrices de la OCDE, conforme el cual las empresas deben “respetar los derechos humanos de aquéllos afectados por sus actividades de conformidad con las obligaciones y compromisos internacionales del gobierno de acogida”. ForUM arguyó que, toda vez que contribuyen a mantener un sistema de detención violatorio de la ley internacional y los derechos humanos básicos, las actividades de Aker Kværner ASA y KPSI tienen efectos lesivos para los prisioneros y omiten respetar sus derechos humanos. Luego de aceptar el reclamo de ForUM, el PNC mantuvo dos reuniones en presencia de ambas partes, ForUM y Aker Kværner. En su declaración final, el PNC manifestó su apoyo a los alegatos del reclamante: hizo referencia a los antecedentes pobres que en materia de derechos humanos registran las instalaciones de detención de Guantánamo, y sostuvo que “cabe considerar que las actividades de la compañía han afectado, al menos parcialmente, a los detenidos en dichas prisiones”. El PNC criticó a Aker Kværner por haber omitido revelar información durante el procedimiento confidencial, observando que pudo haberlo hecho “sin por ello afectar su compromiso de confidencialidad con el cliente”. Por último, el PNC remarcó que la empresa omite adecuar su conducta a directrices éticas, “recomendándole enfáticamente” el desarrollo de directrices para regular todas sus actividades en el futuro. La declaración del PNC está disponible en http://www.oecdwatch.org/docs/ForUM_ Aker_Kvaerner_NCP_final_statement.pdf. Aker Kværner ha anunciado su decisión de retirarse de la Bahía de Guantánamo, invocando la razón de no haber ganado una licitación. Todas las operaciones de Aker Kværner en Guantánamo cesarán a fines de 2005. Los reclamantes han celebrado la retirada de Aker Kværner y sostienen que su reclamo ha contribuido con dicha decisión, a pesar de que la empresa lo niega. Luego de publicarse la declaración del PNC, Aker Kværner se acercó a ForUM en busca de ayuda para desarrollar sus nuevas políticas de RSE. Anvil Mining y el incidente de Kilwa, República Democrática del Congo En septiembre de 2004, el Directorio del Banco Mundial aprobó una garantía de riesgo político para la mina de cobre y plata Dikulushi de la empresa Anvil Mining, en la región de Katanga de la República Democrática del Congo. Pocas semanas después hubo un levantamiento reducido en el pueblo de Kilwa, a aproximadamente 50 Km. al sur del proyecto Dikulushi. Kilwa es crucial para las operaciones de extracción de cobre y plata de Anvil, dado que es el puerto –sobre el Lago Mweru- desde el cual los minerales son enviados a Zambia para su procesamiento. En Lubumbashi, la oficina regional de MONUC –organización establecida por el Consejo de Seguridad de la ONU para monitorear y asegurar el cese de fuego en la República Democrática del Congo- realizó una investigación poco después de este incidente. Se reportaron aproximadamente 100 muertes y, conforme la ONU, unas 28 muertes fueron ejecuciones sumarias. Según los dichos de testigos oculares, reunidos por abogados de derechos humanos, los soldados acometieron un ataque desenfrenado e indiscriminado, perpetrando arrestos arbitrarios y ejecuciones sumarias de presuntos rebeldes y sus seguidores, violando mujeres y sometiendo a los detenidos a torturas y golpes. El informe de MONUC reveló asimismo que Anvil Mining proveyó apoyo logístico a la operación militar: permitió el uso de los aviones que alquila para trasladar a sus empleados hacia y desde la mina, tanto para hacer llegar a los militares al lugar de los hechos como para trasladar a Lubumbashi a quienes habían sido arbitrariamente arrestados por éstos. A su vez, los testigos informaron a los abogados de derechos humanos que los militares recibieron comida y dinero de Anvil, y que los vehículos de la empresa –conducidos por sus propios empleados- fueron utilizados para enterrar a quienes habían muerto en el incidente. Ya en junio de 2004, organizaciones de la sociedad civil congolesas e internacionales manifestaron su preocupación por el apoyo del Banco Mundial al proyecto Dikulushi. Las ONGs se preguntaron si el Organismo Multilateral de Garantía de Inversiones (Multilateral Investment Guarantee Agency – MIGA) había evaluado adecuadamente las implicancias del proyecto en materia de derechos humanos y seguridad, dada la manifiesta relación entre conflictos vinculados a la industria extractiva y violaciones de derechos humanos. En agosto de 2005, luego de un documental australiano sobre el incidente de Kilwa (de junio de 2005) y de la subsiguiente carta que RAID y otras organizaciones de la sociedad civil enviaran al Banco Mundial resaltando estas cuestiones, Wolfowitz, Presidente del Banco, instó al Ombudsman y Asesor en materia de Observancia a revisar la diligencia debida por el organismo en el proyecto Dikulushi. La evaluación concluyó y fue enviada al Presidente Wolfowitz en septiembre último. Su publicación ha sido demorada sin explicación. En junio, las ONGs canadienses Rights and Democracy y L’Entraide Missionaire presentaron un reclamo ante el PNC canadiense, quien facilitó una reunión entre la empresa y las ONGs en noviembre de 2005. Anvil Mining, empresa de propiedad australiana que cotiza en la bolsa canadiense, es también investigada por la Policía Federal australiana, a fin de determinar si existen evidencias de la comisión de crímenes de lesa humanidad o crímenes de guerra de conformidad con el Código penal australiano (Australian Criminal Code Act 1995), y/o violaciones tanto a la enmienda Nº 1999 al Código penal (la ley australiana que prohíbe los pagos ilícitos a funcionarios públicos extranjeros de conformidad con la Convención Anticorrupción de la OCDE) como a la ley sobre los productos del delito (Proceeds of Crime Act 2002 ó 1987). Las organizaciones RAID, ACIDH y ASADHO/ Katanga y el Consejo Australiano de Derechos Humanos (Human Rights Council of Australia) ayudan actualmente a las víctimas a solicitar de la empresa la correspondiente reparación, a través del estudio jurídico australiano Slater & Gordon. Boletín de OECD Watch Visitas in situ – método de prueba y error Recientemente, los PNCs británico y canadiense se han esforzado en resolver reclamos de alto perfil a través de la visita oficial a los países de acogida relevantes en cada caso. Para el caso relativo al proyecto de oleoducto BakuTbilisi-Ceyhan (BTC) de British Petroleum (BP), el PNC del RU organizó un viaje de recolección de información en septiembre último, visitando las comunidades afectadas y a ONGs de Azerbaiján, Georgia y Turquía. El PNC organizó sus visitas en colaboración con los reclamantes y la empresa, a fin de asegurar que todas las partes estuvieran satisfechas con los términos de referencia. Basándose en esta experiencia positiva con el PNC del RU, OECD watch recomienda, para el futuro, una instancia previa de acuerdo sobre los términos de referencia (y, de ser necesario, su traducción a las lenguas locales) y su puesta a disposición de todas las partes interesadas. Desafortunadamente, en el caso que involucraba a Ascendant Copper Corporation, el intento de los representantes