TRIBUNAL FISCAL DE LA NACION En Buenos Aires, a los 9 días del mes de junio de 2003, reunidos los Vocales miembros de la Sala "E", Dres. D. Paula Winkler, Gustavo A. Krause Murguiondo y Catalina García Vizcaíno, con la presidencia del Vocal nombrado en segundo término, a fin de resolver en los autos caratulados: "AMERICAN AIRLINES S.A. c/Dirección General de Aduanas, s/recurso de apelación" Expte. Nº 12.925-A y, La Dra. Winkler dijo: I- Que a fs. 189 los Dres. Alejandro Altamirano, Eduardo José Güemes y Florencia L. Misrahi solicitan la regulación de sus honorarios profesionales por su actuación profesional en esta instancia en el carácter de letrados apoderados y patrocinante de la actora, respectivamente. A fs. 204/206 manifiestan que dicha regulación deberá efectuarse a favor de la sociedad civil "Estudio Beccar Varela" en su carácter de miembros del mismo, y solicitan que se adicione el IVA atento que dicho ente es responsable inscrito en ese impuesto. No acompañan las constancias de inscripción de la CUIT requeridas. Que a fs. 209/210 acompañan la constancia de inscripción del ente colectivo. II.- Que en cuanto a la regulación solicitada a favor del estudio jurídico, corresponde hacer lugar a la misma (art. 2º, 2º párrafo de la Res. AFIP 689/99), sin perjuicio de señalar que no corresponde adicionar el IVA por la situación de responsable inscrito frente a dicho tributo del mencionado ente, por cuanto los letrados no acreditaron su situación personal frente al IVA, ello así, atento lo resuelto por la C.S.J.N. in re "Central Neuquén S.A. y otra c. Prov. de Bs. As. y otra" del 16.4.02, que resulta aplicable en la especie y conforme lo resuelto en "Cía. Gral. de Combustibles S.A." ("Fallos" 316:1533). Que si bien es cierto que el art. 8º de la Resolución General AFIP Nº 689/99 establece que "únicamente cuando el sujeto destinatario del honorario correspondiente -ente colectivo o, en su caso, persona física- revista, en el momento en que tal concepto se regula el carácter de responsable inscripto en el impuesto al valor agregado, corresponderá adicionar al importe regulado el citado impuesto" (el subrayado me pertenece), la Corte Suprema ha fijado un criterio distinto. Que corresponde acatar dicho pronunciamiento más allá de la opinión individual que profeso al respecto, por razones de economía procesal. Que en el mencionado caso el Alto Tribunal, en el considerando 5 sentenció que "en el sub lite" no se advierte razón suficiente para que la condenada en costas sea sometida a la carga que se pretende. Ha sido la calidad del profesional la que ha primado para que se haya efectuado una regulación que tuvo en cuenta el mérito y extensión de la labor por ellos y no por el estudio que integran. Han sido sus obligaciones, de atender personalmente el asunto que les ha sido confiado, de abstenerse de colocar a un colega en su lugar sin el consentimiento de su cliente, de mantener su responsabilidad frente a aquel que depositó en ellos una confianza especial tal que determinaría en su caso la aplicación del art. 902 del Cód. Civil, lo que exige concluir que por los servicios prestados, en definitiva intuitue personae, es el carácter que aquéllos revisten frente al ente recaudador el que determina si debe considerarse en la regulación de honorarios la carga que tiene el impuesto al valor agregado. En el expediente, más allá que la intervención de los abogados aludidos se haya configurado por haberse efectuado una derivación interna del estudio jurídico y de que existan acuerdos entre los interesados que los obliguen a entregar a la sociedad los honorarios percibidos, ningún servicio prestó la sociedad civil (...) que exija reconocer el adicional pretendido". Que los peticionarios afirman ser solamente integrantes del Estudio, circunstacia que acreditan a fs. 191/198 de autos. En cambio, no acreditan (tampoco afirman serlo) socios del Estudio para el que prestan su labor profesional. Que, ello