boletín - OECD Watch

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boletín
ECD Watch
Marzo 2006
www.oecdwatch.org
Contenido
1 Noticias de OECD watch
1 5 años después
2 Miembros de los Parlamentos holandés, británico y
canadiense debaten las Directrices
4 Paper informativo de OECD watch: la transparencia y el principio de confidencialidad
5 Desarrollo reciente de los casos
5 El PNC noruego critica el desempeño en materia de derechos humanos de una empresa operando en
Bahía de Guantánamo
5 Anvil Mining y el incidente de Kilwa, República
Democrática del Congo
6 Visitas in situ – método de prueba y error
6 Confusión en los casos concernientes al oleoducto BTC
7 Pedidos de clarificación denegados
7 Caso Bayer: el PNC mantiene reuniones separadas
7 La transparencia del PNC en el caso australiano contra
GSL
8 Pocos cambios en el caso concernientea la represa
hidroeléctrica en Brasil
8 La declaración del PNC belga en el caso del Forrest
Group – Bruselas, 20 de noviembre de 2005
9 Estadísticas actuales de los casos
9 Actualización Trimestral de Casos
10 Consultas en la OCDE
10 El Comité de Comercio considera la propuesta del
gobierno holandés
0 Orden del día de la inversión internacional
1
13Talleres de OECD watch
13 Desarrollo de capacidades en Ghana
14 Taller sobre la cadena de producción – Berlín, diciembre de 2005
14 Empresas en zonas de conflicto – París, septiembre de
2005
15 Actividades en las Américas
16 Noticias de la OCDE
16 La OCDE nombra un nuevo Secretario General
16 Partidas y arribos
17 Los nuevos miembros de OECD watch
17 Research Group for an Alternative Economic Strategy
(GRESEA), Bélgica
17 African Association for the defence of Human Rights
(ASADHO/Katanga), República Democrática del
Congo
17 Defensa y conservación ecológica de Intag (DECOIN),
Ecuador
17 FinnWatch, Finlandia
17 Yokohama Action Research Center (YARC), Japón
17 Forum for Environment and Development (ForUM),
Noruega
17 The Social Support Foundation (SSF), Ghana
20 Calendario de eventos
Noticias de OECD watch
5 años después
La revisión de las Directrices en el año 2000 –que contó
con un nivel inaudito de participación de ONGs- despertó gran optimismo en la repleta sede de la OCDE: “Si
las Directrices para EMNs logran ganar la confianza de
empresas, sindicatos y ONGs, podrían convertirse en una
de las iniciativas mundiales más importantes de responsabilidad empresaria global, reforzando instrumentos tales
como el Global Compact de la ONU. Como lugar de
origen de la mayoría de las multinacionales del mundo, la
OCDE puede y debe ganarse tal confianza”1.
me titulado Cinco años después, OECD watch notó que,
a pesar de la creciente visibilidad de las Directrices, los
resultados de la gran mayoría de los casos no fueron
alentadores2. El detallado informe enuncia ciertos impactos positivos, aunque las ONGs criticaron tanto la falta
de transparencia como la inconsistencia en las interpretaciones y la aplicación de las Directrices por parte de los
Puntos Nacionales de Contacto (funcionarios públicos
responsables de interpretar las Directrices y de tratar los
reclamos presentados en base a ellas, en adelante PNCs).
Sin embargo, la experiencia de las ONGs en los últimos
cinco años ha apagado el entusiasmo inicial. En su infor-
En una ciudad que presenció siglos de barricadas, disturbios y protestas callejeras corrió el rumor de que
las ONGs invadirían el sector que aloja a la OCDE, el
Arrondissement 16. Desde su espacio de reuniones y
en un clima de gestión de crisis, los PNCs luchaban por
enviar al mundo un mensaje en respuesta a los reclamos
de OECD watch. Lo mejor que pudieron ofrecer fue un
débil mensaje tranquilizador en el sentido de que los
gobiernos estaban comprometidos con el objetivo de
tornar las Directrices en una herramienta aún más útil
para promover la responsabilidad social empresaria entre
las multinacionales3. OECD watch aboga por que los
gobiernos introduzcan medidas más rigurosas para superar las malas prácticas empresarias, particularmente en
los países en desarrollo.
En su esfera individual, varios PNCs consideran que las
Directrices han sentado la base para que los gobiernos
de los países de origen de las EMNs puedan impugnar la
presunta mala conducta de éstas en sus operaciones en
países en desarrollo. Arguyen que, tratándose de empresas preocupadas por su reputación, el intercambio –aunque confidencial y con frecuencia informal- incrementa
la conciencia de los problemas y las trampas ligadas a
la globalización. En consecuencia, las actitudes y prácticas empresarias están cambiando. Añaden que entre
las ONGs existe una fe equivocada en la efectividad de
las regulaciones vinculantes. Sin embargo, los PNCs no
toman en consideración los análisis de OECD watch, sino
sólo sus conclusiones.
¿Y cuál es la posición de las multinacionales en este
debate? En últimos cinco años, los intentos de los principales órganos empresarios del mundo de diseminar las
Directrices entre sus miembros han sido notablemente
débiles. MEDEF, la asociación empresaria e industrial
francesa, constituye una excepción: el Instituto de
Empleadores y la Cámara Internacional de Comercio han
comenzado a manifestar públicamente su adhesión a las
Directrices de la OCDE, aunque menos por convicción
que para esquivar las Normas de Derechos Humanos de
la ONU para las Empresas. No obstante, varias empresas
comienzan a adherir en forma individual a los procedimientos de las Directrices, un tanto desorientadas por
la fragmentación y la proliferación de los códigos de
conducta y sistemas de certificación: sólo en los EE.UU.
existen 12 organismos públicos con más de 50 programas federales dedicados a promocionar la responsabilidad social empresaria. Empresas líderes de la industria
extractiva incluso alentarían una mayor claridad por parte
de la OCDE respecto de lo que se considera conducta
aceptable en zonas de conflicto. Hay signos que indican
un compromiso renovado incluso de parte del Comité
Consultivo Empresario e Industrial de la OCDE (Business
and Industry Advisory – BIAC), que durante años no
mostró más que indiferencia. BIAC anunció recientemente una “agenda positiva” en relación a las Directrices,
Boletín de OECD Watch
aunque sin revelarla aún, y está apoyando el trabajo del
Comité de Inversión en materia de zonas de gobernabilidad débil.
En un claro mensaje a los gobiernos OECD watch
transmitió la frustración de las ONGs por el perceptible
debilitamiento de las Directrices y los reiterados intentos
de los PNCs de esquivar los procedimientos. Resulta
imposible alcanzar una visión compartida de la dimensión
ética de los negocios globales a través de un proceso
a puertas cerradas en el cual sólo participan empresas
y funcionarios públicos. En este sentido, el afirmar que
las Directrices son insuficientes no es novedad y es difícilmente controvertible. Sí sería una novedad que los
gobiernos adoptaran acciones positivas…
Miembros de los Parlamentos holandés, británico y canadiense debaten las Directrices
El informe –y la consternación- de OECD watch sobre
el mal proceder de los PNCs en numerosos casos han
alentado a miembros de los parlamentos holandés, británico y canadiense (MP) a impugnar la actual forma de
implementación de las Directrices. En los Países Bajos y
el Reino Unido se han iniciado importantes revisiones del
actual procedimiento.
Países Bajos
En otoño último, durante una consulta general sobre
la responsabilidad social empresaria (RSE), la miembro
del Parlamento holandés Corien Jonker (del partido
gobernante Cristiano Democrático, CDA) planteó varias
preguntas sobre la actitud del gobierno holandés hacia
las Directrices. En respuesta, la Ministro van Gennip
(Ministro holandés para el Comercio Exterior) confirmó
que estaba al tanto del informe de OECD watch y reconoció que el gobierno es responsable de promover las
Directrices. Respecto de la penosa cuestión del alcance
de las Directrices, la Ministro hizo referencia al pedido
del gobierno holandés al Comité de Comercio de la
OCDE para que realizara un estudio sobre la RSE en el
comercio y las cadenas de producción de las empresas.
La Ministro se manifestó en favor de un mecanismo de
“aprendizaje de pares” tendiente a mejorar el desempeño de los PNCs de la UE. Durante una consulta sobre
el presupuesto del Ministerio de Economía para 2006,
miembros del partido opositor Ecologista de Izquierda
(GroenLinks) inquirieron sobre lo que estaba haciendo
el gobierno para que las Directrices fueran más vinculantes; la Ministro van Gennip respondió que se oponía
a que los instrumentos de RSE fueran de cumplimiento
obligatorio. En noviembre de 2005, dos MP holandés,
la Sra. Corien Jonker (CDA) y el Sr. Kris Douma (Partido
Laborista – PvdA) participaron en un debate público
sobre la RSE en la industria del té, organizado por SOMO
en Ámsterdam. El Sr. Douma bregó por la extensión del
alcance de las Directrices y en favor de su transformación
en un instrumento vinculante.
En septiembre de 2005, el Ministerio de Economía holandés comenzó a evaluar el trabajo del PNC holandés, revisando la conveniencia de su actual estructura y funciones
institucionales. El decreciente interés en las Directrices
contribuyó a motivar dicha evaluación: en los últimos 18
meses posteriores a la controvertida decisión del caso
Chemie Pharmacie Holland no se presentaron nuevos
reclamos ante el PNC holandés. En el contexto de la evaluación se realizaron consultas tanto con representantes
de los diversos Ministerios que integran la estructura del
PNC como con representantes de empresas, sindicatos y
ONGs.
Las ONGs expresaron su preocupación por la aplicación
del “nexo de inversión” y la incapacidad del PNC (o su
falta de disposición) de tratar casos de índole comercial.