del PNC canadiense de arribar a un acuerdo previo sobre los términos de referencia con los reclamantes fracasó. Lo mismo ocurrió con su tentativa de facilitar una reunión con líderes comunitarios, ONGs y la empresa en Ecuador: el encuentro fue cáustico. El PNC insistió en la confidencialidad de la primera reunión entre ejecutivos de la empresa y representantes comunitarios y de ONGs, condición inaceptable en razón de que, en opinión de las ONGs, “en (el área de) Intag hay un clima tenso, plagado de desconfianza”. En diciembre de 2005, miembros de las comunidades afectadas por las actividades de Ascendant habían incendiado parte de las instalaciones de la empresa. Las ONGs temían que una reunión confidencial sólo exacerbara la actual situación local debido a que los representantes estarían impedidos de informar a sus respectivas comunidades las conclusiones de la misma. “Más que aliviar la tensión y pavimentar el camino hacia un entendimiento mutuo, una reunión confidencial probablemente incremente la desconfianza”9. Sin embargo, las ONGs aceptaron la naturaleza confidencial de cualquier información potencialmente sensible y solicitaron al PNC que planteara la cuestión a Ascendant, pero su pedido fue rechazado. Las ONGs han desistido de su reclamo, invocando que no confían en el proceso. El comunicado de prensa que informa el desistimiento del caso se encuentra publicado en http://www.oecdwatch.org/docs/DECOIN_ Ascendant_withdraw_press_release.pdf. Confusión en los casos concernientes al oleoducto BTC Casi tres años después de que ONGs de seis países presentaran reclamos contra el consorcio Baku-Tbilisi-Ceyhan –liderado por la BP-, cuyo controvertido oleoducto BTC transportará crudo del Mar Caspio hacia mercados occidentales, los PNC en cuestión no han logrado decidir a cuál/es de ellos corresponde entender en los casos. El PNC belga insiste en que el RU aceptó asumir total responsabilidad en la materia, posición que comparte con el PNC italiano. Pero el RU mantiene que los PNC nacionales deberían hacerse cargo de los reclamos, a pesar de que su PNC figura como el “PNC principal”. En consecuencia, los reclamantes basados fuera del RU se encuentran en un limbo: sus casos sólo juntan polvo mientras los archivos van y vienen de un PNC al otro. Las ONGs consideran presentar una protesta formal ante el Comité de Inversión. Pedidos de clarificación denegados En 2005, el Comité de Inversión recibió dos pedidos de clarificación relativos a dos casos que, en opinión de las ONGs reclamantes, fueron mal manejados por los PNCs francés y belga; ambos casos versan sobre proyectos de represas hidroeléctricas en Laos: el primero concierne al proyecto Nam Theun 2 de la empresa Electricité de France; el segundo, al proyecto Houay Ho de Suez‑Tractebel. Las ONGs sostienen que, en ambos casos, los PNCs burlaron la Guía Procedimental de las Directrices a la hora de tratar las instancias específicas, en particular las disposiciones referentes a la consulta con la parte reclamante. El Comité de Inversión rechazó los pedidos de clarificación de las ONGs en razón de que OECD watch, su grupo paraguas, carece de “status consultivo” ante él. Al crearse la OCDE hace más de 40 años, tanto a TUAC (el Comité Consultivo Sindical) como a BIAC (el Comité Consultivo Empresario e Industrial) y a varias organizaciones de agricultura se les reconoció status consultivo especial ante el Consejo de la Organización, condición que los faculta a participar ampliamente en el trabajo de la misma. La OCDE no ha modernizado sus reglas a fin de reconocer adecuadamente el surgimiento, en las últimas dos décadas, de la sociedad civil global. Al rechazar los pedidos de clarificación de las ONGs, el Comité de Inversión no sólo falla en una de sus principales tareas –la de asegurar la efectiva implementación de las Directrices- sino también perpetúa un sistema injusto y caduco. Caso Bayer: el PNC mantiene reuniones separadas El caso que varias ONGs alemanas presentaron en octubre de 2004 se funda en la presunta violación, por parte de proveedores de la empresa alemana Bayer AG en India, del Capítulo de las Directrices referente al empleo y las relaciones industriales, en razón del uso de trabajo infantil. Se basa en un estudio del año 2003, titulado “El Trabajo Infantil y las Transnacionales Semilleras en la Producción de Semillas Híbridas de Algodón” (Child Labour and Transnational Seed Companies in Hybrid Cottonseed Production), y en un estudio del año siguiente que reveló que aproximadamente 2.000 niños trabajan para proveedores de Proagro, subsidiaria de Bayer. Habiendo recibido información comprehensiva de ambas partes, el PNC alemán invitó a todas ellas a una reunión. Sin embargo, Bayer objetó la participación de una de las ONGs involucradas, rechazando la invitación, a pesar de lo cual informó al PNC y al público en general que ya ha adoptado medidas concretas y constructivas para resolver los problemas planteados. En lugar de llevarse a cabo una reunión conjunta, el PNC mantuvo reuniones separadas con cada parte: primero se reunió con Bayer, ocasión en la cual la empresa explicó su plan y cómo pensaba abordar el problema. El PNC transmitió a las ONGs la presentación de la empresa y las minutas de la reunión y posteriormente se reunió con ellas. Las minutas de esta última reunión omitieron ciertos puntos planteados por las ONGs, hecho que provocó la preocupación de éstas; luego de una serie de discusiones con el PNC, dichos puntos fueron incluidos en una nueva versión de las minutas. En términos generales, se percibió que el mantener reuniones separadas con el reclamante, por un lado, y con la empresa, por el otro, puede comprometer la naturaleza (supuestamente) independiente/ objetiva del PNC, dado que lo coloca en la situación de tener que presentar a las ONGs la visión y los argumentos de la empresa. La transparencia del PNC en el caso australiano contra GSL En el caso sobre la detención ilegal de niños en centros de detención de inmigrantes, que involucra a la empresa Global Solutions Limited, el PNC australiano mantuvo un alto nivel de comunicación con los reclamantes, tanto telefónica como por escrito (incluyendo el correo electrónico). El PNC les proveyó información detallada por escrito y los documentos de correspondencia entre todas las partes involucradas. Ha sido transparente y claro en todo momento del seguimiento de la Guía Procedimental, lo cual es particularmente alentador dado el carácter extremadamente sensible del problema y la especial atención que despiertan las cuestiones conexas en la opinión pública. Pocos cambios en el caso concerniente a la represa hidroeléctrica en Brasil El 6 de junio de 2005, dos ONGs brasileras presentaron un reclamo ante el PNC de dicho país, concerniente a las actividades de Alcoa Alumínios S.A. y un consorcio brasilero en la construcción de una represa hidroeléctrica en Barra Grande, Brasil. Con el objeto de reunir más información, el PNC mantuvo una reunión inicial con las ONGs aunque luego admitió que la actual situación política brasilera dificultaría la resolución del caso. Fuentes no oficiales informaron a las ONGs que el PNC planea cerrar el caso invocando la falta de evidencia de la conducta de las empresas, aunque las ONGs sostienen que la evidencia en su poder es suficiente. La declaración del PNC belga en el caso del Forrest Group10 – Bruselas, 20 de noviembre de 2005 Según 11. 