El Carácter de Dios - ¿Quién es Jesús? Vimos el domingo pasado que Dios tenía muchos nombres que revelan su carácter. El nombre que más utiliza es Padre. Antes de cualquier otra cosa, nuestro Dios es un padre. Si eres un padre debe tener un hijo. Esto es verdad de Dios. Hoy quiero que veamos el Hijo, Jesucristo. ¿Qué piensas cuando digo el nombre de Jesús? Probablemente piensas en el hombre que camina la tierra con sus discípulos, sanando a los enfermos y predicando el evangelio del Reino de Dios. O tal vez piensas de él en la cruz, o como el Señor resucitado. Pero Jesús era sólo con nosotros en el mundo durante unos 33 años. Imagina una línea. Una larga línea. De hecho, una línea que no tiene principio ni fin. Se extiende desde la eternidad hasta la eternidad. Jesús ha existido por toda la longitud de esta línea. En algún lugar de esta línea, Jesús viene a vivir con nosotros en la tierra por 33 años. Es una pequeña fracción del tiempo. La forma de Jesús, el hombre, era en la tierra solo por un parpadeo de ojos. ____________________________________________:_________________________ Sabemos muchas sobre Jesús el hombre. Así que lo que necesitamos saber es, ¿Cómo era antes, y cómo es ahora? Vamos a ver. Él vino de Dios y regresó a Dios. Juan 1:1-2 En el principio ya existía el Verbo, y el Verbo estaba con Dios, y el Verbo era Dios. Él estaba con Dios en el principio. después de su resurrección Jesús dijo a sus discípulos. Marcos 16:19 Después de hablar con ellos, el Señor Jesús fue llevado al cielo y se sentó a la derecha de Dios. Y por supuesto continua vivir allí. El Padre nunca fue sin el Hijo. Es como el padre es una lámpara, y el Hijo es la luz. No puede tener uno sin otro. La Biblia dice que Jesús es el resplandor del Padre. Lo que el Padre es, Jesús es. Él creó todo Juan 1:3 Por medio de él todas las cosas fueron creadas. Sin él, nada de lo creado llegó a existir. Colosenses 1:16 Por medio de él fueron creadas todas las cosas en el cielo y en la tierra, visibles e invisibles, sean tronos, poderes, principados o autoridades; todo ha sido creado por medio de él y para él. Todo en el mundo material y también en el mundo espiritual fue creado por Jesús. Y así que tiene poder y autoridad sobre todo en la tierra y en el reino espiritual. Todo fue creado por él, y para él también. ¡La tierra es el mundo de Cristo! Jesús no es algo que se añade a nuestra vida. Él no es sólo alguien que salva a las almas y cura a las enfermedades, pero no hace mucho más. Él es el Señor de todo. Él está en control de todo. Todo este universo, este mundo, y tú y yo somos todo suyo. Cristo es el centro de todo. Él sostiene todas las cosas. Colosenses 1:17 Él es anterior a todas las cosas, y todas las cosas en él subsisten. Si Jesús no estuviera a cargo, todo el universo se cae a pedazos. Cristo subsisten y da la vida a cada animal, cada planta, cada hombre y mujer y niño. Y nos subsisten cada momento de cada día. Antes de que existiera el universo Jesús ya estaba allí. ¿Qué estaba haciendo Jesús? Estaba allí con el Padre y el Espíritu. El padre lo estaba amando. Juan 17:24 Padre, quiero que los que me has dado estén conmigo donde yo estoy. Que vean mi gloria, la gloria que me has dado porque me amaste desde antes de la creación del mundo. El padre siempre ha amado a Jesús, y Jesús siempre ha amado el padre. Dios es amor, e incluso antes de que existiera cualquier otra cosa, él demostró su amor al amar a su Hijo. Él apareció en el Antiguo Testamento En el Antiguo Testamento tenemos muchos casos en los que aparece Dios, a veces en una nube, a veces en la gloria brillante, a veces como un ángel, a veces en la forma de un hombre. ¿Quién era? ¿Qué parte de la trinidad vino