Plantearon la ausencia de plazos y de transparencia en la
resolución de los procedimientos de instancia específica,
y cómo ello las llevaba a cuestionar la imparcialidad del
PNC. Aunque varios Ministerios integran oficialmente la
estructura del PNC, su secretaría es claramente liderada
por el de Economía, cuya tarea principal consiste en
promover los intereses de las empresas holandesas. Ello
ha incrementado la desconfianza en la imparcialidad del
PNC. Las ONGs presentaron una serie de propuestas
tendientes a restaurar dicha confianza, como el establecimiento de un ombudsman o comisión independiente
dotada de poderes investigativos y responsable de
resolver los procedimientos de instancia específica. El
PNC reformado podría presentar sus recomendaciones
al Ministro de Comercio Exterior holandés, quien sería
el responsable último del resultado de cada caso. Otras
sugerencias incluyeron la transformación del PNC en
un órgano cuatripartito, con representantes de empresas, ONGs y sindicatos. Otros Ministerios –como el
de Cooperación para el Desarrollo, Asuntos Sociales y
Medioambiente- debieran desempeñar un rol mucho más
importante en el trabajo del PNC. Por último, diversos
Ministerios podrían liderar la resolución de los diferentes
casos, en función de las características de cada uno.
Las opciones para mejorar el desempeño del PNC seguirán siendo objeto de discusión. Se espera que el Ministro
de Comercio Exterior presente los resultados de la evaluación en abril de 2006.
Reino Unido
En octubre de 2005, el gobierno británico anunció que
realizaría una consulta con stakeholders sobre “potenciales mejoras” a la promoción e implementación de
las Directrices por parte del PNC del RU. La decisión
se fundó en un informe del Grupo Parlamentario
Interpartidario sobre la Región de los Grandes Lagos (All
Party Parliamentary Group on the Great Lakes’ Region
– APPG), de febrero de 2005, relativo al tratamiento, por
parte del PNC británico, de los reclamos presentados
por la ONG RAID en función de los hallazgos del Panel
de Expertos de la ONU sobre la Explotación Ilegal de
los Recursos Naturales y Otras Formas de Riqueza de la
República Democrática del Congo. RAID y The Corner
House, quienes habían planteado la mayoría de los
casos, presentaron una respuesta conjunta4. La consulta
del gobierno del RU se caracterizó por su alcance notablemente estrecho: sus preguntas se limitaron únicamente a “cuestiones sobre las cuales aún no tiene una visión
firme”. El documento de la consulta sólo enumera potenciales acciones cuya realización el gobierno ya propone
desde un comienzo. Si bien algunas de ellas son bienvenidas, como el involucramiento más formal de otras áreas
gubernamentales en el trabajo del PNC, el documento
evita cualquier discusión sobre el tema del procedimiento
más allá de alguna propuesta de modificación menor. La
respuesta de las ONGs señala las cuestiones problemáticas, incluyendo la adopción de decisiones ad hoc, la
ausencia de disposiciones en materia de revelación de
información y las inconsistencias y la tendenciosidad en
la interpretación e implementación de las Directrices.
El documento de la consulta también contiene una serie
de afirmaciones con las cuales las ONGs están en desacuerdo, como por ejemplo aquélla según la cual PNC
del RU se abstendría de tratar un reclamo cuando media
un procedimiento judicial paralelo, sea éste penal, civil
o administrativo. Las ONGs objetan una regla “sábana”
que impida la consideración de los reclamos en razón
de la existencia de procedimientos paralelos, aunque
reconocen que, tratándose de un procedimiento penal
paralelo, el PNC deberá ser advertido de la necesidad
de evitar un posible prejuzgamiento. A su vez, recomiendan que el PNC del RU sea el reestructurado y se
le confiera el status de ombudsman independiente. En
su defecto, proponen como medida transitoria que el
Departamento de Comercio e Industria –debidamente
entrenado al efecto- continúe desempeñando un rol
mediador. En caso de fracasar la mediación, el reclamo
irresuelto sería transferido a un panel interministerial
presidido por una persona legalmente designada al
efecto. Según las ONGs, si el gobierno británico –abandonando su postura original- insistiera en que el PNC
del RU no está obligado a declarar las violaciones a las
Directrices, poco quedará por ganar del compromiso
con este instrumento.
El Financial Times cubrió, en enero de 2006, el lanzamiento de un informe de las ONGs Amnesty International
Reino Unido, Christian Aid y Friends of the Earth, titulado
¿Insignia o Fracaso? 5 (Flagship or Failure?) y basado en
la experiencia de las ONGs británicas en la presentación
de reclamos ante el PNC. El informe critica la falta de
voluntad política del gobierno para imponer la ejecución
obligatoria de las Directrices.
El Comité de Desarrollo Internacional del Parlamento
británico ha solicitado expresamente una presentación
sobre el trabajo del PNC del RU, en vista de la próxima celebración de audiencias sobre el desarrollo del
sector privado. Por su parte, el Grupo Parlamentario
Interpartidario sobre la Región de los Grandes Lagos ha
instituido un grupo de trabajo multi-stakeholder cuya
función específica consiste en asistir al gobierno tanto
en la evaluación del resultado de la consulta como en el
establecimiento de un nuevo procedimiento para tratar
los reclamos.
Canadá
Un grupo de parlamentarios canadienses solicitó al
Ministro canadiense de Relaciones Exteriores el establecimiento de medidas jurídicamente vinculantes para
gobernar la conducta de las empresas mineras canadienses en todo el mundo, y, puntualmente, la investigación
de las actividades de TVI, una empresa minera que
actualmente opera en las Filipinas6. El Ministro rechazó
el pedido7, arguyendo que Canadá prefiere mantener
su adhesión a códigos de carácter voluntario como las
Directrices de la OCDE. Sostuvo asimismo que consideraba unificar los principios voluntarios en materia
de derechos humanos y de seguridad, declarando que
“cuenta con ciertos mecanismos para influenciar a las
empresas que, a pesar de tener sus sedes en el exterior
y de ser administradas por personas no residentes en
Canadá, se hallan incorporadas al país o bien cotizan
en la bolsa canadiense”. En el transcurso del año, el
gobierno canadiense organizará cinco mesas redondas
en distintas partes del país para examinar las cuestiones
planteadas en el informe parlamentario. También se comprometió a brindar apoyo financiero y político al trabajo
del Representante Especial de la Secretaría General de
la ONU en lo referente a derechos humanos y empresas
transnacionales y otras empresas comerciales.
Paper informativo de OECD watch: la transparencia y el principio de confidencialidad 8
Desde el primer reclamo presentado por una ONG, en
2001, la cuestión de la confidencialidad y la transparencia
en el procedimiento de instancia específica ha sido una
de las cuestiones centrales en los debates sobre cómo
promover la efectiva implementación de las Directrices
para Empresas Multinacionales.
Refiriéndose a él como el “principio de confidencialidad” de las Directrices, la Guía Procedimental instruye a
las partes en un reclamo a omitir revelar la información
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conocida y la documentación recibida luego de haber
sido el caso aceptado por el PNC, salvo que las partes
acuerden que la información puede ser hecha pública.
En lo que también cabría denominar el “principio de
transparencia”, la Guía Procedimental dispone a su vez
que los PNCs debieran hacer públicos los resultados de
los reclamos, “a menos que el mantenimiento en secreto
de dicha información redunde en el máximo interés de la
aplicación eficaz de las Directrices”.
En la práctica, no obstante, es frecuente que los PNCs
den mayor énfasis al mantenimiento de la confidencialidad en todos los aspectos del procedimiento de instancia específica, sacrificando así la transparencia hacia los
reclamantes. Ejemplo de ello es el hecho de que pocos
PNCs emiten una declaración al concluir un caso. Por
otro lado, hay signos preocupantes que sugieren que
el Comité de Inversión se propone extender el alcance
del principio de confidencialidad, mientras que, paralelamente, casi nada demuestra que los PNCs se estén
esforzando por una mayor transparencia en el manejo de
los reclamos.
Un nuevo paper de OECD watch explica el principio de
confidencialidad de las Directrices, incluyendo en qué
consiste, cuándo es aplicable y cuándo una interpretación
del principio no es consistente con la Guía Procedimental
de las Directrices. También explica las obligaciones del
PNC en materia de transparencia, describiendo cómo
la ausencia de procedimientos administrativos para la
consideración de instancias específicas (incluyendo la
información sobre los resultados de los casos) continúa
siendo el principal obstáculo al logro de la equivalencia funcional. El paper también examina los principales
debates en materia de confidencialidad y transparencia
en el procedimiento de instancia específica, concluyendo con una serie de recomendaciones para aumentar la
transparencia.
Desarrollo reciente de los casos
El PNC noruego critica el desempeño en
materia de derechos humanos de una
empresa operando en Bahía de Guantánamo
El 29 de noviembre de 2005, el Punto Nacional de Contacto noruego emitió su declaración final en el caso sobre las actividades de Aker Kværner en la Bahía de
Guantánamo, Cuba. El reclamo había sido presentado
cinco meses antes por ForUM (Forum for Environment
and Development), red noruega de más de 50 organizaciones voluntarias dedicadas al medioambiente y el desarrollo.
Aker Kværner ASA opera en la Bahía de Guantánamo
desde 1991, trabajando para el Departamento de
Defensa de los EE.UU. a través de su subsidiaria
Kværner Process Services Inc. (KPSI) cuya propiedad
ostenta en un 100%. En 2001, la empresa fue contratada para la construcción y el mantenimiento de instalaciones para la detención de combatientes, muchos de
los cuales habían sido capturados durante la guerra en
Afganistán. Varias organizaciones internacionales –incluyendo el Comité Internacional de la Cruz Roja, Human
Rights Watch y Amnistía Internacional- declararon que
las condiciones de detención en las instalaciones de la
Bahía de Guantánamo son violatorias de las normas fundamentales de derechos humanos.