11. 11. y las demás ONGs reclamantes, la declaración del PNC belga en el caso sobre las actividades mineras de Forrest Group en la República Democrática del Congo constituyó “una burla a las Directrices que se supone debiera defender y promover”11. Por su parte, el PNC belga señaló que había convocado a cinco reuniones en el transcurso del año, tres de las cuales contaron con la participación de las ONGs y de M. Forrest y sus representantes legales. Las ONGs admitieron que, al recomendar mayor transparencia al Forrest Group, el PNC reconoció implícitamente el incumplimiento de las Directrices por parte de la empresa, aunque luego contrarrestó dicha admisión al declarar que el Forrest Group había respetado las Directrices “en la medida de lo posible”. En la declaración del PNC fue notable la ausencia de referencias a la cuestión clave en los contratos mineros del grupo, cuya validez fue cuestionada tanto por el Panel de la ONU como por la Comisión Investigadora sobre los Grandes Lagos del Senado belga (2003). Según el Comité de Asistencia para el Desarrollo de la OCDE (Development Assistance Committee – DAC), las investigaciones del Senado belga “pudieron haber sido más profundas; más aún, las recomendaciones formuladas en la evaluación apenas si fueron seguidas con diligencia” 12. El PNC recomendó al Forrest Group que proveyera periódicamente “información confiable y relevante” sobre las cuestiones financieras, sociales y medioambientales que lo involucran, y que alentara a sus proveedores a adherir a las Directrices. Le recordó asimismo que el grupo debería hacer más por las comunidades cercanas a sus instalaciones. “Estas recomendaciones muy generales Boletín de OECD Watch son bienvenidas, y nosotros llamamos al Forrest Group a ponerlas en práctica”, sostuvo Marc-Olivier Herman de la ONG Broederlijk Delen. Pero las ONGs presentaron recomendaciones más específicas, que incluyen la convocatoria a una auditoria medioambiental total y un estudio de salud pública en las áreas residenciales que rodean la planta de tratamiento de cobalto en Lubumbashi (parte del joint venture entre Big Hill y el OM Group de los EE.UU.). Las ONGs también convocaron a una evaluación independiente del contrato minero de Kamoto, una de las principales concesiones en Katanga que fue adjudicada al Forrest Group en julio de 2005, cuando el Banco Mundial había impuesto una moratoria a los nuevos contratos mineros. Las ONGs admiten que el PNC consideró seriamente la mayoría de las cuestiones planteadas en el reclamo, aunque pusieron en duda la independencia e imparcialidad de algunos miembros del PNC, sobre todo los representantes del gobierno regional de Walloon. En este contexto, y en relación con la autorización de exportación que el gobierno de Walloon otorgó a New Lachaussée (una empresa del Forrest Group) para la construcción de una línea de producción de municiones para rifles de asalto en Tanzania, el Comité de Asistencia para el Desarrollo de la OCDE expresó su preocupación por “la absoluta falta de jerarquía entre el nivel federal y los niveles federados, lo cual dificulta la resolución de conflictos de intereses” y la coherencia en materia de políticas. Con el tiempo, dicha autorización fue suprimida13. La principal lección para las ONGs en el proceso fue la necesidad de reformar el PNC y de establecer el carácter vinculante de las Directrices de la OCDE. A estos efectos se presentaron iniciativas privadas de leyes ante la Cámara de diputados y el Senado belga. A principios de febrero de 2006, el Ministro de Relaciones Exteriores belga, Karel De Gucht, realizará una visita oficial a la República Democrática del Congo. Se espera que tenga presente la recomendación del Comité de Asistencia para el Desarrollo de la OCDE en el sentido de que Bélgica “debería continuar mejorando el monitoreo de la conducta de las empresas belgas con intereses en la República Democrática del Congo” 14. Estadísticas actuales de los casos Status actual de los 47 casos presentados por ONGs en función de las Directrices Status Presentados: la ONG ha enviado el reclamo al PNC No. de casos 0 Pendientes: el PNC ha confirmado la admisibilidad del caso y el procedimiento de instancia específica está en marcha 16 Concluidos: el PNC ha arribado a una decisión y emitido una declaración, o bien el caso fue resuelto en un ámbito externo al del PNC 13 Cerrados: el PNC había iniciado el caso pero luego lo ha desechado sin emitir declaración 2 Desestimados: el PNC ha desestimado formalmente el caso presentado por la ONG 8 Desistidos: los reclamantes han optado por desistir el caso 2 Bloqueados: el PNC no tiene en claro el estado del caso (no hubo desestimación formal pero tampoco hay intención de aceptarlo como instancia específica). 6 Número de casos de ONGs que involucran los diversos Capítulos de las Directrices Capítulo de las Directrices de la OCDE que fue invocado Capítulo I - Conceptos y Principios No. de casos 8 Capítulo II – Principios Generales (incluyendo derechos humanos y cadena de producción) 38 Capítulo III – Publicación de informaciones 11 Capítulo IV – Empleo y relaciones laborales 17 Capítulo V – Medioambiente 20 Capítulo VI – Lucha contra la corrupción 9 Capítulo VII – Intereses de los Consumidores 2 Capítulo VIII – Ciencia y Tecnología 0 Capítulo IX – Competencia 7 Capítulo X – Fiscalidad 3 Actualización Trimestral de Casos OECD watch publica ahora una Actualización Trimestral de Casos que provee una vista general de los desenvolvimientos en todos los casos presentados por ONGs en función de las Directrices. Para ver ver la Actualización Trimestral de Casos más reciente, ver la sección de información sobre los casos disponible al público en la página web de OECD watch (www.oecdwatch.org). Consultas en la OCDE El Comité de Comercio considera la propuesta del gobierno holandés En octubre último, representantes de SOMO y Oxfam– Países Bajos se reunieron con el Comité de Comercio de la OCDE a fin de discutir la propuesta del gobierno holandés para identificar las trabas que obstruyen –y mejores prácticas que hacen progresar- la conducta empresaria responsable en el ámbito del comercio internacional. El objetivo de este ejercicio de inventario consistiría en formular recomendaciones acerca de las mejores formas de apoyo a las iniciativas de RSE por parte de los gobiernos de los países miembros de la OCDE. No obstante, el gobierno holandés dejó en claro que su propuesta no apuntaba a extender el alcance de las Directrices para Empresas Multinacionales a las actividades de índole comercial. La cuestión planteada radica en determinar si las empresas deben ser consideradas responsables del incumplimiento de las Directrices por parte de sus proveedores. A pesar de las claras referencias textuales sobre la aplicabilidad de las Directrices a la cadena de producción de