así, deben desecharse las argumentaciones que formulan al respecto los mencionados peticionarios. III. Que, asimismo, y atento la imposición de las costas por su orden, deberá intimarse a la firma recurrente, a que dentro del quinto (5º) día de notificada, informe el carácter que reviste frente al impuesto al valor agregado o su condición de pequeño contribuyente inscrito en el régimen simplificado, presentando en autos en consecuencia, una copia de la constancia de inscripción emitida por la AFIP, firmada, conforme lo dispone el art. 6 de la Resolución General Nº 689/99 (AFIP), bajo apercibimiento de lo dispuesto en el art. 10, incs. a) y b) de la misma Resolución General. Por ello, VOTO POR: 1º) Regular los honorarios del Estudio Jurídico Beccar Varela en la suma de pesos dos mil setecientos noventa y seis ($ 2.796), por la representación y patrocinio letrado de la actora en esta instancia (arts. 6, 7, 8, 37 y 38 de la ley 21.839, modif. la ley 24.432), los que se encuentran a cargo de la firma recurrente. Se deja constancia que a dicha suma no se adiciona el monto correspondiente en concepto de IVA atento que los peticionarios no acreditaron en autos su situación personal frente a dicho impuesto ("Fallos" 316:1533 "Cía. Gral. de Combustibles S.A." y "Central Neuquén S.A. y otra c. Prov. de Bs. As. y otra" CSJN, sent. del 16.4.02). 2º) Intimar a la firma recurrente, a que dentro del quinto (5º) día de notificada, informe el carácter que reviste frente al impuesto al valor agregado o su condición de pequeño contribuyente inscrito en el régimen simplificado, presentando en autos en consecuencia, una copia de la constancia de inscripción emitida por la AFIP, firmada, conforme lo dispone el art. 6 de la Resolución General Nº 689/99 (AFIP), bajo apercibimiento de lo dispuesto en el art. 10, incs. a) y b) de la misma Resolución General. El Dr. Krause Murguiondo dijo: Que adhiero en lo sustancial al voto precedente. La Dra. García Vizcaíno dijo: Que adhiero al voto de la Dra. Winkler, excepto en cuanto considera que no debe adicionarse el IVA, ya que entiendo que no es aplicable en la especie la doctrina de la Corte Suprema in re “Central Neuquén SA y otra v. Provincia de Buenos Aires y otra”, del 16/4/2002). Que, en efecto, en el recurso de apelación el Dr. Eduardo José Güemes, apoderado de la actora, ha consignado expresamente “(Estudio Beccar Varela)” – ver fs. 12 de autos-, lo cual le permitió al ente recurrido conocer tempestivamente que su contraria era un estudio jurídico, y no abogados elegidos intuitu personae. Que abona lo dicho que en la presentación de fs. 76 amplió fundamentos el Dr. Alejandro Claudio Altamirano expresando que mantenía “el domicilio constituido en Cerrito 740, piso 16, (Estudio Beccar Varela)”. Que advierto que la mención del Estudio Beccar Varela se reiteró en los escritos siguientes presentados por la actora (ver fs. 148, 162, 167, 189 y 204). Que de la documentación acompañada a fs. 191/203 y fs. 209 surge que el Estudio Beccar Varela cuenta entre sus integrantes a los profesionales que han actuado por la recurrente, y que se inscribió ante la AFIP como Estudio el 1/4/99, encontrándose expresamente inscripto en el IVA. Que la presente causa fue iniciada el 29/10/99 (ver F4 de fs. 1 y cargo de fs. 17 vta. de autos), es decir, cuando se hallaba inscripto ante la AFIP en el carácter indicado. Que el art. 15 del decreto reglamentario de la ley de IVA prevé que cuando los trabajos o prestaciones, “no sean realizados en forma ocasional y a título personal, revestirá la calidad de sujeto el ente colectivo que agrupa a los profesionales o prestadores que los realizan, aún en aquellos casos en los que la contraprestación deba fijarse judicialmente y una o más personas físicas, integrantes del agrupamiento, asuman la representación del mismo, circunstancia de la que deberá dejarse expresa constancia en el respectivo expediente, en la forma y condiciones que