En su reclamo, ForUM alegó que Aker Kværner, a través de su subsidiaria KPSI, había violado el Capítulo 2,
párrafo 2 de las Directrices de la OCDE, conforme el cual
las empresas deben “respetar los derechos humanos de
aquéllos afectados por sus actividades de conformidad
con las obligaciones y compromisos internacionales del
gobierno de acogida”. ForUM arguyó que, toda vez que
contribuyen a mantener un sistema de detención violatorio de la ley internacional y los derechos humanos básicos, las actividades de Aker Kværner ASA y KPSI tienen
efectos lesivos para los prisioneros y omiten respetar sus
derechos humanos.
Luego de aceptar el reclamo de ForUM, el PNC mantuvo
dos reuniones en presencia de ambas partes, ForUM y
Aker Kværner. En su declaración final, el PNC manifestó
su apoyo a los alegatos del reclamante: hizo referencia
a los antecedentes pobres que en materia de derechos
humanos registran las instalaciones de detención de
Guantánamo, y sostuvo que “cabe considerar que las
actividades de la compañía han afectado, al menos
parcialmente, a los detenidos en dichas prisiones”. El
PNC criticó a Aker Kværner por haber omitido revelar
información durante el procedimiento confidencial,
observando que pudo haberlo hecho “sin por ello afectar
su compromiso de confidencialidad con el cliente”. Por
último, el PNC remarcó que la empresa omite adecuar su
conducta a directrices éticas, “recomendándole enfáticamente” el desarrollo de directrices para regular todas
sus actividades en el futuro. La declaración del PNC está
disponible en http://www.oecdwatch.org/docs/ForUM_
Aker_Kvaerner_NCP_final_statement.pdf.
Aker Kværner ha anunciado su decisión de retirarse de la
Bahía de Guantánamo, invocando la razón de no haber
ganado una licitación. Todas las operaciones de Aker
Kværner en Guantánamo cesarán a fines de 2005. Los
reclamantes han celebrado la retirada de Aker Kværner y
sostienen que su reclamo ha contribuido con dicha decisión, a pesar de que la empresa lo niega. Luego de publicarse la declaración del PNC, Aker Kværner se acercó a
ForUM en busca de ayuda para desarrollar sus nuevas
políticas de RSE.
Anvil Mining y el incidente de Kilwa,
República Democrática del Congo
En septiembre de 2004, el Directorio del Banco Mundial
aprobó una garantía de riesgo político para la mina de
cobre y plata Dikulushi de la empresa Anvil Mining, en
la región de Katanga de la República Democrática del
Congo. Pocas semanas después hubo un levantamiento
reducido en el pueblo de Kilwa, a aproximadamente 50
Km. al sur del proyecto Dikulushi. Kilwa es crucial para
las operaciones de extracción de cobre y plata de Anvil,
dado que es el puerto –sobre el Lago Mweru- desde el
cual los minerales son enviados a Zambia para su procesamiento.
En Lubumbashi, la oficina regional de MONUC –organización establecida por el Consejo de Seguridad de la
ONU para monitorear y asegurar el cese de fuego en la
República Democrática del Congo- realizó una investigación poco después de este incidente. Se reportaron
aproximadamente 100 muertes y, conforme la ONU, unas
28 muertes fueron ejecuciones sumarias. Según los dichos
de testigos oculares, reunidos por abogados de derechos
humanos, los soldados acometieron un ataque desenfrenado e indiscriminado, perpetrando arrestos arbitrarios y
ejecuciones sumarias de presuntos rebeldes y sus seguidores, violando mujeres y sometiendo a los detenidos a
torturas y golpes.
El informe de MONUC reveló asimismo que Anvil Mining
proveyó apoyo logístico a la operación militar: permitió
el uso de los aviones que alquila para trasladar a sus
empleados hacia y desde la mina, tanto para hacer llegar
a los militares al lugar de los hechos como para trasladar
a Lubumbashi a quienes habían sido arbitrariamente
arrestados por éstos. A su vez, los testigos informaron a
los abogados de derechos humanos que los militares recibieron comida y dinero de Anvil, y que los vehículos de la
empresa –conducidos por sus propios empleados- fueron
utilizados para enterrar a quienes habían muerto en el
incidente.
Ya en junio de 2004, organizaciones de la sociedad
civil congolesas e internacionales manifestaron su preocupación por el apoyo del Banco Mundial al proyecto
Dikulushi. Las ONGs se preguntaron si el Organismo
Multilateral de Garantía de Inversiones (Multilateral
Investment Guarantee Agency – MIGA) había evaluado
adecuadamente las implicancias del proyecto en materia
de derechos humanos y seguridad, dada la manifiesta
relación entre conflictos vinculados a la industria extractiva y violaciones de derechos humanos.
En agosto de 2005, luego de un documental australiano
sobre el incidente de Kilwa (de junio de 2005) y de la
subsiguiente carta que RAID y otras organizaciones de
la sociedad civil enviaran al Banco Mundial resaltando
estas cuestiones, Wolfowitz, Presidente del Banco, instó
al Ombudsman y Asesor en materia de Observancia a
revisar la diligencia debida por el organismo en el proyecto Dikulushi. La evaluación concluyó y fue enviada al
Presidente Wolfowitz en septiembre último. Su publicación ha sido demorada sin explicación.
En junio, las ONGs canadienses Rights and Democracy
y L’Entraide Missionaire presentaron un reclamo ante
el PNC canadiense, quien facilitó una reunión entre la
empresa y las ONGs en noviembre de 2005.
Anvil Mining, empresa de propiedad australiana que
cotiza en la bolsa canadiense, es también investigada
por la Policía Federal australiana, a fin de determinar
si existen evidencias de la comisión de crímenes de
lesa humanidad o crímenes de guerra de conformidad con el Código penal australiano (Australian
Criminal Code Act 1995), y/o violaciones tanto a la
enmienda Nº 1999 al Código penal (la ley australiana
que prohíbe los pagos ilícitos a funcionarios públicos extranjeros de conformidad con la Convención
Anticorrupción de la OCDE) como a la ley sobre los
productos del delito (Proceeds of Crime Act 2002 ó
1987). Las organizaciones RAID, ACIDH y ASADHO/
Katanga y el Consejo Australiano de Derechos
Humanos (Human Rights Council of Australia) ayudan
actualmente a las víctimas a solicitar de la empresa la
correspondiente reparación, a través del estudio jurídico australiano Slater & Gordon.
Boletín de OECD Watch
Visitas in situ – método de prueba y error
Recientemente, los PNCs británico y canadiense se han esforzado en resolver reclamos de alto perfil a través de la visita oficial a los países de acogida relevantes en cada caso.
Para el caso relativo al proyecto de oleoducto BakuTbilisi-Ceyhan (BTC) de British Petroleum (BP), el PNC del
RU organizó un viaje de recolección de información en
septiembre último, visitando las comunidades afectadas
y a ONGs de Azerbaiján, Georgia y Turquía. El PNC organizó sus visitas en colaboración con los reclamantes y la
empresa, a fin de asegurar que todas las partes estuvieran
satisfechas con los términos de referencia. Basándose en
esta experiencia positiva con el PNC del RU, OECD watch
recomienda, para el futuro, una instancia previa de acuerdo sobre los términos de referencia (y, de ser necesario,
su traducción a las lenguas locales) y su puesta a disposición de todas las partes interesadas.
Desafortunadamente, en el caso que involucraba a
Ascendant Copper Corporation, el intento de los representantes del PNC canadiense de arribar a un acuerdo
previo sobre los términos de referencia con los reclamantes fracasó. Lo mismo ocurrió con su tentativa de facilitar
una reunión con líderes comunitarios, ONGs y la empresa
en Ecuador: el encuentro fue cáustico. El PNC insistió en
la confidencialidad de la primera reunión entre ejecutivos
de la empresa y representantes comunitarios y de ONGs,
condición inaceptable en razón de que, en opinión de las
ONGs, “en (el área de) Intag hay un clima tenso, plagado
de desconfianza”. En diciembre de 2005, miembros de las
comunidades afectadas por las actividades de Ascendant
habían incendiado parte de las instalaciones de la empresa. Las ONGs temían que una reunión confidencial sólo
exacerbara la actual situación local debido a que los
representantes estarían impedidos de informar a sus
respectivas comunidades las conclusiones de la misma.
“Más que aliviar la tensión y pavimentar el camino hacia
un entendimiento mutuo, una reunión confidencial probablemente incremente la desconfianza”9. Sin embargo, las
ONGs aceptaron la naturaleza confidencial de cualquier
información potencialmente sensible y solicitaron al PNC
que planteara la cuestión a Ascendant, pero su pedido fue
rechazado. Las ONGs han desistido de su reclamo, invocando que no confían en el proceso. El comunicado de
prensa que informa el desistimiento del caso se encuentra
publicado en http://www.oecdwatch.org/docs/DECOIN_
Ascendant_withdraw_press_release.pdf.