las empresas, el Comité de Inversión anunció, en 2003, que las Directrices sólo son aplicables a las actividades con carácter de inversión –y sus actividades conexas- y no así a las actividades comerciales de las empresas. En consecuencia, se rechazaron varios reclamos de ONG fundados en los hallazgos del Panel de Expertos de la ONU en materia de explotación ilegal de los recursos naturales durante la reciente guerra en la República Democrática del Congo. De hecho, el motor que impulsó la propuesta del gobierno holandés fue el caso contra la empresa holandesa comerciante de coltán, Chemie Pharmacie Holland (CPH), rechazado con el argumento de la presunta falta de nexo de inversión. La propuesta holandesa aún está bajo consideración del Comité de Comercio. Orden del día de la inversión internacional Los inversores sacan ventaja del contexto actual en los acuerdos internacionales El Simposio sobre Acuerdos de Inversión Internacional15 (de fines de 2005, en París) fue organizado por la OCDE, el CIADI16 y la UNCTAD17, tres organizaciones que desempeñan un rol importante en este campo. Tanto la OCDE como UNCTAD monitorean y analizan acuerdos de 10 Boletín de OECD Watch inversión, pero mientras la OCDE lo hace desde la perspectiva de los países más ricos, UNCTAD intenta informar y asesorar a países en desarrollo para lograr su participación efectiva en la negociación de inversiones internacionales. El CIADI es un marco legal multilateral patrocinado por el Banco Mundial para la resolución de disputas relativas a inversiones internacionales, y su propósito consiste en proteger los intereses del inversor extranjero. El Simposio reunió a oficiales nacionales de inversión de todo el mundo, incluyendo China, India, Egipto, Indonesia y la Federación Rusa, como también a abogados corporativos y académicos que participaron en los paneles de arbitraje internacional. OECD watch envió a dos observadores. En su transcurso se abordaron los recientes desarrollos en el campo del arbitraje de inversión: cuestiones jurisdiccionales, el riesgo de sentencias arbitrales múltiples y opuestas, la falta de transparencia en los procedimientos y en las sentencias arbitrales, los elevados costos del arbitraje internacional y la negligencia hacia las cuestiones de interés público. Robert Danino, Secretario General del CIADI, señaló el notable incremento, en los últimos años, del volumen de financiamiento extranjero de origen privado a países en desarrollo: “de unos US$ 75 billones a principios de los ’90 a más de US$ 400 billones a fines de 2004”. A su vez, se verificó un correspondiente incremento en el número de acuerdos bilaterales de inversión (ABIs). Existen conforme UNCTAD unos 2.400 ABIs, como también tratados multilaterales, otros tratados regionales de inversión, tratados de libre comercio como el NAFTA y, finalmente, el Tratado sobre la Carta de la Energía. Sin embargo, el status legal de estos tratados es poco claro, dado que se desconoce cuántos de ellos han sido formalmente ratificados. UNCTAD estima que 30 por ciento de los tratados aún no entraron en vigencia. Más de 1.500 ABIs remiten al CIADI como foro para el arreglo de las disputas que puedan surgir en su consecuencia. Por lo tanto, la carga de casos pendientes del CIADI es, actualmente, un problema: hace 10 años, el Centro tenía una carga de 5 casos pendientes con una suma total de montos reclamados equivalente a US$ 15 millones. En la actualidad, el CIADI tiene una carga de 113 casos pendientes y la suma de los montos reclamados asciende a más de US$ 30 billones. La impresionante mayoría de los casos nuevos fueron remitidos al CIADI en razón de la disposición de “arbitraje inversor-estado” contenida en los tratados de inversión. Los mecanismos de arreglo de diferencias conocidos como “arbitraje inversor-estado” proveen derechos a los inversores extranjeros que reclaman la reparación de daños ocasionados por el presunto incumplimiento de obligaciones vinculadas a la inversión por parte de los gobiernos anfitriones. Gran parte de las disputas son planteadas por empresas o inversores extranjeros, sin que se requiera de ellos el previo agotamiento de las instancias judiciales locales. La mayoría de los ABIs definen el concepto de inversión en forma tan amplia que se torna difícil imaginar una transacción comercial que quede fuera de su cobertura. En términos generales, los “tribunales han sido más bien generosos a la hora de reconocer la naturaleza de inversión del caso. A modo de ejemplo, han decidido que tanto los contratos de ingeniería civil como la operación de plantas de tratamiento de basura, los servicios de inspección previa a la expedición de mercadería, los instrumentos de valores y de deuda, los contratos de compra de energía y los derechos de gobernabilidad corporativa constituían, todos, inversiones” 18. Desde ya, los inversores se encuentran, en teoría, sujetos a la ley nacional del país anfitrión. No obstante, pueden recurrir simultáneamente al derecho internacional, es decir, a los tratados aplicables y al derecho consuetudinario internacional. Si bien se considera que el derecho internacional es complementario del derecho interno, algunos tribunales arbitrales han sido totalmente indiferentes a la normativa y los tribunales del país anfitrión. Demanda en base al tratado – demanda en base al contrato Otro problema que acosa al arbitraje de inversión es el denominado “demanda en base al tratado – demanda en base al contrato”: ocurre con frecuencia que los contratos de inversión contienen disposiciones que remiten a los tribunales judiciales o arbitrales del país anfitrión para el arreglo de disputas. Sin embargo, estos contratos están al mismo tiempo cubiertos por tratados de inversión que otorgan protección internacional y acceso al arbitraje internacional. Cuando los inversores inician un procedimiento arbitral internacional basándose en el tratado citado, los países anfitriones arguyen, con frecuencia, que el caso debiera ser planteado ante los tribunales locales, aunque dicha objeción es frecuentemente denegada. Expropiación La motivación principal de los regímenes de inversión internacional ha sido la protección contra la expropiación. Las condiciones que debe cumplir una expropiación para ser legal se encuentran claramente estipuladas y precisadas en numerosos tratados, e incluyen: el fin público, la no discriminación, la compensación total, rápida y efectiva y el debido proceso legal. En la actualidad, a los inversores extranjeros les preocupa menos la confiscación manifiesta que lo que denominan expropiación indirecta o gradual. Paneles arbitrales han decidido que acciones como la revocación, por parte del Estado anfitrión, de una licencia de inversión, una licencia de construcción o un permiso de operación equivalen a una expropiación indirecta. Cabe destacar que la regulación por parte del Estado, fundada en el interés público y en el marco de sus poderes, no constituye expropiación ni conlleva la obligación de resarcir. El CIADI resaltó una serie de problemas en torno a la presunta imparcialidad y neutralidad de los miembros de tribunales