al respecto establezca” la AFIP. Que el art. 8° de la RG. de la AFIP dispone que: “Únicamente cuando el sujeto destinatario del honorario correspondiente —ente colectivo o, en su caso, persona física— revista, en el momento en que tal concepto se regula, el carácter de responsable inscripto en el impuesto al valor agregado, corresponderá adicionar al importe regulado el citado impuesto”. Que, en consecuencia, propicio que se adicione el IVA al estudio jurídico, sin que a ello sea óbice la doctrina de la Corte Suprema emergente del precedente citado, ya que en el mismo el Alto Tribunal se expidió en un caso en que “la calidad del profesional” había primado “para que se haya efectuado una regulación que tuvo en cuenta el mérito y extensión de la labor realizada por ellos y no por el estudio que integran. Han sido sus obligaciones, de atender personalmente el asunto que les ha sido confiado, de abstenerse de colocar a un colega en su lugar sin el consentimiento de su cliente, de mantener su responsabilidad frente a aquel que depositó en ellos una confianza especial tal que determinaría en su caso la aplicación del art. 902 del Cód. Civil, lo que exige concluir que por los servicios prestados, en definitiva intuitu personae, es el carácter que aquéllos revisten frente al ente recaudador el que determina si debe considerarse en la regulación de honorarios la carga que tiene el impuesto al valor agregado”. Que no parece que esta situación se hubiera configurado en el presente ya que la apelante confirió poder a los numerosos abogados que se detallan en el poder de fs. 2/5 de autos, sin que resulten de los actuados las circunstancias relatadas en el párrafo anterior. Que, a mayor abundamiento, cabe agregar que la Corte Suprema en la sentencia citada consideró que en el caso que sentenció el estudio jurídico era “un tercero absolutamente ajeno al expediente judicial”, a diferencia del sub-lite en el cual en todos los escritos de la actora se consignó la expresión “Estudio Beccar Varela”. Que, por ende, comparto la regulación de honorarios del voto de la Sra. Vocal preopinante y propicio que se le adicione la suma de $ 587 (pesos quinientos ochenta y siete) en concepto de IVA. Que, advirtiéndose que los Dres. Alejandro C. Altamirano y Florencia L Misrahi no han cumplido con lo dispuesto por el art. 3° de la RG de la AFIP 689/99 en cuanto no han comunicado su Clave Única de Identificación Tributaria (C.U.I.T.) o, en su caso, Clave Única de Identificación Laboral (C.U.I.L.), propongo que se haga saber a la AFIP dicha circunstancia, a los efectos impositivos y previsionales que dicho ente estime corresponder. Que, en lo demás, adhiero al voto de la Dra. Winkler. En virtud de la votación que antecede, por mayoría, SE RESUELVE: 1º) Regular los honorarios del Estudio Jurídico Beccar Varela en la suma de pesos dos mil setecientos noventa y seis ($ 2.796), por la representación y patrocinio letrado de la actora en esta instancia (arts. 6, 7, 8, 37 y 38 de la ley 21.839, modif. la ley 24.432), los que se encuentran a cargo de la firma recurrente. Se deja constancia que a dicha suma no se adiciona el monto correspondiente en concepto de IVA atento que los peticionarios no acreditaron en autos su situación personal frente a dicho impuesto ("Fallos" 316:1533 "Cía. Gral. de Combustibles S.A." y "Central Neuquén S.A. y otra c. Prov. de Bs. As. y otra" CSJN, sent. del 16.4.02). 2º) Intimar a la firma recurrente, a que dentro del quinto (5º) día de notificada, informe el carácter que reviste frente al impuesto al valor agregado o su condición de pequeño contribuyente inscrito en el régimen simplificado, presentando en autos en consecuencia, una copia de la constancia de inscripción emitida por la AFIP, firmada, conforme lo dispone el art. 6 de la Resolución General Nº 689/99 (AFIP), bajo apercibimiento de lo dispuesto en el art. 10, incs. a) y b) de la misma Resolución General. Regístrese y notifíquese.