a la tierra? A veces leemos que el Espíritu santo vino a llenar una persona por un tiempo limitado. Pero hay más. Juan 1:18 dice: A Dios nadie lo ha visto nunca Pero en realidad muchas personas lo vieron. Jacob luchó con él y dijo después, vi a Dios cara a cara. (Génesis 32:30). El Señor habló a Moisés cara a cara como habla un hombre con su amigo (Éxodo 33:11) Moisés y los 70 ancianos vieron a Dios en una montaña (Éxodo 24:10) Los padres de Sansón vieron a Dios cuando él les anunció el nacimiento de su hijo (Jueces 13:22) Isaías vio al Señor al comienzo de su ministerio profético (Isaías 6: 5) Ezequiel también lo vio (Ezequiel 03:23) Juan dice sobre Dios: nadie lo ha visto nunca pero luego añade el Hijo unigénito, que es Dios y que vive en unión íntima con el Padre, nos lo ha dado a conocer. Jesús nos muestra Dios. Es Jesús quien aparece en todo el Antiguo Testamento. Cada vez que leemos sobre el Ángel del Señor, esto significa Jesús. Hay una palabra teológico por eso – es un teofanía. ¿Te acuerdas de la historia cuando Jesús encuentro a dos discípulos en el camino a Emaús? Los acompaño en la ruta y comenzando con Moisés y por todos los profetas, les explicó lo que se refería a él en todas las Escrituras. Jesús les mostró todas las profecías sobre él, y también cada vez que había aparecido antes de su nacimiento en la tierra. Que pudo haber dicho algo como - ¿Te acuerdas de cuando Shadrak, Mishak y Abed-nego estaban puestas en el horno, y un cuarto hombre apareció con ellos y los rescataron. ¡Ese era yo! O cuando el Ángel del Señor encontró a Gedeón cuando estaba escondiéndose en el miedo y le dijo El Señor está contigo, ¡guerrero valiente! ¡Ese era yo! Jesús aparecía y era activo durante todo el Antiguo Testamento. Él juzgaba las malas acciones, guiaba a su pueblo, les daba comida, y los defendía. Oró por ellos como un hombre ora por su amigo. Incluso tenía las comidas con ellos como cuando se apareció a Abraham y Sara (en Génesis 18). Jesús también observó los sacrificios que se hicieron en el templo, a veces apareciendo como una nube de gloria. Él sabía lo que sería el sacrificio que va a venir. Y entonces, vino en forma humana para vivir con nosotros. El Espíritu Santo le dijo a Simeón para visitar el templo y para sostener al niño Jesús en sus brazos. Sabía que este bebé era la gloria de Dios que vino a la tierra. Qué increíble! Este niño era Dios con nosotros. Emanuel. Un hombre en el siglo 11 dijo que era El beso de Dios. El novio había venido para estar con su novia. Esta es la pasión y la compasión de Dios por nosotros. El que vivía en toda la gloria, vino a nacer en un establo sucio y tomar la forma humana. Dios quiso identificarse completamente con nosotros. Él nació de una virgen así que no sería descendiente de Adán, sino del Padre que está en los cielos. Y así permaneció como Dios. Pero él nació de una mujer y por lo que también se convirtió al hombre. Para salvarnos del pecado, tuvo que ser uno de nosotros. Tenía que hacer lo que Adán no podía hacer. Adán había caído alejado de Dios y él nos llevó con él. Jesús vino para traernos de vuelta a la presencia de Dios. ¿Por qué Jesús vivió con nosotros? Jesús vivió entre nosotros para mostrarnos como es el Padre. No hay otro dios en el cielo, sino el que es exacto como Jesucristo. Él es la representación exacta del Padre. Si hemos visto a Jesús, hemos visto a Dios. Sabemos el carácter de Dios porque es igual del carácter de Jesús. Jesús vivió entre nosotros para traernos el Reino de Dios. Para esto apareció el Hijo de Dios, para destruir las obras del diablo. (1 Juan 3:8) Pasó la mayor parte de su tiempo con personas que no conocen a Dios. Ellos eran las personas que venía a buscar. Las