arbitrales. El número de árbitros (abogados corporativos) involucrados en cada caso es relativamente bajo, y los mismos pequeños grupos de árbitros participan como consejeros o expertos en otros casos. Ello los expone a potenciales conflictos de intereses originados en sus respectivos roles de árbitros y de consejeros en diferentes casos, y perjudica la credibilidad del proceso. El “paseo de compras” en busca de foros alternativos y los procedimientos múltiples La OCDE señala que un inversor extranjero puede, como si fuese de compras, dedicarse a la búsqueda combinada de un foro y de un tratado, ambos más convenientes, a fin de ampliar sus posibilidades de elección de un foro más allá de las opciones provistas por un ABI específico y, así, poder plantear los mismos hechos en procedimientos paralelos o múltiples. El ejemplo más llamativo de esta práctica de procedimientos múltiples derivados de una única serie de hechos es el número de casos en el CIADI contra el gobierno de Argentina: actualmente hay unos 40 procedimientos contra Argentina en el Centro, la mayoría de los cuales fueron iniciados en los meses siguientes a la devaluación de su peso, en diciembre de 2001. El Simposio contribuyó a despejar ciertas dudas sobre un oscuro aunque importante aspecto del derecho en 11 materia de inversión internacional, que preocupa no sólo a ONGs sino también a los gobiernos de países en desarrollo. ¿Marco de políticas para la inversión o “AMI versión 2”? Durante mas de un año, un grupo de trabajo constituido por 60 funcionarios de países miembros y no miembros de la OCDE, convocados por el Comité de Inversión, estuvo desarrollando un Marco de Políticas para la Inversión; la tarea del Grupo de Trabajo está ahora llegando a su última fase. El 1ó 2 de marzo de 2006, en la sede de la OCDE en París, los delegados discutirán y finalizarán el texto preliminar revisado del Marco de Políticas para la Inversión, antes de transmitirlo al Comité de Inversión de la OCDE para su aprobación. Si todo resulta de acuerdo al plan, en mayo de 2006 el Consejo de Ministros de la OCDE adoptará el Marco de Políticas para la Inversión19. Aparentemente, el borrador del Marco ofrece una “lista no taxativa de cuestiones a ser consideradas por cualquier gobierno interesado” que esté buscando modos de atraer a inversores nacionales y extranjeros. En particular, el Marco debiera convertirse en una referencia para los programas de desarrollo de capacidades de las organizaciones internacionales como también para los donantes que asistan a socios de países en desarrollo a mejorar el clima local para la inversión. Las áreas prioritarias del Marco son: políticas de inversión, facilitación 12 Boletín de OECD Watch y promoción de la inversión, políticas comerciales, políticas de competencia, políticas fiscales, gobernabilidad empresaria, políticas de promoción de la conducta empresaria responsable, desarrollo de los recursos humanos, desarrollo de la infraestructura, servicios financieros y gobernabilidad pública. Las ONGs y TUAC están preocupados por el equilibrio general entre los derechos y las responsabilidades de los inversores, mientras BIAC procura evitar que el documento fomente el debate acerca de “la relación entre las cuestiones comerciales, por un lado, y las cuestiones sociales y medioambientales, por el otro”. El Marco invoca el Consenso de Monterrey (2002), que identificó al capital privado, incluyendo el proveniente de la inversión extranjera directa, como “componente vital en los esfuerzos nacionales e internacionales de desarrollo” y enfatizó la necesidad de “crear las condiciones nacionales e internacionales necesarias para facilitar los flujos de inversión directa”. Las ONGs tenían hasta el 10 de febrero para comentar el borrador y definir si el Marco representa un nuevo enfoque hacia la inversión o si se trata simplemente de una versión rehecha del desacreditado Acuerdo Multilateral de Inversiones (AMI) de la OCDE. Para leer los comentarios de las ONGs, visite www.oecdwatch.org. Talleres de OCDE Watch Desarrollo de capacidades en Ghana En noviembre de 2005, la organización miembro de OECD watch Wassa Association of Communities Affected by Mining (WACAM) organizó un seminario para el desarrollo de capacidades que, en dos días, reunió a miembros de OECD watch, el personal de WACAM y más de 40 representantes de la sociedad civil de Ghana, muchos de los cuales trabajan en comunidades afectadas por actividades mineras. Los participantes exploraron los modos en que las Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales (Directrices), la Declaración Universal de los Derechos Humanos y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales pueden ser aplicados por las ONGs en su trabajo de advocacy basado en derechos y tendiente a promover la responsabilidad social empresaria (RSE). Se realizaron talleres para explicar las Directrices, las convenciones de la ONU y las herramientas desarrolladas por OECD watch para el monitoreo de la conducta empresaria irresponsable. Los participantes también discutieron tanto el nivel de protección que brindan las Directrices y las convenciones de la ONU como las limitaciones de los instrumentos, explorando estrategias para la constitución de redes que contribuyan a mejorar la protección de las comunidades impactadas y el medioambiente en forma consistente con los estándares internacionales. Representantes comunitarios de los distritos de Prestea, Obuasi, Dumasi, Kenyasi y New Abirem presentaron los problemas que enfrentan los Ghaneses y los hechos que impactaron sobre sus sustentos y sus libertades. Atribuyeron a la minería en Ghana el incremento de la pobreza en sus comunidades y el incumplimiento de la promesa original de nuevos puestos de trabajo. Citaron, además, otros problemas tales como la falta de agua potable, la destrucción de la vida acuática, los daños a las cosechas, la contaminación atmosférica, las enfermedades y demás problemas de salud, la violación de los derechos humanos y el acoso a los habitantes por parte de agentes de seguridad. Las comunidades también manifestaron que el gobierno ignora sus preocupaciones cuando acuden al él en busca de tutela. Los participantes sostuvieron asimismo que las empresas de los países miembros de la OCDE no han respetado las Directrices en sus operaciones en Ghana. Citaron sus experiencias con Bogoso Gold Ltd. (una empresa de origen estadounidense–canadiense, de propiedad de Golden Star Resources) y Newmont Ghana Gold Ltd. (subsidiaria de Newmont Mining, basada en los EE.UU.) como ejemplos de empresas que han ignorado repetidamente los principios y estándares de las Directrices. Acusaron también a AngloGold Ashanti, firmante del Global Compact de la ONU, de haber violado los principios del Compact en materia de derechos humanos y laborales y de protección del medioambiente. Al finalizar el seminario se presentó una resolución que expresaba la preocupación de los participantes por el fracaso de las autoridades Ghanesas en el ejercicio de su función de brindar debida protección a los derechos de las personas marginalizadas, a pesar del compromiso