Confusión en los casos concernientes al oleoducto BTC
Casi tres años después de que ONGs de seis países presentaran reclamos contra el consorcio Baku-Tbilisi-Ceyhan
–liderado por la BP-, cuyo controvertido oleoducto BTC
transportará crudo del Mar Caspio hacia mercados occidentales, los PNC en cuestión no han logrado decidir a
cuál/es de ellos corresponde entender en los casos. El
PNC belga insiste en que el RU aceptó asumir total responsabilidad en la materia, posición que comparte con el
PNC italiano. Pero el RU mantiene que los PNC nacionales
deberían hacerse cargo de los reclamos, a pesar de que
su PNC figura como el “PNC principal”. En consecuencia,
los reclamantes basados fuera del RU se encuentran en un
limbo: sus casos sólo juntan polvo mientras los archivos
van y vienen de un PNC al otro. Las ONGs consideran presentar una protesta formal ante el Comité de Inversión.
Pedidos de clarificación denegados
En 2005, el Comité de Inversión recibió dos pedidos
de clarificación relativos a dos casos que, en opinión
de las ONGs reclamantes, fueron mal manejados por
los PNCs francés y belga; ambos casos versan sobre
proyectos de represas hidroeléctricas en Laos: el primero concierne al proyecto Nam Theun 2 de la empresa
Electricité de France; el segundo, al proyecto Houay Ho
de Suez‑Tractebel. Las ONGs sostienen que, en ambos
casos, los PNCs burlaron la Guía Procedimental de las
Directrices a la hora de tratar las instancias específicas, en
particular las disposiciones referentes a la consulta con la
parte reclamante.
El Comité de Inversión rechazó los pedidos de clarificación
de las ONGs en razón de que OECD watch, su grupo
paraguas, carece de “status consultivo” ante él. Al crearse
la OCDE hace más de 40 años, tanto a TUAC (el Comité
Consultivo Sindical) como a BIAC (el Comité Consultivo
Empresario e Industrial) y a varias organizaciones de agricultura se les reconoció status consultivo especial ante el
Consejo de la Organización, condición que los faculta a
participar ampliamente en el trabajo de la misma.
La OCDE no ha modernizado sus reglas a fin de reconocer adecuadamente el surgimiento, en las últimas dos
décadas, de la sociedad civil global. Al rechazar los pedidos de clarificación de las ONGs, el Comité de Inversión
no sólo falla en una de sus principales tareas –la de asegurar la efectiva implementación de las Directrices- sino
también perpetúa un sistema injusto y caduco.
Caso Bayer: el PNC mantiene reuniones
separadas
El caso que varias ONGs alemanas presentaron en
octubre de 2004 se funda en la presunta violación, por
parte de proveedores de la empresa alemana Bayer
AG en India, del Capítulo de las Directrices referente
al empleo y las relaciones industriales, en razón del
uso de trabajo infantil. Se basa en un estudio del año
2003, titulado “El Trabajo Infantil y las Transnacionales
Semilleras en la Producción de Semillas Híbridas
de Algodón” (Child Labour and Transnational Seed
Companies in Hybrid Cottonseed Production), y en un
estudio del año siguiente que reveló que aproximadamente 2.000 niños trabajan para proveedores de
Proagro, subsidiaria de Bayer.
Habiendo recibido información comprehensiva de
ambas partes, el PNC alemán invitó a todas ellas a una
reunión. Sin embargo, Bayer objetó la participación
de una de las ONGs involucradas, rechazando la invitación, a pesar de lo cual informó al PNC y al público
en general que ya ha adoptado medidas concretas y
constructivas para resolver los problemas planteados.
En lugar de llevarse a cabo una reunión conjunta, el
PNC mantuvo reuniones separadas con cada parte:
primero se reunió con Bayer, ocasión en la cual la
empresa explicó su plan y cómo pensaba abordar el
problema. El PNC transmitió a las ONGs la presentación de la empresa y las minutas de la reunión y posteriormente se reunió con ellas. Las minutas de esta
última reunión omitieron ciertos puntos planteados
por las ONGs, hecho que provocó la preocupación de
éstas; luego de una serie de discusiones con el PNC,
dichos puntos fueron incluidos en una nueva versión
de las minutas. En términos generales, se percibió que
el mantener reuniones separadas con el reclamante,
por un lado, y con la empresa, por el otro, puede
comprometer la naturaleza (supuestamente) independiente/ objetiva del PNC, dado que lo coloca en la
situación de tener que presentar a las ONGs la visión y
los argumentos de la empresa.
La transparencia del PNC en el caso
australiano contra GSL
En el caso sobre la detención ilegal de niños en
centros de detención de inmigrantes, que involucra
a la empresa Global Solutions Limited, el PNC australiano mantuvo un alto nivel de comunicación con
los reclamantes, tanto telefónica como por escrito
(incluyendo el correo electrónico). El PNC les proveyó información detallada por escrito y los documentos de correspondencia entre todas las partes
involucradas. Ha sido transparente y claro en todo
momento del seguimiento de la Guía Procedimental,
lo cual es particularmente alentador dado el carácter
extremadamente sensible del problema y la especial
atención que despiertan las cuestiones conexas en la
opinión pública.
Pocos cambios en el caso concerniente a la
represa hidroeléctrica en Brasil
El 6 de junio de 2005, dos ONGs brasileras presentaron
un reclamo ante el PNC de dicho país, concerniente a
las actividades de Alcoa Alumínios S.A. y un consorcio
brasilero en la construcción de una represa hidroeléctrica en Barra Grande, Brasil. Con el objeto de reunir más
información, el PNC mantuvo una reunión inicial con las
ONGs aunque luego admitió que la actual situación política brasilera dificultaría la resolución del caso. Fuentes
no oficiales informaron a las ONGs que el PNC planea
cerrar el caso invocando la falta de evidencia de la conducta de las empresas, aunque las ONGs sostienen que
la evidencia en su poder es suficiente.
La declaración del PNC belga en el caso del
Forrest Group10 – Bruselas, 20 de noviembre
de 2005
Según 11. 11. 11. y las demás ONGs reclamantes, la
declaración del PNC belga en el caso sobre las actividades mineras de Forrest Group en la República
Democrática del Congo constituyó “una burla a las
Directrices que se supone debiera defender y promover”11. Por su parte, el PNC belga señaló que había convocado a cinco reuniones en el transcurso del año, tres
de las cuales contaron con la participación de las ONGs y
de M. Forrest y sus representantes legales.
Las ONGs admitieron que, al recomendar mayor transparencia al Forrest Group, el PNC reconoció implícitamente el incumplimiento de las Directrices por parte de
la empresa, aunque luego contrarrestó dicha admisión
al declarar que el Forrest Group había respetado las
Directrices “en la medida de lo posible”. En la declaración del PNC fue notable la ausencia de referencias a la
cuestión clave en los contratos mineros del grupo, cuya
validez fue cuestionada tanto por el Panel de la ONU
como por la Comisión Investigadora sobre los Grandes
Lagos del Senado belga (2003). Según el Comité de
Asistencia para el Desarrollo de la OCDE (Development
Assistance Committee – DAC), las investigaciones del
Senado belga “pudieron haber sido más profundas; más
aún, las recomendaciones formuladas en la evaluación
apenas si fueron seguidas con diligencia” 12.
El PNC recomendó al Forrest Group que proveyera periódicamente “información confiable y relevante” sobre las
cuestiones financieras, sociales y medioambientales que
lo involucran, y que alentara a sus proveedores a adherir a las Directrices. Le recordó asimismo que el grupo
debería hacer más por las comunidades cercanas a sus
instalaciones. “Estas recomendaciones muy generales
Boletín de OECD Watch
son bienvenidas, y nosotros llamamos al Forrest Group a
ponerlas en práctica”, sostuvo Marc-Olivier Herman de
la ONG Broederlijk Delen. Pero las ONGs presentaron
recomendaciones más específicas, que incluyen la convocatoria a una auditoria medioambiental total y un estudio
de salud pública en las áreas residenciales que rodean la
planta de tratamiento de cobalto en Lubumbashi (parte
del joint venture entre Big Hill y el OM Group de los
EE.UU.). Las ONGs también convocaron a una evaluación
independiente del contrato minero de Kamoto, una de las
principales concesiones en Katanga que fue adjudicada al
Forrest Group en julio de 2005, cuando el Banco Mundial
había impuesto una moratoria a los nuevos contratos
mineros.
Las ONGs admiten que el PNC consideró seriamente la
mayoría de las cuestiones planteadas en el reclamo, aunque pusieron en duda la independencia e imparcialidad
de algunos miembros del PNC, sobre todo los representantes del gobierno regional de Walloon. En este contexto, y en relación con la autorización de exportación que
el gobierno de Walloon otorgó a New Lachaussée (una
empresa del Forrest Group) para la construcción de una
línea de producción de municiones para rifles de asalto
en Tanzania, el Comité de Asistencia para el Desarrollo
de la OCDE expresó su preocupación por “la absoluta falta de jerarquía entre el nivel federal y los niveles
federados, lo cual dificulta la resolución de conflictos de
intereses” y la coherencia en materia de políticas. Con el
tiempo, dicha autorización fue suprimida13.
La principal lección para las ONGs en el proceso fue la
necesidad de reformar el PNC y de establecer el carácter
vinculante de las Directrices de la OCDE. A estos efectos se presentaron iniciativas privadas de leyes ante la
Cámara de diputados y el Senado belga.
A principios de febrero de 2006, el Ministro de
Relaciones Exteriores belga, Karel De Gucht, realizará una
visita oficial a la República Democrática del Congo. Se
espera que tenga presente la recomendación del Comité
de Asistencia para el Desarrollo de la OCDE en el sentido
de que Bélgica “debería continuar mejorando el monitoreo de la conducta de las empresas belgas con intereses
en la República Democrática del Congo” 14.
