ASMA Y DEPORTE El asma es una enfermedad crónica muy frecuente y de distribución mundial. Los pacientes con asma suelen presentar una menor tolerancia al ejercicio, por ese motivo pueden restringir las actividades física por ideas y miedos erróneos con respecto al ejercicio y asma. Esta enfermedad no constituye una contraindicación para la práctica del deporte por el contrario, la actividad regulada y reglada es considerada parte esencial y pilar fundamental para el tratamiento del asma, existiendo una evidencia concreta que los ejercicios aeróbicos mejoran la calidad de vida de los pacientes, proporcionando un importante beneficio físico y psíquico para el paciente. En el Sistema Respiratorio: Mejora el mecanismo respiratorio ( usando adecuadamente el diafragma y evitando el uso de los músculos respiratorios accesorios). Disminuye la rigidez torácica. Aumenta la resistencia física al ejercicio. Corrige los defectos posturales. Incremento de la superficie de contacto entre alveolo pulmonar y capilares sanguíneos, mejorando la difusión pulmonar. Aumenta el volumen corriente por incremento en los esfuerzos máximos. Mejora la capacidad vital por aumento de la frecuencia respiratoria. Aumenta la tolerancia al ejercicio. En el desarrollo Psicológico: Favorece a la integración social del paciente. Mejora el autoestima Ayuda a disminuir la ansiedad durante las crisis de asma. Aumenta el control del asma. Existe una importante gama de actividades para conseguir una mejoría en la capacidad física, se recomienda aquellos deportes que estimulan a realizar esfuerzo progresivos de comienzo gradual con el objetivo de divertirse y mejorar su capacidad aeróbica. Ejemplo natación, ciclismo etc. Entre estos pacientes se encuentran David Beckaham (futbolista), Denis Rodman (Baloncesto NBA) Tom Dalon (Nadador) Miguel Indurain (ciclista), Matías Ola (Nadador Argentino). Para resumir: No existe mayor límite para el cuerpo humano que lo que impone la mente. Que el asma, no te pare!!!