que Ghana asumió al firmar las convenciones de derechos humanos de la ONU y la Carta Africana de Derechos Humanos. Los participantes también reafirmaron su compromiso de monitorear las actividades de las multinacionales mineras en Ghana y, sobre todo, de exigir a dichas empresas la aplicación, en sus operaciones en Ghana, de los mismos estándares y regulaciones que están obligadas a seguir en sus países de origen. Luego del seminario, Peter Pennartz de IRENE, Hannah Owusu Koranteng y otros miembros de WACAM visitaron las zonas mineras de extracción de oro en Tarkwa, Prestea y Obuasi. La misión visito áreas de minería superficial, asentamientos locales y hospitales, a fin de entrevistar a personas afectadas por las actividades de extracción de oro. En forma consistente con la próxima investigación de WACAM sobre el impacto de la extracción de oro en Ghana y con lo expresado durante el seminario, los entrevistados se lamentaron de varios problemas, entre ellos: problemas de salud –como la proliferación de la malaria, el estrés, la hipertensión arterial y problemas respiratorios-, la contaminación atmosférica a raíz de las detonaciones, el daño a las viviendas –incluyendo grietas en cimientos y techos- y el daño a las cosechas y la vegetación. Las comunidades han elevado sus reclamos reiteradas veces, recibiendo en respuesta la negativa de las empresas mineras a discutir los problemas; un incidente incluyó la policía disparando por encima de las cabezas de los manifestantes en una protesta en el distrito de Prestea. La petición que presentaron a las autoridades para ser reasentadas en otro lugar fue ignorada por el gobierno. 13 Taller sobre la cadena de producción – Berlín, diciembre de 2005 Un taller de OECD watch, que tuvo lugar en Berlín en diciembre de 2005, reunió a un grupo de ONGs, consultores y expertos con experiencia en una amplia gama de sectores (indumentaria, electrónica, supermercados, frutas y vegetales, minerales y financiero) a fin de discutir criterios clave para definir la responsabilidad empresaria en la cadena de producción. El motivo que impulsó la realización del taller fue el cambio en el modo en que los PNCs abordan los reclamos fundados en problemas en las cadenas de producción de las empresas. En 2003, el Comité de Inversión decidió arbitrariamente y sin consulta previa que para que los casos vinculados a la cadena de producción de las empresas fueran admisibles era preciso comprobar la existencia de un “nexo de inversión”. Sin embargo, el Comité de Inversión omitió precisar los criterios que ayudarían a potenciales reclamantes a determinar la existencia de dicho nexo de inversión. El vago enfoque “caso por caso” que los PNCs adoptaron en consecuencia ha provocado la desestimación automática de varios casos de incumplimiento de las Directrices en la cadena de producción de las empresas, independientemente del mérito que pudieran tener. En el transcurso del taller, la discusión se centró en la complejidad de las cadenas de producción de las empresas. Se señaló que todos aquellos que desempeñan un papel en las diferentes etapas del proceso que culmina con la puesta en el mercado del producto de la multinacional son parte de su cadena de producción, desde las empresas que proveen la materia prima o bien partes manufacturadas hasta quienes realizan el montaje, distribuyen o venden el producto. La relación de la empresa multinacional con cada uno de estos proveedores –y la influencia que ejerce sobre ellos- puede variar mucho. 14 Los participantes acordaron continuar el trabajo conjunto a fin de establecer una definición de la responsabilidad en la cadena de producción que sea clara, comprehensiva y aplicable a todos los sectores. Empresas en zonas de conflicto – París, septiembre de 2005 Con frecuencia, las empresas de países miembros de la OCDE que operan en el exterior están ubicadas cerca de frentes de inestabilidad y conflicto violento. En tales contextos, las inversiones y operaciones de la empresa pueden ser objeto de actos violentos, aunque también pueden exacerbar la violencia directa o indirectamente. Con el objeto de apoyar los esfuerzos de los PNCs en el manejo efectivo de casos de esta índole, dos ONGs especializadas en promover el potencial de las empresas para contribuir en la prevención del conflicto y la paz – International Alert y Fafo AIS-, junto con OECD watch, organizaron un seminario en París, haciéndolo coincidir con la reunión de septiembre de 2005 del Comité de Inversión. Jessie Banfield de International Alert señaló que la OCDE y los Puntos Nacionales de Contacto están siendo presionados a asumir una posición que les permita responder a esta clase de casos. El informe de la Comisión para África del RU (marzo de 2005) llamó a los países de la OCDE a “promover el desarrollo y la implementación efectiva de directrices claras y comprehensivas para empresas que operan en zonas de riesgo de conflicto violento”20. Los participantes indicaron los factores a tener en cuenta al determinar la naturaleza precisa de la relación entre la empresa y quienes integran su cadena de producción. El producto, ¿es de marca? ¿La empresa se provee en forma directa o a través de intermediarios? ¿Qué caracteriza al sector: la integración vertical o la tercerización? Las cuestiones debatidas en el encuentro incluyeron: el rol de las Directrices de la OCDE en la configuración de un entorno regulador más abarcativo para las zonas de conflicto, otras fuentes relevantes de información que sirvan de guía en la materia, los desafíos pendientes y el fortalecimiento de las capacidades de los PNCs en materia de promoción e implementación de las Directrices de un modo que a su vez responda a las necesidades de orientación perceptibles entre las empresas afectadas. Manfred Schekulin, Presidente del Comité del Inversión, y Willem van der Leeuw, el PNC holandés, participaron en el taller junto con los PNCs de Canadá, Francia, el RU y Suiza. Representantes de empresas líderes europeas –BP, Shell y Total- participaron en el debate acerca de los dilemas éticos que conlleva el operar en zonas de conflicto. Otro factor importante es la duración del contrato con el proveedor: cuanto más largo, mayor la influencia de la multinacional sobre éste. El reciente incremento de vendedores mayoristas “sin nombre” puede dificultar la tarea de determinar la existencia de responsabilidad en la cadena de producción. Manfred Schekulin describió el estado de desarrollo de la “herramienta de gestión de riesgo para empresas” de la OCDE, cuyo borrador revisado será presentado al Consejo de Ministros en junio de 2006. Miembros de OECD watch –entre ellos, RAID- y las ONGs Human Rights Watch, Global Witness, International Alert y NIZA Boletín de OECD Watch enviaron detallados comentarios al borrador. Karen Ballentine hizo referencia al reciente estudio de FAFO sobre empresas y delitos internacionales21, y Chris Camponovo, del Departamento de Estado de los EE.UU., comentó acerca del desarrollo de los Principios Voluntarios sobre Seguridad y Derechos Humanos22. OECD watch supo de un reciente acuerdo para el establecimiento de