Estadísticas actuales de los casos
Status actual de los 47 casos presentados por ONGs en función de las Directrices
Status
Presentados: la ONG ha enviado el reclamo al PNC
No. de casos
0
Pendientes: el PNC ha confirmado la admisibilidad del caso y el procedimiento de instancia
específica está en marcha
16
Concluidos: el PNC ha arribado a una decisión y emitido una declaración, o bien el caso
fue resuelto en un ámbito externo al del PNC
13
Cerrados: el PNC había iniciado el caso pero luego lo ha desechado sin emitir declaración
2
Desestimados: el PNC ha desestimado formalmente el caso presentado por la ONG
8
Desistidos: los reclamantes han optado por desistir el caso
2
Bloqueados: el PNC no tiene en claro el estado del caso (no hubo desestimación formal
pero tampoco hay intención de aceptarlo como instancia específica).
6
Número de casos de ONGs que involucran los diversos Capítulos de las Directrices
Capítulo de las Directrices de la OCDE que fue invocado
Capítulo I - Conceptos y Principios
No. de casos
8
Capítulo II – Principios Generales (incluyendo derechos humanos y cadena de producción)
38
Capítulo III – Publicación de informaciones
11
Capítulo IV – Empleo y relaciones laborales
17
Capítulo V – Medioambiente
20
Capítulo VI – Lucha contra la corrupción
9
Capítulo VII – Intereses de los Consumidores
2
Capítulo VIII – Ciencia y Tecnología
0
Capítulo IX – Competencia
7
Capítulo X – Fiscalidad
3
Actualización Trimestral de Casos
OECD watch publica ahora una Actualización Trimestral
de Casos que provee una vista general de los desenvolvimientos en todos los casos presentados por ONGs en
función de las Directrices. Para ver ver la Actualización
Trimestral de Casos más reciente, ver la sección de información sobre los casos disponible al público en la página
web de OECD watch (www.oecdwatch.org).
Consultas en la OCDE
El Comité de Comercio considera la
propuesta del gobierno holandés
En octubre último, representantes de SOMO y Oxfam–
Países Bajos se reunieron con el Comité de Comercio de
la OCDE a fin de discutir la propuesta del gobierno holandés para identificar las trabas que obstruyen –y mejores prácticas que hacen progresar- la conducta empresaria
responsable en el ámbito del comercio internacional.
El objetivo de este ejercicio de inventario consistiría en formular recomendaciones acerca de las mejores formas de
apoyo a las iniciativas de RSE por parte de los gobiernos de
los países miembros de la OCDE. No obstante, el gobierno
holandés dejó en claro que su propuesta no apuntaba a extender el alcance de las Directrices para Empresas Multinacionales a las actividades de índole comercial.
La cuestión planteada radica en determinar si las empresas deben ser consideradas responsables del incumplimiento de las Directrices por parte de sus proveedores. A
pesar de las claras referencias textuales sobre la aplicabilidad de las Directrices a la cadena de producción de las
empresas, el Comité de Inversión anunció, en 2003, que
las Directrices sólo son aplicables a las actividades con carácter de inversión –y sus actividades conexas- y no así a
las actividades comerciales de las empresas.
En consecuencia, se rechazaron varios reclamos de ONG
fundados en los hallazgos del Panel de Expertos de la
ONU en materia de explotación ilegal de los recursos naturales durante la reciente guerra en la República Democrática del Congo. De hecho, el motor que impulsó la propuesta del gobierno holandés fue el caso contra la empresa holandesa comerciante de coltán, Chemie Pharmacie
Holland (CPH), rechazado con el argumento de la presunta falta de nexo de inversión.
La propuesta holandesa aún está bajo consideración del
Comité de Comercio.
Orden del día de la inversión internacional
Los inversores sacan ventaja del contexto actual en los
acuerdos internacionales
El Simposio sobre Acuerdos de Inversión Internacional15
(de fines de 2005, en París) fue organizado por la OCDE,
el CIADI16 y la UNCTAD17, tres organizaciones que desempeñan un rol importante en este campo. Tanto la
OCDE como UNCTAD monitorean y analizan acuerdos de
10
Boletín de OECD Watch
inversión, pero mientras la OCDE lo hace desde la perspectiva de los países más ricos, UNCTAD intenta informar
y asesorar a países en desarrollo para lograr su participación efectiva en la negociación de inversiones internacionales. El CIADI es un marco legal multilateral patrocinado
por el Banco Mundial para la resolución de disputas relativas a inversiones internacionales, y su propósito consiste
en proteger los intereses del inversor extranjero.
El Simposio reunió a oficiales nacionales de inversión de
todo el mundo, incluyendo China, India, Egipto, Indonesia y la Federación Rusa, como también a abogados corporativos y académicos que participaron en los paneles
de arbitraje internacional. OECD watch envió a dos observadores.
En su transcurso se abordaron los recientes desarrollos en
el campo del arbitraje de inversión: cuestiones jurisdiccionales, el riesgo de sentencias arbitrales múltiples y opuestas, la falta de transparencia en los procedimientos y en
las sentencias arbitrales, los elevados costos del arbitraje internacional y la negligencia hacia las cuestiones de interés público.
Robert Danino, Secretario General del CIADI, señaló el
notable incremento, en los últimos años, del volumen de
financiamiento extranjero de origen privado a países en
desarrollo: “de unos US$ 75 billones a principios de los
’90 a más de US$ 400 billones a fines de 2004”. A su vez,
se verificó un correspondiente incremento en el número
de acuerdos bilaterales de inversión (ABIs). Existen conforme UNCTAD unos 2.400 ABIs, como también tratados
multilaterales, otros tratados regionales de inversión, tratados de libre comercio como el NAFTA y, finalmente, el
Tratado sobre la Carta de la Energía. Sin embargo, el status legal de estos tratados es poco claro, dado que se
desconoce cuántos de ellos han sido formalmente ratificados. UNCTAD estima que 30 por ciento de los tratados aún no entraron en vigencia. Más de 1.500 ABIs remiten al CIADI como foro para el arreglo de las disputas que puedan surgir en su consecuencia. Por lo tanto,
la carga de casos pendientes del CIADI es, actualmente, un problema: hace 10 años, el Centro tenía una carga de 5 casos pendientes con una suma total de montos
reclamados equivalente a US$ 15 millones. En la actualidad, el CIADI tiene una carga de 113 casos pendientes
y la suma de los montos reclamados asciende a más de
US$ 30 billones. La impresionante mayoría de los casos
nuevos fueron remitidos al CIADI en razón de la disposición de “arbitraje inversor-estado” contenida en los tratados de inversión.
Los mecanismos de arreglo de diferencias conocidos
como “arbitraje inversor-estado” proveen derechos a los
inversores extranjeros que reclaman la reparación de daños ocasionados por el presunto incumplimiento de obligaciones vinculadas a la inversión por parte de los gobiernos anfitriones. Gran parte de las disputas son planteadas por empresas o inversores extranjeros, sin que se
requiera de ellos el previo agotamiento de las instancias
judiciales locales. La mayoría de los ABIs definen el concepto de inversión en forma tan amplia que se torna difícil imaginar una transacción comercial que quede fuera de su cobertura. En términos generales, los “tribunales han sido más bien generosos a la hora de reconocer
la naturaleza de inversión del caso. A modo de ejemplo,
han decidido que tanto los contratos de ingeniería civil
como la operación de plantas de tratamiento de basura,
los servicios de inspección previa a la expedición de mercadería, los instrumentos de valores y de deuda, los contratos de compra de energía y los derechos de gobernabilidad corporativa constituían, todos, inversiones” 18.
Desde ya, los inversores se encuentran, en teoría, sujetos
a la ley nacional del país anfitrión. No obstante, pueden
recurrir simultáneamente al derecho internacional, es decir, a los tratados aplicables y al derecho consuetudinario
internacional. Si bien se considera que el derecho internacional es complementario del derecho interno, algunos
tribunales arbitrales han sido totalmente indiferentes a la
normativa y los tribunales del país anfitrión.
Demanda en base al tratado – demanda en base al
contrato
Otro problema que acosa al arbitraje de inversión es el
denominado “demanda en base al tratado – demanda en
base al contrato”: ocurre con frecuencia que los contratos de inversión contienen disposiciones que remiten a
los tribunales judiciales o arbitrales del país anfitrión para
el arreglo de disputas. Sin embargo, estos contratos están al mismo tiempo cubiertos por tratados de inversión
que otorgan protección internacional y acceso al arbitraje internacional. Cuando los inversores inician un procedimiento arbitral internacional basándose en el tratado citado, los países anfitriones arguyen, con frecuencia, que
el caso debiera ser planteado ante los tribunales locales,
aunque dicha objeción es frecuentemente denegada.
Expropiación
La motivación principal de los regímenes de inversión internacional ha sido la protección contra la expropiación.
Las condiciones que debe cumplir una expropiación para
ser legal se encuentran claramente estipuladas y precisadas en numerosos tratados, e incluyen: el fin público, la
no discriminación, la compensación total, rápida y efectiva
y el debido proceso legal. En la actualidad, a los inversores extranjeros les preocupa menos la confiscación manifiesta que lo que denominan expropiación indirecta o gradual. Paneles arbitrales han decidido que acciones como
la revocación, por parte del Estado anfitrión, de una licencia de inversión, una licencia de construcción o un permiso de operación equivalen a una expropiación indirecta. Cabe destacar que la regulación por parte del Estado,
fundada en el interés público y en el marco de sus poderes, no constituye expropiación ni conlleva la obligación
de resarcir.
El CIADI resaltó una serie de problemas en torno a la
presunta imparcialidad y neutralidad de los miembros
de tribunales arbitrales. El número de árbitros (abogados corporativos) involucrados en cada caso es relativamente bajo, y los mismos pequeños grupos de árbitros participan como consejeros o expertos en otros casos. Ello los expone a potenciales conflictos de intereses originados en sus respectivos roles de árbitros y de
consejeros en diferentes casos, y perjudica la credibilidad del proceso.