personas religiosas lo acusaron de ser un amigo de los pecadores. ¡Qué gran título! Jesús enseñó a sus discípulos a pasar tiempo con ellos también. Tenían que estar en la calle con la gente, compartiendo las buenas nuevas de Jesucristo con todo el mundo. Donna y yo estamos tratando de ser amigos con tantas personas como podamos en Huércal-Overa. Nos hemos unido el gimnasio, nos hemos unido a un coro, y estamos empezando a un intercambio en un bar. También tenemos otros amigos españoles que viven aquí en la ciudad y reunimos con ellos con mucha regularidad. Estamos buscando formas de ser amigos con personas que ya no conocen a Jesús, para presentarlo a ellos. Para compartir el bueno que Jesús nos ha dado. ¿Qué haces tú? Jesús vino a morir en nuestro lugar para que pudiéramos vivir para siempre. Jesús tomó nuestro castigo. Hemos sido liberados del temor al castigo de Dios. En cambio, recibimos la gracia de Dios. Nos ama para siempre. Jesús vino ser la cabeza de la iglesia. Esta es su novia, y él es el novio. Quiere que su iglesia sea como él, para ser hermosa, y para adorarle. Y entonces Jesús ascendió y regresó al cielo. Lo hizo en su nuevo cuerpo. Algunas personas piensan que se fue a los cielos como un tipo de espíritu. ¡Él murió, se levantó, se vaporiza! ¡Eso no es muy confortante para nosotros que vayamos a seguirle! No. Lucas dice: (24:36-39) Todavía estaban ellos hablando acerca de esto, cuando Jesús mismo se puso en medio de ellos y les dijo: - Paz a ustedes. Aterrorizados, creyeron que veían a un espíritu. - ¿Por qué se asustan tanto? – les preguntó -, ¿Por qué les vienen dudas? Miren mis manos y mis pies. ¡Soy yo mismo! Tóquenme y vean; un espíritu no tiene carne ni huesos, como ven que los tengo yo. Y luego se sube a los cielos (Lucas 24:51) en su cuerpo físico. Esto significa que ahora hay un hombre en el cielo, un hombre que comparte nuestra experiencia del mundo. Jesús sabe todo acerca de nuestra humanidad y nuestra debilidad. Sabe todo sobre nuestros problemas, y todo sobre nuestras esperanzas y temores. Y ahora está sentado como el Hijo en la mano derecha del Padre en el cielo. El primer Adán se alejó de Dios y tomó toda la humanidad con él. El segundo Adán nos ha traído de vuelta a Dios, y ahora intercede por nosotros ante el trono. No renunciar a su naturaleza humana y no se convirtió en un espíritu en el cielo. hebreos nos dice que Cristo es el sumo sacerdote que vive siempre para interceder por nosotros. Y cuando él ascendió al cielo, un ángel les dijo a los discípulos: Este mismo Jesús, que ha sido llevado de entre ustedes al cielo, vendrá otra vez de la misma manera que lo han visto irse. (Hechos 1:11) De hecho, hay unas personas que vio a Jesús en su cuerpo en el cielo. Por ejemplo: Esteban, cuando estaba siendo apedreado, vio a Jesús como un hombre junto a Dios en el cielo. (Hechos 7:56) Juan lo vio en Apocalipsis 1:13 como un hombre, pero con gran gloria y poder. La visión de Jesús era tan poderosa que Juan cayó como muerto. Leemos la descripción de Jesús en Apocalipsis 1:12-18 Jesús ahora vive para siempre como el hijo de Dios, con todo el poder y la autoridad. (Filipenses 2:9-11) Dios lo exaltó hasta lo sumo y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre, para que ante el nombre de Jesús se doble toda rodilla en el cielo y en la tierra, y debajo de la tierra, y toda lengua confiese que Jesucristo es el Señor, para gloria de Dios Padre. Y el fin del tiempo, va a regresar. Se va a crear un cielo nuevo y una tierra nueva, y él comenzará una nueva era. Vamos a reinar con Él y estar con su presencia para siempre. Este es Jesucristo. Este es nuestro Dios, nuestro Redentor y nuestro amigo. ¿Es fantástico a conocerlo!