un Panel –integrado por representantes gubernamentales, de ONGs y de empresas- que trataría los reclamos originados en el incumplimiento de los Principios Voluntarios por parte de empresas. Quizás este avance logre impulsar la mejora del procedimiento de instancia específica, a fin de que no quede relegado. Los participantes coincidieron en que, teniendo en cuenta la función de la OCDE de promover la diseminación y el alcance, es especialmente importante asegurar que el actual trabajo en materia de zonas de gobernabilidad débil sea lo más claro posible –dentro de sus términos de referencia- en lo referente al conflicto. Actividades en las Américas En la conferencia regional coorganizada por CIOSL/ ORIT23 y UNI-Américas –en julio de 2005, en Buenos Aires-, Bart Slob de SOMO habló acerca de los roles complementarios de los sindicatos y las ONGs en el uso de las Directrices de la OCDE. Slob también se reunió con representantes de IBASE –miembro brasilero de OECD watch- y de Fundación SES, FARN y Fundación El Otro –miembros argentinos de la red- a fin de desarrollar estrategias conjuntas para el avance de la RSE en Latinoamérica. En noviembre del mismo año, Juliana Ortiz de Fundación El Otro presentó el informe “Cinco años después: Una revisión de las Directrices de la OCDE y los Puntos Nacionales de Contacto” en un seminario sobre RSE organizado por Red Puentes en Ciudad de México. En su presentación, Ortiz también expuso las experiencias latinoamericanas en la presentación de reclamos basados en las Directrices. Varios miembros de OECD watch concurrieron al seminario de Red Puentes. 15 Noticias de la OCDE La OCDE nombra un nuevo Secretario General El 1 de junio de 2006 José Ángel Gurría, ex Secretario de Finanzas de México, reemplazará a Donald Johnston como Secretario General de la OCDE: es la primer persona proveniente de un país de ingresos medios que liderará el “club de los ricos” integrado por 30 naciones. En 1999, Euromoney lo nombró Ministro de Finanzas del Año, aunque su apodo mexicano era “Manos de tijera” en razón de los drásticos recortes al gasto público que impuso durante una crisis del precio del petróleo. Según el International Herald Tribune, el Sr. Gurría desea transformar la OCDE en una especie de órgano asesor permanente para las reuniones del G8. Una de las prioridades absolutas de la OCDE es establecer una fuerte relación de acercamiento a las cuatro grandes economías exter- 16 Boletín de OECD Watch nas al club, conjunto denominado economías BRIC e integrado por Brasil, Rusia, India y China (Rusia ya ha enviado a la OCDE su solicitud de membresía). Otra prioridad radica en racionalizar las actividades de los 200 comités y grupos de trabajo de la OCDE, objetivo que seguramente complacerá a los EE.UU. y Japón, los principales contribuyentes al presupuesto de la organización. Quienes trabajan en la OCDE esperan que el Sr. Gurría incremente “la relevancia y el perfil de la organización”. OECD watch espera que el Sr. Gurría demuestre habilidad y disposición para el trabajo con ONGs y la sociedad civil. El enfoque de la OCDE en materia de transparencia y compromiso con la sociedad civil, si bien muestra signos de mejoría, aún deja mucho que desear. Manejar la globalización con miras a maximizar sus beneficios y reducir sus consecuencias social y medioambientalmente dañosas debiera ser uno de sus principales objetivos. Otro, la creación de consenso a fin de frenar las malas prácticas empresarias. OECD watch espera forjar una relación constructiva con el Sr. Gurría, con miras a lograr estos objetivos. Partidas y arribos PNC alemán Joachim Steffens, Director de Inversiones Internacionales del Ministerio Federal de Economía y Trabajo alemán, ha reemplazado al Dr. Hans. G. Kausch. PNC del RU Eleanor Reid ha reemplazado a Duncan Lawson en el área denominada Europe and World Trade Directorate, del Departamento de Comercio e Industria del RU. Los nuevos miembros de OECD watch Nueve organizaciones se han unido a OECD watch desde marzo de 2005, elevando el número total de miembros a 51 organizaciones que representan a 29 países. Research Group for an Alternative Economic Strategy – GRESEA (Grupo de Investigación para una Estrategia Económica Alternativa), Bélgica Fundado en 1978 por activistas de países en desarrollo, sindicalistas y académicos, GRESEA se ha desempeñado activamente en el área de la RSE durante varios años. Su trabajo más reciente incluye la promoción de la ley belga de etiquetado social. GRESEA también fue co-reclamante en un procedimiento de instancia específica –de noviembre de 2004- contra cuatro empresas belgas, relativo a la explotación ilegal de recursos naturales en la República Democrática del Congo. Para más información ver: www. gresea.be. African Association for the defence of Human Rights – ASADHO/Katanga (Asociación Africana para la Defensa de los Derechos Humanos), Republica Democrática del Congo ASADHO es una ONG apolítica dedicada a la defensa y promoción de los derechos humanos. Su trabajo más reciente incluye exponer el rol logístico que desempeñó Anvil Mining, empresa australiano-canadiense, en el incidente de Kilwa en octubre de 2004, durante el cual murieron al menos 70 personas, muchas de las cuales fueron ejecutados sumariamente por las Fuerzas Armadas congolesas. El reclamo fundado en las Directrices de la OCDE y concerniente al rol de Anvil en dicho incidente –presentado por Rights and Democracy- continúa pendiente en Canadá. Defensa y conservación ecológica de Intag – DECOIN, Ecuador Fundada en 1995, DECOIN es una organización regional de base, cuya misión consiste en proteger la selva ecuatoriana del impacto de la minería. En mayo de 2005, DECOIN, Mining Watch Canadá y Friends of the Earth-Canadá presentaron un reclamo concerniente al proyecto Junín de la empresa Ascendant Copper Corporation. Los reclamantes desistieron del caso a mediados de enero de 2005, en razón de que el PNC canadiense no implementó el procedimiento de las Directrices en forma apropiada. Para más información ver: www.decoin.org. FinnWatch, Finlandia Fundada en octubre de 2002, FinnWatch es una red de organizaciones que reúne, analiza y disemina información relativa al impacto social y medioambiental de las empresas finlandesas en el Sur Global y en economías en transición, a fin de concienciar y alentar la conducta empresaria responsable. Para más información ver: http://www.finnwatch.org. Yokohama Action Research Center – YARC (Centro de Acción e Investigación Yokohama), Japón Fundada en 2001, YARC se dedica a la investigación para la acción de varias cuestiones económicas a nivel global, con el objeto de beneficiar los movimientos sociales. Las investigaciones de YARC examinan la inversión extranjera directa por parte de empresas japonesas, las empresas multinacionales y sus prácticas de RSE, la Comunidad del Este Asiático y el Impuesto Tobin. La organización participó en el caso contra las prácticas antisindicales de Toyota en las Filipinas. El caso, presentado en marzo de 2004 ante el PNC japonés, continúa pendiente. Forum for Environment and Development – ForUM (Foro para el