El “paseo de compras” en busca de foros alternativos
y los procedimientos múltiples
La OCDE señala que un inversor extranjero puede, como
si fuese de compras, dedicarse a la búsqueda combinada
de un foro y de un tratado, ambos más convenientes, a fin
de ampliar sus posibilidades de elección de un foro más
allá de las opciones provistas por un ABI específico y, así,
poder plantear los mismos hechos en procedimientos paralelos o múltiples. El ejemplo más llamativo de esta práctica de procedimientos múltiples derivados de una única
serie de hechos es el número de casos en el CIADI contra
el gobierno de Argentina: actualmente hay unos 40 procedimientos contra Argentina en el Centro, la mayoría de
los cuales fueron iniciados en los meses siguientes a la devaluación de su peso, en diciembre de 2001.
El Simposio contribuyó a despejar ciertas dudas sobre
un oscuro aunque importante aspecto del derecho en
11
materia de inversión internacional, que preocupa no
sólo a ONGs sino también a los gobiernos de países en
desarrollo.
¿Marco de políticas para la inversión o
“AMI versión 2”?
Durante mas de un año, un grupo de trabajo constituido
por 60 funcionarios de países miembros y no miembros
de la OCDE, convocados por el Comité de Inversión, estuvo desarrollando un Marco de Políticas para la Inversión; la tarea del Grupo de Trabajo está ahora llegando
a su última fase. El 1ó 2 de marzo de 2006, en la sede de
la OCDE en París, los delegados discutirán y finalizarán
el texto preliminar revisado del Marco de Políticas para la
Inversión, antes de transmitirlo al Comité de Inversión de
la OCDE para su aprobación. Si todo resulta de acuerdo
al plan, en mayo de 2006 el Consejo de Ministros de la
OCDE adoptará el Marco de Políticas para la Inversión19.
Aparentemente, el borrador del Marco ofrece una “lista no taxativa de cuestiones a ser consideradas por cualquier gobierno interesado” que esté buscando modos
de atraer a inversores nacionales y extranjeros. En particular, el Marco debiera convertirse en una referencia
para los programas de desarrollo de capacidades de las
organizaciones internacionales como también para los
donantes que asistan a socios de países en desarrollo a
mejorar el clima local para la inversión. Las áreas prioritarias del Marco son: políticas de inversión, facilitación
12
Boletín de OECD Watch
y promoción de la inversión, políticas comerciales, políticas de competencia, políticas fiscales, gobernabilidad
empresaria, políticas de promoción de la conducta empresaria responsable, desarrollo de los recursos humanos, desarrollo de la infraestructura, servicios financieros
y gobernabilidad pública.
Las ONGs y TUAC están preocupados por el equilibrio
general entre los derechos y las responsabilidades de los
inversores, mientras BIAC procura evitar que el documento fomente el debate acerca de “la relación entre las cuestiones comerciales, por un lado, y las cuestiones sociales y
medioambientales, por el otro”.
El Marco invoca el Consenso de Monterrey (2002), que
identificó al capital privado, incluyendo el proveniente de
la inversión extranjera directa, como “componente vital
en los esfuerzos nacionales e internacionales de desarrollo” y enfatizó la necesidad de “crear las condiciones nacionales e internacionales necesarias para facilitar los flujos de inversión directa”.
Las ONGs tenían hasta el 10 de febrero para comentar
el borrador y definir si el Marco representa un nuevo enfoque hacia la inversión o si se trata simplemente de una
versión rehecha del desacreditado Acuerdo Multilateral
de Inversiones (AMI) de la OCDE. Para leer los comentarios de las ONGs, visite www.oecdwatch.org.
Talleres de OCDE Watch
Desarrollo de capacidades en Ghana
En noviembre de 2005, la organización miembro
de OECD watch Wassa Association of Communities
Affected by Mining (WACAM) organizó un seminario
para el desarrollo de capacidades que, en dos días,
reunió a miembros de OECD watch, el personal de
WACAM y más de 40 representantes de la sociedad civil
de Ghana, muchos de los cuales trabajan en comunidades afectadas por actividades mineras.
Los participantes exploraron los modos en que las
Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales
(Directrices), la Declaración Universal de los Derechos
Humanos y el Pacto Internacional de Derechos
Económicos, Sociales y Culturales pueden ser aplicados por las ONGs en su trabajo de advocacy basado
en derechos y tendiente a promover la responsabilidad
social empresaria (RSE).
Se realizaron talleres para explicar las Directrices, las
convenciones de la ONU y las herramientas desarrolladas por OECD watch para el monitoreo de la conducta
empresaria irresponsable. Los participantes también
discutieron tanto el nivel de protección que brindan
las Directrices y las convenciones de la ONU como las
limitaciones de los instrumentos, explorando estrategias
para la constitución de redes que contribuyan a mejorar la protección de las comunidades impactadas y el
medioambiente en forma consistente con los estándares
internacionales.
Representantes comunitarios de los distritos de Prestea,
Obuasi, Dumasi, Kenyasi y New Abirem presentaron
los problemas que enfrentan los Ghaneses y los hechos
que impactaron sobre sus sustentos y sus libertades.
Atribuyeron a la minería en Ghana el incremento de la
pobreza en sus comunidades y el incumplimiento de la
promesa original de nuevos puestos de trabajo. Citaron,
además, otros problemas tales como la falta de agua
potable, la destrucción de la vida acuática, los daños a
las cosechas, la contaminación atmosférica, las enfermedades y demás problemas de salud, la violación de los
derechos humanos y el acoso a los habitantes por parte
de agentes de seguridad. Las comunidades también
manifestaron que el gobierno ignora sus preocupaciones cuando acuden al él en busca de tutela.
Los participantes sostuvieron asimismo que las empresas de los países miembros de la OCDE no han respetado las Directrices en sus operaciones en Ghana. Citaron
sus experiencias con Bogoso Gold Ltd. (una empresa
de origen estadounidense–canadiense, de propiedad
de Golden Star Resources) y Newmont Ghana Gold Ltd.
(subsidiaria de Newmont Mining, basada en los EE.UU.)
como ejemplos de empresas que han ignorado repetidamente los principios y estándares de las Directrices.
Acusaron también a AngloGold Ashanti, firmante del
Global Compact de la ONU, de haber violado los principios del Compact en materia de derechos humanos y
laborales y de protección del medioambiente.
Al finalizar el seminario se presentó una resolución
que expresaba la preocupación de los participantes
por el fracaso de las autoridades Ghanesas en el ejercicio de su función de brindar debida protección a los
derechos de las personas marginalizadas, a pesar del
compromiso que Ghana asumió al firmar las convenciones de derechos humanos de la ONU y la Carta
Africana de Derechos Humanos. Los participantes
también reafirmaron su compromiso de monitorear las
actividades de las multinacionales mineras en Ghana y,
sobre todo, de exigir a dichas empresas la aplicación,
en sus operaciones en Ghana, de los mismos estándares y regulaciones que están obligadas a seguir en sus
países de origen.
Luego del seminario, Peter Pennartz de IRENE, Hannah
Owusu Koranteng y otros miembros de WACAM visitaron las zonas mineras de extracción de oro en Tarkwa,
Prestea y Obuasi. La misión visito áreas de minería
superficial, asentamientos locales y hospitales, a fin de
entrevistar a personas afectadas por las actividades de
extracción de oro. En forma consistente con la próxima investigación de WACAM sobre el impacto de la
extracción de oro en Ghana y con lo expresado durante
el seminario, los entrevistados se lamentaron de varios
problemas, entre ellos: problemas de salud –como la
proliferación de la malaria, el estrés, la hipertensión
arterial y problemas respiratorios-, la contaminación
atmosférica a raíz de las detonaciones, el daño a las
viviendas –incluyendo grietas en cimientos y techos- y el
daño a las cosechas y la vegetación.
Las comunidades han elevado sus reclamos reiteradas veces, recibiendo en respuesta la negativa de las
empresas mineras a discutir los problemas; un incidente
incluyó la policía disparando por encima de las cabezas
de los manifestantes en una protesta en el distrito de
Prestea. La petición que presentaron a las autoridades
para ser reasentadas en otro lugar fue ignorada por el
gobierno.
13
Taller sobre la cadena de producción – Berlín,
diciembre de 2005
Un taller de OECD watch, que tuvo lugar en Berlín
en diciembre de 2005, reunió a un grupo de ONGs,
consultores y expertos con experiencia en una amplia
gama de sectores (indumentaria, electrónica, supermercados, frutas y vegetales, minerales y financiero)
a fin de discutir criterios clave para definir la responsabilidad empresaria en la cadena de producción.
El motivo que impulsó la realización del taller fue
el cambio en el modo en que los PNCs abordan los
reclamos fundados en problemas en las cadenas
de producción de las empresas. En 2003, el Comité
de Inversión decidió arbitrariamente y sin consulta
previa que para que los casos vinculados a la cadena
de producción de las empresas fueran admisibles
era preciso comprobar la existencia de un “nexo de
inversión”. Sin embargo, el Comité de Inversión omitió precisar los criterios que ayudarían a potenciales
reclamantes a determinar la existencia de dicho nexo
de inversión. El vago enfoque “caso por caso” que
los PNCs adoptaron en consecuencia ha provocado la desestimación automática de varios casos de
incumplimiento de las Directrices en la cadena de
producción de las empresas, independientemente
del mérito que pudieran tener.