Medioambiente y el Desarrollo), Noruega Fundada luego de la Cumbre para la Tierra de 1992, ForUM es una red de más de 50 ONGs dedicada a promover el desarrollo sostenible, a través del desarrollo de iniciativas y estrategias para influenciar a los hacedores de políticas, y a facilitar el intercambio de experiencias y recursos (sobre todo personas) entre organizaciones noruegas e internacionales. En julio de 2005, ForUM presentó un reclamo contra la empresa Aker Kværner ASA, responsable de la construcción y el mantenimiento de instalaciones de detención en la Bahía de Guantánamo. Para más información ver: www.forumfor.no. The Social Support Foundation – SSF (Fundación para el Apoyo Social), Ghana SSF fue constituida en agosto de 2000 como comité cohorte en materia de HIV/SIDA en Obuasi, distrito de Adansi West, Ghana. Sus actividades incluyen proveer 17 apoyo a personas con SIDA (reduciendo la estigmatización y la discriminación y ofreciendo apoyo psicosocial y atención médica) y a huérfanos del SIDA (reescolarizando a niños que abandonaron el sistema educativo y ofreciéndoles asistencia psicológica), como también promover prácticas de sexo seguro entre los trabajadores del sexo, promoviendo su reinserción. Para más información ver: www.ssfghana.org. Notes 1 © OECD Observer Nº 234, octubre de 2002. Belgium is flouting OECD rules for multinationals” (Las actividades 2 Informe de OECD watch Cinco años después: Una revisión de las mineras del Forrest Group en el Congo: Bélgica burla las reglas de la Directrices de la OCDE y los Puntos Nacionales de Contacto”, ver: OCDE para multinacionales), comunicado de prensa, Bruselas, 20 de www.oecdwatch.org. noviembre de 2005. 3 Comunicado de prensa de la OCDE, 21 de septiembre de 2005. 12 Comité de Asistencia para el Desarrollo de la OCDE, “Peer Review 4 RAID y The Corner House, “Response to the Stakeholder Consultation” – Belgium” (Revisión de pares – Bélgica), París, noviembre de 2005, pág. (Respuesta a la consulta con los stakeholders), enero de 2006, ver www.raid-uk.org. 5 Para leer el informe, ver http://www.oecdwatch.org/docs/Flagship_or_ Failure.pdf. 6 Comité Permanente de Relaciones Internacionales y Comercio Internacional del Parlamento canadiense, “Mining in Developing Countries and Corporate Social Responsibility” (La minería en países en desarrollo y la 45: http://www.oecd.org/document/37/0,2340,fr_2649_34603_35598117_ 1_1_1_1,00.html [en adelante, CAD – OCDE 2005]. 13 CAD – OCDE 2005, pág. 47. 14 CAD – OCDE 2005, pág. 14. 15 “A Symposium on Making the Most of International Investment Agreements: A Common Agenda” (Simposio sobre cómo obtener mayor provecho de los acuerdos de inversión internacional – una agenda común) – OCDE, París, Responsabilidad Social Empresaria). 12 de diciembre de 2005. 7 Ídem, “Mining in Developing Countries –Corporate Social Responsibility: 16 Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a la Inversión The Canadian Government’s Response to the Report of the Standing Committee on Foreign Affairs and International Trade”, (La minería en (International Centre for the Settlement of Investment Disputes – ICSID). 17 Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo (United Nations países en desarrollo y la Responsabilidad Social Empresaria: respuesta del Gobierno Canadiense al Informe del Comité Permanente de Conference on Trade and Development). 18 Christoph Scheuer, “Investment Arbitration – A Voyage of Discovery” Relaciones Internacionales y Comercio Internacional), octubre de 2005. 8 Ver http://www.oecdwatch.org/docs/OECD_Watch_Transparency_Briefing_ Paper.pdf. 9 Carta de Decoin, Friends of the Earth y Mining Watch Canadá a Stephen De http://www.oecd.org/document/42/0,2340,en_2649_34529562_35725418_ 1_1_1_34529562,00.html. Boer, Director Adjunto de la División de Políticas de Inversión y Comercio 20 Ver http://www.dfid.gov.uk/news/files/commision-africa-report1.asp. canadiense (Investment Trade Policy Division), 16 de enero de 2006. 21 “Business and International Crimes”, en http://www.fafo.no/liabilities/467.pdf. 10 Comuniqué del Punto Nacional de Contacto belga a cargo del seguimiento de las Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales, 20 de noviembre de 2005. 11 11.11.11 y otros, “The Forrest Group’s mining activities in the Congo: 18 (Arbitraje de inversión – Un viaje de descubrimientos). 19 La última versión preliminar del Marco de Políticas está disponible en: Boletín de OECD Watch 22 “Voluntary Principles on Security and Human Rights”, en http://www.voluntaryprinciples.org. 23 Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales Libres y su rama hemisférica, la Organización Regional Interamericana de Trabajadores. colophon OECD watch es una red internacional de 52 Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) que promueve la responsabilidad empresarial. El objetivo de OECD watch es poner a prueba la eficiencia de las Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales y informar a la comunidad de ONGs sobre las políticas y actividades del Comité de Inversión (antes: CIME) de la Organización para la cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE). Redactor: Patricia Feeney. Contribuciones de Jan Capelle, Colleen Freeman, Joris Oldenziel, Gunhild Ørstavik, Peter Pennartz, Bart Slob and Joseph Wilde. El Boletín de OECD Watch se publica periodicamente en inglés, español y francés. Para más información, contacte a uno de los coordinadores de OECD watch: Patricia Feeney, Editora Rights and Accountability in Development (RAID) Reino Unido Tel: (44) 1865 436 245 Fax: (44) 1865 270 721 E-mail: tricia.feeney@ntlworld.com Cornelia Heydenreich Germanwatch Vossstrasse 1, 10117 Berlín Alemania Tel: (+49) (0)30 2888 3564 Fax: (+49) (0)30 2888 3561 E-mail: heydenreich@germanwatch.org www.germanwatch.org Joris Oldenziel SOMO-Centro de Investigaciones para Empresas Multinacionales Keizersgracht 132, 1015 CW Amsterdam Países Bajos Tel: (+31) (0)20 639 1291 Fax: (+31) (0)20 639 1321 E-mail: j.oldenziel@somo.nl La producción de este boletín ha sido posible a través de financiamiento de la Comisión Europea (DG Empleo y Asuntos Sociales), el Ministerio holandés de Asuntos Exteriores, Novib (Oxfam-Holanda), MISEREOR y EED Alemania. ECD Watch www.oecdwatch.org Este proyecto es coordinado por SOMO. SO M O 19 Calendario de eventos 3 de marzo París, Francia OCDE Consulta sobre Infraestructura, Comité de Inversión 22 y 23 de mayo París, Francia OCDE Foro Anual – Tema: “Rebalanceando la Globalización” 16 de marzo Palais des Nations, Ginebra, Suiza 62do. período de sesiones de la Comisión de Derechos Humanos (CDH) 23 y 24 de mayo París, Francia OCDE Reunión del Consejo Ministerial 10 al 14 de abril París, Francia OCDE Reunión del Comité de Inversión – Tema: procedimientos legales paralelos 19 al 23 de junio París, Francia OCDE Reunión Anual de los PNCs y Mesa Redonda del Comité de Inversión – Tema: la mediación 24 y 25 de abril Varsovia, Polonia OECD watch Seminario de entrenamiento 3 al 7 de julio Tarkwa, Ghana OECD watch Seminario Interregional en África 4 al 7 de mayo Atenas, Grecia Foro Social Europeo