En el transcurso del taller, la discusión se centró en
la complejidad de las cadenas de producción de las
empresas. Se señaló que todos aquellos que desempeñan un papel en las diferentes etapas del proceso
que culmina con la puesta en el mercado del producto de la multinacional son parte de su cadena de producción, desde las empresas que proveen la materia
prima o bien partes manufacturadas hasta quienes
realizan el montaje, distribuyen o venden el producto. La relación de la empresa multinacional con cada
uno de estos proveedores –y la influencia que ejerce
sobre ellos- puede variar mucho.
14
Los participantes acordaron continuar el trabajo conjunto
a fin de establecer una definición de la responsabilidad
en la cadena de producción que sea clara, comprehensiva y aplicable a todos los sectores.
Empresas en zonas de conflicto – París, septiembre de 2005
Con frecuencia, las empresas de países miembros de la
OCDE que operan en el exterior están ubicadas cerca
de frentes de inestabilidad y conflicto violento. En tales
contextos, las inversiones y operaciones de la empresa
pueden ser objeto de actos violentos, aunque también
pueden exacerbar la violencia directa o indirectamente.
Con el objeto de apoyar los esfuerzos de los PNCs en
el manejo efectivo de casos de esta índole, dos ONGs
especializadas en promover el potencial de las empresas
para contribuir en la prevención del conflicto y la paz
– International Alert y Fafo AIS-, junto con OECD watch,
organizaron un seminario en París, haciéndolo coincidir
con la reunión de septiembre de 2005 del Comité de
Inversión.
Jessie Banfield de International Alert señaló que la OCDE
y los Puntos Nacionales de Contacto están siendo presionados a asumir una posición que les permita responder a
esta clase de casos. El informe de la Comisión para África
del RU (marzo de 2005) llamó a los países de la OCDE a
“promover el desarrollo y la implementación efectiva de
directrices claras y comprehensivas para empresas que
operan en zonas de riesgo de conflicto violento”20.
Los participantes indicaron los factores a tener en
cuenta al determinar la naturaleza precisa de la relación entre la empresa y quienes integran su cadena de
producción. El producto, ¿es de marca? ¿La empresa
se provee en forma directa o a través de intermediarios? ¿Qué caracteriza al sector: la integración vertical
o la tercerización?
Las cuestiones debatidas en el encuentro incluyeron: el
rol de las Directrices de la OCDE en la configuración de
un entorno regulador más abarcativo para las zonas de
conflicto, otras fuentes relevantes de información que
sirvan de guía en la materia, los desafíos pendientes y el
fortalecimiento de las capacidades de los PNCs en materia de promoción e implementación de las Directrices
de un modo que a su vez responda a las necesidades de
orientación perceptibles entre las empresas afectadas.
Manfred Schekulin, Presidente del Comité del Inversión, y
Willem van der Leeuw, el PNC holandés, participaron en
el taller junto con los PNCs de Canadá, Francia, el RU y
Suiza. Representantes de empresas líderes europeas –BP,
Shell y Total- participaron en el debate acerca de los dilemas éticos que conlleva el operar en zonas de conflicto.
Otro factor importante es la duración del contrato con
el proveedor: cuanto más largo, mayor la influencia de
la multinacional sobre éste. El reciente incremento de
vendedores mayoristas “sin nombre” puede dificultar la
tarea de determinar la existencia de responsabilidad en
la cadena de producción.
Manfred Schekulin describió el estado de desarrollo de
la “herramienta de gestión de riesgo para empresas”
de la OCDE, cuyo borrador revisado será presentado
al Consejo de Ministros en junio de 2006. Miembros
de OECD watch –entre ellos, RAID- y las ONGs Human
Rights Watch, Global Witness, International Alert y NIZA
Boletín de OECD Watch
enviaron detallados comentarios al borrador.
Karen Ballentine hizo referencia al reciente estudio de
FAFO sobre empresas y delitos internacionales21, y
Chris Camponovo, del Departamento de Estado de los
EE.UU., comentó acerca del desarrollo de los Principios
Voluntarios sobre Seguridad y Derechos Humanos22.
OECD watch supo de un reciente acuerdo para el establecimiento de un Panel –integrado por representantes
gubernamentales, de ONGs y de empresas- que trataría
los reclamos originados en el incumplimiento de los
Principios Voluntarios por parte de empresas. Quizás este
avance logre impulsar la mejora del procedimiento de
instancia específica, a fin de que no quede relegado.
Los participantes coincidieron en que, teniendo en cuenta la función de la OCDE de promover la diseminación
y el alcance, es especialmente importante asegurar que
el actual trabajo en materia de zonas de gobernabilidad
débil sea lo más claro posible –dentro de sus términos de
referencia- en lo referente al conflicto.
Actividades en las Américas
En la conferencia regional coorganizada por CIOSL/
ORIT23 y UNI-Américas –en julio de 2005, en Buenos
Aires-, Bart Slob de SOMO habló acerca de los roles
complementarios de los sindicatos y las ONGs en el uso
de las Directrices de la OCDE. Slob también se reunió
con representantes de IBASE –miembro brasilero de
OECD watch- y de Fundación SES, FARN y Fundación
El Otro –miembros argentinos de la red- a fin de desarrollar estrategias conjuntas para el avance de la RSE en
Latinoamérica.
En noviembre del mismo año, Juliana Ortiz de Fundación
El Otro presentó el informe “Cinco años después: Una
revisión de las Directrices de la OCDE y los Puntos
Nacionales de Contacto” en un seminario sobre RSE
organizado por Red Puentes en Ciudad de México. En
su presentación, Ortiz también expuso las experiencias
latinoamericanas en la presentación de reclamos basados
en las Directrices. Varios miembros de OECD watch concurrieron al seminario de Red Puentes.
15
Noticias de la OCDE
La OCDE nombra un nuevo
Secretario General
El 1 de junio de 2006 José Ángel
Gurría, ex Secretario de Finanzas
de México, reemplazará a Donald
Johnston como Secretario General
de la OCDE: es la primer persona
proveniente de un país de ingresos
medios que liderará el “club de los
ricos” integrado por 30 naciones.
En 1999, Euromoney lo nombró
Ministro de Finanzas del Año,
aunque su apodo mexicano era
“Manos de tijera” en razón de los
drásticos recortes al gasto público
que impuso durante una crisis
del precio del petróleo. Según el
International Herald Tribune, el Sr.
Gurría desea transformar la OCDE
en una especie de órgano asesor
permanente para las reuniones
del G8.
Una de las prioridades absolutas de
la OCDE es establecer una fuerte
relación de acercamiento a las
cuatro grandes economías exter-
16
Boletín de OECD Watch
nas al club, conjunto denominado
economías BRIC e integrado por
Brasil, Rusia, India y China (Rusia
ya ha enviado a la OCDE su solicitud de membresía). Otra prioridad
radica en racionalizar las actividades de los 200 comités y grupos
de trabajo de la OCDE, objetivo
que seguramente complacerá a
los EE.UU. y Japón, los principales
contribuyentes al presupuesto de la
organización. Quienes trabajan en
la OCDE esperan que el Sr. Gurría
incremente “la relevancia y el perfil
de la organización”.
OECD watch espera que el Sr.
Gurría demuestre habilidad y disposición para el trabajo con ONGs
y la sociedad civil. El enfoque de la
OCDE en materia de transparencia
y compromiso con la sociedad civil,
si bien muestra signos de mejoría,
aún deja mucho que desear.
Manejar la globalización con miras
a maximizar sus beneficios y reducir
sus consecuencias social y medioambientalmente dañosas debiera
ser uno de sus principales objetivos. Otro, la creación de consenso
a fin de frenar las malas prácticas
empresarias. OECD watch espera
forjar una relación constructiva con
el Sr. Gurría, con miras a lograr
estos objetivos.
Partidas y arribos
PNC alemán
Joachim Steffens, Director de
Inversiones Internacionales del
Ministerio Federal de Economía y
Trabajo alemán, ha reemplazado al
Dr. Hans. G. Kausch.
PNC del RU
Eleanor Reid ha reemplazado a
Duncan Lawson en el área denominada Europe and World Trade
Directorate, del Departamento de
Comercio e Industria del RU.
Los nuevos miembros de OECD watch
Nueve organizaciones se han unido a OECD watch desde marzo de 2005, elevando el número total de
miembros a 51 organizaciones que representan a 29 países.
Research Group for an Alternative Economic
Strategy – GRESEA (Grupo de Investigación
para una Estrategia Económica Alternativa),
Bélgica
Fundado en 1978 por activistas de países en desarrollo,
sindicalistas y académicos, GRESEA se ha desempeñado
activamente en el área de la RSE durante varios años. Su
trabajo más reciente incluye la promoción de la ley belga
de etiquetado social. GRESEA también fue co-reclamante
en un procedimiento de instancia específica –de noviembre de 2004- contra cuatro empresas belgas, relativo a la
explotación ilegal de recursos naturales en la República
Democrática del Congo. Para más información ver: www.
gresea.be.
African Association for the defence of Human
Rights – ASADHO/Katanga (Asociación
Africana para la Defensa de los Derechos
Humanos), Republica Democrática del Congo
ASADHO es una ONG apolítica dedicada a la defensa
y promoción de los derechos humanos. Su trabajo más
reciente incluye exponer el rol logístico que desempeñó Anvil Mining, empresa australiano-canadiense, en el
incidente de Kilwa en octubre de 2004, durante el cual
murieron al menos 70 personas, muchas de las cuales
fueron ejecutados sumariamente por las Fuerzas Armadas
congolesas. El reclamo fundado en las Directrices de la
OCDE y concerniente al rol de Anvil en dicho incidente
–presentado por Rights and Democracy- continúa pendiente en Canadá.
Defensa y conservación ecológica de Intag
– DECOIN, Ecuador
Fundada en 1995, DECOIN es una organización regional de base, cuya misión consiste en proteger la selva
ecuatoriana del impacto de la minería. En mayo de
2005, DECOIN, Mining Watch Canadá y Friends of the
Earth-Canadá presentaron un reclamo concerniente
al proyecto Junín de la empresa Ascendant Copper
Corporation. Los reclamantes desistieron del caso a
mediados de enero de 2005, en razón de que el PNC
canadiense no implementó el procedimiento de las
Directrices en forma apropiada. Para más información
ver: www.decoin.org.
FinnWatch, Finlandia
Fundada en octubre de 2002, FinnWatch es una red de
organizaciones que reúne, analiza y disemina información relativa al impacto social y medioambiental de las
empresas finlandesas en el Sur Global y en economías
en transición, a fin de concienciar y alentar la conducta empresaria responsable. Para más información ver:
http://www.finnwatch.org.
Yokohama Action Research Center – YARC
(Centro de Acción e Investigación Yokohama),
Japón
Fundada en 2001, YARC se dedica a la investigación para
la acción de varias cuestiones económicas a nivel global,
con el objeto de beneficiar los movimientos sociales. Las
investigaciones de YARC examinan la inversión extranjera
directa por parte de empresas japonesas, las empresas
multinacionales y sus prácticas de RSE, la Comunidad del
Este Asiático y el Impuesto Tobin. La organización participó en el caso contra las prácticas antisindicales de Toyota
en las Filipinas. El caso, presentado en marzo de 2004
ante el PNC japonés, continúa pendiente.
Forum for Environment and Development
– ForUM (Foro para el Medioambiente y el
Desarrollo), Noruega
Fundada luego de la Cumbre para la Tierra de 1992,
ForUM es una red de más de 50 ONGs dedicada a promover el desarrollo sostenible, a través del desarrollo de
iniciativas y estrategias para influenciar a los hacedores
de políticas, y a facilitar el intercambio de experiencias
y recursos (sobre todo personas) entre organizaciones
noruegas e internacionales. En julio de 2005, ForUM presentó un reclamo contra la empresa Aker Kværner ASA,
responsable de la construcción y el mantenimiento de
instalaciones de detención en la Bahía de Guantánamo.
Para más información ver: www.forumfor.no.
The Social Support Foundation – SSF
(Fundación para el Apoyo Social), Ghana
SSF fue constituida en agosto de 2000 como comité
cohorte en materia de HIV/SIDA en Obuasi, distrito de
Adansi West, Ghana. Sus actividades incluyen proveer
17
apoyo a personas con SIDA (reduciendo la estigmatización y la discriminación y ofreciendo apoyo psicosocial y
atención médica) y a huérfanos del SIDA (reescolarizando
a niños que abandonaron el sistema educativo y ofreciéndoles asistencia psicológica), como también promover
prácticas de sexo seguro entre los trabajadores del sexo,
promoviendo su reinserción. Para más información ver:
www.ssfghana.org.
Notes
1 © OECD Observer Nº 234, octubre de 2002.
Belgium is flouting OECD rules for multinationals” (Las actividades
2 Informe de OECD watch Cinco años después: Una revisión de las mineras del Forrest Group en el Congo: Bélgica burla las reglas de la
Directrices de la OCDE y los Puntos Nacionales de Contacto”, ver:
OCDE para multinacionales), comunicado de prensa, Bruselas, 20 de
www.oecdwatch.org.
noviembre de 2005.
3 Comunicado de prensa de la OCDE, 21 de septiembre de 2005.
12 Comité de Asistencia para el Desarrollo de la OCDE, “Peer Review
4 RAID y The Corner House, “Response to the Stakeholder Consultation” – Belgium” (Revisión de pares – Bélgica), París, noviembre de 2005, pág.
(Respuesta a la consulta con los stakeholders), enero de 2006, ver
www.raid-uk.org.
5 Para leer el informe, ver http://www.oecdwatch.org/docs/Flagship_or_
Failure.pdf.
6 Comité Permanente de Relaciones Internacionales y Comercio
Internacional del Parlamento canadiense, “Mining in Developing Countries
and Corporate Social Responsibility” (La minería en países en desarrollo y la
45: http://www.oecd.org/document/37/0,2340,fr_2649_34603_35598117_
1_1_1_1,00.html [en adelante, CAD – OCDE 2005].
13 CAD – OCDE 2005, pág. 47.
14 CAD – OCDE 2005, pág. 14.
15 “A Symposium on Making the Most of International Investment Agreements:
A Common Agenda” (Simposio sobre cómo obtener mayor provecho de los
acuerdos de inversión internacional – una agenda común) – OCDE, París,
Responsabilidad Social Empresaria).
12 de diciembre de 2005.
7 Ídem, “Mining in Developing Countries –Corporate Social Responsibility: 16 Centro Internacional de Arreglo de Diferencias Relativas a la Inversión The Canadian Government’s Response to the Report of the Standing Committee on Foreign Affairs and International Trade”, (La minería en (International Centre for the Settlement of Investment Disputes – ICSID).
17 Conferencia de la ONU sobre Comercio y Desarrollo (United Nations países en desarrollo y la Responsabilidad Social Empresaria: respuesta del Gobierno Canadiense al Informe del Comité Permanente de Conference on Trade and Development).
18 Christoph Scheuer, “Investment Arbitration – A Voyage of Discovery” Relaciones Internacionales y Comercio Internacional), octubre de 2005.
8 Ver http://www.oecdwatch.org/docs/OECD_Watch_Transparency_Briefing_
Paper.pdf.
9 Carta de Decoin, Friends of the Earth y Mining Watch Canadá a Stephen De
http://www.oecd.org/document/42/0,2340,en_2649_34529562_35725418_
1_1_1_34529562,00.html.
Boer, Director Adjunto de la División de Políticas de Inversión y Comercio 20 Ver http://www.dfid.gov.uk/news/files/commision-africa-report1.asp.
canadiense (Investment Trade Policy Division), 16 de enero de 2006.
21 “Business and International Crimes”, en http://www.fafo.no/liabilities/467.pdf.
10 Comuniqué del Punto Nacional de Contacto belga a cargo del seguimiento
de las Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales, 20 de
noviembre de 2005.
11 11.11.11 y otros, “The Forrest Group’s mining activities in the Congo: 18
(Arbitraje de inversión – Un viaje de descubrimientos).
19 La última versión preliminar del Marco de Políticas está disponible en:
Boletín de OECD Watch
22 “Voluntary Principles on Security and Human Rights”, en
http://www.voluntaryprinciples.org.
23 Confederación Internacional de Organizaciones Sindicales Libres y su rama hemisférica, la Organización Regional Interamericana de Trabajadores.
colophon
OECD watch es una red internacional de 52
Organizaciones No Gubernamentales (ONGs) que
promueve la responsabilidad empresarial. El objetivo
de OECD watch es poner a prueba la eficiencia de las
Directrices de la OCDE para Empresas Multinacionales
y informar a la comunidad de ONGs sobre las políticas
y actividades del Comité de Inversión (antes: CIME)
de la Organización para la cooperación y Desarrollo
Económicos (OCDE).
Redactor: Patricia Feeney. Contribuciones de Jan
Capelle, Colleen Freeman, Joris Oldenziel, Gunhild
Ørstavik, Peter Pennartz, Bart Slob and Joseph Wilde.
El Boletín de OECD Watch se publica periodicamente en
inglés, español y francés. Para más información, contacte
a uno de los coordinadores de OECD watch:
Patricia Feeney, Editora
Rights and Accountability
in Development (RAID)
Reino Unido
Tel: (44) 1865 436 245
Fax: (44) 1865 270 721
E-mail: tricia.feeney@ntlworld.com
Cornelia Heydenreich
Germanwatch
Vossstrasse 1, 10117 Berlín
Alemania
Tel: (+49) (0)30 2888 3564
Fax: (+49) (0)30 2888 3561
E-mail: heydenreich@germanwatch.org
www.germanwatch.org
Joris Oldenziel
SOMO-Centro de Investigaciones
para Empresas Multinacionales
Keizersgracht 132, 1015 CW Amsterdam
Países Bajos
Tel: (+31) (0)20 639 1291
Fax: (+31) (0)20 639 1321
E-mail: j.oldenziel@somo.nl
La producción de este boletín ha sido posible a través de financiamiento de la
Comisión Europea (DG Empleo y Asuntos Sociales), el Ministerio holandés de
Asuntos Exteriores, Novib (Oxfam-Holanda), MISEREOR y EED Alemania.
ECD Watch
www.oecdwatch.org
Este proyecto es coordinado por SOMO.
SO M O
19
Calendario
de eventos
3 de marzo
París, Francia
OCDE
Consulta sobre Infraestructura, Comité de
Inversión
22 y 23 de mayo
París, Francia
OCDE
Foro Anual – Tema: “Rebalanceando la
Globalización”
16 de marzo
Palais des Nations, Ginebra, Suiza
62do. período de sesiones de la Comisión de
Derechos Humanos (CDH)
23 y 24 de mayo
París, Francia
OCDE
Reunión del Consejo Ministerial
10 al 14 de abril
París, Francia
OCDE
Reunión del Comité de Inversión – Tema:
procedimientos legales paralelos
19 al 23 de junio
París, Francia
OCDE
Reunión Anual de los PNCs y Mesa Redonda del
Comité de Inversión – Tema: la mediación
24 y 25 de abril
Varsovia, Polonia
OECD watch
Seminario de entrenamiento
3 al 7 de julio
Tarkwa, Ghana
OECD watch
Seminario Interregional en África
4 al 7 de mayo
Atenas, Grecia
Foro Social Europeo
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